1
El Conflicto Interno Armado en la Caricatura Editorial, 1991-2009
“en el campo de las fuentes de la historia de las mentalidades,
la iconografía pone a disposición de los investigadores
una masa considerable de documentos con lo que les
permite alcanzar grupos sociales más extendidos
como también percibir actitudes diferentes”
Michel Vovelle (Ideologías y Mentalidades)
Juan Carlos Pachón Rojas1
Resumen
Hablar de caricaturas es hablar de imágenes, de contenidos lingüísticos que pueden
expresar tendencias e ideas de forma más directa y concreta que cualquier discurso o texto
político. La creación de discursos políticos en imágenes tiene un amplio impacto por la
superficialidad y facilidad del lenguaje para colarse en la inteligencia del conglomerado
social.
1 Politólogo de la Universidad Nacional de Colombia. El siguiente documento es un avance de la investigación que adelanta el autor como tesis para optar al título de Magister en Historia en la UPTC, sede
Tunja.
2
Entendiendo lo anterior, este estudio pretende dar a conocer el imaginario político a través
de la caricatura editorial2, puesto que este elemento, ha sido muy poco abordado en la
elaboración de documentos y análisis en nuestro país; aun más en el campo correspondiente
al conflicto armado interno, del cual se rescata un sinnúmero de trabajos, pero ninguno que
haya explotado la caricatura vista desde esta óptica. Además de esto, se encuentra otro
factor determinante, el cual se basa en la carencia de la Historiografía de los 90s, del siglo
XX y comienzos del siglo XXI, a lo cual pretendo aportar de manera significativa, haciendo
notar que la Historia también debe estudiar tiempos recientes y que mejor aun, desde
nuevos enfoques y con nuevas fuentes.
Introducción
En un país como el nuestro, donde la realidad supera la ficción, la caricatura política3, ha
encontrado en el acontecer político un nicho de acción demasiado prolifero. La mayoría de
la caricatura política que se encuentra en los medios de información colombianos, tiene
como uno de sus objetivos el mostrar hechos sociales y políticos, particularmente, los
acontecimientos que propician los gobiernos de turno. Por lo anterior, se gesta esta
propuesta investigativa en repuesta a la particularidad de este recurso que expresa una
2 Es aquella caricatura que forma parte de la zona editorial de un periódico, puede que algunas veces
concuerde con la nota editorial del periódico, que es la postura oficial del medio de comunicación impreso.
No es la caricatura que hace parte de una noticia o de aquella que contribuye a ambientar un reportaje, o una
crónica. Es la caricatura política que hace parte de la zona editorial. 3 Se entiende por caricatura política como “una mirada fugaz sobre los acontecimientos, muy dependiente del
medio en que aparece. Capta eventos y personajes políticos, así como situaciones que aparecen de una definición política o se han politizado transitoriamente”, ver en: IBARRA, Hernán. La caricatura política en
el Ecuador a mediados del siglo XX. Quito: Ministerio de Cultura, 2006.
3
forma de construcción del imaginario político del conflicto interno armado4, teniendo
como fuente de investigación las caricaturas editoriales que nos proporcionan a diario los
diferentes medios de información impresos.
La idea nace de la observación de la caricatura política como una parte fundamental en el
proceso de formación de la opinión política5 en el caso colombiano. El hecho de que se
utilice la caricatura política como fuente de investigación, no quiere decir que no sea
tomado con el rigor académico que se requiere. En ningún momento se pretende con la idea
en proceso dar fundamento a una investigación light. Lo jocoso y divertido, que hace parte
de la caricatura, no le quita su valor como hecho real y fehaciente del acontecer nacional6.
Los medios de comunicación masivos han sido los grandes generadores de opinión pública.
En ese sentido, los medios de comunicación impresos siguen jugando un rol predominante
en la generación de imaginarios políticos.
4 Hay que hacer en este punto varias observaciones. Por conflicto interno armado “es aquel que se desarrolla
en el territorio de un Estado entre sus Fuerzas Armadas y Fuerzas Armadas disidentes o grupos armados
disidentes que, bajo la dirección de un mando responsable, ejerzan sobre dicho territorio un control tal que
les permita realizar operaciones militares sostenidas y concentradas” (Articulo 3 Común a los Convenios de
Ginebra y el Protocolo II de los Convenios de Ginebra). Por Sociedad Civil como aquella que no es
combatiente y que no hace parte de ningunas de las partes en conflicto. 5 La caricatura política, como señala Beatriz González, es un "sistema de lucha dirigido con virulencia
contra personajes de la vida pública, con el ánimo de ridiculizarlos para corregir sus errores. Corregir con
la risa es la fórmula más civilizada de educar; a diferencia de la caricatura que busca diversión a costa de
los demás, la caricatura política usa la risa y el dibujo como un arma. La caricatura política, por su carácter
ético, es un arte propio de la opinión pública, cuyo objetivo es agitar las conciencias. Su nivel estético ha
planteado serias reflexiones, porque no siempre una buena idea se acompaña de un gran dibujo y viceversa;
por ello se la ha definido recientemente como "la hija bastarda del arte y de la prensa". Artículo que se
puede consular: http://www.lablaa.org/blaavirtual/revistas/credencial/octubre1990/octubre1.htm . Para
ampliar lo anterior, sobre la relación entre caricatura política y opinión pública, ver el documento de Germán
Colmenares, Ricardo Rendón: una fuente para la historia de la opinión pública. Bogotá: Tercer Mundo,
1998.
6 Como dice Pierre Vilar, en el Epílogo del libro Luis Bagaría. El humor y la Política, “cada mañana, en un
quiosco de las Ramblas, lo primero que hacía era buscar, en la prensa de Madrid, el dibujo de Bagaría, capaz
de cristalizar de un plumazo la actualidad más compleja”, pág. 475.
4
Los medios de comunicación impresos tienen varias herramientas para generar, presentar y
discriminar hechos políticos: están los grandes encabezados de las noticias, los artículos de
opinión, las editoriales y las caricaturas políticas7.
La particularidad de las caricaturas políticas es que encierran en una imagen la coyuntura
política y son parte fundamental de todo medio impreso. Son inexistentes los medios de
comunicación impresos que no cuenten entre sus páginas con algún caricaturista casi
oficial. Ese es el caso de la Revista Semana que cuenta con Vladdo y Caballero, El
Espectador con Osuna, El Colombiano con Ricky y Paris, El Tiempo con Matador.
Por lo anterior, es necesario estudiar y determinar el imaginario político que ha generado la
caricatura editorial frente al conflicto interno armado en Colombia, en el periodo que va
desde la formulación e implementación de la Constitución Política de 1991 hasta el año
2009.
Balance sobre la fuente documental en Colombia
Durante la elaboración del presente documento se han encontrado las siguientes
investigaciones; se ubican cuatro líneas de publicaciones concernientes al tema de la
caricatura política en Colombia, la primera son los estudios académicos propiamente, como
los de Darío Acevedo Carmona, el de Cesar Ayala y Germán Colmenares; el segundo son
las publicaciones en revistas educativas, que analizan el valor como recurso didáctico para
7 Para ver un ejemplo diciente, el trabajo de Cesar Augusto Ayala: Exclusión, discriminación y abuso de
poder en El Tiempo del Frente Nacional: una aproximación desde el análisis crítico del discurso (ACD).
Bogotá: Universidad Nacional de Colombia, 2008.
5
el desarrollo en las aulas de clases; el tercero, las publicaciones de los caricaturistas, es
decir compilaciones de sus trabajos. Una cuarta línea, es la de la historia de la caricatura
política propiamente, en ese sentido está el trabajo de Beatriz González.
Tienen en común los documentos consultados en que son de publicación reciente,
seguramente se deba a las compilaciones por parte de los mismos caricaturistas que genero
inquietud por parte de algunos académicos.
El texto que más ha profundizado en el tema de la caricatura política es el de Política y
caudillos colombianos en la caricatura editorial, 1920-1950, de Darío Acevedo Carmona8.
Es una publicación donde se presenta los resultados de su investigación de tesis Doctoral, la
temática gira alrededor de cómo se presentan los caudillos de la época de estudio por parte
de las caricaturas políticas, se analiza quien es el caricaturista, su tendencia política y el
diario donde se publica. Para esto se vale de herramientas metodológicas como la
semiótica, del análisis cultural de la antropología interpretativa y de estudios sobre las
obras de arte.
Otro texto, que también es de reciente publicación es el Cesar Augusto Ayala: Exclusión,
discriminación y abuso de poder en El Tiempo del Frente Nacional. Una aproximación
desde el análisis crítico del discurso (ACD). Aunque para su estudio se aproxima desde
8 De este mismo autor hay las siguientes publicaciones: La caricatura de El Siglo y el imaginario político del
conservatismo (1948-1949). En: Revista Universidad de Antioquia. Vol. 62, no. 232 (abr. - jun., 1993); p. 4-
10. La mentalidad de las elites sobre la Violencia en Colombia, 1936-1949. Instituto de Estudios Políticos y
Relaciones Internacionales (IEPRI) de la Universidad Nacional de Colombia. Bogotá: El Áncora, 1995. La
caricatura política y la violencia liberal-conservadora. En: Revista Credencial Historia. No. 125
(may.2000), Bogotá. La caricatura editorial como fuente para la investigación de la historia de los
imaginarios políticos: reflexiones metodológicas. En: Revista Historia y Sociedad. No 9 (2003).
6
varias ópticas, una de ellas son las caricaturas políticas, en el desarrollo del texto es
recurrente el análisis de las caricaturas para ejemplificar la tendencia del diario El Tiempo,
demuestra cómo hay una satanización a la oposición durante el Frente Nacional por parte
del diario; para llevar a cabo la anterior estrategia, se vale de sus columnas de opinión, la
editorial y por supuesto de la caricatura política.
Un texto a tener en cuenta es el de Germán Colmenares, Ricardo Rendón: Una fuente para
la historia de la opinión pública, como bien dice el título del libro, la idea de Colmenares
es de ahondar en la caricatura como fuente histórica, en este caso las de Rendón, aunque se
queda muy corta su tesis. En la Introducción del documento explica las razones de su tesis,
de porque son valiosas (las caricaturas políticas) para entender los acontecimientos de la
época, enseguida contextualiza una serie de hechos de la mano de las caricaturas, temas
como la política liberal y conservadora, entre otros.
Un cuarto texto es la ponencia de Carlos A. Flórez López, Imaginarios políticos de derecha
e izquierda en Colombia. 1919 – 1936, anotaciones a partir de la caricatura política; es un
artículo donde el autor hace un avance de su tema de investigación doctoral. Es un artículo
interesante, que sigue la misma línea de análisis de Darío Acevedo Carmona.
Vale señalar las tesis de Pregrado, por ejemplo, la tesis de Sociología de Patricia Eugenia
Carrera Díaz, la tesis de Comunicador Social de Mauricio Angarita Sánchez y la tesis de
Historia de Andrés Felipe González.
La primera tesis, abarca una diversidad de temas, lo cual presenta una desventaja, puesto
que no profundiza en ninguno evidenciando poca claridad en su pretensión, no obstante es
7
la tesis más estructurada y mejor organizada, es valiosa en la medida en que hace una
conceptualización, desde la sociología, para entender la caricatura política. Se enmarca en
la década de los 90s del siglo XX.
La segunda tesis fundamenta más la pretensión del autor por formar un área de estudio
sobre la caricatura política en la carrera de comunicación social, el periodo de estudio son
los 80s y comienzos de los 90s del siglo XX. Es una de las primeras tesis de pregrado
sobre el tema, pero también de las pocas. Se rescata el análisis que hace de los medios de
comunicación impresos que son: puente entre el caricaturista y el emisario final y como
herramienta para el medio de comunicación.
La tercera tesis, es un estudio sobre un diario que circulo en el Valle del Cauca a comienzos
del siglo XX, para el desarrollo se vale de la cultura política. Su pretensión se ve clara y
puntual, pero deja muchas falencias en cuanto a su valoración del concepto de cultura
política, seguramente se debe a la poca bibliografía que consulto sobre el tema. Es una
buena introducción para saber lo que acontecía en la época.
Hay un cuarto documento que es un borrador de investigación de una serie de estudiantes
de la Universidad del Rosario, titulado Caricatura y Economía. Una mirada a la historia
económica de Colombia. Los artículos toman una caricatura política y a partir de ella hacen
un análisis de la coyuntura económica, en los artículos se ve reflejada la manera en que se
condensa de la caricatura y la articulación de esta a un periodo especifico.
Sobre las publicaciones de los caricaturistas sobresalen las compilaciones de Vladdo,
Osuna y Caballero. Se ubican en mostrar sus imágenes más controversiales, ya sea por
8
temáticas o por periodos de tiempos, cada uno tiene una forma muy diferente de abordar las
temáticas y los personajes. En Vladdo se puede inferir una pretensión de reflexión sobre
múltiples temas netamente coyunturales. Osuna realiza una crítica sin mayores
consecuencias políticas. Caballero se ubica en ciertas improntas de la cultura política
colombiana, es poca su reflexión coyuntural; por lo tanto sus caricaturas tienen la ventaja
de ejemplificar todo un periodo y no solo la coyuntura.
También se encuentra la historia de la caricatura en Colombia. Es un trabajo realizado por
Beatriz González. En este se hace una periodización que va desde sus inicios a comienzos
del siglo XIX hasta de la década de los 80s del siglo XX. La autora analiza tendencias e
influencias, como también los caricaturistas más sobresalientes de cada periodo9.
Por último están los artículos de revistas sobre educación. Estos tienen en común el
llamado por parte del mismo gremio de maestro para sus pares, en el sentido del valor de la
caricatura como herramienta metodológica en las aulas de clase10
. Se dice la manera como
se debe acercar al alumno, como se puede transferir y reflexionar sobre varios temas.
9 Actualmente se realiza una exposición en la Biblioteca Luis Ángel Arango en Bogotá, donde González
hace una actualización a este trabajo, es decir hasta el año 2010. 10 Entre estos, está el artículo El uso de cuentos y caricaturas para la enseñanza de ideas dinámico sistémicas en el ámbito infantil y empresarial, de Samuel Prieto Mejía y Zuany Luz Paba Argote. En: Revista Praxis
Educativa. No. 1Editorial: Universidad del Magdalena Facultad de Ciencias de la Educación, 2008.
9
Apuntes metodológicos de la investigación
Para avanzar en la investigación en curso, ha sido un poco difícil el uso de una
herramienta para la interpretación del documento iconográfico11
, en este caso la caricatura
política. Al principio se recurrió a la propuesta de Erwin Panofsky. Resultando poco
práctico a la hora de elaborar las fichas correspondientes.
Por lo anterior se recurrió a la propuesta, más pragmática, que propone Didier Prioul en un
corto documento: Cómo analizar un documento iconográfico12
. En síntesis, la propuesta
nos indica los pasos para analizar y contextualizar un documento iconográfico. “La primera
es observar el documento; en la segunda, se identifica el contenido de la imagen; en la
tercera, se establece la red de relaciones en que se inscribe un documento particular, por
medio de la contextualización”13
.
Con los tres pasos se debe elaborar una ficha por cada imagen. Se da un modelo de ficha
con 12 ítems, especificando en cada ítem que debe ir. Al comparar este modelo de ficha
con un trabajo en particular, El País de “El Llorón de Icamole”14
, se concluyo que dicho
modelo era el más acorde con la propuesta de investigación.
La investigación hace uso de la caricatura que ha sido aceptada “como fuente documental,
para complementar el conocimiento de la historia política, en tanto revela detalles
11 Al respecto nos dice Vovelle “el verdadero problema que no es técnico, con seguridad sigue siendo el de
establecer un programa y modalidades de tratamiento”. En Ideologías y Mentalidades, Pagina 76. 12 El articulo hace parte del libro La caja de herramientas del joven investigador, La Carreta Editores,
Medellín, 2007. 13 Ibídem, Pagina 96. 14 En este libro de Rafael Barajas Duran, analiza 129 caricaturas políticas en el periodo denominado como el “Porfiriato”. A cada una de las caricaturas, él hace su respectiva ficha muy similar al modelo que propone
Didier Prioul.
10
desconocidos de la historia política, en tanto revela detalles desconocidos o en la medida en
que expresa de manera sintética, con imágenes dibujadas, un conjunto de hechos y de
situaciones entrelazadas con personajes”15
.
El tema de investigación
La hipótesis de la investigación es: ¿cómo se puede llegar a concebir una conceptualización
del conflicto interno armado colombiano a partir de los imaginarios políticos y de las
representaciones que están presentes en la caricatura política? Se logra teniendo como
fuente la coyuntura política16
plasmada por medio de la caricatura política y
reconstruyendo un periodo histórico a partir de la opinión política; opinión, que se infiere
de cada caricatura y por ende del caricaturista, pero también del medio de comunicación en
el cual va impresa la caricatura. Es importante tener en claro, que la caricatura política se
nutre de la vida política en un espacio coyuntural específico.
Un objetivo es demostrar como la caricatura política, como un elemento del arte no escapa
a las lógicas de la representación popular del poder y como aparato para legitimar o
deslegitimar la acción política del cualquier régimen. La caricatura política fomenta
imaginarios políticos, representaciones de la ética y la moral de sujetos políticos; adecua
una especie de memoria abstracta sobre la sociedad y sus instituciones; además, simplifica
los lenguajes de relación entre el ciudadano, los medios y la institucionalidad; en
15 Acevedo Carmona, Darío. Política y caudillos colombianos en la caricatura editorial, 1920-1950. La
Carreta Editores, Medellín, 2009. P. 10. 16
La coyuntura política hace alusión al presente político, es decir, al momento diacrónico y dinámico del
acontecer político del largo proceso sincrónico y estructural.
11
definitiva, es una herramienta de construcción ideológica y puente entre los actores
detentadores del poder y la legitimidad social.
Se pretender delimitar ciertos ejes de investigación, por ejemplo: como ha sido el manejo
del fenómeno del desplazamiento forzado, como es la actuación de los actores armados,
qué papel juega intereses de actores internacionales; qué tipo de conflicto armado hay en
Colombia y determinar el rol de los derechos humanos y específicamente en donde queda
el Derecho Internacional Humanitario por parte de los actores involucrados en el conflicto.
No se utiliza el concepto de violencia política sino el de conflicto interno armado17
. Una de
las razones es que para la época objeto de estudio, en la normatividad colombiana empieza
a implementarse los Convenios de Ginebra18
, pero sobre todo el Protocolo II que se refiere
a los conflictos armados internos. Esto se ve reflejado tanto en el lenguaje utilizado por los
medios de comunicación: en los titulares de prensa, en las noticias de los periódicos, en las
editoriales y por supuesto en las mismas caricaturas políticas.
La temporalidad del tema de investigación
Se necesita investigar este periodo que se inscribe en lo que ha dado en llamar como el
tiempo presente. “La historia del tiempo presente, al igual que toda operación histórica es
17 Para tener más elementos de juicio ver el articulo de Alejo Vargas Nueva prospectiva para la paz de
Colombia, http://ciruelo.uninorte.edu.co/pdf/invest_desarrollo/11-1/nueva_prospectiva_para_la_paz.pdf 18 Ver al respecto los fallos de constitucionalidad emitidos por la Corte Constitucional, por ejemplo la
Sentencia No C 574 de 1992 y la Sentencia No C 225 de 1995.
12
una historia en proceso de formación”19
. La investigación parte desde la formulación e
implementación de la Constitución Política de Colombia de 1991 hasta el año 2009. Las
publicaciones que serán objeto de estudio son: El Tiempo, El Espectador, Revista Semana,
en cuanto a publicaciones nacionales. A nivel regional se revisaran El Colombiano, El
Meridiano de Córdoba, El Heraldo, El País.
Vale señalar que en el periodo histórico de investigación han sucedido una serie de
acontecimientos, que sería bueno señalar. A modo de ejemplificar en el presente escrito, se
hará de manera lineal: 1. El proceso de la Constitución Política de 1991, de la cual fueron
participes algunos desmovilizados de grupos armados ilegales; 2. La serie de incursiones
militares perpetradas por las FARC a puestos de control del Ejercito Nacional; 3. El
proceso de paz en el San Vicente del Caguan, entre las FARC y el gobierno de Andrés
Pastrana; 4. Fortalecimiento militar y modernización por parte de la fuerza pública debido
en gran parte al Plan Colombia, a finales de la década de los 90s y comienzos del XX; 5.
Proceso de desmovilización de Paramilitares y la implementación de la llamada “seguridad
democrática”.
En la década de los 90s del siglo XX y comienzos del siglo XXI, en ese periodo, en
Colombia se ha vivido una profundización del conflicto interno armado. Si bien hubo la
pretensión de un cambio democrático, de salidas políticas al conflicto armado, de
desmovilización de grupos armados ilegales y de reivindicación de derechos civiles,
políticos y sociales, lo cual es innegable; en la realidad, no se puede desconocer el aumento
19 Fazio Vengoa, Hugo. La historia del tiempo presente: una historia en construcción, En: Revista Historia
Critica, Revista No 17, Universidad de los Andes, Julio-Diciembre de 1998, Pág. 47.
13
vertiginoso de desplazamiento interno, de la degradación del conflicto armado, de la sevicia
por parte de todos los actores armados. Lo anterior permite concebir –en parte- el
imaginario político del colombiano: 1. Un individuo indiferente e indolente frente a la
desgracia de las víctimas; 2. Un creyente que tiene en su imaginario la resignación, es decir,
que en “el mas allá” encontrara la tan anhelada justicia; 3. Al ser sujeto de derechos pero
también de deberes, se ha quedado más en la última, y es poca o nula su defensa tanto
individual como colectiva de sus derechos como ciudadano. 4. Un pragmatismo a todo
nivel, que muchas veces se puede considerar como una suerte de supervivencia.
A comienzos de la última década del siglo XX Colombia vivía entre dos contradicciones:
Por un lado, se vivía en una euforia colectiva debido a la apertura democrática que
significaba la Constitución Política de 1991 como también a la desmovilización de varios
grupos armados ilegales, pero por otro lado, había una ola de atentados terroristas, varios
magnicidios como los de Jaime Pardo Leal y los secuestros de varias figuras políticas,
como Andrés Pastrana.
El país vivió una oleada de inestabilidad institucional debido al “Narco-escándalo”,
generado a partir de unas grabaciones, donde se dejaba entrever la financiación de
campañas políticas. A su vez se genera un incremento del mayor grupo guerrillero
colombiano, las FARC, que hacen una serie de tomas en el sur del país, dejando claro la
transición de un grupo armado de guerrillas a un ejército de posiciones. De la misma
manera en el norte del país se va ir forjando y consolidando grupos de extrema derecha que
se denominan autodefensas.
14
Con la llegada de Andrés Pastrana se da un acercamiento con la guerrilla de las FARC en
procura de un proceso de paz, se da un fortalecimiento de las Fuerzas Armadas, con el
apoyo de los EU a través del Plan Colombia. El apoyo político que tenía este grupo
guerrillero se fue disminuyendo debido – en gran medida- a que sus ataques no disminuyen
y cada vez más se cuestiona este proceso de paz. Comienza la expansión paramilitar desde
el norte del país, su modelo de guerra empieza a ser emulado en otras regiones del país y a
generarse el concubinato con políticos regionales, lo que más adelante se denominaría
como la para-política.
Por último, el gobierno de Álvaro Uribe Vélez quien, con un discurso de “mano fuerte y
corazón grande”, logra mermar el poder armado de los grupos guerrilleros. Se ve un
repliegue táctico por parte de las FARC (como de otras agrupaciones guerrilleras) y una
disminución de sus operaciones militares. Con los grupos paramilitares se logra un proceso
de desmovilización y entrega a la justicia. Hay un fortalecimiento de la Fuerza Pública, mas
presencia de tropa y se ha llegado a un Ejército más profesional, pero a su vez más
violatorio del DIH.
Debido a todo lo anterior, Colombia ostenta a nivel mundial como uno de los países donde
más se genera el fenómeno del desplazamiento forzado, donde se viola sistemáticamente el
DIH por parte de todos los grupos armados, el PIB para gastos de guerra es el más alto de
Latinoamérica20
. Colombia es percibida en la región como un foco de inestabilidad. “La
20 Para sustentar lo afirmado cito una importante página web: http://www.codhes.org/. En esta página de
Codhes se pueden consultar varios informes sobre Derechos Humanos en Colombia. Igualmente se puede
consultar las páginas de: http://www.nuevoarcoiris.org.co/sac/, http://www.planetapaz.org/, http://www.ideaspaz.org/index.php. Es decir en la época objeto de estudio, hay un incremento de este tipo de
organizaciones.
15
historia del tiempo presente no solo es una inquietud de los historiadores, sino una
necesidad social que nos debe permitir entender las fuerzas profundas que están definiendo
nuestro abigarrado presente”21
.
Conclusiones preliminares de la investigación
Sin duda alguna los medios de comunicación son generadores de opinión pública. En ese
sentido, los medios impresos y en su caso particular la caricatura editorial inciden en la
formación de esa opinión.
En ese sentido, es diciente el caso de El Colombiano y El Tiempo. En el caso de El
Tiempo, para el año 1991 de las aproximadamente 360 caricaturas editoriales, hay 86
caricaturas editoriales que aluden al tema de investigación. Con respecto a El Colombiano,
el registro de 10 años (1991-2000) da como resultado 524 caricaturas editoriales. Lo cual
nos dice que la temática del conflicto interno armado es la más recurrente. Teniendo
presente que hay otras temáticas, que para efectos de la investigación son alrededor de 20
temas diferentes22
.
Con lo anterior, se puede afirmar que temas concernientes al conflicto interno armado
colombiano son predominantes en la caricatura editorial. Pero esta afirmación no es del
todo cierta si se compara, por ejemplo, con El Heraldo. Este diario barranquillero da mayor
21 Ibíd. Pág. 51. 22Los temas de la caricatura editorial los he discriminado en: senado-corrupción-clientelismo; calidad de vida-
impuestos-desempleo; pobreza-diferencias socioeconómicas; conflictos del mundo; justicia-fiscalía-entes
control; industria-economía-empresas; medio ambiente-catástrofes; transporte-estado vías; ferias y fiestas-reinados-celebraciones; candidatos-elecciones-partidos políticos; gobierno-ministros; E.U.; otros; conflicto
interno armado colombiano.
16
interés a un comic. Para el año 1991 “Panchita” registra 228 entregas. Sus temas, además
de jocosos, están relacionados con actitudes picarescas, la vida promiscua de una joven.
Pero a excepción de El Heraldo, en los restantes diarios consultados es predominante la
anterior conclusión.
Se percibe por parte de los caricaturistas un énfasis al tema de la paz, de una solución
política al conflicto interno armado. El símbolo de la paz, una paloma blanca y en su pico
una rama de olivo, es el preferido por los caricaturistas. Claro, se recalca la ineptitud de los
distintos gobiernos en las mesas de negociación; pero de la misma manera, se insiste en el
poco o nulo interés por parte de los actores ilegales de llegar a una pronta solución.
El uso de la imagen de la muerte, es decir la parca, es muy recurrente por parte de los
caricaturitas. Ningún actor armado es ajeno a este tipo de representación: ya sea la Fuerza
Pública con lo que se ha denominado “falsos positivos”, o los mismos grupos armados
ilegales: ya sea las Farc o los paramilitares.
17
Fuente: El Espectador, Abril 22 de 1991, Pág. 3A. Caricaturista: Covo
La anterior caricatura representa un hecho del ideario político colombiano: el pensar que
con las normas que se cambia la realidad. El caricaturista es escéptico a la nueva Carta
Constitucional. La ola más grande, que viene siendo la guerrilla y descendiendo otras
manifestaciones del mismo flagelo.
18
Fuente: Vladdografias: diez años de caricaturas. Editorial Planeta, Bogotá 1996.
En esta imagen se puede observar como el caricaturista Vladdo simplifica una serie de
acontecimientos en una sola imagen. Dando a entender que a pesar de todo lo malo, de toda
la sevicia de los actores en conflicto siempre habrá una salida simplista a los problemas, en
este caso un reinado de belleza. Es recurrente que el símbolo de la paz este en un estado
agonizante.
19
Fuente: El Colombiano, Abril 13 de 1999. Pág. 5A. Caricaturista: Paris.
Se percibe en esta caricatura elementos del DIH. Se representa a Colombia en un estado
paupérrimo y decaído, dando entrever las condiciones de dejación por parte de sí mismo. Es
de las pocas imágenes donde se representa a Colombia no como un símbolo femenino, sino
masculino. La imagen apartada del médico es la que el caricaturista le da a la Comunidad
Internacional, la cual realiza sus diagnósticos pero sin ser partícipe de una solución en el
terreno.
20
Fuente: Un Pasquín, Numero 31, Abril/Mayo 2008, Pág. 6. Caricaturista: Vladdo
La imagen representa el flagelo del desplazamiento interno colombiano, como
consecuencia del conflicto armado. Es un escenario desolador y sin aparentes esperanzas.
21
Fuente: El Colombiano, Noviembre 25 de 1992, pág. 5A. Caricaturista: Ricky
El caricaturista refleja en esta viñeta la posición, entre dos fuegos, de la población civil. La
figura de la derecha es el de la Fuerza Pública con sus respectivas insignias militares, que le
connota su rango. A la izquierda algún miembro de un grupo insurgente.
22
Fuente: El Tiempo, Octubre 2 de 1991, pág. 5A. Caricaturista: Guerreros
La anterior es una representación que ejemplifica la idea permanente de los caricaturistas
con respecto a los diálogos de paz. Dando a entender que en el conflicto armado
colombiano todos son víctimas.
23
Bibliografía
ACEVEDO CARMONA, Darío. Política y caudillos colombianos en la caricatura editorial,
1920-1950”. Medellín: La Carreta Política, 2009.
BURKE, Peter. Visto y no visto. Barcelona: Editorial Crítica, 2005.
COLMENARES, Germán. Ricardo Rendón: una fuente para la historia de la opinión
pública. Bogotá: Tercer Mundo, 1998.
CHARTIER, Roger. El mundo como representación. Barcelona: Editorial Gedisa, 1995.
FREEDBERG, David. El poder de las imágenes. Madrid: Cátedra, 1992.
LÉTOURNEAU, Joselyn. La caja de herramientas del joven investigador: guía de
iniciación al trabajo intelectual. Medellín: La Carreta, 2007.
VOVELLE, Michel. Ideologías y Mentalidades. Barcelona: Editorial Ariel, 1985
GUTIÉRREZ, Francisco, ed. Nuestra guerra sin nombre. Transformaciones del conflicto en
Colombia. Bogotá: IEPRI-Editorial Norma.