Clarín - Martes | 02.11.2004
TEMOR AL FRAUDE ELECTORAL
Dan consejos para que en EE.UU. todos voten
Como si se tratara de recetas de un paso a paso se difunden las técnicas para votar.
Ana Baron. WASHINGTON CORRESPONSAL
Haga que su voto sea computado", decía un cartel en uno de los barrios negros de Miami.
El consejo parece fuera de lugar. En principio, todos los votos deben ser computados. Pero
teniendo en cuenta que en las elecciones de 2000 se perdieron entre 4 y 6 millones de votos,
ya fuera por irregularidades o directamente por fraude, esta vez todo el mundo está en
estado de alerta.
Durante las disputadas elecciones presidenciales que tendrán lugar hoy en EE.UU. se
calcula que en algunos centros de votación habrá igual cantidad de abogados, observadores
y voluntarios que de votantes. Al menor problema entrarán en acción.
"El objetivo es que no se vuelva a repetir lo que sucedió en el 2000 en Florida", dijo a
Clarín Kelly McBride, una demócrata que actualmente está viviendo en Ecuador pero que
viajó a Nuevo México para trabajar como voluntaria en el programa "Voter protection"
(protección de votantes) del Partido Demócrata.
El temor al fraude es tal que un editorial del The �ew York Times publicado ayer
aconsejaba a los votantes qué hacer para poder votar y para que su voto no sea
descalificado. Entre otras cosas, decía:
• Infórmese sobre dónde debe votar. En algunos estados no dejan votar en el centro
incorrecto.
• Traiga un documento con foto. No en todos los estados lo exigen, pero tráigalo por si
acaso.
• Revise la papeleta o su voto electrónico antes de emitirlo.
• Conozca sus derechos sobre el voto provisional. Este año nadie puede impedirle que
vote. Si hay dudas sobre si cumple requisitos, lo tienen que dejar emitir un voto
provisional.
• Sepa a quién pedirle ayuda. Si tiene problemas o ve algo irregular, pida ayuda. Habrá
observadores no partidarios en muchos lados.
• Traiga un teléfono celular y el número de teléfono de una línea de ayuda para los
votantes.
• Prepárese para las colas largas. En algunos lugares habrá que esperar varias horas.
Intente ir a votar a la mañana temprano y no en las horas pico y no deje que cierren el
centro de votos hasta que haya votado.
La increíble pérdida de votos de 2000 se debió fundamentalmente a que las papeletas eran
confusas, las máquinas para votar eran deficientes; los padrones no eran claros y en el
centro de votación no había suficiente gente con entrenamiento para el conteo del votos. A
eso se sumaron problemas de intimidación racial y de exclusión en el seno de las
comunidades afroamericana e hispana.
Hubo cientos de votantes negros a los que se les negó el derecho a votar ya fuera porque no
se encontraban en los padrones o porque cuando llegaban a los centros de votación ya
estaban ce rrados. Hubo otros votantes negros que recibieron tarjetas postales que decían
que no fueran a votar porque en cada centro de votación iba a haber policías listos para
llevarlos presos. En Wharton, Texas, quemaron con una cruz el hogar de una mujer blanca
que se atrevió a apoyar la candidatura de un sheriff negro.
Con el enorme esfuerzo que han realizado los dos candidatos para movilizar a la gente para
que salga a votar, se calcula que habrá mucha más participación, y, por lo tanto, más
problemas. De hecho, en algunos estados como Florida y Ohio los verdaderos ejércitos de
abogados que han desplegado tanto de un lado como del otro ya han comenzado a litigar.
Se calcula que cada uno de los candidatos tienen un total de 10.000 abogados en los estados
más disputados.
El Departamento de Justicia decidió enviar mil observadores federales más que los que
movilizó en 2000. Paralelamente, organizaciones no gubernamentales reclutaron sus
propios voluntarios para asistir a los votantes.
"Desde que abrimos las líneas telefónicas especiales para recibir llamados, a mediados de
octubre, ya recibimos más de 40.000", dijo Kim Alton, vocera de la Coalición para la
Protección de las Elecciones, que reúne a 60 organización no gubernamentales.
Por ley, los observadores no pueden entrar en las salas donde se vota, pero piensan estar a
la salida listos para ayudar a los votantes que tengan problemas.