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XII ÉPOCAS Y F^OHn1AS DF ABONAR La época dc efectuar el abonado varía con la sustancia utilizada y con la planta que se trata cíe abonar, por lo quc, para realizar de una manera general el estudio, vamos a considerar las plan- tas divididas en anuales y vivaces, pudiendo estas últimas presentar marcada parada invernal o no, y los abonos en ]os grupos que hemos considerado de fosfatados, nitrogenados, potásicos, calizos, or- gánicos y mixtos. J.us abonos fosfatados pueden presentar su áci- cío fosfórico, como hemos indicado más arriba, bajo la forma dc fosfato monocálcico, bícálcico, tricálci^co o tetracálcico los dos primeros ácidos, y los otros, no. Por otra parte, el ácido fosfórico es retenida por el poder absorhente de los suelos, no pudiendo, por tanto, ser arrastrado por las aguas de infiltración. Hechas estas aclaraciones previas vemos que cuando se trate de abonar plan- tas herbáceas anuaíes será conveniente acíicionar los abonos fosfatados antes de la siembra, con la suficicnte antelación si son ácidos, para que, reac- cionando con los carbonatos del suelo, neutrali-

XII · 2007. 4. 9. · ycte, como ya sabemos, es suruamente túxicu ltara las hlantas ; por la misma razón no deberá em-l,learse este abono en las plantas vivaces que ca-rezcan

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    ÉPOCAS Y F^OHn1AS DF ABONAR

    La época dc efectuar el abonado varía con lasustancia utilizada y con la planta que se trata cíeabonar, por lo quc, para realizar de una manerageneral el estudio, vamos a considerar las plan-tas divididas en anuales y vivaces, pudiendo estasúltimas presentar marcada parada invernal o no,y los abonos en ]os grupos que hemos consideradode fosfatados, nitrogenados, potásicos, calizos, or-gánicos y mixtos.

    J.us abonos fosfatados pueden presentar su áci-cío fosfórico, como hemos indicado más arriba,bajo la forma dc fosfato monocálcico, bícálcico,tricálci^co o tetracálcico los dos primeros ácidos,y los otros, no. Por otra parte, el ácido fosfóricoes retenida por el poder absorhente de los suelos,no pudiendo, por tanto, ser arrastrado por lasaguas de infiltración. Hechas estas aclaracionesprevias vemos que cuando se trate de abonar plan-tas herbáceas anuaíes será conveniente acíicionarlos abonos fosfatados antes de la siembra, con lasuficicnte antelación si son ácidos, para que, reac-cionando con los carbonatos del suelo, neutrali-

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    cen su acidez, tomando el estado de fosfato tri-cálcico, que siendo neutro deja de ser pelígrosopara la vegetación. Si se emplean fosfatos natura-les que contienen el fosfórico en estado de fosfa-to tricálcico, se podrá realizar su adición cuandoconvenga, aun cuando es preferible utilizar lalabor profunda para facilitar su reparto uniformepor la masa del terrrno ; y si se utilizan escoriaso basifosfatos, es necesario realizar su adicióncon la suficiente antelación para que su fosfóricopueda pasar al estado dc tricálcico, haciéndose asi-milable por ]as p]antas.

    En las plantas vivaces de marcada parada in-vernal, la incorporación de los abonos fosfatadosse llevará a cabo durante esta parada, teniendocuidado de adicionar los fosfatos naturales cuan-do se haya de dar alguna labor para facilitar suincorporación al terreno. En las que carecen demarcada parada invernal se huirá de los abonosfosfatados ácidos, que pueden perjudicar grave-mente la vida de las plantas.

    Las sustancias nitrogenadas ya sabemos quepaiemos adicionarlas bajo forma directamenteasímilable o capaz de tomar este estado mediantereacciones de orden química, o bajo formas queexijan la íntervencíón de seres vivos para tomare] estado asimilable, síendo esta transformaciónmás o menos rápida, según las condicíones delmedio. Sentado esto, vemos que la distribuciónde los abonos nitrogenados que tengan su nitró-geno en forma nítrica podrá efectuarse durantela vegetación o muy poco antes de iniciarse ésta,

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    con lo que se evitarán o disminuirán, según el cli-nta (cuanto más Iluvioso, más agua de infiltración,y, por tanto, más arrastres), las pérdidas dc nitró-

    Estercoladura.

    geno por arrastre a las capas profundas, ya queel nitrógeno bajo esta forma no es retenido porel poder absorbente de los suelos ; cuando se tra-te de abonos que tengan el nitrógeno bajo ]aforn^a antoniacal, pueden emplearse durantc lavcgctación o con alguna antclación a iniciarse lavi

  • que con facilíclad toma el estado cíe dicianamicla,ycte, como ya sabemos, es suruamente túxicu ltaralas hlantas ; por la misma razón no deberá em-l,learse este abono en las plantas vivaces que ca-rezcan cie l^aracla invernal v adicionarse en ésta,^• co q suficicnte antelaci

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    cionando una pequeña parte del seguncio con loshumatos del suelo, dando lugar a humato potásico,quc es retenido por el poder absorbente y des-cendiendo el resto a las capas profundas, en lasque, reduciéndose, toma el estado de carbonato,quedando retenido; es necesario adicionar estassales antes de las siembras o clurante la paradainvernal, con suficiente antelacirín para que enei primer caso se elimine el cloruro cálcico for-madc y en el segundo se recíuzca el sulfato, evi-tándose el peligro que para ]a vicía de las plantasrepresenta la gran toxicidad de estos productos. Sise trata de plantas vivaces sin parada invernalserá necesario realizar la adición en veces, porcantidades muy pequeñas y en la época de vidamenr^s activa. En las plantas de raíces profundasse preferirá el sulfato al cloruro, por su modade actuar, y en las de raíces superficiales, alrevés.

    Las sustancias calizas, obrando principalmentecomo enmiendas, se adicionarán con suficiente an-telación para que la causticidad que algunas deellas presentan desaparezca antes de íniciarse oreanudar la vida activa de las plantas ; las quecarecen de causticidad pueden emplearse pocoantes de las siembras, incorporándolas al suelocon las labores. EI yeso puede utilizarse durantela vegetación, adicionándolo de una vez al iniciar-se ésta o después de cada corte en las leguminosasforrajeras.

    I,os abonos orgánicos de origen vegetal debenincorporarse al terreno lo antes posible, para que

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    tengan tictnpo su ĥciente para sufrir la humifica-cicín, minrraliz'sción y nitrificacií^n que las con-vierta en sustancias asimilables por las plantas.

    L)istribuidoras de abono.

    sien^io necesario al adicionarlas tomar la precau-ción cie agre;;ar algo de cal, con el fin de propor-cionar al suelo la suficiente atcalinidaci para acti-var la descomposición de la sustancia incorporada ;clescle luego que en los suelos calizos esta precau-cí^"^n es ínnecesaria.

    Las sustancias de orígen animal, sícndo cn gc-neral cíe acción rapidísima, pueden adicíonarse enc] mrnnento cíe las siembras, plstntaciones o tras-plantes, o poco antes, pudiendo, en muchos casos,realizarse durante la vegetación para activar ésta,lo yue se puede efectuar sin peligro alguno.

    Los abonos mixtos, como ya sabemos, puedenser artificiales y naturales; por lo que respecta alos prin^eros, nos es imposible dar ninguna regla

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    fija sobre la época en que dehen incoporarse alterreno, pues ésta

  • antes dĉ la^ sienibras, plantaciones y trasplantes,y otra durante la vida vegetativa de las plantas.

    Los abonos solubles podrán adicionarse al te-rreno repartiénciolos por su superficie, sin necesi-dad dc dar labor alguna para su incorporacíón,limitánduse a lo su^no a un pase ligero de grada.

    I_os ínsolubles reyuieren una tabor lo más pro-iunda posiblc riespués de su distribución, paracon el movimiento cíe la tierra facilítar su distri-bucibn c incorporacíón al terreno. ^

    Cuando ei abonado se efectúe antes de la siem-bra, plantación o trasplante, se aprovechará al-guna de las labores preparatorias, especialmentela profunda, con el fin de facilitar la distribucióndel abono por eI suelo, y cuando se realicé du-rante e1 ciclo vegetativo se pmcurará incorporarlocon un riego o un ligero pase de grada. La distri-bución puede efectuarse a mano o empleandomáduinas distribuidoras de abono.