Vínculo y Relación de Objeto

Embed Size (px)

Citation preview

  • 7/28/2019 Vnculo y Relacin de Objeto

    1/9

    Vnculo y Relacin de Objeto

    Marcos Bernard

    La articulacin y correspondencia entre los conceptos de vnculo y de relacin de objetoocupan un lugar central en las teorizaciones del psicoanlisis contemporneo. Voy aintentar aqu establecer un somero panorama de definiciones y posiciones al respecto:son muchos los autores que han hecho aportes significativos respecto de alguno de estosconceptos, o de sus correlaciones recprocas, y no me hago ilusiones de poder rendir

    justicia cabal a la amplitud y complejidad del tema en este espacio. Aprovechar laocasin para aportar algunas reflexiones, desde mi propia experiencia de analistavincular.

    Vnculo. Algunas definiciones.

    El vnculo como institucin. Para R. Kas (1996), el vnculo instituido se determinapor efecto de una doble conjuncin. Una de ellas es el deseo de sus sujetos de inscribirsu relacin en un contexto de duracin y estabilidad. Ese proyecto supone, para surealizacin, un nmero de formaciones intersubjetivas: alianzas, contratos, pactos, etc.,que deben ser investidas y observadas recprocamente por los sujetos. La segunda es lade las formas sociales que sostienen desde lo jurdico, cultural, econmico, etc., lainstitucin de ese vnculo. Segn este autor, desde esta doble conjuncin se imponentres componentes del vnculo instituido: la alianza, la comunidad de realizacin de finesy la sujecin (contrainte). Incluye entre las configuraciones posibles de vnculosinstituidos, a las parejas, las familias, los grupos y las instituciones y sus subconjuntos.

    Encontramos en esta definicin algunos elementos que han trabajado tambin otrosautores: la permanencia en el tiempo, la estabilidad (es decir, una forma ms o menosconstante), una comunidad de intereses (lo que hace a la motivacin manifiesta de susintegrantes, a realizar en y a travs del dispositivo vincular), la sujecin (una obligacinrecproca que se establece a partir del hecho de reconocerse perteneciendo a dichovnculo).

    El vnculo como representacin. Para E. Pichon-Rivire 1970), el grupo es un

    conjunto de personas articuladas por su mutua representacin interna. La dialcticainterna es la del grupo interno, cuya crnica es la fantasa inconsciente. Pienso que es

    importante subrayar que grupo interno no es aqu, exactamente, sinnimo de fantasainconsciente, sino que sta sera la crnica (el contenido), de la que el grupo interno esestructura (volver sobre este punto ms adelante).

    J. B. Pontalis, por su parte, afirma que si bien el grupo, en el campo sociolgico, esuna realidad especfica, en el campo del psiquismo individual acta como una fantasa.

    No forzamos el concepto de vnculo si extendemos estas consideraciones ms all delcampo de los pequeos grupos, hasta abarcar las otras configuraciones vinculares: entodas ellas encontraremos esta representacin del conjunto, que nos servir paraestablecer puentes con el concepto de relacin de objeto.

    As, dos vertientes nos permiten aproximarnos, hasta aqu, al vnculo: una, la primera,que tiene ms que ver con su articulacin con lo social, contextual y funcional en la

  • 7/28/2019 Vnculo y Relacin de Objeto

    2/9

    realidad, y la otra, que nos permite considerar sus races en el psiquismo de susintegrantes.

    El vnculo como envoltura. D. Anzieu (1986) define al grupo como una envoltura,

    que permite que los individuos se mantengan juntos. Para l, un entramado de reglas,costumbres, ritos, actos que tienen el valor de una jurisprudencia, y que tiene que vercon la tarea manifiesta que el grupo se ha propuesto, permite que el conjunto establezcaun espacio interno, el de quienes comparten todas estas producciones comunes, que sesepara as de un espacio externo, el de aquellos que no lo hacen. Entre ambos espacios,se establece una epidermis, la envoltura que mencionbamos antes, que propone unlmite y protege a sus integrantes, actuando como una membrana de transcripcin y

    paraexcitacin. Para Anzieu, esta membrana tiene dos caras: una externa, que tiene quever con la adaptacin del conjunto a su medio, y otra interna, que sirve como pantalla de

    proyeccin de fantasas, imagos, tpicas subjetivas. Ningn grupo puede sobrevivir,afirma, si estas dos funciones no se establecen y mantienen, si estas dos exigencias de

    todo vnculo humano no son satisfechas. Podemos pensar que la representacinfantaseada del propio vnculo cumple tambin aqu su papel: la recproca representacininterna que compartes los miembros, es una variante del despliegue fantasmtico querealizan. El vnculo no puede as, desde el enfoque de D. Anzieu, establecerse nisostenerse si no mantiene una relacin de simbolizacin, apuntalamiento y continencia,de despliegue y de satisfaccin libidinal, con el mundo interno (lugar de las relacionesde objeto) de sus integrantes.

    La cotidianidad. La tarea que los miembros del vnculo se han propuesto; el

    entretejido que se va estableciendo entre ellos a partir de estructuraciones de roles socialy/o interaccionalmente establecidos, y de complejas redes de atribuciones de sentido,conscientes e inconscientes, producen, a partir de la cotidianidad y rutinizacin de larelacin, una serie de constantes que los enmarcan y contienen. Esta es una funcin,comprendida entre las que mencionara D. Anzieu, que merece ser subrayada por suimportancia. Es la funcin de encuadre que todo vnculo necesita, cuya funcin esestablecer las condiciones necesarias para el establecimiento de la sociabilidadsincrtica, lugar y estrato de despliegue de los aspectos no discriminados de la

    personalidad de sus integrantes (Bleger, J., 1967, 1971). Todo lo que hace al narcisismoprimario desplegado en un contexto vincular, se apuntala en esta funcin encuadrante dela cotidianidad.

    Relacin de objeto. Definiciones.

    Para J. Laplanche y J. B. Pontalis, la relacin de objeto es un "Trmino utilizado congran frecuencia en el psicoanlisis contemporneo para designar el modo de relacin delsujeto con su mundo, relacin que es el resultado complejo y total de una determinadaorganizacin de la personalidad, de una aprehensin ms o menos fantaseada de losobjetos y de unos tipos de defensa predominantes." (1967, pg.359). Y ms adelante,"La palabra relacin debe tomarse en su sentido pleno: se trata, de hecho, de unainterrelacin, es decir, no slo de la forma como el sujeto constituye sus objetos, sino

    tambin de la forma en que estos modelan su actividad". (op.cit., pg. 360). Subrayanestos autores que el acento debe ser puesto en la palabra de, que marca precisamente

  • 7/28/2019 Vnculo y Relacin de Objeto

    3/9

    esta interaccin. Dos aspectos de la definicin a tener en cuenta: aprehensin ms omenos fantaseada, e interrelacin. El mundo externo est representado en el aparato

    psquico, pero ha sufrido las distorsiones producidas por procesos de transcripcin quelo inscriben en el contexto de una subjetividad.

    Respecto de esta distorsin, vista segn el punto de vista kleiniano, nos dice W.Baranger (1980, pg. 63): "Para Melanie Klein, el objeto se encuentra arraigado en elsistema de fantasas inconscientes previas a la experiencia: constituye la materia mismadel mundo interno [...]. En ningn caso puede reducirse a un objeto natural o a surepresentacin. No pertenece al orden de la representacin". Unas pginas antes, en stemismo texto, este autor ha afirmado "El pecho preexiste a la experiencia. En lafantasmtica trascendental, es el centro de una cantidad de fantasas originarias [...]. La

    percepcin real del pecho como rgano natural no es determinante para conferir suforma al pecho interiorizado."(op. Cit., pg. 51). El modelo kleiniano parece extremarlos trminos de la distorsin de que hablan Laplanche y Pontalis, hasta llevar estainterpretacin del objeto externo a una determinacin que surge de lo gentico, previo a

    toda experiencia posterior al nacimiento. Este modelo geneticista de M. Klein parecesugerir la coexistencia de dos mundos relativamente paralelos, el interno y el de losvnculos con los objetos de la realidad, que se influencian relativamente, y queseguramente no se determinan recprocamente.

    Una concepcin tal de las relaciones de objeto ofrece obstculos particulares paraestablecer el nexo entre el adentro y el afuera vincular. La definicin kleiniana defantasa inconsciente es coherente con su idea de una determinacin instintiva ygentica del psiquismo, y contribuye a cerrar su posibilidad de construir, a partir deellas, un sistema de interacciones recprocamente determinantes entre el sujeto y sucontexto intersubjetivo y social.

    Esta postura se modifica radicalmente en la perspectiva de W. R. Fairbairn (1952). Paral las relaciones objetales son la causa primaria de la estructuracin del psiquismo. El

    punto de partida de cualquier trastorno del desarrollo es para Fairbairn ambiental, ymundo interno y mundo externo interactan intensamente a travs de toda la vida delsujeto. Pero para este autor la pulsin, en contraste con lo que ocurre en los modelosfreudianos y kleinianos, no es el estmulo de la actividad psquica, descartando al Ellocomo motor de energas pulsionales y al Yo como una estructura destinada acontrolarlas. La posibilidad de construir una metapsicologa que pueda ser aplicada a lacosa vincular, en base a esta teora, nos alejara de conceptos tales como transferencia,

    presencia del cuerpo, libido (en la definicin freudiana del trmino), imponindonos larenuncia al uso de instrumentos de comprensin valiosos.

    Sobre esta problemtica nos dice B. Brusset (1993, pg. 11): "[...] Los dos modelos dela pulsin y de la relacin de objeto, lejos de ser opuestos y contrarios, se revelansituados sobre planos diferentes, no solamente compatibles, sino complementarios. La

    pulsin supone al objeto que, por ser contingente y sustituible [...] no es menosindispensable: no hay pulsin sin objeto. Tambin la relacin de objeto, para noconfundirse con la relacin interpersonal, debe mantener en su definicin al objeto en elsentido especfico que le da el psicoanlisis. Desde ese punto de vista, esfundamentalmente ubicuo y no se confunde jams con la persona del otro en su realidad

    propia, sino en lo que hace al deseo del sujeto, en tanto determinado por la economapulsional inconsciente. Muchos parmetros son requeridos: el objeto del amor y del

  • 7/28/2019 Vnculo y Relacin de Objeto

    4/9

    odio, el objeto en la fantasa consciente, preconciente e inconsciente, el objeto parcial enel juego de los procesos primarios y el objeto total en funcin de los procesossecundarios y en referencia a la realidad." Teora de las pulsiones y relacin objetal noson divisoria de aguas, pero resta establecer el estatuto de sus relaciones ydeterminaciones recprocas.

    Fantasa, objeto y relaciones de objeto.

    La relacin de objeto no nos da cuenta de las caractersticas de un objeto internoaislado, sino de un argumento interno (fantasa) del que ste objeto forma parte, juntocon el Yo del sujeto (y eventualmente otros "personajes"). Podemos pensar en larelacin de objeto como la matriz estructural de esta fantasa inconsciente, y a stacomo el resultado de experiencias vivenciales (que no son reproducidas en ellasespecularmente) en ocasin del encuentro del sujeto con los objetos del mundo externo.

    Coincido aqu con la opinin de Fairbairn, respecto del efecto estructurante de lasrelaciones de objeto respecto del aparato psquico.

    Toda experiencia humana produce un correlato psquico que puede diferenciarse en unargumento y una estructura1. Se ha afirmado que la fantasa inconsciente da cuenta, ensu sentido ms profundo, de una serie de posiciones, bsicamente la del cuerpo del bebrespecto del cuerpo de la madre. Las fantasas originarias, por ejemplo, fundan elaparato psquico a travs de proporcionarle una primera estructura, que propone lascategoras de adentro-fuera, lo mismo lo otro, y el antes y el despus (M. Bernard,1994). Alucinacin optativa del pecho; castracin, seduccin y escena primaria, antes deadquirir sus sentidos genitales, dan cuenta de estas posiciones de continuidad odiscontinuidad entre el recin nacido y su madre, y permiten establecer a aquel un

    bosquejo de borde en su psiquismo naciente2.

    Quiero insistir sobre la idea de que no existen objetos internos aislados: en laexternalizacin de las relaciones objetales, en el proceso de la transferencia, la clnicamuestra fehacientemente que el despliegue transferencial comprende siempre al sujetoque transferencia, en el contexto de un vnculo especfico determinado por las fantasasinconscientes que son contenido de dicho despliegue. La transferencia es as la

    proyeccin sobre una escena de la realidad de una escena interna compleja, una fantasainconsciente en la que el sujeto est incluido, aunque no necesariamente ocupando en

    ella un lugar especfico o determinado (Bernard, M. 1996a).Es posible tambin establecer equivalencias entre el concepto de relacin de objeto y elde grupos internos: se superponen en el modelo de E. Pichon-Rivire y mo (Bernard,M. 1996b), y constituye algunos de los casos en los que definiera R. Kas (1976). Comolo marca este ltimo autor, los estratos ms primitivos de las relaciones de objeto, losque Bleger describira como pertenecientes a la simbiosis madre-beb, corresponden, enel psiquismo del beb, a un grupo interno cuyos integrantes mantienen entre s unarelacin de indiscriminacin y continuidad. La triangulacin en estas estructuras, si bienexiste (aportada por el psiquismo de la madre), es incipiente.

  • 7/28/2019 Vnculo y Relacin de Objeto

    5/9

    Vnculo y relacin de objeto.

    Un buen acpite para este tem podra ser una parfrasis del Evangelio de San Juan: "Enel principio exista el vnculo". Uno de los autores que ms ntidamente ha desarrolladoesta situacin es P. Aulagnier (1975, pg. 30): "La psique y el mundo se encuentran y

    nacen el uno con el otro, uno a travs del otro; son el resultado de un estado deencuentro al que hemos calificado como coextenso con el estado de existente". Y msadelante (pg. 31): "La primera representacin que la psique se forma de si misma comoactividad representante se realizar a travs de la puesta en relacin de los efectosoriginados en su doble encuentro con el cuerpo y con las producciones de la psiquematerna". Como lo he propuesto en otro trabajo, la primera produccin representacionalque se produce en el sujeto humano, la alucinacin optativa del pecho, es la marca quedeja un protovnculo en el psiquismo en formacin. Esta representacin corresponde al

    perodo de la unidad dual3, sin embargo, an esta relacin didica implica un bosquejode diferenciacin. La triangulacin es coextensiva con la objetalizacin, lo que es

    posible porque el Edipo est all, produciendo estructura, desde el comienzo, aportado

    por el psiquismo materno. "La diferenciacin con el objeto es tambin la condicin desu introyeccin, la que le constituye como objeto interno en el metabolismo pulsional"(Brusset, B, op.cit., pg 8). Pero, como ya vimos, a partir de esta discriminacin(producto del conocimiento de la exterioridad del objeto externo, resultado de latriangulacin precoz), lo que se internaliza y desencadena el desarrollo del psiquismo esuna relacin de objeto, la imagen de un vnculo, una fantasa con contenido y estructurarudimentarias.

    Esta es la primera articulacin entre un vnculo que comienza, tal como lo definiramosantes, y una relacin de objeto, que le corresponde como su registro psquico. En estecaso, como marcbamos al principio de esta seccin, el vnculo externo precede a larelacin de objeto, aunque, si seguimos a P. Aulagnier, en el sentido en que la psique yel mundo se encuentran y engendran mutuamente, el vnculo se crea en el momento enque es representado, y esta representacin crea, en el mismo acto, al aparato psquico.Imposible pensar en una relacin ms inextricable, entre los dos conceptos que danttulo a esta presentacin.

    R. Moguillansky (1999, pg. 91) ha escrito, al respecto: "[...] Todo vnculointersubjetivo estable tiene como cimiento una experiencia fusional que se da sobre elmodelo del encuentro ilusorio con lo idntico o lo complementario: his majesty the

    baby, en la relacin paterno-filial; el enamoramiento en el vnculo de la alianza; los

    fenmenos de masa en las instituciones; las transferencias preformadas en el vnculoanaltico. [...] En ese estado fundacional no hay sensacin de alteridad, se elimina loajeno, lo diferente y de es parte de lo uno"

    El psiquismo se desarrolla, de ah en ms, en tanto sus vnculos externos hacen lopropio. Esto justifica la expresin de R. Kas, para describir esta ntimainterdependencia en el crecimiento recproco "No uno sin lo otro": las relaciones deobjeto son un motor del vnculo, en tanto se externalizan e invisten el mundo que rodeaal sujeto a partir de la carga libidinal que movilizan. Organizan, crean a veces, a partirde este procedimiento, los vnculos en los que participar el sujeto. Este mundo exteriorobjetal es reinternalizado, aumentando el acerbo representacional, en un crculo que

    terminar con la muerte.

  • 7/28/2019 Vnculo y Relacin de Objeto

    6/9

    Estamos en el campo de la transferencia, esa que se establece casi desde el comienzo dela vida (Bernard, M, 1996), y contribuye a dar sentido a las vivencias intersubjetivas.Leemos en B. Brusset (op. cit., pg. 10)" [...] La transferencia abre [a la pulsin], por elobjeto, sobre la alteridad del mundo exterior y su poder de transformacin: mas all dela cuestin del rol del objeto en la constitucin misma de la pulsin como estructura

    abierta, su epignesis, la teora de la transferencia a encontrado en los modelos de larelacin de objeto una salida aparentemente simple y directa. Adems, ella da el espacioterico, epistmico, para una teora psicoanaltica de la intersubjetividad, de lacomunicacin (palabra ausente en la obra de Freud), de los vnculos interpersonales, y, atravs de ello, del desarrollo especficamente psquico."

    La transferencia es entonces el gran articulador entre las relaciones de objeto y losvnculos de que el sujeto participa. Estos vnculos, como decamos, tienen en lasrelaciones de objeto de sus actores, si no el nico, por lo menos un organizadorindispensable. Los otros son el marco social y legal que la sociedad provee paraencuadrarlos ( que de todos modos est tambin internalizado, y puede ser provisto por

    las mismas relaciones de objeto, que se han organizado incluyndolo), las fuerzasconvocantes que vienen del recproco inters comn de los vinculantes (como factorinterviniente desde el proceso secundario), y por un elemento, que llamaremos efectocombinacin4, que surge y acta desde el mismo campo que se est organizando, y quedepende de las formas, impredecible de antemano, en que los intervinientes del vnculo

    puedan acoplarse. El efecto combinacin es lo que en vnculo hay de irreductible a lasuma de sus componentes5. Marca un efecto de creacin que, junto con el hecho de queel objeto externo, el otro, sea irreductible a la posibilidad de ser transformado en objetointerno sin resto, otorga al despliegue transferencial todo lo que ste tiene de innovador,de prueba y de juego.

    El ser humano, su aparato psquico, es uno y nico, independientemente del tipo devnculo en que vaya a insertarse. He sostenido (Bernard, M. 1999) que todos losvnculos humanos tienen un sustrato, un organizador comn, que surge del

    procesamiento psquico de los restos de la unidad dual, que describiera I. Hermann. Elsujeto ya lo haban sostenido Platn, J. Lacan, R. Kas- busca en el vnculo, en todovnculo, la complecin, la unidad perdida, sin encontrarla nunca. Este es el fundamentocomn de todo vnculo, que puede rastrearse en los estratos ms profundos de una

    pareja, un pequeo grupo, una familia. Forma parte de la infraestructura narcisistaprimaria de los sujetos del vnculo6, y se expresa especialmente, en lo observableclnicamente, en el enamoramiento (Freud, 1921), la ilusin grupal (Anzieu, 1986), en

    la vivencia ocenica, el orgasmo genital, etc. Sobre este zcalo se teje la especificidadde cada vnculo, con sus organizadores concientes e inconscientes especficos;pregenitales en los pequeos grupos, edpicos en las parejas y las familias.

    El objeto del anlisis vincular.

    El foco del psicoanlisis vincular debe ser establecido entre esa articulacin entre lointrasubjetivo, representado por las relaciones de objeto, y lo intersubjetivo, es decir, laforma, el estilo, las combinaciones, el proceso introyectivo y proyectivo que se produce

    entre el adentro y el afuera de los sujetos del vnculo en el contexto contratransrero-transferencial que determina el encuadre psicoanaltico. El acento en esa coyuntura nos

  • 7/28/2019 Vnculo y Relacin de Objeto

    7/9

    libra del doble desvo posible en los anlisis vinculares: la atencin predominante en lointrasubjetivo, y estaramos haciendo entonces un psicoanlisis individual compartido, oel acento en lo estrictamente interaccional, y nos moveramos as en el campo de la

    psicologa social o de la psicoterapia sistmica.

    Nuestro paciente es el sujeto del vnculo, en tanto tal, y en ocasin del vnculo, en elcontexto de un encuadre psicoanaltico, que define un campo contratransfero-transferencial. En ste el despliegue de las relaciones objetales de sus protagonistas, suentretejido transferencial, su funcin organizadora del campo vincular, generan

    productos nuevos, crean sustancia psquica y producen sentido all donde hubo, hastaese momento, malentendidos y desencuentros. La funcin del analista vincular esmantener activo este trabajo de elaboracin, actuando como un catalizador que permitey sostiene el trabajo del preconciente de los pacientes vinculares.

    Notas:

    1. [...] El comn denominador que une a todas las fantasas es su carcter mixto, queconcilia, aunque en grados variables, lo estructural y lo imaginario. [...] Sin embargo, noes nicamente, ni fundamentalmente, la proporcionalidad variable e inversa entreingrediente imaginario y la ligadura estructural lo que permite diferenciar y clasificar lasmodalidades fantasmticas entre los polos extremos de la fantasa originaria y laensoacin. La estructura misma parece variar. En el polo del sueo diurno hay unescenario esencialmente en primera persona, con un lugar invariable asignado al sujeto.[...] Por el contrario, el polo de la fantasa original se caracteriza por la no subjetivacinas como por la presencia del sujeto en la escena [...]. Laplanche, J. y Pontalis, J. B.,1964)[Volver]

    2.. De estas afirmaciones surge que en las fantasas originarias se estableceran las basesde la estructura psquica; que en ellas la estructura es fundante, y continente de futuroscontenidos psquicos.[Volver]

    3.. He tratado este tema con ms extensin en otro artculo (Bernard, M., 1999)[Volver]

    4..R. Kas (1986-87) lo denomina organizadores transpsquicos.[Volver]

    5..No siempre un vnculo es ms que la suma de sus partes: en los vnculos narcisistas lasuma da un resultado menor. (Bernard, M., 2000)[Volver]

  • 7/28/2019 Vnculo y Relacin de Objeto

    8/9

    6.La sociabilidad sincrtica que describiera J. Bleger (1971).[Volver]

    BIBLIOGRAFA

    Anzieu, D. (1986). El grupo y el inconsciente. Lo imaginario grupal. Biblioteca Nueva,Madrid, 1986.

    Aulagnier, P. (1975). La violencia de la interpretacin. Amorrortu editores, BuenosAires, 1977.

    Baranger, W. (1980). "Validez del concepto de objeto en la obra de Melanie Klein". En

    Baranger, W y col. Aportaciones al concepto de objeto en psicoanlisis. Amorrortueditores, Buenos Aires, 1980.

    Bernard, M. (1994). "Structure du fantasme et du transfert" En R. Kas, Les voies de laPsych. Dunod, Para, 1994.

    Bernard, M. (1996a). "Reflexiones sobre el concepto de transferencia". Revista de laAsociacin Argentina de Psicologa y Psicoterapia de Grupo. XIX, 1, 1996.

    Bernard, M. (1996b). "Los grupos internos" En Bernard, M. y otros Desarrollos sobregrupalidad. Una perspectiva psicoanaltica. Lugar Editorial, Buenos Aires, 1996.

    Bernard, M. (1999). "Los organizadores del vnculo. De la pulsin al otro". Revista dela Asociacin Argentina de Psicologa y Psicoterapia de Grupo. XXI, 1, 1999.

    Bernard, M. (2000). "Los efectos del inconsciente en la organizacin de los vnculos".Actualidad Psicolgica, Ao XXIV, N 277.

    Bleger, J. (1967). Simbiosis y ambigedad. Paids, Buenos Aires, 1967.

    Bleger, J. (1971). "El grupo como institucin y el grupo en las instituciones". En Temas

    de psicologa social. Nueva Visin, Buenos Aires, 1971.Brusset, B. (1993). "Relation dobjet et thorie des grupes". Revue de Psychothrapie

    psychanalytique de groupe. N 20, 1993.

    Fairbairn, W. R. (1952). Estudios psicoanalticos de la personalidad. Horm, BuenosAires, 1962.

    Freud, S. (1921). "Psicologa de las masas y anlisis del yo). O.C., T XXVIII,Amorrortu editores, Buenos Aires, 1984.

    Kas, R. (1976). El aparato psquico grupal. GEDISA, Barcelona, 1976.

  • 7/28/2019 Vnculo y Relacin de Objeto

    9/9

    Kas, R. (1986-87). "Los organizadores psquicos del grupo". Revista de Psicologa yPsicoterapia de Grupo, XII, 1989.

    Kas, R. (1986). "Une introduction". En Soufrance et psychopathologie des liensinstitus. Dunod, Paris, 1996.

    Laplanche, J.; Pontalis, J. B. (1967). Diccionario de psicoanlisis. Labor, Madrid,1983.

    Moguillansky, R. (1999). Vnculo y relacin de objeto. Polemos, Buenos Aires, 1999.

    Pichon-Rivire, E. (1970). "Una teora del abordaje de la prevencin en el mbito delgrupo familiar". En El Proceso grupal. Nueva Visin, Buenos Aires, 1977.

    Pontalis, J. B. (1963) "Le petit groupe comme objet". En Aprs Freud. Gallimard,Paris, 1968.

    Vnculo y relacin de objetoTrabajo presentado en el II Congreso Argentino de psicoanlisis de Familia y Pareja.Buenos Aires, Mayo de 2001.

    Marcos BernardMiembro Titular Honorario de la Asociacin Argentina de Psicologa y Psicoterapia deGrupo. Miembro Fundador de la Sociedad Psicoanaltica del Sur (SPS).