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1
Turismo como sector de desarrollo: de la teoría a la
práctica. Lecciones aprendidas en proyectos
financiados por el Banco Interamericano de
Desarrollo1
Carmen Altés2
(Innova Management, España)
La escalada de posiciones del turismo en la agenda
internacional de desarrollo
La incursión de los bancos de desarrollo en la financiación de centros turísticos
costeros impulsados por los gobiernos de países en desarrollo en los años 70 y 80
supuso cierta experimentación en un sector relativamente nuevo, en rápida expansión
en aquel momento. Es el caso de Cancún, en México, y de Puerto Plata, en la
República Dominicana, financiados por el BID y el Banco Mundial respectivamente.
El modelo escogido, en el que primaban las grandes empresas y se concedía prioridad
a los aspectos cuantitativos del desarrollo3, contribuyó a difundir la idea de que el
turismo debía dejarse en manos del sector privado y las fuerzas del mercado. En el
caso paradigmático de Cancún, las expectativas generadas por la oferta de empleo
ocasionaron externalidades negativas no previstas, en particular el crecimiento de
población y urbano sin planificar, con los consecuentes problemas sociales y
medioambientales. Todo ello contribuyó a erosionar, durante algún tiempo, la
imagen del turismo como instrumento de desarrollo, provocando un retraimiento del
apoyo al sector por parte de algunos gobiernos y organismos internacionales.
1 Esta ponencia recoge las conclusiones de un trabajo de análisis de la actividad del BID en apoyo del turismo que coordiné durante el período en que trabajé en la sede del BID en Washington DC (2003-2006). 2 [email protected] / [email protected] 3 Estos proyectos respondían al modelo de negocio vigente, el turismo de masas.
2
Tras el reconocimiento del turismo en la Cumbre de la Tierra de Río de Janeiro
(1992)4 como una de las actividades económicas compatibles con la conservación del
medio ambiente y el patrimonio natural, éste se integra de forma decidida en la
agenda internacional sobre desarrollo sostenible5. Surge el concepto de “turismo
sostenible” y la Organización Mundial del Turismo (OMT) adapta al turismo la
Agenda 21 propuesta por la Cumbre.
Por otra parte, la gran expansión del turismo internacional en los 90 contribuyó a dar
mayor relevancia al impacto económico del turismo. En esa década, las llegadas de
viajeros internacionales a países en desarrollo se duplicaron y, en el año 2000, el
turismo se sitúo entre los 3 primeros sectores de exportación para el 83% de los
mismos. En 2002, el turismo estuvo presente en la Cumbre de la Tierra en
Johannesburgo en la que se destacó la capacidad del sector de generar empleo e
ingresos en países y regiones pobres. A raíz de esta declaración se popularizó el
término “pro poor tourism” acuñado por DFID6.
Estos hechos atrajeron la atención sobre la oportunidad que representa el turismo
para los países en desarrollo y la necesidad de apoyo para que puedan competir en un
mercado global. El camino quedaba abierto para que las agencias de Ayuda Oficial al
Desarrollo (AOD) financiasen proyectos de turismo y los proyectos apoyados tanto
por agencias de cooperación bilateral como por los organismos multilaterales se han
multiplicado. La nueva generación de proyectos ha puesto énfasis en el
aprovechamiento del patrimonio natural y cultural, y en la creación de nuevos
modelos de desarrollo turístico “sostenible”.
Aunque teniendo en cuenta las complejas realidades de los países en desarrollo, y los
retos a los que se enfrentan, buena parte de la ayuda al desarrollo no deja de ser un
experimento; el turismo se incorporó como un nuevo “sector” de actividad en unas
organizaciones que no estaban preparadas para ello. Por la transversalidad del
turismo existen numerosos puntos de entrada para actuar en el mismo y buena parte
del apoyo en este ámbito se ha canalizado desde los sectores tradicionales de la AOD
como el desarrollo urbano, desarrollo rural o medioambiente, entre otros. 4 Conferencia de Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo 5 7ª Reunión de la Comisión de Naciones Unidas para el Desarrollo Sostenible (1999), la 3ª Conferencia de las Naciones Unidas sobre los Países Menos Avanzados (Bruselas 2001) y la Cumbre de Johannesburgo (2002) entre otros. 6 Department for International Development, Reino Unido.
3
En el caso del BID, la mayoría de las operaciones dirigidas a financiar el desarrollo
del turismo aprobadas entre 1990 y 2005 fueron ad-hoc y se caracterizaron por la
dispersión y la falta de coordinación interna, por lo cual presentaban el riesgo de
incurrir en solapamientos e incluso contradicciones entre proyectos. En esos años, las
actuaciones se guiaron más bien por las demandas de los países que por un marco
estratégico e institucional adecuado y estaban dispersas entre los diferentes
departamentos regionales y las divisiones operacionales del Banco. Los préstamos
para el desarrollo turístico considerados “sectoriales” que se aprobaron en los años 90
tuvieron un enfoque de desarrollo integrado en zonas turísticas y financiaban
actuaciones muy diversas.
Tras unos años de renovada actividad dirigida a poner en marcha proyectos de
turismo, en el año 2005 se llevó a cabo un proceso de revisión y reflexión interna con
miras a precisar mejor la acción del Banco en dicho sector. Las líneas que siguen
resumen ese trabajo de análisis de la actividad del BID en apoyo del turismo para el
cual se consultó con otras organizaciones bilaterales y multilaterales, y se revisó una
amplia bibliografía sobre el tema.
Los impactos del turismo y la importancia de planificar para
optimizar sus beneficios
Impacto económico: El turismo tiene un gran potencial como promotor del desarrollo
socioeconómico en zonas con atractivos claros, al menos por las siguientes razones:
(i) si las inversiones públicas son realizadas de manera estratégica, éstas pueden
inducir y atraer montos elevados de inversión privada; (ii) el sector es un generador
de empleo a todos los niveles, lo cual incluye oportunidades para mujeres, jóvenes7 y
segmentos de población con menores niveles de calificación, contribuyendo así a
mejorar los ingresos de los hogares más pobres; (iii) un buen manejo del desarrollo
del sector puede generar ingresos para proteger recursos culturales y naturales
7 Por ejemplo, en Brasil el 83% de las empresas de alojamiento y alimentación tienen menos de cuatro trabajadores (IBGE, 2003). Otra referencia fuera de la región es la Unión Europea, en la que la media de empleados por empresa en el mismo rubro es 4,6, el 48% de los empleados son jóvenes entre 15 y 34 años, y el 54% son mujeres (EUROSTAT, 2005 y 2000).
4
valiosos, satisfaciendo necesidades de conservación –en ocasiones postergadas por
restricciones fiscales–; y (iv) el desarrollo del sector puede tener un efecto
multiplicador sobre el desarrollo de otras actividades económicas, tanto del sector
primario como del de servicios. Este efecto depende, entre otros factores, del tamaño
y la base económica del destino, las relaciones intersectoriales en el mismo y el nivel
de recursos externos netos que genera. En términos generales:
− Cuanto más desarrollados están los enlaces intersectoriales, mayor es el
impacto indirecto de los ingresos por turismo. Los enlaces intersectoriales
tienden a aumentar con el tiempo a medida que los destinos turísticos se
desarrollan y se alcanza masa crítica de negocio; y suelen ser mayores en países
grandes y con economías diversificadas.
− Cuanto menor es el área de influencia, mayores son las fugas desde el punto de
vista de circulación de dineros en la economía local y menor es el efecto
multiplicador.
− Cuando los costos de oportunidad de los factores utilizados son bajos, el
impacto económico del turismo es mayor aún si el efecto multiplicador es bajo.
Este es el caso de muchas islas en las que, a pesar de las fugas de divisas y
enlaces escasos con otros sectores, el peso del turismo en su economía es
elevado.
Impacto ambiental y social: La aplicación de principios de desarrollo sostenible al
turismo pone énfasis en que el crecimiento económico impulsado por el mismo puede
ir acompañado de impactos negativos ambientales y sociales a los que hay que prestar
atención. Estos pueden atribuirse en parte a algunas características del sector,
especialmente al hecho de que, en turismo, la producción y el consumo son
inseparables, ocurren en el destino receptor, y utilizan su territorio como escenario
de la actividad turística. En consecuencia, no sólo los impactos, sino también la
capacidad de producción y la calidad de la misma, están influidas por: (i) el espacio
disponible y la fragilidad de los recursos turísticos; (ii) el tipo de oferta turística y su
correspondiente demanda; (iii) la dinámica de la interacción entre el turismo y otras
actividades económicas; y (iv) la interacción entre turistas y residentes, que
5
comparten espacios, infraestructuras y servicios. Los impactos negativos del turismo,
al igual que los de otros sectores, son más evidentes en lugares que crecen
rápidamente sin planificación adecuada y en países en desarrollo debido a la
magnitud de los problemas sociales, la carencia de infraestructura básica y la
debilidad de las instituciones públicas.
El Informe de Evaluación de Préstamos del BID para proyectos de turismo
preparado en 1989 ya indicaba que: “Parece injusto escoger al turismo, de entre todos
los catalizadores del cambio social y cultural, para atribuirle todos los males. [...] la
experiencia demuestra que es la falta de planeamiento y la deficiente coordinación, y
no una característica inherente al turismo, lo que trastorna el equilibrio económico y
social”.
Los impactos ambientales negativos más frecuentes se relacionan con: (i) el rápido
crecimiento
urbano y el uso desordenado del suelo; (ii) la presión sobre recursos escasos y la
destrucción de ecosistemas frágiles; (iii) la contaminación de cuerpos de agua por las
actividades recreativas o el vertido de residuos sin tratar; y (iv) el deterioro estético
del paisaje y del entorno urbano. En muchos casos estos efectos no son directamente
atribuibles al turismo sino que este pone en evidencia problemas existentes de forma
más acusada que otros sectores, al considerar el paisaje y el medio ambiente como
activos, así como por el contacto directo con el mercado internacional que es más
sensible a estos temas. Asimismo, existen impactos ambientales globales y de otras
industrias que afectan a los destinos turísticos. Entre los primeros figuran los
desastres naturales, cada vez más relacionados con el cambio climático. Entre los
segundos, los que más inciden en el turismo son los vertidos de petróleo al mar y la
contaminación de aguas por pesticidas y productos químicos utilizados en agricultura
o procedentes de residuos industriales.
En cuanto a los impactos sociales negativos que pueden surgir de la interacción entre
turistas yresidentes locales se destacan: (i) el aumento de la criminalidad, más
acusado en destinos en los que la diferencia entre el nivel de riqueza de la población
6
local y los turistas es mayor; (ii) prostitución y turismo sexual organizado, incluyendo
el turismo sexual infantil –relacionado tanto con el turismo, como con la pobreza y la
exclusión social–, los cuales están siendo combatidos con la ayuda de iniciativas a
nivel internacional8; (iii) cambios bruscos en las costumbres que pueden afectar a la
estructura social tradicional y a la identidad cultural, como, por ejemplo, la
monetarización de las economías tradicionales indígenas; y (iv) aumento de precios –
en particular de terrenos y viviendas– no acompañado de un aumento del poder
adquisitivo de la población local que se ve desplazada hacia la periferia de los núcleos
urbanos. En algunos casos, pueden llegar a darse situaciones de enfrentamiento entre
los turistas y/o la industria turística y la población local, que se siente excluida del
proceso de desarrollo turístico y sus beneficios o utilizada como atracción sin su
consentimiento. En países en desarrollo, el turismo también ha sido criticado por
provocar o acelerar el desplazamiento forzado de poblaciones tradicionales e
indígenas, agravado por la falta de títulos de propiedad de la tierra9 y de políticas que
lo regulen. Por otra parte, cuando el turismo se desarrolla de forma apropiada
también puede tener impactos sociales positivos al contribuir a mejorar la calidad de
vida, valorar la cultura y fortalecer la identidad local.
De todo ello se concluye que el turismo puede contribuir al desarrollo sostenible en la
medida en que se consigue maximizar sus impactos positivos y minimizar los posibles
impactos negativos. Para lograrlo es necesario combinar medidas dirigidas a apoyar el
desarrollo empresarial y la competitividad de los destinos con otras que aseguren la
sostenibilidad ambiental y social. Tratándose de un sector productivo, en turismo
ambas dimensiones son igualmente importantes y están estrechamente relacionadas.
Descuidar el medio ambiente puede tener serios impactos en la sostenibilidad a largo
plazo de los destinos turísticos, afectando su competitividad, ya que el medio natural
8 En 1996, tuvo lugar el Congreso Mundial sobre Explotación Sexual Comercial de la Infancia, organizado por el gobierno sueco y UNICEF, cuyas conclusiones se recogieron en la Declaración de Estocolmo. Del mismo año data una Comunicación de la CE al Parlamento Europeo con propuestas para combatir el turismo sexual infantil. Por su parte, la OMT creó un grupo de trabajo que, en 1999, hizo público el Código Global de Conducta para proteger a la infancia de la explotación relacionada con los viajes y el turismo. En marzo de 2005, 68 empresas de 18 países se habían adherido al código y 32 países habían adoptado medidas, incluyendo leyes extraterritoriales que permiten la persecución de sus ciudadanos por crímenes cometidos en el extranjero. http://www.worldtourism.org/protect_children/index.htm. 9 La superposición entre los sistemas de áreas protegidas y territorios indígenas en algunos lugares es causa de conflicto, pero éste no se restringe al turismo.
7
es parte del atractivo. Por otro lado, sin empresas competitivas y sin un clima de
negocios favorable, no es posible lograr crecimiento económico de forma sostenida.
Por su parte, los aspectos sociales son fundamentales para lograr una distribución
equitativa de los beneficios. Sólo los gobiernos están en condiciones de promover, de
manera significativa, procesos de utilización del turismo como herramienta de
desarrollo sostenible, combinando la inversión e incentivos para el desarrollo del
sector privado con la protección del interés público a medio y largo plazo. En los
países en desarrollo los retos son mayores mientras que la capacidad institucional y
los recursos son insuficientes. Apoyarles en sus esfuerzos es el papel del BID y de
otras organizaciones de desarrollo multilaterales y bilaterales.
Modalidades de actuación
A la hora de analizar el apoyo al desarrollo turístico y de extraer lecciones aprendidas
es importante distinguir entre las operaciones de préstamo a gobiernos y los
proyectos de cooperación técnica.
Operaciones de préstamo a gobiernos
Son programas que contemplan grandes inversiones, de millones de dólares, que
suelen incorporar contrapartidas locales y se ejecutan durante varios años. Su
preparación requiere un trabajo conjunto entre los profesionales del banco de
desarrollo y los entes de gobierno a cargo de la operación. Durante ese proceso, que
puede alargarse más de un año, se generan la información y los acuerdos requeridos
para la aprobación del préstamo. Por su monto elevado, estas operaciones incluyen
grandes proyectos de infraestructura, si bien también pueden incorporar
componentes o actividades de asistencia técnica entre las que suele destacar el
fortalecimiento institucional.
Estos programas se enmarcan en estrategias gubernamentales de desarrollo y persiguen
lograr un impacto considerable a medio y largo plazo en el desarrollo regional y local,
contribuyendo al logro de objetivos macroeconómicos en términos de desarrollo de
8
empresas, creación de empleo, ingresos en divisas e ingresos fiscales. Entre los valores
añadidos de los bancos de desarrollo destacan las condiciones financieras ventajosas y
la transferencia de know-how mediante el apoyo a los ejecutores en la preparación de
los préstamos por parte de los equipos propios, o con apoyo de especialistas externos.
Estos últimos pueden ser financiados por los fondos de consultoría que algunos
países miembros ponen a disposición de los bancos de desarrollo o por medio de
fondos especiales de los propios bancos. En ocasiones su costo puede cargarse al
préstamo.
Por tratarse de préstamos en divisas se suelen enfocar a inversiones en destinos en los
que predomina -o se pretende promover- el turismo internacional10.
Proyectos de cooperación técnica
Se financian por medio de donaciones a fondo perdido y suelen incluir asistencia
técnica por parte de consultores internacionales para fortalecimiento institucional,
desarrollo del capital humano, compra de equipamientos e incluso la financiación de
pequeñas inversiones (por ejemplo, equipamientos para el turismo en parques
naturales).
Las agencias bilaterales de cooperación al desarrollo canalizan la mayor parte de su
ayuda a través de esta modalidad y la mayor parte de los proyectos de apoyo al
desarrollo turístico financiados por la Comisión Europea también son cooperaciones
técnicas11.
El BID financia operaciones de cooperación técnica “no reembolsable” para
fortalecimiento institucional de entidades de gobierno, así como de entidades
ejecutoras de proyectos y el Fondo Multilateral de Inversiones (FOMIN) -del grupo
BID- ofrece subvenciones para financiar cooperación técnica dirigida al apoyo de
pymes, por lo general bajo un esquema de matching funds.
10 No obstante, en América Latina, existen países grandes con economías emergentes como Brasil, en los que el turismo interno adquiere un volumen considerable que puede superar al turismo internacional. El turismo interno, si bien no genera divisas y presenta menor gasto que el turismo internacional, contribuye a la redistribución de renta y ofrece oportunidades para el desarrollo regional y local que puede favorecer a destinos del interior, y a zonas rurales o con economías deprimidas. 11 La CE también financia infraestructuras y otras inversiones bajo modalidades diferentes a los bancos de desarrollo.
9
Estos proyectos de cooperación técnica, de menor alcance y presupuesto que los
préstamos, pueden cubrir de forma eficaz necesidades puntuales, a corto plazo y/o en
ámbitos geográficos restringidos. Sin embargo, si no se logra resolver los problemas
estructurales de desarrollo institucional y gobernanza, pueden convertirse en medidas
paliativas sin resultados significativos.
La diversidad de actores en el ámbito de la cooperación técnica y la multiplicidad de
proyectos12 con objetivos y procedimientos propios y diferentes entre sí, representa
una dispersión de esfuerzos y un riesgo de pérdida de eficacia y eficiencia y, aunque
existen comités de donantes concebidos para coordinar las iniciativas en un mismo
país, las propuestas de colaboración entre los mismos encuentran dificultades
formales para su puesta en práctica. En todo caso, la cooperación técnica de la AOD
suele pasar por algún tipo de trámite gubernamental y algunos países beneficiarios
cuentan con unidades que centralizan esta función a nivel nacional. No obstante,
como estas unidades suelen estar situadas en los ministerios de economía y el trámite
suele ser informativo, las autoridades de turismo pueden quedar al margen de los
proyectos que se canalizan a través de otros entes de la administración.
Lecciones aprendidas en la preparación y ejecución de
operaciones de préstamo del BID
A continuación se resumen las lecciones aprendidas en la preparación y ejecución de
operaciones de préstamo del BID relacionados con turismo entre 1990-2005. No
obstante, los ejercicios de evaluación de proyectos de cooperación técnica financiados
por la CE en los que he participado y la revisión de bibliografía especializada,
muestran que muchas conclusiones son similares aunque sea a escala diferente.
12 Por otro lado, en los últimos años, han surgido numerosas iniciativas de cooperación desde los gobiernos regionales y las administraciones locales de grandes ciudades, lo cual ha multiplicado el número de actores públicos. El número de ONGs que actúan en los países de desarrollo también se han multiplicado.
10
El desarrollo sostenible del turismo requiere combinar un marco
estratégico a medio y largo plazo con proyectos bien focalizados
Los préstamos considerados “sectoriales” en turismo tenían un enfoque de desarrollo
integrado en zonas turísticas y financiaron diversas actividades siendo las principales:
infraestructura básica y de acceso, mejoras urbanas en municipios turísticos, obras de
puesta en valor de atractivos turísticos públicos, gestión del turismo en áreas
protegidas, capacitación y apoyo a pequeñas empresas, y fortalecimiento de la
capacidad institucional para planificar, gestionar y monitorear el desarrollo turístico.
La lección aprendida es que por la variedad de ámbitos de actuación requeridos para
el desarrollo turístico, cuando se intenta actuar en todos ellos con un mismo proyecto
la dispersión de esfuerzos supone menor impacto y pérdida de eficiencia –este efecto
es más acusado cuanto mayor es el ámbito geográfico del proyecto. En particular, los
grandes programas regionales con componentes diversos que involucran a diversos
ejecutores, y requieren aportes locales de distintas instancias con capacidades
diferentes, fueron difíciles de gestionar y sufrieron problemas serios de ejecución.
La recomendación es concentrar el ámbito de intervención de los proyectos ya que no se
pueden solucionar todas las necesidades de un sector complejo con un único
proyecto. A la hora de realizar un esfuerzo para reducir/concentrar el ámbito de los
proyectos con visión estratégica las principales opciones son:
− Concentración geográfica: por medio de proyectos de desarrollo turístico
integrado con una actuación intensa, pero en áreas geográficas reducidas. Esta
opción puede requerir combinar actuaciones de diferentes entes de gobierno
(municipal, regional y nacional).
− Concentración temática en uno o varios aspectos del desarrollo turístico con un
propósito bien definido. Tiene sentido cuando existe una agencia ejecutora con
competencias específicas, se pueden lograr economías de escala y/o en destinos
maduros con problemas concretos. En este caso es posible actuar en un ámbito
geográfico mayor (p.e. gestión de visitantes en parques nacionales).
11
− Cuando el turismo sea sólo un componente de otros proyectos, como suele ser el
caso en proyectos de desarrollo regional, hay que definir bien el propósito del
componente y concentrarse en el mismo. En este caso suele ser útil trabajar con
un enfoque de clúster.
En todos los casos hay que evitar proyectos demasiado superficiales o excesivamente
complejos y limitar el número de componentes para aumentar el impacto.
Las necesidades varían en función del nivel de desarrollo turístico en la
zona
Apoyar el desarrollo del turismo en los países en desarrollo no significa partir de cero
ya que los mismos cuentan con destinos turísticos en diferentes fases del ciclo de vida
que enfrentan problemas y retos diferentes.
− Destinos maduros: Son destinos en los que el turismo tiene una larga tradición,
que cuentan con una oferta turística relativamente bien desarrollada –al menos en
términos cuantitativos-, y que reciben flujos considerables de visitantes. Debido a
la concentración y falta de diversificación de la oferta y la elevada dependencia de
ciertos mercados (tanto en términos de motivaciones como geográficos), suelen
sufrir una acusada estacionalidad que impide un aprovechamiento eficiente de la
oferta instalada y del potencial del destino. Con el tiempo, empiezan a mostrar
signos de declive y pérdida de competitividad debido a cambios en las
motivaciones de los mercados, falta de adaptación de la oferta y el surgimiento de
nuevos competidores. Las consecuencias pueden ser disminución de la demanda y
pérdida de cuota de mercado, reducción de la tasa de ocupación de los
alojamientos, y rebajas de precios que suelen atraer a segmentos con menor poder
adquisitivo. En dicha situación existe el riesgo de entrar en un círculo vicioso de
deterioro de la calidad de la oferta, reducción de ingresos, y erosión de la calidad
ambiental y estética por falta de inversión y mantenimiento, tanto por parte del
sector público como del sector privado.
12
En estos casos, las inversiones han de estar dirigidas principalmente a la
resolución de problemas creados por actuaciones desordenadas aplicando una
estrategia de revitalización por medio de la modernización de las infraestructuras
de acceso y transporte, así como de otras infraestructuras básicas que favorezcan
la recuperación y mantenimiento de la calidad ambiental, así como la mejora de la
calidad en instalaciones y servicios turísticos. También suele ser necesario
fortalecer la gestión pública del turismo -regional y municipal-, invertir para
aprovechar nuevas oportunidades de mercado por medio de la mejora de sus
atractivos y la diversificación del mix de producto, y organizar una acción de
marketing bien coordinada dirigida a reposicionar el destino en el mercado y a
atraer nuevos segmentos de demanda.
− Destinos en fase de expansión: Se trata de zonas en las que el turismo puede ser una
actividad tradicional -aunque a pequeña escala- o relativamente reciente y en las
que el sector muestra signos de gran dinamismo. La expansión puede ser debida a
cambios en el mercado o a otros aspectos que supongan una coyuntura favorable.
Se refleja en un aumento considerable tanto de llegadas de turistas como del
número y escala de las inversiones privadas con el consecuente incremento de la
presión sobre el medioambiente y los recursos y atractivos turísticos. En una fase
de expansión es frecuente que el crecimiento del sector supere a las capacidades de
planificación y control por parte de la administración pública dirigidas a asegurar
un desarrollo sostenible. El resultado es que las infraestructuras no siguen el
ritmo de las inversiones privadas ni el aumento de la planta turística, no existe una
adecuada planificación territorial, y el crecimiento desordenado afecta a la calidad
ambiental pudiendo comprometer el atractivo básico y el futuro del destino.
Además, las empresas y servicios se suelen multiplicar sin un marco ordenado que
promueva estándares adecuados en cuanto a calidad, seguridad, impacto
ambiental, etc. Las inversiones en este caso han de estar dirigidas a introducir
medidas de planificación y control del crecimiento y a minimizar los efectos
negativos del desarrollo turístico: planificación territorial, mejora de las
capacidades del sector público para planificar y gestionar el desarrollo turístico,
13
mejora de la infraestructura básica, entre otros. También se requiere organizar al
sector y desarrollar productos turísticos compatibles, en el uso del territorio y los
demás recursos, que contribuyan a lograr ventajas competitivas.
− Destinos emergentes: Son zonas en las que el turismo es una actividad muy
incipiente o prácticamente inexistente pero que, por su localización y sus recursos
naturales y/o culturales, y teniendo en cuenta las tendencias de los mercados,
pueden presentar gran potencial de desarrollo. Puede tratarse de zonas i) en las
que otras actividades económicas tradicionales están en declive y en las que el
turismo supone una alternativa de empleo e ingresos, ii) que estén relativamente
próximas a otros destinos consolidados, cuyo desarrollo pueda contribuir a la
diversificación y complementariedad de la oferta turística a nivel regional, o iii)
tratarse de zonas prácticamente vírgenes. En caso de plantear proyectos
ambiciosos con cuantiosas inversiones estos destinos requieren una cuidadosa
planificación a partir de un Plan de Desarrollo Turístico que, basado en estudios
de mercado, establezca una adecuada zonificación de la actividad turística,
identifique las necesidades en infraestructura básica necesaria para atraer
inversión privada, y defina las bases para un desarrollo ordenado de la actividad -
que prevea tanto la promoción de inversiones, como la minimización de los
posibles impactos negativos.
Es importante asegurar coherencia entre los objetivos, las actuaciones
y los indicadores de resultado e impacto de los proyectos
Muchos proyectos de turismo se han planteado objetivos ambiciosos que se han
traducido en la financiación de actividades muy diversas. En cuanto a los indicadores
de impacto más utilizados tradicionalmente, se definían en términos de aumento de
visitantes, ingresos o empleos. Esta perspectiva, si bien puede tener sentido para
definir el objetivo final de los proyectos (contribuir a….), no es la más adecuada para
medir el propósito del proyecto (lo que se logra directamente). La falta de relación
14
directa entre las actividades del proyecto y los impactos esperados, así como la
dificultad para establecer una relación directa de causa-efecto entre los mismos, ha
pesado sobre la imagen del turismo en los bancos de desarrollo.
La conclusión es que hace falta mejorar la definición de los objetivos e impactos
esperados para valorar adecuadamente la contribución de los proyectos al desarrollo.
La lección aprendida es que la diversidad de actividades que suelen plantearse para
ser financiadas con un mismo proyecto suele dificultar la definición de un solo
“propósito” que tenga sentido en el marco lógico del mismo. Por ello, se recomienda
que los proyectos ambiciosos y complejos sean diseñados como programas con
grandes componentes o subproyectos para los que se definan sus propios propósitos
y resultados. De esta forma resultará más fácil clarificar las actividades elegibles para
financiación en cada caso y mejorará la consistencia entre las diferentes actividades de
un mismo componente o subproyecto.
Los sistemas de monitoreo de impactos también se han revelado como un punto
débil de los proyectos de turismo. Por la complejidad de estos sistemas en los grandes
proyectos, y la inversión necesaria para obtener los datos, los ejecutores tienden a
percibirlos como una imposición del banco de desarrollo. La recomendación es que
hay que mejorar la selección de indicadores de proyecto, siendo preferible utilizar
pocos indicadores y mejorar las fuentes de datos existentes, así como diseñar o
fortalecer mecanismos que resulten útiles más allá del proyecto.
Hay que involucrar a los ejecutores adecuados desde la fase de
preparación y fomentar la colaboración entre los mismos
La necesidad de combinar actuaciones en diferentes ámbitos, en los que intervienen
diferentes instancias de gobierno, suele dificultar la ejecución de los proyectos de
turismo. Por lo general, la solicitud de un crédito y la preparación de la operación
están a cargo del ente del gobierno que lo ha solicitado y para el cual ha obtenido la
aprobación de las autoridades económicas. Sin embargo, en muchos casos, los
proyectos integran componentes que quedan fuera del área de responsabilidad y de
las capacidades técnicas del ejecutor.
15
Es lo que sucedió en proyectos de turismo en parques naturales o en sitios históricos
o arqueológicos, en los que los ejecutores eran las autoridades de medioambiente o
cultura, pero que también financiaban inversiones municipales o asistencia técnica
para el sector turístico de la zona.
La lección aprendida fue que, por lo general, las agencias de medio ambiente y cultura
requieren ser fortalecidas para poder gestionar eficazmente la visita turística en los
lugares bajo su tutela, así como para mejorar su capacidad de generar ingresos a partir
del turismo. Además, es importante que desde la fase de preparación se analice la
necesidad de involucrar a los entes del gobierno que sea necesario para que se hagan
cargo de la ejecución de componentes o actividades específicas en miras de lograr
mayor eficacia e integración en sus estrategias. En estos casos resulta de particular
importancia cerrar acuerdos o convenios que establezcan la responsabilidad directa
sobre la inversión, operación y mantenimiento de obras específicas bajo su
jurisdicción.
Proceso participativo pero con enfoque estratégico
Las políticas internas de los bancos de desarrollo suelen exigir que se lleven a cabo
procesos de consulta pública durante el proceso de preparación de las operaciones de
préstamo. La experiencia en los proyectos de turismo mostró que al tratarse de un
sector productivo que dispone de asociaciones empresariales propias hay que
distinguir entre la consulta con la “industria” y la consulta con la población local.
En las zonas de menor desarrollo, en las que el acceso a la información y el nivel de
formación de los actores es menor, suele ser necesario acompañar la consulta de un
componente de transferencia de conocimientos para asegurar una correcta
comprensión de las alternativas por parte de los consultados. En todos los casos se
debe evitar: (i) la creación de expectativas excesivas en la fase inicial de preparación de
los proyectos, ya que los resultados tardan en materializarse y se puede generar
frustración; (ii) la “fatiga participativa”, coordinando las diferentes instancias de
consulta13; y (iii) que el resultado de la consulta sea una lista de actividades a ser
13 Estudios preparatorios realizados por especialistas sectoriales, estudios de impacto ambiental y consulta pública.
16
financiadas sin bases estratégicas ni lógica interna14. Asimismo, hay que evitar la
creación de comités formales que añadan complejidad al esquema de ejecución de los
proyectos y no reflejen una instancia institucional dotada de competencias y recursos
para cumplir sus funciones con regularidad.
La conversión de las “wish lists” (listados de obras y servicios que se
desea financiar con el préstamo) en proyectos ejecutivos y/o términos
de referencia listos para ser licitados genera retrasos en la preparación
de las operaciones
Con la finalidad de no retrasar la ejecución, y evitar costes financieros adicionales, los
bancos de desarrollo exigen que antes de la aprobación del préstamo estén listos un
número razonable de proyectos ejecutivos que permitan licitar los contratos de obras.
Este requisito suele retrasar la preparación de las operaciones de préstamo ya que los
ejecutores no suelen disponer de proyectos suficientemente elaborados. Uno de los
motivos es que no disponen de los fondos para ello, aunque en algunos casos los
bancos les ofrecen fondos especialmente dedicados a este fin. Este requisito también
puede aplicarse a licitaciones de equipos y servicios, en cuyo caso se les pide que
preparen los términos de referencia para los contratos previstos para el primer año.
Hay que tomar medidas para asegurar la sosteniblidad de las
infraestructuras y equipamientos financiados por los proyectos
En términos de la gestión de un proyecto, la sostenibilidad se refiere a la continuidad
de los resultados e impactos a lo largo del tiempo. Los préstamos representan una
inyección importante de inversiones en infraestructura y equipamientos que suelen
requerir recursos humanos y financieros para su operación y mantenimiento, un
aspecto que se tiende a descuidar, y que no siempre está previsto con suficiente
detalle en el momento de preparar las operaciones. En el caso de las infraestructuras y
de los servicios públicos requieren habitualmente aportes fiscales para cubrir esos
14 En muchos casos no se trata de que cada actuación en sí no sea necesaria, sino que no es posible obtener determinados objetivos con actuaciones dispersas que no contribuyen a los mismos.
17
costes. En cuanto a las atracciones naturales y culturales, como son los parques
naturales o los sitios arqueológicos, pueden necesitar “planes de negocio” que
indiquen, como mínimo, cómo se cubrirán los costes de operación de los
equipamientos y servicios especialmente concebidos para los visitantes. Lo mismo
aplica en el caso de proyectos de fortalecimiento institucional que incluyen
inversiones en equipos y sistemas informáticos.
Por otro lado, las inversiones en infraestructuras tienen un efecto catalizador, pues
contribuyen al aumento de la inversión privada, a la llegada de más turismo y al
aumento de la población atraída por las oportunidades de empleo. Una lección de la
experiencia es que dichas inversiones deben ir acompañadas de actividades de
fortalecimiento institucional destinadas a mejorar las capacidades locales para
gestionar el rápido crecimiento. Los procesos de descentralización administrativa
aplicados en varios países de América Latina, que delegan más responsabilidad a nivel
regional y local, evidencian todavía más la necesidad de mejorar la capacidad
institucional de las autoridades subnacionales.
El turismo no es panacea y los proyectos con comunidades indígenas y
rurales funcionan mejor cuando su viabilidad ha sido analizada de
forma adecuada
La introducción del concepto de turismo sostenible impulsó la multiplicación de
proyectos de desarrollo que fomentan la participación de la población indígena o
rural en la prestación de servicios turísticos15. Una parte importante de estos
proyectos, a los que se suele referir como “turismo comunitario”, son cooperaciones
técnicas de agencias de cooperación bilateral, AOD de gobiernos subnacionales
(regiones o ciudades) o de organizaciones privadas de ayuda al desarrollo. Algunos
proyectos de los bancos multilaterales de desarrollo también han incluido este tipo de
actuaciones si bien representan un parte muy pequeña de la inversión.
15 En muchos casos el objetivo es ofrecer alternativas económicas a raíz de la protección de sus tierras y de la prohibición de realizar actividades tradicionales relacionadas con la explotación de los recursos naturales.
18
Estas actuaciones, lideradas en buena parte por ONGs, tienden a situarse en
programas rurales o ambientales desarrollados al margen del sector turístico. En su
afán por apoyar el turismo “sostenible”, los gobiernos de algunos países en América
Latina también han promovido el desarrollo de iniciativas de turismo comunitario
con fondos propios. Aunque existen ejemplos de buenas prácticas, en muchos casos
se han sobredimensionado las expectativas de mejora en las condiciones de vida de la
población local y de obtención de ganancias a corto plazo. Son escasos los ejemplos
de empresas de turismo comunitario exitosas o rentables y la mayoría de ellas
desconocen cómo, dónde y a quién vender sus servicios turísticos, mientras las
instalaciones financiadas con fondos de los proyectos de desarrollo se van
deteriorando por falta de uso y de mantenimiento.
Los análisis y evaluaciones de este tipo de proyectos16 han revelado: i) falta de
investigación en cuanto a experiencias similares en otros destinos (se repiten los
mismos errores una y otra vez), ii) acciones dispersas y poco coordinadas, iii)
conceptualización y formulación de proyectos con escasa o ninguna intervención de
especialistas en el sector, vi) carencia de estudios de viabilidad económica y v) falta de
capacidad técnica para el seguimiento de los proyectos por parte de los promotores y
ejecutores de estas iniciativas.
El ejemplo de México ilustra las dimensiones que pueden alcanzar estas inversiones y
la importancia de coordinar esfuerzos. Un relevamiento de iniciativas en todo el país
mostró que en el año 2005 se apoyaron 408 proyectos de turismo en comunidades
indígenas y/o rurales por un importe de 358 millones de pesos, de los cuales el 66%
correspondió a aportaciones del gobierno federal. Es de destacar que el 93 % de los
fondos se dedicó a infraestructuras –sobre todo construcción de cabañas para
turistas-. En lo que se refiere a la inversión total en el período 2001-2005 –
incluyendo aportes de los gobiernos de los estados y municipales y de ONG–, superó
los 1.052 millones de pesos (unos 100 millones de dólares), con una tendencia anual
creciente –de 49 millones de pesos en 2001 a más de 350 millones en 2005–.
Tras constatar que diversas entidades del gobierno ofrecían ayudas de este tipo y que,
en algunos casos, existía duplicación de apoyos para un mismo proyecto, a fines de
2004 se firmó el Convenio General de Colaboración para el Desarrollo del
16 No sólo del BID, sino de agencias bilaterales y apoyos directos de los gobiernos.
19
Ecoturismo, Turismo Rural y demás Actividades de Turismo de Naturaleza con el
objetivo de mejorar la efectividad de las diferentes acciones. Para su implementación
se creó un grupo interinstitucional de trabajo en el que participan trece entidades de
gobierno y representantes del sector privado. El grupo ofrece un espacio de
interlocución e impulsó la elaboración del Plan Estratégico de Turismo de
Naturaleza 2006-2015.
Finalmente, cabe destacar que la utilización del término turismo comunitario17 en
América Latina resulta confuso por la tendencia a equiparar las formas de vida en
comunidad y el principio de la no acumulación, con sistemas de propiedad o
producción colectivos. En este sentido es importante distinguir entre las necesidades
de apoyo a la población para fomentar sus habilidades individuales como empresarios
y profesionales del turismo, y las oportunidades para generar ingresos para el
conjunto de la población a partir de alianzas y acuerdos entre la comunidad y
operadores privados (de la misma comunidad o de fuera de ella), con o sin
participación directa de la misma en el negocio. Los problemas que pueden resultar
de esta confusión, a la hora de repartir los ingresos por turismo, todavía no afloran
porque la mayoría de estos proyectos prácticamente no generan ventas y
consecuentemente tampoco hay beneficios. En cualquier caso, sería interesante que se
publicasen y diesen a conocer más evaluaciones y resultados de estos proyectos que
incluyesen datos concretos. Al respecto, resultan interesantes las lecciones aprendidas
por SNV que fue muy activa en este tipo de proyectos hace años.
17 Cuando el concepto community tourism se utiliza en países como Reino Unido o Canadá, tiene que ver con el desarrollo turístico a nivel municipal.
20
Lecciones de la experiencia de la SNV en el desarrollo de turismo con comunidades rurales e indígenas
Aunque obtenidas a partir de la experiencia de la SNV (Agencia Holandesa de Cooperación Internacional) en África, estas enseñanzas son ilustrativas y aplicables a otros proyectos y países:
La iniciativa del proyecto debe surgir de los beneficiarios. Los proyectos han de estar basados en un estudio de mercado y viabilidad económica. Si la oferta
existente en la zona no consigue atraer suficiente demanda, no hay que financiar más iniciativas. Las probabilidades de éxito son mayores si el proyecto ofrece servicios que complementan una oferta
turística existente, o si está situado en una ruta turística y la oferta se basa en habilidades y atractivos relacionados con las formas de vida tradicionales.
Hay que integrar los proyectos en los circuitos turísticos: al trabajar con operadores se puede asegurar un flujo regular de turistas.
Si bien es importante involucrar a los más pobres y marginados, el éxito de estos proyectos requiere la participación de gente con cierta capacidad emprendedora y de gestión, y conocimientos de idiomas: trabajar con los actores más experimentados y profesionales contribuye a mejorar la viabilidad de los proyectos a corto plazo, aunque los beneficios para los pobres serán más modestos.
Involucrar a los más desfavorecidos supone mayor complejidad, más inversión y más esfuerzo en la gestión de los proyectos. Cuanto mayor es la diferencia entre la sociedad local y los turistas, más trabajo se requiere.
Algunas comunidades se sienten capaces de gestionar sus propias iniciativas turísticas, pero suelen tener problemas para comercializar su oferta de forma provechosa. La gestión del proyecto de forma comunitaria no ha de ser un dogma. Las alianzas con el sector privado han demostrado ser eficaces para generar ingresos.
No se recomienda ofrecer ayudas directas en efectivo. Es un sistema injusto para aquellos que no las reciben y atraen a gente que no está realmente interesada en los proyectos.
Fuente: SNV, (Agencia para el desarrollo de los Países Bajos). 2001. Community-Based Tourism in Botswana. The SNV Experience in three Community-tourism Projects.
21
Bibliografía
Altés, Carmen. El turismo en América Latina y la Experiencia del BID (2006)
Banco Interamericano de Desarrollo, Washington DC, EEUU
http://idbdocs.iadb.org/wsdocs/getdocument.aspx?docnum=984876
Altés, Carmen. Turismo y desarrollo en México (2008). Banco Interamericano de
Desarrollo. Washington DC, EEUU.
http://www.iadb.org/res/pub_desc.cfm?pub_id=CSI-117&Language=Spanish
1
El turismo como una estrategia de desarrollo para el
mundo en desarrollo: el Programa
UNWTO.VOLUNTEERS
Susana Lima1
Instituto Politécnico de Coimbra (Escola Superior de Educação, Portugal)
Domingo Gómez López2
(Universidad Intercultural de Chiapas, México)
Cecilia S. García Gómez3
(Fundación UNWTO.Themis, México)
Resumen
En años recientes, el compromiso del turismo como una estrategia de desarrollo para el
mundo en desarrollo ha adquirido mayor interés de los gobiernos y de las
organizaciones para el desarrollo en el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo del
Milenio (ODM) de las Naciones Unidas. La idea de aprovechar el turismo como una
herramienta para aliviar a la pobreza ha sido establecido como una prioridad mayor por
las instituciones multilaterales, donantes, gobiernos, ONG’S, organismos de turismo
nacionales e internacionales, como la Organización Mundial del Turismo (OMT),
como se evidencia a través del lanzamiento de programas como el
UNWTO.Volunteers.
El Programa UNWTO.Volunteers fue puesto en práctica en 2005, y diseñado con la
misión de contribuir a los ODM, promoviendo al turismo como instrumento de
desarrollo a través de la educación y formación de profesionales voluntarios para apoyar
a los Estados Miembros de la OMT, difundiendo el espíritu del voluntariado.
1 Profesora de la licenciatura en Turismo. Instituto Politécnico de Coimbra – Escola Superior de Educação, Portugal, [email protected]. 2 Profesor y director del programa académico de la licenciatura en Turismo Alternativo. Universidad Intercultural de Chiapas, Méjico, [email protected]. 3 Fundación UNWTO.Themis, México, [email protected].
2
Esta ponencia busca contribuir al marco teórico relacionado a las diversas perspectivas
sobre los programas de cooperación internacional para el desarrollo, que consideran la
capacidad del turismo para contribuir al desarrollo socioeconómico, como es el caso del
Programa UNWTO.Volunteers. Las características principales de este programa serán
descritas y sus resultados potenciales discutidos, considerando los impactos que pueden
producir en los destinos involucrados. Esta discusión se basa en un caso de estudio del
Programa UNWTO.Volunteers, implantado en el estado mexicano de Chiapas en
2008.
Palabras clave: Turismo, gestión del conocimiento, cooperación internacional para el
desarrollo, Programa UNWTO.Volunteers.
Abstract
In recent years, commitment to tourism as a development strategy for the developing
world has gained an increased interest from the governments and development
organizations in the fulfilment of the United Nations Millennium Development Goals.
The idea of using tourism as a tool to alleviate poverty has been established as a major
priority by multilateral institutions, donors, governments, NGOs, national and
international tourism bodies, as the United Nations World Tourism Organization
(UNWTO), as is evidenced by the launching of programs such as the
UNWTO.TEDQUAL Volunteers Program.
The UNWTO TedQual Volunteers Program was put into practice in 2005, and was
designed to support developing countries to accomplish a sustainable and more
competitive tourism sector based on the knowledge management framework through
education, training and research. This is to be supported by volunteer participants
from universities and other education institutions in the developed and developing
worlds, governments and civil society in the country which hosts the programme
3
Volunteer tourism may constitute an important human resource base for the successful
implementation of some of the current international development assistance projects.
Nevertheless, there is an increasingly ambiguity in the definition and context of
volunteer tourism. Some authors tend to discuss at what extent is it beneficial to host
communities or whether do volunteers possess the skills to make a difference.
This paper looks to contribute to the theoretical framework related to the diverse
perspectives about the effectiveness of volunteer tourism and its role in such programs
as is the case of UNWTO.TEDQUAL Volunteers Program. The main characteristics
of this program are described and its potential results are discussed considering the
impacts it may produce on the destination areas involved. This discussion is based
upon a UNWTO.TEDQUAL Volunteers Program case study, developed in the
Mexican state of Chiapas in 2008.
Key words: Volunteer tourism, international development assistance,
UNWTO.TEDQUAL Volunteers Program.
1. Introducción
Es ampliamente reconocido que el turismo presenta un enorme potencial para la
atenuación de la pobreza en los países en desarrollo, que es el tema aglutinador de los
ocho Objetivos de Desarrollo del Milenio. Para lograrlo, se pueden asumir diversos
tipos de intervenciones a través, por ejemplo, de programas de cooperación
internacional para el desarrollo, siempre y cuando estos programas tengan subyacente
como principio elemental, la capacitación de las comunidades locales de los destinos
objeto de intervención, a través de una efectiva transferencia de conocimiento, para que
puedan perpetuar un desarrollo sostenible, basado en una sólida gobernanza,
implicando el sector público, el sector privado y la sociedad civil.
En los últimos años, se verificó un interés creciente por el turismo como un
instrumento de atenuación de la pobreza y el hambre, por parte de los gobiernos, de los
donadores, de instituciones bilaterales y multilaterales, Organizaciones Non-
4
Gubernamentales, organismos oficiales nacionales e internacionales de turismo. En este
ámbito, destaca el papel de la Organización Mundial del Turismo, que asumió el
compromiso con los ODM como una prioridad de su gestión. El Programa
UNWTO.Volunteers es un ejemplo de eso.
El diseño y implementación del Programa UNWTO.Volunteers presupone
precisamente la transferencia de conocimiento para los destinos de los países en
desarrollo, en proyectos que involucran a todos los actores clave para el desarrollo
sostenible del turismo, del sector público, sector privado y sociedad civil, buscando la
excelencia de la gobernanza, y por esta vía contribuir para la atenuación de la pobreza
en los países en desarrollo.
Es con este enfoque que pretendemos discutir en esta ponencia el papel del turismo
como instrumento de desarrollo, a través de programas de cooperación internacional,
tomando como ejemplo el Programa UNWTO.Volunteers y el estudio de caso de su
implementación en el estado mexicano de Chiapas, en 2008. En una primera parte,
discutimos el potencial aporte del turismo para alcanzar los Objetivos de Desarrollo del
Milenio, considerando la complejidad del concepto de pobreza, siguiéndose un breve
abordaje a los tipos de programas de ayuda internacional al desarrollo. Por fin, se
presentan las características principales del Programa UNWTO.Volunteers,
terminando con el caso del Proyecto “Chiapas 2015”, en que se presentan sus
principales fases y se discuten sus potenciales impactos. La selección de este estudio de
caso tiene que ver con el hecho de que los autores han participado directamente,
aunque con diferentes papeles, en el referido proyecto.
2. El papel del turismo para lograr los Objetivos de Desarrollo
del Milenio
De acuerdo con UNDP (1997: iii), “El mundo tiene los recursos naturales y
materiales, el know how y la gente para que éste se vea libre de la pobreza en menos de
una generación”. En consecuencia, el hecho de erradicar el hambre extrema y la pobreza
no es totalmente idealista si no que al contrario, se trata de un objetivo práctico y
5
alcanzable. Creemos que el turismo es uno de los mayores motores en el mundo
contemporáneo y puede tener un papel primordial en la realización de ese ambicioso
objetivo.
Una visión colectiva de la cooperación global para el desarrollo en el siglo XXI fue
expresada en la Declaración del Milenio en septiembre de 2000. Después de varias
conferencias globales en la década de 1990, en las cuales se fueron definiendo los
objetivos de desarrollo para el milenio, fue en aquella ocasión que los 189 Estados
Miembros de las Naciones Unidas establecieron objetivos medibles en todas las esferas
de actividad consideradas determinantes para el desarrollo de la humanidad, teniendo
como meta 2015. Con metas bien definidas que permitan medir el progreso alcanzado,
esta visión de futuro asumió así la forma de ocho Objetivos de Desarrollo del Milenio
(ODM), que se describen a continuación (UN, 2009):
Objetivo 1: Erradicar la pobreza extrema y el hambre
Objetivo 2: Lograr la enseñanza primaria universal
Objetivo 3: Promover la igualdad entre los sexos y el empoderamiento de la
mujer
Objetivo 4: Reducir la mortalidad de los niños menores de 5 años
Objetivo 5: Mejorar la salud materna
Objetivo 6: Combatir el VIH/SIDA, la malaria y otras enfermedades
Objetivo 7: Garantizar la sostenibilidad del medio ambiente
Objetivo 8: Fomentar una alianza mundial para el desarrollo
Entre los ODM destaca el primero por considerarse que de su concretización
dependerá la de los restantes. La ausencia de las condiciones mínimas para vivir
dignamente constituye así el eje central de la actuación del combate centrado en la lucha
contra la pobreza, que se plasma en uno de los mayores desafíos en el marco de la
cooperación para el desarrollo sostenible, en un mundo cada vez más globalizado e
interdependiente, donde la reducción de las desigualdades entre Países Desarrollados y
en Desarrollo se asume no solamente como un imperativo ético y moral, sino como
una prioridad en términos de seguridad global.
6
Por consiguiente, el turismo se asume como una actividad de excelencia para combatir
el flagelo de la pobreza, pudiendo constituirse como un importante instrumento de
desarrollo de regiones desfavorecidas, si es conducido debidamente y teniendo como
marco de acción, los principios elementales del desarrollo sostenible.
En esta perspectiva es fundamental ante todo comprender el complejo concepto de
pobreza, en sus distintas dimensiones, ya que no se trata solamente de bajos
rendimientos, sino también de aspectos como la salud y educación, privación del
conocimiento y comunicación, inhabilidad para ejercer los derechos humanos y
políticos y la ausencia de dignidad, confianza y auto-expresión (UNDP, 1997).
Asimismo, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) definió
tres perspectivas de la pobreza: la perspectiva del rendimiento, la perspectiva de las
necesidades básicas y la perspectiva de la capacidad. En este contexto, es posible definir
la pobreza utilizando el abordaje económico, basado esencialmente en el rendimiento y
consumo - medido por el Banco Mundial a través del PIB per cápita - y no-económico,
que incorpora tres elementos esenciales de la vida humana como la longevidad,
conocimiento y un nivel de vida decente – medido por el Índice de Pobreza Humana
(IPH), que fue introducido por el PNUD en 1997.
Asimismo, actualmente, existen más de 125 naciones en desarrollo, si consideramos el
bajo rendimiento per cápita y el mediano o bajo nivel de desarrollo humano, según los
criterios mencionados arriba (UN, 2006).
En el actual escenario, ¿cómo puede entonces el turismo contribuir para atenuar la
pobreza en sus diversas dimensiones?
El turismo se ha convertido en un motor clave del progreso socioeconómico, con un
crecimiento sostenido y una diversificación cada vez mayor, en los últimos seis
decenios. Si bien en 1950, los quince primeros destinos turísticos representaron el 88%
de las llegadas internacionales, en 2007 el porcentaje cayó al 57 %, lo que refleja el
surgimiento de nuevos destinos, muchos de ellos en países en desarrollo (UNWTO,
2008).
Según la UNWTO (2008), en la actualidad, los ingresos de exportación generados por
el turismo internacional ocupan la cuarta posición, después de los combustibles, los
productos químicos y los productos automotrices, mientras que en muchos países en
7
desarrollo el turismo es la primera categoría de exportación representando una de las
principales fuentes de ingresos para muchos países en desarrollo, crea empleo y
oportunidades de desarrollo. De hecho, las llegadas de turistas en todo el mundo
ascendieron a 903 millones en 2007, lo que representa un crecimiento anual del 6,6 %;
entre 1995 y 2007 el crecimiento medio se situó en promedio arriba del 4 % al año; los
ingresos por turismo internacional se elevaron a 625.000 millones de euros, en 2007, lo
que corresponde a un incremento en términos reales del 5,6 % en relación con 2006.
Según las previsiones de la OMT para 2020, el número de llegadas mundiales en 2020
será de 1,600 millones (UNWTO, 2001; UNWTO, 2008).
El año 2008 presentó un crecimiento más moderado de 2% (924 millones de llegadas),
debido a la crisis de la economía global, que afectó la confianza del consumidor, el
aumento del paro y la reducción del ingreso disponible.
Estos datos y cifras demuestran que el turismo juega un papel muy importante para la
generación de ingresos y creación de empleo. No obstante, si la importancia económica
del turismo para los países en desarrollo ya es ampliamente reconocida, su rol como
instrumento de lucha contra la pobreza es muy reciente (Zhao & Ritchie, 2007).
UNWTO (2004) identificó siete diferentes formas en que el turismo puede funcionar
como instrumento de reducción de la pobreza: (1) empleo de los pobres en empresas
turísticas; (2) oferta de bienes y servicios a las empresas turísticas por los pobres o
empresas que emplean pobres; (3) ventas directas de bienes y servicios por los pobres a
los visitantes; (4) creación de empresas turísticas por los pobres; (5) tasas o impuestos
sobre el rendimiento turístico que van a beneficiar los pobres; (6) donativos a los
pobres por los turistas o empresas turísticas; (7) inversión en infraestructura
estimulada por el turismo y que también beneficia a los pobres.
El problema es que, no obstante el crecimiento que el turismo pueda generar en los
países en desarrollo, hay potenciales contradicciones que lo impiden, tales como: falta
de recursos humanos calificados para trabajar en el sector; elevado control extranjero
sobre los recursos locales; sustancial fuga de capitales al exterior; falta de articulación
con otros sectores de la economía; bajo efecto multiplicador fuera de los enclaves
turísticos; refuerzo de los padrones de desigualdad socioeconómica y espacial
(Brohman, 1996; Carbone, 2007; Scheyvens & Momsen, 2008).
8
Según Zhao & Ritchie (2007), esto ocurre porque la reducción de la pobreza ha sido
considerada como un aporte natural del crecimiento económico regional que el turismo
puede inducir y no como una prioridad. Sin embargo, en los últimos años, se verificó
un interés creciente por el turismo como un instrumento de atenuación de la pobreza y
del hambre, por parte de los gobiernos, de los donadores, de instituciones bilaterales y
multilaterales, Organizaciones Non-Gubernamentales (ONG), organismos oficiales
nacionales e internaciones de turismo. En este ámbito, destaca el papel de la
Organización Mundial del Turismo, que asumió el compromiso con los ODM como
una prioridad, como demuestra su imagen institucional en la página web (UNWTO,
2009) en la cual destaca el lema “UNWTO - Comprometidos con el turismo y con los
objetivos de desarrollo del Milenio”.
3. El turismo y la cooperación internacional para el desarrollo
Hay varias formas de abordar el tema de la asistencia al Desarrollo internacional en el
cual el Turismo se considera la principal herramienta para la mitigación de la pobreza.
El abanico de programas y tipos de instituciones que se pueden considerar en este
debate es muy variado, considerando desde distintas Organizaciones No
Gubernamentales, agencias de ayuda internacional, el Banco Mundial, la Organización
Mundial del Turismo a la Comisión Europea entre otras que trabajan sin excepción,
aunque con diferentes abordajes, para el mismo objetivo que es la mitigación de la
pobreza.
Considerando el vasto conjunto de iniciativas y programas hay una necesidad de
entender las diferentes estructuras, tipos de intervención y resultados. En todo caso,
todos ellos se deberían concentrar en el principio de la transferencia de conocimiento y
experiencia de los países desarrollados, como defiende la OMT en contraposición a
intervenciones esporádicas en varios proyectos, desarticulados entre sí. Esto ocurre a
menudo y no contribuye a lograr una eficaz “capacidad creadora” a largo plazo en los
destinos de los países en desarrollo.
9
La capacidad creadora es un concepto fundado en los principios básicos de la
democracia, participación, desarrollo, y mejoría continua de los conocimientos así como
los procedimientos de aprendizaje compartidos y el acceso igualitario a las
oportunidades. El resurgimiento del debate sobre el desarrollo sostenible antes y
después de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y
Desarrollo en 1992 ha contribuido para colocar La Capacidad Creadora en el primer
lugar de la lista de prioridades de la asistencia al desarrollo internacional y como
condición necesaria para permitir la realización efectiva y el desarrollo profundo de
todas las regiones del planeta. Actualmente se reconoce que La Capacidad Creadora no
se trata solamente de brindar asistencia al desarrollo, se trata de la implementación
técnica y de la toma de decisiones en todos los países y regiones que conllevará a nuevos
caminos que permitirán que el Medio Ambiente y los asuntos sociales sean una parte
integral del desarrollo económico (Partidário and Wilson, 2009).
El Turismo es apoyado cada vez más por las agencias de desarrollo multilateral e
Instituciones Financieras como una estrategia de desarrollo en particular con relación a
la reducción de la pobreza y el logro de los ODM.
Instituciones Multilaterales
Hay una creciente demanda para usar el turismo como una herramienta de desarrollo
que se refleja en la existencia de un vasto conjunto de proyectos y programas apoyados
por instituciones especializadas que además facilitan asesoría técnica en los países en
desarrollo. De hecho, estas instituciones multilaterales incluyen los bancos Africano,
Asiático e Interamericano de Desarrollo, la Unión Europea y diversas agencias de las
Naciones Unidas como la Organización Mundial de Turismo, el Programa de las
Naciones Unidas para el Desarrollo, el programa de Educación de las Naciones
Unidas, la Organización Cultural, Científica y Educativa de las Naciones Unidas y la
Conferencia de Comercio y Desarrollo de las Naciones Unidas que están todas
envueltas en actividades relacionadas con Turismo desde una variedad de perspectivas
(Hawkins & Mann, 2007).
10
Instituciones Bilaterales
Aparte de las instituciones internacionales de referencia, las agencias de desarrollo con
delegaciones en el extranjero están financiando cada vez más los proyectos de desarrollo
con base en el Turismo y son demasiadas para ser enumeradas en esta ponencia.
Algunos ejemplos son las agencias Alemana, Holandesa y Española, todas con el
objetivo específico de divulgar el Turismo como herramienta para el desarrollo y la
reducción de pobreza (Ferguson, 2007; Hawkins & Mann, 2007).
Existe además una variedad de organizaciones No Gubernamentales que tienen
objetivos específicos para el Turismo particularmente en lo que se refiere al desarrollo
de las comunidades y la conservación.
4. El Programa UNWTO.Volunteers de la Fundación
UNWTO.Themis
La Organización Mundial del Turismo desempeña un papel central y decisivo en la
promoción del desarrollo de un turismo responsable, sostenible y accesible para todos,
prestando especial atención a los intereses de los países en desarrollo. Desde 2003 es
un organismo especializado de las Naciones Unidas y representa la principal institución
internacional en el campo del turismo. Constituye un foro mundial para debatir
cuestiones de política turística y una fuente útil de conocimientos especializados en este
campo. Entre sus miembros figuran 161 países y territorios y más de 390 Miembros
Afiliados que representan al sector privado, a instituciones de enseñanza, a asociaciones
de turismo y a autoridades turísticas locales (UNWTO, 2009).
En 2005, la OMT inició el Programa UNWTO.TedQual Volunteers a través de la
Fundación UNWTO.Themis, con la misión de: “Contribuir a los Objetivos de
Desarrollo del Milenio de las Naciones Unidas promoviendo al turismo como
instrumento de desarrollo a través de la educación y formación de profesionales
voluntarios para apoyar a los Estados Miembros de la OMT, difundiendo el espíritu
del voluntariado” (UNWTO.Themis, 2008).
11
Los Proyectos en el ámbito del Programa UNWTO.Volunteers se realizan en un país
de acogida, cuya Administración Nacional de Turismo ha presentado un proyecto de
desarrollo, e involucra a expertos en turismo y jóvenes voluntarios especializados en
turismo y cooperación para el desarrollo con el objetivo de llevar a cabo un proyecto de
6 meses, incluyendo 3 a 4 semanas de trabajo de campo en el país de acogida
(UNWTO.Themis, 2008).
El principio básico es aprovechar la experiencia del país anfitrión, de los expertos de la
OMT y del personal de la OMT, y brindar asistencia al país anfitrión en la
identificación de productos turísticos de gran potencial y en el desarrollo de alternativas
de posicionamiento estratégico que contribuyan al desarrollo sostenible del turismo
como alternativa económica, buscando la generación de beneficios socioeconómicos. En
este planteamiento juega un papel fundamental la gobernanza en el turismo, de manera
que, la participación activa del sector público, privado y de la sociedad civil en todas las
fases del proceso propicia el desarrollo turístico y el equilibrio medioambiental.
El Programa UNWTO.Volunteers tiene los siguientes objetivos:
- Apoyar a los Estados Miembros de la OMT en la formulación e
implementación de planes, programas y proyectos a través de la contribución técnica
de expertos y voluntarios de la OMT;
- Capacitar de una manera teórico-práctica a profesionales con la adecuada
vocación y aptitudes en el campo del turismo como instrumento para el desarrollo:
Voluntarios;
- Difundir, a través de la educación y la formación, las políticas de la OMT en el
campo del turismo, especialmente, la condición del turismo como instrumento de
desarrollo y su potencialidad para contribuir en la reducción de la pobreza;
- Difundir los ideales de servicio y solidaridad arraigados en la esencia del
voluntariado.
Para alcanzar estos propósitos el programa UNWTO.Volunteers emprende un
proyecto de desarrollo turístico en una región o destino de un país en desarrollo que
solicita soporte a la OMT para implantar un proyecto considerado importante para sus
esfuerzos a favor del turismo sostenible. Así, la selección del proyecto deberá ser
12
enfocada en áreas asignadas tales como: estrategias de marketing, evaluación,
identificación y desarrollo de productos, creación de plan de negocio, desarrollo
internacional, desarrollo de planes de turismo basado en comunidades y estrategias de
turismo a favor de la pobreza (UNWTO, 2009).
Después de la OMT y el país anfitrión firmaran un convenio sobre el alcance y
naturaleza del proyecto, el programa emprenderá en colaboración con los actores
locales y el grupo de voluntarios, implicando las siguientes fases:
- Curso de preparación de la OMT;
- Selección de los voluntarios para el destino especifico;
- Planificación e investigación de datos secundarios antes de iniciar el trabajo de
campo (2 meses);
- Trabajo de campo (2-3 semanas);
- Preparación del informe final con las conclusiones y recomendaciones para
acciones futuras (2-3 meses);
- Proyectos e investigaciones adicionales a petición del país anfitrión.
Los voluntarios estarán implicados aproximadamente 6 meses en el proyecto. Durante
este periodo, ellos trabajarán en investigación extensiva sobre turismo en el país
seleccionado, incluyendo un análisis general de las tendencias del turismo para el
destino y la región, que incluye datos tales como llegadas de visitantes y perfiles de los
viajeros, análisis comparativa y benchmarking, evaluación de marca actual, estrategias
de imagen y marketing (Ruhanen, Cooper and Fayos-Solá, 2008: 29).
Ruhanen, Cooper and Fayos-Solá (2008: 30) enfatizan así los beneficios para todos los
grupos implicados como sigue:
El país anfitrión recibe consultoría de alto nivel a poco o sin costo; el único
gasto que puede ser asumido por acompañamiento de una agencia de
desarrollo, será transporte y alojamiento para los voluntarios en el interior
del país. El voluntario OMT obtiene importantes experiencias en el campo
del desarrollo del turismo, solo con sus gastos de viajes y artículos personales
en el interior del país. Los beneficios a largo alcance acumula para la
13
institución educativa de turismo miembros de la OMT y las instituciones en
el país anfitrión que tienen la oportunidad de aprender en colaboración con
otras. Desde la perspectiva de la OMT, el programa provee la oportunidad
para diseminar conocimiento al país en desarrollo entre educación,
entrenamiento e investigación, con el objetivo de producir direcciones y
estrategias para el desarrollo del turismo sostenible.
Desde la edición 2005, el programa UNWTO.Volunteers está siendo readaptado
de acuerdo a los diferentes acercamientos asumidos por la organización para
mejorar sus resultados y adaptar las características específicas de cada proyecto y
destino. Desde finales de 2008, el proyecto tomó lugar en los siguientes destinos:
México (Tabasco en 2005 y Chiapas en 2008), Ecuador (2005), Argentina (2005),
Uruguay (2008). En el tiempo de escribir el presente artículo estaban en
preparación proyectos para Colombia y Lesotho.
4.1 El proyecto “Chiapas 2015: Plan de Estrategia y Competitividad
Turística”
Marco geográfico
Chiapas, uno de los cinco estados de la República Mexicana que forma parte del
Mundo Maya, cuenta con una gran riqueza en arqueología, cultura y naturaleza,
concentrándose en un espacio territorial de 75634 km2. Representa el 3,8% de la
superficie del país, colinda al norte con Tabasco; al este con la República de Guatemala,
al sur con el Océano Pacífico y al oeste con los estados de Oaxaca y Veracruz. En el
estado se concentra el 30% del agua superficial del país, producto de los ríos Grijalva,
Usumacinta, Lacantún, Jataté y Suchiate; las presas: Belisario Domínguez, Chicoasén,
Nezahualcóyotl y Peñitas; y de los lagos de Montebello, Colón y Miramar.
14
Mapa 1.- División Política y Regiones Económicas del Estado de Chiapas
Fuente: Sistema Estatal de Estadística e Información Geográfica. Gobierno del Estado de
Chiapas.
Existen 37 áreas naturales protegidas, entre las que destacan Montes Azules, La
Sepultura, La Encrucijada, El Ocote y El Triunfo. En el territorio chiapaneco existen
19386 localidades, distribuidas en 118 municipios, agrupados en 9 regiones
económicas: Región I Centro, Región II Altos, Región III Fronteriza, Región IV
Frailesca, Región V Norte, Región VI Selva, Región VII Sierra, Región VIII
Soconusco y Región IX Istmo Costa.
Chiapas opta por desarrollar un turismo responsable y solidario por la calidad estética
de los atractivos naturales y culturales que tiene este estado del sureste mexicano que
son únicos en el país. Se pueden mencionar como ejemplo los siguientes lugares:
Cascadas de Agua Azul, Río Usumacinta, Lago Miramar en el corazón de la Selva
Lacandona, Lagos de Montebello, la Cascada el Chiflón. Asimismo, Chiapas concentra
un alto porcentaje de especies de fauna, en específico aves. En cuanto a la arqueología,
existen centros ceremoniales de la cultura Maya como Bonampak, Yaxchilán, Palenque,
Toniná, Chinkultik y otros sitios donde la mayoría de estos lugares se encuentran en
las zonas rurales.
15
Chiapas 2015: Plan de Estrategia y Competitividad Turística
El Proyecto “Chiapas 2015” inicia con la solicitud del gobierno de la Ciudad de Tuxtla
Gutiérrez, capital del Estado de Chiapas, ante las autoridades estatales y nacionales
correspondientes, quienes, a su vez, presentaron la petición a la OMT. A esta solicitud
se sumaron las de los municipios de Chiapa de Corzo, Comitán de Domínguez, San
Cristóbal de las Casas y Palenque, también del Estado de Chiapas.
Con la finalidad de concretar los alcances del Proyecto, en el mes de octubre de 2007 se
llevó a cabo una misión exploratoria en la que participaron el Director Ejecutivo de la
Fundación UNWTO.Themis, Sr. Vicente J. Molés y la consultora Lic. Cecilia García,
quienes acompañados por las autoridades turísticas de Tuxtla Gutiérrez visitaron las
localidades de Tuxtla Gutiérrez, Chiapa de Corzo, San Cristóbal de las Casas,
Comitán de Domínguez y Palenque; incluyendo entrevistas con autoridades estatales,
municipales y representantes del sector privado.
El Convenio para la elaboración del Proyecto “Chiapas 2015”, fue firmado con fecha 8
de agosto de 2008, participando en este documento las autoridades nacionales, estatales
y municipales, así como la contraparte de la Organización Mundial del Turismo,
formalizando de esta manera la ejecución del Proyecto.
Derivado de los trabajos realizados y siguiendo el enfoque metodológico adoptado por
el grupo de trabajo, se tomó la decisión de que el Proyecto Chiapas 2015 estuviera
conformado por los siguientes elementos (UNWTO.Themis, 2009):
1º. Diagnóstico de la situación actual del Sistema Turístico de los Destinos
Seleccionados, para identificar y evaluar los diversos elementos que constituyen el
sistema, así como los elementos externos y el análisis estratégico de los destinos, con
base a los intereses y deseos de los protagonistas de la actividad turística en dichas
localidades como requisito y condición previa a la formulación de propuestas de
desarrollo.
2º. Propuesta de Modelo de Desarrollo, que plantea los criterios generales para un
desarrollo turístico sostenible y establece los componentes que configuran el modelo:
- Estructuración turística del espacio;
16
- Determinación de objetivos y visión de desarrollo turístico para la zona motivo
de estudio;
- Propuesta de posicionamiento turístico para el área de estudio, con base a las
oportunidades que presenta el entorno de mercado y a las posibilidades objetivas de
las que disponen cada uno de los destinos incluidos en el Proyecto;
- Evaluación de diferentes opciones de desarrollo y estrategia para el área motivo
del estudio;
- Elección de una propuesta estratégica, es decir, selección de una cartera de
negocios/productos prioritarios para cada centro turístico identificado y para el
conjunto del área de estudio, la priorización de públicos/segmentos por productos y
centros, y la priorización de mercados geográficos por productos y centros.
3º. Programas específicos de actuación, que identifican y priorizan los ámbitos de
actuación para crear, mejorar y reforzar las condiciones que permitan la
implementación del Proyecto Chiapas 2015.
Una vez definido el Modelo de Desarrollo e identificados los campos de acción
prioritarios, la siguiente fase del Proyecto consiste en la elaboración de programas de
actuación detallados para trabajar de manera sistemática en mejorar las condiciones
generales y específicas de los centros y productos turísticos.
Dicho plan se logró desarrollar con la participación de 10 voluntarios internacionales
del Programa UNWTO.Volunteers provenientes de Portugal, España, Brasil,
Guatemala y México, voluntarios del Curso Universitario Turismo y Cooperación
Internacional para el Desarrollo, en 2007 y 2008, de la OMT. Asimismo, participaron
dos expertos técnicos en turismo de nacionalidad mexicana, quienes coordinaron los
trabajos de campo y la redacción del documento final.
Los voluntarios iniciaron las primeras exploraciones en el mes de agosto y concluyeron
con el trabajo de campo en el mes de octubre de 2008. Los trabajos que se desarrollaron
en la parte de exploración se realizaron por equipos integrados en forma
interdisciplinaria donde se presentaron los primeros avances en la concentración en el
área de estudio.
17
El trabajo de campo consistió con la visita técnica en los cinco municipios con los
mismos voluntarios para evaluar la calidad estética de los atractivos turísticos naturales
y socioculturales, los recursos turísticos, la infraestructura, la estructura y la
superestructura turística. Para la obtención de la información se visitaron los diferentes
atractivos, se realizaron entrevistas con prestadores de servicios turísticos, funcionarios,
turistas y la población local. Además de un taller de planeación estratégica con los
actores mencionados para identificar las fortalezas, amenazas, debilidades y
oportunidades en cada municipio.
Dichos programas de actuación se concretaran en cinco propuestas, que abarcan los
principales temas identificados como parte del diagnóstico, como son: el desarrollo del
producto turístico; el fortalecimiento del Factor Humano, área que abarca los aspectos
de formación, capacitación y cultura turística; el mejoramiento de las condiciones
generales en los destinos, que contempla aspectos como imagen urbana, señalización
turística y servicios de asistencia al turismo; Marketing, que se refiere a propuestas
concretas de posicionamiento, estrategias y acciones de comunicación hacia diversos
públicos de interés y finalmente, una propuesta para fortalecer la organización
institucional para la gestión turística municipal, que permita el seguimiento puntual de
las propuestas presentadas.
La identificación y priorización de los campos de acción es el resultado, por una parte,
de las propias necesidades y requerimientos que plantea el Modelo de Desarrollo y, por
la otra, de la valoración que han realizado los propios protagonistas de la actividad
turística de los destinos participantes tanto en los Talleres Sectoriales celebrados, como
a través de las entrevistas hechas a informantes clave en cada uno de los destinos.
El caso de Chiapas es un avance sin precedentes de la participación de la OMT en
materia turística, el plan está elaborado y queda en manos de las autoridades para la
ejecución y seguimiento de la misma.
18
5. Discusión sobre el Programa UNWTO.Volunteers y los
potenciales resultados del proyecto “Chiapas 2015”
Con frecuencia se cree que la variedad y calidad de los atractivos en un destino y su
zona de influencia son los componentes determinantes para establecer la
competitividad de un destino. El trabajo de campo realizado en Chiapas por el grupo
de voluntarios confirmó este postulado. Esta idea bastante extendida parece haber
motivado iniciativas para entrar al mercado turístico, o bien para despertar, entre las
comunidades, el sector empresarial y el sector público local, expectativas desmedidas en
torno a los beneficios que puede generar el turismo, en la creencia de que basta contar
con paisajes y atractivos para asegurarse una posición en el mercado.
Entre los diferentes actores involucrados en la actividad turística de los Municipios que
fueron receptores del Programa UNWTO.Volunteers, encontramos que se dejaba de
lado, o no se conocían elementos indispensables para consolidar un destino turístico,
tales como: la condición de los factores productivos y de las industrias de apoyo; la
ubicación geográfica; el clima de negocios; los costos de transportación; la información
sobre los mercados; la disponibilidad y especialización de los recursos humanos; así
como las habilidades existentes para la planeación, promoción y comercialización.
Consideramos que un valor fundamental del Programa UNWTO.Volunteers es que
pone especial énfasis en el desarrollo de capacidades y habilidades intelectuales en los
destinos turísticos como piedra angular que orienta el trabajo de las instituciones,
impulsa a las empresas e integra a los diferentes actores hacia un propósito compartido
de largo plazo, a partir del reconocimiento de la complejidad de la actividad turística.
Esta complejidad obedece no sólo al conjunto de elementos que convergen a
estructurarla al interior del sistema, sino a las múltiples relaciones que mantiene el
sistema turístico con el entorno político, social, económico, ambiental y tecnológico. Se
destaca el conocimiento como recurso estratégico para la generación de riqueza a través
de la identificación de oportunidades. Bajo esta perspectiva el conocimiento puede,
incluso, crear atractivos turísticos allí en donde antes no los había.
19
Al fomentar la representatividad y considerar los intereses e iniciativas referentes al
turismo en sentido amplio de la sociedad civil y el sector privado: empresas, sindicatos,
instituciones del conocimiento (centros de investigación, universidades, otras
instituciones de enseñanza, instituciones de normalización y estandarización, iniciativas
de capacitación y diseminación del conocimiento, etc.), organizaciones no-
gubernamentales, grupos ciudadanos, a través de la investigación previa, entrevistas
personales y de los talleres realizados durante el trabajo de campo, el Programa
UNWTO.Volunteers comunica al destino receptor del programa, que debido a la
existencia de estas estructuras y sus relaciones dinámicas, que finalmente son las que
explican la aparición y el desarrollo del turismo, resulta que el fomento o el impulso a la
actividad no puede reducirse a elementos simples como la existencia de atractivos. Se
advierte también que las condiciones y estructura de las empresas y las industrias
resultan básicas para la competitividad de un destino. Por lo tanto, los esfuerzos para
mejorarla deben enfocarse hacia ellas, aunque no únicamente, en tanto que las
administraciones públicas locales también tienen un papel relevante en cualquier
proceso de desarrollo turístico y de mejora de la competitividad.
Al trabajar con equipos interdisciplinarios, el Programa UNWTO.Volunteers enfatiza
que el proceso de desarrollo turístico es amplio por naturaleza, ya que engloba
programas económicos, tecnológicos, ambientales, sociales, culturales y políticos,
poniendo de relieve las interrelaciones entre las distintas esferas.
El Programa UNWTO.Volunteers permite la mayor participación de las
universidades en el desarrollo de la actividad turística asegurando que las distintas
partes interesadas en el proceso de desarrollo regional (instancias encargadas de
impartir educación y formación, empleadores, organizaciones patronales, sindicatos,
organismos de desarrollo económico y del mercado laboral, profesores y estudiantes)
sean conscientes de las funciones de los demás y de los factores que alientan o impiden
un mayor compromiso regional. Por ejemplo, se subraya la necesidad de vincular a las
instituciones educativas con los organismos del mercado laboral.
Finalmente, consideramos que a través de la propuesta de Programas de Actuación
específicos, el Programa UNWTO.Volunteers “Proyecto Chiapas 2015”, y su
seguimiento, pueden apoyar la labor de las autoridades federales, estatales y
municipales solicitantes, así como de las empresas y sociedad civil para priorizar,
20
enfocar y posicionar al destino, asegurándose de que se cumplan las condiciones para la
sostenibilidad, ayudando a satisfacer las expectativas de los actores involucrados y
presentando opciones para la utilización de los recursos públicos y privados que
apunten a la rentabilidad económica, social y ambiental a largo plazo, que acabarán por
contribuir para la atenuación de la pobreza.
Aunque todavía sea muy pronto para medir los impactos globales resultantes de la
intervención del Programa UNWTO.Volunteers “Proyecto Chiapas 2015”, creemos
que las recomendaciones propuestas en los programas de actuación serán puestas en
marcha, por la dinámica y voluntad política que hemos observado en la contraparte
local.
Sin embargo, hay algunos aspectos que consideramos que pueden ser mejorados, como
por ejemplo, la duración del trabajo de campo que fue insuficiente para comprender
con más profundidad la funcionalidad del fenómeno turístico de cada lugar, por lo que
se sugieren algunas recomendaciones con la intención de mejorar en los próximos
programas de voluntariado de la OMT: a) Entrevistas en profundidad a personas claves
que puedan proporcionar información del sector turístico, b) Destinar mayor tiempo
en la discusión con los voluntarios la pertinencia sobre la vocación turística de cada
lugar, c) Prolongar la duración del trabajo de campo con el propósito de preparar un
anteproyecto del plan por parte de los voluntarios en coordinación con los expertos
técnicos, d) Incluir en las entrevistas en profundidad a académicos del sector turístico
para cada región de estudio.
Podemos así concluir, con el ejemplo del “Proyecto Chiapas 2015”, que el Programa
UNWTO.Volunteers presenta características en su diseño y implementación que nos
hacen creer que los resultados futuros podrán tener un impacto positivo en los destinos
objeto de intervención, ya que se preconiza y implementa una efectiva participación de
todos los actores locales, del sector público, privado y de la sociedad civil, en la
discusión de los Planes de Desarrollo Estratégico, contribuyendo a través de la
transferencia de conocimiento, ante todo para el refuerzo de la Gobernanza en el
destino.
21
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1
Redes sociales de optimización de los sistemas de
información del turismo comunitario, Izabal,
Guatemala
Stephane Bajulaz
Jorge Araña
Matías González
Francisco López
Cátedra UNESCO en Planificación Turística y Desarrollo Sostenible
(Universidad de las Palmas de Gran Canaria, España)
Resumen
La prolongada guerra civil que devastó Guatemala finalizó sin cambios sustanciales
en los factores que justificaron su inicio: inequidad, pobreza y vulneración sistemática
de los derechos de los pueblos indígenas. La región Caribeña, que cuenta con las
mejores representaciones de bosque tropical húmedo y numerosas áreas protegidas,
acogió a decenas de comunidades Q’eqchi’es procedentes de las Verapaces. Limitadas
por las normas de conservación, muchas comunidades apostaron por pequeños
emprendimientos ecoturísticos para generar ingresos y empleos compatibles con los
objetivos de conservación. Sin embargo, no han podido atraer un flujo significativo de
visitantes, ni obtener un impacto positivo en el desarrollo humano. Este proyecto,
promovido por la cooperación de las Islas Canarias e identificado con las
comunidades y otros actores locales, persigue fortalecer los productos turísticos y
mejorar su orientación al mercado, así como potenciar su comercialización, todo a
partir de ampliar las capacidades locales. La creación de una red de comunidades
(Ecoaldeas) y el diseño de una estrategia compartida, constituye la esencia del
proyecto. La red complementa los atributos naturales y culturales que atesora cada
aldea, conformando un producto más competitivo, fomentando los intercambios
entre las comunidades y reduciendo los costes de movilidad de los productos y
2
personas que entran y salen del área, residentes y visitantes. La reasignación de
recursos desde la comunicación presencial a la conectividad mediante TICs
apropiadas (bajo coste), permite aumentar la fluidez, la frecuencia y la estabilidad de
los contactos, incrementando la robustez y mejorando los resultados comerciales de
la Red de Ecoaldeas.
Palabras claves: Desarrollo rural, turismo comunitario, redes sociales, Tecnologías
de la Comunicación y la Información (TIC), Sistema de Información (SI), Gestión
de RR.HH
Abstract
The protracted civil war that devastated Guatemala ended without substantial
changes in the factors that justified it: inequity, poverty and systematic violations of
the rights of indigenous peoples. The Caribbean region, where the best
representations of tropical rainforest and numerous protected areas can be found,
hosted dozens of Q’eqchi’es communities who came from Verapaces. Limited by the
rules of conservation, many communities have ventured to put up small businesses
ecotourism to generate income and employment compatible with the conservation
goals. However, they have not been able to attract a significant flow of visitors, nor
obtain from a positive impact on human development. The project, promoted by the
cooperation of the Canary Islands and identified jointly with the communities and
other local actors, pursues strengthen the products and improve their market
orientation, as well as enhancing the effectiveness of its marketing, everything
supported on expanding local capacities. The creation of a network of communities
(ecovillages) for the design of a shared strategy is the essence of the project. The
network allows natural and cultural attributes held by each village be complemented
by the others, creating a new and more competitive product; encourages exchanges
among the participating communities; and reduces the costs of the mobility of the
products and people coming and leaving the area, both residents and visitors. The
reallocation of resources from face-to-face communication to connectivity through
3
appropriate ICT (low cost), increased the flow, the frequency and the stability of the
contacts, increasing the robustness and improving the commercial results of the
community network.
Key words: Rural development, community tourism, social networks, Information
Technologies (IT), Information Systems, HR Management.
1. Introducción
La Red de Ecoaldeas Maya-Caribe enlaza tres comunidades Q’eqchi’es del
departamento de Izabal, Guatemala Oriental: Lagunita Salvador, Chichipate y
Chapín Abajo. Las tres comunidades han apostado por el ecoturismo para
diversificar sus fuentes de ingreso; pero por falta de infraestructuras, de recursos, y de
una comunicación adaptada, el negocio es incipiente, y difícilmente permite cumplir
con los eternos objetivos de lucha contra la pobreza y preservación ambiental.
Formulamos la hipótesis siguiente: existen soluciones técnicas y organizacionales de
bajo coste que permiten una comunicación más eficiente, dentro y alrededor de la red
de turismo comunitario. Los efectos esperados trascienden el mero negocio turístico.
A medio-largo plazo, se pretende reanudar lazos y nodos intercomunitarios,
debilitados por cuatro décadas de guerra civil, e influyentes en las cuatro vértices del
desarrollo sostenible: ambiental, económico, social e institucional (Valentin y
Spangenberg, 2000). En este ámbito, la definición de los indicadores pertinentes para
la evaluación supone una gran complejidad; tal y cómo lo expresó Daniela Meadows
(1998): “el proceso de encontrar, implementar y mejorar los indicadores del desarrollo
sostenible, no es alcanzable a la primera. No obstante, es urgente empezar”.
4
2. Contexto de intervención
2.1 Historia y Sociedad
Para entender los problemas actuales de las poblaciones indígenas del Caribe
Guatemalteco, hay que partir de la premisa que este espacio no estaba habitado antes
de los años 50. Castigada por el ejército durante 36 años de conflicto armado, la
población campesina Maya de Alta Verapaz huyó de la persecución, refugiándose en
el vecino departamento de Izabal. La secular discriminación que han sufrido los
pueblos indígenas en el país y su condición de extrema vulnerabilidad durante la
guerra han derivado en una situación de supervivencia a costa del entorno natural. La
tala de árboles para la construcción, la cocina y la ganadería; el braconaje de especies
escasas para venta o consumo propio, permiten la subsistencia de pueblos que aspiran
a un modo de vida más sostenible, pues la mayoría son conscientes del círculo vicioso
en el cual se ven atrapados. Aunque no pueden desconocerse los esfuerzos de los
gobiernos sucesivos y de la cooperación internacional para favorecer el desarrollo de
la población indígena, en la mayoría de los casos los resultados no han sido los
esperados. La población indígena de Guatemala se concentra principalmente en el
área rural, lo que aumenta las probabilidades de sufrir condiciones de pobreza. En
efecto, la pobreza extrema alcanzaba en 2004 valores del 32% para el área rural, y del
29% para la población indígena, frente al 9% de la población urbana y al 15% de la
población no indígena (SEGEPLAN, 2005). La agricultura sigue manteniéndose
como el principal medio de supervivencia y generación de ingresos, gracias a la
comercialización de pequeños excedentes de productos de bajo valor económico, y
que difícilmente compiten con las importaciones de otros países, con una agricultura
subsidiada.
Para conferir una nueva dinámica de desarrollo rural, la diversificación de las
actividades económicas resulta crucial. En este orden de ideas, los servicios a la
producción, a las personas, a los hogares y a la comunidad están llamados a crear
vínculos dinámicos con la demanda urbana nacional y con el mercado internacional,
que remunera mejor los esfuerzos de las pequeñas unidades productivas.
Potencialmente, el turismo, los servicios ambientales y los llamados eco-negocios
vinculados a la valoración y aprovechamiento sostenible de los ecosistemas y la
5
biodiversidad local, constituyen un oportunidad atractiva para los pueblos indígenas.
El Parque Nacional de Río Dulce, ubicado en el municipio de Livingston, y el
Refugio de Vida Silvestre Bocas de Polochic en El Estor constituyen atractivos
turísticos mayores. Ambos municipios cuentan con más del 90% de población
indígena, perteneciendo su mayoría a la etnia Q’eqchi’. Las comunidades beneficiadas
por esta primera fase de implementación de la Red Ecoaldeas aparecen en amarillo en
la tabla siguiente, las demás comunidades podrían entrar a formar parte del proceso
en una próxima etapa.
Área Protegida Nº de Comunidades Total Habitantes
Parque Nacional de Río Dulce 53 10356
Biotopo Chocón Machacas 3 413
Lagunita Salvador 1 124
Creek Cáliz 1 117
Puntarenas 1 172
Resto del Parque Nacional 50 9943
Refugio de Vida Silvestre Bocas de Polochic 8 5271
Chichipate 1 2366
Pataxte 1 850
Selempín 1 126
Chapín Abajo 1 365
Guaritas 1 320
Chinebal 1 660
Bocancha 1 334
Nva. Esperanza Polochic 1 250
Tabla 1: Repartición de las poblaciones indígenas en el Parque Nacional de Río Dulce y el
Refugio de Vida Silvestre de Bocas de Polochic. Fuente: SEGEPLAN, 2005.
Las poblaciones directamente beneficiadas: Lagunita Salvador, Chapín Abajo y
Chichipate, suman un total de 2.855 habitantes, pero las actividades desarrolladas y los efectos multiplicadores de éstas sobre otras comunidades, instituciones locales y
agentes turísticos (Mesa de Turismo Comunitario, operadores locales, transportistas...) o de prestación de servicios (alimentación, suministros, banca), pueden aumentar el número de beneficiados indirectos.
6
2.2 TIC y Sociedad
Técnicamente hablando, este proyecto no habría sido posible hace tan sólo dos años.
En efecto, la estrategia de intervención basada en las TIC y en la transferencia de conocimiento, se fundamenta en la madurez tecnológica de Internet y la telefonía
móvil. Se pretende innovar en materia organizacional para sacar partido de las nuevas herramientas que mejor se adapten a las necesidades y capacidades de la comunidad
rural.
Según el PNUD (2001): “La tecnología ha tenido siempre una importancia decisiva en
el progreso de la humanidad. Los avances alcanzados a finales del siglo XX han llevado a
expresar que estamos en presencia de una verdadera revolución tecnológica, la cual, como
tal, afectará profundamente a todas las personas en todos los países”. El Anexo 1 permite
visualizar el carácter exponencial de la revolución tecnológica y cultural, en el ámbito
de la telefonía celular en Guatemala.
Según los autores del Programa Internacional para el Desarrollo de la Comunicación
(UNESCO, 2008): “Los medios de comunicación social pueden verse como:
- Canales de información y educación mediante los cuales las/los ciudadanos pueden
comunicar entre sí;
- Correctores de la “natural asimetría de la información” entre gobernadores y gobernados
y entre agentes privados en competencia;
- Maneras en que la sociedad aprende sobre sí y conforma un sentido de comunidad, y que
da forma al entendimiento de los valores, costumbres y tradición;
- Vigilantes que observan a los gobiernos en todas sus formas, promoviendo la
transparencia (…), exponiendo la corrupción, la administración incorrecta y las
actuaciones empresariales indebidas;
- Herramientas para aumentar la eficiencia económica;
(…) La interrogante clave, es cómo fomentar un marco mediático y prácticas que
contribuyan a estos objetivos trascendentales. Esta preocupación es particularmente aguda
en las democracias nuevas o restauradas, cuyos sistemas mediáticos han sido
distorsionados o quebrantados por la opresión, corrupción o los efectos de la guerra y el
subdesarrollo.”
7
El proyecto de Red Ecoaldeas se inscribe en esta línea de trabajo. Partimos de la
hipótesis siguiente: Internet y las redes sociales representan en sí un autentico desafío
al estatus quo de la condición indígena en el medio rural, caracterizada por la
agricultura de subsistencia, el aislamiento y la falta de comunicaciones, materiales y
virtuales, con el resto del país y del mundo.
El estudio de oportunidades (ver apartado 3.2. I+D+i) confirmó la funcionalidad de
la red de telefonía celular y 3G en el área de intervención, así como la predisposición
de los usuarios locales para utilizar este medio. La elección de este soporte para
enlazar a las comunidades entre sí, y con la red de redes, se justifica con aspectos
prácticos, ergonómicos y económicos. El trabajo en red, con particular énfasis en las
nuevas posibilidades brindadas por la telefonía móvil e Internet, suponen recursos de
coste asequible y de fácil uso que, aprovechando las redes de telecomunicaciones
existentes, resultan muy eficientes para favorecer la formación continua, la creación,
la expresión, la promoción, la venta, el trabajo colaborado, la construcción de una
inteligencia colectiva genuina al servicio de las comunidades.
2.3 TIC y Ecoturismo
En muchos casos, la permanencia de las comunidades indígenas en los entornos
protegidos es discutida por la Autoridad Ambiental, considerándolas como
poblaciones invasoras. No obstante, la Autoridad Ambiental estaría dispuesta a
legalizar su estancia dentro de las áreas protegidas si se dedicaran a actividades
permitidas, de bajo impacto, como la prestación se servicios ambientales, turismo y
recreación. Los resultados del proyecto iniciado en el 2006 con la comunidad de
Lagunita Salvador, debido a la reconversión de sus actividades hacia prácticas de
turismo comunitario de bajo impacto, han propiciado que actualmente la autoridad
ambiental reconozca el esfuerzo comunitario por respetar los recursos naturales. Así,
la firma del “Convenio de Cooperación entre la Autoridad Ambiental y Lagunita
Salvador” garantiza la permanencia de la comunidad en el Parque Nacional de Río
Dulce.
8
Habida cuenta que los pueblos indígenas de Guatemala habitan parajes naturales de
belleza insólita y poseen una rica cultura ancestral bien conservada, el turismo ha
emergido en años recientes como una vía promisoria de desarrollo. En efecto, el
ecoturismo, el turismo comunitario y étnico, son modalidades compatibles e
sinérgicas que pueden mejorar la situación socio-económica y la imagen de las
poblaciones indígenas en el país. Para ello, la actividad debe de ser rentable y cumplir
con sus objetivos de preservación ambiental y social. Tal y cómo lo expresó el Dr.
Eduardo Fayos-Solà (OMT, 2006): “El turismo puede incidir en un amplio espectro de
asuntos que abarcan desde la economía hasta los aspectos sociales y medioambientales,
desde la seguridad hasta la educación y la gestión del conocimiento, desde la tecnología de
la información y la comunicación hasta la ordenación del territorio. El turismo debería
estimarse por lo que es: un vector sutil de desarrollo.”
Imagen 1: Logotipo de la Red Ecoaldeas.
Diseño: Yubal Travieso (2009), Red
Ecoaldeas.
Imagen 2: Dibujos humorísticos. Por
Sergio Langer (2002), Concurso “Turismo
desde la perspectiva de caricaturistas latinoamericanos”, Buenos Aires.
9
Internet es otro vector sutil de desarrollo que se ha convertido en la primera fuente
de información utilizada por los turistas para preparar su viaje (OMT, 2007).
También es una fuente de conocimiento ilimitada para quienes buscan soluciones
para un turismo más sostenible. El World Wide Web está cambiando profundamente
la fisonomía de la industria, el turista siendo cada vez más experimentado y mejor
informado. El modelo de comunicación externa de la Red de Ecoaldeas viene
enfocado hacia una relación directa con el visitante potencial, gracias a un conjunto
de Software Social: las herramientas informáticas que sustentan el fenómeno llamado
“Web 2.0” (ver 3.4. Herramientas). De esta forma, las comunidades pueden
interactuar directamente con las poblaciones viajeras, independientemente de los
intermediarios tradicionales del sector turístico, con consecuencias económicas,
organizativas y culturales que trataremos de evaluar en el apartado siguiente.
3. Fortalecimiento de le Red Ecoaldeas de Turismo
Comunitario en Guatemala
3.1 Objetivos y resultados esperados
El objetivo general del proyecto consiste en promover un desarrollo humano
sostenible a través del ecoturismo autogestionado por las comunidades indígenas.
Partimos de la hipótesis siguiente: existen métodos organizacionales y herramientas
de bajo coste que permiten optimizar la comunicación, dentro y alrededor de las
comunidades, con efectos transversales sobre la gestión y la sostenibilidad del
turismo. Esta hipótesis viene reflejada en el Objetivo 8 de los Objetivos del Milenio
(ONU, 2000): “Fomentar una asociación mundial para el desarrollo: En cooperación con
el sector privado, dar acceso a los beneficios de las nuevas tecnologías, especialmente las de
la información y las comunicaciones”.
Con el fin de comprobar la hipótesis, establecemos los objetivos específicos siguientes
en relación con los resultados esperados:
10
Objetivos Específicos (OE) Resultados Esperados (R)
R.1. Modelo de capacitación y gestión participativa de recursos
humanos de las Ecoaldeas, basado en las TIC, con particular
énfasis en la telefonía móvil y en la Web 2.0 como canal y
soporte operativo del turismo 2.0.
OE.1. Conformar y Consolidar el
Modelo de EcoAldeas
Proceso: Diseño del SI y del SC de la Red
de EcoAldeas
R.2. Carta de calidad de las EcoAldeas de Guatemala, elaborada
y operativa.
R.3. Sitios WEB y Red piloto de las Ecoaldeas de Lagunita-
Salvador, Chapin Abajo y Chichipate, elaboradas y activados,
con técnicos locales en gestión y actualización de las mismas, y
capacitación de los mismos.
OE.2. Fortalecer la Comercialización
de las EcoAldeas
Proceso: Desarrollo del SI de la Red de
EcoAldeas
R.4. Creación de la Central de Reservas en línea, y técnicos
locales capacitados para el manejo de la misma.
R.5. Sistema de indicadores cuantitativos y cualitativos,
elaborado y operativo.
OE.3. Diseñar indicadores y procesos
de evaluación de los resultados del SI
de la Red de EcoAldeas.
Proceso: Evaluación y seguimiento de la
Red de EcoAldeas
R.6. Evaluación de resultados efectiva y proceso de decisión
participativa alimentado.
Tabla 2: Objetivos específicos y resultados esperados. Fuente: Red Ecoaldeas, 2009.
Para cada resultado esperado, se han diseñado de forma participativa los indicadores,
la metodología de evaluación y los canales de comunicación, siendo estas las
principales aportaciones técnicas del proyecto. Conforme con Aguado, Barrutia y
Echebarria (2008): “La formación de un juicio o decisión se facilita comparando las
condiciones iniciales existentes con un estándar o meta. Por ello, los indicadores se suelen
definir (…) como instrumentos que suministran información sintética para poder conocer
y evaluar las dimensiones de los problemas, segundo, para identificar los objetivos a
alcanzar (…) y, por último, para controlar el cumplimiento de los objetivos. Pueden
utilizarse además para incrementar el grado de concienciación ciudadana (Bermejo,
2001)”. Así, la evaluación no se limita a la definición de los indicadores y a la
medición, también servirá como instrumento de comunicación más directo y más
revelador para las comunidades.
11
3.2 Metodología de intervención, seguimiento y evaluación
La actividad de arquitectura del Sistema de Información la Red Ecoaldeas consiste en
acompañar a las comunidades en un proceso de construcción: identificación de las
oportunidades contextuales, estudio de las necesidades y capacidades, definición de
nodos y canales adaptados, asimilación de las herramientas y de la metodología de
trabajo (ver 3.4. Herramientas y procesos), creación y funcionamiento autónomo de
la red de turismo comunitario de Izabal.
La capacitación de los técnicos locales es fundamental, y ha sido reforzada en los
talleres, en los concejos y en línea por medio de email, Chat, videos, Powerpoint y
llamadas telefónicas. Progresivamente, la red y la metodología de trabajo se están
extendiendo a las ONG, las empresas, las comunidades y sus organizaciones
representativas, en un esfuerzo mancomunado a medio-largo plazo.
No obstante, el modelo de comunicación “abierta” en red requiere una calidad
irreprochable del producto de turismo comunitario EcoAldeas, para surtir los efectos
esperados del “boca a boca virtual” o “Buzz”. De ahí la necesidad de disponer de
parámetros de calidad estandarizados para su correcta evaluación e implantación, por
lo que se plantea la actividad de analizar los requisitos de calidad, y la posterior
confección y elaboración de un manual de uso de una Carta de Calidad para los
miembros de la Red de EcoAldeas. El Manual y los materiales desarrollados para la
implantación de los distintos parámetros de calidad permitirán la réplica del modelo
turístico a otras comunidades, y el seguimiento de los parámetros de calidad en el
tiempo. Esta actividad ha sido desarrollada con la participación de los técnicos locales
y miembros de la FENATUCGUA e INGUAT1. Se identificaron una serie de
parámetros de calidad a corto, medio y a largo plazo, para que las comunidades que
quieren adoptar el modelo de turismo comunitario EcoAldeas puedan entenderlo e
implantarlo inicialmente, garantizando niveles de calidad de servicio satisfactorios.
Los factores de calidad se enmarcan en las siguientes categorías de mayor a menor
grado de necesidad o urgencia de implantación:
• Factores medioambientales y culturales de la comunidad,
• Factores de seguridad del servicio turístico,
1 FENATUCGUA: Federación Nacional de Turismo Comunitario de Guatemala, INGUAT: Instituto de Turismo de Guatemala. www.fenatucgua.org
12
• Factores del producto turístico,
• Factores organizacionales,
• Factores informacionales,
• Factores de marketing,
• Factores de fiabilidad de la información y calidad de la comunicación en la
Web 2.0,
• Factores turísticos contextuales.
Observamos que la comunicación interviene directa o indirectamente en la buena
gestión de cada uno de los factores listados.
El diseño de los indicadores correspondientes se hizo en función de los objetivos y de
las capacidades técnicas de la red. Acorde con los siete orientadores de Bossel (in
Meadows, 1998), se han tomado en cuenta los aspectos siguientes, que son comunes
a todos los sistemas desde el organismo simple hasta la sociedad en su conjunto:
• Existencia (habilidad para sostener necesidades físicas),
• Necesidades fisiológicas (habilidad para generar bienestar, felicidad,
únicamente aplicable a los sistemas humanos),
• Efectividad (habilidad para actuar y producir los efectos esperados),
• Libertad de acción,
• Seguridad,
• Adaptabilidad,
• Coexistencia (habilidad para convivir en armonía y evitar los costes derivados
de la incompatibilidad con otros actores o con el entorno).
La definición de indicadores de sostenibilidad, a través de lo que Bossel, Valentin y
Spangenberg (2000) denominan el Prisma de Sostenibilidad, comprende aspectos
sociales, económicos, ambientales e institucionales. Con esta aproximación
metodológica, afirman que se pueden diseñar indicadores claramente definidos que
faciliten tanto la comunicación de los principios de sostenibilidad como la posibilidad
de medición de los progresos realizados. Además, consideran que gracias al Prisma
13
de Sostenibilidad, no sólo se visualizan las cuatro dimensiones de la misma, sino
también sus vínculos e interrelaciones. Por definición, los vínculos e interrelaciones
constituyen la materia prima del enfoque sistémico, tal y cómo lo expresó Preston
Cloud (en Meadows, 1998): “el enfoque de sistemas puede ayudar en el diseño de
indicadores que identifican vínculos críticos, tendencias dinámicas y palancas para la
acción”. Pero resultan todavía escasos en la bibliografía los Sistemas de Indicadores
que presentan una visión ecosistémica (Aguado, Barrutia y Echebarria, 2008),
basándose la mayoría de ellos en una estructura de tipo Presión-Estado-Respuesta
aunque, fundamentalmente, abundan los indicadores de Presión, que suelen ser
mayoritariamente de tipo ambiental.
En el marco del proyecto de Red Ecoaldeas nos interesan en particular los
indicadores sociales y organizacionales, a estructura espacial o ecosistémica. Dichos
indicadores se agrupan por ámbitos espaciales (comunidades, áreas protegidas) o por
ecosistemas sociales (grupo de trabajo, Red Ecoaldeas), y pueden considerarse con
un modelo dinámico o de flujos, en el que se concibe a la red como un sistema con
unos flujos asociados de entrada de recursos e información, posterior transformación
y salida en forma de distintos outputs, de los cuales se derivan ciertos impactos que
finalmente condicionan la calidad ambiental, económica y social de las comunidades.
Así, a efectos de seguimiento de los avances y evaluación de los resultados, se han
diseñado una serie de 60 indicadores (40 cuantitativos y 20 cualitativos) listados en la
matriz del Anexo 2, que recopila las actividades e indicadores correspondientes a
cada resultado esperado.
A la luz de los resultados intermediarios, podemos observar lo siguiente:
• Los gastos están cubiertos, los plazos y el presupuesto están siendo respetados;
• 2 Nodos han sido constituidos: en la Central de reservas y en la ULPGC,
enlazando 6 actores en Guatemala y 6 actores en Canarias mediante canales de
comunicación síncrona (por ej. Chat) y asíncrona (por ej. email);
• 6 Teléfonos celulares 3G han sido comprados y configurados con las
aplicaciones siguientes: Gmail, Mapas, Youtube, Fring. El volumen total de
llamadas telefónicas mensuales ha sido de 428 mn en el primer mes de
actividad, con 145 mn de llamadas internas a la red (tarifa plana ilimitada);
14
• 6 técnicos locales están siendo capacitados de forma satisfactoria, en
modalidad presencial (30%) y en línea (70%); todos están interactuando y
produciendo vía teléfono celular, email, Chat y redes sociales;
• 1 Portal Web común ha sido creado: www.redecoaldeas.com, con soporte
Destinum y seguimiento estadístico Google Analytics;
• 4 Herramientas “Web 2.0” están siendo utilizadas por los técnicos locales y el
equipo de asistencia técnica de la ULPGC: Gmail (email, Chat, Docs,
Calendarios, Youtube), Facebook, Panoramio y Skype.
A modo de ejemplo cuantitativo, la tabla siguiente permite contabilizar 202 emails
intercambiados (interacción asíncrona) entre los miembros y nodos de la red, en el
primer mes de activación del sistema. El color verde corresponde al nodo Central
Ecoaldeas, ubicado en El Estor, Guatemala; y el azul representa el nodo ULPGC,
situado en Canarias.
15
9 Actores
202 emails
Comercial
1
Técnico
TIC
Líder
Lagunita
Líder
Chapin
Líder
Chichipate
Líder
Aso
Progal
Jefe de
proyecto
ULPGC
Técnico
Calidad
ULPGC
Técnico
TIC
ULPGC
Comercial
1 22 4 2 1 2 4 1 4 4
Técnico
TIC 4 27 2 2 4 4 1 2 8
Líder
Lagunita 2 2 16 0 2 2 3 4 1
Líder
Chapin 1 2 0 6 0 1 0 1 1
Líder
Chichipate 2 4 2 0 19 3 2 4 2
Líder
Asoprogal 4 4 2 1 3 28 3 6 5
Jefe de
proyecto
ULPGC
1 1 3 0 2 3 22 6 6
Técnico
Calidad
ULPGC
4 2 4 1 4 6 6 27 8
Técnico
TIC
ULPGC
4 8 1 1 2 5 6 8 35
Tabla 3: Matriz de intensidad de los vínculos por email, a efectos de evaluación de la
comunicación interna en la Red Ecoaldeas Maya-Caribe. Fuente: Red Ecoadeas, 2009.
Del mismo modo, se evalúa la intensidad de los contactos síncronas: a través del
teléfono celular y del Chat. Obviamente, el aumento del volumen de comunicaciones
no garantiza per se la consecución de los objetivos de desarrollo. ¿Cuántos emails son
necesarios para realizar una venta turística?; ¿Cuántos emails son necesarios para
lograr un acuerdo de cooperación internacional? Son preguntas complejas que nos
interesan, y buscaremos respuestas en la evaluación. A priori, el sistema de
16
información de la Red Ecoaldeas está sujeto a las leyes básicas de la teoría de los
sistemas (Wiener, 1948):
1) El sistema es más que la suma de sus componentes (porque la suma de relaciones entre
sus componentes determina el carácter intrínseco del sistema).
2) La estructura del sistema determina su función.
3) La función del sistema es el producto de diferentes estructuras (principio de
equifuncionalidad).
4) El sistema no puede ser completamente descrito en un solo nivel jerárquico (principio de
reduccionismo excluido).
Veremos en el apartado siguiente la importancia del proceso de arquitectura del
sistema, que viene acompañado por esfuerzos organizacionales y capacitación.
3.3 I+D+I: Arquitectura del Sistema de Información y organigrama
de la Red Ecoaldeas
El SI debe facilitar la comunicación interna de la red, o “back office”: a efectos de
información, formación, coordinación y gestión; así como la comunicación externa, o
“front office”: a efectos de socialización, información y comercialización. En paralelo
al diseño de la arquitectura del sistema, es imprescindible organizar y capacitar a los
Recursos Humanos de la red. La repartición de los papeles y el organigrama han sido
consensuados in situ, con los líderes y representantes comunitarios, constituyéndose
el Comité de Orientación y el equipo de realización del SI Red Ecoaldeas. Entre
otras funciones, la red asume los procesos de comercialización, incluidas las reservas
en línea, que consisten en un modelo técnico y comercial simple enfocado hacia una
comunicación directa con los clientes potenciales vía Internet. El proceso de
información/venta ha sido simplificado y parcialmente estandarizado:
1) Reclutar y referenciar los prestatarios (sourcing) de la Red Ecoaldeas.
17
2) Generar tráfico (Search Engine Optimisation y Buzz en las redes sociales).
3) Transformar el tráfico en transacciones.
4) Gestionar la relación con el cliente y el proceso de pago/facturación.
Los técnicos locales están siendo capacitados para gestionar el conjunto del proceso,
aunque en esta fase intermediaria el Nodo ULPGC se encarga de las etapas 1 y 2. En
cuanto a la central de reservas, el software Destinum2 ofrece gratuitamente un
paquete de servicios integrados con alto valor añadido, desde la construcción asistida
de la página Web de la red, hasta la gestión de reservas y disponibilidades, con
capacidad para gestionar las ventas cruzadas: enlazando hoteles particulares,
turoperadores locales y otros prestatarios de servicios (alimentación, transporte,
guías, eventos, etc.). De esta forma, la central de reservas estará totalmente integrada
en el sistema de información y la Web servirá como nodo e interfaz para la
comercialización de los productos de la Red de EcoAldeas.
El estudio de las necesidades y capacidades de los actores locales permitió determinar
que el teléfono celular era más adaptado a las poblaciones metas que el ordenador
portátil. Por razones económicas, ergonómicas, prácticas, la capacidad de manejo
informático de los actores siendo aún limitada. Así, la telefonía celular se impone
como medio imprescindible en la arquitectura del sistema, con consecuencias diversas
sobre el diseño y el funcionamiento del mismo. Los Anexos 1 y 2 ilustran esta
situación y presentan una modelizacion de la red en su ámbito espacial (mapa
Google) y virtual (NetDraw-Ucinet).
3.4 Herramientas y procesos
Entre la multitud de herramientas disponibles en el mercado TIC, hemos
seleccionado las que mejor se adaptan a las necesidades y capacidades de los actores
locales. El teléfono celular se impone como medio de comunicación interna y de
conexión a Internet. En complemento, han sido seleccionadas las herramientas
siguientes para implementar esta primera fase de desarrollo del SI, o “Iteración 1”:
2 Ver 3.4. www.destinum.com
18
- Gmail, considerado como servidor de correo electrónico idóneo, por la
interoperabilidad, la cantidad y la calidad de las aplicaciones satélites que ofrece
(Chat y Video-conferencia, Calendarios, Docs, Youtube, Mapas, Picasa, Grupos,
Analytics, etc.). Google Analytics permite seguir el tráfico, la procedencia y el tiempo
pasado por los visitantes de la página Web de la Central de Reservas.
- Skype, con 100 Millones de usuarios3, es un complemento ideal a Gmail para
chatear y comunicar por video-conferencia con los clientes y socios de la Red, en el
mundo entero.
- Facebook, con cerca de 200 Millones de usuarios4, es de las redes sociales más
populares. A través de esta plataforma, la comercial de la Red Ecoaldeas podrá
desarrollar sus habilidades y su red de contactos, dar a conocer sus productos,
noticias y actividades, y empezar a conformar la identidad virtual de la Red
Ecoaldeas:
http://www.facebook.com/profile.php?id=1770297648
- Fring permite agregar la mayoría de las mensajerías instantáneas en un solo panel de
control, asequible desde el teléfono celular. Además, de momento Fring permite las
llamadas de Voz IP, es decir, que permite llamar gratis a cualquier parte del
mundo…
- Panoramio permite ubicar las fotos tomadas con los teléfonos celulares por las
comunidades en Google Earth y Google Maps (geolocalización), que se están
convirtiendo en nuevos “catálogos turísticos” del siglo XXI. Tal y cómo lo explicamos
en el taller: “es como poner un cartel gigante en la carretera, que puede ser visto en
todo momento desde Nueva York o Paris”.
- Destinum es un software social que permite crear redes de empresas y actores
turísticos. Esta herramienta ha sido utilizada como base para diseñar y publicar la
página Web de la Red Ecoaldeas5. Cuenta con funciones importantes tales como:
agregación de varios destinos en una misma página y ventas cruzadas, publicación de
3 Fuente: http://share.skype.com/sites/es/2006/04/pues_si_ya_somos_100_millones.html 4 Fuente: http://blog.facebook.com/blog.php?post=72353897130 5 Ver: www.destinum.com y www.redecoaldeas.org.
19
contenidos multimedia, gestión de disponibilidades, compra en línea, actualización
de contenidos con una relativa facilidad, sin conocimientos particulares de lenguaje
html.
Con apenas treinta horas de formación presencial, es obvio que los actores de la red
aún no controlan del todo las herramientas. Entramos en una fase de capacitación en
línea, continua durante toda la duración del proyecto, a través de Gmail, Facebook y
Youtube principalmente. Además, los procesos de venta por Internet, por teléfono e
in situ, han sido descritos y esquematizados, para facilitar su comprensión por los
actores de la red y por los operadores de la central de reservas. A notar un proceso
novedoso, concebido específicamente para las necesidades del proyecto, que consiste
en “sustituir el pago en línea por un enlace social” (ver Anexo 5, canal verde). En
efecto, además de los problemas de credibilidad de la Central de Reservas por su
juventud, en ausencia de intermediarios o patrocinadores reconocidos por el cliente y
en imposibilidad técnica de facturar en nombre de las comunidades (ver 3.5. Mejora
continua), la central de reservas debe ofrecer alternativas al prepago en línea. A través
de Facebook, cerca de 200 Millones de clientes potenciales pueden reservar su
estancia de la manera siguiente: hacerse amigo y/o fan de la Red Ecoaldeas, y dejar
un comentario o una pregunta, en el muro. De esta forma, el cliente participa en el
Buzz, en la promoción de la Red, y se crea un enlace aunque débil, se espera
suficiente para asegurar la reserva y/o la corrección del cliente, que puede avisar con
48 horas de antelación en caso de cambio o cancelación.
3.5 Sistema de Calidad y mejora continua
Aplicado y coordinado con el SI, el Sistema de Calidad es una herramienta
organizativa que debe entrar en la cultura de la organización, con el fin de emprender
un proceso de mejora continua. Hemos visto (ver 3.4. Herramientas y procesos) que
esta primera fase de implementación, o “iteración 1”, tan sólo es un primer eslabón en
la construcción de la Red Ecoaldeas. En efecto, para ser competitivos en el mercado
hyper-competitivo de la Web, es imprescindible ampliar y densificar la
comunicación, con nuevas herramientas y nuevos procesos. La “iteración 2” está
prevista para enero del 2010, y su contenido vendrá determinado en función de las
20
enseñazas asimiladas en esta primera fase. Por consenso entre los líderes
comunitarios, las tres comunidades han firmado un acta de constitución de la Red
Ecoaldeas Maya-Caribe, y han abierto una cuenta bancaria para gastos comunes. La
integración contable y bancaria al nivel de la central de reservas, prevista para la
segunda iteración, debería facilitar economías de escala para las comunidades.
La capacidad de reconfiguración inherente a las redes (Castells, 2006) debe permitir
a la organización anticiparse y responder a los cambios de forma coordinada, si las
unidades son capaces de aprender, reunir información, discernir y comprender la
consecuencia de sus acciones sobre el sistema Red Ecoaldeas. Así, la última actividad
planteada por el proyecto, consistirá en la celebración de un taller de restitución y
validación de los resultados con los diferentes grupos de trabajo (sistema de calidad y
central de reservas). La evaluación de los resultados y el intercambio de experiencias
permitirá planificar una eventual ampliación de la red, gracias a otras herramientas de
comunicación y de comercialización (por ej: integración contable), y a otras
comunidades de Centroamérica6.
4. Conclusiones
Aún es pronto para sacar conclusiones sobre los resultados del proyecto
“Fortalecimiento de la Red Ecoaldeas de Turismo Comunitario en Guatemala”7. No
obstante, podemos sacar algunas enseñanzas de la experiencia acumulada y de los
procesos emprendidos. Al vincular directamente las necesidades de las comunidades
con la tecnología, el sistema de información de la red de Ecoaldeas pretende producir
un impacto técnico a efectos transversales, actuando como un catalizador
comunitario e impulsando el desarrollo de otras actividades. En efecto, las
innovaciones tecnológicas refuerzan el potencial de las empresas de propiedad
comunitaria para suavizar el problema del aislamiento rural. En este sentido, el
estudio de necesidades y capacidades ha demostrado que el teléfono celular es el
medio más adecuado para acercar a los técnicos locales a la red de redes. Con un coste
asequible, y un despliegue técnico relativamente simple, se facilita la apropiación de
6 Ver www.redturs.org , www.fenatucgua.org 7 La evaluación de los resultados está prevista para noviembre del 2009.
21
las herramientas de voz, imagen y datos por los actores locales. El modelo propuesto
permite controlar lo gastos y maximizar el valor agregado de los recursos
comunitarios. Se implementa un nuevo modelo comercial económicamente
sustentable y aplicable por la misma población a corto-medio plazo. El modelo y las
tecnologías están ampliamente aceptadas por la comunidad, y podrían extenderse a
otras aldeas, promoviendo una interacción entre los habitantes y el medio ambiente,
ya no como consumidores de recursos naturales, sino como protectores y gestores.
Con particular énfasis en la perspectiva de géneros, las organizaciones locales
aprenden a generar productos y actividades atractivas para los turistas; obviamente, la
implicación de las comunidades en el proceso es fundamental. Tal y cómo lo sugiere
Daniela Meadows (1998): “La información debe llegar desde todos los niveles. El público
también puede ser un contribuidor importante, así como los usuarios de la información y
de los indicadores”. El Sistema de Información de la Red Ecoaldeas Maya-Caribe está
concebido para facilitar una comunicación fluida entre todos los actores, y para
fomentar su participación en el desarrollo sostenible de la región. El conjunto de la
metodología de trabajo, de las herramientas y de los objetivos de la red pretende
fomentar la implicación de los actores locales, con una atención particular para la
información y la colaboración de los técnicos, organismos y asociaciones locales. A
medio plazo, la red y su sistema de información serán autogestionados y autónomos,
siempre conectados a través de Internet con sus clientes, socios, entidades de apoyo y
asesores, nacionales e internacionales; entre los cuales la Cátedra UNESCO de
Planificación y Desarrollo Sostenible, y todos los viajeros en busca de experiencias de
calidad.
22
Imagen 3: Baile del Venado, fotografía tomada con el teléfono celular.
Fuente: www.redecoaldeas.com
Imagen 4: El futuro, los jóvenes de la Ecoaldea Lagunita Salvador.
Fuente: www.redecoaldeas.com
23
Referencias Web
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• Blog oficial Facebook: http://blog.facebook.com
• Destinum, “crea tu propia red de empresas turísticas”: www.destinum.com
• Federación Nacional de Turismo Comunitario de Guatemala:
www.fenatucgua.org
• OMT: http://www.youtourist.net
• Red de Turismo Comunitario de América Latina: http://www.redturs.org
• Red Ecoaldeas, “Eco-Villages Network”: http://redecoaldeas.com
• Superintendencia de Telecomunicaciones de Guatemala: www.sit.gob.gt
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Development. Ed. Sustainabilty Institute, Hartland.
OMT (2007): World Tourism Facts & Trends: the new consumer changing the face of
the industry. Seminario OMT-FITUR, Madrid.
24
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sus comunidades. Programa 21, Sección III, Capítulo 26: Fortalecimiento del papel
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autoevaluación y códigos de conducta. SEDD. Nº 79, Oficina Internacional del
Trabajo, Ginebra.
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desarrollo de los medios de comunicación social. Programa Internacional para el
Desarrollo de la Comunicación, Paris.
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sustainability indicators. Environmental Impact Assessment Review, vol.20, 3: 381-
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the Machine. New York.
25
Anexo 1
Situation of mobile phone business in Guatemala.
Fuente: Superintendencia de Telecomunicaciones de Guatemala y Tigo.
Mapa de cobertura celular (verde) y 3G (azul), Tigo Guatemala. Fuente:
www.tigo.com.gt
Número y tipo de contrato celular en Guatemala. Superintendencia de
Telecomunicaciones de Guatemala. www.sit.gob.gt/index.php?page=estadisticas
26
Número de teléfonos celulares en operación y tasa de variación anual, 31/12/2007.
Fuente: Superintendencia de Telecomunicaciones de Guatemala.
www.sit.gob.gt/index.php?page=estadisticas
27
Anexo 2
Spacial & virtual model of Eco-Villages Network
Mapa de simulación de las telecomunicaciones internas en el ámbito espacial de la
Red Ecoaldeas Maya-Caribe, Google Maps. Fuente: Stephane Bajulaz, ULPGC,
2009.
Modelo NetDraw, arquitectura del sistema de comunicación interna de la Red
Ecoaldeas.
Fuente: Stephane Bajulaz, ULPGC, 2009.
1
Turismo, políticas de cooperación y desarrollo en el
Caribe Mexicano
Bonnie Lucía Campos Cámara1
Ligia Aurora Sierra Sosa2
(Universidad de Quintana Roo, México)
Resumen
A partir de la segunda mitad del siglo pasado, el turismo internacional ha registrado una
gran expansión, tanto en movimiento de viajeros como en generación de ingresos y
puestos de trabajo, situándose como uno de los sectores líder de la economía mundial. El
turismo ha favorecido la participación de los países en desarrollo en el mercado global, y
el peso del sector en la economía de muchos países de América Latina y el Caribe ha
aumentado. El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) ha financiado inversiones
públicas dirigidas a fomentar el desarrollo turístico en los países de la región. La
comunidad internacional reconoce que, con una adecuada planificación, el turismo
contribuye al desarrollo económico y al alivio de la pobreza; el turismo puede integrar y
favorecer todos los aspectos del desarrollo sostenible ya que actúa como incentivo para la
protección y puesta en valor del patrimonio natural y cultural, fomenta la calidad
ambiental en los núcleos turísticos, ofrece oportunidades de empleo y fuentes de
ingresos alternativas a la explotación no sostenible de los recursos naturales, y acelera la
provisión de infraestructuras y servicios públicos que contribuyen a mejorar la calidad de
vida de la población local. La creación de la industria turística en el Caribe mexicano, ha
generado una considerable serie de cambios a nivel social, económico y ambiental, aún
cuando observamos que desde una perspectiva economicista, son el precio del desarrollo
seguido. Quintana Roo se ha destacado en los últimos años como un destino turístico
por excelencia hasta hacer de esta actividad económica la más importante en el estado.
2
Sin embargo, tanto el desarrollo turístico como los beneficios y retos que conlleva, se
han concentrado en la zona costera de Quintana Roo, marcando una considerable
diferencia con el resto del estado. La dimensión del fenómeno turístico y la diversidad de
sus formas tienen múltiples consecuencias en el medio natural, en la sociedad y en la
economía.
Los Estados no permanecen indiferentes frente a una actividad que se perfila como un
verdadero sector económico y un poderoso agente de transformación del espacio. Esto
pone en práctica las verdaderas políticas turísticas para intentar canalizar el fenómeno y
sacar de él el mejor partido. En el Caribe Mexicano la aplicación de principios de
desarrollo sostenible al turismo pone énfasis en que el crecimiento económico impulsado
por el mismo puede ir acompañado de impactos negativos ambientales y sociales a los
que hay que prestar atención. Es un hecho que en esta región crece rápidamente sin
planificación adecuada y en países en desarrollo – como México- debido a la magnitud
de los problemas sociales, las carencias en infraestructuras básicas y la debilidad de las
instituciones públicas.
Palabras clave: Turismo, cooperación, desarrollo, Caribe mexicano.
Introducción
La creación de la industria turística en el Caribe mexicano, ha generado una
considerable serie de cambios a nivel social, económico y ambiental, aún cuando
observamos que desde una perspectiva economicista, son el precio del desarrollo
seguido. Quintana Roo se ha destacado en los últimos años como un destino turístico
por excelencia hasta hacer de esta actividad económica la más importante en el estado.
Sin embargo, tanto el desarrollo turístico como los beneficios y retos que conlleva, se
han concentrado en la zona costera de Quintana Roo, marcando una considerable
diferencia con el resto del estado.
3
La dimensión del fenómeno turístico y la diversidad de sus formas tienen múltiples
consecuencias en el medio natural, en la sociedad y en la economía. Los Estados no
permanecen indiferentes frente a una actividad que se perfila como un verdadero sector
económico y un poderoso agente de transformación del espacio. Esto pone en práctica
las verdaderas políticas turísticas para intentar canalizar el fenómeno y sacar de él mejor
partido ( Mesplier-Bloc-Duraffour, 2000).
Es importante considerar que los espacios geográficos que tienen un interés para la
actividad turística deben estar sujetos a una política que ordene, regule, promocione,
desarrolle y controle esta transformación para tal uso con una detallada planificación. El
Caribe mexicano visto como un espacio turístico es una zona del territorio con
posibilidades de desarrollo cuenta con espacios litorales, como son las zonas de costa,
playa y mar, práctica de deportes náuticos, actividades de descanso, recreativas y de
esparcimiento. Desde luego que estos espacios, desde el punto de vista de ordenación del
territorio y de la adscripción urbanística y administrativa forman parte de un
municipio turístico y son centros y zonas de interés turístico, acordes con los planes
nacionales, estatales y locales que tiene cada Estado a través de la administración
pública.
1. Cooperación Turística
El sector del turismo recurre, cada vez más, a la cooperación y la creación de
asociaciones para conseguir metas empresariales y comunitarias importantes. Lo
sorprendente es que esas asociaciones se constituyen en un sector que se ha considerado
siempre fragmentado. Es evidente como el sector turismo haya salido de su propio
reducto para crear alianzas con otros sectores. (OMT, 2004)
La actividad turística internacional es una de las actividades económicas, sociológicas,
técnicas, científicas y culturales que se presta con mayor grado positivo a la cooperación
internacional tanto en el ámbito público como privado. El turismo es un pasaporte para
la paz, rezaba el lema que en 1967 lanzó la ONU al declarar aquel año, Año
4
Internacional del Turismo. Esa paz se fundamenta, entre otros aspectos, en la
cooperación internacional. De acuerdo a Montaner (2002) si la diplomacia bilateral es la
manifestación tradicional de la existencia de ciertos procesos de cooperación entre los
Estados, la época contemporánea ha conocido la aparición y el desarrollo de nuevas
formas de cooperación como la diplomacia multilateral en el ámbito público o
intergubernamental, o como las iniciativas privadas a través de las Organizaciones No
Gubernamentales (ONG) centradas en la ayuda para el desarrollo en países en vías de
desarrollo. Después de la Segunda Guerra Mundial hasta hoy, este fenómeno de la
cooperación se ha acelerado a favor del crecimiento de la interdependencia de los
Estados, no sólo en el campo económico, tecnológico estratégico y cultural, sino también
en otros campos conflictivos como la aparición de problemas globales (polución
atmosférica, crecimiento demográfico, agotamiento de los recursos naturales,
subdesarrollo), que por su naturaleza sobrepasan las fronteras y no pueden encontrar
solución si no es a través de una acción concertada de los diferentes miembros del
sistema internacional. Es así, que debemos reconocer que hoy las organizaciones
internacionales, constituyen el lugar privilegiado de la cooperación multilateral en todos
los campos, y también en el turístico.
El sector del turismo recurre, cada vez más, a la cooperación y la creación de
asociaciones para conseguir metas empresariales y comunitarias importantes. Por
ejemplo, la Organización Mundial del Turismo, el Consejo Empresarial de la
Organización Mundial del Turismo (CEOMET) apoyaron algunos modelos de
cooperación y asociación en varios ámbitos, como la comercialización, el desarrollo de
productos y la capacitación, teniendo en cuenta las diferencias culturales y de tradiciones
en las distintas partes del mundo. En la Región América Latina y el Caribe se realizaron
dos proyectos: “Establecimiento de una iniciativa conjunta de ecoturismo: reserva
ecológica Kapawi, Ecuador” y “Creación de un programa de desarrollo integral:
Proyecto de Pequeñas Empresas de Turismo, Caribe” el tipo de asociación que se formó
tenía que ver con una Alianza Estratégica, Red Comercial, Formación de recursos
humano y apoyo financiero (OMT, 2004).
5
Por otra parte, las asociaciones pueden tener nombres y estructuras diferentes y
formarse en el sector privado y el sector público. Las siguientes definiciones de tipos de
asociaciones que pueden establecerse es una adaptación del estudio Developing Business
Opportunities Trough Partnering, publicado por la Comisión Canadiense de Turismo
en 1995.
• Consorcio: es el caso en que dos o más empresas combinan recursos (tecnología,
servicios, etc.), para obtener beneficios que no podrían alcanzar por separado.
• Sociedad en participación: es un proyecto de cooperación entre empresas (cada
una aporta normalmente recursos o capacidades diferentes) con el fin de
aprovechar una oportunidad. La iniciativa suele materializarse en forma de
“entidad mercantil” independiente.
• Alianza Estratégica: por lo general, consiste en un acuerdo a largo plazo para
alcanzar objetivos comunes. Puede incluir instituciones de mayor o menor
tamaño con recursos o experiencia complementarios. Se denomina “estratégica”
porque los objetivos son de vital importancia para la estrategia empresarial o de
desarrollo del mercado general adoptada por los asociados.
• Comercialización cooperativa: Se trata de un acuerdo para comercializar
productos o servicios de los asociados mediante una promoción conjunta.
• Relación de cadena de valor: varias empresas de industrias diferentes con una
especialización propia pero complementaria deciden concertarse para crear valor.
• Red Comercial: es una asociación entre varias empresas participantes que
colaboran para alcanzar objetivos comunes.
• Subcontratación: Consiste en la contratación externa de servicios secundarios.
Sin embargo, la clave de éxito de una asociación reside en reconocer que se trata de una
relación empresarial en la que los asociados comparten los riesgos, los beneficios y la
responsabilidad del éxito o fracaso de la iniciativa (OMT, 2004).
6
2. El Sector Turístico en función de la política de México
El procedimiento del sector turístico en función de la política de cada país está
relacionado de forma directa con la importancia que tiene la actividad turística en su
economía, en sus mercados y en su sociedad. Es decir, la intervención del Estado en
materia de turismo es muy diversa, según cada régimen y ordenación política de cada
país. En el caso de México, el nivel de intervención es parcial, este nivel se da en la
mayoría de países democráticos con una actividad turística importante. El estado
interviene, a través de organismos públicos, en mayor o menor grado, en la ordenación,
promoción y control de la actividad turística, dejando al sector privado la libertad de
creación de empresas y actividades turísticas basadas en una economía de mercado.3
a. La Región: Caribe Mexicano
Con el fin de implementar nuevas fuentes de ingresos para el país –alternativas al
petróleo- el Gobierno Federal, a finales de la década de los sesenta, determina al turismo
como posible opción de desarrollo. Para madurar la opción encargó al Banco de México
crear las políticas de los que serían los nuevos polos turísticos del país, para lo cual creó
el Fondo de Infraestructura Turística (INFRATUR).4 Ese mismo año INFRATUR
realizó estudios en todo el litoral de México, encontrando cinco posibles sitios, entre los
cuales resultó elegido Cancún, por su belleza paisajística, por su posición geoestratégica
y con una gran riqueza cultural que le brindaría un plus a la zona.
Es a partir de esto que en 1970, se da un fuerte impulso gubernamental, a través del
INFRATUR, y de organismos como el Banco de México (BM) y del Banco
Internacional para el Desarrollo (BID), para el comienzo de la construcción del Cancún
turístico (que hasta ahora era una aldea de pescadores, coprera y chiclera) el cual resultó
3 Por economía de mercado se entiende la organización explícita y asignación de la producción y el consumo de bienes y servicios que surge del juego entre la oferta y la demanda. También se utiliza para designar al país y sobre todo al conjunto de los países que la adoptan, habitualmente en plural: economías de mercado. 4 Estudios socioeconómicos preliminares de Quintana Roo. sector turismo. Centro de Investigaciones de Quintana Roo A.C. México. 1985.
7
un éxito. La migración laboral, para creación de infraestructura y servicios, no tardó en
verse y el turismo nacional e internacional en llegar. Este éxito condujo a que en años
posteriores el imán turístico se extendiera creando la Riviera Maya5.
Quintana Roo se ha destacado en los últimos años como un destino turístico por
excelencia, hasta hacer de esta actividad económica la más importante del Estado (95%
del PIB estatal)6; tanto, que la mayor parte de las políticas generadas para el desarrollo
van enfocadas a este rubro. Haciendo falta políticas de complementación dirigidas a
otros sectores y ámbitos de la sociedad y de la economía productiva, como lo sería el
manejo forestal, la agricultura, la pesca, la ganadería o la industria.
En la actualidad Quintana Roo es la entidad que cuenta con el mayor índice de
crecimiento y dinámica en cuanto a la actividad turística se refiere, siendo
particularmente Cancún y la Riviera Maya los destinos más importantes de nuestro país
y América Latina, no solamente por el volumen de turistas que reciben anualmente, sino
por la cantidad, calidad e infraestructura con la que cuentan.
Al ser el turismo la actividad que impulsa el funcionamiento de la economía local, el
aumento de la infraestructura hotelera permite que la entidad tenga la mayor capacidad
de alojamiento dentro de los destinos turísticos de México. La oferta hotelera de
Quintana Roo equivale al 12% del total del país con 763 hoteles y 59 mil 497 cuartos,
generándose un crecimiento del 58.60% y 51.20% respectivamente, durante los últimos
seis años.
En el 2004, arribaron a Quintana Roo 10.8 millones de turistas y visitantes, de los cuales
3.5 millones fueron visitantes en cruceros, lo que representa el 46% del total de los
turistas que por esta vía llegan a México. En este mismo año, México se situó en el
octavo lugar mundial en afluencia con sus 20.6 millones de turistas internacionales.
De esa cifra el 24% corresponde a Quintana Roo con cinco millones de turistas
extranjeros, quienes generaron una derrama económica de $4,138.57 millones de
5 Corredor turístico situado entre Playa del Carmen y Tulum. 6 México http://www.senado.gob.mx 16 -11- 2007.
8
dólares. En el Estado se capta el 33% de las divisas que por concepto de turismo ingresan
al país.7
Quintana Roo cuenta con los aeropuertos internacionales de Chetumal, Cozumel y
Cancún. El Aeropuerto de Cancún se ubica como el segundo con mayor número de
operaciones en el país y el primero en vuelos internacionales. En el año 2004, Cancún
registró 51 mil 303 operaciones aeroportuarias y una movilización de 4.9 millones de
pasajeros.
En los dos últimos años la actividad turística ha crecido más de un 10% anual (ver
cuadro 1). Esta tendencia se ajustará hacia un crecimiento del 5% anual para los
próximos 6 años. La inversión privada en el sector continuará incrementándose. De
acuerdo a lo establecido en los Programas de Ordenamiento Ecológicos Territoriales, en
el Estado se pueden construir 141 mil cuartos de hotel, lo que significa que a la fecha se
ha cubierto el 42% de la capacidad permitida.
Cuadro 1. Llegada de Turistas: Caribe Mexicano 2000-2006
Fuente: Secretaría de Turismo del Estado de Quintana Roo, 2006.
7 Fuente: Secretaria de Turismo SECTUR.
7,463,8652,954,431 205,925336,147410,9653,556,397 2006
7,014,850 2,643,363 196,444 318,445 400,865 3,455,733 2005
6,726,284 2,418,623 200,542 312,924 418,598 3,375,597 2004
5,824,209 2,021,989 146,656 227,817 364,798 3,062,949 2003
5,350,865 1,793,864 141,548 204,371 383,676 2,827,406 2002
5,294,295 1,504,052 141,785 205,216 455,620 2,987,622 2001
5,003,847 1,184,249 144,793 207,582 421,541 3,045,682 2000
TOTAL Q. ROO
RIVIERA MAYA
ISLA MUJERES
CHETUMAL COZUMEL CANCÚN AÑO
* NOTA. ESTAS DATOS PUEDEN VARIAR POR LOS DAÑOS OCASIONADOS POR EL HURACAN WILMA.
9
Por otra parte este espectacular crecimiento que ha venido desarrollando la actividad
turística desde la creación de Cancún se ha basado en una modalidad de turismo
llamado de sol y playa, lo cual hasta hace algunos años no permitía el desarrollo de otros
segmentos, de no generar una diversificación en la oferta turística nos pone en desventaja
ante otros destinos, ya que dadas las tendencias actuales del turismo mundial, los países
preferidos son aquellos que ofrecen un valor agregado al segmento de sol y playa.
Quintana Roo es la puerta de entrada al Mundo Maya, el cual está en proceso de
consolidación como un multidestino, ya que se ha impulsado el desarrollo de un gran
centro turístico el cual incluye todos los destinos del Estado como Cancún, la Riviera
Maya, Cozumel, Holbox, Isla Mujeres, la Zona Maya y la Grand Costa Maya, bajo una
sola marca comercial llamada ¨ Caribe Mexicano”.
Figura 1. Quintana Roo: Multidestino
Xcalak
Punta Herrero
ChetumalBanco
Chinchorro
Cozumel
MahahualPulticub
RB Sian Ka’an
Tulum
Cancún
Isla Mujeres
Grand Costa Maya, Grand Costa Maya, (Chetumal, (Chetumal, Bacalar, RBacalar, Ríío Hondo, Costa Maya, o Hondo, Costa Maya, Corredor arqueolCorredor arqueolóógico.)gico.)•• Baja DensidadBaja Densidad•• Turismo de Naturaleza y Turismo de Naturaleza y
cultural.cultural.•• Turismo de aventuraTurismo de aventura•• Sol y playaSol y playa•• 1,828 cuartos de hotel1,828 cuartos de hotel•• 1 muelle de cruceros1 muelle de cruceros•• 500,000 visitantes fronterizos500,000 visitantes fronterizos
••Media densidadMedia densidad••Sol y playaSol y playa••ExclusividadExclusividad••Parques TemParques Temááticosticos••25,170 cuartos de hotel25,170 cuartos de hotel••1 muelle de cruceros1 muelle de cruceros
Riviera MayaRiviera Maya
••Alta densidadAlta densidad••Sol y playaSol y playa••Hoteles grandesHoteles grandes••27,518 cuartos de 27,518 cuartos de hotelhotel
CancCancúúnn••Sol y playaSol y playa••Villas y hoteles medianosVillas y hoteles medianos••1,058 cuartos de hotel1,058 cuartos de hotel
Isla Mujeres
•• Turismo de naturalezaTurismo de naturaleza•• ArqueolArqueolóógico, histgico, históórico, rico,
cultural, naturalcultural, natural•• 263 cuartos de hotel263 cuartos de hotel
Zona Maya
••CrucerosCruceros••Turismo de aventuraTurismo de aventura••Sol y playaSol y playa••3,800 cuartos de hotel3,800 cuartos de hotel••3 muelles de cruceros3 muelles de cruceros
CozumelCozumel
••Turismo de Turismo de naturalezanaturaleza
••Turismo de aventuraTurismo de aventura••283 cuartos de hotel283 cuartos de hotel
HolboxHolbox
PROMOCIPROMOCIÓÓNN
Fuente: Plan de Gobierno del Estado de Quintana Roo, Estudio de Gran
Visión 2000-2025.
10
La actividad turística en nuestro Estado ha demostrado ampliamente ser un detonador
del desarrollo económico, ya que el crecimiento de la zona norte específicamente de
Cancún: en los quince años entre 1970 y 1985, años en los que se desarrolló Cancún, el
Producto Interno Bruto de la entidad creció casi el triple (2.8 veces) que el PIB
Nacional. La rama económica específica de restaurantes y hoteles, creció de 86 mil pesos
en 1970 a 70 millones 430 mil pesos en 1985, seis veces y media más que el crecimiento
de esta rama a nivel nacional (Banco de Información Económica del INEGI).
En Quintana Roo actualmente la infraestructura hotelera permite que tengamos la
mayor capacidad de alojamiento dentro de los destinos turísticos de México, la oferta
hotelera equivale al 12 % del total del país, con 763 hoteles y 60 mil cuartos de hotel;
existe una comunicación vía área con más de 107 ciudades del mundo; se cuenta con tres
aeropuertos internacionales; Cancún se ubica como el segundo con mayor número de
operaciones en el país y el primero en vuelos internacionales, asimismo se cuenta con los
principales puertos de cruceros del mundo Cozumel y Mahahual.
3. Cooperación Internacional para el desarrollo turístico
Las relaciones de cooperación internacional para el desarrollo turístico se llevan a cabo a
través de organizaciones públicas y privadas. En este apartado mencionaremos algunas
que tienen mayor presencia a nivel mundial.
a. Política de desarrollo turístico de la Organización Mundial de Turismo (OMT)
La Organización Mundial de Turismo se crea en 1974 y juega un papel importante y
decisivo en la promoción del desarrollo de un turismo responsable, sostenible y accesible
para todos.
En 2003 la OMT se transforma en un organismo especializado de las Naciones Unidas
y para 2005 lo conforman 150 países, siete territorios y aproximadamente 310
miembros afiliados, que representan al sector privado, instituciones docentes,
asociaciones de turismo y autoridades turísticas locales.
11
Uno de los objetivos esenciales de la OMT es la transferencia de conocimientos técnicos
de turismo en los países en desarrollo. A petición de los Estados miembros, la OMT
contribuye a conseguir financiación, a localizar a los mejores e importantes expertos
mundiales y llevar acabo todo tipo de proyectos de desarrollo turístico, sean de pequeña
o gran dimensión.
b. La Organización Mundial del Comercio (OMC). El GATT.
Se estableció el 1 de enero de 1995, en sustitución del acuerdo General sobre Aranceles
Aduaneros y Comerciales, como la entidad principal que supervisa el comercio
internacional. Tiene cinco objetivos fundamentales: administrar y aplicar los acuerdos
comerciales multilaterales y plurilaterales que constituyen el acuerdo por el que se
establece la OMC; servir de foro para los negociaciones comerciales entre los miembros
y cooperar con otras instituciones internacionales que intervienen en el adopción de
políticas económicas a escala mundial.
c. Organización de Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE)
Fundada el 14 de diciembre de 1960 en París por una convención intergubernamental
de 18 países europeos a la que se han ido incorporando otros países de otros
continentes. Los objetivos de la OCDE son, básicamente: fomentar el desarrollo
económico y social del país miembro; realizar estudios periódicos sobre la situación
económica de los países que la constituyen. Los países que forman la OCDE son los
principales países turísticos del mundo, tanto por la importancia de los ingresos como de
los gastos del turismo internacional.
12
d. Organización Internacional de Aviación Civil (OACI)
Tiene su sede en Montreal, Canadá, fue creada en 1945 tras acuerdos adoptados en la
Conferencia de Chicago de 7 diciembre de 1944 con el propósito de promover la
aviación civil a escala mundial y establecer unas normas internacionales en ese campo.
e. Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA)
Agrupa a las compañías aéreas de vuelo regular; creada en 1945, tras finalizar la Segunda
Guerra Mundial. Las principales funciones de IATA son las siguientes: coordinar las
respectivas tarifas aéreas; crear los medios de colaboración entre las compañías aéreas;
normalizar y homogeneizar las normativas, establecer sistemas y códigos para la
extensión y venta de los billetes, definir reglamentaciones aduaneras; implantar
funciones en el campo de la seguridad: robos de equipaje, billetes, fraudes, protección de
los aeropuertos; etc.
f. Asociación Mundial de Agencias de Viajes (WATA)
Fue creada en 1949. Tiene sede en Ginebra. Forman parte de ella unos 250 miembros
que tienen como objetivo el fomento del turismo y de los viajes organizados; recopilar y
difundir información del sector, asesor a organizaciones e instituciones nacionales de
turismo de todo el mundo. Es una asociación cooperativa y restringida a agencias de
viajes importantes, de reputación probada y que disponen de una fuerte clientela.
Conclusión
Es evidente que de la cooperación internacional aplicada al desarrollo turístico de los
Países en Vías de Desarrollo (PVD), surgen muchas de las ideas en relación al turismo y
la cooperación al desarrollo. Sin embargo, se puede señalar que a pesar de todas las
iniciativas existe una falta de coordinación, conocimiento e interés mutuo entre los
13
técnicos y profesionales de estos dos sectores de intervención, por un lado el sector
turístico y por otro lado el sector de la cooperación internacional al desarrollo.
Muchos de los actores y profesionales del sector turístico en los principales mercados
emisores y receptores ven la relación del turismo con la Cooperación Internacional al
Desarrollo (CID) como un hecho interesante y exótico, pero sin repercusión sustancial
ni para su mercado turístico interno ni para el mercado turístico global.
El gran reto del turismo en relación a la cooperación internacional al desarrollo en los
próximos años residirá en la capacidad del sector para contribuir al alivio de la pobreza.
Hasta el momento se han realizado múltiples análisis acerca de las relaciones entre
turismo y desarrollo, pero es necesario ampliar la investigación y el diseño de modelos de
intervención sectorial en turismo que contribuyan al desarrollo humano desde el alivio
de la pobreza. Estos nuevos modelos deberían orientar la intervenciones tanto a nivel
microeconómicos (proyectos) y macroeconómicos. (Pérez, 2000)
14
Bibliografía Consultada
Carmen Altés, El turismo en América Latina y el Caribe y la experiencia del BID, Banco
Interamericano de Desarrollo, Serie informes técnicos del Departamento de Desarrollo
Sostenible, Washington, D.C, 2006.
Gobierno del Estado de Quintana Roo Estudio de Gran Visión, 2000-2025.
Jordi Montaner Montejano, Política y relaciones turísticas internacionales, Ariel
Turismo, 2002
Secretaría de Turismo, Estudio de Gran Visión del Turismo en México: Perspectiva
2020, México, 2000.
Organización Mundial de Turismo (OMT) Cooperación entre sectores público y
privado, mejorando la competitividad turística, España, 2001.
Organización Mundial de Turismo (OMT) Cooperación y asociaciones en turismo:
Una perspectiva mundial, España, 2004.
Pérez Palomo Salvador, El turismo y la cooperación al desarrollo, Universidad de
Málaga, España, 2000.
1
Potencialidades para el desarrollo del turismo en la
región del Trifinio (El Salvador-Honduras-
Guatemala)1
Fco. Javier Jover Martí2
Juan Antonio García González3
Miguel Panadero Moya4
Dpto. de Geografía y Ordenación del Territorio
(Universidad de Castilla-La Mancha, España)
Resumen
La región del Trifinio es un territorio compartido por tres países centroamericanos:
El Salvador, Honduras y Guatemala. Comprende aproximadamente 7.500 km2 en el
que residen unos 670.000 habitantes. Se ha constituido como una unidad ecológica
indivisible a través de un Tratado suscrito por los tres países para la ejecución del
Plan de Desarrollo Trinacional Fronterizo. El reto que se plantea es conseguir que
países que hasta hace poco estuvieron enfrentados trabajen juntos en este tipo de
proyectos para el desarrollo de la región. Una de las iniciativas de cooperación
conjunta es el impulso de la actividad turística. La región del Trifinio cuenta con
potencialidades para su desarrollo. Se localizan importantes atractivos naturales y
culturales, y donde cada país puede aportar recursos diferenciados para la elaboración
de un único producto turístico que sea competitivo en la región.
Palabras clave: Integración regional, turismo rural, competitividad, Trifinio.
1 Esta aportación se inscribe dentro del Proyecto de Investigación Synchronising Information for Local-National Participatory Natural Resources Management (SINREM). Project number INCO-518706 de la convocatoria del Sixth Framework Programme de la Comisión Europea. 2 [email protected] 3 [email protected] 4 [email protected]
2
Abstract
The Trifinio region is a territory shared by three Central American countries: El
Salvador, Honduras and Guatemala. It includes approximately 7,500 km2 in which
reside about 670,000 inhabitants. It has been constituted as an ecological indivisible
unit across an Agreement signed by all three countries for the execution of the Plan
de Desarrollo Trinacional Fronterizo. The challenge that appears is to achieve that
countries that were confronted they should work together at this type of projects for
the development of the region. One of the initiatives of joint cooperation is the
impulse of the tourist activity. The Trifinio region possesses potentials for its
development. Important natural and cultural attractions are located. Every country
can offer resources differentiated for the production of a unique tourist product that
could be competitive in the region.
Key words: Regional integration, rural tourism, competitiveness, Trifinio.
1. Introducción
El espectacular incremento del turismo desarrollado a lo largo de la segunda mitad
del s. XX se ha visto acompañado de cambios en la diversificación de destinos, así
como en la diferenciación de gestión y de las pautas del comportamiento en la
práctica turística (OMT, 2006). En este momento de transformaciones en el sector
aparecen nuevos destinos que pueden aportar otras posibilidades y oportunidades
con respecto a destinos turísticos más consolidados. Además, el período de
vacaciones tiende a desconcentrarse a lo largo del año, las modalidades territoriales
varían y los motivos son múltiples.
En un período de constantes cambios en esta actividad, la región del Trifinio se
presenta como un territorio con posibilidades de posicionamiento en el mercado
turístico internacional. Está compartido por tres países centroamericanos (El
Salvador, Honduras y Guatemala) con una extensión de unos 7.500 km2 donde
residen unos 700.000 habitantes. Los importantes atractivos naturales y culturales
allí localizados que posibilitan una oferta turística integrada pueden llegar a competir
con otros destinos más consolidados de la región centroamericana. Además, en la
3
región hay una sociedad comprometida en el desarrollo del Trifinio. Son diversos los
proyectos comunes que se están llevando a cabo en el territorio donde el conjunto de
la sociedad de los tres países está implicada. Todo ello invita a pensar que las
características presentes en la región tienen potencialidades para el desarrollo.
2. El Trifinio, una región estratégica con carencias sociales
El Salvador, Honduras y Guatemala comparten un espacio común conformado por
varios municipios donde convergen en un punto denominado Trifinio que da
nombre al conjunto de la región. Este punto se localiza en la cima del macizo de
Montecristo. A su alrededor, 45 municipios fronterizos (8 de El Salvador, 15 de
Guatemala y 22 de Honduras) la constituyen. De los 7.541 km2 de extensión, el
15’3% pertenece a El Salvador, el 44’7% a Guatemala y el 40% a Honduras. Se ha
constituido como una unidad ecológica indivisible a través de un Tratado suscrito
por estos tres países con el objetivo de coordinar y desarrollar actividades conjuntas
para resolver los problemas de su población y gestionar los recursos naturales de un
modo ambientalmente sostenible.
Mapa 1. Ubicación de la Región del Trifinio
4
Se trata de una unidad ecológica indivisible que alberga una variedad de paisajes. Es
un área predominantemente montañosa en el que se pueden apreciar diferencias
altitudinales considerables, pues varía de los 330 m del valle de Chiquimula hasta los
2.780 m del Cerro del Pital. El recurso forestal es primordial entre sus pobladores
donde se encuentran cinco tipos de bosques: bosque nebuloso, bosque de transición,
bosque mixto de roble y pino, bosque seco subtropical y bosque tropical. También
hay una variedad de flora y fauna, así como algunos yacimientos minerales. La
conservación y gestión coordinada de estos recursos se ha convertido en un objetivo
fundamental para los tres países, pues tienen potencial para el crecimiento económico
de la región. Mayor importancia adquiere el recurso hídrico. En esta región se ubican
tres cuencas hidrográficas: la cuenca binacional del río Motagua (Honduras y
Guatemala), la cuenca del río Ulúa en Honduras y la cuenca trinacional del río
Lempa, la mayor de las tres cuencas hidrográficas. Se ha considerado una región
estratégica por formar parte de uno de los sistemas hídricos más importantes de
América Central.
Al tratarse de una zona fronteriza cuenta con una serie de particularidades al
configurarse como un escenario único a la vez que complejo. La fragmentación,
entendida en varios sentidos, es lo que mejor la define. Sufren cierta exclusión
política, pues estos municipios se localizan lejos de los centros de toma de decisiones;
los conceptos de seguridad e inseguridad son primordiales, pues las reviste de
vulnerabilidad e importancia estratégica, dado que es un espacio donde circulan
personas y hay intercambio comercial; en el sentido político aparecen como unidades
administrativas de división donde predomina un sentido de territorialidad y
pertenencia a un Estado frente al de integración (López et al., 2004). De esta manera,
la integración de la región se ha convertido en un reto y una oportunidad para las
autoridades nacionales. Los elementos que promueven estas dinámicas son los
vínculos transfronterizos generados a lo largo de la Historia. En este proceso las
referencias quedan establecidas por las condiciones ambientales, socioeconómicas y
políticas de la región.
5
La región del Trifinio está habitada actualmente por 681.505 personas. El Salvador
aporta el 14’8%, Honduras el 27’2% y Guatemala el 58%. Dos municipios albergan
mayor cantidad de población: Chiquimula (Guatemala) (79.815 hab.) y Metapán (El
Salvador) (59.004 hab.). En los municipios con menor cantidad de habitantes los
limitantes impuestos por la naturaleza (escasez de recursos, eventos naturales,
orografía accidentada…) han dificultado su ocupación. Éste es el caso de Dolores
Merendón (Honduras), con tan sólo 2.272 habitantes. A partir de la densidad de
población se puede apreciar la desigual distribución de la población por toda la
región. La media está en torno a los 92’3 hab/km2. La tendencia de la población ha
sido concentrarse en determinados espacios (mapa 2). El ámbito urbano capta mayor
cantidad. En la región son referentes de este escenario Esquipulas (Guatemala),
Metapán (El Salvador) y Ocotepeque (Honduras). En ellas el crecimiento de la
población es alto y actividades como la industria del cemento o el comercio tienen
suficiente capacidad para dinamizar la economía regional. En cambio, el espacio rural
es el mayoritario en el Trifinio. Sus pobladores tienen una orientación forestal,
agrícola, ganadera y artesana. Se practica un cultivo de subsistencia basado en la
producción de hortalizas, fruta y cultivo de café. Estos productos están destinados a
satisfacer el consumo local y a los departamentos vecinos. Es una zona de tránsito
donde se han producido intercambios a lo largo de la Historia generando vínculos
sociales y económicos entre sus habitantes (López et al., 2004).
6
Mapa 2. Densidad de población de los municipios de la Región del Trifinio
Fuente: DIGESTYC, 2008; INE, 2009a, 2009b. Elaboración propia.
Un indicador con información interesante y de bastante utilidad es el Índice de
Desarrollo Humano (IDH). En éste convergen varios índices y tasas sociales y
económicas que permiten aproximarse a conocer la realidad de municipios de la
Región del Trifinio. El grado de desarrollo alcanzado es bajo, aunque se dan
diferencias entre ellos. En el mapa 3 se pueden apreciar estas diferencias, pues el
IDH varía desde el 0’400 de Jocotán (Guatemala) hasta el 0’679 de San Ignacio (El
Salvador). Las cifras más altas aparecen en los municipios fronterizos de la región del
Trifinio. En este caso, su ubicación en un espacio de tránsito bien comunicado los
intercambios comerciales, de personas… ha favorecido, en parte, su desarrollo. En
cambio, los que se encuentran más alejados de esta zona presentan las cifras más
bajas. Así ha ocurrido con un amplio número de municipios al norte del Trifinio
ubicados en Guatemala. La misma situación han vivido los que su sistema de
7
comunicaciones viario es deficitario. Así, pese a encontrarse muy próximos a las
fronteras como Citalá (El Salvador) o Santa Fe y Concepción (Honduras), la
orografía y la falta de recursos han supuesto un limitante a la construcción de
infraestructuras.
La subsistencia y la pobreza aparecen como dos rasgos representativos de la Región
del Trifinio y de sus pobladores. El 53% de la población vive en condiciones de
pobreza extrema. Ésta sigue siendo una realidad manifiesta en los centros urbanos y
en las áreas rurales más alejadas de los tradicionales centros de toma de decisiones.
Cuenta con una serie de problemas que no terminan de mitigarse, como es la
insuficiente infraestructura de saneamiento básico, problemas sanitarios, bajo nivel
de tecnología, carencia de redes de comunicación y electricidad, problemas
fronterizos (contrabando, delincuencia…), problemas ambientales (deforestación y
pérdida de biodiversidad)… (CATIE, 2005). Además mantienen una gran
dependencia económica a las remesas que llegan de los emigrantes y de la agricultura,
por lo que resulta necesario la diversificación de su producción, así como la del resto
de actividades económicas, dando cabida a otro tipo de actividades que puedan
generar riqueza y empleo en la región y sea sostenible a largo plazo. En ellas, el
intercambio de bienes y servicios tiene una consideración positiva, pues la integración
que se promueve a partir de los vínculos creados puede generar oportunidades en la
comercialización y movilización de personas por este territorio.
8
Mapa 3. Índice de Desarrollo Humano de los municipios de la Región del Trifinio
Fuente: PNUD, 2005, 2006a, 2006b. Elaboración propia.
3. El Plan Trifinio, modelo de integración regional
Han llegado hasta nuestros días características compartidas en estas tierras que han
otorgado cierta unidad al territorio centroamericano desde los tiempos de la
conquista. De hecho, son más las semejanzas que las diferencias entre ellos. La puesta
en marcha de proyectos de cooperación comunes queda justificada por a la existencia
de los mismos intereses y objetivos. A lo largo de la Historia de estos países han
surgido varias iniciativas para avanzar juntos. De la misma forma que ha estado
presente el deseo de iniciar un camino común desde su constitución como Estados
soberanos en 1811, en los que en todos ellos existía un sentimiento integrador, las
dificultades en el proceso integrador han ido surgiendo y han estado marcadas por
9
una serie de encuentros y desencuentros (Panadero, Navarrete y Cebrián, 2004).
Aunque los esfuerzos se han encaminado en esa dirección, se considera que el
proceso de integración todavía no está definitivamente consolidado. Así, se han ido
sucediendo episodios de proyectos de unión en estos países desde su independencia
de España en 1821 que no han tenido su aplicación en este territorio.
La aparición de la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), un
organismo internacional dependiente de la ONU, y su posterior apoyo fueron
fundamentales en las propuestas iniciales de integración. Durante las décadas de los
’50 y ’60 alentó la integración e intercambio comercial interamericano. El modelo
integracionista de la CEPAL estaba formulado para que se ejecutase de forma
gradual, pacífica, planificada e integral. En este contexto, el Mercado Común
Centroamericano (MCCA) se estableció en 1960 por el Tratado de Managua, paso
lógico para la superación de sus reducidos mercados nacionales (Cebrián Abellán,
2005). Al mismo tiempo, los conflictos internos en la región paralizaron los avances
de la integración. Pero, poco a poco se fue produciendo un avance en Centroamérica
hacia la democratización de sus países que contribuyó al relanzamiento de los
proyectos de integración regional.
Hitos fundamentales para la resolución de los conflictos violentos y la creación de
una zona de paz fueron los Acuerdos de Esquipulas I y II. Así en el marco de estos
Acuerdos, los gobiernos de El Salvador, Guatemala y Honduras suscribieron un
Acuerdo de Cooperación Técnica para la formulación del Plan Trifinio en 1986 a
partir de la elaboración de un diagnóstico socioeconómico de los municipios de esta
región. Se aprobó en 1988 por las autoridades competentes. En la década anterior los
gobiernos de los tres países ya habían mostrado su interés en la conservación de los
recursos forestales del Macizo de Montecristo. Su objetivo era generar un ambiente
de cooperación para promover la pacificación y la integración entre los tres países.
Así, se sentaron las bases para que el Trifinio fuera considerado ejemplo de buenas
prácticas en la gestión de recursos naturales internacionales, especialmente en la
gestión sostenible de los recursos hídricos compartidos. Se constituyó como marco
orientador del desarrollo y en un instrumento estratégico de acciones para la Región.
10
De esta manera, se concibió el Plan Trifinio con el objetivo de “contribuir a la
Integración Centroamericana, mediante una acción conjunta de Guatemala, El Salvador
y Honduras, que tienda al desarrollo integral, armónico y equilibrado de la región
fronteriza de los tres países” (López et al., 2004: 30; VV.AA., 2004: 6).
Hasta que se produjera la firma del Tratado y su consiguiente entrada en vigor
pasaron 10 años. Durante ese período de tiempo se llevó a cabo el Proyecto Piloto
Trifinio con una duración desde 1992 hasta 1999 donde se pusieron en marcha
proyectos de desarrollo en que la gestión de los recursos naturales ocupaba un área
central. Se incentivó la participación de la sociedad local con la creación de las
Asociaciones del Trifinio para el Desarrollo Sostenible (ATRIDEST), una carencia
detectada al producirse la revisión de los Acuerdos en 1992. Ésta no ha sido la única
actualización hecha al Tratado, pues se hizo otra en 2004. Estas revisiones a partir de
la actualización del contexto socioeconómico han permitido la adaptación a las
nuevas realidades del mundo competitivo y global para una correcta aplicación de las
acciones y proyectos.
El éxito de este conjunto de programas, proyectos y actividades reside en que se ha
involucrado a un amplio conjunto de actores donde también ha sido partícipe la
sociedad civil. Además, se ha desarrollado en un contexto donde la integración ha
sido contemplada como instrumento y objetivo. También la paz se ha percibido
como condición y producto del desarrollo de estos proyectos.
Además, se ha creado una institución con autonomía administrativa, financiera y
técnica y personalidad jurídica propia, tal y como se especifica en el artículo 1º del
Tratado: “fortalecimiento institucional del Plan Trifinio a través del reconocimiento y la
normación de las funciones de la Comisión Trinacional y de sus órganos encargados de
velar por la ejecución del Plan y su permanente actualización”. (CTPT, 1998: 2). Se
trata la Comisión Trinacional del Plan Trifinio (CTPT) que está integrada por los
Vicepresidentes del El Salvador y Guatemala y uno de los Designados a la
Presidencia de Honduras. La institucionalidad quedaba de esta forma creada y
consolidada, lo que ha permitido tener un Tratado, una base legal y estructura
institucional que le ha permitido actuar dentro de la trinacionalidad. Los objetivos de
11
desarrollo sostenible se han contemplado en sus actividades e iniciativas donde la
gestión compartida de los recursos naturales ha sido un tema prioritario. Entre las
acciones llevadas a cabo están: la propuesta de un Parque Multifuncional
denominado La Fraternidad o la Declaratoria de Reserva de La Biosfera La
Fraternidad (VV.AA., 2004).
4. La actividad turística en la región del Trifinio
4.1 Los contextos centroamericano y nacional
Según los últimos datos aportados por la OMT (2009), el número de visitantes que
durante el año 2008 ingresó en la región centroamericana superó la cifra de los 8
millones. Se trata de una cifra modesta en términos absolutos y de cuota de mercado,
pues presenta las cifras más bajas registradas a escala mundial. No ocurre lo mismo si
se atiende al ritmo de crecimiento que está experimentando América Central en este
sector. Durante estos últimos 15 años ha mostrado un rápido incremento de las
llegadas, así como de los ingresos económicos. El porcentaje de turistas que llegaron a
lo largo del año 2008 aumentó en un 7’9% con respecto al 2007. En este mismo
período, el incremento en las llegadas de turistas a escala mundial experimentó un
crecimiento en torno al 1’8%.
El progresivo crecimiento de la actividad turística en América Central tiene sus
orígenes en la primera mitad de la década de los ’90. Una vez concluidos los
conflictos bélicos, políticos, económicos y sociales, que dejaron una región
empobrecida consiguiendo un aumento de la deuda pública y de las tensiones
sociales, y tras la recuperación de la estabilidad perdida en la década de los ’80, se
planteó revitalizar estas sociedades a partir de la diversificación de sus respectivos
sectores económicos tradicionales donde se vio en el desarrollo del turismo una
posible salida a la crisis.
La tendencia al crecimiento se mantiene en la actualidad, a pesar de verse
interrumpida en algunos de estos países debido a factores y condicionantes internos
(conflictividad política y social, violencia…) o a factores externos (atentados del 11 de
septiembre de 2001, epidemia del SRAS, crisis económica mundial…). La actividad
12
turística, como manifestación, elemento y consecuencia de la globalización, no
permanece ajena a este tipo de sucesos que acontecen en el mundo y tienen
repercusiones en la escala local. A partir del análisis del turismo en cada uno de estos
países se puede realizar una aproximación al comportamiento de sus respectivas
dinámicas sociales, económicas y políticas (Raymond, 2008).
El desarrollo de esta actividad se ha basado en la mirada turística (Urry, 2004)
proyectada desde los países industrializados que han puesto en valor los recursos
naturales y culturales del territorio. Estos recursos son la base para la realización y
ejecución de iniciativas y proyectos de desarrollo turístico. Esto ha dado lugar a
procesos de desarrollo turístico diferenciados (Ivars Baidal, 2007), pues a pesar de
que comparten muchas características, presentan diferencias en el grado de desarrollo
que tienen su reflejo en las particularidades políticas, económicas y sociales.
La dinámica turística se ha visto inmersa en un proceso de adaptación o reconversión.
En este sentido, las políticas de desarrollo local de estos países se han centrado en la
actividad turística aprovechando este cambio de tendencias en la demanda turística
internacional y una oferta de productos basadas en las particularidades de sus
recursos locales. Las repercusiones de la aplicación de estas políticas se han hecho
perceptibles en una mayor difusión espacial que es manifiesta en el turismo
latinoamericano (Ivars Baidal, 2007). Así, países cuya vocación turística era escasa,
como El Salvador u Honduras, actualmente captan una cuota de mercado aceptable
con su consiguiente aparición e inserción en los mapas y mercados turísticos
internacionales. Se han considerado destinos emergentes (OMT, 2006). La OMT
entiende por destino emergente aquél cuyo incremento en el número de turistas ha
sido de más de 100.000 turistas a lo largo del período de tiempo comprendido entre
1995 y 2005 o si la tasa de crecimiento es superior a la del promedio mundial,
estimada durante este período en un 3’9%. Durante estos años el ritmo de
crecimiento ha sido alto en todos los países centroamericanos, pero con un ritmo
diferenciado. Por encima de todos destaca el rápido incremento que se ha producido
en El Salvador. Para el período de referencia se ha calculado una tasa de crecimiento
de un 17%, es decir, un aumento en términos absolutos superior a los 700.000
turistas.
13
4. 2 Potencialidades turísticas en el Trifinio
La región del Trifinio presenta una serie de potencialidades para que el turismo se
desarrolle. Cuenta con recursos naturales y culturales que pueden ser explotados para
uso turístico, así como la voluntad de un amplio número de actores que están
decididos a apoyar e impulsar los procesos de desarrollo turístico. Al mismo tiempo,
aparecen una serie de condicionantes y limitantes que son necesarios superar para
asegurar el adecuado desarrollo del sector.
Para hacer una primera aproximación al turismo en la región del Trifinio, es
necesario conocer el número de turistas que la visitan. Se trata de una tarea compleja
conocer con exactitud esta cantidad. Recordemos que el Trifinio es un área fronteriza
por donde transita un amplio número de personas. A pesar de la dificultad, el
CATIE (2005) ha conseguido estimar una afluencia anual en torno al 1’7 millones de
turistas. Para poder acercarse a conocer el número de visitantes en la región se ha
recurrido a la consulta de entrada de visitantes a través de los puestos fronterizos
terrestres que se encuentran en el Trifinio a partir de las estadísticas elaboradas por
el Ministerio de Turismo de El Salvador (MITUR), el Instituto Hondureño de
Turismo (IHT) y el Instituto Guatemalteco de Turismo (INGUAT). Según estos
datos (tabla 1), serían unas 600.400 personas las que habrían cruzado alguna de estas
fronteras durante el año 2008, una cifra que ha aumentado en algo más de 50.000
activos con respecto al año anterior. No todos los que cruzan las fronteras presentan
comportamientos propios de turistas. Entre los municipios de estos departamentos
se han generado una serie de vínculos que hacen que se produzcan constantes flujos
de bienes, de servicios y de personas. También sucede que no todos los que acceden
por esta vía visitan algunos de los hitos turísticos de la región del Trifinio, por lo
tanto no identificados como turistas. Pero no conviene descalificar este tipo de
turistas por realizar otro tipo de actividades alejadas de las propiamente turísticas o
no hacer uso de los servicios turísticos. Esto implica descartar la posibilidad de
realizar un diagnóstico, una programación o proyección a potenciales usuarios de
servicios turísticos y eliminando la posibilidad de comprender las interacciones entre
14
visitantes y visitados (Bringas Rábago, 2005). Se desconoce el número de personas
que acceden a estos países desde las vías aéreas y marítimas, así como los datos del
turismo doméstico.
El turismo en la región del Trifinio cuenta con recursos territoriales susceptibles de
uso turístico. En cada parte nacional de la región se cuenta con un hito turístico con
suficiente entidad para articular el turismo de esa área. Así, en parte guatemalteca se
encuentra la Basílica de Esquipulas. El Cristo Negro tiene una gran capacidad de
atracción de visitantes movidos por la devoción, que ha trascendido fronteras. Se
trata del mayor centro de atracción turística de la región trinacional. Se ha estimado
en más de un millón los visitantes que recibe anualmente esta ciudad. En torno a la
actividad turística religiosa se han generado una serie de servicios. Así, se encuentran
hoteles (en torno al 75 % de la oferta hotelera del Trifinio), restaurantes, transporte,
comercio de artesanías… con la finalidad de satisfacer la demanda de los visitantes,
pero también la demanda local. En la parte salvadoreña se encuentra el Parque
Nacional Montecristo. Es uno de los 3 espacios que cuentan con protección legal en
El Salvador. Alberga una abundante riqueza natural con la que el visitante, en su
mayoría nacional, puede practicar un tipo de turismo basado en la contemplación de
la naturaleza, con fines científicos o deportivos. Cuenta con un punto de acceso al
Punto Trifinio. El turista se puede alojar en este espacio, pues gracias a la
contribución realizada por la AECI se construyeron cabañas con este fin. La parte
hondureña contiene el Parque Arqueológico de Copán Ruinas, un importante legado
cultural maya que ha llegado hasta nuestros días, cuya entrada de visitantes al año se
estima en torno a las 150.000.
15
Tabla 1. Llegada de turistas por fronteras (2007-2008)
País Frontera 2007 2008 País Frontera 2007 2008
Agua
Caliente
56.17
2 62.804 San Cristóbal 2.822 4.143
El Poy 61.52
0 68.783 Anguiatú 2.499 5.640
El Florido 40.01
0 44.734 El Poy 4.309 8.275 H
on
du
ras
Total 157.7
02 176.321
El S
alva
do
r
Total 9.630 18.058
País Frontera 2007 2008
San Cristóbal 98.317 106.851
Nueva Anguiatú 158.922 165.545
Agua Caliente 49.699 51.836
El Florido 75.838 81.789
Gu
atem
ala
Total 382.776 406.021
Fuente: IHT, 2009; INGUAT, 2009; MITUR, 2009. Elaboración propia.
A su alrededor se pueden generar polos de crecimiento Además de éstos, cuenta con
otros atractivos como son los centros artesanales de La Palma y San Ignacio (El
Salvador) o Nueva Ocotepeque (Honduras) que tiene potencial para desarrollar
empresas agropecuarias, así como las áreas naturales que se encuentran repartidas
por todo el espacio del Trifinio.
Para el desarrollo de la actividad turística en el Trifinio ha sido necesario el impulso
recibido desde la Comisión Trinacional del Plan Trifinio. Los empresarios de
turismo, gobiernos municipales y organizaciones comunitarias han manifestado en
reiteradas ocasiones que los recursos naturales y culturales presentes en el territorio
16
se pueden aprovechar para uso turístico y, de esta manera, ofrecer un destino
turístico al mundo y contribuir a la mejora de los niveles de vida y al crecimiento y
diversificación económica de esta región tan deprimida (PTCARL, 2008). Así, se
solicitó a través de la Oficina de la CTPT al Banco Interamericano de Desarrollo
(BID) y al Fondo Multilateral de Inversiones (FOMIN) un Proyecto titulado
“Apoyo al ordenamiento y desarrollo del turismo sostenible en la Región Trifinio”. El
objetivo del Proyecto es “mejorar la competitividad y acceso al mercado nacional,
regional e internacional de las MIPYMES de turismo en la Región Trifinio articulándose
en una ruta Trinacional de Turismo Sostenible” (BID-FOMIN, 2008: 5). Se ha
diseñado en torno a 4 componentes que tendrán una ejecución paralela a lo largo de
su desarrollo durante 4 años:
- Componente 1: análisis para el mejor ajuste de oferta y demanda, y planificación
estratégica: Su propósito es el diseño de una Ruta Trinacional de Turismo donde se
articule una oferta de productos y servicios existentes en los tres países basada en los
principios del desarrollo sostenible.
- Componente 2: capacitación de población y recursos humanos y sostenibilidad
ambiental y cultural: su objetivo es mejorar las capacidades de las Mipymes para que
incrementen la calidad de sus servicios y productos y diversifiquen su oferta turística.
- Componente 3: fortalecimiento institucional del sector: su objetivo es fortalecer la
Cámara Trinacional de Turismo Sostenible en su capacidad técnica, administrativa,
financiera, de coordinación, organización y gestión.
- Componente 4: imagen, promoción y comercialización: consiste en promocionar y
posicionar la Ruta Trinacional tanto en los mercados nacionales de El Salvador,
Honduras y Guatemala, como a nivel internacional.
Los beneficiarios del Proyecto no serán únicamente las Mipymes que desarrollan
aquí su labor, sino también se verán implicadas las mancomunidades, asociaciones de
artesanos, de empresarios de hoteles, restaurantes y centros turísticos. Todo esto con
una finalidad, revertir en la población local para ofrecer una posible alternativa a la
actual situación en la que se encuentran.
17
5. A modo de conclusión
Parque Nacional de Montecristo, Parque Arqueológico de Copán Ruinas y Basílica
del Cristo Negro en Esquipulas, es decir, ecoturismo, turismo arqueológico y turismo
religioso, son recursos de los que dispone la región del Trifinio para poder impulsar
la actividad turística. Se trata de tres centros de referencia para el turismo nacional,
regional e, incluso, internacional. En torno a ellos la creación de un único destino que
ofrezca variedad de productos turísticos es una oportunidad para el desarrollo del
turismo regional. El sector turístico presenta una evolución positiva durante estos
últimos años en cada uno de estos países y estos recursos turísticos pueden contribuir
a que esta tendencia se mantenga. Por sí solos tienen suficiente capacidad de
atracción, pero se pueden mejorar si caminan en una misma dirección. En este
sentido, sus posibilidades de desarrollo pasan por la facilidad de trámites en los
puestos fronterizos de la región del Trifinio o la proyección de la mirada turística
(Urry, 2004) que ha posibilitado que todos los recursos y destinos sean susceptibles
de uso turístico.
Una gestión compartida supone una oportunidad y un reto para las autoridades de
esta región fronteriza. Por una parte, se promueve la integración regional, que
contribuye a una apertura de mercados de todas las partes del mundo y también se
proyecta una imagen diferente a la que se percibía años anteriores, de otra parte, es
un reto porque se trata de una región donde los conflictos permanecen latentes, sobre
todo, en regiones en las que hubo enfrentamientos. La dependencia con respecto a
organismos internacionales se convierte en un limitante para la puesta en marcha de
proyectos.
Otro aspecto que hay que considerar para llevar a cabo proyectos de desarrollo
turístico en esta región es la vulnerabilidad y fragilidad del territorio. La pobreza, el
analfabetismo y la fuerte dependencia exterior son los rasgos que identifican esta
región. En el turismo se ha visto una alternativa hacia su crecimiento y su desarrollo
económico. Esta actividad involucra a varios sectores y a todos los actores de la
sociedad donde se lleva a cabo, pero hay que tener cuidado a la hora de planificar su
desarrollo. No se trata de destinos consolidados, se encuentran todavía en una fase de
emergencia, por lo que se tiene que producir una implantación gradual y planificada
para producir los menores impactos posibles.
18
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19
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1
Cooperación interuniversitaria al desarrollo local
mediante el apoyo a los modelos de turismo
comunitario en la selva Lacandona
María José Pastor Alfonso1
Área de Antropología Social (Universidad de Alicante, España)
Domingo Gómez López2
(Universidad Intercultural de Chiapas, México)
Resumen
En la Selva Lacandona del Estado de Chiapas, México, se vienen generando diversos
modelos de desarrollo local a través del turismo comunitario, como alternativa al
turismo invasivo que empezó a desarrollarse en esta zona, caracterizada por su amplia
diversidad étnica, numerosas zonas arqueológicas de la cultura Maya y gran belleza
paisajística.
La Universidad Intercultural de Chiapas (UNICH) y la Universidad de Alicante
(UA), a través del Vicerrectorado de Relaciones Internacionales y Cooperación,
trabajan en un proyecto común de apoyo a los diferentes grupos étnicos, mediante la
formación para la actividad turística de individuos, en sus propias localidades, y la
investigación de los impactos socioculturales causados por el desarrollo turístico
específico de cada comunidad.
Se destaca en este trabajo la identidad étnica en dos vertientes, por una parte como
atractivo turístico, utilizado como reclamo para motivar el viaje; y por otra, como
elemento básico que se modifica a causa de las relaciones que se establecen en el
intercambio turístico.
Palabras clave: Cooperación al desarrollo y universidades, turismo comunitario,
turismo sostenible, desarrollo local, identidad cultural. 1 Profesora, Coordinadora del Área de Antropología Social, Universidad de Alicante, [email protected]. 2 Profesor, Director del Programa Educativo de la Licenciatura en Turismo Alternativo de la Universidad Intercultural de Chiapas. [email protected].
2
Summary
In the Lacandon Jungle of the State of Chiapas, Mexico, several local development
models have emerged using community-based tourism as an alternative to the
invasive tourism model that was originally developed in the region. This latter is
characterized for its broad ethnic diversity, numerous archaeological sites from the
Mayan period and beautiful landscape.
The Intercultural University of Chiapas (UNICH) and the Universidad de Alicante
(UA), through Vicerrectorado de Relaciones Internacionales y Cooperación , work in a
joint project to support the different ethnic groups offering tourism training to
individuals in their localities and conducting research on the socio-cultural impacts
caused by the specific tourism development in each community.
This collaborative work highlights ethnic identity in two scopes: on the one hand, as
a tourist attraction, as a means to motivate the journey; and on the other hand, as the
basic element that undergoes change in each culture as a result of the relationships
that occur during the tourism exchange.
Key words: Development cooperation and universities, community tourism,
sustainable tourism, local development, cultural identity.
1. Introducción
La presente exposición analiza el papel de las universidades en los proyectos de
Cooperación al Desarrollo, mediante un diseño concreto de desarrollo local basado
en el turismo comunitario. Hacemos referencia al proyecto “Turismo alternativo y
desarrollo local sostenible. Organización de módulos formativos y talleres artesanales
comunitarios”, financiado y puesto en práctica a través de la Oficina de Cooperación
y Relaciones Internacionales, dependiente del Vicerrectorado de Relaciones
Internacionales y Cooperación, de la Universidad de Alicante (UA), con el apoyo de
la Universidad Intercultural de Chiapas (UNICH). Estas dos instituciones firmaron
un convenio ínter universitario en 2008.
3
A fin de apoyar proyectos del desarrollo sostenible, así como el progreso social,
cultural e institucional de los países en vías de desarrollo, nace en 1997 la llamada
Comisión del 0,7% de la UA (http://www.ua.es/internacional/prog07/cooperacion/
Cooperación.html): “La Universidad de Alicante, en el ámbito de la cooperación
internacional, se plantea apoyar presupuestriamente, a través de los fondos 0,7,
acciones que propicien el desarrollo sostenible y el progreso social, cultural e
institucional de los países menos favorecidos, promoviendo su desarrollo endógeno
tendente a eliminar los causas de la pobreza, promoviendo la justicia social, el
respeto de los derechos humanos y el fortalecimiento de las instituciones que
aseguren la consolidación de la democracia y el respeto al medio ambiente”.
Como se verá, nuestro proyecto plantea una serie de objetivos acordes con los
definidos por esta universidad, entre ellos queremos destacar el número 3: Contribuir
a la sensibilización social mediante proyectos de educación y otras actividades de
sensibilización. Pensamos que la formación debe ser la base de cualquier acción
dirigida a promover el desarrollo local, y que dicha formación deberá ser
complementada posteriormente por apoyos de diversas características.
Respecto a la Universidad Intercultural de Chiapas, la Licenciatura en Turismo
Alternativo tiene planteado, en su modelo educativo, un eje de formación
denominado “Vinculación con la Comunidad” que tiene como objetivo preparar a los
estudiantes a nivel teórico y práctico para los trabajos comunitarios enfocados al
Turismo Alternativo Comunitario.
Por otro lado, existen otros ejes en la UNICH que complementan la formación de
los estudiantes tales como el eje Ecológico - Ambiental, Geográfico - Sociocultural,
Político - Económico y el eje de Lenguas. En este último, se está preparando a los
estudiantes en adquisición y dominio de alguna lengua originaria de Chiapas
(Tzotzil, Tzeltal, Ch’ol, Tojolabal y Zoque). En el área de intervención del proyecto
que exponemos, es decir, en la Comunidad Lacandona, se hablan Ch’ol, Lacandón y
Tzeltal.
4
2. Presentación del proyecto
2.1 Definición del proyecto
- Título: “Turismo alternativo y desarrollo local sostenible. Organización de
módulos formativos y talleres artesanales comunitarios”. Trabajo conjunto con la
Universidad de Alicante y Universidad Intercultural de Chiapas.
- Objetivo específico de desarrollo: Lograr la sostenibilidad en el desarrollo
turístico a partir del conocimiento y proyección de los elementos identitarios
patrimoniales.
- Período: 5 años (comenzado en marzo de 2008).
- Región geográfica: Selva Lacandona, Chiapas, México.
- Grupo predefinido de beneficiarios: Comunidades indígenas en proceso de
desarrollo turístico en la Selva Lacandona: Etnias de Lacandones, Tzeltales y
Ch’oles principalmente. Especial atención a las mujeres artesanas de la zona.
- Efectos de producción tras la retirada del apoyo externo: Se pretende lograr la
gestión del desarrollo turístico por parte de los propios miembros pertenecientes
a las diversas comunidades locales, de tal manera que, al mismo tiempo que la
comunidad se beneficia de la dinámica económica generada, puedan mostrar al
turista la realidad, sin deformarla, vinculando los elementos patrimoniales, tanto
culturales como naturales, a través de la interpretación patrimonial.
2.2 Justificación del proyecto
La relevancia de la historia política reciente mexicana del Estado de Chiapas, ha
supuesto un atractivo añadido a sus espacios naturales y culturales. Desde 1996, los
habitantes de la región, en su mayoría campesinos indígenas, han empezado a
plantearse la posibilidad de gestionar directamente el desarrollo turístico de sus
localidades (que frecuentemente ha estado en manos de empresas e individuos
foráneos), como una forma de obtener beneficio económico y social en los proyectos
llevados a cabo en su propio medio, y no ser exclusivamente mano de obra en un
sector que cada vez produce más dividendos.
5
El punto de partida para la gestión del turismo debe ser el desarrollo sostenible;
basándonos en las declaraciones de la Cumbre de Río (1992): “Los pueblos
indígenas, sus comunidades y las otras comunidades locales, ejercen una tarea vital en
la gestión del ambiente y en el desarrollo mediante su conocimiento y prácticas
tradicionales. Los estados deberían reconocer y favorecer debidamente la identidad,
la cultura y los intereses de dicho pueblos habilitándolos a una efectiva participación
en el logro de un desarrollo sustentable”.
El proyecto consta de una vertiente de investigación para el conocimiento de los
grupos humanos del lugar, que se pone en marcha mediante la aplicación práctica de
la Antropología del turismo, materia que se ocupa de estudiar los grupos implicados,
residentes y turistas, así como las relaciones que establecen entre ellos y los impactos
originados por las mismas. La otra vertiente se dirige a la formación de los agentes del
desarrollo local, de tal forma que adquieran el conocimiento necesario para gestionar
distintos aspectos del sector turístico, consiguiendo que la comunidad se beneficie de
la dinámica económica generada, mostrando al turista la realidad, sin deformarla,
vinculando los elementos culturales y naturales a través de la interpretación
patrimonial. El conocimiento del medio y de las diversas culturas de la zona, así como
el respeto a los mismos y la dignidad a la hora de presentarlos ante el visitante.
2.3 Ámbitos de actuación
Desarrollo económico: Las comunidades en las que está prevista la actuación han
empezado a desarrollar el turismo alternativo como actividad complementaria en
Frontera Corozal y Nueva Palestina, o principal como es el caso de Lacanjá
Chansayab, por lo que la orientación y el aprendizaje sobre las técnicas de trabajo en
turismo, así como el apoyo a la realización y comercialización de las artesanías
tradicionales mejorará considerablemente los ingresos a corto y mediano plazo,
facilitando la planificación de un sector con futuro de la economía comunitaria.
Desarrollo educativo: Partimos de que la formación es uno de los pilares del
desarrollo, por lo que los módulos y talleres previstos en el presente Proyecto, están
dirigidos tanto a formadores de formadores, en la Universidad Intercultural de
Chiapas, como a los individuos que dentro de las comunidades indígenas desean
6
dedicarse al turismo, ya sea en la planificación, construcción, restauración,
alojamiento rural, sector servicios, guías, elaboración y comercialización de
artesanías, difusión del patrimonio cultural, etc.
Mejora de la salud: Aunque en este Proyecto no se trabaje directamente con el
sector salud, es sabido que un incremento en los ingresos de la población y una
adecuada distribución de los mismos (se trabaja en cooperativas organizadas por las
propias comunidades) produce, ya sea de manera directa o indirecta, una mejora en la
calidad de vida y la posibilidad de acceder a servicios vedados en anteriores
condiciones.
Protección de colectivos vulnerables: Las mujeres indígenas, que han elaborado
ancestralmente objetos artesanales con una función precisa en su comunidad (tejidos,
bordados, tallas, alfarería, adornos corporales, etc.), ven mermar su producción a
causa de la adquisición de productos ajenos llegados a través del comercio
globalizado. El hecho de que estas mujeres artesanas puedan adaptarse a los cambios
sociales sin dejar de producir sus elementos culturales, simplemente combinando la
función de uso tradicional con la de la comercialización turística, hace que este sector
de la población pueda incorporar a su economía doméstica unas ganancias que les
permitirán mejorar su posición y no depender de padres o esposos. Al mismo tiempo,
la organización en talleres artesanales y la comercialización en locales de la zona,
gestionados por las mismas mujeres, evitará la venta ambulante llevada a cabo por
ellas y, en mayor grado, por los niños quienes, liberados de la tarea comercial,
tendrán mayores opciones de asistir a la escuela y formarse.
Habitabilidad básica: En principio no nos planteamos trabajar sobre las
infraestructuras, sin embargo es posible que, más adelante, surja la necesidad de
construir, transformar o rehabilitar espacios para el trabajo artesanal y la
comercialización del mismo.
Acceso al agua potable y saneamiento básico: Cualquier proyecto de desarrollo
turístico, aunque sea alternativo con orientación ecológica, debe contar con un
mínimo de infraestructuras que aporten al visitante, y por tanto a la propia
comunidad, los servicios mínimos de saneamiento y acceso al agua.
7
2.4 Tipología de acciones
Mejora de la capacitación: La organización para trabajar en los diferentes aspectos
posibles del turismo en la Selva Lacandona, implica la capacitación de todos aquellos
que deseen entrar a formar parte de este sector. Queremos puntualizar que, aunque
hablamos de turismo comunitario, no toda la comunidad se implica, ya que hay otros
rubros de la producción que no deben quedar excluidos bajo ningún concepto,
fundamentalmente el agrícola.
Reconstrucción medioambiental: Estamos planteando un Proyecto a desarrollar en
la Selva Lacandona, con dos Reservas de la Biosfera: Lacan.Tun y Montes Azules,
que se enfrentan a graves problemas medioambientales vinculados al desarrollo
pecuario y explotación maderera en algunas de sus zonas. Afortunadamente,
comunidades oriundas como los Lacandones, tienen muy en cuenta la preservación
medioambiental; sin embargo otras comunidades, trasladadas a la zona a causa del
deterioro y empobrecimiento de sus tierras de origen, se dedican fundamentalmente
a la ganadería, actividad que conlleva la deforestación de grandes extensiones. El tipo
de desarrollo turístico que planteamos implica la preservación y defensa del medio y,
siempre que sea necesaria, la reforestación del lugar.
Apoyo a acciones que promuevan una participación y reconocimiento efectivo: A
las mujeres indígenas de las comunidades que nos atañen, se las orientará de tal
manera que el desarrollo de su labor en la comunidad sea reconocido en la misma,
mitigando los sesgos machistas de su cultura tradicional; para ello creemos de gran
interés la participación de los hombres como compañeros en la nueva orientación de
sus actividades. La consideración positiva de la mujer influirá en la formación y
beneficio de los niños.
8
3. Planificación del proyecto: enfoque del marco lógico (EML)
A) Programación:
Actividades
1.- Docencia a través de módulos específicos en la Universidad Intercultural de
Chiapas
2.- Prácticas de campo en comunidades
3.- Talleres en comunidades indígenas (guías y artesanos). UNICH y UA
Recursos
1.- Personal humano: Docentes, investigadores y técnicos. UNICH y UA
2.- Aulas en la UNICH
3.- Vehículos
4.- Locales en las comunidades, medios técnicos (ordenador portátil y cañón de
proyección) y vehículos
B) Identificación de problemas:
Los pueblos originarios del Estado de Chiapas, concretamente los de la Selva
Lacandona, poseen la mayor parte de los atractivos turísticos de tipo natural y
sociocultural, pero son quienes reciben la mínima parte de los beneficios económicos.
Los empresarios turísticos, en específico los tour operadores y transportistas
turísticos obtienen jugosas ganancias por la operación y venta de destinos turísticos.
A partir del 2000, se contempla en el plan de desarrollo estatal como prioridad el
desarrollo del turismo sostenible a través de la implantación de proyectos turísticos
comunitarios en las zonas rurales administrados por la gente local, contribuyendo a la
creación de actividades económicas diferentes a la agricultura o ganadería, con la
finalidad de diversificar las rutas turísticas del Estado.
9
C) Formulación de acciones a realizar y cronograma previsto por cada mes de
trabajo:
Actividad Período de
realización
Objetivo previsto
- Contacto previo con las
comunidades indígenas
5 días - Conocer la situación del momento
- Diseño de los talleres
- Prácticas de campo 5 días - Aplicación de los conocimientos en el medio ru
- Clases teóricas
10 días - Formación en los temas propuestos
- Realización de talleres 7 días - Puesta en marcha de los talleres junto con el p
formado previamente
4. Criterios de actuación
Eficacia: Durante los cinco años en los que se propone realizar el Proyecto, se
ampliará el número de comunidades en las que se pondrán en práctica los módulos y
talleres, al mismo tiempo que se seguirá colaborando con la UNICH en la formación
de formadores. Durante febrero de 2008 se establecieron los primeros contactos en
los campamentos con los que se ha comenzado a trabajar: Escudo Jaguar, Rio
Lacanjá, Cueva del Tejón, Las Golondrinas, Las Guacamayas y Las Nubes, donde se
actuará en sucesivas etapas.
Eficiencia: Los recursos necesarios para poner en marcha este Proyecto son mínimos
comparados con los beneficios que se obtendrán. Estamos apoyando el desarrollo
local de comunidades con opciones de desarrollo económico muy limitadas, tanto por
el espacio en el que habitan como por la formación adquirida.
Pertinencia: El turismo comunitario es una de las pocas opciones que los habitantes
de la Selva Lacandona tienen como opción de desarrollo económico. En la propia
zona o en lugares muy próximos se encuentran yacimientos arqueológicos muy
importantes como Palenque, Bonampak, Yaxchilán o Chinkultic, además de espacios
naturales de gran atractivo para los visitantes, sin descartar el turismo de tipo étnico
que implica la convivencia con los habitantes autóctonos. La organización y puesta en
funcionamiento de este tipo de proyectos, ayudará a compaginar las actividades
10
tradicionales con las turísticas ya en manos de los pueblos originarios, hasta hace
poco reservadas a los tour operadores internacionales, obteniéndose de esta forma
ganancias de las que podrán beneficiarse directamente las comunidades.
Impacto: Los impactos positivos previstos con la puesta en práctica de este Proyecto
serían:
- A corto plazo: Capacitación de los individuos y motivación para el desarrollo
iniciado.
- A medio plazo: Mejora de infraestructuras, puesta en valor del patrimonio
cultural y ganancias incipientes procedentes del sector turístico.
- A largo plazo: Beneficios económicos suficientes, mejora de la calidad de vida de
los miembros de la comunidad y aceptación del nuevo rol de la mujer con
responsabilidades económicas y toma de decisiones. El medioambiente podrá ser
vigilado desde las propias comunidades, evitando su deterioro. Además, una vez
incluidos los campamentos en los circuitos turísticos, podrá orientarse la afluencia
turística hacia un tipo de visitante responsable, concienciado, respetuosos del
medio ambiente y de las culturas nativas para la zona.
Viabilidad: El Proyecto ya ha sido consultado tanto con los responsables de la
UNICH como con los miembros de las comunidades que desean involucrase en
turismo comunitario. No estamos decidiendo qué comunidades pueden trabajar en
ello, si no que nos dirigimos a individuos que han decidido trabajar, a través de sus
cooperativas, en el sector turístico y desean formarse para poder gestionar por sí
mismos. La UNICH, como universidad orientada a la formación de indígenas, con
licenciaturas en Desarrollo Sustentable y Turismo Alternativo, ha tramitado un
convenio con la U. A., lo que dará estabilidad y continuidad al proyecto.
Mecanismos de financiación: Consideramos que la financiación del proyecto no
implica gastos excesivos, ya que fundamentalmente se necesitaría costear transporte,
alojamiento y alimentación para los docentes, además de algunos materiales técnicos,
la mayoría reutilizables. Por otra parte, distintas instituciones gubernamentales y
estatales mexicanas financian parte de las infraestructuras comunitarias. La UNICH
colabora en el traslado para las prácticas de campo y en alguna otra actividad, que se
concretará a través del convenio entre esa universidad y la U. A.
11
Para el caso del gobierno mexicano, existen instituciones que se han interesado en el
Proyecto, específicamente la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales
(SEMARNAT) a través de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas
(CONANP) y la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas
(CDI). La primera institución mencionada, está interesada en formar guías locales
especializados en turismo orientado hacia la naturaleza y, la segunda, en formar guías
locales especializados en turismo cultural.
En la Universidad Intercultural de Chiapas, como proyecto piloto se está
concluyendo el “Curso para la Formación de Guías Especializados en Turismo
Orientado hacia la Naturaleza”, que tiene como propósito fundamental trabajar en
las comunidades a través del ejercicio de la actividad como guías profesionales y
capacitar a la población local para la interpretación del patrimonio natural.
12
RESUMEN DESCRIPTIVO
INDICADORES
VERIFICABLES
OBJETIVAMENTE
FUENTES DE
VERIFICACIÓN
HIPÓTESIS
OBJETIVO
GENERAL
Incentivar la gestión local del turismo comunitario
preservando las culturas indígenas
Constancia de realización de las
actividades propuestas
- Universidad
Intercultural de
Chiapas
La formación en
turismo alternativo,
respetando la
identidad cultural,
puede ser la base para
el desarrollo local
comunitario
OBJETIVO
ESPECÍFICO
Lograr la sostenibilidad en el desarrollo turístico a
partir del conocimiento y proyección de los elementos
identitarios patrimoniales
Constancia de realización de las
actividades propuestas y
seguimiento
- Universidad
Intercultural de
Chiapas
- Comunidades
indígenas
RESULTADOS
Gestión del desarrollo turístico por parte de los propios
miembros pertenecientes a las comunidades locales, de
tal manera que, al mismo tiempo que la comunidad se
beneficia de la dinámica económica generada, pueda
mostrarse al turista la realidad, sin deformarla,
vinculando los elementos patrimoniales, tanto
culturales como naturales, a través de la interpretación
patrimonial.
Seguimiento del proceso y
evaluación del mismo en posteriores
visitas
- Universidad de
Alicante
- Universidad
Intercultural de
Chiapas
13
ACTIVIDADES
1.- Docencia a través de módulos específicos en la
Universidad Intercultural de Chiapas
2.- Prácticas de campo en comunidades
3.- Talleres en comunidades indígenas (guías y
artesanos)
Recursos
1.- Aulas en la UNICH
2.- Vehículos
3.- Locales en las comunidades,
medios técnicos (ordenador portátil
y cañón de proyección) y vehículos
Costes
1.- Profesorado de la
UA y de la UNICH
2.- Traslados y
alojamiento
3.- Equipos técnicos y
traslados a las
comunidades
14
5. Comentario final
El proyecto aquí presentado se aprobó en la Universidad de Alicante y está siendo
financiado, en parte, con los fondos 0,7 gestionados por la oficina de Cooperación y
Relaciones Internacionales de esta universidad; se puso en marcha en marzo de 2008,
aunque ya se había establecido un contacto previo con la Universidad Intercultural de
Chiapas relacionado con el ámbito de la investigación en antropología y turismo en la
zona.
Pensamos que en cinco años podremos empezar a sacar conclusiones sobre su
eficacia, de momento, los miembros de las comunidades visitadas están participando
y colaborando, con su apoyo y conocimiento, a la implementación del proyecto, como
lo demuestran las entrevistas en profundidad realizadas a los líderes comunales.
Los diferentes grupos étnicos que pueblan la Comunidad Lacandona son el motor del
desarrollo local en turismo; de ellos depende, en buena parte, que los resultados
económicos y socio-culturales, así como los impactos, incluido el físico, sean
fundamentalmente positivos. Ahora bien, la formación en los distintos campos del
sector turístico debe ser el punto de partida de posteriores acciones más específicas;
por ello consideramos que las Universidades pueden y deben tener un papel crucial
en la planificación y puesta en marcha de los proyectos de desarrollo local apoyados
por iniciativas de cooperación al desarrollo.
15
Referencias bibliográficas
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Universidad Nacional del Litoral. México. 2003
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Desarrollo turístico y sustentabilidad social, Orozco, J., Nuñez, P. y Virgen, C.R.
Coordinadores. Porrúa. México. 2008
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do Sul, Porto Alegre, nº 20, pp. 97-115, 2003
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(VV.AA.) Madrid. 1998
- SANTANA A.: Antropología y Turismo ¿Nuevas hordas, viejas culturas? Ariel.
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Síntesis. Madrid. 2000
Direcciones de internet
- GARCÍA CANCLINI, Nestor( s/f): La globalización y la interculturalidad
narrada por los antropólogos
http://www.colciencias.gov.co/seiaalcongreso/Ponen1/GARCIA.htm
16
- SANTANA TALAVERA, Agustín (2003): “Patrimonios culturales y turistas:
Unos leen lo que otros miran”. En Pasos, Revista Electrónica de Turismo y
Patrimonio Cultural (1-12), Vol. 1, Nº 1. www.pasosonline.org
- UNIVERSIDAD DE ALICANTE:
http://www.ua.es/es/internacional/prog07/objetivos.html
http://www.ua.es/es/internacional/prog07/cooperacion/cooperacion.html
Normativa sobre universidades y cooperación:
- Plan Director de la Cooperación Valenciana 2008-2011
- Ley 6/2007, de 9 de febrero, de la Generalitat Valenciana
- Ley 23/1998, de 7 de julio, de Cooperación Internacional para el Desarrollo
- Código de conducta de las universidades en materia de Cooperación al Desarrollo
- Estrategia de Cooperación Universitaria al Desarrollo (ESCUDE).
- Plan General de Cooperación al Desarrollo de la Generalitat 2007
1
Planteamientos operativos y tecnológicos aplicados a
la localización de actividades ecoturísticas1
Juan Antonio Arrebola Castaño2
Federico Benjamín Galacho Jiménez3
Anna Luque Gil 4
(Universidad de Málaga, España)
Resumen
El diseño de proyectos de ecoturismo para el desarrollo local en espacios donde estas
actividades aún no se han desarrollado debe conllevar unos trabajos previos de
conocimiento de la realidad territorial y social. Se expone la experiencia realizada en el
área geográfica de Valle de Bravo-Amanalco (México) y se hace mención a las tecnologías
utilizadas con referencia al diseño de un Sistema de Apoyo a la Decisión Espacial cuyo
objeto es modelar la realidad territorial y social del ámbito de estudio y servir como
sistema de ayuda a la decisión. El objetivo es disponer de los métodos y los instrumentos
necesarios para orientar las líneas estratégicas de actuación de los posibles proyectos y
adecuarlos a los recursos naturales y sociales. Por último, se exponen los problemas
principales encontrados y las soluciones generadas a los mismos.
Palabras clave: capacidad de acogida, ecoturismo, planificación y sistemas de apoyo a la
decisión.
1 Este trabajo se ha podido realizar gracias a las ayudas del Programa de Cooperación Interuniversitaria e Investigación Científica de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), que financió dos proyectos (A/6251/06 y A/9071/07) en sus convocatorias de los años 2006 y 2007, y cuya denominación es: Desarrollo de un Sistema de Apoyo a la Decisión Espacial para la planificación y gestión territorial a escala local del municipio de Valle de Bravo. Equipo de Investigadores del proyecto: por la Universidad de Málaga (España): Federico Benjamín Galacho Jiménez (Coordinador); María Luisa Gómez Moreno; Ana María Luque Gil, Carmen Ocaña Ocaña; Rafael Blanco Sepúlveda y Juan Antonio Arrebola Castaño. Por la Universidad Autónoma del Estado de México (México): José Francisco Ramírez Dávila (Coordinador), José Isabel Juan Pérez y Juan Campos Alanis 2 Becario Investigador. Departamento de Geografía, Universidad de Málaga; [email protected]. 3 Departamento de Geografía, Universidad de Málaga; [email protected]. 4 Profesor Contratado Doctor. Departamento de Geografía, Universidad de Málaga; [email protected].
2
1. El ámbito de estudio
Partimos de la consideración de que la implantación de iniciativas de desarrollo rural y
ecoturístico debe adecuarse a las características del medio y aportar beneficios al mayor
número posible de grupos humanos. El área de de estudio es un espacio de vocación
agrícola y ganadera pero con excepcionales recursos naturales y gran biodiversidad. En
ella se encuentra el núcleo principal de Valle de Bravo que sirve como reclamo turístico y
zona de establecimiento de segundas residencias en torno al embalse del mismo nombre.
Las iniciativas turísticas se han venido desarrollando de modo improvisado y no
planificado, lo que está produciendo una serie de problemas que deterioran los propios
recursos y no benefician a los grupos humanos presentes en la zona que ven que sus
precarias condiciones de vida se acentúan, fundamentalmente al producirse una lucha
desigual por la propiedad y el uso de la tierra y al confluir cada vez más intereses
económicos. Esta situación está generando que una vez más sean los más desfavorecidos
los más perjudicados con lo que muchos efectivos humanos se han visto obligados a
emigrar y que en el modelo de ocupación territorial se torne desordenado y altamente
impactante. Junto a ello, es característico un déficit de infraestructuras importante, lo
que condiciona los nuevos proyectos. Todo ello está amenazando un posible modelo de
desarrollo equilibrado en lo ambiental, en lo social y en lo económico, ya que los cambios
que se producen son radicales y no son fruto de una implantación ordenada de las
actividades.
2. Planteamiento operativo de trabajo
En el proyecto se establecieron distintas fases. Se partió de una primera fase cuyo
objetivo era el diseño de metodologías para el diagnóstico respecto a tres ámbitos
temáticos: la identificación de la problemática ambiental, el diagnóstico de la situación
social y la evaluación de los recursos naturales con posible uso ecoturístico. Una segunda
fase consistió en diseñar una Sistema de Información Geográfica en el que introducir y
manejar toda la información recabada, cuyo objeto principal era disponer de un
3
instrumento informático que asistiese en los procesos de diagnóstico, y a su vez, fuese la
base de un posterior sistema de ayuda a la decisión. Con la ayuda de este instrumento y
basados en los resultados de los trabajos mencionados en la primera fase se procedió a
definir una serie de unidades espaciales en función de las interacciones entre el hombre y
el medio, lo que permitiría integrar los resultados del análisis DAFO en los aspectos
social y ambiental, además de inventariar los recursos naturales, para finalizar
localizando sobre el territorio las líneas de actuación.
En la tercera fase se procedió al establecimiento de las líneas básicas de generación de
propuestas y al diseño de un Sistema de Ayuda a la Decisión Espacial en el que probar y
simular sobre el territorio dichas propuestas.
2.1 Diseño de metodologías para el diagnóstico
a. Identificación de la problemática ambiental
Se elaboraron un conjunto de indicadores de desarrollo sostenible mediante los cuales
medir la situación medioambiental respecto a la configuración de las actividades
económicas que se desarrollan actualmente en la zona objeto de estudio. Con ellos
también se procedió a identificar la problemática ambiental. Se establecieron dos tipos
de indicadores: unos que se sirvieron para evaluar el grado de desarrollo y gestión de los
ámbitos de carácter más urbano y turístico (agua, residuos, contaminación, energía,
ecosistema, alojamiento, infraestructuras, ocio, etc.) y los que se encargaron de la
evaluación de la situación de los ámbitos menos ocupados, con mayor presencia de
recursos naturales. La combinación de ambos grupos de indicadores nos proporcionaría
una idea de la situación ambiental en función de las actividades desarrolladas
(agricultura, actividades recreativas, etc.) y de la accesibilidad y el uso de las áreas
naturales.
4
b. Diagnosis de la situación social
La planificación física y el desarrollo endógeno se integran bajo una escala de detalle, en
este caso, la local. De acuerdo a ello se tienen en cuenta las capacidades locales en su
origen y las iniciativas relacionadas con los propios recursos físicos y humanos. En
definitiva, se busca la evaluación de los recursos humanos disponibles y la determinación
del grado de implicación de los grupos humanos en el diseño y participación en
proyectos de desarrollo ecoturístico. El proceso metodológico establece en este apartado
dos tipos de actuaciones: la cuantificación de los recursos humanos y el diseño de trabajos
sociológicos para el conocimiento de aspectos básicos como la percepción de los recursos
por parte de la población autóctona y sus expectativas ante posibles proyectos de
desarrollo.
c. Inventario y evaluación de los recursos naturales de potencial uso ecoturístico
En este punto se acometieron varias tareas: en primer lugar, se inventariaron los recursos
naturales en función de sus condicionantes de singularidad y posible utilización por
parte de unos determinados tipos de demanda turística (los interesados en actividades
recreativas y deportivas en la naturaleza y los interesados en aspectos etnográficos y
culturales). En segundo lugar, se clasificaron los recursos inventariados a varios niveles
(naturaleza, tipo, subtipo 1 y subtipo 2), para precisar con exactitud su tipología; se
realizó una ficha de inventario individual, aplicando el diseño propuesto por Leno Cerro
(1993). En tercer lugar, se normalizó y homogeneizó la información recabada para su
posterior introducción en un Sistema de Información Geográfica. Y en cuarto lugar, se
realizó un inventario de los equipamientos e infraestructuras de uso ecoturístico.
5
2.2 Diseño del Sistema de Información Geográfica y reconocimiento de
unidades espaciales de actuación
El SIG se constituye en la base de todo el proyecto. Su propósito principal ha sido que
desempeñe un papel activo en el suministro de información interrelacionada que facilite
las respuestas a los problemas de estudio planteados. Este propósito ha sido desarrollado
a través de un planteamiento programático continuo de investigación, recopilación,
organización, análisis y desarrollo de la información o los datos. En la preparación de
este proceso conceptual y luego para su ejecución se ha requerido prever una serie de
pasos básicos. De estos pasos, en cada momento, se ha esperado obtener una serie de
resultados, antes de pasar a fases posteriores.
Como primer paso, ha sido necesario realizar un inventario de los datos existentes,
donde se ha definido su origen y utilización, lo que ha determinando el método de
captura. Esta es una cuestión fundamental para llegar a un diseño del modelo de la base
de datos más en consonancia con las necesidades propias de las posibles aplicaciones que
desarrolle el sistema. Para mayor operatividad del proyecto de investigación que ha dado
lugar a la aplicación que estamos describiendo, se ha optado por la captura o adquisición
de las capas de información desde distintas fuentes, ya en formato digital, reduciendo los
procesos de digitalización a lo estrictamente necesario. No obstante, la procedencia de
información de distintas fuentes ha obligado a un trabajo de adecuación de escalas y
control de calidad de la misma. No vamos a insistir aquí en la problemática que aún hoy
presentan los datos geográficos, sobre todo, en lo que a su calidad se refiere, pero sí
queremos mencionar una cuestión relacionada con ellos: la escasa aplicación real y
práctica de normas de estandarización de la información geográfica que faciliten a los
usuarios su manejo e integración. Existe un gran desfase entre “teoría” y “práctica” en lo
que se refiere a la producción de los datos que posteriormente pasarán a formar parte de
las bases de datos de los distintos usuarios.
El montaje del sistema sigue un desarrollo continuo que se puede reformular en función
de nuevas necesidades, partiendo de las bases de datos y cartografía iniciales, ésta se
procesa combinándose o integrándose en nuevas capas.
6
Una vez definida la estructura y la información a introducir en el SIG se procedió con
ayuda de este instrumento a definir las unidades espaciales de actuación en función de la
relación entre el hombre y el medio.
2.3 Definición de las líneas básicas de generación de propuestas
Tras la elaboración de los diagnósticos en base a las metodologías propuestas, se confirma
una compleja situación en la que sobresalen importantes impactos ambientales, tensiones
territoriales y precaria situación social; aunque también sobresalen unos recursos naturales
excepcionales, importantes valores etnográficos y una población autóctona de importante
acerbo cultural pero gran desarraigo social.
Con esta base se realiza una orientación general de posibles propuestas (objetivos
adecuados, tareas de actuación, fuentes para obtener información y resultados),
estudiándose los requisitos para formalizar proyectos conformes al desarrollo económico
y a la preservación ambiental, diseñando estrategias para la gestión sostenible del medio
natural, rural y humano, y como establecer los tipos de actividades ecoturísticas, una vez
localizadas las zonas y los recursos naturales y humanos idóneos.
3. Diseño de un sistema de ayuda a la decisión espacial: Una
herramienta geoinformática de apoyo a la toma de decisiones
Se ha diseñado un Sistema de Apoyo a la Decisión Espacial Distribuido (SADED) para
el proceso de evaluación de la capacidad de acogida del territorio para los usos
ecoturísticos. En este sistema se combinan las capacidades de procesamiento de
información de los SIG con los métodos y técnicas (en nuestro caso, técnicas de
evaluación multicriterio) que definen los procesos que darán lugar a la aplicación
diseñada, cuyos fundamentos se encuentran en Ocaña y Galacho (2002), Manceras et al
(2002), Ocaña, y Galacho (2003), Galacho et al (2004) y Ocaña et al (2004).
7
Los fundamentos de aplicación que definieron esta herramienta geoinformática fueron;
la necesidad de ordenar los usos del medio mediante evaluación de las aptitudes del
territorio y de sus posibles impactos, el interés de evaluar condiciones particulares del
medio en orden a la mejor estimación de sus posibilidades, el interés de realizar
evaluaciones basadas en juicios de valor razonadas en atributos concretos del territorio y
el interés en establecer simulaciones y diferentes escenarios de actuación mediante una
herramienta interactiva, que permita reflexionar y conocer el campo de actuación.
El diseño del sistema se realiza a través de una arquitectura en tres niveles o módulos,
con la finalidad de dotar a la herramienta de mayor flexibilidad y escalabilidad para dar
servicios Web. Dichos módulos o niveles se comunican mediante lenguaje XML, lo que
abre las posibilidades de la herramienta para ser combinada con otras aplicaciones. Los
niveles mencionados son (Galacho et al (2004)):
1. Sistema de Información Geográfica (Módulo SIG), donde se trabajan y almacenan los
datos originales, además de los resultados de la evaluación de los factores que forman
parte del proceso, aptitud, impacto y restricción. Se combinan las herramientas que nos
facilitan las Tecnologías de Información Geográfica.
2. Plataforma de Evaluación Multicriterio (Módulo PEM), se localizan aquí los
programas de aplicación que gestionan y evalúan los datos y las operaciones. Esta
plataforma es una herramienta informática abierta, haciendo asequible el complejo
sistema de manejo y evaluación de las bases de datos del Sistema de Información
Geográfica y donde se puede configurar la evaluación multicriterio de forma fácil y
cómoda. Se definen aquí unos modelos de evaluación que pueden ser aplicados por
distintos usuarios al poder ser matizados de acuerdo a sus preferencias. El sistema está
diseñado para ser accesible a través de Internet, de manera que distintos usuarios
puedan realizar evaluaciones del territorio personalizadas. Se ofrecen además un
conjunto de funciones y operaciones propias de tratamiento de datos y que fueron las
que generaron las capas de información que alimentan al sistema de evaluación.
8
3. En un tercer nivel se sitúa un Servidor de Interfaz de usuario (Módulo SIU), consta
de un interfaz con el navegador, gestiona la apariencia visual y el interfaz de acceso a
través de la Web, lo ejecuta el usuario y facilita la realización de las aplicaciones y
configuración de los procesos de evaluación. Es el encargado de la comunicación con los
usuarios y permite, tanto mostrar las evaluaciones del territorio disponibles, como
interactuar con las evaluaciones a los usuarios, con independencia de su nivel de
conocimiento, siendo asequible para cualquier usuario. Aunque las posibilidades del
módulo dependen de si son expertos o no, el experto configura la abstracción de la
evaluación territorial, las capas y variables que intervienen, en qué orden se evalúan y
cual es la ponderación entre ellas, además de cuáles son las opciones de elección,
mientras que el usuario no experto puede elegir qué evaluación hacer y dar valor a las
variables que les deja abiertas la evaluación, obteniendo un mapa donde aparecerán las
distintas zonas del territorio puntuadas según su adecuación a la evaluación, para llegar a
esa evaluación, en el motor de cálculo PEM, las variables van siendo evaluadas entre ellas
según la especificación de la evaluación. Es el interfaz SIG quien descompone la
especificación de la evaluación, en las operaciones básicas que proporcione la librería
SIG sobre la que se está ejecutando. Dicha interfaz obtiene los datos del SIT. Para
obtener el resultado final, se van agrupando los resultados parciales que son a su vez
nuevas capas o variables de información. Finalmente, obtendremos una capa que
representa el resultado de la evaluación.
9
Figura 1. Esquema lógico del sistema. Elaboración Propia.
La lógica del modelo de evaluación no es construir un proceso cerrado, formulando un
objetivo de la valoración y obteniendo un mapa final. Su lógica interna, en la que se
avanza en la construcción de la valoración con una desagregación muy elevada de juicios
parciales, lo convierte en una herramienta dúctil con la que interactuar, capaz de
reorientar la evaluación de acuerdo a nuevos requerimientos para ser usado en otros
cometidos. Habiéndose establecido los pilares fundamentales de una política de
planificación y gestión territorial apoyada en este tipo de herramientas e instrumentos
de carácter científico.
El modelo informático mide comparativamente la capacidad de cada punto del
territorio, como una relación entre aptitud y vulnerabilidad conforme a unos objetivos
concretos, planteados por el usuario. La puesta en marcha del sistema genera un
importante aporte de información, que debe ser transformado, de la realidad a
información útil, haciéndolos manejables y comprensibles.
10
4. Conclusiones
Como primera conclusión respecto a los planteamientos operativos, para llevar a cabo la
elaboración del proyecto existe dificultad en la obtención y homogeneización de
información:
- Incompleta red de datos cartográficos, lo que dificulta el objetivo general de desarrollo
de un sistema geoinformático basado en SIG.
- Criterios y variables. Ausencia de información de muchos aspectos básicos y esenciales
para la gestión ambiental.
Como segunda conclusión, las fructíferas reuniones y el intercambio de información,
han facilitado el conocimiento de la situación actual del área de estudio. El acercamiento,
a los problemas relacionados con el proyecto facilita la toma de decisiones para
solucionarlos.
Como reflexión general se entiende que con los proyectos de cooperación se inician unos
procesos de comunicación, que no deben centrarse en la duración estipulada para el
proyecto, si no que deben mantenerse, extendiéndose en sucesivos proyectos o
desarrollos.
Respecto a los planteamientos tecnológicos, se concluye que ha primado el interés en
conseguir hacer un sistema accesible, a los grupos y actores sociales interesados en
iniciativas de desarrollo local o ecoturístico, pese a existir problemas para la puesta en
marcha de iniciativas de este tipo, debiéndose esto a:
- Recursos económicos dedicados a otras necesidades. Existen problemas de mayor
prioridad, que dejan este tipo de iniciativas de innovación sin inversión económica para
su desarrollo.
- Existe déficit de infraestructura informática y de telecomunicaciones para la utilización
y puesta en marcha de las herramientas informáticas diseñadas.
- Escasa disponibilidad y difícil acceso a la información territorial digitalizada, con gran
desconocimiento de los datos disponibles o escasez de los mismos.
11
- Ausencia de personal formado en estas tecnologías y lógico desconocimiento de la
utilidad y existencia de tales herramientas e instrumentos.
Figura 2. Causas y relaciones del difícil acceso a estas tecnologías. Elaboración Propia.
Pero, a favor se cuenta con la gran accesibilidad a Internet, lo que supone un enorme
potencial debido a la creciente demanda de información geográfica por usuarios no
especializados, ofreciendo un producto cartográfico digital ligero, pero con precisión
científica basada en las TIG. El usuario se libra de la complejidad que caracteriza a estos
sistemas y a la información territorial en sí misma. Se pone al alcance de los usuarios,
abundante y diversa información, consiguiendo su familiarización con conceptos
espaciales que resultan de difícil comprensión para un público poco especializado.
Déficit Informático
Información No Digitalizada
Personal Sin Formación
Escasez de Recursos
Económicos
Desconocimientode estos
Instrumentos
12
Bibliografía
- Barredo, J.I. (1996). Sistemas de información geográfica y evaluación multicriterio en la
ordenación del territorio. Ra-Ma. Madrid.
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las TIC en la Cooperación Española. Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación.
Madrid.
- Secretaría de Estado de Cooperación Internacional (2007). Estrategia de Medio
Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Cooperación Española. Ministerio de Asuntos
Exteriores y Cooperación. Madrid.
1
La Cooperación Intergubernamental en apoyo al
desarrollo sustentable en las zonas turísticas de
Quintana Roo
Adela Vázquez Trejo
(Universidad de Quintana Roo, México)
Resumen
El trabajo describe los programas recientes que se están llevando a cabo para impulsar
el desarrollo sustentable en las áreas turísticas del Estado de Quintana Roo. Se aborda
brevemente el contexto en el que se hace necesaria la participación de la cooperación
internacional, sobre todo la de tipo gubernamental y las áreas en las que se concentra en
el caso de México. Se destacan las medidas y las acciones que realizan las autoridades
municipales y estatales, derivados de los acuerdos con las agencias de cooperación
internacional, prevenir y atender los problemas relacionados con los Residuos Sólidos
Urbanos (RSU), siempre con el apoyo de la Agencia Alemana de Cooperación Técnica
y la participación de organizaciones de la sociedad civil interesadas en mantener un
medio ambiente sano.
Palabra clave: Cooperación internacional, ambiente, residuos sólidos urbanos (RSU)
2
Introducción
Los estudios realizados en el campo de las ciencias sociales muestran que históricamente
la cooperación internacional ha llegado a los países subdesarrollados para atender
problemáticas diversas, esencialmente para colaborar en la solución de problemas
relacionados con la pobreza y la marginación; sin embargo, al tomar relevancia mundial
la cuestión ambiental vemos que poco a poco se va destinando mayor cooperación
internacional para diversas iniciativas que se orienta a la atención de los asuntos
ambientales en los países menos desarrollados. Esta cooperación ambiental se manifiesta
en años recientes y abarca diversas modalidades como la donación, asociación y ayuda
oficial al desarrollo. Este es un fenómeno muy común en los países latinoamericanos y
caribeños, que es entendible por los pocos recursos financieros disponibles
encaminados a sanear las expresiones del deterioro ambiental.
Interesa exponer en este documento como se ha realizado la cooperación
intergubernamental para apoyar el desarrollo en Quintana Roo, México. Se revisará la
presencia de los agentes cooperantes y su aplicación en la esfera ambiental, lo logrado y
los actores involucrados en sus actividades.
En la revisión del panorama regional de la cooperación internacional, se menciona como
ha sido la trayectoria de algunos agentes de la cooperación y como se caracterizan sus
estrategias; tendremos presente que la Cooperación Internacional para el Desarrollo
proviene de dos fuentes centrales: La Cooperación Técnica Internacional y La
Cooperación No Gubernamental. En este caso, se destaca la primera, ejercida a través de
diversos medios como son las agencias gubernamentales.
En los estudios sobre la cooperación internacional se menciona lo importante que es el
papel de las organizaciones multilaterales para apoyar a países como México al
beneficiarlo como receptor de cooperación y en otros casos como socio.
3
1. La cooperación internacional para el Medio ambiente en
América Latina
Las condiciones de atraso y subdesarrollo que predominan en América Latina y la
urgencia de atender los efectos del deterioro ambiental, genera que los países busquen
caminos innovadores para cumplir con los compromisos de la Agenda 21, capítulo 17,
que señala como tarea de las naciones propiciar el manejo sustentable de las costas y los
océanos; asimismo, entre los objetivos de Desarrollo para el Milenio ( ONU) se señala
que es necesario garantizar la sustentabilidad del medio ambiente y fomentar la
asociación mundial para el desarrollo, en ese sentido, las actividades realizadas con el
apoyo de la cooperación internacional en los países latinoamericanos también deben
orientarse al cumplimiento de estas metas.
El tema de la cooperación internacional ambiental tomó vigencia en los años noventa,
justamente durante los preparativos para la Cumbre Mundial sobre Medio Ambiente y
Desarrollo que se realizó en 1992 en Río de Janeiro, Brasil. A esta reunión asistieron
representantes gubernamentales de los países del Norte y Sur (más de 150), para
plantear los problemas relativos al ambiente y al desarrollo, pero también para asumir
compromisos colectivos, pues el panorama mundial daba luces de que la crisis ambiental
requería de un frente amplio, diverso y decidido para emprender medidas y programas
ambientales. En esa conferencia se adoptaron un conjunto de principios básicos y
planes de acción tanto en el orden general como en el regional para buscar la solución a
las principales problemáticas que afectan el lazo entre el medio ambiente y el desarrollo.
A inicios de los noventa, el interés gubernamental en América Latina sobre el tema
ambiental no era generalizado; sólo se atendían problemas relacionados con la
contaminación del aire en las ciudades. Los países se interesaban poco en conocer sobre
4
el impacto ambiental de las actividades productivas1. La misma suerte tenía el tema
sobre el agotamiento y disposición de los recursos naturales, o sobre los impactos en el
ambiente por la acumulación de los desechos tóxicos en las metrópolis con gran
desarrollo industrial. Los centros de investigación nacionales y las tendencias de los
estudios regionales no enfatizaban el tema ambiental en sus agendas. Son escasos los
estudios, dentro de las Ciencias Sociales, que de manera seria y profunda abordan el
asunto ambiental en los años setenta y ochenta, el de mayor trascendencia es el que
realizan Oswaldo Sunkel y Nicolo Gligo (1980)2 con un gran proyecto al interior de la
Comisión Económica para América Latina (CEPAL), que analizaba el desarrollo que
imperaba en la región y los costos ambientales que eran evidentes por el curso que había
tomado la industrialización.
Por otra parte, en el terreno de las acciones regionales los vínculos entre gobiernos se
habían concentrado en programas de cooperación que brindaban asistencia científica y
tecnológica con énfasis en asuntos económicos, dejando en el olvido proyectos que
atendieran temas relacionados con el ambiente. La posibilidad de unir esfuerzos para
enfrentar los síntomas de una palpable e irremediable crisis ecológica era apenas
mencionada en las reuniones de los organismos regionales y prácticamente ausente en las
agendas bilaterales. Poco a poco este contexto ha cambiado y hoy ya existen ejes
rectores en las políticas ambientales en la mayoría de los países, y se brinda tiempo y
recursos a las acciones colectivas.
Al considerar la dimensión ambiental en el proceso de desarrollo latinoamericano se
llega también al reconocimiento de la heterogeneidad ecológica de la región pues la
fragmentación de ecosistemas y hábitats es una de las principales amenazas para la
1 Un ejemplo de este desconocimiento es el relacionado con la evaluación del impacto ambiental ( EIA), ésta se refiere a los efectos negativos, alteraciones físicas, biológicas o químicas que pueda sufrir el "medio ambiente" como resultado de las actividades humanas. En muchos países de la región la evaluación del impacto ambiental que tendrán las obras a realizarse se ha hecho obligatoria para los proyectos privados y públicos. En la actualidad, las leyes ambientales que hacen referencia a la EIA en los países latinoamericanos se promulgaron durante los años noventa, a saber: Argentina, 1990; Paraguay, 1993 (Ley 294); México, 1996; Bolivia desde 1992; Uruguay, 1994 y Chile en 1994. Sólo Brasil la contempla en su Ley ambiental nacional desde 1988. 2 Los autores llevaron a cabo un proyecto de investigación auspiciado por la CEPAL, durante los años 1978-1980, que fue pionero en llamar la atención sobre la relación ambiente-desarrollo; el resultado fue la obra Estilos de Desarrollo y medio ambiente en la América Latina, (1980), FCE, México.
5
biodiversidad, se advierten las diferencias entre los recursos naturales que posee cada
país, su problemática específica y sus posibilidades de solución; como consecuencia de
este reconocimiento se vislumbra un nuevo camino con la cooperación ambiental,
aunque falta mucho por hacer en el contexto regional.
Sobre el tema, Urquidí (1994) señaló:
[...] no cabe duda de que las nuevas consideraciones ambientales,
vinculadas al concepto cada vez más aceptado de ‘desarrollo
sostenible ‘ o ‘sustentable ‘, van a ser paulatinamente más
importantes en la determinación de la convivencia internacional.
De ello podría surgir un nuevo tipo, con nuevas modalidades, de
cooperación internacional, con fuerte acento en el adiestramiento
y la educación general y en la transferencia de tecnologías, que
abarque todos los aspectos interrelacionados y beneficie a los
‘desiguales’ y no sólo a los ya adelantados (...) Evitar la
degradación ambiental y, a la vez, promover el desarrollo [...]
será, sin duda, uno de los grandes dilemas de los próximos
decenios.
Un principio importante que sirve como punto de partida en este ensayo, es que
debemos entender a la cooperación como un instrumento de política internacional, que
ha estado asociada tradicionalmente a los temas de la integración económica y de
promoción de inversiones pero hoy la encontramos vinculada de forma directa con la
protección del medio ambiente. A finales del siglo XX, la esfera ambiental estaba aislada
o minimizada; al respecto, señalaba la CEPAL (1997) “la política y las estrategias de
desarrollo son miradas únicamente bajo la racionalidad económica, desconociendo la
importancia que tiene el entorno físico como espacio de desarrollo de la sociedad y el
comportamiento sistémico que tiene el medio ambiente”.
6
Al respecto encontramos que el problema ambiental en la región se le ha dado un
tratamiento colectivo, derivado de acuerdos y convenios internacionales de carácter
multilateral3, y esta estrategia ha sido la más utilizada por las naciones latinoamericanas.
Privilegiar la cooperación antes que el enfrentamiento entre las naciones es plantear la
existencia de muchos puntos en común, basada en el apoyo mutuo y orientado por un
interés colectivo para solucionar las diversas problemáticas que se presentan en el
escenario mundial y regional.
La cooperación ambiental que se está dando entre los países, tanto en la esfera
multilateral como bilateral, es un tema atractivo para los estudiosos de la realidad
latinoamericana; asimismo, los actuales programas de cooperación ambiental con apoyo
internacional aparecen como nuevos instrumentos en este largo camino de búsqueda de
alternativas para atender los problemas del desarrollo; actualmente, la tarea incluye
otras variables como la protección de recursos naturales, la preservación del ambiente en
general y el aseguramiento de mejores condiciones de vida para un mayor número de
habitantes. Encontramos en el contexto regional cada vez más acuerdos de cooperación
internacional para proteger los ecosistemas; más organismos intergubernamentales
participan de la preocupación y acciones en defensa del ambiente; se disponen de apoyos
financieros para fomentar y aplicar proyectos ambientales en naciones en desarrollo, no
obstante, como señalan los estudiosos “en muchas ocasiones, la colaboración y
cooperación para la protección del medio ambiente se ha visto entorpecida” ( Pacheco y
Vega, 2003:409).
3 Entre los acuerdos, tratados y convenciones multilaterales de mayor importancia para la región, tanto por el ámbito que tratan como por los miembros se encuentran: Acuerdo Internacional sobre maderas tropicales ( Ginebra, 1983); Convención sobre diversidad biológica ( Río De Janeiro, Junio 1992); Convenio de Basilea sobre el control de los movimientos transfronterizos de los desechos peligrosos y su eliminación (Basilea, Marzo 1989); Convenio sobre pueblos indígenas y tribales en países Independientes (Ginebra, 1989); Convenio Marco de las Naciones Unidas sobre el cambio climático (Nueva York, 1992); Convenio para la Protección y el desarrollo del medio marino de la región del Gran Caribe (Cartagena de Indias, Marzo 1983); Convenio sobre el comercio internacional de especies amenazadas de fauna y flora silvestre (CITES) (Washington, 1973); Protocolo de cooperación para combatir los derrames de hidrocarburos en la región del Gran Caribe (Cartagena de Indias, Marzo 1983); Tratado de Cooperación Amazónica (Brasilia, Junio 1978).
7
En cuanto a los estudios sobre la cooperación ambiental, se conocen dos enfoques que
plantean formas diversas de abordar y proponer alternativas para la conservación del
medio ambiente. Una vertiente señala que debe darse un tratamiento internacional a
dichos problemas, en donde participen países del Norte y el Sur, y otra que se centra en
el tratamiento nacional con la participación de los sectores público y privado, incluyendo
a las organizaciones no gubernamentales y basado en las necesidades económicas y
sociales internas.
Para comprender la importancia que ha tenido la presencia de las agencias de
cooperación internacional, a través de las agencias nacionales (no exclusivamente
gubernamental, pues casi siempre hay participación de la iniciativa privada) he
seleccionado un caso, sólo como ejemplo, para mostrar las áreas a las que llegan los
recursos internacionales y los proyectos que se impulsan con una visión de contribuir al
desarrollo local.
Dentro de las agencias nacionales de cooperación internacional destaca el caso de la
Agencia alemana para la cooperación técnica internacional (Deutsche Gesellschaft für
Technische Zusammenarbeit) (GTZ, por sus siglas en inglés) que actúa en los diversos
países a nombre del Ministerio Federal Alemán de Cooperación Económica y Desarrollo.
En los convenios que firma con otros países se hace constar que GTZ es “una empresa
que actúa por encargo del Ministerio Federal De Cooperación Económica y Desarrollo
y otros Ministerios del Gobierno alemán. Gobierno de otros países, organismos
internacionales como la Comisión Europea, la ONU y el BM, así como del sector
privado” ( GTZ, 2008).
En la información oficial del gobierno alemán se señala que los objetivos de la GTZ
dentro de una política de desarrollo es brindar soluciones viables en áreas de política,
economía, ecología y desarrollo social en un mundo globalizado. Su objeto social es
mejorar las condiciones de vida de las personas sobre una base sostenible.
8
Por definición, la cooperación técnica es aquella “donde los donantes buscan mediante la
asesoría y la transferencia del expertise, el desarrollo de habilidades y capacidades
nacionales para el mejor manejo de los recursos naturales” (Schmuckler, Ayala y
Sánchez, 2008:163).
1.1 Presencia de GTZ en América Latina
GTZ tiene oficinas en 16 países de la región latinoamericana y su presencia toma
diferentes formas de cooperación entre las que destacan: a) Cooperación bilateral para el
desarrollo como es el caso de la cooperación bilateral que realiza con Brasil y Chile, que
aborda diferentes ámbitos del desarrollo. También ensaya otras formas ampliadas de la
cooperación como la que realiza con el proyecto “La gestión sostenible de los recursos
naturales en el Gran Chaco Sudamericano (Argentina, Bolivia, Paraguay)”. Otra forma
de cooperación es: b) en forma de asociación, como es el caso de Costa Rica, Bolivia y
Colombia.
La agencia alemana participa también en programas de combate a la pobreza o en
asuntos de la gestión pública en general como es el caso de Bolivia donde tiene el
proyecto “Gobernanza descentralizada y de Apoyo a la Reducción de la Pobreza”.
Además, la GTZ ha impulsado una variable de cooperación en donde participa la
iniciativa privada del país receptor, (Proyectos con Participación Privada- PPP). Los
países en donde opera proyectos con participación privada (PPP) son Ecuador,
Guatemala, el Salvador, Haití, Honduras y México.
1.2 Cooperación con México
Desde 2005, GTZ viene realizando el programa “Gestión Ambiental y Manejo
Sustentable de Recursos (2005-2009)” con el gobierno mexicano; de aquí se derivan
varios proyectos en los ámbitos federal, estatal y municipal.
9
En la Cooperación Alemana para el Desarrollo, la GTZ trabaja cercanamente con los
siguientes ministerios del gobierno mexicano:
o Secretaría de Energía, SENER, con el proyecto “Promoción de
Energías Renovables y eficiencia Energética”.
o Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales,
SEMARNAT, con el proyecto “ Información y Monitoreo Ambiental” y “
Gestión Integral de Residuos Sólidos y sitios Contaminados”
También trabaja con dependencias estatales representantes de estos mismos sectores,
como es el caso del Convenio de cooperación con el gobierno del Estado de Quintana
Roo para la gestión integral de los residuos sólidos en la entidad y que se realiza a través
de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente y la Secretaría de turismo.
Consultado en www.giresol.org/ (on line) ( 30/06/2009)
2. GTZ y su participación en el desarrollo sustentable de las
zonas turísticas de México
Después de publicada la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos
en México (DOF, octubre 2003), y reformada en 2007, a nivel nacional se hizo necesario
tejer un compromiso de todos los niveles de gobierno para cumplir este mandato y
atender el problema de los residuos sólidos en los estados. Se busca el apoyo de los
países que han tenido experiencias más exitosas y de los que cuentan con la tecnología
apropiada para el asunto de la gestión de los residuos sólidos urbanos (RSU), en este
tema destaca el gobierno alemán, quien a través del Ministerio de Cooperación
Económica y Desarrollo colaboró con nuestro país para elaborar La Guía de
cumplimiento de la Norma 083- SEMARNAT-2003,( SEMARNAT, 2004).
A lo largo de los últimos diez años, GTZ ha puesto en marcha otros proyectos en
nuestro país como los siguientes:
El desarrollo sostenible de zonas áridas y semiárida.
10
Protección del medio ambiente industrial y urbano.
Proyecto para aumentar la productividad y la eficiencia
energética en la Argentina, las PYME.
Gestión de Residuos Peligrosos.
Proyecto de preservación de la biodiversidad.
La protección del medio ambiente y la gestión sostenible de
los recursos naturales.
2.1. Acción Local: costas de Quintana Roo
Existen dos razones que explican por qué Quintana Roo recurrió a la cooperación
internacional para el asunto de los residuos sólidos, a saber: 1) por la creciente
contaminación del medio ambiente en las zonas densamente pobladas y 2) por el
deterioro que causa la carencia de servicios urbanos en los centros turísticos, los cuales
no son eficientes ni debidamente planeados.
Años antes, la GTZ había tenido la experiencia de participar en un proyecto orientado
al manejo y explotación de los recursos forestales tropicales de Quintana Roo, conocido
como Acuerdo-GTZ y agente central del Plan Piloto Forestal (PPF), el cual “estuvo
formado por ejidos, organismos gubernamentales y no gubernamentales, unidos por un
compromiso hacia un esquema coordinado para organizar la forestería comunal y recibir
apoyo técnico y financiero de diversas fuentes externas” y que operó de 1983 a 1998
(González, 1999-2000:).
En la última década la cooperación bilateral entre México y Alemania se ha concentrado
en atender problemas ambientales y en la gestión de los recursos. Cabe recordar que la
participación de la Agencia Alemana de Cooperación Técnica Internacional se ha
dejado ver en todos los ámbitos de gobierno, tanto federal como estatal y municipal. En
años recientes, México ha recibido asistencia y apoyo de GTZ para el desarrollo de
proyectos en el manejo de desechos sólidos y se orientan a las siguientes tres áreas: los
residuos y la gestión de los sitios contaminados, las energías renovables, y la información
11
ambiental y monitoreo, estos programas se han concentrado en la zona norte de
Quintana Roo que es donde se localiza la mayor parte de la actividad turística;
autoridades estatales declaran que “Como Gobierno Estatal estamos buscando
mecanismos para apoyar a los Gobiernos Municipales sobre quienes recae directamente
la responsabilidad del manejo de los Residuos Sólidos de acuerdo al artículo 115
constitucional y una de las áreas es a sentar (sic) las bases de colaboración entre todos los
sectores” (Sin Fronteras. (2008). Disponible en:
http://sinfronterasplaya.com/nota1/FIRMA-CONVENIO-COLABORACIN.php).
A continuación se describe brevemente un panorama del contexto en que ha operado la
cooperación con GTZ.
2.2. El problema de la generación de residuos sólidos urbanos (RSU)
Quintana Roo, estado mexicano que basa su economía en el sector terciario,
fundamentalmente en servicios turísticos, tiene aproximadamente, 1, 134 000
habitantes y su área turística se localiza fundamentalmente en los municipios de Benito
Juárez y Solidaridad. La gran riqueza biológica concentrada en su selva y costas, más la
belleza de sus playas y la cercanía con la segunda barrera arrecifal más grande del mundo
le brindan todavía un gran potencial turístico al Estado que actualmente aporta el 11.3
% del PIB turístico nacional; a nivel estatal el turismo emplea al 18 % del total de
población empleada. (Base de datos INEGI, 2005).
El municipio de mayor importancia por sus servicios turísticos y su concentración de
población en el Estado de Quintana Roo se llama Benito Juárez, cuenta con el 44 % de la
población total del estado y más 200 mil personas consideradas como población flotante
mensual. A este municipio pertenece la Ciudad de Cancún y es el polo turístico más
poblado y dinámico del Estado (siguiéndole en importancia Playa del Carmen y
Cozumel) en esta demarcación el asunto de la generación de residuos sólidos urbanos
es un problema añejo. El crecimiento poblacional atribuido a la atracción que tiene la
actividad turística ocasionó que se rebasaran los planes de desarrollo urbano, y un
ejemplo claro es la producción diaria de desechos sólidos que se encuentra entre 1.48 y
12
1.66 kg/persona, muy por arriba de la media estatal que es de 87 kg/persona. (con una
distribución porcentual promedio de 50% de plásticos, 20% de electrónicos, 15% de
vidrio y 15% de material orgánico).
Basurero a cielo abierto, México, 2009
En ese sentido, la GTZ en su programa de cooperación con el Gobierno de Quintana
Roo ha contribuido a la elaboración de la normatividad como lo es la Ley Estatal para la
Prevención y Gestión Integral de Residuos Sólidos del Estado de Quintana Roo (publicada
en diciembre 2007) y otras disposiciones jurídico administrativas relacionadas con la
gestión integral de los residuos sólidos urbanos, además de asesoría técnica para el
diseño de rellenos sanitarios en los municipios del Norte del Estado que incluye Benito
Juárez, Solidaridad, Cozumel y Lázaro Cárdenas. Desde 2007 se impulsa una estrategia
de cooperación que ha logrado involucrar al sector hotelero en la gestión integral del
residuos sólidos; de igual manera se busca el contacto con los empresarios en general
para diseñar un Proyecto de Participación Privada (PPP) enfocado a la recuperación de
los RSU y destinarlos a su reciclaje y usos alternativos con el apoyo de las tecnologías
ambientales. Un eje fundamental de este programa es fomentar la responsabilidad de los
diferentes actores, como los hoteleros, autoridades y visitantes, en relación con la
gestión integral de los RSU.
13
En esta gran tarea se deben involucrar a todos los sectores sociales y económicos, entre
los que destacan los empresarios de la industria hotelera a los cuales se les ha invitado a
acercarse a la oficina gubernamental encargada de esta labor en donde se puede
informar sobre esta nueva ley y su reglamento.
Entre las actividades más importantes para sensibilizar a los diferentes actores sociales
para la aplicación de la Ley Estatal y el diseño de un programa integral para el manejo
de los residuos sólidos, destaca la organización de talleres que recuperan la experiencias
de cómo manejan sus residuos sólidos lo desarrolladores turísticos del área de Cancún y
la Riviera Maya, como son el caso del Parque acuático Xelha, el Mayan Palace y los
Hoteles Palladium. Esto también tiene como finalidad promover el desarrollo de
planes de manejo en los establecimientos turísticos, pues cada día el turista exige
destinos ambientalmente sustentables. Sin duda ante lo problemático que resulta el
manejo de los desechos en las zonas costeras, es imprescindible que los hoteleros sean
sensibles al deterioro ambiental visible y atiendan los procesos derivados de la
generación de residuos sólidos; asimismo, es importante sensibilizar a los turistas sobre
su papel para reducir la producción de desechos. Por su parte, la administración local
hace esfuerzos por promover y hacer cumplir el desarrollo de planes de manejo integral
de residuos en hoteles, así como acatar la normatividad respectiva, al mismo tiempo que
instrumenta mecanismos para fortalecer el acopio, reciclaje y re-uso de residuos a la
población local.
Para lograr la participación del sector privado fue necesario emprender una alianza entre
los representantes del gobierno estatal, un holding de servicios turísticos y la GTZ. Esto
quedó plasmado en el proyecto “Responsabilidad ambiental y gestión integral de residuos
sólidos en el sector turismo del Caribe Mexicano, Quintana Roo”.
El proyecto se puso en marcha durante 2008 y en él participan diversos actores, tanto
nacionales como internacionales, privados y públicos, a saber:
el operador turístico suizo, KUONI Travel Holding, sector privado
internacional;
14
Amigos de Sian ka'an (ONG local), que participa en la Iniciativa para el
Arrecife Mesoamericano;
la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente (SEDUMA),
gobierno local;
la Secretaría de Turismo (SEDETUR), gobierno local;
la Cooperación Técnica Alemana (GTZ), organismo cooperante
internacional.
y la Asociación de Hoteles de la Riviera Maya (AHRM), sector privado
nacional.
El objetivo central de esta alianza es la promoción de la gestión integral de residuos
sólidos en establecimientos turísticos. El modelo de PPP procura “articular esfuerzos de
hoteles, tuoroperadores, organizaciones de la sociedad civil y el sector público del estado
dentro de una estrategia común para mejorar la gestión de residuos y así reducir el
impacto ambiental que está amenazando la belleza natural de la región” (GTZ, 2008).
Este tipo de convenios en donde participan los hoteleros son fundamentales ya que
justamente este sector debe asumir su responsabilidad en la generación de los RSU;
(estamos hablando de que en Cancún existen alrededor de 161 hoteles con 28.861
cuartos) y procurar mecanismos de tratamiento. Las cabeceras municipales que
generan mayor cantidad de residuos son Cancún con 750 ton./día; en Playa del Carmen,
se producen 320 ton/día; aproximadamente 400 tn son generadas por la industria
hotelera (POQROO, 2009:39). El origen de estos residuos son fundamentalmente de
tres fuentes: habitacional, sector turismo y comercios. Esto puede sumarse a las
precarias condiciones en que se lleva a cabo la disposición final de los mismos, que en su
mayoría no son controlados y son a cielo abierto, y que por la traza urbana y la
composición del suelo (carcásico) de esta región del país, se ha dificultado la
construcción de los rellenos sanitarios (instrumento ambiental para reducir y controlar
la emisiones de gases con efecto invernadero). Por otra parte, la falta de manejo de los
15
residuos representa amenazas palpables a los ecosistemas locales que podrían colocar a
todo el sector turístico de Quintana Roo en riesgo, trayendo con esto desastrosas
consecuencias económicas y ambientales.
Considerando que el Programa Estatal para la prevención y Gestión de los Residuos en el
Estado de Quintana Roo 2009- 2011 se ponga en marcha y se cumpla su aplicación, se
espera que al final de 2009, más de 30 hoteles de la Riviera Maya estén realizando
acciones que los conviertan en “hoteles verdes”, esto basado en programas de recolección
y separación de RSU, reciclaje y técnicas de composteo.
.
Separación de residuos, en el relleno sanitario de Kantunilkin (abril 2009), Municipio de
Lázaro Cárdenas, Quintana Roo
Conclusiones
La atención a la cuestión ambiental en materia de Gestión de residuos urbanos en el
Estado de Quintana Roo se ha fortalecido y es notoria una mayor credibilidad en cuanto
a los programas ambientales que se han diseñado con la participación de organismos de
la cooperación internacional. Las más altas autoridades del Estado de Quintana Roo
16
reconocen gran avance en la cuestión del manejo de los residuos sólidos, debido sobre
todo a la presencia de los expertos de la GTZ; señala una nota periodística.
desde hace dos años la SEDUMA ( Secretaria de Ecología
Desarrollo Urbano y Medio Ambiente) trabaja de la mano con
la Cooperación Técnica Alemana (GTZ), sobre el tema de los
residuos sólidos en Quintana Roo, cuyos frutos se ven reflejados
en la Ley Estatal para la Prevención y Gestión Integral de
Residuos Sólidos del Estado (publicada en diciembre 2007) y el
Programa Estatal de Prevención y Gestión Integral de Residuos
(PEPGIRS) del Estado, (recientemente publicado en junio
2009). (Diario de Quintana Roo, 2 de octubre, 2008).
Se espera que con la participación de los diferentes actores sociales, económicos y
políticos locales se pueda desarrollar un programa de desarrollo ambiental y
económicamente sustentable. Para la realidad estatal en materia ambiental, una de las
medidas de mayor alcance es la encaminada a la construcción de los rellenos sanitarios
en los municipios de la zona norte; se encuentra ya en operación el de la comunidad de
Kantunilkin, se encuentran con importante grado de avance el de Felipe Carrillo Puerto;
asimismo, se ha decidido trasladar el basurero municipal de Benito Juárez (Cancún) a
un área menos perjudicial para la población, alejada de las concentraciones urbanas y con
mayor duración de vida útil. Cabe recordar que el primero en el Estado de Quintana
Roo se instaló en la isla de Cozumel y se seguirá con este programa de Gestión de
Residuos Urbanos, como parte de una política pública federal que pretende prevenir los
riesgos ambientales y detener la degradación ambiental que se está presentando en las
zonas turísticas. Estas acciones que conjugan la participación de diferentes actores, pero
sobre todo a agentes cooperantes, son una un avance en la búsqueda de tecnología
ambiental que pueda aplicarse al confinamiento de desechos, que logre contribuir al
control de residuos y reducir los múltiples impactos relacionados con la acumulación
de RSU.
17
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1
Aportes del turismo comunitario en los procesos de
desarrollo rural de Centroamérica
Ernest Cañada1
(Asociación Alba Sud, España)
Resumen
En los últimos años el Turismo Comunitario ha centrado la atención creciente de la
cooperación internacional sobre su papel en los procesos de desarrollo rural. En esta
comunicación se defienden sus impactos positivos en los procesos de desarrollo rural
en Centroamérica, a la vez que se alerta sobre algunas de sus limitaciones y
contradicciones.
Palabras clave: Turismo Comunitario, desarrollo rural, Centroamérica, pro-poor
tourism, economía popular.
1 Coordinador de la asociación Alba Sud – Investigación y Comunicación para el Desarrollo, www.albasud.org.
2
1. Introducción
El Turismo Comunitario (TC) es un tipo de turismo desarrollado en zonas rurales
en el que la población local, en especial pueblos indígenas y familias campesinas, a
través de distintas estructuras organizativas de carácter colectivo, ejerce un papel
protagonista en su desarrollo, gestión y control, así como en la distribución de sus
beneficios. El TC no sustituye a las actividades productivas tradicionales (agricultura,
ganadería, pesca, agroindustria, artesanías…), sino que es una forma de ampliar y
diversificar las opciones de las comunidades rurales y complementar así las
economías de base familiar campesina. En Centroamérica el TC es ya una realidad.
Son varias decenas las iniciativas comunitarias que están funcionando y atendiendo a
turistas de forma habitual y con servicios de calidad. Su experiencia es muy diversa,
como también lo son las realidades rurales de cada uno de los países que conforman
la región. En la presente comunicación queremos enfatizar los aportes que este tipo
de actividad ha generado en los procesos de desarrollo rural allá donde ha logrado
abrirse camino. Entendemos que también es necesario poner en discusión los retos y
dificultades planteadas, así como las múltiples amenazas que se ciernen sobre el TC.
2. Aportes del Turismo Comunitario
A medida que el TC ha ido tomando fuerza y haciéndose cada vez más presente en
las agendas públicas del sector turístico, múltiples voces han puesto en evidencia su
incomodidad, tanto por su protagonismo como por los recursos económicos que les
ha destinado la cooperación internacional. Como respuesta han tratado de
desvalorizarlo. En ocasiones invisibilizan su rol en el marco de políticas generales
sobre el turismo rural, como si no tuviera demasiada trascendencia diferenciar
quiénes son y cómo están organizados los protagonistas de esas iniciativas. En otros
casos, el ataque ha sido frontal y se ha considerado que el TC es una vía equivocada
para la reducción de la pobreza, e incluso una opción destinada al fracaso.
Entre sus detractores destacan investigadores como Jonathan Mitchell y Pam
Muckosy, vinculados al Overseas Development Institute (ODI), una institución con
sede en Londres y con gran influencia en el pensamiento sobre Desarrollo, quienes de
3
forma clara han sostenido que el TC era una ruta equivocada. A su modo de ver, el
TC raramente ha aliviado la pobreza y la vulnerabilidad de las comunidades rurales.
Consideran que el TC se ha sostenido por el apoyo de la cooperación externa, pero
que no ha logrado insertarse en el mercado. Y que cuando lo hace, en realidad, su
forma de organización no es tan comunitaria como se declara, sino que se trata de
iniciativas empresariales de carácter individual y mucho más “clásicas”. De hecho,
afirman que las estructuras colectivas de gestión son demasiado complejas e
incómodas para trabajar de forma efectiva. Tomando como referencia algunos
ejemplos sueltos llegan a la conclusión que el TC está condenado al fracaso para, a
continuación, sostener la idea que la mejor opción para las comunidades rurales es
vincularse al turismo convencional (Mitchell & Muckosy, 2008).
Es necesario reconocer que el TC ha tenido hasta la fecha dificultades para aportar
datos que avalen los aportes concretos alcanzados. Las dificultades en los registros de
las iniciativas comunitarias no dejan de ser hasta cierto punto lógicas dado el punto
de partida a diversos niveles en que se encuentran muchas de las familias campesinas
y pueblos indígenas que han puesto en marcha este tipo de emprendimientos. Sin
embargo, también es cierto que se está haciendo un esfuerzo en diversos países de
América Latina para investigar y aportar análisis que progresivamente vayan llenando
estos vacíos. A pesar de la importancia de los datos, absolutamente necesarios, la
discusión planteada tiene otra dimensión. Pasa en primer lugar por entender y
reconocer cuáles son los asuntos sobre los que necesitamos investigar. Sin una
revisión a fondo de los términos del debate, fácilmente podemos ser conducidos a
terrenos engañosos en los que la parte no deje ver el todo.
A partir de la experiencia de acompañamiento y conocimiento directo de numerosas
iniciativas comunitarias en Centroamérica, vamos a plantear a nuestro entender
cuáles son los principales aportes del TC en aquellos lugares donde más se ha logrado
desarrollar. Es sobre todos estos aspectos que necesitamos profundizar y orientar la
investigación social.
Los principales aportes identificados son:
4
2.1 Diversificación productiva, creación de empleo y generación de
recursos económicos directos
El turismo ha sido una vía de diversificación de las actividades productivas de las
comunidades rurales. La puesta en marcha de servicios turísticos ha generado nuevas
fuentes de empleo en comunidades rurales en múltiples ocupaciones, tanto para los
propios propietarios de las iniciativas de alojamiento, como para empleados de éstas o
por parte de proveedores de servicios o bienes diversos. Resultan de especial interés
los procesos exitosos de introducción del turismo que se han dado en cooperativas
cafetaleras, como son los casos, por ejemplo, de la UCA San Ramón en Matagalpa, la
UCA Miraflor en Estelí o Finca Magdalena en Ometepe, todas ellas en Nicaragua; o
el de la Cooperativa Los Pinos, a orillas del Lago Coatepeque, en el Departamento de
Santa Ana, en El Salvador. También destacan casos como el de la Cooperativa de
Pescadores Artesanales Tárcoles, en Garabito, Costa Rica. Gracias a la introducción
de un nuevo rubro como el turismo estas iniciativas, prácticamente dedicadas a una
sola actividad, como el café o la pesca, han logrado ampliar sus fuentes de ingresos.
En otros casos, la introducción del turismo en pequeñas fincas familiares, como
algunas vinculadas a la UCA Miraflor, ha facilitado la introducción de cambios en la
forma de organizar la producción agropecuaria. Gracias a la demanda de alimentos
que genera el propio turismo en la zona, algunas familias han reducido la extensión
de tierra dedicada a un solo cultivo destinado al mercado y han preferido diversificar
y aumentar la producción de verduras y hortalizas para consumo directo.
Los nuevos empleos vinculados al turismo no sólo han generado ingresos monetarios,
si no que al ser distribuidos a lo largo de todo el año, o no ser necesariamente
coincidentes con los ingresos derivados de las actividades agropecuarias tradicionales,
han permitido que las familias implicadas en dichas actividades hayan podido
mejorar su bienestar y condiciones de vida. Los ingresos derivados del turismo han
contribuido significativamente a una mejora de la alimentación familiar y de la
educación de hijos e hijas. Por otra parte, con la ampliación de las actividades
productivas que las familias campesinas pueden llevar a cabo en sus territorios,
especialmente por parte de mujeres y jóvenes, se ha ampliado la base social que se
beneficia directamente de las actividades vinculadas al campo.
5
A pesar de estos aspectos positivos, uno de los riesgos que entraña el desarrollo del
TC en las comunidades es el incremento de las diferencias y desigualdades, de por sí
ya existentes originariamente. En dependencia del modelo de gestión y las dinámicas
sociales que se desarrollen, el TC, y sobre todo cuando hay mucho dinero por medio
de la cooperación internacional, puede ser un factor que ayude a acentuar los
desequilibrios internos y, finalmente, derive en situaciones de conflicto social que
pongan en riesgo los potenciales de este tipo de actividad (Gascón, 2005).
Existen múltiples ejemplos de iniciativas comunitarias que, conscientes de estos
riesgos, han tratado de introducir formas de gestión que los reduzcan o traten de
evitar: mecanismos de rotación en los servicios y trabajos (transporte, guías, etc.),
alojamientos e infraestructuras de carácter colectivo, potenciación de los vínculos con
otras actividades productivas en la misma comunidad o en zonas cercanas, formas de
solidaridad interna. Uno de los casos más interesantes de cómo la propia colectividad
intenta que todos sus miembros se beneficien por igual de la actividad turística lo
encontramos en la Cooperativa Nuevo Amanecer, asociada a la UCA Miraflor, en la
comunidad de Sontule, Estelí. La Cooperativa está formada por 22 mujeres y reciben
grupos de estudiantes extranjeros cuatro o cinco veces al año. Debido a la escasez de
recursos no pudieron plantearse la construcción de un albergue colectivo y
prefirieron que los turistas se alojaran en las casas de las mismas socias de la
Cooperativa. Dadas las diferentes condiciones en las que se encontraban sus casas
decidieron que sólo 12 de ellas estaban en condiciones de alojar a las visitas. Pero con
el fin de que todas se beneficiaran del mismo modo, las 10 mujeres que no podían
alojar apoyan a las otras mujeres. Al final los ingresos se distribuyen entre todas las
socias por igual, independientemente que hayan aportado o no sus casas como
alojamiento. Este tipo de situaciones no son las más frecuentes pero muestran la
capacidad de organización comunitaria y de la propia gente para articular propuestas
de gestión solidarias y que reduzcan las dinámicas de diferenciación y desigualdad.
6
2.2 Mantenimiento de propiedades y mejora de infraestructuras
El desarrollo de actividades turísticas por parte de las comunidades o algunos de sus
miembros ha contribuido a una revalorización de los bienes y recursos comunitarios,
como la tierra, el bosque o el agua. Con frecuencia este incremento del valor de estos
recursos, principalmente la tierra, ha contribuido a su mantenimiento frente a las
presiones del mercado para su venta. Este es el caso, por ejemplo, de Finca
Magdalena, propiedad de la Cooperativa Carlos Díaz Cajina, ubicada en las faldas del
volcán Maderas, en la isla de Ometepe. Después del triunfo electoral de Doña
Violeta Barrios de Chamorro en 1999, su gobierno puso fin al trato preferencial que
habían recibido las cooperativas durante la Revolución Sandinista. Endeudados y sin
políticas de apoyo, la Cooperativa decidió vender todo su ganado y hacer frente a una
parte de las deudas que había contraído a consecuencia de los cambios en las políticas
monetarias. Poco después la introducción del turismo facilitó nuevos ingresos que
permitieron mantener la propiedad de la tierra, objetivo prioritario de los socios y
socias de la Cooperativa. Más recientemente, la Cooperativa Los Pinos, en El
Salvador, vio como el desarrollo residencial en las orillas del lago Coatepec
amenazaba su propiedad. Una empresa inmobiliaria se apropió de parte de sus tierras
para construir un complejo residencial. Ante la amenaza de perder el resto de sus
tierras en las orillas del lago, la Cooperativa puso en marcha servicios turísticos que
incluyen un restaurante, miradores, un sendero y un espacio acondicionado para el
baño en el Lago. De este modo, la actividad turística ha servido para reforzar su
presencia y el control del área.
Además, las infraestructuras familiares y comunitarias creadas para atender a los
turistas (habitaciones, comedores, albergues, salas de actos) han tenido también otros
usos, beneficiando así a las poblaciones locales. Uno de los principales aportes del TC
es que ha permitido la movilización de recursos que capitalizan el campo y quedan en
manos de las familias campesinas y comunidades rurales.
7
2.3 Democratización en el acceso a espacios rurales
Frente a otros modelos de desarrollo turístico, como el turismo residencial, que
provocan una “elitización” del espacio, por cuanto su acceso queda restringido para
uso y disfrute de sectores con mayores recursos económicos, el TC pone a
disposición de la gran mayoría de la población espacios, infraestructuras y servicios.
A pesar de que el TC aún depende demasiado del mercado turístico internacional, el
grueso de la oferta existente y los relativamente bajos precios establecidos facilitan
este mayor acceso público de la población local que otros modelos turísticos. De este
modo el TC contribuye en la lucha contra la desposesión de las comunidades rurales
y de la misma ciudadanía y, por tanto, favorece una mayor “justicia ambiental”,
entendida como un acceso a los recursos naturales más equitativa, en la línea del
denominado “ecologismo de los pobres” (Martínez Alier, 2009). Una contribución
en este sentido la encontramos en los numerosos ejemplos de servicios turísticos en
ríos y pozas que facilitan a la población de menores ingresos el acceso a espacios
naturales. Se trata de casos como el de las playas del río Sumpul en el municipio de
El Carrizal, en Chalatenango; o el Campamento Ecológico Campuzano, en el
municipio de El Viejo, Chinandega, Nicaragua. Y lo mismo ocurre con los bosques.
Iniciativas como la Eco Posada El Tisey en Estelí, o del Bosque de Cinquera, en El
Salvador, son ejemplos en este sentido. Otro caso muy significativo lo encontramos
en San Juan del Sur, Nicaragua, donde el desarrollo a gran escala del turismo
residencial amenaza con privatizar toda la línea de costa del municipio. En este
contexto Community Tours, una iniciativa de familias pescadoras y campesinas
ubicadas en la playa de El Ostional, desarrolla una propuesta turística que facilita una
mayor accesibilidad a las costas por parte de la población local, en fuerte contraste
con la mayoría de proyectos turístico-residenciales de la zona. En la medida que el
TC favorece esta democratización en el acceso a espacios rurales actúa como barrera
de contención frente a la “elitización” del espacio y, por ende, del deterioro social y
democrático. Una de las principales consecuencias de la privatización del espacio
vinculado a la funcionalización turístico-residencial es el deterioro de la calidad
democrática, por cuanto los grupos económicos presionan y corrompen las
instituciones públicas para lograr tratos de favor.
8
2.4 Dinamización de la economía local
Los beneficios generados por la actividad turística además de mejorar las condiciones
de vida de las familias directamente implicadas y de ser reinvertidos en el propio
funcionamiento de la actividad turística han sido utilizados en el progreso y
fortalecimiento de otras actividades productivas dentro de las mismas cooperativas o
comunidades rurales. Hay ejemplos, como el de Finca Magdalena, en los que a través
de los ingresos generados por el turismo se ha logrado renovar las plantas de café o
construir infraestructuras necesarias para la transformación y agregación de valor de
la producción agrícola. Pero el impacto económico de la actividad turística no acaba
ahí. Uno de los efectos más sentidos y valorados en las comunidades, más allá de
quiénes están implicados directamente en los servicios de alojamiento y atención,
tiene que ver con la dinamización y reactivación de las economías locales, generando
una fuerte demanda vinculada a la producción y venta de alimentos y bebidas,
alquiler de servicios, transporte, elaboración y comercio de artesanías, etc. Allí donde
el turismo comunitario ha logrado impulsar las economías locales se produce una
significativa reducción de la emigración hacia el exterior.
2.5 Protección del medio ambiente
La gran mayoría de iniciativas comunitarias se han desarrollado a la par de
estrategias de protección del medio ambiente impulsadas por la propia población
local. El municipio de Cinquera, en el Departamento de Cuscatlán, El Salvador, fue
duramente castigado durante la guerra en los años ochenta, con intervenciones del
Ejército dirigidas a acabar con la población local. Como consecuencia el municipio
quedó prácticamente abandonado y en los alrededores se dejó de cultivar. Poco a
poco el bosque fue creciendo, convirtiéndose en refugio y salvación para la población
local y la guerrilla del FMLN. Al terminar la guerra, un grupo local, la Asociación de
Reconstrucción y Desarrollo Municipal (ARDM), decidió impulsar una iniciativa
para proteger el bosque que les había salvado la vida. Hoy el Bosque de Cinquera
cuenta con senderos bien señalizados, pozas donde se baña la población local y guías
especializados. La organización comunitaria fue la clave de la salvaguarda de este
9
bosque secundario. Otro ejemplo lo encontramos en Miraflor, Estelí. Esta zona
estaba fuertemente dañada por el cultivo de patatas, en el que se usaron
intensivamente agroquímicos. Durante los años noventa, los pequeños productores
de la zona organizados en la UCA Miraflor, preocupados por los daños ambientales
y los bajos rendimientos, promovió una exitosa campaña para que el área fuera
declarada como Reserva Natural. En la mayoría de casos, el impulso de actividades
de TC y cuidado del medio ambiente se han articulado de forma interrelacionada.
Frente a modelos de conservación ambiental basados en la creación de “áreas
protegidas siguiendo el modelo norteamericano de parques nacionales, intocables y
sin gente”, impulsadas por los grandes organismos mundiales de conservación (Elias,
2009: 5), las comunidades rurales, y en especial los pueblos indígenas, han
contribuido significativamente a la conservación de los bosques. Sus medios de vida,
incluyendo el desarrollo de actividades turísticas, han hecho un uso de los recursos
naturales mucho más sostenible que otras formas de explotación económica del
territorio.
2.6 Cambios incipientes en las relaciones de género
Los trabajos de atención y servicio a los turistas a excepción de las de guiado han
recaído en su mayoría en las mujeres de las comunidades. La percepción de muchas
de las mujeres entrevistadas en diferentes iniciativas comunitarias de Nicaragua es
que este protagonismo vinculado a una actividad nueva, que está reportando ingresos
económicos significativos, ha generado algunos cambios en las relaciones de poder
consuetudinarias entre hombres y mujeres. Las mujeres vinculadas a este tipo de
actividades turísticas, han incrementado su participación y protagonismo en los
asuntos públicos de la comunidad. No son pocas las mujeres que disponen y
controlan de forma autónoma los recursos económicos obtenidos. Una de las
cuestiones en las que más fijan su atención muchas de las mujeres que hemos podido
entrevistar es que gracias al turismo, a pesar de que, en algunos casos, ciertamente
han visto cómo aumentaban algunas de sus tareas cotidianas, se han podido retirar de
los trabajos más pesados del campo. Muchas afirman con orgullo que ahora, tanto
ellas como sus hijas, ya no tienen que “asolearse afuera” y pueden trabajar “adentro”.
10
No es menos cierto que la presencia en zonas rurales de hombres y mujeres de otras
partes ha permitido a las poblaciones rurales, y especialmente a las muchachas
jóvenes, el contacto, intercambio y conocimiento de otras formas plantearse la vida, la
maternidad, las relaciones de pareja, las preferencias sexuales, el trabajo doméstico,
etc. El contacto con personas que en algunos casos, no necesariamente siempre, con
visiones distintas de las relaciones de género puede haber contribuido a la
transmisión de valores distintos a los tradicionales.
2.7 Oportunidades de enriquecimiento cultural
El desarrollo de actividades turísticas en el campo y en las que el principal motivo de
atracción tiene que ver con la propia vida rural ha sido una oportunidad para la
revalorización y reconocimiento de lo rural, su cultura material (arquitectura,
trabajos, cocina,...) y sus distintas expresiones culturales artísticas (música, bailes,
canciones, idiomas…). También ha sido una oportunidad para reactivar
conocimientos tradicionales en la elaboración de productos naturales como jabones,
medicinas, tintes naturales, etc. En este contexto el turista pone en valor aspectos de
la vida cotidiana de la población rural que suponen un motivo de reconocimiento y
autoestima comunitaria. Este proceso de afirmación de la cultura propia ha sido
especialmente significativo en el caso de los pueblos indígenas.
Uno de los ámbitos en los que de forma significativa el TC ha contribuido en el
desarrollo cultural es en la recuperación de la memoria histórica. Muchas iniciativas
comunitarias, especialmente en contextos de conflictos armados recientes, como es el
caso de El Salvador, por ejemplo, han permitido una labor de salvaguarda de registros
materiales de especial valor histórico, simbólico y cultural y de difusión amplia y
pública. En el Departamento de Morazán, en El Salvador, la Ruta de Paz, ha
articulado un conjunto de visitas a iniciativas comunitarias, como el Memorial a las
Víctimas de la Masacre del Mozote o el Museo de la Revolución de Perquín, que
recuerdan la guerra reciente y rinden homenaje a sus víctimas. El caso de los museos
de asociaciones, como el mencionado, o comunitarios, como el Museo Pre-
Colombino de Chagüitillo, en Sébaco, Nicaragua, suponen un esfuerzo muy
11
destacable, por cuando la población local se ha organizado para cubrir una necesidad
cultural que brindan al conjunto de la ciudadanía y en especial a los escolares, que no
llegan a ser asumidas por las políticas culturales de los propios Estados.
Por otra parte, el contacto con personas de otros lugares y países ha sido una
oportunidad especial para la gente del campo para conocer, intercambiar y
enriquecerse culturalmente. Las formas de turismo más vinculadas al voluntariado y a
la solidaridad internacional han sido especialmente propensas a facilitar este tipo de
procesos.
3. Límites y contradicciones en el desarrollo del Turismo
Comunitario
A pesar de que el TC nunca había tenido tanta difusión, reconocimiento y apoyo
externo también es cierto que no todas las iniciativas emprendidas han logrado
consolidarse. Por obvio que pueda parecer es necesario recordar que la clave para que
el TC pueda llegar a ser un factor de desarrollo rural para que las iniciativas
comunitarias logren poner en marcha una oferta de calidad, diferenciada y una
capacidad de gestión que les permita ser sostenibles en términos económicos. Para
ello hay múltiples factores en los que incidir: disponer de infraestructuras adecuadas,
generar una oferta de actividades y servicios de calidad, mejorar las capacidades de
administración, poder acceder a sistemas de financiación, capacidad de promoción y
comercialización, etc.
Pero ser viables y desarrollarse económicamente no pasa necesariamente por la
especialización y la conversión de las iniciativas comunitarias en empresas dedicadas
en exclusiva a la actividad turística. Las orientaciones de algunos sectores de la
cooperación que las incitan a la especialización turística y el logro de ventajas
comparativas en la prestación de dichos servicios no toman en cuenta principios
básicos de la economía campesina, en la que se inserta el TC. En los contextos rurales
de Centroamérica la especialización turística supone vulnerabilidad y dependencia en
relación a un rubro externo cuya dinámica no pueden controlar las organizaciones
comunitarias. Por el contrario, el turismo debe formar parte de una estrategia de
12
diversificación productiva, dentro de una dinámica de complementariedad, no
sustitutiva, de las actividades agropecuarias tradicionales (Cañada & Gascón, 2006:
69-73; Gascón & Cañada, 2008).
Para las familias campesinas lo esencial es garantizar su alimentación y el impulso de
otros rubros, como el turismo, necesariamente queda supeditado a lo fundamental:
producir alimentos. En toda esta discusión la palabra clave es diversificación, no
especialización. Los servicios turísticos pueden ser un medio de ampliar las
actividades productivas, del mismo modo que lo pueden ser otras actividades, si la
comunidad lo desea, si tiene las condiciones, si logra desarrollar actividades y
servicios atractivos, si consigue comercializarlos.
Al mismo tiempo hay que ser conscientes de las posibilidades reales del mercado
turístico y evitar las falsas expectativas. Sería necesario reconocer que no todas las
comunidades en el ámbito rural pueden esperar tener el mismo éxito con el turismo.
Sencillamente no es posible que la demanda pueda ampliarse indefinidamente. Poner
en marcha iniciativas turísticas comunitarias es complicado y requiere voluntad,
esfuerzo, organización, pero también algunas condiciones (atractivos turísticos,
accesibilidad, diferenciación, etc.).
El TC puede ser parte de una estrategia de desarrollo turístico alternativo al modelo
dominante. Pero sólo puede ser una parte. Por si sólo el TC no puede ser la
alternativa. Necesita construir una alianza con la pequeña y mediana empresa
turística local y nacional. Sólo la articulación y encadenamiento de estos dos grupos
(comunitarios y pequeños y medianos empresarios locales) puede permitir un
desarrollo turístico de carácter endógeno. Impulsar procesos de estas características
no es tarea fácil, por lo que la labor de la administración local es de gran importancia.
El turismo, en definitiva, puede ser una forma de diversificar las actividades
económicas de una comunidad, pero no la única vía, ni necesariamente la más
importante, y mucho menos una opción para todo el mundo. Es por ello que es
especialmente importante que los planes de desarrollo comunitario no estén
centrados en un solo sector, ya sea el turismo o cualquier otro, sino en la diversidad y
complementariedad de acciones que pueden favorecer al conjunto de su población y
que, a su vez, traten de evitar los riesgos de generar nuevos procesos de diferenciación
y agudización de las desigualdades.
13
Uno de los rasgos que han caracterizado al TC en Centroamérica es su excesiva
dependencia hacia el exterior. Son muchos los motivos por los que debería reducirse
esta situación. El modelo turístico dominante, sostenido por los costes relativamente
baratos de los billetes de avión, está entrando en graves dificultades por las tendencias
de fondo hacia un progresivo encarecimiento de los precios del petróleo y reducción
de la diversidad de destinos comerciales. Además su impacto ecológico hace
totalmente insostenible el modelo (Buades, 2009). La orientación hacia el mercado
internacional del TC incrementa la vulnerabilidad de su población en relación a
factores externos sobre los que las comunidades no pueden incidir. A nuestro
entender, la viabilidad económica del TC depende más del fortalecimiento de
mercados turísticos locales, con circuitos de corta distancia, de base nacional y
regional, y evitar la dependencia del mercado internacional. No se trata de negar las
posibilidades de encontrar oportunidades en el ámbito internacional, pero el
desarrollo del TC no puede sostenerse sobre bases tan frágiles y vulnerables.
A la par de los problemas internos de cómo poner en marcha y sostener esta nueva
actividad, el TC enfrenta en estos momentos otros problemas derivados de las
visiones contrapuestas de la cooperación internacional en sus estrategias de apoyo.
No todas las formas de cooperación con el TC responden a una misma lógica de
fortalecimiento de la economía popular. De hecho, el TC se ha convertido ya, como
ha ocurrido con el comercio justo, en un espacio de “fuego cruzado” entre posiciones
neoliberales y otras de carácter altermundista. Uno de los ámbitos en el que se pone
en evidencia la deriva neoliberal de algunos de los sectores de la cooperación lo
encontramos en la presión creciente para que las iniciativas comunitarias introduzcan
sellos o certificaciones de garantía de carácter internacional, siguiendo el ejemplo del
comercio justo. Aunque no es el único intento desarrollado en este sentido, el
ejemplo el “Sello FLO”, promovido por Fairtrade Labelling Organizations
International, es el más conocido (Cañada & Gascón, 2006: 75-79; Cañada, 2006,
Cañada & Gascón: 2008).
Pero más problemáticas son las orientaciones a favor que el TC establezca alianzas
con mega-proyectos turísticos. Organismos como la Organización Mundial del
Turismo (OMT) a través de su programa STEP o el Servicio Holandés de
14
Cooperación (SNV) han hecho suyo el enfoque Pro-Poor Tourism (PPT),
ampliamente desarrollado por instituciones como el Overseas Development Institute
(ODI). En términos sintéticos el PPT propone una estrategia de reducción de la
pobreza a partir del incremento de ingresos netos de la población de los países del
Sur a través del turismo. Sin embargo, un incremento neto de ingresos que no vaya
acompañado de una mengua de la desigualdad difícilmente puede lograr cambios
reales en la dinámica de la pobreza (Cañada & Gascón: 2006: 82-85; Gascón, 2009:
17-26). El problema, además, es que a través de este enfoque se están legitimando los
mega-proyectos turísticos. Buscar consensos que supeditan el TC a los mega-
proyectos es, a nuestro entender, una estrategia errónea, porque no se está tomando
en cuenta la dimensión política de las relaciones económicas. Implica, de hecho,
transferir legitimidad a aquellos que están destruyendo las posibilidades de vida del
sector campesino e indígena y tratar de desactivar conflictos por la resistencia de las
comunidades a la usurpación de sus recursos (tierra, agua, bosques) y territorios.
Contrariamente al enfoque PPT, creemos que es necesario, fortalecer la resistencia a
los mega-proyectos turístico-inmobiliarios e incrementar la autonomía y la capacidad
de gestión de las propias iniciativas comunitarias que, en alianza con las iniciativas
turísticas de la pequeña y mediana empresa local, logren articular conglomerados
atractivos y económicamente viables.
4. Conclusiones
El debate sobre el TC necesita abordarse desde una perspectiva más amplia de lo que
se ha hecho hasta el momento. El tema principal en discusión debería centrarse en
cómo la economía popular desarrollada por iniciativas comunitarias, vinculada o no
al turismo, está funcionando y contribuye a la mejora de las condiciones de vida de la
población local. El fortalecimiento de la economía de base comunitaria, sea a través
de la agricultura, la ganadería, la pesca, la agroindustria, la apicultura o el turismo, de
forma diversificada y complementaria, en la que el protagonismo y control de los
recursos esenciales queda en manos de la gente del lugar organizada colectivamente,
es la clave que puede permitir a las comunidades seguir viviendo en sus territorios
tradicionales.
15
El desarrollo turístico no es neutral, conlleva competencia y conflictos en torno al
territorio, los recursos naturales y las arcas de los Estados. La lógica del capital
turístico corporativo es “generar” espacios que le permitan ampliar la acumulación de
capital y para ello necesita transformar y elitizar determinados territorios hasta que
los agotan, para después migrar y conquistar nuevas áreas en las “periferias de placer”
(Turner & Ash: 1991).
El punto crucial en discusión es cómo esas distintas expresiones de economía popular
actúan como un dique de contención frente a las múltiples formas de usurpación de
los territorios y los recursos naturales por parte del capital corporativo, ya sea en
forma de agrocombustibles, agricultura industrial, minería, construcción de mega-
infraestructuras o explotación turística. Y al mismo tiempo, si las poblaciones locales
organizadas colectivamente son capaces de poner en marcha y sostener propuestas de
desarrollo rural alternativas a las dominantes, con otras lógicas y otros valores. El
objetivo no es otro que poder sostener comunidades rurales vivas. Y es en este
contexto que el TC adquiere un nuevo sentido estratégico, como parte de un proceso
mucho más amplio de empoderamiento social.
16
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Indicadores de sostenibilidad turística en Fernando de Noronha.
Pernambuco, Brasil.
Autores:
Maria Clara Fernandes Dias da Silva, estudiante, UdG (Universitat de Girona, España) - [email protected]
Milena Caldas Galindo, estudiante, UIB (Universitat de les Illes Balears, España) – [email protected]
Nathalia Körössy Leite, profesora, UFPE (Universidad Federal de Pernambuco, Brasil) – [email protected]
Parque Nacional Marino de Fernando de Noronha:
Archipiélago compuesto por 21 islas, islotes y peñas (26 km2 en total) en el Oceano Atlántico, a 545 km
de Recife, capital de la provincia de Pernambuco, región Nordeste de Brasil.
Población en 2007: 2801 habitantes. Incidencia de pobreza en la zona: 21,72%.
Principales actividades productivas: el servicio público, la pesca, la agropecuaria y el turismo.
Problemática:
•Uno de los principales destinos
turísticos de la provincia de
Pernambuco
•Los recursos naturales son los
principales atractivos del archipiélago
•Dependencia económica del sector
turístico: 70% de la población entre
14 e 43 años está empleada en
funciones relacionadas al sector
•Las actividades alternativas
principales – pesca y agropecuaria –
también dependen directamente de la
sostenibilidad de los recursos
naturales del archipiélago
•Ausencia de mecanismos capaces
de reglar la actividad y garantizar su
desarrollo sostenible
Objetivo:•Contribuir al desarrollo sostenible del Archipiélago de
Fernando de Noronha a través de la elaboración de
indicadores de sostenibilidad turística
Objetivos específicos:
•Proponer indicadores de sostenibilidad turística que
apoye la planificación y la gestión turística de Fernando
de Noronha
•Sensibilizar los distintos agentes locales involucrados en
la cadena productiva del turismo en Fernando deNoronha acerca de la importancia de la aplicación de
indicadores de sostenibilidad en la gestión turística local
•Colaborar con el intercambio interuniversitario deconocimientos, a través de la difusión de los resultados
del proyecto en las comunidades académicas de origen y
del destino
Principales actividades propuestas:•Análisis documental para elaboración de diagnóstico
turístico previo de Fernando de Noronha
•Diseño y aplicación de encuestas a agentes turísticos
locales•Diseño y realización de entrevistas en profundidad con
representantes de grupos de agentes turísticos locales
•Diseño y realización de talleres participativos con los
agentes turísticos de Fernando de Noronha para definir
los indicadores de sostenibilidad turística a ser aplicados
al archipiélago
•Análisis de los datos obtenidos a partir de las fuentes
primarias y secundarias•Elaboración de un cuadro de indicadores de
sostenibilidad turística para Fernando de Noronha
Continuidad del proyecto:Una segunda etapa del proyecto prevé la implementación de dichos indicadores de manera a permitir su
monitoreo continuo y, en consecuencia, contribuir más eficazmente al desarrollo sostenible de la
actividad turística en el archipiélago.
1
Conclusiones Mesa 1: El turismo como instrumento eficaz de cooperación al
desarrollo. De la teoría a la práctica
Moderador: Enrique Navarro (Universidad de Málaga, España)
La ponencia marco denominada “Turismo sostenible y transferencia de tecnología en el
turismo” realizada por el coordinador de Turismo del Groupe Développement de la
Universidad de Toulouse, François Vellas, presenta dos partes bien diferenciadas, por
un lado el cuerpo teórico que posibilita el desarrollo del turismo (teoría de la ventajas
comparativas, costes competitivos, teoría de la demanda representativa y transferencia
de tecnología entre territorios) y, en segundo lugar, los resultados de un proyecto de
investigación que ha estudiado siete formas de transferir nuevas tecnologías en el
sector; los ejemplos aplicados en medio ambiente, sistemas de calidad, marketing,
distribución, gestión de negocios, producción y destinos demostraron la posibilidad de
seguir avanzando en los instrumentos de cooperación al desarrollo.
Seguidamente se inició la mesa de intervenciones con tres invitados, Carmen Altés de
la consultora Innova Management, Salvador Palomo de la Universidad de Málaga y
Lucca Monocchi de la Fundación THEMIS-OMT. Carmen Altés, con su experiencia
como consultora en diversos organismos internacionales (Banco Interamericano de
Desarrollo, Comunidad Europea, AECID...) planteó cómo el turismo en los países
menos desarrollados debe basarse en estrategias que lo integren en el marco del
desarrollo económico global, en contraposición de los países más desarrollados donde
se necesitan proyectos más específicos. A partir de esta premisa realizó un balance de
las ayudas a la cooperación al desarrollo en turismo y expuso, en primer lugar, cómo la
mayoría de las inversiones cuantiosas se centran en la mitigación de los impactos en
destinos ya consolidados, más que en proyectos ex novo de desarrollo; en segundo
lugar argumentó la pérdida de eficacia de dichas inversiones debida a que se centran en
múltiples objetivos y no buscan un enfoque global estratégico, lo que sin duda tiene
que ver con la escasa atención prestada a los diagnósticos, bien porque no se
identifican los problemas adecuadamente, bien por el escaso conocimiento del
fenómeno turístico. Además puntualizó cómo las grandes áreas turísticas precisan de
estrategias temáticas concretas y los pequeños enclaves a desarrollar deben tener
estrategias con un enfoque más global.
2
Por el contrario, la intervención de Salvador Palomo se centró en las contribuciones
del estado español a través de Ayuda Oficial al Desarrollo en el periodo 2005-07; en
este caso las cifras no dejan lugar a dudas, la inversión del AECID en el sector turístico
es tan solo el 0,35%, pero la “inversión turística encubierta” llega al 7% (aunque haya
países como Perú que reciban un 20%). Además resalta dos cuestiones de enorme
interés, la falta de calidad en los tipos de intervenciones que se financian y la carencia
de microcréditos para las PYMEs turísticas, con el beneficio que supondrían estas
actuaciones a nivel local.
Para finalizar, Lucca Monocchi presenta diversos estudios y programas de
capacitación que realiza la Fundación THEMIS; destaca el estudio del mercado
laboral de Oriente Medio y Norte de África y el estudio de la oferta y demanda de los
recursos humanos en turismo de América Latina, este último, por ejemplo, ha sido
realizado con la colaboración de varias universidades de Colombia, Ecuador, España,
México, Portugal y Perú y el objetivo era dar a conocer las necesidades en educación y
formación en el sector turístico, especialmente en el sector hotelero. También destacó
el programa propio “Capacity” donde se forma a los funcionarios de las
administraciones turísticas de distintos niveles (nacional, regional y local) para su
capacitación y para fomentar la creación de redes de colaboración entre
administraciones de distintos países y con ello contribuir al desarrollo equilibrado del
turismo.
Las siete comunicaciones presentadas en esta mesa versaban sobre los impactos del
turismo, la eficacia de los planes de desarrollo, los planes de formación y la puesta en
práctica de nuevas tecnologías de comunicación e información a partir de proyectos de
cooperación entre distintos organismos públicos. Su concentración geográfica es
llamativa, todas las aportaciones son de Centroamérica (Guatemala, Honduras, El
Salvador) y especialmente de México. En relación con la ponencia marco del profesor
François Vellas, la comunicación Redes sociales para el desarrollo del turismo comunitario
(St. Bajulaz, J. Araña, M. González y F. López de la Universidad de Las Palmas de
Gran Canaria) y Planteamientos operativos y tecnológicos aplicados a la localización de
actividades ecoturísticas (J.A. Arrebola, F.B. Galacho y A. Luque de la Universidad de
Málaga) muestran la aplicación de las TICs. En la primera comunicación el objetivo
era fomentar una nueva cultura de cooperación intercomunitaria, en las comunidades
3
Q´eqchi´es en Guatemala, a partir del manejo de ordenadores y teléfonos móviles; en la
segunda, se aplican los Sistemas de Información Geográfica, en el Valle de Bravo-
Amanalco en México, con el fin de conocer la realidad territorial y social, evaluar la
capacidad de acogida y como instrumento de apoyo a la toma de decisiones en las
iniciativas ecoturísticas.
Estas innovadoras iniciativas deben complementarse con programas de capacitación y
formación a la población local, temática que introduce las siguientes comunicaciones
que se desarrollan en el Estado de Chiapas (México). Con la comunicación
Cooperación interuniversitaria al desarrollo local mediante el apoyo a los modelos de
turismo comunitario en la Selva Lacandona, Mª J. Pastor y D. Gómez de la Univ. de
Alicante y la Univ. Intercultural de Chiapas respectivamente, presentaron la
experiencia conjunta de ambas universidades en la puesta en marcha de un plan de
formación y los resultados obtenidos tras cinco años de experiencia. Susana Lima
(Instituto Politécnico de Coimbra) y nuevamente Domingo Gómez con la
comunicación El Turismo como una estrategia de desarrollo para el mundo en desarrollo:
el Programa UNWTO.Volunteers, informaron de las características principales del
Programa de voluntarios de la OMT y describen cómo diversos voluntarios
internacionales realizaron el Proyecto “Chiapas 2015: Plan de Estrategia y
Competitividad Turística”, aunque todavía era pronto para medir los impactos
globales, como reconocieron los autores, el éxito ha sido la puesta en marcha y la
implicación institucional en esta iniciativa.
La presentación de planes como instrumento para el desarrollo turístico ha sido una
temática recurrente en esta primera ponencia, sin duda un ejemplo de cooperación
poco habitual es el “Plan de Desarrollo Trinacional Fronterizo” en la región de
Trifinio, aportación presentada por FºJ. Jover, J.A. García y M. Panadero (Univ. de
Castilla-La Mancha) Potencialidades para el desarrollo del turismo en la región del
Trifinio (El Salvador- Honduras- Guatemala) cuyo objetivo ha sido crear un destino
turístico a partir de los valores territoriales naturales-culturales para lo que se han
creado rutas, cursos de capacitación a la población, se ha intentado fortalecer al sector
privado a partir de microcréditos, todo ello con fondos del Banco Interamericano de
Desarrollo y el Fondo Multilateral de Inversiones.
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Por último, de la región de Quintana Roo (México), las profesoras B. Campos y L.
Sierra, en primer lugar, y A. Vázquez, todas de la Univ. de Quintana Roo, presentan
respectivamente Turismo, políticas de cooperación y desarrollo en el Caribe mexicano y La
Cooperación Intergubernamental en apoyo al desarrollo sustentable en las zonas turísticas
de Quintana Roo. La primera aportación se centra en el proceso de desarrollo turístico
de la región (con destinos tan emblemáticos como Cancún, Riviera Maya, Isla
Mujeres…) a partir de las inversiones públicas financiadas por el Banco
Interamericano de Desarrollo. La segunda comunicación describe iniciativas de
desarrollo sostenible y detalla el programa sobre los residuos sólidos realizado entre
distintas organizaciones de la sociedad civil y la Agencia Alemana para la Cooperación
Técnica Internacional.
En el debate posterior se abordaron múltiples temáticas, desde las más conceptuales a
las más aplicadas. Se abogaba por el correcto uso de los conceptos utilizados, ya que en
ocasiones se empleaban las palabras desarrollo, sustentabilidad o gobernanza, con
sentidos y/o matices distintos, lo que podía resultar confuso en algunos casos. Se
reflexionaba sobre la importancia de la población local, su participación en los
procesos de desarrollo turístico y su grado de efectividad, incidiendo en que, sin la
previa concienciación de éstos, el proceso se vería truncado desde los inicios.
Interesante reflexión sobre los actuales niveles de pobreza en el mundo y las acciones
llevadas a cabo en los últimos treinta años; y se reincide en algunas cuestiones que se
presentaron en la mesa, como qué patrones de desarrollo se pueden continuar o si son
más eficaces estrategias concretas en espacios relativamente pequeños o cuantiosas
inversiones concentradas.
En opinión del moderador, pese a lo rico y variado de las aportaciones y el debate,
quedaron sin tocar temáticas tan interesantes respecto a la puesta en práctica de las
principales teorías sobre el desarrollo aplicadas en el turismo (Polos de Desarrollo,
Teoría de la Base de Exportación…) o reflexiones desde una perspectiva mundial
sobre la aplicación del Modelo de Gormsen, por ejemplo. En próximas convocatorias
se podrá aportar más sobre esta y otras temáticas de interés.