1.- feliz el hombre que lee y viaja mucho es como un águila que vuela en las alturas.¡ay del hombre que no acostumbra ni leer, ni viajar!
se parece a un ratón encerrado en un hoyo.
2.- feliz el hombre que aprendió a pensar. es como un atleta entrenado para el triunfo.
¡ay del hombre, que no sabe pensar! se parece a un viajero, caminando en una noche oscura.
3.- feliz el hombre, que sabe expresar su opinión. es como una fragante rosa primaveral que alegra, estimula y enriquece.
¡ay del hombre, que no piensa ni opina!
se parece a un palo abandonado en medio del camino, que solo sirve para estorbar.
4.- feliz el hombre, que nunca se reúsa a tomar compromisos. es como un alpinista, que de cumbre en cumbre llega a escalar hasta las más altas montañas.
¡ay del hombre que le tiene miedo a los compromisos!
se parece a un eterno espectador, que nunca sueña con subir al ring.
5.- feliz el hombre responsable. es como un árbol frondoso, al que todos
se acercan en busca de sombra en un día caluroso.
¡ay del hombre irresponsable! se parece a un carro chocado, del cual solamente se aprovecha una que otra pieza en caso de necesidad.
6.- feliz el hombre constante. es como una gota de agua, que con el tiempo llega a perforar hasta la roca más dura. ¡ay del hombre inconstante! se parece a un eterno aprendiz, que continuamente cambia de oficio y nunca llega a ser maestro.
7.- felices ustedes, cuando se dejen guiar por las ideas y tengan una meta bien fija en la vida. Serán como una roca firme, que ningún aguacero o temblor podrá mover.
¡ay de ustedes! si no tienen ningún ideal en la vida y se dejan guiar por el sentimiento.
se parecen a la paja del campo, que el viento lleva de un lugar a otro sin rumbo alguno y que todos pisan sin darse cuenta.