136

Van FRAASSEN, B. C.-La Imagen Cientifica

Embed Size (px)

DESCRIPTION

Filosofia de la ciencia. Cuando se habla de realidad, hay que tener en cuenta que el dominio de la científica se centra en lo observable, y que lo que puede ser observado ...

Citation preview

  • 'aid6s. PROBLEMAS CIENTIFICOS Y FILOs6FICOS . LA IMAGEN ..Ian Hacking, Representar e intervenir CIENTIFICA . BflS C. van Fraassen, La imagen cientiflCa

    Bas C. van Fraassen

    ~II~

    PAIDOS

    Mexico

    Buenos Aires

    Barcelona

    -.

    Universidad Nacional Aut6noma de Mexico

  • DIRECCION DE LA COLECCION Seminario de Problemas Cientificos y Filosoficos, UNAM

    Titulo original: The Scientific Image

    Publicado en ingles por Oxford University Press

    Traducci6n: Sergio Martinez

    Revision de la traducci6n: Luigi Amara

    Diseiio de cubierta: Margen Rojo I Angel Garcia Dominguez

    TO edicion. 1996

    Quedan rigurosrunente prohibidas, sin la autorizaci6n escrita de los titulares del "Copyright", bajo las sanciones establecidas en las leyes, la reproducci6n tolalo

    parcial de esta obra par cualquier medio 0 procedimiento, comprendidos la reprografia y el tratruniento informatico, y la distribuci6n de ejemplares de ella

    . mediante a1quiler 0 prestruno publico.

    Bas C. van Fraassen, 1980

    de la presente edici6n:

    Universidad Nacional Aut6noma de Mexico

    Coeditan: Seminario de Problemas Cientificos y Filos6ficos, UNAM;

    Instituto de Investigaciones Filos6ficas, UNAM,

    Circuito Mario de la Cueva, Ciudad de la Investigaci6n en

    Humanidades, Ciudad Universitaria, 04510, Mexico, D.F.;

    Ediciones Paid6s Iberica, S.A.,

    Mariano Cub!, 92 - 08021 Barcelona, y

    Editorial Paid6s Mexicana, SA,

    Ruben Dario 118, 03510 Col. Moderna, Mexico, D.F., I

    Tels.: 579-5922, 579-5113. Fax: 590-4361

    ISBN: 968-&53-321-1 I IDerechos reservados conforme a la ley

    Al amistoso pueblo de Tigh-na-Coille

    fit Impreso en Mexico - Printed in Mexico

  • INDIeE

    1. INTRODUCCI6N .............. '.' ... ; .......... 15

    2. ARGUMENTOS CONCERNIENTES AL REALISMO

    CIENTlFICO .................................. 21

    1. Realismo cientifico y empirismo constructivo ............. 21

    Enunciaci6n del realismo cientifico ....... " , .... 221.1 1.2 Alternativas frente al realismo ... . . . . . . . . . . ., . . . . 26

    . 1.3 Empirismo constru~tivo , .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . 27

    2. La "dicotornfa" teona/observaci6n. . . . . . . . . . . . . ~ . . . . . . 30

    3.Inferencia hacia la mejor expUcaci6n .................. 36

    4, Lfmites de la demanda de explicaci6n. , , . , . . . , .'. . . , . . . . 40

    5, EI principio de la causa comun ....... , .............. 43

    6. Llmites de la explicaci6n: un experimento mental ........ 51

    7. Los demonios y el argumentoultimo ............. . . . . . . . 54

    \ . . . . . .

    3. SALVAR LOS FEN6MENOS , ; ., . " .. , .... ,. 'j... , , . 63

    l. ,Modelos ........ , ; ........ ~ .. , ... , ........ 63

    2. EI movimiento aparente y el espacio absoluto . . . . . , . . . . . . 67

    3. El contenido emplrico de la teona de Newton ., ... , ~ ... , .. 69

    4. Las teorias y sus extensiones . . . , . . . . . , . . . . . .. . . . , . . 70

    5. Extensiones: victoria y derrota calificada, , .............. 74

    6. Las fallas del enfoque sintactico . . . , . . . . . . . . . . . . . . . . 77

    7. El cfrculo hermeneutico . . . . . . . . . .. . . . . .. . . . . . . . . . 80

    8. Los llmites de la descripci6n emplrica ................. 83

    9. Una nueva imagen de las teonas .................... 89

    4. EMPIRISMO Y METODOLOGIA CIENTIFICA ........... 95

    1. La epistemologfa empirista yet escepticismo ............. 96

    2. La metodologia y el diseiio experimental . . . . . . . . . . . . . . . 98

    2.1 Los papetes de la teona .. . . . . . . . . . .. . . . . . . . . 98

    2.2 La medici6n de la carga del electron. . . . . . . ; . . . .: . . 100 li!f

  • o LA IMAGEN CIENTIFICA

    2.3 Boyd y la expllcacion filosofica de la metodologfa . . . . . . 103

    2.4 Fenomenologia de la actividad cientffica . . . . . . . . . . . 107

    3. La objeci6n de la cQnjuncion . . . . .. . . . . . .. . . . . . . . . 109

    4. Vutudes pragmaticas y explicacion ................ 114

    4.1 Las otras virtudes ....................... 114

    4.2 La incursion de la pragmatica. . . . . . . . . . . . . . . . . 116

    4.3 La busqueda de la explicacion . . . . . . . . . . . . . . . . ~ 119

    i. PRAGMATICA DE LA EXPUCACION ..... ~ ........ 125

    1. Ellenguaje de la explicacion ..................... 125

    1.1 Verdad y gramatica .................. ; ..... 126

    1.2 Algunosejemplos. . . . . . . . . . . . . . . . .. . . .. '. .. 130

    2. Una historia parciaL . . . . . . . . . . . . ~ . . . . .. . . . . . . 132

    2.1 Hempel: las bases de la creencia. . . . . . . . . . . . . . . . 132

    2.2 Salmon: factores estadisticamente relevantes .. ;..... .135

    2.3 Propiedades globales de las teorfas .;..... .. . . . . . . . 139

    . 2.4 Las dificultades: las asimetrias y los rechazos . . . . . . .. 141

    2.5 Causalidad: la conditio sine qua non ............ 143

    2.6 Causalidad: la teoria de Salmon . . . . . . . . . . . . . . . . .150

    2.7 Las claves de la causalidad .................. 155

    2.8 Las preguntas "por que" .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . 159

    2.9 La elaboracion de las claves ................ 161

    3. Las asimetrfas de la explicacion: un relato breve ......... 163

    3.1 La asimetria y el contexto: la criba aristotlica ........ 163

    3.2 "La torre y la sombra" ................. '.... 165

    4. Un modelo para la explicacion .................. 167

    4.1 Contextos y proposiciones ...................... 168

    4.2 Preguntas. . . . .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 171

    4.3 Una teona de las preguntas "por que" .. '........... 176

    4.4 Evaluacion de las respuestas .: ................ 181

    4.5 La presuposicion y la relevancia elaboradas .......... 187

    5. Conclusion. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 189

    i. PROBABILIDAD: LA NUEVA MODALIDAD

    DE LA CIENCIA . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 195

    1. La estadistica en la ciencia general ............... 197

    2. La mecanica estadistica clasica. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 199

    2.1 La medida de la ignorancia . . . . . . . . ~ . . . . . . . . . 200

    2.2 La probabilidad epistemologica y la probabilidad

    objetiva desenredadas ...... . . . . . . . . . . . . . . . . 203

    iNDlCE 11

    2.3 La intrusion de la infinitud ............... 206

    3. La probabilidad en mecamca cuantica ................. 208

    3.1 Las divergencias con el caso clasico .............. 210

    3.2 Las probabilidades cuanticas como probabilidades ~

    condicionales .... " ...................... 215

    3.3Ensambles virtuales de mediciones .............. 218

    4. Hacia una interpretacion empirista de la proba~ilidad ....... 219

    4.1 Los espacios de probabilidad como modelos

    de experimentos .......................... 220

    4.2 La interpretacion frecuentista estrlcta . . . . . , . . . . . . .. 223

    4.3 Propension y secuencias virtuales .. . . ... . ~ . . . . . . . . 229

    4.4 Una interpretacion frecuentista modal .............. 233

    4.5 La adecuaci6n empfrica de las teorias estadisticas . . . . . . 237

    5. La modalidad: un atrincheramiento filos6fico ......... 239

    5.1 Empirismo y modalidad . . .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . 239

    5.2 Ellenguaje de la ciencia . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 241

    5.3 Modalidad sin metafisica . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 245

    7. UNA POLEMICA MODERADA .................. .-. 249

    I .................................... 250

    II ...................................... 253

    m.: ........................... 254

    IV ... " ................................... 256

    V ',' ': . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 258

    Posdata ciehtffica final . . . . . . . . . . . . . : . . . . . . . . . . . 259

    fNDICE ANALITICO . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 263

  • PREFACIO

    El proposito de este libro es desarrollar una altemativa constructiva frente al realismo cientffico, una posicion que ultimamente ha sjdo muy discutida y defendida en la filosofla de la ciencia Para este rm present are tres teodas, cada una de las cuales necesita de las otras para su apoyo mutuo. La primera coilcieme a la relacion de una teoria con el mundo, y especialmente 10 que puede ser Hamado su valor empirico. ,La segunda es una teoda de la explicacion cientifica, en la cualla capacidad explicativa de una teoda es considerada una caracteristica que de hecho va mas alIa de su valor empirico, pero que es radicalmente dependiente del contexto. Y la tercera es una explicacion de la prob'abilidad tal como se presenta dentro de la teoria

    " de la flsica (como opuesto a: en la evaluacion de su apoyo evidencial). Los primeros dos capitulos forman una introduccion breve y relativamente sencilla a los debates concemientes al realismo cientifico, y explicaran de este modo la organizacion y la estrategia del resto. He mantenido el caracter no

    tI~cnico a todo 10 laigo de la exposicion, remitiendome para detalles tecnicos a artfculos de revista donde, me parece, tienen un lugar mas indicado.

    , Estoy en deuda con numerosas personas; muchas de elIas se indican en las notas. Me gustaria aiiadir aquf algunos agradecimientos personales. Mi mayor deuda de gratitud en filosofla de la ciencia ha sido siempre con Adolf Grunbaum, y se renovo cuando asistf a su conferencia sobre la: electrodina, mica de Dirac, en Santa Margarita, en 1976, un paradigma de exposicion filosofica de la ciencia, lacual solo escasamente puedo esperar emular. Con

    ,,' Glymour,Hooker, Putnam, Salmon, Smart y Sellars tengo la deuda del reto "

  • 14 LA IMAGEN CIENTiFICA

    bre todo de las conferencias de 61 y de Dalla Chiara acerca de su teoria de la estructura de la ffsica. Una deuda mas antigua, recordada al escribir varias partes de este libra, es con Henry Matgenau, dequien aprendl bastante sobre las probabilidades y los estados en la mecaruca culintica. Muchos amigos y colegas ayudaron en varias etapas durante la redaccion de este libro, reaccionando amigable y cruelmente, al mismo tiempo, a mis argumentos, ideas e hlstorias didacticas: Paul Benacerraf, Nancy Cartwright, Ronald de Sousa, Hartry Field, Yvon Gauthier, Ronald Giere, Karel Lambert, Edwin Levy, Margot Livesey, Hugh Mellor, Ben Rogers, Richmond Thomason y Roger Woolhouse, para mencionar solo algunos. Las principales tesis de este libro fueron presentadas en diver'sasocasiones en conferencias; las ultimas, antes de la impresion, fueron tres conferencias en la Universidad de Princeton en mayo de 1979. Finalmente, ha sido invaluable la ayuda del Canada Council en apoyo de los proyectos de investigacion durante los cuales este libro cobra forma, especialmente al facilitar los contactos con otros investigadores, requisito indispensable para esta investigacion.

    Julio de 1979

    B.C.v.F.

    A,19"

    1 INTRODUCCI6N

    , ,

    Es facil tolerar el instinto metaffsico comtin. Pero un gusto por la metaffsica puede ser una de aqueUas cosas a las que debemos renunciar si queremos moldear nuestras vidas hasta la perfecci6n artistica.La filosafia sirve a la cultura, no~con,.el don imaginario del conocimiento absoluto 0 , trascendentaL, sine",sugiriendo preguntas.'; .

    Walter Pater, El Renacimiento

    La oposicion entre empirismo y realismo es vieja y puede ser presentada con ejemplos de muchos episodios de la historia de la filosofia. El mas ilustrativo de todos 6stos quiza sea el ofrecido por el sentido de superioridad fdosofica que los participantes en el temprano desarrollo de la ciencia modema sentian en relacion con la tradicion aristotelica. En esa tradicion, los realistas sostenian que las regularidades en los fen6menos naturales debian tener una raWn (causa, explicaci6n), y veian esta;razon en las propiedades causales --constitutivas de 10 que elIos llamaban formas sustanciales 0 naturaleza-:- de las sustancias involucradas en los procesos naturales. Los nominalistas, que negaban la realidad de estas propiedades, estaban en la posicion de tener que rechazar tales demandas de explicacion.1

    Los fil6sofos comprometidos con el desarrollo de los fundamentos filos6ficos de la ciencia modema habian elurlido aparentemente este dilema, Sin postular tales propiedades causales, formas 0 "cualidades ocultas", todavia podfan explicar laS regularidadesque se observan en la naturaleza. Asi, Robert Boyle escribe:

    1 Para unadiscusi6n de algunos de los temas ftlos6fi

  • 17 16 LA IMAGEN CIENTiFICA

    AqueUo a 10 que principalmente aspiro es a hacerles creible, a traves de experiment08, que casi tOO08 los tipos de cualidades, la mayor parte de las cuales han sido dejadas sin explic;lci6n poe las escuelas 0 generalmente han sido referidas a no se que incomprensilies formas sustanciales, pueden ser prOOucidas mecanicamente, es decir, por agentes corp6reos. Entiendo por ello aquellos agentes que no parecen.operar de otra manera que en virtud de su movimiento, tamafio, figura y diseiio de sus propias partes (I1amo a estos atributos afecciones mecarucas de Ia materia).2

    Ellos se percataron muy bien de que dar cuenta de fen6menos tales como el calor 0 las reacciones qufmicas unicamente en terminos de atributos mecarucos requerfa de por 10 menos una teorfa at6Il1ica de la materia. Pero supongo ql.le esta claro que enfrentan otra vez el mismo dilema en cuanto a las regularidades que postulan en el comportamiento de las partes del atomo. Alii no son posibles las explicaciones mecanicas, puesto que los ~ttomos no tienen partes ulteriores. As! qu~, 0 bien deben atribuir poderes, cualidades y propiedades causales especificas a esos atomos para explicar por que estos actuan y reaccionan de la manera en que 10 hacen, 0 bien deben rechazar, como los nominalistas antes que ellos, la demanda de explicaci6n.

    Ademas, se ganaron un problema. Parte de la motivaci6n para el rechazo nominalista del mundo de poderes, ptopiedades y disposiciones de los rea~ !istas aristotelicos (vuelto famoso por la virtus dormitiva de Moliere) era epistemol6gica. La observaci6n de los fen6menos no apuntaba sin ambigiiedad hacia las supuestas conexi ones causales detras de ellos. Este problema existe de manera similar para las hip6tesis at6micas: los 'Jen6menos no deciden su verdad 0 falsedad, aunque quizas son explicados mejor por una hipotesis que por otra. Intentos subsecuentes de los. cientfficos por clarificar las bases ftlosoficas de su disciplina encontraron aun mas diffcilde reconciliar el empirismo que profesaban y su antipatfa hacia la metafisica, con una no autorizada creencia en hipotesis que describen un mundo supuesto mas alIa de los fen6menos.

    Esto llevo en el siglo XIX alfenomenalismo de Ernst Mach, al convenciomllismo de Henri Poincare y al ficcionalismo de Pierre Duhem. En el siglo xx, el empirismo logico de Hans Reichenbach y el positivismo 16gico de Rudolf Carnap fueron desarrollos ulteriores en esta vuelta radical al empirismo.

    2 The Works of Ihe Honourable Robert Boyle, Londres, Birch, 1672, vol. III, pag. 13; tomo el pasaje de R.S. Woolhouse, Locke's Philosophy ofScience and ofLonguage, Oxford, Blackwell, 1971, que contiene un excelente examen de los temas filos6ticos de tal periodoy del papel que desempefi6 Boyle.

    INTRoDuccr6N

    Sin embargo, actuaImente nadie puede adherirse a ninguna de estas posiciones filos6ficas en algun grado considerable. EspeciaImente el positivismo 16gico, aun cuando uno mismo sea bastante benevolo acerca de 10 que cuenta como un desarrollo en vez de un cambio de posicion, tuvo un fracaso espectacular. As! que olvidemos estas etiquetas que nunca hacen mas que imponer un orden momentaneo en las arenas movedizas de la fortuna filosofica, y veamos que problemas enfrenta hoy un aspirante a empirista. l Que clase de explicacion filosofica es posible dar acerca del fin y la estructura de la ciencia?

    Los estudios en filosoffa de la ciencia se dividen, a grandes rasgos, en dos clases. La primera, que podrfa ser Hamada fundacional,' se refiere al contenido y la estructura de las teorfas. La otra clase de estudio trata de las relaciones de una teorfa con el mundo, por un lado, y con el usuario de la teona, por el otro; .. , .

    Existen profundos desacuerdos filos6ficos acerca de la estructura general de las teorias cientfficas y la caracterizaci6n general de su contenido. Una opini6n coh"iente, no del todo libre de controversia pero todavfa generalmente aceptada, es que las teorfas dan razon de los fen6menos (10 cual significa los procesos y las estructuras observables) postulando otios procesos y estructuras no accesiblesdirectamente a la observacion, y que lin sistema de cualquier tipo es descrito por una teorfa en terminos de sus estados posibles. Esta es una opinion acerca.de la estructura de las teorfas compartida por much()s fiIosofos que, sin embargo, discrepan en las cuestiones concernientes a ~a relaci6n de una teona con el mundo y con sus usuarios. Los adversaribs de tal opinion supongo que diran, por 10 menos, que esta explicacion de cOmo es la ciencia es verdadera "a simple vista", 0 correcta como una primera aproximaci6n.

    Una relacion que una teorfa puede tener conel mundo es la de ser verdadera, dar una descripcion verdadera de los hechos. A primera vista puede parecer trivial afmnar que la ciencia pretende encontrar teorfas verdaderas. Pero. unida a la opinion precedente sobre como son las teorias, la trivialidad desaparece. En conjuncion implican que la ciencia pretende encontrar una descripci6n verdadera de procesos inobservables que expliquen los observables, y tambien de los estados de cosas que son posibles, y no meramente de los, que son el caso. EI empirismo ha sido siempre una gufa filos6fica muy importante en el estudio de la na(uraleza. Pero el empirismo requiere de teorias Unicamente para ofrecer una caracterizacion verdadera de 10 que es observable, y considera la estructura postulada ulteriormente UIJ. medio para dicho fin. Ademas, los empiristas han evitado siempre la reificaci6n de la posibilidad (0 desu par,lanecesidad). Ellos restringenlaposibilidad'

  • 18 19 LA IMAGEN ClENTlFICA

    y la necesidad a relaciones entre ideas 0 entre palabras. considenindolas meros artificios que facilitan la descripcion de 10 que efectivamente sucede. Asf que desde un punto de vista empirista. para servir a los propositos de la ciencia, los postulados no necesitan ser verdaderos. excepto en 10 que dicen . acerca de 10 que es efectivo y empmcamente comprobable.

    Cuando este punto de vista ernpirista fue representado por ei positivismo logico. este Ie aiiadi6 una teona del significado y ellenguaje y. en general. una orientacion lingiifstica. Actualmente esa forma de ernpirisrno es impugnada por el realisrno cientffico. que rechaza no solarnente las opi~ niones de los positivistas sobre el significado. sino ta:mbien aquellas tesis empiristas que subraye en el pan-afo anterior. Mi propia posicion es que el empirismo es (,::orrecto. pero que no podia perdurar en la forma lingiiistica que los positivistas Ie dieron. En algunos casos tenian razon al pensar que varias perplejidadesfllosoficas. malinterpretadas comop~oblenias oh~ . tologicos y episternologicos. eran realmente. en el fondo. problemas acerca del lenguaje. Esta opinion creo que es correcta especialmente cuando se trata de problemas relativos a la posibilidad y la necesidad. El lenguaje de la ciencia. siendo parte dellenguaje natural. es c1aramente parte del tema de la filosofla generlll de 1a 16gica y del 1enguaje. Pero esto unicamente significa que ciertosproblemas pueden ser dejados de 1ado cuando estamos haciendo fllosofla de fa ciencia, y eateg6ricamente no significa que los con- ceptos filosoficos deban ser todos y cada uno explicados lingiifsticarnente. LOs positiyistas logicos y sus herederos fueron demasiado lejos en el intento de convertir los problemas filosoficos en problemas acerca delleJiguaje. . En algunos casos su orientacion lingiifstica tuvo efectos desastrosos en la filosorIa de la ciencia. Sin embargo. ei realismocientffico mantiene el error antitetico de reificar cualquier cosa que no pueda ser definida.i{ i

    En correlacion con las discusiones sobre la relacion entre; tina teorfa y el mundo. esta la pregunta de quees aceptar una teorfa cientffica. Esta pregunta tiene una dimension epistemologica (l,que grado de cn~encia supone la aceptacion de una teorfa?) y tambien una dimension pragmatica ("que otra cosa esui involucrada ademas de la creencia?). En la perspectiva que desarrollare.la creencia involucrada al aceptar una teorla cientffica es meramente que ella "salva los fenornenos". es decir, que describe correctamente 10 que es observable. Pero la aceptacion no es solo creencia. No tenemos nunea la opcion de aceptar una teorfa omnfmoda, completa en cada detalie. De modo que aceptar una teorfa en lugar de otra involucra tambien un compromiso con un prograrna de investigacion. continuar el diatogo con la naturaleza en un marco conceptual y no en otro. Aun si dos teorfas son equivalentes empi'ricamente, y la aceptacion de una teorfa involucra solo

    INrRODUCCI6N

    la creencia en su adecuacion empi'rica, puede todavfa haber una gran diferencia en cuat de ellas aceptar. La diferencia es pragmatica. y argumentare que las virtudes pragmaticas no nos dan ninguna razon, por encima de la evidencia de los datos empi'ricos, para pensar que una teorfa es verdadera.

    Asi que argurnentare en favor de una posicion empirista y en contra del realismo cientffico. De. alguna manera, la filosoffa estli sujeta a modas; nO mas que otras disciplinasintelectuales, supongo, pero al menos en la medida en que casicualquier filosofo comenzara explicando que se opone a la concepcion "dominante" 0 "aceptada", y que presentarli la suya propia como revolucionaria. Serfa entonces bastante sospechoso si en este punto yo dijera que el realismo cientffico se ha vuelto dominante en la filosoffa de la ciencia. Otros ciertamente 10 han caracterizado como el vencedor emergente: Isaac Levi escribio recientemente: "mi propia opinion es que el ataud del empirismo esta ya fuertemente sellado".3 Y Arthur Fine. en.una replica a Richard Healey, afirma:

    Las objeciones que el dirige en contra de una comprensi6n realista [de la mecruuca culilltica1 deben ... supuestamente mover a mis colegas fil6sofos hacia las mismas convicciones antirrealistas que el senor Healey piensa que son sostenidas por muchos ffsicos. No estoy seguro de culilltos f{sicos sostienen tales convicciones antirrealistas estos dras [ ... 1 Sospecho [ ... 1 que la mayonade los ffsicos que se apartan del realismo estanmas influidos por la tradici6n en la cual fueron educados de 10 que 10 estan por estos argumentos mas bien recientes y complicados. Esta tradici6n es el legado profundamente positivista de Bohr y Heisel/.berg [ .. ] No estoy muy preocupado de que mis colegas fil6sofos se sientan seducidos por consideraciones positivistas pareadas con razones insustanciales, pues nos educamos de manera diferente.4 .

    Ya existe entonces por 10 menos un considerable sentimiento del lado de los realistas de que ellas han sustituido el empirismo ametaffsico de los positivistas. La posicion empirista que intento defender estarli fuertemente disociada de ambos. (Veanse el capitulo 2, 1.2 Y el capitulo 3, 6 para algunos comentarios sobre el positivismo.)

    En parte mi argumento sera destroctivo, y se opondra a los argumentos presentados por los realistas cientfficos en contra del punto de vista empirista. Dare un nOlnbre provisional, "empirismo constroctivo", a la posicion filosofica especffica que defendere. La parte principal de esta defensa sera

    3 I. Levi, "Confmnational Conditionalizat~on", Journal of Philosophy, 75, 1978, pags. 730-737; Ia cita (:orresponde a Ia pag. 737. .

    4 A. Fine, "How to Count Frequencies: A Primer for Quantum Realists". Syntilese.42. 1979; el pasaje se encuentra en las pitgs. 151-152.

  • 20 LA IMAGEN CIENTiFlCA

    el desarrollo de una alternativa construct iva frente al realismo'cientifico en las cuestiones principales que nos dividen: la relacion de la teoria con el mundo, el arullisis de la explicacion cientffica yel significado de los enunciados de probabilidad cuando forman parte de Una teoria fisica. Empleo el adjetivo "constructivo" para indicar mi concepcion de la actividad cientffica mas como una construccion que como un descubrimiento: construccion de modelos que deben ser adecuados a los fenomenos; y no descubrimiento de la verdad respecto de 10 inobservable. EI bautizo de esta posicion filosofica como un "ismo" especffico no pretende implicar el deseo de una escuela de pensamiento; solo trata de reflejar que los realisms cientfficos se han apropiado para ellos del nombre mas persuasivo (/,no somos todos cientificos y realisms hoy dia?), y que, despues de todo, siempre hay algo en un nombre.

    . ~':

    '.'

    .):

    2 ARGUMENTOS CONCERNIENTES AL , REALISMO CIENTiFIco . .

    .EI rigor de la ciencia exige que distingamos bien entre la figura . sin ropajes de Ii riat~eza en sf misma y el habito abigarrado con el cuaI nosotros la vestimos a nuestro gusto.

    Heinrich Hertz, citado por Ludwig Boltzmann, carta a Nature, 28 de febrero de 1895

    En nuestro siglo, la primera filosofia de la ciencia que ocupo una posicion dominante fue desarrollada como parte dei positivismo logico. Todavia ahora, una expresion como"Ia concepcion recibida de las teorias" se refiere a las opiniones desarrolladaspor los positivistas logicos, si bien su apogeo precedio a la Segunda Guerra Mundial.

    En este capitulo ~oy a examinar,y acritiCar, los principales argumentos que se han ofreddo en fayor del realismo cientffico. Estos argumentos frecuentemente' aparecieron como parted~ unacritica al positivismo logico. Pero es sin dU!la licito examinarlos por separado, ya 'que aun cuando el realismo cientffico se entienda mucho mas facilmente como una reaccion en contra del positivismo,deberia ser capazde sostenerse por sf solo. La nocion alternativa por la cual abogo --a falta de un n.ombre tradicionalla Ilamare empirismo constructivo-- esta igualmente en contra de la doctrina positivista.

    L REALISMO CIENTiFICO Y EMPIRISMO CONSTRUCTIVO

    En la filosofla de la ciencia, el termino "realismo cientffico" designa una posicion precisa sobre la cuestion de como debe ser entendida una teoda cientifica y sobre que es realmente la actividad cientifica. Intentare definir esta posicion y escudrmar sus posibles alternativas. Luego indicare, a gran

  • 23 22 LA IMAGEN CrENTlFrCA

    des rasgos y brevemente, la altemativa especifica que voy a defender y a desarrollar en los capftulos siguientes.

    1.1 ENUNCIACI6N DEL REALISMO CIENTiFIcO

    i.,Que es exactamente el realismo cientifico? Unaenunciacion ingenuade la posicion podna ser esta: la imagen que la ciencia nos da del mundo es verdadera, fiel en sus detalles, y las entidades postubldas en la ciencia existen realmente: los avances de la ciencia son descubrimientos, no invenciones. Esta enunciacion es demasiado ingenua; atribuye al realist a cientifico la creencia eh que las teorias contemporaheas son correctas. Significaria que la posicion filosofica de up realista cientf:fico anterior, como C.S~ Peirce~ habria sido refutada porhallazgos empi'ricos. No supongo que los realist as cientificos deseen comprometerse, en cuanto tales, ni siquiera con la pretension de que la ciencia llegara a su debido tiempo a teorfas verdaderas en todos los aspectos, pues el desarrollo de la ciencia podrfa ser una auto- . correccion siQ. fm; 0 peor aun, el fin del mundo podrfa ocurrir demasiado pronto. .

    Pero esa enunciacion ingenua tiene el sabor correcto. Responde dos cuestiones principales: caracteriza a una teoria cientifica como lin relata acerca de 10 que realmente existe, y a la actividad cientifica como una empresa de descubriIniento, en oposicion a una de invencion. Las preguntaS acerca de que es una teoria cientifica y a:

  • 24 25 LA IMAGEN CIENTfFICA

    Ningunade estas formulaciones fueron concebidas como defmiciones. Pero muestran, creo, que la verdad debe desempeiiar un papel importante en Ia formuIaci6n de Ia posici6n realista Msica. Muestran tambien que la formulaci6n debe incorporar una respuesta a Ill. pregunta de que es aceptar 0 sostener una leoda. Voy a proponer ahora una formulaci6n que me parece que da sentido a las observaciones anteriores, y que tambien hace inteligibles los razonarruentos de los reaIistas que examinare mas adelante, sin cargarlos con mas que el minima necesario para ello.

    La ciencia se propone damos, en sus teorlas, un relato literalmente verdadero de como es el mundo; y la aceptacion de una teorfa cientifica conlleva la creenci'a de que ella es verdadera. Estaes la enunciaei6n'correcta del rea1ismo cientifico. .' ..... '. . '. . .

    '. Permftaseme defender esta fOITQulaci6n mostrando que estotaImente niinima, y que podrfa ser aceptada poicualq\liera que se considere un realista cientifico. La enuriciaciqn' ingenua decia qQe lll.ciencia relata una' hist

  • 26 27 LA IMAGEN ClENTiFICA

    1.2 ALTERNATNAS FRENTE ALREALl:SMQ .

    El realismo cientifico es la posici6n que sostiene que la construccion de teoms cientfficas se propone damos un relato literalmente verdadero de como es el mundo, y que la aceptacion de una teoria cientifica lleva consigo Ia creen~ia en que esta es verdadera. POT consiguiente, el antirrealismo es una posicion de ~cuerdo con la cual el proposito de la ciencia bien puede alcanzarse sin proporcionar tal relato literalmente verdadero, y la aceptaci6n de una teona puede correctamente Uevar consigo algo menos (u otra cosa) que la creenciaen que es verdadera. .

    "Que es, entonces,de acuerdo con estas diferentes posiciones, 10 que haee un cientific01 Segun el realista, cuando alguien projJOne una teoria esta sosteniendo que es verdadera. Pero seg6n el antirrealista, el proponente no afinna la teoria: la desp/iega y reclama ciertas virtudes para ella. Estas virtudes pueden no llegar a la verdad: adecuaci6n empfrica, quizas; alcance. aceptabilidad para varios propositos. Esto tendra que esclarecerse, puesto que estos detalles no estan determinados por la negacion del realismo. Por ahora debemos concentramos en las nociones clave que permiten la division generica.

    La idea de un relate lite:ralmente verdadero tiene dos aspectos: ellenguaje debe ser interpretado literalmente; y asf interpretado, el relato es verdadero. Esto divide a los antirrealistas en dos tipos. El primer tipo sos~ Hene que la cieJ}cia e's 0 trilla de ser verdadera si se interpreta correct~ent~ (perono literalmente), Et segWido sostiene que ellenguaje qe la cienQ1a :leberfa ser interpretado literalmente~ pero sus teonas no necesitan ser ver:laderas para ser buenas. El antirrealismo que voy a defender pertenece al ,egundo tipo: . .".. . . . ..... . l':'fo es tan f~cil expresar 16 que se qiliere decir con una intei:j}retacion* liteiaI. La idea viene tal vez de la teologfa, donde los funda.rnentalistas lnterpretan la Biblia literalmente, y los liberales tienen una variedad de in~ :erpretaciones aleg6ricas, metaf6ricas y analogicas que Hdesmitifican". El . )roblema de explicar que significa una "interpretacion,li,.teral" pertenece a a filosoffa dellenguaje. Mas addante. en la section 7 ~,~onde examine breremente algunas de las opiniones de Michael Dumme~t. habre de subrayar rue "literal" no significa "valorado como verdaderQ". EI termino "literal"

    ~sta suficientemente bien comprendido por el uso filosofico general, pero

    Aun cuando van Fraassen empJea la palabra "construal", que dene una conexion muy mportante con su idea de un "empirismo constructivo", se ha optado por traducirla como interpretacion", haciendo hincapie, sin embargo, en que se trata de una interpretacion literal, ~ cual es practicamente una construccion. [N. del T.] .

    ARGUMENTOS CONCERNIENTES AL REALISMO ClENTiFtco

    si tratamos de explicarlo nos encontraremos de Ileno en el problema de dar una descripcion adec,uada del lenguaje natural. Sena una mala tactica la de enlazar una investigacion sobre la ciencia con el compromiso de una solucion para ese problema. Los comentarios siguientes, y los de la seccion 7, habrIDl de fijar el uso de "literal" de modo suficiente para los propositos actuales. ,. .

    La decision de no admitir sino las interpretaciones literales dellenguaje de la ciencia, deja fuera esas formas de antirrealismo conocidas como positivismo e instrumentalismo. En primer lugar, en una interpretacion literal,las proposiciones aparentes de la ciencia son realmente proposiciones, capaces de ser verdaderas 0 falsas. En segundo lugar, a pesar de que una interpretaci6n literalpuede detallar las relaciones logicas, no puede cambiarlas. (Es posible detallarlas, por ejemplo, identificando 10 que los terminos designan. La "reduccion" del lenguaje de la termodinamica fenomenologica al de la mecanica estadistica es de ese tipo: los cuerpos de gas son identificados como ag.-egados de moleculas, la temperatura como si significara energfa cinetica, y asi sucesivamente.) En la interpretacion positivista de la ciencia, los terminos tieneJi significado solamente a traves de su conexi6n con 10 observable. EUos sostienen, por 10 tanto, _que dos teorfas pueden de hecho decir 10 mismo a pesar de que formalmente se contradigan mutuamente. (Tal vez una dice que toda la materia esta form ada poi: ~itomos. mientras que la otra, en cambio, postula un medium continuo universal; sin embargo, segun los positivistas, ambas dir3.n 10 mismo si estan de acuerdo en sus consecuencias observables.) Pe~o dos teodas que se contradicen entre sl de tal forma pueden "realmente" estar diciendo 10 mismo solo si no se interpretan literalmente. Mas especfficamente, si una teoda dice que algo existe, entonces una interpretacion literal puede detallar 10 que ese algo es, pero no suprimira la implicacion de existencia.

    Ha habido muchas critic as de las interpretaciones positivistas de la ciencia y no es necesario repetirlas. Afiadire algunas crfticas especificas al enfoque positivista en el siguiente capitulo.

    1.3 EMPIRISMO CONSTRUCTIVO

    Insistir en un~ interpretacion literal del lenguaje de la ciencia es rechazar la interpretacion de una teorfa como una metafora 0 un simil. 0 como algo solamente inteligible despues de ser:"desmitologizado"0 sujeto a algun 000 tipo de "traduccion" que no preserve la forma 16gica. Si los enunciados de la teoria incluyen "hay electrones", entonces la teorfa dice que hay electrones.

  • 28 29 LA IMAGEN CIENTIFICA

    Si ademas incluye que "los electrones no son planetas", entonces la teona dice, en parte, que hay otras entidades ademas de los planetas.

    Pero esto no soluciona gran cosa. Frecuentemente no es nada obvio cmindo un termino se refiere a una entidaq concreta 0 a una entidad matematica. Quiza una interpretacion defendible de la fisica clasica sea que no hay entidades concretas que son fuerzas; que "hay fuerzas tales que ... " puede siempre ser entendido como un enunciado matematico que afmna la existencia de ciertas funciones. Esto es discutible.

    No toda posicion filosofica concerniente a: la ciencia que insista en una interpretacion literal del lenguaje de la ciencia es una posicion realista. Esto es asi debido a que dicha insistencia no ataiie en absoluto a nuestras actitudes epistemologicas frente a las teorias, ni al fm que perseguimos construyendo teonas, sino solamente a la coriecta comprension de que es 10 que dice una teoda. (EI teista fundamentalista, el agnostico y el ateo presumiblemente concuerdan entre si-perono con los teo logos liberalesen su comprension del enunciado que afirma que Dios, los dioses 0 los angeles existen.) Despues de decidir que ellenguaje de la ciencia debe ser comprendido literal mente, todavfa podemos decir que .no hay necesidad de creer que las buenas teorias son verdaderas, nicreer ipso facto que las entidades que postulan son reales.

    La,ciencia se propone ofrecernos teodas que son emp(ricamente adecuadas; y la aceptaci6n de unateoda involucra como creencia solamente que ella es emp{ricamente adecuada. Esta es la enunciaci6n de la posicion Mtirrealista que. defiendo; la Hamare empirismo constructivo.

    Esta formulacion esta sujeta a las mismas observaciones restrictivas que ladel reaIismo cientifico mencionadas en la seccion 1.1. Ademas, requiere una explicacion de 10 que es ser "empiricamente adecuado". Por ahora dejare esto con la explicacion preliminar de que una teorfa es empiricamente adecuada precisamente si 10 que dice acerca de las cosas Y S1.!cesos observables en este mundo es verdadero; si ella "salva los fenomenos". Un poco mas exactamente: tal teorfa tiene por 10 menos un modelo en el cual todos los fenomenos reales encajan. Debo hacer enfasis en que esto se refiere a todos los fenomenos; estos no se agotan con los realmerite observados, ni tampoco con aqueHos observados en algun momento, ya' sea pasado, presente 0 futuro. Todo el capitulo siguiente estara dedicado a la explicacion de este termino, el cua! esta intimamente ligado a nuestra concepcion de la estructura de una teoria cientifica.

    La distincion que he trazado entre realismo y antirrealismo, en la medida en que ataiie a la aceptacion, se refiere solamente al grado de creencia que supone. Pero la aceptacion de teonas (ya sea completa, tentativa, hasta cierto

    ARGUMENTOS CONCERNIENTES AL REALISMO CIENTfFICO

    grado, etc.) es un fenomeno de la actividad cientffica que claramente implica mas que la creencia. Una importante razon para esto es que nunca nos vemos frente a una teona completa. Asi que si un cientffico acepta una teoda, se involucra en cierto tipo de programa de investigacion. Ese program a bien podrfa ser diferente de aquel que Ie habna dado la aceptacion de otra teona, aun si esas dos teodas (muy mcompletas) son equivalentes entre sf con respecto a todo 10 que es observable -basta donde elIas llegan.

    Por 10 tanto, la aceptacion implica no solame.nte la creencia, sino cierto compromiso. Aun para aquellos que no somos cientfficos de oficio, la aceptacion implicael compromiso de enfrentar cualquier fenomeno futuro por medio de los recursos conceptuales de esta teorfa. Ella determina los terminos en los cuales habremos de buscar explicaciones. Si la aceptacion tiene alguna fuerza, esta se manifiesta en ei papel de informador que asume la persona, en su disposicion a contestar preguntas ex cathedra. Incluso si uno no acepta una teona, puede entablar una conversaci6n en un contexto en el cual el uso dellenguaje se guia por esa teona; pero la aceptacion produce tales contextos. Hay semejanzas en todo esto con el compromiso ideologico. Un compromiso no es, por supuesto, verdadero 0 faIso: la confianza manifestada es que sera reivindicado.

    Este es un esbozo preliminar de la dimension pragmatica de la aceptacion de teodas. A diferencia de la dimension epistemologica,no figura abiertamente en el desacuerdo entre el realista y el antirrealista. Pero puesto que el grado de creencia implicado en la aceptacion es usualmente menor seg6n los antirrealistas, estos tendernn a exagerar ~os aspectos pragmaticos. Tambien hay que notar aqui la diferencia importlmte: la creencia de que una teona es verdadera, 0 de que esempiricamente adecuada, no implica, ni es implicada por la creencia de que la aceptacion completa de la teona sera reivindicada. Para visualizar esto, solamente se necesita considerar . aqui a una persona que tenga creencias muy defmidas acerca del futuro de la raza humana, 0 acerca de la comunidad cientifica y las influencias sobre ella y laslimitaciones priicticas que tenemos. Bien puede ser, por ejemplo, que una teoria adecuada empfricame.nte no se ajuste con facilidad a algunas otras teorias que hemos aceptado de hecho, 0 que el fin del mundo ocurra antes de que triunfemos. En que medida, en condiciones ideales de investigacion, podria reivindicarse a largo plazo la identificacion entre la aceptacion de una teorfa y la creencia de que es verdadera o empfricamente adecuada, es una cuestion distinta. A mf me parece una cuesti6n irrelevante dentro de la filosoffa de la ciencia, porque una respuesta afmnativa no borrarfa la distincion que hemos establ.ecido ya con las observaciones precedentes. (La pregunta incluso puede suponer que los

  • 30 31 LA IMAGEN CIENTfFICA

    enunciados contrafacticos son objetivamente verdaderos 0 falsos, 10 cual yo negaria.)

    A pesar de que me parece que realistas y antirrealistas no necesitan disentir acerca de los aspectos pragmatic os de la aceptaci6n de teorias, 10 he mencionado aquf porque creo que usualmente 10 hacen. Nos encontraremos, por ejemplo, regresando una y otra vez a las demandas de explicaci6n a las que los realistas asignan tipicamente una validez objetiva que los antirrealistas no pueden conceder.

    2. LA "DICaroMlA" TEORiA;OBSERVACI6N ..

    Por buenas razones, el positivismo 16gico domino la filosoffa de la ciencia durante treinta anos. En 1960, el primer volumen de los Minnesota Studies in the 'Philosophy ofScience publico "The Methodological Status of Theo~ retical Concepts" ["EI estatus metodo16gico de los conceptos teoricos"] de Rudolf Camap, que es, en muchas formas, la culminacion del programa. positivista. Interpreta la ciencia relacionandola con un lenguaje de obser~ vacion (postuIado como una parte dellenguaje natural exenta de tt.~rminos te6ricos). Dos anos mas tarde, este articulo fue seguido en la misma serie por "The Ontological Status of Theoretical Entities" ["El estatus ontol6gi,.. co de las entidades teoricas"] de Grover Maxwell, en oposici6n directa, en titulo y tema, al de Carnap. Estees ellocus classicus para la disputa de los nuevos realistas acerca de quela distinci6n teoria/observaci6n no puede ser trazada; _

    Examinare directamente algunas de las ideas de Maxwell, pero hare antes un comentario general sobre el asunto. Expresiones tales como "entes te6ricos" y "dicotomfa observable/te6rico" son, a primera vista, e jemplos de en-ores categoriales. Los terminos 0 los conceptos son teoricos (introducidos o adaptados para los propositos de la construcci6n de teo1'fas); los entes son observables 0 inobservables. Esto puede parecer un detaIle pequeno, pero separa la discusi6n en dos preguntas: i,Podemos dividirmuestro lenguaje en una parte teorica y una no teorica? Y, por otro lado; lPodemos clasificar objetos y eventos en observables e inobservables1

    Maxwell responde ambas cuestiones negativamente; aunque sin dis tinguirlas muy cuidadosamente. Con respecto a la primera, donde el puede contar con los conocidos ensayos de apoyo de Wilfrid Sellars y de Paul Feyerabend, estoy en total acuerdo. Todo nuestro lenguaje esta completamente infectado de teorfa. Si pudieramos limpiar nuestro lenguaje de terminos cargados de teorla, comenzando con aquellos introducidos recientemente

    ARGUMENTOS CONCERNIENTES AL REALISMO ClENTfFICO

    como "receptor YHF", y continuando con el de "masa" e "impulso" hasta ~l de "elemento", y asl sucesivamente dentro de la prehistoria de la formacion dellenguaje, terminarfamossin nada utH. La manera en que hablamos ",yen que los cientfficos hablan- se gufa por las inuigenes provistas por teorfas previamente aceptadas. Como Duhem ya subray6, esto es verdad tambienrespecto a los informes experimentales. Las reconstrucciones hi

    gi~nicas dellenguaje, tal como las imaginaban los positivistas, simplemente son inoperantes. Regre.sare a esta crfticadel positivismo en el siguiente capitulo.

    Pero i,acaso significaesto que debemos ser realistas cientificos? Nosotros tenemos seguramente mas tolerancia hacia la ambigUedad que eso. El hecho de que dejemos que nuestro lenguaje se gufe, encierto grado, por una imagen dada, no muestra cuanto creemos acerca de esa imagen. Cuando hablamos d,el Sol que sale en laS mananas y se pone en la noche, nos guiamos por una imagen hoy explfcitamente desaprobada. Cuando Milton escribi6 Elpara(so perdido, dej6 deliberadamente que la vieja astronomfa geocentrica guiara su poema, a pesar de que varios comentarios incidentales revelan claramente su interes en los riu.evos descubrimieritos astron6micos y en las especulaciones de su tiempo. 13stos son ejerriplos extrem6s, pero muestran que no sepueden sacai conclusiones inmediatl;\S.de 13. carga te6rica de nuestro lenguajeL ... . .. . - Como sea, los principales argumentos de Maxwell se dicigen en contra

    de la distinci6h observable/inobservable. Aclaremos primero en que se supopJa q\le c01lllistfa esta distincion. El termino"observable" clasifica entes SUPllestos (entes que pueden existir 0 no). Un caballo rolador es observable ---esta es la raz6n por la cual estamos tan seguros de quem) hay ningun~ y el numero diecisiete no 10 es. Se supone que hay una clasificaci6n correlap tiva de los actos humanos: un acto espontaneo de percepcion, par ejemplo, es una oQservaci6n. Un calculo de la masade una partfcula a partir de la desviacion de su trayectoria en un campo de fuerza conocido, no es una observaci6n de esa masa.

    Tambien aquf es importante ne confundir observar (un ente, tal como una cosa, acontecimiento oproceso) con observar que (una cosa 0 la otra es el caso). Supengamos que a uno de los hombres de la Edad de Piedra encontrados recientemente en las-Filipinas se Ie muestra una pelota de tenis 0 un choque de autom6viles. Por su comportamiento, vemos que los ha notado; por ejemplo, toma la pelota y la arroja; Pero el no ha visto que es una pelota de tenis. 0 que algun suceso es un choque de autom6viles, pues el ni 'siquiera tiene esos conceptos. No puede obtener esa informaci6n atraves de la percepcion; tendrfa primero que aprendcr

  • 32 33 LA IMAGEN CIENTfFIcA

    muchas cosas. Sin embargo, decir que 61 no ve las mismaS cosas yacontecimientos que nosotros es simplemente tonto; es un retruecano que se vale de la ambigiiedad entre ver y verque. (Las condiciones deverdad de nuestro enunciado "x observa que A" deben ser tales que cualesquiera conceptos que x tenga, presumiblemente relacionados con el lenguaje que x habla si es humane; entren de alguna manera como variable dentro de la correcta definici6n de verdad. Por tanto~ decir que x observ6 ta. pe~ Iota de tenis no implica en 10 mas mfuimo que x observ6 que era una pelota de tenis; eso requerirfa algun conoeimiento conceptual del juego de tenis.)

    Los argumentos que Maxwell ofrece acerca de la observabilidad son de dos tipos: uno dirigido contra la posibilidad de trazar tales distinciones, el otro contra la importancia que podrfa asignarse a las distinciones que pudieran trazarse.

    EI primer argumento viene del continuum de casos que yacen entre la observaci6n directa y la inferencia:

    .. hay, en pIincipio, una serle continua que empieza con v~r a traves de un vacfo y que coniiene.los siguieptes elem~ntos: ver a traves del crista! de una ventana, vC!r a traves de lentes, ver a traves de binoculru:es, ver a traves de un microscopio . poco potente, ver a traves de un miCroscopio de' gran poder, etc., en el orden dado. La consecuencia importan~es que, hasta aquf, nos quedamos sincriterios que ncispermitan trazar una lfnea no arbitraria entre "observaci6n" y"teor~a",1

    Estaserie continua desupuestos actos de observaci6n no corresponde directamente a un continuum en 10 que es supuesfamente observable. Porque si algo puede ser visto a traves de una ventana, tambien puede set visto con la ventana abierta. De manera semejante, las lunas de Jupiter puedenser vistas a traves de un telescopio; pero tambien pueden ser vistas sin telescopio si uno esta 10 suficientemente cerca. Que algo sea observable no implica automaticamente que las condiciones sean adecuadas para observarlo ahora. EI principio es:

    X es observable si hay circunstancias tales que, si X senos presenta bajo . esas circunstancias, entonces 10 obserVamos. . . . . . .

    Esto no esta concebido como una definici6n, sino solamente como una gufa aproximada para evitar falacias.

    7 G. Maxwell, "The Ontological Status of Theoretical Entities", Minnesota Studies in Philosophy ofScience, ru, 1962, pag. 7. [Versi6n en castellano: "EI estatus ontol6gico de las entidades te6ricas", en L. Olive y A.R. Perez R. (comps.), FiIosofia de la ciencia: teorla y observaci6n. Mexico. Siglo XXl~lnstituto de Investigaciones Filos6ficas, UNAM, 1989.]

    ARGUMENTOS CONCERNIENTES AL REALISMO CIENTIF1CO

    Podemos Jodavr~. ser capaces de encontrar un continuwn en 10 que se supone detectable: quaa algunas cosas puedan ser solamente detectadas, por 19 menos, con la ayuda de un microscopio 6ptico; quiza algunas requieten un microscopio electr6nico, y asi sucesivamente. E1 problema de Maxwell es: l.d6nde trazaremos la linea entre 10 que es observable y 10 que es sol~ente detectable de algl,maforma mas inqirecta?

    PUesto que no podemoscontestaresta pregunta de un modo no arbitrario, l.que se sigue? Que "observable" esunpredicadqvago. Hay muchos enredos en t(lmo a los predicados vagQs y muchos sofismas disenados para mostrar que, en presencia de la vaguedad, absolutamente nmguna distinci6n puede

    trazar~e. En los escritos deSextoEmpfrico, encontramos el argumento de que el incesto no es innlorai porque toear eldedo gordo del pie de la propia . madre con el dedo menique 110 es inmoral, y todo el resto difieres610 en grado. Pero los predicados en ellenguaje natural son casi todos vagos y no hay problema con su uso; solanientelo hay en formular la 16gica que los gobierQ.a.8 Uri predicadovagoes utilizable cbn taIde que tenga casos elaros a favor y en contra. Ver con el ojodesniIdo es un caso claro de observaci6n . l.Esta Maxwell entonces retandorios quizas apresentar.wi claro caso en contra? Tal vez, pues dice: "He estado tratando de apoyar la tesis de que cualquier termino (no 16gico) es un posible candidato para ser un termino de observaci6n.'1, .

    Un vistazo a las lunas de Jupiter a traves de un telescopio me parece un claro caso de observaci6n, ya que los astronautas seran sin duda capaces de verlas tambien desde cerca. Pero la sUpuesta observaci6n pe micropartfculas en una camara de vapor me parece un caso claramente diferente -si es que nuestra teoria acerca de 10 que alli sucede es correcta. La teorla afirma que si una partfcula catgada atraviesa una camara lIena con vaporsaturado, algunos atomos en las proximidades de sutrayectoria so~ ionizados. Si este vapor se descomprirne y entonces se vuelve supersaturado, se condensa en gotitas sobre los iones, marcando asi la trayectoria de la particula. La linea gris plata que resulta es similar (rlSicamente, tanto como en apariencia) a la estela de vapor que queda en el cielo cuando pasa un avi6n a reacci6n. Supongamos que senalo dicha estela y digo: jMiren, alIi va un avi6n!; alguien podrfa decir: "Veo Ia: estela de vapor, pero l.d6nde esta el avi6n?" Entonces yo contestarfa: "Mire s610 un poco adelante de la estela ... jaIlH,

    8 Hay una gran cantidad de trabajos recientes sobre la 16gica de los predicados vagos; especialmente importante, 'en mi opini6n, son elde Kit Fine ("Vagueness, Truth, and I..ogic", Symhese, 3D, 1975, pags, 265-300) y el de Hans Karnp. Este ultimoesta trabajando actualmente en una nueva teorCa de la vaguedad que Ie hace justicia ala "vaguedad de la vaguedad" y a la dependencia contextual de los panirnetros para la aplicabilidad de predicados.

  • 34 35 LA IMAGEN CIENTiFICA

    (,10 ve?" Ahora bien, eli el caso de la crunara de vapor esta respuesta no es posible. Asi que, mientras la particula se detecte pot medio de la camara de vapor y la detecdon este basada en la observadon, c1ararnelite no esel caso que la particuhi. este siendo observada.

    Como' segundo arguniento, Maxwell dirigelmestra atencion hacia el "puede" de la expresion "10 que es observablt{eidoque puede ser observado". Un objeto podria ser, desde luego, temporalrhenfe inobservable-en un sentido mas bien diferente-: no puede ser obs~rvad6en las circunstan~ . ciaS en iaS cuales se encuentfil. realmente en ese moiIi~n:to, pero podria ser observado si las circunstandas fueran mas favorables~Exactamente de la rnisma manera, yo podria ser temporalmente invulnerable 0 invisible. Asi que deberiamosconcentramos enla nocion de "obserV~bl~"'tout court, 0 en 13, de (como 61 prefiere decir) "iQobservable en principio';: E,sta significa, . segun laexplicadon de :Maxwell, que la teoria cieritifica pertIDe'1te implica que las entidades no pmxlen ser observadaS en nlIlguna circunsbmcia. Pero esto nunca sucede, aiiade, porque las diferentes drcunstancias podrian ser aquellas en las 'cuales tendriamos diferentes organos de los sentidos; ojos de microscopioelectronico, por ejemplo. ". , .

    Esto me suena como un truco, como un cambio enel tema qe la discusi6n. SI tengo un mortero y una mana hechos de cohre y que pesan cerca de un kilo, i,deberia llamarlos rompibles porque un gigante podria romperlos'? i,Podria llamar portatil at edificio Empire S tate'?i,N 0 haydistincion entre una grabadora pOltitil y una de consola'? E1 organismo hum,ano es, desde el punto de vista de la fisica, cierto tipo de aparato de r:nediciones. Como tal, tiene dertas limitadones inherentes, que serandescritas en detalle por la fisica y 1a biologia Ultimas. Son estas limitad()nes a las queel "able" en "observable" serefiere: nuestras limitadones qua seres humanos.

    Sin embargo, como mendone, el articulo de Maxwellcontiene tambien otro tipo de argurnento: inc1uso si fuera factible una distindon entre 10 observable' y 10 inobservable, est a distindon no tendria importanda. El punto en cuesti6n para el realista es,despues de todo, larealidad de los entes postuladosen la cienda. Supongamos que estos entes pudieran ser clasificadosen' observables y otros; (,que pertinenda tendria esto para la cuesti6nde suexistenda'?

    L6gicamente, uinguna. Porque el terminG "observable" c1asifica entes supuestos, y no tiene logicamente nada que ver con,ta existenda. Pero Maxwell debe estar pensando en algo mas cuando diCe: "conc1uyo que el trazado de 1a linea observadonallteoricoen algunplillto ,dadoes unaccidente y una funci6n de uuestra disposici6nfisio16gica,. . .y.por tanto, que

    ARGUMENTOS CONCERNIENTES AL.REALlSMO ClENTiFIco

    no tiene ninguna importanda onto16gica.,,9 Ninguna importancia onto16gica 5i la cuesti6n es solamente en que medjda"observable" y "existe" se implican mutuamente, porque no 10 hacen; pero i,notiene tampoco ninguna importanda para la cuesti6n del realismo cientifico?

    Recuerdese que defmi el realismo cientificoen terminos del prop6sito de la denda y de actitudes epistemologicas; Lacuesti6n es que prop6sito tiene la actividad dentifica y que tanto herrios' de creer cuando aceptamos una teoria delitifica. i,CmU es la forma idonea de la aceptacion: creer que la teoria, en con junto, es verdadera, u otra cosa? Paraesta preguntit, 10 que es observable pot nosotros sin duda parece pertineru:e.De hecho, podemos intentar unarespuesta en este punto: aceptar una teoria es (para nosotros) creer que es erripmcamente adecuada: que todocuanto la teoria dice acerca de Iii que es observllble (por nosotros) eS verdadero. '

    Se objetara inmediatamente que, en esta propuesta, 10 que el antm:ealista decida creer acercadel mundo dependera enparte de 10 quecreaque essu rango de evidenciaaccesible --:0, mas biell,el 'de la comunidad epistemo16gicIL Actualinente, consideramos a Iii. especiehumana como la comunidad epistemo16gica a la cual pertenecemos; pero esta especie puede sufrir una mut~cion, 0 esa comunidad puede~er increment ada aiiadiendole otros animales (terrestres 0 extraterrestres) atraves de decisiones ideo16gicas 0 morales pertinentes ("contarios como personas"). En conseCuencia, el antirrealista tendria que aceptar, en mi propuesta, condiciones de la forma:

    Si la comunidad epistemologica carnbiaen forma Y,e~toncesmis creencias acerca del mundocambiaran en f~rmaZ.

    9 Op. cit., pag. 15. En el siguiente capitulo examinareun' poco mas como esque debe entenderse la observabilidad. Sin embargo, en este momenta podrfan .acusanne de confiar en distinciones modales que he criticado en otros lugares. Despuesde ,todo,estoy haciendo una distincion entre limitaciones humanas y factores acddentales. eierta manzanacayo al mar en una .bolsa de desecho que se hundi6; en relacion .c.on dicha infonnaciOn,es ne.cesario que nadie observara nunca el corazon de la manzana. No obs.tante"esainformaci6n concierne a wi accidente de la historia, y por ella no son limitaciones hu~anas las ~ue imposibilitan 'observar el coraz6n de la manzana. Pero a menos queafume que dertos hechosacerca de los humanos son esenciales, 0 ffsicamentenecesarios, y otrosaccidentales,l.c6mo,podria dar sentido a la distincion? Esta pregunta permite ver Ia dificultad de unadisminuci6n fd6sofica dellenguaje modal. Esto creo que serfa posible a travesde unapromoeion de la .j>ragmatica. En el casopresente, la respuesta podrfaser, .clicho de manera muy burda, que las teorfas eientfficas que aceptamos son un factor determinante para el conjunto de caracteristicas del .()J;ganismo humano.quesecuentan entre las limitaci0IIes a las cua:les nos referimos.al emplear

    ehemiino~observable".El.temade la modalidadresl!rgira elCplfcitamenteen el capitlilo sobre 1a ,pnibabilidaa.

  • 37 36 LA IMAGEN CIENTrnCA

    Considerar esto como una objecion al antirrealismo es proc1amar la exigencia de que nuestras polfticas epistemologiCas deben dar los mismos resultados independientemente de nuestras creencias acerca del rango de evidencia accesible para nosotros. Esta exigencia no me parece racionalmente apremiante en modo alguno; podrfa ~selo con respeto, pensaria yo, solo a traves de un ~scepticismo total 0 atrav~s de.un compromiso con saltos de fe al por mayor. Pero no podemos resolver las granges cuestiones 4e la epistemologia en passant en la fllosoffa de la cienc:ia;. 'lsi. qu~~6Jo concluire que no es irracioqal, a juzgar por las apeIlcias,pomprometerse unicamente con la bt1squeda de teorias que sean empfriCat11~l1te adecuadas, aquellas cuyos mode\os encajan con los fenom~nos obsetYabl~~, al tiem:po' que reconoeer que loquecuenta como un f'eI).omen.9,o6sery~ble esta en funcion de la que es l~ qomunidad epistemologica (que:9i?servable es observable-para-nosotros). . '., ...... ... ,'" . ,

    Lanocion de adecuacion empmca utilizada en ~sta respu~'sta tendra que detallarse muy cuidadosainente si no se quiereque muerda el polvoen compafiia de las objeeiones trilladas. Tratare de haCerlo asf ~n el siguien~e, capitulo. Pero la cuestion sigue en pie: aun si observabilidad no tiene nada que \rer con existencia (porser,de hecho, una idea mny antropocentrica), \ puede aun tener mucho que vee con la actitud epistemologica correcta hacia la ciencia. ' . ., '

    . '. .

    3. INFERENCIA HACIA LA MEJOR E;XPLICACI6N

    Una opinion promovida en diferentes formas por Wilfrid Sellars, I.I.C. Smart y Gilbert Harman es que los canones de la inferencia racional requieren del realismo cientifico. Si vamos a segtiir respecto a estacuestion los mismos patrones de inferencia que seguiinos"en la ciencia misma, nos encontraremos actuando irraciona1mente, a menos que afrrmemos la verdad de las teodas cientfficas que aceptamos. Asi, Sellars dice: "Como yo 10 yeo, tener buenas razones para sostener una teoria es ipso facto tener buenas razones para sostener que las entidades pos1iIl~as por la teoria existen:'10 ' "

    La principal regia de inferencia invocada en argumentos de este tipo es la regia de inferencia hacia la mejor explicacion. La idea debe quizas acreditarse a C.S. Peirce, pero los principales intentos recientes para explicar

    10 Science, Perception and Reality, Nueva York, Humanities Press, 1962; vease la nota a1 pie de 1a pagina 97. Vease tambien mi resena de sulibro Studies in Philosophy and its History, en Annals o/Science, enero de 1977.

    ARGUMENTOS CONCERNIENTES AL REALISMO CIENTrnCO

    esta regia y sus usos han sido realizados por Gilbert Harman. 11 Presentare solamente una version simplificada.Supongamos que tenemos Ia evidenciaE y estamos considerando varias hip6tesis, digamos H y H'. La regia diCe que debemos inferir H mas bien que H' precisamente si H es una mejor explicacion de E que H'. (Varios requisitos son necesarios para evitar la inconsistencia: deberiamos tratar de movemos siempre hacia la mejor explicacion global de toda la evidencia disponible.) . Se argumenta que seguimos esta regia en todos los casos "ordinarios",

    y que si la seguimos consistentemente en todas partes, seremos llevados al realismo cientifico, en el sentido que el dictum de Sellars sefiala. Y seguramente hay muchos casos "ordinarios" significativos: oigo rasgufios en la pared, ruido de pasitos menudos a medianoche, mi queso desaparece, e infiero que un raton ha venido a vivir conmigo. No es solamente que estos signos aparentes de presencia ratonil continuaran, no es solamente que todos los fenomenos observables seran como si hubiera un raton; sino que realmente hay un raton. , ' ' . .. ....

    i,Nos conducira tambien este patron de inferencia a creer en entidades inobservables? i,Es el realista cientifico simplemente alguien que sigue consistentemente las reglas de inferencia que todos seguimos en contextos mas munqanos? Tengo dos objeciones contra.1a idea de que esto es asi.

    Antes que nada, l.que sentido tiene decir que todos seguimos cierta regia de inferencia? Un sentido podrfa ser que nosotros, deliberada y conscientemente, "aplicamos" la regia como 19 hace un estudiante en un ejercicio de l~gica. Ese sentido es demasiado literal y restrictivo; seguramen~e toda la humanidad sigue las regl~ de la logica la mayor parte del tiempo, mientras que solo una fracci6n podrfa siquiera formuladas. Un segundo sentido es que actuamos de acuerdo con las reglas eli una forma que no requiere deliberacion consciente. Esto no es tan facH de precisar, pues.to que cada regia logica es una regia de permiso (el modus ponens Ie permite a uno inferir B a partir de A y (si A entonces B), pero en cambio no Ie prohibe inferir (B 0 A. Sin embargo, podriamos decir que en ese sentido una persona se comporto de acuerdo con un conjunto de reglas si cada conclusion que obtuvo pudiera ser alcanzada a partir de sus premisas por medio de aquellas reglas. Pero este significado es demasiado

    11 "The Inference to the Best Explanation", PhilosophiCal Review, 74, 1965, pligs. 8895, y "Knowledge, Inference and Explanation",American Philosophical Quarterly,S, 1968, pligs. 164-173. La posici6n de Hannan ha sido desarrollada en pubIicaciones subsecuentes (Nolis, 1967; Journal o/Philosophy, 1968; en M. Swain (comp.),lnduction, 1970; en H.-N. Castaiieda (comp.), Action. Thought, and Reality. 1975; yen su libro Thought, cap. 10). Aquf no considerare estos desarrollos ulteriores.

  • 39 38 LA IMAGEN CIENTiFIcA

    laxo; en este sentido, siempre nos comportamos de acuerdo con la regia de que cualquier conclusion puede ser inferida de cualquier premisa. As! que, para seguir una regIa, parece que debo estar en la disposicion de creer todas las conclusiones que permite, mientras que indudablemen~ te no debo estar dispuesto a creer en conclusiones divergentes de aquellas que permite, 0, si no, debo cambiar mi disposicion a creer las premisas en cuestion.

    Por consiguiente, la proposicion de que todos seguimosecierta regia en ciertos casos, es una hip6tesis psico16gica acerca de 10 que estamos dispues

    " tos 0 noa hacer. Es una hipotesis empfrica, para ser confrontada con los datos y con hipotesis rivales. He aqui una hipotesis rival: estamos siempre diSpuestos a creer que la teoria que explica mejor las pruebas es empiricamente adecuada (que todos los fenomenos observables son como la teorfa dice que son). " "

    De esta manera, ciertamente puedo dar cuenta de los mliltiples casos en los que un cientifico parece argumentar a favor de la aceptacion de una teorla ohipatesis, sobre la base de su exito explicativo. (Algunos de dichos e ejemplos son relatados por Thagard.)12 Porque recuerdese: yo equiparo Ia aceptacion de una teorla cientifica con la creencia en que es adecuada empiriCamente. Por tanto, tenemos dos hipotesis rivales concemientes a estos ejemplos de inferencia cientifica: una es apta en una consideracion realista, la otra, en una consideracion antirrealista.

    CasoS como el del raton eola alacena no pueden proveer pruebas significativas para estas hipotesis rivales.,Dado que el raton es unacosa observable, "hay un raton en la alacena" y "todos los fenomenos observables son como si hubiera un raton en la alacena" son, por consiguiente, totalmente equivalentes: cada uno implica al otro (dado 10 que sabemos acerca de los ratones).

    Podni objetarse que es menos interesante saber si la gente sigue una regIa de inferencia qlle saber si debe seguirla. Concedido; pero la premisa de que todos seguimos la regia de inferencia hacia la mejor explicacion cuando se trata de ratones y atras cosas mundanas deja mucho que desear. No esta garantizada por los datos, puesto que esos datos no son relevantes para la premisa en tanto que opuesia a la hipotesis altemativa que propuse, que en este contexto es pertinente.

    Mi segunda objecion es que aun si aceptaramos que la regia de inferencia hacia la mejor explicacion es correcta (0 valiosa), el realista necesita

    12 Vease P. Thagard, tesis doctoral, Universidad de Toronto, 1977, y "The Best Expla

    nation: Criteria for Theory Choicen Journal ofPhilosophy, 75, 1978, p4gs. 76-92.

    ARGUMENTOS CONCERNIENTES AL REALISMO CIENTlFICO

    aIgunas premisas ulteriorespara su argumento. Esto es asi debido a que es una regIa que solamente dicta una eleccion dado un conjunto de hipotesis rivales. En otras palabras,necesitamos estar dispuestos a creer en una de varias hipotesis antes de que la regIa pueda ser aplicada. Entonces, en circunstancias favorables, ella nos dira cuat de las hipotesis de dicho grupo hemos de escoger. EI" realista nos pide que escojamos entre diferentes hipotesis que explican las regularidades de cierta manera; pero su oponerite desea siempre' escoger entre hipotesis de la forma "la teoria Ti es adecuada empfricai.rien~"~ Asf que el realista necesitara su premisa extra especial de que cada regularidad universal en la naturaleza necesita una explicacion, antes de que la reglahagaun realista de cada uno de nosotros. Y esa es precisamente lapremisa que distinglle al realista de sus oponentes (la cual examinare con detenimiento" en las secciones 4 Y ~ mas adelante). , e' "

    EI de mentalidad logica puede pensar que la prenlisa extra puede ser eludidapor un acto de prestidigitaci6n 16gico. Supongamos que los datos disponibles son que todos loshechos observad~ hasta iIlora encajan con la teOrla T; enton~s T es una explicacion posible de aquellos datos. Una alternativa es no T (que T es falsa). Este ~ival es una explicacion muy pobre de los datos. Asl que nosotros tenemos siempre un con junto de hipotesis rivales, y la regia de infertmcia hacia la mejor explicacion nos conduce de un modo infalible ala conclusi6n deque T es verdadera. l.Estoy comprometido necesariamente con la opinion de que T es verdadera 0 T es falsa? " " "1

    Este tipo de prestidigita~ion epistemologica desde luego no funciona. Para comenzar, estoy comprcimetido con la opinion de que T es verdadera o T es falsa, ipero no por ello comprometido con un movimiento inferencial hacia una de las dos! La regIa funciona solamente si he decidido no permanecer neutral frente a estas dos posibilidades.

    En segundo lugar, no es probable en 10 mas mfnimo que la regia sea aplicable a dichos rivales mezclados logicamente. Harman enumera varios criterios que han de emplearse en la evaluacion de hip6tesis qua explicaciones.13 Algunos son mas bien vagos, como el de simplicidad (l.pero no es la simplicidad una razonpara usar una teorla, crease 0 no en ella?). Los criterios precisos provienen de la teorla estadistica, la cual ultimamente ha mostrado ser de maravillosa utilidad para la epistemologfa:

    13 Vease especialmente"Knowledge, Inference and Explanation", pag. 169.

  • 40 41 LA IMAGEN CIENTlFICA'

    H es una mejor explicaci6n que H' (ceteris paribus) de E, con tal de que: . , '

    (a) P(H) > P(H') --:H tenga mayor probabilip.ad que H' (b) P(E/ H) > P(E/ H') -H otorgue mayor probabilidad a E que H'.

    El uso de probabilidades "iniciales" 0 a prio.ri en '(a) ~la plausibilidad inicial de las hip6tesis rnismas--... es tfpica de losasi llamados bayesianos. Unapnlctica estadistica Imis tradicional sugiere solamente eluso de (b). Pero aun esopresupone que H y H' otorgan a E probabili

  • 43 42 LA IMAGEN CIENTfFICA.

    Sin embargo, Smart replicarfa sin duda que tal respuesta solamente hace retrocederla cuestion un paso: "que explica la precision de las predicciones basadas en la teona de Copernico? Si digo que es la adecuacion empfrica de tal teona, unicamente doy una explicacion verbal. Pues Smart,por supuesto, no pretende limitar su pregunta a las predicciones reales; la pregunta abarca, en Ultima instancia, todas las predicciones y retrodieciones reaIes y posibles. Para ponerlo muy toncretarnente: "que explica: elhecbo de'que todos los fenomenos planetarios observables encajan en la teoria de Copemico (si 10 hacen)? Desde los debates medievales recordamos laresplle~tanominalista: de que las regularidades basicas son meramente regul~ida&s en brute y no tienen explicacion. Asf que aquf el antirrealista, dem-anerasimilar, debe deck: que los fenomenos observables exhiban esta:sregUlari4~ges,dcaus!l de his cuales enos encajan en la teoria, es unicamente un heeijo ~futo y puede terier0no uria explicaci6n en t6rminos de hechos inobservaoles "mas alili de los fen6inenos"; ella realmente no afecta la virtud de la teoria Ifimiestra comprension del mundo.

    La principallfnea de argumentaci6n de Smart se dirige exactamente bacia este punto. En el mismo capitulo argumenta como sigue. Sup6ngase que tenemos una teoria T que postula una microestructura directamente y una macroestructura indirectamente. Las leyes estadfsticas y aproximadas acerca de los fen6menos macrosc6picos quizas estan solo parciaJmente descifradas; yen cualquier caso se derivan de las leyes precisas (deterministas o estadfsticas) ac;en::a de las entidades basicas. Ahora.consideramos ia teona T', que es partede T, Y que afmna soiamellte 10 que Tdiceacerca de los fen6menos macrosc6picos. (Como deberia caracterizarse T' es unacuestion que dejare abierta, porque no afecta al argumento.) Asf, 61 continua: .

    Yo. sugerirfa que el realista podrfa (decir) [ ... ] que el exito de T' se explica por el heche de que la teo.rfa o.riginal T es verdadera acerca de las Co.sas sobre las que o.stensiblemente trata; en o.tras palabras, por el heche de que realmente hay electro.nes 0. cualquier cosa po.stulada por la teo.na T. Si no. hubieran tales Co.sas, y si T no. fuera verdadera en un sentido. re~ista, i.,no. sena el exito. de T' to.talmente inexplicable? Tendda que supo.nerseque hubo innumerables accidentes afo.rtunado.s alrededo.r del compo.rtamiento mencionado. en el vocabulario. o.bservacio.nal, de tal manera que se co.mpo~on milagro.samente como si hubieran side producido.s a partir de cOsas no. existentes ostensiblemente mencio.nadas en el vo.cabulario. teo.rico..1S

    15 Ibid. pags. 150 s.

    ARGUMENTOS C(jN

  • 44 45 LA IMAGEN CIENTiFICA

    Enunciare primero el argumento y el principio de Reichenbach a grandes rasgos y de una fonna intuitiva, y luego examinare su formulacion precisa. Supongamos que se descubre que dos clases de sucesos estan correlacionados. Un ejemplo sencillo serfa que una clase se presenta siempre que la otra 10 hace; pero la correlacion puede ser solamente estadfstica. Aparentemente hay una correlacion significativa entre el excesivo consumo de cigarriHos y el cancer, pero es una correlacion meramente eStadistica. Explicar tal correlacion requiere encontrar 10 que Reichenbach llamaba una causa corn(lIi. Pero -sigue el arguiil'ento-- entre los sucesos observables con frecuencia no hay causascomtmes para las correlaciones observables dadas. Por 10 tanto, la explicacion cientCficafrecuentemente requiere que haya ciertos sucesos inobservables.. . .

    Reichen'bachsostenia que'~raun principio deia metodologia cientCfica que cada correlacion estadfstica' (pOI; 10 menos cada dependencii positiva) debiaexplicarse atraves de diusa:s'comunes. Pero esto signiflta, entoIices, que el proyecto mismo de Ia cit~ricia habrfa de conducir necesariamente ala introduccion de una estructura inobservable mas alla de los fen6menos. La explicaci6h cientfflca Seraiinposible~menos que haya elltidades inobst:lrva

    bie~; pero el prop6sito de Ill, cie?cia eS ofrecer ex plicaciones cientCficas; pOT arrQi~ ~n argumento a f~vor del realismQ semejant~ al de S~~ acerca'de las coincidencias, y aflade que 1a demandli de tina causacomun para explicar coificidencias aparentes es 18. que encierra el principio MSico que'cstadetnis de sU argumentaci6n. Sin embargo. el hadebiIitado el principio de la causa comun de manera que evita las objeciones que he founulado en esta secci6n. Me parece que su argumento en favor el realismo es, asimismo, correspondientemente debil. En la medida que no haya una exigencia universal de una calisa comun para todas las regularidades 0 correlaciones, no hay entonces ningun argume~to en pro del realismo .. Lo unico que hayes una explicaci6n de por que es satisfactoria para el pensarniento la postulaci6n de mecanismos explicativos, incluso inobservables, cuando podemos hacerlo. No hay arguinento de que las premisas nos constriiian a la conclusion realista. Salmon, en una conversaci6n, ha sugerido que tal vez podriamos imponer la demanda universal de explicaci6n de que s610 se admite que queden sin explicaci6n las correl!lci6nes entre sucesos espacio-temporales (aproximadarnente) coineidentes. No veo ningum(~azon para ello; pero ademas, se trata de una demanda que no satisface la mecanica culintica, donde hay correlaciones no locales (como en la "paradoja" de Einstein-Podolski-Rosen); lafisica ortodoxa rechaza considerar estas rorrelaciones genuinarnente paradojiCas; Examinare la teoda mas reciente de Salmon en el capCtulo 4. Estas son escaramuzas; en un nivel mas biisico pretendo sostener que hay una satisfacci6n suficiente para el pensamiento si podemos construir teorfas en cuyos modelos las correlaciones y coincidencias aparentes puedan remontarse hacia causas comunes, sin tener que agregar que todas las caracteristicas de esos modelos corresponden a elementos de Ia realidad. Posteriormente vease mi "Rational Belief and 'the Common Cause Principle", en la compilacion de R McLaughlin que esta por salir con ensayos sobre la filosoffa de la ciencia de Salmol!-.

    ARGUMENTOS CONCERNlENTES AL REALlSMO CIENTiFrco

    10 tanto, el prop6sito de la ciencia puede solamente cumplirse si es verdad que hay entidades inobservables.

    Para examinar este argumento, primero debemos ver c6mo Reichenbach lleg6 a su nocion de causas comunes y como la precis6. Luego argfiire que su principio no puede ser en absoluto un principio.generaI de la ciencia y, en segundo lugar, que Ia postulaci6n de causas comunes (cuando esta ocurre) .es tambien bastante inteligible sin el re

  • 46 47 LA IMAGEN ClENTIFICA

    considerar Ia probabilidad de que A ocurra dado que Bocurra. La probabilidad de lluvia, dado que el cielo esta nublado, clararri.ente es mas alta que la probabilidad de lluvia en general. Decimos que B es estadisticamente relevante para A si la probabilidad de Adado B --en notaci6n: peAlB~ es diferente de peA). Si peAlB) es mas alta que peA), decimos que hay una correlaci6n positiva. Siempre y cuando A yB sean sucesos' que tienen alguna probabilidad positiva de ocurrencia (i.e.. peA), PCB) rio son

    ,p.(A). PCB) . . ". . '.' .'. . ..... (d) De (a) y (c) se. sigue que, si peA) - y PCB) =f O,entonces hay una

    correIaci6n positiva entre A y B exact~ent~ si. .'

    peAlB) > peA), y tambien si y s610 si '.'

    P(B/A) P(B)

    Entonces, decir que hay una correlaci6n positiva e~tre elcancerY'rldevado consumo de cigarrillos, equivale a decir que la incidencia de cancer entre los fum adores empedernidos es mayor de loque es en la poblaci6n en general. Pero'debido a la simetI'ia de A y B en (d), este enunciado por sf mismo no da razones para pensar que el Mbito de fuinar produce cancer, en vez de que el cancer produce el habito de fumar, 0 que ambos son producidos por algun otro factor, 0 por otros dive~os factores,s! los hay.

    Estamos hablando aqui de hechos relativos aun mismo tiempo. BuscaDios I'll causa en el pasado: fumar en exceso en un mOfi:1ento es seguido (con cierta probabilidad) por fumar en exccso en un mol1ieI,lJo ulterior, y tambien par tener cancer en esc momento ulterior. Nosotroshemos encontrado realmente, en este suceso pasado C, la causa comun de esta correlaci6n presente si

    peAlB&C) P(AIe}

    ARGUMENTOS CONCERNIENTES AL REALISMO CIENTfFico

    Podemos formular esto como sigue: en relaci6n con la informaci6n de que . C ha ocurrido, A YB son estadlsticamente independientes. Podemos defmir

    .. Ia probabilidM de un suceso X, ya sea por SI mismo 0 condicionado a otro .. suceso Y, relativa a C como sigue:

    (e) La probabilidad relativa aCes definida como

    PcX =P(X/C) Pc(X/Y) = Pc(X&Y) + Pc(Y)

    = P(X/Y&C) partiendo de que Pc(Y)- 0, pee) - n,

    .. p~ manera que decir queC es I~ causacom~n dela correlaci6n entre A y B, es decir. que, por 10 que toca a C, no hay tal correlaci6n~ C explica 'la correlaci6n, ya que observamos Urut correlaci6n solamente en tanto no tomamos en cuenta a C. .

    El principiQde la causa ccmun de Reichenbach es que cada relaci6n de relevancia estadisticapositiva debe ser explicada por causas estadisticas comunes anteriore.s, de la manera indicada antes .. 19 Para expresarlo de manera bastanteexacta yen los propios terininos de Reichenbach:

    Si las coincidencias de dossucesos A y B oourren mas frecuentemente de 10 que correspondeda asu ocurrencia independiente, esto es,si los sucesos satisfacen la relaci6n . . . \ (1) P(A&B) > P(A).P(B), . entonces existe ~nacausacomun C de estos sucesos tal que la'bifurcaci6n ACB esconjuntiva. estoes, satisface las relaciones{2}--(5) que se presentan a ,continuaci6n:

    . . .

    (2) P(A&B/C) P(AIC).P{B/C) (3) P(A&B/C) = P(A/C).P(B/C) (4) P(A/C) > P(AtC). (5) PCB/C) > P(B1c)

    (1) se sigue 16gicamente de (2)-(5).

    19 H. Reichenbach, The -Direction :Of Time.. Berkeley, UniVersity f California. 1963, seceitlin 19. p~gs. 157-163:; v&rIse tambien :lassecs. 22 'Y 23. [Versi6nen castellano: El seniiilo del 'liempo,trad. A:'S. 'ae :Liberman, .Mexioo,UNAM, 1959J

  • 49 48 LA IMAGEN ClENTlFICA

    Este principio de la causa comun es al mismo tiempo preciso y persuasiyo. Puede ser visto como una formulaci6n de la convicci6n que subyace en argumentos tales como el de Smart, que exigen la eliminaci6n de las "coincidencias c6smicas" por la ciencia. Pero no es un principio que .guie la ciencia del siglo xx, porque es muy cercano ala demanda de teoriasdeterministas sobre el mundo que Reichenbach queria rechazar. Mostrare esto por medio de un ejemplo esquematico; pero este ejemplo incorporara los tipos de correlaciones no clasicas que distmguen la mecaruca cuantiCa de la fisica clasica. Me refiero aqui a las correlaciones expuestas por el experimento mental de Einstein, Podolski y Rosen, en su famoso trabajo "l.Puede considerarse completa la descripci6n mecanico-cuantica de la realidad?" Estas correlaciones no son meramente te6ricas; se encuentran en muchos experi~ mentos reales, tales como el de dispersi6n y producci6n de pares de fotones de Compton. Yo sostengo, por afiadidura, que correlaciones 'suficientemente ' similares para refutar el priricipio de la causa comun deben aparecer en casi cualquier teoria indeterminista de suficiente complejidad. 20 Imagine que usted ha estudiado el comportamiento de un sistema u objeto que, despues de estar en un estado S, siempre pasa a otro estado que puede seT caracterizado por varios atributos Fl, .. , Fn y G1 j , Gn. Suponga que ha llegado ala conclusi6n de-que esta transici6n es genuinamente indeterminista, pero puede proponer una teoria aeerca de las probabilidades de transici6n: ' '

    (8) (a) P(F;/S) = lin (b) P(G;fS) = lin (C)P(Fi== Gi/S) = l'

    donde == significa si y solo si 0 cuando y exactamente cuando~, En otras palabras, es puramente azaroso si el estadohacia el cui! trans ita S esta caracterizado por uno de los atributos de F, Y similarmente para los atributos de G, pero ciertamente es caracterizado por Fl si es caracterizado por Gh por F2 si por G2, y asi sucesivamente.

    Si estamos convencidos de que este es un fen6meno irreductiblemente indeterminista, de manera que S es una descripci6n completa del estado

    20 El escrito de Einstein, Podolski y Rosen aparecio en la Physical Review, 47, 1935, pags. 777-780; examino su experimento mental y la dispersion deCompton en la parte 1 de mi articulo "The Einstein-Podolski-Rosen Paradox", Synthese, 29, 1974, 1, pags. 291-309. Un elegante resultado general concerniente a la medida en que una "explicacion" estadlstica de una correlaci6n a traves de una tercera variable requiere del detemiinismo, es ellema b,rmar Ilna teona q1,l~ yi()la el principio de Reichenbach en una que l() obe,dezca, sin ~terar~u. adecuac~6n empiri~? Posiblemente; s,e ten}lria q\le negar que 1~ 8J:d,buci6n del es.ta,dg S da info.maci6n completa acercadel ~istema ~n ~l momento en cuesti6n, y postular parametros ocultos que subyacen en esos estados. Los intentos en esta direcci6n, respecto a la mecanica cuantica, se conocen como teorias de variables ocultas, pero puede mostrarse que si una teoria como tal es empiricamente equivalente a la mecanica cuantica ortodoxa, entonces todavia muestra correlaciones no locales de tipo no clasico que violarian aun el principio de Reichenbach. Pero nuevamente la cuesti6n es academica, puesto que la flsica modema no reconoce la necesidad. de tales variables ocultas.

    l.Podria debilitarse el principio de Reichenbach de manera que se preserve su espiritu motivador y al mismo tiempo se eliminen sus inaceptables consecuencias presentes? COmo parte de una teoria mas amplia de la explicaci6n (que discutire mas tarde), Wesley Salmon ha propuesto separar la ecuaci6n (2) anterior en

    (2*) P(A&B/C) >P(AIC).P(BIC)

  • 50 51 LA IMAGEN CIENTfFICA

    en cuyo caso C calificarfa aun como causa comun. Observeseque en el ejemplo esquematico que ofreci, S calificarla entonces como causa comlin de los sucesos Fi y Gj.

    Pero formulado asi, el principio produce una regresi6n. Porque sup6ngase que (2*) es verdadera. Entonces notarfios una correlaci6n positiva relativa a C:

    Pc(A&B Pc(A).Pc(B) a la que se aplica el principio y para la cual se demanda una ca~sa comun C'. Estaregresion se detiene solamente si: 0 bien enalgun punto la causacomun mostrada satisface la ecuaci6n original (2)(10 que nos llevade regreso a nuestra situaci6n original), 0 bien se usa mieVamente algun otroprincipio para restringir la demanda de expllcaci6n. , " '. '. En chalqtiiertaso, debilitar el principio devari~manbras(y ciertlunente tendri que ser debilitado sies que se pretendeque pUeda ser a.c6ptable ',en cUalquier sentidoYmermara la fuerzadc:: ios.argumentos realis~,.ya . que cualquiet debilitaffiiellto es uriacuerdd para dejai- algunos tipos de "00incidencia c6srnica" ihexplicados. Pero esto es admitir que el punto de vista ri!)rninalista/empirista se puede de{cmder, plies la demanda de explicaci6n deja de ser entonces un "imperativocategorico" cientffico. .

    No obstante, aqui hay tin problema que deberfa enfrentarse. Sin Ingar a dudas, muchasempresas cientfficas pueden caracterizarse como bUsquedas de causas comunes para explicar correIaciones. i,Que puede decir ante ello el antirrealista? i,No es una bUsqueda de realidades explicativasmas allade los fen6menos? .

    Creo que hay dos sentidos en los cuales un principio

  • 53 52 LA IMAGEN ClENTiFICA

    es negro") son explicados cientificamente pot tegularidades generales observables ("todos los cuervos son negros''), laS que a su vez Son explicadas por hipotesis altamente teoricas sin restriccion en cuanto a 10 que dicen acerca de 10 observable. Los tres niveles son comumnente designados como el ' del hecho, el de la ley empirica y el de la teorla. Pero como Sellars sefiala, las teorlas no explican y ni siquiera implican tales leyes empfricas; soIamente muestran por que las cosas observables obedecen estaS asi llamadas leyes en lamedida en que 10 hacen.24 De hecho, quiza no tellemos en absoluto tales leyes empiric as: todos loscueivosson negros --excepto los albino8-, el agua hierVe a 1000 C ...:.....si la presion atmosferica es norrilal-, un cuerpo encaida aceler~ -si no es interceptado 0 sujetadoauhaeroplanopor una ; liriea estatica-':",y asi sticesivamente. En el myel de 16 observable estamos

    cond~nados a encontrar soliunente leyes putativas, queestliij,fuertemente sujetas a clausulaS ceteris paribus no escritas. ' ' ," <

    :&te es, hasta aqui, solounpunto metodologico. ReaInlerite no esperamosque las teorfas "salven" nuestras generalizaciones comunesde caga dia, porque nosotros mismos no tenemos confianza en su umversalidad estricril. Pero una teoria que dice que latnicroestructura,de las cosas esta sujeta a algunas regularidades exactas, uhiversales, debe unplicar 10 mismo para ' aquellas cosas en sf mismas. Esta es, por 10 menos, rni reaccion ante los ptintostratados hasta ahora. Sin embargo, SelIars've una illferioridad illherente en Ia descripci6n de'lo observable por sf sold, una insuficiencia que exige (sub specie de 16s fmes de la ciencia) la introduccion de una realidad inobservable mas alIa de los fen6menos. Estose hace patente a traves de tin interesante "experimerito inental". .

    Imaginese que en alguna etapa temprana. de la qUrlnica se hubiera encontradoqiJe diferentes muestras de oro se disuelven en agtia regia erigrados direrentes, a pesar de que "hasta donde puede ser determinado mediante la observacion, los especfmenes y las circunstancias son identicas".25 Irnagfuese ademas que la respuesta de la qufmica a este problema era la de postular dos microestructuras distintas para las diferentes muestras de oro. La iinpredeciQle variacion observada en el grado de disolucion era explicada diciendo que las muestras son mezclas (no compuestos) de estas dos sustancias (identicas segun la observacion), cada una de las cuales tiene un grado fijo de disolucion.

    En este case,' teriemos una explicacion mediante leyes que no tienen contrapartes observacionales que puedan desempefiar el mismo papel. De

    24 Op. cit., pag. 121. 25 Ibid., pag. 121.

    ARGUMEN1'OS CONCERNIENTES AL REALISMO CIENTfFICQ

    hecho, ninguna explicacion parece posible, a menos que acordemos buscar nuestras variables fisicas fuera de 10 observable. Pero la ciencia trata de explicar, debe tratar de explicar, y asi, debe exigir la creencia en esta microestructura inobservable. Tal es el argumepto de Sellars.

    Hay aqui por 10 menos tres preguntaS frente a nosotros. i,Esta postulacion de una micr~structura n() tiene rea.lmente nuevas ..co~~uencias en los

    fenom~nos observables? l,Pesa realmente sobre la, ClenCla ,la exigencia de ' q~ede?a e~p~~car, aun si lo~ m.edios de ~~plicacion no~frecen ninguna

    ~anancla en cuanto a laspredlcclones emplflc~? Y t,ercero, i,podria existir unarazon dife'rente para: seiVirse de la imagen de una microeSfructura en el desarrollo de una teoria cientffica en un caso como este? ' ,

    Primero, me parece que estOsqufmicos hipotetioos postulaban lambien nuevas regularidadeso~seiva~les. Supongase que las d6~sustancias sOQ A y B, con grados de dlSoluclon x y x +y, y 9ue cada muestra de oro es una mez~la de estas sustancias. Entonces se sigue que cada muestra de oro se disuelve en un grado no menor que x y no mayor que x +Y; y que, entre estos dos, algun valor puede ser encontrado -dentro de los Ifmites de exactitud de la mezcla de oro. Nada de esto es implicado por los datos de

    , que las diferentes mezclas de Qro se disolvieron en varios grados entre x y x + y.