46 Nursing. 2011, Volumen 29, Número 2

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barreras entre el lenguaje clínico y la percepción de las náuseas o vómitos por parte del paciente no sólo ayuda a los profesionales de enfermería a conectar con los pacientes sino que también les permite comunicar sus síntomas y sentirse más seguros.

Este artículo describe cómo nuestro hospital desarrolló y probó una

nueva escala para valorar las náuseas. Compartimos nuestra nueva Escala de Náuseas del 0 al 5. En primer lugar, describimos los problemas que tenía nuestro sistema anterior.

Presentación del problemaLos profesionales de enfermería de nuestra unidad de oncología informaron que los pacientes hospitalizados tenían problemas a la hora de valorar las náuseas del 0 al 10. Nuestra escala anterior de náuseas se basaba en la escala visual analógica del dolor de uso común, diseñada para valorar el dolor, no las náuseas1. Varios profesionales de enfermería valoraron al mismo paciente y se encontraron inconsistencias sustanciales debido a que la intensidad o el grado de los síntomas era demasiado amplio, y los números carecían de criterios específicos. A los clínicos les resultaba difícil informar del grado de náuseas a causa de la falta de los descriptores específicos, de manera que las dosis inapropiadas y la selección de antieméticos provocan una incomodidad al paciente a largo plazo.

Decididos a encontrar una forma mejor de controlar a estos pacientes, los profesionales de enfermería revisaron los estudios a fin de evaluar las herramientas de valoración de las incómodas e insoportables náuseas que se producen de 1 a 2 h después del tratamiento y que desaparecen alrededor de las 24 h. Estos síntomas se asocian con patologías o tratamiento del cáncer y con el período postoperatorio.

Revisar las herramientasEn nuestra investigación revisamos 21 herramientas que se utilizan para valorar los síntomas de náuseas. Lo más importante para el paciente era que se le controlaran las náuseas,

LAS NÁUSEAS Y EL VÓMITO son problemas habituales en los pacientes postoperados y en pacientes oncológicos. Los profesionales de enfermería deben ser capaces de valorar adecuadamente el nivel de las náuseas o de los vómitos para poder controlarlos de forma apropiada. La utilización de herramientas efectivas para afrontar las

Valorar los beneficios de utilizar una escala de náuseas del 0 al 5Angela Halpin, MN, RN, CNS; Loucine M. Huckabay, PhD, RN, PNP, FAAN; Jessica L. Kozuki, MSN, RN, AOCNP, CNS, NP, OCN, y Deborah Forsythe, RN, OCN

Escala de Náuseas del 0 al 53,6-7,8

En cada habitación hay una copia de la escala.

En la valoración de los pacientes, los profesionales de enfermería muestran la escala a los pacientes que pueden leer, y la explican a los que no pueden.

Los profesionales de enfermería leen los niveles de la escala y los criterios. Los pacientes indican en qué nivel se encuentran.

Los profesionales de enfermería preguntan a los pacientes qué es lo que les ayudaría con sus signos y síntomas. Los pacientes pueden escoger entre una intervención farmacéutica o no.

Los profesionales de enfermería valoran al paciente antes de la administración de medicamentos y, en los 30 min posteriores, se valora la efectividad de la intervención. Luego recogen ambos resultados en la base de datos y en el registro de medicamentos.

Los profesionales de enfermería registran el nivel del paciente antes de las intervenciones no farmacéuticas y 30 min después en la base de datos y en las notas de evolución.

Se realiza un informe diario por unidad para asegurar que los signos y síntomas se han valorado y se han registrado los resultados.

Medida Definiciones

0 Ninguna Sin náuseas

1 Prevista Las náuseas se prevén y deben suministrarse medicamentos como profilaxis

2 Leve Náuseas. Capaz de tolerar alimentos o medicamentos por la boca

3 Moderada Náuseas persistentes. Falta de apetito. Capaz de tomar ocasionalmente pequeñas comidas

4 Alta Náuseas en curso. Sin apetito. Incapaz de tolerar alimentos/medicamentos por la boca

5 Intensa Náuseas con arcadas

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pero no existía ninguna herramienta estandarizada de valoración de las náuseas o los vómitos relacionados con el cáncer o con la cirugía. Kirkova y otros colegas revisaron sistemáticamente varias herramientas que valoraban las náuseas y los vómitos como síntomas separados2. La mayoría eran autoevaluaciones, y algunas se basaban en las observaciones del profesional de enfermería o bien en las respuestas del paciente.

En cuidados intensivos, los intensos signos y síntomas de los pacientes hacen que les resulte complicado completar la autoevaluación mediante la utilización de estudios o de mecanismos escritos. Determinadas preguntas son demasiado largas para los pacientes, en escalas de más de 7 puntos. Normalmente, son los familiares y no los pacientes los que completan la valoración.

La revisión mostró que comparar los instrumentos es un reto, puesto que los estándares de fiabilidad y validez varían2. No existe ningún instrumento que cumpla todos los criterios psicométricos de validez, fiabilidad, sensibilidad y practicidad.

Crear la Escala de Náuseas del 0 al 5Después de evaluar la evidencia en la valoración de las náuseas, un grupo de profesionales de enfermería de oncología y una enfermera clínica especialista desarrollaron un lenguaje apropiado para la Escala de Náuseas del 0 al 5, combinando las mejores características de las herramientas existentes y de la escala Likert3-6. El objetivo consistía en mejorar la comunicación entre los pacientes, los profesionales de enfermería, los cuidadores sanitarios y el personal clínico. (Véase el cuadro anexo Escala de Náuseas del 0 al 5). La fundación DAISY proporcionó una subvención, y la junta de revisión institucional aprobó el estudio.

La escala resultante es clara, concisa y fácil de utilizar a la cabecera de la cama del paciente. Consideramos que sería mejor evaluar el síntoma de las náuseas con criterios. Su contenido y su estructura satisficieron a los profesionales de enfermería, que consideraron que la escala era más clara que la existente hasta el momento y que ayudaría a los pacientes a comunicar su nivel de náuseas.

Se desarrolló un estudio piloto para evaluar tres cuestiones:

1. ¿Qué nivel de satisfacción experimentan los profesionales de enfermería cuando utilizan esta nueva Escala de Náuseas del 0 al 5 con criterios específicos, comparado con la actual escala del dolor del 0 al 10 adaptada a las náuseas?2. ¿Es fácil de entender esta nueva escala por parte de los pacientes?3. ¿Es fácil de utilizar para los pacientes y de comunicar la extensión de sus náuseas?

Esta herramienta se probó en 89 situaciones que experimentaron pacientes de oncología y se demostró que era la más útil. Se utilizó una hoja de encuesta para cada una de las 89 situaciones (n=55) y se completó un análisis estadístico basado en los hallazgos. Los resultados demostraron que los profesionales de enfermería preferían la Escala de Náuseas del 0 al 5 ante la escala del 0 al 10 en cuatro principales áreas en los siguientes porcentajes:

Comprensión de los profesionales de enfermería, 52%.

Comunicación de los profesionales de enfermería con el paciente, 67%.

Habilidad del paciente para comunicar, 75%.

Comunicación de los médicos con los profesionales de enfermería y los pacientes, 76%.

Los datos se extrajeron de las encuestas formuladas a los profesionales de enfermería mientras cuidaban a sus pacientes. Los profesionales de enfermería utilizaron unas fichas plastificadas con la escala del 0 al 5 para la autoevaluación de los pacientes. La efectividad de la escala se determinó preguntando a los pacientes sobre el nivel de sus náuseas utilizando la nueva escala del 0 al 5. Los profesionales de enfermería realizaron el cuestionario y se contaron. Después de recopilar los datos, los profesionales de enfermería que participaron en las encuestas rellenaron una encuesta aparte sobre la satisfacción.

La implementación de esta herramienta fue positiva. Los hallazgos de la nueva escala indicaron que para los profesionales de enfermería era más

fácil y más efectiva si la comparábamos con la escala del 0 al 10, y era por los criterios que se utilizaban. Permitía a los profesionales de enfermería comunicarse mejor con los pacientes, sorteando la dificultad que existía entre el lenguaje clínico y la percepción de los síntomas por el paciente.

La herramienta resultó ser un éxitoLa comunicación mejoró significativamente según un estudio realizado después de su implantación y de la revisión de las encuestas. La herramienta de medida de la intensidad, el grado de calificación y los criterios hacen que la escala sea práctica para su uso a la cabecera de la cama del paciente. Desde el estudio comparativo, la escala fue adoptada para su utilización en todos los departamentos del hospital, y continuamos recibiendo testimonios positivos de los pacientes al respecto. N

BIBLIOGRAFÍA

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En el Hoag Memorial Hospital Presbyterian de Newport Beach (California), Angela Halpin es presidenta de investigación de la enfermería por excelencia y enfermera clínica especialista en patología pulmonar, Loucine M. Huckabay es consejera de investigación de enfermería, Jessica L. Kozuki es enfermera clínica especialista en oncología, y Deborah Forsythe es enfermera de oncología. La Dra. Huckabay es asimismo directora y profesora en la California State University, en Long Beach.