1
2
ANNA PREMOLI
3
El presente documento tiene como finalidad impulsar la lectura hacia aquellas
regiones de habla hispana en las cuales son escasas o nulas las publicaciones, cabe
destacar que dicho documento fue elaborado sin fines de lucro, as que se le agradece
a todas las colaboradoras que aportaron su esfuerzo, dedicacin y admiracin para
con el libro original para sacar adelante este proyecto.
4
Sttefanye Lsgab38
Sttefanye
Cleta Julieta 9768
Basarab_Coutness
Isa_Peti
Vickyra
MaryJane
MaraD
Francatemartu
Maniarlb
Eneritz
Yayitaalen
Sarii
LadyPandora
Laumoon
Yanii
Gabymart
Angie
MaraD
MaryJane
Vericity Carmen15
5
A mi marido Alessandro,
quin hace una dcada le dediqu mi pera prima,
o bien la tesis sobre Backtesting de relativos Var.
Ahora, una novela de romance.
Amor, no abandones la esperanza.
6
Un caballero del pas ingls que galopa detrs
de un zorro: lo inefable en plena bsqueda
de lo incomible.
Oscar Wilde.
7
Dedicatoria------------------------------------------------------------------------------ 4
Dedicatoria 2---------------------------------------------------------------------------- 5
Sinopsis---------------------------------------------------------------------------------- 7
Captulo 1-------------------------------------------------------------------------------- 10
Captulo 2------------------------------------------------------------------------------- 16
Captulo 3------------------------------------------------------------------------------- 27
Captulo 4------------------------------------------------------------------------------- 33
Captulo 5------------------------------------------------------------------------------- 38
Captulo 6------------------------------------------------------------------------------- 52
Captulo 7------------------------------------------------------------------------------- 55
Captulo 8------------------------------------------------------------------------------- 59
Captulo 9------------------------------------------------------------------------------- 69
Captulo 10------------------------------------------------------------------------------ 83
Captulo 11------------------------------------------------------------------------------ 91
Captulo 12------------------------------------------------------------------------------ 96
Captulo 13------------------------------------------------------------------------------ 131
Captulo 14------------------------------------------------------------------------------ 109
Captulo 15------------------------------------------------------------------------------ 121
Captulo 16------------------------------------------------------------------------------ 126
Captulo 17------------------------------------------------------------------------------ 130
Captulo 18------------------------------------------------------------------------------ 134
Captulo 19------------------------------------------------------------------------------ 139
Captulo 20------------------------------------------------------------------------------ 144
8
Captulo 21------------------------------------------------------------------------------ 148
Captulo 22------------------------------------------------------------------------------ 165
Captulo 23------------------------------------------------------------------------------ 172
Captulo 24------------------------------------------------------------------------------ 181
Captulo 25------------------------------------------------------------------------------ 193
Captulo 26------------------------------------------------------------------------------ 199
Captulo 27------------------------------------------------------------------------------ 213
Captulo 28------------------------------------------------------------------------------ 218
Captulo 29------------------------------------------------------------------------------ 222
Captulo 30------------------------------------------------------------------------------ 227
Captulo 31------------------------------------------------------------------------------ 232
Eplogo----------------------------------------------------------------------------------- 237
Agradecimientos----------------------------------------------------------------------- 239
Acerca del autor------------------------------------------------------------------------ 240
9
s aquel odio esconde amor?
Y s ella probara cualquier cosa por aquel arrogante y
detestable compaero?
Y s aquel presuntuoso fuera otro?
Jennifer e Ian se conocen desde hace siete aos y los ltimos cinco se la
han pasado hacindose la guerra. A la cabeza de dos equipos en el mismo
banco de inversin londinense, est siempre el enfrentamiento abierto y
declarado entre ellos. Se detestan, no se soportan, y no hacen ms que
poner los palos entre las ruedas. Hasta que un da por casualidad son
forzados a trabajar en un mismo proyecto: Administrar los fondos de un
noble y rico cliente. Y as se encuentran teniendo que pasar mucho de su
tiempo juntos, incluso fuera del horario de oficina.
Pero Ian es el soltero ms encantador, rico y codiciado de Londres y sus
pretendientes nunca pasan desapercibidas. Slo una noche inocente
transcurrida en un restaurante, la hace aparecer en las pginas de chismes
de un conocido peridico britnico.
Ella est molesta: cmo pueden asociarla a un ostentoso, clasista y
engredo como Ian?
l est divertido, pero sobretodo sorprendido: unas fotos con su
compaera de trabajo han desalentado a todas sus agobiantes
pretendientes. Entonces l se lanza a una propuesta indecente: le dar
carta blanca con el adinerado cliente si ella acepta fingir ser su novia.
Pronto, sin embargo, aquello que a Jennifer le pareca una broma, se
complica ms de lo esperado y un beso que debera ser parte de la puesta
en escena, desencadena escalofros y reacciones completamente
inesperadas.
Y
10
o puedo hacer, lo puedo hacer, lo tengo que hacer!
Pero despus cometo un error: miro el reloj. Dios mo, no lo puedo hacer
Estoy corriendo como una loca por la calle de Londres porque es la primera vez,
en casi nueve aos de honrada carrera que estoy en un clamoroso retardo. Yo,
perfecta independiente y jefa del mejor equipo de asesores de impuestos fiscales de
todos los bancos, estoy retrasada el da de una presentacin importante. Apenas llego
delante de los torniquetes, y sin perder tiempo vaco todo el contenido de la cartera en
el suelo. Jadeo por la carrera y por los nervios, sin contar que tengo que encontrar
aquella condenada tarjeta de identificacin y debo apresurarme, sino de otro modo mi
cabeza rodar.
Me tiro en el suelo y busco desesperadamente entre los miles de objetos, hasta que no
recupere eso que me interesa. Sin esperar un instante ms, devuelvo todo o casi todo
a la cartera, pero eso poco importa. Tanto es as que el brillo de labios que est
rodando fuera no es nada especial.
Bien, aqu estoy, con un retraso de dos horas sobre la hora acordada!
Que escena tan divertida. Estoy en cmara indiscreta? pregunta una prfida y
profunda voz detrs de m.
Mi mano queda suspendida en el aire y aprieto la tarjeta de identificacin que estaba
por insertar en la mquina. No tengo ni que voltearme para saber a quin le pertenece
esa voz.
Bueno, ahora era oficial: no lo podr hacer
* * * *
Una parte de m est tentada en pasar la identificacin y continuar con mi camino sin
ni siquiera voltearme, pero eso podra parecer una fuga y el da en el que huya delante
de Ian St John ser el da en que se haya proclamado el fin del mundo. Y a pesar de
todas las maldiciones y profecas tan queridas de los mayas y las pelculas de
Hollywood, parece que an no nos llega ese destino.
Hago lo posible por entretener a mis compaeros le respondo apenas girndome.
L
11
Por el rabillo del ojo observo que su alta y amenazadora figura se acerca
peligrosamente. Paso con un movimiento rpido la tarjeta magntica y atravieso
corriendo el vestbulo. Despus presiono con furia el botn del ascensor delante de m.
Tengo mucha prisa en caso de que no lo hubiera entendido.
Nunca pens presenciar una escena similar me dice la voz que antes estaba detrs
de m y ahora en cambio est a mi lado, maldicin. Al parecer, estamos todava
parados delante de un ascensor que no termina por llegar. Tanta tecnologa para
despus encontrarse uno en este punto: no poder ni siquiera evitar a aquel colega con
el que no hubiera querido encontrarse nunca. Me pregunto, sin embargo, no han
inventado todava alguna app que eviten escenas de mierda como aquella que acabo
de hacer?
Incluso sin verlo, siento que me est mirando con evidente curiosidad. Si estuviera en
su lugar lo hara tambin.
Levanto un poco la mirada y quedo incinerada por los ojos ms azules que nunca
hayan sido creados. Bajo rpidamente la cabeza, molesta de tanto resplandor. Qu
desperdicio intil, dos ojos as de intensos sobre una criatura tan llena de s misma, tan
altanera y tan odiosa.
Pero al parecer la curiosidad es ms fuerte que yo, por lo tanto, mientras le lanzo un
ltimo vistazo, sin darme cuenta se me escapa una risita.
Sus cejas negrsimas se fruncen en un signo de desconfianza. Es una expresin que de
hecho lo he visto asumir muy a menudo. Incluso realizo ejercicios frente al espejo para
parecer en lo posible ms inquietante cuando nos enfrentamos. No es que logre en el
intento, estamos claros.
Soy feliz de hacerte sonrer en un da tan difcil para ti. No tenas una presentacin
digamos hace una hora, Jenny? me pregunta sabiendo como molestarme
Bastardo susurro entrando finalmente al ascensor.
Ups, cre que slo lo haba pensado, pero evidentemente no fue as.
Ian me sigue y se re.
Estar tambin en un dramtico retraso pero, t como que nunca entras a esta
hora? Un fiel deber que generalmente no pierdes oportunidad de hacer notar le digo
spera como una mora recogida muy prematuramente.
Un desayuno con una cliente dice con voz neutra, para nada molesto por mi
acusacin.
Por supuesto, Ian saca a todas las clientes. Se dice que incluso se desmayan delante de
l. Para ser sincera, es probable que se desmaye toda la poblacin femenina de este
edificio. Incluso aquel de al frente. Y ese de la va siguiente
Me da mucho gusto ser la nica que no lo hace.
12
Una mano aparece detrs de m y presiona el botn del quinto piso.
Puesto que ests tan retrasada, al menos podras pulsar el botn del ascensor
seala con sarcasmo.
La verdad es que me he distrado, maldita sea y esta maana no necesito de otro
problema ms.
La cabina comienza a subir con una leve sacudida.
Vamos Jenny pregunta otra vez. Dime qu cosa sucede. T nunca has llegado
retrasada
Y es as como al final me doy la vuelta hacia Ian, quien me mira como un cazador que
est a punto de dispararle a su presa. Un mechn rebelde de cabello negro cae
travieso sobre su frente. Lo aleja con un gesto bien estudiado de esos ojos tan
intensos. Si fuera una mujer imparcial, tendra que admitir que un contraste similar es
bastante notable, pero por suerte soy muy consciente cuando se trata de Ian, por lo
tanto puedo pasar de su aspecto fsico. Con la idolatra de mis compaeras, es ms
que suficiente.
Aclaremos una cosa le digo molesta. Primero que todo no es asunto tuyo por
qu he llegado tarde esta maana y segundo, no pretendas que te importa algo,
porque s muy bien que no te importa un comino.
Al principio mi frase parece no provocar ninguna reaccin. Pero entonces, en sus
labios bien esculpidos, se asoma una descarada sonrisa de burla.
Jenny, Jenny, como puedes pensar una cosa semejante de m me dice como si se
dirigiera a un nio pequeo mientras el ascensor se detiene en nuestro piso. Me volteo
para salir de esta trampa mortal, cuando oigo detrs de m un cambio en su voz. Ahora
se escucha ms bien aburrida. Con cierta satisfaccin me doy cuenta que me tom
cerca de dos minutos y medio hacerle perder los estribos. Impresionante, pero
siempre puedo mejorar.
Sin embargo, me concierne a m, puesto que me han llamado para calmar la ira de
Lord Beverly, que esperaba a su asesora fiscal exactamente hace una hora.
Y con esta frase se encamina rpidamente a la sala de reuniones. Me quedo pasmada
por un momento, luego inicio mi camino para alcanzarlo.
Pero cuando por fin logro alcanzarlo l se encuentra abriendo la puerta de la sala de
reuniones con decisin; por lo que no puedo hacer otra cosa ms que seguirlo adentro.
Delante de nosotros mientras tanto, haban preparado una especie de sala de t y la
escena sera realmente de cabaret, si no supiera que era la nica culpable de este
espectculo fuera del programa.
13
El temido Lord Beverly estaba en efecto bebiendo t, entretenido por nuestro jefe,
Colin, que se encontraba con el rostro rojo y claramente nervioso. Y Colin nunca se
pona nervioso.
Pero hoy haba una excusa ms que valida, porque se saba que todos siempre se
ponan nerviosos frente a Lord Beverly, un hombre de aspecto ostentoso y
amenazante. Que contaba con toda la presuncin que se podra esperar de un noble
ingls que piensa que todava vive en el siglo XVIII, junto con la arrogancia que
proviene de las montaas de dinero que posea.
Generalmente los nobles de hoy en da se haban jugado todo lo que posean por
generaciones y nosotros los simples mortales por lo menos podamos mirar cmo se
iban reduciendo. Pero Lord Beverly no, se crea superior por nacimiento y tambin por
dinero. Lo que su familia haba posedo desde siempre lo haba sabido invertir muy
bien gracias a unas minas en Nueva Zelanda.
Ian, muchacho mo le dice Beverly cortsmente y se levanta para saludarlo.
Por un momento sacudo la cabeza creyendo estar soando. Beverly corts? Qu
demonios le habr puesto Colin en su t?
Ian le aprieta con firmeza la mano y sonre naturalmente. S, natural, como no
Lord Beverly! Qu placer volverlo a ver! exclama Ian relajado. Claro, l no es el
que llega con retraso, por lo que puede permitrselo.
El placer es todo mo! Tu abuelo est bien? Desde hace tiempo que no lo veo por el
club, espero que est todo bien le informa educadamente Beverly, como si casi
fuera un ser humano como todos nosotros.
Colin y yo nos echamos una mirada preocupada. Y si nos vamos y los dejamos con
sus bromas aristcratas?
Pero justo cuando estoy por dar mi escapada, Lord Beverly se da cuenta de mi
presencia. Tena que ser ms rpida.
Ah, Seorita Percy ha llegado finalmente. Su contestacin me suena como a
condena de muerte. Su tono de voz cambi al instante y se torn tan fra como el Polo
Norte.
No s cmo disculparme con usted por el retraso. intento justificarme, pero me
interrumpe al instante con un gesto de la mano y una mirada dura. Alguien le debera
recordar que no soy su perro.
Y creo que est a punto de decirme algunas cosas, cuando Ian interviene.
Se ha tratado de un grave problema familiar, Lord Beverly. Espero que acepte la
disculpa de mi compaera.
14
Y Beverly, quien estaba por mandarme hace un segundo al mismsimo infierno antes,
se para y me observa fijamente. Se le puede ver en el rostro la lucha interna que est
teniendo. Es claro que mi problema no le interesa un pepino. En lugar de eso, le
importa ms congraciarse con St John. Eso s que es lo ms curioso, nunca me imagin
que Beverly tuviera necesidad de congraciarse con algn alma viviente en toda su
existencia.
Bueno, imagino que a todos le ocurren de vez en cuando problemas familiares.
termina por ceder. Se entiende que lo dice de mala gana, pero le toca.
Es chocante, y por un momento me quedo literalmente con la boca abierta. St John 1
vs. Beverly 0.
Una parte de m est casi decepcionada, pero la otra parte, la ms racional, est de
verdad ms tranquila. Vuelvo de nuevo a respirar. Y pensar que tampoco me di cuenta
de estar en apnea1.
Le agradezco por la compresin le digo teatralmente.
Encontrndonos en este punto Colin decide intervenir. Visto que hemos arreglado
todo, propongo que Lord Beverly confiara en su asesora fiscal. Por lo que Ian y yo los
dejamos trabajar en paz.
Y dicho esto, se encamina hacia la puerta. Sin embargo Lord Beverly parece tener
otras intenciones.
Colin, estaba pensando, qu me dices si tambin Ian estuviera presente en la
reunin?
Mi mandbula cede, mientras mi boca se abre. Ian en una reunin conmigo? Beverly
no se da cuenta de la cosa que est pidiendo.
Pero Colin recuerda demasiado bien los tiempos tormentosos en los cuales Ian y yo,
trabajando juntos, nos hemos enfrentado, y vuelto a enfrentar un sinfn de veces. El
pnico ahora le inunda el rostro tan blanco como el papel. Pobre hombre, esta
maana entr directo en el top ten de las personas ms perdedoras de su existencia.
Seor Beverly, creo que Ian tiene una cita... tartamudea Colin, tratando de salvar
la situacin.
Pero Beverly no es del tipo de dejarse intimidar por las citas ajenas, y al final termin
sentado en esta sala de reuniones hace una hora, intentando beber de a sorbitos el t
y comer galletas de mantequilla, y sabe bien que todo lo que pida ser concedido.
Tengo que insistir, Colin. se limita a decir, maldicin, sabe muy bien que eso es
todo lo que necesita para que se cumpla su orden.
1 Apnea: Se denomina apnea a una enfermedad del aparato respiratorio cuyo sntoma es la interrupcin
de la respiracin por, al menos, diez segundos.
15
Nuestro jefe asiente resignado. Crees poder estar libre, Ian? le pregunta.
Solo necesito alrededor de dos minutos para desocuparme de mis asuntos. Si me
disculpan, me retiro por un momento dice el hombre ms solicitado del da, y luego
desaparece.
* * * *
No. No lo puedo hacer.
En el momento en que saco los documentos de mi bolso, Ian ya ha regresado,
perfectamente a gusto, sonriendo y con una mirada determinada. Est disfrutando
esta maana, y todo es gracias a m.
ste es el da ms asqueroso de mi vida. Hasta ahora la primicia de la maana era para
el da en que fui operada de apendicitis y haba vomitado sin descanso cuando me
aplicaron la post-anestesia, pero hoy oh, hoy es definitivamente el peor da de
todos!
Mi enemigo nmero uno se encontraba sentado cmodamente en el elegante silln
de cuero negro junto al Lord Beverly, deseoso de escuchar mis brillantes planes para la
optimizacin fiscal de mi cliente.
Por un instante me siento catapultada atrs en el tiempo: nobleza contra plebeyos.
Lord Beverly, hijo de un Mrquez e Ian St John, nieto del duque de Revington, hijo de
un Mrquez, as como un sucesor del ttulo y por lo tanto conde de algo que
simplemente no recuerdo, me escudrian desde sus posiciones y esperan con una mal
disimulada impaciencia, saber qu demonios he maquinado.
Y entonces, viendo que soy y sigo siendo la mente ms brillante que este banco tiene
en activo, a pesar de la opinin contraria del conde de pacotilla, inicio mi genial
presentacin y les demuestro cuanto valgo.
16
stoy agotada y siento que la cabeza me va a explotar. El dolor me acompaa
desde el dramtico momento en que me despert esta maana y me di cuenta
que:
a) No haba escuchado el despertador dos horas antes.
b) Llegaba MUY tarde a una cita importante.
c) Me estaba recuperando de la primera resaca real de mi msera vida.
Siempre he sido una mujer fuerte, decidida, determinada, y nada ni nadie me ha
intimidado nunca, pero ayer por la tarde me he derrumbado miserablemente frente a
mi ensimo desastre amoroso. Y el golpe de gracia no haba sido tanto que me
hubiera dejado mi novio, sino el saber que no me importaba nada de l.
En el momento en que me dijo que no quera vivir conmigo, sent un gran alivio. Casi
se me escapa una sonrisa. Otra vez.
Esta era mi tercera relacin seria que termina antes de comenzar a vivir juntos, y ayer
al final comprend que la culpa no era de mis dbiles novios, sino solo ma. Yo soy la
razn de mis fracasos amorosos, y el motivo por el que me dejan, es que antes o
despus se dan cuenta de que no me importan, y que yo solo voy a lo mo, entonces se
van.
Yo en su lugar me ira incluso antes.
Este repentino conocimiento me haba dejado tan K.O ayer que Laura y Vera me
obligaron a salir. Habamos recorrido todos los pubs y comenzamos a beber como
esponjas.
Al menos tuvieron xito en su misin, porque lograron que me olvidara hasta de mi
misma. Me emborrach tanto que deje de pensar en mis aburridos novios y en mis
continuos fracasos. Por un momento logr no pensar en el motivo por el que los haba
elegido, incluso en el hecho de que eran hombres tan insignificantes que no habran
podido tocar mnimamente mi vida tan ocupada.
Detesto no tener el control de las cosas y de las relaciones, por lo que acabo siempre
eligiendo personas que no puedan de ninguna manera obstaculizar mis planes,
personas que me dejen guiarlas.
Qu lstima que el despertar sea un terrible regreso a la realidad. Y que fea realidad.
E
17
Me viene todo a la cabeza mientras desgrano datos e informacin frente a Lord
Beverly e Ian, dos idiotas patentados sin ninguna duda que creo que estn, por alguna
perversa razn, a m mismo nivel.
* * * *
Volviendo a mi ltimo novio, durante un pequeo periodo de tiempo haba llegado a
pensar que Charles era perfecto para m: profesor de filosofa en la Universidad,
increblemente serio y reflexivo, odia a los conservadores y suea con cambiar el
mundo. S, suea pero no acta, pero al menos suea con cosas justas.
Mi familia lo haba adorado enseguida y encontraron en l una afinidad que nunca
haban tenido conmigo. Soy un error gentico que todava no comprenden.
Este ltimo fracaso con Charles me obligaba en serio a trabajar en m misma. Tena
que encontrar a la persona adecuada. Una que me gustara a m y no a mi familia.
La llamada de Vera me aleja de mis divagaciones. Respondo el telfono enseguida
cuando reconozco su nmero.
Hola preciosa le digo sonriendo.
Ests viva! responde emocionada.
Ms o menos confieso.
Cmo va la famosa presentacin?
Oh, no podra ir mejor contesto con irona. Me he despertado dos horas tarde y
apenas he conseguido arrastrarme hasta el trabajo, despus descubro que mi cliente
adora rodearse de sus semejantes, y para terminar he tenido que fingir que estaba a
gusto mientras le enseaba todo no solo a l, sino tambin a su magnfico igual. Ian.
Oh, oh
Vera sabe todo acerca de la disputa que se ha prolongado durante aos entre Ian y yo,
ha pasado noches enteras escuchando mis lamentos y sabe casi todos los detalles de
nuestras clebres peleas.
Creo que se lo cuenta a todos los novatos para que tengan claro que no es bueno
acercarse a nosotros.
Ella est convencida de que el odio entre nosotros se debe a una especie de lucha de
clases. Yo sin embargo pienso que l es un cretino patentado y que la diferencia social
no tiene mucho que ver. El hecho de sea un noble no cambia la cosa, solo lo convierte
en un cretino orgulloso.
S, puedes decirlo fuerte. Solo, oh, oh
18
Tan terrible ha sido? me pregunta con miedo.
Cario, ha sido peor que terrible. Pero soy una mujer con suerte, por lo que me he
salvado. Tambin admito que Ian no ha interferido mucho y ha estado extraamente
callado.
Bien, no? pregunta Vera.
Pues no me convence. Si se tratara de alguien ms quiz. Pero Ian no es de fiar, lo
sabes. Tengo la impresin que hoy ha evitado apualarme solo porque tiene en mente
un plan ms diablico.
Vera se re. Ests paranoica, cario, te lo ha dicho alguien alguna vez?
S que lo estoy, soy una asesora fiscal, tengo que serlo a la fuerza!
Vera todava se est riendo cuando veo a Colin acercarse a mi puesto y hacerme seas
para que me rena con l.
Tengo que irme preciosa le digo a Vera. El gran jefe quiere verme. Cruza los
dedos por m.
Hecho!
Hasta luego.
* * * *
Me reno enseguida con Colin, que se encuentra parado frente a la mquina de caf.
Te has librado por un pelo hoy me dice el jefe. Pero su tono no es de reproche.
Lo s, Colin, no pienses que no s lo que he arriesgado. Ha sido un error, uno de esos
que no tengo la ms mnima intencin de volver a cometer.
Colin introduce dos monedas en la mquina, y luego pulsa rpidamente una fila de
botones, poco despus me da un caf hirviendo. Lo pruebo y est muy dulce.
Extra de azcar? le pregunto.
La necesitars me dice en tono misterioso.
Entonces ser mejor que me siente.
Eres una mujer fuerte, estoy seguro de que lo conseguirs incluso si es incmodo.
Y me guia el ojo.
Venga, Colin, sabes que consigo encajar las malas noticias le digo estoicamente.
Realmente, empiezo a intuir a dnde quiere ir a parar y no me gusta nada.
19
Y t, Jenny, sabes bien de que se trata o no tendras esa cara agria despus de beber
el caf ms dulce de tu vida.
Parece que tengo un jefe sabio.
S de qu se trata pero no quiero quitarte la incomodidad de tener que decrmelo.
Chica mala Entonces, si no ests dispuesta a facilitarme la tarea, quiero que sepas
que Lord Beverly insiste en que lo respalden t y Ian, juntos.
Ah No consigo decir otra cosa. Desgraciadamente haba acertado con las malas
vibraciones.
Es obvio que nuestro cliente no sabe de sus problemas, y sinceramente, despus de
hoy, preferira que no lo supiese nunca precisa.
Escucha Colin le digo seria. Soy una persona que asume sus responsabilidades.
Entiendo que he fallado y que debo pagarlo de alguna forma, pero esto esto es
mucho. Lord Beverly puede no saberlo, pero t sabes lo que sucedi y tambin sabes
cuales son los riesgos.
Colin gira nerviosamente su caf sin mirarme. Han pasado cuatro aos, Jenny,
esperaba que dos personas inteligentes y adultas pudiesen haber superado sus
diferencias en todo este tiempo.
Cierto, si Ian fuese ligeramente adulto o inteligente. Pero de momento creo que le
hacen falta ambas caractersticas.
Mientras lo digo mi cara es como la de un ngel, quizs uno irrespetuoso, pero
siempre un ngel.
Pero en los ojos de Colin se nota cierto nerviosismo. Jenny me reprende.
No dejo ni que termine la frase, se lo que va a decir. Tienes razn, he hecho algo
estpido hoy y debo asumir las consecuencias.
Colin intenta cambiar de tctica. Intenta verlo de esta forma. Ests pagando por un
error que t has cometido, pero Ian l se ha visto envuelto en esta situacin sin
quererlo. En este momento no creo que l est precisamente saltando de alegra.
Visto as, la situacin se vuelve ms interesante. En el fondo, quin soy yo para
negarle a Ian la alegra de tener que trabajar conmigo?
l ya lo sabe? pregunt cargada de nueva energa. Nunca hay que infravalorar el
efecto de hacer imposible la vida del otro.
Colin sonre resignado. Veo que algunos trucos siempre funcionan. Ustedes dos son
como nios, Jenny. me reprende con naturalidad.
Perdona, pero en vista de que soy dos aos mayor, el nio es l.
Cierto, esos famosos dos aos de diferencia
20
Esos fundamentales dos aos de diferencia le recuerdo muy seria.
La verdad es que hace cinco aos todo empez por una cuestin de edad, cuando
fundaron el primer equipo mixto de consulta fiscal, compuesto por economistas y
asesores, estuvieron obligados a una difcil e incmoda decisin. A quin pondran al
mando?
En ese entonces yo tena veintiocho aos, y una carrera increble sobre mis hombros, e
Ian tena veintisis aos y era una reciente adquisicin, aunque a su favor se contaban
ya cosas increbles. Decan que era un economista genial y brillante y que los clientes
hacan todo lo que salan de sus labios.
Bien, despus de haber barajado varios candidatos, el banco deba elegir a quien
nombrar responsable entre nosotros dos. Los dos esperbamos obtener tal
reconocimiento.
La decisin fue muy difcil, pero al final el consejo, viendo la incapacidad para elegir,
decidi premiar a la persona ms adulta. Necesitaban alguien con un mnimo de
madurez.
Dentro de m saba que aquel motivo era una excusa y que yo tena todas las
condiciones para el puesto. Ser responsable de un equipo nuevo no quiere decir ser
solamente el mejor, aunque sin duda lo soy, sino tambin saber guiar y alentar al
grupo. Para m Ian siempre ha sabido guiarse solamente a s mismo.
De cualquier manera l tom mal esa decisin. En un primer momento todos
pensamos que se despedira para irse a otro sitio, sin embargo adopt una estrategia
ms sutil. Decidi quedarse, pero desde ese momento sus das de trabajo tenan como
nico objetivo: meterme en problemas.
Los primeros meses su hostilidad fue disfrazada, para desembocar en una guerra real.
Nuestras reuniones de equipo se volvieron legendarias e interminables.
Si yo deca A l deca B. Yo blanco l negro. Y as con todo.
Despus de un ao de lucha la situacin se volvi insoportable, al principio intent ser
superior a las provocaciones y seguir mi camino, pero tras el ensimo desprecio, volvi
a desacreditarme frente a un cliente, y perd los estribos. Nos enfrentamos en su
oficina y le dej bien claro lo que pensaba y l me insult a ms no poder.
Termin fatal. Dej que toda la rabia que tena reprimida durante un ao de continuas
peleas saliese a flote y al final termin por darle un puetazo en toda la nariz. Al
parecer lo hice bien porque Ian acab con el tabique nasal roto y yo con una mano
lastimada toda una semana.
Antes de eso yo no haba daado ni a una mosca.
El episodio caus un gran revuelo, y para intentar salvar la situacin, la empresa
decidi sabiamente que no debamos trabajar juntos nunca ms. Se nos asign a cada
21
uno un equipo, y desde ese momento la guerra pas a ser solo profesional. Cada uno
de nuestros grupos obtena resultados extraordinarios intentando superar al otro,
aunque siempre en medio estaba conseguir el cetro del mejor. Por el momento
estbamos bloqueados en un constante empate.
Entonces, crees que conseguirn no asesinarse en cualquier reunin en las que
estn juntos? La voz de Colin me devolvi a la realidad.
Han pasado cinco aos, podemos intentar ser civilizados le respondo asombrada
de mi misma.
Colin se sorprende satisfactoriamente, la vena diplomtica nunca ha estado entre mis
mejores caracterstica. Por lo que vuelve a sonrer. Por lo menos hay alguien que
todava puede hacerlo.
Me has hecho muy feliz. De verdad, Jenny, no tienes ni idea
Pero s que lo s. S lo que significaba para l poder contar con personas dispuestas.
Admito que en los ltimos cinco aos no se ha visto muy a menudo un poco de sentido
comn entre estas paredes. Quiz por una vez pueda intentar hacer algo por l, ya que
siempre me ha defendido tras aquel famoso incidente, adems de haber salvado mi
puesto.
Al final, yo era la que lo haba golpeado, y tcnicamente era la mala ante los ojos de
los dems. Pero Colin saba que si haba reaccionado de aquella manera era porque Ian
haba sobrepasado los lmites.
Prefieres que hable yo con Ian? me pregunta el jefe.
En fin, tengo treinta y tres aos y no necesito un escudo. Estara bien, pero, por
desgracia, cada uno deba hacerse cargo de sus responsabilidades.
No, te lo agradezco. Yo hablar con Ian le digo resignada. Es mi asunto despus
de todo.
Colin me da una palmadita en la espalda. Suerte.
Algo me dice que la necesitar.
* * * *
La idea no me haba resultado tan mala cuando Colin me lo haba propuesto, pero una
vez que vuelvo a mi oficina me parece algo imposible. Y as acabo pegada a mi silla
toda la jornada.
Soy una cobarde, lo s y no es lo mo. El solo pensamiento es suficiente para
recomponerme del entumecimiento y enviarme a la accin.
22
La oficina est casi vaca y afuera esta oscuro. La hora de la cena ya haba pasado hace
tiempo. Gracias a Dios maana es sbado, as que los que pueden salen temprano
para disfrutar de su fin de semana fuera o para tener citas.
George, mi asistente, asoma la cabeza en mi oficina. Todava ests aqu? me
pregunta como si no pudiese ser verdad.
Eso parece
Me lanza una mirada rpida, en su gesto veo compasin.
Suerte me dice.
Y s a lo que se refiere. Probablemente toda la oficina ya lo saba.
Gracias, George. Ten un buen fin de semana. Divirtete le respondo.
Una parte de mi quera que Ian ya se hubiese ido, as podra pasar los prximos dos
das tranquila y esperar hasta el lunes para afrontarlo, pero hoy la suerte huye de m,
como polvo al viento.
Resoplo mientras me levanto de la silla y me encamino decidida a mandar al diablo
mis dos das de serenidad. La luz en la oficina de Ian es tan cegadora que es difcil
ignorarla, incluso encontrndose tan lejos al final del pasillo.
Nunca he sido capaz de acobardarme ante un desafo. Pero hoy por primera vez me
planteo esa posibilidad.
Mientras camino sigilosamente por el pasillo me doy cuenta de que Tamara, la
asistente de Ian sabiamente se ha esfumado, ni su enamoramiento por su jefe ha
conseguido retenerla en la oficina hasta las nueve un viernes.
No me entretengo ni me replanteo mi decisin mientras llamo a la puerta, ni siguiera
cuando la abro sin esperar respuesta. Era mejor pillarlo desprevenido, eso me daba
una ventaja psicolgica.
Y en efecto debo haberlo sorprendido, porque la mirada que me lanza es de verdadera
sorpresa. Dura solo un segundo, porque casi de inmediato pasa a la modalidad
circunspecta y letal. Los ojos antes cristalinos pasan en un instante a tornarse velados
y oscuros.
Curioso, hasta ahora no me haba dado nunca cuenta de cmo mi proximidad fsica lo
poda afectar. Hace un segundo tena frente a m a un hombre relajado, y ahora es un
enemigo preparado para atacar.
Ian se encontraba sentado cmodamente en una silla de cuero negro, la pantalla del
PC iluminando su rostro cauteloso. Mi mirada se posa en su cuello desabrochado y su
corbata floja. En las manos tiene un paquete voluminoso de documentos que coloca
sobre la mesa en cuanto se dio cuenta de mi presencia.
23
Me pregunto por qu llamas si no vas a esperar a que te conteste? pregunta en
voz alta.
Debo perder el tiempo esperando una respuesta? respondo sentndome en la
silla que se encontraba frente de l.
Ian curva una de las esquinas de sus labios en un amago de sonrisa.
Seguro que no debes, puedo entenderlo yo solo. Has llamado porque as me
muestras cierto respeto, pero en realidad no te importa, y no has esperado ni siguiera
mi respuesta para as tener la ventaja de la sorpresa, no es as?
Le sonro forzadamente. Claro que tiene razn.
Debo ser sincera, el cerebro de Ian siempre ha sido un problema. Normalmente
consigo superar a cualquier persona en ingenio, pero en su caso, su prfida
inteligencia llega a igualar la ma. Lo que es muy humillante.
Ian relaja la espalda y se deja caer en la silla.
A qu debo el honor? me pregunta observndome con esos ojos azulsimos.
Ahora que estoy aqu no s ni por dnde empezar. En mi mente haba construido toda
una exposicin lgica, pero ahora tengo como un lapso de memoria.
Ests aqu para agradecerme? me pregunta irnicamente como una serpiente.
Agradecerte? le pregunto extraada. Y por qu?
El tono de mi voz se volvi ms alta de repente.
Ian me sonre. Por lo de esta maana, por haber salvado tu culo con Beverly me
intenta hacer entender.
Le interrumpo al instante. Realmente me he salvado sola con Beverly.
Claro, pero solo porque mi presencia le ha tranquilizado y dulcificado. Y as has
podido salvarte tu sola puntualiza.
Una parte de mi sabe que tiene razn, pero me ha liado tantas veces que ni siquiera un
millar de otra acciones como las de hoy bastaran para empatarnos.
Que quede claro, me habra salido con la ma sin tu petulante presencia, Ian.
l me lanza una mirada dudosa. Eso es cuestionable, cario. El modo en que lo
dice me provoca un escalofro.
Por un instante no hacemos ms que mirarnos, ninguno quiere retirar la mirada
primero. Al final es Ian el que pone fin a la lucha. Quisiera quedarme aqu toda la
noche pero, por desgracia, dentro de diez minutos debo dejar la oficina para ir a una
cita, as que te ruego que me digas cual es el asunto que quieres decirme me dice
repentinamente con voz fra. Ya ha terminado con las bromas.
24
El asunto es Beverly comienzo indecisa. Quiere que trabajemos juntos en su
caso.
Claro que quiere remarca Ian como si fuese algo normal. Ha escuchado que
somos las dos mentes ms brillantes sobre el tema y quiere la contribucin de los dos.
Lo entiendo. Trabajars en tu proyecto y una vez acabado me lo dars para que pueda
sugerirte algunas mejoras dice tranquilamente.
Y es extrao, porque en general Ian es todo menos un hombre comprensivo. Intenso
en el peor sentido de la palabra, por supuesto.
Entiendo que la fulana que llevas a cenar esta noche te est derritiendo el cerebro,
pero intenta mantenerte concentrado un minuto ms le digo secamente.
Mi frase surte efecto porque en un instante despus salta de la silla, se agarra al borde
del escritorio y se acerca peligrosamente a mi rostro.
Una fulana? repite enfadado. En sus ojos veo relmpagos azules.
Y eso me hace sonrer. Siempre lo son. O has cambiado de gnero recientemente?
pregunto con una expresin de perfecta inocencia.
Ian me coge del rostro, y esforzndose en no aplastrmelo, me dice: Dios como
quisiera hacerte callar de una vez por todas esa bocaza. Sera la satisfaccin ms
grande de mi vida.
En sus ojos veo una rabia difcil de controlar. Debo de haberle hecho perder la
paciencia de verdad. Bien.
Con un movimiento decidido consigo apartarme y echndome hacia atrs restablezco
una distancia de seguridad entre los dos. Ya le he roto la nariz una vez, no quisiera
tener que repetirlo.
Primer punto, Beverly quiere que trabajemos juntos en su dosier, y nosotros dos,
grandes profesionales y personas adultas, lo haremos le explico. Segundo punto,
nada de equipos, seremos solo nosotros dos en este trabajo, ya somos lo bastante
problemticos sin tener que incluir a nadie ms en esta lucha aado.
Su expresin es una mezcla de irritacin y comprensin. Ya est intuyendo a donde
quiero llegar.
Tercer punto, cuando nos tiremos de los pelos, en el sentido figurado de la palabra,
lo haremos lejos de esta oficina. Para todos los dems estaremos siempre de acuerdo
mientras dure el encargo. Nuestras inevitables luchas sucedern fuera de este edificio.
concluy.
En otras palabras, no quieres testigos me responde Ian sin inmutarse.
Claro que no, como no los quieres t. La ltima vez nuestra lucha casi termin con
nuestras carreras, esta vez no quiero nada parecido.
25
Y porque yo me he arreglado la nariz dice enfadado.
Y no quisiera nunca arruinar lo que tu cirujano plstico ha reconstruido tan bien
aado sarcstica.
S que Ian no se ha operado la nariz despus del puetazo, pero insinuarlo siempre me
ha dado cierta satisfaccin, tambin porque es particularmente sensible al tema. Su
obsesin por la apariencia es bien conocida por todos, pero tambin lo es su terror por
los hospitales y las operaciones.
Hubieses querido que el cirujano me la tuviera que reconstruir me dice enfadado.
Lo juro, ests ms obsesionado que una mujer con la forma de tu nariz. Yo tengo
una nariz fea y estoy estupendamente le digo sintindome superior.
No tienes una nariz fea me dice convincente. Tienes una nariz normal que
encaja perfectamente con tu rostro.
La frase me deja asombrada. Ian habla bien de mi nariz? Pero qu extrao giro ha
tomado esta conversacin?
Claro que, si queremos hablar de tu cabello, entonces tendra unas cuantas
observaciones que hacer se apura a aadir.
Ah, aqu estn las crticas que son las que mejor entiendo. De todos modos, para los
que quieran saber, tengo un cabello normal, de un castao muy normal, de una
longitud media extremadamente comn. No hay mucho para criticar.
Entonces, trato hecho? le digo ignorando su comentario y levantndome, luego
le tiendo la mano. La profesionalidad ante todo.
Tengo alternativa? pregunta resignado.
Claro que no le respondo amablemente.
Ian suspira. Entonces, trato hecho me dice. Mira con duda mi mano, tanto que casi
me inclino a pensar que no la apretar, cuando hace todo lo contrario y se decide, la
aprieta. De forma segura, y sin espacio a la indecisin.
Alzo los ojos y me encuentro con su mirada. Claramente un error, sus llameantes ojos
azules me aprisionan y se niegan a dejarme ir. Entiendo por qu tiene a todo Londres a
sus pies; en serio, puedo ser objetiva y ver al hombre objetivamente, irritablemente
guapo. En los peridicos sensacionalistas escriben a menudo sobre l, un noble, futuro
duque, heredero principal de un imperio de incalculable valor, con una presencia fsica
que no pasa inadvertida. Es fcil hablar de l y de la lista de mujeres con quien se
fotografa. Todas son modelos o relacionistas pblicas pseudo-trabajadoras, que
fingen trabajar esperando cazar a algn hombre rico. En realidad, todas juntas no
renen el coeficiente de una persona de inteligencia media, pero eso no importa. A Ian
le basta con que le idolatren, con eso no pide ms.
26
Libero mi mano como si me hubiese quemado y aparto la mirada. Era mejor volver a la
realidad. Entonces, que lo pases bien esta noche y buen fin de semana le digo
magnnima, segura de mi superioridad.
l levanta su ceja con gesto irnico. Y mis buenas intenciones de enterrar el hacha se
derriten como la nieve al sol. Me dirijo a la salida y le digo: Vamos, muvete, sabes
que las fulanas no esperan. Nunca hagas a una esperar.
Y para acabar le guio un ojo mientras mi figura desaparece en la oscuridad del
pasillo.
Vuelvo a mi oficina y por primera vez, desde que he abierto los ojos esta maana,
tengo ganas de sonrer. Gracias Ian, gracias de corazn.
27
umento la velocidad mientras mi auto hace ruidos en el camino a travs de los
campos a las afueras de Londres. Estoy en el campo, cerca de la finca de mis
padres.
Aqu todo es orgnico, todo lo que es polticamente correcto.
Mis padres son criaturas extraas, por lo menos para una persona como yo.
Son ingleses, pero anti-monrquicos, vegetarianos, veganos para ser ms precisos,
antirreligiosos, o al menos estn lo ms cerca al budismo que a cualquier otra religin,
no estn casados pero en realidad son una pareja, y apoyan a todas las organizaciones
no gubernamentales que puedan existir. Han dado a luz a tres hijos: Michael, mi
hermano mdico quien trabaja para Amnista Internacional y otros grupos que ayudan
a los refugiados en todo el mundo, y mi hermana Stacey, quien en cambio, es una
abogada que ofreca asistencia jurdica gratuita a quienes no podan pagar los
servicios de un abogado.
As que es fcil entender por qu me siento como un pez fuera del agua dentro de mi
familia. Yo soy una asesora especializada en impuestos! Ante sus ojos ayudo a los
ricos a hacerse ms ricos y por lo tanto automticamente soy la encarnacin de las
malas compaas, casi una especie de satans con falda.
Pero tambin soy su pequea y por ello se esfuerzan por tolerarme. Si yo hubiera sido
la primognita, sin duda hubiera sido repudiada con el paso del tiempo. Sin mencionar
que cuando Charles entr a formar parte de mi vida, mi familia me vio con ojos ms
magnnimos.
Pero ahora sin l, sin duda regresar al final de la clasificacin familiar.
* * * *
Cuando apenas estaciono en el camino de entrada, me saludan como es ya habitual,
un grupo de gansos que me atacan tratando de morderme la mano.
Los gansos son felices si son libres, eso es lo que dice siempre mi madre. No tiendo a
compartir su opinin, pero todava no he encontrado el valor para decrselo.
A
28
Entonces por qu mis padres cran gansos sino es para comerlos? Sinceramente eso
se escapa a mi entendimiento. Los gansos son traicioneros, todo el mundo lo sabe. Y
mis padres estn criando gansos dictatoriales y malos.
Como ya es costumbre, camino con paso firme hacia la puerta de entrada,
arriesgndome ante una manada de perros y gatos dormitando bajo el alfizar.
Despus de aos de prctica constante, he adquirido una considerable habilidad en
esto y por lo tanto en unos pocos segundos estoy segura en el interior de la casa. El
ganso asesino, que se haba dirigido a m desde el principio, revolotea fuera de la
puerta. Qu satisfaccin
Mam, estoy aqu! grito para hacerme or.
Estoy en la cocina me responde la voz persuasiva de mi madre.
Y efectivamente all est, con la intencin de hacer una especie de sopa de un olor un
tanto inusual. Nunca le pregunten que pone en el plato, podras morir del susto.
Aqu estoy Jenny, estbamos preocupadas, llegas una hora tarde me seala
inmediatamente mi madre, que viste hoy un llamativo vestido amarillo.
Probablemente una especie de saludo al sol, ya que el color causa cegamiento.
No llego tarde. Les haba avisado que iba a llegar a la una en punto, y aqu estoy,
puntual como un reloj suizo.
Slo entre nosotros, tiendo a llegar una fraccin de segundo antes cuando se trata de
mi familia. Nunca un minuto antes, sino me arriesgara a una avalancha de preguntas
incmodas.
Djame verte, querida. Todava tienes la cara tan gris. Qu diablos comes? No
estars consumiendo carne? pregunta mi madre, visiblemente conmocionada ante
la sola idea.
Bien, habiendo sido criada por dos vegetarianos, estaba ms que claro que no coma
carne, aunque de vez en cuando comerse un pescado o incluso un huevo, no estaba
nada mal. Pero nunca tendra el valor para decirle eso a mi madre, podra incluso
matarla si se entera que soy vegetariana laxista y no vegana integrista.
No, mam le digo. Nada de carne, es solo el estrs.
Por su expresin comprendo que he elegido las palabras equivocadas. Bueno,
francamente es lo que te mereces por elegir el trabajo que tienes. En realidad,
Jennifer, qu fue lo que te paso por la cabeza cuando elegiste ser asesora fiscal, y
trabajar para un banco de inversiones? Entonces... te das cuenta? Ellos son la causa
del colapso de nuestro sistema financiero y econmico! me repite por ensima vez.
He escuchado esta historia tantas veces que incluso puedo anticipar palabra por
palabras lo que va a reprocharme, con la diferencia de algunos cuantos errores
mnimo.
29
Pens que estaban contentos con el colapso en curso le sealo.
Mi madre se queda con la cuchara suspendida en el aire y se vuelve para mirarme.
Por supuesto que estoy feliz! Al fin, los otros se estn dando cuenta de lo que tu
padre y yo hemos estado repitiendo desde hace cuarenta aos. Los ojos le brillan
mientras dice esas palabras, lo que la hace parecer mucho ms joven.
Entonces debes estarlo an ms, sabiendo que estoy contribuyendo a derrocar el
sistema. De una manera o de otra agrego casi sonriendo.
Soy astuta, y mi madre lo sabe. As que se vuelve resignada hacia lo que estaba
preparando en la olla.
Y Charles, porque no ha venido contigo? me pregunta, mientras sigue mezclando
la sopa. Santo cielos, realmente estaba esperando que no preguntaran, al menos no
tan pronto. Pens que las recriminaciones sobre mi trabajo me ayudaran a ganar unos
minutos de ms.
S, Jenny, dnde est Charles? pregunta mi hermano que aparece como por arte
de magia a mi lado.
Hmm murmure. Y a partir de ese breve sonido apenas pronunciado mi madre
explota.
Oh, Dios mo, te ha dejado.
B-bueno...
Michael sintiendo mi incertidumbre trata de echarme una mano. Mam, no seas tan
dramtica, tal vez Charles tendra algn compromiso hoy, verdad?
l sabe que nos separamos, no es ningn tonto, pero al parecer, este no es un buen da
para una noticia como esta. Mi madre, por lo general tan tranquila, se ha convertido
en una furia ante la sola idea. As que por el momento era mejor omitir la noticia.
Por supuesto, est en una conferencia contesto con conviccin. Ya tena muchos
aos de prctica detrs.
Es una lstima. Eso significa que vas a llevarte una bolsa con los restos de la comida.
Sabes cmo adora mi cocina?
Admito que me casara con l slo por eso. Me parece que nunca encontrar a un
hombre que realmente pueda apreciar la cocina de mi madre. Pero a Charles
realmente le encantaba, y no era tanto una cuestin de gustos, sino que de acuerdo
con su punto de vista filosfico, si los ingredientes son ticos y lgicos tambin lo es el
resultado, independiente del sabor.
Aunque el sabor es muy, muy cuestionable. Y lo digo con todo el amor de hija.
Vamos, ya est listo nos anima poco despus mi madre.
30
Y la seguimos cuando se encamina para llegar al amplio comedor para el almuerzo.
Amplio por encontrarse extremadamente desnudo, como dicen las nuevas reglas del
feng shui.
Alrededor de la mesa de madera natural (sin materiales frvolos) mi padre se
encuentra absorto hablando con Tom, el esposo de mi hermana Stacey. Ellos tambin
tienen una granja completamente orgnica a pocos kilmetros de aqu. Sus dos hijos,
Jeremy y Annette, se persiguen uno al otro alrededor de la mesa.
Mi hermana se encuentra conversando con la novia de Michael, Hannah. Ella es una
mdica alemana. Se conocieron hace unos aos en un campo de refugiados, desde
entonces se aman locamente. La boda debera estar casi lista, si no fuera porque los
compromisos de trabajo no se lo permiten.
De hecho, llevan ms de un ao tratando de casarse, pero las continuas guerras, de la
que la humanidad parece incapaz de prescindir, lo hacen estar muy ocupados. Tengo
la impresin de que si siguen esperando un momento de serenidad mundial, acabaran
por no casarse nunca, pero despus de todo, por qu estropear los sueos de los
dems?
Estos pueblos en guerra estaban unidos por ideales y creencias comunes, son
personas que poseen una apasionada conviccin. Y con eso realmente no tengo nada
que hacer, nada.
La verdad es que crec tan sensibilizada con todas las atrocidades en el mundo, que
tuve que construir un muro para mi propia defensa personal. As que decid hacer algo
totalmente contrario a las creencias de mis padres, algo que para ellos es frvolo y
tonto, pero que para m me permiti poner distancia entre ellos y yo. Realmente
descubr como era, despus de haber cortado de alguna manera mis lazos con ellos.
Siempre sent la necesidad de existir como una entidad separada, y no como parte de
un espacio comn en el que todos se vieran obligados a compartir las mismas ideas.
Y siendo una de las mejores estudiantes de Oxford me permiti consolidar aquella
separacin que luego me ayudara ir a Londres, y reinventarme.
No es que por el momento no tuviera xito, al menos humanamente hablando. Mi
carrera era lo nico que me mantena a flote, aunque era algo que no me gustaba
admitir.
Hola Jenny salud mi padre. No vino hoy Charles? Afortunadamente su tono
de voz es amable y no spero como el de mi madre hace unos pocos minutos atrs.
No, compromisos universitarios ment de nuevo con habilidad
Entonces es justificado dice con voz solemne. Slo para que quede claro: yo no lo
estoy nunca, si tengo que trabajar durante el fin de semana, y por lo tanto no paso a
saludarlos.
31
Entonces, que es lo que ha pasado recientemente en la ciudad? me pregunta
Tom.
Yo dira que nada interesante. Todo sigue igual contesto mientras me siento
alrededor de la mesa.
No estarn ustedes a punto de fracasar como aquellos de Lehman? pregunta
preocupado Stacey.
Toco madera debajo de la mesa. No, yo dira que por el momento no estamos
fallando.
Es mucho ms probable que Inglaterra fracase en lugar de otro gran banco, me digo a m
misma, pero es intil perforar sus mentes con escenarios similares.
Sabes, en la peluquera, el otro da le un artculo acerca de un noble que trabaja en
tu mismo banco dijo Hannah. Quien se le permita leer las columnas de chismes de
vez en cuando porque es alemana.
Estoy masticando un pedazo de pan de centeno que de repente se detiene a mitad de
camino. Me siento perseguida, incluso hablan de l en el nico rincn de Inglaterra
donde tena la esperanza de que pasara inadvertido.
Cul es su nombre? Es un hombre muy guapo, lo habrs notado me dice Hannah
ignorante de mi incomodidad.
Todo el mundo se detuvo para mirarme fijamente en suspenso.
Ian St John, el Conde de Langley digo en voz baja carraspeando.
Exacto! exclama Hannah satisfecha. Lo conoces?
Por un momento estuve tentada a decirle a mi futura cuada que le romp la nariz al
hermoso Conde de Langley, pero esto poda generar demasiado entusiasmo en mi
familia normalmente pacifista. Por lo que era mejor permanecer en silencio ante este
detalle.
Lo vi de pasada respond llanamente.
Aun as, quin realmente puede pretender conocer a Ian St. John? Creo que nadie.
An no era claro lo que estaba haciendo en un gran banco de inversiones americano,
cuando su familia posea un nmero indefinido de empresas por todo el mundo. En la
prensa se haba hablado de algunas disputas familiares que lo haban obligado a
rechazar todas las posiciones ofrecidas a l por su abuelo. Ciertamente, trabajar como
empleado, aunque pagado generosamente, no puede compararse con administrar
una enorme fortuna familiar.
La verdad es que muy bien podra no hacer nada como la mayora de sus iguales;
mientras que en cambio se pasa altas horas en la oficina. Casi tanto como yo. Lo que
contribua a hacerlo an ms odioso.
32
Pronto la conversacin en la mesa gira a temas ms seguros como el cambio gradual
de la energa nuclear a energa solar y elica que tendr que efectuar Japn, pasando a
la nueva poltica social inglesa y cosas similares.
Despus de unas horas estaba de vuelta en el coche, y a mi lado un paquete
cuidadosamente envuelto con la peor sopa de la historia.
Quin sabe por qu, pero esa visin me pudo dar el mpetu necesario para volver a
casa.
33
stoy en casa grito decidida mientras cruzo el umbral de mi
apartamento. Tres habitaciones preciosas ms cocina y sala, que
comparto con Vera y Laura, en una zona a las afueras de la ruidosa
ciudad. En los ltimos aos mi sueldo se ha elevado considerablemente y podra vivir
en una zona ms cntrica y segura, pero mis amigas no se lo pueden permitir, as que
hace aos decid quedarme con ellas hasta irme a una eventual convivencia o
matrimonio. No hay duda que me quedar aqu para siempre.
Hola Jenny me saluda Vera, tirada sobre el sof del saln intentando leer un libro.
Vera siempre lee un libro, mientras cocina, mientras limpia o mientras hace la compra.
Trabaja en una biblioteca y decidi inconscientemente leer todo lo que est escrito.
As que no pierde el tiempo. Nunca.
Hola, algo interesante? le pregunto agachndome en el sof delante de ella.
Asiente sin apartar la mirada de la pgina.
Todo bien con tu familia?
Como siempre digo dejando las sobras sobre la mesa.
Que hay en ese paquete? pregunta curiosa.
No s cmo lo ha visto sin haber levantado los ojos del libro. Evidentemente tiene
capacidades extrasensoriales. Me ri antes de decir: Minestrone de mi madre para
Charles. Esto le hace dejar el libro sobre la mesa instantneamente. Me lanza una
mirada preocupada con sus preciosos ojos verdes.
Bromeas, no?
Ojal le respondo resignada.
Entonces tus padres no lo saben
Hoy no era el da, adems estaba demasiado cansada para enfrentarme a ellos
intento justificarme.
Necesitas unas vacaciones me dice Vera injustamente. Necesitas mandar al
diablo a todos y todo por una semana. Puede que ir a cualquier sitio extico que te
ayude, que tal las Mauricio o las Seychelles.
E
34
Sabes que si me fuera tendra que decirles a mis padres que he estado en
Afganistn para ayudar a los necesitados?
Vera me mira resignada. Te das cuenta que, en comparacin con tu familia, la ma
parece casi normal?
Y escuchar eso de una persona cuya madre se ha casado cinco veces y su padre ha
tenido tres hijos con distintas mujeres, resulta bastante significativo.
De todas formas se lo dir. No quiero mentir para siempre. Solo debo superar esta
tensin en el trabajo y volver a la normalidad le respondo cansada.
Siento por lo que ests pasando me consuela mi amiga.
Lo s, y estoy muy agradecida a ti y a Laura por ser mi apoyo moral. De verdad, sin
ustedes dos las prximas semanas seran inaguantables hasta para una mujer dura
como yo.
Por qu? Qu pasa? me pregunta preocupada.
Trabajar en un equipo maravilloso le digo fingiendo alegra. Pero ella no se lo
traga.
Con quin? me pregunta con desconfianza. Mi expresin basta para hacerla salir
de las dudas. Oh Dios, no con
Deja la frase sin terminar para obtener un efecto ms teatral.
Claro que s. Seorita Percy, tenemos una gran oportunidad: usted y el conde de
Langley son perfectos para esta misin suicida. Al final la hago rer, no creo que me
quede de otra.
Oh, cielos! Lo siento tanto, Jenny dice seria.
Vera, no te preocupes por m. S defenderme, en serio.
Ella lo piensa un segundo y despus re sin parar. S, pero quin defender a la
nobleza inglesa de ti? pregunta irnica.
Por favor, no me digas que ahora tenemos que tratarlos como una especie en va de
extincin le digo preocupada.
Sabes que esta vez no puedes romperle la nariz aunque se lo merezca? me
recuerda Vera. Y no lo digo por su nariz, que no me importa mucho, lo digo por tu
carrera.
Lo s, lo s le aseguro. De todas formas, no debera haberle roto la nariz la
primera vez. Y yo tampoco lo digo por su nariz, solo por la no violencia. Gandhi no
estara muy orgulloso de m. Y tampoco mi madre. Aos y aos de no violencia y que
es la primera cosa que hago en un momento de dificultad? respondo con un
puetazo? Qu banal
35
Bueno, no es un hombre cualquiera me hace ver mi amiga.
El problema es que tiene razn, en el fondo s que Ian es la nica persona que me hace
perder los modales. Y para una persona racional como yo no es una gran satisfaccin
admitirlo.
No, realmente no es uno cualquiera. Es mi nmesis en la vida, parece ser admito
suspirando.
Ms que nada, tu anttesis me hace notar.
Cario, quisiera enserio que lo fuese, pero soy lo suficientemente realista para
entender que es mi nmesis y no mi anttesis. Porque en nuestras diferencias
extremas, en realidad sus caractersticas son como las mas. Y por eso me hace perder
la paciencia, porque razona de una forma similar a la ma y logra tocar los botones
justos.
Vera est afectada por mi anlisis. Preciosa, deberas ser psicloga.
Pensaba que lo sabas, los asesores son de hecho psiclogos. Deberan darnos un
ttulo honorario.
Ella me tira un cojn, mientras continua riendo. Eres asesora fiscal, no un juez de
paz!
Es por eso que conozco la vida, muerte y milagros de mis clientes.
En ese momento entra Laura en escena. Tiene una cara larga.
Qu pasa? le preguntamos ambas a la vez.
He roto con David responde entre seria y desesperada.
Para que entiendan, Laura rompe con David una vez a la semana y siempre es un
drama.
Por qu? le pregunto.
Porque es un idiota, no se quiere comprometer! No se quiere casar tras siete aos
de relaciones! Siete aos, os dais cuenta? nos dice y se tira en el sof al lado de
Vera.
Para ser sinceras, lo sabemos muy bien, porque David lleva siete aos repitindole a
Laura que no se quiere casar y que no es un tipo de casarse, pero s de vivir juntos. Y
aqu est el problema: David quieren que vivan juntos mientras que Laura no quiere
hacerlo si no es con un vestido blanco. Parece que son dos posiciones irreconciliables.
Sin embargo a pesar de todo eso se quieren de veras mucho y por lo tanto, despus de
algunos das hacen las paces. Para volver a pelear enseguida despus. Y as vuelve a
empezar todo de nuevo.
Y si en vez de casarte pruebas primero a vivir con l? me atrevo a preguntar.
36
Ella me fulmina con la mirada.
Nunca me dice. Tengo valores y convicciones y nunca en la vida lo har, o tengo
una boda como Dios manda o no tendr nada.
Quisiera decirle que vivir juntos es distinto que nada, que es como un matrimonio en
todos los aspectos y que mis padres conviven felizmente desde hace cuarenta aos
as, pero s que sera intil. Cuando est enfadada es mejor dejarlo pasar hasta que se
calme.
Se crea un silencio incomodo en la habitacin hasta que Vera exclama: S lo que
necesitamos ahora mismo las tres! Laura y yo la miramos consternadas. Un
nuevo corte de cabello! dice convincente.
Vera ha cambiado tantas veces el color de su cabello como para haber batido un
record. Es una experta en tintes, solo saben ms que ella los peluqueros profesionales.
Quiz por una vez tenga razn.
Me apunt le digo. Creo que necesit un cambio radical en mi vida.
Intento alejar de mi cabeza esa molesta voz que me sugiere que intento cambiar
porque cierta persona me lo sugiri. Est claro que es ridculo, si quiero hacer algo con
mi cabello es porque quiero, no porque lo haya dicho Ian.
De repente Laura tambin parece estar interesada. Siempre he credo que Jenny
sera una perfecta rubia.
Rubia yo? le digo en shock.
Vera se muestra de acuerdo. Absolutamente, un rubio con mechas de sol evidentes
y muy claras.
Pero, se han vuelto locas?
Vera ya se ha levantado del sof y esta yendo al bao. Creo que tengo todo lo
necesario nos dice al minuto siguiente.
Adelante, empecemos!
Chicas, pero estn bien? Rubia? Y, no es por poner en duda tus habilidades Vera,
pero me vas a hacer las mechas? le pregunto preocupada.
Por un momento Vera pone una expresin ofendida y cruza los brazos sobre el pecho
retndome. Despus ve mis ojos aterrados. Necesitas un cambio drstico, por qu
no hacerlo? Y sabes perfectamente que soy buena y que no tienes que preocuparte
por nada.
No dudo de sus capacidades, solo del efecto final bueno, para ser honesta, tambin
tengo algo de miedo de lo primero.
37
Venga, sintate en esta preciosa silla y cierra los ojos. Si quieres cirralos hasta el
final. Mi asistente Laura y yo lo haremos todo.
Y es as, como al final me dejo convencer, y por primera vez en mi vida me tio el pelo.
38
s lunes, son las siete y media de la maana y en la oficina no hay casi un alma.
Menos mal, me digo a m misma serena cuando salgo del ascensor y escudrio
el horizonte.
Dira que mi enemigo no ha llegado todava, tambin porque, efectivamente, la hora
es poco apta para cualquier lunes por la maana. Pero para m no es un lunes como
cualquier otro. Hoy es el lunes que marca el principio de mi colaboracin con Ian. Qu
pensamiento tan molesto!
Tamara aparece de repente delante de m cuando estoy a punto de entrar a mi oficina.
Hola Jennifer me saluda afable.
Ella siempre es agradable y amable con todo el mundo, es as por naturaleza. Lstima
que su jefe sea un hijo de puta de primer orden. Espero que al menos le sirva para
fortalecerle un poco el carcter.
Hola Tamara le respondo corts, pero luego me doy cuenta de que est como
petrificada frente a mi puerta y me mira con la boca abierta, en el rostro se le puede
ver plasmado el asombr ms completo.
Es algo malo? le pregunto inocentemente. S bien por qu me est mirando tan
absorta.
Nada dice distrada y me sigue escudriando. Es porque ests tan... tan
diferente... se aventura a decir finalmente.
Puedes decir eso otra vez le respondo sonriendo.
Estoy completamente diferente, lo que realmente me gusta. Vera es un genio.
Tengo una cabeza rubia, mi cabello es ligeramente ondulado y suelto. Me olvid de la
cola de caballo que he llevado los ltimos veinte aos de mi vida.
Por no hablar de que llevaba un traje negro con una falda de raja audaz y tacones
altos. Siempre he sido una mujer de los mil pantalones y zapatos bajos.
Has cambiado, t sabes... mucho... dice. Pero ests muy bien se apresura a
decir.
Te lo agradezco. S que tiene razn.
El cambio esttico en teora debera tambin ser un cambio interior. Esperemos que
sea verdad. Esperemos haber cerrado las fallas y lo de presa fcil.
E
39
Unos segundos ms tarde llega tambin George, que no hace nada por ocultar su
apreciacin.
Qu demonios te ha pasado? pregunta. No es que no me guste, pero es un
cambio bastante drstico.
Romp con Charles me limito a contestar. No conseguir nada dando tantas
vueltas al asunto.
l asiente con la cabeza. Eso es algo, por lo que puedo estar feliz. Realmente Jenny,
dnde consigues a un profesor de filosofa hoy en da? bromea.
Tengo que admitir que tiene razn y sonro ante su pregunta. Qu quieres que te
diga, tengo un don especial.
Deberas elegir la prxima vez a alguien con espina dorsal. No tanto como la tuya,
porque sera imposible, pero al menos la mitad me sugiere con las mejores
intenciones.
A decir verdad, por ahora nada de citas. Quiero aprovechar para respirar y
concentrarme en mi trabajo. El caso Beverly me mantendr bastante ocupada por las
prximas semanas.
Incluso Ian ha incluido su nombre en la agenda dice Tamara perpleja.
Lo s confirmo como si la cosa me fuera totalmente indiferente. Y cielos,
realmente me gustara que lo fuera, porque realmente me molesta a muerte. Ese
hombre me provocara ulceras antes de los cuarenta. Es un caso que vamos a seguir
juntos, como solicit especficamente el cliente le explico a los dos.
Y ambos abren la boca como si fueran peces fuera del agua.
Ustedes dos van a trabajar juntos realmente? pregunta George. Quiero decir...
haba odo algo al respecto el viernes pasado, pero pens que ustedes habran
encontrado una manera de evitarlo.
S, esa era la idea inicial, pero muy difcil de lograr admito.
George y Tamara me miran asombrados. En general, nada es imposible para dos
personas como nosotros.
Buena suerte dice George riendo.
ltimamente me lo repites a menudo. Gracias, de todos modos, voy a necesitarla.
* * * *
Pocas horas despus Colin se asoma por la puerta de mi oficina. l tambin, parece un
poco consternado por mi nuevo look.
40
Hola Jenny me saluda mirando mi cabello. Como si fuera tan extrao en una mujer
cambiarse el color. Su secretaria se lo cambia al menos una vez al mes y nadie se da
cuenta.
Buenos das le contesto, concentrada en los datos sobre mi pantalla.
Hay una sala de reunin libre me comunica. Y s inmediatamente a que se refiere.
Gracias, has tenido una buena idea. Mejor un terreno neutral.
Colin sonre con satisfaccin. Me lo imaginaba. As que la reserv por dos horas. La
sala no est insonorizada, sin embargo seala.
Lo s, tengo aos de experiencia detrs de nosotros, recuerdas?
Mi jefe levanta los ojos al cielo. Digamos que habis dado una gran cantidad de
espectculos dentro de estas paredes. Las secretarias se quejan que desde que no
trabajan juntos, todo se vuelve extremadamente aburrido y predecible.
Por lo que nuestra nueva colaboracin est causando gran curiosidad... le digo
cundo termina la frase. Pero aburrido es una buena cosa en nuestro caso, no es
as?
No me sorprendera si alguien tratara de colocar algunos bichos en la sala de
reuniones slo para escucharte. Tienes una manera de... hacer las cosas ya sabes...
ardientes confirma mi jefe.
Miro a Colin perpleja. Bueno, no es exactamente la palabra que yo usara, pero me
imagin que algunas personas podran pensar as admito.
Colin est a punto de salir, cuando se vuelve una ltima vez y me dice. De todos
modos, ests genial, rubia. Y me hace un guio desapareciendo.
* * * *
La sala de reuniones est desnuda y con lo esencial. Se dice que est desprovista de
cualquier cosa en el momento de mis querellas con Ian, porque teman que pudiera
lanzarle algn objeto contundente. Visto como terminaron las cosas, tenan un punto.
Cuando ms tarde me decid a entrar, veo que Ian ya est sentado cmodamente
hablando por telfono. Si hubiera sido cualquier otra persona, le dara un poco de
privacidad, pero Ian no merece ninguna amabilidad, entonces que se vaya al infierno.
Sin parar de hablar me mira de una manera inquisitiva. Tiene una expresin
indescifrable en el rostro, aun as sigue mirndome.
Tengo que decir adis dice finalmente al telfono. No s muy bien qu planes
tenga para esa fecha. No puedo prometer nada, pero si tuviera que ir ocasionalmente
41
a la zona, sin duda hara un alto. Adis mam dice antes de colgar. Rpidamente
pone el telfono en el bolsillo y est listo para atacar.
Tamara me dijo que te habas hecho un cambio de look drstico bromea. Pero
ciertamente no imagin hasta qu punto.
Yo estaba realmente esperando ver su cara de sorpresa, o por lo menos tener la
ventaja psicolgica sobre l, pero su asistente se haba ido de la lengua, por lo tanto
adis efecto sorpresa.
Las mujeres suelen cambiarse el peinado, qu tiene eso de raro?
T nunca lo haces responde simplemente, cerrando la boca despus del discurso.
Bueno, ahora lo he hecho y quien dice que no lo har en el futuro. En ese
momento pens que tal vez el rojo me quedara bien. O es que acaso existe alguna
norma que requiera que siempre me quede igual? le pregunto con sarcasmo.
Tu problema es que a pesar del cambio exterior, de hecho sigues siendo la misma de
siempre. Es ste tu drama del que no puedes escapar me dice en tono de
sabelotodo.
Esto es realmente agradable.
Se te ha pasado por la mente que nunca he querido cambiar o huir lejos de lo que
soy? le pregunto irritada.
Quizs t no lo quieras, pero, evidentemente, tus novios quieren escapar, sin duda
alguna replica dejando caer su as bajo la manga.
Antes del final del da iba a tener la cabeza de Tamara en mi escritorio, pequea
serpiente traicionera.
Ahora bien, si le doy por segunda vez un puetazo en la nariz, quien dice que pueda
condenarme? Sus puos verbales no son quizs tan insidiosos?
Ah, ah, esas palabras viniendo del hombre que no recuerda el nombre de la mujer
con la que estaba ayer por la noche, es como un elogio le respondo en el mismo
tono. Pens sin embargo en una solucin: te aconsejara que las llamaras a todas
por un nombre genrico, que tal cario as no correras el riesgo de confundirlas.
Equivocar el nombre en la mejor parte, es tan de plebeyo, y en cambio a ti te importa
tanto ser un lord, no es cierto? lo provoco.
La expresin de Ian de repente se vuelve intensa. Intensamente enojado, dira yo.
Golpeado y hundido.
Durante unos segundos nos observamos con evidente antipata. Luego, decido dejar
atrs las bromas. Si hemos acabado con el intermedio, qu dices de pasar al
trabajo? le pregunto.
42
Me siento a su lado y abr el archivo de la presentacin del viernes. Pero ni siquiera
tengo tiempo para sacar una hoja cuando lo siento acercarse.
Antes de empezar, hay algo que quiero decir dice Ian serio.
Mi silencio es una clara invitacin a continuar
La gente como Beverly est acostumbrada a hacer negocios de la manera
tradicional. Es ms una cuestin de relaciones y no de soluciones. Puedes tener la idea
ms brillante del mundo, pero lo que cuenta es como se lo sirves en el plato. l es un
hombre acostumbrado a ganar, siempre, y espera continuar siendo as. Si propone
algo es porque quiere que sea realizado, y no debido a que otro se lo sugiriera. No
vuelvas a dudar de que l sea quien tenga las ideas ms eficaces.
Lo miro a ver si realmente cree en lo que est diciendo. Sus ojos azules me dicen que
esta vez va en serio.
No entiendo por qu tiene que pagarnos. Si ya es capaz solo... siseo cantando las
palabras.
Ian siempre se pone nervioso fcilmente. No seas estpida, sabes que es as como
funcionan las cosas? El secreto est en sugerir algunas ideas que luego se presentarn
como propias. Slo tenemos que meterle una pulga en la oreja.
Ests bromeando, verdad? No voy a tratar con tamaas manas de algn viejo snob
de pacotilla exclamo nerviosa.
Ian resopla. Siempre caemos de nuevo en este punto, no? Para ti slo es una
guerra de clases! me acusa.
Desplazo con violencia un mechn rebelde que sigue cayndome sobre el rostro.
No es una cuestin de clases, es una cuestin de mera inteligencia. Si se le paga a un
experto es para obtener su opinin. Si usted es capaz de resolver el problema por s
mismo, entonces ni siquiera busque ayuda! explico con vehemencia.
Muy bien, entonces lo haremos as. Sugiero un perodo de observacin, un perodo
pre-decisional, durante el cual se evaluar cuidadosamente a Beverly y su forma de
pensar y rediscutiremos esta cuestin fundamental. Porque todas las soluciones que
tenemos que tomar, no sern nada si no somos capaces de encontrar el camino
correcto.
No te atrevas a insinuar que yo no puedo hacer mi trabajo! le digo molesta.
Yo no insino nada, es un hecho que tienes la sensibilidad de un rinoceronte.
Yo? Y qu me dices de ti? Guau, la inteligencia y la sensibilidad personificada! le
digo a mi vez avanzando amenazadoramente en su direccin.
Bueno, ser mejor que t! Has sido tallada en granito desde el da en que naciste.
43
Celoso de mi carcter Ian? Bastaba decir lo...
Y quin sabe por cunto tiempo ms hubiramos seguido insultndonos, si Colin no
irrumpe en la sala de reuniones. Justo a tiempo, como pareca.
Por cierto, llam antes de entrar. Pero entonces, cmo podran or si gritan as?
Colin est muy enojado, se poda decir por el movimiento frentico de sus fosas
nasales. En el aire hay electricidad y tensin, y no proviene todo de m y Ian.
Tienen dos minutos para recuperarse y presentarse feliz y sonriente a mi oficina. Y
cuando digo sonriendo quiere decir que quiero ver incluso las muelas del juicio a
medida que avanzan a lo largo de ese corredor nos dice amenazador.
Y con eso, se va golpeando la puerta detrs de l.
Oops... esta vez hemos metido la pata hasta el fondo.
S... asiente Ian.
Rpidamente recogemos nuestras cosas y nos apresuramos a salir. En el pasillo estn
todos esperando, es claro que han estado escuchando y sentido todo.
Tratando de sonrer aceleramos el paso para llegar a la oficina de Colin. Ian abre la
puerta y me invita a entrar, y por primera vez me encuentro hacindolo sin discutir. l
me sigue por detrs.
En silencio, nos sentamos en las dos sillas frente a Colin, que golpea sobre su teclado,
todava enojado. Tras un minuto de silencio fnebre, por fin se decide a levantar sus
ojos a nosotros.
Pens que estaba lidiando con personas adultas, pero al parecer todava estamos en
un jardn de infantes, as que voy a tratarlos como tal. De ahora en adelante se
encontrarn fuera de aqu. Saldrn a las seis, y se tomarn un delicioso aperitivo
mientras trabajan en algn lugar, muy lejos de esta oficina. Lejos, entienden? No
deben ver a nadie! Les sugiero un lugar desconocido y donde no los conozcan. Les
propondra encontrarse por la noche en la casa de uno de los dos, pero luego pens,
que sin testigos alrededor, me temo que la reunin se convierta en un bao de sangre,
por lo que por el momento me abstengo de hacer tales sugerencias.
Voy a decir algo cuando Colin me detiene con un fuerte gesto de la mano.
Mi paciencia se acab con ustedes dos. Despus de este ao, absurdamente pens
que ustedes seran capaces de mostrarse ms adultos y superar algunos conflictos
pasados, pero parece que me enga. Los dos son idiotas, y cranme, estoy
hacindoles un cumplido. Sin embargo, si ustedes desean enviar a la mierda sus putas
carreras, son libres de hacerlo. Pero no me arrastren con ustedes. He sido lo
suficientemente claro?
Nunca he odo hablar de esta manera a Colin. Me avergenzo como una ladrona.
44
Has sido muy claro le digo con la cara roja.
Perfectamente claro afirma Ian con gravedad.
Bueno, entonces programen una maldita cita para maana en la tarde y degollense
cuanto quieran pero fuera de esta oficina. Cuando hayan terminado, me gustara que
hablen de su trabajo. De una manera seria y constructiva. Beverly les espera el sbado
por la maana en su finca de Escocia para pasar un fin de semana maravilloso con sus
dos asesores favoritos de activos. Y honestamente, no los envidio para nada.
Despus de la ltima oracin contina escribiendo con fuerza en el teclado.
Hemos sido rebajados en un minuto, una leccin que duele. La expresin de ambos no
es de alivio una vez que salimos de la oficina de Colin. No es de extraar entonces que
cada uno de nosotros regrese a su oficina sin decir una sola palabra.
* * * *
Cuando abro la puerta de la casa, al da siguiente, Laura y Vera parecen casi asustadas.
De hecho, tienen razn, slo son las seis, y yo nunca lleg a casa tan temprano desde
el da en que fui ascendida.
Te sientes mal? me pregunta Laura preocupada, no slo por cortesa.
Hola chicas, tranquilas, estoy bien, pero tengo una cita de negocios en media hora y
tengo que cambiarme, por algo informal. Mientras lo digo, entro a mi habitacin
para encontrar algo adecuado.
Cielos, qu se puede usar en tales ocasiones? Ian me haba enviado un e-mail esta
misma tarde con una direccin y hora. No saba nada del lugar, pero haba odo hablar
de l. Cuando le pregunto a Laura, que me haba seguido a la habitacin, ella rueda los
ojos.
Y con quin debes reunirte en un lugar como ese? pregunta sospechosa.
Es slo trabajo me defiendo mientras agarro un par de pantalones vaqueros y una
camiseta negra.
Esa camiseta es bastante escotada seala Vera que entra en mi habitacin. No
trates de eludir el tema, con quin te vas a ver?
Me detengo un momento antes de responder. Si me juran que no se harn ideas
extraas... asienten cada vez ms curiosas. Est bien, tengo que encontrarme con
Ian. Pero es estrictamente una reunin de negocios. En la oficina nos peleamos
demasiado, por lo que el jefe ha sugerido, de hecho, nos ha ordenado que nos
encontremos en un terreno neutral. Y despus de que casi nos matamos en la oficina
finalmente hemos decidido hacerlo afuera.
45
Cre haberte enseado algo! No hay que tener testigos, Jenny! se burla Vera.
Es trabajo! Eso es todo preciso exasperada.
Claro, cmo no... hace eco Laura, y el hecho de que ests tan tensa como una
cuerda de violn, es solo porque se trata de trabajo.
No estoy nerviosa! le digo con firmeza.
Pero en verdad s lo estoy, maldita sea. Esta lucha con Ian me est cansando, mental y
fsicamente.
En pocos segundos estoy lista, no me apliqu maquillaje ni me solt el cabello. En
cambio he reconstruido deliberadamente mi cola de cabello con la esperanza de
volver a la normalidad. No quiero correr el riesgo de que Ian se haga ideas extraas.
Tambin llevo zapatos bajos, ya que no tengo que impresionar en absoluto a nadie.
Me despido de las chicas y en poco tiempo estoy en el metro. Por supuesto, Ian ha
elegido un lugar poco visitado, reflexiono con irona. Supongo que el tipo no conoce ni
siquiera un pub poco conocido o un barrio que no sea de lujo. Todo en l parece serlo,
desde el pelo demasiado largo, pero hbilmente esculpido por su estilista de
confianza, a su caros trajes a medida.
Fcilmente llego al lugar, que est lleno de gente de moda. Odio como son tan snobs.
Una chica que sirve en las mesas inmediatamente se da cuenta de mi mirada y trata de
ayudarme. Ests buscando a alguien? pregunta mientras me observa escudriar
el lugar.
Bueno s, un hombre alto, moreno, ojos claros... describo vagamente.
Oh, ya veo dice enseguida. Eres Jennifer! confirma segura.
La miro con asombro.
Sgueme, detrs hay una habitacin ms tranquila.
No me queda ms opcin que obedecer mientras ella hace su camino a travs de las
mesas. En efecto, me lleva a una habitacin mucho ms ntima, donde se ven pocas
personas. En una mesa en la esquina que se encuentra escasamente iluminada est
Ian, leyendo la avalancha de correos electrnicos que siguen llegando a nuestro
BlackBerry, por lo que no me ha notado todava.
Es l? me pregunta la chica.
Desafortunadamente es l confirmo. Parece sonrerme, como si me entendiera.
Le doy las gracias y me acerco a la mesa. Ian est al parecer trabajando, se ha quitado
la chaqueta y la corbata, tambin se ha arremangado las mangas de la camisa, pero el
resto sigue igual. Baja el telfono y me mira con sorpresa. Muy deportiva, por lo que
veo.
46
Mi versin cmoda de incgnito explico.
Nada de vestido de vampiresa dice casi sorprendido.
Yo, como una vampiresa? Ian cielo, ya has estado bebiendo? pregunto
preocupada sentndome.
Ni una gota de alcohol vuelve a contestar. El alcohol retarda los reflejos, y
contigo no puedo correr riesgos.
Gracias, lo considerare como un cumplido murmuro.
Por un momento permanecemos en silencio y nos miramos con hostilidad.
Tenemos que darle vuelta a la pgina me dice luego de una manera inesperada,
pero sin mucho entusiasmo.
Lo s le confirmo con el mismo tono montono, como cuando visito al dentista.
Ayer las cosas dieron un giro para peor, otra vez.
Lo s asiento. Yo tambin estaba all.
Y corremos el riesgo de arruinar nuestras carreras...!
Ian, puedes omitir lo obvio? Estamos aqu porque ambos decidimos cambiar. Lo
entiendo, de verdad.
Y ests lista para comprometerte? pregunta fijando su mirada sobre m.
Si lo ests t. le respondo.
Yo lo estoy, de verdad. Hay un brillo peligroso en ese azul intenso.
Entonces yo tambin lo estoy.
Bueno, porque la secretaria de Beverly me acaba de enviar un memorndum para el
prximo fin de semana, y ser muy difcil salir con vida de all, si no estamos de
acuerdo.
Lo imagino confirmo. Quiero decir, est claro que las cosas deban cambiar.
Bueno, yo dira que esta aclaracin ha ido mejor de lo que pens dice l aliviado.
Lo miro con disgusto. Escucha, soy una mujer extremadamente razonable, con los
que quieren razonar.
T no eres para nada razonable me acusa Ian mientras hace sea a la camarera
para que se acercara. Qu quieres tomar, Jenny? pregunta casi galante, como si
no me hubiera ofendido un segundo antes.
Me gustara un capuchino murmuro con rencor.
Bueno, un capuchino para la seorita y un vaso de vino blanco para m ordena a la
chica.
47
Tenemos que trabajar. Vas a beber alcohol? bromeo.
Espero que ahora me pueda relajar. Por lo menos lo peor debera haber pasado.
Mantn la esperanza le digo mientras saco de la bolsa un pesado fascculo con
todo el conocimiento que tenemos sobre Beverly, sus subsidiarias y su familia. Es
mejor no saber lo que vas a encontrar.
* * * *
Dos horas ms tarde, todava estamos inclinados sobre los papeles, yo estoy mucho
ms nerviosa porque he tomado una dosis masiva de cafena y Ian ms relajado,
porque ha tomado varios vasos de vino blanco. Incluso parece estar ms cmodo, ya
que lanza algunas cuantas sonrisas y de vez en cuando trata de ser simptico. Con el
nico