Embed Size (px)
Citation preview
UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR
FACULTAD DE CIENCIAS ECONÓMICAS
CARRERA DE ECONOMÍA
CORRELACIÓN ENTRE BRECHA DIGITAL Y DESIGUALDAD
SOCIAL EN ECUADOR
INFORME FINAL DE INVESTIGACIÓN PRESENTADO COMO REQUISITO
PARA OPTAR AL TÍTULO DE ECONOMISTA
SÁNCHEZ VILELA MARÍA SOLEDAD
TUTOR
ECON. BRYAN ESPINOZA ESTRELLA (PHD)
2017
~
. .
–i–
DERECHOS DE AUTOR
Yo, Sánchez Vilela María Soledad en calidad de autora del trabajo de investigación
“Correlación entre brecha digital y desigualdad social en Ecuador”, autorizo a la Uni-
versidad Central del Ecuador hacer uso de todos los contenidos que me pertenecen
o parte de los que contiene esta obra, con fines estrictamente académicos o de in-
vestigación.
Los derechos que como autora me corresponde, con excepción de la presente auto-
rización, seguirán vigentes a mi favor, de conformidad con lo establecido en los ar-
tículos 5, 6, 8 y 19 y demás pertinentes de la Ley de Propiedad Intelectual y su Re-
glamento.
Asimismo, autorizo a la Universidad Central del Ecuador para que realice la digitali-
zación y publicación de este trabajo de investigación en el repositorio virtual, de
conformidad a lo dispuesto en el artículo 144 de la Ley Orgánica de Educación Su-
perior.
_____________________________________ FIRMA
MARÍA SOLEDAD SÁNCHEZ VILELA
C.C: 131063391-0
~
. '
–ii–
DECLARACIÓN DE AUTORÍA Y AUTENTICIDAD
Yo, Sánchez Vilela María Soledad, declaro que este informe final es de autoría propia.
_____________________________________ FIRMA
MARÍA SOLEDAD SÁNCHEZ VILELA
C.C: 131063391-0
e ,~ .. ~·. ---
Econ. Bryan Fabrizio~inoza Estrella (PhD) PROFESOR DE LA FACULTAD
CC: 0912604402
1
Atentamente.
Es todo lo que puedo informar, y aprovecho por este medio para expresarle 1111
consideración y estima.
La egresada ha culminado satisfactoriamente el proyecto de investigación.
De acuerdo al oficio Nº 104-2017-UTA-CE, emitido el 19 de junio de 2017, y mediante el cual el Director de Carrera (E) Bayardo Tobar me designa director del proyecto de investigación titulado: "CORRELACIÓN ENTRE BRECJ-IA DIGITAL Y DESIGUALDAD SOCIAL EN ECUADOR", de SÁNCHEZ VILELA MARÍA SOLEDAD (CC: 13106339 I-G), previo a la obtención del título de ECONOMISTA, comento a usted:
De mi consideración:
Doctora Ec. Alberto Reinoso Director de Titulación FACULTAD DE CIENCIAS ECONÓMICAS DE LA UCE En su Despacho
Quito, DM. 05 de octubre de 2017
–vii–
DEDICATORIA
A mi madre, Josefa Araminta Vilela Pita, quien siempre me apoyó y por ser una de
mis motivaciones, para llenarla de orgullo ante este logro realizado.
A mi padre, Teófilo Arturo Sánchez Cobeña, quien a pesar de la distancia física ha
estado pendiente de cada uno de mis pasos, y sé, sentirá orgullo de este logro tan
importante para mí.
A mis hermanas María Fernanda y Silvia Patricia, y a mi hermano José Alejandro,
quienes han sido las inspiraciones más relevantes para alcanzar este objetivo.
A mis sobrinos Michelle Tuárez, Joel Paredes, Annie Paredes y Rafaela Ruiz, para que
vean en mí no solo a una tía sino un ejemplo a seguir.
A mi abuelita Digna Soledad Pita Delgado, a quien considero como mi mamá.
A mis padres de crianza Francisca Sánchez y Francisco Pita, que aún en la distancia
han sido seres fundamentales en cada paso que he dado.
A mis tías y tíos, Marjorie Vilela, Neyes Vilela, Buenaventura Vilela y Anibal Torres,
por estar pendientes de mí proceso de graduación, y por brindarme su apoyo incon-
dicional.
A mis primas Jennifer Vilela, María Elena Montiel y Silvana Coello, que han sido como
mis hermanas, y sé que este logro también las llena de felicidad.
A Marlon Alexander, por tantas ayudas y tantos aportes para mi vida; eres mi inspi-
ración y mi motivación.
–viii–
AGRADECIMIENTOS
A la Universidad Central del Ecuador por haberme permitido estar en sus aulas y
hacer de mí una profesional.
A mis profesores, Economistas Bryan Espinoza y Ramiro Villarruel, por la rectitud
en la profesión como docentes y que sin ellos este trabajo no habría sido posible.
–ix–
CONTENIDO
DECLARACIÓN DE AUTORÍA Y AUTENTICIDAD ..................................................................... ii
RESUMEN ............................................................................................................................................ xiii
ABSTRACT ........................................................................................................................................... xiv
INTRODUCCIÓN .................................................................................................................................... 1
Hipótesis .................................................................................................................................................. 2
Objetivo general ................................................................................................................................... 2
Objetivos específicos .......................................................................................................................... 2
Alcance ..................................................................................................................................................... 2
Metodología ........................................................................................................................................... 3
Fuentes de información ..................................................................................................................... 3
Estructura del proyecto de investigación ................................................................................... 4
1 MARCO TEÓRICO ................................................................................................................... 5
1.1 La educación dentro del concepto de desarrollo humano ..................................... 5
1.2 Desigualdad social y exclusión de género frente a la educación ......................... 7
1.3 Brecha digital........................................................................................................................ 12
1.4 Conclusiones del capítulo ................................................................................................ 16
2 TICS Y POBREZA EN ECUADOR: PERFIL 2016 ........................................................ 17
2.1 Base de datos ENEMDU-2016 ........................................................................................ 17
2.2 Hogares con acceso a tecnología ................................................................................... 17
2.3 Hogares con acceso a tecnología por área ................................................................ 18
2.4 Hogares con acceso a tecnología por regiones naturales .................................... 19
2.5 Hogares con acceso a tecnología por provincias .................................................... 20
2.6 Hogares con acceso a tecnología por sexo como jefe de hogar ......................... 22
2.7 Hogares con acceso a tecnología por etnia ............................................................... 23
2.8 Pobreza a nivel nacional .................................................................................................. 25
2.9 Pobreza por área ................................................................................................................. 26
2.10 Pobreza por regiones naturales .................................................................................... 27
2.11 Pobreza por provincias..................................................................................................... 28
2.12 Pobreza por sexo ................................................................................................................. 29
2.13 Pobreza por etnia ................................................................................................................ 30
–x–
2.14 Conclusión del capítulo .................................................................................................... 30
3 CORRELACIÓN ENTRE BRECHA DIGITAL Y DESIGUALDAD SOCIAL ............. 32
3.1 Coeficiente de Gini por distribución de ingresos.................................................... 32
3.2 Coeficiente de Gini tecnológico ..................................................................................... 35
3.3 Coeficiente de concentración ......................................................................................... 38
3.4 Base de datos ........................................................................................................................ 40
3.5 Correlación entre CGT y CG por distribución de ingresos .................................. 41
3.6 Correlación entre CC y CG por distribución de ingresos ..................................... 42
3.7 Conclusiones del capítulo ................................................................................................ 44
4 DESAFÍOS EN EL USO Y DESARROLLO DE TICS EN ECUADOR......................... 46
4.1 Ecuador dentro del marco mundial ............................................................................. 46
4.2 Entorno legal ........................................................................................................................ 49
4.3 Aporte de las telecomunicaciones dentro del PIB ................................................. 50
4.4 Objetivos, proyectos y políticas nacionales .............................................................. 52
4.5 Conclusiones del capítulo ................................................................................................ 57
5 CONCLUSIONES ................................................................................................................... 58
6 BIBLIOGRAFÍA ..................................................................................................................... 60
–xi–
LISTA DE TABLAS
Tabla 1. Total de Hogares con acceso tecnología a nivel nacional ........................ 18
Tabla 2. Total de hogares con acceso a tecnología por área .................................... 19
Tabla 3. Total de hogares con acceso a tecnología por regiones naturales ....... 19
Tabla 4. Total de hogares con acceso a tecnología por provincias ........................ 21
Tabla 5. Total de hogares con acceso a tecnología por sexo .................................... 23
Tabla 6. Total de hogares con acceso a tecnología por etnia ................................... 24
Tabla 7. Total de pobreza a nivel nacional ...................................................................... 26
Tabla 8. Total de pobreza por área urbana y rural ...................................................... 27
Tabla 9. Total de pobreza por regiones naturales ....................................................... 27
Tabla 10. Total de pobreza por provincias ........................................................................ 28
Tabla 11. Total de pobreza por sexo .................................................................................... 29
Tabla 12. Total de pobreza por etnia ................................................................................... 30
Tabla 13. Coeficiente de Gini por distribución de ingresos ........................................ 33
Tabla 14. Coeficiente de Gini por distribución de ingresos según provincias ..... 34
Tabla 15. Coeficiente de Gini tecnológico por provincias............................................ 37
Tabla 16. Coeficiente de Gini tecnológico .......................................................................... 38
Tabla 17. Coeficiente de concentración .............................................................................. 39
Tabla 18. Base de datos: CG, CGT, CC. .................................................................................. 41
Tabla 19. Correlación entre coeficiente de CG y CGT .................................................... 42
Tabla 20. Correlación entre CG por distribución de ingresos y CC .......................... 43
Tabla 21. Índice de preparación en red 2016 de América Latina y el Caribe ...... 48
Tabla 22. Sectores Estratégicos Industriales en Ecuador ............................................ 51
–xii–
LISTA DE FIGURAS
Figura 1. Total de hogares con acceso a tecnología por regiones naturales ....... 20
Figura 2. Total de hogares con acceso a tecnología por etnia ................................... 25
Figura 3. Curva de Lorenz por distribución de ingresos nacional. .......................... 33
Figura 4. Curva de Lorenz por distribución de tecnología: Azuay .......................... 36
Figura 5. Tabla de datos: Correlación entre CG y CGT ................................................. 42
Figura 6. Tabla de datos: Correlación entre CG y CGT ................................................. 43
Figura 7. Porcentaje de personas que usan TICs............................................................ 52
–xiii–
RESUMEN
CORRELACIÓN ENTRE BRECHA DIGITAL Y DESIGUALDAD SOCIAL
Autora: María Soledad Sánchez Vilela
Tutor: Bryan Fabrizio Espinoza Estrella
Buscar un correlacionamiento entre brecha digital y desigualdad social constituye un desafío teórico y metodológico, ya que actualmente no existen modelos definidos que expliquen una relación entre ambas variables. Al no existir una metodología que indique como medir este relacionamiento existe la necesidad dentro del país de lle-nar este vacío teórico y de entender nuestro entorno. Por tanto, a través de este tra-bajo se establecerá la correlación posible entre brecha digital y desigualdad social en Ecuador, según datos disponibles para el año 2016. Para ello se establecieron modelos matemáticos entre el coeficiente de Gini por distribución de ingresos frente a, por un lado, el coeficiente de Gini por distribución de hogares con acceso a tecno-logía, y por otro, frente al coeficiente de concentración de hogares con acceso a tec-nología. De acuerdo a los resultados se pudo observar que si existe una correlación para el primer modelo; aunque fue baja ya que en las provincias hay mayor dispari-dad en términos de acceso a las TICs que respecto al ingreso. A su vez, con respecto al segundo modelo, no se presentó correlación alguna; sin embargo, se puede expre-sar que existen mayores concentraciones del recurso tecnológico en unas provincias que en otras.
PALABRAS CLAVE: BRECHA DIGITAL / DESIGUALDAD SOCIAL / COEFICIENTE DE GINI POR DISTRIBUCIÓN DE INGRESOS / COEFICIENTE DE GINI TECNOLÓGICO / COEFICIENTE DE CONCENTRACIÓN / ECUADOR.
–xiv–
ABSTRACT
CORRELATION BETWEEN DIGITAL GAP AND SOCIAL INEQUALITY
Author: María Soledad Sánchez Vilela
Tutor:
Econ. Bryan Fabrizio Espinoza Estrella Finding a correlation between digital gap and social inequality constitutes a theo-retical and methodological challenge, since there are currently no defined models that explain a relationship between the two variables. In the absence of a methodol-ogy that indicates how to measure this relationship there is a need within the coun-try to fill this theoretical gap and to understand our environment. Therefore, through this work will establish the possible correlation between digital divide and social inequality in Ecuador, according to data available for 2016. For this purpose, mathematical models were established between the Gini coefficient for income dis-tribution versus, for one side, the Gini coefficient for the distribution of households with access to technology, and, on the other hand, the coefficient of concentration of households with access to technology. According to the results it was observed that if there is a correlation for the first model; although it was low since in the provinces there is greater disparity in terms of access to the TICs than with respect to the in-come. In turn, with respect to the second model, no correlation was presented; how-ever, it can be expressed that there are higher concentrations of technological re-source in some provinces than in others. KEYWORDS: DIGITAL GAP / SOCIAL INEQUALITY / GINI COEFFICIENT BY INCOME DISTRIBUTION / GINI TECHNOLOGY COEFFICIENT / CONCENTRATION COEFFI-CIENT/ECUADOR.
–1–
INTRODUCCIÓN
Actualmente se convierte en un desafío teórico y metodológico hallar una correla-
ción entre brecha digital y desigualdad social, puesto que no existen modelos defi-
nidos que expliquen una relación entre ambas variables. Así entonces, surge la ne-
cesidad dentro del país en establecer modelos que nos permitan conocer nuestro
entorno. La integración de las herramientas tecnológicas dentro de la población es
un mecanismo importante para superar barreras, y a su vez, para generar desarrollo
y crecimiento de capacidades humanas. La brecha digital está considerada como la
brecha que exacerba limitaciones y desigualdad en otras áreas dentro del desarrollo,
como salud, educación y empleo, entre otras (Acevedo, Fernandez, Peña, & Frías,
2012). Es decir, desde esta óptica, se considera que las limitaciones en el uso de las
tecnologías originan una serie de barreras y se plantea al poco acceso tecnológico,
consecuentemente, como la base de las desigualdades.
Por otro lado, se conoce que la pobreza supone la privación de capacidades entre
ellas las tecnológicas; por tanto, esta pobreza evitaría a las personas participar de
los beneficios del desarrollo humano. Con ello, desde esta perspectiva, la pobreza se
convierte en sinónimo de inestabilidad social y política y nutre así, negativamente,
a la inseguridad y corroe las oportunidades de progreso en una sociedad (Tenazos
& Quiñones, 2013). A diferencia de la óptica anterior, expuesta en el párrafo ante-
rior, se plantea aquí a la pobreza como la base de las demás barreras y desigualda-
des. Por lo que surge un encadenamiento o una especie de círculo vicioso que, en el
peor de los casos, enfrenta tanto a la pobreza con la brecha digital.
Por consiguiente, este proyecto de investigación se diseña como una determinante
para analizar si existe o no un relacionamiento entre ambas variables, y en caso de
existir, se analizará la magnitud o sensibilidad. En todo caso, con el fin de continuar
con esta sección introductoria se plantea a continuación la hipótesis, objetivo gene-
ral, objetivos específicos, alcance y limitaciones, metodología empleada, fuentes de
información, así mismo como la estructura de este proyecto de investigación.
–2–
Hipótesis
Existe una correlación directa en el país que explica que a mayor brecha digital se
incrementan los niveles de desigual social.
Objetivo general
Establecer una correlación posible entre la brecha digital y la desigualdad social, en
Ecuador, según datos disponibles para el año 2016; con el fin de explicar esta de-
sigualdad a partir de la carencia de conocimientos y manejo de herramientas tecno-
lógicas dentro de la población ecuatoriana.
Objetivos específicos
Para cumplir con el propósito del objetivo general se plantean los siguientes objeti-
vos específicos:
• Calcular la brecha digital tanto por provincia como para el país en general.
Para ello se aplicarán dos coeficientes, el primero, llamado coeficiente de
GINI por distribución de hogares con acceso a tecnología, y, el segundo, lla-
mado coeficiente de concentración de hogares con acceso a internet.
• Calcular la correlación entre los coeficientes de brecha tecnológica y el coefi-
ciente de GINI por distribución de ingresos, este último que explica la de-
sigualdad social existente en el país.
• Realizar críticas o sugerencias en relación a la política establecida en el país,
en los últimos años, y que están llamadas a reducir la brecha digital.
Alcance
Este proyecto de investigación tiene como finalidad calcular la correlación existente
entre brecha digital y desigualdad social, y se realizará dicho cálculo por provincia
y para el país en general, así entonces tendrá una dimensión nacional.
–3–
En relación a los dos modelos matemáticos que serán testeados se planteará para
ambos casos como variable de entrada al coeficiente de Gini por distribución de in-
gresos. En relación al primer modelo se planteará a su vez como variable represen-
tativa de brecha digital al coeficiente de Gini por distribución de hogares con acceso
a tecnología. En relación al segundo modelo, se presenta como variable de salida al
coeficiente de concentración de hogares con acceso a tecnología.
Metodología
El proceso para llevar a cabo la investigación se lo realizara a través del método de
investigación mixto, es decir se utilizará tanto un método cualitativo y uno cuantita-
tivo, como ya fue explicado en la sección anterior. En todo caso, como aspecto fun-
damental de este trabajo será calcular la correlación, a nivel nacional, entre la bre-
cha digital versus la pobreza definida, esta última expresada por el coeficiente de
Gini por ingresos. La brecha digital será calculada por dos vías, por un lado, a partir
del coeficiente de GINI por distribución de hogares con acceso a tecnología, dentro
del cual el término tecnología se refiere a los hogares con acceso a computadoras e
internet; y, por otro lado, a partir del coeficiente de concentración de hogares con
acceso a tecnología, el mismo que indica la relación entre computadores por provin-
cia frente a la nacional. Una vez definidas y calculadas cada una de las variables se
procederá a calcular el coeficiente de Pearson.
Fuentes de información
Se contará con la base de datos de la encuesta nacional de empleo, desempleo y
subempleo –ENEMDU- de 2016; encuesta que es realizada periódicamente por el
Instituto Nacional de Estadísticas y Censo –INEC-. Al ser un estudio que parte de
datos generalizados, en el cual se involucran los ingresos socioeconómicos de los
ecuatorianos, y la cantidad del recurso tecnológico de las familias ecuatorianas, no
se hará incidencia de grupos específicos o de etnias, sino más bien, de una estratifi-
cación por quintiles al momento de calcular el índice de Gini por distribución de in-
gresos, el coeficiente de Gini tecnológico y el índice de concentración.
–4–
Estructura del proyecto de investigación
Este trabajo estará comprendido por cuatro partes principales; más dos secciones
adicionales, una dedicada al capítulo introductorio expuesto al inicio de este trabajo,
y la otra dedicada a las conclusiones expuestas al final. El capítulo uno plantea un
marco teórico en el que se analizan los diferentes enfoques principales sobre desa-
rrollo económico, capital humano y sobre los conceptos actuales de brecha digital.
En el capítulo dos se determinará la brecha digital, tanto por provincia como para el
país, por un lado, a través del coeficiente de GINI por distribución de hogares con
acceso a tecnología; por otro, a través del coeficiente de concentración de hogares
con acceso a tecnología. En el capítulo tres se determinará el nivel de correlación
existente en el país entre las brechas digitales y el coeficiente de GINI por distribu-
ción de ingresos. Por último, en el capítulo cuatro se analizarán las políticas estable-
cidas en el país y los desafíos a los cuales deberán enfrentarse el país para reducir
la brecha digital existente.
–5–
1 MARCO TEÓRICO
Dentro de este capítulo se analizará el concepto de desarrollo humano, en el cual se
pone énfasis en la importancia de la educación para vencer pobreza, desigualdad y
exclusión por género. Sobre esta base, se enfrenta a los problemas sociales mencio-
nados y a la posibilidad de reducirlos ante sistemas educativos de calidad, que, en
Latinoamérica, han carecido históricamente de una adecuada planificación y de po-
líticas educativas acertadas. Por último, se plantea el concepto de brecha digital
como debate actual, acerca del círculo vicioso que se genera entre pobreza y de-
sigualdad frente al analfabetismo digital.
1.1 La educación dentro del concepto de desarrollo humano
La sociedad de la información surge a mediados de los setenta, desde entonces, este
proceso se lo ha intentado explicar desde varias perspectivas, sean filosófica, econó-
mica, política y sociológica, entre otras. Así también, desde cada una de éstas pers-
pectivas han tomado diferentes enfoques. Desde la economía existe una visión de-
nominada desarrollo humano, la cual es objeto de una publicación generada por el
Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo –PNUD- desde 1990. Esta me-
dición se efectuó tomando en cuenta factores como educación, salud, ingreso y cre-
cimiento económico (Fongang, 1999).
Para Silva Colmenares (2007), el concepto comprende.
… todas las opciones humanas, en todas las sociedades y en todas las etapas de desarrollo. Expande el diálogo sobre el desarrollo, pues éste deja de ser un debate en torno a los medios -crecimiento del producto nacional bruto, PNB- para convertirse en un debate sobre los fines últimos. Al desarrollo hu-mano le interesan tanto la generación de crecimiento económico como su distribución, tanto las necesidades básicas como el espectro total de las aspi-raciones humanas, tanto las aflicciones humanas del norte como las privacio-nes humanas del sur.
El mérito de desarrollo humano, que fue expuesto por el PNUD, radicó en que se
expuso al bienestar humano como fin último de todo proceso económico y social.
Con ello cambia radicalmente el enfoque del progreso material y lo reemplaza por
–6–
el bienestar del individuo como objeto principal. A su vez, en 1992, tanto la Comisión
Económica para América Latina y el Caribe -CEPAL- y la Organización de la Naciones
Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura –UNESCO- emitieron un documento
en el cual conciben a la educación y al conocimiento como prioritario para el desa-
rrollo y cambio económico (CEPAL/UNESCO, 1992).
En América latina, entre 1950 y 1980, el sistema educativo creció de manera signi-
ficativa, aunque lamentablemente también se incrementaron las deficiencias y se
redujeron las oportunidades educativas. Con ello, los países de la región quedaron
en desventaja dentro de la economía internacional. Aunque estos problemas se tor-
naron estructurales puesto que los niños que se matriculaban no siempre recibían
una formación adecuada, mientras tanto, otros ingresaban muy tarde o se retiraban.
Por otro lado, los estados frente a sus respectivas crisis tendían a destinar menos
recursos a la educación, con lo cual la pobreza educativa se acentuaba, los salarios
de los maestros disminuían, y la infraestructura educativa también se empobrecía a
manera de un círculo vicioso (Ibídem).
Lo anterior condujo a un estancamiento de los contenidos educacionales con un
asentamiento de los rasgos burocráticos y centralistas, lo que desvinculó a los siste-
mas educativos de los problemas sociales del país. Todo ello se presenta hasta ahora
como una impronta de dichos problemas estructurales. De igual manera, permanece
una disparidad entre la educación rural y urbana, puesto que el joven debe despla-
zarse hasta los centros poblados, y con ello nace otro motivo para la deserción del
campo a la ciudad. Incluso el currículo académico dentro de nuestros sistemas edu-
cativos es diseñado en la ciudad con su aplicativo citadino, y no necesariamente es
el más adecuado para la realidad rural. Por todo ello, se genera un decaimiento del
nivel de productividad en el campo.
Es así como en la mayoría de países, la educación ha sido una de las fuentes más
importantes para el crecimiento social, a la vez, está declarada como un derecho
para todos los ciudadanos. Por tanto, la inversión educativa deberá ser siempre
alentada, sea a través de establecimientos, demás infraestructuras, capacitación de
–7–
docentes, becas, intercambios, entre otras. De hecho, la educación beneficia la re-
ducción de la pobreza, a su vez hace posible que sectores emergentes de estratos
populares puedan ser capacitados de manera profesional para el desempeño de ac-
tividades productivas. Así, pueden vincularse en la industria, comercio, entre otros
sectores, como personal capacitado o como dueños de sus propios negocios o lide-
rando sus propios emprendimientos.
Así entonces, podemos generar una primera conclusión, por tanto, sabemos que el
objetivo principal del desarrollo humano se enfoca en aumentar las oportunidades
de las personas; dentro de la cual, no sólo se preste atención a la riqueza económica
sino también a la vida humana. Para esto, los Estados deberán crear instrumentos y
condiciones necesarias para tal desarrollo. Entre dichas herramientas y condiciones
se presenta la participación en la vida política y comunitaria, sostenibilidad ambien-
tal, seguridad y derechos humanos, promoción de la igualdad y justicia social; pero
sobre todo, la educación se convierte en un hilo estructural que será el conductor
del conocimiento para alcanzar a las anteriores y que permitirá un nivel de vida
digna.
En América Latina las condiciones educativas han crecido de manera significativa a
partir de los cincuenta. Se eleva así el nivel de formación en la población, donde la
mayoría de niños logran terminar la primaria, las mujeres obtienen oportunidades
para ingresar al mercado laboral e incluso pueden ingresar a escuelas y universida-
des. Sin embargo, hasta los ochenta existieron estas deficiencias en la calidad edu-
cativa lo que ocasionó desventajas en el desarrollo de los países latinoamericanos
frente a una economía internacional. No obstante, a pesar de los esfuerzos y mejoras
educativas, aún se refleja ciertos niveles de analfabetismo ante la oferta escolar que
se le proporcionaba a la ciudadanía. (CEPAL/UNESCO, 1992).
1.2 Desigualdad social y exclusión de género frente a la educa-ción
En las década de los ochenta y noventa, el ingreso de los niños a las escuelas era de
forma tardía y a su vez repetitiva. Esto debido a que no todos tenían la oportunidad
–8–
de entrar a una institución educativa, y, si lograban ingresar, pronto esta parte de la
población se retiraba ya que sentían la necesidad de trabajar y poder generar ingre-
sos. Otro cierto porcentaje de niños perdía el año escolar por mala nutrición, lo que
a su vez les generaba deficiencias en las condiciones de aprendizaje. Frente a las
escasas políticas estatales dentro del apoyo escolar, desde luego, las instituciones
educativas no contaban y no cuentan con programas de nutrición. Otro caso de aná-
lisis serían los bajos salarios de los maestros, los mismos que tienden a renunciar
para buscar otros sectores más rentables (Ibídem).
Como se expresó anteriormente, en la actualidad las personas tienen mayor acceso
a la educación, sin embargo no todos pueden acceder a una educación de calidad,
principalmente, ya que existen diferencias entre los centros educativos. De hecho,
existen escuelas que forman parte del sector público o del sector privado. Desde
luego, las que pertenecen al sector público son de acceso gratuito, mientras que las
privadas tienen un costo elevado. Usualmente, se parte del paradigma que las del
sector privado proveen profesores de mayor nivel preparativo por las mejores con-
diciones salariales. Por esta razón mencionada, se generan circuitos educacionales
diferenciados en términos de estratos sociales. A raíz de ello, se reflejaría un bajo
rendimiento educativo en los sectores más pobres.
Así, el éxito o fracaso de la trayectoria escolar de los niños y adolescentes depende
del trabajo docente, de ahí que, entre ellos existe una relación directa que se desa-
rrolla en el día a día. Por tanto, esta relación debe ser la más idónea para contribuir
con los conocimientos del cual se alimentan estos alumnos, y, por esta razón, se debe
garantizar una educación de calidad. En este sentido, depende de nuestras socieda-
des desafiar dos grandes dimensiones que son, por un lado, la educación y, por otro,
el estatus social. Sobre estas dimensiones se deberán desarrollar estrategias peda-
gógicas en que, independientemente de su origen social, étnico o religioso, los niñas
y niños puedan aprender y formarse, dando prioridad a la educación y no tanto a la
estratificación social (Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología, 2006).
–9–
En Latinoamérica, la historia de la escolaridad ha sido el mejor antídoto para vencer
la ignorancia y la desigualdad. Ha hecho que la población tenga al menos un nivel
mínimo de alfabetización, con lo cual, esto ha permitido que la población tenga claro
sus derechos y responsabilidades como ciudadanos. Aunque estas políticas de esco-
larización hayan tenido efectos positivos, se recalca históricamente, que hubo mar-
ginación para aquellas escuelas de culturas originarias y populares por falta de en-
tendimiento acerca de los conocimientos ancestrales. Además, como otra crítica,
debe señalarse que el modelo funcional de desarrollo educativo, aunque puso énfa-
sis en la expansión de las clases medias, a través de la enseñanza obligatoria, fue
visto de manera segmentada, es decir, con características específicas según al nivel
social al cual se pertenecía (Redondo, 2015).
En cuanto a la educación rural y urbana, aunque tienen que ser diferenciadas de
acuerdo a sus realidades, debe decirse, que no deberán tener diferencias en torno a
la calidad en sus sistemas educativos. En contraste a lo dicho, en la zona rural se
tienen menos oportunidades de acceder a un mejor nivel, lo que obliga a las perso-
nas a desplazarse a sectores mayormente poblados con mejores niveles de calidad.
Esto conlleva a que se abandone el sector rural a desmedro o hacinamiento de los
sectores populosos urbanos. Para algunos, se elimina el sustento diario que en un
principio se generaba a partir de las actividades agrícolas, y, además, se perjudica la
productividad agrícola. Esta última que podría más bien ser impulsada con una en-
señanza de calidad y oportuna (Ibídem).
Para combatir la desigualdad social y la exclusión de género, fuentes de subdesarro-
llo, es importante generar unas bases robustas de la educación con políticas sólidas.
Aunque se debe comprender que la educación no depende solo de una institución
educativa sino que va más allá. Si bien es cierto, la educación es un derecho de toda
la vida, en todo ámbito, la sociedad debe ser la primera escuela. No obstante, se ha
concentrado en delegar esta responsabilidad de manera completa a las escuelas,
pero sobre todo a los profesores que trabajan en ellas. Fuera de estas anomalías
puntuales, lo cierto es que, de manera las escuelas familias y sociedad son las que
–10–
pueden y deben combatir la desigualdad y los problemas de género (Redondo,
2015).
En cuanto a la familia, tienen un papel fundamental para el desarrollo de conoci-
mientos del alumno, ya que adquieren compromisos con la escuela a la que acuden
sus hijos. Es así que, estas familias requieren complementariamente otros recursos
para apoyarse en tan importante accionar, como económicos, hábitos de trabajo y
académicos. Así entonces, un alumno, desde el hogar, podrá fortalecer actividades
como la lectura, las matemáticas, ciencias, y demás áreas para que puedan explotar
las potencialidades educativas. Sobre este marco utópico, para muchos casos, las fa-
milias no disponen de recursos que puedan brindar las mejores condiciones a sus
hijos. Sobre esto, se generará otro círculo vicioso, ya que las familias con dichas li-
mitantes tratarán de aportar un conocimiento también limitado (Marchesi, 2000).
En Ecuador, la educación ha logrado uno de los mayores progresos de la población,
pero no es la excepción ante otros países. A pesar de estos esfuerzos, lastimosa-
mente, esta mejoría no ha sido igualitaria para todos los ecuatorianos. En la pobla-
ción rural, especialmente en las comunidades indígenas, aún se percibe la escasez
de oportunidades y recursos necesarios que permitan alcanzar una educación ade-
cuada. De hecho, estas poblaciones se excluyen de un sistema educativo de calidad
por sus condiciones socioeconómicas y étnicas, residencia, sexo, entre otras; siendo
solo la población de las zonas urbanas quienes participan masivamente del sistema
educativo. Esto último ha provocado en la población de Ecuador que la población
urbana pueda tener un mayor ascenso social (SIISE, 2001).
Por otro lado, a manera de otro rasgo que aún permanece, históricamente existieron
desventajas en algunos países donde la mujer no podía acceder a la educación, y es
por esta razón que su nivel educativo era deficiente frente a la de un hombre. Sin
embargo, aun cuando una mujer esté mejor preparada, dicha condición no le ase-
gura un empleo mejor remunerado. Así mismo las mujeres se concentraron en de-
terminadas carreras que les permitían su acceso al mercado laboral, tales como en-
fermería y pedagogía. De hecho, la mujer se encuentra estereotipada, de acuerdo a
–11–
la publicidad, como ama de casa, como testeadora de productos de limpieza o ama
de casa, entre otras, y no necesariamente como una persona con éxito profesional y
dueña de otros talentos. A las mujeres, dentro de este marco de subvaloración, in-
cluso, se les exige mayores años de estudios para acceder a las mismas ocupaciones,
a pesar de tener mayores cualificaciones o similares, en algunos casos, que las del
hombre (Ibídem).
La incógnita que surgiría es acerca del momento en que se crean estos círculos vi-
ciosos entre desigualdad, exclusión por género y educación. Puede decirse que es la
consecuencia de una mala planificación de políticas educativas y de igualdad, o par-
tir de los pobres presupuestos orientados a estas áreas, desde luego, a partir de una
subvaloración o desmerecimiento de estas bases estructurales. Para autores como
Salazar (2012), radica en mantener las condiciones de explotación del hombre, pues
frente a la falta de educación y capacitación se vuelven más vulnerables y coercio-
nables. Pero los tiempos han cambiado, ahora se observa la importación de tener
una población con conocimientos, ya que, por el contrario, al no tener años de esco-
laridad son calificados como personas no útiles y no productivas de la Patria.
En Ecuador se ha declarado en los últimos treinta años, con mayor énfasis en la úl-
tima década, una lucha intensa contra la pobreza y la desigualdad, con base en au-
mentar los niveles de educación. Por ello, el acceso al sistema educativo básico es
obligatorio y gratuito, con ello, se aseguraría una inclusión a la vida digna. La de-
sigualdad en la sociedad es un tema que ha costado años y aún no se ha podido eli-
minar, y, de hecho, se suma ahora la falta de acceso a las tecnologías de la informa-
ción. Esta última que permite el desarrollo de los conocimientos de forma igualita-
ria, y que brinda mayores posibilidades de competencia en el mercado laboral, para
así, poder ocupar puestos de trabajo con mejores condiciones salariales, consecuen-
temente, se vuelve en un recurso que permite el desarrollo económico de toda la
sociedad (Reygadas, 2008).
–12–
1.3 Brecha digital
La pobreza se convierte en sinónimo de inestabilidad social y política, y nutre así,
negativamente, a la inseguridad y corroe las oportunidades de progreso en una so-
ciedad (Tenazos & Quiñones, 2013). A su vez, la pobreza supone la privación de ca-
pacidades, entre ellas las tecnológicas, que sin esta última, las personas no podrían
participar en los beneficios del desarrollo humano. En todo caso, esta visión plantea
a la pobreza como la base de las demás barreras y desigualdades. Por lo que surge
un encadenamiento u otro círculo vicioso que enfrenta ahora tanto a la pobreza con
la brecha digital. En este sentido, las tecnologías de la información y comunicación
–TICs- se las considera como el origen de oportunidades para el crecimiento econó-
mico y el desarrollo social.
Sin embargo, para aquellas personas que no pueden acceder al beneficio de las TICs,
esto puede ser motivo de exclusión y del no favorecimiento de todos los beneficios
que puedan proveer. Es aquí donde se da origen a la denominada brecha digital, la
cual se ha dado por diferentes factores como nivel de ingresos, género, etnias y ubi-
cación geográfica. Consecuentemente, de acuerdo a cierta visión teórica, es un mo-
tivo adicional para generar también desigualdades económicas, demográficas y geo-
gráficas. De esta manera, la carencia de las TICs genera un efecto negativo en el desa-
rrollo económico lo que ocasionaría todo lo anteriormente mencionado. (Jordan,
2010).
En todo caso, se considera como brecha digital a la diferencia cuantificable entre las
personas de una sociedad que tienen acceso a internet en sus hogares y las que no.
Es decir, es la diferencia entre aquellas que conocen su funcionamiento por la fre-
cuencia en la que usan esta herramienta, y, por otro lado, de aquellas personas que
no disponen de este recurso y no tienen el ingreso necesario para disponerlas en sus
hogares. De este panorama nace el nuevo término denominado analfabetismo digi-
tal. Este último que se define como la carencia del uso de las TICs, que en la actuali-
dad se han hecho indispensables tanto para estudiantes como para la sociedad en
general (SITEAL, 2012).
–13–
La integración de las herramientas tecnológicas dentro de la población es un meca-
nismo importante para superar barreras, y a su vez, permiten generar desarrollo y
crecimiento de capacidades humanas. A la vez, la brecha digital está considerada
como la brecha que exacerba limitaciones y desigualdad en otras áreas dentro del
desarrollo, como salud, educación y empleo, entre otras (Acevedo, Fernandez, Peña,
& Frías, 2012). Es decir, desde esta óptica, se considera que las limitaciones en el
uso de las tecnologías originan una serie de barreras, y se plantea consecuente-
mente como la base de las desigualdades. Sobre este antecedente, existen varias bre-
chas digitales, denominadas como multiformes.
La brecha digital multiforme, es llamada así, ya que entre ellas se fusionan para la
exclusión tanto en situaciones nacionales como locales. Dentro de estas barreras se
encuentran los recursos económicos, geografía, edad, sexo, lengua, educación y pro-
cedencia sociológica o cultural, empleo, e integridad física. Cada una de ellas se torna
en los factores más relevantes para la existencia de brecha digital. Desde luego, entre
sus diferentes fusiones generan la exclusión de las personas, que generan a su vez
el desconocimiento de las herramientas informáticas que hoy en día se han conver-
tido en la base para la educación y el ingreso al mundo laboral (UNESCO, 2005). Con
todo, la falta de acceso a las mismas es el factor de desigualdad, y con ello se plantea
un nuevo círculo vicioso dentro de este marco teórico expuesto.
La brecha digital, sin duda alguna, nos recuerda que ha existido una geografía de
internet, la cual coincide con la geografía del desarrollo de los países ricos, de hecho,
se puede observar una estrecha correlación entre el equipamiento en servidores In-
ternet y el indicador de desarrollo humano (IDH) del Programa de las Naciones Uni-
das para el Desarrollo –PNUD-. Esto nos ha mostrado de forma inevitable el desa-
rrollo de los países ricos por medio de las nuevas tecnologías, a las cuales los países
en desarrollo no han podido acceder por falta de recursos económicos (Ibídem). Por
otro lado, la solidaridad digital, tiene como objetivo principal, reducir esta brecha
digital en los países en desarrollo mediante las nuevas tecnologías, estas mismas
que contribuirían con el desarrollo de estos países hacia las sociedades del conoci-
miento.
–14–
Si bien en cierto, la reducción de la brecha digital es un desafío que los gobiernos de
los países no pueden enfrentarlos solos, sino, con ayuda y cooperación de poderes
públicos, organizaciones internacionales, y con el apoyo del sector privado. El grupo
de los ocho países con las economías más industrializadas del planeta G-8, han
creado estrategias de desarrollo y han contribuido a la lucha contra la pobreza de
los países en desarrollo (Ibídem). Como se conoce, en la actualidad, las TICs se han
convertido en una necesidad básica, ya que aporta al desarrollo humano y crea opor-
tunidades para la reducción de brecha digital en una sociedad. Sin embargo existen
obstáculos que se deben vencer, para así poder crear oportunidades a los grupos de
personas que no tienen acceso a estos beneficios de las nuevas tecnologías.
El reducir la brecha digital no solo depende de los países menos privilegiados, sino
también, es la responsabilidad que tiene cada ser humano para avanzar hacia un
mundo más justo. De allí, los individuos deberán aprovechar las oportunidades que
brinda cada gobierno en el aprendizaje de las tecnologías (Serrano & Martinez,
2003). Hoy en día, el uso de las tecnologías es indispensable, y en varios países de
América Latina, el acceso a tecnologías ha sido decretado como un derecho para la
ciudadanía. Así también se crea el concepto de alfabetización digital que, básica-
mente, describe las habilidades del uso de las TICs en la que toda persona debe tener
conocimiento. Como se expuso con anterioridad, esta condición de acceso no permi-
tirá su exclusión ante una sociedad tecnológica, debido, principalmente, por las nue-
vas habilidades y competencias adquiridas por y para el acceso de las mismas.
Sin embargo, los sistemas educativos de América Latina aún presentan problemas
estructurales, lo que no permiten alcanzar una educación de calidad con respecto a
las TICs (Severin, 2014). Existe una marginación en el uso de las TICs, como se había
mencionado anteriormente, en todo caso, la aparición de nuevas tecnologías reper-
cute en el surgimiento de una nueva clase social llamada exclusión. De acuerdo a
Almenara (2004), "La desigualdad se alimenta de la riqueza del sistema. A medida
que se avanza en los niveles técnicos y económico se retrocede en el aspecto social".
Está claro que siempre ha existido brecha digital, es decir, de personas que se privan
–15–
de acceder a determinadas tecnologías, tanto para consumidores como para produc-
tores, a causa de la edad, género, situación económica, entre otras.
Es importante destacar que una nueva tecnología no sustituye en su totalidad a las
existentes, de esta manera, las tecnologías no son sustitutivas sino suplementarias.
Por otro lado, las tecnologías no se basan solo en la computación, sino que van más
allá. El internet y las nuevas tecnologías que han sido asociadas han aportado consi-
derablemente a la comunicación de la humanidad, esto mediante correo electrónico,
charlas on-line, llamadas a través de un dispositivo móvil, entre otras. Dichas herra-
mientas que han permitido a las personas comunicarse de manera eficaz pero sobre
todo a bajos costos (Rodriguez, 2006). Sin embargo, el acceso a Internet en países
latinoamericanos no ha sido tan representativo como en las potencias mundiales.
En la mayoría de hogares, las familias disponen de estas nuevas tecnologías. Este
acceso se debe a los ingresos que tienen cada familia y, consecuentemente, la posi-
bilidad de poder obtener equipos electrónicos en sus hogares. A pesar de ello, quie-
nes no tengan los ingresos necesarios para invertir en estos equipos, se encuentran
en desventaja y disminuyen sus posibilidades de acceder a las ofertas de trabajo. Se
imposibilita así el mejorar el estatus socioeconómico, debido a la falta de conoci-
miento sobre estas herramientas informáticas. La brecha digital, es un reflejo de las
condiciones económicas, políticas y sociales de una sociedad, la cual, está relacio-
nada con la disponibilidad y el uso de información que permiten ampliar las opor-
tunidades de desarrollo humano.
Para tener Internet se requiere contar con otras facilidades como electricidad, equi-
pos electrónicos, contrato de servicio a internet, pero sobre todo, se requiere de
cierto de nivel de educación. Esta última, en general, permitirá a un ciudadano poder
manejar estas herramientas, mediante la navegación y búsqueda de información a
cargo de la mayor realización de Internet (Diaz, Pérez, & Florido, 2011). En la actua-
lidad, poder acceder a las TICs es un requisito fundamental, ya que cada vez depen-
demos más de la tecnología para poder comunicarnos. A pesar de esto, la brecha
digital no deja de existir a medida que pasan los años, con lo cual, erradicar este
–16–
problema social depende mucho de un gobierno para mejorar las oportunidades
(Ibídem).
1.4 Conclusiones del capítulo
La educación se ha convertido en una de las mejores estrategias para formar a la
ciudadanía del siglo XXI. Se convierte desde luego en uno de los componentes del
proceso de desarrollo en donde, por un lado, se debe considerar el perfil de la per-
sona, su condición geográfica y etnia; por otro, se deberá tener en cuenta acerca del
tipo de sociedad que se espera crear mediante los conocimientos en que se imparta
desde los medios educativos. Cabe señalar que, gracias a la educación, las personas
pueden acceder a un trabajo de calidad y pueden participar de manera adecuada
ante los procesos democráticos (Jimenez, 2011). El desarrollo económico de un país,
hoy en día, se ha vinculado con la reducción de la brecha digital. La misma que con
el pasar de los años se ha innovado de tal manera que el desarrollo tecnológico ha
provocado un gran impacto en los sectores productivos.
Así entonces, las TICs se vuelven un requisito esencial para el funcionamiento de
una sociedad. Por otra parte, la brecha digital actualmente genera las diferencias
entre los países desarrollados y en desarrollo. Esta diferencia radica en la capacidad
de acceso a estos instrumentos y herramientas de la información, y en los niveles de
formación que tienen las personas para utilizarlos, con lo cual unos países tienen
mayores disponibilidades que otros. Sobre dicha base, las oportunidades entre in-
dividuos, familias, empresas y áreas geográficas son mayores en los países más ri-
cos, y en los cuales se amplían por tanto el rango de actividades económicas (ALADI,
2003).
–17–
2 TICS Y POBREZA EN ECUADOR: PERFIL 2016
Dentro de esta sección se analizará el comportamiento de las diferentes variables
dentro de Ecuador; por un lado, en relación al acceso de las tecnologías de la infor-
mación, es decir, sobre la disponibilidad que tienen los hogares a computadoras con
internet; y, por otro, acerca de los datos de pobreza por individuo. Para ambos casos,
se analizará a nivel nacional y de manera general, así como por área rural o urbana,
región, provincia, sexo y etnia. No obstante, en un primer punto se hará mención
sobre la base de datos de la cual se procesó la información, y se han estructurado y
emitido las diferentes tablas y figuras aquí mostradas.
2.1 Base de datos ENEMDU-2016
La información para la elaboración de las diferentes tablas y gráficos fue obtenida
de la encuesta nacional de empleo, desempleo y subempleo de 2016 –ENEMDU-. Di-
cha estadística es realizada de manera anual por el Instituto Nacional de Estadísticas
y Censos –INEC-. La ENEMDU es realizada de manera organizada y expuesta en su
web en forma de base de datos, y contiene a todos y cada uno de los elementos de la
población, conforme al interés en el que participa cada familia e individuo. En todo
caso, para la realización de la presente investigación se ha hecho uso de la informa-
ción relacionada a los individuos y hogares con acceso a tecnología, de acuerdo a su
área, regiones naturales, etnias, género y por provincias. A su vez, se ha hecho uso
de los datos que expliquen la situación socioeconómica de dichas familias. Cabe re-
saltar, una vez más, que el objeto del presente trabajo es analizar la correlación po-
sible entre la brecha digital y la desigualdad social.
2.2 Hogares con acceso a tecnología
El acceso de tecnología en los hogares se constituye como una herramienta que per-
mite el desarrollo de las personas y de la sociedad en sí. Además, facilita el manejo
de la información y permite crear, compartir, modificar, enriquecer y transformar el
conocimiento. Las nuevas tecnologías aumentan cada vez con mayor impacto en una
–18–
sociedad, tanto por la aparición de nuevos dispositivos como por las actualizaciones
de sus aplicaciones. Por esta razón, el costo de estos productos se va reduciendo a
medida que nuevas marcas salen al mercado. De hecho, entre las diferentes marcas
se incluyen como nichos de mercado a hogares con bajos recursos, por lo que en
principio se facilitaría la adquisición de estos equipos (INEGI, 2016).
Aunque, como se conoce, existen grupos o familias que por sus bajos recursos dicho
acceso es básicamente imposible. Sin embargo, la diferencia que existe entre hoga-
res con acceso a tecnología y los que no, se ha reducido con el pasar de los años, pero
no se ha logrado eliminar en su totalidad. En Ecuador el acceso a una computadora,
ya sea de escritorio o portátil, con disponibilidad de internet, se torna difícil por la
disparidad de ingresos de los diferentes individuos, puesto que, para algunos, no son
lo suficientemente altos para la adquisición de estas herramientas. La tabla 01
muestra el total de los hogares correspondientes al año 2016, y, sobre ellas, el nú-
mero que poseen tanto computador como acceso a internet.
Tabla 1. Total de Hogares con acceso tecnología a nivel nacional
Descripción Total %
Total de hogares con tecnología 1.472.799 37,7%
Total de hogares en general 3.901.624 100%
Fuente: ENEMDU 2016
Elaboración propia
2.3 Hogares con acceso a tecnología por área
El término hogares con acceso a tecnología por área está comprendida por el nú-
mero de hogares con este acceso, pero con la diferenciación entre área rural y ur-
bana. En la tabla 2 se visualiza esta realidad en el país, con lo cual, se puede observar
que la falta de infraestructura y equipamiento informático en el área rural es bas-
tante considerable si lo comparamos con el área urbana. En el área urbana se en-
cuentra una concentración del 86,7% del total de hogares con acceso a tecnología,
mientras que el área rural se encuentra el complemento, es decir un 13,3%. Desde
–19–
luego, en la zona rural las personas no disponen de los recursos necesarios para ad-
quirir equipos electrónicos, mucho menos disponer de internet, que les permita en-
riquecer sus conocimientos en base a las nuevas tecnologías.
Cabe recalcar que la población rural, aún carece de instituciones educativas de
buena infraestructura, consecuentemente no disponen de tecnología en la misma, lo
que refleja un atraso en el aprendizaje a partir de las herramientas informáticas.
Tabla 2. Total de hogares con acceso a tecnología por área
Área Hogares por área % Hogares con acceso
a tecnología %
%
Concentración por área
Urbana 2.677.188 68,6% 1.276.864 86,7% 47,7%
Rural 1.224.436 31,4% 195.935 13,3% 16,0%
Total 3.901.624 100% 1.472.799 100% 37,7%
Fuente: ENEMDU 2016
Elaboración propia
2.4 Hogares con acceso a tecnología por regiones naturales
Ecuador posee cuatro regiones naturales, y estas son Sierra, Costa, Amazonía e In-
sular, en las cuales las familias con acceso a tecnología comprenden aquellas que
tienen computador y acceso a internet como fue expuesto anteriormente. La tabla 3
muestra la distribución respectiva por área natural.
Tabla 3. Total de hogares con acceso a tecnología por regiones naturales
Región Natural Hogares por
Región %
Hogares con acceso a
Tecnología %
%
Concentración en cada región
Región Sierra 1.810.409 46,4% 829.062 59,29% 45,8%
Región Costa 1.890.943 48,5% 586.696 39,84% 31,0%
Región Amazonía 183.026 4,7% 52.407 3,56% 28,6%
Región Insular 7.311 0,2% 3.479 0,24% 47,6%
No delimitadas 9.935 0,3% 1.155 0,08% 11,6%
Total 3.901.624 100% 1.472.799 100% 37,7%
Fuente: ENEMDU 2016
Elaboración propia
–20–
En la tabla en mención se observa en términos absolutos como la región insular po-
see la menor cantidad de hogares con acceso a tecnología, es decir, posee el 0,24%
del total nacional; no obstante, en términos de concentración es la mayor región, con
lo cual el 47,6% de sus familias tienen acceso a tecnología. Sobre las demás regiones,
la Sierra cuenta con una concentración regional del 45,8%, la Costa un 31%, mien-
tras que la Amazonía con un 28,6%. A su vez, en la figura 1, complementariamente,
se muestra la distribución de las familias con acceso a tecnología por cada una de las
regiones.
Figura 1. Total de hogares con acceso a tecnología por regiones naturales
Fuente: ENEMDU 2016
Elaboración propia
2.5 Hogares con acceso a tecnología por provincias
En Ecuador, la población se encuentra dividida entre veinte y cuatro provincias. Las
mismas que, en la tabla 4, han sido ordenadas de manera ascendente de acuerdo a
la distribución geográfica de hogares con acceso a las tecnologías. Se puede observar
que la provincia de Galápagos refleja la menor cantidad de hogares con este acceso,
desde luego, debido a su baja densidad poblacional; no obstante, al ser analizada de
Región Sierra46,4%
Región Costa48,5%
Región Amazonía
4,7%
Región Insular0,2% No
delimitadas0,3%
DISTRIBUCIÓN DE HOGARES CON ACCESO A TECNOLOGÍA POR REGIÓN NATURAL
(Total: 1.472.799 hogares)
–21–
manera individual esta provincia tiene el índice más alto por concentración, con un
47,6%. A la vez, la provincia de Los Ríos posee la menor concentración; del total de
214.370 familias que tiene, lo que representa el 5,49% del total nacional, tan solo
32.557 familias tienen el acceso, en otras palabras, el 2,2% de sus hogares tienen
estas hermanitas.
Tabla 4. Total de hogares con acceso a tecnología por provincias
Provincia Total Hogares con acceso a Tecnología
% Total
Hogares %
%
Concen-tración
Zonas no delimitadas 1.155 0,1% 9.935 0,25% 11,6% Galápagos 3.479 0,2% 7.311 0,19% 47,6%
Pastaza 5.701 0,4% 20.665 0,53% 27,6% Napo 7.430 0,5% 23.918 0,61% 31,1% Zamora Chinchipe 7.490 0,5% 25.389 0,65% 29,5% Bolívar 8.141 0,6% 47.078 1,21% 17,3% Morona Santiago 8.679 0,6% 38.986 1,00% 22,3% Orellana 9.485 0,6% 30.821 0,79% 30,8% Carchi 13.397 0,9% 46.130 1,18% 29,0% Sucumbíos 13.624 0,9% 43.247 1,11% 31,5% Santa Elena 15.481 1,1% 76.329 1,96% 20,3% Cañar 16.684 1,1% 61.612 1,58% 27,1% Chimborazo 25.324 1,7% 123.213 3,16% 20,6% Esmeraldas 28.973 2,0% 132.760 3,40% 21,8% Cotopaxi 31.493 2,1% 104.414 2,68% 30,2% Los Ríos 32.557 2,2% 214.370 5,49% 15,2% Sto. Domingo de los T. 36.999 2,5% 102.100 2,62% 36,2%
Imbabura 43.214 2,9% 107.416 2,75% 40,2% Loja 48.774 3,3% 119.511 3,06% 40,8% Tungurahua 56.589 3,8% 139.847 3,58% 40,5% El Oro 62.961 4,3% 162.580 4,17% 38,7% Manabí 84.570 5,7% 340.272 8,72% 24,9% Azuay 102.759 7,0% 192.627 4,94% 53,3% Guayas 362.155 24,6% 964.632 24,72% 37,5% Pichincha 445.689 30,3% 766.462 19,64% 58,1% Total 1.472.799 100,0% 3.901.624 100% 37,7%
Fuente: ENEMDU 2016. Elaboración: propia.
–22–
2.6 Hogares con acceso a tecnología por sexo como jefe de hogar
Según el INEC, en Ecuador, el acceso tecnológico está definido en un mayor número
por hombres que mujeres. La mayoría de estos usuarios comprenden edades entre
16 y 24 años. Esta población joven usa la red principalmente para revisar redes so-
ciales, comunicarse, informarse, educarse y a su vez trabajar, ya sea de una conexión
pública, en las instituciones educativas o trabajo. Esto debido a que hoy en día la
conectividad está relacionado con el esquema ‘siempre disponible’ de los consumi-
dores. Esto quiere decir que la población se conecta de forma constante para tener
información en tiempo real, las veinte y cuatro horas del día y desde cualquier lugar
en el que se encuentre.
Las diferencias que existen para el uso de tecnología entre hombres y mujeres son
bastantes representativos en otras regiones del mundo. Sin embargo, estas diferen-
cias de géneros no se dan de forma igualitaria en la adquisición de teléfonos inteli-
gentes, puesto que existe mayor probabilidad de que los hombres posean estos dis-
positivos (Bauer, 2016). A la vez, no se observan diferencias en la percepción de co-
nocimiento ante una serie de aplicaciones entre ambos géneros, ya que sus habili-
dades y conocimientos en el manejo de las TICs son iguales. A pesar de ello, los hom-
bres son quienes usan con más frecuencia estos dispositivos; de esto podrían surgir
dos hipótesis, la primera en la cual muestran mayor interés, o la segunda, que po-
seen mayor tiempo para ello.
De hecho, el tiempo que gasta un hombre en el uso de las nuevas tecnologías es ma-
yor. Esto se atribuye a que las mujeres dada sus múltiples responsabilidades y acti-
vidades efectuadas durante el día no disponen del mismo tiempo. Por otra parte,
esta diferencia se da también frente a las elecciones en las carreras universitarias
que son escogidas de manera diferente por cada género. Los hombres suelen incli-
narse por carreras tecnológicas, mientras que las mujeres escogen carreras sociales,
de humanidades o sanitarias, lo que ocasionaría que esta diferencia siga creciendo,
no por falta de oportunidades sino más bien por elección propia.
–23–
Es entonces, que el género masculino pasa mayor tiempo en las redes para tramitar
cuestiones administrativas, comprar o realizar transacciones bancarias. Por el con-
trario, las mujeres utilizan más su tiempo para buscar información laboral, acadé-
mica o resolver cuestiones sanitarias (Morán, 2008). En general, se destaca que con
el pasar del tiempo existe un aumento en el manejo de las nuevas tecnologías en la
población, sin embargo la diferencia existente entre géneros no se ha podido reducir
por los varios factores ya mencionados anteriormente (Bauer, 2016).
La tabla 5 muestra el total de hogares con acceso a tecnología, aunque indica qué
genero ocupa el puesto de jefe de hogar. Así, existen en el país un total de 1.132.635
hogares en donde el hombre encabeza la familia; por el contrario, vemos como
340.164 hogares la encabezan las mujeres. Dentro de estos totales, de acuerdo al
género, las familias encabezadas por un hombre tienen acceso a tecnología en un
39,5%, mientras que para el caso de las familias encabezadas por la mujer se en-
cuentran en 33,0%.
Tabla 5. Total de hogares con acceso a tecnología por sexo
Sexo Hogares por cabeza de fa-
milia %
Hogares por ca-beza de familia con tecnología
% Concentración
por género
%
Masculino 2.870.763 73,6% 1.132.635 76,9% 39,5%
Femenino 1.030.861 26,4% 340.164 23,1% 33,0%
Total 3.901.624 100% 1.472.799 100% 37,7%
Fuente: ENEMDU 2016
Elaboración propia
2.7 Hogares con acceso a tecnología por etnia
La sociedad de la información está orientada a eliminar las diferencias socioeconó-
micas que existen dentro de las sociedades en un país, a su vez contribuyen a reducir
la disparidad que existe entre los países desarrollados y en desarrollo (Barbero,
2003). A pesar de ello, dentro de Ecuador, la exclusión digital se encuentra acen-
tuada también por tipo de etnia, ya que las minorías han sido históricamente aisla-
das del progreso y del desarrollo social. Por lo que, en la actualidad, se requiere de
–24–
la atención de políticas públicas que permitan superar sus brechas, y con ello, poder
superar los estadios de desarrollo y fortalecer conjuntamente el desarrollo econó-
mico de los grupos más desfavorecidos.
En la tabla 6, podemos observar como la etnia de los montubios registra la menor
cantidad de hogares con acceso a las tecnologías (23.728) comparadas con la de
mestizos que posee mayor número (1.335.306). A la vez, al analizar de manera indi-
vidual y por etnia se observa que los blancos registran el mayor total con un 44,2%,
mientras que los indígenas se encuentran como menos favorecidos con el 11,0%. Es
por esta razón que las brechas digitales se pueden presentar en distintos contextos,
y una de estas es la apropiación cultural que tiene cada individuo según su etnia
(Catalán, 2010).
Tabla 6. Total de hogares con acceso a tecnología por etnia
Etnia Hogares por et-nia con acceso a
Tecnología %
Hogares por
Etnia %
Concentración por Etnia
%
Indígena 32.562 2,21% 295.010 7,6% 11,0%
Afroecuatoriano 45.275 3,07% 169.901 4,4% 26,6%
Montubio 23.728 1,61% 178.907 4,6% 13,3%
Mestizo 1.335.306 90,66% 3.175.842 81,4% 42,0%
Blanco 35.845 2,43% 81.009 2,1% 44,2%
Otra Etnia* 83 0,01% 955 0,0% 8,7%
Total 1.472.799 100% 3.901.624 100% 37,7%
*Las personas autoidentificadas con “otra etnia” diferente a las registradas en este cuadro, no tie-nen representatividad estadística. Fuente: ENEMDU 2016. Elaboración propia.
En la figura 2 se presenta la distribución de familias con acceso a tecnología de
acuerdo a la etnia. En ella se aprecia que la mayor concentración la poseen los mes-
tizos (1.335.306; 90,66%), este gran porcentaje, incluso, porque cuentan con la ma-
yor densidad poblacional en el país (3.175.842; 81,4%). Por el contrario, la menor
cantidad de hogares con acceso a tecnología lo poseen los montubios (23.728;
1,61%), aunque poseen el penúltimo puesto por densidad poblacional a nivel nacio-
–25–
nal (178.907; 4,6%). En relación al caso indígena, en ellos, un total de 32.562 hoga-
res cuentan con esta herramienta, lo que representa el 2,21% del total, a pesar de
contar con un total de 295.010 familias (7,6%) dentro del total nacional (3.901.624).
Figura 2. Total de hogares con acceso a tecnología por etnia
Fuente: ENEMDU 2016
Elaboración propia
2.8 Pobreza a nivel nacional
En Ecuador, la pobreza encuentra sus orígenes en la discriminación y exclusión; li-
mitada participación ciudadana; instituciones públicas, que a pesar de su fortaleci-
miento en estos últimos años carecen de la implementación de políticas públicas a
favor de los ciudadanos y que de una u otra forma son excluidos; y, entre otras, por
la corrupción a manera de impronta cultural, esta última que se presenta como uno
de los problemas más representativo en toda la región de manera generalizada
(Wielandt & Artigas, 2007). Ahora, en este punto es importante definir el término
de pobre; para el Sistema Integrado de Indicadores Sociales del Ecuador -SIISE-, son
considerados como pobres…
Indígena2,21% Afroecuatoriano
3,07%
Montubio1,61%
Mestizo90,66%
Blanco2,43%
Otra Etnia*0,01%
DISTRIBUCIÓN DE HOGARES CON ACCESO A TECNOLOGÍA POR REGIÓN NATURAL
(Total: 1.472.799 hogares)
–26–
Aquellas personas que pertenecen a hogares cuyo ingreso per cápita, en un período determinado, es inferior al valor de la línea de pobreza. La línea de pobreza es el equivalente monetario del costo de una canasta básica de bie-nes y servicios (SIISE, en línea).
En Ecuador, la pobreza se ha reducido en la última década; para el INEC la tasa de
pobreza por ingresos en 2016 fue de 22,92%, comparado con el 2007 que fue de
36,7%, lo que representó una reducción de aproximadamente 1,4 millones de per-
sonas (INEC, 2017). De acuerdo a esta misma fuente, en relación al costo de la ca-
nasta básica, para el final del año 2016, tuvo un costo de 700,96 dólares. De acuerdo
a estos antecedentes, en la tabla 7 se presenta la cantidad de pobres en el país. De
ello, se puede ver como el 22,92% de la población es definida como pobre frente a
una población no pobre de 77,08%.
Tabla 7. Total de pobreza a nivel nacional
Pobreza por ingresos Total %
Pobre 12.792.961 22,92%
No pobre 3.803.944 77,08%
Total 16.596.905 100%
Fuente: ENEMDU 2016
Elaboración propia
2.9 Pobreza por área
En cuanto a la pobreza por área, sea esta rural o urbana, la tabla 8 presenta los datos
respectivos. Se observa que del 100% un 67,99% de la población se asienta en el
área urbana, mientras que la diferencia del 32,01% se encuentra en el área rural.
Del total asentado en el área urbana, el 15,74% es considerado pobre (1.775.659
individuos) mientras que en el área rural este porcentaje se incrementa a un 38,18%
(2.028.285 individuos). Así entonces, como conclusión previa se recalca que aunque
el sector urbano posee alrededor de las siete décimas de la población total, esta área
alberga la menor cantidad de pobres con 1.775.659 pobres frente a los 2.028.285
que se encuentran en el área rural.
–27–
Tabla 8. Total de pobreza por área urbana y rural
Áreas Total
Población % Pobre % No Pobre %
Urbana 11.284.045 67,99% 1.775.659 15,74% 9.508.386 84,26%
Rural 5.312.860 32,01% 2.028.285 38,18% 3.284.576 61,82%
Total 16.596.905 100% 3.803.944 22,92% 12.792.961 77,08%
Fuente: ENEMDU 2016
Elaboración propia
2.10 Pobreza por regiones naturales
Ecuador, tiene la mayor incidencia de pobreza en la región amazónica, es decir, del
total de pobres nacionales (3.803.944) esta región alberga al 44,99% (403.199). La
amazonía, a lo largo de la historia, ha vivido bajo condiciones de exclusión social, lo
cual, no les ha permitido un crecimiento económico como las demás regiones del
país (Burgos, 2013). La tabla 9 muestras estos valores, en donde se refleja que la
región insular cuenta con el menor índice en el país, de hecho el 99,60% de personas
son no pobres (30.345), y tan solo registra el 0,40% de pobres (122) dentro de su
población regional.
En términos generales, del total poblacional (16.596.905) el 22,92% son considera-
dos pobres, mientras que los no pobres cubren la diferencia con el 77,08%.
Tabla 9. Total de pobreza por regiones naturales
Fuente: ENEMDU 2016
Elaboración propia
Regiones Población por región
% Pobre % No Pobre %
Región Sierra 7.414.380 44,67% 1.558.625 21,02% 5.855.755 78,98%
Región Costa 8.216.268 49,50% 1.832.247 22,30% 6.384.021 77,70%
Región Amazonía 896.135 5,40% 403.199 44,99% 492.936 55,01%
Región Insular 30.467 0,18% 122 0,40% 30.345 99,60%
No delimitadas 39.655 0,24% 9.751 24,59% 29.904 75,41%
Total 16.596.905 100% 3.803.944 22,92% 12.792.961 77,08%
–28–
2.11 Pobreza por provincias
La pobreza, en las provincias, es un fenómeno social en el que las personas se en-
cuentran en una situación de exclusión. Determinar quién es pobre se torna una ta-
rea bastante difícil. La pobreza, conlleva a otra serie de problemas como un inade-
cuado acceso a servicios de salud, educación, crédito, y a otros bienes y servicios. En
la tabla 9, se presenta al número de pobres y no pobres por provincia, las mismas
que han sido ordenadas de manera descendente según el número porcentual de po-
bres.
Tabla 10. Total de pobreza por provincias
Provincia Población % Pobre % No pobre %
Pastaza 105.101 0,63% 59.285 56,41% 45.816 43,59%
Morona Santiago 184.108 1,11% 93.156 50,60% 90.952 49,40%
Napo 125.244 0,75% 62.379 49,81% 62.864 50,19%
Chimborazo 508.803 3,07% 224.061 44,04% 284.741 55,96%
Esmeraldas 611.454 3,68% 263.335 43,07% 348.119 56,93%
Orellana 154.364 0,93% 65.371 42,35% 88.994 57,65%
Sucumbíos 214.971 1,30% 81.484 37,90% 133.487 62,10%
Zamora Chinchipe 112.347 0,68% 41.523 36,96% 70.824 63,04%
Bolívar 206.321 1,24% 75.451 36,57% 130.870 63,43%
Carchi 179.859 1,08% 63.232 35,16% 116.627 64,84%
Cotopaxi 467.109 2,81% 139.602 29,89% 327.507 70,11%
Imbabura 450.456 2,71% 125.295 27,82% 325.161 72,18%
Santa Elena 371.444 2,24% 102.336 27,55% 269.108 72,45%
Loja 503.152 3,03% 138.593 27,54% 364.559 72,46%
Los Ríos 884.140 5,33% 223.829 25,32% 660.311 74,68%
Manabí 1.509.894 9,10% 380.952 25,23% 1.128.942 74,77%
Zonas no delimitadas 39.655 0,24% 9.751 24,59% 29.904 75,41%
Cañar 266.921 1,61% 65.111 24,39% 201.810 75,61%
Tungurahua 564.368 3,40% 123.060 21,80% 441.308 78,20%
El Oro 684.422 4,12% 125.366 18,32% 559.056 81,68%
Guayas 4.154.913 25,03% 736.429 17,72% 3.418.485 82,28%
Sto. Domingo de los T. 429.929 2,59% 71.209 16,56% 358.720 83,44%
Azuay 837.670 5,05% 125.342 14,96% 712.328 85,04%
Pichincha 2.999.792 18,07% 407.669 13,59% 2.592.123 86,41%
Galápagos 30.467 0,18% 122 0,40% 30.345 99,60%
Total 16.596.905 100% 3.803.943 22,92% 12.792.962 77,08%
Fuente: ENEMDU 2016
Elaboración propia
–29–
De acuerdo a la tabla en mención se puede ver como la provincia de Pastaza, en re-
lación a la población que mantiene (105.101), tiene un total de 56,41% de pobres. A
su vez, la provincia de Galápagos posee la menor concentración porcentual en rela-
ción a su total de habitantes (30.467) con un 0,40% de pobres. En relación a la pro-
vincia del Guayas, ésta tiene un total de 17,72% de pobres con respecto a su pobla-
ción total (4.154.913); y, sobre la provincia de Pichincha, posee una de las concen-
traciones más bajas con un 13,59% en relación a su población total (407.669).
2.12 Pobreza por sexo
De igual manera, se puede realizar un análisis de pobreza por sexo en el país y co-
nocer a priori si el género es un factor que incide en este problema social. En la tabla
11 se observa que para el año 2016 tanto la población masculina como femenina se
encuentra prácticamente equilibrada, puesto que la población femenina supera en
1,36% a la masculina. En relación a la pobreza, del total masculino (8.185.489) el
22,45% es pobre, mientras que del total femenino (8.411.416) el 23,38% es pobre.
Así entonces, la incidencia de pobreza en la mujer supera al del sexo masculino en
0,93%; a pesar de ello, no se puede generar una conclusión contundente sobre estos
datos, en los que se indique la condición de la mujer como fuente de pobreza; para
ello, se recomendaría otro tipo de estudios que se salen del objetivo general de la
presente investigación.
Tabla 11. Total de pobreza por sexo
Sexo Población % Pobre % No pobre %
Masculino 8.185.489 49,32% 1.837.483 22,45% 6.348.006 77,55%
Femenino 8.411.416 50,68% 1.966.461 23,38% 6.444.955 76,62%
Total 16.596.905 100% 3.803.944 22,92% 12.792.961 77,08%
Fuente: ENEMDU 2016
Elaboración propia
–30–
2.13 Pobreza por etnia
La pobreza por ingresos afecta de forma diferente a los grupos humanos a partir de
sus condiciones particulares y, especialmente, según su etnia (Burgos, 2013).
En el país, la población montubia representa el 3,44% del total (16.596.905), mien-
tras que los mestizos representan el 74,32%. Sobre los niveles de pobreza, dentro
del total indígena (1.202.468) el 16,77% se los considera pobres, con lo cual poseen
la mayor incidencia por grupo étnico. Mientras tanto, el blanco posee la menor inci-
dencia de pobreza, del total de esta población (253.339) tan solo el 1,11% se lo con-
sidera pobre.
Tabla 12. Total de pobreza por etnia
Etnia Población % Pobre % No pobre %
Indígena 1.202.468 7,25% 637.800 16,77% 564.669 4,41%
Afro ecuatoriano 641.769 3,87% 197.346 5,19% 444.423 3,47%
Montubio 570.804 3,44% 165.212 4,34% 405.592 3,17%
Mestizo 12.335.456 74,32% 2.311.538 60,77% 10.023.918 78,36%
Blanco 253.339 1,53% 42.195 1,11% 211.145 1,65%
Otra Etnia 3.721 0,02% 1.217 0,03% 2.504 0,02%
No Informa 1.589.347 9,58% 448.703 11,80% 1.140.643 8,92%
Total 16.596.905 100% 3.804.011 22,92% 12.792.894 77,08%
Fuente: ENEMDU 2016
Elaboración propia
2.14 Conclusión del capítulo
En esta sección se analizó el comportamiento de las diferentes variables dentro de
Ecuador; por un lado, en relación al acceso de las tecnologías de la información, y,
por otro, acerca de los datos de pobreza por individuo. De acuerdo a los datos que
se obtuvieron de la ENEMDU-2016 se observó que existen un total de 3.901.624 de
hogares, de los cuales el 37,7% poseen acceso tecnológico, es decir, poseen un
computador con acceso a internet. Al analizarlo de acuerdo al área, de este total de
hogares con acceso a tecnología, el 86,7% se encuentran en el área urbana mientras
que, su diferencia, el 13,3% se encuentran en el área rural.
–31–
Sobre las regiones naturales, la Sierra alberga al 59,29% como la mayor provincia
en este número; y, a su vez, la región Insular tan solo el 0,24%, aunque este dato se
encuentra incidido por la densidad poblacional baja. De hecho, si se analiza a cada
región de manera individual, la región Insular supera a todas con un 47,6%. Sobre
el análisis por provincia, tanto Guayas como Pichincha, en conjunto, recogen al
54,9% del total de hogares con este acceso tecnológico. La etnia con mayor cantidad
de hogares es la mestiza (81,4%) a nivel nacional, y por ello contiene la mayor can-
tidad de familias que poseen esta herramienta tecnológica (90,66%).
Con respecto a pobreza, consideradas dentro de esta definición a aquellas personas
que pertenecen a hogares cuyo ingreso per cápita, es menor al costo de una canasta
básica de bienes y servicios, que para el 2016 fue de 700,96 dólares. En el país, del
total de 16.596.905 de habitantes se consideran pobres al 22,92% (3.803.944). El
área rural alberga al 53,32% de este total, mientras que el área urbana acapara a la
diferencia, es decir al 46,68%. Sobre las regiones, en la región Costa se encuentra el
mayor número de pobres con el 48,17% del total, le sigue la Sierra (40,97%), Ama-
zonía (10,60%) y en cuarto puesto a la región Insular (0,003%).
Con respecto a las provincias, en la provincia de Guayas se encuentra concentrado
el mayor número de pobres con el 19,36%, al cual le sigue Pichincha con el 10,72%;
en último puesto, se encuentra la provincia de Galápagos con el 0,003%. A partir de
la cuantificación de pobres de acuerdo al sexo, del total poblacional de pobres, el
22,45% son hombres y el 23,38% son mujeres.
–32–
3 CORRELACIÓN ENTRE BRECHA DIGITAL Y DESIGUAL-DAD SOCIAL
En esta sección, de acuerdo a la metodología planteada en un principio se establece-
rán tanto los modelos como los cálculos para, por un lado, establecer la correlación
entre el índice de Gini por distribución de ingresos en los hogares frente al coefi-
ciente de Gini tecnológico, y, por otro, para establecer la correlación entre el mismo
índice de Gini por distribución de ingresos pero ahora frente al coeficiente de con-
centración de hogares con acceso a tecnología. Es importante indicar que tanto el
coeficiente de Gini tecnológico así como el coeficiente de concentración son plantea-
dos como indicadores de brecha digital.
3.1 Coeficiente de Gini por distribución de ingresos
El coeficiente de Gini por distribución de ingresos en los hogares (CG) es utilizado
para medir la desigualdad en los ingresos dentro de un país. Este coeficiente se en-
cuentra entre 0 y 1, donde 0 se corresponde con una situación de máxima igualdad
en esta distribución, mientras que 1 se corresponde a la máxima desigualdad del
mismo. Para calcular el CG se lo hace a través de la ecuación (1), no obstante, dentro
del programa econométrico Data Analysis and Statistical Software (Stata) es calcu-
lado a través del comando inequerr.
CG = 1 − ∑ (���� − ��)(� + ���)� �� (1)
En la tabla 13 se muestra este coeficiente de Gini por distribución de ingresos en los
hogares según diferentes situaciones. En todo caso se observa que el CG para Ecua-
dor es de 0,47; a su vez, en la figura 3 se presenta la curva de Lorenz correspondiente
a la determinación de este mismo caso a nivel nacional. En relación a la misma tabla
13 se puede ver que el CG para el área urbana posee un coeficiente más alto de de-
sigualdad que es de 0,45; mientras que para el área rural es de 0,41. De acuerdo a
las regiones se observa que la amazonía posee la mayor desigualdad entre las demás
con 0,56; y la región insular posee un valor de 0,41. A partir de un análisis específico
–33–
entre costa y sierra podemos apreciar que la región costa es menos desigual que la
sierra.
Tabla 13. Coeficiente de Gini por distribución de ingresos
Nº Descripción CG
Nivel nacional
01 Ecuador 0,47
Áreas
01 Urbana 0,45
02 Rural 0,41
Regiones
01 Sierra 0,47
02 Costa 0,44
03 Amazonía 0,56
04 Insular 0,41
Fuente: ENEMDU 2016
Elaboración propia
Figura 3. Curva de Lorenz por distribución de ingresos nacional.
Fuente: ENEMDU 2016
Elaboración propia
–34–
En la tabla 14 se presenta el coeficiente de Gini por cada una de las provincias, y que
han sido ordenadas de menor a mayor según este CG. Como resultado se tiene que
Santa Elena y El Oro tienen el menor coeficiente al poseer el valor de 0,40; es decir
posee la más baja desigualdad. No obstante, la provincia con el coeficiente más alto
de desigualdad en el país es Morona Santiago con 0,61.
Tabla 14. Coeficiente de Gini por distribución de ingresos según provincias
Nº Provincia CG
01 El Oro 0,40
02 Santa Elena 0,40
03 Galápagos 0,41
04 Santo Domingo de los Tsáchilas 0,41
05 Azuay 0,43
06 Guayas 0,43
07 Manabí 0,43
08 Los Ríos 0,44
09 Cañar 0,46
10 Imbabura 0,46
11 Pichincha 0,46
12 Tungurahua 0,46
13 Bolívar 0,47
14 Carchi 0,47
15 Cotopaxi 0,48
16 Loja 0,49
17 Zamora Chinchipe 0,49
18 Esmeraldas 0,50
19 Chimborazo 0,52
20 Sucumbíos 0,53
21 Orellana 0,55
22 Pastaza 0,58
23 Napo 0,59
24 Morona Santiago 0,61
Fuente: ENEMDU 2016
Elaboración propia
–35–
En cuanto a las provincias más pobladas de acuerdo al número de hogares (ver tabla
4), se aprecia que Guayas se encuentra en el sexto puesto con un coeficiente de 0,43;
a su vez, Pichincha está ubicada en el onceavo puesto con 0,46; mientras que Manabí
posee el mismo coeficiente que Guayas y Azuay.
De acuerdo al reporte de pobreza y desigualdad del INEC, hasta junio de 2016, el
Ecuador registró una incidencia de la pobreza en un 23,70%; sin embargo, de
acuerdo a los cálculo aquí presentados hasta final del año se concluye que la pobreza
se redujo hasta ubicarse en el 22,92% (ver tabla 7). Según el mismo reporte el coe-
ficiente de Gini en el área urbana fue de 0,445 y en el área rural de 0,446; al compa-
rarlos con los datos aquí hallados fueron respectivamente de 0,45 y 0,41; lo que im-
plica que en el área rural ha disminuido.
3.2 Coeficiente de Gini tecnológico
El coeficiente de GINI tecnológico (CGT) ha sido calculado a través de la ecuación
(2), la cual es muy parecida al coeficiente de Gini por distribución de ingresos; pero
en este caso la variable de acumulación de recursos es el número de computadoras.
Cabe indicar que un número importante de hogares por cada provincia no poseen
esta tecnología (ver tabla 4), o incluso a veces poseen computador sin internet. Para
un mejor tratamiento de datos de aquel grupo que además de poseer computador
posee internet, se les ha agregado dentro del cálculo un computador adicional a ma-
nera de compensación.
CG = 1 − ∑ (���� − ��)(� + ���)� �� (2)
A manera de ejemplo, se expone en la figura 4 la curva de Lorenz para el caso espe-
cífico de Azuay, en ella se puede ver como el 54,9% no posee computador, por ello,
esta curva no parte de la coordenada 0,0. Se aplicará el mismo comando inequerr
dentro del software Stata, para cada una de las provincias y de esta forma obtener
el coeficiente de GINI tecnológico por cada una de ellas. Como se había mencionado
anteriormente, al poseer este indicador el mismo concepto de GINI, pero ahora con-
siderando distribución del recurso tecnológico, computadora e internet, su valor de
–36–
igual manera variará entre 0 y 1; el cual, 0 refleja la distribución equitativa de los
hogares con acceso a tecnología, y, a su vez, 1 refleja la desigualdad de dicha distri-
bución de los hogares con acceso a las mismas.
Figura 4. Curva de Lorenz por distribución de tecnología: Azuay
Fuente: ENEMDU 2016.
Elaboración propia.
En la tabla 15 se detalla el Gini tecnológico por cada una de las provincias, aunque
se encuentran ordenadas desde la provincia con menor desigualdad hacia la de ma-
yor desigualdad. Se puede apreciar como la provincia de Pichincha lidera esta tabla,
mientras que Los Ríos se encuentra en el último puesto como la provincia más de-
sigual para este recurso tecnológico. Por otro lado, la tabla 16 muestra el Gini Tec-
nológico según otras áreas geográficas y por sector; y aunque estos datos no inter-
vendrán dentro de los cálculos de correlación expuestos más adelante se ha creído
necesario exponerlos con el fin de conocer la realidad nacional.
0,00000
0,10000
0,20000
0,30000
0,40000
0,50000
0,60000
0,70000
0,80000
0,90000
1,00000
0,00000 0,20000 0,40000 0,60000 0,80000 1,00000
–37–
Tabla 15. Coeficiente de Gini tecnológico por provincias
Provincia CGT
Pichincha 0,54
Azuay 0,58
Galápagos 0,64
Loja 0,68
Tungurahua 0,69
El Oro 0,69
Imbabura 0,69
Guayas 0,70
Santo Domingo de los Tsáchilas 0,71
Napo 0,75
Sucumbíos 0,76
Cotopaxi 0,76
Orellana 0,77
Zamora Chinchipe 0,77
Carchi 0,78
Cañar 0,79
Pastaza 0,79
Manabí 0,81
Esmeraldas 0,83
Morona Santiago 0,83
Santa Elena 0,84
Chimborazo 0,85
Bolivar 0,86
Los Ríos 0,88
Fuente: ENEMDU 2016
Elaboración propia
Sobre esta tabla 16, se ve como el coeficiente de Gini tecnológico a nivel nacional es
de 0,70; razón por la cual se puede afirmar que el país tiene una gran desigualdad
sobre este recurso. De acuerdo al tipo de área, la parte urbana desde luego posee
relativamente una menor desigual con 0,63, frente al área rural con 0,88; no obs-
tante, se resalta que ambos datos generan preocupación. Por el lado de las regiones
se presenta que la región amazónica es la más desigual con 0,78; mientras que las
regiones de sierra e insular lideran la tabla con un valor igual de 0,64.
–38–
Tabla 16. Coeficiente de Gini tecnológico
Nº Descripción CGT
Nivel nacional
01 Ecuador 0,70
Áreas
01 Urbana 0,63
02 Rural 0,88
Regiones
01 Sierra 0,64
02 Costa 0,76
03 Amazonía 0,78
04 Insular 0,64
Fuente: ENEMDU 2016 Elaboración propia
3.3 Coeficiente de concentración
El coeficiente de concentración (CC), como se dijo en un principio, es otro indicador
que muestra la distribución del recurso tecnológico. Dicho coeficiente, para nuestro
caso, ha sido calculado a través de la ecuación 3, la misma que ha permitido visuali-
zar en qué provincia se encuentra el índice más alto de concentración en el acceso a
las tecnologías dentro del país.
CC =
���
����
��
���
(3)
Dónde:
H�� Es la cantidad de hogares con tecnología sea de una provincia, área o
a nivel nacional.
TH�� Representa el total de hogares con tecnología sea de una provincia,
área o a nivel nacional.
H� Es el total de hogares existentes según el espacio geográfico estu-diado.
–39–
TH� Considera el total de hogares a nivel nacional.
Una vez realizados los cálculos se presenta la tabla 17.
Tabla 17. Coeficiente de concentración
Provincias HT H CC
Azuay 102.759 192.627 1,41
Bolívar 8.141 47.078 0,46
Cañar 16.684 61.612 0,72
Carchi 13.397 46.130 0,77
Chimborazo 25.324 123.213 0,54
Cotopaxi 31.493 104.414 0,80
El Oro 62.961 162.580 1,03
Esmeraldas 28.973 132.760 0,58
Galápagos 3.479 7.311 1,26
Guayas 362.155 964.632 0,99
Imbabura 43.214 107.416 1,07
Loja 48.774 119.511 1,08
Los Ríos 32.557 214.370 0,40
Manabí 84.570 340.272 0,66
Morona Santiago 8.679 38.986 0,59
Napo 7.430 23.918 0,82
Orellana 9.485 30.821 0,82
Pastaza 5.701 20.665 0,73
Pichincha 445.689 766.462 1,54
Santa Elena 15.481 76.329 0,54
Sto. Domingo de los T. 36.999 102.100 0,96
Sucumbíos 13.624 43.247 0,83
Tungurahua 56.589 139.847 1,07
Zamora Chinchipe 7.490 25.389 0,78
Zonas no delimitadas 1.155 9.935 0,31
Datos agregados a nivel nacional
Total 1.472.799 3.901.624 1,00
Codificación THT TH CC
Fuente: ENEMDU 2016
Elaboración propia
–40–
A través de esta tabla 17 se puede observar como la provincia con el índice más bajo
es la provincia de Los Ríos con un valor de 0,40; es decir, posee una concentración
por debajo de la media nacional. Por otro lado, el índice más alto de concentración
de acceso a tecnología se encuentra en la provincia de Pichincha con 1,54 seguida
de la provincia de Azuay con 1,41. Asimismo, en promedio, el 29,17% de las provin-
cias tienen una CC de hogares con acceso a computadora e internet superior a 1;
mientras tanto, la diferencia, es decir el 70,83% muestran coeficientes inferiores a
1; con lo cual, se puede argumentar que las provincias con un CC superior a 1 tienden
hacia una reducida brecha digital.
3.4 Base de datos
La base de datos con el cual se resolverán los modelos econométricos han sido crea-
dos a través de fórmulas y variables resueltos por el programa Stata; desde luego,
los datos que precedieron a estas variables creadas, como se dijo anteriormente,
partieron de la ENEMDU-2016. Stata es un paquete estadístico econométrico dise-
ñado para realizar análisis estadísticos y modelación econométrica (Borrego &
Sánchez, 2010). En esta investigación, la base de datos que será corrida dentro del
software en mención fueron los valores provenientes de los CG, CGT y CC.
De acuerdo a la metodología expuesta, por tanto, se usarán dos modelos. En el pri-
mero, se tendrá como variable dependiente a la brecha digital medida a través del
CGT, mientras que la variable independiente será el CG que mide la distribución de
ingresos. En el segundo, se tendrá como variable dependiente a la brecha digital me-
dida ahora a través del CC, mientras que la variable independiente será el mismo el
CG. Sobre la correlación a medir se la realiza a través de la ecuación 4, que en Stata
está representada a través del comando correlate.
r2 = (∑�����)
�
(∑���)(∑���
�) (4)
En la tabla 18 se exponen los datos que serán corridos dentro del software y se co-
rresponden con CG, CGT y CC.
–41–
Tabla 18. Base de datos: CG, CGT, CC.
Provincia CG CGT CC
Azuay 0,43 0,58 1,41
Bolívar 0,47 0,86 0,46
Cañar 0,46 0,79 0,72
Carchi 0,47 0,78 0,77
Chimborazo 0,52 0,85 0,54
Cotopaxi 0,48 0,76 0,8
El Oro 0,4 0,69 1,03
Esmeraldas 0,5 0,83 0,58
Galápagos 0,41 0,64 1,26
Guayas 0,43 0,70 0,99
Imbabura 0,46 0,69 1,07
Loja 0,49 0,68 1,08
Los Ríos 0,44 0,88 0,4
Manabí 0,43 0,81 0,66
Morona Santiago 0,61 0,83 0,59
Napo 0,59 0,75 0,82
Orellana 0,55 0,77 0,82
Pastaza 0,58 0,79 0,73
Pichincha 0,46 0,54 1,54
Santa Elena 0,4 0,84 0,54
Sto. Domingo de los T. 0,41 0,71 0,96
Sucumbíos 0,53 0,76 0,83
Tungurahua 0,46 0,69 1,07
Zamora Chinchipe 0,49 0,77 0,78
Elaboración propia.
3.5 Correlación entre CGT y CG por distribución de ingresos
El coeficiente de correlación de Pearson es una covarianza representada por la letra
(r2), como se muestra en la ecuación 4, la misma que halla el promedio de variables
cruzadas entre X e Y. Estos valores varían entre 0 y 1 (Amon, 1990); en todo caso, si
el coeficiente es cercano a 0, la correlación es débil; mientras tanto, si es cercano a
1, ésta correlación es alta. De acuerdo a la expresión citada:
–42–
• La variable X se corresponderá para nuestro caso con el coeficiente de Gini,
que mide la distribución de hogares por ingresos como se expresó anterior-
mente.
• A su vez, la variable Y se corresponde con el coeficiente de Gini tecnológico;
el cual mide la distribución del recurso tecnológico computadoras e internet
dentro de la población en general.
Una vez corridos estos datos, se observa a través de la tabla 19 que la correlación
que existe entre brecha digital y desigualdad social es débil con 0,3075. La figura 5
por su parte muestra la expresión procedente de manera directa del software Stata.
Tabla 19. Correlación entre coeficiente de CG y CGT
Descripción Coeficiente
Correlación entre los coeficientes de GINI correspondiente a la distribución de ingresos en los hogares (CG), y a los ho-gares con acceso a tecnología (CGT).
0,3075
Fuente y elaboración: propia
Figura 5. Tabla de datos: Correlación entre CG y CGT
Fuente y elaboración: propia
3.6 Correlación entre CC y CG por distribución de ingresos
–43–
A partir de la misma ecuación 4 se determinará la correlación entre el coeficiente de
Gini por distribución de ingresos y el coeficiente de concentración. Ahora, de
acuerdo a la expresión citada:
• La variable X se corresponderá nuevamente con el coeficiente de Gini, que
mide la distribución de hogares por ingresos.
• Por otro lado, la variable Y se corresponde con el coeficiente de concentra-
ción; el cual mide la concentración del recurso tecnológico computadoras e
internet dentro de la población en general.
De acuerdo a la tabla 20 se puede observar que no existe una relacón, ya que el valor
reflejado en el cálculo respectivo es negativo con un valor de -0,2934. La figura 6 por
su parte muestra la expresión procedente de manera directa del software Stata.
Tabla 20. Correlación entre CG por distribución de ingresos y CC
Descripción Coeficiente
Correlación entre los coeficientes de GINI correspondiente a la distribución de ingresos en los hogares (CG), y a los hogares con acceso a tecnología (CC).
-0,2934
Fuente y elaboración: propia
Figura 6. Tabla de datos: Correlación entre CG y CGT
Fuente y elaboración: propia
–44–
3.7 Conclusiones del capítulo
De acuerdo a los cálculos realizados se pudo observar que el coeficiente de Gini
por distribución de ingresos en los hogares fue de 0,47. En donde, en la región
insular se tiene la menor desigualdad en cuanto a las demás regiones con un valor
de 0,41; aunque cabe indicar que en la región Insular se encuentra el mayor nivel de
turismo de Ecuador y existe una gran cantidad de personas extranjeras asentadas
en dicho lugar. A su vez, la Amazonía se presenta como la región más desigual. En el
caso de las provincias de Santa Elena y El Oro tienen el menor índice, es decir, po-
seen la más baja desigualdad. No obstante, la provincia con el coeficiente más alto
de desigualdad es Morona Santiago. Según reporte del SIISE, la variación de la de-
sigualdad del ingreso a lo largo del tiempo se debe a cambios en políticas económi-
cas y por la acción social de agentes públicos y privados.
El coeficiente de Gini tecnológico, el mismo que fue calculado mediante el número
de computadoras que tienen los hogares, tuvo un valor a nivel nacional de 0,70; con
lo cual, se observa una gran desigualdad sobre este recurso tecnológico; en que la
región rural (0,88) es más desigual frente a la urbana (0,63). Así mismo, la región
amazónica presenta el índice más desigual con respecto al resto de regiones con un
valor de 0,78. A nivel de provincias Los Ríos posee el indicador más desigual con un
valor de 0,88. Con respecto al índice de concentración, el cual es un indicador que
mide básicamente la concentración por provincia con respecto a la nacional, se in-
dica que Pichincha posee la mayor concentración con 1,54 mientras que la menor
concentración la tiene desde luego Los Ríos.
A su vez, para medir la correlación entre la brecha digital y la desigualdad social, en
las provincias del país, se la midió a través del coeficiente de Pearson. Es importante
indicar que se corrieron dos modelos; el primero, confrontan al índice de Gini por
distribución de ingresos frente al coeficiente Gini tecnológico; el segundo, que en-
frente nuevamente al coeficiente de Gini por distribución de ingresos frente, ahora,
al coeficiente de concentración. Con los resultados obtenidos, por cada modelo, se
ha hecho posible responder a la pregunta de investigación ¿Existe una correlación
directa en el país que explica que a mayor brecha digital se incrementan los niveles
–45–
de desigual social? Cabe señalar que no existió una correlación entre el coeficiente
de Gini por distribución de ingresos frente al coeficiente de concentración.
Por otro lado, se indica que si existió una correlación entre el coeficiente de Gini por
distribución de ingresos frente al coeficiente de Gini tecnológico. Sin embargo, la
asociación de estas variables es baja con 0,3075; básicamente, debido a que se pre-
senta una alta variabilidad entre las observaciones. Esto como consecuencia de que
en las provincias hay mayor disparidad en términos de acceso a las TICs que res-
pecto al ingreso.
–46–
4 DESAFÍOS EN EL USO Y DESARROLLO DE TICS EN ECUA-DOR
En esta sección se analizarán las políticas que se han desarrollado en el país última-
mente, su entorno legal, el aporte que hacen las tecnologías dentro del PIB, así como
los objetivos que tenga el gobierno para desarrollar el uso y habilidades dentro de
este campo. Desde luego, también se analizará el perfil del país con respecto al en-
torno mundial y los desafíos que se deberán enfrentar dentro de este milenio.
4.1 Ecuador dentro del marco mundial
En relación al Informe Global de Tecnología de la Información 2016 del Foro Econó-
mico Mundial, los países implicados como Finlandia, Suiza, Suecia, Israel, Singapur,
Países Bajos y Estados Unidos son quienes han liderado propuestas que en principio
tendría impacto económico en las inversiones que deben realizarse dentro de las
TICs (Centro de Desarrollo Industrial, 2016). De hecho, estos siete países se carac-
terizan por poseer una infraestructura de calidad y habilidades que les ha permitido
ampliar sus beneficios al momento de invertir en TICs; con lo cual han gozado de un
impacto económico social, la misma que aumenta a manera de círculo virtuoso sus
velocidades de desarrollo comparados con el resto del mundo.
En la actualidad las TICs son consideradas como la columna vertebral para el desa-
rrollo de los países; básicamente, debido a que el futuro de los países, empresas e
individuos dependerá de la adopción de estas herramientas que se antepondrán
como prioridad para el desarrollo socioeconómico (Ibídem). En este informe se
mencionan cuatro puntos importantes como:
1. La innovación, que se basa cada vez más en las tecnologías y modelos de ne-
gocios, los cuales impulsan el beneficio económico y social.
2. Prioridad de las empresas para adoptar las TICs dentro de sus desarrollos.
3. Inversión en estas herramientas informáticas, con lo cual tanto el sector pú-
blico como privado deberán realizar los esfuerzos necesarios para alcanzar
niveles tecnológicos.
–47–
4. Economía digital, la cual dependerá de la evolución de los gobiernos, y que a
su vez permiten a las sociedades reaccionar de forma rápida a los cambios de
las mismas TICs.
Por su parte, este informe presenta la última versión del índice de preparación en
red (NRI por sus siglas en inglés), el mismo que representa una herramienta clave
para evaluar la preparación de cada uno de los países en cuanto al aprovechamiento
de los beneficios de las TICs para la transformación digital. Es decir, este Informe
evalúa los factores, políticas e instituciones que permiten a un país aprovechar de
forma plena las TICs para la prosperidad en un ranking mundial. Esta evaluación se
la realiza en cuatro categorías:
1. En el entorno general para el uso y la creación de tecnología.
2. Por disposición en red en términos de infraestructura de TICs, accecibilidad
y habilidades.
3. De acuerdo a la adopción y uso de las TICs por parte del gobierno, sector pri-
vado e individuos.
4. Por el impacto económico y social de las TICs.
Para la elaboración de este índice NRI, a su vez, se toman en cuenta 71 variables que
son agrupadas en tres subíndices como son ambiente, preparación y uso. El objetivo
principal de este índice es llamar la atención de los líderes de cada uno de los países
alrededor de mundo que permita alentar el desarrollo de las TICs. Por otra parte se
requiere un ecosistema productivo digital que permita el desarrollo de forma con-
junta con el subsistema educativo, salud, energías, transporte y servicios públicos.
Entonces, a partir de esto se puede tener un subsistema de banda ancha con infra-
estructura adecuada que incluye redes y equipamiento tecnológico.
En términos generales, la disponibilidad de red ha mejorado en estos últimos años
en el mundo en general. El NRI del año 2016, con los mejores puntajes de 6.0 se
encuentra en países de Singapur y Finlandia, seguidos por los países de Suecia, No-
ruega, Estados Unidos, Países Bajos y Suiza con una puntuación de 5.8. Sin embargo,
así como estos países mejoraron sus desempeños en cuanto al acceso de red, otros
–48–
países empeoraron de la misma forma tales como Haití, Madagascar, entre otros.
Con respecto a Ecuador, es un país que ha mejorado su desempeño de red, y se ubica
actualmente en el puesto ochenta y dos con una puntuación de 3,9 (Ministerio de
Telecomunicaciones y de las Sociedades de la Información, 2016).
Con respecto al ranking dentro de América Latina y el Caribe, en la tabla 21 se pre-
senta a cada uno de los países, puesto y puntuación según en NRI. Se puede observar
como Ecuador se encuentra en tercer lugar con una puntuación de 3,90, en el índice
de disponibilidad para la conectividad 2016.
Tabla 21. Índice de preparación en red 2016 de América Latina y el Caribe
Puesto País Puntaje
68 Colombia 4.10
72 Brasil 4.00
82 Ecuador 3.90
89 Argentina 3.80
90 Perú 3.80
93 El Salvador 3.70
98 República Dominicana 3.60
103 Guatemala 3.50
105 Paraguay 3.40
108 Venezuela 3.40
Fuente: The Global Information Technology Report 2016.
Elaboración propia.
Cabe indicar que Ecuador para el año 2015, fue el único país de Sudamérica en ser
excluido del Informe. En este informe se toman en cuenta a los países que alrededor
del mundo están luchando para asegurar su crecimiento económico de manera equi-
tativa; y que, de la misma manera, puedan proveer de beneficios hacia la población.
Es decir, a Ecuador no lo veían como un país que tenga dicha iniciativa de mejorar
su aprovechamiento de las TICs, y con ello, no representaba un país que intente re-
ducir la brecha tecnológica. Desde el año 2012, los países de América Latina y el
Caribe han mejorado su puntuación en el índice referido con la finalidad de fomen-
–49–
tar las fuerzas de innovación, las cuales se han convertido en la clave de la prospe-
ridad en el mundo digitalizado. Por tanto, se necesita de un mayor esfuerzo de estos
países para mejorar su entorno de innovación.
4.2 Entorno legal
Para el Plan Nacional de Telecomunicaciones y Tecnologías de Información del
Ecuador 2016-2021, el país en los últimos años ha desarrollado y aumentado el ser-
vicio de las telecomunicaciones, tales como, la cobertura que se le da a la población
de servicios móviles; así como el registro de redes avanzadas 3G y 4G, los cuales han
permitido incrementar usuarios a la banda ancha móvil; por último, se tiene tam-
bién la fibra óptica, que ha crecido significativamente desde el año 2006. Este último
ha sido el que mayor crecimiento ha tenido dentro de la población, ya que les ha
permitido llegar a puntos donde otras compañías de telecomunicaciones no han po-
dido llegar, desde luego, gracias a la avanzada tecnología que manejan (Ministerio
de Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información, 2016).
En febrero de 2015, la Ley Orgánica de Telecomunicaciones (LOT) establece el ac-
ceso a internet como un servicio básico como agua, luz y teléfono, con lo cual el Es-
tado garantiza el acceso a todos los ecuatorianos. Por otro lado, para ese mismo año,
se llegó a un acuerdo ejecutivo que permitió aumentar el presupuesto en las institu-
ciones educativas para ciencia y tecnología (Ibídem). El acceso a las tecnologías ha
sido prioritario para las universidades y escuelas politécnicas del país, debido a que
se busca incrementar el acceso a internet en los hogares al 50% de la población; sin
embargo, hasta el año 2016 según datos del INEC el alcance apenas llegó al 37,7%.
Para el año 2014, según la encuesta de Gobierno Digital 2014 de las Naciones Uni-
das, Ecuador ocupó el puesto 83 de 193 países en relación a esta cobertura; así en-
tonces, el país ha mejorado sus servicios disponibles en línea, lo que la ubicó en el
año 2016 en el puesto 82. Por otra parte, según la Secretaría Nacional de la Admi-
nistración Pública (SNAP) existen alrededor de 385 trámites que se pueden realizar
100% en línea, de los cuales se pueden destacar los siguientes:
–50–
• Declaración de impuestos en línea del Servicio de Rentas Internas –SRI-.
• Sistema de comprobantes electrónicos del SRI.
• Postulación de becas y ayudas económicas de la Secretaría Nacional de Edu-
cación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación.
• Obtención de certificados de diversas instituciones.
• Trámites relacionados con la matriculación vehicular del SRI, entre otros.
Según la clasificación del Open Knowledge Foundation y del Open Data Barometer1
del año 2014, como principales oportunidades para mejorar el desempeño del país
y que las personas puedan tener acceso a información requerida se encuentran los
siguientes campos: gasto gubernamental, códigos postales, emisiones de polución2,
resultados electorales, estadísticas nacionales y legislación. Es por esta razón que el
país debe desarrollar oportunidades para el sector de las TICs, con la potenciación
consecuente del desarrollo del talento humano calificado, mejorar el ambiente y ne-
gocios, establecer regulaciones acorde al avance tecnológico y promover el acceso
al financiamiento que permita crear emprendimientos en el sector.
4.3 Aporte de las telecomunicaciones dentro del PIB
El Instituto de Promoción de Exportaciones e Inversiones (PRO Ecuador), indica que
el sector de las TICs para el año 2013 generó veinte y nueve mil plazas de trabajo, a
su vez representó el 3,1% del PIB, a partir de la incorporación en tres mil veinte y
seis empresas. Entre los subsectores se destacaron el de software, hardware, pro-
veedores de internet y empresas de telecomunicaciones. Por esta razón, las TICs son
de suma importancia para el desarrollo del país ya que durante la última década ha
sido fundamental la implementación de éstas a nivel mundial, debido a la contribu-
ción en el desarrollo socioeconómico y generación de empleos.
1 Información que puede ser leída y procesada a través de dispositivos electrónicos, la misma que las personas y organizaciones puedan tener acceso. 2 Información agregada de carácter nacional respecto a la emisión de gases contaminantes que pue-den ser dañinos para la humanidad.
–51–
En la tabla 22 se presentan los sectores estratégicos que están divididos en ocho
subsectores, que al haber incorporado las TICs se han ayudado con el desarrollo de
su productividad, competitividad, generación de empleo y presencia en mercados
internacionales.
Tabla 22. Sectores Estratégicos Industriales en Ecuador
Puesto Sectores
1 Agroalimentario
2 Petroquímico - Minería
3 Banca y Negocios
4 Farmacéutico - Cosmético - Higiene
5 Construcción - Ingeniería - Transporte
6 Turismo
7 Medio - Ambiental
8 Mar
9 Energía
10 Automatización industrial
11 Servicios públicos
Fuente: PRO Ecuador.
Elaboración propia.
El Banco Central de Ecuador (BCE) para el año 2013 manifestó que el sector Correos
y Telecomunicaciones representaron el 2,10% del PIB medido en dólares corrientes.
Cuando se considera puntualmente la contribución del sector TIC al PIB de Ecuador,
sin Correos, se observa que contribuye con cerca del 2% del ingreso nacional. Para
el año 2016 el sector de correo y comunicaciones aportó con el 2% del PIB nominal.
(Ministerio Coordinador de Sectores Estratégicos, 2017).
Para el año 2016, el país contó con mayor acceso al servicio de internet y telefonía
fija-Móvil 4G; con esto, se ha fomentado el mayor uso de las TICs desde las institu-
ciones educativas. Dichas inversiones han representado para el país alrededor de
3,05 mil millones de dólares en inversión pública, 4.000 kilómetros de fibra óptica
siendo en su totalidad 70.713 kilómetros en el país; y si hablamos de la red 4G, el
país ocupa el primer lugar en América y el 28avo puesto en el mundo como la más
rápida, ésta se encuentra operando desde noviembre del año 2016 (Ibídem). Por
–52–
otro lado, existen 854 infocentros3 para plena disposición de la ciudadanía y el 74%
de las parroquias rurales cuentan con al menos un infocentro.
En la figura 7 se muestra el porcentaje de las personas que usan TICs desde el año
2009 hasta el 2016, lo que refleja de manera notoria el aumento de las personas que
usan estas herramientas informáticas. Dicho porcentaje se ha incrementado en un
22,9%; lo que indica que de cada diez ecuatorianos al menos cinco tienen acceso a
internet.
Figura 7. Porcentaje de personas que usan TICs
Fuente: Ministerio de Telecomunicaciones y Sociedad de la Información
Elaboración: Ministerio Coordinador de Sectores Estratégicos
4.4 Objetivos, proyectos y políticas nacionales
El incremento del uso de internet ha sido generalmente para dispositivos portátiles,
puesto que le permite a la población comunicarse en cualquier lugar donde se en-
cuentre por medio de redes sociales y aplicaciones de mensajería instantánea. El uso
de dispositivos móviles ha provocado que compañías de telecomunicaciones tengan
la necesidad de actualizar de forma continua sus redes fijas y móviles acorde a las
últimas tecnologías; estas mismas que han mejorado la velocidad de subida y bajada
3 Espacio comunitario de participación y desarrollo, el mismo que es de uso exclusivo para el acceso
a las TICs por parte de las poblaciones de parroquias rurales y urbanas marginales del país.
–53–
de datos para satisfacción del usuario. Debido a este crecimiento, el Ministerio de
Telecomunicaciones en su plan nacional establece cuatro objetivos:
1. Completar y fomentar el despliegue de infraestructura de telecomunicacio-
nes.
2. Aumentar la penetración de servicios TICs en la población.
3. Asegurar el uso de las TICs para el desarrollo económico y social del país.
4. Establecer las bases para el desarrollo de una industria de TICs a largo plazo.
Para el primer objetivo, las últimas tendencias a nivel mundial han sido los servicios
de libre transmisión como Netflix, Skype y Whatssap. Estos servicios han captado la
atención de los operadores de las telecomunicaciones que han invertido cada vez
más para actualizar sus redes; con ello, han satisfecho a la población con un servicio
de mejor calidad, rápido y eficaz al momento de conectarse con el resto del mundo.
Sin embargo, no toda la población del país está conectada a estas redes debido a la
reducida cobertura que tienen algunos sectores; por esta razón se tiene como obje-
tivos, entre otros, aumentar la cobertura poblacional de 4G, 3G y 2G, y aumentar el
porcentaje de hogares que se encuentran a menos de 1,5 Km de la red de fibra
(Ministerio de Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información, 2016).
El aumentar el porcentaje de hogares que se encuentran a menos de 1,5 km de la red
fibra mejora la conectividad de banda ancha fija; con este aumento se permite un
crecimiento digital en la educación, salud y justicia en términos sociales. En térmi-
nos económicos, las empresas que proporcionan las TICs se ven beneficiadas, ya que
si ellas dan un servicio rápido de banda ancha entonces se mejora el uso de las tec-
nologías de forma eficiente y productiva para la población. En todo caso, la política
para este primer objetivo quedo establecida como “Impulsar el desarrollo eficiente
de la infraestructura de telecomunicaciones necesaria para permitir el acceso a las
TICs por parte de la población” (Ibídem). Los proyectos a su vez quedaron propues-
tos de la siguiente manera:
1. Fomentar el despliegue de infraestructura móvil para comunicaciones móvi-
les de voz y datos. Este proyecto está alineado con el Plan Nacional del Buen
–54–
Vivir 2013-2017 que garantiza la accesibilidad de servicios TICs en la pobla-
ción; como meta definida para el año 2021 se estableció alcanzar el 98% de
cobertura poblacional para 2G y 3G, y en un 80% de cobertura para la 4G.
2. Incentivar el despliegue de infraestructura de última milla, es decir, fomentar
el despliegue de infraestructura de banda ancha fija en el Ecuador, especial-
mente en zonas del país que no cuentan con los suficientes recursos para ac-
ceder a las mismas.
Con respecto al objetivo dos, aumentar la penetración de servicios TICs en la pobla-
ción, su importancia radica en tratar de elevar el acceso de computadoras e internet
en el país, el cual se encuentra en tan sólo 37,7% del total de hogares. Por esta razón
se buscan iniciativas que permitan la accesibilidad en mayor porcentaje, como son
el aumentar la penetración de banda ancha fija, banda ancha móvil, telefonía móvil
en hogares, computadores y de smartphones. Para cumplir con este objetivo la po-
lítica a desplegar será “propiciar la asequibilidad de los bienes y servicios TICs por
parte de la población, a través de mecanismos que promueven la sana competencia
en el mercado y faciliten el acceso a estos bienes y servicios” (Ibídem). Entre los
proyectos propuestos para este fin se encuentran:
1. Generar regulación para promover y proteger la competencia de última mi-
lla, misma que se refiere a beneficiar a los usuarios con mejores tarifas para
los servicios de TICs. Esto permitiría un incremento en la penetración de
banda ancha fija. Como meta definida para este proyecto es que para el año
2021 la penetración de banda ancha fija sea del 59% de la población.
2. Promover la competencia en el mercado de comunicaciones, el cual indica
que se deben evaluar una serie de alternativas regulatorias que fomenten la
competencia y mejoren las tarifas para la población con el tercer operador
CNT.
3. Desregular la importación de teléfonos celulares, frente a la regulación actual
en dichas importaciones. Consiste básicamente con la eliminación de las so-
bretasas arancelarias.
–55–
4. Reducir la carga impositiva a computadores de bajo costo, con el fin de au-
mentar la penetración de estos equipos en los hogares.
Sobre el objetivo tres “asegurar el uso de las TICs para el desarrollo económico y
social del país”, en el ámbito económico por parte de las empresas, tendrá impacto
directo en la mejora de la eficiencia y en el aporte que hacen al país a través del
crecimiento de ventas y exportaciones. En el ámbito social, la incorporación de estas
herramientas en sectores como la salud, educación o justicia, permitirán aumentar
la eficiencia y reducir el gasto público. Por último, de la administración pública, le
ahorrará tiempo a la ciudadanía en la realización de trámites desde la comodidad de
sus hogares (Ibídem).
Como objetivos específicos se espera: aumentar el uso de TICs en PyMEs y micro-
empresas y así mejorar el estado actual del acceso a servicios básicos TICs; poten-
ciar el desempeño de los procesos digitalizados del sector público de alto impacto
social, debido a que los sectores de salud, educación y justicia están relacionados
con el bienestar de las personas; aumentar el uso de servicios de gobierno electró-
nico por parte de ciudadanos y empresas; aumentar número de personas capacita-
das en TICs y de esta forma democratizar las habilidades básicas de la ciudadanía al
usar una computadora; por último, asegurar la conectividad e infraestructura en in-
focentros y escuelas para de esta manera reducir la brecha digital que afecta de
forma directa a las zonas rurales (Ibídem). Sobre la política propuesta para este fin
se establece “favorecer la apropiación de las TICs en la población y en los sectores
productivos, como herramienta de desarrollo económico y acercamiento de las ins-
tituciones del Estado a la población”. Para su viabilizarían, entre los proyectos pro-
puestos se establecen:
1. Potenciar el uso de infocentros, la cual se refiere a la mejora de desempeño
de RNI para fortalecer la viabilidad económica a futuro.
2. Capacitar a microempresarios en TICs empresariales básicas, a través del uso
de los infocentros para contribuir de manera equitativa a la inclusión digital
de las microempresas.
–56–
3. Capacitar PyMEs en uso de TICs para su sector, mediante capacitaciones teó-
ricas y prácticas que permitan mejorar su negocio.
4. Mejorar los servicios de gobierno electrónico, manteniendo los esfuerzos de
estos últimos años en la mejora del número de servicios en línea para la ciu-
dadanía.
5. Potenciar el desempeño de los procesos digitalizados en sectores públicos de
alto impacto social como la educación, salud, justicia y seguridad; básica-
mente, con la finalidad de alcanzar el mayor grado de eficiencia a través de la
mejora de los sistemas de comunicación, el fomento del desarrollo de cono-
cimiento y con la disminución del impacto negativo sobre el medio ambiente.
6. Asegurar la conectividad e infraestructura en escuelas, así como el aumento
en el número de computadoras disponibles para los alumnos en las institu-
ciones educativas públicas.
Sobre el objetivo cuatro, establecer las bases para el desarrollo de una industria de
TICs a largo plazo, en el que se contempla como finalidad mejorar la calidad y canti-
dad de talento humano requerido para el sector de las TICs, mejorar la facilidad para
el financiamiento tanto local como internacional y, entre otros, mejorar el ambiente
de negocios en el país en el que se considere el costo y tiempo que se requiere para
la creación de una nueva empresa. La política establecida para este fin fue “Impulsar
un ambiente propicio para el desarrollo competitivo de la industria de las TICs”;
como consecuencia, los proyectos planteados fueron:
1. Fortalecer al sector laboral dentro de la industria de las TICs, a través de la
producción de talento en carreras de computación e Informática; y, por otro,
a través de la mejora de calidad de los programas de educación bilingüe bajo
estándares internacionales.
2. Simplificar el proceso para la apertura de nuevos negocios en Ecuador, a par-
tir de la reducción en el número de días para la apertura del mismo y de esta
manera mejorar el ambiente de negocios en el país.
–57–
3. Apoyar a empresas de TICs a obtener financiamiento, en beneficio de su cre-
cimiento; de esta manera podrán dichas empresas al inicio de sus actividades
invertir tanto de forma local como internacional.
4.5 Conclusiones del capítulo
Las TICs se han convertido en uno de los sectores más importantes a nivel mundial.
Es por esta razón que en la actualidad el país ha considerado estas herramientas
como un servicio básico para la ciudadanía, mismo que permita el desarrollo econó-
mico y social del país. Por otra parte, para poder alcanzar el acceso mayoritario de
individuos con herramientas informáticas depende mucho del gobierno, ya que es
el encargado de invertir en el sector de las comunicaciones, especialmente en las
instituciones educativas del sector e instituciones públicas. Las TICs avanzas cada
vez más rápido, lo que ha permitido que las personas puedan realizar trámites en
línea de manera más rápida y sin pérdida de tiempo.
Detrás ha habido toda una campaña gubernamental en la simplificación de trámites,
y para ello se ha apostado previamente en mejorar el rendimiento de estas tecnolo-
gías y conectividad. Por otra parte, en el país se implementaron infocentros gracias
a la política pública y al trabajo del Gobierno Nacional; los mismos que han permi-
tido que la población se capacite de manera gratuita especialmente en sectores ru-
rales y urbanos marginales. Con esta población capacitada se espera reducir la bre-
cha digital que existe actualmente en el país, y generar los demás beneficios que
conlleva. Ecuador cuenta con el servicio más rápido de América Latina y El Caribe
4G, y con esto un gran porcentaje de la población maneja este servicio es sus dispo-
sitivos móviles, lo que ha mejorado las funcionalidades de los equipos.
–58–
5 CONCLUSIONES
A través de este trabajo se estableció la correlación existente entre la brecha digital
y la desigualdad social en Ecuador, según los datos disponibles de 2016. Para ello,
se hizo uso de la encuesta nacional de empleo, desempleo y subempleo –ENEMDU
2016-, la misma que es realizada de manera periódica por el INEC. Para medir dicha
variable se crearon a su vez dos modelos, el primero, en el cual se estableció la co-
rrelación entre el índice de Gini por distribución de ingresos en los hogares frente
al coeficiente de Gini tecnológico, el segundo, en el cuál se estableció la correlación
entre el mismo índice de Gini por distribución de ingresos pero ahora frente al coe-
ficiente de concentración de hogares con acceso a tecnología. Es importante indicar
que tanto el coeficiente de Gini tecnológico así como el coeficiente de concentración
fueron planteados como indicadores de brecha digital.
Sobre el análisis realizado se indica que la hipótesis planteada en un inicio es acep-
tada parcialmente; ya que bajo el primer modelo, si existió una correlación, sin em-
bargo la asociación de estas variables fue baja con 0,3075. En relación al segundo
modelo, se indica que no existió correlación alguna. Para profundizar en estos resul-
tados se argumenta que la situación se debe, por un lado, a que existe una alta va-
riabilidad entre las observaciones, por otro, que entre las provincias existe mayor
disparidad en términos de acceso a las TICs que respecto al ingreso. Sobre el análisis
adicional dentro de este trabajo, además, se concluye que existen un total de
3.901.624 de hogares, y tan solo el 37,7% tienen acceso tecnológico. En el área ur-
bana se presenta un mejor indicador con el 86,7% frente al 13,3% del área rural. A
su vez, la Sierra presenta el mayor acceso en términos absolutos con el 59,29% de
los hogares; mientras que la región Insular se presenta con el 0,24%, aunque este
dato se encuentra incidido por la densidad poblacional baja.
De hecho, si se analiza a cada región de manera individual, la región Insular supera
a todas puesto que el 47,6% de sus hogares mantienen como mínimo un computador
con acceso a internet. La etnia con mayor cantidad de hogares con acceso tecnoló-
gico es la mestiza (81,4%) a nivel nacional, y por ello contiene la mayor cantidad de
–59–
familias que poseen esta herramienta tecnológica (90,66%). Por otro lado, en el país,
del total de 16.596.905 de habitantes se consideran pobres al 22,92% (3.803.944).
El área rural alberga al 53,32% de este total, mientras que el área urbana mantiene
el restante 46,68%. Sobre las regiones, la Costa tiene al mayor número de pobres
(48,17%) y le sigue la Sierra (40,97%), Amazonía (10,60%) y la región Insular
(0,003%).
Por último, se indica que con este trabajo se buscó hallar el correlacionamiento en-
tre brecha digital y desigualdad social, ya que en la actualidad se constituye como
desafío teórico y metodológico, puesto que aún no existen modelos definidos que
expliquen la relación entre estos campos. Así entonces, se espera que este proyecto
de investigación se plasme como un documento de referencia para futuras investi-
gaciones. No obstante, ante el índice relativamente bajo se esperaría fortalecer los
modelos planteados y de esta forma conseguir resultados más contundentes. Así,
por un lado, se aconsejaría a esos nuevos investigadores el uso de series de tiempo
y no bajo un análisis transversal. Por otro, puesto que las familias, aunque poseyeran
el mismo nivel de ingresos, la adquisición de un computador podría estar relegada
ante otras necesidades como alimentación, salud o educación; con lo cual, cabría
buscar alguna variable adicional que indique el nivel de ahorro de dichas familias, o
la valoración que tienen acerca del recurso tecnológico.
–60–
6 BIBLIOGRAFÍA
Acevedo, M., Fernandez, M., Peña, I., & Frías, V. (01 de noviembre de 2012). TIC y
desarrollo humano en Latinoamérica perspectivas de futuro para reducir la
desigualdad. Recuperado el 04 de mayo de 2017, de Google Books:
https://books.google.com.ec/books?id=BerrCgAAQBAJ&pg=PA151&lpg=PA
151&dq=brecha+digital+y+GINI&source=bl&ots=R3ryYHTkKz&sig=lsO9Bs
K1-
dio63Kz6VVnBuaEcLI&hl=es&sa=X&ved=0ahUKEwiln4Hn0NfTAhVG6CYK
HWbhDakQ6AEIUzAJ#v=onepage&q=brecha%20digital%20y%20GINI&f=f
alse
ALADI. (2003). La brecha digital y sus repercuciones en los países miembros de la
ALADI.
Almenara, J. C. (2004). Reflexiones sobre la brecha digital y la educación. Sevilla,
España.
Amon, J. (1990). Estadística para psicólogos (1). Madrid.
Barbero, M. (2003). Usos de Internet por organizaciones indígenas. Revista
Comunicación.
Bauer, R. (2016). El uso de internet y las diferencias según el género.
Borrego, C., & Sánchez, R. (2010). Microeconometría. Madrid: Universidad Carlos III
Madrid.
Burgos, S. (Abril de 2013). EVOLUCIOb N DE LA POBREZA Y DESIGUALDAD DE
INGRESOS 2006 - 2012.
Catalán, R. (Septiembre de 2010). Los desafíos de la inclusión digital étnica. Diálogos
de la comunicación.
Centro de Desarrollo Industrial. (2016). Informe Global de Tecnología de Información
2016.
CEPAL/UNESCO. (1992). Educacion y conocimiento ejes de transformacion
productiva con equidad. Santiago de Chile.
–61–
Diaz, J., Pérez, A., & Florido, R. (2011). Impacto de las tecnologías de la información y
las comunicaciones (TIC) para disminuir la brecha digital en la sociedad actual.
Habana, Cuba.
Fongang, S. (1999). Desarrollo humano: problematica y fundamentos de una polıtica
economica. Francia: UNESCO.
INEC. (17 de enero de 2017). 1,4 millones de personas salen de la pobreza por
ingresos en nueve años.
INEGI. (2016). Estadísticas a propósito del día mundial de internet. México.
Jimenez, L. A. (2011). Educación y desarrollo humano. Hacia un modelo educativo
pertinente.
Jordan, V. (2010). Banda ancha: la nueva brecha digital. Chile.
Marchesi, Á. (Agosto de 2000). ¿Equidad en la educación? Revista Ibero Americana.
Ministerio Coordinador de Sectores Estratégicos. (2017). Rendición de cuentas 2016.
Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología. (2006). Educación y desigualdad
social. Buenos Aires.
Ministerio de Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información. (2016). Plan
nacional de telecomunicaciones y tecnologías de información del Ecuador.
Quito.
Ministerio de Telecomunicaciones y de las Sociedades de la Información. (2016).
Plan nacional de telecomunicaciones y tecnologías de información del Ecuador
2016 - 2021.
Morán, C. (04 de Enero de 2008). La tecnología abre la brecha entre sexos.
Redondo, J. (14 de Mayo de 2015). La educación, la escuela y la desigualdad.
Reygadas. (2008). Tres matrices generadoras de desigualdades. México.
Rodriguez, A. (2006). La brecha digital y sus determinantes. México.
Salazar, W. (26 de Abril de 2012). La pobreza y desigualdad social en Ecuador.
Pobreza Ecuador.
Serrano, S., & Martinez, M. (2003). La brecha digital: mitos y realidades.
Severin, E. (2014). Tecnologías de la Información y la Comunicación, TIC, para el
aprendizaje. Santiago, Chile.
–62–
SIISE. (marzo de 2001). La exclusión social en el Ecuador: los indígenas y la
educación. Gestión.
Silva Colmenares, J. (2007). CRECIMIENTOECONO=MICOYDESARROLLOHUMANO:
Una distincion necesaria en la busqueda de un nuevo modo de desarrollo.
Colombia.
SITEAL, S. d. (01 de Diciembre de 2012). La brecha digital en América Latina.
Uruguay, Uruguay, Uruguay.
Tenazos, S., & Quiñones, A. (febrero de 2013). Desarrollo humano, pobreza y
desigualdades. Santander.
UNESCO. (2005). Hacias las sociedades del conocimiento.
Wielandt, G., & Artigas, C. (2007). La corrupción y la impunidad en el marco del
desarrollo en América Latina y el Caribe: un enfoque centrado en derechos
desde la perspectiva de las Naciones Unidas. EnCEPAL,enserie139,Politicas
Sociales;DivisióndeDesarrolloSocial.SantiagodeChile.
–63–
Nota. Hoja en blanco (cubierta)
