Un poquito de historia: De origen húngaro, nacido en Bratislava en 1879, fue uno de los
pioneros e iniciadores de las nuevas concepciones sobre el arte del movimiento expresivo y de la
danza. Su obra se desarrolló primero en Alemania (1920) y luego en Inglaterra, país donde vivió
hasta su muerte (1958). Intentó en todo momento comunicar y compartir sus conocimientos.
Dos son los sistemas complementarios que constituyen el pilar de su obra: laLabanotación y
la Danza Educativa Moderna, también llamada Danza Expresiva, Danza Libre o Danza
Creativa.
El análisis del movimiento de Laban, parte de su experiencia en escuelas de danza moderna, en
Europa, allá por los años 40. Según Laban “los aspectos expresivos y comunicativos del
movimiento se pueden discernir, tomar nota y codificarlos utilizando las múltiples variables de
las localizaciones espaciales y de los factores de movimiento designados como esfuerzo”.
Cuando dos personas comienzan a moverse, sus cuerpos se desplazan a través del espacio. La
forma en que se mueven cada una es diferente, porque expresa estilos, historias de vida y
personalidades diferentes. Estos aspectos cualitativos o dinámicos del movimiento se describen
en términos de esfuerzo –a partir de la cual ha nacido toda una teoría.
En la teoría del esfuerzo se consideran 4 factores fundamentales: espacio, tiempo, peso y
flujo.
Espacio: Directo (caminar recto) o flexible (caminar sinuoso)
Tiempo: Rápido (movimiento cuando por accidente tocas una estufa caliente) a lento (caminata
sin prisa)
Peso: De fuerte (movimiento vigoroso y enérgico) a liviano (movimiento delicado y sensible)
Flujo: Contenido (cuando se camina con cuidado sobe rocas cortantes e irregulares) o libre
(movimiento difícil de detener)
El esfuerzo –según Laban- se expresaba en 8 movimientos básicos: flotar, golpear o
arremeter, deslizar, dar latigazos, palpar, retorcer, sacudir, empujar.
“Lo que se expresa a través del movimiento nunca puede expresarse con palabras, en un simple
paso de baile, por ejemplo, puede estar presente una reverencia de la que apenas tenemos
conciencia. Sin embargo, a través de ello, algo puede circular hacia nosotros y desde nosotros ir
más allá”: lo dice Laban…
Laban es el primero en señalar la importancia de la danza en el mundo de la educación y la
sitúa al mismo nivel que las otras materias. Defiende el movimiento como un arte fundamental
por el que se educa la integridad del ser como unidad sensitiva, emocional e intelectual. Ofrece
no sólo un terreno para descubrir y experimentar el movimiento, sino que propulsa un medio de
formación, de expresión y de comunicación que favorece el espíritu crítico y las facultades
globales del ser.
¡Qué te vaya bonito!