Vivir

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Vivir. Oración. POBREZA. Al servicio de la Iglesia. Fraternidad. Minoridad. Vida sencilla. Libertad. Evangelización. Dios Hermano. Salir. VIVIR «Alguna vez te has preguntado: ¿Quién enseño a los pájaros a cantar? ¿Quién pintó las flores de colores? - PowerPoint PPT Presentation

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  • VivirPOBREZAMinoridadLibertad Dios Hermano Al servicio de la IglesiaOracin Fraternidad Vida sencilla Evangelizacin

  • Dichoso aquel que, cuando habla, no descubre todas sus cosas con miras en la recompensa y no habla con ligereza (cf. Prov 29,20), sino que medita sabiamente lo que ha de decir o responder con vistas al bien de sus hermanos. (Francisco de Ass, el Buenagente. Adm.11) VIVIRAlguna vez te has preguntado:Quin enseo a los pjaros a cantar? Quin pint las flores de colores? Quin ense el camino a las golondrinas? Quin dio a los hombres la capacidad de amar?

    Dichoso el hombre que no se enaltece ms por l bien que el Seor dice y obra por l, que por el que dice y obra por medio de otro. Comete pecado el hombre que prefiere ms recibir de su prjimo que dar de s mismo al Seor Dios. (Admonicin 17) Regresar

  • La pobreza, al contrario que en las ordenes precedentes, debe ser absoluta, individual y colectivamente. Los hermanos deben vivir del propio trabajo y, en caso de necesidad, pueden recurrir a la "mesa del Seor", o sea a la mendicacin, sin avergonzarse, porque tambin Cristo se hizo pobre y peregrino en este mundo.RegresarPOBREZA

    Francisco recomend a sus hermanos vivir de su propio trabajo, y si llegase el caso de que ste no diera para el sustento, entonces deban acudir a la mesa del Seor, a la caridad de las gentes del lugar.

    Pobre es el que lo espera todo de Dios;

  • MINORIDAD Aunque fueses tan agudo y sabio que tuvieses toda la ciencia (cf. lCor 13,2) y supieses interpretar toda clase de lenguas (cf. lCor 12,28) y escudriar agudamente las cosas celestiales, no puedes gloriarte de nada de eso; pues un solo demonio saba de las cosas celestiales, y sabe ahora de las terrenas ms que todos los hombres Asimismo, aunque fueses el ms hermoso y rico de todos y aunque hicieses tales maravillas que pusieses en fuga a los demonios, todo eso te es perjudicial, y nada te pertenece y de nada de eso puedes gloriarte.En esto nos podemos gloriar: en cargar diariamente la santa cruz de nuestro Seor Jesucristo (cf. Lc 14,27).RegresarLes entr la idea de cual de ellos sera el ms grande. Jess, cogi la mano de un criadito, lo puso a su lado y les dijo: el que acoge a este chiquillo por causa ma, me acoge a m; y el que me acoge a m, acoge al que me ha enviado; es decir, el que es de hecho ms pequeo de todos vosotros, se es el mayor.

  • Si el objeto de la vida es este duro ajetreo con el que llenamos nuestros das entonces no es para m, debe haber algo mejor, tiene que haberlo.El hombre es espritu, tiene alma, y eso es lo que yo quiero recobrar, mi alma, Quiero vivir en los campos, caminar en las colinas, trepar a los rboles, nadar en los ros, sentir la firmeza de la tierra bajo mis pies, sin zapatos, sin posesiones, sin aquellas sombras que llamamos criados; quiero ser un mendigo, s, un mendigo; Cristo fue un mendigo. Quiero ser tan libre como l. LIBERTADslo los que nada tienen pueden experimentar la gratuidad de Aquel que alimenta a los pjaros y a las hierbas silvestres. Las aves son libres porque no tienen graneros. S la pobreza la que transforma este mundo de intereses y espadas en un gran hogar en que unos dan y otros reciben, si bien los que dan son los que ms recibenRegresar

  • DIOS HERMANO. Francisco, por qu tarda tanto el trigo en crecer y dar fruto? Y por qu Dios no escucha nuestras oraciones al momento? Dichoso t, hermano Len, si sabes cuidar el trigo hasta el momento de la cosecha, slo entonces y nunca antes, podrs comer pan. Si te apresuras en la recogida del fruto, todo tu esfuerzo habr sido intil. En cuanto a Dios, seguramente te ha escuchado incluso antes de que t acabases tu oracin, pero sobre el momento adecuado slo l tiene la sabidura. (Francisco de Ass, el Buenagente) Lucas 12,6: No se venden cinco gorriones por cuatro cuartos?. Y sin embargo, ni de uno slo de ellos se olvida Dios. Es ms, hasta los pelos de vuestra cabeza estn contados. No tengis miedo Regresar

  • Los que han sido constituidos sobre otros, glorense de tal prelaca tanto como si estuviesen encargados del oficio de lavar los pies a los hermanos SERVIR Francisco Cmo puedo hacer justicia?. Le pregunt un hombre que se senta robado por su hermano- Francisco tom una fruta del rbol y le contest: Dios ha puesto esto en nuestras manos, no slo para nuestro bien sino tambin para el bien de nuestros hermanos. Slo si das t primero, pues tienes ms, hars que tu vecino no necesite robarte. Slo t sabes si Dios te pide darle la mitad o drsela enteraDichoso el hombre que comparte cuanto tiene pues sabe que todos los bienes pertenecen al Seor Dios, porque quien se reserva algo para s, esconde en s mismo la riqueza de su Seor Dios (cf. Mt 25,18), y lo que crea tener se le quitar. S.Francisco de Ass: LC 8, 18. Admonicin 18)Regresar

  • RegresarORACIONCreer es sentir a Dios por debajo de las nubes, en el agua que corre, en la tierra que pisas, en el cielo lleno de estrellas, en el amigo lleno de palabras;y tambin en cada noche de lluvia que promete otro amanecer.

    Creer es tener el convencimiento de que no estamos solos, de que Alguien, llamado Dios, nos pens y nos am; que la vida es Su don y que cada da es un regalo y cada maana una oportunidad

    Mirad que diariamente se humilla el Hijo de Dios en la eucarista (cf. Flp 2,8), como cuando vino desde el trono real, (Sab 18,15) al seno de la Virgen Mara. l mismo viene diariamente a nosotros en humilde apariencia. Cada da baja del seno del Padre al altar, en manos del sacerdote. Y como se mostr a los santos apstoles en carne verdadera, as tambin ahora se muestra a nosotros en el pan de la eucarista. (cf. Mt 28,20). Adm 1Regresar

  • Amad a vuestros enemigos, haced el bien a los que os odian, bendecid a los que os maldicen, rezad por los que os injurian. Al que te pegue en una mejilla, presntale tambin la otra, al que te quite la capa, dale tambin la tnica. Al que te pide, dale, al que se lleve lo tuyo no se lo reclames. Tratad a los dems como queris que ellos os traten.

    Lc 6,37: No juzguis y no os juzgaran; no condenis y no os condenarn; perdonad y os perdonarn; dad y os darn: os vertern una medida generosa, colmada, remecida, rebosante. La medida que usis la usarn con vosotros RegresarFRATERNIDADLa caridad entre los hermanos y entre ellos y sus superiores debe ser ms "materna" que fraterna La humildad sin medida y el deseo de obedecer a Dios y ayudar prcticamente a los hombres hacen de San Francisco el ms fiel intrprete del concepto cristiano del trabajo

  • Tened el delantal puesto, y encendidos los candiles: pareceos a los que velan esperando a que su amo vuelva de la boda para, cuando llegue, abrirle en cuanto llameVida sencilla Quiero que todos mis frailes trabajen y se ejerciten humildemente en obras buenas para huir del ocio, enemigo del alma; para ser menos gravosos a los hombres, para ganarse la vida honestamente. Los que saben trabajar, trabajen y ejerctense en el oficio que supieren, y los que no saben ninguno, aprndanlo, mas cuiden de trabajar con fidelidad y devocin, de modo que no extingan el espritu de oracin, al que deben servir todas las cosas temporales; y gurdense de no recibir en pago sino las cosas necesarias al cuerpo, salvo dinero, y esto humildemente, como conviene a los siervos de Dios y a los seguidores de la santsima pobreza.

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  • La predicacin por parte de los frailes capacitados y autorizados debe ser, segn el ejemplo del Seor, con discursos tiles y edificantes y "brevedad de palabras". Y debe ir acompaada por el buen ejemplo, "sirviendo al Seor en pobreza y humildad", mostrndose ante todos en el mundo como hombres "mansos, pacficos, modestos y humildes", sin discusiones, contiendas o juicios, soportando con humildad y paciencia las persecuciones y enfermedades y orando por los enemigos. Evangelizacin y Misin

    Y aadi : Dichoso el hombre que conforta a su amigo en su fragilidad, y le ayuda a llevar sus tareas como querra que a l le ayudaran, si estuviese en una situacin semejante (Admonicin 18).Regresar

  • La verdadera ALEGRIADichosos vosotros cuando os odien los hombres y os insulten y propagen mala fama de vosotros por causa de este hombre. Alegraos ese da y saltad de gozo, mirad que os va a dar Dios una gran recompensa. Viene un mensajero y dice que todos los maestros de Pars entraron en la Orden. Escribe: no es verdadera alegra. Y lo mismo de todos los prelados del otro lado de los Alpes, arzobispos y obispos; y lo mismo del rey de Francia y del rey de Inglaterra. Escribe: no es verdadera alegra. Y que todos mis hermanos fueron a los infieles y los convirtieron a todos a la fe; y que tengo tanta gracia de Dios que curo a los enfermos y hago muchos milagros. Te digo que en todas estas cosas no est la verdadera alegra. Cul es, entonces, la verdadera alegra? Regreso de Perusa y llego aqu muy de noche y es invierno, con barro y mucho fro, hasta el punto que el agua congelada en el borde de la tnica me golpea las piernas y sangran las heridas. Y lleno de barro, con el fro y el hielo, llego a la puerta y, despus de mucho aporrear y llamar, viene el fraile y pregunta: Quin es? Yo respondo: Fray Francisco. Y l dice: "Vete, estas no son horas. No entrars". Y al insistir de nuevo responde: "Vete, eres un simple y un ignorante; de ningn modo vendrs con nosotros; somos tantos y tales que no te necesitamos". Y yo sigo an en la puerta y digo: "Por el amor de Dios, hospedadme esta noche". Y l responde: "No lo har. Ve al lugar (hospital) de los Crucferos y pide all". Yo te digo que si tengo paciencia en esto y no me molesto, esa es la verdadera alegra y la verdadera virtud y salvacin del alma.Regresar