VACACIONES DE VERANO, TIEMPO PARA DISFRUTAR Y APRENDER

María Moreno Pérez Orientadora del IES Monte Miravete

Vacaciones es el plural de vacación, un término que procede del latín "vacatio" y que hace referencia al descanso temporal en una actividad habitual. Se trata del periodo en el cual, las personas que trabajan o estudian suspenden temporalmente sus obligaciones. A finales de junio nuestros alumnos abandonarán las aulas del instituto para tomarse un descanso en su actividad educativa. Al igual que los trabajadores, los estudiantes necesitan de las vacaciones para despejarse de las tareas habituales que han tenido durante todo el curso escolar y poder retomar con fuerza e ilusión el inicio del curso siguiente. Pero si malo es no tener tiempo libre que nos permita el justo descanso y recuperar fuerzas, peor es tener todo el tiempo libre del mundo y no saber qué hacer. Así debemos tener claro que las vacaciones de verano son para disfrutar y también son para aprender. El estudio es algo que realizáis porque es vuestra obligación, invertís vuestro esfuerzo para el día de mañana, aunque ahora os parezca muy lejano. Cuando llegue el momento agradeceréis haber hecho el esfuerzo de estudiar, y el verano es también un tiempo a invertir para ese futuro. Durante los meses de verano podemos compaginar el estudio y el ocio, aunque parecen dos términos incompatibles. Algunos alumnos tendréis que combinarlos por obligación, para recuperar en septiembre las asignaturas no aprobadas en la evaluación ordinaria de junio y otros, aquellos que habéis alcanzado el éxito en los exámenes finales de junio, para repasar, reforzar y afianzar contenidos trabajados durante el año y estar preparados para afrontar con éxito los nuevos estudios que iniciaréis en el mes de septiembre. Es importante mantener el hábito de estudio durante las vacaciones para que la reincorporación a la rutina escolar en septiembre sea fácil, productiva y exitosa. Una buena organización y rutina de estudio diario es fundamental para conjugar este tiempo de descanso y de trabajo, disfrutando de los momentos lúdicos y de descanso y dando cabida a un tiempo para el estudio o el repaso. Veamos cómo podéis hacerlo. Primero, el horario. El más adecuado es por las mañanas (se está más despejado y el rendimiento es mayor), después de desayunar y antes de iniciar las actividades de tipo lúdico. Procura disponer un horario fijo de estudio, comenzando todos los días a la misma hora. Se convertirá en una costumbre y te costará menos esfuerzo ponerte a ello. El tiempo a emplear dependerá de si estudias para recuperar asignaturas en septiembre o para reforzar los conocimientos adquiridos. En el primer caso deberías utilizar como mínimo tres horas, pudiendo completar estas tres horas matutinas con dos horas en horario de tarde, dedicando un total de cinco horas diarias al estudio. En el segundo caso, con dos horas diarias puedes cumplir el objetivo. Segundo, estudiar solo o con ayuda. Si durante el curso has prestado atención a las explicaciones del profesor, has hecho los deberes, y no has superado la asignatura únicamente por falta de estudio, posiblemente con una rutina de estudio y trabajo diario puedas superar esa asignatura a la que no dedicaste el tiempo suficiente durante el curso.

Pero si no has aprobado porque te resulta difícil entender la asignatura, no entiendes los ejercicios o actividades que has de resolver, probablemente necesites de una ayuda externa. Esta ayuda puede ser muy variada, desde la que te puedan dar tus padres, hermanos mayores u otros familiares, hasta la que te puedan dar amigos o profesores particulares. Es conveniente que hables con tus padres cuál sería la opción más adecuada para que en septiembre pudieras superar la materia o materias suspensas. Tercero, lugar de estudio. El lugar que elijas debe estar alejado de influencias ambientales que puedan distraer o interrumpir tu estudio y será siempre el mismo. Cuando inicies la sesión de estudio tienes que tener preparado todo lo que necesitas. Despeja la mesa, ponte cómodo y ya puedes comenzar. Estudia SIN MÚSICA. Apaga el TELÉFONO MÓVIL para no estar pendiente de las llamadas perdidas ni de los SMS de amigos, hasta finalizar la sesión lo dejamos fuera de nuestro alcance. No utilizar el ordenador, ni Internet, salvo que lo necesites para realizar un trabajo. Si en lugar que estudias hay televisión, estará apagada. Cuarto, utilizar unas técnicas básicas de estudio. Además de hacer los deberes y trabajos que te pidan en cada asignatura, debes dedicar todos los días un tiempo al estudio. El estudio puede consistir en leer, comprender y memorizar el contenido de los temas correspondientes, subrayar y elaborar un esquema o un resumen, volver a hacer los ejercicios o preguntas que has resuelto en tu cuaderno para comprobar que comprendes y recuerdas la información, completar las notas que tomaste en clase con información del libro o de otras fuentes de consulta, tratar de responder a preguntas que tú mismo te plantees y que te podría formular el profesor en un examen, etcétera. Puedes utilizar el método 2L2S2R (Lectura rápida, Lectura lenta, Subrayado, Síntesis, Recitar, Repasar), que a través de una secuencia de acciones específicas, te permite retener y comprender lo estudiado de una forma sistemática:

- Lectura rápida: realizar una primera lectura del texto para determinar sus contenidos y las partes en las que se estructura. - Lectura lenta: consiste en una segunda lectura comprensiva del texto, tratando de interpretar cada párrafo y comprender las ideas principales. - Subrayado: buscar y resaltar lo más importante del contenido de manera que resulte fácil volver sobre ello. - Síntesis: realizar un esquema de lo subrayado anteriormente, y sobre éste, redactar un resumen plasmando los contenidos fundamentales. - Recitar: recitar en voz alta lo aprendido, de modo que se fijen los contenidos y se detecten los puntos más difíciles, hasta lograr memorizarlos. - Repasar: realizar un repaso de lo aprendido de manera periódica, no sólo al terminar el proceso, sino también pasados unos días.

Para aquellos de vosotros que tenéis una cita en septiembre con los exámenes, este último punto (repasar) es fundamental para alcanzar el éxito que esperáis. Una de las principales causas del olvido, junto con la falta de concentración y deficiente comprensión, es la falta de repaso. Si no se repasa lo aprendido se olvida. Es fundamental repasar un rato cada día y hacerlo relacionando unas ideas con otras, para que a la hora de realizar

el examen la mente no se quede en blanco y tenga recursos suficientes para contestar. También ayuda hacer simulacros de exámenes, para comprobar si somos capaces de responder correctamente. No es necesario repasar toda la asignatura, sino los puntos fundamentales de cada tema que están recogidos en esquemas y resúmenes. El objetivo es que una semana antes del examen se domine la asignatura y que la noche anterior se descanse suficientemente. El trabajo con antelación permite acudir a un examen con más seguridad e incrementa las probabilidades de aprobar. EN CONCLUSIÓN, para estas -y futuras- vacaciones os dejos una serie de recomendaciones:

DISFRUTA. El verano es tiempo de nuevas experiencias, conocer nuevos lugares, nuevas personas. Aprovéchalo.

COLABORA. Todos tenemos responsabilidades y es hora de que asumas las tuyas en casa. Tus padres trabajan para darte lo mejor y es justo que tú te impliques en pequeñas cosas. Haz tu cama, pon y quita la mesa, limpia y ordena tu habitación y, por qué no, echa una mano con la comida. Puedes hacer la compra u otros recados, da igual, lo importante es que colabores en casa. Todo se hace más llevadero.

CONECTA. El verano es un gran momento para conectarse con otros, también desde las redes sociales siempre que tengas un mínimo de sentido común. Recuerda protege tus datos personales y no los facilites de forma irresponsable.

HAZ ALGO NUEVO. Este verano puede ser la oportunidad para hacer algo que no hayas hecho hasta ahora. ¿Has pensado en algún trabajito? ¿Has pensado en colaborar como voluntario con alguna ONG? No dudes en aprovechar este tiempo para nuevas experiencias que te enriquecerán como persona.

HAZ DEPORTE. Men sana in corpore sano, decían los latinos. Aprovecha las vacaciones para hacer deporte y cultivar la disciplina que ello supone. Ganarás en salud y en bienestar.

DISFRUTA DE LA NATURALEZA. Qué mejor época que el verano para realizar actividades en la naturaleza: Senderismo, excursiones al monte, a la playa o sitios de interés ecológico, acampadas…

REALIZA ACTIVIDADES CULTURALES. Apúntate a talleres de música, de dibujo o pintura. Ir al cine. Realizar juegos de ingenio. Visitar un museo. Ir a la biblioteca pública.

DILE A LOS TUYOS LO MUCHO QUE LOS QUIERES. Aprovecha para decir a los tuyos esos sentimientos que sientes hacia ellos. Los afectos son el motor del mundo y todos necesitamos un abrazo al día y unas buenas palabras.

ESTUDIA. Dedica un rato al día al estudio. Planifícate y organiza tu tiempo, te sorprenderá que haya tiempo para todo.

LEE. Nada como las vacaciones de verano para fomentar el gusto por la lectura. Una buena lectura es la puerta a magníficas experiencias. Los libros desarrollan la imaginación y el conocimiento del mundo, de sus habitantes, de sus costumbres y

sentimientos, estimulan la curiosidad por lo que nos rodea y nos acercan a mundos lejanos. Los libros invitan a buscar, a comparar y a comprender. Educan los sentimientos, nos ayudan a conocernos y a identificarnos con otros. Enriquecen el lenguaje y aumentan nuestra capacidad de expresión. Las palabras nos ayudan a pensar y a relacionar unas ideas con otras. Novelas realistas (relaciones de amistad, primer amor, conflictos personales); novelas que reflejan los problemas del entorno social (ecología, pacifismo, interculturalidad, convivencia); narraciones de suspense (lo misterioso, lo desconocido, historias policiacas); aventuras peligrosas; libros informativos (temas científicos, sexo, profesiones, religiones, historia); ciencia-ficción; biografías; poesía; teatro; revistas sobre temas que te interesan; prensa diaria… ELIGE TU GÉNERO Y DISFRUTA de algún momento al día con un buen libro entre tus manos.

Y SOBRE TODO: PASA UNAS ¡¡¡FELICES VACACIONES!!!