Capote for sale
La indignación de él por
su ausencia no hacía
más que soplarla como
a un pequeño y
cósmico globo inasible,
brillante y frágil. Más
miraba uno su
decepción, más
retrocedía la otra hacia
el éter de las calles que
se entrecruzaban
bocinantes y
hambrientas de
ingenuas y
demandantes
relaciones carceleras.
Nadie puede decir que
no hizo intentos para
que el amor terrenal la
besara, relajado y
sinuoso, por todos los
surcos de su piel; pero
por el contrario, éste le
terminaba pesando
como un hiriente
capote de plomo
oxidado que la hacía
gemir de dolor e
infectaba sus purezas
de pequeño y suave
huracán de fuego, aire
y nada.
El estrépito que produjo
al caer acalló su llanto.
Clara María Berduc
2012.-
Capote for sale
La indignación de él por
su ausencia no hacía
más que soplarla como
a un pequeño y
cósmico globo inasible,
brillante y frágil. Más
miraba uno su
decepción, más
retrocedía la otra hacia
el éter de las calles que
se entrecruzaban
bocinantes y
hambrientas de
ingenuas y
demandantes
relaciones carceleras.
Nadie puede decir que
no hizo intentos para
que el amor terrenal la
besara, relajado y
sinuoso, por todos los
surcos de su piel; pero
por el contrario, éste le
terminaba pesando
como un hiriente
capote de plomo
oxidado que la hacía
gemir de dolor e
infectaba sus purezas
de pequeño y suave
huracán de fuego, aire
y nada.
El estrépito que produjo
al caer acalló su llanto.
Clara María Berduc
2012.-