“Solar Juvenil Oaxaqueño”
Literatura
3° Semestre
3er Parcial
“Cuento”
Francisco ErickWilber Antonio
Márquez Sánchez Ruíz Espinoza
10 de noviembre del 2012
El niño viajero
Había una vez un niño llamado Josué, él
vivía en una pobre casita ubicada cerca de
la playa, tenía una familia muy amorosa pero él era muy pobre. Su mamá trabajaba en una
marisquería lavando platos y su papá limpiaba las lanchas de la playa. Josué veía como sus
padres se desgastaban para que él tuviera una buena vida y no le faltara nada, se ponía
muy triste al saber que no podía ayudar en mucho.
Un día al ir caminando por la playa encontró una vieja botella de vidrio con un papel dentro
de ella, al abrir el corcho de la botella y sacar el papel se quedo anonadado al ver que era
un antiguo mapa del tesoro lo que había encontrado, observó las coordenadas y supo al
instante que el sitio donde se encontraba el tesoro no era muy lejos de ahí, el único
problema era que el tesoro se encontraba en una isla.
Entonces Josué rápidamente ideó un plan para poder llegar hasta la isla, llegada la noche,
escapó por la pequeña ventana de su habitación, llegó a la playa y tomó el primer bote que
encontró y así emprendió su viaje a la isla.
Navegó toda la noche, al caer la mañana parecía que divisaba tierra cuando… un pelícano
comenzó a picotear su barco hasta dejarlo sin nada, Josué no sabía nadar y por
consecuencia comenzó a ahogarse, cuando Josué estaba al borde de la muerte un delfín
salió a su rescate arrastrándolo a la orilla de la playa.
El niño al despertar se alegró de ver que estaba vivo, en el mismo instante cambió su rostro
a tristeza y lágrimas al ver que había perdido el mapa del tesoro, camino desconsolado en
el bosque cuando de pronto vio algo que se movía raro, se acercó y se espantó al ver que
era una isla llena de serpientes, corrió
hasta que tropezó con algo que sobresalía
de la arena.
El niño enloqueció cuando se dio cuenta
que con lo que tropezó era un gran cofre,
al abrirlo vio que tenía monedas y collares
de oro, lo tomó y se dirigió rápidamente a
la playa.
Sabía que no podía pedir ayuda porque
iban a quitarle su tesoro, así que aprendió
a cómo sobrevivir en la isla hasta que
terminará de construir su barco con partes
de troncos y pedazos de madera que estaban alrededor de la playa.
Cuando terminó, emprendió su viaje de regreso que fue mucho más ligero que el de ida,
llegó al puerto donde ya lo esperaban sus padres, Josué se preguntó como sabían sus
padres eso, a lo que ellos contestaron que lo vieron salir en un bote y todos los días desde
que se fue lo esperaban en el puerto.
Josué muy conmovido los abrazó y les hizo entrega del tesoro, con esto su familia salió
adelante y pudieron tener su propia casa, que sus padres estudiaran junto con Josué.
Y vivieron felices para siempre, y colorín colorado este cuento se ha acabado.
FIN