MATERIALES PARA EDUCADORES
HERMINIO OTERO
PARÁBOLAS EN SON DE PAZ
EDITORIAL CCS
HERMINIO OTERO
PARÁBOLAS EN SON DE PAZ
EDITORIAL CCS
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de BXTORWU. CCS: www.editorialccs.com
© Herminio Otero
© 1993. EDITORIAL CCS, Alcalá, 166 / 28028 MADRID
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Diagramacion editorial: Concepción Hemanz (Oficina Técnica CCS) Ilustraciones: Clara Abad ISBN: 84-7043-743-7 Depósito legal: M-26934-2003 Fotocomposición: M&A, Becerril de la Sierra (Madrid) Imprime: Franjograf S.L. (Madrid)
Presentación
PARÁBOLAS EN SON DE PAZ
Tienes en tus manos, educador, unas Parábolas en son de paz. Son parábolas para educar en la paz.
Quiero regalártelas precisamente ahora, cuando para algunos parece que ya se ha acabado eso de la paz. Al menos no se habla tanto de ello. Creo que se puede hablar... y actuar.
La Reforma Educativa nos pide imaginación para impregnar toda nuestra tarea educativa de una dimensión fundamental: el eje transversal de educación en la paz.
A eso quieren servir de ayuda estas Parábolas en son de paz.
- Son parábolas, que es la mejor forma de llegar al corazón de los humanos y al corazón de la verdad.
- Son parábolas de ahora y de siempre: la vieja sabiduría que ha pacificado corazones y las nuevas formas que buscan un compromiso más directo con la realidad.
- Son parábolas para educar en la paz: Parábolas para descubrir la paz a nuestro lado. Parábolas para descubrir y cambiar los caminos que amenazan la paz. Parábolas para buscar la paz cada día. Parábolas para preparar nuevos caminos de paz. Parábolas para soñar la paz con imaginación. Parábolas para comprometerse y trabajar juntos por la paz. Parábolas para construir poco a poco, dentro y fuera de cada uno, la paz: la paz interior y la paz social. Parábolas para cultivar y contagiar por doquiera la paz. Parábolas, en definitiva, para vivir en paz.
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No sólo en la Escuela; también en el tiempo libre, en los grupos juveniles, en la Educación de adultos, en los encuentros ocasionales... pueden sonar estas Parábolas en son de paz.
Aquí está la letra; necesitan ahora vida. Que tú seas capaz de poner la música... y hacer que estas parábolas suenen en son de paz.
Herminio Otero Madrid, 21 de septiembre de 1993
Día Mundial de la Paz
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Introducción
EDUCAR CON PARÁBOLAS EN LA PAZ
Existen abundantes obras teóricas y prácticas que ayudan a los educadores a poner las bases y desarrollar el programa de una educación en la paz y para la paz. Este libro parte de ellas y las presupone, pues tiene en cuenta que existen y que desarrollan ampliamente la teoría y práctica de la educación en la paz. Acudan, pues, a ellas los educadores. Y, sobre todo, no busquen aquí lo que en ellas han de encontrar y sin lo que este material carecería en cierta medida de sentido.
Lo que aquí ofrecemos es una recopilación de parábolas que creemos pueden servir para educar en la paz según la teoría y práctica propuestas en esas obras. Las parábolas, eso sí, están estructuradas en torno a diversos núcleos y dispuestas con cierta lógica dentro de ellos. A todas les acompañan una lista de temas o descriptores, una reflexión con alusiones a la experiencia vital que se encierra en ellas (y que no quiere ser moralista) y varias propuestas de actividades específicas para cada caso.
Esta obra, pues, quiere ser un material vivo puesto en manos de educadores que viven con entusiasmo, educan partiendo de las necesidades y deseos de los educandos, trabajan creativamente y confían plenamente en sí mismos y en los demás.
Nuestra propuesta, que no excluye a ninguna otra sino que las integra, es educar en la paz con creatividad a partir de las parábolas, que son, más que ninguna otra cosa, patrimonio mundial de la humanidad.
1 . Descubrir las parábolas
Cuentan que el último día de la Edad de Oro la Verdad se quedó dormida.
Aquel momento fue aprovechado por la Mentira, que, acercándose hasta la Verdad, le robó las vestiduras. Y la Mentira se presentó al mundo.
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AI despertar, la Verdad -totalmente desnuda- acudió presurosa entre los hombres. Pero estos la rechazaron. Desolada, la Verdad se retiró al desierto. Allí encontró las ropas que le había robado la Mentira. Se las puso y nuevamente se presentó ante los humanos. Desde entonces fue identificada ya con la Mentira y aceptada.
A partir de aquel día, la Verdad adoptó la forma de parábola.
J. J. BENÍTEZ
El lenguaje simbólico es la única manera de alcanzar el alma del mundo, o aquello que Jung llamó «el inconsciente colectivo». O sea, a través de los cuentos, relatos, narraciones, fábulas, parábolas... podemos entroncar especialmente con ese núcleo común que nos constituye. A través de las historias míticas que van más allá de la historia y que, a su vez, hacen la verdadera historia, podemos dar sentido a nuestra historia: esa que habita en el mundo de los sueños y de las posibilidades.
Sabemos que mediante los cuentos y relatos se descubren y se transmiten los valores como de ninguna otra forma. Por eso es importante trabajar con parábolas para educar en la paz. Ellas servirán mejor que ninguna otra cosa para resumir ia historia colectiva y para narrar la vida personal, para contar lo sucedido y lo que queremos que suceda. O sea, para encontrar la verdad del mundo -que alguien ha convertido en sueños- y hacerla nuestra de forma natural.
2. Contar historias
Cuando el gran Rabino Israel Baal Shempov veía el peligro que amenazaba a sus fieles, tenía la costumbre de refugiarse en un cierto lugar del bosque para meditar. Entonces encendía un fuego, decía una oración especial y el milagro se producía: el peligro quedaba descartado.
Más tarde, cuando uno de sus discípulos, el célebre Magid de Mezritch, tenía que interceder ante Dios en una situación similar, se iba al mismo lugar del bosque y decía:
-¡Señor del Universo, escúchame! Yo no sé cómo encender el fuego, pero conozco la oración.
Y aún se producía el milagro.
Mucho más tarde, el rabino Mashe Leev de Savov, para salvar a su pueblo una vez más, iba al bosque y decía:
-Yo no sé cómo encender el fuego, no conozco la oración, pero conozco el lugar y esto debe ser suficiente.
Después al rabino Israel de Rizhn le ocurrió tener que vencer un gran peligro. Sentado en una silla, con la cabeza entre las mano, se dirigió a Dios:
-Yo soy incapaz de encender el fuego, no conozco la oración y tampoco conozco dónde se encuentra el lugar del bosque. Lo único que puedo hacer es contar la historia. ¿Es suficiente?
¡Y esto fue suficiente! Parábola rabínica
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¡Contar una historia para contar la Historia! Porque nosotros mismos estamos hechos de historias: ellas reflejan y nos hacen vivir aquello que teje nuestro interior. NI los datos ni las cifras hablan de nosotros; sólo nos constituye lo que hemos vivido -personal o colectivamente- y que alguien es capaz de contar (no con números, sino con cuentos).
Por otra parte, el relato tiene la virtud de hacer presente lo que narra. Es necesario contar para conectar. La magia del sortilegio que cambia la realidad, el poder de dominar el fuego que alumbra las sombras, la capacidad de encontrar el lugar sagrado para comunicarse con los dioses..., todo eso nos lo da la parábola. Contar una historia es hacer la Historia realidad.
La fábula, el cuento, el relato, las parábolas... constituyen una vía hacia la interiorización. La leyenda, como ya dice su nombre, es un relato que requiere «saber leer»: palabras e Imágenes evocan «la otra dimensión». En esta óptica, una leyenda puede ser más «verdadera» que una relación científica porque manifiesta lo que en la experiencia es más significativo en la vida del ser humano. Y una fábula o cuento tienen un lugar preferente en la educación. Y una parábola puede ayudar a suscitar la sensibilidad y a afinar las antenas que permitan rastrear los rasgos de alteridad y de trascendencia en la vida cotidiana. Por eso las historias, relatos, parábolas... pueden convertirse en elementos clave para educar en la paz.
3. Emplear las parábolas
El Maestro impartía su doctrina en forma de parábolas y de cuentos, que sus discípulos escuchaban con verdadero deleite, aunque a veces también con frustración, porque sentían necesidad de algo más profundo.
Esto le traía sin cuidado al Maestro, que a todas las objeciones respondía:
-Todavía tenéis que comprender, queridos, que la distancia más corta entre el hombre y la verdad es un cuento.
En otra ocasión les dijo:
-No despreciéis los cuentos. Cuando se ha perdido una moneda de oro, se encuentra con ayuda de una minúscula vela; y la verdad más profunda se encuentra con ayuda de un breve y sencillo cuento.
Anthony DE MELLO
Los cuentos son algo más que cuentos. Los niños lo saben cuando piden «Cuéntame un cuento, anda». Saben que mediante los cuentos pueden llegar a vivir y sentir lo que no lograrían de ninguna otra forma: entroncar con el sentido profundo de la vida, lograr seguridad...
El verdadero lenguaje del ser humano no son las fórmulas esquemáticamente fijadas ni los argumentos lógicos, sino las historias y relatos que reflejan ambivalencias y que manifiestan miedos y esperanzas, ruindades e imprevistos heroísmos, alegrías y dolores. Los niños piden que les cuenten un cuento antes de dormir para mantener el contacto asegurador con el mundo externo representado por el adulto: antes de entrar en el reino desconocido y a veces angustioso del sueño y de los sueños, piden una palabra que les acompañe o que, antici-
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pando la fantasía del sueño, haga menos brusco el paso de la vigilia al reposo. Por eso el cuento es uno de los géneros literarios más apreciado por los niños y valorado también por los adultos.
Cuando el niño se hace adulto, sigue añorando aquella edad dorada -la colectiva también- en que los cuentos y relatos le hacían conectar con un mundo mágico y encantado. La razón viene a segar magia y encantamientos, pero las raíces quedan. Y cuando el adulto quiere conectar con «la verdad del mundo» o con las «verdades del corazón»..., vuelve a recuperar el alma de niño y acude a una parábola: ese relato que le lleva a desvelar el fondo oculto de las cosas y a descubrir los entresijos de la vida.
Emplear las parábolas -Jesús de Nazaret lo hizo como nadie- es arrojar luz en las sombras de la confusión y descubrir el sentido en un golpe de iluminación. Porque las parábolas acortan la distancia entre el ser humano y la verdad. Por eso se pueden emplear como textos vivos para descubrir las líneas básicas de educación en la paz. En esta selección nosotros aludimos en cada caso a la experiencia humana que se esconde tras cada parábola. No es para explicarlo. De seguro que cada educador u oyentes encuentran mucho más.
4. Narrar las parábolas
Mi abuelo era cojo. Un día le pidieron que contara una historia de su maestro.
Entonces contó cómo el maestro solía saltar y bailar en la oración. Mi abuelo se puso de pie para contar la historia. Y se metió tanto en la narración que tuvo que mostrar saltando y bañando cómo hacía el maestro.
Y desde entonces se curó.
Así se deben contar las historias.
Leyenda jasidin
Las historias hay que narrarlas de tal suerte que ayuden al propio narrador y que capten la atención y el corazón de los oyentes convirtiéndolos en protagonistas y agentes de la historia narrada. Para eso es necesario narrar desde dentro, creer lo que se narra, poner vida y corazón en ello, emplearse a fondo en tonos, gestos...
Narrar es un arte. Es importante que el educador desarrolle ese arte de narrar. Recordamos algunas de sus características, aun sabiendo que sólo el ejercicio y la imitación de los maestros permiten llegar a una verdadera experiencia.
1. El narrador ha de relatar de modo que el interlocutor reviva el acontecimiento y quede implicado logrando su participación.
2. Es mejor narrar el relato o la parábola que leerlo. Narrando se comunican mejor los contenidos simbólicos y los significados interpersonales.
3. La narración ha de ser flexible y expresiva. Los ojos del narrador deben encontrase con los del oyente. La voz (tono, ritmo, entonación...) y los gestos comunican la vivencia. El rostro transmite los sentimientos.
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4. En caso de leerlo a los demás, el lector ha de estar implicado emotivamente con el oyente e intentará conectar empáticamente con lo que la historia signifique para él.
5. El buen narrador se apropia de la historia, la enriquece con su persona y la hace revivir. Para eso ha de vivir interiormente lo que narra y dejarse transformar por ello. Así le será más fácil poner color y vida a la narración.
6. El buen narrador tiene en la cabeza lo esencial que quiere comunicar y está seguro de su desarrollo, de la trama, de los personajes y de los diálogos de modo que no tenga dudas durante la narración.
7. El narrador eficaz nunca pone en primer lugar la intención didáctica ni moraliza intentado sacar conclusiones de la historia.
8. Un relato nunca es la explicación de un texto. Nadie puede sustituir al oyente para encontrar el significado de la historia.
9. El relato no termina en él. Un buen narrador lo convierte en un momento de intensa participación vital: crea la atmósfera adecuada y deja que los niños y muchachos respondan a la fantasía con la fantasía. Y les invita a participar y a crear.
10. En la selección que hemos hecho, muchas parábolas se pueden narrar. En caso de que el narrador las lea, hágalo como hemos indicado. En ocasiones todos pueden tener el texto, en cuyo caso lo pueden leer personalmente o todos juntos, según las circunstancias y objetivos.
5. Trabajar con las parábolas
El Maestro era partidario tanto del aprendizaje como de la Sabiduría.
-El aprendizaje -contestó cuando los discípulos le preguntaron- se adquiere leyendo libros o asistiendo a conferencias.
-¿Y la sabiduría?
-Leyendo el libro que cada uno es.
Y como si se le ocurriera de pronto, añadió:
-Claro, que no es una tarea fácil en absoluto, porque cada minuto del día supone una nueva edición del libro...
A. DE MELLO
La parábola es nueva cada vez que se anuncia. Cada oyente la escucha de una forma. A cada uno le puede ayudar a leer (7egere=elegir) lo que él es. Por eso es nueva cada día. Y por eso se puede trabajar con las parábolas.
Nosotros proponemos diversas actividades específicas para realizar a partir de cada parábola. Téngalas en cuenta el educador si le sugieren algún aspecto en los que no había caído. Con todo, sea siempre libre para acomodarlas a las necesidades del grupo y a sus propios objetivos.
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A la hora de trabajar con las parábolas, además de lo sugerido en cada caso, intentará:
1. No explicar las parábolas; tan sólo narrarlas para «ayudar a leer el libro que cada uno es».
2. Facilitar los comentarios a partir de ellas, dado que cada vez que se narran son una nueva edición. No comentarlas sino hacer que todos muestren el agua que han removido o que ha salido del pozo interior: sentimientos, recuerdos, sugerencias, ideas...
3. Trabajar con los personajes: identificación con alguno de ellos, selección de los demás, representación, improvisación desde ellos...
4. Trabajar con los símbolos: aplicar analogías y comparaciones con diversos aspectos de la realidad a partir de los elementos simbólicos que aparecen en las parábolas.
5. Aplicar la parábola a la realidad actual, sea social, política, educativa... «¿En qué se parece lo que aquí sucede a...?»
6. Aplicar la parábola, siempre, a uno mismo. (Tener en cuenta lo dicho en el punto 2).
7. Aplicar la parábola a lo que es y a lo que podría ser: concretar qué se puede hacer, elegir algo para realizarlo, llevarlo a cabo...
8. Repetir la parábola: con otros grupos, con el mismo grupo en otras ocasiones... Y dejarse llevar por lo que surja en el grupo. Saldrán muchas ideas, nuevas interpretaciones...
9. Trabajar con la parábola convirtiéndolo en un texto vivo: representarla, inventar varios finales (dejando el final sin narrar), continuar la historia, recrearla con personajes conocidos, traducirla en un poema, elaborar otros relatos a partir de sus personajes o palabras clave, crear nuevas historias a partir de los objetos simbólicos que en ella aparecen...
10. Trabajar con los objetos que en ella aparecen: espada, flor, uvas... pueden dar mil ideas para educar en la paz...
ó. Trabajar a partir de las parábolas
Le decía un viajero a uno de los discípulos:
-He recorrido una enorme distancia para escuchar al Maestro, pero sus palabras me han parecido de lo más vulgar.
-No debes escuchar sus palabras. Escucha su mensaje.
-¿Y cómo se hace eso?
-Toma una de las frases que él diga y agítala con fuerza hasta que se desprendan todas las palabras. Lo que quede hará que arda tu corazón.
A. DE MELLO
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Nosotros creemos que «Se aprende lo que se hace; no se hace lo que lo se aprende». Para aprender a vivir en paz es necesario llevar a cabo acciones de paz y alimentar actitudes de paz. Además de lo sugerido en los puntos anteriores, ofrecemos aquí una larga lista de acciones en son de paz por un mundo en paz. Muchas de ellas se podrán concretar a partir del trabajo con algunas parábolas. Invitamos a ello.
Estas acciones requieren un sentido y un objetivo que aquí no señalamos y que el educador sabrá concretar en cada caso.
• Abrazos por la paz: Compartir y contagiar actitudes de paz mediante un cálido y largo abrazo (abrazoterpia).
• Anuncios por la paz: Preparar uno o varios anuncios en defensa de la paz. Imitar a los conocidos. Puede ser un anuncio de televisión, de prensa, de radio...
• Árbol de la paz: Plantar un árbol (o más). Y cuidarlo después: regarlo, contemplarlo...
• Biónica para la paz: Dibujar un animal cualquiera, incluyendo algunas partes internas, esquemas de funcionamiento digestivo... Hacer después otro dibujo a partir del anterior: convertir cada una de sus partes en una pieza mecánica de un artefacto (en este caso) de paz. Ponerla en funcionamiento después, siendo cada persona una pieza de esa máquina de paz.
• Cadenas de paz: Una cadena humana. O una cadena de poemas... O encar-telarse...
• Canciones por la paz: Recopilar las que hay, cantar las mejores, poner letrillas a otras músicas, inventar otras nuevas...
• Carteles por la paz: Encandelarse con carteles que contengan proclamas pacifistas, dibujos, frases...
• Cartas por la paz: A los periódicos, a los políticos, a los militares, a los novios... Enviarlas.
• Cómics por la paz: Dibujar historietas en cómic. Pueden valer estas parábolas en son de paz. Mejor inventar otras.
• Comunicados por la paz: Elaborarlos después de un debate o reflexión, repartirlos por la calle...
• Cuadros por la paz: Exposición de dibujos o pinturas preparadas por cada uno; proyección de diapositivas de cuadros de paz... Un marco vacío: en él se coloca cada día la «foto de paz».
• Debates por la paz: Sobre algún tema conflictivo. Hacerlo de modo pacífico para desarrollar en el mismo modo de realización actitudes de paz.
• Decálogo de la paz: elaborar diez puntos con actitudes pacíficas. Y pacifistas. Puede haber varios: Paz en la familia, paz en la clase, paz en la calle, paz entre las naciones...
• Denuncias por la paz: Descubrir, analizar y denunciar situaciones injustas o de violencia. Denunciar también las fábricas de armamentos.
• Desfile de modelos: Unirlo a los «disfraces por la paz»; disfrazarse de algunos personajes declaradamente pacifistas. Estos pueden responder como tales personajes, igual que si estuvieran en una rueda de prensa o como lo hacían en la realidad...
• Dibujos animados: Trabajar con ellos, además de verlos. Grabar algún frag-
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mentó y analizar la violencia contenida... ¿Por qué no preparar un pequeño guión de tema pacifista? Se puede convertir después en cómic. Dibujos en torno a la paz: De actitudes pacifistas, de acciones pacíficas, de símbolos de paz, de escenas pacificadoras... Discofórum por la paz: Recopilar, escuchar y comentar canciones que aludan a algo relacionado con la paz. Disfraces por la paz: Hacer una fiesta de «disfraces por la paz». Es esencial pintarse... unos a otros. Documentos por la paz: Elaborar y dar a conocer un dossier por la paz. Encuentros por la paz: Religiosos (de oración, como el de Asís; eucaristía...); de reflexión (tertulias, mesas redondas...). Eslóganes de paz: Crear, dibujar, plasmar, pintar, corear... Exposiciones por la paz: Libros, folletos, instrumentos de paz (los normales, pero empleados para usos pacíficos); los bélicos pero transformados... Felicitaciones por la paz: Felicitar en determinadas fechas a personas que trabajan por la paz. Fiestas de paz: Fiesta con música, baile, alegría y paz. (Y poco más). Firmas por la paz: Pero no firmar por firmar... Hacer, por ejemplo, que cada letra sea el inicio de una frase de paz... Foto de paz: Elegir cada día una foto del periódico o de las revistas y colocarla en un marco. La foto ha de reflejar actitudes o logros de paz... Frases por la paz: Cada día, en la pizarra de clase; cada semana, en la cartelera... Gestos por la paz: Hacer una lista de los todos los gestos posibles por la paz e irlos realizando progresivamente, uno en cada sesión... Acudir a la coordinadora «Gestos por la paz». Inventar nuevos gestos... Guiones por la paz: Elaborar varios guiones, ya sean totalmente nuevos o a partir de otros relatos o parábolas. Los guiones pueden ser para el teatro, para un montaje, para un videoclip, para un programa de radio... Grupos por la paz: Participar en los grupos de reflexión y acción por la paz; organizarlos si no existen... Guiñol de paz: Buscar o crear los personajes, elaborar los muñecos, preparar las obras, representar... Hojas informativas: En el portal, en las carteleras... recalcando gestos y acciones de paz. Humor por la paz: Recopilar y contar chistes referidos a la guerra y paz. Imágenes por la paz: Buscar imágenes que hablen de paz. Ponerlas en la cartelera: cada día una (noticia); cada semana otra (noticia-actitud). Investigaciones sobre la paz: Métodos de lucha noviolenta... Jornadas por la paz: Celebrar los días internacionales relacionados con la paz (Ver la lista y materiales en H. OTERO, Tiempo de vivir. 4 tomos [Otoño, invierno, primavera, verano], Editorial CCS, Madrid 1992). Juegos por la paz: Jugar, practicar juegos cooperativos, inventar nuevos juegos cooperativos... Juicios en defensa de la paz: Contra la guerra, contra la violencia... Sobre... Ver los pros y contras de una misma realidad. Libro blanco por la paz: Regalar o comprar... un libro en blanco. En él se van escribiendo las «historias de paz» que vivimos, imaginamos o recreamos.
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Libros por la paz: Seleccionar los últimos libros de literatura infantil y juvenil. O los de siempre. Hacer una exposición con ellos. Pasarlos de mano en mano. Jugar con ellos: animarlos. O sea, dar vida a su contenido. Manifestaciones por la paz: En la propia clase, en el patio del colegio, alrededor del colegio, por doquier... Manifiestos pacifistas: En favor de la paz, rechazando la violencia. (Ojo: «No condenar a los violentos ni excusar la violencia»). Mapas por la paz: Señalar en un mapa del mundo los lugares en los que existen conflictos (rojo) y aquellos en los que se llevan a cabo acciones que constituyen un mundo en paz (verde). Máquina de la paz: Diseñar la «máquina de la paz». Cuanta más fantasía, mejor. Al final se visualiza y ejecuta: cada uno es una pieza y la máquina se pone en marcha. Monumento por la paz: Con los miembros del grupo, hacer uno o varios monumentos a la paz. O con material de desecho. O con arena en la playa... Murales sobre la paz: Sólo de fotos, de títulos de periódicos, con dibujos, en relieve (pegar instrumentos simbólicos hechos con papel de periódico: una pajarita, un barco, un sombrero, un pozo...). Murales vivos por la paz: Murales en las tapias (una vez al año); en la calle (una vez al mes, un mural vivo y en relieve: varias personas toman diversas posturas y van variándolas, como si fueran estatuas móviles...); en la clase (una vez a la semana o en alguna sesión...), con fotos, noticias... Música por la paz: Buscar diversos discos de música que ayude a serenarse... Usarla en alguna sesión de relajación. Noticias de no paz: Lo mismo que la noticia de paz, pero con compromiso para superar las deficiencias. Noticias de paz: Comentar la noticia del día, elegir la noticia de la semana... Objeción por la paz: Apoyar la objeción de conciencia al servicio militar, difundir la objeción fiscal a los gastos militares... Objetos imaginarios por la paz: Imaginarlos (partir de la biónica). Realizarlos después en trabajos manuales. Oraciones por la paz: Oraciones como poemas, pero oraciones. Creadas, recopiladas. Y orar. Parábolas de paz: Inventarlas. Representarlas. Regalarlas. (No explicarlas). Pegatinas: Preparar el diseño y elaborar nuevas pegatinas, difundir las existentes... Películas de paz: Hay alguna (hay muchas más de guerra y de violencia...). No es necesario verlas enteras. Seleccionar algunos fragmentos. Verlos y trabajar a partir de ellos continuando la historia, hablando desde los personajes... Pintadas por la paz: En las tapias del colegio o de la calle (una vez al año); en la pizarra (cada día...). Poemas por la paz: Recopilar algunos poemas que se refieran a la paz. Mejor: crearlos imitando a los buenos o siguiendo pautas sencillas de creación. Premios por la paz: Dar una vez al mes o al trimestre, por votación popular, el «Premio Nuevo de la Paz»; elegir el acontecimiento local, nacional o mundial que haya ayudado a crear o mantener la paz. Es un premio nominal. Se hace llegar a los interesados (diploma, carta, notas a la prensa...)
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Proclamas de paz: Proclamar y cantar llamamientos, mandamientos, eslóga-nes... Programas por la paz: Con imaginación, proponer todas las ideas posibles para crear la paz. Estructurar después alguna de ellas en un programa realizable. Recital de poemas: Realizar la fiesta de la poesía por la paz: invitar a autores conocidos, hacer que todos escriban algún poema, recitar alguno famoso... Recortes por la paz: Recortar noticias, fotos, gráficos... que traten sobre la paz. Regalos de paz: Regalar a alguien de dentro (grupo, clase...) o alguien de fuera (gobernantes, políticos...) algo visible (pero barato), simbólico, preparado por uno mismo, dibujado... Relatos por la paz: Buscar los que existen. Pero, sobre todo, crear otros nuevos. No redactar, sino imaginar, crear... (Seguir el esquema de Rodari en Gramática de la fantasía). Representaciones por la paz: Elaborar pequeños guiones a partir de relatos, parábolas, cuentos..., sean inventados o no, y representarlos. Revista oral: Resumir diversos aspectos de un tema mediante varias páginas de una revista oral (se lee, canta, dice, pregunta... en público) como si fueran varias secciones de una revista. Revista de paz: Recopilar o crear noticias, titulares, chistes, dibujos, canciones... de paz y confeccionar una revista. Sentada por la paz: En la propia clase (sentarse pacíficamente), en las escaleras del colegio, en los parques... Semanas por la paz: Realizar algunas de las ideas aquí sugeridas y otras, especialmente con ocasión de alguna Jornada Internacional o acontecimiento especial. Silencio por la paz: Un minuto (en las grandes ocasiones...). Unos momentos (cada día, antes de comenzar el trabajo...). Una hora o jornada de desierto... Sueños por la paz: Recopilar («Ayer tuve un sueño», de M. Luther King), soñar despiertos nuevos sueños, escribirlos... Teatro por la paz: Preparar breves representaciones. (Se pueden poner en escena algunas de estas breves parábolas...). Telegramas por la paz: A alguien conocido. Hacer la síntesis a partir de varios telegramas previos cuyo contenido se resume después en uno. Temas de paz: Unir siempre la paz a la justicia, la libertad y los derechos humanos. Titulares de paz: Buscar los existentes, inventar los posibles. Trabajos manuales sobre la paz: Concretar las ideas y proyectos en realizaciones.
7. Buscar nuevas parábolas
Llegó al monasterio un escritor con la mtpnrrtí de VM l i ' á Bnltao sobre el Maestro.
-La gente dice que eres un genio. ¿Piensas tñ gae JO eres* -te preguntó.
-¡Ya lo creo que sí! -respondió el Maestre ese oc áecsassada modestia.
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-¿Y qué es lo que le convierte a uno en genio?
-La capacidad de reconocer.
-Reconocer... ¿qué?
-Reconocer a la mariposa en el gusano; al águila en el huevo; y al santo en el hombre egoísta.
A. DE MELLO
Al educador que trabaje con estas Parábolas en son de paz para educar en la paz, le invitamos a que lleve a cabo esas acciones que ayuden a reconocer -a él mismo y a los demás- «al santo en el hombre egoísta».
Nosotros hemos seleccionado ochenta parábolas de diversas culturas (china, judía, árabe, hindú, indios de América...). Otras pertenecen a autores concretos, algunos más conocidos que otros. Otras proceden de las más diversas fuentes. Al final, en la bibliografía, señalamos de dónde hemos tomado algunas parábolas, aún sabiendo que en muchos casos esos mismos autores las tomaban de otras fuentes. Por eso no siempre hemos señalado el nombre del recopilador.
Invitamos al educador a que busque nuevas parábolas y trabaje con ellas, convencidos como estamos de la eficacia de este recurso en la educación para la paz tal como lo hemos propuesto aquí. Los mismos chicos, jóvenes o adultos le ayudarán en esa tarea.
Invitamos, sobre todo, a que el educador proponga crear otras nuevas parábolas. Nosotros hemos incluido en esta selección varias parábolas escritas por niños o por adultos sin experiencia. La educación en la paz pasa también por la implicación de todos en imaginar nuevos relatos para que se conviertan después en realidad.
Entonces, después de haber narrado los sueños y aterrizado en la realidad, podremos ir con la música a otra parte, pero siempre en son de paz.
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BUSCAR LA PAZ
1. El camino de la felicidad
Es la historia de un hombre que estaba harto de llorar. Miró a su alrededor y vio que tenía delante de sus ojos la felicidad. Estiró la mano y quería cogerla.
La felicidad era una flor. La cogió. Y nada más tenerla en su mano, la flor ya se había deshojado.
La felicidad era un rayo de sol. Levantó sus ojos para calentar su cara y enseguida una nube lo apagó.
La felicidad era una guitarra. La acarició con sus dedos, las cuerdas desafinaron.
Cuando al atardecer volvía a casa, el hombre seguía llorando.
A la mañana siguiente siguió buscando la felicidad. A la vera del camino había un niño que lloriqueaba. Para tranquilizarlo cogió una flor y se la dio. La fragancia de la flor perfumó a los dos.
Una pobre mujer temblaba de frío, cubierta con sus harapos. La llevó hasta el sol y también él se calentó.
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Un grupo de niños cantaba. Él les acompañó con su guitarra. También él se deleitó con aquella melodía.
Al volver a casa de noche, el buen hombre sonreía de verdad. Había encontrado la felicidad.
E. VIETÍNGHOF
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Felicidad, búsqueda, solidaridad, colaboración, alegría, los otros, donación...
J Experiencia humana
- La búsqueda de la felicidad es una actitud constante en el ser humano. Va unida a la búsqueda de sentido.
- La felicidad, como la salud, sólo se nota cuando nos falta. Ahora se habla más de ella. Por algo será.
- La felicidad está al alcance de la mano, pero requiere nuevos ojos para ver la realidad y nueva actitud para transformarla... En el fondo es cada uno quien ha de cambiar.
- Buscar la felicidad y encontrarla de esta forma es una manera de buscar y crear la paz.
_l Actividades
1. Pensar y decir en qué pone cada uno la felicidad. ¿La logra con ello? ¿No la logra? ¿Qué tendría que hacer?
2. Seguir los pasos del hombre de la parábola: ¿en qué sentido cada uno ha seguido ese mismo camino?
3. Comparar la parábola con la frase de Tagore: «Si lloras porque se ha hecho de noche, las lágrimas te impedirán contemplar las estrellas».
4. Representar la parábola, pues se presta a ello. Prepararla incluso para un encuentro, una celebración... Pueden intervenir muchas personas: una hace de flor, otras de la casa...
5. Trabajar con los tres elementos clave: flor, guitarra, soL Elegir, por ejemplo uno de esos tres elementos, Decir cómo pueden servir para buscar y crear la paz... y llevar a cabo una de esas acciones.
6. Llevar una flor: regalársela a alguien del grupo manifestando la causa. Se puede regalar también una flor simbólica, aunque no se tenga presente
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7, Con una guitarra, cantar canciones de niños y canciones que ayuden a cambiar el mundo, o al menos a cambiamos a nosotros mismos.
8. Sol: hacer una lista de acciones que podemos realizar para dar ánimo o iluminar a alguien. Llevar a cabo al menos una de ellas.
2. El cantero buscador
Había una vez un cantero que todos los días se dirigía a la montaña para cortar piedras de la roca. Con las piedras fabricaba umbrales y losas sepulcrales. Es cierto que sus ingresos eran modestos y duro el trabajo, pero se mostraba satisfecho y no deseaba más. En cierta ocasión el cantero tuvo que trabajar para un rico. Quedó prendado de la casa del hombre rico.
-Si fuera rico no tendría que cortar piedra durante toda la jornada -exclamó.
Para su asombro, oyó repentinamente la voz del buen genio:
-Tu deseo se cumplirá: serás rico.
Pronto el cantero olvidó su vida anterior. Aquel verano fue cálido y los rayos caían con más fuerza sobre la tierra. Hubo una enorme sequía. El picapedrero rico exclamó:
-El sol es más poderoso que yo... Quisiera ser sol.
El buen genio hizo realidad el nuevo deseo. Con orgullo envió sus rayos sobre la tierra. Sólo una nube se interpuso entre la tierra y el sol.
-¿Cómo puede ser una nube más potente que el sol? Quiero ser nube.
Convertido en nube hizo llover torrencialmente. Todo se destruía a su paso. Todo menos una empinada roca que permanecía indiferente a la furia de la nube.
-Quiero ser roca -exclamó el expicapedrero.
Como en ocasiones anteriores se le concedió el deseo.
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Un día, un hombrecito llegó hasta la roca y comenzó a demoler la base.
-¿Cómo un hombrecito es más poderoso que yo...? Quiero ser picapedrero.
Y nuestro hombre volvió a ganarse el sustento con el sudor de su frente, ejerciendo su oficio primero.
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Satisfacción, insatisfacción, deseos, búsqueda, sueños, conversión, cambio, aceptación, realidad, yo...
• Experiencia humana
- Podría ser esta la parábola del hombre actual: nada le satisface y siempre busca más. En su progresión por cosas que le dan sentido, sólo lo encontrará cuando vuelva a ser lo que era...
- Lo que se logra con facilidad no se valora: enseguida queremos más, En estos tiempo conviene recuperar el valor del esfuerzo.
- ¿Dónde está la paz? La solución de la parábola no ha de llevar a una lectura conservadora: cada uno tiene que seguir donde está y como está... En cambio, la búsqueda del yo sólo se logrará dando sentido a lo que se hace... para cambiar la realidad.
Ü Actividades
1. Comparar esta parábola con el hombre (hombre y mujer) actual.
2. Pensar y escribir: ¿Qué ha soñado cada uno que no le ha dado la felicidad?
3. Describir lo que cada uno hace a lo largo de un día. Ver después en qué sentido eso le ayuda a vivir en paz o qué tendría que hacer para que le ayudara a ello.
4. Comparar cada uno de los deseos del picapedrero con algún personaje de la actualidad.
5. Escribir un relato titulado «El joven que buscaba la paz» Incluir que la va encontrando poco a poco.
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3. El amor y la guerra
Entre dos países vecinos la guerra se había hecho inevitable. Por ambas partes los señores feudales decidieron enviar espías para averiguar los puntos más débiles de la frontera del enemigo. Tras un tiempo, los espías retornaron e informaron lo mismo por ambas partes. En toda la frontera había solamente un lugar adecuado para penetrar en el territorio del enemigo.
-Allí vive -dijeron- un pequeño pero laborioso campesino en una pequeña casa con su encantadora esposa. Están muy enamorados. Y se dice que son el matrimonio más feliz del mundo. Tienen un hijo. Si nosotros invadimos por medio de sus tierras, estropearemos su felicidad. Por consiguiente, no puede haber guerra.
Los señores entendieron los motivos y es obvio que no hubo guerra.
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
Q Temas
Amor, guerra, matrimonio, familia, felicidad.,.
• Experiencia humana
- Esto es un sueño más que una realidad. Pero todavía soñamos con que la paz de unos pocos se pueda contagiar a muchos.
- Soñamos también con que los poderosos puedan descubrir los motivos sencillos que puedan libramos de la guerra...
- En realidad se anteponen los intereses colectivos -que muchas veces encubren intereses difrazados de los importantes- a los derechos personales.
J Actividades
1. «Es obvio que no hubo guerra». ¿Qué tendría que suceder para que en nuestro mundo esa conclusión fuera real?
2. Buscar noticias que muestren que esta parábola no se cumple hoy.
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3. Escribir una carta como si se fuera un personaje de esa familia (padre, madre, hijo), aduciendo las razones para que no se declare la guerra y se haga la paz.
4, Escribir un relato «más creíble» en el que los gobernantes descubren algo que les lleva a evitar la guerra y buscar la paz.
4. El mujik y el caballo
Era durante una guerra y todos huían frente al enemigo. Un mujik fue al campo y dijo a su caballo:
-Sigúeme, o los enemigos te cogerán.
- N o te seguiré -respondió el caballo- porque yo no estaré mal con tus enemigos: lo mismo me da trabajar para ti que para ellos.
León TOLSTOI
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Guerra, enemigos, tomar partido, objeción de conciencia, noviolencia...
Ü Experiencia humana
- ¿Quiénes son nuestros enemigos? Cuando la guerra se declara, es inevitable tomar partido porque uno u otro bando tira de nosotros.
- Pero hay otras soluciones y respuestas: que no decidan por nosotros los demás. Y elegir el camino de la noviolencia...
- A veces callamos y actuamos según lo que nos dicen los demás.
• Actividades
1. ¿Vemos razonable la actitud del caballo? ¿Es también pacifista?
2. «Lo mismo me da trabajar para ti que para ellos». ¿Qué hubiera hecho cada uno en esa situación?
3. Buscar una respuesta del caballo en la que se manifieste un actitud pacifista.
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4. Imaginar que el caballo vuelve de la guerra y habla con su amo. Preparar y representar un diálogo pacifista.
5. Ahora ya no se pelea a caballo, sino con misiles y aviones programados,.. Hacer la lista de estos «nuevos caballos» y poner de manifiesto su irracionalidad.
5. El tesoro
El preciado tesoro consiste en el libro de Hizmir, donde se contienen además de otros, el hechizo de la paz. Este hechizo no se abrirá a la persona rencorosa o guerrera.
El camino es arriesgado. Dado que el tesoro consiste en magia, se debe ir acompañado de magia. Se debe salir en noche de luna nueva, en día par y en año impar. Se debe llevar un ovillo de lana y la trenza de una dama.
Pasado el Puente Triste, sobre el río Dulce, se debe
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dirigir hacia el árbol como si se tratase de una puerta. Un duende te preguntará los años de la luna. Debes decir: «De la luna nueva en primer día, un día. En su último día 28».
Te entregará una llave lila que debes guardar en tu calcetín derecho.
Antes de llegar a la montaña, en Sabesnó, debes pedir hospedaje en un castillo reluciente y precioso. No te dejes seducir por Jullidena, la malvada maga que te servirá y te hospedará.
A la mañana siguiente no te extrañes de estar tumbado en el suelo. Pasa el arroyo negro y da trece monedas de plata y dos de cobre a la cabeza de piedra blanca que te pedirá peaje.
Si llegas a la cueva profunda, en la Peña Chata en día impar, espera un día par. Abre la caja o cofre o arcan, como quieras llamarle, rezando a la Santísima.
Cuidado con la magia del libro. Puede volverse en su contra.
Ruth MIGUEL FRANCO
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
Ü Temas
Tesoro, magia, poder, camino, búsqueda, peregrinación, pruebas, acción.,.
• Experiencia humana
- Este relato, que la autora escribió cuando tenía 11 años, es mágico y va de magia, como la vida del ser humano sobre la tierra. Establece una constante ruptura con lo esperado en ese recorrido en busca de sentido y solución. Al ñnal no se sabe cuál es el tesoro, como todavía le pasa al ser humano. Además no proporciona la paz, sino «el hechizo de la paz»: la paz hay que trabajarla todavía.
- A veces, cuando hemos vivido mucho y parece que hemos logrado lo que queríamos, nos damos cuenta de que tenemos que volver a comenzar. O de que lo que hemos logrado nos destruye. O de que hemos empleado muchas fuerzas en trabajos inútiles... Somos aprendices de brujo y no podemos controlar todas las fuerzas de la naturaleza, de nosotros mismos, de los grupos sociales...
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• Actividades
1. Señalar todos los elementos que aparecen. Buscar algún elemento de la realidad (económica, religiosa, política, social, escolar...) a los que se puedan referir cada uno de ellos.
2. Dibujar un plano (la autora había hecho uno pero no lo reproducimos) que muestre el recorrido del camino narrado aquí. Puede ser un plano simbólico.
3. Recorrer ese camino simbólicamente. Ver qué se hace en cada lugar y el sentido que puede tener. Detenerse en ello y realizarlo dando una interpretación concreta a cada uno de los símbolos que aparecen.
4. El tesoro está claro desde el principio, pero al ñnal no se dice en qué consiste, Escribir un página de ese libro como si fuera el hechizo de la paz.
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DESCUBRIR LA PAZ
ó. La paz del pescador
Un hombre rico y emprendedor se horrorizó cuando vio a un pescador tranquilamente recostado ¡unto a su barca contemplando el mar y fumando apaciblemente su pipa después de haber vendido el pescado.
-¿Por qué no has salido a pescar? - le preguntó el hobre emprendedor.
-Porque ya he pescado bastante por hoy -respondió el apacible pescador.
-¿Por qué no pescas más de lo que necesitas? -insistió el industrial.
-¿Y qué iba a hacer con ello? -preguntó a su vez el pescador.
-Ganarías más dinero -fue la respuesta- y podrías poner un motor nuevo y más potente a tu barca. Y podrías ir a aguas más profundas y pescar más peces. Ganarías lo suficiente para comprarte unas redes de nailon, con las que sacarías más peces y más dinero. Pronto ganarías para tener dos barcas... Y hasta una verdadera flota. Entonces serías rico y poderoso como yo.
-¿Y qué haría entonces? -preguntó el nuevo pescador.
-Podrías sentarte y disfrutar de la vida -respondió el hombre emprendedor.
-¿Y qué crees que estoy haciendo en este preciso momento? -respondió sonriendo el apacible pescador.
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Poder, riqueza, consumo, trabajo, contemplación, disfrute, vida...
ü Experiencia humana
- La sociedad de consumo nos lanza a nuevas metas... de consumo, no de felicidad. Por eso es esencial saber vivir... con poco.
- Más: es esencial saber hacer mucho de lo poco. Y contemplar desde dentro. De nuevo estamos ante el dilema de tener o ser.
- Porque, por muchas cosas que se tengan, al final falta lo esencial: la capacidad para gozar.
- No quiere decir esto que hay que permanecer pasivos. Contemplación no es lo mismo que pasividad.
• Actividades
1. ¿En qué se parece cada uno al pescador?
2. Ojo: una cosa es saber disfrutar con poco y otra caer en el peligro de la molicie, tan frecuente hoy en algunas personas sobre todo jóvenes. Descubrir y comentar las diferencias.
3. Analizar la sociedad de consumo desde la parábola.
4. Contemplar algo con detenimiento: un objeto, una persona, un paisaje... Caer en la cuenta de todo lo que se puede ver que habitualmente no vemos.
5. Comparar las actitudes vitales de los dos personajes relacionándolas con un mundo en paz.
7. El Señor No
Érase una vez un hombre que sólo sabia decir que no. Se llamaba señor No. Un día fue a la tienda.
-El señor No quería comprar pan.
-¿Quiere usted pan? -preguntó el vendedor.
- N o -dijo el señor No.
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-¿Quiere Ve!, leche, mantequilla, queso, galletas? -le preguntó el vendedor.
- N o -respondió el señor No.
-Si es así -dijo el dependiente- yo no puedo ayudarle.
Y siguió su trabajo.
El señor No volvió a casa muy triste y furioso consigo mismo. Siempre hacia lo contrario de lo que quería: sí tenía hambre y se disponía a comer, se le caía el plato; si quería leer, de repente se le rompía el libro... Hasta que un día alguien llamó a su puerta.
-¿Vive aquí el señor No? -preguntó una voz desde fuera.
- N o -respondió el señor No.
Pero la puerta se abrió y entró una mujer ¡oven y bella. Sacó de su cesta alimentos suculentos y puso la mesa. El señor No se acercó. Comieron y bebieron. Finalmente la ¡oven preguntó al señor No:
-¿Quiere usted que vuelva?
Y el señor No dijo:
-S í . B. BRECHT
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Costumbres, aceptación propia, cambio, encuentro, diálogo, acción...
• Experiencia humana
- Muchas veces decimos sí cuando queremos decir no, o al revés. Y nos sentimos confusos o culpables. Es esencial aprender a decir no y aprender a decir sí.
- Las experiencias personales negativas nos llevan a veces a desconfiar de todos y de todo, Sólo cuando somos aceptados como lo que somos nos convertimos en nosotros mismos.
- La acción desinteresada y gratuita de otra persona hace salir del ensimismamiento en que a veces nos protegemos, Sólo entonces podremos cambiar para decir sí.
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- Las personas no cambian por los noes que reciben sino por los síes con los que se confirma lo que van haciendo... Por otra parte, es necesario tener decisión y entendimiento para captar lo que hay detrás de lo que decimos, aceptar a los demás sin interpretar. No es fácil. Y es imprescindible para que maduren como personas.
• Actividades
1. El Señor No es un señor que tal vez lleve mi nombre. Descubrir en qué sentido cada uno es ese Señor No.
2. Las personas no cambian porque se les digan las cosas, sino cuando comienzan a actuar. ¿Qué tendría que hacer cada uno para cambiar realmente? ¿Qué tendría que hacer el grupo?
3. Aprender a decir no es importante para no dejarse manipular por los demás. Sí, puedo decir no y Digo no y no me siento culpable son dos libros que ayudan a ello. Conviene ojearlos y ponerlos en práctica.
4. Cuando nos sentimos queridos, cambiamos de verdad. ¿Qué podemos hacer en ese sentido por los demás?
8. Los dos pájaros
Dos pájaros estaban muy felices sobre la misma planta, que era un sauce. Uno de ellos se apoyaba en una rama en la punta más alta del sauce; el otro estaba más abajo, en la bifurcación de unas ramas.
Después de un rato, el pájaro que estaba en lo alto dijo para romper el hielo:
- ¡Oh, qué bonitas son estas hojas tan verdes!
El pájaro que estaba abajo lo tomó como una provocación y le contestó de modo cortante:
-¿Pero estás cegato? ¿No ves que son blancas?
Y el de arriba, molesto, contestó:
-¡Tú eres el que estás cegato! ¡Son verdes!
Y el otro, desde abajo, con el pico hacia arriba, respondió:
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-Te apuesto las plumas de la cola a que son blancas. Tú no entiendes nada, so tonto.
El pájaro de arriba notaba que se le encendía la sangre y, sin pensarlo dos veces, se precipitó sobre su adversario para darle una lección.
El otro no se movió. Cuando estuvieron cercanos, uno frente a otro, con las plumas encrespadas por la ira, tuvieron la lealtad de mirar los dos hacia lo alto, en la misma dirección, antes de comenzar el duelo.
El pájaro que había venido de arriba se sorprendió:
- ¡Oh, qué extraño! ¡Fíjate que las hojas son blancas!
E invitó a su amigo:
-Ven hasta arriba adonde yo estaba antes.
Volaron hasta la rama más alta del sauce y esta vez dijeron los dos a coro:
-¡Fíjate que las hojas son verdes!
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Peleas, insultos, duelo, provocación, apuesta, verdad, puntos de vista, perspectiva, diálogo, cambio...
• Experiencia humana
- En la sociedad actual, la realidad es cada vez más poliédrica: depende del punto de vista del espectador. Es, además, cambiante: cada vez las cosas suceden más de prisa... Todo se mueve.
- En ese contexto es necesario tener algunos puntos de referencia que orienten, pero es peligroso quedarse sólo con una única visión de la realidad.
- La personalidad autoritaria excluye los puntos de vista de los demás e intenta imponer los suyos: la realidad sólo es tal como él la ve. Pero hay otras visiones y otros caminos. Sólo cuando nos movemos de nuestras posiciones tomadas previamente, podemos entender la realidad en su complejidad y, sobre todo, entender al otro.
- Lo resume un proverbio: «No juzgues a ninguno si antes no has caminado durante una hora metido en sus zapatillas».
- Así se puede aprender a ver desde otro lugar, saber ceder, tener fuerza y deci-
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sión para subir o bajar, descubrir lo nuevo, aceptarlo y reconocerlo... Todo un programa para asumir con autonomía la complejidad del tiempo actual.
lj Actividades
1. Imaginar cuáles son los sentimientos de los dos pájaros en cada momento de la historia. Puede ayudar a ello una breve representación. Una escalera o pupitre facilitará el lugar más alto; o simplemente el otro pájaro se agacha.
2. Los protagonistas podrían haber sido «dos pajarillos». O «dos pajarracos». ¿Cambiaría algo la historia?
3. Sacar conclusiones de la parábola aplicándola a diversos contextos: religión, política...
4. Intentar ver desde el punto de vista de la otra persona. Para ello, hacer ejercicio de escucha activa: descubrir sus sentimientos, emociones, deseos más profundos, miedos, esperanzas.,, y aceptarlos sin juzgarlos.
5. Elaborar un mensaje de paz en una hoja de árbol (mejor que en un hoja de papel). Ponerlo de tal forma que el mensaje no sea completo o no se entienda si no es leyendo las dos partes de la hoja.
6. Preparar un sencillo material para ver una realidad poliédrica. Se necesitan dos fotos y una cartulina, todas del mismo tamaño. La cartulina se pliega en forma de acordeón. Las fotos se cortan en tantos trozos como pliegues se hayan dado a la cartulina. Después se pegan en ésta los trozos de las fotos manteniendo la posición inicial pero alternativamente, uno de una foto, otro de otra...
9. Podría haber sido peor
Existe en Escocia un pequeño poblado que mantiene una encantadora tradición. Cuando muere alguien del pueblo, los otros habitantes se reúnen ¡unto a la tumba y dicen algo positivo sobre el difunto antes de que el féretro sea enterrado.
Durante generaciones esto fue así sin obstáculo, pero surgió un problema y la comunidad no estaba segura de poder continuar con esa ininterrumpida tradición.
El problema, en este caso, fue un personaje malvado que vivía en lo alto de la colina. Era tan malvado y odioso que nadie podía pensar en algo positivo que decir de él.
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Finalmente murió. Los habitantes del pueblo estuvieron de pie en torno al ataúd, durante tres horas, en total silencio. Al final, alguien dijo:
-Bien, creo que podría haber sido peor.
Y la aliviada concurrencia enterró por fin el cuerpo.
E. KENT HAYES
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
_l Temas
Visión positiva, alabanza, optimismo, humor, ovejas negras, mal...
J Experiencia humana
- Hay ocasiones en que es difícil pensar algo positivo de los demás. Sobre todo algunos padres no saben qué pensar de sus hijos adolescentes y quizás a estos les pase lo mismo sobre sus padres. Sin embargo siempre hay posibilidad de descubrir algo bueno en los demás. Ejercitarse en ello es un buen recurso para avanzar por el camino de la paz.
- Por otra parte a veces no encontramos cosas positivas en los demás porque todos hemos dicho que «es malo». Y mientras más se dice, más lo es, ya que cada uno se va convirtiendo en la imagen que recibe de los demás... Las «ovejas negras» existen porque alguien las comienza a tachar con brochazos de negro...
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• Actividades
1. Comparar lo que sucede en la parábola con lo que pasa en algún grupo: familia, clase, grupo de amigos...
2. Realizar un ejercicio de autoestima: cada uno sale al centro o adelante y se sienta en una silla. Los demás sólo le dicen algún aspecto positivo que ven en él, algo que ha hecho bien, algo que les llama positivamente la atención a los demás... Al final, quien ha escuchado manifiesta sus sentimientos y manifiesta a los demás su agradecimiento de palabra o con algún gesto.
3. Realizar un relax imaginativo: Imaginar que cada uno acaba de morir y escucha las alabanzas (sólo alabanzas) que dicen de él los demás compañeros, otras personas...
4. Imaginar: ¿Qué pasaría si sólo nos dijésemos cosas positivas? (Eso no quiere decir que ocultemos lo que nos molesta de otros. Pero entonces hablaríamos de nosotros mismos enviando mensajes yo: sentimientos que me causa el comportamiento de la otra persona y descripción de la conducta que espero.,.).
5. Ver el original, y aplicar a la paz lo que allí se dice, en E. KENT HAYES, Malos hijos, ¿buenos padres? Cómo prevenir por medio de la educación los problemas de la adolescencia, Ediciones B, Barcelona, 1991, p. 145.
10. Ver en lo interior
-¿Por qué es aquí tan feliz todo el mundo excepto yo?
-Porque han aprendido a ver la verdad y la belleza de todas las partes -respondió el Maestro.
-¿Y por qué no veo yo en todas las partes la bondad y la belleza?
-Porque no puedes ver fuera de ti lo que no ves en tu interior.
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Felicidad, belleza, interior, visión positiva, autoestima, bondad, amargura, optimismo...
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U Experiencia humana
- No sólo cada uno habla de la feria como le va en ella, sino que le va en ella de una u otra forma según lo que vive interiormente respecto a ella: presupuestos mentales, sentimientos de aceptación o rechazo, actitudes vitales...
- Las personas amargadas ponen unas rejas en los ojos y en el corazón que les hacen ver todo como una cárcel. No sólo lo ven todo con amargura, sino que todo lo contagian de amargura.
- Para descubrir la paz en los demás y en lo que nos rodea, es imprescindible llevarla en el corazón y ser capaz de descubrirla y manifestarla con sencillez.
• Actividades
1. Decir entre todos formas concretas para «ver la verdad y la belleza en todas las partes», además de lo que se señala en la parábola.
2. Comentar cada uno cómo practica alguna de esas formas o fórmulas.
3. Realizar un ejercicio de autoestima: Imaginar que alguien dice de cada uno que no es capaz de percibir la belleza del mundo. Cada uno, para demostrar lo contrario, escribe algunos rasgos o características que demuestran que es capaz de descubrir esa belleza y bondad que nos rodea.
4. Llevar unas gafas al grupo. Son las gafas de «ver hacia afuera lo que se ve hacia adentro». Cada uno que se las pone dice características positivas de los demás que él también tiene o que le gustaría tener.
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DESCUBRIR LOS CAMINOS
QUE AMENAZAN LA PAZ
11. La destrucción del mundo
La conferencia que el Maestro iba a pronunciar sobre la destrucción del mundo había sido profusamente anunciada, y fue mucha la gente que acudió a los jardines del monasterio para escucharle.
La conferencia concluyó en menos de un minuto. Todo lo que el Maestro dijo fue:
-Estas son las cosas que acabarán con la raza humana:
la política sin principios, el progreso sin compasión, la riqueza sin esfuerzo, la erudición sin silencio, la religión sin riesgo y el culto sin consciencia.
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TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Ser humano, fin de la humanidad, política, progreso, riqueza, sabiduría, ciencia, religión, culto, mal...
U Experiencia humana
- Los sabios y los grandes hombres se pasan la vida buscando las causas de los males que aquejan al mundo. Hacen bien, pero a veces nos enredan con sus análisis.
- Quizás tan sólo los maestros del espíritu pueden dar con la clave sencilla después de haber vivido mucho y haber dedicado mucho ejercicio y tiempo a descubrir lo esencial. Cuando nos lo revelan, quedamos atónitos por su clarividencia.
- No se necesitan entonces ni muchas palabras ni muchas aclaraciones; sólo se requiere una clara determinación de actuar.
- He aquí un claro ejemplo de ello.
• Actividades
1. Para poder hablar así durante un minuto, ¿cuánto tiempo habrá dedicado a pensar? Sacar conclusiones y hacer aplicaciones a la propia vida personal.
2. Comentar cada una de las cosas que el Maestro señala como causas que terminarán con la raza humana. Buscar ejemplos en lo que eso se cumple a nuestro alrededor, ¿Qué podría hacer cada uno o que tendríamos que hacer entre todos para que no fuera así?
3. Te dicen: «Tienes un minuto para arreglar el mundo». Resumir lo que cada uno diría.
4. Te dicen: «Tienes un minuto para arreglar el mundo». Decir lo que cada uno haría. Y hacerlo después.
12. Los calcetines del rey
Un rey tenía ios pies muy grandes... Y sus calcetines, que también eran muy graneles, los ponía a secar en el jardín. La gente venía a ver esos ridículos colgajos y se reía con mucha maldad.
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Harto de esas burlas, el rey decidió, para poder secar sus calcetines, colgarlos en la punta de una lanza... y pasearlos por toda la ciudad. La idea era genial. Al ver cómo ondeaban al viento, los habitantes los tomaron por banderas y los aclamaban a su paso.
C. BOUJON
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Poder, símbolos, objetos, banderas, burlas, sacralización...
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• Experiencia humana
- Los poderosos no se diferencian de los demás más que en aquello que han sacralizado, pues ninguna diferencia hay entre unos y otros. Y si existen las diferencias -pies grandes-, logran que éstas se conviertan en un signo de aceptación y respeto.
- Por eso existe una tendencia a burlarse de los poderosos, sobre todo de sus males, ya que otra cosa no podemos hacer. Es también una forma de decir, como la zorra, que las uvas no están maduras cuando en realidad no las podía alcanzar.
- Ellos saben emplear buenas estratagemas para que la burla se transforme en aclamación. He aquí un buen ejemplo de sometimiento colectivo al ver ondear al viento (¡El caso es que se muevan!)... unos calcetines.
• Actividades
1. ¿Qué significa la bandera para cada uno? ¿Y si fuéramos ciudadanos del mundo?
2. «Los habitantes tomaron los calcetines por banderas y los aclamaban a su paso» ¿Qué posibilidades hay de que nos pase a nosotros lo mismo? Aplicarlo a otras realidades.
3. Trabajar con imaginación: buscar lapsus o equivocaciones notorias, sean personales o de otros; en vez de recriminar a los demás o recriminarse a sí mismo por ellas, aceptarlas y partir de ellas de modo que den origen a una creación concreta: dibujo, relato, comentario original.,.
4. Imaginar un origen pacifista de las banderas. Escribirlo en un relato,
13. Lanzas y escudos
En el reino de Chu vivía un hombre que vendía lanzas y escudos.
-Mis escudos son tan sólidos -se jactaba- que nada puede traspasarlos. Mis lanzas son tan agudas que nada hay que no puedan penetrar.
-¿Qué pasa si una de sus lanzas choca con uno de sus escudos! -le preguntó alguien.
El hombre no replicó.
Yan FEITSÚ
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TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
J Temas
Seguridades, certezas, rigidez, adaptación, armamentismo...
• Experiencia humana
- «Hay hombres y mujeres que están muy seguros de sí mismos, de sus ideas y de sus actitudes. Hay gente que no tiene ideas: tiene certezas. Y es un tormento tratarlos». Sólo hay que esperar a que una de sus lanzas choque contra uno de sus escudos. A ver qué pasa.
- Hágase también otra lectura desde la carrera de armamentos: cada vez son más sofisticados... Hasta que choquen unos contra otros y todo salte por los aires.
_l Actividades
1. Decir cuáles pueden ser las lanzas y escudos personales. Dibujarlos después con toda clase de detalles.
2. Hacer lo mismo con las lanzas y escudos sociales, políticos, económicos, religiosos...
3. Elaborar unos escudos de cartón y lanzas de palo. Transformarlos después en otros objetos que sean instrumentos para la paz y jugar con ellos: escudo-bandeja, cuadro, alfombra...
4. Hacer un esfuerzo para descubrir y aceptar las propias contradicciones. Los demás pueden ayudamos desde fuera. Cada uno formula en una frase lo que él cree; los demás van diciendo si realmente ven que actúa así...
14. ¿La mejor solución?
Después de un primer silencio, el hombre bajito (el padre Brown) le dijo a otro (Flambeau):
-¿Dónde escondería un hombre sabio una píedrecílla?
Y el hombre alto contestó en voz baja:
-En la playa.
El hombre bajito asintió con la cabeza y tras otro breve silencio, dijo:
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-¿Y dónde escondería un hombre sabio una hoja?
Y el otro contestó:
-En el bosque.
-¿Y qué haría si no hubiera bosque?
-Y bien -respondió Flambeau irritado-, ¿qué es lo que haría?
-Plantaría un bosque para esconderla en él -di jo el sacerdote con voz oscura.
-Un pecado temible. Si no hubiera ningún bosque, crearía uno. Y si quisiera esconder una hoja muerta, crearía un bosque muerto.
No hubo aún respuesta, y el sacerdote añadió todavía con mayor calma y suavidad:
-Y si alguien quisiera ocultar un cadáver, haría un campo de cadáveres para ocultarlo en él.
T. CHESTERTON
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Adaptación, resistencias, rutina, tradición, novedad, amenaza, agresión, engaño, armamentismo...
• Experiencia humana
- Comenta C. G. VALLES (1992, 78): «Todos sentimos resistencia a abandonar costumbres, actitudes o creencias que han perdido su valor, pero que nosotros seguimos atesorando por la comodidad de seguir con la rutina, la pereza de intentar algo nuevo, la necesidad de ajustamos al modo de obrar y pensar del grupo al que pertenecemos, y el miedo al castigo por abandonar la tradición e intentar novedades». En ese contexto el cuento es claro y sencillo: pone al descubierto timideces y anima a ver vistas antiguas con ojos nuevos.
- Por otra parte, según KUHN, las personas tienen una capacidad infinita de aferrarse a sus puntos de vista en contra de toda evidencia. Algo en lo que uno ha creído durante años, se hace permanente, fijo, indispensable: se defiende contra toda evidencia cuanto mayor sea la evidencia en contra.
- Esto se hace sobre todo cuando alguien se siente amenazado: pone en juego todos sus recursos de dialéctica, convencimiento y agresión para defender su causa como su propia vida...
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- ¿Y si en vez de una hoja quisiéramos ocultar tantas armas como nos invaden? Pues se crea una guerra.
• Actividades
1. Aplicar esta parábola a la realidad social. ¿Dónde y cómo se refleja hoy la misma situación?
2. Buscar en la propia vida algún aspecto en el que nos puede la rutina, la tradición, la adaptación a las costumbres...
3. Desenmascarar el aferramiento a los propios puntos de vista en contra de toda evidencia. Se puede hacer a partir de la representación libre de la parábola tal como está transcrita o de su adaptación a otra realidad. Mejor todavía si se hace en forma de sociodrama.
4. Aplicar la parábola a la carrera de armamentos. Buscar noticias que confirmen las actitudes que en ella se reflejan.
15. El discípulo calculador
En el pueblo de Kateraka vivía un maestro que tenía un discípulo que era tan tonto como tragón.
Un día, con ocasión de una fiesta, el discípulo había recibido como limosna treinta y dos pasteles. Mientras volvía a casa le acometió el hambre, y entonces pensó: «De estos pasteles, mi maestro me dará la mitad que me corresponde. De manera que puedo comerme mi mitad». Y se comió dieciséis pasteles. Luego siguió razonando de este modo: «Ahora me dará la mitad de éstos. Voy a comerme inmediatamente mi mitad, que son ocho pasteles.» Se comió los ocho pasteles, y así continuó hasta que sólo le quedó medio pastel, que entregó a su maestro.
Este le dijo:
-Pero, ¿qué es esto? ¿Nuestro hijo espiritual no te ha dado más que medio pastel, o tú te has comido el trozo que falta?
El discípulo respondió:
-Tu hijo espiritual te aprecia y por ello me ha dado
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treinta y dos pasteles; pero yo me los he comido.
Al oírlo el maestro preguntó:
-¿Cómo has hecho eso?
Entonces el discípulo, en su presencia, se tragó la última mitad y dijo:
-¡Pues así es como lo he hecho!
El maestro no pudo saciar su hambre y, al saberlo, la gente quedó muy asombrada.
Fábula hindú
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Limosna, hambre, disculpas, engaños, presunción, justicia, Tercer Mundo...
• Experiencia humana
- El problema del mundo actual es que una buena parte de personas mueren de hambre mientras unos pocos mueren de indigestión. Y parece que esto no hay quien lo arregle.
- ¿A qué se debe? ¿Quién se aprovecha de ello? ¿Qué causas confluyen? ¿Cómo arreglarlo? Las cuestiones superan unas respuestas sencillas. Pero cada vez está más claro que algo hay que hacer.
IJ Actividades
1. Responder a las preguntas formuladas más arriba.
2. Formular y responder otras nuevas: ¿A quién pertenecían los pasteles? ¿Por qué se los da y a quién? ¿Quien tenía hambre? ¿Se sacia así el hambre?
3. Comparar la parábola con lo que sucede con los países del Tercer Mundo. Poner nombres a cada uno de los personajes, situaciones que viven y acciones que realizan.
4. Las ayudas concretas a los países del Tercer Mundo no llegan a su destino sino que se desvían por intermediarios para intereses de otro tipo... Sin embargo algo habrá que hacer... Investigarlo y proponer soluciones creativas.
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1 ó. La caza de ciervos
Un cazador era muy hábil en imitar las voces de todos los animales de la selva y utilizaba su habilidad para cazarlos. Los animales al oír su propia llamada, creían que algunos de su especie estaban allí, se acercaban sin miedo, y el cazador los abatía con sus flechas. Nunca fallaba el método.
Un día fue a cazar ciervos y al llegar al lugar oportuno en la selva, se puso a imitar sus voces.
Antes de que pudieran llegar los ciervos, oyó la voz un lobo y, pensando que podría encontrar comida, ya que a un lobo le es fácil matar a un ciervo, acudió al instante.
El hombre se asustó al ver al lobo, pero tuvo presencia de ánimo y, para librarse de él, se puso a imitar el rugido del tigre. En cuanto el lobo lo oyó, le entró miedo y desapareció a toda velocidad. Pero entonces atraído por la voz de quien pensaba era otro tigre, llegó un tigre, y el cazador se asustó más todavía.
Para librarse del tigre imitó el bramido del oso, ya que hasta el tigre teme al oso y se aleja de él. En efecto, el tigre se marchó inmediatamente, pero llegó un oso, y ya no hubo solución.
Al cazador se le había agotado el repertorio animal. Quedó solo ante el oso, que se abalanzó sobre él, lo destrozó y se lo comió.
Liu SUNGYUAN
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Imitaciones, identidad, voz, sinceridad, carrera de armamentos, muerte...
• Experiencia humana
- Los humanos imitamos a veces a otros para pretender ser más. Pero las imitaciones siempre son peligrosas. La única manera de dar valor a la vida es ser uno mismo...
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- Cada uno de nosotros tiene una voz individual y exclusiva, tan personal como las huellas dactilares. A ella debe atenerse por dignidad y sinceridad, ya que la voz expresa el carácter y retrata a la persona. No es fácil engañar pues el tono de voz, el timbre, la prisa o el reposo de las sílabas pronto nos delatan nuestro estado de ánimo.
- Pero la parábola puede ir más allá: para defenderse de algo que nos asusta, llamamos a alguien más fuerte de quien a su vez tenemos que defendernos... hasta que nos sobreviene la muerte. A veces puede ser la muerte colectiva. Piénsese y apliqúese todo esto a la carrera de armamentos.,.
• Actividades
1. Aplicar la parábola a la carrera de armamentos. Poner ejemplos históricos o buscar noticias actuales que la confirmen.
2. Lo fundamental es ser uno mismo. Nuestras voces reflejan lo que somos. Grabar una conversación y comentar después los rasgos distintivos de cada uno.
3. Realizar alguna imitación de personajes conocidos. Mejor todavía, de profesores, animadores o compañeros de grupo.
4. Reconocer la voz de algún compañero, aunque este la distorsione. Inventar algún juego para ello.
5. Imitar la voz de algún personaje público y elaborar un discurso o efectuar unas declaraciones en las que se digan «palabras y propuestas de paz...».
17. Los creadores del león
Cuatro príncipes reales buscaban una especializa-ción en la que nadie les igualara. Se dijeron entre sí: «Recorramos la tierra y aprendamos la ciencia máxima».
Los cuatro hermanos partieron cada uno en una dirección, después de haber acordado un lugar de reunión en el futuro.
Pasó el tiempo. Después de un año, un mes y un día, los cuatro príncipes se reunieron en el lugar consabido y se preguntaron unos a otros qué habían aprendido.
-Yo he aprendido una ciencia que me permite crear
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la carne de un ser viviente con tal de que cuente con uno de sus huesos -dijo el primero.
-Yo sé cómo hacer crecer la piel de ese ser viviente e incluso el pelo, si el hueso está recubierto de carne -dijo el segundo.
-Yo soy capaz de crear los miembros si tengo la carne, la piel y el pelo -dijo el tercero.
-Y yo -concluyó el cuarto- sé cómo dar vida a esa criatura si su forma está completa.
Los cuatro hermanos fueron a la jungla en busca de un hueso que les permitiese demostrar su capacidad.
No fue difícil. Después de un breve recorrido encontraron un hueso y lo recogieron. No se preguntaron a qué clase de animal pertenecía. Estaban tan poseídos de su ciencia que ni siquiera pensaron en ello.
Uno añadió carne al hueso, el segundo creó la piel y el pelo, el tercero lo completó con miembros adecuados y el cuarto dio vida... a un león.
La fiera se levantó agitando sus crines, abrió las fauces amenazadoras y se abalanzó sobre sus creadores. Allí mismo los mató a todos y desapareció satisfecho en la jungla.
Fábula hindú
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Técnica, ciencia, sentido, creación, dominio, muerte, armamentismo...
_l Experiencia humana
- El poder creativo que el ser humano ha demostrado tener contiene un gran potencial de autodestrucción. En una hora el hombre actual puede lograr lo que en el pasado debía trabajar .durante años. Pero las consecuencias están ahí: ha alterado el equilibrio ecológico, ha contaminado el aire y ha llenado de ruidos y energías negativas el ambiente.
- El ser humano viaja a gran velocidad, ve en la televisión lo que sucede a gran distancia, decide con el ordenador... pero ha perdido la capacidad de dominar
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los instrumentos que usa. Tiene muchas comodidades, pero está necesitado de dirección y de sentido. Como aprendiz de brujo, no puede dominar los instrumentos que ha creado.
- Si aplicamos esto a la carrera de armamentos, ¿no es una auténtica parábola de la situación actual?
J Actividades
1. Aplicar la parábola a la situación actual, ya sea política, militar, económica, religiosa o social.
2. Comparar a cada uno de los hermanos con algún personaje o fenómeno actual.
3. Concretar algún aspecto actual que refleje lo que los príncipes sabían hacer: revestir de carne, proteger con piel esa carne, ordenar los miembros, dar vida...
4. Aplicarlo, además de a la técnica en general, a la carrera de armamentos.
5. En algunas versiones de la fábula hindú, los hermanos tenían instrucción pero carecían de juicio; uno de ellos no tenía instrucción pero tenía juicio. Cuando el último va a dar vida al león, se sube a un árbol, espera allí y baja cuando el león ha marchado... ¿Cuál sería la actitud más juiciosa del ser humano actual?
18. El hacha perdida
Un hombre perdió su hacha.
Sospechaba del hijo de su vecino.
Al observar su forma de caminar, le parecía que era la propia de un ladrón de hachas; su fisonomía, la de un ladrón de hachas; todos sus movimientos y gestos eran, sin excepción, los propios de un ladrón de hachas.
Al poco tiempo, el hombre fue a cavar al valle y se encontró su hacha.
Al día siguiente cuando volvió a ver al hijo de su vecino, ni uno solo de sus movimientos o gestos le parecieron los de un ladrón de hachas.
UE TZU
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TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Apariencias, suspicacia, sospechas, prejuicios, juicios, culpa, perdón...
• Experiencia humana
- El ojo suspicaz lo distingue todo, hasta lo que no existe: se imagina todo y cree ver con evidencia absoluta los gestos delatores en cada movimiento, en cada detalle, en cada inflexión de voz...
- La idea preconcebida proyecta su prejuicio sobre los hechos o personas en cuestión: todo lo ve bajo su prisma, lo riñe de su color, lo encaja en su molde...
- Es fácil buscar a culpables: «Él tiene que ser, luego es él». Es el mejor argumento.
- Es esa una actitud muy peligrosa, pues nos confirmamos en lo que queremos que sea de una forma determinada. Así, las sospechas matan la convivencia.
• Actividades
1. Buscar ejemplos en los que se demuestre que «las sospechas matan la convivencia».
2. Buscar y decir frases que usamos habitualmente y que traducen la actitud reflejada en la parábola: «Es evidente», «¡Fíjate cómo anda, cómo habla, cómo se mueve!», «No hay más que verlo»..,
3. Popularmente se dice que «las cosas son del color con que se miran». ¿Qué quiere decir eso? Buscar aplicaciones y sacar consecuencias.
4. Un adagio latino resume: Quidquid recipitur, ad modun recipientis recipitur. O sea, cada uno ve las cosas según como él es. De otra forma: hay personas que miran con buenos ojos y otros que miran con mal corazón. ¿Es esto verdad? Poner ejemplos. Buscar causas. Y decir qué se puede hacer ante situaciones de ese tipo.
5. ¿En qué sentido y por qué esas actitudes son caminos que amenazan la paz?
19. Una historia cruel
Una ratita nació sin bigotes.
La familia discutía:
-¿Será verdaderamente una ratita?
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Uno decía:
-Los bigotes no te hacen ser ratita.
Pero otro sostenía:
- N o hay queso de Gruyere sin agujeros ni ratitas sin bigotes.
Para alejar a la recién nacida del barullo de la discusión, un vecino la llevó a pasear.
Al rato regresó sólo y aseguró:
-Desde luego que era una ratita, pues el gato se la ha comido.
C. BOUJON
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Discusión, realidad, diversidad, compromiso, muerte, racismo, política...
• Experiencia humana
- Es fácil buscar razones para todo, pero la realidad es una: los más pobres llevan las de perder. Y mientras los dirigentes discuten y hablan, los más débiles sufren las consecuencias.
- Las grandes discusiones a veces no arreglan nada cuando lo que está en juego es una persona concreta.
- Esto es un elemento distintivo de la ecología humana: no hay que defender a toda la especie, sino a cada miembro de ella.
_l Actividades
1. Poner ejemplos actuales en los que se vea claramente que la gente sigue hablando mientras otros sufren las consecuencias.
2. Es necesario, sin embargo, tener un planteamiento claro. Las discusiones teóricas no son en balde. Hacer una lista de grandes temas sobre los que es necesario aportar razones y tomar postura. Centrarse en uno de ellos y hacerlo.
3. La filosofía política de los gobernantes dice que «no importa que el gato sea blanco o negro, sino que cace ratones». ¿Qué consecuencias puede tener eso?
4. Imaginar a la rata en el momento de la muerte. Meterse dentro de su personaje y decir lo que creemos que ella diría momentos antes de ser atrapada y comida por el gato.
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20. El cartucho de dinamita
Nasrudin estaba mascullando algo entre los dientes con cara de satisfacción. Un amigo lo vio y le preguntó qué le pasaba.
-Ese imbécil de Ahmed -dijo Nasrudin- tiene la costumbre de pegarme unas tremendas palmadas en la espalda siempre que me ve. Pues bien, hoy me he puesto un cartucho de dinamita bajo la chaqueta, y esta vez, cuando me dé la palmada, la explosión le va a arrancar el brazo.
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Muerte, destrucción, daño, envidia, prevención, mal..,
• Experiencia humana
- Todavía hay personas que se alegran con el mal que causan a los demás. Encuentran en él una satisfacción especial.
- No se dan cuenta que es imposible dañar a otro sin dañarse a sí mismo.
J Actividades
1. El personaje se había prevenido ante un gesto de otra persona, gesto que puede entenderse como de camaradería y amistad. ¿Cuáles pueden ser las causas de esa actitud?
2. ¿Hemos actuado alguna vez como el Nasrudin de la parábola? Concretar cuándo y por qué.
3. Comentar la frase: «Es imposible ayudar a otro sin ayudarse a sí mismo, lo mismo que dañar a otro sin dañarse a sí mismo».
4. Concretar cómo nos ayudamos a nosotros mismos cuando ayudamos a otro. Sacar aplicaciones a la educación para la paz.
5. Durante un día o en los próximos encuentros, propiciar el saludo amigable a los demás con una palmadita en la espalda, Notar cómo reaccionan.
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21. Los cuatro monjes
Cuatro monjes decidieron caminar ¡untos en silencio durante un mes.
El primer día todo fue estupendamente. Pero, pasado el primer día, uno de los monjes dijo:
-Estoy dudando si he cerrado la puerta antes de salir del monasterio.
Y dijo otro de ellos:
-¡Estúpido! ¡Habíamos decidido guardar silencio durante un mes, y vienes tú a romperlo con esa tontería!
Entonces dijo el tercero:
-¿Y tú, qué? ¡También tú acabas de romperlo!
Y el cuarto monje dijo:
-¡A Dios gracias, yo soy el único que no he hablado!
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Promesas, silencio, camino, compromisos, grupo, insultos, acusaciones, disculpas, cooperación...
• Experiencia humana
- Cuando algo va bien, conserva la tendencia a seguir bien. Cuando algo comienza a ir mal, todo se precipita hacia el desastre. Al menos eso nos creemos, y por eso es más difícil contener lo que se derrumba.
- Cuando en un grupo o comunidad lo que importa es quedar el primero o quedar por encima, todo vale: pisar a otro, dejarle en la cuneta, hacer trampas, disculparse, acusar... Sólo la cooperación, aunque exigente, ayuda a saber disculpar, hacer sin hablar...
- La pretensión de ser más santos que los demás y de aparecer mejores que ellos nos lleva a declarar nuestras intenciones. En ese momento hemos roto la magia de la santidad, el carisma de la bondad, el regalo de la gratuidad.,.
- ¡Y era tan fácil...! Para mantener la promesa no había más que haber callado. Ya
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buscarían todos la forma de restañar -con el silencio- la palabra incumplida o la manera de hacer florecer las palabras que nacieron como fruto de las preocupaciones.
- Esa es otra: no hablar para mantener el silencio, es una equivocación; el silencio es algo más...
• Actividades
1. Comentar la actitud de los monjes. Descubrir la causa o causas por las que obraron así.
2. Poner ejemplos en los que nosotros también hacemos lo mismo.
3. Culpar a los otros, disculparnos a nosotros... ¿No es una actitud frecuente? ¿Por qué?
4. ¿Cuál podría haber sido la actitud de los otros monjes cuando el primero habló? ¿Y de los dos últimos cuando habló el segundo...? Y así sucesivamente... Entre otras cosas, podrían haber comenzado a contar de nuevo y... a caminar con otro rumbo.
5. Realizar la experiencia de silencio: proponerse caminar durante un tiempo determinado en silencio, contemplando... Mejor si se hace en la naturaleza. Comentar la experiencia al final,
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DEFENDER LAS BASES DE
LA PAZ
22. Matar dragones
Chu Pingman fue a Chili Y¡ para aprender a matar dragones. (A veces los dragones pueden hacerse dañinos y hay que eliminarlos). Estudió tres años y gastó casi toda su fortuna hasta conocer a fondo la materia. Pero había tan pocos dragones que Chu no encontró dónde practicar su arte.
CHUANGTSÚ
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Miedos, defensa, muerte, lucha, prejuicios, enemigos...
• Experiencia humana
- En la cultura china los dragones son algo familiar. Pero a todos nos viene la tentación de defendernos de algo que tememos que suceda, aunque en realidad nunca haya sucedido. Tenemos prevenciones y miedos. Y nos preparamos para defendemos... de un fantasma.
- Las organizaciones e instituciones necesitan inventar enemigos para preparar la defensa propia... Pero esos enemigos son fantasmas: no existen más que en la imaginación y nunca llegarán a existir si comenzamos a caminar por otro camino.
- Lo bueno son las disculpas que damos: «Los dragones pueden hacerse dañinos y entonces hay que eliminarlos». ¿Quién decide lo primero? ¿Quién y cómo determina lo segundo?
• Actividades
1. Repasar nuestros años de preparación y de estudio, ¿Nos hemos dedicado a formarnos para matar dragones?
2. Buscar cuáles son los fantasmas por los que ahora nos sentimos amenazados. Descubrir qué otros miedos ocultan.
3. Aplicar todo esto a la carrera de armamentos. ¿No es preparar la guerra y casi provocarla el hecho de amontonar armas por si acaso los otros nos atacan?
4. Buscar ejemplos a nuestro lado en los que actuemos por la lógica de «los dragones pueden hacerse dañinos».
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5. Imaginar: cómo lograr que un dragón dañino (si es que existen los dañinos) se convierta en un dragón beneficioso.
6. «La bola del dragón» fue una serie de dibujos animados de contenido eminentemente bélico. Comentar lo que se recuerde de ella. Y analizar alguna serie o episodio de otros dibujos animados desde esta perspectiva.
23. Las propias sombras
Érase una vez un hombre al que le angustiaba tanto el ver su propia sombra que decidió desprenderse de ella. Y se dijo a sí mismo:
-Correré, me alejaré de ella.
Y se puso a correr y correr. Pero la sombra le seguía sin ningún esfuerzo.
Entonces el hombre se dijo a sí mismo:
-Tengo que correr mucho más de prisa, más de prisa, más de prisa...
Y corrió tanto que, al final, le falló el corazón y cayó al suelo. Estaba muerto...
¡Había sido tan fácil haberse cobijado a la sombra de un árbol...! Y habrían desaparecido las sombras. Pero nuestro hombre no cayó en la cuenta.
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Sombra, pasado, interior, huida, muerte...
U Experiencia humana
- Todos llevamos dentro un mundo de fantasmas y de sombras (a veces colectivos). En algunos sitios se concretan culturalmente: la sombra del fantasma de Hamlet, la «negra sombra que me asombra» de Rosalía o el hecho de «reírse de su sombra» de los andaluces,., son diversas actitudes ante «la sombra».
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- En la noche no hay sombra: todo es sombras. También los países tiene su «larga noche de sombras» (Celso E. FERREIRO).
- Muchas veces huimos de nosotros mismos: de nuestro pasado, de nuestras experiencias amargas... No sabemos integrarlo: aceptar y caminar con las sombras que nos han habitado para así hacer que desaparezcan. Y emprendemos múltiples huidas sin tener claro el objetivo ni el destino.
• Actividades
1. Dibujar en un espacio determinado las sombras que nos habitaron en el pasado. Incluir también las que ahora permanecen. Llenar de color las que han desaparecido.., Explicarlo después.
2. A partir de la sombras que ahora tengo describir el camino que voy a seguir para llegar a donde quiero.
3. La propia aceptación y pacificación interior llevan a vivir sosegadamente y en paz. Decir dos aspectos que ayudan cada uno a lograr ese estilo de vida...
4. Jugar a pisar la sombra de otra persona: aquel cuya sombra es pisada, se paraliza hasta que alguien de los «vivos» le resucita tocándolo...
24. Reconstruir a la persona
Un hijo estaba continuamente molestando a su padre.
El padre, para distraerlo y liberarse de él, tomó de un viejo atlas una hoja en la que se encontraba dibujado todo el mundo: a escala muy reducida, contenía todos los estados, regiones, ciudades... Lo cortó en pequeños trozos y se lo entregó al hijo para que lo recompusiera.
-Le llevará mucho tiempo -pensó el padre- y así me dejará en paz.
Después de unos pocos minutos, el niño volvió con el mundo perfectamente colocado.
-¿Cómo has sido capaz de componerlo tan de prisa? -le preguntó asombrado el padre.
-Muy sencillo, papá. En el reverso del papel estaba dibujado un ser humano. He reconstruido primero aquella persona y el mundo se ha ido articulando por sí mismo.
Adaptado de G. NEGRI
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TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Persona, ser humano, niño, relaciones internacionales, salvación...
• Experiencia humana
- El mundo tiene sentido porque el hombre se lo da. Eso significa que tenemos que dárselo, pues el mundo no lo tiene de por sí, una vez que el ser humano ha comenzado a controlar y dirigir en parte su rumbo.
- Estados y naciones suelen poner sus intereses por encima de las personas. Sin embargo, la salvación de una sola persona hace que el mundo tenga mayor sentido.
- Y únicamente cuando la persona esté en el centro, el mundo habrá cobrado sentido.
• Actividades
1. Comentar la parábola, ¿En qué sentido es verdad lo que refleja?
2. En la parábola es el niño quien se da cuenta de lo que está por detrás de la pretensión de construir el mundo. Hacer una lista con características de los niños que harían un mundo mejor. Practicar después alguna de ellas: jugar, cantar, tener capacidad de admiración...
3. Preparar varios puzzles como el de la parábola: por una parte tiene una figura difícil de recomponer y, por la otra, una figura que facilita la tarea. Hacerlos sobre temas distintos.
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25. La rama cortada
Angulimal, un bandido, fue un día a matar a Buda. Buda le dijo:
-Antes de matarme, ayúdame a cumplir un último deseo: Corta, por favor, una rama de ese árbol.
Con un golpe de espada el bandido hizo lo que Buda le pedía. Pero éste añadió:
-Ahora vuelve a ponerla en el árbol, para que siga floreciendo.
-Debes estar loco -respondió Angulimal- si piensas que eso es posible.
-Al contrario, dijo Buda, el loco eres tú, que te crees poderoso, porque puedes herir y destruir. Eso es cosa de niños. El verdaderamente poderoso es el que sabe crear y curar.
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Muerte, agresividad, destrucción, creación, vida.,.
_l Experiencia humana
- «Esto lo arreglo yo de un plumazo...», solemos decir. A veces la pluma se convierte en una espada o en una estaca o simplemente en el puño cerrado. El caso es dar un golpe de mando...
- Pero eso también lo hacen los niños: es fácil hacer saltar todo por los aires...
- La auténtica creación es la que integra los contrarios y la que de la muerte saca vida...
• Actividades
1. Preparar entre todos una lista de palabras, gestos y acciones con los que se puede herir y destruir. Escribir después cómo se ha ejercido ese poder durante la última semana con algunas personas (pareja, amigos, familia...)
2. Llevar al grupo una rama cortada. Ya que está cortada y es difícil injertarla en el mismo u otro árbol, darle otros múltiples usos, especialmente pacíficos: abani-
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car, dar aire para ventilar, barrer, adornar, contener algún objeto... El uso que elija cada uno ha de tener algo que ver con lo que él es, con lo que se pretende en el grupo o con el tema tratado...
26. El hombre sin manos
Hubo una vez un cadí que en un mismo día fue padre y fue injusto.
Cuando más feliz se sentía por el nacimiento de su hijo, acudieron ante él unos hombres con un ¡oven fuertemente atado.
-M i ra ese hombre. Ha sido hallado robando un caballo. Aplícale la ley y haz justicia.
El ¡oven cuatrero se dirigió al cadí diciéndole:
-Sé piadoso conmigo. Ya se que he faltado, pero mis motivos tenía para robar el animal. Mi padre está muy enfermo lejos de aquí y mi único deseo era verle pronto para que no estuviera tan solo en su agonía. Ya ves que no robé por codicia, sino por necesidad.
El cadí debía tener el corazón de roca pues fue capaz de condenar al ¡oven a que le cortaran las manos.
A partir de este día vivía de la limosna y muchas veces se topó con su juez sin que éste ni siquiera le mirase.
Un día, pasados unos años, estaba el pobre mutilado observando los peces que se movían en el fondo del estanque público.
De pronto vio como un muchacho se caía al agua y no podía salir. Se estaba ahogando sin remedio.
El pobre hombre alargó sus muñones para arrancárselo a la muerte, pero al faltarle las manos el niño se iba hundiendo cada vez más.
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-Ayúdame, ayúdame -gritó el niño- y mi padre te recompensará. ¡Soy el hijo de cadi!
El hombre estalló en sollozos.
- N o puedo. ¿Ves que no tengo manos? Tu padre me las cortó hace tiempo.
Cuento popular árabe
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Robo, justicia, castigo, venganza, perdón, indulgencia, necesidad, bien...
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J Experiencia humana
- La parábola se entiende mejor si se conoce que proviene de la tradición árabe. Pero la realidad es común a todas las culturas: la injusticia provoca injusticia y, al final, se vuelve contra nosotros mismos. Ya hemos recordado que nadie puede dañar a otros sin dañarse a sí mismo (n. 20).
- De otra forma: la justicia que no hace justos a quienes juzga, es injusta.
ü Actividades
1. La injusticia provoca ira. Recordar alguna situación personal en la que nos haya podido la ira. ¿Qué causa injusta se esconde detrás?
2. «Se cazan más moscas con una gota de bien que con un barril de vinagre», dice San Francisco de Sales. Aplicar esa frase al cambio de las personas.
3. ¿Consideramos que la pena de muerte es un remedio eficaz para preservar el orden? Establecer un debate.
4. Fijarse en la ilustración y trabajar con ella: también las ramas florecidas están caídas, como los dos muñones impotentes; sólo los peces «nadan como pez en el agua» y salen a consolar...
27. La solución perfecta
El Maestro ofreció la solución perfecta a un matrimonio que nunca dejaba de reñir. Les dijo:
-Sencillamente dejad de reclamar como un derecho lo que podéis pedir como un favor.
Las riñas cesaron al instante.
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Matrimonio, riñas, peleas, agresividad, derechos, favores, atención, respeto, amor, asertividad...
• Experiencia humana
- Hay tres actitudes básicas en el comportamiento de las personas: la agresiva
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que parte de que «yo sólo tengo derechos y tú no»; la pasiva que acepta que «yo no tengo derechos, los tienes tú»; y la asertiva: «Yo tengo derechos y quiero que me los respetes; sé que tú tienes derechos y quiero respertártelos».
- Es necesario también aceptar las propias necesidades y saber que los demás nos pueden ayudar. En la convivencia cercana o en el trato con desconocidos serán palabras mágicas la expresión «Por favor».
J Actividades
1. Representar una situación familiar en la que existen continuas riñas. Caer en la cuenta de los sentimientos que provocan y las consecuencias a las que se llega.
2. Repetir después la misma representación intentando pedir las cosas por favor y desde el respeto a la otra persona. Ver la diferencia.
3. Hacer ejercicio y practicar varias veces al día durante una semana: usar con frecuencia la expresión «Por favor» u otra similar. Notar las reacciones de la gente.
28. Escuchar de verdad
Cuando un hombre cuyo matrimonio funcionaba bastante mal acudió al Maestro en busca de consejo, el Maestro le dijo:
-Tienes que aprender a escuchar a tu mujer.
El hombre se tomó a pecho este consejo y regresó al cabo de un mes para decirle al Maestro que había aprendido a escuchar cada una de las palabras que decía su mujer.
Y el Maestro, sonriendo, le dijo:
-Ahora vuelve a casa y escucha cada una de las palabras que ella no dice.
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Matrimonio, escucha, atención, palabras, saber ver, comunicación no verbal, silencio...
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J Experiencia humana
- La escucha es esencial. Tanto que, sin ella, -vivimos solos y en soledad.
- Pero nos cuesta escuchar: oímos pero no escuchamos, miramos pero no vemos... Por eso no somos acogedores,
- Para aceptar a los demás, para escucharlos de verdad es necesario prestar atención a las claves no verbales. Ellas reflejan lo que en realidad nos sucede, lo que queremos, lo que necesitamos. Por eso es tan importante aprender a ver y mirar captando a la otra persona... sin interpretar.
• Actividades
1. Representar una situación familiar en la que no escucha la gente. Repetir la representación prestando atención a lo que se dice pero haciendo caso omiso de los gestos. (Se puede hacer sin verse). Repetirla después intentando hacer caso de lo que hay por debajo de las palabras, de los gestos, de los tonos de voz...
2. Para salir del laberinto en el que a veces nos metemos en las relaciones interpersonales, es necesario preguntar y escuchar en vez de hablar. Hacer ejercicio de ello.
3. Realizar un ejercicio de escucha de la otra persona: por parejas uno comienza a hablar diciendo «Yo soy una persona que...» El otro sencillamente escucha o pregunta «Tú quién eres?» en caso de que el primero calle o se escape. Después se cambian los papeles dentro de la misma pareja.
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PREPARAR EL CAMINO DE
LA PAZ
29. El origen del sol, la luna y las estrellas
Cuando las tinieblas cubrían la Tierra, una muchacha era visitada por la noche por alguien cuya identidad no podía descubrir.
Determinó averiguar quién pudiera ser. Mezcló un poco de hollín con aceite y se pintó el pecho con ello.
La siguiente vez descubrió, horrorizada, que su hermano tenía un círculo negro de hollín en torno a la boca. Le reprendió y el lo negó.
El padre y la madre se enfadaron mucho y les regañaron a ambos con tanta severidad que el hijo huyó de su presencia. La hija cogió un tizón del fuego y le persiguió. El corrió hacia el Cielo para escapar de ella, pero ella voló en pos de él. El hombre se transformó en la Luna, y la muchacha que llevaba la antorcha se convirtió en el Sol. Las chispas que saltaron del tizón se convirtieron en las Estrellas.
El Sol continuamente persigue a la Luna que se oculta en la oscuridad para evitar ser descubierta. Cuando se produce un eclipse, se cree que ambos se encuentran.
Mito esquimal
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
Q Temas
Encuentro, engaño, riña, persecución, culpabilidad, huida, noche, violencia...
Q Experiencia humana
- Otros pueblos con una cultura distinta a la nuestra traducen la misma realidad en mitos diferentes. Aquí aparece la superación del incesto impuesta por los padres con severidad y la reacción de la mujer que persigue permanentemente a quien antes la ha violentado con engaño.
- También aparece la huida permanente: la vida como camino que hay que recorrer dia y noche haciendo que no nos dominen las tendencias sembradas en nosotros desde las sombras de la noche de los tiempos...
• Actividades
1. En nuestra cultura se compara al hombre con el sol y a al mujer con la luna; en la cultura esquimal vemos que es al revés. Decir todas las características del hombre y de la mujer desde una u otra similitud,..
2. La violencia está sembrada en nosotros desde la noche de los tiempos. ¿Lo creemos así? En todo caso se puede superar o se ha superado. Dar un repaso a la historia y ver la evolución que ha habido. Reflejarlo en un dibujo.
3. Las estrellas se originaron según este mito de una chispa de luz. ¿La violencia puede crear vida? Discutirlo.
4. Establecer un diálogo de amor y reconciliación entre el sol-mujer y la luna-hombre. Prepararlo antes por escrito. También se puede improvisar.
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30. La disputa entre el Sol y la Luna
En los días del primer Abuelo, la Luna y el Sol vivían en la Tierra. Entonces, disputaron.
La Luna dijo:
-Se me ha terminado la paciencia contigo. Yo reúno al Pueblo, pero tú lo dispersas. Haces que se pierdan.
-Deseo que crezca mucho Pueblo, por eso los disperso -respondió el Sol-. Tú los dejas en la oscuridad; de este modo, matas a muchos de hambre.
Entonces, Sol llamó al Pueblo: «¡Eh! Sois Pueblo. Muchos de vosotros se harán fuertes. Os contemplaré desde lo alto. Gobernaré todo vuestro trabajo».
Dijo Luna: «También yo moraré encima de vosotros. Os congregaré al oscurecer. Juntándoos en gran número, dormiréis. Yo misma regiré todo vuestro trabajo. Andaremos en el sendero, uno detrás de otro. Yo andaré detrás de vosotros».
Cuento sioux
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TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Disputa, paciencia, oposición, muerte, vida, integración, contrarios, aceptación...
• Experiencia humana
- La vida de los pueblos y de las personas está regida por la tendencia a la dispersión y a la unión. Es la lógica del cambio y también de la defensa: reunirse y mirar hacia adentro para participar de una misma identidad, dispersarse o mirar hacia afuera para conquistar nuevas tierras o defenderse. Día y noche se convierten así en dos espacios temporales simbólicos.
- Es importante la integración de los contrarios para dar equilibrio a las personas y a los pueblos: trabajar y descansar, conquistar metas externas y conquistarse a sí mismo, caminar como grupo que avanza unido y caminar uno tras otro...
ü Actividades
1. Establecer un diálogo entre el Sol y la Luna. Es un diálogo de paz. Lo hacen dos personas.
2. Dibujar lo que podría ser el sendero de la paz.
3. Buscar algunas contradicciones que se dan en nosotros mismos, en nuestro grupo, en la sociedad... Elegir una de ellas y buscar los medios para lograr una integración de los elementos opuestos.
31. El día y la noche
Un viejo rabi preguntó a sus discípulos:
-¿Quién de vosotros sabría decirme cómo se puede distinguir el momento en que termina la noche y empieza el día?
-Yo diría -contestó el primero- cuando viendo un animal de lejos, uno no sabe distinguir si es oveja o perro.
- N o -le contestó el rabí.
-Podría empezar el día -dijo otro- cuando viendo de lejos un árbol no se puede decir si es una higuera o un manzano.
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-Tampoco -insistió- el rabi.
-Entonces -preguntaron los discípulos-, ¿cómo podemos saber cuándo termina la noche y empieza el día?
-Cuando mirando el rostro de un hombre cualquiera ves que es tu hermano -contestó con solemnidad el rabí-. Porque si no logramos ver esto, cualquiera que sea la hora del día será siempre de noche.
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Sabiduría, aceptación del otro, saber ver, prójimo, fraternidad...
Ü Experiencia humana
- La sabiduría verdadera no consiste en poseer mucha ciencia ni en tener muchos conocimientos.
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- La verdadera claridad -la clarividencia- se da cuando superamos el reino animal o vegetal y descubrimos al otro como hermano.
• Actividades
1. Según la parábola, ¿vivimos o hemos vivido más tiempo de día o de noche?
2. «Terminar la noche y empezar el día» pasa a ser una expresión de llegar a la sabiduría, a la luz verdadera, a la clarividencia, a la verdad. ¿Ha llegado ya a ese punto la humanidad? Aportar ejemplos en los que sí es así. Decir también las sombras que quedan por vencer,
3. Hacer una lista de actitudes que se requieren para «ver a tu hermano en el rostro de una persona cualquiera».
32. Pacífico y pacificador
Había un abad en el desierto que tenía un discípulo y varias lauras o ermitas.
Llegó un monje nuevo y el abad le prestó una laura.
El nuevo era un santo y recibía muchas visitas.
Le entró envidia al abad y envió a su discípulo para decirle que abandonara su laura. Pero el discípulo fue y le preguntó cómo se encontraba. Le contestó que le dolía el estómago y que agradeciera al abad su interés por él.
Volvió el discípulo y le dijo al abad que el monje le pedía que le dejase dos días más y se iría. Pero no se fue.
El abad volvió a enviar a su discípulo para que se fuera inmediatamente. Y si no, iría con un garrote y lo echaría a palos. Pero el discípulo fue y le preguntó si se encontraba mejor. Este le dijo que diera muchas gracias al abad por su delicadeza y por las oraciones que rezaba por él.
El discípulo volvió a su abad y le dijo que el monje le pedía que le dejara hasta el domingo y se iría.
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El domingo, furioso el abad porque no se iba, cogió un garrote y se dirigió hacia él. El discípulo le dijo:
-Déjeme ir por delante para que despida a sus visitantes y no se escandalicen. Se adelantó y le dijo:
-M i abad viene a visitaros. Salid a su encuentro para agradecerle el haberos dejado la laura.
Salió el monje y se tiró a los pies del abad y se los besaba agradecido, pues había sido generoso y había rezado por él.
Esto desarmó al abad, le invitó a comer y le regaló la laura que le había prestado.
Cuando el monje se fue a la que ya era su laura, preguntó el abad a su discípulo:
-Dime la verdad, ¿le dabas mis recados?
- N o me atrevía a replicarle, pero no se los daba.
-Pues ahora yo seré tu discípulo y tú serás mi abad, ya que estás mucho más cerca de Dios que yo.
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Envidia, amenazas, engaños, violencia, ira, generosidad, humildad, alabanza, santidad, conversión, cambio...
• Experiencia humana
- Las miserias humanas son grandes, incluso entre quienes se dedican a la santidad. Precisamente los profesionales de la santidad -o los profesionales de la paz, si los hay-, a veces dejan mucho que desear, pues la rutina vence a la libertad y a la sinceridad...
- Agendas ocultas, motivaciones inconfesables, envidias no manifiestas... hacen que a veces tomemos decisiones que parecen una cosa y son otra,
- Contar entonces con personas conciliadoras y libres a la vez, será una gran suerte,., para todos.
ü Actividades
1. Repasar esta historia de los padres del desierto y concretar cuáles son las actitudes de cada personaje. Colocarlas según el grado de pacificación que aporta cada una de ellas.
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2. ¿Es conveniente tener una actitud como la del discípulo? ¿Se logran más y mejores cosas así? ¿Podría haber logrado otras cosas de otra manera...?
3. Al final se da una aceptación y un cambio. ¿Por qué cambió aquí? ¿Suele suceder esto en realidad? ¿Qué se necesita para que eso se dé?
4. «Estar más cerca de Dios» debería implicar estar más cerca también de los demás. ¿Sucede eso así? ¿Qué se podría hacer para que sucediera?
33. La semilla de la paz
Un muchacho soñó que entraba en un gran comercio. Había un ángel detrás del mostrador.
-¿Qué vendes aquí? -preguntó el ¡oven.
-Todo lo que desees -respondió cortésmente el ángel.
Entonces el chico comenzó la lista de sus peticiones: el fin de todas las guerras del mundo, más justicia para los explotados, tolerancia y generosidad para los extranjeros, más amor a las familias, trabajo para los parados...
El ángel lo interrumpió:
-Lo siento, ¡oven... Usted no me ha comprendido bien. Nosotros no vendemos frutos, sino solamente semillas.
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
Q Temas
Deseos, sueños, peticiones, justicia, paciencia, compromiso, comienzo, Reino...
• Experiencia humana
- «Quiero esto, pero ya», decíamos hace bien poco y seguimos diciendo ahora. Acostumbrados a tener todo, lo queremos todo sin implicamos demasiado y a la vez sin dedicar a ello el esfuerzo necesario.
- Pero «a quien algo quiere, algo le cuesta». Saber que los mejores logros hay que trabajarlos es señal de buena salud.
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- La impaciencia, por otra parte, no es la mejor arma de los pacíficos..,
- Más: lo que importa es sembrar, que otros recogerán si no lo llega a recoger uno mismo.
- Para los cristianos, «el Reino de Dios es como una semilla que un hombre hizo sembrar en un campo», según narraba Jesús. Pero el Reino es siempre un comienzo, a veces minúsculo y despreciable: un poco de levadura, una pequeña semilla, una brote reciente... Y así se puede dar el gran milagro: el crecimiento de grandes empresas y valores, nacidos de una pequeña semilla...
• Actividades
1. Decir algún aspecto en el que somos impacientes. Buscar las causas.
2. Continuar la parábola: decir cómo pudo seguir después ese muchacho para hacer crecer y florecer a la semilla.
3. Representar esa tienda: uno hace de ángel y los demás acuden a ella a pedir «todo lo que deseen». Una vez que lo han pedido han de pagar por ello: decir cómo lo lograrían, concretando incluso los pasos que están dispuestos a dar...
4. Realizar un relax imaginativo: cada uno es una pequeña semilla de una planta (que representa una virtud o cualidad concreta). Esa semilla cae en tierra..., se abre, brota..., crece.
5. Hacer una lista de deseos concretos que pediría cada uno. Colocarlos después por orden de importancia. Del primero de ellos, poner al menos cinco elementos que concreten formas de acción para llevarlos a cabo.
6. Plantar un árbol y seguir su proceso de crecimiento. Compararlo con el proceso de pacificación, tanto interior como exterior.
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6
SOÑAR LA PAZ
34. Y un día empezó la paz
Los fusiles se negaron a disparar. Los tanques no quisieron moverse. Los aviones dijeron que no deseaban transportar más bombas.
-Estamos hartos de matar hombres.
-Estamos cansados de las guerras.
Y de pronto el ruido de las balas y de las bombas cesó y se pudo oír el trino de los pájaros y las voces de los niños.
Los campos de batalla se convirtieron en enormes parques infantiles. Los tanques pintados de mil colores diferentes se transformaron en toboganes y de los grandes cañones colgaban columpios. Los aviones fueron escuelas, bibliotecas, cines...
A los fusiles, de no usarlos, les nacieron hermosas rosas en sus cañones; los cascos sirvieron para tiestos que adornaban todos los balcones.
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Y los hombres tacharon de los libros y diccionarios las palabras guerra, enemigo, odio...
En las escuelas se enseñaba que siempre se escribe con mayúsculas PAZ, AMIGO, AMOR...
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
_l Temas
Armas, sueño, utopía, guerra, enemigo, amigo, amor...
• Experiencia humana
- La violencia crea violencia; la noviolencia va haciendo posible el sueño de la paz.
- Si la agresividad y la violencia están presentes desde el principio en la historia de la humanidad, también lo está el sueño de la paz: la paz mesiánica sería ese tiempo en el que el Mesías llegaría como Príncipe de la Paz; la utopía del Reino se concretaría en un mundo en Paz...
- Esta dimensión utópica sigue sembrando inquietudes: el sueño de un mundo en paz puede transformarse en un compromiso personal y colectivo de acciones por la paz.
- En ese sentido es importante acudir a la imaginación y a la fantasía. Recordaba Novalis que «si tuviéramos una fantástica como tenemos una lógica, se habría descubierto el arte de inventar». En el mundo todavía nos falta mucho por hacer en el arte de inventar la paz.
• Actividades
1. Realizar numerosas actividades que impliquen «soñar la paz». Al ñnal se pueden coordinar todas en una fiesta por la paz. Sugerimos algunas, pero se pueden realizar otras, siempre a partir de este texto.
2. Ilustrar esta parábola-poema. Cada uno o cada grupo puede centrarse en un párrafo.
3. Elaborar un breve relato a partir de cada frase, tomándola por título: «El día en que los fusiles se negaron a disparar...».
4. En vez de relato, preparar un breve poema.
5. Preparar con diversos materiales los nuevos instrumentos de paz nacidos de los instrumento de guerra: cascos-tiestos, tanques-toboganes... Escribir o pegar en ellos los poemas o dibujos preparados anteriormente.
6. Tachar palabras: ver qué palabras nos decimos habitualmente unos a otros que habría que evitar para caminar en son de paz.
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7. Preparar una lista de las diez palabras de la paz.
8. Disfrazarse después con algo que represente a cada una de esas palabras y celebrar, con todo lo anterior, una fiesta por la paz.
35. El museo del futuro
Llegará un día en que nuestro mundo actual será como un museo. Ante los grandes paneles fotográficos, los niños de África preguntarán:
-¿Qué es el hambre?
Los niños de Sudáfrica preguntarán:
-¿Qué es el racismo?
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Los niños de Hiroshima preguntarán:
-¿Qué es la bomba atómica?
Los niños de la India preguntarán:
-¿Qué son las chabolas?
Los niños de todo el mundo preguntarán.
-¿Qué es la guerra?
Todos preguntarán y nadie les responderá... Porque nadie sabe lo que es el hambre, ni el racismo, ni las bombas, ni las chabolas... Nadie, nadie.
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Sueño, utopía, compromiso, hambre, racismo, bomba atómica, pobreza, guerra, justicia...
• Experiencia humana
- La memoria de la humanidad está sembrada de muerte y destrucción. La utopía de la paz, el sueño posible de la pacificación universal, sigue esperando que esa memoria se borre y sólo quede en las paredes de los museos porque también el corazón humano habrá cambiado ya.
- Para ello es necesario concretar cada uno de los aspectos que siguen haciendo del mundo un museo del mal. Sólo el compromiso en la lucha contra ellos podrá ir haciendo que el sueño siga haciéndose realidad.
J Actividades
1. Buscar una solución imaginativa para cada uno de los problemas que aparecen en el texto. (Se puede hacer un concurso). Concretar después formas de llevarla a la práctica en diversos niveles: personalmente, en el grupo, en el centro educativo, en la familia, en la ciudad, en las naciones, en el mundo..,
2. Imaginar que ese futuro se da ya ahora. Preparar un pequeño periódico en el que aparecen ya las noticias de un mundo en paz. Poner una fecha futura e imaginar después que esas noticias son ya realidad: concretar qué habría que hacer para que se convirtieran en realidad en la actualidad.
3. Escribir un relato titulado «Ha estallado la paz».
4. Preparar una pequeña exposición de murales elaborados con noticias actuales, recortadas de los periódicos, en las que ya vaya siendo realidad lo que dice la parábola. Son, por lo tanto, noticias y fotos, que reflejan cómo ha ido desapareciendo el hambre, el racismo,.,
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36. Reconciliación
No luchaba. Tan sólo buscaba un camino vacío de hombres luchando, un espacio abierto donde escuchar el espacio de la risa, un lugar tranquilo donde toda acción se hiciera sin prisa...
No luchaba, no luchaba. Tiró su fusil con fuerza y lloró, lloró y lloró. No quería luchar. En medio de la batalla, se pasó al otro lado, encontró el primer cuerpo de hombre que luchaba y gritó:
-Te quiero, hermano. Soltemos las armas y ornémonos. Perdona, te quiero y sé que me quieres...
Isabel BLÁZQUEZ
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
Ü Temas
Lucha, noviolencia, utopía, reconciliación, amor, encuentro...
J Experiencia humana
- A veces nos meten en guerras que no queremos. O nos dejamos meter. O nos dejamos seguir en ellas.
- Es necesario «pasarse al otro lado»: dar el salto hacia la reconciliación.
• Actividades
Nota: Conviene saber el origen de este relato. Fue preparado por una joven en menos de dos minutos de creación rápida a partir de las palabras con cierto sentido que aparecen en la palabra «reconciliación»: re, con, concilla, reconcilia, lía, ion, rec, eco... En este caso no alude demasiado a cada una de ellas. El tiempo podía haber sido más y el relato más largo...
1. Elaborar un relato del modo sugerido, a partir de esa misma palabra o de otra que esté relacionada con la construcción de la paz.
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2. Ilustrar ese poema-parábola,
3. ¿Pueden ser efectivas las frases que dice el personaje anónimo al final? ¿Las hacemos nuestras? ¿Dónde nos gustaría repetirlas?
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TRABAJAR JUNTOS
POR LA PAZ
37. ¿Quién puede hacerlo?
Esta es la historia de cuatro personas que se llamaban Cadauno, Alguno, Cualquiera y Ninguno.
Había que hacer un trabajo importante y se pidió a Cadauno que lo hiciera. Cualquiera estaba seguro de que Alguno lo haría, pero Ninguno lo hizo.
Alguno se molestó a causa de ello, porque era el trabajo de Cadauno.
Cadauno pensó que Cualquiera podía hacerlo, pero Ninguno se dio cuenta de que Cadauno no lo habría hecho.
Al final resultó que Cadauno riñó a Alguno, cuando Ninguno hizo lo que, en realidad, Cualquiera podría haber hecho.
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
_l Temas
Compromiso, disculpas, intereses, acción, colaboración...
• Experiencia humana
- Es más fácil escurrir el bulto y desaparecer que... hacer historia,
- No sólo eso: las disculpas aparecen pronto; la falta de compromiso encuentra fáciles justificaciones con sólo mirar alrededor,
- Somos ingeniosos para... escapamos.
• Actividades
1. Elegir a uno de estos personajes. ¿Cuál es el que más se parece a mí?
2. ¿Cuál es el que representa mejor las actitudes de los políticos, los creyentes, los jóvenes.,.?
3. Hace unos años alguien escribió en una farola de Madrid esta frase: «Nadie te salvará. Nadie te defenderá. Vota a Nadie». Trabajar con ella. Compararla con la parábola. Sacar conclusiones.
4. Reescribir la historia en sentido positivo: los mismos personajes dan una respuesta y actúan.
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5. Concluir: ¿Qué podemos hacer para construir la paz que no hemos hecho? Concretar algunas acciones para llevarlas a cabo.
38. La pelea del cuerpo
Un día la mano izquierda le dijo confidencialmente a la mano derecha:
-Mira, nosotras trabajamos todo el día, mientras el estómago no hace nada.
Las piernas escucharon y dijeron:
-Tienes razón, nosotras también estamos cansadas caminando todo el día para comprarle alimentos al estómago y él sólo come sin hacer nada para conseguirlo.
La mano derecha gritó:
-Hagamos huelga, no le demos ya comida al estómago. Quel él se las arregle si quiere.
Entonces habló el estómago:
-Amigos, vosotros estáis pensando mal. Nuestros trabajos y aptitudes son muy diferentes, pero la verdad es que dependemos muchísimo los unos de los otros.
Los brazos le gritaron:
-Cállate. Esos son los argumentos de un vago. Desde ahora no vas a comer nada, absolutamente nada.
Pasaron unos días
-¡Ay qué débil me siento! -se quejó un brazo al otro.
-Yo también, no sabes lo cansado que me siento...
Las piernas se quejaron:
-Nosotras apenas nos podemos mover.
Y todas las partes del cuerpo decían lo mismo. Todos se sentían desfallecer. Entonces el estómago habló:
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-Yo también me siento débil. Si me alimentáis podré trabajar de nuevo y vosotros y yo nos sentiremos mejor.
-Bueno, vale la pena probarlo -di jo la mano derecha.
Y las piernas con mucha dificultad llevaron el cuerpo a la mesa, las manos cooperaron y metieron la comida en la boca.
Al poco rato las manos exclamaron:
-Ya nos sentimos mejor.
Todos los miembros del cuerpo decían lo mismo.
Entonces comprendieron que todos los miembros del cuepo deben cooperar si quieren conservarse con buena salud. Y el estómago comprendió que él depende del trabajo de los miembros y que debe repartir por igual con los miembros todo lo que llegue a él.
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
ü Temas
Reivindicaciones, peleas, disputas, colaboración, igualdad, originalidad...
ü Experiencia humana
- Hay muchas partes y un sólo cuerpo. Hay muchas personas y un sólo cuerpo social.
- En el cuerpo social, todos somos importantes; nadie puede ser excluido para que el cuerpo marche bien.
- Cuando uno sufre, todos los demás sufren con él; cuando alguien recibe atención, todos la reciben en él.
Ü Actividades
1. Comparar esta parábola con la sociedad. Dar nombre a lo que serían las distintas partes del cuerpo, según sus funciones.
2. Aplicar la parábola al título de este capítulo: «Trabajar juntos por la paz».
3. «Repartir por igual a todos»: ¿Qué es lo que lo impide en el mundo, en nuestra sociedad,..? ¿Qué podemos hacer?
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39. Cielo e infierno desde aquí
Cierto día, un sabio visitó e! infierno. Allí, vio a mucha gente sentada en torno a una mesa ricamente servida. Estaba llena de alimentos, a cuál más apeti toso y exquisito. Sin embargo, todos los comensales tenían cara de hambrientos y el gesto demacrado. Tenían que comer con palillos; pero no podían, porque eran unos palillos tan largos como un remo. Por eso, por más que esteraban su brazo, nunca conseguían llevarse nada a la boca.
mpresionado, el sabio salió áeí infierno y subió al cielo. Con gran asombro, vio que también allí había una mesa llena áe comensales y con iguales manjares. En este caso, sin embargo, nadie tenía la ca^a desencajada; todos los presentes lucían un semblante alegre; respiraban salud y bienestar por ios cuatro costados. Y es que, allí, en el cielo, cada cual se preocupaba de alimentar con los largos palillos al que tenía enfrente
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Cielo, infierno, riquezas, hambre, eqoísmo, solidaridad, colaboración, prójimo, ,
J Experiencia humana
- Cielo e infierno son realidades que se inician aquí y que se hacen presentes entre nosotros. Descubrir los infiernos existentes a nuestro lado y trabajar para convertirlos en cielos, esa es una gran tarea para construir la paz
- No es fácil, porque todo es lo mismo: manjares, mesas, instrumentos,,. Sólo cambia nuestra actitud
- Porque el cielo y el infierno no consisten en algo exterior, sino en actitudes internas: donde hay egoísmo, hay infierno: donde hay fraternidad, hay cielo..
J Actividades
1. Aplicar esta parábola a las realidades de aquí abajo, 6Qué cielos e infiernos descubrimos9
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2 ¿Qué podemos hacer, aquí y ahora, para destruir el infierno y para adelantar el cielo9 Buscar compromisos concretos
3. Para describir el cielo, se utiliza aquí la imagen del banquete. Buscar otras imágenes
4. Decimos «Eres un cielo», «Esto es un infierno,.,» Sabiendo que el cielo y el infierno son un estado más que un lugar, concretar los lugares de la tierra que hemos convertido en cielo o infierno,.,
5. Dice un refrán que «un sabio y un tonto saben más que un sabio solo». Aplicarlo a todo esto y a la construcción de la paz.
40. El duelo entre el elefante y el gorrión
En un lugar de !a espesa jungla vivían un gorrión y su mujer; habían construido su nido en una rama de un árbol ¡lamado tama!, y ai poco tiempo aumentó ¡a familia.
Cierto día, un elefante de la selva acometido por el calor y la fiebre, liego hasta ese tamal en busca de sombra. Enceguecido por su mal, tiró con el extremo de su trompa de ¡a rama en dode los gorriones tenían su nido, y la rompió. Los huevos se rompieron, en tanto que los padres -gue estaban destinados a sobrevivir- escaparon con vida.
Entonces el gorrión hembra se lamentó con gran pesar por la muerte de sus pollitos. Al oír sus lamentos, acudió un pájaro carpintero, gran amigo de ellos, y entristecido por su pena dijo:
-M i amiga querida, ¿para gué lamentarse en vano? Recuerda gue ¡a escritura dice:
Por lo perdido, muerto y pasado, el sabio no se lamenta; esa es justamente la diferencia entre el sabio y el insensato.
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-Es una buena doctrina -d i jo el gorrión hembra-, ¿pero de qué me sirve? Ese elefante, corriendo en su estado afiebrado, ha matado a mis bebés. Por lo tanto, si tú eres mi amigo, piensa en algún plan que permita matar al gran elefante. Si así se hiciera me sentiría menos apenada por ¡a muerte de mis criaturas.
-Señora -dijo el carpintero-, tu observación es muy cierta. Pues el proverbio dice:
Amigo en el pesar, amigo de verdad, aunque de casta distinta; el mundo entero es su amigo ansioso mientras queden los favores.
Veremos lo que mi astucia inventa. Sabe que tengo un amigo, un mosquito llamado Susurro de laúd. Con su ayuda el villano elefante será asesinado.
Luego se fue con el gorrión hembra, encontró al mosquito y dijo:
-Estimado amigo mío, esta es mi amiga la señora Gorrión. Tendrás que prestarnos tus servicios, pues preparo un plan para matar al elefante.
-Buen amigo -dijo el mosquito-, sólo hay una contestación posible. Tengo un amigo íntimo, un sapo llamado Mensajero Nube. Hagamos las cosas correctamente y consultémoslo.
Y los tres ¡untos fueron y contaron a Mensajero Nube la historia completa; después de escucharlos el sapo dijo:
-¡Cuan débil es ese elefante desgraciado frente a un grupo grande y enfurecido! Mosquito, tú irás y zumbarás en su afiebrados oídos, para que cierre los ojos complacido al escuchar tu música. Entonces e! pájaro carpintero, con su pico le sacará los ojos. Una vez realizado esto, me sentaré a croar al borde de un abismo. Y él, teniendo sed, me oirá y se aproximará esperando encontrar un sitio con agua. Cuando llegue al borde del abismo, caerá dentro y sucumbirá.
Llevaron a cabo sus planes, y el elefante afiebrado cerró sus ojos complacido por el canto de! mosquito,
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fue cegado por el pájaro carpintero, anduvo atormentado por la sed toda la tarde, siguiendo el croar de un sapo llegó a un gran abismo, se cayó en el y murió.
Fábula hindú
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
J Temas
Mal, duelo, violencia, muerte, lamentaciones, astucia, venganza, colaboración...
• Experiencia humana
- Creemos que el dolor con dolor se paga. No es así. Pero a veces nos puede el ansia de venganza, ya que la venganza todavía anida en lo más recóndito de nuestro corazón: Si pudiéramos matar al elefante, «me sentiría menos apenada por la muerte de mis criaturas».
- En otro orden de cosas, sabemos que el débil vence al fuerte. Es lo que aquí queremos recalcar. Sobre todo porque el débil sabe unirse a otros débiles. Y la unión hace la fuerza: de muchas debilidades puede nacer gran fortaleza.
J Actividades
1. ¿Con qué sabor nos deja la parábola? Expresar los sentimientos
2 Intentar corregir nuestra tendencia hacia la venganza. Para ello, cambiar el relato de modo que el elefante no tenga que morir sino que se convierta: que se dé cuenta del mal que ha hecho y que él mismo decida compensar o dar una solución que convenza a los demás.
3. Concretar quiénes pueden ser hoy los elefantes: ¿Qué hacer entre todos para que se convierta y viva cada uno de ellos?
4 La fábula hindú original termina así:
Un carpintero y un gorrión con un sapo y un mosquito, si atacan juntos y unidos, a un elefante dejarán vencido.
Preparar otros versos con un final en el que nadie sea vencido, sino que todos ganen.
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41. Las aves voladoras
«Las aves, volando en formación triangular, están, por así decirlo, ligadas las unas a las otras por el aire que las relaciona o, más exactamente, por la elasticidad de dicho aire».
Semejante grupo de pájaros contituye un todo, y el aire que los sostiene forma parte de ese todo. La bandada se mueve en el seno de una «forma aérea» creada por el mismo aire y que reacciona a su vez sobre cada pájaro del grupo.
Una comparación nos ayudará a comprenáerlo mejor.
A menudo podemos observar en los estanques cómo un cisne que nada va dejando una estela triangular de olas tras de sí, sobre la que a veces sus polluelos se dejan transportar. Todo barco en marcha deja tras de sí una estela semejante.
Los indígenas de la Costa de Oro utilizan semejantes estelas con sus pequeñas canoas. Ellos reman con sus pequeños navios, detrás de! barco a vapor, hasta haber alcanzado su misma velocidad, y después sitúan sus embarcaciones sobre la pendiente anterior de la cresta de una de ías oías. La ola los transporta a la misma velocidad que el vapor, sin que tengan que molestarse en remar.
Esta es, aproximadamente, la imagen del vuelo triangular de los pájaros. Cada uno de ellos flota sobre una «ola» que ha sido inscrita en el aire por el pájaro que vuela en cabeza. Los movimientos áe las olas siguen el vaivén de la ola y ponen en evidencia la forma aérea, invisible y vibrante, que envuelve y transporta a todos esos pájaros. Así, cada pájaro vuela en un punto bien preciso de la estela aérea, que abraza y reúne a todos los miembros del grupo.
Cada pájaro debe gastar muy poca energía, dado que el movimiento de la ola aérea le eleva y le baja las alas, por así decirlo. Si uno de estos pájaros dispone de fuerza de sobra, entonces hace algo más que dejarse llevar: reforzará la ola a base de golpes
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de ala, aportando asi energía a la forma colectiva, de la que se aprovecharán los más débiles. Estos últimos obtienen energía a partir del «campo de aire» en movimiento. Desde luego que el pájaro que marcha en cabeza también extrae de ahí energía.
«El vuelo en formación de la bandada constituye una totalidad, un organismo en el que los animales por separado son como los órganos. Es un nuevo cuerpo, creado a partir del aire en el que -al igual que en el cuerpo sonoro nacido de una orquesta- el instrumento particular se une en gran parte a la unidad superior para la cua! es necesario. Las aves, como elementos individuales de una bandada, están unidas las unas a las otras por el aire que las envuelve como si fuese por hilos elásticos. Esto hace posible largos desplazamientos de las aves migratorias. El aire las soporta. El ave es un ser aéreo, y es imposible que el aire la deje caer».
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
J Temas
Jerarquía, viaje, orden, energía, integración, colaboración...
J Experiencia humana
- Estos datos están sacados de los estudios de R. Schieferstem y T. Schwenk en El caos sensible, según resumen de C. G VALLES (1992, 91ss.).
- Los animales perciben mejor que los humanos lo que debemos y podemos hacer. También nosotros nos sentimos a veces inundados de una paz colectiva o nadando en una energía que nos transporta a otros mundos... Es algo para descubrir y potenciar.
J Actividades
1, Leer con detenimiento todos estos datos. ¿Qué aprendemos de ellos?
2. Comparar el misterio de la V con el comportamiento humano: a qué lo podemos aplicar.
3, Buscar formas de colaboración en alguna acción concreta sin que a la vez las personas dejen de ser ellas mismas. ¿Qué características tendría que tener esa acción9
4. Tener en cuenta la parábola siguiente. Trabajar con ella después de haberse centrado en ésta.
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42. ; Adonde vas?
Una bandada de aves en forma de «V» cruzaba el cielo cuando a una nube gue compartía el mismo cielo se le encendió ía curiosidad y guiso saber adonde se dirigían y gué planes tenían. Esperó a cruzarse en su camino y, con delicadeza, sin molestar ni entorpecer la marcha, gue adivinaba seria e importante, se acercó cuidadosamente al último pájaro en una de las ramas de la «V» y le preguntó con dulzura:
-Dime, guerido pájaro, si se puede saber y puedes decírmelo, ¿adonde os dirigís en un vuelo tan recto y tan largo, y gué vais a hacer allí?
El pájaro, sin dejar de volar al ritmo de sus compañeros, constestó:
-¡Ay, si yo lo supiera! Pero no tengo ni idea. Yo no hago más gue seguir al compañero gue me precede. Voy adonde ya él, y vuelo hacia donde él vuela. Pregúntale a él. El lo sabrá.
La nube se adelantó un poco, hasta alcanzar al pájaro anterior, y recibió la misma respuesta. Y así fue pasando de un pájaro a otro y de una rama de la «V» a la otra, sin lograr saciar su curiosidad. Todos le decían gue ellos no sabían nada y gue preguntase a los demás, gue ellos sabrían. Pero nadie sabía nada.
Cada uno seguía al gue tenía delante, sin preguntarse más, y no podían dar respuesta.
A la nube se le acrecentaba la curiosidad con ello, y no le guedó más remedio gue dirigirse al pájaro del vértice de la «V» aun a riesgo de molestarlo y distraerlo en su importante tarea de líder del grupo. Se disculpó, pues, y le preguntó adonde iba con todos aguellos compañeros gue los seguían.
El pájaro áe guía contesto:
-¡Qué más guerrla yo gue saberlo! No tengo ni idea de adonde vamos. Pero todos éstos me vienen empujando por detrás, y no tengo más remedio gue seguir
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volando, aunque sin saber adonde me llevan. ¡Ellos lo sabrán! Pregúntaselo a ellos.
Garios G. VALLES
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
Ü Temas
Preguntas, viaje, sentido, líderes, objetivos, libertad, cambio...
J Experiencia humana
- A veces hacemos las cosas sin saber por qué, O lo supimos al principio pero después cambió la realidad y nosotros no. Continuamos haciendo lo que siempre se hizo o lo que tuvo sentido en un principio, pero que ahora sigue en marcha solamente porque nadie se ha parado a pensar si merece la pena seguir con ello.
- Esto puede suceder especialmente a algunos grupos, incluso los que han luchado por una causa justa: descubrieron una necesidad y comenzaron a trabajar según un ideal. Cuando este ideal se desvirtúa, surgen los intereses creados, el grupo necesita perpetuarse, sus miembros buscan seguridad, las normas se hacen rígidas, se invocan tradiciones para seguir haciendo lo que siempre se ha hecho
- Lo mismo se puede aplicar a cada uno: «¿Adonde voy? ¿Adonde va mi vida? ¿Soy consciente de lo que hago o me dejo llevar por lo que s iempre he hecho?»
- Con todo hay gente que va por delante en política, en sociedad, en religión,.. Saben dar cuenta de su posición, descubrir nuevos caminos, adelantar metas.. Pero ellos mismos tienen el peligro de repetir las certezas de siempre y recitar fórmulas...
J Actividades
1. Aplicar la parábola a la construcción de la paz. ¿Es bueno que eso suceda? ¿Qué tendríamos que hacer para evitar esos peligros...?
2. Comentar lo expresado en la «experiencia humana» y responder a las preguntas que ahí se ponen.
3. Imaginar que somos de las personas que saben dar cuenta de su posición, descubren nuevos caminos y adelantan metas... respecto a la construcción de la paz. Formular varias propuestas concretas,
4. Tener en cuenta el texto de la parábola anterior (n. 42) y unirlo con esta. Escribir una parábola o relato breve en que se superen las posibles contradicciones o dificultades de consciencia y de sentido que aparecen aquí.
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43. La Ley de la gran paz
1 . Con los jefes de la Liga de las Cinco Naciones, planto el Árbol de la Gran Paz.
2. Llamo al árbol el Árbol de las Grandes Hojas Largas.
3. Bajo la Sombra de este Árbol de la Gran Paz, y con el suave, blanco pulmón de globo de! cardo, tendemos asientos para vosotros.
4. Las raíces del Árbol de la Gran Paz se han extendido, una al Norte, una al Este, una al Sur y otra a Oeste. Estas son las Grandes Raíces Blancas y su naturaleza es paz y fuerza.
5. El humo del fuego del consejo de la liga ascenderá y traspasará el cielo, de tal suerte que otras naciones que puedan ser aliadas, puedan ver el fuego del consejo de la Gran Paz.
ó. Vosotros, los Jefes de la Liga de las Cinco Ncc'o-
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nes, sed firmes, para que si un árbol cae sobre vuestras manos unidas, no separe ni debilite vuestra firmeza. Así la fuerza de la unión será preservada.
7. El Gran Creador nos ha hecho de una sola sangre y de la misma tierra.
8. Cuando alguien de una nación extraña viene al territorio de la Liga y busca refugio y residencia permanente, ¡os jefes de la nación a la cual viene, le ofrecerán hosp i ta l idad y So harán miembro de la nación.
9. Cuando quiera que una nación extranjera entra en la Liga o acepta la Gran Paz, las Cinco Naciones y la nación extranjera entrarán en un convenio por el cual la nación extranjera tratará áe persuadir a las otras naciones de aceptar la Gran Paz.
10. Y ahora arranco el árbol más alto y arrojamos toáas las armas de guerra al agujero que allí queda. Dentro de las profundidades de la tierra, abajo y dentro de las profundas corrientes interiores de agua que fluyen en regiones desconocidas, arrojamos todas las armas de ¡a lucha. Las enterramos fuera de la vista y plantamos el árbol, de nuevo. Así será restablecida la Gran Paz y las hostilidades no serán nunca más conocidas entre las Cinco Naciones, y habrá paz para la gente unida.
Aaaptcdc oorjchn BE?I-C?Í~ ae¡ Ubre ¡roques de "¡a Gran Ley
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
J Temas
Tratado, ley, pacto, enemigos, armas, hospitalidad, unión, consejos de paz, árbol de la paz.,,
J Experiencia humana
- Bastante antes de las primeras colonizaciones inglesas en Jamestown y Ply-mouth, las cinco tribus moqueas de la región que más tarde sería Nueva York se reunieron en una «gran paz». Otras tribus o naciones fueron invitadas a buscar refugio dentro de la Gran Liga.
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- Las cinco naciones originales -Mohawak, Oneida, Onondaga, Cayugay Séneca-junto con Tuscadora, tribu iroquesa de Carolina del Norte, todavía conservan la Ley de la Gran Paz, Todas honran la memoria del fundador de la Liga, Degana-wida, que plantó el «árbol» y extendió el suave «pulmón del cardo» donde los primeros pacificadores celebraban sus consejos.
- Este y similares hechos han pasado a ser memoria colectiva, más del futuro que del pasado,
J Actividades
1. Proclamar el texto reviviendo su contenido: plantar el Árbol de la Gran Paz, enterrar las armas de la lucha...
2. «Vamos a sentarnos para hablar de paz con paz». Tener, pues, una sentada por la paz. Recalcar la dimensión de serenidad y paz interior.
3. Señalar los cuatro puntos cardinales actuales de la paz
4. Imaginar que se es representante de cuatro o cinco naciones poderosas (su Presidente o Jefe de Estado, por ejemplo): celebrar un Consejo de Paz.
5. Este texto está tomado de El Gran libro de la paz (Edebé, Barcelona 1991). Allí hay otros muchos relatos. Trabajar con ellos. (Los autores han cedido sus derechos en favor de organizaciones pacifistas y defensoras de los derechos humanos como Annistia Internacional,..).
44. La historia universal
Al principio, la Tierra estaba llena de fallos y fue una ardua tarea hacerla más habitable.
No había puentes para atravesar los ríos.
No había caminos para subir a los montes.
¿Quería uno sentarse? Ni siquiera un banquillo, ni sombra. ¿Se moría uno de sueño? No existían las camas. Ni zapatos ni botas para no pincharse los pies.
No había gafas para los que veían poco. No había balones para jugar un partido; tampoco había ni ollas ni fuego para cocer los macarrones; es más, mirándolo bien, tampoco había macarrones. No había nada de nada. Cero tras cero y basta.
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Sólo estaban los hombres, con dos brazos para trabajar, y así se pudo poner remedio a los fallos más grandes.
Pero todavía quedan muchos por corregir; ¡arremangaos, que hay trabajo para todos!
Idea de G. RODARi
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
J Temas
Historia, tierra, trabajo, esfuerzo, colectividad, compromiso.,.
ü Experiencia humana
- La historia existe desde que el ser humano comenzó a hacer habitable esta tierra nuestra. A la vez, esta tarea le ha ayudado a construirse a sí mismo.
- La verdad es que se ha hecho mucho, pero queda mucho por hacer. (Entre otras cosas, no destruir lo que ha sido, más que ninguna otra cosa, «patrimonio de la humanidad»: una vida integrada en la naturaleza).
J Actividades
1. Señalar los fallos que ahora todavía hay en la tierra. ¿Cómo arreglarlos?
2. Dibujar -o hacer con cartón..,- los elementos que va señalando el autor: puente, camino, banco, cama, platos, bota, gafas, balones, ollas, macarrones... Trabajar después con ellos usándolos como símbolos de lo que el ser humano es, ha sido, quiere ser...
3. Imaginar que se es una de las dos personas que queda en el mundo: todo puede comenzar de nuevo... ¿Cómo lo haría cada uno? ¿Qué elementos de los que tenemos ahora mantendría como esenciales?
4. Trabajar con el relato original, más largo y enriquecedor. Ver G. RODARI, Cuentos por teléfono, Juventud, Barcelona 1981,
5. En caso de que no se tenga el original, crear otro a partir de esta breve síntesis. (Ver otro modelo del autor en el número 55 de esta selección)
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CONSTRUIR
45. Receta
Un libro de recetas.
Un libro de cuentos que hayan leído tres niños, obligatoriamente que el primero sea uno cuyo nombre empieze por P, el segundo por A y el tercero por Z.
Quermarlo en un hoguera de madera de olivo. Añadir a las cenizas una piedra preciosa de la corona de un déspota, machacada hasta el polvo.
Mezclar esto con tierra de un territorio en guerra y arena recogida de una playa con el mar picado.
Echar medio litro de agua bendita de una iglesia.
Mezclar también un cabello de blanco, un cabello de negro y uno de chino.
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Añadir lágrimas de tristeza de un huérfano y las de alegría de una madre a! encontrar a su hijo.
Dejar esto enterrado en una olla de cobre durante tres días y tres noches en un campo de batalla. Añadirle una hoja de olivo. Salpicar el brebaje con una pluma de paloma mensaiera.
Cesará la guerra.
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
3 Temas
Receta de paz, rituales, árbol tierra, racismo, tristeza, alegría, paloma, guerra...
J Experiencia humana
- Este relato, de una niña de 11 años, como el 5 y el 54. es maravilloso. Participa de los elementos mágicos de los cuentos infantiles, pero usa símbolos nuevos y establece una continua ruptura con lo esperado. También el final es inesperado
- Ha sido una constante la pretensión humana de dominar la naturaleza (también la interna).
- Ante las situaciones de mal. la humanidad ha buscado siempre soluciones y sobre todo, ha pedido recetas. Tenemos la tentación de creer que. por hacer algo ntualmente, ya vamos a solucionar todo. Esta receta para que cese la guerra lleva implícitos unos componentes que implican un cambio. Eso sí que es importante. Y se acepta el mal en nuestro mundo como realidad presente, aunque no definitiva..
- Los humanos necesitamos incorporar la paz a nuestra propia vida y convertirnos cada día.
-I Actividades
1, Leer el relato y hablar sobre todo lo que de él llame la atención. Hablar después a partir de cada uno de los símbolos que aparecen:
- Un libro de recetas: ¿Qué recetas buscamos en nuestra vida de oración, personal, de estudio,,,0
- Un libro de cuentos: La verdad de los cuentos,,.
- Los tres niños han de leer el mismo libro: ¿Por qué los niños9
- Madera de olivo: La purificación del fuego... Olivo: paz
- Piedra de la corona de un déspota, machacada: ¿Cómo y en qué se puede traducir todo eso hoy9
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- Concretar qué pueden ser los demás elementos que aparecen: mar picado, agua bendita, cabello de blanco, negro y chino, lágrimas de tristeza y de alegría, tres días, campo de batalla, hoja de olivo, pluma de paloma mensajera..
2. Dibujar los ingredientes de la receta, de modo que al final aparezca un «cuadro de paz».
3. Representar la receta. Cada uno es un ingrediente' ha de pensar qué aporta él. Lo puede ir diciendo mientras sale al centro y se queda allí... Al ñnal entre todos pueden hacer una «escena de paz».
4. Preparar otra receta para que termine la guerra.
46. Te hice a ti
Un hombre que pasaba por el bosque vio un zorro que había perdido sus patas, por lo que el hombre se preguntaba cómo podría sobrevivir. Entonces vio llegar a un tigre que llevaba una presa en su boca. El tigre ya se había hartado y dejó el resto de la carne para el zorro.
Al día siguiente, Dios volvió a alimentar al zorro por medio del mismo tigre.
El hombre comenzó a maravillarse de la gran bondad de Dios y se dijo:
-Voy también yo a quedarme en un rincón, confiando en el Señor, y éste me dará cuanto necesito.
Así lo hizo durante muchos días. Pero no sucedía nada.
El pobre hombre estaba casi a las puertas de la muerte cuando oyó una voz que le decía:
- O h tú, que te hallas en la senda de! error, abre tus ojos a la verdad. Sigue el ejemplo del tigre y deja de imitar al pobre zorro mutilado.
Luego, el hombre vio a una niña aterida y tiritando de frío dentro de un ligero vestidito y con pocas perspectivas de conseguir comida decente. Se encolerizó y le dijo a Dios:
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-¿Por qué permites estas cosas? ¿Por qué no hacer nada para solucionarlo?
Durante un rato, Dios guardó silencio. Pero aquella noche, de improviso le respondió:
-Ciertamente que he hecho algo. Te he hecho a ti.
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
J Temas
Alimento, Dios, providencia, confianza, esfuerzo, hambre, compromiso, trabajo,,.
J Experiencia humana
- Siempre tenemos cierta esperanza -a veces es esperanza cierta- en que los dioses vengan en nuestra ayuda. Nos resulta más fácil.
- Pero Dios no va a venir a arreglar nada de lo que nosotros tenemos que hacer... Para eso estamos nosotros. (Quizás Dios, para los creyentes, les ayuda a tener fuerza para seguir en esa tarea diaria.,. ¿Se puede entender así la Providencia o hay algo más?).
-I Actividades
1. Comentar la parábola. Aquí aparece el tema religioso, que actualmente se evade o no se afronta. ¿Qué decimos de ello9
2. La parábola es de origen oriental. Así se puede entender mejor la referencia a Dios. Con todo conviene preguntarse: ¿Qué imagen tiene cada uno de Dios? ¿Es un Dios que ayuda a comprometerse o a no tomar parte en la marcha de la historia?
3. Concluir la frase: «Para escuchar la voz de Dios, yo...»
4. «Oyó una voz que le decía...» Imaginarse que a cada uno le habla Dios. Pensarlo. Decir qué oiría cada uno y comentarlo después
5. Después del punto anterior, recordar que Dios nos habla por los demás: sus necesidades, sus deseos, sus.,, Y que eso nos debe llevar a actuar, («Si alguien dice que ama a Dios, a quien no ve, y no ama al hermanea quien ve, es un mentiroso», dice San Juan). Concretar qué puede hacer cada uno por los demás «para adorar a Dios en espíritu y en verdad», o sea, en la propia vida.
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47. Por dónde empezar
El Talmud afirma que la condición para que venga ei Mesías es que todos los hombres se conviertan. Convencido de esta palabra me decidí a poner manos a la obra y orar por ellos. Estaba seguro de tener éxito.
Pero, ¿por dónde empezar? El mundo es tan vasto... Empezaría por el país que mejor conocía: el mío. Pero era tan enorme mi país...
Bueno, comenzaría por la ciudad que me era más próxima: la mía. Pero es tan grande mi ciudad... Apenas la conozco.
Bueno empezaría por mi calle. No, por mi casa. No, por mi familia. Entonces, empezaré por mí mismo.
E. WIESEL
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
J Temas
Conversión, Mesías, oración, cambio personal...
J Experiencia humana
- Cuando se trata de cambiar, echamos balones fuera; siempre pensamos que el cambio lo necesitan los demás.
- Pero el mundo cambiará, si cambia cada uno
- Nos esforzaremos, al menos, para no ser nosotros los cambiados.
J Actividades
1. Aplicar este texto a la construcción de la paz.
2. El proceso puede ser inverso a como solemos hacer: comenzar por uno'y seguir por los demás... ¿Qué se puede hacer en ese sentido en concreto?
3. El lema la Nueva Era resume; «Piensa globalmente, actúa localmente». ¿Tiene algo que ver con esto?
4. Comparar este texto con la parábola siguiente.
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48. El que se quejaba de los demás
A un discípulo que siempre estaba quejándose de los demás, le dijo el Maestro:
-Si es paz lo que buscas, trata de cambiarte a ti mismo. Es más fácil calzarse unas zapatillas que alfombrar toda la tierra.
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
J Temas
Cambio, quejas, egoísmo, disponibilidad,,.
ü Experiencia humana
- El amor verdadero empieza por uno mismo. El cambio también,
- Lo dicho: «Es más fácil calzarse unas zapatillas que alfombrar toda la tierra» Pero a veces nos quedan ganas de decir a los otros los zapatos que tienen que calzar...
_l Actividades
1. Concretar cuántas veces y cómo se queja cada uno de los demás, ¿Qué sentido tienen esas quejas9
2. «Si es paz lo buscas,,.» ¿Es paz lo que buscas9 Decir cómo lo hace cada uno.
3. Aplicar la comparación de las zapatillas a la construcción de la paz.
4. Concretar ejemplos actuales en los que se quiere alfombrar la tierra en vez de calzarse unas zapatillas
5. Ver la parábola anterior y la siguiente
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49. Pequeños pasos
Un ¡oven estudiante tenía un gran deseo de dedicarse el bien de la Humanidad. Se presentó a San Francisco de Sales y le preguntó:
-¿Qué debo hacer para lograr la paz del mundo?
San Francisco de Sales le respondió sonriente:
- N o dar esos portazos tan fuertes.
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
J Temas
Paz, generosidad, delicadeza, respeto, detalles,..
J Experiencia humana
- Los pequeños inconvenientes encierran grandes litigios
- Y los grandes amores están hechos de muchas cosas pequeñas,
J Actividades
1. Elegir varias acciones diarias que cada uno realiza más o menos conscientemente. Decir después con qué grado de paz interior y conciencia pacífica las realiza.
2. Buscar al menos tres detalles de sí mismo que cada uno podría cambiar para «dedicarse al bien de la humanidad»,
3. Hacer una lista de aspectos concretos y sencillos que se pueden tener en cuenta en el grupo para construir un ambiente de paz
50. El valor de uno más
-¿Puedes decirme cuánto pesa un copo de nieve? -preguntó un pájaro carbonero a una paloma.
- Nada. Ni un ápice -le contestó ia paloma.
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Entonces el pájaro carbonero íe contó esta historia a la paloma:
-Estaba yo posado sobre la rama de un abeto, cerca de! tronco, y empezó a nevar. No era una ventisca; era una nevada suave y plácida como un sueño. Los copos de nieve caían lentos, balanceándose en la nieve. Como yo no tenía otra cosa que hacer, fui contando los copos mientras caían sobre la rama donde yo estaba posado. Cayeron exactamente 3.751 .952. Cuando sobre la rama cayó el siguiente copo (nada de peso, ni un ápice, como tú dices), la rama se rompió...
Y dicho esto, el pájaro carbonero se marchó volando.
La paloma, toda una autoridad en materia de paz desde los tiempos de Noé, se puso a reflexionar. Pasados unos minutos, dijo:
-Quizás tan sólo haga falta la colaboración de una persona más para que la paz se abra camino en el mundo.
<. KAUTER
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
ü Temas
Paloma,, Noé, solidaridad, preguntas, aceptación, colaboración.,.
J Experiencia humana
- Vamos descubriendo, efectivamente, «el valor de uno más».
- Nos falta una cosa por descubrir: «Quizás faltas sólo tú»
- Al menos lo has de descubrir tú mismo. Porque nadie es imprescindible, pero, lo que tú no hagas, nadie lo va a hacer.
J Actividades
1. Concretar algún aspecto que puede hacer cada uno y que nadie va a hacer por él...
2, El pájaro carbonero cuenta una historia y se va. Preparar datos u otras historias para presentar a los demás o a otros grupos de modo que les hagan reflexionar.
3. Imaginar que alguien dice a cada uno que puede aportar poco a la humanidad. Por escrito, cada uno responde manifestando aquellas dimensiones positivas que cada uno tiene y puede aportar,
4, Elaborar una historia en la que aparezca la frase «Quizás faltas sólo tú». Puede ser también una breve representación que lleve por título esa misma frase
51. Los dos hermanos
Un hermano del desierto dijo a un anciano:
-Hay dos hermanos. Uno de ellos permanece en silencio en su celda, ayunando durante seis días seguidos y sometiéndose a una severa disciplina; el otro sirve a los enfermos... ¿Cuál de los dos es más acepto a Dios?
El anciano le contestó:
-Aún cuando el hermano que ayuna seis días se colgara por la nariz, no igualaría al que atiende a los enfermos...
Historias ae los Padres del Desierto
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TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
J Temas
Dios, servicio, penitencia, ayuno, justicia, ayuda,,
J Experiencia humana
- Estos dichos de los Padres del Desierto traducen de manera adecuada io que también se vive en el desierto de la sociedad actual. La ascesis genuma es la realizada en el servicio a los demás
- Porque «el ayuno que yo quiero es este: Abrir las prisiones injustas, dejar libres a los oprimidos, partir el pan con el hambriento, hospedar a los pobres sin techo,,.» (Is58,7).
- Porque «estuve enfermo y me vinisteis a visitar,.. Tuve hambre y me disteis de comer.,,» (Mt 25)
J Actividades
1. ¿Cómo puede impedir o ayudar la idea religiosa a trabajar por la paz0 Buscar ejemplos concretos
2. Comentar: «El Dios que no quiere la salvación del ser humano, es falso»
3. Analizar la acción de los políticos desde el contenido de esta parábola.
4. ¿Qué servicios se están haciendo entre nosotros0 Porque ese es el camino de la conversión, de la solidaridad, del encuentro con Dios... cO no°
52. La cita con Dios
Cuenta ¡a hisioria de un monje, Demetrio, que un dia recibió una orden tajante: debería encontrarse con-Dios ai otro ¡ado de la montaña en 'a que viv'a, antes de que se pusiera el sol.
El monje se puso en marcha, montaña arriba, precipitadamente. Pero o mitad de camino se encontró c un herido que pedía socorro. Y &• monje, casi s'n detenerse, le explicó que no podía pararse, que Dios le esperaba al otro lado de la cima, antes de que aíar-deciese. Le prometió que volvería en cuanto atendiese a Dios. Y continuó su precipitada marcha.
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Horas más tarde, cuando aún el so! brillaba en todo lo alto, Demetrio llegó a la cima de la montaña y desde allí sus ojos se pusieron a buscar a Dios.
Pero Dios no estaba. Dios se había ido a ayudar al herido que horas antes se cruzó por el camino.
Hay, incluso quien dice que Dios era el mismo herido que le pidió ayuda.
.evenca es ava
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
_l Temas
Dios, camino, herido, disculpas, hermanos, ayuda, servicio,.
J Experiencia humana
- «A un personaje tan notable como Dios no se le puede hacer esperar», podría haber pensado el ermitaño. Como nosotros mismos,
- Y es verdad. Pero hay que saber rastrear sus huellas para encontrarlo en el camino. Porque cuando llegamos, siempre está «en otro sitio».
- Lo dice G, Thibon: «Hay dos categorías de gentes que no consigo soportar: los que no buscan a Dios y los que se imaginan que lo han encontrado»
-l Actividades
1, Concretar: lugares donde encontrar a Dios en la vida cotidiana.
2. Analizar el comportamiento de los creyentes desde esta leyenda
3. Imaginar que es Dios quien me viene a ayudar, ¿Cómo lo haría9
4, Dice un proverbio chino: «Durante treinta años anduve en busca de Dios; cuando al final abrí los ojos, descubrí que era él el que me buscaba a mí». Repasar los acontecimientos de la propia vida y ver si esto es verdad también en cada uno
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CONTAGIAR LA PAZ
53. Perro va por fuego
Los hombres tenían fuego.
Lobo no tenía fuego.
Lobo y Perro eran amigos.
Lobo dijo a Perro:
-Ve a robarle una chispa al Pueblo.
Perro se acercó a los hombres.
Lo alimentaron y se olvidó de robar la chispa.
Eso es todo. Cuento de ¡os indios Pieies Roja
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
ü Temas
Búsqueda, acomodación, domesticación, alimentos...
J Experiencia humana
- Quien domina el fuego, tiene el poder. Pero a veces dejamos que el otro lo domine
- Porque, para bien o para mal, a veces nos sometemos: preferimos el plato de lentejas bien cocidas al riesgo de la libertad insegura.
J Actividades
1. Analizar la sociedad actual desde esta parábola: decir quién sería el Lobo, quién el Perro, quién el Pueblo..
2. ¿Somos ahora más civilizados9
3. Contar historias alrededor de un fuego. Después de las truculentas historias reales de la humanidad, que sean historias inventadas: historias de paz.
4. Ver la película En busca del fuego, (Se puede encontrar fácilmente en video) Analizar nuestras agresividades y las situaciones conflictivas actuales desde el retrato que se hace de la vida del hombre primitivo.
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54. El reloj
Tic tac tic tac tic tac.
Asi sonaba el bonito y viejo reloj de la casa de la abuela. Pedro miraba sus agujas y pensaba los años que había marcado. Una noche Pedro descubrió al reloj llorando. Su tic tac sonaba quejumbroso como el alarido de un fantasma.
-¿Qué te pasa? -le preguntó Pedro.
-He estado en el futuro.
-¿Cómo? -se extrañó Pedro.
-Una vez, que adelanté 23.360 vueltas de mi aguja pequeña..., o sea, 32 años. Allí -prosiguió el reloj-todos ganaban segundos. Allí un minuto era una eternidad. Todos llegaban en segundos y, como no tenía segundero, por mi culpa despidieron a 2 empleados por llegar medio minuto tarde...
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- N o te preocupes. Por suerte, aquí nadie tiene prisa. Y yo te prometo sobre la cruz de... de... de mi ametralladora que nunca tendré prisa.
Ahora el abuelo Pedro, cada vez que le dicen «Vamos» o «Aprisa» siempre dice:
-Hay tiempo, pequeños, hay tiempo.
Rutn MIGUEL -RA\CO
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
J Temas
Tiempo, prisa, futuro, paz,.
J Experiencia humana
- Tercer relato de una chica de 11 años (Ver el 5 y el 45, y también el 78), que condensa la necesidad que tenemos de dar sentido al futuro y vivirlo desde el presente: un mundo en paz, que se mantenga definitivamente...
- Hay experiencias que marcan nuestra vida. Algunas personas son clarividentes y optan en un momento determinado por seguir un camino concreto.
- En ese sentido, son importantes las decisiones conscientes, libres y personales. Para cambiar el mundo. Y sobre todo para cambiar uno mismo si el mundo no se puede cambiar.
J Actividades
1. Contar qué es lo que pasa según el relato. Buscar y decir por qué sucede eso.
2. Representar de forma original este relato, de corte moderno y con un final inesperado.
3. Después de la representación, imaginar lo que pasó desde que Pedro es niño hasta que llega a ser abuelo: que alguien vaya diciendo lo que se imagina que diría cada diez años,.
4. Revisar cómo vivimos nosotros el tiempo: las prisas, la dedicación, el uso del tiempo,., GQué tiene que ver esto con la construcción de la paz?
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55. Andrés de vidrio
En una lejana ciudad nació, una vez, un muchachito que era transparente.
Todo se veía a través de él, como si toero a través del aire o del agua.
Bien es verdad que era de carne y huesos, pero parecía de vidrio.
Si se caía, no vayáis a pensar que se rompía en m;
pedazos; como mucho, le saldría un chichón transparente en la frente.
Se podía ver cómo latía su corazón y hasta todos sus pensamientos, inquietos como los peces de colores de una pecera.
Una vez, el muchacho dijo una mentira y la gente vio cómo crecía una especie de hongo de fuego a través de su frente. Dijo entonces la verdad y el hongo desapareció. Durante el resto de su vida no di jo jamás otra mentira.
En otra ocasión, un amigo le confió un secreto y todos vieron una nube negra que daoa vueltas en su pecho y el secrero dejó de serlo.
El niño creció y se convirtió en un chicarrón y luego en todo un hombre.
Todos pedían leer su pensamiento y, cuando se le hacía una pregunta, se podía adivinar ía respuesta antes de que abriese la boca.
Se ilamaba Andrés, pero la gente le llamaba «Andrés de vidrio» y todos le amaban.
Por desgracia, un día se hizo con el gobierno de aquel país un feroz dictador y comenzó un tiempo de opresión, de injusticias y de miseria para todo el pueblo.
El que osaba protestar desaparecía sin dejar rastro.
El que se rebelaba era fusilado.
Los oob res eran perseguidos, humillados e insultados de mil maneras.
La gente callaba y aguantaba por miedo a lo que les podía pasar.
Pero Andrés no podía callar.
Aunque no abriese la boca, sus pensamientos hablaban por él: era transparente y todos ¡eían en su frente lo pensamientos de desdén y condena por las injusticias y violencias del tirano. Luego la gente comentaba a escondidas los pensamientos de Andrés y así volvía a nacer la esperanza.
E! tirano hizo prender a Andrés de vidr io y mandó que le metieran en la más oscura de la prisiones.
Pero entonces, ¿qué diréis que paso?
Las paredes de la celda donde Andrés estaba encerrado se volvieron también transparentes, y luego, también las paredes de todo ei edificio, y al final las murallas de la prisión.
La gente que pasaba por delante de la prisión veía a Andrés sentado en un taburete, como sí la prisión fuera de vidrio, y seguían leyendo sus pensamientos. Por ía noche la prisión permanecía iluminada y se veía perfectamente a su alrededor.
El tirano hizo cerrar las cort:nas de su palacio para no verle más, pero, ni aún así, consiguió dormir.
Incluso preso, Andrés de vidrio era más poderoso que la verdad, más luminoso que el día, más terrible que el huracán.
Gianni RODARI
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
J Temas
Sinceridad, trasparencia, dictadura, injusticias, profeta, valentía, lucha, verdad
J Experiencia humana
- Quien es libre, contagia libertad.
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- Quien es transparente, comunica y contagia paz.
- Qué bien si aprendemos a leer... las necesidades de los demás. Y a actuar. Porque alguien tiene que ser el primero, Y alguien tiene que ser el único si los demás no lo hacen. Para que se enteren. Para que lo hagan.
ü Actividades
1. ¿Nos parece exagerado este relato? Comentarlo y sacar conclusiones después de leerlo detenidamente.
2. ¿Cómo andamos nosotros de sinceridad9 ¿Y de valentía"5 Responder primero asignándose un número del 1 al 10. Explicar después aportando datos y causas
4. Soñar que se tiene una característica especial que puede ayudar a los demás Contar después el sueño...
5, Rodan elaboró este relato según algunas de las pautas que da en su libro Gramática de la fantasía (Partir de las características de un material concreto y aplicarlas a un personaje. Ya Cervantes lo había hecho, de otra forma, en El licenciado Vidriera). El mismo autor señala otras muchas ideas para crear relatos Aplicar alguna de ellas a la elaboración «de relatos por la paz». Después se puede celebrar un encuentro en el que se leen o representan esos «relatos de paz».
56. El último monje
Nuestra Señora, con el Niño Jesús en sus brazos, decidió bajar a la Tierra y visitar un monasterio. Orgullosos, todos los monjes formaron una gran fila y cada uno llegaba ante la Virgen para rendirle su homenaje. Uno declamó bellos poemas, otro mostró sus iluminaciones para la Biblia, un tercero dijo el nombre de todos los santos. Y así, monje tras monje, todos fueron homenajeando a Nuestra Señora y al Niño Jesús.
En el último lugar de la fila había un monje, el más humilde del convento, que nunca había aprendido los sabios textos de la época. Sus padres eran personas sencillas, que trabajaban en un viejo circo de ¡os alrededores, y todo lo que le habían enseñado era arrojar bolas al aire y hacer algunos malabarismos.
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Cuando le llegó el turno, los otros monjes querían poner fin a los homenajes, porque el antiguo malabarista no tenía nada importante que decir y podía deslucir la imagen del convento. Sin embargo, en el fondo de su corazón, también él sentía una inmensa necesidad de dar alguna cosa de sí para Jesús y la Virgen.
Avergonzado, sintiendo las miradas reprobadoras de sus hermanos, sacó del bolsillo unas naranjas y empezó a lanzarlas al aire haciendo malabarismos, que era lo único que sabía hacer.
Fue en este instante cuando el Niño Jesús sonrió y comenzó a batir palmas desde los brazos de Nuestra Señora. Y fue para este monje para quien la Virgen extendió los brazos, dejando que el monje sostuviese un rato en Sos suyos al divino Niño.
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TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
J Temas
Sabiduría, humildad, alegría, sencillez, aceptación, sonrisa,..
ü Experiencia humana
- Más que en la mente, la sabiduría está en el corazón.
- Por eso muchos no han oído hablar nunca de las ciencias supremas, pero han logrado descubrir a través de sus vidas la verdadera piedra filosofal que da sentido a la vida. Apartados, sólo son reconocidos por quienes tienen «ojos para ver».
- En cambio otros son incapaces de descubrir las grandes verdades -las señales de Dios, por ejemplo, o la sencillez de vida de las personas-, porque el raciocinio intelectual las rehusa aceptar.
J Actividades
1. ¿Qué podría hacer cada uno para que se alegrara y riera el Niño Jesús9 Aprovecharse de los símbolos para unlversalizar la situación.
2 Y que podría hacer cada uno para que se alegrara un niño9 Hacerlo
3. Demostrar ante los demás una habilidad que ellos ignoran o desconocen. Los demás han de estar atentos y al final alabar los aspectos positivos que han visto...
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RECORRER EL CAMINO DE LA PAZ
57. La historia del mundo
-Idos todos lejos, que el mundo empieza a estallar.
Todos encontraron un pequeño sitio bien resguardado y el mundo fue sacudido por una gran explosión en ¡a que se formaron las estrellas como el Sol y los planetas como la Tierra.
En un pr incip io, el hombre vivía en el agua, tenía espinas y cola como una merluza, era amigo de los peces. Después salió del agua y se puso a arrastrarse por la tierra como una serpiente. Después aprendió a tenerse en pie y ia serpiente envidiosa le hizo comer la manzana y lo hizo expulsar del Paraíso Terrenal. El hombre se ofendió y se convirtió en su enemigo. Hizo amistad con la mona y de ella ap rend ió muchas cosas, como subirse a los árboles, comer la nueces y meterse los dedos en la nariz.
El hombre, con el paso de los siglos, aprendió a leer y escribir y a montar en bicicleta. Escribió muchos ibros de historia verdadera y de historia inventada, pero todos querían ser la historia del mundo desde los orígenes a nuestros días, o sea, desde los orígenes al final. Después de la bicicleta y los libros vinieron el automóvil, y el avión, y la bomba.
El mundo se hizo insoportable y el hombre se preparó para convertirse en una merluza. Todos empezaron a buscarse un pequeño sitio bien resguardado con vistas a la próxima explosión.
Luigi MALERBA
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Ser humano, origen, evolución, catástrofe, explosión, refugio, historia,,,
J Experiencia humana
- «El desarrollo del ser reproduce el desarrollo de la especie». Somos las sombras que nos pueblan.
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- Asumimos -y vivimos- hoy nuestra historia: el pasado histórico y prehistórico.
- Pero eso no es todo: somos también los sueños que nos habitan.
J Actividades
1. ¿Cómo nos deja este cuento9 cEn qué sentido es pacifista9
cO no lo es9
2. «El mundo se hizo insoportable...» Concretar en qué y por qué
3. ¿Qué se puede hacer en vez de «buscarse un pequeño sitio bien resguardado con vistas a la próxima explosión9
4. Ver también la parábola siguiente.
58. La última flor
La duodécima guerra mundial, como todo el mundo sabe, trajo el hundimiento de la civilización.
Capitales, ciudades y pueblos desaparecieron de la faz de la tierra. Hombres, mujeres y niños quedaron situados debajo de las especies más ínfimas.
Libros, pinturas y música desaparecieron, y las personas sólo sabían sentarse, inactivos, en círculos.
Pasaron años y más años.
Los chicos y las chicas crecieron miránáose estúpidamente extrañados. El amor había huido de :a tierra.
Un día, una chica que no había visto nunca un flor, se encontró con la última flor que había en este mundo. Y corrió a decir a las gentes que se moría la última flor. Sólo un ch ico la hizo caso, un ch ico al que encontró yendo a la aventura.
El chico y la chica se encargaron los dos, de cuidar la flor. Y la flor comenzó a sobrevivir.
Un día una abeja vino a visitar la flor.
Después vino un colibrí.
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Pronto fueron dos flores; después cuatro... y después muchas, muchas.
Los bosques y selvas reverdecieron.
Y ia chica comenzó a preocuparse de su figura.
El chico descubrió que !e gustaba acariciarla.
El amor había vuelto ai mundo.
Sus hijos fueron creciendo sanos y fuertes.
Y aprendieron a reír y a correr.
Poniendo piedra sobre piedra, el chico descubrió que podían hacer un cobijo.
Muy deprisa toda la gente se puso a hacer casas.
Capitales, ciudades y pueblos surgieron de toda la tierra.
De nuevo los cantos volvieron a extenderse por toda la tierra.
Se volvieron a ver trabadores y juglares, sastres y zapateros; pintores y poetas; soldados;
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lugartenientes y capitanes generales; mariscales y ibertadores.
La gente escogía vivir aquí o allí.
Pero, entonces, los que vivían en los valles se lamentaban por no haber escogido las montañas.
Y a los que habían elegido las montañas, les apenaba no vivir en los valles (..,).
Invocando a Dios, los libertadores enardecían ese descontento.
Y enseguida el mundo estuvo nuevamente en guerra.
Esta vez la destrucción fue completa.
Nada sobrevivió en el mundo.
Sólo quedó un hombre... una mujer... y una flor.
ia^es "JRBER
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
IJ Temas
Guerra mundial creación, responsabilidad, civilización, catástrofe, pasividad, amor, aventura, naturaleza, vida,,
J Experiencia humana
- El amor -no sólo la fe- mueve montañas. Siempre. Una vez más
- Si el amor se desgasta, habrá que sembrarlo otra vez. Como una flor,
- Las tareas personales nunca son sólo tareas personales. Lo que cada uno hace tiene sentido, para bien o para mal, dentro de todo un conjunto: somos creadores.,. Podemos serlo de muerte, pero también de vida
- La salida de sí mismo hacia los demás siempre es creadora: supone sembrar la flor del amor. De otra forma lo dice Ench Fromm: «El amor a sí mismo está inseparablemente ligado al amor a otro ser»
-I Actividades
1, Eliminar las seis últimas líneas y pedir que cada uno concluya la parábola. Descubrir el mundo de valores que aparecen, la visión de la realidad y de la sociedad, la mirada que se trasluce sobre el futuro,,,
2. Dar a leer o narrar el contenido de las cinco últimas líneas. Comentar la visión del autor, ¿Estamos de acuerdo con ella"3
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3. Representar la parábola: no usar la palabra, sino sólo música, gestos y silencio
4. Elegir alguna frase o fragmento y tomarla como núcleo generador de otro breve relato. Estos pueden dar pie a nuevas representaciones o, relacionándolos, a una representación común con varias partes,
5. Imaginar que el chico y chica de la parábola son cristianos. ¿Qué tendría que hacer como tal para que esa sociedad no se volviese a destruir con otra guerra? Realizar también toda clase de propuestas para mejorarla.
6. Trabajar con algún póster de la colección «Pósters con humor» que esté relacionado con la paz (por ejemplo el 1 y el 29), Ver material de trabajo y propuestas en H. OTERO, Pósters con humor. Para educar al hombre. Editorial CCS. Madrid, 1982.
59. Peace & War
En un rincón del universo, en galaxia Cruch-Cruch-Aaahh se encuentran los planetas Peace y War.
Peace era un planeta donde ¡os habitantes tenían la extraña cualidad de estar pendientes de las necesidades de los demás, por lo que la justicia era de verdad y la paz reinaba en cada corazón.
En cambió, en el vecino War, en los telediarios sólo salían atentados y guerras en las que se devastaban los habitantes del propio planeta. Tenían la manía de ver solamente el propio ombligo. Así eran los warle-ses.
Un sábado, cansados de sangre, se reunieron en asamblea y tomaron la decisión de no aniquilar su especie, por lo que determinaron declarar su especie, por lo que determinaron declarar la guerra a Peace. La noticia la llevó un mensajero del emperador a! presidente de Peace. El mensaje decía:
(En lenguaje warliano significa: «En un rato, os damos el garrotazo»
Cuando el mensaje llegó al presidente de Peace éste se echó las manos a la cabeza, tembló por Peace y
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decid ió que sus ciudadanos estuviesen informados, por lo que convocó una asamblea.
Unos días después, en la asamblea, el presidente dijo:
-Estamos en una situación muy complicada. Los war-leses nos han declarado la querrá, y yo no quiero la querrá. Como ellos tienen muchos heridos, nos quieren aniquilar a nosotros.
A los pocos días el presidente mandó un teleqrama al planeta W a r d id iendo: «Nosotros no queremos la querrá, no la aceptamos». Cuando esto llegó a las manos del emperador de War, éste hizo poner un reactor a Peace.
Y así fue. Lanzaron un reactor con una nota. Cuando el reactor llegó, un anciano cogió la nota y se la dio al presidente. Decía así: «Si no queréis la querrá no os podéis quedar en esta qalaxia». Y el planeta fue desapareciendo en el polvo interestelar.
La tierra, no habi tada aún, se acercó a la qalaxia Cruch-Cruch-Aaahh y casualmente chocó con el planeta War. Y sus habitantes se trasladaron al planeta Tierra. Se lanzaron al espacio pero, al no quedarles
energía, sólo consiguieron llegar al sistema solar y se quedaron allí.
Fueron creando instrumentos de guerra. También crearon varios dioses. Se dispersaron por todo el planeta en pueblos que luchaban para sus dioses y sacrificaban vidas. Los días fueron transcurriendo y las culturas eran muy avanzadas. Se dedicaron especialmente a la invención de armas: espadas, lanzas, cuchillos... y otras clases de artefactos que acababan con la vida de los seres vivos.
Cuando un pueblo se veía con mucho poder luchaba con uno más débil, el cual se tenía que enfrentar aunque siempre acabara sucumbiendo.
Un día las gentes de Peace, chocaron contra la Tierra y sus habitantes se incorporaron al planeta azul.
Con la noviolencia lucharon por la paz entre los war-leses, y en esta historia continuamos nosotros. Tú, ¿en qué bando estás?
David GONZÁLEZ VÁZQUEZ ¡13 anos]
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
J Temas
Paz, justicia, guerra, solidaridad, egoísmo, territorios, dioses de la guerra, armas, lucha, debilidad...
J Experiencia humana
- El autor de este relato tenía 13 años cuando lo escribió. Buenos y malos (Peace y War, Paz y Guerra) aparecen claramente en un mundo de ficción que es tan real como la misma realidad, ¿Como la vida misma9 (Quien está mal quiere que los demás también lo estén; la violencia crea violencia...)
- Según algunos, nuestro origen está basado en el mal. Aquí se representa de otra forma el mito del pecado original.
- Pero al menos hay una toma de postura. Y una pregunta para cada uno: «Tú, cen qué bando estás9».
J Actividades
1. Comentar lo que llama la atención de este relato. Hay muchas cosas originales, aunque suenen a conocidas
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2. Imaqinar y representar un encuentro entre los presidentes de los planetas Pea-ce y War. Hacer que al final triunfe la cordura. Ver entonces cuál ha sido el proceso sequido para llegar a ella.
3. «En esta historia continuamos nosotros». ¿Qué tendrían que hacer los del planeta Peace para que las cosas marcharan mejor?
4. Responder: «Tú, ¿en qué bando estás9».
5. Elaborar un mensaje,., de paz que se enviaría a los presidentes de las naciones al Papa, a otros dignatarios..
60. El mensaje de la espada
En tiempos de guerras entre reyes moros, corrió de boca en boca la leyenda de que quien se apoderara de la espada Asharaf, sería el vencedor y ejercería un dominio absoluto sobre todas la tierras del Isiam.
Apodera rse de la espada no era empresa fác i l . Había que descubrir primero dónde estaba, llegar hasta el lugar y hacerse con ella en competencia a muerte, ya que todos anhelaban poseerá . N a d i e escatimaba fuerza ni ingenio cara llegar a poseer la espada triunfadora.
Tras muchas peripeoas, uno de los reyes logró nacerse con ella. Se asegura de que era ía auténtica espeda Asharaf e inmediatamente se lanzó el campo de batalla para sojuzgar a ios demás reyes. Se sabía invencible, y estaba impaciente por ejercitar el poder que le concedía la espada.
Sin embargo, no le salieron las cosas como esperaba. En la primera y apresurada batalla a que se lanzó en cuanto obtuvo posesión de la espada , fue derrotado, y él mismo murió en la lucha, atravesado por la propia espada que él estaba seguro de darle la victoria. Mur ió con la mueca de sorpresa en los labios, cual si preguntase cómo podía haber sucedido aquello. Si esa era la auténtica espada Asharaf, ¿cómo le había traicionado en su primer encuentro?
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La misma sorpresa se dibujaba en el rostro de ¡os vencedores, que sacaron con cuidado la ensangrentada espada y la examinaron con precaución. No fue difícil explicar el enigma. Una vez limpia de sangre, ia espada reveló que en su hoja, de arriba a abajo, en filigrana vertical, estaba grabada una inscripción artística y clara que cualquier árabe podía leer al isntante. La inscripción decía: «No luches nunca con la espada. En paz y concordia se unirán tus hermanos a ti».
Ese era e! mensaje ele la espada Asharaf. Su nuevo dueño lo entendió, renunció a la lucha, emprendió el camino de la paz y los demás reinos se unieron a él en unidad hermana.
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
J Temas
Poder, reinos, armas, acción, lucha, guerras, peleas, batallas, conquista, concordia, unidad.,.
J Experiencia humana
- La vida está llena de mensajes. Las cosas hablan, los acontecimientos tienen sentido, las ocasiones revelan secretos de conquista. Pero tenemos prisa y no nos paramos a escuchar, a descifrar, a leer
- Hemos oído la leyenda y se nos desata la imaginación. Queremos la espada para luchar locamente. Hay que apoderarse de ella y blandiría antes de que lo haga el adversario: urgencia, acción, lucha.,.
- Dice C. G, VALLES (1992, p. 56):
«Espera un momento. Reflexiona. Contempla al menos la espada que tienes ya en la mano. Espada es cualquier plan de acción, cualquier ideología, cualquier idea. Mírala bien antes de lanzarte»
«Lee el mensaje grabado en la hoja brillante. Entérate por ti mismo. No te dejes llevar por las apariencias. Es posible que la espada no sea para lanzarse, sino para evitarla».
«Aprende a leer. Acostúmbrate a interpretar los mensajes que te llegan a través de las personas y cosas. Deja hablar a las circunstancias...»
«Ábrete a los signos de los tiempos. Escucha. Reflexiona, Deja que la historia te haga confidencias,..».
«Ojos para ver, oídos para oír y sensibilidad para sentir. La vida entera es un jeroglífico artístico y secreto que hay que descifrar paso a paso, rasgo a rasgo, momento a momento. El mensaje entendido a tiempo salva un remo»
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-I Actividades
1. Creemos que la espada sólo sirve para dar mandobles y no paramos hasta lograrla y blandiría... ¿Cuándo hemos obrado así? ¿Es esa una actitud pacífica y creadora de paz9
2 «Asharaf» en árabe quiere decir «noble». ¿Cuál sería el uso más noble que habría que dar a otras armas9
3. Preparar otros mensajes para inscribir en otras armas de modo que se cambiase su objetivo y su destino
4. Analizar la propia vida siguiendo las pautas del texto que hemos reproducido de Valles
61. Negros y blancos
Hace ya mucho tiempo, todos los elefantes del mundo eran o negros o blancos. Amaban a los demás animales, pero se od iaban entre sí, por lo que ambos grupos se mantenían apartados: ¡os negros vivían a un lado de ¡a jungla y los blancos en el lado opuesto.
Un día los elefantes negros decidieron matar a todos los elefantes blancos y los elefantes blancos decidieron matar a todos ios elefantes negros.
Los elefantes de ambos grupos que querían la paz se internaron en lo más profundo de la selva. Y nunca más se les volvió a ver.
Comenzó la batalla. Y duró mucho, mucho tiempo. Hasta que no quedó ni un sólo elefante vivo.
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Durante anos no se volvió a ver a ningún elefante sobre la Tierra.
Hasta que un día, los nietos de los elefantes pacíficos salieron de la jungla. Eran grises.
Desde entonces los elefantes han vivido en paz.
Pero desde hace algún tiempo, los elefantes que tienen orejas pequeñas y los elefantes que tienen orejas grandes se miran unos a otros de forma un tanto extraña (e inquietante).
Dri /o .V.c<EE
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
3 Temas
Racismo, segregación, violencia, lucha, agresividad, noviolencia, batallas, mezcla, mterculturalidad...
J Experiencia humana
- ¿Será posible gue no aprendamos? ¿O es gue llevamos sembrado en los genes el germen de la agresividad y la destrucción9
- Los gue querían la paz no presentaron batalla: se internaron en otro mundo.. Nació una nueva raza..
- Pero «vuelta la burra al trigo».,. (Ni burra ni elefantes: tal que nosotros mismos una y otra vez)
J Actividades
1. Este breve relato está editado en el número 102 de la colección Altea Benjamín (David McKee, Negros y blancos, Altea, Madrid, 1985), con preciosas ilustraciones del mismo autor. Se pueden sacar bellas diapositivas y preparar un montaje.
2. Ilustrar el relato si lo anterior no es posible
3. Continuar el relato. Leer lo gue ha salido y comentar.
4. Continuar el relato, esta vez por grupos y con un objetivo: las miradas extrañas e inguietantes se van a arreglar y todo termina en paz
5. Inventar una letra pacifista a la canción «Un elefante se balanceaba sobre...» Cantarla y representarla a la vez.
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62. Un gesto de paz
El grupo de gnomos había salido de la frondosidad del bosque. La discusión sobre el camino que iban a seguir para encaramarse a la cima del volcán, había dividido al grupo.
Néstor, el gnomo más anciano, propuso detenerse. Las miradas de algunos fulminaban ira y odio... Se sentaron en un círculo y él se sentó en el centro. Entrelazó sus manos por los pulgares y formaron una paloma...
No fue necesario pronunciar una palabra. Todos lo habían entendido.
Se abrazaron y hubo silencio, silencio, silencio...
A lo lejos, una lechuza pululaba...
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TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
-I Temas
Viaje, dificultades, odio, solución de problemas, paloma, silencio, abrazo...
J Experiencia humana
- Las dificultades, personales o colectivas, aparecen en el camino de la vida. Es normal. Es tiempo, entonces, de detenerse y afrontar la situación.
- No las muchas palabras resuelven los conflictos. Es necesario recordar el objetivo: y el origen; y el destino,.. A veces llega tan sólo con un gesto de amor.
J Actividades
1. Este relato (¿inconcluso?) fue elaborado por un joven animador en minuto y medio en un curso de creatividad a partir de «un gesto de paz». ¿Qué sucede en él? Comentarlo.
2 ¿Qué pasará después9 Continuarlo. Concretar actitudes que lleven a la resolución de problemas.
3. Dar un abrazo a otra persona. Se puede jugar al «abrazo musical»: todos bailan al son de la música; se corta ésta y se dan un abrazo por parejas; cuando se corta la música, las parejas se dan un abrazo entre sí y siguen bailando los cuatro... Así hasta que al final acaban todos en un solo corro.
4, Aprender y cantar la canción «Tus manos son palomas de la paz,..»
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CULTIVAR ACTITUDES
DE PAZ
63. Los cuatro tipos de personas
El Maestro dijo al discípulo:
-Existen cuatro tipos de personas:
El justo, que habla: «Lo que es mío, es mío; lo tuyo, tuyo».
El enamorado, que exclama: «Lo que es mío, es tuyo; lo tuyo es mío».
El egoísta, que piensa: «Lo tuyo es mío; lo mío es mío».
El santo, que actúa: «Lo que es mío es tuyo; lo tuyo, es tuyo».
Anónimo judío
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
Zi Temas
Justicia, amor, egoísmo, santidad..
_l Experiencia humana
- Una buena síntesis: hablar, exclamar, pensar, actuar... Cuatro actitudes distintas para cuatro posiciones diferentes..
- Faltan quizás más posturas. Por ejemplo, la que vi escrita en inglés en una camiseta de unos jóvenes extranjeros, en la estación de Manresa en septiembre de 1992: «Yours is mine and mine belongs to me» («Lo tuyo es mío y lo mío me pertenece a mí»)
J Actividades
1. Concretar: cómo funciona ahora la sociedad.
2. GCuál sería la postura más constructiva de paz? ¿Por qué9 Tener en cuenta también los verbos hablar, exclamar, pensar, actuar..
3. Pensar cuál es la postura que se da más en cada uno. Poner ejemplos.
4. Por grupos, elaborar una historia a partir de cada frase. Todas han de ser historias pacifistas.
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64. No todo es lógica en la vida
Era una vez un chino que tenía un caballo. El caballo se le escapó. Los vecinos fueron a darle el pésame.
-¿Quién dice que sea una desqracia? -les contestó el chino.
En efecto, a la semana siguiente el caballo vino trayendo una yegua salvaje. Los vecinos le felicitaron.
-¿Quién dice que sea una fortuna? -respondió el chino.
A los dos día su hi jo p r imogén i to , montando la yegua, se cayó y se quedó cojo. Los vecinos expresaron su sentimiento de dolor.
-¿Quién dice que sea una desgracia? -voivió a responder el chino.
Al año siguiente hubo una guerra el en país. El primogénito, por estar cojo, no tuvo que alistarse en el ejercito...
Y la parábola podría continuar...
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
J Temas
Indiferencia, desapasionamiento, desgracia, suerte, prevención, ira, alegría, impasibilidad, dificultad, ecuanimidad,,,
J Experiencia humana
- Para vivir en paz es necesario sacar bien del mal. De otra forma: «A mal tiempo, buena cara...»
- Para contagiar paz no es necesario nadar en la euforia momentánea; es más efectivo un estado de ánimo ecuánime que sabe gozar de la vida y está dispuesto a afrontar la dificultad,,,
J Actividades
1. ¿Es mejor ver las cosas con ojos positivos o con prevención9 Vamos a hablar del chino de la parábola...
156
2 Continuar la parábola. O mejor, comenzar una nueva siguiendo el mismo estilo pero aplicándolo a otra realidad.
3. Decir las características que hay que tener para mantener un estado de ánimo ecuánime.
4. Conviene aprender a manifestar los sentimientos. El problema es si nuestros sentimientos son o no adecuados a la realidad... Hacer ejercicio de expresión de sentimientos: comentar algo que te ha hecho sufrir o gozar de forma especial.
65. Los tres hijos del Rey
Erase un rey que tenía tres hi jos. Poseía además muchas riquezas. Sobre todo un brillante de valor extraordinario, admirado en el mundo entero. ¿Para quién sería aquel brillante al repartir la herencia? Su padre les sometió a una prueba. Sería para el que realizase la mayor hazaña en el día señalado...
Al llegar la noche, cada uno relató los acontecimientos de la ¡ornada. El mayor había dado muerte a un dragón que sembraba el pánico por todo el reino.
El segunáo venció a diez hombres bien armados con una pequeña daga.
El tercero d i jo: -Sal í esta mañana y encontré a mi mayor enemigo durmiendo al borde de una acantilado.. . y le dejé seguir durmiendo.
Entonces el rey se levantó del trono, abrazó a su hijo menor y le entregó el brillante.
LiTCHU
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
3 Temas
Enemigo, hazañas, perdón...
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_l Experiencia humana
- «Con este relato Litchu quiso explicar qué difícil es el perdón entre los hombres».
- Por eso mismo perdonar a alguien es la mejor manera de construirnos como personas, de realizar la mayor hazaña, de.,, cultivar la paz.
J Actividades
1. ¿Es fácil o difícil perdonar9
2. Solemos decir: «Perdono pero no olvido», ¿Cómo poder olvidar sin «ser tonto»9
3. Imaginar que dan a cada uno un brillante según lo que ha sido capaz de perdonar. Visualizarlo. Imaginar, por ejemplo, que el corazón se convierte en un diamante más o menos brillante según lo que ha perdonado,.
66. La misericordia
En cierta ocasión se presentaron ante un hombre justo y de corazón p iadoso unos hombres por tando un cadáver sobre unas parihuelas.
-Aquí te traemos a tu hijo pequeño, que ha sido muerto por su p rop io pr imo, tu sobrino Abdu l . A él lo hemos apresado y te lo entregamos maniatado. Es tuyo.
El asesino cayó al suelo y no se atrevía a mirar a su tío, padre de la víctima. Tenía mucho miedo y vergüenza, y no levantaba la vista de! suelo.
El viejo no sabía qué hacer y sentía odio en sus entrañas. En aquel momento su hijo mayor le dijo:
-Padre, haz justicia y venga a mi hermano pequeño.
El hombre misericordioso contestó:
- N o ; hay algo mejor que hacer. Y lo harás tú. Haz estas tres cosas: Libera al hijo de mi hermano, entierro a tu hermano, y gasta tus fuerzas en consolar a tu madre, que mucho te necesitará.
La cara del anciano se llenó de paz.
Cuento árabe
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TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
Ü Temas
Justicia, odio, misericordia, perdón, conciencia, alternativa..
J Experiencia humana
- «El amor de un hombre por una mujer, crece y decrece como la Luna. Pero el amor de un hermano por su hermano es constante como las estrellas y dura como la palabra del Profeta» (Proverbio árabe).
-1 Actividades
1. Representar la parábola para interiorizar las actitudes de los personajes.. Improvisar lo necesario. Comentar después.
2. cCómo «liberar al hijo del hermano»? Dar ideas, qué se podría hacer par ello y cómo.
3. El perdón en la familia a veces cuesta más. ¿Por qué9 ¿Cómo lograrlo''
67. El regalo
Cerca del desierto donde vivían los monjes llamados «estilistas», habitaba una anciana pobre que solía compartir su frugal comida con el monje más cercano al poblado.
Un buen día le quiso llevar algo especial: una cesta repleta de sabrosos racimos de uvas.
El monje se alegró mucho y no encontraba palabras para dar gracias a la anciana. Y ya se disponía a saborear los jugosos frutos, cuando se acordó de su compañero que vivía a una hora de camino por el desierto.
-El sol y el viento de! desierto le están resecando la garganta -pensaba- y necesitará refrescarse con estos racimos.
Y, sin más, emprendió el largo camino que le separaba de su compañero. Cuando llegó cansado a los
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pies de la columna, ató ia cesta ai cordel que el monje le había bajado desde lo alto, se despidió con un amplio abrazo dibujado en el aire.
Al tener entre sus manos la cesta, el santo varón dio un salto de alegría tan grande que casi se cae. Pero, de improviso, se quedó pensativo. Se acordó de! monje que vivía en otra columna a dos horas de camino.
-ES sol y el viento del desierto están agobiando también a mi compañero -se d i j o - y necesitará refrescarse con estos racimos de uvas.
Y sin pensarlo dos veces, bajó y se fue a todc prisa hasta la morada de su amigo y compañero.
Pero la historia no terminaba aquí. El mismo gesto de bondad y de generosidad se repitió... una... y otra vez... por el inmenso desierto.
Y la cesta, repleta de racimos de uvas, volvió a ser regalo refrescante para la anciana señora que vivía en el poblado, cerca del desierto.
hisiorias de los Dacres ae¡ Desie'to
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
J Temas
Comida, alimentos, generosidad, donación, compartir...
J Experiencia humana
- Los monjes vivían en una columna... pero pensaban en los demás. La sociedad actual nos ha amontonado en pisos, pero somos extraños los unos para los otros...
- ¡De cuántas cosas se puede prescindir..,! (Y cuántas, cuántas podríamos compartir: de seguro que volverían a nuestras manos).
J Actividades
1. Comentar esta extraña parábola. ¿Son cosas de otra época?
2. Buscar hechos similares que se están dando hoy. Puede haberlos muy cercanos.
3. ¿A quién podríamos dar algo de lo nuestro? (Quizás no necesite cosas...).
68. Regalo de aniversario
Era un matrimonio pobre. Ella hilaba a la puerta de su choza pensando en su marido. Todo el que pasaba se quedaba prendado de ¡a belleza de su cabello, negro, largo, como hebras brillantes salidas de su rueca. El iba cada día al mercado a vender algunas frutas. A la sombra de un árbol se sentaba a esperar, sujetando entre los dientes una pipa vacia. No le llegaba el dinero para comprar un pellizco de tabaco.
Se acercaba el día del aniversario de la boda y ella no cesaba de preguntarse qué podría regalar a su marido. Y, además ¿con qué dinero?
Una ¡dea cruzó su mente. Sintió un escalofrío al pensarlo, pero al decidirse todo su cuerpo se estremeció de gozo: venderla su pelo para comprarle tabaco.
Ya imaginaba a su hombre en la plaza, sentado ante
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sus frutas, dando largas bocanadas a su pipa: aromas de incienso y de jazmín darían al dueño del puestecillo la solemnidad y el pestigio de un verdadero comerciante.
Sólo obtuvo por su bello pelo unas cuantas monedas, pero eligió con cuidado el más fino estuche de tabaco. El perfume de las hojas arrugadas compensaba largamente el sacrificio de su pelo.
Al llegar la tarde regresó el marido. Venía cantando por el camino. Traía en su mano un pequeño envoltorio: eran unos peines para su mujer, que acababa de comprar tras vender su pipa.
R. TAGORE
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
Zl Temas
Matrimonio, pobreza, entrega, detalles, amor, donación,.,
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J Experiencia humana
«Estaban hablando una vez un mando y su mujer. Le decía el mando:
- ¿Sabes, querida? Voy a trabajar duro y algún día seremos ricos.
Y la mujer le responde:
- Ya somos ricos, querido. Nos tenemos el uno al otro. Tal vez algún día tengamos también dinero».
3 Actividades
1. Comentar lo que pensamos de esas personas. ¿En qué nos parecemos a ellos9
2. Hoy día podríamos pensar que hubiera sido mejor que lo hubieran hablado... ¿O no?
3. El problema está en cómo siguieron después. Continuar la historia,
4. Dar un regalo simbólico a cada miembro del grupo: aquello que más necesita para comprometerse. O como premio por lo que ya hace por los demás..
5. ¿Qué se regalaría cada uno a sí mismo?
69. ¡Mira por dónde vas!
Antiguamente se usaban en Japón linternas de pape! y de bambú con candelas encendidas dentro.
Una noche alguien ofreció a un ciego una linterna para regresar a su casa.
-A mí no me sirve la linterna -di jo el ciego-, Luz y oscuridad son lo mismo para mí.
-Ya sé que a ti no te sirve la linterna para encontrar el camino -respondió el otro- pero, si no la llevas, cualquiera puede venirte encima. De modo que toma una.
El ciego partió con la linterna. No había andado muy lejos cuando alguien chocó contra él.
-¡Mira por dónde vas! -gritó el ciego al desconocido-. ¿No ves esta linterna?
-Tu vela se ha apagado, hermano -respondió el desconocido.
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TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Camino, luz, constancia, interior...
J Experiencia humana
- Las actitudes de paz han de iluminar, antes que nada, nuestro propio interior. También los demás necesitan verlas
- Será necesario reavivarlas de vez en cuando para que no se nos apaguen.
J Actividades
1. Comparar las actitudes internas de paz de una persona con una linterna o farol. ¿Qué linterna sería cada uno?
2. Señalar situaciones y hechos concretos que logran apagar las actitudes de paz
3. cCómo cultivar actitudes de paz9 GCómo contagiarlas para que las vean y asimi
len también los demás9
4. Preparar una linterna o farol cuyas cuatro o cinco caras sean transparencias que hagan alusión a la paz (pueden ser de cristal, o de cartulina con papel celofán,.,). Después atreverse a más: hacer una pequeña procesión, manifestación o sentada nocturna... para que vean los demás
70. La humildad
Un hermano del desierto preguntó a un anciano:
-¿Qué es la humildad?
El anciano dijo:
-Hacer bien a los que te ofenden.
El hermano repuso:
-Si no se puede ir tan lejos, ¿qué haría?
El anciano replicó:
-Aléjate de ellos y manten cerrada tu boca.
Historias de los Padres del Desierto
164
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
J Temas
Humildad, ofensa, perdón, donación, discreción, silencio, saber escuchar,.,
J Experiencia humana
- Si haces bien a quienes te ofenden, te pueden llamar tonto. (¡Benditos tontos que, con el arma de la bondad, desbaratan tantas contiendas y logran una victoria mayor: no contagiarse del malí)
- Buena solución: Saber callar..,! ¡Y saber marchar!
J Actividades
1. La humildad no tiene gran venta en estos tiempos de agresividad, Pero ¿puede ser una actitud clave de paz si se traduce como muestra este hecho? Hablar sobre ello.
2. Tener dominio de sí mismo, sin presentar batalla a la primera de cambio, puede ser otra buena actitud de paz, ¿Cómo lograrlo sm renunciar a la defensa de los propios derechos7
3. Buscar otras actitudes de paz que se escondan tras ese hecho.
4 Completar la frase y comentar: «Hacer bien a quienes me ofenden me supone.,.».
71. «Dos no riñen...»
Había dos ancianos que llevaban viviendo muchos años ¡untos en el desierto, sin reñir nunca. Uno de ellos dijo:
-¿Y si tratáramos de reñir una vez a! menos como lo hacen los demás?
Y el otro le contestó:
- N o sé cómo se hace para reñir.
Entonces el primero le dijo:
-Fíjate: yo pongo un ladrillo entre los dos y digo «Este es mío», y tú dices «No, es mío», y después comienza la riña.
165
Así pues, colocaron un ladrillo entre ellos, y uno de
ellos dijo:
-Este es mío.
Y el otro:
-No ; es mío.
Y replicó aquel:
-¡Sí, todo es tuyo, así que llévatelo todo!
Y se fueron sin ser capaces de pelear entre sí.
H:stonas de 'os Padres de Desierto
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
_J Temas
Riñas, derechos, propiedad, peleas, conflictos, noviolencia, asertividad,.
J Experiencia humana
- «Dos no riñen si uno no quiere». Si los dos no quieren reñir, mejor que mejor Siempre habrá medios para buscar la solución.
- En la parábola número 27 presentamos el resumen de aquello en lo que consiste la asertividad. Vuélvase sobre ello, pues es importante para aprender a mantener actitudes noviolentas superando la agresividad o la pasividad.
J Actividades
1. «No sé cómo se hace para reñir». Buscar primero las causas de las riñas. Decir después algunos métodos para evitarlas
2. Llevar un ladrillo y trabajar con él creativamente. Decir todos los usos posibles Recalcar después los más constructivos y pacíficos. Realizar alguno de ellos (Ladrillo como florero,,.)
3. Profundizar en lo que significa la asertividad y entrenarse en ella llevando a cabo algunas habilidades sociales dentro de un aprendizaje estructurado. Recomendamos algunos libros prácticos:
-J , J, FABREGAS, Técnicas de Autocontrol, Alhambra, Madrid 1987
- DAVIS-MCKAY-ESHELMAN, Técnicas de autocontrol emocional Martínez Roca Barcelona 1985.
- L, MICHELSOK y otros, Las habilidades sociales en la infancia. Evaluación y tratamiento, Martínez Roca, Barcelona 1987,
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• A, GOLDSTEIN y otros, Habilidades sociales y autocontrol en la adolescencia. Un programa de enseñanza, Martínez Roca, Barcelona 1989.
• M. COSTA CABANILLAS-E. LÓPEZ MÉNDEZ, Manual para el educador social. (Dos tomos) 1. Habilidades de comunicación en la relación de ayuda. 2. Afrontando situaciones. Ministerio de Asuntos Sociales, Madrid 1991.
72. El silencio
Un día Teófilo, de santa memoria, obispo de Alejandría, fue a Scetis. Y los hermanos que se habían congregado dijeron a Abba Pambo:
-Di una palabra al obispo que le sirva de provecho a su alma.
El anciano replicó:
-Si no le inspira mi silencio, mucho menos le inspirarán mis palabras.
Historias de tas Padres del Desierto
167
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Palabras, silencio, autoridad, saber escuchar, paz interior,,.
• Experiencia humana
- «Lo esencial es invisible a los ojos; se ve con el corazón», decía el Principito. Por eso lo esencial también se dice con el corazón.,.
- Tenemos una tarea pacificadora: mirarse con buenos ojos, Y con buen corazón,
- Porque los buenos deseos también se contagian.
J Actividades
1. Decir una palabra a los que están revestidos de autoridad que les sirva de provecho para ellos y par los demás. Es una palabra pacífica y pacificadora.
2 Realizar alguno de los múltiples ejercicios de comunicación en los que no se permite hablar: mirarse, contacto,.
3, Mirar en silencio a alguna persona y manifestarle mentalmente buenos deseos para ella.
73. Una tonelada de arroz
Una mujer que deseaba vivamente encontrar la paz en medio de sus quehaceres domésticos de esposa y madre, acudió al sabio Yang Zhu y le rogó le instruyera lo más rápidamente posible para alcanzar la iluminación enseguida y poder volver a su hogar con el ánimo ecuánime, ya que tenía plena fe en que, una vez l iberada su mente de la ilusión que es la v ida, podría dedicarse plenamente a sus deberes sin que éstos turbaran en manera alguna su espíritu. Sabía que esto era así, y estaba dispuesta a hacer todo lo que se le dijera para llegar a la liberación interior en el breve tiempo de que disponía.
El sabio respondió:
-Genuino es tu deseo, y ésa es la primera gran con-
168
dición para alcanzar el fruto del espíritu. Pero también hace falta cierta instrucción y ciertas prácticas que puedo ir enseñándote poco a poco en ratos breves, según tengas tiempo para venir a verme. Junto con el gran deseo, la gran paciencia es también requisito indispensable para la iluminación. Me has dicho que tienes un hijo. En toda su vida tu hijo llegará a comerse una tonelada de arroz. Pero ¿qué pasaría si le haces comerse todo ese arroz de una vez? No le haría bien sino daño. Aprende a tener gran deseo y ninguna prisa. Vuelve cuando así lo desees.
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
-1 Temas
Liberación interior, iluminación, paz interior, trabajo, tiempo, prisa, deseos paciencia...
J Experiencia humana
- No quieras terminar de crear ya la paz en el mundo. Deja algo para mañana, no sea que te dé una indigestión y estalles con imposiciones, descalificaciones o cualquier otra cosa peor
- Porque la paz va creciendo, lentamente, como una flor. Hay que regarla, eso sí. Y cuidarla. Y mimarla,.. Cada día un poco,,, más.
J Actividades
1. Recordar la propia historia de agresividades y de purificación interior. ¿Qué proceso ha seguido9
2. Imaginar que se es un río poderoso que nace con fuerza... Va arrastrando material y corre impetuoso... A lo largo de su curso se va serenando poco a poco hasta que llega al remanso final... Visualizarlo mediante un ejercicio de relajación,
3. ¿De qué tengo o de qué puedo alimentarme hoy para cultivar el espíritu de paz? Concretar una ración. Preparar la de mañana, pero no ya la de pasado,,.
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74. Las tres pipas
Un viejo indio daba este sabio consejo a los jóvenes impacientes de su tribu:
-Cuando estés seriamente enfadado con alguien gue te ha ofendido mortalmente y decidas matarlo para lavar la honra, siéntate antes de salir, carga bien tu pipa de tabaco y fúmatela.
Una vez que acabes la primera pipa, notarás que la muerte, a fin de cuentas, es un castigo demasiado serio para la culpa cometida... Te vendrán ganas entonces de ir a darle una solemne paliza...
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Antes de ¡r a buscar un grueso bastón, siéntate, carga una segunda pipa y fúmatela hasta agotarla... Entonces pensarás que unos cuantos insultos fuertes y sonoros podrían suplir muy bien a la paliza...
Por fin, cuando te dispongas a salir para ir a insultar a quien te ha ofendido, siéntate de nuevo, carga una tercera pipa y fúmatela... Cuando acabes, quizás sólo desees hacer las paces con quien te había ofendido y causado mal...
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
ü Temas
Impaciencia, enfados, ofensa, muerte, agresividad, insultos, tranquilidad, paz interior, bendición.,
J Experiencia humana
- Deja que pase el tiempo antes de levantar la mano o la voz contra tu hermano Tus ojos, menos ofuscados, verán mejor, Y se oirá más fuerte el eco de tu silencio y de tu perdón.
- ¿Y por qué no fumarse una cuarta pipa, hecha de silencio y de deseos de amor? Quizás entonces seas capaz hasta de regalarle una bendición. (Ver la actividad 4).
J Actividades
1. Recordar los últimos enfados serios que has tenido... O los enfados tenidos durante la última semana. ¿Cómo has actuado9 ¿Cómo te gustaría haber actuado9
2 Concretar qué otros ejercicios o actividades de relajación interior y exterior se podrían hacer ahora antes de agredir a la otra persona,
3, Aprender a respirar y hacer ejercicios de relajación como práctica de la pacificación interior. Practicar después,
4. Dar un paso más allá en el proceso de perdón hasta llegar a dedicar a la otra persona esta Bendición gaélica:
Paz profunda de la ola que corre hacia ti. Paz profunda del aire que fluye hacia ti. Paz profunda de la tierra callada para ti.
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Paz profunda de las estrellas que brillan para ti. Paz profunda de la noche apacible para ti. La luna y las estrellas viertan su luz benéñca sobre ti. Paz profunda para ti.
5, La bendión anterior puede escucharse en el disco Jewel Lake. de Bill Douglas. También el resto de las canciones se pueden usar para pacificar el espíritu, meditar: relajarse, sobre todo antes de tomar una decisión premeditada.., contra los demás.
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VIVIR Y MORIR POR LA PAZ
75. El hombre y el pájaro
Un hombre con una escopeta Se dijo a un Pájaro:
-Esto de que la caza es un deporte cruel es una tontería. Y pongo mi destreza contra tu astucia; esto es todo. Es un juego limpio.
-Cierto -dijo el Pájaro-, pero no quiero jugar.
-¿Por qué no? -preguntó el hombre con una escopeta.
-Es un juego limpio -di jo el pájaro- como tú dices; as posibilidades son las mismas. Pero fíjate en las ganancias. Tú me ganas a mí, pero ¿yo qué gano?
No disponiendo de respuesta para una tal pregunta, el Hombre con una Escopeta eliminó sagazmente al autor de la proposición.
Ambroise BIERCE
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
J Temas
Violencia, muerte, diálogo, contrario, eliminación,,.
J Experiencia humana
- Hay cierta tendencia en algunos a responder con agresividad y violencia ante planteamientos intelectuales que no son capaces de contestar. Se piensa que por la eliminación física (a veces es confinamiento), se va a eliminar también su planteamiento teórico.
- Nótese el uso de las mayúsculas en la parábola: El pájaro comienza siendo Pájaro y termina siendo nada; el hombre con una escopeta comienza el diálogo pero termina endiosándose en el Hombre con una Escopeta, disparate mayúsculo, hombre-arma sin distinción..
J Actividades
1, Comentar lo señalado en «Experiencia humana».
2, Buscar ejemplos concretos en los que se cumple lo que cuenta la parábola.
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3. Buscar soluciones a esa situación.
4, Escribir un relato titulado El Hombre con una Escopeta, Puede ser la continuación de esta fábula: ese hombre se da cuenta de lo que ha hecho, cambia.,, y se convierte en persona; la escopeta adquiere también otros usos.
76. El problema
El Gobernador de una colonia le dijo a un ¡efe indígena:
-Lamento profundameente la opresión a que mi pueblo somete al tuyo. Debe usted ayudarme a solucionar el problema.
-¿Y cuál es el problema? -preguntó el ¡efe.
-Escuche, mi querido amigo. Si yo le atara a usted a un poste y le prendiera fuego, usted tendría un problema, ¿no cree?
-¿Yo? ¡Con que usted me soltara, asunto arreglado! Ahora bien, si me dejara quemarme vivo, yo moriría, y entonces sería usted quien tendría el problema.
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
_l Temas
Muerte, noviolencia, paz interior, donación, dependencia, eliminación...
_i Experiencia humana
- Muchos han muerto como un árbol tronchado por la paz. De sus cenizas nacieron nuevos ramos de paz.
- (Y los tiranos, y los salvadores, se encontraron con más brotes que cortar,,.).
J Actividades
1, Repasar la historia reciente o los periódicos. ¿Algún hecho confirma lo que dice esta parábola9
176
2. Revisar la biografía de los grandes pacifistas (Jesús, Gandhi, Luther King) desde esta perspectiva,., 6Qué aprendemos para nuestra vida práctica'
3, Pero no es tan fácil mantener esa actitud. Decir por qué
77. La experiencia fundamental
Malik, hijo de Diñar, estaba muy preocupado por la disoluta conducta de un libertino ¡oven que vivía en la casa contigua a Sa suya. Durante mucho tiempo no hizo nada al respecto, en la esperanza de que hubiera alguien que interviniera. Pero cuando la conducta del ¡oven se hizo absolutamente intolerable, Malik se dirigió al él y le pidió que cambiara su modo de ser. Con toda tranquilidad, el ¡oven informó a Malik de que él era un protegido del Sultán y, por lo tanto, nadie podía impedirle vivir como a él se le antojara. Malik le dijo:
-Yo, personalmente, me quejaré al Sultán.
Y el joven le respondió:
-Será completamente inútil, porque el Sultán jamás combiará su opinión acerca de mí.
-Entonces le hablaré de ti al Sumo Creador -replicó Malik.
-El Sumo Creador -dijo el joven- es demasiado misericordioso como para reprocharme nada.
Malik quedó totalmente desarmado, por lo que desistió de su intento. Pero al poco tiempo la reputación del ¡oven se hizo tan pésima que originó la repulsa general. Malik decidió entonces que debía intentar reprenderle. Pero cuando se dirigía a casa del ¡oven, oyó una voz que le de decía:
- N o toques a mi amigo. Está bajo mi protección.
A Malik, esto le produjo una enorme confusión y,
177
cuando se vio en presencia del ¡oven, no supo qué decirle.
El ¡oven le preguntó:
-¿A qué has venido?
Respondió Malik:
-Venia a reprenderte, pero cuando me dirigía hacia aquí una Voz me dijo que no te tocara porque estás bajo Su protección.
El rostro del disoluto joven se transformó.
-¿De veras me llamó amigo suyo? -preguntó.
Pero para entonces Malik ya se había marchado.
Años más tarde Malik se encontró con él en La Meca. Las palabras de la Voz le habían impresionado del tal modo que había renunciado a todos sus bienes y se había hecho un mendigo errante.
- H e venido aquí en busca de mí Amigo - l e di jo a Malik.
Y dicho esto, murió.
Cien'o ooouar isíór'co
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
J Temas
Conducta, caprichos, protección, ser paciente, comprensión, libertad, cambio, amigo, Dios,,.
• Experiencia humana
- Ser paciente, dejar actuar, no imponer... Es la lógica contraria al primer impulso de cortar por lo sano. ¡Es poco común, pero tan efectiva...
- Cuando alguien se siente querido y aceptado por al Alguien importante, todo está cambiado, Y todo está salvado,
- Las concepción religiosa que se tenga -sea cual sea- no es indiferente a la hora de trabajar por un mundo -y un corazón- en paz.
• Actividades
1. Centrarse en lo que más llama la atención de este cuento. ¿Sucede esto ahora entre nosotros?
178
2 ¿Se puede imponer a los demás lo que nosotros creemos que es lo mejor9 Ver cuándo y cómo lo hacemos. ¿No será bueno «saber esperar» y confiar en las personas». Ver las dificultades.
3. ¿A quién -y cómo- puede enviar cada uno una Voz... de paz y amor9 Hacerlo mentalmente o mediante un ejercicio de reconciliación.
78. El grano de trigo
Anastasio era el grano de trigo más nuevo y pequeño. Estaba allí, encima de Lola y Fermín, en lo alto de toda espiga.
El casi no sabía nada. Sólo sabía que aquello luciente y dorado era el so!. Que Lola se llamaba Lola, que Fermín se llamaba Fermín, que Juana se llamaba Jua-
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na, gue Pepe se llamaba Pepe y gue Esteban, el grano más viejo, se llamaba Esteban.
Esteban le había contado gue nació de Sonia, un grano grande de trigo viejísimo gue ahora estaba enterrado.
Un día, cuando el sol lucía más gue nuca, se sintió amontonado, ¡unto con otras espigas.
- ¡Nos han cortado! -decía Esteban.
Luego cuando ya se sentía agusto con tantos granos de trigo e iba a proponerle jugar a «tú espigueos, yo espigueo» el grano de trigo gue tenía al lado, sintió un ruido muy fuerte y gue se precipitaba sobre él una gran piedra. Luego se extrañó de verse tan blanco y tan bonito.
- ¡Qué guapa estás! - le dijo a Juana.
-Tú también, Anastasio - le contestó.
De repente, después de un gran tragueteo, se mezcló con una cosa l íguida, como la l luvia. Se parecía mucho y estaba igual de fresca, pero no estaba en gotas.
Luego con una cosa un poco amarga, pero simpática. Luego unas manos la ¡levaron de un iado para otro, amasándolo.
Luego sintió crecer... crecer. Luego un calor muy grande y luego una voz gue decía: -Esa barra, bien íosta-dita.
Luego unos dientecilbs gue la mordían.
Ahora forma parte del cuerpo de Eva.
?u-h MIGJEL FRANCO
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
• Temas
Comunidad, grupo, muerte, vida, historia, cambio, transformación, donación comunión..
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J Experiencia humana
- «Si el grano de trigo no cae en tierra y muere, no da fruto», dice Jesús
- Morir por la paz: para dar sentido a la vida; para que otros vivan... Y así pasamos de no saber (estar amontonado, conocer sólo los nombres...) a saber («Ahora forma parte del cuerpo de Eva»)
-1 Actividades
1. Contar la historia de este grano desde él mismo: escribir una especie de diario en el habla el grano en primera persona y cuenta los sentimientos, emociones, miedos, alegrías... ante las transformación que sufre y ante el cambio final. Hacer alusiones a su colaboración en la construcción de la paz
2 Dibujar una espiga con todos los miembros del grupo. Pintar a cada uno de una forma o color especial.
3. Inventar un juego de paz. Puede ser el «tú espigueas, yo espigueo...» del relato. Pero puede ser también a partir de cualquier otro objeto que se transforma en ,, objeto de paz.
4. Como otros relatos de esta selección, éste fue escrito por una chica cuar.ic tenía 11 años. Es todo un ejemplo de lo que pueden llegar a hacer trabajando con las técnicas adecuadas. Preparar otros relatos a partir de elementos ccn-cretos siguiendo su proceso de elaboración: zapatos, árbol, coche..
79. Perder para ganar
Dos pequeñas ardillas iban de saltarinas por la vida. Trotanto y trepando, conocían cada rincón del bosque. Eran muy alegres y dicharacheras. Vivían en el tronco de un árbol. Su casa era pequeña y muy aseada. Eran felices y vivían en paz...
Un buen día se presentó en el bosque un arrogante buho y se plantó en una rama de! árbol donde vivían las ardillas. El buho se puso a aullar y pronto las ardillas se asomaron. Cuando le vieron se asustaron tanto que casi se quedan sin voz.
-¿Qué haces ahí? -preguntó una de ellas con voz temblorosa.
-Esta rama es mía y me voy a quedar a vivir aquí.
- N o , no debes hacerlo. Si te quedas en esa rama,
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nosotras no podremos salir y entrar en nuestra casa. - N o importa. Total, vosotras no me importáis para nada . . . Y además, este árbol era de mi padre y, antes, de mi abuelo, y ahora vá a ser para mi.
-¿Pero no te das cuenta que no tenemos adonde ir?
-Es vuestro problema. A mí me da !o mismo.
Las ardillas decidieron luchar contra el buho y echarle de la rama por la fuerza. Empezaron a buscar unos palos y ataron unos cuchillos... Pero de pronto, una de ellas oyó desde dentro de sí misma una vocecita que le decía: «No merece ia pena... Si matáis al buho, su familia quedará huérfana. Y si él os mata a vosotras, habréis perdido lo más bonito que poseéis: la vida».
La ardilla se lo pensó y lo comentó después a su compañera.
-¡Cuánta razón tiene esa voz! -pensaron.
Por eso áecidieron marcharse y abandonar su casa.
Cuando el buho vio la decisión que tomaban, comprendió cuan ruin había siáo y que, de todas formas, daba lo mismo una rama que otra... El tan sólo tenía que volar a la rama próxima y las ardillas deberían construir otra casa.
Por eso decid ió marcharse él y dejar a las ardillas tranquilas, felices y en paz...
María SATOCA
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
- I Temas
Tranquilidad, invasión, miedos, violencia, noviolencia, desprecio, vivienda, resistencia, sumisión...
J Experiencia humana
- Vivir en paz es un ideal común a muchas personas: quieren llevar una vida sin sobresaltos, sueñan con vivir,,, paz
- A veces eso no resulta fácil: los demás invaden nuestro campo o nuestras vidas, las necesidades materiales o de otro tipo nos acosan,,.
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- Entonces es cuando podemos sacar recursos para «vivir en paz» frente a la tentación de la violencia, la lucha, la imposición.,,
- Es peligroso, sin embargo, renunciar a los propios derechos, Pero el hecho de no presentar batalla, hace que se gane la guerra de antemano. Los demás también se pueden contagiar, a la corta o a la larga, de esta actitud de paz. ¿Que es sólo un sueño9
(Pues vamos a soñar!
_l Actividades
1. Señalar los problemas que aparecen en la parábola. Juzgar después la actitud de sus protagonistas. Recalcar las causas por las que actúan en cada caso
2. Comparar la parábola con diversas realidades según los problemas antes señalados: vivienda, autoritarismo,,
3. Imaginar un diálogo entre las ardillas y el buho en el que aquéllas llegan a convencerlo sin necesidad de renunciar a sus derechos
4. Proponer toda clase de soluciones que puedan ser aceptadas por ambas partes sin renunciar cada uno a sus derechos.,. Elegir al ñnal una de ellas que sea distinta de la señalada por la autora.
5. La autora nos envió esta parábola, que preparó en escasos minutos a petición nuestra. Yo sólo le había dado el titulo genérico. Hacer nosotros lo mismo: elaborar un relato o parábola a partir de un tema concreto relacionado con la construcción de la paz. Organizar algo después: lectura pública, representación de algunos relatos, exposición de ilustraciones o cómics sobre esas parábolas...
80. Los cuatro caminos
El Maestro estaba de un talante comunicativo, y por eso sus discípulos trataron de que les hiciera saber las fases por las que había pasado en su búsqueda de la divinidad.
-Primero -le d i jo- Dios me condujo de la mano a! País de la Acción, donde permanecí una serie de años. Luego volvió y me condujo al País de la Aflicción, y allí viví hasta que mi corazón quedó purificado de toda afección desordenada. Entonces fue cuando me vi en e! País del Amor, cuyas ardientes llamas consumieron cuanto quedaba en mí de egoísmo. Tras
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de lo cual, accedí al País del Silencio, donde se desvelaron ante mis asombrados ojos los misterios de la vida y de la muerte.
-¿Y fue ésta la fase fina! de tu búsqueda? - le preguntaron.
- N o -respondió el Maestro-. Un día dijo Dios: «Hoy voy a llevarte al santuario más escondido del Templo, al corazón del propio Dios». Y fui conducido al País de la Risa.
TRABAJAR CON LA PARÁBOLA
J Mensaje final
Amigos
Trabajad, sufrid, amad... por la paz.
Pero sobre todo, reíd de corazón.
Y que vuestra risa contagie
alegría, sonrisa y,,, nueva paz.
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BIBLIOGRAFÍA
Seleccionamos algunos libros que recopilan o tienen parábolas. En algunos casos indicamos a continuación y entre paréntesis los números de las parábolas que hemos tomado de ellos, ya sean originales o provenientes de otra recopilación anterior. En otras ocasiones no indicamos nada por ser parábolas que nosotros mismos hemos recopilado, creado o encargado.
J. J. BENITEZ, Sueños, Plaza & Janes, Barcelona 1982.
C. BOUJON, Los caracoles no tienen historias, Edebé, Barcelona 1992. (12, 19)
C. CARRIO VILLALONGA, Historias del desierto, M. Font, Mallorca 1989. (26, 66)
Cuentos de los indios pieles rojas, Olañeta, Palma de Mallorca, 1986. (29, 30, 53)
El gran libro de la paz, Edebé, Barcelona 1991. (43)
En torno al fuego en las noches de África, Mundo Negro, Madrid 1990.
ESCUELA DIOCESANA DE EDUCACIÓN EN EL TIEMPO LIBRE, Parábolas para una nueva evangelización, Burgos 1991. (2, 24)
B. FERRERO, El canto del grillo, Editorial CCS, Madrid 1993. (74)
B. FERRERO, La silla vacía, Editorial CCS, Madrid 1993.
B. FERRERO, Quaranta storíe nel deserto, LDC, Turín 1989. (8)
B. FERNANDEZ GARCÍA, Parábolas de comunidad, Publicaciones Claretianas, Madrid 1991. (1,3, 6, 23, 35, 38, 47, 50)
A. FIERRO, Historias de Dios, Laia, Barcelona 1981.
R. FONT FUSTER, LOS cuentos de la paz, Paulinas, Madrid 1989.
A. FRANCIA, Educar con parábolas, Editorial CCS, Madrid 1991.
B. GONZÁLEZ BUELTA, Signos y parábolas para contemplar la historia. Más allá de las utopías, Sal Terrae, Santander 1992.
J. GUERRA CACERES, Fábulas del abuelo. Relatos por un mundo mejor, Fundación Dehón, Madrid 1989.
A. LAURENT (Selección y traducción), Fábulas hindúes, Adiax, Barcelona 1982. (15, 17,40)
P. LÓPEZ ARRONIZ, Más allá... Aventura espiritual a través de cuentos y leyendas, PS, Madrid 1987.
A. DE MELLO, El canto del pájaro, Sal Terrae, Santander 1986.
A. DE MELLO, La oración de la rana, I y II, Sal Terrae, Santander 1986. (20, 38, 76, 80)
185
A. DE MELLO, ¿Quién puede hacer que amanezca...?, Sal Terrae, Santander 1992. (10, 27, 28, 48)
Y. NOMURA, Sabiduría del desierto, Paulinas, Madrid, 1984. (51, 70, 71, 72)
H. OTERO, Narraciones para la catequesis, Editorial CCS, Madrid 1993. (5, 45, 54, 79)
J. PERADEJORDI, 56 relatos para buscar a Dios, Obelisco, Barcelona 1990.
P. RIBES, Parábolas y fábulas para el hombre moderno, Paulinas, Madrid 1991.
R. M. RILKE, Historias del buen Dios, López Crespo Editor, Buenos Aires 1977.
G. RODARI, Cuentos por teléfono, Juventud, Barcelona 1981. (44, 55)
M. SÁNCHEZ MONGE, Parábolas como dardos, Atenas, Madrid 1992. (25, 32, 38, 67)
L. TOLSTOI, Fábulas, La Gaya Ciencia, Barcelona, 1973. (4)
C. G. VALLES, Salió el sembrador..., Sal Terrae, Santander 1992. (13, 16, 18, 22, 41, 42, 60, 73)
P. J. YNARAJA DÍAZ, Nuevas parábolas, Sigúeme, Salamanca 1991.
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ÍNDICE TEMÁTICO
Las cifras se refieren al número de las parábolas
Abrazo 62 Acción 5, 7, 37, 60, 80 Aceptación 2, 30, 50, 56 Aceptación del otro 31 Aceptación propia 7 Acomodación 53 Acusaciones 21 Adaptación 13, 14 Aflicción 80 Agresión 14 Agresividad 25, 27, 61, 74 Alabanza 9, 32 Alegría 1, 45, 56, 64 Alimentos 46, 53, 67 Alternativa 66 Amargura 10 Amenaza 14, 32 Amigo 34, 77 Amor 3, 27, 34, 36, 58, 63, 68, 80 Apariencias 18 Apuesta 8 Árbol 45 Árbol de la paz 43 Armamentismo 13, 14, 16, 17 Armas 34, 43, 59, 60 Asertividad 27, 71 Astucia 40 Atenciones 27, 28 Autoestima 10 Autoridad 72 Aventura 58
Ayuda 51, 52 Ayuno 51
Banderas 12 Batalla 60, 61 Belleza 10 Bendición 74 Bien 26
Bomba atómica 35 Bondad 10 Burlas 12 Búsqueda 1, 2, 5, 53
Cambio 2, 7, 8, 32, 42, 48, 77, 78
Cambio personal 47 Camino 5, 21, 52, 69 Caprichos 77 Castigo 26 Catástrofe 57, 58 Certezas 13 Cielo 39 Ciencia 11,17 Civilización 58 Colaboración 1, 37, 38, 39, 40, 41, 50
Colectividad 44 Comida 67 Comienzo 33 Compartir 67 Comprensión 77 Compromiso 19, 21, 33, 35, 37, 44, 46 Comunicación no verbal 28
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Comunidad 78 Conciencia 66 Concordia 60 Conducta 77 Confianza 46 Conflictos 71 Conquista 60 Consejo de paz 43 Constancia 69 Consumo 6 Contemplación 6 Contrarios 30, 75 Conversión 2, 32, 47 Cooperación 21 Costumbres 7 Creación 17, 25, 58 Culpa 18 Culpabilidad 29 Culto 11
Daño 20 Dar la vida 75 Debilidad 59 Defensa 22, 27 Delicadeza 49 Dependencia 76 Derechos 27, 71 Desapasionamiento 64 Deseos 2, 33, 73 Desgracia 64 Desprecio 79 Destrucción 20, 25 Detalles 50, 68 Diálogo 7, 8, 75 Dictadura 55 Dificultades 62, 64 Dios 46, 51, 52, 77 Dioses de la guerra 59 Discreción 70 Disculpas 15, 21, 37, 52 Discusiones, 19, 38 Disfrute 6 Disponibilidad 48
Disputa 30 Diversidad 19 Domesticación 53
Dominio 17 Donación 1, 67, 68, 70, 76, 78 Duelo 8, 40
Ecuanimidad 64 Egoísmo 39, 48, 59, 63 Eliminación 75, 76 Encuentro 7, 29, 36 Enemigos 4, 22, 34, 43, 65 Energía 41 Enfados 74 Engaño 14, 15, 29, 32 Entrega 68, 75 Envidia 20, 32 Escucha 28 Esfuerzo 44, 46 Evolución 57 Explosión 57
Familia 3 Favores 27 Felicidad 1, 3, 10, Fin de la humanidad 11 Fraternidad 31 Futuro 54
Generosidad 32, 49, 67 Grupo 21, 78 Guerra 3, 4, 34, 35, 45, 59, 60 Guerra Mundial 58
Hambre 15, 35, 39,46 Hazaña 65 Heridos 52 Hermanos 52 Historia 44, 57, 78 Hospitalidad 43 Huida 23, 29 Humildad 32, 56, 70 Humor 9
188
Identidad 16 Igualdad 38 Iluminación 73 Imitaciones 16 Impaciencia 74 Impasibilidad 64 Indiferencia 64 Indulgencia 26 Infierno 39 Injusticias 55, 75 Insatisfacción 2 Insultos 8, 21, 74 Integración 30, 41 Interculturalidad 61 Intereses 37 Interior 10, 23, 69 Invasión 79 Ira 32, 64
Jerarquía 41 Juicios 18 Justicia 15, 26, 33, 35, 51, 59, 63, 66
Lamentaciones 40 Leyes 43 Liberación interior 73 Libertad 42, 77 Líderes 42 Limosna 15
Lucha 22, 36, 55, 59, 60, 61 Luz 69
Magia 5 Mal 9, 11, 20, 40 Matrimonio 3, 27, 28, 68 Mesías 47 Mezcla 61 Miedos 22, 79 Misericordia 66
Muerte 17, 19, 20, 23, 30, 40, 74, 7 76, 78
Naturaleza 58 Necesidad 26 Niño 24 Noche 29 Noé50 Novedad 14 Noviolencia 4, 36, 61, 71, 76, 79
Objeción de conciencia 4 Objetivos 42 Objetos 12 Odio 62, 66 Ofensa 70, 74 Oposición 30 Optimismo 9, 10 Oración 47 Orden 41 Origen 57 Originalidad 38 Ovejas negras 9
Paciencia 30, 33, 73, 77 Pacto 43 Palabras 28, 72 Paloma 45, 50, 62 Pasado 23 Pasividad 58
Paz interior 72, 73, 74, 76 Peleas 8, 27, 38, 60, 71 Penitencia 51 Perdón 18, 26, 65, 66, 70 Peregrinación 5 Persecución 29 Persona 24 Perspectiva 8 Peticiones 33 Pobreza 35, 68 Poder 5, 6, 12, 60 Política 11, 19 Preguntas 42, 50 Prejuicios 18, 22 Presunción 15
189
Prevención 20, 64 Prisa 54, 73 Problemas sociales 75 Profeta 55 Progreso 11 Prójimo 1, 31, 39 Promesas 21 Propiedad 71 Protección 77 Providencia 46 Provocación 8 Prueba 5 Puntos de vista 8
Racismo 19, 35, 45, 61 Realidad 2, 19 Receta de paz 45 Reconciliación 36 Refugio 57 Reino 33, 60 Relaciones internacionales 24 Religión 11 Resistencias 14, 79 Respeto 27, 49 Responsabilidad 58 Rigidez 13 Riñas 27, 29, 71 Riqueza 6, 11, 39 Risa 80 Rituales 45 Robo 26 Rutina 14
Saber ver 28, 31 Saber escuchar 70, 72 Sabiduría 11, 31, 56 Sacralización 12 Salvación 24 Santidad 32, 63 Satisfacción 2 Segregación 61 Seguridades 13 Sencillez 56 Sentido 17
Ser humano 11, 24, 57 Servicio 51, 52, Silencio 21, 28, 62, 70, 72 Símbolos 12 Sinceridad 16, 55 Solidaridad 1, 39, 50, 59, Solución de problemas 62 Sombra 23 Sonrisa 56 Sospecha 18 Sueños 2, 33, 34, 35 Suerte 64 Sumisión 79 Suspicacia 18
Técnica 17 Tercer Mundo 15 Territorios 59 Tesoro 5 Tiempo 54, 73 Tierra 44, 45 Tomar partido 4 Trabajo 6, 44, 46, 73 Tradición 14 Tranquilidad 74, 79 Transformación 78 Transparencia 55 Tratado 43 Tristeza 45
Unidad 60 Unión 43 Utopía 34, 35, 36
Valentía 55 Venganza 26, 40 Verdad 8, 55 Viaje 41, 42, 62 Vida 6, 25, 30, 58, 78 Violencia 29, 32, 40, 61, 75, 79 Visión positiva 9, 10 Vivienda 79 Voz 16
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ÍNDICE
Presentación: Parábolas en son de paz 5
Introducción: Educar con parábolas en la paz 7
1. BUSCAR LA PAZ 19
1. El camino de la felicidad 21 2. El cantero buscador 23 3. El amor y la guerra 25 4. El mujik y el caballo 26 5. El tesoro 27
2. DESCUBRIR LA PAZ 31
6. La paz del pescador 33 7. El Señor No 34 8. Los dos pájaros 36 9. Podría haber sido peor 38
10. Ver en lo interior 40
3. DESCUBRIR LOS CAMINOS QUE AMENAZAN LA PAZ 43
11. La destrucción del mundo 45 12. Los calcetines del rey 46 13. Lanzas y escudos 48 14. ¿La mejor solución? 49 15. El discípulo calculador 51 16. La caza de ciervos 53 17. Los creadores del león 54 18. El hacha perdida 56 19. Una historia cruel 57 20. El cartucho de dinamita 59 21. Los cuatro monjes 60
4. DEFENDER LAS BASES DE LA PAZ 63
22. Matar dragones 65 23. Las propias sombras 66 24. Reconstruir a la persona 67 25. La rama cortada 69
191
26. El hombre sin manos 70 27. La solución perfecta 72 28. Escuchar de verdad 73
5. PREPARAR EL CAMINO DE LA PAZ 75
29. El origen del sol, la luna y las estrellas 77 30. La disputa entre el sol y la luna 79 31. El día y la noche 80 32. Pacífico y pacificador 82 33. La semilla de la paz 84
6. SOÑAR LA PAZ 87
34. Y un día empezó la paz 89 35. El museo del futuro 91 36. Reconciliación 93
7. TRABAJAR JUNTOS POR LA PAZ 95
37. ¿Quién puede hacerlo? 97 38. La pelea del cuerpo 98 39. Cielo e infierno desde aquí 100 40. El duelo entre el elefante y el gorrión 101 41. Las aves voladoras 104 42. ¿Adonde vas? 106 43. La Ley de la gran paz 108 44. La historia universal 110
8. CONSTRUIR LA PAZ 113
45. Receta 115 46. Te hice a ti 117 47. Por dónde empezar 119 48. El que se quejaba de los demás 120 49. Pequeños pasos 121 50. El valor de uno más 121 51. Los dos hermanos 123 52. La cita con Dios 124
9. CONTAGIAR LA PAZ 127
53. Perro va por fuego 129 54. El reloj 130 55. Andrés de vidrio 132 56. El último monje 134
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10. RECORRER EL CAMINO DE LA PAZ 137
57. La historia del mundo 139 58. La última flor 140 59. Peace& War 143 60. El mensaje de la espada 146 61. Negros y blancos 148 62. Un gesto de paz 150
11. CULTIVAR ACTITUDES DE PAZ 153
63. Los cuatro tipos de personas 155 64. No todo es lógica en la vida 156 65. Los tres hijos del Rey 157 66. La misericordia 158 67. El regalo 159 68. Regalo de aniversario 161 69. ¡Mira por dónde vas! 163 70. La humildad 164 71. «Dos no riñen...» 165 72. El silencio 167 73. Una tonelada de arroz 168 74. Lastres pipas 170
12. VIVIR Y MORIR POR LA PAZ 173
75. El hombre y el pájaro 175 76. El problema 176 77. La experiencia fundamental 177 78. El grano de trigo 179 79. Perder para ganar 181 80. Los cuatro caminos 183
Bibliografía 185
índice temático 187
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