06.01.09 12:39GARGANTA PROFUNDA: PIGLIA / PLANETA : EL ESCÁNDALO
Page 1 sur 18http://209.85.129.132/search?q=cache:x_zsxieZujkJ:gargantaprofund…o.html+polemica+de+fogwill+plata+quemada&hl=es&ct=clnk&cd=6&gl=ar
Versión de solo texto
Esta es la versión en caché de http://gargantaprofunda1.blogspot.com/2006/03/piglia-planeta-el-escndalo.html deGoogle. Se trata de una captura de pantalla de la página tal como esta se mostraba el 29 Dic 2008 04:45:59 GMT.Es posible que la página haya sufrido modificaciones durante este tiempo. Más información
Se han resaltado estos términos de búsqueda: fogwill plata quemada Estos términos sóloaparecen en enlaces que apuntan a esta página: polemica
F R I D A Y , M A R C H 2 4 , 2 0 0 6
PIGLIA / PLANETA : EL ESCÁNDALO
El gran escritor
Ricardo Piglia, la
editorial
multinacional
Planeta, un editor y
representante del
artista y el
escasamente
conocido novelista
Gustavo Nielsen, ah
y por último un
premio que en su
momento supuso
40.000 dólares
como recompensa.
El premio Planeta lo
ganó Piglia pero
Nielsen entendió
que con malas artes,
por lo cual demandó
a escritor, editor y editorial convencido de que todo había sido
acordado en maniobras que la metáfora más vulgar llamaría entre
gallos y medianoche. "Creo que no es justo -declaró Nielsen- que
hagan participar a 264 ingenuos en una gran campaña publicitaria
armada como si fuera un concurso literario".
El tribunal de primera instancia absolvió. Nielsen apeló. Y en marzo
último, la sala G de la Cámara Civil dictaminó que sí, que "existen
demostradas muchas circunstancias que revelan la predisposición o
predeterminación del premio en favor de la obra de Ricardo Piglia".
A B O U T M E
DINTILAKO
LIMA, LIMA, PERU
VIEW MY COMPLETE
PROFILE
P R E V I O U S P O S T S
LAS DÉCADAS DEL HORROR EN
LA POESÍA
G A R G A N T A P R O F U N D ABlog suivant»RECHERCHER LE BLOG MARQUER LE BLOG
06.01.09 12:39GARGANTA PROFUNDA: PIGLIA / PLANETA : EL ESCÁNDALO
Page 2 sur 18http://209.85.129.132/search?q=cache:x_zsxieZujkJ:gargantaprofund…o.html+polemica+de+fogwill+plata+quemada&hl=es&ct=clnk&cd=6&gl=ar
predeterminación del premio en favor de la obra de Ricardo Piglia".
Los jueces entendieron que el autor de "Respiración artificial" "no
debió postularse para la obtención del premio" porque entonces se
encontraba vinculado contractualmente con la empresa Espasa Calpe
Argentina, que forma parte del Grupo Planeta, organizador del
concurso. Así, condenó a Piglia, a Planeta y al editor Schavelzon a
pagarle a Nielsen diez mil pesos de indemnización.
Luego del fallo, los acontecimientos se precipitaron: el equipo
perdedor anunció que apelará y que hasta Corte Suprema no para. Y
Piglia escribió en el diario Página 12 un artículo buscando explicar su
posición. Para eso recurrió a jueguitos literarios, como el de llamar
Carlos Argentino Daneri (el ridiculizado personaje de "El Aleph", de
Borges) a su contrincante. Enredado en guiños, arabescos y elegancias,
poco se entendía de la defensa de Piglia, ausente de cualquier
contundencia. Nielsen, por su parte, replicó en el mismo periódico
reiterando sus fuertes acusaciones y haciendo notar que si en el juego
propuesto él era Daneri, Piglia se reservaba el lugar de Borges, saco
que le queda algo holgado Piglia y a cualquiera.
Como para garantizar la continuación del culebrón acaba de aparecer
una carta abierta, firmada por más de cincuenta artistas e
intelectuales, en donde se sostiene que "la infundada acusación contra
la probidad de Ricardo Piglia responde a una sola causa: se lo acusa de
ser quien es en nuestra literatura, en la cultura nacional y en el plano
internacional y académico". Lo firman, entre otros, Osvaldo Bayer,
Arturo Carrera, Tito Cossa, León Ferrari, Gerardo Gandini, Germán
García, Leónidas Lamborghini, Luis Felipe Noé, Juan José Saer y
Héctor Tizón. El escrito denuncia una campaña de difamación contra
Piglia que habría empezado en 1997. Nielsen no lo demandó por ser
quien es sino por entender que había tomado parte en un chanchuyo.
Y si es culpable o inocente del enjuague no le quita una coma ni un
punto a una de las obras literarias más brillantes y perdurables que
produjo la Argentina en los últimas décadas y que seguirá leyéndose
con fervor cuando los ecos de esta telenovela sean una nada de polvo y
espanto. Ahora, de allí a atribuir el juicio a una conjura internacional,
como mencionó uno de los firmantes, o al "periodismo de escándalo",
como razonó otro, más que defender a Piglia parecen agraviarlo con el
dedo gordo del disparate.
Otro breve resumen
Piglia tenía una novela que ya había sido contratada por el grupo
Planeta a través de Seix-Barral, y que por algún motivo (una deuda
económica que ese autor tenía con la editorial) participó del concurso
y ganó. Piglia no recibió el importe del premio, sino que ese importe
condonaba la deuda anterior, y todos felices: excepto los concursantes
que fueron estafados en su buena fe. Nielsen -que estaba entre los diez
finalistas- pudo ver este tejemaneje y decidió que debía hacer respetar
06.01.09 12:39GARGANTA PROFUNDA: PIGLIA / PLANETA : EL ESCÁNDALO
Page 3 sur 18http://209.85.129.132/search?q=cache:x_zsxieZujkJ:gargantaprofund…o.html+polemica+de+fogwill+plata+quemada&hl=es&ct=clnk&cd=6&gl=ar
finalistas- pudo ver este tejemaneje y decidió que debía hacer respetar
su parte; lo hizo, y ganó. Entre todos estos dimes y diretes hubo
solicitadas que defendían a Piglia, cartas de una y otra parte, insultos,
golpes de puño, escritores revueltos, encuentros y desencuentros,
disculpas, faltas de respeto, mentiras y conspiraciones, un verdadero
reality show de la literatura argentina del siglo XX - XXI que exponía
sus ideas humanas al nivel de un programa de Laura Bozzo (con
comerciales incluidos); toda esa intelectualidad volátil bajó por algún
tobogán de algún tren fantasma, se olvidó del problema filosófico–
literario para exponer las miserias que aparentemente no tenían
mucho que ver con las letras, pero cuanto del convencimiento de que
cuando las papas queman, el sálvese quien pueda es del mismo tenor
que el del colectivero de la línea sesenta que evita un choque con un
camión cisterna en pleno Puente de Piedra y en época de crecida del
río Rimac
No podemos meternos con Piglia.
Nos metemos con Piglia, se meten con Piglia, pero el aire medroso no
se renueva, cuando la tensión fue en aumento más de uno se agarró la
cabeza. Cuarenta años de carrera literaria no es poco, y mucho menos
si esta carrera se desarrolló de una manera brillante y regaló a la
literatura argentina páginas históricas que son y serán estudiadas en
distintas universidades del mundo; meterse con Piglia sería (fue) -en
cierta manera- como meterse con el finado Saer o con Osvaldo Bayer
(por sólo nombrar a dos), instituciones inquebrantables y sólidas,
indestructibles a pesar de cualquier cosa. Schavelzon (representante de
Planeta y de Piglia) sabía eso y podemos intuir que su posición, su
manejo, fue sólo político, pragmático, como el de cualquier empresario
de bananas. El punto que desvió el curso de los hechos fue que
Ricardo Piglia no se presentó -como había sido combinado- en una de
las audiencias; sé que Nielsen, si ése hubiera sido el caso, no
continuaba con la afrenta judicial, no quería tocar al literato. A partir
de ahí, un círculo que podría haberse desvanecido, acabó por cerrarse.
Piglia rompe el silencio
El trece de marzo de 2005 Piglia publica su descargo en Página/12 en
el que expone sus argumentos en contra de la cruzada en su desmedro,
intenta desmerecer a Nielsen al compararlo con Carlos Argentino
Daneri (personaje literario que Borges ridiculizó en su cuento El
Aleph) y se defiende con cuanta herramienta dialéctica encuentra en
su camino. El problema fue que no hubo demasiadas, y Piglia lo sabía,
no podríamos menospreciar su intelectualidad en este punto. A pesar
de saberlo, interpretemos sus alternativas:
1.- Permanecía en silencio (mientras todos esperaban alguna
manifestación). (Prima la razón.)
2.- Admitía los hechos. (Prima la sinceridad, una honestidad tardía
pero tan peligrosa cuanto respetable.)
06.01.09 12:39GARGANTA PROFUNDA: PIGLIA / PLANETA : EL ESCÁNDALO
Page 4 sur 18http://209.85.129.132/search?q=cache:x_zsxieZujkJ:gargantaprofund…o.html+polemica+de+fogwill+plata+quemada&hl=es&ct=clnk&cd=6&gl=ar
pero tan peligrosa cuanto respetable.)
3.- Se defendía de la manera que podía y ponía como telón su
trayectoria. (Prima lo humano, el instinto.)
Solicitada
La última semana de marzo de 2005 dio a luz una solicitada publicada
en distintos medios que expresaba que la infundada acusación contra
la probidad de Ricardo Piglia responde a una sola causa: se lo acusa de
ser quien es en nuestra literatura, en la cultura nacional y en el plano
internacional y académico. Entre los firmantes podemos encontrar
iconos de la literatura argentina, amistades incondicionales del señor
Piglia, algunos escritores y críticos actuales y con gran posibilidad,
simples oportunistas (que pueden encuadrarse dentro de las categorías
anteriores, con excepción de la primera, claro). No descartemos este
último punto, y me remito a la correspondencia que recibió Fogwill
de un firmante anónimo (está en el enlace que coloqué al comienzo de
este artículo) luego de expresar su posición frente a este evento:
Debajo del sofá
Olvidemos todo lo leído hasta aquí. Nada de lo que leyeron en estas
pequeñas reflexiones -que ya muchos habrán hecho anteriormente de
una u otra manera- fue objetivo principal de este texto. El objetivo es
otro, que a pesar de haberlo olido todos, nadie quiso entenderse. Ni
siquiera Fogwill; menos Nielsen. No es una crítica, quizá quien
escribe estos párrafos desordenados hubiera hecho lo mismo.
Todos pasaron cerca del sofá y apenas acudió ese aroma podrido y
suave, casi imperceptible, giraron sobre sus talones para posicionarse
encima la alfombra persa, junto a la mesa, en una silla que no era la
cabecera.
Y aquí me remito a tres citas claves:
La de la solicitada:
Con cuarenta años de presencia en la literatura argentina, con la
producción de una obra cuya solidez no está en discusión, con una
decidida intervención en los debates cruciales de la cultura y una activa
presencia intelectual en tiempos difíciles de la historia argentina,
Ricardo Piglia es objeto de una campaña de difamación que empezó en
1997, cuando la decisión unánime de un jurado compuesto por los
escritores Mario Benedetti, María Esther de Miguel, Tomás Eloy
Martínez y Augusto Roa Bastos le otorgó el Premio Planeta a su novela
Plata Quemada.
La de Piglia:
Según esa insinuación, Augusto Roa Bastos, Mario Benedetti, Tomás
Eloy Martínez y María Esther de Miguel –que formaron parte del
jurado y premiaron mi novela por unanimidad– se habrían dejado
06.01.09 12:39GARGANTA PROFUNDA: PIGLIA / PLANETA : EL ESCÁNDALO
Page 5 sur 18http://209.85.129.132/search?q=cache:x_zsxieZujkJ:gargantaprofund…o.html+polemica+de+fogwill+plata+quemada&hl=es&ct=clnk&cd=6&gl=ar
jurado y premiaron mi novela por unanimidad– se habrían dejado
manipular por la editorial.
La de Fogwill:
No sé qué pensarán mis abogados, pero yo lo nombraré: en el jurado,
junto a María Esther de Miguel, Augusto Roa Bastos, Tomas Eloy
Martínez y Mario Benedetti, que Piglia menciona, figuraba como
presidente Guillermo Schavelzon, funcionario de la editorial
auspiciante y agente literario del autor.
Aquí es donde el gato muerto comienza a manifestarse. Cómo fue que
Plata quemada ganó un premio por unanimidad entre un jurado
formado por cinco personas, luego se demuestra que el premio fue un
fraude, los que participaron en la elección de la novela premiada hacen
silencio de radio, pasan desapercibidos, y ninguno de ellos firma la
solicitada a favor de Piglia ni resulta tocado por el conflicto, ¿ellos no
eligieron también?
Aquí hay gato encerrado; no, no está encerrado, está muerto.
Si existe el No podemos meternos con Piglia y acabamos metidos,
llevemos esta afirmación hasta Roa Bastos, de Miguel, Benedetti y
(Eloy) Martínez. Era demasiado; Piglia ya había metido la cabeza; con
una era suficiente.
Y el gato, ya no está más.
Se lo llevaron.
Carta de Gustavo Nielsen (Publicado en Revista de Libros de
El Mercurio, Santiago de Chile, el 11/03/05)
(Según Nielsen, en la semana anterior, Pagina/12 había declinado la
posibilidad de difundirla por tratarse de un caso cerrado.)
Soy el ganador del juicio a Editorial Planeta, Schaveltzon y Piglia por
el Concurso de Novela Planeta 1997. La Cámara, como es de público
conocimiento, entendió que dicho concurso estaba viciado por falta de
transparencia y de buena fe, y condenó a los tres demandados a
pagarme una cifra de dinero por chance perdida y otra por daños y
perjuicios.
No tengo nada personal contra Piglia o Schaveltzon, a quienes conocí
personalmente durante el juicio. Al momento del pleito, había leído
solamente “Respiración artificial”: lo considero un gran libro.
Tampoco tengo nada personal contra la Editorial Planeta, ni la gente
que la conforma. Me consta que Díaz y Nacho Iraola son grandes
personas. Publiqué mi primera novela en ese sello, recuerdo que todo
el personal que en ese momento era parte de la editorial fue muy
amable conmigo. El motivo que me llevó a emprender el juicio es otro:
06.01.09 12:39GARGANTA PROFUNDA: PIGLIA / PLANETA : EL ESCÁNDALO
Page 6 sur 18http://209.85.129.132/search?q=cache:x_zsxieZujkJ:gargantaprofund…o.html+polemica+de+fogwill+plata+quemada&hl=es&ct=clnk&cd=6&gl=ar
amable conmigo. El motivo que me llevó a emprender el juicio es otro:
la búsqueda de transparencia en los concursos literarios.
Como escritor, surgí de un concurso literario. Como escritor, sigo
dependiendo de los concursos literarios, el único instante de la
literatura Argentina en el que se puede encontrar una recompensa
monetaria. Esta situación le ocurre a casi la totalidad de los escritores,
que muchas veces se ven confinados a trabajar de noteros, críticos,
talleristas o lectores de editoriales para poder mantener a sus familias.
Sigo participando y creyendo en los concursos como el primer día.
Corrijo mis libros y hago las fotocopias y los anillados con la misma fe
del primer día. Los entrego con esa misma fe. Y considero que esto es
una suerte, no una condena o un pecado de ingenuidad.
Del “Concurso Planeta 1997” participaron 264 escritores. Estaba
contento por haber quedado entre los diez finalistas con mi novela “El
amor enfermo”, que después de dos años se terminó publicando en
Alfaguara. Ganó un libro, “Plata quemada”, que estaba
comprometido con uno de los sellos del Grupo Editorial que
organizaba el concurso. El dato no es menor, y fue denunciado
oportunamente por la revista “Tres Puntos” y por “Radar Libros”. La
periodista Claudia Acuña, autora de la investigación inicial, sostuvo sus
verdades con decisión durante su testimonio judicial.
Mi abogado se llama Gabriel Len. Tiene mi edad, poco más de
cuarenta años. Es un profesional que se desempeña con honestidad y
valentía. También es mi amigo. Durante siete años trabajamos juntos
en el juicio. Codo a codo, como se dice en la calle. Fui a todas las
audiencias. Escuché mentiras y verdades, suposiciones y
contradicciones. Vi como huían de mí los otros escritores, como si yo
pudiera contagiarlos de viruela. Vi temblar a unos cuantos boxeadores
de las letras, a los que había equivocadamente considerado como la
imagen misma de la anticorrupción. Los vi vencidos en su afán de
venderle la obra al Gran Mercado. No los juzgo: los contendientes eran
importantes. Para colmo, tres. Tampoco me quejo: me la busqué. La
única contención verdadera y desinteresada proveniente del medio, me
la dieron los escritores Rodolfo Fogwill, Carlos Chernov, Elvio
Gandolfo, Jorge Accame, Elena Bossi, Edgardo González Amer,
Damián Tabarosky y Ana María Shua. La contención tuvo a veces la
forma de un viaje a Cariló, un asado, una paella, un discurso contra las
instituciones, una ensalada de tomates, una receta de Lexotaniles, un
abrazo, un consejo, unos vinitos, un partido de ping pong.
También me apoyaron mi mamá, doña Josefina Scellatto, de oficio
poeta; mi hermana Machi; mi sobrina Sofi; mi socia, la arquitecta
Viviana Miglioli y una buena compañera que tuve que se llama Lorena
Boldt, diseñadora gráfica y fotógrafa, que se bancó gran parte de las
levantadas temprano para ir a Tribunales.
06.01.09 12:39GARGANTA PROFUNDA: PIGLIA / PLANETA : EL ESCÁNDALO
Page 7 sur 18http://209.85.129.132/search?q=cache:x_zsxieZujkJ:gargantaprofund…o.html+polemica+de+fogwill+plata+quemada&hl=es&ct=clnk&cd=6&gl=ar
levantadas temprano para ir a Tribunales.
También me apoyó la editorial Alfaguara, publicándome,
soportándome, y haciéndome creer en todo momento que no sabían
que yo andaba (y ando) sin otras opciones editoriales, como si fuera
un escritor que pudiera pasarme a otro sello simplemente por pura
especulación de mercado. Nunca me hicieron sentir que estaba solo;
nunca se aprovecharon del monopolio que yo mismo había fabricado.
Si no fuera por Alfaguara, y especialmente por su director Fernando
Esteves - el uruguayo más tozudo que conozco - no habría podido
publicar nada.
Escribo esta carta para agradecer a mis lectores, a todas las personas
que creyeron en el juicio, a todos los que creen que los concursos
deben ser transparentes, a mi abogado el doctor Len y al doctor
Marcelo San Martín, que hicieron que este resultado fuera posible. Y
para decirles a los escritores que empiezan: sigan concursando. Esta
fue la excepción, no la norma. Lo sé. Hice un juicio para exigir respeto
por las ilusiones. Ojalá la lucha sirva para que la gente conozca a los
otros finalistas de este premio mal otorgado de 1997, que aún tengan
sus libros sin publicar. Otros que también creyeron que estaba todo
bien y terminaron participando involuntariamente del marketing de
un objeto vendido.
A esas personas que “perdieron” conmigo en el concurso cuestionado,
que este justo fallo reivindica, les deseo una pronta publicación y les
mando mi abrazo.
Texto de Ricardo Piglia (Publicado en Radar-Página/12 el 13-
03-2005)
EL CASO PLATA QUEMADA. RICARDO PIGLIA ROMPE EL
SILENCIOA CASI DOS SEMANAS DE CONOCIDO EL FALLO
JUDICIAL SOBRE EL CASO PLATA QUEMADA, LA NOVELA CON
LA QUE GANÓ EL PREMIO PLANETA 1997, EL ESCRITOR
RICARDO PIGLIA ESCRIBE POR PRIMERA VEZ SOBRE LA TRAMA
QUE CASI LO LLEVA A LAS PÁGINAS POLICIALES DE LOS
DIARIOS.
La lógica de los hechos por Ricardo Piglia
La rivalidad entre escritores y las sórdidas luchas por los premios
literarios ya la narró Borges en El Aleph. Lo increíble es que ahora esa
historia se ha repetido en la realidad. En esta nueva versión, Carlos
Argentino Daneri, el típico escritor arribista retratado por Borges, es
quien ha perdido el concurso y como un maniático se ha dedicado a
denunciar al que ganó y a denigrarlo. Que la Justicia haya perdido su
tiempo en una ridícula rencilla literaria me parece un simpático signo
de los tiempos que corren. Sabemos desde Kafka que la clave de un
proceso es que cualquier cosa que diga el acusado parece una
justificación o una coartada. Por eso, cuando hace unos días el fallo
del tribunal se hizo público, pensé que lo mejor era no decir nada,
06.01.09 12:39GARGANTA PROFUNDA: PIGLIA / PLANETA : EL ESCÁNDALO
Page 8 sur 18http://209.85.129.132/search?q=cache:x_zsxieZujkJ:gargantaprofund…o.html+polemica+de+fogwill+plata+quemada&hl=es&ct=clnk&cd=6&gl=ar
del tribunal se hizo público, pensé que lo mejor era no decir nada,
pero la dimensión que ha tomado el asunto me ha decidido a
intervenir. Las líneas que siguen son un intento de esclarecer –en lo
posible– la lógica que ha regido la misteriosa serie de hechos literarios
que me ha llevado casi a la página policial de los diarios.Como el
personaje de Borges, el nuevo Carlos Argentino Daneri piensa que la
justicia literaria sólo es justa si es él quien gana el concurso, porque
cualquier otro resultado es prueba de una manipulación y de un
fraude. Denunció entonces que, contra las posibilidades de todos los
participantes y aparte de mis posibles méritos, de antemano se había
decidido que yo iba a ser el ganador del concurso de novelas
organizado por la editorial Planeta en 1997. Según esa insinuación,
Augusto Roa Bastos, Mario Benedetti, Tomás Eloy Martínez y María
Esther de Miguel –que formaron parte del jurado y premiaron mi
novela por unanimidad– se habrían dejado manipular por la editorial.
Pero como esa presunción es irracional, el jurado jamás aparece
mencionado en la acusación y soy yo quien es acusado. Su denuncia no
sólo desató una ola de rumores y de sospechas sino que sirvió para
llevarme a los tribunales y enredarme en un proceso que duró ocho
años.
Lo increíble es que la razón que Daneri usó para acusarme se fundó en
la lectura delirante de una cláusula del concurso. Según las bases que
el fallo cita, la novela “debía ser inédita, sin haber cedido o prometido
respecto de ella los derechos de edición y/o reproducción en cualquier
forma con terceros”.
Es obvio que el objeto de esa cláusula es proteger al editor de la
posibilidad de que un escritor firme con anterioridad un contrato con
una editora que no sea Planeta. La cláusula impide que el escritor que
gane el concurso pueda publicar luego la novela con otro editor.
Aunque parezca imposible, en la interpretación irracional de esa
cláusula se fundamentó la denuncia.
Daneri insinúa que mi novela Plata quemada estaba contratada
porque yo había firmado años atrás un contrato con Planeta por la
edición de toda mi obra. Pero mi novela Plata quemada no estaba
contratada, no estaba contemplada ni incluida en ese contrato porque
todavía no existía, y nunca se firmó un contrato previo al concurso por
esa novela.De todos modos –como si esto fuera un relato policial–,
vamos a considerar por un momento los hechos tal cual los presenta
Daneri.
1. Si la novela ya hubiera estado contratada, eso no garantizaba que
pudiera ganar el concurso, ya que esa decisión dependía del jurado.
2. Si la novela ya hubiera estado contratada por la editorial que
organizaba el concurso, ese hecho no hubiera alterado ninguna de las
bases del premio, ya que la cláusula impedía el contrato con terceros
(como cita el mismo fallo), esto es, con otra editorial.
La suposición de que Plata quemada ya estaba contratada generó un
desdoblamiento que podríamos considerar típico de un cuento de
fantasmas de Henry James. Sucede que en el razonamiento de Daneri
06.01.09 12:39GARGANTA PROFUNDA: PIGLIA / PLANETA : EL ESCÁNDALO
Page 9 sur 18http://209.85.129.132/search?q=cache:x_zsxieZujkJ:gargantaprofund…o.html+polemica+de+fogwill+plata+quemada&hl=es&ct=clnk&cd=6&gl=ar
fantasmas de Henry James. Sucede que en el razonamiento de Daneri
yo aparezco presentando al concurso dos novelas distintas.
Permítanme hacer un poco de historia. Terminé de escribir la novela a
fines de julio y la presenté el 20 de agosto, mucho tiempo antes de la
terminación del plazo del concurso (el manuscrito recibió el número
111 sobre un total de 264 novelas presentadas). La envié con el
pseudónimo de Roberto Luminari y con el título de Por amor al arte
para proteger mi anonimato y el del libro.
Las bases me permitían presentarme con mi nombre, y muchos
escritores lo han hecho en ese y en otros concursos anteriores. Pero si
usé un pseudónimo y la presenté con un título distinto fue porque
pensé que podía no ganar el concurso. No soy Daneri, no pienso que
deba ganar cualquier concurso al que me presente. Como pensé que
era posible que no ganara el concurso y que mi novela podía quedar
entre los finalistas, preferí (como han hecho antes que yo muchos
otros escritores) que mi nombre y el título de mi libro no aparecieran
en las listas que se dan a conocer antes del fallo.Esta decisión fue
presentada por Daneri como una prueba de mi culpabilidad. Cito del
fallo: “De todas maneras, [María Esther] De Miguel conoció la
identidad del autor de Plata quemada por aparecer un personaje
reiterado en las obras de Piglia (Emilio Renzi), circunstancia que
comunicó a la editorial organizadora, mas las condiciones no se
modificaron respecto a la preselección efectuada por lectores amigos o
especializados”.
No entiendo la sintaxis de ese párrafo, ni de qué soy acusado.
Desde luego, esto sólo prueba que los jurados no sabían que había una
novela mía en el concurso y la leyeron igual que a cualquier otra, y sólo
lo supieron gracias al conocimiento literario de uno de ellos que le
permitió identificar a mi personaje.
Pero las confusiones kafkianas no terminan ahí. Me permito citar otro
párrafo del fallo: “También viene a cuento señalar que el
codemandado Piglia admite que la novela que presentara al concurso
Por amor al arte, bajo el pseudónimo de Roberto Luminari,
corresponde al título que después fue cambiado, supuestamente con
anterioridad a la edición, aunque para ser exacta esta aseveración,
debió acreditarse la identidad del contenido entre la novela presentada
y Plata Quemada, circunstancia que no ha tenido lugar en tanto no
se ha acompañado el texto de la primera de estas obras a fines
comparativos”.
No entiendo. Parece que había dos novelas distintas. Parece que nadie
comprobó que las dos novelas eran una sola. Parece que los escritores
del jurado no se dieron cuenta de que habían premiado una novela y
que después se había publicado otra distinta.
Carlos Argentino Daneri ve fantasmas. Intenta insinuar que Plata
quemada fue introducida a último momento en el concurso para
sustituir a Por amor al arte y cree que eran dos novelas distintas. Es
decir, sugiere que yo gané con una novela pero luego se publicó otra
porque la editorial lo quería así.
06.01.09 12:39GARGANTA PROFUNDA: PIGLIA / PLANETA : EL ESCÁNDALO
Page 10 sur 18http://209.85.129.132/search?q=cache:x_zsxieZujkJ:gargantaprofun….html+polemica+de+fogwill+plata+quemada&hl=es&ct=clnk&cd=6&gl=ar
porque la editorial lo quería así.
Aunque no resuelva el enigma, sería bueno preguntarse cuáles son las
razones por las cuales se produjeron estas oscuras y fantasmales
sustituciones. La conclusión de Daneri implica el ejercicio simultáneo
del resentimiento literario y del anacronismo deliberado. Dice (y cito
del fallo) que la editorial se aseguraba así que mi novela “le diera
ganancias con las sucesivas ediciones, la realización de una película,
etc.”
No hace falta aclarar que en ese momento nadie sabía que tres años
después se iba a filmar una película basada en el libro. ¿O Daneri cree
que la filmación de una película es el resultado natural de un premio?
Y además, ¿quién, salvo Daneri, puede asegurar que toda novela que
gane el premio Planeta va a recibir sucesivas ediciones? Estas han sido
las razones y los argumentos por los que he sido acusado y
calumniado. Más allá de lo que yo pueda decir o explicar, el daño ya
está hecho y es irreparable.
Los premios literarios han sido siempre objeto de controversia y de
polémica. En un sentido, la literatura argentina empezó con el debate
sobre un premio. En el Certamen Literario que se realizó en
Montevideo en 1841 con motivo del aniversario de la revolución de
mayo, una obra de Juan María Gutiérrez se impuso sobre un texto de
José Mármol y esto desató de inmediato una gran controversia en la
que varios escritores (entre ellos Alberdi) se opusieron al fallo y hubo
debates y discusiones en los diarios. Desde entonces ha habido
disidencias y discrepancias por los concursos. Los resultados siempre
se pueden discutir, pero hay que ser muy arrogante para imaginar que
se comete un delito si una obra nuestra no obtiene el éxito que
esperamos.
En la literatura argentina las diferencias literarias las han dilucidado
siempre los escritores mismos. Todos esperamos que esa tradición
persista. ¿O vamos a empezar a llamar a la policía cada vez que
alguien no valore lo que escribimos? (fin del texto de Ricardo Piglia)
Comentario de Fogwill
Piglia es un gran escritor y un pésimo polemista. Es uno de los veinte
mejores escritores vivos de la Argentina: es decir, tiene esas
excepcionales condiciones poéticas y narrativas que se manifiestan en
apenas uno de cada dos millones de ciudadanos.
Pésimo polemista, elige siempre tan mal a su enemigo como a la
manera de enfrentarlo. Y no se resiste a aprender de la experiencia. A
cualquiera le hubiese bastado con el balance de su patética
intervención de hace más de diez años en Diario de Poesía para
corregir su estrategia equivocada. Pero él persevera en sus errores. Un
polemista debe, ante todo, borrar cualquier huella de mala fe y nunca
trasuntar que argumenta para un lector desprevenido, ignorante del
tema, o discapacitado para evaluarlo. Piglia acaba de ser condenado
por la justicia en un proceso que habría podido eludir diciendo la
06.01.09 12:39GARGANTA PROFUNDA: PIGLIA / PLANETA : EL ESCÁNDALO
Page 11 sur 18http://209.85.129.132/search?q=cache:x_zsxieZujkJ:gargantaprofun….html+polemica+de+fogwill+plata+quemada&hl=es&ct=clnk&cd=6&gl=ar
por la justicia en un proceso que habría podido eludir diciendo la
verdad y cargando las culpas en su agente, que fue quien lo involucró
en la causa. Pero entre la verdad y la fidelidad hacia quien maneja sus
intereses literarios, optó por esta última.
En su artículo publicado en Página/12 del 13 de marzo de 2005
manifiesta descreer en la justicia, y, en eso, coincidimos plenamente.
Pero en cambio, él simula creer en la justicia de las justas literarias.
Esto es curioso: él -como yo- carece de formación jurídica, pero tiene
un sólida formación literaria, no sólo en cuanto a los aspectos teóricos
y documentales del arte de escribir, sino también en lo que respecta al
conocimiento de los procederes de editores, jurados, comentaristas y
agentes en el campo de lo que es la política y los negocios que se
articulan en torno a la industria del libro. En ese artículo ataca al
denunciante y ganador del proceso judicial, como si ignorase cómo se
falla en estas instancias y como si el público ignorase que, los
testimonios y el fallo del tribunal corroboran, no ha juzgado el valor
literario de su obra y la de Nielsen, sino la defraudación a la buena fe
de lectores y participantes en que incurrieron los organizadores del
certamen.
El ataque es personal: identifica a Nielsen con el ridículo Carlos
Argentino Daneri, arquetipo del escritor naive y mediocre argentino.
Presenta a Nielsen como a "maniático dedicado a denunciarlo y
denigrarlo", a él, a Piglia.
En eso transparenta su mala fe: Piglia sabe que Nielsen es un brillante
arquitecto que se dedica a muchas cosas, y que ha escrito relatos, que,
calificados entre los mejores de nuestra literatura, podrían sustituir a
cualquiera de los suyos (¡y hasta de los míos!) en cualquier antología
de la lengua española. (Me refiero a Marvin, Playa Quemada.
Adentro y Afuera, y podría citar otros y, en otro contexto, efectuar
odiosas comparaciones que darían cuenta de lo que afirmo.)
Tal vez por recomendación de sus abogados, en su relato de "la trama
policial" del proceso publicado en Página/12 del 13 de marzo de 2005,
Piglia no nombra a Nielsen sustituyendo su nombre por el de Daneri.
Esto es como si nosotros, ahora, sustituyésemos el apellido Piglia por
"De La Rúa", que es otro que cada vez que rinde cuentas de sus actos
queda peor parado. Prefiero nombrar directamente a Piglia, y hago
notar a los lectores de este burdo descargo, que, junto al de Nielsen,
omite otro nombre. No sé qué pensarán mis abogados, pero yo lo
nombraré: en el jurado, junto a María Esther de Miguel, Augusto Roa
Bastos, Tomas Eloy Martínez y Mario Benedetti, que Piglia menciona,
figuraba como presidente Guillermo Schavelzon, funcionario de la
editorial auspiciante y agente literario del autor.
Este nombre, y no el del imaginario Carlos Argentino Daneri, debió ser
el eje de la rendición de cuentas de Piglia en Página/12. Su
participación es tan plausible, como lo prueba su despido de la
06.01.09 12:39GARGANTA PROFUNDA: PIGLIA / PLANETA : EL ESCÁNDALO
Page 12 sur 18http://209.85.129.132/search?q=cache:x_zsxieZujkJ:gargantaprofun….html+polemica+de+fogwill+plata+quemada&hl=es&ct=clnk&cd=6&gl=ar
participación es tan plausible, como lo prueba su despido de la
editorial ante la primer denuncia pública del fraude. Piglia lo oculta, y
en ese texto en que se burla de la justicia, simula creer en el valor de
los fallos de este tipo comitivas que sólo toman contacto con una breve
selección de finalistas, y deben debatir sus pareceres con un miembro
que, a la vez es gerente de la empresa que los remunera y se hace cargo
de sus viajes y viáticos.
Piglia falta a la verdad y apela al sentido común de los lectores.
Burlándose del juez y de la cámara que corroboró su fallo, escribe, por
ejemplo, "que la justicia haya perdido su tiempo en una ridícula
rencilla literaria es signo de los tiempos que corren", fingiendo que
pertenece a la clase de gente que cree que los tiempos que corren son
peores (¿y más corruptos, tal vez?) que los tiempos de nuestros
mayores. Con esto trata de convertir el acto de justicia, reparadora de
un fraude, en "una rencilla literaria", como si no supiera que la
indemnización a Nielsen es, a la vez que una reparación económica a
uno de los cientos de damnificados, un señalamiento sobre la
moralidad de su proceder.
Al respecto, me consta que no fueron Nielsen ni su abogado, quienes
involucraron a Piglia en esta demanda, sino el funcionario que ahora
es su agente. También me consta que en momento alguno Nielsen
obró por impulso de competitividad literaria, porque no es los de los
que creen que la justicia puede dirimir cuestiones estéticas. Nielsen
sabe bien que la obra del Piglia de "Plata Quemada" es mejor
elección que su "El amor enfermo" para alcanzar la lista de best sellers
y atraer al público de cine comercial, pero a la vez, respeta la obra del
otro Piglia tanto como ha de sentirse indignado ante el que ha escrito
esta falsa trama judicial, que tal vez sea el mismo que, a instancias de
su agente, se involucró en un proceso, que, aún después de concluido,
sigue damnificándolo.
A continuación Solicitada que se hizo circular sobre la figura
de Piglia.
ACUSADO DE SER RICARDO PIGLIA
Con cuarenta años de presencia en la literatura argentina, con la
producción de una obra cuya solidez no está en discusión, con una
decidida intervención en los debates cruciales de la cultura y una activa
presencia intelectual en tiempos difíciles de la historia argentina,
Ricardo Piglia es objeto de una campaña de difamación que empezó en
1997, cuando la decisión unánime de un jurado compuesto por los
escritores Mario Benedetti, Maria Esther de Miguel, Tomás Eloy
Martínez y Augusto Roa Bastos le otorgó el Premio Planeta a su novela
Plata Quemada.
06.01.09 12:39GARGANTA PROFUNDA: PIGLIA / PLANETA : EL ESCÁNDALO
Page 13 sur 18http://209.85.129.132/search?q=cache:x_zsxieZujkJ:gargantaprofun….html+polemica+de+fogwill+plata+quemada&hl=es&ct=clnk&cd=6&gl=ar
Porque el silencio favorece esta campaña que no merece, decimos que
la infundada acusación contra la probidad de Ricardo Piglia responde
a una sola causa: se lo acusa de ser quien es en nuestra literatura, en la
cultura nacional y en el plano internacional y académico.
Como ciudadanos, como colegas y como amigos, expresamos nuestra
solidaridad con Ricardo Piglia.
Carlos Altamirano, Cristina Banegas, Osvaldo Bayer, Arnaldo Calveyra,
Arturo Carrera
Tito Cossa, Washington Cucurto, León Ferrari, Aníbal Ford, Gerardo
Gandini, Germán García, Daniel García Helder, Norberto Gómez,
Horacio González, Flora Guzmán, Emilio de Ipola, Roberto Jacoby,
Leónidas Lamborghini, Daniel Link, José L. Mangieri Juan, Molina y
Vedia, Federico Monjeau, Luis Felipe Noé, Alan Pauls, Nicolás Peyceré,
Alfredo Prior, Roberto Raschella, Juan C. Romero, León Rozitchner,
Guillermo Saavedra Juan José Saer, José Sazbón, Daniel Samoilovich,
Horacio Tarcus, Osvaldo Tcherkaski, Vivi Tellas,
Héctor Tizón.
Comentario de Fogwill sobre la solicitada:
Hace días que circula la solicitada que transcribo. He sido convocado
para firmar, y lo he rechazado. Ahora me consta que entre los
firmantes, figuran personas que no están de acuerdo con lo que el
escrito manifiesta. Más adelante transcribo un mail que lo confirma,
enviado por uno de los que aparecen firmando. La solicitada llama
"campaña" a la difusión que en Pagina/12, Clarín, Nación, La voz del
Interior y El Mercurio dieron a la sentencia de la Cámara Civil. Esto no
fue una campaña sino una noticia de actualidad. También es inexacta
la solicitada cuando habla de la decisión unánime del jurado,
omitiendo el nombre de su presidente y agente literario de Piglia. Es
evidente que muchos han firmado de buena fe, movidos por su
amistad o por la admiración a Piglia. No advierten que lo que aquí está
en juego es la mala fe y, ellos mismos, han incurrido en la mala fe.
Rodolfo Enrique Fogwill
Cruce de mails de Fogwill y un Firmante:
Un firmante, escribe diciendo:
Quique, no pasó nada... Obviamente la gente está pirando mal con este
asunto. Sigo pensando lo mismo de siempre: Ricardo hizo un pacto
con el diablo y de ésa no se sale fácil.. Lo último que yo había hablado
06.01.09 12:39GARGANTA PROFUNDA: PIGLIA / PLANETA : EL ESCÁNDALO
Page 14 sur 18http://209.85.129.132/search?q=cache:x_zsxieZujkJ:gargantaprofun….html+polemica+de+fogwill+plata+quemada&hl=es&ct=clnk&cd=6&gl=ar
con el diablo y de ésa no se sale fácil.. Lo último que yo había hablado
era que la solicitada no se hacía, pero después apareció circulando, con
mi firma. ¿Qué iba a hacer? Decir que "yo no sabía nada" me parecía
una forrada. Si Piglia reacciona, puede salir algo bueno de todo. Si no
reacciona, al menos yo no voy a sentirme culpable de no haber
intentado ayudarlo.
Si leyó tu texto, debería estar pensando en esa dirección. Yo ya no me
acuerdo quiénes firmaron aquella solicitada en favor de los Premios
Municipales (estaba Sarlo, seguro, porque lo discutí con ella), pero eso
me pareció mucho más vergonzoso que decir que Piglia es el boludo
del asunto...Abrazo
Respuesta de Fogwill a “Firmante”:
Estimado "firmante"
Yo tendría que estar escribiendo y laburando, y a cada rato me
interpelan con novedades. ¿Qué es esto de los Premios Municipales y
la Sarlo? Al margen: es grave lo que decís. ¿Es cierto que la solicitada
circuló con tu firma sin tu autorización? La socilicitada miente, y vos
lo sabés tanto como que en ella figuran firmas que, tal vez agregadas
de buena voluntad, corresponden a personas embaucadas.
Atte:
Fogwill
RadarDomingo, 27 de Marzo de 2005
polemicas el caso plata quemada, segundo round
Ficción y realidad
A dos semanas de que Ricardo Piglia hiciera pública en Radar su
posición en el caso Plata quemada, ésta es la réplica del escritor
Gustavo Nielsen.
Por Gustavo Nielsen
Ficción y realidad son dos términos que todo el tiempo están
mezclándose, en la Argentina. Se mezclaron en los hechos sucedidos
durante la muestra de León Ferrari, donde unos manifestantes
rompieron una obra artística por entender que ofendía su espíritu
“católico”. Como si la obra de Ferrari fuera la verdad absoluta, algo
objetivo, un dogma inapelable. Y no solamente una ficción que lleva la
firma de un sujeto bastante particular: un artista. Se mezclaron en las
amenazas que recibí por mi novela Auschwitz, y en la sugerencia
tímida que un periodista de esta casa publicó en Radar del 6/3/05, por
la cual cualquier persona podría llegar a hacerme un juicio de resultar
06.01.09 12:39GARGANTA PROFUNDA: PIGLIA / PLANETA : EL ESCÁNDALO
Page 15 sur 18http://209.85.129.132/search?q=cache:x_zsxieZujkJ:gargantaprofun….html+polemica+de+fogwill+plata+quemada&hl=es&ct=clnk&cd=6&gl=ar
la cual cualquier persona podría llegar a hacerme un juicio de resultar
ofendido con las escenas “subidas de tono” de esta misma novela.
Ficción y realidad, realidad y ficción.
Acaba de volver a pasar. Piglia expuso “la lógica de los hechos” en
Radar del 13/3/05 y armó un ensayo literario para demostrarle al
público que se ha cometido una injusticia. ¿A qué lector ingenuo está
dirigida su nota? Los cargos de los que Piglia se sigue defendiendo
absurdamente ya están probados por la Justicia. Basta entrar en
Internet y bajarse el dictamen de la Cámara de Apelaciones, o las
declaraciones de los testigos, o cualquier asunto del expediente que se
quiera verificar. El caso no es un caso federal, ni un caso de familia;
esto es: no hay confidencialidad, y cualquiera lo puede consultar. Un
modo más fácil es ver la sentencia en el weblog de Daniel Link:
http://linkillodraftversion.blogspot.com/2005/03/caso-piglia.html
En su nota del domingo, Piglia dice que no había contrato previo por
Plata quemada, y en verdad hay uno de 1994 que él firmó con
Espasa Calpe por toda su obra existente (en carácter de reediciones),
más tres libros nuevos, entre los que figura una “novela nueva”. Por
eso no estaba escrita en el momento de la firma. Entre el ‘94 y el ‘97,
año del premio, la única “novela nueva” publicada fue la premiada por
Planeta, Plata quemada, por lo que la Cámara, en un fallo ejemplar,
lo condenó.
Piglia dice que yo culpo al jurado de notables, y jamás lo hice. Se
olvida, en su explicación, que uno de los miembros del jurado era
Guillermo Schavelzon, y al día de la entrega del premio era director
editorial de Planeta, y director del jurado de notables. Era, a su vez,
organizador y juez del concurso. Y era también quien le alcanzaba los
libros, a su antojo, al resto del jurado. Por esta misma situación, la
señora María Esther de Miguel, el único miembro del jurado que
declaró en el juicio, dijo que mi libro El amor enfermo, finalista con el
de Piglia y otros ocho libros, jamás llegó a sus manos. Un par de
semanas después del escándalo del Premio Planeta 1997, Schavelzon
renunciaba a la editorial para pasar a ser agente literario de Ricardo
Piglia.
Piglia aclara que su libro no estaba contratado con otra editorial, sino
con Planeta. Caramba, esto es peor de lo que habíamos imaginado con
mi abogado. Que Piglia suponga que es correcto presentarse a un
concurso abierto con un libro que ya ha sido contratado, por el que ya
se le ha abonado un suculento adelanto y que está a punto de salir a la
calle bajo el sello editorial que organiza el certamen, parece un
disparate. Si así fuera, Piglia, Schavelzon y Planeta habrían usado a
260 participantes para que de nuestros propios bolsillos y a costa de
nuestras propias ilusiones paguemos la promoción de Plata
quemada. ¿Era un concurso o una operación publicitaria?
Piglia y los otros han defraudado con su accionar a cientos de
participantes. Entre esos participantes no debe haber muchos
escritores famosos, de los que tienen agentes literarios, cobran
anticipos de cien mil dólares y les publican la foto en las revistas. Es
06.01.09 12:39GARGANTA PROFUNDA: PIGLIA / PLANETA : EL ESCÁNDALO
Page 16 sur 18http://209.85.129.132/search?q=cache:x_zsxieZujkJ:gargantaprofun….html+polemica+de+fogwill+plata+quemada&hl=es&ct=clnk&cd=6&gl=ar
anticipos de cien mil dólares y les publican la foto en las revistas. Es
probable que en este mismo instante, la editorial Planeta o la agencia
Schavelzon estén organizando (solapadamente) la publicación de una
solicitada, utilizando la imagen del “escritor dañado”. Y es probable
que otros escritores de laeditorial o de la agencia firmen. En este
camino de ocho años de juicio me he encontrado con que algunos
escritores venden hasta sus almas por estar cobijados bajo el ala de las
multinacionales. Saludo a aquellos que no lo hacen.
Tampoco ésta es una “rencilla literaria”, como Piglia la está queriendo
disfrazar en su nota. Es un tema estrictamente contractual, de
“respetar los pactos”, por el que planteé una demanda en el fuero civil,
basada en las normas del Código Civil escrito por Vélez Sarsfield. No
hubo denuncia, tampoco querella, no es un caso policial. La Cámara
Nacional de Apelaciones en lo Civil (sala G) sostuvo, en su dictamen,
que no se habían respetado las bases del concurso, se burló la buena fe
y el certamen estuvo viciado por falta de transparencia. Además, si por
hacer este juicio le hice perder el tiempo a la Justicia, como dice Piglia,
¿por qué ahora ellos recurren a la Corte Suprema? ¿O es que el tiempo
de la Corte Suprema de Justicia no tiene ninguna importancia?
Piglia es partidario, en su nota, de que las peleas entre escritores se
resuelvan entre escritores. Es lo primero que quise hacer. Por eso lo
llamé varias veces a su casa y jamás me atendió. Por si esa voluntad no
existiera, la Justicia prevé una mediación obligatoria, que se hizo, y a
la que Piglia faltó sin avisar.
No tengo nada contra Piglia, ni discuto su calidad literaria. Pero
respeto mucho los concursos. He ganado algunos, he perdido decenas.
Y ésta fue la única vez que protesté. Es el único juicio que hice en mi
vida, y tal vez el único que haga. “Maniático”, como me llama Piglia,
puedo ser. Pero un maniático real, verdadero, no de ficción. Un
“Maniático Textual”.
El daño puede que sea irreparable para Piglia, a esta altura de los
acontecimientos, como sale a aclararlo en Radar. Pero se lo ha
infligido él mismo, asociándose con Schavelzon y Planeta para
organizar una maniobra viciosa. Lamentablemente, Piglia se ha
expuesto como el “escudo humano” de su agente en Barcelona, y la
nota de Radar lo muestra atorado en las mismas mentiras de antes de
llegar al juicio. Bastaba, simplemente, con una disculpa pública, y a
volver a escribir.
Con respecto a la comparación ofensiva que Piglia hace de los
acontecimientos reales con el cuento “El Aleph”, de Borges, lo voy a
tomar como una confusión más entre aquello que es ficción y aquello
que no. Y, para cerrar mi réplica, cito un párrafo humorístico de
Wimbledon, el weblog del escritor Guillermo Piro
(www.ultimasdebabel.blogspot.com), que en su edición del día
16/3/05 comenta: “Si Daneri es Nielsen, Piglia es Borges. Hasta ahí
vamos bastante bien. Pero entonces: ¿el missing Willy Schavelzon
sería Beatriz Viterbo?”.
06.01.09 12:39GARGANTA PROFUNDA: PIGLIA / PLANETA : EL ESCÁNDALO
Page 17 sur 18http://209.85.129.132/search?q=cache:x_zsxieZujkJ:gargantaprofun….html+polemica+de+fogwill+plata+quemada&hl=es&ct=clnk&cd=6&gl=ar
(Este informe lo presentamos a raíz de que la editorial
Planeta ha decidido abrir una sede aquí en el Perú, pero
independientemente de la editorial que fuere, ya estamos
avisados de los manejos fraudulentos que las editoriales
pueden incurrir, manipulando prestigios arteramente,
cuando se trata de ver acrecentados sus intereses y su poder.
Ojala, si fuera el caso que convocaran un premio de
literatura local, no recurran a este tipo de manipulaciones
que nos hagan ver, con sorpresa, la proliferación de
nombres, igualmente deseosos de poder, que ya todos
conocemos. )
POSTED BY DINTILAKO AT 1:07 PM
5 C O M M E N T S :
Anonymous said...
Al parecer al informe le faltan algunas partes, pero me parece que lo
sustantivo está. Es impresionante la carta de Piglia a Pagina12, nunca
un escritor fue tan desafortunado defendiendose. Acabo de leerla y no
pude evitar escribir algo.
3:13 PM
un argentino said...
Me parece que todo esto no debería afectar la visión que se tiene del
trabajo literario del Sr Piglia, quien es reconocido por todos como uno
de los más importantes escritores latinoamericanos del momento.
Basta con leer sus celebres libros, incluso esta misma novela "plata
quemada", motivo de la nota. Así que solo espero que Piglia siga
escribiendo y nos siga deleitando con lo que mejor sabe hacer.
3:20 PM
otro argentino said...
Creo que nadie duda de las particulares cualidades de Piglia, pero de
ahí a olvidar que el se coludió descaradamente con su editor para
hacerse de un premio fraudulentamente, sin ninguna consideración
por los otros escritores participantes como él de un concurso, donde
muchos jovenes escritores ponen legitimamente sus expectativas, me
parece que no tiene nombre. Piglia después de esto no puede seguir
siendo el mismo.
3:49 PM
Anonymous said...
PAOLO DE LIMA REPUDIA A LOS BLOGS ALTERNATIVOS, LOS
LLAMA "BASURA":
06.01.09 12:39GARGANTA PROFUNDA: PIGLIA / PLANETA : EL ESCÁNDALO
Page 18 sur 18http://209.85.129.132/search?q=cache:x_zsxieZujkJ:gargantaprofun….html+polemica+de+fogwill+plata+quemada&hl=es&ct=clnk&cd=6&gl=ar
"El último domingo apareció un blog-basura que lleva un título similar
al que leen en estos momentos y en el que, con titulares
sensacionalistas que recuerdan los peores tiempos de la prensa
peruana fujimontesinista, se insulta y pretende denigrar a diferentes
personas. Curiosamente, el único que prácticamente aparece
específicamente bien considerado resulto siendo yo."
12:29 PM
Anonymous said...
Al parecer a Piglia todo este asunto ya no le interesa, recientemente ha
sido premiado en Chile con el premio Donoso y parece que ya olvido
todo. Pero lo que si dudo es que en la Argentina, muchos quieran
olvidar tamaño incidente, una tradición tan prolífica como la de ese
país no puede permitirse pasar por agua tibia algo semejante.
2:09 PM
POST A COMMENT
<< Home
Recommended