José Arévalo Pérez Rodriquez
Gestión de Almacén
El objetivo general de una gestión de almacenes
consiste en garantizar el suministro continuo y oportuno de los
materiales y medios de producción requeridos para asegurar los
servicios de forma ininterrumpida y rítmica.
La Gestión de Almacenes se sitúa en el Mapa de Procesos Logísticos
entre la Gestión de Existencias y el Proceso de Gestión de Pedidos y
Distribución. De esta manera el ámbito de responsabilidad (en cuya
ampliación recae la evolución conceptual del almacenamiento) del
área de almacenes nace en la recepción de la unidad física en las
propias instalaciones y se extiende hasta el mantenimiento del
mismo en las mejores condiciones para su posterior tratamiento.
La gestión de almacenes para tener una gran importancia y unos
claros objetivos deben plantearse la rapidez de entrega, fiabilidad,
maximizaciones de productos disponibles, minimización de las
operaciones de manipulación y transporte y cada uno de ellos nos
aportara unos beneficios y nos justificaran la importancia el porqué
de la gestión de almacenes ellos son la reducción de tareas
administrativa, mejora de la calidad del producto, reducción de
tiempo de proceso y nivel de satisfacción del cliente.
La función de un almacén depende de la incidencia de
múltiples factores tanto físicos como organizacionales, algunas
funciones resultan comunes en cualquier entorno, dichas funciones
comunes son recepción de materiales, registro de entradas y
salidas del almacén, mantenimiento de materiales, y una
coordinación con los departamentos de control de inventarios y
contabilidad.
Cada gestión que se plantee en una empresa para el desarrollo del
funcionamiento del almacén se deben considerar cada una de las
funciones ya mencionada ya que si cumplimos con cada una de ella
tendremos una gestión de almacén satisfactoria para el
funcionamiento de la misma.