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UNIVERSIDAD CENTRAL DE CHILE
La Política de Migración Argentina
Análisis de la construcción de la política migracional en el caso de Buenos Aires.
Victoria Valdivia
Estudio de CasosEscuela de Ciencias Políticas.
Facultad de Ciencias Políticas y Administración Pública.Universidad Central de Chile.
Semestre Otoño, 2012.
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Tabla de Contenidos.Resumen..................................................................................................................................2
Abstract...................................................................................................................................2
Introducción............................................................................................................................3
Origen de los Datos.................................................................................................................4
Ley de Migraciones Argentina N° 25.875........................................................................................4
Tipología de Extranjeros..................................................................................................................5
Metodología............................................................................................................................6
Migraciones: un fenómeno más que un acontecimiento.........................................................6
Acercamientos al concepto de Migración: definición y alcances....................................................6
Migrantes: tipología de seres humanos...........................................................................................8
Modelos de Migración..................................................................................................................9
Políticas de Migración...................................................................................................................10
Migración en Argentina..................................................................................................................12
Flujos Migratorios.........................................................................................................................12
Oleadas Migracionales...............................................................................................................14
Europeos de ultramar v/s Latinoamericanos limítrofes..................................................................16
Conclusiones.........................................................................................................................23
Bibliografía...........................................................................................................................25
Victoria Valdivia.
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La Política de Migración Argentina
Análisis de la construcción de la política migracional en el caso de Buenos Aires.
Victoria Valdivia1
Resumen.La inmigración, como fenómeno, produce una serie de impactos sociales que llevan al
cambio en la forma de interacción que sostienen los sujetos en dicha sociedad, por lo cual
se hace latente el cambio de paradigmas institucionales, a fin de que sean las instituciones
las que refleje la nueva sociedad que nace. Es en éste sentido, que la presente investigación,
abordando la Ley de Migración Argentina, mediante el estudio de caso único de la
Migración en Buenos Aires, aporta a la línea de entendimiento del fenómeno migratorio,
dando luces para nuevos procesos dentro de la Región y futuros cambios a las dinámicas
migratorias dentro de Argentina.
Palabras claves: Migración, Argentina, Ley de Migración, modelo de puertas abiertas.
Abstract.
The immigration phenomenon, produces a range of social impacts that lead to change in the
form of interaction that support individuals in this society, which becomes latent
institutional change paradigms, to be the institutions that reflect the new society is born. It
is in this sense, the present investigation, addressing the Migration Act Argentina, using
single case study of migration in Buenos Aires, gives the line of understanding of
migration, shedding light for new processes within the Region and future changes to the
dynamics of migration in Argentina.
Keywords: Migration, Argentina, Immigration Law, Economic open door model.
1 Estudiante de pre- grado en Ciencias Políticas de la Universidad Central de Chile, Bachiller en Administración Pública. Ha realizado estudios de Intercambio en la Universidad de Buenos Aires, Argentina.
Victoria Valdivia.
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Introducción
La inmigración de grupos humanos, es un fenómeno inherente a la condición social del ser
humano; desde el alba de su concepción como grupo, el hombre se ha visto en la necesidad
de cambiar de lugar de asentamiento, atendiendo básicamente a los principios de completa
carencia de recursos que permitan su subsistencia.
El presente trabajo, busca abordar el fenómeno de la migración en Argentina, como
propulsor de la política migratoria que establece dicho Estado, construyéndola dada la
necesidad de establecer un medio institucional, por parte de la nueva élite política
proveniente de Europa, a fin de controlar y normar el campo de acción e incidencia de
nuevos migrantes, con el propósito de evitar un cambio en el Balance de Poder.
Esto, dada la composición heterogénea de la población de América Latina, se torna como
el punto de partida o génesis, para llegar a comprender la toma de decisiones en la región,
desde el cómo surgen las élites políticas (y los policy makers), por lo cual el presente
estudio de casos toma relevancia al situarse en el estudio de los flujos migratorios en
Argentina, caracterizando su procedencia y siguiendo su rastro histórico a fin de destacar si
quienes ocupan los cargos en toma de decisión, se corresponden con hijos o migrantes. Así
también, éste estudio, abre nuevas puertas a la academia, para estudios prospectivos en
Argentina, a fin de proyectar el devenir de posibles movimientos xenofóbicos como
consecuencia de un crecimiento demográfico explosivo de migrantes en Argentina, en
situación de crisis económica de dicho Estado.
Así también, el lector encontrará utilidad sobre éste estudio en la posible aplicabilidad de
una ley semejante a otros Estados de la región, compuestos de forma similar a la nación
Argentina.
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Origen de los Datos.
En Argentina, dada su gran expansión territorial y la poca población inicial o “paisana”, las
Instituciones entendidas, en el sentido neo- institucionalista de North, como las “reglas del
juego de una sociedad, bajo la cual los diferentes actores –consumidores y compradores-
pueden interactuar de tal manera que los costos de transacciones en los que se incurre al
momento de realizar un intercambio entre agentes económicos, sean los más bajos posibles.
De esta manera, siendo bajos los costos de transacciones, la eficiencia de un sistema
económico mejora” (North, 1990), han dado respuesta al déficit poblacional y por ende los
problemas de crecimiento económico de Argentina, mediante una serie de propuestas
orientadas a fomentar la inmigración. Para ello, se establecieron una serie de requisitos,
definidos con posterioridad en la Carta Magna de la República de Argentina, cristalizados
en la acción de Instituciones formales, que actualmente recibe el nombre de Dirección
Nacional de Migraciones, dependiente del Ministerio del Interior y Transporte.
El estudio presente, basa sus datos en los aportes de Migraciones y Extranjería al estudio
estadístico del fenómeno de migración. Así mismo, desde el plano netamente normativo,
nos remitiremos al Artículo 25 de la Constitución Argentina, dado que es la única fuente
formal en donde se manifiesta el sentido de dar orden a las dinámicas sociales, que tienen
las Instituciones en el sentido de North.
Ley de Migraciones Argentina N° 25.875
La Ley de Migraciones Argentina, Ley N° 25.875, es la primera Ley sobre la materia, que
se promulga en Argentina (y Latinoamérica) en condiciones estables de Democracia, dado
que desde 1876, año en el cual comienzan los incentivos a la migración en argentina, la
materia, había estado regulada únicamente por normativas parciales; vale decir: decretos
con fuerza de Ley o decretos de facto que respondían a la lógica de Gobiernos Militares.
Ésta Ley, reconoce derechos inalienables a la persona humana, en su calidad de migrante,
tal como la igualdad y universalidad de la migración humana en la República Argentina
(Ley 25.871, 2010), la regularización de los migrantes ilegales, permitiéndoles el acceso al
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Documento Nacional de Identificación (DNI), entre otras medidas orientadas a sentar bases
de igualdad entre los migrantes residentes en el territorio nacional.
En efecto, la Ley de Migraciones, parece sentar las nuevas bases de la dinámica
migracional Argentina y muy a pesar de su aparente espíritu altruista al tratar de
homogeneizar la universo migrante, más bien pareciera ser el mecanismo normativo que
poseen los descendientes de las primeras “oleadas” de migración, frente a los nuevos
migrantes, a fin de evitar nuevos balances de Poder.
Tipología de Extranjeros.
La Dirección de Migraciones, establece los requisitos para los extranjeros que deseen
permanecer en el país; ello es logrado mediante un sistema de VISA, la cual estará
orientada en finalidad y durabilidad acorde al propósito del extranjero en la República
Argentina. Actualmente y bajo los parámetros de la Ley de Migraciones, ya no se hace
sustancial diferencia entre los migrantes de Europa, con los de países fronterizos, en los
trámites y facilidad de éstos para obtener la residencia (en caso de que así se desease), dado
que los requisitos son para todos los migrantes iguales.
Entorno a la VISA, se establecen tres tipos de extranjeros en Argentina: Turistas (visa de
residencia temporaria, no superior a los 90 días calendario consecutivos), Residentes
Temporarios (Visas por las siguientes causales: estudios, trabajo con contrato definido,
entre otros) y Residente definitivo, siendo éste último quien cuente con la plena facultad de
ciudadanía y nacionalidad argentina.
Para efectos del presente estudio, nos centraremos en las diferencias existentes entre
migrantes de origen europeo y migrantes de países fronterizos, respecto a las providencias
de la Residencia definitiva; vale decir, si en efecto existen migrantes de segunda y tercera
categoría, al minuto de acceder a los derechos y deberes de la permanencia definitiva en
Argentina, dado su país de procedencia.
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Metodología
La presente investigación, tiene como propósito el explorar las dinámicas de interacción
social, entorno al fenómeno de migración, en Argentina, como precedente para la
formulación de la Ley N° 26.871, a fin de establecer si ésta responde a un mecanismo
normativo por parte de los “primeros inmigrantes” para controlar los nuevos flujos
migratorios y mantener así la posición de Poder dentro de la República Argentina. Para
ello, hemos dado revisión a los datos estadísticos aportados por la Dirección de
Migraciones, entorno a las estadísticas de migrantes para las tres oleadas migratorias y
datos de CENSOS Poblacionales y de vivienda de los años 1980, 1991 y 2001 sobre la
población migrante en Argentina. Ello, nos permite la elaboración de una base de datos de
largo aliento, sobre los totales de población migrante identificada en Argentina.
Los estadísticos otorgados por las Instituciones pertinentes a la migración argentina, han
sido analizados entorno a la construcción teórica realizada, para definir los parámetros de
análisis de los datos obtenidos; esto significa la revisión bibliográfica de lo escrito con
anterioridad a éste estudio, tanto de estudios pretéritos como de prensa que aborde la
temática de migración en la República Argentina; ello nos ha permitido avanzar sobre el
actual estado de la polémica entre migrantes de origen diferente.
Dada la naturaleza histórica – descriptiva, del presente estudio de caso único, el análisis de
la información, se realiza desde una perspectiva descriptiva del fenómeno, para lograr
atender las variables de país de procedencia de los migrantes, momento económico de
Argentina la minuto de producirse las “oleadas migratorias” y sector laboral en el que se
posicionan los migrantes.
Migraciones: un fenómeno más que un acontecimiento.
Acercamientos al concepto de Migración: definición y alcances.
La migración es un fenómeno inherente a la condición de grupo humano; produciéndose
desde las primeras asociaciones humanas, como forma de asegurar el propio sustento y con
ello la supervivencia. No obstante, no es hasta el surgimiento de los Estados- Nación, que
se comienza a observar estos desplazamientos como un fenómeno, pues al incluir el flujo
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de grupos humanos, implica una modificación a la población originaria del Estado
recipiendario de la migración. En virtud de ello, es que entenderemos el fenómeno de
migración como “desplazamiento de personas que tienen como intención un cambio de
residencia desde un lugar de origen hacia otro destino, atravesando un límite geográfico que
generalmente es una división político – administrativa” (Ruiz García, 2002)).
La migración, como fenómeno que produce significativos desplazamientos humanos,
implica modificaciones a nivel económico y social ; económicos por cuanto los recursos
que otrora fuesen para una determinada población, con mayor densidad demográfica,
tenderán a hacerse más escasos y sociales por cuanto la inserción de nuevos grupos
humanos, con cultura diferente, desatará otro tipo de fenómenos sociales, tales como el
sincretismo cultural; modificando las bases culturales primigenias del grupo humano que se
ve expuesto a la migración. Es en ésta línea, que la migración envuelve la transformación
del sentido de identidad, pues tanto el grupo humano que emigra, como el que lo recibe,
debe adaptarse a los cambios culturales que se producirán, por lo que la migración como
fenómeno, produce un nuevo tipo de sociedad, con bases culturales basadas en la
heterogeneidad; una sociedad que a pesar de no haber conocido en su totalidad los
problemas de la escasez, se hace consciente de ello e inserta en sí el malestar.
Como nos recuerda Ruiz García, la migración se produce entorno a dos variables:
desplazamiento de un grupo humano y un destino. Ello, por supuesto, implica también un
lugar de origen y en un plano mucho más sutil una necesidad de cambio entorno a
problemáticas sociales, asociadas a la seguridad del grupo humano en movimiento. Sobre-
entendemos que no se produce ningún tipo de flujo humano, si las condiciones del entorno
no amenazan su supervivencia, es pues el temor el que origina los movimientos. Entorno al
tipo de movimiento, la migración se subdivide en dos tipos: emigración e inmigración.
La emigración, es lo que se produce por parte de quien se mueve; es la salida del territorio
que es propio, en busca de un nuevo porvenir. Desde el punto de vista de quien recibe al
grupo en desplazamiento, el fenómeno será conocido como inmigración, pues denota la
entrada de un grupo “extranjero” a un Estado definido.
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Así también, debemos tener en cuenta y para fines de la presente investigación, que el
grupo humano en desplazamiento, será definido como “migrantes”.
Migrantes: tipología de seres humanos.
Como mencionamos con anterioridad, la migración es el fenómeno de desplazamiento de
humanos, a los que se les conoce como migrantes, pues al mismo tiempo se constituyen
como inmigrantes y emigrantes, dado que egresan de su Estado que les es natal, para
ingresar a otro desconocido que promete un mejor porvenir.
Dado que la migración como fenómeno se produce debido a una amenaza latente contra la
supervivencia humana, no todos los desplazamientos humanos se producirán en el mismo
marco normativo. Es necesario establecer, antes de pasar a revisar la categoría de
migrantes, que todos los Estados, poseen normas y leyes respecto a quiénes son los
naturales del Estado y las garantías, derechos y deberes de quienes son los extranjeros. Así
es, como se establece la primera línea de división entre un “nosotros” y el “ellos”. Existen,
a su vez, mecanismos legislativos, en todos los Estados, por los cuales los extranjeros
pueden adquirir los derechos y deberes de los naturales del Estado que los recibe,
cumpliendo para ellos con una serie de requisitos. Es en virtud del cumplimiento o no de
éstos requisitos y los fines que establezca el Estado para los migrantes, que se genera una
tipología de migrantes.
Canales y Zlolnisky (2009) en el estudio sobre Migraciones, establecen la siguiente
tipología de migrantes:
a) Trabajadores temporarios: Invitados por el Estado huésped, para
desenvolverse en labores remuneradas por un determinado período de tiempo.
b) Migrantes calificados: Profesionales altamente calificados, no son
necesariamente invitados por el Estado huésped, pero una vez consumada la
migración, se unen a las élites de sus respectivos campos laborales. Incrementan el
patrimonio cultural de la sociedad dado su alto grado de instrucción.
c) Migrantes irregulares: Conocidos popularmente como “ilegales”, son
aquellos migrantes que han cruzado las fronteras del Estado huésped sin realizar
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ningún tipo de procedimiento legal. Generalmente responden a convulsiones
sociales en sus Estados de origen.
d) Refugiados: Migrantes que se encuentran bajo la protección del Estado
huésped, como una excepción, dada la situación de extremo riesgo para la vida, que
presentan los Estados originarios de éste tipo de migrantes. Ej. Persecución política,
guerras, etc.
Así pues, a partir de la categoría que otorgan los investigadores y académicos, encontramos
el componente valórico de los Estados sobre la calidad de los grupos humanos que ingresan
a su territorio, haciéndoles más o menos deseables, en virtud de los aportes que éstos
puedan realizar a su economía y desarrollo socio- cultural.
Modelos de Migración.
Dado los efectos de la migración sobre la población de los Estados, es que se ha hecho
menester estudiar éste fenómeno, tipificarle, caracterizarle y describirle, a fin de lograr
aprehenderlo y con ello reducir la incertidumbre que genera cualquier dilema sobre el
cambio. En virtud de ésta finalidad; de tratar de hacer cercano un desconocido, es que se
generan modelos sobre migración, basados en distintas interrogantes respecto a qué
produce el flujo humano, para qué, las consecuencias en la sociedad que los recibe,
consecuencias económicas para el Estado huésped, entre otros.
Martínez y García (García - Martínez , 2001), establecen una tipología sobre modelos de
migración, basados en dónde se coloca el énfasis al observar la migración, si es en ámbito
económico, social, político u otro. Así, definen 4 modelos:
a) Markovianos: Establecen relación entre el por qué se mueve el individuo,
vale decir las razones actuales que llevan a la migración y la población que migra,
tomándola como un todo homogéneo.
b) Gravitacionales: Basados en la teoría de gravitación, tienen en cuenta las
variables sociales, económicas y políticas que llevan a la población a la decisión de
migrar.
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c) Económicos: Basándose en los modelos Markovianos, pretenden establecer
proyecciones sobre el devenir de la población migrante y a la vez explicar el por qué
se origina la migración.
d) De Ecuación Master: En base a conceptos matemáticos dinámicos, pretenden
dar explicación a los posibles cambios que sufra la población migrante y la del
Estado huésped, denotando una relación que es inestable en virtud de procesos
dinámicos. Trata de establecer una proyección en base a procesos desconocidos.
Las políticas migratorias, se originan en base a modelos de migración, modelos que son
estudiados y catalogados en virtud del fenómeno observado en un determinado espacio
tiempo. Para el caso Argentino, definiremos que los flujos migratorios, se han visto insertos
en un modelo gravitacional de migración, pues como detallaremos más adelante, toda
manifestación y estudio sobre el porqué de la migración argentina, enfatiza el por qué los
migrantes decidieron llegar a la República Argentina, colocando especial atención en el
proceso social y económico que vivían los migrantes en sus Estados natales, más que en los
efectos que se desencadenan con su arribo.
Oleadas Migracionales.
El primer gran flujo de migración hacia territorio Argentino, se produce entre los años 1800
y 1930, como respuesta a la necesidad de mayor población. Dado los contextos socio-
culturales e históricos, el gobierno nacional, consideró que el ideal era fomentar la
migración Europea, por su alto capital cultural. Así pues, el primer gran flujo migratorio
argentino, estuvo marcado por una migración selectiva a fin de incrementar la actividad
económica de la República Argentina y elevar el nivel cultural de su sociedad,
condiciéndose con el pensamiento neo-liberalista que North plantea frente al rol de las
Instituciones.
Ello, queda en manifiesto en la Constitución de la República Argentina de 1835, en donde
se establece que:
“ART. 25. El Gobierno federal fomentará la inmigración europea; y no podrá restringir,
limitar ni gravar con impuesto alguno la entrada en el territorio argentino de los extranjeros
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que traigan por objeto labrar la tierra, mejorar las industrias, e introducir y enseñar las
ciencias y las artes.” (Senado de la Nación Argentina)
En éste primer gran flujo, se comienzan a trazar los lineamientos de migrantes deseados,
que constituirán las élites de la sociedad argentina (no en la totalidad de los casos), pues la
élite nacional, que ya existía, provenía de padres migrantes, tal es el caso de Sarmiento y
Avellaneda.
A la par, dado que el objetivo del gobierno era dar respuesta a la baja actividad económica
y baja densidad poblacional, se adopta la política migratoria de “puertas abiertas”, para el
total de migrantes europeos. Ello significa, que no se restringirá de ninguna forma la
entrada de europeos y se garantiza que pasarán a ser nacionales argentinos, a cambio de su
trabajo.
Un segundo gran flujo, se encuentra enmarcado en los años 1946- 1955, en donde tras una
fuerte crisis económica, se hace patente la necesidad de activar la industria argentina, no
obstante la población migrante del primer gran flujo, ha volcado sus actividades hacia la
agricultura.
Argentina, fomenta la migración latinoamericana, para emplearla en su industria. Con ello,
surge el discurso de integración a nivel regional, regularizadas por el Primer y segundo
Plan Quinquenal del gobierno justicialista.
Nuevamente, el modelo de migración es gravitatorio, pues responde a la selección de
migrantes acorde a la motivación que tendrían para hacerlo. Se trata de apuntar nuevamente
hacia el sector europeo, dada la coyuntura de Segunda Guerra Mundial, no obstante, debido
a ese mismo acontecimiento el número de migrantes en arribar es considerablemente menor
que en el primer flujo.
La migración latinoamericana, a pesar de ser selectiva, no responde al perfil de migrantes
deseados por el Estado argentino, sino más bien responde a una estrategia de segunda
mano, para incrementar el crecimiento económico. Ello significa, que las posibilidades del
migrante fronterizo, en cuanto a posicionamiento dentro de las esferas económicas y
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políticas, eran considerablemente menores que las de un migrante europeo, dado que el
Estado sigue considerando el capital cultural regional, inferior que el del ”viejo continente”.
Tras estos dos grandes flujos migratorios, Argentina mantuvo el statu quo en cuanto a la
constante recepción de migrantes, provenientes tanto de la región como del continente
europeo, pero sin promulgar mayores modificaciones a su política migracional, la cual
cambiaba de foco únicamente con el cambio de modelo de desarrollo económico esperado.
Dicho de otra forma, el cambio en la política migracional argentina, responde única y
exclusivamente a las necesidades detectadas del mercado. En orden de ello, las
Instituciones pertinentes se pronuncian y fijan un nuevo set de reglas, destinados a suplir
las necesidades del mercado.
Conformación de las clases políticas: de los europeos revolucionarios a los
Latinoamericanos
Políticas de Migración.
Las políticas, dentro de una sociedad determinada, poseen la característica de ser
normativas para su sociedad; vale decir, intentan dar control a las relaciones y
comportamientos que se susciten en ella. En éste sentido, se aplican políticas basadas en las
nuevas necesidades de la sociedad, lo que demanda. Es en ésta línea que entenderemos a las
políticas como respuestas del Estado para asegurar la supervivencia de su población,
asegurándose que ésta cumpla con su fin último, fin para el cual ha surgido.
Así pues, no es de extrañar que frente a un fenómeno que implica profundos cambios
sociales, dando nuevos balances de Poder y llevando el punto del status quo hacia un nuevo
estado, que el Estado, por medio de los distintos gobiernos, entiendan la necesidad de
normar las relaciones entre migrantes y nacionales, como medida de preservar la población
del Estado huésped y minimizar los efectos negativos en ella, tales como riesgos de
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seguridad y nuevos balances de Poder que destruya las relaciones ya establecidas e
institucionalizadas entre sus distintos estamentos.
Dado que el efecto más visible de la migración, se da sobre el ámbito económico (ya sea
por aumento de tasa de desempleados, al aumentar la población, surgimiento de nuevas
industrias, reducción del coste de las horas hombre como consecuencia de mano de obra
más barata, etc.), no es de extrañar que las Políticas migratorias, como respuesta estatal
para controlar e influir sobre el flujo de migrantes, esté asentado en el tipo de mercado para
el que se produce en conjunto con la ideología liderada. Ello, nos permite ubicar los
distintos tipos de políticas migratorias.
De ésta forma, en virtud a lo que el Estado busque para su desarrollo económico, bajo el
precepto de que a mayor desarrollo económico existirá un mayor desarrollo social, es que
se impulsarán nuevas políticas migratorias, a fin de potenciar o disminuir el flujo migrante.
No obstante, la variable económica no es la única presente al minuto de la elaboración de
políticas migratorias, dado que en conjunto con el modelo de mercado a desarrollar, se
encuentra el tipo de migrante que el Estado desea atraer hacia su territorio, para cumplir el
fin de mercado. Así mismo, será que si el Estado desea impulsar la producción doméstica,
con mano de obra barata, no pondrá mayor obstáculo con el ingreso de migrantes
irregulares ; aumentará el flujo de éste, los cuales se emplearán a menor costo para los
productores nacionales, aumentando la producción.
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Migración en Argentina.
Flujos Migratorios.
Durante los inicios de la República Argentina, ésta se vio enfrentada a un gran dilema que
colocaba en jaque su estabilidad: estar constituida por un extenso territorio y una población
en extremo pequeña, por lo cual no podía, con la población existente, hacer ocupación
efectiva del territorio nacional, corriendo el severo riesgo de pérdida territorial por parte de
los grupos humanos nativos.
Como planteamos en el comienzo de la presente investigación, las Instituciones formales,
son las encargadas de dar respuesta a las problemáticas territoriales y económicas producto
de la carencia de población en el territorio nacional. Y son éstas las llamadas a efectuar
cambios en las reglas del juego para el crecimiento económico, pues a medida que las
Instituciones sean más fuertes, el grado de incertidumbre disminuye y esto fomenta el grado
de eficiencia de los mercados, aumentando las transacciones efectivas; como consecuencia
de la creación de una estructura efectiva, con un set de incentivos que operan bajo el marco
de la eficiencia (North, 1990). Para el caso único de Argentina, frente a la problemática de
baja densidad poblacionas, directamente relacionada con un crecimiento económico lento
(dado que no hay mano de obra ni capacidad económica para investigar y crecer en el uso
de teconología que haga más eficiente la actividad laboral argentina), es que las
Instituciones nacionales, consideran la solución de aumentar la densidad poblacional bajo el
incentivo a la migración. Ésta, sería fomentada acorde a la lógica de crecimiento de
mercado y ideología dominante (pues la ideología marca la lógica de crecimiento del
mercado). En virtud de ellas, se definen entonces las políticas migratorias (respuestas
Institucionales), las cuales pretenden dar controlada selección al tipo de migrante que se
desea incorporar a la fuerza laboral argentina.
Dicha dinámica, queda expresada en el siguiente cuadro explicativo, en donde se
sistematiza la lógica de funcionamiento de las políticas migratorias, para los principales
flujos migratorios, posteriormente detallados:
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Producción Para Ideología dominante
Evolución demográfica Política Migratoria
Mercado Externo Liberalismo Inmigración masiva europea. Declina mortalidad por desarrollo social. Declina fecundidad. Pirámide social: joven. Rápida urbanización. Concentración población metropolitana
urbana.
Exterminio población aborigen. Fomento inmigración europea asociada al proceso
colonizador.
Mercado Interno coyunturalmente
Liberalismo inversionista
Aumento constante migraciones internas. Pirámide social: transición. Concentración población en zonas urbanas.
Restricciones entrada migrantes europeos. Puesta en dudas modelo puertas abiertas. Problemas migrantes limítrofes.
Mercado Interno. Nacionalismo popular
Aumento constante migración interna. Concentración población en zona urbana
Restricción migrantes limítrofes. Preferencia migración europea.
Mercado Externo Neoliberalismo represivo
Leve reducción migración interna. Pirámide social: envejecimiento. Emigración de argentinos
Restricción migrantes limítrofes. Preferencia migración europea.
Mercado Externo Neoliberalismo Democrático.
Estancamiento reducción mortalidad. Probable emigración argentinos.
Amnistía migrantes limítrofes. Restricciones migrantes limítrofes.
Mercado Externo Neoliberalismo Conservador
Crecimiento de la población. Tendencia declinante de crecimiento
migratorio. Desaceleración crecimiento población
total.
Amnistía migrantes limítrofes. Restricciones migrantes limítrofes.
Fuente: Novick, años 1992,1993, 1997,1998, 2000, 2001 (Novick).
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Europeos de ultramar v/s Latinoamericanos limítrofes.Como hemos ya señalado, en las oleadas migracionales, los primero migrantes en arribar en
territorio argentino, con todas las providencias para poder arraigarse y desarrollarse social y
económicamente, fueron los europeos de ultramar (denominados de ésta forma por provenir
de lugares más allá de los océanos que bañan nuestro continente). Ello, no sólo supuso las
ventajas legales entorno a la mayor facilidad de obtener la residencia, nacionalidad y
ciudadanía argentina, sino que también implicó que fueran éstos grupos humanos, los
llamados a crear las bases de las clases políticas argentina.
No obstante, el lector no debe mantener el pensamiento de que el total de los europeos
arribados durante el fomento de la inmigración de éste sector del mundo, pudieron llegar a
las cúspides de la élite política, dado que del 100% de migrantes europeos, arribados, el
40% correspondía a población analfabeta, que principalmente se asentó en las zonas rurales
y litorales del Gran Buenos Aires, dedicándose a la actividad agropecuaria.
El 60% restante, había recibido en Europa instrucción básica y/o avanzada. Es ésta
población la que se asienta en las zonas urbanas, produciendo una explosión demográfica
cuya directa consecuencia fue la creación de los barrios porteños. Son parte de éste
porcentaje, quienes logran crear e influir en la élite política, que conforma la actual clase
política bonaerense.
Dentro de los migrantes europeos, el mayor porcentaje corresponde a migrantes de origen
italiano, seguido por los migrantes de origen español; son éstos dos grupos a los que
prestaremos mayor atención, a fin de ejemplificar la construcción de la clase política.
Los migrantes italianos, llegan a Argentina, siguiendo el modelo gravitacional, como
consecuencia de la Primera Guerra Mundial y las consecuentes crisis económicas y sociales
que vivía Europa. Estos migrantes, arribados entre 1900 – 1914, respondieron en un
aproximado 50% a una migración del tipo “golondrina”, lo que quiere decir que una vez
que lograron aumentar sus propias arcas y lograr estabilidad y mejoría económica, regresan
a su lugar originario.
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Al respecto, en el siguiente cuadro, graficamos los porcentajes de población italiana sobre
el total de población de Buenos Aires para los años señalados:
Cuadro de Migrantes Italianos y total de población en las tres oleadas migratorias de
Argentina (Saéz, 2001)
Año Cantidad de Italianos Total de Población % de italianos
s/ población total
1869 71.442 1.736.923 4,1
1895 492.676 3.954.911 12,4
1914 928.860 7.885.237 11,7
No obstante, el porcentaje de italianos que “decidieron quedarse”, no constituían cualquier
tipo de ciudadano italiano, dado que se constituían como una población altamente
politizada (motivo por el cual, dado las coyunturas históricas en Italia, probablemente les
fuera riesgoso cualquier misiva de retorno), dado que se trataba en su mayoría, de
individuos seguidores de Bakunin y por tanto perseguidos una vez que estalla la división
entre marxistas y anarquistas. Dicha población, en Buenos Aires, no abandonó sus ideales
políticos y pretendieron construir en Argentina, una especie de República Itálica.
Indudablemente, la idea de los politizados italianos, agitó la colonia bonaerense, estallando
la controversia en sus calles. Los grupos de italianos, iban ganando tanto adeptos como
enemigos dentro de la población bonaerense, con una gran significancia: conformarse como
líderes de opinión y gestores de una nueva e imponente clase política.
El segundo grupo de gran relevancia es el compuesto por los migrantes españoles, quienes
representan un aproximado del 20% del total de europeos en territorio argentino.
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Los españoles, al igual que el grupo italiano, responden a un modelo gravitacional de
migración, respondiendo a situaciones de crisis económica en su país de origen. No
obstante, en su mayoría, los grupos de españoles, llegan a la Argentina, para integrarse en
los campos laborales de las zonas rurales o empleos de medio status. Dentro del grupo
español, se constituyen sub-grupos de vascos y gallegos principalmente, siendo éstos
últimos los propulsores de la clase política española en Argentina.
En efecto, la población gallega, que en Buenos Aires se estaba desempeñando como
postores o dueños de posadas (conventillos, bares y similares en los barrios populares de
Buenos Aires, como la Boca o Caminito), comenzó a promulgar la actividad colectiva,
entorno a la unificación de la población gallega, que estaba siendo fuertemente excluida de
la actividad política, como consecuencia de su empobrecida situación.
Paulatinamente, el movimiento gallego, fue radicalizándose entorno a las variables de
nacionalismo e influencia política (desde la academia, en donde muchos de los nuevos
gallegos, se habían logrado insertar), valiéndose así de la legitimidad necesaria para poder
imponerse en la arena política, como referentes.
Otro grupo de españoles, gozaba de participación y relevancia política, dada la historia de
colonización de España en la región; eran individuos pertenecientes a la élite política
colonizadora, ciertamente herederos de un mejor pasar que sus pares gallegos.
De ésta forma, la clase política argentina, en sus primeros pasos dentro de una República
constituida como tal, se vio enriquecida por la actividad política experimentada, de grupos
humanos migrantes, provenientes de Europa, dado que son éstos migrantes los que ven
facilitada su llegada a Argentina como consecuencia de la política migracional que el
Estado Argentino maneja y la situación coyuntural histórica.
Como logramos plantear, la población total argentina, se encuentra, en su alba, constituida
principalmente por migrantes europeos, por lo cual, a años posteriores, el crecimiento
demográfico se ve influenciado por el mestizaje entre los paisanos argentinos y los
europeos, lo que trae como directa consecuencia que la población argentina, en su totalidad,
se encuentre compuesta por descendientes europeos; en distintos grados de descendencia,
por lo cual la acción de una clase política europea, al tratarse de lo que los “padres” hacen,
Victoria Valdivia.
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es completamente legitimada por la población argentina, dado que quienes no eran
descendientes de europeos, reconocían en éstos superioridad cultural, por lo cual no se
sentían cualificados para ir en contra de sus acciones. Ello, se ve reflejado en la acción en
balde del senador Cane, con la Ley de Residencia (Ley N° 4.144), la cual fue sancionada
por el Congreso en 1902. Dicha Ley, pretendía poder expulsar de territorio argentino a
migrantes radicalizados, agitadores sociales y obreros que promovieran la lucha sindical.
Dicha Ley, no logró ver la luz y ser aplicada, dado que fue sancionada por el mismo
Congreso Nacional, dado amparo a las acciones europeas, quizás como consecuencia de
que el mismo Congreso estuviera compuesto por honorables de origen europeo.
Años más tarde, muy a pesar de que se había fomentado la migración europea, lo que
implicaba importación directa y a bajo costo de tecnología, cultura y en síntesis un salto
social cuántico, la situación económica de Argentina, volvió a tener reveses, como
consecuencia de que no existía mano de obra barata, dispuesta a trabajar en las fábricas que
los migrantes europeos habían propulsado.
Lo anteriormente señalado, en conjunto con una crisis económica regional: en donde
diversos países de la región, en especial los limítrofes, atravesaban crisis sociales de gran
envergadura, lo que llevó a parte de su población a ver en Argentina, en específico en
Buenos Aires, la ciudad de oportunidades, en donde salvaguardar su existencia y la de su
descendencia. Es en orden de esto, que durante la década de los 60´s se nota un aumento
explosivo en la migración latinoamericana hacia Buenos Aires, en específico la migración
latinoamericana limítrofe.
El siguiente cuadro, grafica el crecimiento demográfico entorno a las variables de países de
procedencia y años en que se produce el crecimiento:
Victoria Valdivia.
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En el cuadro, se aprecia que conforme aumenta la migración latinoamericana, la migración
europea se ve paralizada. Ello, como claro síntoma de las acciones Institucionales,
orientadas a activar la economía interna, lo que se traduce en un incentivo indirecto a la
inmigración de mano de obra barata; individuos con una baja tas de escolarización y en
situación de riesgo, lo que se condice con el perfil migratorio latinoamericano.
Si bien es cierto, los incentivos no son dentro del marco legal, se entienden como tal las
medidas gubernamentales, al no poner sanciones a la movilización hacia territorio
argentino de ilegales, ni a su contratación en las fábricas y empresas de diversos rubros, aun
cuando ello se encuentre completamente fuera de la legislación argentina y los resguardos
de seguros sociales, condiciones de contrato, entre otras (condiciones que sí gozaron los
migrantes europeos).
A su vez, dado los bajos niveles de instrucción y que no se trata de migrantes deseados, en
vista a una residencia permanente en el país, sino que más bien a una migración del tipo
“golondrina” pero en beneficio de la economía local, es que los migrantes
latinoamericanos, se ubican en los sectores laborales de menor paga y mayor cuota de
trabajo.
Victoria Valdivia.
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En el siguiente cuadro, se ilustra la inserción laboral de los migrantes latinoamericanos
limítrofes, en Buenos Aires (León, 2010):
Como se logra apreciar, en virtud de los datos proporcionados por el INDEC, los migrantes
limítrofes, componen los escalafones más bajos de la inserción laboral; en efecto es casi
estadísticamente poco relevante, el porcentaje de migrantes limítrofes que logran
posicionarse dentro de las élites económicas y / o políticas, a pesar de que actualmente, en
cuanto a cifras, superan con creces a los migrantes de origen europeo.
Dada la situación irregular en la situación de los migrantes limítrofes, existen una serie de
abusos o faltas al protocolo, en la situación de empleabilidad de éstos: no poseen
documentación nacional de ningún tipo: vale decir que ingresan al país, generalmente, con
visa temporaria de turismo, pero que una vez vencidos los 90 días, no re renueva pues no
salen de la Argentina. A su vez, con visa de turista, son empleados en diversas áreas de
mano de obra, sin las providencias pertinentes, como un contrato laboral. Son ilegales en
todo sentido, sin derecho a seguro social o a las garantías mínimas de seguridad laboral,
como el salario mínimo.
Completamente fuera del marco normativo - legal, los migrantes latinoamericanos, se ven
enfrentados a la constante discriminación por la población “legal” de Buenos Aires,
compuesta mayoritariamente por descendientes de migrantes europeos. Esto, constituye un
escenario peligroso para la precaria estabilidad social de un Buenos Aires tan heterogéneo
Victoria Valdivia.
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de composición, pues el aumento de ilícitos ligados a la prostitución y tráfico de drogas, se
relaciona con el incremento de la presencia de limítrofes ilegales en Buenos Aires.
Ello, nos recuerda el tan popular adagio de que en momentos de crisis económicas se
tenderá a culpar al extranjero por la carencia de alimento. En efecto, en Buenos Aires,
dicho fenómeno social se cristaliza en la segregación a la población de los sectores
limítrofes, la cual se ve sumergida en una espiral; no pueden dejar las actividades
económicas pues las necesita para subsistir, el costo de retorno al país de origen es
demasiado alto e inalcanzable (pues muchas veces involucra la seguridad de la propia vida),
pero tampoco pueden impulsar una actividad sindicalista como otrora lo hicieran los
gallegos, pues no cuentan con la condición de “legal” dentro de Argentina, por lo cual el
temor a la deportación, los somete a las condiciones precarias de vida que ya tienen.
El Estado, por su parte, mientras considere necesaria la actividad laboral de limítrofes para
activar la economía argentina, no toma medidas pertinentes para tener un control cierto
sobre la entrada y salida de extranjeros del país, pero tampoco toma las providencias
pertinentes para asegurar el bienestar de éstos “ilegales” en el país.
En efecto, la clase política argentina, constituida por otrora inmigrantes, se reconoce como
distinta y superior, en su calidad de inmigrante, con los “nuevos llegados” provenientes de
américa latina, no tan sólo por el país de origen o nivel de instrucción alcanzado, sino
principalmente porque ellos, a diferencia de los limítrofes, son considerados ciudadanos de
Buenos Aires, teniendo acceso a todos los derechos, beneficios y deberes que dicho título
ostenta.
La problemática aquí, subyace en el hecho de que los migrantes latinoamericanos son
considerados “migrantes de segunda categoría” y bajo dicho alero, son privados de los
derechos inalienables del ser, como la seguridad social que puede tener alcances tan
poderosos, como vulnerar el mismísimo derecho a la vida.
La instrumentalización de la migración latinoamericana, no es novedad respecto al modelo
de migración en Argentina, no obstante las repercusiones en la población ha llevado al
aumento de la violencia e inseguridad en las calles de Buenos Aires, traduciéndose en una
problemática de Defensa y Seguridad nacional.
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Conclusiones
El aumento de la tensión entre los descendientes de migrantes europeos, legitimados en sus
acciones políticas dado que son quienes constituyen la clase política argentina, quienes
diseñan las actuales reglas del juego en Buenos Aires y la empobrecida clase trabajadora,
proveniente de los países limítrofes, ha traído como directa consecuencia, la necesidad de
legislar entorno a la Migración en Argentina, a fin de establecer un mecanismo normativo-
institucional, que permita dar respuesta al fenómeno que vive Argentina: estar compuesta
en su mayoría poblacional por descendientes de migrantes que se niegan a la aceptación de
nuevos grupos de inmigrantes.
La respuesta Institucional, frente a la migración como fenómeno, siempre ha ido entorno a
las Políticas Migratorias, las cuales tienen su fundamento en el modelo económico que se
adopta, acorde al contexto histórico – político que vive el Estado.
Frente a la última coyuntura social, en donde el aumento de ilícitos e inseguridad en
Buenos Aires, ha llevado a que descendientes de migrantes europeos, que hoy componen la
élite política ( como Mauricio Macri, hijo de migrante Italiano y gobernador actual de
Buenos Aires), lleven a cabo campañas políticas en contra de la migración latinoamericana,
ligándola directamente con el aumento de ilícitos y crímenes dentro de Capital Federal y de
además, ser una causante de la inestabilidad social que experimenta la zona y la patente
desigualdad frente al poder defenderse, por parte de los limítrofes, es que el Estado, bajo el
Gobierno de Cristina Fernández, ha dado a luz a la Ley N° 25.875, a fin de entregar a los
migrantes limítrofes, las condiciones de ciudadano, bajo las cual comenzar a gestionar
bases de igualdad, dado que únicamente podrán acceder a cargos públicos, aquellos que
ostenten la condición de Residencia permanente y ciudadanía Argentina.
Frente a ello, la clase política argentina, proveniente de migrantes europeos, se ha opuesto
rotundamente, dado que la inserción a la ciudadanía de los migrantes limítrofes,
desplazados y marginados durante años, podría llevar a un profundo sentimiento de
identidad entre pares, que impulse la actividad política de corte nacionalista entre los ya
citados, impulsando una nueva ola de movimientos políticos, que podrían resultar tan
influyentes como lo fueran los movimientos italianos en sus momentos.
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Nuevos actores políticos, implican una serie de modificaciones al modo en que se
relacionan éstos con las estructuras sociales, dado que no sólo se suman más competidores
para los cargos públicos y con ello un nuevo balance de Poder, sino que además involucra
el que las demandas de los nuevos ciudadanos, sean incluidas en las agendas de campañas
electorales y con ello en las agendas de gobierno, cambiando el acento de los actuales
intereses que marcan las agendas.
La Ley de Migración Argentina, si bien es cierto dota a la población limítrofe de
condiciones de bienestar como lo es la ciudadanía y los empodera al reconocerles el voto de
urna para elecciones, no representa únicamente el espíritu altruista de homogeneizar una
sociedad tan compleja como la bonaerense, sino que al emanar de una clase política,
compuesta en su mayoría por descendientes de europeos, habla más bien de un mecanismo
de control de las actividades de los nuevos migrantes. En efecto, otorgando los derechos
civiles, se les compromete al cumplimiento de los deberes que ello conlleva. Teniendo
pleno registro de sus actividades, es mucho más efectivo el control sobre dichas
actividades, que si se les mantiene fuera del marco legal, en donde todo se transforma en un
mero supuesto.
La migración, como fenómeno, está lejos de presentar un estancamiento y podemos
asegurar que como género de estudio, es uno de los pocos sometidos constante al dilema
del cambio; provoca profundos e irreversibles cambios en las sociedades que los
experimenta y por ello precisa de las respuestas Institucionales pertinentes, a fin de
asegurar la supervivencia de las formas sociales conocidas, como los Estados en su
conformación territorial.
Podemos establecer, que conforme las situaciones sociales se convulsionan y amenazan la
supervivencia, los grupos humanos se verán orientados a migrar, para poder preservar su
propiedad privada, entendiendo ésta como su libertad, su vida y sus bienes. Frente a un
escenario económico incierto, respecto a la banca Europea, no debería ser extraño que en
los próximos años, observáramos una segunda gran oleada de migrantes europeos a la
región. Teniendo de antecedente el caso de la Migración Argentina, es menester que los
Estados elaboren propuestas desde el marco normativo a fin de que éstas oleadas de
migrantes, no generen desbalances de Poder que pudieran llevar al caos y convulsión
Victoria Valdivia.
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social. Esto, fundamentado en la experiencia argentina mediante la Ley de Migraciones,
que demuestra que aquel grupo social que logre dar control al fenómeno de Migración,
mantendrá sus cuotas de Poder, pues mientras sean los hijos de europeos, quienes sigan
formulando las políticas públicas entorno a la migración, seguirán siendo la clase
privilegiada que ostente los cargos públicos de mayor rango, seguiremos leyendo apellidos
como Macri, Kirchner, Menem, De La Rúa, entre otros, cuyos orígenes, se encuentran en la
Europa de Ultramar.
Bibliografía
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Victoria Valdivia.
