La Columna de Trajano
Adrián Morar 1º bachillerato
La Columna Trajana o Columna de
Trajano es un monumento
conmemorativo erigido en Roma
por orden del emperador Trajano
que conmemora las victorias de
Trajano frente a los dacios (pueblo
de la actual Rumanía). Concluida en el año 114, es una
columna de 30 metros de
altura ,38 incluyendo el pedestal
sobre el que reposa, recorrida por
un bajorrelieve en espiral con
episodios de las Guerras
Daco-romanas . En la mitad
inferior de la columna se
ilustra la primera (101-
102) y en la superior la segunda
(105- 106). Ambas
secciones están separadas
por la personificación de la
Victoria.
La columna se compone de 18
enormes bloques de mármol,
cada uno de los cuales pesa
aproximadamente 40 toneladas
y tiene un diámetro de unos 4
metros. El friso escultórico
completo mide unos 200
metros y da 23 veces la vuelta
a la columna. En el interior de
la misma, una escalera de
caracol de 185 peldaños
permite el acceso a una
plataforma mirador en su parte
superior.
La siguiente inscripción se encuentra en
el pedestal: SENATVS·POPVLVSQVE·ROMANVS IMP·CAESARI·DIVI·NERVAE·F·NERVAE TRAIANO·AVG·GERM·DACICO·PONTIF MAXIMO·TRIB·POT·XVII·IMP·VI·COS·VI·P·P· AD·DECLARANDVM·QVANTAE·ALTITVDINIS MONS·ET·LOCVS·TANT<...>IBVS·SIT·EGES
TVS «El senado y el pueblo romano, al
emperador César Nerva Trajano Augusto
Germánico Dácico, hijo del divino Nerva,
pontífice máximo, tribuno por
decimoséptima vez, emperador por sexta
vez, cónsul por sexta vez, padre de la
patria, para mostrar la altura que
alcanzaban el monte y el lugar ahora
destruídos para <obras> como ésta.
La finalidad de la Columna de
Trajano era triple: señalar hasta
dónde llegaba el monte
desplazado por el foro, albergar las
cenizas del emperador y
conmemorar la conquista de la
Dacia como victoria de Trajano.
Un molde de yeso realizado en el siglo
XIX preside el Cast Court (Patio de
Moldes) del Victoria and Albert
Museum, en Londres. Dividido en dos
secciones, permite estudiar de cerca
los relieves. Irónicamente, tras un siglo
de polución en Roma, el molde es hoy
más legible en muchos detalles que el
original. En el siglo XX técnicos rumanos
realizaron otro molde que se expone en
el Museo Nacional de Historia de
Rumania, en Bucarest. Probablemente
éste sea el lugar donde se puede
apreciar la columna con más detalle,
pues el molde se muestra a los
visitantes del Museo escena a escena, a
tamaño natural y a la altura de la vista.
Tras la muerte de Trajano, en 117, el Senado romano votó que sus cenizas recibieran sepultura, dentro de una urna de oro, en la base de la columna. Actualmente las cenizas ya no se encuentran allí.
Se construyó una preciosa urna de alabastro recubierta de oro y
marfil para contener las cenizas del emperador y la caja se depositó en la base de la magnifica columna de Trajano. Pasados los siglos y después de las destrucciones sobrevenidas por las invasiones de los bárbaros, se perdió la pista de la urna. Hacia 1620 un anticuario romano ofreció al duque de Alcalá, embajador de Felipe IV, una urna que le aseguró era la misma que contenía las cenizas del emperador español. El duque, gran coleccionista, sin dudarlo la compró y la envió a su palacio de Sevilla, donde instaló el preciado objeto en un estante que presidía la biblioteca.
A la muerte del embajador y habiéndose producido un pleito entre sus herederos, una de sus criadas robó la preciosa reliquia y la llevó para su casa en Santiponce, en las afueras de Sevilla. Transcurrido un tiempo y resuelta la testamentaría, se echó en falta la urna de Trajano. Fruto de las indagaciones de los alguaciles se descubrió a la autora del hurto, que, confesa, devolvió el arca. Al abrirla se comprobó que estaba vacía y preguntada la criada qué había hecho con las cenizas, dijo que al ver que el cofre estaba lleno de polvo y arena, lo limpió y tiró las cenizas en un naranjal cercano a su casa.