FASE 2. PLAN DE ACCIÓN. Resultados Cecilia Carolina Moreno Guzmán Grupo 33 Prov N.L.
Se realizó el proyecto ligado al área de ¿Cómo los scouts trabajan
por un mundo en el que el riesgo por sustancias dañinas
sobre la gente y el medio ambiente sea minimizado?, así como
al eje de ¿Cómo los scouts trabajan por un mundo donde se
implementen las prácticas ambientales más apropiadas?
Se ejecutó el plan de acción para la limpieza y la concientización de
preservación en tres plazas públicas del municipio de San Nicolás de los
Garza, N.L. Esto se llevó a cabo el 2, 8 y 11 de enero del 2014, en aras de
decir “Empezamos el año cuidando el medio ambiente”, siendo esta
actividad una acción representativa.
Como parte de la primera fase, planeación, se seleccionaron los
parques y se organizaron los grupos de jóvenes afines a las colonias
para determinar las fechas en el período establecido, que era las dos
primeras semanas del año. Se elaboraron los diseños de los volantes a
entregar en las casas circundantes y los posters que se pegarían en la
zona, ambos alusivos a la concientización y la invitación a cuidar
nuestras zonas verdes.
Durante la ejecución del proyecto, en cada uno de los tres parques yo
acudí como líder. Para cada ocasión, una parte del grupo en acción
limpió el parque mientras otros repartieron los volantes. También se
pegaron los posters en superficies visibles para los visitantes.
Al terminar hubo la evaluación y reflexión. Con cada grupo nos
tomamos el tiempo de platicar sobre la importancia que tienen estas
acciones y las repercusiones de las sustancias dañinas en el ambiente,
invitando a que dieran su opinión sobre qué impacto tuvo este proyecto
en ellos y cuáles eran sus expectativas.
A continuación presento imágenes de la ejecución del proyecto y parte
de lo que expresaron tres de los muchachos que participaron y que
hablaron en representación del resto. Al final recapitulo mi experiencia.
2 de enero del 2014 Parque de la Col. Casa Bella.
Participaron:
Diana Dulce
Vanessa Oscar
Giancarlo Luis Cecilia
Mónica
8 de enero del 2014 Parque de la Col. Las Villas
Participaron:
Jesús David Ivonne
Víctor Cecilia
Alexia Carlos Cristian
11 de enero del 2014 Parque de la Col. Bet-el
Participaron:
Juan José Paola Lillian
Carolina Tania Cecilia
Eduardo Karla Mercedes
Evaluación & reflexión
Diana
Ávalos.
18 años.
Esta actividad me pareció muy interesante ya que no son cosas
que uno hace a menudo pero deberíamos practicarlo más
seguido para que a la gente que se le dio la información y nos
vio, tome conciencia y que así imiten nuestras prácticas.
A mí en lo especial me impactó mucho que a las personas no les
importa que sean áreas verdes aún así las utilizan para hacer
destrozos en las festividades y por ende dejar basura en los
parques y demás , lo que aun sorprende mas es que no se
tomen la molestia para limpiar después de terminar las
festividades. Es algo muy padre participar en este tipo de
actividades ecológicas y si por mi fuera lo haría siempre y
obviamente hay que tomar acciones , y sobre todo concientizar
a más y más personas para que así poco a poco nuestra cultura
en ese sentido se vaya puliendo.
Víctor De
Anda.
17 años.
La verdad me sorprendió mucho la basura tirada porque normalmente hay
pero como acababa de pasar año nuevo estuvieron tronando cohetes e
imagino que no les importó dejarlo así de sucio, y pues está mal.
Yo no me involucro mucho con lo del medio ambiente pero esta vez me di
cuenta del impacto que tiene por ejemplo una simple fiesta y todos los
desperdicios que ocasiona y que a veces se nos hace fácil dejarlo ahí, porque
suponemos que alguien lo va a recoger, pero si es de nosotros es justo que
nosotros lo pongamos en su lugar, no en la calle donde no pertenece y menos
en los parques que son zonas verdes. Me dio mucha cosa que todas las
plantitas estaban cubiertas de papeles porque parecía que la gente lo hizo a
propósito. También la gente se nos quedaba viendo pero no nos daba nada
de vergüenza porque así es como deberíamos ser todos los ciudadanos
siempre: conscientes de que es nuestra responsabilidad cuidar los árboles y
las plantas y de reparar el daño que hacemos. Con los posters que pegamos y
con los folletos espero que ahora todos los que vayan al parque sigan las
recomendaciones de no tirar basura, recogerla y ponerla en su lugar y cuidar
los árboles.
Evaluación & reflexión: mi experiencia Ahora que terminé mi proyecto, me siento satisfecha por haberlo
llevado a cabo. Creo que cualquier grupo de jóvenes con iniciativa son
capaces de repetir las acciones que aquí hicimos o de realizar
actividades similares. No se necesita ser
experto ni tener recursos exorbitantes, y el
tiempo que se invierte se convierte en una
tarde de diversión. De hecho esa es una de las
cosas que más me gustó: no fue tedioso, no fue
aburrido.
Las horas que gastamos en cada parque fueron
horas en las que estuvimos entre amigos,
joviales y sintiéndonos útiles. Todos los muchachos que participaron
expresaron que era la primera vez que hacían tal cosa, y en las tres
plazas no faltó alguno que comentara entre risas, mientras se agachaba
con la bolsa: “No vuelvo a tirar basura”. También comentaban cosas
como “Cuando venga al parque, les voy a contar a mis amigos que yo
ayudé a limpiarlo y toda la experiencia” o “Ya no voy a permitir que con
quien ande tire basura donde se le dé la gana”.
Para mí no fue la primera vez que entraba en una “campaña de
limpieza” pero sí lo era en cuanto a que las áreas fuesen parques
Para mí el cuidar los lugares públicos como los parques es muy
importante porque habla mucho de las personas que viven a su
alrededor y la limpieza que tienen, sobre todo hablan de su
comportamiento frente a la Tierra. Es obvio que existen
excepciones, pero todo esto habla mal de la sociedad y del país.
Por eso esas excepciones podemos hacer el cambio. Espero que la
gente se dé cuenta que todos podemos ayudar porque no nos
cuesta nada.
Ahora estamos en un mundo que no tiene respeto por la
naturaleza, que la dañamos. Hay que ser sustentables, hay que
aprenderlos efectos dañinos que tienen nuestras acciones.
Tania
Agüero
14 años.
públicos, y en cuanto a que se tratara de algo que yo organizara. Con
respecto a eso, no se me presentaron grandes dificultades. Los posters y
los volantes fueron diseños míos que quise acatar a lo que eran los
objetivos del proyecto, fáciles de entender, atractivos y sucintos. La
basura que recogimos fue en general papel periódico, producto de los
cohetes que se usan en las fiestas de fin de año. En el primer parque fue
el mayor reto, puesto que verdaderamente el lugar estaba bañado de
papeles dado que los trabajadores de municipio aún no pasaban por el
lugar. Aún así, nos dio gusto ver dos bolsas de basura llenas en un
rincón del parque, señal de que algún vecino quiso recoger el área. En el
segundo parque ya habían recogido la mayor parte y habían hecho
montoncitos; sin embargo, con la extensión que tenía y dado que los
trozos de periódico se perdían entre las hojas caídas, aún había mucho.
También empezábamos a encontrarnos con botellas de plástico, de
vidrio y con bolsas de comida chatarra. Esto también sucedió en el
tercer parque, de extensión más pequeña, pero también con incontables
recortes de periódico; la observación aquí fue que había botes de basura
instalados en el lugar, a diferencia de las dos plazas anteriores.
En lo que más batallé fue en reunir a los voluntarios. La indiferencia es
pues una de las cosas que debemos corregir en la sociedad y en nosotros
mismos, ya que debido a esa actitud se presentan todos estos problemas
que existen y que vemos día con día, no sólo en el ámbito ambiental. Por
lo mismo me doy cuenta que es importante que las acciones no se
queden entre la misma gente, entre los scouts o en la familia, sino que
vaya más allá, que realmente se incite a dar un impacto. Pequeñas
acciones en conjunto hacen la diferencia. Todos los que participamos
estamos de acuerdo en ello.
Cuando los chicos me preguntaban que para qué hacía el proyecto o de
qué trataba la insignia, les contaba de todas las acciones que hice en los
últimos meses y terminaba diciendo que, una vez allí, las acciones ya no
las hacía ni siquiera para ganarme un parche. Me di cuenta que quería
llevar a cabo el proyecto porque sabía lo que significaba, sabía que
estaba contribuyendo a un mundo mejor y sabía que era más una
responsabilidad que un mero trámite. Y me siento muy contenta.