Microrrelatos en 100
palabras
Estaba enfadado.
-Pero, ¿qué te pasa?
Tenía el ceño fruncido y miraba hacia la ventana. Giré la cabeza para comprobar qué se veía desde ella. Era el árbol de nuestro jardín grande y enhiesto, detrás de él se adivinaba el cielo azul. Eso me dio una idea.
-¿Salimos a jugar al jardín?... ¡Venga!
-¡No quiero!
-A ver, Daniel, ¿por qué estás enfadado?
-Desde que papá plantó el árbol, no puedo mirar por la ventana. Quiero ver los pájaros, el sol, el cielo,...
Entonces me fui y a los pocos minutos volví con un dibujo y lo pegué en la ventana. Mi hermano sonrió.
Carmen Pinelo Báez
EN BUSCA DE LA FELICIDAD
Era verano, hacía un día magnífico, María como todos los días se marchó
junto con su madre María Enriqueta al campo.
María era una niña de 14 años, vivía en un pequeño pueblo cerca de
Méjico. Era muy alegre y divertida; su rostro era muy peculiar y su piel era más
clara de lo normal. Estos detalles y algunos más le hicieron pensar que era
adoptada.
…2 años más tarde...
Tras una larga enfermedad se murió su madre adoptiva y ella decidió
volver donde nació, a España. Allí residía su familia biológica al completo. En
ese país encontró la felicidad...
María Ortega Moreno
Las Cabañas Del Pintado
Todo comenzó cuando yo tenía diez años. Todos los veranos, solíamos ir
de vacaciones pero en ese año mi madre me preguntó si quería ir de
campamento. Yo, confuso, le respondí negativamente porque no sabía cómo
eran los campamentos. Dos años más tarde, lo volvió a intentar y me convenció.
Al ser el primer año, me llevaron en coche para ellos conocer también el
campamento. Al llegar, estuve solo y muy cortado hasta que llegaron los
autobuses. Me pusieron en una cabaña sin conocer a nadie, pero a medida que
fueron pasando los días, estuve mucho más feliz y contento.
Francisco José Luque
"No vuelvas a dejarme"
Salió dando un gran portazo, estremeciendo así hasta al hombre sordo que se pasaba las horas frente al televisor; pareciera que sin comer, ni dormir.
- ¡Taxi! ¡Al aeropuerto!- dijo montándose en el taxi sin ni siquiera fijarse si estaba ocupado.
Mientras iba de camino al aeropuerto, miraba por la ventanilla como si buscase algo. De repente sus ojos se fijaron en una persona y gritó:
- ¡Pare aquí!- dijo soltando un billete a la vez que se bajaba del taxi.
Corrió hasta llegar a un hombre uniformado y dijo entre sollozos y lágrimas:
- Amor, no vuelvas a dejarme.
Elena García Domínguez
Thriller, de Michael Jackson, era la canción que sonaba por la radio.
Serían las tres de la madrugada de, justamente el día en que murió el rey
del pop, cuando de repente se encendió el equipo de música y empezó a sonar a
toda voz, yo, rápidamente me desperté, me puse las zapatillas y cogí el móvil
para utilizarlo como linterna.
Cuando bajé y apagué la música, empiezo a escuchar un sonido que venía
del cuarto de baño, era el cepillo de dientes eléctrico que, sin más, empezó a
funcionar.
Al final conseguí acostarme, aunque todavía pienso qué ocurrió ese día.
Marina Gil Mesa
Respuesta no recibida
…Y no me respondió. Estaba sentada en clase de Lengua aburrida, cuando el
profesor propuso la magnífica idea de redactar un texto narrativo de cien palabras, ni
noventa y nueve, ni ciento una, ¡cien! No era el día más indicado para tener que
redactar esa composición de palabras, ya que sinceramente ni tenía ganas, ni estaba de
ánimos para hacerlo. Estaba frente al cuaderno completamente en blanco, y solo se me
ocurría la idea de escribir sobre mi verano, pero la verdad, no estaba en disposición de
recordarlo todo. Ya cansada de pensar, le pregunté al profesor sobre qué escribir.
Sara López Aracil
Iba mi amigo José un día por la calle camino a casa cuando sintió un
escalofrío casi sin pensarlo se giró de forma espontánea y para su asombro vio a
una persona que disimulo al ver que se fijó en él. José siguió su camino pero
cada vez que giraba una esquina se fijaba en si aquel hombre con capucha seguía
el mismo camino. Hizo un giro en una calle que cambio de dirección a la que iba
y seguía detrás eso le confirmó que le perseguía. De pronto se despertó y
descubrió que era solo un mal sueño.
Adrián Escudero Barra
Mi primer novio
No me contestó, se quedó sin palabras, todo esto se remonta a hace unas horas. Yo iba andando cuando me encontré con María, la saludé y le di dos besos:
-Hola. ¿Cómo estás?
-Bien. ¿Y tú, Laura?
-Yo regular.
-Y eso.
-Por qué no encuentro a Daniel.
-Ah bueno, creo que está en su casa, lo siento me tengo que marchar.
-Adiós.
Me dirigí a su casa. Le conté que hace unos años ya me empezó a gustar, él se quedó sorprendido y me lancé:
-Bueno quería decirte…
Aquí estábamos, se quedó sin palabras, y de repente me contestó que sí.
Francisco José Jiménez Molina
¿La Amistad?
Alguien me dijo una vez que sólo los verdaderos amigos son los que
duran toda la vida, y la verdad es que no sé qué pensar…
Considero a mis amigos aquellas personas en las que puedo confiar, las
que me transmiten confianza y seguridad para poder contar con ellas cuando lo
necesite, aquellas personas que sé que si tengo alguna pelea con ellas, sé que no
corro el riesgo de perderlas, eso es para mí la verdadera definición de amistad.
La única parte negativa de esto es saber que sólo ha habido, hay y
seguramente habrá en mi vida así.
Ana López Veloso
¡Qué sorpresa!
Ese día iba andando por el parque, aunque un poco más preocupada. Su
perro ya no estaba con ella y la vida ya no la veía igual. Toti, su perro, llevaba
con ella desde los dos años y habían crecido juntos. Su madre había intentado
consolarla: "ya pasará, todo es pasajero, hija", pero eso no le había servido de
nada. Toti había sido atropellado y ella lo había visto todo. No se le olvidaría
jamás. Iba esa tarde a casa de su abuelo, su madre le había llamado: " ve a ver a
abuelo". Llegó y un perro nuevo esperaba allí.
Rocío Librero Rodríguez
UN DÍA EN ELPARQUE DE ATRACCIONES
Se despertó temprano como de costumbre, pero esta mañana estaba
ilusionada. Tomó su desayuno veloz, y al terminar subió rápidamente a su
armario para comenzar a vestirse.
En la otra punta de la ciudad, él ya estaba en el taxi; este se dirigía al
parque de atracciones ya que era el lugar de encuentro de ambos.
Eran las 11:00 y ella aún no había llegado. Decidió esperarla con un
algodón de azúcar, aunque él no debía tomarlo.
Al fin llegó ella, y juntos pasaron el mejor día de sus largas vidas. Él tenía
75 años y ella 67. SE AMABAN.
Mariana Martínez García
El día que contestó
Y no me respondió desde hace una semana, y no sé nada de ella, le envié
un correo, en el que le pregunté cómo se encontraba, que hacía tiempo que no la
veía. Seguía sin contestarme al correo, y yo, cada vez me preocupaba más por
ella; pasaron tres días más y tampoco me contestó, estuve a punto de ir a
buscarla a su casa, hasta que antes de salir de mi casa escuché que me habían
mandado un correo y fui corriendo a ver si era ella, y al fin me contestó y
pudimos salir ese día para saber qué pasó.
Juan Jesús Reina Lora
Un día, en mi casa, estaba tumbado en la cama y al lado mi perro José.
Eran las 11:00 y estaba desayunando y abriendo una lata de comida para mi
perro. Cuando le llamé, vi que no estaba en casa, me vestí rápidamente y cogí el
coche para buscarlo. Fui preguntando a las personas que estaban paseando por
la calle, o trabajando, pero me dijeron que no habían visto nada. Entonces se lo
pregunté a un anciano y me dijo:
- ¿Es igual que el perro que tiene en el coche?
Entonces vi que mi perro estaba sentado tranquilo en el coche.
Jesús Arincón Rico
EL BARCO SOLITARIO
Zarpamos del puerto de Cádiz. El mar estaba revuelto, y por eso íbamos
muy deprisa.
Anocheció y toda la tripulación cansada del viaje, se fue a sus camarotes a
descansar. Fue por la mañana cuando me di cuenta de que todo el mundo había
desaparecido, estaba completamente solo.
Me estaba volviendo loco, no sabía qué hacer. ¿Qué podría haber pasado
para que todo el mundo desapareciera?
En ese momento me desperté sobresaltado.
Fui hacia la proa, allí estaban mis marineros trabajando para llegar al
amanecer a las Américas. Me quedé en paz... Al descubrir que todo había sido
un sueño.
Antonio Manuel Nuño Ruiz
CIEN PALABRAS PARA LA HISTORIA DE UNA RATITA
Suena el cascabel. Creo que viene por el pasillo, así que me esconderé en
la lata de tomate Orlando de la cocina ¡Esa gata blanca me lleva persiguiendo
desde hace más de dos semanas! Se llama Clara y es la nueva mascota de mi
vecino Oscar. Yo me llamo Rati y no soy la ratita presumida, ni una de
biblioteca, solo un pequeño roedor de una casa en la calle 13. Llevo una vida
normal como la de cualquier ratita; como queso, soy perseguida por gatos, de
vez en cuando salgo a tomar el sol y mi casa está en un hueco de la pared.
María Pizarro Gallardo
El espejo
Érase una vez una niña llamada Daniela. Desde que era
pequeña había sido un poco diferente. Los demás niños de su edad la
trataban mal. Cuando Daniela empezó a darse cuenta de esto se fue
encerrando en sí misma. Se sentía muy mal cuando los demás se
reían de ella y la dejaban de lado. Daniela no comprendía por qué si
ella era igual que todos los demás. Tenía dos ojos, dos brazos y dos
piernas, como todo el mundo. Seguía sin comprenderlo y lloraba en
silencio. Un día se miró al espejo y lo comprendió. Ella no era
hermosa.
Carlota Cano Muñoz
Encerrados
Amanece el día, miro a mi alrededor y no veo nada. En el techo hay una
pequeña rendija por donde entra algo de luz. Ando dos pasos a mi derecha y se
encuentra mi amigo todavía dormido, lo despierto. Estamos los dos encerrados
en una habitación de poco más de dos metros cuadrados. Buscamos
desesperadamente la puerta pero no la encontramos, abrimos la rendija pero
detrás de la misma había un cristal. Intentamos ver qué había pero no llegamos.
De repente me pego un pequeño golpe con la pared… Aparecí en mi cuarto, todo
había sido un sueño casi real.
Daniel Albarrán Lora
15 años perdidos
Todo empezó en el autobús, de camino al campamento.
Yo me subí el primero con un amigo y ella, la tercera. Al llegar al
campamento me hice su amigo, era muy buena gente y guapísima.
En los siguientes días me enamoré de ella y decidimos salir durante ese
tiempo. Le di mi corazón junto a mi virginidad. En el último día ella me dejó
una caja con una nota:
- No la abras hasta llegar a casa.
Llego a mi casa, la abro; una gran sorpresa que me cambió la vida, pues
había una carta que decía:
- Bienvenido al mundo del sida.
Francisco Rodríguez Muñiz
Ayer mismo pasó. Llevaba como tres meses viéndome, pero nunca tan
cerca. Tanto tiempo preparándome para este día y cuando llega me escondo
como una ratita se esconde del ataque de un gato. Mi madre tuvo más valor que
yo y abrió la puerta. Yo hice como el que pasaba para ir a la cocina. Entró al
salón para hablar con mi madre. Dos días más tarde mi madre me dio la noticia,
era mi hermano perdido. Lo adoptaron. Él quiso encontrar su verdadera familia
y lo ha conseguido. Ahora entiendo por qué tenía ese curioso parecido conmigo.
Alicia Miranda
Luchaba con soltura y valentía, luchaba con bastante rapidez y fuerza, fue
uno de los piratas más temidos de los mares europeos, el capitán Jon Prais,
capitán del navío Ana María de Santana. Digo fue porque ya murió, la guardia
española le tendió una emboscada en el mar cantábrico. Iba buscando un tesoro
que se encontraba en Francia, era el tesoro más buscado por todos los piratas.
Se enfrentaron unos sesenta marineros contra como mínimo doscientos
soldados. Jon estaba perdido, la mayoría de sus tripulantes o estaban muertos o
se habían tirado al mar, fue una masacre. Apenas tenía escapatoria, le
invadieron el barco y apresaron a los pocos marineros que quedaban y a él lo
fusilaron.
José Mª Gil-Toresano