REVISTA DIFUSIÓN
BIOÉTICA
COLEGIO DE BIOÉTICA
UNIVERSIDAD VIRTUAL ATENEA DE MÉXICO-FAAC
Año 5, Número 14, Volumen 5, Marzo 2021
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REVISTA DIFUSIÓN BIOÉTICA
ES UNA PUBLICACIÓN DEL COLEGIO DE BIOÉTICA DE LA UNIVERSIDAD
VIRTUAL ATENEA DE MÉXICO-FAAC
Compiladores de los artículos Célida Godina Herrera Jesús Rodolfo Santander
Ilustración de portada:
https://pixabay.com/es/illustrations/cicl%C3%B3n-
destrucci%C3%B3n-destructivas-2115648/
DATOS DE LA UVAM-FAAC
Sección d núm.16 Col. Unidad Guadalupe, C. P. 72560
Puebla, Puebla, México.
CORREO: [email protected]
PAGINA WEB: www.fundacionateneaonline.com.mx
TEL. 222 960.38.97
PUBLICADO BAJO LA LICENCIA DE PRODUCCIÓN DE PARES
ATRIBUCIÓN · COMPARTIR BAJO LA MISMA LICENCIA · NO CAPITALISTA
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ÍNDICE PRESENTACIÓN 5
ARTÍCULOS SOBRE LO QUE ACONTECE EN EL MUNDO
FUENTES: SOKOLOVELAW.COM / CÓMO LAS CORPORACIONES COMPRAN «CIENCIA» PARA CONFUNDIR AL PÚBLICO ESTADOUNIDENSE 8
SILVIA RIBEIRO / TAPAR EL SOL CON EL DEDO 18
AGUSTÍN MORENO / EL DERECHO HUMANO AL AGUA,
AMENAZADO 22
HOMAR GARCÉS / RÍOS EN SUBASTA 27
SABINE GERMAIN / ¿SON LAS MUJERES LAS GRANDES PERDEDORAS DE LA PANDEMIA? 31
ANTONIO GÓMEZ MOVELLÁN / RESIDENCIAS DE ANCIANOS: IGLESIA Y FONDOS BUITRES EN UN NEGOCIO DE RAPIÑA 36
JOSÉ NICOLÁS MEDINA FUENTES / TERAPIAS O TORTURAS DE CONVERSIÓN 40
SILVIA RIBEIRO / TRASNACIONALES FARMACÉUTICAS ASEGURAN
ESCASEZ DE VACUNAS 46
ARTÍCULOS SOBRE LO QUE ACONTECE ESPECIALMENTE EN NUESTRA AMÉRICA
RUBÉN RAMOS ALIZOROJO / PFIZER PIDE GARANTÍAS PARA MATAR CON SU VACUNA 51
CÉSAR MANZANOS BILBAO / VIOLENCIA FARMACOLÓGICA 54 CECILIA ZAMUDIO / 8M: POR UN FEMINISMO REVOLUCIONARIO,
QUE NO ES FOTO DE PORTADA SINO LUCHA CONTRA TODA EXPLOTACIÓN 58
DECÁLOGO ECOFEMINISTA PARA SALIR DE LA PANDEMIA 64
ARTÍCULOS SOBRE LO QUE ACONTECE ESPECIALMENTE EN MÉXICO
EMILIO GODOY / UN VIEJO CONOCIDO ACECHA A COMUNIDADES MEXICANAS 72
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SIMÓN VARGAS AGUILAR / SE ACERCAN LAS GUERRAS POR AGUA 80
ELVIRA LLACA GARCÍA Y LUZ ADRIANA TEMPLOS ESTEBAN / LA PANDEMIA DE COVID-19 EN MÉXICO: EL PAPEL FUNDAMENTAL DE LOS CUIDADOS PALIATIVOS Y DE LA BIOÉTICA 84
ADRIÁN GERARDO RODRÍGUEZ / LA LUCHA POR LA EDUCACIÓN SUPERIOR GRATUITA EN MÉXICO RECIÉN COMIENZA 106
FRENTE NACIONAL DE LUCHA POR EL SOCIALISMO / CRÍTICA AL ACADEMICISMO 113
CRISTÓBAL LEÓN CAMPOS / VIOLENCIA MACHISTA-POLICIAL EN QUINTANA ROO 119
MISCELANEA CULTURAL
ENTREVISTAS
ALEXIS RODRÍGUEZ-RATA / ENTREVISTA A NICHOLAS A. CHRISTAKIS 123
XAVI AYÉN / NUCCIO ORDINE: “EL CORONAVIRUS NOS MUESTRA QUE LAS PERSONAS NO SON ISLAS” 133
JAIME VINDEL|ALEJANDRO PEDREGAL / ENTREVISTA A ANDREAS MALM: LUCHA DE CLASES Y TRANSICIÓN ECOSOCIAL 141
JAVIER CORTINES / LA POSITIVIDAD TÓXICA 156 ANÓNIMO / MENSAJE A TODOS LOS BOBOS ECOLOS QUE NOS
QUIEREN HACER LA MORAL... 160
RESEÑAS
DANI MUNDO: "EL LIBRO DEL TÉ" Y POR QUÉ NO SOMOS
SABIOS 166
KARLA CASTILLO VILLAPUDUA: QUENTIN MEILLASSOUX, DESPUÉS DE LA FINITUD. ENSAYO SOBRE LA NECESIDAD DE LA CONTINGENCIA 172
POEMA
GABRIELA MISTRAL “MEJOR BUSQUE ENTRE LOS POBRES” 179
DOSSIER
ONTOLOGÍA ORIENTADA A LOS OBJETOS (OOO) 182
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Presentación
Las lecturas que deseamos compartir en este número doble son artículos que hemos
seleccionado sobre cosas que pasan en el mundo y que nos interpelan. Son velas y
espejos, luz que nos ayuda a comprender lo que acontece en nuestro entorno
cercano y más allá de él. No queremos dejar pasar estas publicaciones sin
destacarlas, por el valor que tienen para aclarar lo que sucede en el torbellino del
mundo actual.
Los compiladores
“El pensar es la acción del filósofo”.
“Las situaciones concretas de la vida deberían ser el punto de partida de toda
filosofía, y su punto de retorno”.
Jesús Rodolfo Santander
«Para aquel que roba, o pide prestado un libro y a su dueño no lo devuelve, que se
le mude en sierpe en la mano y lo desgarre. Que quede paralizado y condenados
todos sus miembros. Que desfallezca de dolor, suplicando a gritos misericordia, y
que nada alivie sus sufrimientos hasta que perezca. Que los gusanos de los libros le
roan las entrañas como lo hace el remordimiento que nunca cesa. Y que cuando,
finalmente, descienda al castigo eterno, que las llamas del infierno lo consuman para
siempre».
Palabras inscritas en la biblioteca del monasterio de San Pedro de las
Puellas de Barcelona, que encuentro citadas en Una historia de la lectura,
de Alberto Manguel.
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“La filosofía, desde sus orígenes, es algo que no puede funcionar como obediencia
al poder. Apoyar el orden, no criticar lo existente, es una negación de la filosofía.”.
“La filosofía existe porque hay crisis, guerras, revoluciones y catástrofes. La filosofía
existe siempre en condiciones más o menos dramáticas. Trata, precisamente, de
pensar el drama, el horror, al mismo tiempo que la paz y la alegría. La filosofía no
tiene límites. Su único tema es la verdad, y ese tema no admite límite alguno”.
Alain Badiou (1935) Filósofo francés.
“Es cierto que pasó el momento de los grandes pensadores, ya no los hay. Y que
llegó la época en la que la prensa y la publicidad son más importantes que las
publicaciones. Los pensadores se volvieron investigadores full time con una agenda
sobrecargada de exigencias que piensan sus conceptos entre aeropuerto y
aeropuerto. Sin embargo, es en los libros de esta gente donde encontramos
gérmenes para pensar lo que vendrá, y dentro de cuya atmósfera ya vivimos”.
“Entre el smartphone y nosotros se entabla una relación que se parece menos a la
que entabla el yo-pienso con la mano, que la que entabla la mano del ciego con el
bastón que utiliza para orientarse por el mundo, y que tan bien analizó el querido
Maurice Merleau-Ponty. Llega un instante, dice Merleau, que entre la mano y el puño
del bastón hay un acoplamiento, se vuelven una unidad y ya no pueden diferenciarse
como dos entes distintos. Con el Smartphone sucede lo mismo”.
Daniel Mundo. Crítico de la cultura, filósofo argentino.
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ARTÍCULOS SOBRE LO
QUE ACONTECE EN EL
MUNDO
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CÓMO LAS CORPORACIONES COMPRAN «CIENCIA» PARA CONFUNDIR AL PÚBLICO ESTADOUNIDENSE
Fuentes: sokolovelaw.com
Traductor: Francisco Báez Baquet ([email protected].)
Cuando los profesionales médicos y los investigadores científicos
publican en una revista o prestan su nombre para respaldar una teoría
basada en la ciencia, normalmente no pensaríamos dos veces en sus
intenciones.
Después de todo, es probable que hayan entrado en su campo para
marcar la diferencia, hayan soportado años de educación y a estas
alturas, sin duda alguna, tengan la experiencia y el conocimiento para
respaldar sus hallazgos.
Si bien la mayoría de los científicos tienden a ser honestos, hay un lado
más oscuro en el mundo de la investigación científica, uno en el que las
corporaciones compran “ciencia” para tergiversar la verdad y apoyar sus
despreciables agendas.
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El dinero habla y tiene una manera de convencer a los profesionales
médicos y científicos para que impulsen «hechos» que no sirven para el
bien común y todo para respaldar a las empresas con brújula moral rota.
Cómo los científicos se convierten en expertos en la
manipulación de la ciencia
Antes de la Segunda Guerra Mundial el mundo de la ciencia era
relativamente pequeño, había aproximadamente 200.000 científicos
estadounidenses y alrededor de 70 millones de dólares en dinero
federal, en 1940.
En la actualidad, a medida que el número de científicos se ha disparado
a millones y la cantidad de dinero disponible ha aumentado a miles de
millones, uno pensaría que hay fondos suficientes para todos, pero ese,
simplemente, no es el caso.
La Universidad de Boston publicó una serie, de cuatro partes, que analiza
la investigación financiada por el Gobierno y quién paga la factura.
Declaran inequívocamente que «los recortes en los fondos federales
para la investigación, amenazan con desacelerar el ritmo del progreso
científico».
Un artículo, de NPR, describe los auges y caídas de la financiación en lo
que respecta a la ciencia en los EE.UU. y atribuye gran parte de ella a
los Institutos Nacionales de Salud (NIH).
El presupuesto de los NIH aumentó de manera constante entre 1998 y
2003, pero luego disminuyó en más del 20 por ciento en 2004.
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Hubo un aumento en 2009 y 2010 de los fondos de estímulo y luego las
cosas volvieron a ir cuesta abajo.
Los científicos dependen de este dinero para administrar sus laboratorios
y sin él los proyectos colapsan y la gente pierde sus trabajos.
«Las únicas personas que pueden sobrevivir en este entorno son las
personas que sienten una pasión absoluta por lo que están haciendo y
que tienen la confianza en sí mismas y en la competitividad para volver,
una y otra vez, y solicitar fondos constantemente», dijo Robert
Waterland, un profesor asociado en el «Baylor College of Medicine».
Aprovechando el conocimiento de que muchos científicos carecen de
fondos, las corporaciones, con el tiempo, han podido abrirse camino en
asociaciones basadas en la deshonestidad y el engaño.
Los científicos obtienen dinero en efectivo para su trabajo (o
simplemente en sus cuentas bancarias personales) y las empresas
pueden promocionar públicamente el respaldo científico detrás de sus
afirmaciones.
Parece mucho para todos los involucrados, pero para el resto del mundo
quita credibilidad a los hallazgos científicos reales y obliga al público a
cuestionar todas las estadísticas, informes o descubrimientos que
encuentran.
Mentiras científicas contadas en nombre de las ganancias
corporativas y de la codicia
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Los extremos a lo que algunas empresas llegan para ganar dinero,
pueden sorprender a algunas personas. Otras, sin embargo, han estado
oyendo sobre estos incidentes durante años.
Durante el año que trabajó para The New Yorker, en 1993, el respetado
periodista británico Alexander Chancellor escribió un artículo con el
subtítulo: “Detrás de cada investigación médica, aparentemente inútil,
se esconde algún interés comercial creado”.
Cuestionó la investigación publicada esa semana en el Journal of the
American Medical Association, que parecía confirmar la afirmación de
que los hombres menores de 55 años que sufren de calvicie de coronilla
corren un riesgo inusualmente alto de enfermedad cardíaca.
El Journal pretendía que cuanto más calvo se era mayor era el riesgo, e
incluso publicó una tabla de 24 dibujos numerados para mostrar
diferentes tipos de pérdida del cabello.
Chancellor se preguntó que qué haría que alguien quisiera embarcarse
«en una investigación tan extraña y aparentemente inútil».
Encontró su respuesta no en quien realizó la investigación (la Escuela
de Salud Pública de la Universidad de Boston), sino en quién la pagó:
«The Upjohn Company», de Kalamazoo, Michigan.
El nombre de la empresa, «Upjohn» puede no ser reconocible de
inmediato, pero «Rogaine», el producto que venden, sí lo es.
«Rogaine», el producto fabricado, es la marca de un estimulante del
crecimiento del cabello llamado «minoxidil».
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«Por debajo del radar» «Upjohn Company» ha obtenido 3.700 millones
de dólares en ventas anuales
New York Times escribió, que ««Upjohn» estaba preocupada por la
posibilidad de informes de efectos adversos, como los ataques cardíacos,
entre los usuarios del «minoxidil» y luego determinar si tales problemas
cardíacos reflejaban el uso del medicamento o un factor de riesgo
general».
Sin embargo este problema no se limita solo a las empresas que intentan
vender estimulantes del crecimiento del cabello.
La corrupción en la ciencia se ha filtrado a algunos de los problemas más
importantes de nuestro tiempo: el calentamiento global, el tabaco
y el asbesto.
Las empresas que ganan dinero con sustancias peligrosas hacen todo lo
posible para gestionar la mala publicidad y crear giros de relaciones
públicas que tienen como objetivo cambiar la conversación o al menos
crear dudas en la mente del público.
En la película Mercaderes de la Duda, basada en el libro del mismo
nombre, se nos ofrece una mirada a la realidad de los expertos pagados
por empresas y aprendemos por qué el público está tan abierto a creer
en ellos.
“Vemos que este [movimiento de la duda] surge del tabaco. Durante
50 años la gente pudo crear dudas donde no la había”, dijo Robert
Kenner, director de la película. «Fueron un tanto magistrales en eso».
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Kenner habló con Peter Sparber, quien fue vicepresidente del «Instituto
del Tabaco» en la década de los años 1980.
Sparber se enorgullecía de su capacidad para crear dudas, citando la
«investigación» realizada por científicos que habían sido contratados.
Se cita a Sparber:
“Ayudó a ralentizar la legislación con un cigarrillo de combustión lenta.
Pudo convencer a la gente de que no eran los cigarrillos los que
provocaban incendios en las casas sino los sofás.
Pudo hacer una ley que requiere que se coloquen productos químicos
en estos sofás. Resultó que no previó los incendios y también que
causaron cáncer».
Kenner también culpa a los medios de comunicación de proporcionar
una plataforma para que los científicos pagados creen dudas y retrasen
el cambio.
Muchos medios de comunicación y programas de entrevistas permiten a
los expertos compartir sus opiniones, lo que confunde al público y crea
escepticismo.
Víctimas del mesotelioma atacadas por «batas blancas
alquiladas»
En «Science for Sale» (Ciencia en venta), una serie de investigación
reciente, de cuatro partes, publicada conjuntamente por «VICE News»
y el «Center for Public Integrity», se nos brinda una mirada más cercana
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a la creciente influencia de la investigación respaldada por la industria,
especialmente cuando se trata de asbesto y mesotelioma.
El mesotelioma es una forma rara de cáncer causado
directamente por la exposición al amianto.
La primera parte de la serie, «Conozca a los “batas blancas alquiladas”
que defienden los productos químicos tóxicos”, ofrece una visión interna
de la mentalidad de las personas y empresas que intentan pactar ciencia
comprada.
Evan Nelson, un abogado defensor corporativo de las compañías
del asbesto, ideó una teoría científica que podría usar para ganar las
demandas por amianto.
Estaba frustrado con el argumento de que el asbesto es la única causa
conocida del mesotelioma, por lo que miró algunas revistas científicas y
decidió que el tabaco también podría ser una causa.
Nelson envió un correo electrónico a Peter Valberg, un exprofesor de la
Escuela de Salud Pública de Harvard y director actual de la empresa
consultora ambiental «Gradient Corporation», y le dijo que quería
colaborar con él para publicar «varios artículos clave y revolucionarios»,
que vinculan las partículas radiactivas en el humo del cigarrillo para
evidenciar que las personas expuestas a la radiación tenían tasas más
altas de mesotelioma.
El artículo, sin embargo, señala un problema obvio con el susodicho
«científico» de Nelson:
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«Los investigadores durante décadas han analizado exhaustivamente los
datos sobre la salud de cientos de miles de fumadores.
Desde 1964 el Cirujano General de EE.UU. ha resumido los hallazgos de
un estudio tras otro, ninguno de los cuales muestra evidencia de que el
tabaco cause mesotelioma».
Sin embargo ese hecho no detuvo a Nelson y Valberg.
En cambio Valberg dijo que encontraba la teoría de Nelson «muy
intrigante» y que estaba dispuesto a compartirla en revistas revisadas
por pares.
Aceptó escribir el primero de tres artículos, ofreciendo a Nelson un
descuento del 10 por ciento, y también dijo que adoptaría la teoría de
Nelson como testigo experto en juicios contra víctimas del mesotelioma.
La deshonestidad de Nelson finalmente se descubrió y perdió su
trabajo.
Hoy en día incluso se reconoce que la ciencia utilizada en las demandas
por asbesto puede no ser confiable.
«De alguna manera me alegro de haber salido del litigio del asbesto,
porque creo que hay mucha corrupción en él», dijo Nelson.
«He escuchado a otros abogados decir a los expertos ‘Esta es la opinión
que me gustaría que tuvieras'».
16
El sufrimiento de las víctimas del mesotelioma se debe al hecho de que
las corporaciones conocían los peligros del asbesto hace décadas pero
ocultaron la información al público en general.
Es imperdonable que, incluso ahora, trabajen tan duro para crear dudas
y retrasar la indemnización de las víctimas comprando «ciencia» para
satisfacer sus necesidades.
La compra de ciencia debe detenerse
En 2015 el «Pew Research Center» compartió los resultados de una
encuesta que encontró que el 79% de los adultos dicen que la ciencia
ha facilitado la vida a la mayoría de las personas y que la mayoría es
positiva sobre el impacto de la ciencia en la calidad de la atención
médica, los alimentos y el medio ambiente.
Sin embargo también mostró que muchas personas están dando un paso
adelante para cuestionar la ciencia, especialmente con ciertos temas
candentes como los OGM (organismos genéticamente modificados) y el
cambio climático.
Debemos continuar con ese cuestionamiento mientras también
aprendemos a detectar hallazgos científicos incompletos respaldados
por patrocinadores corporativos.
Al denunciar estas tácticas deshonestas estamos diciendo a las
corporaciones y a los científicos contratados que sabemos lo que están
haciendo y que no está bien.
Fuente: https://www.sokolovelaw.com/blog/corporations-buy-science-
16051/
17
Fuente: https://rebelion.org/como-las-corporaciones-compran-ciencia-para-
confundir-al-publico-estadounidense/
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TAPAR EL SOL CON EL DEDO
SILVIA RIBEIRO*
En uno de los confines del mundo, alrededor del círculo polar ártico, se
está llevando a cabo una lucha que nos afecta a todos. Pueblos
indígenas de la región y organizaciones ambientalistas suecas e
internacionales se oponen enérgicamente a un experimento para
avanzar la geoingeniería solar, una propuesta tecnológica de alto riesgo.
A gran escala, tapar parte de los rayos del sol con nubes artificiales
podría causar sequías y otras alteraciones en los trópicos, poniendo en
riesgo las fuentes de agua y alimentación de miles de millones de
personas. Un proyecto de la Universidad de Harvard, financiado por Bill
Gates y otros billonarios, pretende usar el territorio del pueblo indígena
Saami en Kiruna, Suecia, para realizar un experimento de esta tecnología
(https://tinyurl.com/y5ut32y4).
El 24 de febrero, el Consejo Saami, que reúne a los pueblos saami de
Suecia, Noruega, Finlandia y Rusia, manifestó su oposición a dicho
proyecto y exigió al gobierno sueco cancelar el experimento
* Investigadora del Grupo ETC
19
(https://tinyurl.com/f4ektwdj) por falta de consulta previa y
consentimiento de sus pueblos. También porque el experimento es para
desarrollar una tecnología muy peligrosa que afectaría a todo el planeta,
por lo que señalan que no es papel de un grupo de Harvard o algunos
gobiernos decidir sobre ella.
Aunque la geoingeniería todavía aparece para mucha gente como
ciencia ficción, el juego geopolítico y las implicaciones del desarrollo de
la tecnología son una amenaza muy real y que avanza rápidamente.
En ese camino, la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos,
acaba de mover otra pieza en el escenario global. El 25 de marzo publicó
el informe Reflecting Sunlight (Reflejar la luz solar) donde recomienda
que el gobierno de ese país debe asignar inmediatamente 100 a 200
millones de dólares para avanzar en la investigación y experimentación
con geoingeniería solar y cómo se debe gobernar
(https://tinyurl.com/yut5patf). Esa inversión multiplica de cinco a 20
veces la financiación pública para investigación en geoingeniería de
gobiernos como la Unión Europea, China, Rusia y Corea. No obstante,
la mayor inversión en el desarrollo de geoingeniería es de los
supermillonarios, encabezados por Bill Gates, Jeff Bezos, Elon Musk y
otros titanes tecnológicos (https://tinyurl.com/32d38zyx).
Según Raymond Pierrehumbert, profesor de la Universidad de Oxford
y autor principal de reportes globales del IPCC, el nuevo informe no
aporta mayor información científica a la que ya existía en otro anterior
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sobre geoingeniería, publicado por la Academia en 2015. Claramente, el
mensaje principal ahora no es científico, sino político.
Se trata de un intento de legitimar la experimentación a campo
abierto de esta riesgosa tecnología, tal como el que pretenden hacer en
territorio saami y desde antes en otros territorios indígenas desde
Arizona y Alaska a Canadá y Australia. Al mismo tiempo, asegurar que
Estados Unidos (gobierno, empresas, academia) lidere tanto las
inversiones en geoingeniería, como la definición de quién decide sobre
ella. Que haya subsidos públicos es también una forma de blanquear el
dinero que invierten los billonarios, haciéndolo parecer pertinente.
El informe de la Academia reconoce que la geoingeniería solar es
altamente peligrosa e injusta, ya que conlleva impactos desiguales:
mientras algunos países se beneficiarían con la disminución de los picos
de temperatura, otros sufrirán sequías y más desequilibrios climáticos.
Por sus altos riesgos, el Convenio de Diversidad Biológica de Naciones
Unidas (CDB), estableció en 2010 una moratoria al despliegue de la
tecnología y un llamado a extrema precaución y a cumplir con una serie
de condiciones previas –como un mecanismo multilateral de gobierno y
consulta previa a pueblos indígenas y comunidades locales– consulta
que aplica también a los experimentos a pequeña escala.
Para evadir esta y otras decisiones de Naciones Unidas –Estados
Unidos no es parte del CDB, pero la geoingeniería tiene alcance global–
, el informe pretende colocar otras reglas de juego: que se establezcan
sistemas de gobierno a la investigación y experimentación, por iniciativa
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de Estados Unidos, pero que serían internacionales invitando a otros
países (a su antojo) a discutir, para lograr una decorativa muestra de
diferentes regiones. Incluyendo también a los actores privados que
tienen intereses en geoingeniería.
Esta propuesta es un intento de sabotaje a las decisiones
multilaterales y por consenso de todos los países, que es como funciona,
por ejemplo, el CBD. En el caso de la geoingeniería la decisión por
consenso de todos es un requerimiento mínimo, ya que necesariamente
habrá países que serían afectados negativamente.
Åsa Larsson Blind, del Consejo Saami en Suecia, manifestó: La
geoingeniería solar se opone totalmente a la cosmovisión del pueblo
saami y va contra de lo que tenemos que hacer: transformar el planeta
a sociedades sin emisiones de carbono y en armonía con la naturaleza.
Este informe [de la Academia de EU] plantea avanzar una tecnología
que conlleva peligros existenciales, con el falso argumento de que sería
un plan B para el cambio climático. Si los gobiernos no son capaces de
manejar la crisis climática con soluciones reales ahora, menos aún
podrán manejar los enormes riesgos e injusticias de la geoingeniería.
Importante apoyar esta lucha que nos concierne a todas y todos.
Fuente: https://www.jornada.com.mx/2021/03/27/opinion/021a1eco
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EL DERECHO HUMANO AL AGUA, AMENAZADO
AGUSTÍN MORENO
Imagen de archivo./ Pixabay
"El 22 de marzo es el Día Mundial del Agua declarado por
Naciones Unidas. Este año se dedica al 'valor del agua'"
"Hay que recordar que el agua y el saneamiento son
derechos humanos para la ONU desde 2010. Para
garantizarlos, en Madrid hay una campaña en marcha"
"Hace tiempo que el agua está el punto de mira de las
políticas neoliberales. Directivos de grandes
multinacionales expresan con brutalidad que el agua no es
un derecho humano y que debería privatizarse"
El 22 de marzo es el Día Mundial del Agua declarado por Naciones
Unidas. Este año se dedica al “valor del agua” y la
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campaña #Water2me busca dar a conocer su importancia vital y la
necesidad de aportar soluciones para protegerla y conservarla. Porque
hay dos grandes amenazas sobre el agua: el cambio climático y la
ofensiva privatizadora.
No hace falta que veamos a la Estatua de la Libertad semienterrada en
la arena de una playa para saber que el mundo en el que vivíamos se
ha terminado. El cambio climático avanza galopante y golpea al
agua, un bien esencial siempre, y más aún en tiempos de pandemias.
La actual crisis sanitaria del coronavirus pone de manifiesto que la salud
pública depende también de la higiene y del acceso al agua potable y al
saneamiento.
La comunidad científica internacional lo viene advirtiendo: el proceso de
calentamiento y de cambio climático tiene importantes repercusiones en
el ciclo del agua. Se expresa a través de fenómenos meteorológicos
extremos: grandes sequías e inundaciones, olas de calor y terribles
incendios, inmensas nevadas, deshielo acelerado, etc. Si se hace un
repaso de situaciones catastróficas recientes, vemos que las cosas van
demasiado deprisa. Megaincendios en California y en Australia,
con temperaturas por encima de los 50ºC. En la Antártida se han
alcanzado temperaturas de 20ºC, cuando debería de estar bajo cero. La
insólita gran nevada en Texas ha dejado al descubierto la falta de
preparación de EEUU para hacer frente a estas situaciones. En nuestro
país, sucesivas borrascas y DANAS vienen destrozando importantes
24
zonas del litoral levantino, llevándose playas, paseos marítimos y
construcciones. La lista de desastres es demasiado larga.
La radicalización de estos fenómenos reduce la disponibilidad de agua.
Las altas temperaturas producen una mayor evaporación, la reducción
de la pluviosidad y sequías prolongadas, que refuerzan la tendencia a la
desaparición de lagos y masas de agua; las lluvias torrenciales dificultan
el aprovechamiento del agua por las riadas; se acelera el deshielo de los
casquetes polares y de los glaciares de montaña.
En resumen, en los escenarios climáticos más previsibles, todo apunta a
que va a llover menos, de forma más violenta y que el agua se evaporará
más rápidamente. La conclusión de todo lo anterior es la tendencia a
que haya menores recursos hídricos y que su disponibilidad sea menos
predecible con lo que esto conlleva. La reducción del agua potable
aumentará las tensiones sobre su uso y propiedad y hará que sean
frecuentes las restricciones, especialmente en las grandes ciudades, y
los conflictos sociales. Las previsiones por el menor volumen y calidad
del agua, son pavorosas: se calcula que hacia 2050 la mitad de la
población mundial vivirá en zonas con escasez de agua. Por ello
es apremiante declarar la emergencia climática.
España, es un país especialmente vulnerable y se viene
produciendo una disminución de los recursos hídricos. Según el
Ministerio de Medio Ambiente, se han reducido un 14,3% los aportes en
el período 1996-2006 respecto a la media del período del siglo y medio
anterior. Y en cuencas como la del río Segura, ha sido de un 40%. La
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situación será insostenible si se reducen las aportaciones, no disminuye
el consumo y se incrementa el agua de regadío en la agricultura. En el
país hay 4 millones de hectáreas en regadío, que consumen el 80% del
agua total, y se quiere incrementar el regadío en otras 400.000
hectáreas.
De ahí que, en paralelo a la lucha contra el calentamiento global y para
evitar el colapso hídrico, sea necesario un nuevo modelo de gestión
pública del agua que asegure su sostenibilidad y que debe ser
transparente y participativo. Entre las medidas urgentes está la
aplicación de planes de ahorro, el freno a nuevos regadíos y su
modernización y progresiva reducción; la paralización de embalses y
trasvases; el cumplimiento de las Directivas europeas en materia de
lucha contra la contaminación; y el fomento del consumo del agua del
grifo, como una de las formas más inteligentes y ecológicamente
sostenibles de utilizarla.
Hay que recordar que el agua y el saneamiento son derechos
humanos para la ONU desde 2010. Para garantizarlos, en la
Comunidad de Madrid está en marcha una campaña apoyada por
numerosas organizaciones ecologistas, sociales, vecinales y sindicales.
Su objetivo es implementar estos derechos a través de una ley del
Mínimo Vital, la prohibición de los cortes de suministro a los hogares
y personas vulnerables, y su oferta obligatoria en los espacios públicos
y comunes. Los partidos políticos progresistas deberían recoger estas
26
propuestas en sus programas para las elecciones autonómicas del 4 de
mayo.
Hace tiempo que el agua está el punto de mira de las políticas
neoliberales. Directivos de grandes multinacionales expresan con
brutalidad que el agua no es un derecho humano y que debería
privatizarse. La última medida en esta dirección, es la salida a bolsa del
agua en el mercado de futuros de materias primas de Wall Street, lo que
abre la puerta a la especulación sobre el agua. Por ello, es fundamental
la implicación ciudadana para que no se mercantilice con ánimo de lucro
y para que se adopten medidas destinadas a reforzar el agua como
derecho humano, su uso racional, la gestión pública y una participación
transparente.
Hay que evitar que las élites que dominan el mundo controlen el agua y
con ella nuestras vidas. Hagan el ejercicio de imaginarse simplemente
estar todo un día sin agua. Es tan esencial que debería ser impensable
que seamos capaces de ponerla en peligro o de permitir que alguien nos
la pueda robar. El agua, es tan indispensable para la vida que debe ser
un bien común y debemos empeñarnos en su defensa.
Fuente: https://www.cuartopoder.es/ideas/2021/03/22/el-derecho-humano-al-
agua-amenazado/
27
RÍOS EN SUBASTA
HOMAR GARCÉS
Fuentes: Rebelión
Como cualquier otro recurso natural explotado por las grandes
corporaciones transnacionales, ahora el agua comenzó a ser cotizada
también en el mercado de futuros de materias primas en Estados
Unidos, con lo cual, según la percepción general de muchos
economistas, se convertirá en sector clave en la recuperación económica
de la era post-Covid 19 que le tocará vivir al mundo.
Aunque ello no exige la entrega física de dicho vital líquido, su escasez
en diversas regiones de nuestro planeta pasará a servir de referente en
los mercados bursátiles, lo que propiciaría una tendencia a despojarlo
de su condición ancestral de patrimonio común de la humanidad y
28
hacerlo mercancía, según la lógica, los intereses y los manejos de los
grandes sectores capitalistas.
«Quienes apuestan por la transformación del agua en producto
financiero -asevera Liliana Pineda en su artículo «La Bolsa del agua»-
pretenden hacernos creer que asociando un precio a las “funciones
hídricas” prestadas de forma gratuita por la naturaleza, y extendiendo
derechos de propiedad sobre dichas funciones harán frente a la crisis
ecológica y a la escasez, pero nada más lejos de la realidad: la creación
de un nuevo terreno de juego para los fondos de inversión, basado en
la cuantificación monetaria de elementos esenciales para la vida como
es el agua, refleja cómo la crisis climática y la crisis hídrica se han
convertido en nuevas oportunidades de negocio y cómo las catástrofes
sociales, ecológicas y económicas nos convierten a las personas en
supervivientes, en vez de seres vivos capaces de elecciones libres y
colectivas». Esta nueva situación genera todo tipo de conjeturas
respecto al futuro incierto que podrían enfrentar los pueblos
empobrecidos, quienes ya tienen serias dificultades de abastecimiento
de agua potable, además de alimentos, en tierras afectadas por una
desertificación creciente, ante la mirada indiferente de los países
capitalistas desarrollados, a pesar de las muchas cumbres realizadas y
las declaraciones oficiales con que tratarían de mitigar este grave
problema.
Ahora el mayor peligro global -aparte de la crisis climática que sacude
al planeta- es la ambición ilimitada de las grandes corporaciones
29
capitalistas, los que no podrían verse de manera separada, ya que uno
es causado por el otro. Dentro de este orden de ideas, en
«Des/colonialidad del poder: el horizonte alternativo», Aníbal Quijano
observa que «a las luchas de los dominados y explotados del mundo
industrial/urbano, por resistir al neoliberalismo globalizado (en defensa
de empleo, salario, seguridad, servicios públicos, ciudadanía), se suman
ahora, en primer término, las luchas de los “indígenas” de todo el
mundo, los más dominados entre las víctimas de la Colonialidad del
Poder Global, en defensa de sus recursos de sobrevivencia, que son
precisamente tales mal llamados “recursos naturales” desde la
perspectiva eurocéntrica de “explotación de la naturaleza” (el agua, las
florestas y el oxígeno, los demás seres vivos, las plantas alimenticias y
medicinales, en fin todo lo que los “indígenas” han usado, producido y
reproducido por miles de años, y todos los materiales que permiten la
producción de la existencia social)». Resulta ser una lucha de un mayor
rango, combinando objetivos que, a simple vista, podrían verse
incompatibles, sin conexión alguna entre sí, justamente lo que esperan
los sectores dominantes que se perciba, de modo que ellos puedan
mantener incólume su hegemonía.
Ante lo que se avizora para las décadas siguientes, se hace imperativo
entonces un contexto teórico global con el cual pueda confrontarse la
nueva realidad por imponerse a manos de las grandes corporaciones
capitalistas. Aunque esto se haga difícil de lograr, dadas las diferencias
existentes entre pueblos y sectores sociales a nivel global, es la opción
que le permitiría a la humanidad superar la amenaza de extinción que
30
se cierne sobre ella y la naturaleza toda. Lo que pudo ser una
excentricidad difícil de imaginar en el pasado -la posibilidad de que los
ríos fueran puestos en subasta y, con éstos, todo soporte de vida para
los seres humanos- obliga a plantearse seriamente la alternativa de un
tipo de civilización distinto, uno en el cual no exista, ni pueda existir, la
mercantilización de la vida y donde el desarrollo económico no se logre
a costa de la destrucción irreparable del entorno natural del que todas
y todos formamos parte.
Fuente: https://rebelion.org/rios-en-subasta/
31
¿SON LAS MUJERES LAS GRANDES PERDEDORAS
DE LA PANDEMIA?
SABINE GERMAIN
Fuentes: Alternatives Économiques
No es necesario prolongar el suspenso. Las mujeres se ven más
afectadas que los hombres por los efectos de la pandemia. De forma
inequívoca y en todos los frentes: empleo, carga de trabajo y mental,
ingresos… En junio de 2020, la Organización Internacional del Trabajo
(OIT) dio la voz de alarma al constatar que «la crisis de Covid-19 afecta
de forma desproporcionada a las trabajadoras». Y en más de un sentido.
Las mujeres están «sobrerrepresentadas» en todos los frentes de la
crisis sanitaria. En primera línea, ya que las profesiones sanitarias están
feminizadas en más de un 70%, llegando hasta el 90% entre las
enfermeras y auxiliares de enfermería. Pero también en la segunda
línea: en el momento álgido del encierro, las profesiones de la
distribución (el 82% de los empleados son mujeres), la ayuda a domicilio
(el 98% de las mujeres) o la limpieza (el 67%) proporcionaban
«continuidad económica y territorial» asumiendo todos los riesgos,
mientras que los equipos de protección seguían siendo difíciles de
encontrar.
32
Las mujeres también cayeron masivamente en el paro parcial, que les
permitió mantener su empleo cuando las actividades estaban
paralizadas, pero que les hizo perder el 16% de su remuneración neta,
excepto a las que reciben un salario mínimo. Los sectores de actividad
más afectados por la crisis, es decir, los que se han beneficiado de una
mayor asignación parcial de actividad desde el 1 de junio de 2020, son
el turismo, la hostelería, el deporte, la cultura, el transporte de pasajeros
y los eventos.
También en este caso se trata de actividades muy feminizadas: en el
turismo o la hostelería, por ejemplo, más del 80% de los empleados son
mujeres. Para el conjunto del año, aún no se conoce la distribución de
mujeres-hombres entre los beneficiarios de la actividad parcial. Pero la
OIT está convencida de lo siguiente: «Los empleos de las mujeres corren
mucho más peligro que los de los hombres, sobre todo a causa de la
crisis del sector de los servicios». A diferencia de la crisis de 2008, que
afectó más a la industria.
Las mujeres que pueden teletrabajar no se libran. Según un estudio
realizado por Ipsos y el Boston Consulting Group, el 34% de las mujeres
encuestadas dijo estar «al borde del colapso» (frente al 28% de los
hombres). Porque la frontera entre el trabajo y la vida personal se está
erosionando, porque las mujeres tienen 1,3 veces menos probabilidades
que los hombres de tener un espacio de trabajo aislado, porque son 1,5
veces más interrumpidas por los hijos o las tareas domésticas..
33
Por ello, no es de extrañar que la carga mental de las mujeres aumentara
durante el aislamiento físico de la pandemia. Según la encuesta EpiCov
realizada por el Inserm (Institut National de la Santé et de la Recherche
Médicale) y la DREES (Direction de la Recherche, des Études, de
l’Évaluation et des Statistiques) entre el 2 de mayo y el 2 de junio de
2020, las mujeres de entre 20 y 60 años que declaran dedicar al menos
cuatro horas al día a las tareas domésticas habituales son el doble que
los hombres (19% frente al 9%). Además, el 58% de las madres de
niños pequeños pasan más de cuatro horas al día cuidando de ellos,
frente al 43% de los padres. Por último, los hombres son 2,3 veces más
propensos que las mujeres a dedicar menos de una hora al día a las
actividades domésticas (40% frente al 17%).
Índice distorsionado
En este contexto, el Ministerio de Trabajo (Francia) publicó el 8 de marzo
su índice 2021 de igualdad profesional entre mujeres y hombres. Hay
que tener en cuenta que las empresas de más de 50 trabajadores están
obligadas a medir cada año cinco indicadores: la brecha salarial entre
hombres y mujeres (40% de la puntuación), la diferencia de aumentos
anuales (20%), la diferencia de ascensos (15%), los aumentos al
regreso de la baja por maternidad (15%) y la presencia de mujeres entre
los salarios más altos de la empresa (10%).
Este año, el ministerio se ha alegrado de que el índice de respuesta haya
aumentado considerablemente (ha pasado del 59% en 2020 al 70% en
34
2021) y de que la puntuación media haya progresado ligeramente hasta
alcanzar los 85 puntos sobre 100 (+ 1 punto en comparación con 2020).
Sin embargo, los interlocutores sociales consideran que estos resultados
están sesgados por la crisis. El rango de empleados que se tiene en
cuenta en estos cálculos excluye a los que trabajan a tiempo parcial, es
decir, alrededor del 10 % de la plantilla de las empresas con más de 50
empleados.
Por lo tanto, este índice de igualdad ocupacional debe analizarse con
cautela, incluso si se espera que la crisis de Covid se traduzca en un
descenso histórico de la igualdad ocupacional. Rachel Silvera,
investigadora asociada de la Universidad París-Nanterre, lamenta que se
sacrifiquen «los peores trabajos». Con la modesta subida del salario
mínimo (+ 0,9% el 1 de enero de 2021), en particular, «el 13% de las
mujeres cobra el salario mínimo, frente al 5,5% de los hombres», señala
este economista especializado en igualdad profesional. Además, «el
43% de los trabajadores que perciben un salario mínimo trabajan a
tiempo parcial, mientras que esta forma de contratación alcanza al
17,5% de todos los asalariados».
Por lo tanto, podemos concluir con la OIT que «existe el riesgo de perder
algunos logros de las últimas décadas y de empeorar las desigualdades
entre hombres y mujeres en el mercado laboral». Esta es una de las
especificidades de esta crisis: «A lo largo del siglo XX, a pesar de sus
efectos devastadores, las guerras y las recesiones han hecho avanzar la
igualdad de género en los países de renta alta», señala la economista
35
Cecilia Garcià-Peñalosa en una columna publicada por Le Monde el 8 de
marzo. Por ello, cree que «la reinserción de las mujeres en el mercado
laboral debe ser un aspecto fundamental del plan de recuperación».
Alternatives Économiques. Traducción de Correspondencia de Prensa
Fuente: https://rebelion.org/son-las-mujeres-las-grandes-perdedoras-de-la-
pandemia/
36
RESIDENCIAS DE ANCIANOS: IGLESIA Y FONDOS BUITRES EN UN NEGOCIO DE RAPIÑA
ANTONIO GÓMEZ MOVELLÁN
Fuentes: Público [Foto: Un anciano lee un libro de una residencia. EFE/Mariscal/Archivo]
El periodista de investigación Manuel Rico, en la actualidad trabajando
en el diario Infolibre, acaba de publicar un libro titulado Vergüenza: el
escándalo de las residencias en la editorial Planeta y que da un
aldabonazo contundente al drama que se ha vivido en las residencias de
ancianos durante la pandemia. El libro, aparte de describir la situación
del sector, evidencia que ha existido una dejación absoluta de los
poderes públicos: «5.343 mayores murieron en sus residencias sin
recibir atención hospitalaria, lo que equivale al 84 % del total de
37
residentes fallecidos en ese periodo en la Comunidad de Madrid», se
indigna Manuel Rico.
Si estas residencias no fueran un negocio de rapiña totalmente
descontrolado muchas muertes se hubieran evitado. «La pandemia
reventó las costuras de un sistema residencial que estaba en pañales en
España desde hacía muchos años. La factura la pagaron con su vida
miles de ancianos», concluye Rico.
El 85% de las residencias están gestionadas o pertenecen a grupos
buitres diversos siendo la Iglesia católica y sus alrededores la principal
empresa del sector y todo él recibe grandes cantidades de fondos
públicos que acaban en operaciones financieras diversas, pero no
utilizados enteramente para la mejora la calidad de vida de los
residentes.
El autor se escandaliza al comprobar que la Iglesia católica y sus
congregaciones, en alianza con los mayores empresarios de la
construcción de este país, han utilizado todo este sector para sacar
grandes beneficios y todo ello en medio de una gran opacidad que se
ampara, en muchas ocasiones, bajo el marchamo de la religión. Manuel
Rico al referirse al padre Ángel, el famoso presidente de Mensajeros por
la Paz, una de las empresa-ONG de más tamaño del sector, confiesa su
decepción con el personaje, que utiliza la caridad como reclamo de un
oscuro y opaco negocio.
38
Así, el periodista Manuel Rico estudia la evolución del sector y todo
apunta a una concentración del mismo en manos de las organizaciones
religiosas y grupos empresariales vinculados a los fondos buitres y todo
ello en un relato donde desmenuza los pelotazos financieros e
inmobiliarios que considera algo estructural en la evolución de este
sector: «Cuando empezó la década de los diez, había dos grandes
grupos de poder con una posición dominante en las residencias de
mayores: las cajas de ahorros y la Iglesia católica. Las cajas fueron
barridas del mapa en apenas siete años. El análisis de lo ocurrido es
probable que deje al lector con una sensación amarga. Grandes
compañías levantadas gracias al apoyo y a las inversiones millonarias de
las cajas fueron vendidas a precio de derribo. Si no todas, casi todas. Y
varios de los fondos que las compraron —Palamon Capital, G Square,
Magnum Capital, Portobello— obtuvieron beneficios multimillonarios
revendiéndolas poco después», explica.
Un negocio y unos beneficios que no se pude explicar sin la ingente
cantidad de dinero público que se invierte en el mismo: «El modelo
residencial español está completamente privatizado y vive un intenso
proceso de concentración empresarial, que deja cada vez en menos
manos el negocio geriátrico. La huida del Estado, como hemos visto, se
traduce en una creciente transferencia de fondos públicos hacia los
grandes grupos del sector».
El libro también es regeneracionista ya que plantea un decálogo de
soluciones empezando por acabar con la opacidad y llamando a que las
39
administraciones publicas asuman la gestión directa de muchas de estas
residencias e impongan una férrea inspección sobre las mismas y todo
ello duplicando, como mínimo, el personal de las mismas y
sus retribuciones, al tiempo que se diseñe un gran plan de cuidados
sociales, aunque es bastante escéptico de que esto se lleve adelante
vistos los intereses alrededor de este negocio.
Este libro, es, al tiempo, un análisis muy eficiente de la evolución de este
sector de las residencias de ancianos en los últimos años y una denuncia
por el carácter rapiña de los operadores en este sector gracias a la
complicidad de las administraciones públicas. Esta denuncia es también
un homenaje a los trabajadores y trabajadoras de las residencias que,
en condiciones de gran precariedad y bajos salarios, se ocupan de
nuestros padres o abuelos.
Antonio Gomez Movellan es Presidente de Europa Laica.
Fuente: https://blogs.publico.es/dominiopublico/37047/residencias-de-ancianos-
iglesia-y-fondos-buitres-en-un-negocio-de-rapina/
Fuente: https://rebelion.org/residencias-de-ancianos-iglesia-y-fondos-buitres-en-
un-negocio-de-rapina-2/
40
TERAPIAS O TORTURAS DE CONVERSIÓN
JOSÉ NICOLÁS MEDINA FUENTES
Fuentes: Rebelión
Les llaman sutilmente “terapias de conversión”. Todavía está por verse
las técnicas y “terapias” a utilizar por esta variante de torturadores.
Por lo general un oficio o profesión se desarrolla por necesidad social.
Hay oficios más tolerables que otros. En el caso de los médicos,
sacerdotes, abogados, ingenieros, contables, economistas, educadores,
tenemos unos grupos sociales que por necesidad terrenal o espiritual
desarrollan un monopolio del saber que les imparten poder particular,
mayor a unos que a otros, en el enramado social.
Por variedad de factores, por determinadas experiencias históricas o
sobre todo en esta era cibernética y de predominio del capital financiero,
narcotráfico y especulación farmacéutica, algunos oficios han
continuado mermando en la estima pública. Hay oficios que por
necesidades son objeto de amplia demanda por la población. Algunos
muy antiguos como artesanos, enfermeros, parteras, cocineros,
41
instrumentistas, herreros y plomeros, otros más modernos como
mecánicos, técnicos de aires, electro domésticos y cibernéticos. Hay
oficios un poco misteriosos más relacionados con la muerte como los
sepultureros, embalsamadores, arriesgados como los militares, otros
muy tenebrosos como los verdugos, mercenarios, torturadores y
gatilleros.
Las necesidades biológicas y la inclinación al vicio producen en el
mercado ilegal, prostitutas, prostitutos, gigolos, proxenetas, adictos,
capos, gatilleros. Las necesidades estéticas y de entretenimiento
producen pintores, cantantes, músicos, escritores, libretistas,cineastas,
actores, productores, promotores, agentes, entrenadores. De ciertos
deportes aficionados surgen oficios remunerados de fuerza y energía
propios de la vitalidad juvenil. Peloteros, baloncelistas, futbolistas,
corredores y muchos otros. El boxeo y las artes marciales de defensa y
ataque como el karate, judo, jujitsu, kempo, mou tai, lucha olímpica,
nutren a los oficios milenarios de boxeadores y las nuevas modalidades
de combates mixtos y también a puro nudillo (“bare nuckle”)
Entonces a algunos desquiciados se les ha ocurrido una nueva faena
fantasiosa y vil, que no se funda en necesidades vitales, sino en odios y
prejuicios, que requerirá unos oficios y personeros muy depravados que
la instrumenten. Me refiero a las terapias de conversión y a los
torcedores de carácter.
42
Según he podido recoger de aquí y allá hay sectores fundamentalistas
que odian ciertas orientaciones sexuales. Y se han ingeniado forzar el
cambio de orientación sexual a la comunidad discriminada LGBTQ.
Políticos coloniales le han hecho coro.
Les llaman sutilmente “terapias de conversión”. Todavía está por verse
las técnicas y “terapias” a utilizar por esta variante de torturadores.
Por supuesto que la silla eléctrica, el garrote vil, la horca, el gas letal, el
paredón son muy drásticos, no se busca exterminar sino convertir a los
pacientes, y estarán pensando cómo disminuir sus efectos. Así pues a la
silla eléctrica se le reducirá el voltaje y en cómodas butacas propias para
estas terapias se aplicarán cargas menores a los 220 o 110 kilowatts. La
lengua se sostendrá sin tenazas.
Los lectores de la biblia recibirán tratamientos para callos en las cuerdas
vocales de tanto hablar.
Queda por definir el currículo o educación continua para preparar a los
torcedores de carácter. Candidatos para estos oficios siempre surgirán.
Los verdugos, maltratantes, torturadores y odiantes de toda clase
estarán ávidos por ganarse unos pesitos.
Candidatos no faltarán. Bastará un anuncio de convocatoria de empleos
para que a Puerto Rico viajen en hordas-motivadas por pasajes aéreos
tan baratos- supremacistas, paramilitares, verdugos, kukluxclanes, nazi
43
facistas, gatilleros, torturadores, mutiladores sexuales. Los turistas
lúmpenes harán caravanas de celebración y bienvenida.
Tradición y referencias habrá de sobra. .
Se revivirán los recuerdos de la Santa Inquisición y los campos de
concentración alemanes y de dictaduras. Personajes como Cornelius P.
Rhodes- aquella bestia que Albizu Campos denunció su carta en la que
admitía haber inoculado con cáncer a puertorriqueños, raza que
afirmaba había que exterminar- servirán de inspiración. (1)Es más,
Universidad o Instituto de Conversión Cornelius P. Rhodes será un buen
imán para las matrículas. Es campo nuevo para técnicas y currículos.
Afortunadamente, y ya saliendo de la hipérbole satírica, se ha
presentado un proyecto de ley número 184 del Senado por los
legisladores contestatarios José Vargas Vidot (independiente), María de
Lourdes Santiago (PIP) y Rafael Bernabe (MVC) para prohibir esas
nefastas prácticas de presiones psicológicas que se venían implantando
en iglesias y por profesionales de salud en niños y jóvenes y diversas
personalidades como ex gobernadores y sectores de la sociedad civil y
política han respaldado.(2)
* Abogado, profesor, escritor de múltiples ensayos, autor del libro La
Deuda Odiosa y la descolonización de Puerto Rico (Publicaciones Libre
Pensador, 2018), egresado de Harvard, Magna Cum Laude (1987).
44
Nota.
(1) Cornelius P. Rhodes, “licenciado en medicina por la Universidad de
Harvard, donde también ejerció como profesor de Patología, en 1928 se
unía al prestigioso Instituto Rockefeller de Investigación Médica. Tres
años después aceptaba una invitación del hematólogo de Harvard
William B. Castle, director de la Comisión de Anemia Rockefeller, para
desplazarse al Hospital Presbiteriano de San Juan de Puerto Rico. El
objetivo era investigar la anemia endémica en la isla, causada en
algunos casos por el parásito anquilostoma, y en otros asociada a una
dolencia de naturaleza (hoy aún) desconocida llamada esprue tropical.
“ Rhoads escribía una carta dirigida a su amigo y colega de Boston Fred
Stewart, en la que daba un giro completo a su paradisíaca estampa
inicial y se despachaba con la siguiente sarta de perlas: «Los
puertorriqueños son sin duda la raza de hombres más sucia, perezosa,
degenerada y ladrona que jamás ha habitado esta esfera. Te enferma
habitar la misma isla que ellos. Son incluso más bajos que los italianos.
Lo que la isla necesita no es trabajo de salud pública, sino una ola
gigante o algo para exterminar por completo a la población. Entonces
sería habitable. He hecho lo máximo que he podido para impulsar el
esfuerzo de exterminio matando a ocho de ellos y trasplantando células
cancerosas a varios más. Esto último hasta ahora no ha causado ninguna
muerte… La materia de consideración hacia el bienestar de los pacientes
no tiene cabida aquí. De hecho, todos los médicos disfrutan en el abuso
y la tortura de los infortunados sujetos».
45
Javier Yánez. El oncólogo «exterminador» que se jactó de matar a los
puertorriqueños que trató. El Español.
https://www.elespanol.com/ciencia/salud/20171207/267723865_0.htm
l
(2) “Entre sus 12 y 16 años, una consejera, una trabajadora social y dos
psicólogas trabajaron para suprimir la identidad de género y orientación
sexual de Mila García mediante prácticas que la llevaron a una depresión
severa hasta el punto de un intento de suicidio. Mila, armada de valor,
contó hoy su historia”
David Cordero Mercado. Alzan su voz los sobrevivientes de las terapias
de conversión. El Nuevo Día. 24 de marzo de
2021.https://www.elnuevodia.com/noticias/locales/notas/alzan-su-voz-
los-sobrevivientes-de-las-terapias-de-conversion/
Fuente: https://rebelion.org/terapias-o-torturas-de-conversion/
46
TRASNACIONALES FARMACÉUTICAS
ASEGURAN
ESCASEZ DE VACUNAS
SILVIA RIBEIRO*
Las grandes farmacéuticas están en pie de guerra. Han logrado
ganancias absolutamente extraordinarias debido a la especulación con
vacunas, medicamentos e insumos sanitarios relacionados con el Covid-
19. Ahora redoblan el control de sus patentes monopólicas para impedir
que el sector público o empresas nacionales puedan acceder o fabricar
vacunas o medicamentos sin pagar ingentes sumas. Cabildean
agresivamente a sus gobiernos sede para impedir que la Organización
Mundial de Comercio (OMC) apruebe una exención a las patentes
farmacéuticas relacionadas con la pandemia.
Eso propusieron India y Sudáfrica ante el Comité ADPIC (Acuerdo
sobre derechos de propiedad intelectual relacionados al comercio) de la
OMC, que se reunió este marzo en Ginebra. Contaron con apoyo de más
de 100 países, pero los gobiernos de Suiza, Estados Unidos, Unión
Europea, Reino Unido, Australia, Canadá, Singapur, Japón y Brasil
bloquearon cualquier avance de la discusión.
* Investigadora de Grupo ETC
47
India y Sudáfrica plantean que se pueda acceder a vacunas,
medicamentos e insumos para Covid-19 sin verse limitados por elevados
costos y patentes que impiden manufacturarlos en países donde existe
capacidad para ello. Eso multiplicaría enormemente la disponibilidad de
vacunas e insumos en el mundo y fortalecería las capacidades nacionales
en salud pública ante próximas debacles.
El ADPIC prevé el uso de licencias obligatorias y otras excepciones en
caso de crisis de salud pública, pero cada vez que países han intentado
usarlas, los cárteles de la industria farmacéutica han hecho campaña
para castigarlos, como sucedió con Sudáfrica al intentar fabricar
genéricos para la epidemia de sida, o Colombia, que buscaba producir
genéricos de un medicamento para el cáncer, entre otros ejemplos. Por
estos precedentes, ahora se busca que la OMC sancione la exención.
Una cruel paradoja es que la mayoría de los gobiernos que se oponen
a la exención de patentes tienen ya comprometido el abasto de vacunas
de Covid-19 para sus poblaciones, incluso muchas más de lo necesario,
como Canadá que acaparó hasta cinco veces las dosis para inocular a
toda su población. El gobierno de Bolsonaro también se opuso a la
exención, pese a que Brasil tiene las peores cifras mundiales de muertes
y el país tiene capacidad para manufactura nacional.
Entre otras acciones, las trasnacionales farmacéuticas enviaron una
carta a Biden urgiendo a mantener el apoyo a la innovación farmacéutica
( ), oponiéndose a cualquier exención a los ADPIC. La firmaron directivos
de Pfizer, AstraZeneca, Sanofi, Merck, Novartis, Bayer, Eli Lily, Bristol
48
Myers Squibb, Gilead, Abbvie y otras, junto a la agrupación PhRMA,
(Pharmaceutical Research and Manufacturers of America). No obstante,
la innovación de esas empresas es casi nula, y en gran porcentaje se
basa en usar la investigación pública (https://tinyurl.com/hs6bkz28).
Varias de ellas han sido ampliamente subsidiadas por el público para
desarrollar vacunas y con compras anticipadas por la pandemia
(https://tinyurl.com/ykabcmw9), pero han hecho contratos leoninos y
ventas a precios secretos en cada país, incluso a doble y triple precio a
países del Sur. Por ejemplo AstraZeneca vendió su vacuna para Covid-
19 a Sudáfrica al doble del precio que la vendió en Europa. Pfizer exigió
a varios gobiernos latinoamericanos (entre ellos Perú, Argentina y Brasil)
que además de contratos secretos, respalden controversias con sus
activos soberanos, o sea reservas públicas de los países.
(https://tinyurl.com/3v8fpjm4). Sumado a la inmunidad ante cualquier
efecto adverso de las vacunas, que en su caso son experimentales.
Por su lado, la Fundación Bill y Melinda Gates presionó a la
Universidad de Oxford, para que su vacuna se fabricara con la
trasnacional AstraZeneca, aunque la investigación estaba avanzada y
podría haberse hecho con institutos públicos. El anuncio inicial de Oxford
fue que la vacuna estaría disponible gratuita y abiertamente, pero
resultó una vacuna patentada con precios secretos.
En el mismo sentido va el mecanismo Covax, formado inicialmente
por CEPI y GAVI, dos alianzas para promover vacunaciones financiadas
por la Fundación Gates, en el que participa la OMS y más de 180
49
gobiernos. Aunque figura como mecanismo facilitador del
acceso equitativo a las vacunas, en realidad es otra forma de garantizar
que el dinero público vaya a comprar las vacunas de las trasnacionales,
quizá en términos que superficialmente parecen ventajosos, pero que
en realidad son un doble pago del público, en lugar de exigir la
cancelación de patentes y favorecer la manufactura nacional.
Oxfam denunció que los cuellos de botella de entregas, promovidos
por las trasnacionales y la Fundación Gates para asegurar las ganancias
privadas, significan que tomará como mínimo cinco años llegar a un 60
por ciento de población global vacunada y a esa altura los virus muy
probablemente hayan mutado. Además, el tiempo de supuesta
inmunidad de las vacunas es desconocido, y probablemente demande
vacunación anual. Sin contar con el surgimiento de otras pandemias, ya
que las causas para ello siguen sin tocarse.
Así las trasnacionales, con la filantrópica ayuda de Bill Gates, se han
asegurado un estado permanente de escasez y demanda de vacunas –
promovidas desde lo público para ganancias privadas– lo cual aparece
como el negocio del siglo.
Fuente: https://www.jornada.com.mx/2021/03/13/opinion/017a1eco
50
ARTÍCULOS SOBRE LO QUE ACONTECE ESPECIALMENTE
EN NUESTRA AMÉRICA
51
PFIZER PIDE GARANTÍAS PARA MATAR CON SU VACUNA
RUBÉN RAMOS ALIZOROJO
La empresa farmacéutica estadounidense Pfizer pidió colocar en forma
de garantía activos soberanos incluyendo propiedades públicas,
embajadas, bases militares y reservas de bancos a los países de América
latina y del Caribe compradores de su vacuna. Esto, como “resguardo
ante eventuales demandas por posibles resultados adversos (léase
muerte o discapacidad) tras la aplicación de las dosis”.
Así reza la información que da cuenta de las “exigencias” de Pfizer para
entregar su vacuna a quienes ya adelantaron acuerdos con el
mecanismo COVAX creado ex profeso por Bill Gates, sus socios mil
millonarios, el Foro de Davos y los estados europeos implicados en el
“descarrilamiento” de la Pandemia del Covid-19.
52
La «intimidación de alto nivel» no fue obstáculo para que los gobiernos
corruptos y genuflexos de América latina decidieran acatar, en la
“sombra”, las imposiciones de la empresa farmacéutica con sede en
Nueva York. Lo que supone, como en el caso de Perú, ceder en su
soberanía aceptando que, ante controversias, sea un tribunal arbitral u
otra jurisdicción la que pueda tomar decisiones.
Por algo digo que “Perú siempre primero”. Sobre todo, en entreguismo,
claudicación, corrupción y cobardía. Los peruanos deben prepararse
porque gracias a sus gobernantes transparentes y honrados su territorio,
sus propiedades y sus reservas pueden ser confiscados gracias a la
muerte o la discapacidad que les ocasione la vacuna Pfizer a sus
pobladores.
En igual situación están otros ocho países en América Latina y el Caribe
a los que Pfizer impuso su vacuna: Chile, Colombia, Costa Rica,
República Dominicana, Ecuador, México, Panamá, Uruguay. En ninguno
de estos países los detalles de los acuerdos se han hecho públicos. La
gente no sabe nada de nada.
Argentina y Brasil estarían en proceso de revisión de sus “contratos” tras
nuevas imposiciones planteadas por el gigante farmacéutico, que, dicho
sea de paso, no tiene pierde ni antes ni durante ni después.
Y esto, porque fueron los Estados los que hicieron “la chanchita” para el
financiamiento de su vacuna y los estudios “científicos” de BioNTech.
53
Este gigante de las “investigaciones” es propiedad de una pareja turco-
alemana. Del inmigrante turco Ugur Sahin hijo de un obrero turco que
emigró a Alemania. Este es el dueño y director de BioNTech y es uno de
los 100 alemanes más ricos con 55 años de edad. Su esposa y socia en
la empresa es Öezlem Türeci, de 53 años de edad, hija de un inmigrante
turco dedicado a la medicina.
La empresa BioNTech que codirigen de la mano con Bill Gates y la OMS
espera vender este año vacunas contra el coronavirus por un valor total
de 15.000 millones de dólares. Pero ya recibió subvenciones del
Gobierno alemán por más de medio millón de de dólares. En un año, el
valor de mercado de la empresa en la bolsa de valores Nasdaq pasó de
US$4.600 millones a los US$21.000 millones gracias a sus
“investigaciones” para la vacuna contra el Coronavirus.
Fuente: https://barometrolatinoamericano.blogspot.com/2021/03/pfizer-pide-
garantias-para-matar-con-su.html
54
VIOLENCIA FARMACOLÓGICA
CÉSAR MANZANOS BILBAO*
Fuentes: Rebelión
A este mercantilismo de acumulación, totalmente desbocado, que nos
está llevando al desastre, le vale todo con tal de hacer negocio. No le
importa que el número de personas muertas directa o indirectamente
por la pandemia se eleve a cientos de miles, que millones nos veamos
condenadas a la pobreza. No le importa que hayamos renunciado a
nuestra libertad de movimiento, suspendido nuestras relaciones
personales, aplazado nuestras vidas. En eterna espera del final de una
pesadilla que parece no llegar nunca y que está organizada para que
jamás termine, a la vista de los intereses que la están gestionando,
* César Manzanos Bilbao. Soziologia eta Gizarte Langintza Saila/Departamento de Sociología y
Trabajo Social. [email protected]
55
ajenos a la protección del derecho a la salud y la vida. No le importa
nuestro malestar social y psicológico, nuestra angustia, nuestra
ansiedad, nuestra depresión ante tanta privación e incertidumbre
impuesta. Lo único que les importa, a quienes se lucran con todo ello,
es utilizarlo para incrementar sus tasas de ganancia.
En octubre de 2020, incluso antes de la aprobación de las primeras
vacunas, Sudáfrica e India impulsaron, con el apoyo de la mayoría de
los estados del mundo, una propuesta a la Organización Mundial del
Comercio (OMC) para suspender las patentes de las vacunas y
medicamentos para luchar contra el Covid-19 hasta lograr la inmunidad
mundial. España se posicionó con el resto de la Unión Europea (UE),
Estados Unidos, Japón y otros países, en contra de la exención de
patentesde las vacunas mientras dure la pandemia. PlantaDoce, diario
económico del negocio de la salud, se refería a mediados del mes pasado
a la liberalización de la patente por parte de las farmacéuticas como un
“acto de generosidad”, expresión puesta en boca de Carlos
Lema, Catedrático de derecho mercantil, porque “una farmacéutica es
una empresa y no una institución filantrópica y, como tal, debe lograr el
beneficio para mantenerse en el mercado”.
Otro caso terrible es el de la Universidad de Helsinki, donde su equipo
de investigación tan solo necesitaba 50 millones de euros para la fase
tercera de su vacuna libre de patentes, lo que a estas alturas habría
permitido a países de todo el mundo inocular a sus poblaciones sin
desembolsar grandes sumas de dinero y, tal y como indica CTXT,
56
refiriéndose al necromercado, el gobierno de Finlandia se puso de parte
de la gran industria farmacológica priorizando los beneficios
empresariales a la salud pública.
El hecho es que quienes más se están forrando, y continuarán
haciéndolo, son las industrias farmacológicas, con la gestión agónica de
la administración a cuenta gotas de las vacunas, y con el incremento
exponencial en sus ventas de ansiolíticos, antidepresivos y
psicofármacos. Ante esta emergencia mundial, los gobiernos y
organismos internacionales no obligan a las farmacéuticas a liberar las
patentes acelerando la vacunación de toda la población del planeta.
Lejos de ello, las han financiado con dinero público para fabricarlas, y
ahora las venden a los estados para volver a pagarlas con nuestros
impuestos. Negocio redondo. Resulta terrorífico el poder que ostentan,
hasta el punto de tener la solución en su mano y, sin embargo, dedicarse
a negociar con la muerte escudándose en una supuesta incapacidad de
abastecer al mercado. Pero lo más grave de esta cruel violencia, es que
tanto las farmacológicas, como los gobiernos de los países enriquecidos
y sus élites de poder, se presentan como nuestros salvadores, cuando
en realidad son nuestros verdugos.
El posicionamiento de los estados títeres de los países enriquecidos, y
de sus élites de poder informal que mandan es sus gobiernos, además
de suponer una suspensión de la soberanía de los estados, fundamento
de la democracia, es una forma de violencia extrema que hemos de
denunciar y combatir y sin embargo se oculta (al igual que ocurrirá con
57
la publicación de este artículo que será ignorado por las empresas
mediáticas hegemónicas a quienes tantos beneficios les aportan en
publicidad las farmacéuticas).
Mientras, siguen con el discurso de la guerra al virus, pero al parecer, la
quieren hacer con mascarillas, voluntarismo y connivencia necesaria con
quienes nos mantienen confinados, precarizados y sin poder
despedirnos de nuestros muertos que, para ellos, tan solo son meras
víctimas colaterales de su falta de agallas para enfrentarse a las
empresas multinacionales. Los gobiernos como el español son los
auténticos violentos y negacionistas, el resto, convidados de piedra que
pasmados y zombizados, asistimos al cruel espectáculo de la
instauración de un estado permanente y policializado de excepción,
asistimos a su cruel inacción, que es también, la nuestra.
Fuente: https://rebelion.org/violencia-farmacologica/
58
8M: POR UN FEMINISMO REVOLUCIONARIO, QUE NO ES
FOTO DE PORTADA SINO LUCHA CONTRA TODA EXPLOTACIÓN
CECILIA ZAMUDIO
Fuentes: https://cecilia-zamudio.blogspot.com
8 Marzo el día de la Mujer trabajadora y revolucionaria
El 8 de marzo se conmemora a la mujer trabajadora, revolucionaria. La
comunista Clara Zetkin propuso la conmemoración en la conferencia de
mujeres socialistas de 1910, para homenajear la lucha de las mujeres
contra la explotación capitalista. Se recuerda el asesinato, a manos del
Gran Capital, de 129 obreras en huelga quemadas vivas en una fábrica
textil en EEUU: los dueños de la fábrica cerraron las puertas con ellas
dentro y le prendieron fuego para hacerlas arder (como medida de
«disuasión» para evitar que otras obreras siguieran su ejemplo de
lucha). Se conmemora la lucha por la justicia social, por los derechos de
la clase trabajadora, la lucha contra el patriarcado y el capitalismo, cuyos
mecanismos se articulan el uno al otro a la perfección.
59
El 8 de marzo también quedó apuntalado como fecha eminentemente
revolucionaria por los sucesos del 8 de marzo de 1917 en la Rusia
tzarista: miles de mujeres salieron a las calles clamando por sus
derechos, contra la explotación y las guerras que la burguesía imponía
al pueblo: ellas detonaron la Revolución de Octubre. Tras la revolución
de Octubre las mujeres conquistaron sus derechos económicos, sociales,
sexuales y reproductivos: derecho al voto para todas las mujeres (no
solo para las propietarias como en Gran Bretaña), derecho al divorcio,
derecho al aborto, derechos plenos al estudio y trabajo, vivienda,
sanidad y educación garantizadas, etc. Todos estos derechos todavía se
siguen luchando en la inmensa mayoría de países capitalistas.
Las mujeres somos la parte más golpeada de la clase explotada. Somos
víctimas de las guerras imperialistas, del saqueo capitalista que
empobrece regiones y países enteros, de las privatizaciones y la
precariedad, y además somos víctimas del machismo incesantemente
promovido por los medios y toda la industria cultural del capitalismo.
Porque el capitalismo se sustenta fragmentando y dividiendo a la clase
explotada: por ello la industria cultural del capitalismo difunde
incesantemente paradigmas de discriminación como el machismo y el
racismo.
Somos las trabajadoras explotadas, estudiantes, artistas, paradas y
jubiladas a quienes se nos está privando de una vida digna, en ocasiones
hasta de la alimentación, la vivienda, el acceso a la salud, el acceso a la
60
educación, etc. Somos privadas de condiciones de trabajo y de
remuneración dignas por los capitalistas que sacan la plusvalía de
nuestro trabajo. Somos las madres cuyo trabajo en el hogar no es
reconocido, las que se quedan en absoluta precariedad sin pensión.
Somos las mujeres migrantes empujadas a padecer las peores
explotaciones: en maquilas de espanto, rociadas de veneno en el agro-
industrial, abocadas a la explotación de la prostitución o a ser cosificadas
y saqueadas como «vientres de alquiler». Somos las niñas violadas y
forzadas a parir. Somos designadas por este sistema como la diana de
las frustraciones aberrantes que este sistema causa, de la misoginia que
fomenta.
Por ello el feminicidio galopa: porque los medios banalizan la tortura y
toda discriminación alienante funcional al capitalismo, porque la
violencia ejercida de manera estructural arrastra su odio contra
nosotras. Somos víctimas del capitalismo y su barbarie, víctimas
del machismo que el mismo Capital promueve; pero también somos
mujeres luchadoras y revolucionarias. El 8 de marzo no es el día de las
princesas, ni de las empresarias explotadoras. Las mujeres opresoras,
las Cristine Lagarde, las Thatcher, las Hillary Clinton y demás… las que
se lucran de devastar selvas, de oprimir poblaciones, de esclavizar en
fábricas de espanto a miles de trabajadoras, las que se lucran, también,
de fomentar el machismo a través de sus medios de alienación masiva,
son clase explotadora, al igual que los hombres de la clase explotadora.
61
Al Capital le interesa mantenernos atadas a la división sexual del trabajo,
a labores de cuidado no remuneradas, a la discriminación salarial por
ser mujeres. Al Capital le interesa una clase explotada pulverizada y
golpeada, impedida de unidad por el machismo, el racismo, la xenofobia,
el individualismo y demás alienaciones que la clase explotadora se
encarga de cultivar. Frente a una realidad tan brutal, el reformismo,
siempre sirviendo a impedir cuestionamientos profundos, pretende
encapsular nuestra lucha y superficializarla, ocultando su carácter de
clase, obviando la funcionalidad que para el capitalismo tiene el
machismo. Los reformistas, que pretenden seguir engañándonos con la
cínica fábula de un supuesto e imposible “capitalismo con rostro
humano”, buscan ocultar que no lograremos cambiar la cultura
profundamente machista que impera en el mundo entero, a menos que
nos tomemos los medios de producción y por lo tanto los de difusión y
educación.
En este sistema toda una artillería de sometimiento ideológico es
implementada por la clase burguesa; los paradigmas de opresión son
activamente martilleados desde múltiples flancos: desde las
instituciones religiosas históricamente funcionales a las clases
dominantes, pasando por la gran industria audiovisual, hasta los nada
‘inocuos’ videojuegos. Para contrarrestar esa alienación a gran escala,
que tanto sufrimiento causa, se necesitan obviamente medidas que
subviertan el actual orden social; abolir el patriarcado no será posible
sin abolir el capitalismo.
62
Los caballos de Troya de la burguesía intentan hacer creer que las
mujeres explotadoras son nuestras hermanas, cuando ellas también
participan de perpetuar este sistema que devora a la naturaleza, explota
a los seres humanos (a la clase trabajadora), y perpetúa al machismo,
al racismo, al individualismo, comportamientos y discriminaciones
fundamentales para el mantenimiento de este sistema putrefacto.
Las mujeres revolucionarias sabemos que la sociedad de clases se
perpetúa sobre la violencia: esa violencia ejercida por la clase
explotadora (la que posee los medios de producción) contra las mayorías
explotadas y precarizadas, y sabemos también el lastre que significa el
machismo para la unidad de la clase explotada. Luchamos también por
un feminismo revolucionario, para poder oponerlo a la infame
recuperación que el sistema está intentando hacer de la lucha feminista,
con sus aberrantes Caballos de Troya y su discurso de “sororidad
interclasista» (¡cómo si tuviéramos que tener «sororidad» con una
capitalista explotadora, una proxeneta o una ficha del complejo militar-
industrial por el mero hecho de ser mujer!).
Luchamos contra toda explotación, y nuestra lucha contra la opresión
de la mujer trabajadora, la adelantamos luchando día a día contra el
machismo, contra la clase burguesa, contra un orden social de
explotaciones concatenadas; luchando contra la raíz que sostiene las
63
desigualdades sociales: luchando contra un sistema que fomenta la
opresión de la mujer porque necesita esta opresión como mecanismo de
dominación y división de la clase explotada; luchando contra un sistema
que fomenta la violencia machista a modo de control social (como
pérfida válvula de escape de las frustraciones que tal sistema crea);
luchando contra un sistema en el que un puñado de multimillonarios
capitaliza moliendo humanidades y rebanando el planeta.
El Feminicidio galopante es parte de la barbarie de un sistema
económico, político, social y cultural, el capitalista, violento en esencia y
perverso en su lógica. Un sistema basado en la explotación de las y los
trabajadores y en el saqueo de la naturaleza, es un sistema que necesita
banalizar la explotación, la injusticia social y la tortura.
La lucha por la emancipación de la mujer y la lucha contra el capitalismo
son inseparables. Por un feminismo revolucionario, que no es foto de
portada sino lucha cotidiana, que lucha contra toda explotación.
Fuente: https://cecilia-zamudio.blogspot.com/2021/03/8-marzo-mujer-
clase-trabajadora-feminismo-revolucionario-lucha-contra-toda-
explotacion.html?m=1
https://rebelion.org/8m-por-un-feminismo-revolucionario-que-no-es-
foto-de-portada-sino-lucha-contra-toda-explotacion/
64
DECÁLOGO ECOFEMINISTA PARA SALIR DE LA PANDEMIA
Ecofeminismo
Con motivo de la celebración del 8M, Ecologistas en Acción pone
de manifiesto que la crisis sanitaria provocada por el
coronavirus ha agudizado y acelerado la crisis ecológica,
económica, social y de género que la precedían.
La organización ecologista propone diez medidas ecofeministas
para construir la nueva normalidad encaminada a la
sostenibilidad ambiental, justicia social y equidad de género.
Asimismo, desde el ecofeminismo se aprovecha esta fecha para
visibilizar y reconocer la labor de colectivos como las jornaleras
en lucha, las mujeres de la PAH, Ganaderas en Red, los
colectivos de empleo de hogar o las defensoras del territorio
contra los proyectos extractivistas.
La pandemia de la COVID-19 ha mostrado las costuras de un sistema
sostenido en relaciones desiguales, de expolio y violencia, y ha
agudizado y acelerado las múltiples crisis estructurales que existían
previamente: ecológica, económica, social y de género. Nos
encontramos ante un prólogo civilizatorio, un acontecimiento que incide
en todos los ámbitos de la vida y lo cambia todo. Esta coyuntura nos ha
mostrado la rapidez con la que la sociedad puede transformarse y qué
actividades y trabajos han sido y son esenciales para sostener la vida.
La respuesta a la emergencia sanitaria solo afronta los síntomas, pero
no las raíces, las que son la fuente causal de la misma, provocados por
65
la acelerada desaparición y degradación de los ecosistemas debido a la
acción humana, el mal uso de las energías fósiles, la hipermovilidad, la
ganadería industrial, las industrias extractivas, la deforestación y la
destrucción de la biodiversidad. De la misma manera que nuestro
modelo de desarrollo se apropia de la naturaleza, también se apropia
del trabajo y los cuerpos de las mujeres, especialmente de aquellas que
viven en territorios del Sur global. La desigualdad de género, el sexismo,
el racismo, la LGTBfobia y otras formas de dominación, han
condicionado el devenir de la pandemia para miles de personas.
Todos estos factores nos han llevado a adoptar un modelo de habitar el
planeta incompatible con la vida, que solo atiende al beneficio a corto
plazo y al crecimiento ilimitado, en un planeta con recursos finitos. Un
modelo que funciona gracias a los trabajos de cuidados y mantenimiento
de la vida -realizados principalmente por mujeres- que se realizan en
condiciones de explotación y precariedad.
La desconexión entre el neoliberalismo global y las bases materiales que
permiten la vida ignora nuestra dependencia como especie -tanto de la
naturaleza como de otras personas que cuidan de nuestros cuerpos
vulnerables- así como las profundas desigualdades que nuestro modelo
de desarrollo genera.
Aunque durante la pandemia la presión sobre los ecosistemas ha
disminuido drásticamente, mejorando algunos indicadores ambientales,
la actividad extractivista en otros lugares no solo se ha consolidado, sino
66
que se ha visto aumentada. También se han agudizado las diferencias
sociales y la exclusión de muchas personas, la mayoría mujeres.
Además de la pérdida de cientos de miles de vidas, de empleos e
ingresos, la salud de las mujeres se ha visto afectada de forma
dramática. Son las mujeres las que en situación de mayor precariedad y
con diferente estatus migratorio, realizan mayoritariamente los trabajos
considerados como esenciales, sobre todo de cuidados, tanto en el
ámbito laboral como privado, en los hogares, con graves impactos
psicosociales en algunos casos.
En este contexto de crisis civilizatoria, Ecologistas en Acción señala que
se necesita promover otro orden social que enfrente las desigualdades
y relaciones de poder existentes y tenga en cuenta la interdependencia
y la ecodependencia. Por ello, la organización ecologista ha elaborado
un decálogo de medidas que haga posible vivir vidas dignas y
compatibles con el equilibrio de la naturaleza, y que defiendan la justicia
social, la equidad, la sostenibilidad y lo comunitario:
1. Una transición ecológica justa, para alcanzar una sociedad sin
energías fósiles, que revierta la pérdida de biodiversidad y que respete
los límites de los ecosistemas. Fomentar el consumo de cercanía
adaptado a los ciclos de la naturaleza y sustituir los sectores productivos
más contaminantes. Es necesario establecer mecanismos para que la
producción y distribución estén arraigadas en el territorio, sin depender
de la rentabilidad monetaria, garantizando su accesibilidad y
sostenibilidad. Los Fondos Europeos de Recuperación, Transformación y
67
Resiliencia y la llamada política Palanca VIII (Nueva economía de los
cuidados y políticas de empleo), deberían emplearse para la
construcción de una nueva economía y acelerar la urgente y necesaria
transición ecológica.
2. Una reforma profunda y urgente del sistema fiscal para que sea
progresivo, justo, verde y ecofeminista.
3. Reconocer el derecho al cuidado como un derecho fundamental
universal en todos los niveles, tanto público como comunitario, sacarlo
del ámbito privado y doméstico y de la responsabilidad exclusiva de las
mujeres, que los vienen realizando de manera gratuita e invisible. Se
debe garantizar la corresponsabilidad del trabajo doméstico y de
cuidados entre todas las personas, la sociedad y el Estado.
4. Reorganización socioeconómica de nuestro sistema productivo,
orientándolo hacia una economía de los cuidados que priorice las tareas
necesarias para el mantenimiento de nuestras vidas y evite su
mercantilización. Un nuevo equilibrio social que corrija las desigualdades
por razón de sexo, género, raza (entendida como contrucción social)
clase, diversidad funcional, orientación sexual o identidad de género,
con una redistribución y democratización del trabajo, productivo y
reproductivo, que sea indispensable y necesario.
5. Justicia antirracista y decolonial. Los territorios del Sur global y sus
saberes son expoliados desde hace siglos, perpetuando el desequilibrio
de poder y legitimando la violencia hacia estos colectivos de forma
sistémica. Es necesario atajar el racismo estructural, revertir estas
68
dinámicas y ubicar los límites de cada posición (histórica, política,
subjetiva) para hacer un frente común contra la dominación colonial,
capitalista, racista y patriarcal. No habrá justicia climática sin justicia
decolonial.
6. Abogar por una dieta sana, ecológica y sostenible sustentada por la
soberanía alimentaria y la implementación de la agroecología, en donde
el papel de las mujeres siempre ha estado muy presente y vinculado a
estas prácticas, compatibles con el respeto a la naturaleza y animales
no humanos. La experiencia y demandas en materia de igualdad de
colectivos de mujeres rurales deben ser escuchadas. No podemos seguir
manteniendo las prácticas de la agricultura y ganadería intensivas ni
asumiendo prácticas que agudicen las desigualdades.
7. Garantizar servicios y suministros esenciales (agua, comida,
saneamiento, energía, vivienda digna) y el derecho a la educación
pública de calidad, incluyendo la educación para la sostenibilidad, la
educación ecofeminista, educación para la paz, educación sexual, la
justicia restaurativa, la interculturalidad y empoderamiento de mujeres
y hombres como ciudadanos y ciudadanas globales.
8. Garantizar el derecho a la salud (física, ambiental, comunitaria,
sexual, mental). Esto exige una sanidad 100 % pública y universal,
protección frente a la contaminación, impulso a la atención primaria, a
la medicina preventiva y a la salud pública, así como a la educación
respetuosa con la diversidad de identidades de género y relaciones
69
sexoafectivas bajo la lógica público-social-comunitaria, en detrimento de
la lógica de mercado.
9. Ciudades y pueblos sanos y habitables, con especial cuidado a las
periferias, donde se priorice la participación comunitaria y no
organizando el trabajo y el consumo en función del capital y en oposición
y disociación con la naturaleza. Deben ser entendidas como espacios
comunes, producidos y reproducidos por quienes los habitan. Lugares
inclusivos y saludables que prioricen la coexistencia intergeneracional y
la proximidad de espacios naturales, una movilidad sostenible que prime
la cercanía, el uso peatonal y en bicicleta y el transporte colectivo,
basadas en una economía no lineal sino circular, que cierre ciclos.
10. Sociedades libres de violencias machistas y racistas, que garanticen
los derechos humanos (entre ellos los derechos sexuales y
reproductivos) de todas las personas, especialmente de quienes los ven
amenazados de manera especial (mujeres, personas LGTBQ+,
migrantes, habitantes del Sur global, personas amenazadas por
defender el territorio).
Además de publicar este decálogo ecofeminista, Ecologistas en Acción
quiere poner en valor luchas de mujeres que trabajan en dirección a los
objetivos planteados. «Desde el sindicalismo feminista de las jornaleras
en lucha, a las activistas de la PAH dejándose la piel por el derecho a la
vivienda, Territorio doméstico luchando por el 189, Ganaderas en red
visibilizando la situación de las mujeres en la ganaderías, o las
70
defensoras del territorio poniendo el cuerpo contra los proyectos
extractivistas», destacan.
Rosana Cervera, portavoz de Ecologistas en Acción: «Este 8 de marzo,
Día Internacional de la Mujer, Ecologistas en Acción hacemos un
llamamiento a todas las personas, y especialmente a las mujeres, para
seguir tejiendo alianzas entre las organizaciones feministas y las
ecologistas, junto con organizaciones sociales de todo tipo, como las
organizaciones que trabajan en defensa de los servicios públicos o los
derechos humanos. Porque sabemos que está en riesgo la sostenibilidad
de la vida, y que solo podremos asegurarla trabajando desde el
ecofeminismo por la justicia socioambiental. El futuro será ecofeminista,
o no será».
Fuente: https://www.ecologistasenaccion.org/163738/decalogo-ecofeminista-para-
salir-de-la-pandemia/
71
ARTÍCULOS SOBRE LO QUE ACONTECE
ESPECIALMENTE EN
72
UN VIEJO CONOCIDO ACECHA A COMUNIDADES
MEXICANAS
EMILIO GODOY
Foto: https://www.imagenradio.com.mx/aqui-estan-las-hidroelectricas-y-termoelectricas-de-mexico
Desde 2016, habitantes de tres municipios mexicanos del
central estado de Puebla mantienen detenida la construcción
de la central hidroeléctrica privada Puebla 1, mediante una
denuncia en que señalan al megaproyecto de falta de la
obligada consulta indígena y de provocar daños ambientales.
En la imagen una captura de un video de una protesta en uno
de esos municipios del Centro de Análisis e Investigación
Fundar. Foto: IPS/Fundar
MÉXICO, 16 mar 2021 (IPS) - Desde 2016, propietarios de tierras
comunitarias han detenido con recursos legales un parque solar privado
en el sudoriental estado mexicano de Yucatán, por falta de consulta
indígena y riesgo de daños ambientales.
“Abrieron unos caminos, brechas, sin conocimiento de las comunidades.
Hubo una consulta en otro municipio, pero no acá”, relató vía telefónica
a IPS el indígena maya Aurelio Mugarte.
73
Como sus vecinos, Mugarte se dedica a la agricultura en el ejido San
José Tipceh, una tierra pública cedida para la explotación comunitaria,
de 1468 hectáreas de extensión.
El proyecto se divide en Ticul A y B y es propiedad de Vega Solar Energía,
filial mexicana de la estadounidense Sun Power y cuyo accionista
mayoritario es la petrolera francesa Total SE. Implica la tala de unas 700
hectáreas de selva, en una zona sensible por su biodiversidad y por su
suelo kárstico, de composición porosa, propicio a tener socavones y que
se infiltra fácilmente.
Yucatán pertenece a la península homónima que también abarca a los
estados de Campeche y Quintana Roo y constituye el segundo
ecosistema terrestre latinoamericano más importante, después del de la
Amazonia.
Comunidades amenazadas por el proyecto interpusieron dos demandas
que siguen en curso contra el parque, que abarcaría territorios de los
municipios de Muna, Sacalum y Ticul, a unos 1300 kilómetros al sudeste
de Ciudad de México.
La planta es producto de la reforma energética de 2013 que abrió en
este país latinoamericano la generación y comercialización del sector al
capital privado nacional y extranjero. En el ramo eléctrico, la transmisión
y la distribución han seguido en manos de la estatal Comisión Federal
de Electricidad (CFE).
A partir de esa apertura, el gobierno organizó en 2016 y 2017 tres
subastas eléctricas para la construcción de generadoras que vendieran
74
su producción a la CFE. En 2016, Vega Solar fue una de las
ganadoras con Ticul A y B, que instalará unos 1,22 millones de paneles
fotovoltaicos para generar unos 600 megavatios (Mw).
“La reforma nos afectó y permitió que llegaran las empresas. El gobierno
buscó favorecer a la empresa. No se trata de destruir la naturaleza, si la
energía renovable va a destruir eso, no le veo el beneficio”, denunció
Mugarte.
Ahora el presidente Andrés Manuel López Obrador, en el cargo desde
diciembre de 2018, quiere revertir la reforma energética, establecida por
su antecesor, Enrique Peña Nieto, en agosto de 2013, al menos en lo
que respecta al medular sector eléctrico.
Contrarreforma eléctrica
La nueva ley eléctrica, promulgada el 9 de marzo, privilegia la
generación de las plantas de CFE por delante de las privadas, a pesar
de ser más onerosa.
Desde ahora, en el Mercado Eléctrico Mayorista (MEM), administrado por
el estatal y autónomo Centro Nacional de Energía (Cenace), debe
comercializarse primero la generación del sistema eléctrico nacional y
solo luego el fluido de las corporaciones privadas, especialmente la
proveniente de las fuentes eólica y solar.
El gobierno y su partido, el Movimiento de Regeneración Nacional
(Morena, no tocaron la Constitución como sí sucedió en 2013, pero los
cambios revierten la reforma energética de entonces que abrió la
generación y comercialización al capital privado.
75
Esa apertura buscó fomentar la competencia en el mercado y los precios
más bajos de despacho. Pero CFE arguye que le perjudica y pierde
dinero al quedar relegada su generación. En enero, en el
MEM participaron 98 generadores, entre ellos la CFE y operadores
privados.
Con la contrarreforma eléctrica, el Cenace deberá despachar primero la
energía generada por las hidroeléctricas de CFE, después el fluido de
combustibles fósiles y otras fuentes de esa empresa estatal, luego la
eólica y solar de generadores privados y en último lugar la de centrales
de ciclo combinado de empresas privadas, que generan con gas y vapor.
El Proyecto Hidroeléctrico Puebla 1 desviaría el río Ajajalpan,
en el central estado mexicano de Puebla, y perjudicaría la
principal fuente de agua de tres municipios de la sierra norte
de esa región mexicana. Foto: IPS/Fundar
Además, conmina a la autónoma Comisión Reguladora de Energía a
invalidar los permisos de autoabastecimiento obtenidos por particulares
para generar su propia electricidad, de fuentes como gas, hidroeléctrica,
eólica y solar fotovoltaica, en lo que se conoce como generación
distribuida o descentralizada.
Sujeta también los futuros permisos de generación a los criterios de
planificación de la Secretaría (ministerio) de Energía, lo que implica
76
colocarlos bajo las disposiciones gubernamentales. Finalmente, la nueva
norma elimina la obligatoriedad de las subastas eléctricas.
La aplicación de la nueva ley está temporalmente suspendida por orden
deun juez, aunque se da por hecho de que saldrá adelante.
En la segunda economía latinoamericana, con una población de 126
millones de personas, el consumo de electricidad se sitúa actualmente
en unos 270 000 gigavatios hora, de los que la mitad los aporta CFE y
el resto operadores privados.
Las fuentes de la electricidad son primordialmente combustibles fósiles
(casi 76 por ciento), hidroelectricidad (casi ocho por ciento), eólica (6,59
por ciento), fotovoltaica (cuatro por ciento), nuclear (tres por ciento) y
geotermia (1,5 por ciento).
Las comunidades afectadas por megaproyectos sienten que la
contrarreforma les da un respiro, pues de facto ya no tendrán encima la
sombra de los grupos privados. Pero no se libran de CFE, que
históricamente ha ignorado sus planteamientos.
“No creemos que los cambios nos favorezcan, porque la energía no es
para nosotros”, aseguró Mugarte, cuya zona se alimenta de electricidad
generada por una planta termoeléctrica, alimentada por combustibles
fósiles.
La reforma energética dejó a las comunidades locales a expensas de la
CFE y de la también estatal Petróleos Mexicanos (Pemex) y las empresas
privadas, pues no podían rechazar la instalación de un proyecto.
77
Si bien estipula la realización de una consulta indígena y una evaluación
del impacto social, estas se llevaban a cabo después de la planificación
y diseño de la obra y se han convertido en un trámite.
Ante ello, los pueblos afectados han optado por las demandas ante la
justicia por la ausencia de lo que consideran una consulta libre de
presiones, previa al diseño y construcción de los proyectos y con
información adecuada y oportuna.
En otras regiones del país se ha repetido el mismo esquema, que en
Yucatán.
En el central estado de Puebla, la empresa Deselec 1-Comexhidro
intenta erigir la central hidroeléctrica Puebla 1 para abastecer de
electricidad a las filiales en México de la cadena estadounidense de venta
minorista Walmart, una cadena de restaurantes y otra de ropa.
“Sí hay algún cambio, porque eso permitiría que la energía sea
mexicana, pues estaba privatizada. De todos modos, es preocupante.
Quieren seguir manejando el petróleo, la contaminación y que se
construyan más hidroeléctricas, para que sigan obstruyendo las
cuencas”, dijo a IPS vía telefónica el indígena totonaco José Galindo,
desde el municipio de San Felipe Petatlán, en Puebla.
El integrante del no gubernamental Consejo Regional Totonaco, un
pueblo originario mesoamericano del este mexicano, dejó en claro que
“no nos sentimos más respaldados con la CFE, ni que tengamos energía
de mejor calidad”.
78
Desde 2016, residentes en tres municipios de Puebla mantienen
detenido el megaproyecto hidroeléctrico en el cauce del río Ajajalpan,
su principal fuente hídrica, mediante dos demandas legales. El llamado
Proyecto Hidroeléctrico Puebla 1 establece la construcción de dos
represas, Ahuacoya y Zoquiapa, la primera de las cuales tendría una
cortina de 45 metros de altura y una capacidad generadora de 60 Mw.
“Hubo simulación de consulta indígena. Los permisos ya los tenían desde
años pasados, solo le informaron al pueblo de lo que querían hacer. Las
instituciones gubernamentales fueron parte de la simulación. Nunca nos
informaron del proyecto”, indicó Galindo, cuyo municipio, de 4000
habitantes, está a unos 230 kilómetros al sur de Ciudad de México.
Antes de la aprobación legislativa de los cambios en el sistema de la
comercialización de la electricidad, autoridades y organizaciones de 14
pueblos indígenas pidieron participar en la generación renovable.
Plantearon la necesidad de “un nuevo modelo de transición energética
social y democrática, sin participación de grandes multinacionales ni de
megaproyectos privados”.
Desde 2018, poblaciones descontentas han logrado detener al menos
seis proyectos renovables en Yucatán y una central hidroeléctrica en
Puebla.
La CFE no planea invertir en energía renovable, porque favorece la
explotación de los combustibles fósiles, las grandes plantas
hidroeléctricas y la energía nuclear.
79
Comunidades como San José Tipceh y San Felipe Tepatlán solo desean
la anulación de los proyectos.
“Queremos que les nieguen la licencia ambiental. No se trata de destruir
la naturaleza, si la energía renovable va a destruirla, no le veo el
beneficio. Que la pongan en el desierto o en un sitio que no afecte la
naturaleza”, pidió Mugarte.
Por su parte, Galindo confió en la cancelación de la central hidroeléctrica.
“Eso sería muy importante, pues hay muchas violaciones a derechos.
Ojalá que cada pueblo pueda tener su propia energía y la pudiera
controlar”, declaró.
ED: EG
Fuente: http://www.ipsnoticias.net/2021/03/viejo-conocido-acecha-comunidades-
mexicanas/
80
SE ACERCAN LAS GUERRAS POR AGUA
SIMÓN VARGAS
AGUILAR*
En la imagen el lago de Cuitzeo, en riesgo de desaparecer
Hasta hace un par de años, creímos que las probables causas de las
siguientes guerras serían el petróleo o los minerales preciosos; sin
embargo, cada vez se hace más probable que el motivo sea por el
valioso oro azul, ya que, al estilo Mad Max, en quizá al menos 10 años
el mundo entero se encontrará luchando por suministros de agua.
Y aunque pareciera poco probable, este vital líquido se hace cada vez
más necesario, a pesar de que oficialmente no hay una guerra
etiquetada como tal por agua. De acuerdo con datos de la Organización
de Naciones Unidas, hasta 2018 se tenían detectados 263 conflictos
internacionales como el de la Cuenca de Zambeze, la tragedia del Nilo,
el drama del Volta en África, las batallas de Mali, Nigeria y el sureste
chino, así como la confrontación en el Golfo de Bengala, en India; incluso
en México se tienen registrados al menos 916 conflictos sociales
derivados de la lucha por agua; como ejemplo tenemos el lago de
* Analista en temas de Seguridad, Justicia. Si deseas recibir mis columnas en tu correo electrónico,
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Cuitzeo, ubicado en Michoacán, que pasó de cuatro metros de
profundidad en 1946 a 20 centímetros en 2018.
La contaminación, la presión demográfica, el cambio climático y el
uso descontrolado han comenzado a generar escasez, provocando
carestía alimentaria y tensiones entre países, que a la larga podrán
desembocar en guerras por agua; según el Centro Común de
Investigación de la Unión Europea, durante el año pasado se
identificaron zonas potenciales donde podrían comenzar estos conflictos
bélicos presentando como foco de atención las regiones de los ríos Nilo,
Indo, Tigris, Éufrates, Ganges y Colorado.
Desafortunadamente, el tema no es nuevo. Ya en 1995 el entonces
vicepresidente del Banco Mundial, Ismail Serageldin, lanzó una de las
primeras advertencias: Si las guerras de este siglo se disputaron por el
petróleo, las guerras del próximo siglo se librarán por el agua, a menos
que cambiemos nuestro enfoque para administrar este recurso precioso
y vital.
Pareciera que nos acercamos cada vez más al funesto pronóstico
donde el agua se convierta en un detonante para las guerras. A pesar
de los esfuerzos realizados en años recientes, la escasez continúa en
aumento; en datos de la Organización Mundial de la Salud, alrededor de
5 millones de personas podrían sufrir la falta de este vital líquido para el
año 2050, y de acuerdo con el World Resources Institute, para 2040
nuestra realidad sería sumamente complicada, ya que éste prevé que al
82
menos 14 de los 33 países de Oriente Medio se enfrenten a recortes de
suministros de agua, así como Estados Unidos, China e India.
La pérdida de agua no sólo se debe a la sobrexplotación de ríos y
mantos acuíferos, también es atribuida al cambio ambiental, lo que a su
vez ha impactado en la reducción cada vez más evidente de las
precipitaciones; tan sólo en 2011, el norte de nuestro país vivió una de
las peores sequías en 70 años, al igual que España en 2017.
La preocupación es mundial, la herramienta de Alerta Temprana
Global Agua, Paz y Seguridad (WPS), financiada por el gobierno
holandés, y que fue presentada al Consejo de Seguridad de la ONU,
combina variables medioambientales como las precipitaciones, las malas
cosechas y los factores políticos, económicos y sociales para predecir el
riesgo de conflictos violentos relacionados con el agua; predijo que
probablemente diversos conflictos se producirían a partir de 2020 en
Irak, Irán, Mali, Nigeria, India y Pakistán. Los desarrolladores afirman
que la tasa de éxito en la identificación de zonas de enfrentamientos
donde podrían ocurrir muchas muertes es de 86 por ciento. La
herramienta se centra actualmente en los puntos conflictivos de África,
Oriente Medio y el sudeste asiático.
Aplicar medidas es un reto que debemos asumir, ya que implica no
sólo realizar acciones pequeñas en casa o en nuestras empresas, sino
actividades a gran escala de organismos establecidos a nivel mundial e
incluso de gobiernos nacionales; la escasez de agua debe enfrentarse
de manera responsable y frontal.
83
¿Qué podemos hacer para comenzar a revertir la situación o al menos
aminorarla? Ser conscientes, comenzar por pequeñas acciones; no sólo
se trata de no contaminar, sino también de no desperdiciar, de dar el
uso correcto a los recursos con los que aún contamos; de no ser
consumistas, de pensar en el prójimo porque si no actuamos con
sensatez y pensando en el futuro, pronto nos encontraremos en una
realidad postapocalíptica donde la vida, la supervivencia y la guerra giran
en torno a este preciado recurso: el agua.
Olvidamos que el ciclo del agua y el ciclo de la vida son uno mismo.
Jacques Y. Cousteau
* Analista en temas de Seguridad, Justicia. Si deseas recibir mis
columnas en tu correo electrónico, suscríbete
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Fuente: https://www.jornada.com.mx/2021/03/20/opinion/017a2pol
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LA PANDEMIA DE COVID-19 EN MÉXICO: EL PAPEL
FUNDAMENTAL DE LOS CUIDADOS PALIATIVOS Y DE LA
BIOÉTICA
ELVIRA LLACA GARCÍA
LUZ ADRIANA TEMPLOS ESTEBAN*
DOI: 10.36105/mye.2021v32n1.05
Resumen
La pandemia de Covid-19 ha puesto a prueba a todos los sistemas de
salud. La crisis que provocó ha impactado a la sociedad, economía y, en
general, a todas las actividades humanas. Los cuidados paliativos y la
bioética tienen un papel fundamental en el manejo de la nueva
enfermedad Covid-19, que no tiene aún tratamiento conocido. Los
principios de la bioética, sumados a la práctica de los cuidados paliativos
han sido el soporte de la pandemia. Los pacientes recuperados y
aquellos muertos a causa del Covid-19 han requerido en algún momento
de medidas de soporte y paliación, ya sea en unidades hospitalarias o
en su domicilio. Es deseable que se impulsen estas herramientas: la
* E. Llaca: Colegio Mexicano de Cuidados Paliativos y Soporte. Facultad de Bioética. Universidad
Anáhuac México, México. Correo electrónico: [email protected] https://orcid.org/0000-
0002-7971-1811
L. A. Templos E.: División de Cuidados Paliativos y Clínica del Dolor del Hospital General Dr.
Manuel Gea González, Ciudad de México, México. Correo electrónico:
[email protected] https://orcid.org/0000-0001-9377-6964 Recepción: 20 de
septiembre de 2020. Aceptación: 15 de octubre de 2020.
85
paliación y la ética de la vida, ya que no sólo las soluciones que permiten
cuidar la vida y la salud provienen de la tecnología, y no deben ser
mutuamente excluyentes. A un año del inicio de la pandemia, hay
muchas preguntas por responder, mucha investigación por hacer. Sin
duda, el año 2020 dará motivos de reflexión a todos los seres humanos
y, en especial, a los responsables de cuidar la salud.
Introducción
La pandemia de Covid-19 es tema de muchos escritos, discusiones
académicas, médicas y tema habitual en los medios de comunicación.
Algunas voces proponen que existió una realidad global antes del
surgimiento del virus en Wuhan, y existirá una nueva realidad después
de él, o bien junto a él, cuando podamos convivir con el coronavirus sin
riesgo a enfermar, porque ya hemos creado inmunidad, como
históricamente ha sucedido con el surgimiento de los nuevos patógenos.
El presente artículo tiene la intención de resaltar dos herramientas que
pueden trabajar muy bien juntas: los cuidados paliativos y la bioética,
acompañando a los enfermos y a sus familias, y también a los
profesionales de la salud quienes, para cumplir con la lex artis de su
profesión, requieren apoyarse en diversos puntos de vista, desde la
terapéutica al acompañamiento, siempre en un marco de valores.
Este artículo se divide en tres partes: la pandemia, los cuidados
paliativos y la bioética. Presenta una visión desde el campo de batalla y
desde la academia, que pretende resaltar la importancia de cultivar e
incrementar la formación, información y preparación en cuidados
86
paliativos y en bioética del personal de salud y de toda persona
interesada en la medicina y la ética.
1. La pandemia de Covid-19
En los últimos días del 2019, una catástrofe se gestó en Wuhan, China,
y pocos meses después repercutió en el mundo entero, trastornando la
vida del ciudadano posmoderno en los campos sanitarios, sociales,
emocionales y económicos.
La causa de la crisis mundial que debilitó al hombre en constante
empoderamiento, y sigue haciéndolo todavía un año después, proviene
de un agente patógeno, de talla pequeñísima: de 65 a 125 nm de
diámetro (1). Hoy se sabe que este virus es el SARS-CoV-2, compuesto
de ARN. El ya muy estudiado miembro de la familia de los coronavirus
tiene un 96% de similitud con el Bat-CoV. La enfermedad del SARS-CoV-
2 fue nombrada Covid-19 por la Organización Mundial de la Salud. El
ciclo de vida de este coronavirus ha implicado parasitar inicialmente a
un murciélago y, posteriormente, a otro animal intermedio, para llegar
finalmente al ser humano. Se considera una zoonosis (enfermedad que
se trasmite en forma natural de los animales al ser humano) (2).
Una de las primeras pandemias en la historia de la que se tiene noticia
es la «plaga de Justiniano», en el Imperio Romano de Oriente o
Bizantino, y se extendió desde el año 541 hasta el 543 por Europa, Asia
y África, cobrando la vida de 25 millones de personas. Los historiadores
suponen que la causante fue la bacteria Yersinia pestis, mismo agente
causal de la «peste negra», que en el siglo XIV mató a 75 millones de
87
personas. Yersinia pestis es inyectada al ser humano por una pulga
transportada por una rata. Actualmente la Yersinia pestis puede ser
controlada médicamente con antibióticos.
En el siglo XX, en 1918, después de la Primera Guerra mundial, la «gripe
española», causada por la influeza del virus AH1N1, dejó unos 100
millones de muertos. En 2009, un virus del mismo tipo provocó
nuevamente una pandemia de influeza H1N1, en la que murieron 18.000
personas aproximadamente.
Todavía en el siglo XXI las enfermedades virales siguen sin tener
tratamiento. El manejo de los padecimientos virales consiste en dar
soporte al enfermo, en espera de que su sistema inmune logre dominar
la enfermedad (3).
El Covid-19 aún no está totalmente descrito; se requiere tiempo para
poder hacer un estudio del pronóstico y de las posibles complicaciones
en el mediano y largo plazo.
La severidad del cuadro clínico del Covid-19 es muy variable:
asintomático, enfermedad leve, estable con o sin repercusión
respiratoria, afectado e inestable pero no en estado crítico, críticamente
enfermo. Esta descripción se hizo en los primeros meses de la pandemia
en Italia, y hoy las condiciones no han cambiado mucho. La severidad
de la afección y la posibilidad de poner la vida del enfermo en peligro
dictará la modalidad del tratamiento (4).
88
2. Cuidados paliativos
Los cuidados paliativos surgieron con el hombre; en general, el enfermo
es paliado en su dolor y sufrimiento por su propia familia y por sus
allegados. Se sabe que en la Edad Media, durante la epidemia de la
peste negra, la única medida posible era el soporte de los síntomas y el
acompañamiento.
La historia formal de los cuidados paliativos inició a finales del siglo XIX
en Europa. En algunos centros de población ubicados en el paso de los
viajeros había centros de acogida para los enfermos moribundos (5).
En este sentido fue trascendente el inicio del movimiento «Hospice», ya
que dio lugar a reconocer la necesidad de cuidar a los enfermos que no
tenían curación. St Cristopher Hospice, a cargo de Cicely Sauders, fue
fundado en Inglaterra en el siglo XX y, posteriormente, el modelo se
replicó en varios países (5).
En México, los cuidados paliativos fueron desplazados durante el siglo
XX de las instituciones de salud por la tecnología aplicada al diagnóstico
y tratamiento de las enfermedades. Hoy sabemos que la paliación y la
tecnología biomédica no son mutuamente excluyentes; se necesitan
ambas opciones: curar con todo lo existente, sin llegar a la distanasia, y
cuidar cuando ya no es posible curar. El avance de los cuidados
paliativos en México es importante; no son la solución para el enfermo
oncológico, como lo fueron originalmente, sino la alternativa para
mejorar la calidad de vida de personas terminales, con enfermedades
crónicas y para pacientes enfermos, cuya evolución natural de la
89
enfermedad es la curación sin la intervención de un tratamiento médico
(6).
México se encuentra entre los pocos países con una legislación clara en
cuidados paliativos. Éstos son un derecho sanitario de sus habitantes.
Es prioridad fortalecer la formación en ellos, tener unidades para la
atención de los pacientes que requieren paliación y favorecer las
políticas públicas que apoyen esta importante área de la medicina (7).
La Organización Mundial de la Salud ha definido los cuidados paliativos
como la manera de mejorar la vida del paciente y de su familia, en caso
de padecer una enfermedad que amenaza la vida, atendiendo el dolor y
los síntomas, y dando apoyo espiritual y psicológico, desde el
diagnóstico del padecimiento hasta la muerte y durante el duelo (8). La
unidad de cuidados paliativos acompaña al enfermo y a su familia, y una
vez que el paciente muere, acompaña también a la familia en su duelo.
En 2020, la Comisión Lancet redefinió los cuidados paliativos tras un
riguroso estudio, y llegó a la conclusión de que la definición de la OMS
de 2002 se tornó insuficiente. Los cuidados paliativos de hoy incluyen la
prevención, la identificación temprana, el manejo de los problemas
físicos y otros síntomas como el distrés psicológico y espiritual, además
del cuidado de las necesidades sociales. La intervención debe estar
basada en evidencias. Proveen soporte y ayuda a la vida del paciente
hasta cuando aparezca la muerte natural, facilitando la comunicación y
siguiendo las metas del paciente. Se aplican siempre de acuerdo con las
necesidades del paciente. Se proveen junto con otras medidas
terapéuticas que necesite el enfermo. Son una influencia positiva en la
90
enfermedad. No posponen la muerte, sino que afirman la vida en su
final. Proveen soporte a la familia durante la enfermedad del paciente.
Reconocen los valores culturales del enfermo y de su familia. Se aplican
en casa, así como en instituciones y hospitales, y en nivel primario,
secundario o de alta especialidad. Pueden ser brindados por
profesionales con entrenamiento básico. Se requiere de equipos
multidisciplinarios. Deben adoptarse políticas públicas desde el Gobierno
que incluyan los cuidados paliativos. Los seguros médicos deben
incluirlos. Requieren proporcionar acceso a medicamentos contra el
dolor y la tecnología básica para el manejo de dolor. Deben ser parte de
los servicios básicos de salud, e involucrar a población vulnerable y a
niños. Las universidades, hospitales y lugares de formación de personal
de salud deben incluir esta asignatura en su programa de estudios. El
estudio de la Comisión Lancet se verifica durante la pandemia que
estamos presenciando (9).
El Covid 19 ha puesto a prueba a todos los sistemas de salud,
provocando una crisis sanitaria internacional, inicialmente por la
necesidad creciente de camas de hospital, de ventiladores mecánicos,
de insumos y por la insuficiencia de profesionales de la salud. A un año
del inicio de la enfermedad, no se ha descrito un tratamiento efectivo, a
pesar de la investigación en este campo. La paliación de dicha
enfermedad para aliviar el sufrimiento es la mejor manera de ayudar a
los enfermos y a sus familias (10).
91
Sabemos que el espectro clínico de la enfermedad es amplio: puede ser
asintomático, con sintomatología moderada, o paciente con neumonía
severa y falla orgánica múltiple.
Desde la esencia misma de la medicina paliativa y de soporte, son
cardinales cuatro principios en la paliación de las personas infectadas
por el SARS-Cov-2:
Principio 1. Aliviar los síntomas
El enfermo con Covid-19 frecuentemente presenta disnea, que puede
ser manejada con medicamentos o con medidas físicas. En el primer
caso, se usará la mínima dosis de opioide o benzodiacepina, de manera
que sea capaz de evitar la sensación de falta de aire a nivel central. En
el segundo caso, se recolocará al paciente en su cama para que le sea
menos difícil la respiración. El cuadro clínico suele estar acompañado de
sufrimiento; de necesidades sociales, emocionales y espirituales que
requieren atención y se dificultan, ya que el paciente debe estar aislado
y la familia no puede acompañarlo. La paliación debe dirigirse al paciente
y a su familia ya que, como sabemos, la unidad de cuidados paliativos
es el enfermo y su familia, y aquí surge un nuevo reto para aliviar los
síntomas (10).
Principio 2. Cuidado centrado en el paciente
Incluye la necesidad de tomar en cuenta siempre las preferencias del
paciente. Básicamente, el paciente consciente debe decidir si acepta ser
trasladado a un hospital, si quiere ser conectado a un ventilador y, en
caso de que el paciente ya no pueda decidir, se debe subrogar este
92
derecho a sus familiares. En las circunstancias de esta pandemia, es
necesario guardar un equilibrio entre el cuidado centrado en el paciente
y el bien de la comunidad. Los médicos deberán comunicar al paciente
y a su familia que la preferencia del paciente no puede cumplirse por el
riesgo de contagio del virus causal de la enfermedad, por las
comorbilidades del paciente y, en ocasiones, por la situación de los
recursos (10).
Principio 3. Cuidar al paciente y a la familia
La enfermedad afecta al paciente, a su familia y allegados, y todos
requieren cuidado. La comunicación es un aspecto fundamental en el
manejo de los pacientes en todas las circunstancias. El indispensable
aislamiento de la persona infectada con Covid-19 complica mucho el
cumplimiento de este principio. Hemos visto a enfermos acompañados
a través de tabletas electrónicas, de celulares con videollamada y, en
general, de cualquier medio digital que permita la comunicación a
distancia. Sin embargo, aunque es útil, no elimina totalmente la
ansiedad de los enfermos y sus familias. Hoy vemos que la
«videodespedida» es una triste realidad cuando el enfermo no puede
estar acompañado en la muerte, como aparece en la fotografía que
Francesca Cortellaro publicó en Milán.
Se ha incrementado la necesidad de establecer conversaciones difíciles
con pacientes y familias, respecto del pronóstico, del triaje y sobre la
falta de ventiladores en los medios hospitalarios. Esta habilidad es
indispensable en cuidados paliativos (10).
93
Principio 4. Tener equipos multidisciplinarios
Las necesidades del enfermo y de sus familias surgen de la
multidimensionalidad humana, y es necesaria la atención de todos los
aspectos que surgen. Como en ninguna otra época, el personal de salud
ha debido asumir otras funciones diferentes de las suyas, y durante esta
pandemia ha sido característico el «entrenamiento cruzado» para
adaptarse a las circunstancias hospitalarias y de manejo domiciliario. El
especialista en medicina paliativa ha sido sobrepasado y más que nunca
ha sido valorado en su actuación (10).
La medicina paliativa y los cuidados paliativos se ubican en la primera
línea de servicio a la comunidad. Es recomendable mantener al enfermo
en casa, con cuidados paliativos, y darle seguimiento cercano por medio
de telemedicina o de llamadas telefónicas. El médico, en el caso de un
enfermo con comorbilidades y estado de vulnerabilidad, debe decidir
junto con el enfermo y la familia la conveniencia de mantenerlo en casa,
limitando el riesgo de adquirir una infección hospitalaria y de estar
aislado lejos de casa. En el manejo de todo enfermo siempre será
conveniente conocer su voluntad anticipada y preguntarle sus
preferencias para cuando él no pueda decidir (11).
Durante la pandemia se ha modificado la esencia de los cuidados
paliativos, la cual radica en el acompañamiento y cercanía. El paciente
debe estar aislado; las visitas familiares no existen; quienes se acercan
al enfermo usan un equipo especial que da sensación de lejanía e
irrealidad; en caso de haber otro enfermo en el cuarto de hospital, debe
94
estar separado al menos dos metros, y el personal sanitario limitar sus
visitas (12).
En cada unidad de atención médica y en el domicilio en donde debe
prestarse ayuda a una persona con Covid-19, la pandemia requiere
resolver los síntomas que presenta la persona enferma, además de su
observación constante, para resolver oportunamente los problemas y
complicaciones que se presenten y manejar sus síntomas. La
Organización Mundial de la Salud, en su Guía sobre cómo mantener los
servicios de salud durante la pandemia, habla de la inmunización
(cuando esté disponible), de la atención materna, de la atención de
emergencias y de las enfermedades crónicas, entre otras, pero se olvida
de los cuidados paliativos, que son indispensables.
La disponibilidad de opioides y el conocimiento para recetarlos, la
telemedicina, los planes de servicios anticipados, la capacitación del
personal de salud y de los cuidadores primarios es esencial, y es el
quehacer cotidiano de la medicina paliativa (13).
3. Bioética
La bioética es una interdisciplina que nació en 1970, desarrollada por
Van Rensselaer Potter en Estados Unidos. Hoy, la interdisciplina de
Potter se enfrenta por primera vez a una crisis sanitaria global: es la
mayor prueba que la bioética ha enfrentado desde su nacimiento, y
puede decirse que ha estado presente acompañando a los médicos y
elaborando guías de actuación. Seguramente muchos ciudadanos
95
globales con acceso a la información formal e informal han escuchado
en repetidas ocasiones la palabra «bioética».
Reich define la bioética en 1978 como el estudio sistemático de la
conducta humana en el área de las ciencias de la vida y la atención de
la salud, en tanto que dicha conducta es examinada a la luz de principios
y valores humanos (14).
La necesidad más urgente y emanada de la práctica médica de contar
con una interdisciplina, la bioética, que se ocupara de la ética en las
intervenciones sobre el hombre, inició en 1947, cuando Claude Beck
realizó la primera desfibrilación. Con esto logró lo que el hombre había
soñado siempre: revertir la muerte. En 1950, Bower y Bennett
desarrollan el primer ventilador mecánico de presión positiva, y en 1955
apareció en forma comercial el Bird Mark 7, el primer «respirador
artificial», motivo de serios y nuevos problemas de tipo diagnóstico,
pronóstico y ético, ya que la muerte cardiaca se separó de la cerebral,
surgiendo en muchas ocasiones la pregunta acerca de la calidad de vida
del enfermo. La crisis ética de aquellos que no podían ofrecer un
ventilador a sus pacientes invitó al papa Pío XII a llamar «extraordinaria»
a toda medida que estuviera fuera del alcance del médico o que tuviera
mal pronóstico (15).
La sobrevaloración de la tecnología aplicada al manejo de las
enfermedades caracteriza al mundo contemporáneo. La bioética
balanceó la tecnología aplicable a la salud con el impacto de lo que
significan los tratamientos para el enfermo, y ha insistido en el respeto
a la autonomía del enfermo.
96
Actualmente, la extensión de la discusión bioética es enorme: va desde
la creación de ciborgs hasta la necesidad de aplicar la justicia
distributiva; desde el uso de cirugía robótica, hasta la medicina paliativa
(16).
La salud pública siempre está influenciada por las decisiones políticas
del momento, lo cual hace, en ocasiones, más complejo el diálogo
indispensable entre los actores de la bioética. En la crisis sanitaria actual
hemos visto que las palabras de Edmond Pellegrino son reales: la política
interviene en todo momento en las decisiones sobre la salud (16).
En México, la epidemia de obesidad detectada desde 1988 ha traído
como consecuencia el incremento de enfermedades metabólicas en la
población, en todas las edades, y esto se debe, sin duda, a las políticas
alimentarias del país. Hay una tendencia permanente al sobrepeso y a
la obesidad, que ponen en evidencia la necesidad de establecer políticas
públicas tendientes a regular los alimentos que se ofrecen a la población.
Lamentablemente la obesidad inicia en la infancia y se ha normalizado
en la sociedad mexicana, sin pensar que esto es fuente de diabéticos
infantiles, de morbilidad alta y de deterioro de la salud (17). México
recibe al Covid-19 en plena epidemia de obesidad, lo cual hace a esta
población más susceptible de infectarse al tener una comorbilidad, ya
que hace al enfermo más vulnerable. Durante la pandemia de Covid-19
se decide etiquetar los alimentos que tienen exceso en sodio, azúcar,
grasas saturadas y grasas trans, sodio y cafeína. Este es un ejemplo de
lo que Pellegrino plantea como la influencia de la política en la bioética.
97
El problema de postergar soluciones a problemas evidentes que afectan
a la vida y la salud, es directamente un problema bioético (16).
En general, la bioética clínica, tal vez la rama más conocida de esta
disciplina, se enfrenta a dilemas del encuentro clínico individual y a
enfermedades de poblaciones y grupos. Durante la pandemia se ha visto
enfrentada a considerar las obligaciones hacia los grupos sociales,
cambiando el enfoque del individualismo al de satisfacer las necesidades
de toda la población (18).
Desde el punto de vista poblacional, los análisis bioéticos deben
considerar la extensión, dirección, distribución de los recursos,
incluyendo los temas de escasez, y la problemática de los individuos
vulnerables.
Los principios bioéticos para desarrollar en situaciones de problemas
humanitarios son el respeto a la persona, la no maleficencia, la
beneficencia, la justicia, la solidaridad, el no abandono y el principio de
doble efecto (18).
En nombre del respeto a la persona, se considera fundamental
considerar la autonomía. Derivados del principio de autonomía tenemos
el proceso del consentimiento informado, la voluntad anticipada y las
órdenes de no resucitar (19). Se habla mucho de autonomía en la
pandemia. Para algunos autores, en casos de crisis extremas como en
la pandemia actual, podría omitirse la decisión del paciente. Para otros,
respetar la autonomía equivale al respeto de la dignidad de la persona,
siempre y cuando la petición sea proporcionada, esté dentro de la
98
legalidad y exista el recurso. Es indispensable contar con el
consentimiento del enfermo para su tratamiento y conocer
anticipadamente sus preferencias. Es importante platicar con el paciente
acerca del final de su vida cuando él no pueda decidir y orientarlo acerca
de lo que es posible y lo que no, así como de los costos emocionales y
económicos que supondrán para sus familias. La información completa
dada al paciente y a la familia es una obligación del médico para que la
toma de decisiones sea informada (20).
La no maleficencia puede corresponder a la necesidad de adecuar el
esfuerzo terapéutico, o limitar el esfuerzo terapéutico con el objetivo de
no dar tratamientos fútiles a los enfermos y no caer en distanasia. La
distanasia se refiere al esfuerzo fútil del médico por prolongar la vida del
paciente, o hacer más lenta la muerte con la consiguiente angustia y
sufrimiento del paciente y su familia (21). Para evitar la distanasia es
importante conocer el término de adecuación del esfuerzo terapéutico o
la limitación del esfuerzo terapéutico. Éste es un proceso que
proporciona el tratamiento al estado del paciente. Es necesario valorar
el estado clínico de un enfermo y tomar la decisión basada en evidencias
médicas, para no instalar un tratamiento o para suspender uno ya
iniciado. En el caso de la pandemia, adecuar el esfuerzo terapéutico será
retirar al enfermo de la Unidad de Terapia Intensiva, descontinuar la
ventilación artificial, renunciar a la medicación múltiple, como sucede en
pacientes que han adquirido una infección nosocomial y reciben varios
medicamentos cuando presentan una falla orgánica múltiple. El paciente
contará en todo momento con ayuda médica, paliación de su
99
enfermedad y acompañamiento. La relación del médico y la familia
deberá ser lo más cercana posible, y se debe informar de toda medida
que se tome con el enfermo (22).
La beneficencia se relaciona con el control de los síntomas y con
favorecer la ortotanasia, que es sinónimo de muerte digna. Ésta es la
forma de morir que prefiere la bioética y la legislación en México, y se
refiere a respetar el momento de la muerte natural del paciente, sin
alargar ni acortar la vida (21). Es indispensable saber dar malas noticias
(24) y acompañar y favorecer el duelo, ya que es parte del final de la
vida (23).
La justicia tiene que ver con la necesidad de asignar correctamente los
recursos escasos, sobre todo aquellos que son no divisibles. Maximizar
el bien para la mayor cantidad de pacientes es una de las metas a lograr
en situaciones de crisis sanitaria. La meta es la preocupación por dar a
todos una oportunidad, no discriminar y abandonar los prejuicios
injustos como son el estatus, la edad y la raza. Ello significa aplicar bien
el triaje, apegado a las evidencias médicas, siguiendo los modelos de
predicción y sin preferencias (25); cuidar a la persona vulnerable y
ofrecerle oportunidades (26)(27).
Solidaridad es entender el difícil escenario que se presenta ante el
aislamiento y procurar el acompañamiento a través de los medios
posibles para el enfermo y su familia. Solidaridad se refiere a pararse
junto al doliente. Requiere acción y verdadera preocupación por los
demás. La despedida es una situación particularmente compleja, ya que
100
el paciente y su familia no tienen la oportunidad de decirse adiós, ni de
seguir los ritos culturales y familiares del final de la vida (28).
No abandono es un principio fundamental en medio de la crisis sanitaria,
que se refiere a no dejar de atender a ningún paciente. Es indispensable
que el paciente que rechaza algún tratamiento propuesto por el médico
tenga la certeza de que no será desatendido por el personal de salud;
es esencial evitar la falta de esperanza, sea cual sea la situación del
paciente (29).
El principio de doble efecto puede estar presente en decisiones como la
sedación paliativa. La intención de la sedación paliativa radica en
disminuir los síntomas refractarios del paciente. Los tres más
importantes son: disnea, dolor y delirio. Existe la posibilidad de que la
sedación resulte en un final de la vida con un enfermo dormido, que no
haya una despedida. Otra posibilidad que debe advertirse a los familiares
es la posibilidad de una falla respiratoria no reversible. Cuando el
paciente está en posibilidad de decidir lo hará él y, si no lo está, se
pedirá a los familiares consentimiento informado. Aunque hay muchos
autores que no están a favor de este procedimiento, cuando el ventilador
es una medida fútil o extraordinaria, la sedación paliativa es la
alternativa (30).
Conclusiones
En una época de crisis global, que pone en peligro la estabilidad
sanitaria, social y económica del planeta, es necesario reflexionar para
cambiar la dirección en la que va la vida de los seres humanos.
101
La enfermedad Covid-19 apareció en diciembre de 2019 y ha puesto de
manifiesto que son posibles los cambios radicales en la forma de vida.
El aislamiento social, el cambio de modelo en el trabajo, en la educación,
en la forma de atender los servicios sanitarios, dejan ver que el ser
humano es resiliente. Asimismo, deja salir a la superficie las deudas de
los estados con sus ciudadanos como, por ejemplo, que los servicios de
salud son insuficientes. Es entendible que una crisis sanitaria global
ponga a prueba a los servicios de salud más eficientes. En México, estas
insuficiencias se han agravado por el atraso en la cobertura de la salud,
la falta de atención a la epidemia de obesidad, la insuficiente inversión
en actualizar los centros hospitalarios y por la poca atención a las nuevas
necesidades de atención a la población, tanto en modelos de paliación
como de curación.
La medicina actual cuenta con otras herramientas inscritas en la
legislación, poco desarrolladas en la práctica: los cuidados paliativos y
la bioética. En un marco de necesidad y escasez, se empodera la
paliación apoyada en los principios bioéticos, y se hace evidente la
necesidad de desarrollar estos conocimientos e impulsarlos con un
presupuesto mayor, que se destine a la formación de personal sanitario,
al desarrollo de unidades hospitalarias con cuidados paliativos y a la
atención primaria en domicilio.
A un año del inicio de la pandemia, hay muchas preguntas por
responder, muchas evidencias que descubrir, muchas cifras por revelar.
El surgimiento de una nueva enfermedad infecciosa y contagiosa en un
planeta con casi ocho mil millones de personas ha sido un reto, y debe
102
ser también un motor de cambio a favor del cuidado de la vida, de la
salud y de la casa común de todas las vidas.
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Fuente: http://revistas.anahuac.mx/bioetica/article/view/473/592
106
LA LUCHA POR LA EDUCACIÓN SUPERIOR GRATUITA EN
MÉXICO RECIÉN COMIENZA
ADRIÁN GERARDO RODRÍGUEZ
El pasado 9 de marzo se aprobó la Ley General de Educación Superior
en México, la cual pretende legislar la educación superior gratuita en el
país. Pero para que esta medida sea realmente efectiva, hará falta luchar
para una relación de fuerzas favorable.
Está a la venta nuestro segundo número, “El laberinto latinoamericano”.
La suscripción a la revista también te garantiza el acceso a material
exclusivo en la página.
El domingo 27 de diciembre de 2020 fue encontrado sin vida el cuerpo
del estudiante mexicano Daniel Vargas Ortiz. Fue hallado muy lejos de
su domicilio, en una colonia a las orillas de Ciudad Juárez, del estado de
Chihuahua (una urbe que linda con Estados Unidos). El cuerpo de Daniel
había recibido numerosos golpes y en su cuello había un cordón con el
que habría sido asfixiado; había sido reportado como desaparecido
desde el 25 de diciembre, cuando su celular dejó de contestar llamadas.
Este acto oscuro y aún sin resolución tiene sin embargo un telón de
fondo muy claro: la lucha por la educación superior gratuita en México.
107
La última publicación en el muro de Facebook de Daniel data del 12 de
diciembre: una foto –seguramente tomada por él– en la que se puede
observar el símbolo escultórico de la Universidad Autónoma de Ciudad
Juárez (UACJ), donde se encuentra colgada una manta adornada con
letras azules, mayúsculas y anchas. Ahí se lee la consiga: «EDUCACIÓN
GRATUITA PARA TODOS».
Se sabe que Daniel había sido un protagonista por aquellos días en las
organizaciones de estudiantes que habían tomado las instalaciones de
la rectoría de la UACJ el día 11 de diciembre. Los estudiantes exigían a
las autoridades varias acciones muy puntuales, de entre las que
destacaba una: la exención del pago de cuotas que económicamente
exprimen a los estudiantes.
Los estudiantes de la UACJ exigían en particular el cumplimiento de la
Ley General de Educación Superior, que terminaría con el pago de
cuotas en las universidades públicas; habían intentado confrontar al
rector de la universidad para hablar sobre la gratuidad en el marco de
la Ley, pero fueron recibidos con hostigamientos y intimidaciones.
Si bien la ley general iba a ser aprobada en el Congreso el pasado 9 de
marzo y entrará en vigor dentro de los próximos 180 días, el episodio
en la UACJ recuerda que su aplicación y último alcance sigue
dependiendo de en qué medida la sociedad mexicana se apropia de la
iniciativa.
108
La coyuntura y una ley
La discusión de esta Ley es un factor determinante para
entender la burbuja que explotó en Ciudad Juárez. El objetivo
principal de la iniciativa es terminar con el pago de cuotas en
las universidades públicas. Esto se llevaría a cabo de manera
paulatina a partir del año 2022, a través de un «Fondo Especial
Federal» que subsidiará las cuotas.
La propuesta nace producto de la necesidad de hacer cumplir la reforma
al artículo 4 de la Constitución política mexicana, presentada por el
presidente Andrés Manuel López Obrador y vigente hace poco menos de
un año. Dicha reforma elevó a rango de derecho las pensiones a adultos
mayores, el acceso gratuito a la salud y a la educación en todos los
niveles escolares. Sin embargo, en los hechos no existía el elemento
jurídico que diera cuerpo al derecho relacionado específicamente con la
gratuidad en Educación Superior.
Por lo tanto, se entiende por qué la noticia de la discusión y aprobación
de esta ley resultó grata a los estudiantes conscientes de la UACJ, que
vieron de manera oportuna izarla como una de sus banderas en las
protestas en diciembre pasado. Sin embargo, es llamativo que en otras
universidades de provincia –que sufren los mismos estragos que la
UACJ– no haya generado la misma expectativa y no se busque su
inmediata aplicación. Esta falta de repercusión es aún más curiosa
porque, según diversas fuentes, la deserción universitaria en México es
109
una de las más altas de la OCDE: solo una persona de cada diez que
ingresan a la universidad logra graduarse. Esto sin mencionar que en
universidades públicas estatales, la obtención del título depende de si
estás al corriente del pago de las cuotas: puedes terminar la universidad,
pero endeudado.
La oposición a la ley
La razón de que el tema de la Ley General de Educación Superior
haya sido minimizado por los medios en los acontecimientos de
la UACJ y que incluso no sea comentada en las demás
universidades públicas es inseparable de la correlación de
fuerzas y la lucha por la hegemonía que se está dando en el
gobierno de la «Cuarta Transformación».
Por una parte, el gobierno federal se ha visto bajo un continuo asedio
de los medios de comunicación (a los que se le rebajó el presupuesto
publicitario), difundiendo fake news, distorsionado el sentido de la
comunicación oficial y generando una batalla diaria de
contrainformación. Por otra parte, ciertas agrupaciones, sindicatos y
colectivos de izquierda, y una parte del sector universitario, manifiestan
su desaprobación de esta medida del gobierno federal, la cual abona a
un ambiente difuso en cierto nivel de comunicación pública. Estos
actores, entre otros, han incidido en que la publicación y aplicación de
la Ley General de Educación Superior no haya gozado de mayor apoyo
social.
110
El actuar de los medios responde naturalmente a intereses económicos
privados y a la propia crisis que viven en la era digital. Sin embargo, la
oposición de los agrupaciones y colectivos de izquierda es un asunto
más espinoso. A estos grupos de izquierda les preocupa que la Ley
contemple la participación de la iniciativa privada en las universidades;
sin embargo, se olvida de que la iniciativa privada participa de facto en
las universidades desde hace mucho tiempo atrás y que la Ley de hecho
viene a regular estos vínculos en nombre de evitar la corrupción. Otra
preocupación es que la Ley otorga mayor responsabilidad a las
universidades en su gestión, es decir, las vuelva más autónomas ante el
Estado; el temor entre estos sectores es que esto sea una treta para
que el Estado se deslinde de aportarles mayor presupuesto.
Pero este tipo de críticas lanzadas desde algunos sectores de la izquierda
mexicana deben ser relativizadas ante lo que busca la Ley: exención de
pago de cuotas, una acción que propiciaría que llegaran más jóvenes de
escasos recursos a estudiar a la universidad.
Los derechos no se imploran, se conquistan
Si bien la Ley General de Educación Superior prácticamente ya
está aprobada, queda pendiente una disputa importante en
torno a su aplicación. Es por esta razón que las críticas y las
reservas de la izquierda y del campo educativo deberían
hacerse en conjunto con un análisis de la coyuntura electoral:
las elecciones de mediados de 2021 –cuando se renovarán los
111
500 cargos de la cámara de diputados– brindarán una
oportunidad para garantizar que la Ley sea aplicada lo más
pronto y de forma más beneficiosa posible. Con una
composición parlamentaria favorable, los luchadores sociales
podrían ocupar espacios estratégicos en la cámara de diputados
para que dicha Ley no se quede en el plano de las «buenas
intenciones».
Es importante reconocer, a su vez, que los diputados y senadores de
Morena han hecho poco para la politización de la Ley. Pero lo mismo se
podría decir de las autoridades universitarias, quienes mantienen una
relación tensa con la Cuarta Transformación: AMLO ha acusado a dichas
autoridades de presuntos actos de corrupción y del opaco manejo de
recursos públicos, mientras el sector universitario considera que el
presidente promueve un plan de austeridad que afectará los
presupuestos de investigación y salarial.
Sea como sea, la misma correlación de fuerzas de esta situación lleva
inevitablemente a la situación ya referida: o los luchadores sociales se
mantienen en la inercia de antes o dan el salto a la cámara de diputados
para que esa Ley se concrete sin retrasos en el 2022. En otras palabras:
o se sigue implorando justicia o se le conquista.
La paulatina ocupación de espacios institucionales (que llevaría a la
conquista del derecho a la Educación Superior Gratuita) debe ser
acompañada por un amplio y diverso ejercicio de politización del tema
112
entre estudiantes y profesores de todas las universidades. Como Flavio
Sosa Villavencio ha escrito recientemente: la Cuarta Transformación no
solo depende de lo que se realice desde los poderes institucionales, sino
que «su consecución se juega, en gran medida, en la apropiación social
de las medidas de gobierno».
Lo cierto es que la buena intención de la Ley General de Educación
Superior puede esfumarse si no estamos como los estudiantes de la
UACJ en diciembre pasado: organizados y conscientes de sus derechos,
poniendo el cuerpo, hasta que el bienestar social se haga costumbre.
Ese sería un homenaje indiscutible a la memoria de Daniel Vargas Ortiz.
Fuente: https://jacobinlat.com/2021/03/23/la-lucha-por-la-educacion-superior-
gratuita-en-mexico-recien-comienza/
113
CRÍTICA AL ACADEMICISMO
Frente Nacional de Lucha por el Socialismo
… conocimientos políticos. Ustedes, los intelectuales, pueden
adquirir estos conocimientos y tienen el deber de
proporcionárnoslos cien y mil veces más que hasta ahora;
además, deben proporcionárnoslos no sólo en forma de
razonamientos, folletos y artículos (que a menudo —
¡disculpen la franqueza!— suelen ser algo aburridos), sino
indispensablemente en forma de denuncias vivas de cuanto
hacen nuestro gobierno y nuestras clases dominantes en
estos momentos en todos los aspectos de la vida.
Lenin, ¿Qué hacer?
El academicismo hace referencia al trabajo intelectual que se desarrolla
desde la institucionalidad, concretamente en las universidades y centros
de investigación y que influye en gran medida en la construcción de la
ideología de una sociedad. El trabajo intelectual puede ayudar a que el
pueblo adquiera conciencia y se sume a la lucha por su liberación, o
puede ser para justificar la explotación y la opresión capitalista.
La Universidad Autónoma de Chiapas (UNACH) es actualmente conocida
más por estar inmersa en diversos escándalos económicos y políticos
que por sus aportes para explicar la realidad. Muchos académicos,
114
investigadores e intelectuales de dicha institución educativa poco han
ayudado a clarificar la situación actual, por el contrario, han estado
involucrados en actos de plagio, negligencia, acoso sexual y misoginia.
La universidad es un espacio de discusión, análisis, reflexión, un espacio
para la denuncia, para adquirir conciencia y luchar por una educación
gratuita, científica y popular, así ha sido, las organizaciones estudiantiles
en las universidades son expresión de esto, las organizaciones de
profesores, las investigaciones académicas que demuestran las causas
y consecuencias del capitalismo, también.
Pero no todo es bello, también es un espacio para la creación de grupos
porriles, de intelectuales burgueses, de sujetos reaccionarios que con
sus plumas criminalizan la organización y la protesta popular,
lamentablemente este tipo de personas son los que se reproducen más
rápido en las universidades.
Es entendible si tenemos en cuenta que la educación en México no tiene
el objetivo de crear sujetos críticos o liberar al pueblo, sino de
mantenerlo bajo el yugo del capital, por esta razón los planes y
programas de estudio están hechos en función de reproducir la ideología
burguesa, lo podemos constatar con la ausencia total del marxismo en
las universidades.
La crítica política al poder, desde las universidades proviene
generalmente de quienes se acercan a la ciencia del proletariado, de
sujetos con iniciativa, creatividad y conciencia que por la vía de los
115
hechos rompen con las limitaciones que genera el academicismo y dan
otro sentido a la educación, el sentido de educar a las masas para la
lucha por su liberación.
El academicismo expresa en estos momentos pasividad y falta de
discusión hacia temas actuales y de relevancia que incluye: las cada vez
más difíciles condiciones de vida del pueblo, las violaciones a los
derechos humanos, la represión, la impunidad, desplazamiento forzado,
despojo de tierras, etc.
Con los ideólogos del régimen por su papel a lado del represor, es
inevitable la existencia de una contradicción irreconciliable que se
expresa en la lucha ideológica, porque ellos van a defender el interés
oligarca y justificar la represión, mientras que el pueblo organizado va a
cuestionar el actual régimen porque es la razón de la pobreza, miseria,
desempleo y demás fenómenos que laceran la vida de los trabajadores.
En la academia existe aún la posibilidad de generar análisis, discusión y
crítica con objetividad y rigurosidad científica, sin embargo, presenta
serias limitaciones, por ejemplo, un problema recurrente es que sólo se
produce conocimiento a partir del estímulo económico, por tanto, la
mayoría de veces las opiniones de académicos giran en torno a los
interese de quienes financian las investigaciones.
Es así como vemos por ejemplo una tendencia importante al estudio de
“políticas públicas” sus “efectos, impactos, etc.” Estudios que sirven al
Estado para planear el asistencialismo, política de gobierno que busca
116
mantener al pueblo bajo control, para que éste no se organice ni luche
por mejores condiciones de vida.
El esfuerzo intelectual desde la “máxima casa de estudios” por parte de
académicos resulta insuficiente y a veces hasta grosero, esto último se
ejemplifica con el hecho de que algunos para facilitar su trabajo recurren
al plagio, tal como lo hicieron seis profesores que fueron despedidos por
incurrir a plagio en la elaboración de artículos y libros.
Otros dirigen sus esfuerzos mentales para emitir opiniones
criminalizadoras, como el comentario: “y luego dicen por qué las matan”
dicho por un profesor de la Facultad de Medicina, refiriéndose al caso
de mujeres asesinadas, hecho que fue denunciado ampliamente y lo que
terminó en el cese en su trabajo de ese académico.
Otra muestra de que lo que desde la academia se plantea no tiene
utilidad en términos prácticos, es el evento organizado por la UNACH a
inicios del mes de marzo, donde participaron expertos en Derechos
Humanos de diversos países, y donde se abordaron temas como “los
principales desafíos de los Derechos Humanos en México, los Derechos
humanos de personas en situación de desplazamiento forzado”, en
donde lo que priva es el aspecto descriptivo y no propositivo.
En una entidad como Chiapas donde se violan derechos humanos al por
mayor, se requiere de la denuncia, de la protesta, de acciones que
ayuden a detener su cometido y avanzar hacia el camino de la justicia.
117
Esto es lo que los intelectuales se niegan a comprender, que debe haber
una relación armoniosa entre la teoría y la práctica.
Esta relación dialéctica la encontramos ampliamente explicada en el
marxismo cuyo máximo exponente es Carlos Marx, personaje histórico,
revolucionario que escribió una tesis en 1845 que reza “Los filósofos no
han hecho más que interpretar de diversos modos el mundo, pero de lo
que se trata es de transformarlo.” Planteamiento que tiene vigencia y
que sirve como crítica para los que creen que desde la comodidad del
escritorio se podrá modificar los diversos problemas que atraviesa el
pueblo.
No se trata de escribir montones de libros o artículos si estos no van a
contribuir a la compresión científica del mundo y a la liberación del
pueblo explotado. La labor de los intelectuales es terminar con la
dictadura de opinión, con el atraso cultural, generar discusión, hacer
crítica a las concepciones burguesas, todo lo que sea útil para la lucha
ideológica y que permita preparar al pueblo en la lucha por su liberación.
El actual fenómeno sanitario ha obligado a que las universidades,
bibliotecas, centros de investigación cierren, como consecuencia
mermaron las discusiones entre estudiantes, profesores, académicos, se
detuvieron foros, conferencias y demás espacios donde existe la
posibilidad de tocar temas de coyuntura y avanzar en la construcción de
organización en la comunidad universitaria.
118
Mientras esto pasa se aplican políticas que vuelven más precarias las
condiciones de vida para los trabajadores del campo y la ciudad, por
ejemplo, poco se ha dicho desde la academia sobre el despojo de tierras,
desplazamiento forzado, prisión por motivos políticos, violencia
gubernamental, crisis capitalista, la farsa electoral, etc. El silencio
conviene a la clase en el poder, porque así encuentra menos oposición
a sus intereses.
Hay excepciones, hay espacios de difusión y análisis que han generado
algunas universidades, intelectuales donde hay oportunidad de brindar
información, desenmascarar el rostro represivo del gobierno y condenar
las violaciones a los derechos humanos. Esto debe mantenerse, pero
cada vez debe romper el campo de lo virtual para pasar a la acción
política concreta, la denuncia en la calle, los debates de forma
presencial, para no permitir que las cifras de víctimas de la violencia
institucional crezcan.
Frente Nacional de Lucha por el Socialismo
Fuente: https://rebelion.org/critica-al-academicismo/
119
VIOLENCIA MACHISTA-POLICIAL EN QUINTANA ROO
CRISTÓBAL LEÓN CAMPOS
La violencia feminicida y la brutalidad policiaca han cobrado otras
víctimas durante este fin de semana en el Estado de Quintana Roo.
Los videos difundidos en redes sociales por diversos testigos permiten
observar a por lo menos 4 agentes de las patrullas 9276 y 9267 de la
corporación municipal de Tulum, violentar con lujo y exceso de fuerza,
a una mujer (aún no identificada) a la que sometieron hasta asfixiarla y
asesinarla a plena luz del día, en los videos se puede notar como los
policías involucrados escuchan los lamentos de dolor de la mujer sin que
ninguno de ellos demuestre el más mínimo sentimiento humano o
remordimiento por los gritos de ayuda, dejando clara la complicidad ante
los hechos de todos los agentes presentes, pues la mujer es sometida
contra el asfalto y violentada directamente por uno de ellos que ejerce
presión corporal sobre su tórax ante la mirada de todos, para después
de unos minutos, ser subida a la patrulla ya desmayada por los policías
que se retiraron del lugar del crimen como si nada grave hubiera
ocurrido. Este caso presenta marcadas similitudes por la brutalidad
policiaca con el asesinato del afroamericano George Floyd ocurrido el 25
de mayo de 2020 en la ciudad de Mineápolis, en los Estados Unidos.
120
Tras las denuncias y la circulación de los testimonios grabados, las
autoridades han separado de su cargo a los policías involucrados y la
Fiscalía General de Quintana Roo inició una investigación sobre lo
sucedido, de igual forma, la Comisión de los Derechos Humanos ha
emitido una declaración para que el caso sea atendido. Sin embargo, es
importante tener en cuenta la constante violación a los derechos
humanos ejercida por los policías de la entidad y particularmente
recordar la persistente violencia estatal contra las mujeres, tan solo en
noviembre de 2020, policías del municipio de Benito Juárez dispararon
contra mujeres manifestantes que protestaban exigiendo justicia por el
feminicidio de Bianca Alexis.
En este contexto de violencia machista-patriarcal, fue encontrado en
Holbox, municipio de Lázaro Cárdenas, la mañana del domingo 28 del
corriente, el cuerpo de una mujer que trabajaba como chofer de carritos
de golf, las evidencias físicas dejan clara la saña con que se cometió el
feminicidio, ya que presentaba las manos atadas y mutilaciones en zonas
de su cuerpo junto a otras agresiones, el acusado Roger C, ya se
encuentra detenido para la investigación correspondiente. El Estado de
Quintana Roo está desde 2017 bajo alerta de violencia de género, y al
igual que en el resto de la República mexicana, los casos de feminicidio
y violencia policiaca van en aumento, en medio de la crisis económica y
sanitaria que afrontamos.
Ante las recientes muestras de violencia de género, la Red Feminista
Quintanarroense ha manifestado a través de un comunicado que
121
“nuestra rabia e indignación por la escalada de violencia hacia las
mujeres en el estado, una vez más vivimos un fin de semana lleno de
violencia contra las mujeres, donde han ocurrido 5 muertes violentas:
un feminicidio en Holbox, un asesinato policial en Tulum y tres
asesinatos de mujeres sin claridad de los hechos por el hermetismo y la
opacidad del Estado”. Para el lunes 29 se han convocado diversas
protestas para reclamar justicia, castigo a los culpables a los
responsables de la violencia, el cese de los feminicidios y el respeto
pleno de los derechos de las mujeres.
Estos nuevos casos de feminicidio, violencia policiaca y de género,
corroboran lo que el movimiento feminista expresa y reclama: EL
MACHISMO-PATRIARCADO MATA Y LO HACE DE MANERA CONSTANTE.
Corresponde a toda la sociedad exigir justicia y en especial a los hombres
comprender de una vez y para siempre que el machismo-patriarcado
debe desaparecer; es necesario que dejemos de reproducirlo. La
construcción del mundo mejor que tanto soñamos requiere la superación
de la violencia contra la mujer en todas sus manifestaciones y la
destrucción de las estructuras capitalistas-patriarcales que la generan.
Fuente: https://rebelion.org/violencia-machista-policial-en-quintana-roo/
122
MISCELANEA CULTURAL
123
ENTREVISTAS
ENTREVISTA A NICHOLAS A. CHRISTAKIS
“Tras la covid llegarán los locos años 20 del siglo XXI”
ALEXIS RODRÍGUEZ-RATA
Nicholas A. Christakis es sociólogo, médico y uno de los
pensadores más influyentes de hoy, sitúa en el 2024 la explosión
del ocio, la socialización y la economía tras la pandemia
Descripción de la imagen. Evan Mann
Barcelona
Nicholas Christakis (New Haven, 1962), avisa: “La covid no desaparecerá.
Pero llegan los locos años 20”. Lo dice como catedrático de Sociología y
de Medicina en Yale. También como estrella del rock del ámbito
intelectual, según le define The New York Times. Y como uno de los
124
pensadores más influyentes, acaba de publicar Apollos’s Arrow sobre el
“impacto profundo y duradero del coronavirus en la forma que vivimos”.
Él ubica el desenfreno para el año 2024.
¿Ver cero casos de coronavirus es imposible?
No tenemos que llegar ni vamos a llegar a cero casos de coronavirus.
Este virus estará con nosotros para siempre. Se convertirá en endémico.
Podemos controlar la epidemia con nuestras vacunas y con nuestro
comportamiento social, pero no erradicarla. El virus circulará y continuará
causando contagios y muertos en el futuro.
¿Y la vida normal, o tal y como era, volverá?
Depende de cómo definamos la vida normal. Cualquier pandemia seria,
incluida esta, ve tres fases. La inmediata, cuando el virus está fresco, y
ataca. La intermedia, cuando nos recuperamos del virus. Y la
pospandémica. La intermedia va a seguir hasta el final del 2021 y el virus
circulará hasta que haya lo que se llama la inmunidad de grupo, cuando
cierto porcentaje de la población es inmune al virus, ya que aunque no
todo el mundo sea inmune, si vacunas al 96% de las personas de
sarampión y hay un porcentaje que no se ha vacunado, no hay epidemia,
porque esta persona no puede interactuar con ninguna otra a la que
pueda transmitírsela.
125
Sanitarios preparan dosis de la vacuna de Pfizer-BioNTech contra la covid en Nápoles. Ciro de Luca / Reuters
¿Eso pese a las nuevas variantes de la covid?
Debemos conseguir al menos el 50% de vacunados a la actual variante
antes de que la epidemia pare. Y aunque hemos inventado una vacuna
hay que producirla, distribuirla, administrarla. Eso va a llevar tiempo.
Quizá un año. Mientras, el virus se expandirá naturalmente y puede que
actualmente el 20% de las personas ya sean inmunes tras contagiarse.
¿Y luego qué quedará?
Después todavía tendremos que recuperarnos social, económica y
psicológicamente. Así que hasta finales del 2021 tendremos que llevar
mascarillas, cerrar escuelas, permanecer en casa... El verano será mejor.
Pero la vida no volverá a la normalidad este año. Y cuando acabe la
pandemia habrá que recuperar todos esos ámbitos. Si se mira a la historia
de las epidemias, lleva un par de años. Es decir, será a principios del
2024.
126
La covid estará con nosotros para siempre. Se convertirá en endémica
¿Es igual siempre para todas las pandemias?
No, varía. Pero es seguro que en un año no todo estará bien. Luego
depende de a lo que uno se refiera por normal, pero yo creo que el
periodo intermedio será entre el 2022 y el 2023 para luego ver los locos
años 20 del siglo XXI, aproximadamente en el 2024. Y es que la pandemia
siempre acaba. Y veremos el otro lado de todo esto. Pero no en un año.
Y más cuando hay varias de variantes y más problemas.
Usted habla de los locos años 20 mirando atrás en el tiempo,
porque después del horror y las muertes por las epidemias, la
historia, señala, ve habitualmente algo parecido al hedonismo.
¿También será así en esta ocasión, o quizá el contexto mucho
más digitalizado, etc., lo condiciona como no pasó en otras
pandemias?
Hay ciertas circunstancias tecnológicas diferentes entre una pandemia en
el 2021 o el 2020 y hace miles de años, si bien la idea central es que las
plagas no son extrañas para nuestra especie, sólo son nuevas para
nosotros. Las personas han estado tratando con esto por miles de años.
Las plagas están en la Biblia, en Shakespeare o en el Quijote. Son parte
de la condición humana. Así que aunque tenemos videoconferencias,
vacunas con tecnología ARN, etc., hay ciertos aspectos comunes en las
plagas y la respuesta humana a esta que no ha cambiado. Por ejemplo,
127
el aislamiento social, el miedo, las mentiras, también las oficiales; y las
supersticiones, el negacionismo, el culpar a otros, el colapso de la
economía, el dolor y la tristeza.
Poster de 1925 en París de la cantante y bailarina de cabaret Josephine Baker. Getty
Hoy muchos hablan de los felices años 20 del siglo XX como si
esperaran una repetición de esos años. Aunque si miramos a esa
historia después de la gripe española hay años felices, sí, y luego
el crack de la economía, y guerras… ¿Se esperan?
Yo creo que veremos unos locos años 20 cuando la pandemia acabe,
porque las personas, durante los tiempos de plaga, se vuelven más
religiosas, y lo estamos viendo ahora; las personas dejan de interactuar
socialmente y se quedan en casa, y lo vemos; y dejan de gastar su dinero,
la economía colapsa y las personas ahorran en caso de que algo malo
128
pase o no hay dónde gastarlo porque la economía ha colapsado. Cuando
la plaga pasa, se da la vuelta a todas estas tendencias. La religión declina.
Las personas hacen un uso intensivo de las oportunidades sociales. Hay
más sexo, por ejemplo, y más personas en restaurantes y en las calles. Y
empiezan a gastar su dinero. Yo creo que todo eso pasará en unos pocos
años y vamos a ver un florecimiento de las artes, los negocios, del
emprendimiento… tras eso, que se repita lo que pasó hace cien años es
difícil de decir. Puedo decir, al menos para EE.UU., que estamos tomando
prestados trillones de dólares del futuro, así que vamos hacia una
gigantesca deuda pública. Y, normalmente, cuando los países hacen eso,
imprimir mucho dinero, luego hay inflación y…
Suena a que la historia se repite.
Siempre es una sorpresa, para nosotros. Estamos en shock e indignados
pero no es nuevo. Esto es de lo que las plagas están hechas, por miles
de años. Pasa de forma periódica. Y por eso las historias de las plagas
son parte de la tradición oral. La Biblia habla de las plagas. Homero habla
de las plagas. Es un intento de transmitir el conocimiento a las futuras
generaciones. Además, casualmente, esta plaga es menor. No es nada
parecida a la plaga bubónica. Imagina que el coronavirus en vez de matar
al 1% mata al 10%. O al 30%. No hay una razón por la que este virus no
sea más mortífero. Podría serlo. Podríamos tener uno como la plaga
bubónica en la Europa del siglo XXI así que en parte tenemos suerte.
De hecho la plaga bubónica fue muy importante porque, según
relata, fue parte activa en los cambios en la Edad Media en la
129
posición de la aristocracia, clero… ¿La covid cambiará la
democracia?
Cambiará algo, pero sin tener el mismo impacto. Muchos expertos
piensan que la plaga bubónica contribuyó a la Reforma, al auge del
capitalismo y la emergencia de la ciencia moderna, y más, y la razón fue
que las personas perdieron la fe en las autoridades. Las autoridades
religiosas no pudieron parar la plaga. Tampoco las políticas. Las médicas
y científicas tampoco. ‘Y si todas estas autoridades no saben qué está
pasando…’, se oía. Ello contribuyó a muchos cambios en la historia de
Europa. Este virus no es tan malo y el siglo XXI es diferente, pero hay
algunos cambios que puede impulsar.
¿Cuáles?
Depende con qué efectividad responda el gobierno. Para encarar una
amenaza colectiva necesitas una respuesta colectiva, que las personas
trabajen juntas. Así que las acciones del gobierno, del Estado, siempre
han sido necesarias para encarar las plagas, incluso para los atenienses
hace siglos. Por lo que si la acción estatal es efectiva, creo que puede
llevar a un auge en la confianza de las políticas de izquierdas, toda vez,
habitualmente, están más interesadas en potenciar el poder estatal que
la derecha. Pero si el Estado es incompetente, creo que la confianza de
la gente en la función del Estado declinará. Y si la gente ve que de forma
mayoritaria los médicos y científicos aciertan, uno de los cambios que
también veremos es un incremento en la confianza en el conocimiento
130
científico, que puede ser importante en cómo encaramos otros retos,
como el climático.
Pierart dou Tielt ilustra cómo en Tournai (Bélgica) se enterraba a las víctimas de la peste negra que asoló el continente europeo causando la muerte de un tercio de la población en
el siglo XIV. Archivo
¿Y el Estado y los científicos están ganando o perdiendo?
Es muy pronto como para decirlo.
En la antigua Grecia los espartanos fueron los culpados por la
peste, en la Edad Media los judíos, con el sida los
homosexuales… ¿con el coronavirus los chinos? ¿Por qué
siempre se busca a un grupo humano culpable?
Sí, las personas acusan a los chinos, o en Europa a menudo a los
inmigrantes, o a los sintecho, a cualquiera. Es típico. Si miras la historia
de las plagas las personas siempre intentan culpar. Mi teoría es que se
131
da por seguidismo. Es más atractivo para los seres humanos imaginar
que otros seres humanos son los responsables de su sufrimiento que
pensar que Dios lo es, o imaginar que la implacable naturaleza, el mundo
natural, lo es. Porque no podemos hacer nada respecto a Dios o la
naturaleza, pero si pensamos que otros seres humanos son responsables,
se mata, se frena su camino a tu país; o se les culpa.
Defiende que vivimos una vida innatural. ¿Cuál sería la natural?
Muchas de las enfermedades endémicas que afectan a los seres humanos
las adquirimos de nuestros animales domésticos después de vivir en
ciudades, en una densidad de población alta. Como el coronavirus por
ejemplo. 10.000 millones de años atrás no creo que tuviéramos
epidemias. No vivíamos con los animales en asentamientos muy densos.
Por supuesto que las personas tenían infecciones, pero no había
epidemias. Es sólo especialmente con la llegada del Imperio romano,
sobre 2.500 años atrás –bueno, en realidad con la llegada de todos los
imperios, pero ese en especial–, que empezamos a tener más pandemias
de este tipo.
Y así, en un mundo de ciudades y global, ¿podemos esperar
nuevas y próximas epidemias?
Así lo creo. Es todo probabilístico, si bien tenemos una trayectoria y hay
un auge en las enfermedades emergentes infecciosas en los últimos 50
años; hay más y más patógenos entrando en los humanos desde los
animales salvajes. Pero estos no causan epidemias o pandemias. Las
132
epidemias o pandemias vienen cada 10 o 20 años. Las serias, sólo cada
50 o cien. Todo de media.
De hecho puede haber una cara b, ¿no? Tenemos pandemia, etc.,
pero a la vez innovaciones que pueden solventar el problema. La
vacuna se ha desarrollado apenas en meses, ni un año.
La nueva tecnología de vacunas ARN cambia el juego. Y en el futuro, si
tenemos pandemias, puede ser posible desarrollar una vacuna en seis
meses y que a la gente se le diga: ‘bien, hay una nueva enfermedad
grave, debemos estar en casa todos seis meses, y después volveremos’.
No sólo se tendrá la tecnología rápida y a mano, sino que la gente
también sabrá qué hacer.
Fuente: https://www.lavanguardia.com/ocio/viajes/20210314/6374016/mejores-
lugares-viajar-pasaporte-vacunacion-
europeo.html?fbclid=IwAR1EvZlKU9j6Fg567C1ga_l9CEs28u0VqebpTGZFLBqOT0Lv
ZFwha5I6tyQ
133
NUCCIO ORDINE: “EL CORONAVIRUS NOS MUESTRA QUE LAS PERSONAS NO SON ISLAS”
XAVI AYÉN
CONVERSACIONES DE LA PANDEMIA
El filósofo italiano inaugura una serie de entrevistas con
destacados intelectuales sobre el impacto del Covid-19
Nuccio Ordine, en su casa de Calabria durante una entrevista por Skype con La Vanguardia Fecha toma: 15 de marzo del 2020 Autor: Isabelle Pawlak
Barcelona
¿La pandemia del coronavirus obliga a repensar el mundo? Con el
objetivo de fomentar el debate, La Vanguardia inicia hoy una serie
de entrevistas con destacados intelectuales y creadores que reflexionan
sobre la cuestión. Uno de los pensadores más respetados de Italia, el
profesor y filósofo Nuccio Ordine (Diamante, 1958), gran experto en el
Renacimiento y autor de obras como El umbral de la sombra, La utilidad
134
de lo inútil abre fuego, desde el confinamiento que sufre en su casa de
Calabria, mediante videoconferencia.
¿Cómo está?
Un poco triste. Hoy ha fallecido por coronavirus mi amigo, el gran
arquitecto Vittorio Gregotti, acabo de escribir su obituario para el Corriere
della Sera.
¿Dónde se encuentra?
En mi casa, los italianos estamos todos en prisión. Es una gran tristeza,
todo está cerrado, solo abren las farmacias y los supermercados.
¿Cómo le afecta en el día a día?
Mi vida es la misma, me levanto a las seis de la mañana y trabajo hasta
la noche. Me falta la libertad de salir a comer con los amigos, ir al cine o
a un concierto. Se han anulado todas mis actividades, el 11 de marzo iba
a dar un concierto-conferencia junto a Jordi Savall en el auditorio Verdi
de Milán, el mismo que hicimos en el Palau de la Música hace dos años.
¿Qué pensamientos le genera la situación?
Es un momento muy importante para reflexionar. Es una ocasión para
revisar nuestra vida social, política y personal. La crisis es la fase decisiva
de una enfermedad y puede ser una modificación positiva o
negativa, crisis significa en latín decisión, elección, y tenemos que tomar
muchas decisiones.
135
¿La literatura sirve para algo?
Permite comprender el pasado para, a través suyo, comprender el
presente. En el Decamerón de Boccaccio, de 1348, se reúnen unos
amigos en el campo a contarse historias como terapia frente a la peste
que asuela Florencia. Ellos respetarán unas reglas convenientes no solo
a su salud física sino a la salud del espíritu porque la peste genera tristeza
y depresión. Boccaccio es inteligente y nos dice que lo peor es el miedo
al miedo, esa extrema confianza que te hace hacer cosas contra ti mismo
y tu comunidad, él describe la irracionalidad de la gente que cree estar
haciendo cosas para mejorar su salud pero que en realidad son muy
dañinas. Leamos la primera frase del libro: ‘Humana cosa es tener
compasión de los afligidos’. ¿Ve el poder de la literatura como fármaco?
¿Qué tipos de irracionalidad?
La gente cae en comportamientos extremos: comer mucho, ir a
discotecas frecuentadas... El miedo a contactar con otra gente en realidad
es positivo, evita que se difunda más la enfermedad.
¿Más lecciones?
La realidad social y económica de Florencia era caótica, no había un poder
religioso, político, sanitario... nada, todo era el caos. Los diez confinados
se someten a unas reglas.
¿Había otro tipo de discursos?
136
Matteo Villani escribió su crónica de la peste, la enfermedad que lo mató,
para él la enfermedad es un castigo que Dios nos envía por la corrupción
y los pecados que dominan el mundo. Boccaccio no tiene esa visión. Hoy,
en Internet, muchos sitios hablan de punición divina, hay gente que
propaga ideas locas.
¿Destaca alguna referencia literaria anterior sobre las plagas?
El texto más importante es la descripción que hace Tucídides de la peste
en la Historia de la guerra del Peloponeso, en el siglo V a.C.
¿Qué temas se repiten a lo largo de los siglos?
Por ejemplo, cómo estalla la noticia de la infección, la reacción de la
gente, la difusión del miedo, la impotencia ante el mal, la degradación
moral, la peste vista como un elemento extranjero que penetra en la
comunidad...
¿Qué más nos enseña el coronavirus?
La necesidad de una estructura central. En Italia, hemos comprendido
que la educación y la salud no pueden ser delegadas a los gobiernos
regionales, cada uno con su política. En un momento de emergencia
nacional, no puedes crear 26 dispositivos para arreglar el problema. Italia
sufre una tendencia a regionalizar la escuela y la salud, es un error
gravísimo. Son los dos pilares del desarrollo de la sociedad. El Estado
debe ocuparse del bien común, el interés de una región puede resultar
negativo para la región que está al lado. Pero una centralización no es
137
suficiente, porque si Italia toma unas medidas y Alemania, Austria y
Francia no lo hacen no sirve de nada.
¿Qué nos dice de Europa?
Europa no existe ¿dónde está la solidaridad? La presidenta europea ha
decidido invertir unos 8.000 millones de euros contra el coronavirus... y
solo el gobierno italiano ha gastado ya 25.000.
¿Qué más lecciones han aprendido en Italia?
Algo básico sobre la producción empresarial. Italia no tiene producción
nacional de mascarillas, nada, todas vienen de China. Frente a una
epidemia extrema ¿cómo vamos a esperar que nos lleguen de China? Es
un pequeño modelo de cómo deberíamos funcionar en muchas otras
cosas.
¿Y en lo personal?
En este momento en que la gente no se puede abrazar, darse la mano o
besarse, descubrimos que no es verdad la idea que regía el mundo, ese
individualismo que asegura que los hombres son islas separadas. Al
contrario, tenemos necesidad del otro. Si me daño yo, daño a la
comunidad entera. La humanidad es un continente; como decía el poeta
John Donne, ‘ningún hombre es una isla’, ese es el tema de un libro mío
que aún no ha llegado a España. El gesto irresponsable de una sola
persona tiene enormes consecuencias en toda la comunidad: tras la
decisión del gobierno italiano de cerrar toda la Lombardía, 20.000
138
personas tomaron el coche, el tren, el bus y emigraron al sur de Italia, es
un gesto irresponsable que infecta zonas donde no estaba el virus.
¿Y Estados Unidos?
Esa nación carece de solidaridad sanitaria, su sistema de salud es privado
y un test de coronavirus puede costar 2.000 dólares, eso solo lo pueden
pagar los ricos, no los trabajadores. El virus se difunde de manera
incontrolable entre los pobres. En Italia ya hemos vivido que, en los
hospitales, no hay suficientes máquinas de respiración asistida, con lo
que si, de las 50 de un hospital, solo quedan dos libres y de repente
entran cuatro enfermos, el médico está teniendo que elegir quiénes de
los cuatro van a sobrevivir. ¡Es terrible! Esa es otra pregunta que nos
lanza el coronavirus: ¿Una sanidad privada es un buen sistema? No lo es.
El virus despierta gestos generosos, pero otros muy negativos...
Florece la especulación. En estos momentos dramáticos para la
humanidad, hay gente que piensa en hacer dinero. En Internet se venden
cosas que cuestan 50 céntimos por 30 euros porque la gente, en su
desesperación, está dispuesta a pagar lo que sea por mascarillas o
desinfectante para las manos (agotado en toda Italia). También se
venden hoy ‘vitaminas contra el virus’, que, por supuesto, no hacen nada
contra él.
El sistema educativo, una de sus obsesiones como autor, se ha visto
sacudido...
139
Han cerrado las escuelas y universidades. ¿Cómo evitar la ruptura total
entre profesores y estudiantes? La única posibilidad son los cursos a
distancia, telemáticos. Yo soy contrario a esa enseñanza pero entiendo
que es la única posible ahora. Sin embargo, escucho a rectores de
universidad y pensadores que dicen que el coronavirus es la oportunidad
de aprender que el e-learning es el futuro. ¡Menuda sandez! Transformar
la educación de emergencia en la normalidad es muy peligroso. La
verdadera enseñanza no es virtual, sino en el aula, con el profesor
mirando a los ojos del estudiante, solo la mediación física, la palabra del
maestro en clase, puede cambiar la vida de los estudiantes. No es solo
comunicar un contenido sino la experiencia humana que se comparte en
clase. Leer el Quijote en pantalla no es lo mismo que leerlo en papel, los
neurocientíficos demuestran que, aunque el texto de Cervantes sea
el mismo, la concentración del lector es muy diferente, en la pantalla hay
más distracciones y una menor comprensión del texto que en papel.
¿Qué propone para este curso?
Que las clases se prolonguen, ya presencialmente, en los meses de junio
y julio.
Un mensaje final...
El virus nos muestra la importancia de la solidaridad, que algunos habían
olvidado. Leamos la última página de La peste de Camus: “Esto es lo que
se aprende en medio de las plagas, hay más cosas en los hombres a
admirar que despreciar”.
140
Fuente:
https://www.lavanguardia.com/cultura/20200316/474180133280/conversaciones-
pandemia-nuccio-ordine-coronavirus.html
141
ENTREVISTA A ANDREAS MALM: LUCHA DE CLASES Y TRANSICIÓN ECOSOCIAL
JAIME VINDEL | ALEJANDRO PEDREGAL
Andreas Malm
En la siguiente entrevista, el académico y activista ecomarxista Andreas
Malm aborda algunas de las principales tesis de sus publicaciones
recientes en torno al capitalismo fósil, la crisis ecológica y la pandemia
global. Con Capital fósil. El auge del vapor y las raíces del calentamiento
global, publicado en castellano en 2020 por Capitán Swing y traducido
por Emilio Ayllón Rull, Malm revolucionó el debate sobre la crisis
142
climática al señalar su vínculo histórico con el establecimiento de un
nuevo régimen de producción durante el primer capitalismo industrial.
Según Malm, una serie de transformaciones hicieron que este pasara a
depender del carbón como fuente primaria de energía, de la explotación
intensiva por unidad de tiempo de la fuerza de trabajo, de la creación
de un ejército de reserva que presionara a la baja los salarios, de un
despliegue tecnológico que aplacara la combatividad social, de la
fractura metabólica entre el campo y la ciudad, y de las dinámicas
extractivistas del imperialismo energético.
Retomando en clave ecológica los planteamientos del marxismo político,
donde las mutaciones de la historia social aparecen como consecuencia
de las transformaciones en las relaciones de producción –y no del
desarrollo de las fuerzas productivas, según plantea el determinismo
tecnológico, también en su variante marxista–, Malm hace aflorar a la
superficie el íntimo vínculo que subyace entre el calentamiento global y
la lucha de clases. Más recientemente, Malm también ha explorado el
modo en que la reconversión neoliberal del capitalismo fósil está
acompañando la emergencia de opciones de extrema derecha en
diferentes partes del mundo, cuyo impulso de un nuevo nacionalismo
blanco prefigura una gestión ecofascista de la crisis y del posible colapso
ecosocial. Sus reflexiones en este sentido aparecerán próximamente en
el volumen que ha escrito con The Zetkin Collective, White Skin, Black
Fuel: On the Danger of Fossil Fascism, y que será publicado en inglés
por Verso. Por último, y a raíz de su libro El murciélago y el capital.
Coronavirus, cambio climático y guerra social, publicado en castellano
143
por Errata Naturae, con traducción de Miguel Ros González, Malm repasa
en la entrevista una serie de valoraciones sobre la irrupción de la
pandemia de la covid-19 en el contexto del desfondamiento ecológico
del planeta, así como su apuesta por una recuperación del leninismo en
clave ecologista, en la que los aspectos estratégicos de la toma y el uso
del poder político vuelven a cobrar una importancia fundamental para la
izquierda.
Jaime Vindel y Alejandro Pedregal: En Capital fósil argumentas que
el calentamiento global representa un desafío para los historiadores.
¿Qué tipo de desafío es ese? Y desde el ámbito del materialismo
histórico, ¿cómo podemos leer ese reto en relación con la disputa entre
el capital y el trabajo?
Andreas Malm: El calentamiento global extiende su influencia sobre
(al menos) dos siglos de historia: todo ese carbón, petróleo y gas, todos
estos coches, aviones y centrales eléctricas, todo el desarrollo capitalista
basado en los combustibles fósiles (dejando aquí al margen el paréntesis
soviético no capitalista) no tenían un significado evidente hasta hace
poco. Solo ahora sabemos lo que realmente significaba usar la energía
de esa manera. Esto debería llevar a los historiadores a volver sobre
estos dos últimos siglos con una nueva mirada. Y eso está sucediendo:
existe un floreciente campo de investigación que vuelve a indagar sobre
los acontecimientos a la luz de la crisis climática. Un libro del que acabo
de tener noticia es The Whites are Enemies of Heaven. Climate
Caucasianism and Asian Ecological Protection, de Mark W. Driscoll (Duke
University Press, 2020), que se centra en las Guerras del Opio como un
144
momento clave en el surgimiento de la economía fósil o
del Antropoceno, por emplear el término que utiliza el autor. Para los
historiadores comprometidos con el materialismo histórico, el desafío,
supongo, es estudiar el desarrollo de la crisis climática –y la crisis
ecológica en general– a través de la lucha de clases. Yo mismo estoy
actualmente inmerso en un gran proyecto que lleva esta cuestión más
atrás en el tiempo, a un nivel más general, discutiendo cómo se ha
relacionado la dominación de la naturaleza con la explotación de la mano
de obra, desde las primeras sociedades clasistas (me preocupa el
antiguo Egipto) en adelante. ¡Este proyecto corre el riesgo de crecer de
manera absurdamente inabarcable! Lo dejo aquí, solo para decir que la
profundización de la crisis climática está llevando a todo tipo de
historiadores a interrogar al pasado con nuevas preguntas. Por resumir:
¿cómo nos vimos atrapados en este lío? ¿Qué nos trajo hasta aquí? ¿Es
algo innato e intrínseco a la humanidad, una disposición de la especie
como tal, o lo que nos ha empujado hacia el colapso climático es una
configuración histórica específica y una estructura social concreta? Ya
que estoy interesado en las sociedades clasistas precapitalistas, me
gustaría advertir contra la opinión de que todo es culpa del capitalismo.
Aunque, por otra parte, insisto en el carácter excepcional de la
dominación compulsiva y destructiva de la naturaleza bajo las relaciones
de propiedad capitalistas.
J. V. y A. P.: El libro disputa tanto el paradigma ricardiano-
malthusiano como el determinismo de la fuerzas productivas, este último
enfoque adoptado por ciertas tendencias dentro del marxismo. ¿Cuáles
145
son los problemas de esos análisis y qué significan en términos del modo
en que entendemos el desarrollo del calentamiento global? ¿Cómo
afecta esta crítica al debate dentro del propio marxismo y del
ecosocialismo en general?
A. M.: El núcleo de Capital fósil es una investigación sobre un cambio
histórico muy específico: el tránsito de la energía hidráulica a la energía
de vapor en la industria algodonera británica, la punta de lanza de la
Revolución industrial. En relación con esa transformación particular, ni
el paradigma ricardiano-malthusiano ni el determinismo de las fuerzas
productivas pueden sobrevivir a una confrontación con los datos
empíricos básicos. El primero dice que las fuentes de energía
tradicionales no fósiles –el agua, en el caso de la industria– se agotaron
y se encarecieron. Pero, en realidad, el agua era abundante y más barata
durante toda la transición. El determinismo de las fuerzas productivas
es la vieja idea de que “el molino de vapor te da el capitalista industrial”,
que son los diferentes tipos de tecnología los que introducen las
relaciones de propiedad correspondientes; un punto de vista que
representó la ortodoxia en el movimiento comunista (con algunos
disidentes) hasta el decenio de 1970. Pero las relaciones de propiedad
capitalistas precedieron a la adopción de la energía de vapor y
la causaron. El capital nos dio el vapor, no al revés.
Las relaciones de propiedad capitalistas precedieron a la
adopción de la energía de vapor
146
y la causaron
Ahora bien, estos dos errores no son meramente de importancia
historiográfica. El paradigma ricardiano-malthusiano reaparece con la
expectativa de que una vez que la energía solar y la eólica se abaraten,
habrá una transición desde los combustibles fósiles a estas energías
renovables. Sin embargo, ya son más baratas –sobre todo la solar, que
en muchas partes del mundo puede generar ahora la electricidad más
barata que se haya visto en la historia–, y aun así no estamos viendo
una sustitución de los combustibles fósiles por las energías renovables.
Por el contrario, el mismo hecho de que las energías renovables sean
baratas –debido a su disponibilidad y a no depender de mano de obra
(los humanos no tienen que trabajar para que el sol brille, pero sí para
que el carbón o el petróleo salgan de la tierra)– es una maldición bajo
las relaciones de propiedad capitalistas porque los precios mínimos
significan pequeños beneficios. Y el capital se orienta hacia los mayores
beneficios. De ahí la tendencia de los últimos años –y no está claro cómo
se verá afectada por la pandemia– a que más inversiones fluyan hacia
los combustibles fósiles.
La transición actual tampoco dependerá del precio de la energía. Y no
se producirá por algún tipo de cohete tecnológico que despegue y
traslade a todo el mundo a otro planeta. La transición –si tal cosa sucede
alguna vez– será política en su raíz. En otras palabras: presupone, en
primer lugar, un cambio en las relaciones de propiedad, una derrota del
147
capital fósil. Más específicamente, el capital que se beneficia
directamente de los combustibles fósiles tendrá que ser expulsado del
negocio para siempre. Esto no sucederá porque la energía solar y la
eólica se vuelvan ridículamente baratas, ni porque las tecnologías para
captar estas fuentes de energía sean fantásticamente eficientes. Solo
podrá suceder a través de la lucha política.
J. V. y A. P.: Capital fósil redefine desde la perspectiva del marxismo
político y ecológico la interpretación de la modernidad industrial,
enfatizando el vínculo entre los combustibles fósiles y la lucha de clases.
¿Cómo se relaciona esta contribución con la confluencia actual de
intereses entre las nuevas derechas y el capital fósil?
A. M.: Debo decir que, en retrospectiva, cinco años después de que
apareciera Capital fósil, creo que una de las debilidades del libro es que
se centra en el lado de la demanda: por qué los capitalistas compraron
combustibles fósiles en el siglo XIX y por qué lo siguen haciendo hoy en
día. Aborda mucho menos el lado de la oferta: las empresas que venden
combustibles fósiles (o capital fósil primitivo, como lo llamo en el libro).
La razón de este sesgo es que los proveedores tuvieron muy poco o
ningún papel en el tránsito del agua al vapor. Los propietarios de las
minas de carbón respondieron más bien pasivamente a la demanda,
hasta donde pude deducir de mi investigación. Pero el lado de la oferta
es absolutamente central ahora. Gran parte del movimiento climático –
incluido un grupo como Ende Gelände en Alemania, con el que me
identifico– ha apuntado a los proveedores frontalmente, por una muy
buena razón: el interés más concentrado en mantener el status
148
quo proviene de los capitalistas que producen petróleo, carbón y gas.
También hemos visto en los últimos años lo agresiva que puede ser esta
fracción de clase en la promoción de las fuerzas nacionalistas blancas
que eliminan cualquier límite a la producción de combustibles fósiles.
Esta fue la esencia de la era Trump, pero se ha visto algo similar en
países tan dispares como Brasil, Noruega o Polonia. Sobre este tema voy
a publicar un extenso libro titulado White Skin, Black Fuel: On the
Danger of Fossil Fascism, escrito con The Zetkin Collective, que
aparecerá en inglés durante el mes de mayo.
J. V. y A. P.: En los capítulos finales de Capital fósil estableces un cierto
paralelismo entre la Manchester victoriana y la China contemporánea,
como chimeneas del mundo de entonces y de ahora. Hasta cierto punto,
el contexto chino te sirve para rastrear la durabilidad de la economía
fósil en el mundo actual. ¿Cuál es la composición del capital fósil
contemporáneo y la tendencia que sigue? Considerando los poderosos
intereses detrás de él, ¿qué medidas políticas podrían llevar a desafiar
el poder de sus corporaciones y cuáles son las posibilidades reales de
pensar en un futuro fuera del capital fósil?
A. M.: La avanzadilla del capital fósil, por así decirlo, son los capitalistas
cuyo modelo de negocio es obtener beneficios de la producción de
combustibles fósiles. No podemos tener algo así por más tiempo. Y lo
saben: saben que su existencia como capitalistas que se benefician del
petróleo, el gas y el carbón está en juego. ¿Qué medidas políticas
podrían desafiar su poder? Entre todos los países, Dinamarca ha ofrecido
recientemente una indicación. El gobierno socialdemócrata danés ha
149
decidido poner fin a todas las nuevas licencias de exploración y
producción de petróleo y gas en su parte del Mar del Norte. Después del
Brexit, Dinamarca es el mayor productor de petróleo y gas de la Unión
Europea (medido por la cantidad de petróleo y gas extraído en el
territorio nacional de un Estado miembro). Por lo tanto, es muy
significativo que el gobierno danés haya resuelto cerrar definitivamente
esta industria. La decisión es el resultado de las elecciones climáticas en
Dinamarca en 2019, celebradas bajo el impacto de la ola de huelgas
climáticas (que fueron bastante grandes allí) y del verano
extremadamente caluroso y seco de 2018. El gobierno tenía el mandato
popular de hacer las cosas de manera diferente y, en este aspecto
particular, ha cumplido. Sin embargo, la decisión no es exactamente
revolucionaria: se permitirá que los pozos de petróleo y gas que ya están
en funcionamiento continúen hasta que se agoten, dentro de unas tres
décadas. Y los inversores se mostraron de todos modos tibios con
respecto a las nuevas licencias, debido a la pandemia. Además, poner
un límite a los nuevos pozos es realmente una exigencia mínima; debería
haberse hecho hace décadas. Sin embargo, tal como está el mundo, con
la implacable normalidad que sigue avanzando año tras año, resulta ser
algo extraordinario: un Estado traza una línea y dice a los capitalistas
que se acabó, no esperéis poder invertir nunca más en yacimientos de
petróleo y gas nuevos en nuestro territorio. Esa es una especie de
medida política que comienza a desafiar el poder del capital fósil
primitivo. El siguiente paso, por supuesto, es decirles a los mismos
capitalistas: hoy es el último día en que pueden bombear petróleo y gas
150
y extraer carbón. No solo el fin de las licencias y los permisos, sino el fin
de la producción real, ahora: un freno inmediato y un cambio de toda la
economía hacia las energías renovables.
¿Se puede realmente intervenir tan radicalmente en los mercados y las
propiedades privadas? Los confinamientos durante la covid-19 sugieren
que, en realidad, sí se puede. Incluso es posible nacionalizar empresas,
y esta, creo, debería ser una exigencia central: hacerse cargo de todas
las empresas privadas de combustibles fósiles, ponerlas en propiedad
pública y convertirlas en entidades para la extracción de CO2, en lugar
de emitir más. Y para las empresas que ya son propiedad del Estado, en
países que van desde Noruega hasta China, la exigencia debería estar
en cambiar la función de las entidades de ese mismo modo. Obviamente,
esto también implica transformaciones masivas en el consumo de
energía, y para países sin productores importantes de combustibles
fósiles, como Suecia o España, la transición pivotará en ese ámbito. En
mi país son el transporte y la industria pesada (acero, en particular) y la
agricultura los que deben cambiar rápidamente y de forma integral. Pero
ya sea en el lado de la demanda o en el de la oferta, tendrá que haber
intervenciones de gran alcance sobre el estado normal de las cosas en
los mercados y en la propiedad privada. Y si algo bueno puede salir de
esta pandemia, es la percepción, que debería ya estar generalizada
entre la gente, de que el Estado puede de hecho cerrar cualquier negocio
que quiera. Es solo una cuestión de ejercer el poder sobre el capital.
J. V. y A. P.: En varios pasajes del libro, y otros textos tuyos, ofreces
una visión esperanzadora del desempeño de las llamadas alternativas
151
renovables, en términos de energía neta, al tiempo que relativizas los
problemas relacionados con los picos de los combustibles fósiles y otros
minerales imprescindibles para la implementación de infraestructuras
renovables. Esta es una cuestión que, por ejemplo, marca una parte
importante del debate ecológico sobre la transición en España. ¿Qué
capacidad le adjudicas a las llamadas alternativas renovables para
impulsar una transición ecosocial? ¿Qué modelos de transición o ruptura
se podrían seguir? ¿Y qué pueden hacer los movimientos populares al
respecto?
Tendrá que haber intervenciones de gran alcance sobre el
estado normal de las cosas en los mercados y en la
propiedad privada
A. M.: Muy brevemente: por supuesto, soy consciente de los problemas
medioambientales que conllevan los materiales necesarios para la
energía renovable. El litio en Bolivia y demás… Por graves que sean estos
problemas, no se pueden equiparar con los del consumo de
combustibles fósiles. El genocidio y el hurto son delitos, pero no se
puede decir que uno sea igual de malo que el otro. Me opongo
firmemente a la tendencia que se puede encontrar en los márgenes del
ecologismo, especialmente en la reciente película de Michael Moore, de
descartar las renovables por ser destructoras de la naturaleza. Tenemos
que producir y consumir energía; de hecho, algunas personas en el
152
mundo necesitan mucha más, por ejemplo, los 300 millones de personas
sin acceso a electricidad en la India. Y, por otro lado, las limitaciones
ambientales de las energías renovables deben tomarse en serio, razón
por la cual también me opongo a ideas como el comunismo de lujo
totalmente automatizado que visualizan un suministro interminable, una
cornucopia de energía una vez que se haya producido el cambio a las
energías renovables.
Soy de la opinión de que debería reducirse el consumo total de energía
en los países capitalistas avanzados, pero con diferenciaciones: es decir,
debería reducirse drásticamente el consumo de energía de los ricos. No
funcionará, por ejemplo, mantener los niveles de consumo de energía
de los más ricos (y continuar expandiéndolo) y simplemente electrificar
y conectar todos a la energía renovable. Tenemos que conducir menos,
no conducir solo coches eléctricos, y algunas personas tienen que
conducir mucho menos. Una economía mundial totalmente electrificada
y renovable causaría estragos en los ecosistemas si el consumo de
energía continúa aumentando y la producción material acelerándose. Así
pues, una transición significa pasar de los combustibles fósiles a las
energías renovables. Pero también significa recortar el consumo de
energía más atroz y alejarse de un modelo de expansión constante; que
es, por supuesto, el corazón mismo del modo de producción capitalista.
Los movimientos populares son los únicos que pueden impulsar esto.
Las clases dominantes no renunciarán a los combustibles fósiles por su
propia voluntad espontánea, ni se movilizarán para limitar el consumo
de energía en general. Pero estas exigencias son perfectamente
153
compatibles con las exigencias de clase desde abajo, en la medida en
que permiten un mayor consumo de energía entre los más necesitados.
La idea de justicia energética es central aquí.
La pandemia hasta ahora no ha inspirado ningún
movimiento ambiental; una tragedia histórica
J. V. y A. P.: En tu análisis de la crisis del coronavirus, El murciélago y
el capital. Coronavirus, cambio climático y guerra social, estableces una
serie de diferencias entre la forma en que el poder político ha afrontado
sus consecuencias y la falta de acción en relación con el calentamiento
global. ¿Cuáles son las posibilidades que, desde el punto de vista de la
revolución ecocomunista que defiendes, pueden representar este tipo
de hechos críticos, particularmente cuando esta situación de emergencia
parece volverse crónica?
A. M.: Lo único que podemos saber sobre los próximos años es que
habrá más crisis: más e inevitablemente peores eventos climáticos
extremos; más y posiblemente peores pandemias; más síntomas de la
crisis ecológica general, sistemas naturales enteros tambaleándose al
borde de caer, y así sucesivamente. Cada vez que irrumpe una crisis
como esta, el desafío para las fuerzas progresistas es convertirla en una
crisis para los causantes de ella. Es decir, transformar el sufrimiento y el
dolor para focalizar las causas del desastre. ¡Aquí no habrá escasez de
oportunidades! Si al verano extremo de 2018 siguió una ola de activismo
154
climático en Europa, la pandemia hasta ahora no ha inspirado ningún
movimiento ambiental; una tragedia histórica. Tenemos que aprender a
golpear mientras el hierro está caliente. Si fallamos terriblemente con la
covid-19, como al menos ha ocurrido hasta ahora, tenemos que pensar,
aprender y reunir nuestras fuerzas y prepararnos para la siguiente
ronda, porque está cerca. El persistente fracaso en convertir momentos
de crisis aguda en crisis profundas para los causantes de estas significa
estar condenados a sufrir cada vez más sufrimiento y dolor. Hasta donde
yo entiendo, no hay forma de evitar esa lógica.
J. V. y A. P.: Efectivamente, la capacidad demostrada por los gobiernos
para frenar parcialmente la dinámica corporativa dominante, al menos
durante los meses pico de muertes e infecciones, contrasta con la
parálisis de los movimientos sociales (y del movimiento climático en
particular), como hemos experimentado por ejemplo en España. ¿Qué
estrategias políticas podríamos implementar para reducir la brecha entre
la posición subjetiva de las masas populares y el comunismo de guerra
que evocas en el ensayo final de tu libro, cuando planteas una analogía
entre las consecuencias de las crisis ecológicas y la guerra civil que
sucedió a la Revolución bolchevique? ¿No representa este tema una
provocación leninista que subestima la consistencia actual de Estados y
sociedades civiles en diferentes partes del mundo, que no pueden
asimilarse a la Rusia zarista?
A. M.: Por supuesto, cualquier analogía con la situación rusa es parcial
y limitada, toda apropiación del leninismo hoy es selectiva. Vivimos en
un momento político diferente al de los bolcheviques. Pero algunas cosas
155
fundamentales se mantienen: el poder abrumador del capital, su
destructividad y tendencia a producir catástrofes, la necesidad de
enfrentarse a lo primero si se quiere acabar con lo segundo, y mucho
más. Los argumentos en torno al leninismo ecológico y el comunismo de
guerra son esbozos generales. Planeo volver a ellos e intentar elaborar
y llenar algunos vacíos en un futuro próximo. Lo que es inspirador aquí
es que estoy lejos de ser el único que piensa en esta línea: personas
como Derek Wall, Jodi Dean y Kai Heron han asumido recientemente la
idea de una orientación leninista para el movimiento climático, con
diferentes énfasis. Confío en que habrá un diálogo en este sentido en
los próximos años. Cuando la cuestión que plantea la historia es la de
destruir el poder del capital para detener la destrucción de la humanidad,
no podemos prescindir de Lenin. Su fantasma estará con nosotros hasta
que encontremos un camino.
Jaime Vindel es profesor de Historia del Arte en la Universidad
Complutense de Madrid
Alejandro Pedregal es profesor en la Universidad Aalto, Finlandia
Fuente: https://vientosur.info/lucha-de-clases-y-transicion-ecosocial/
156
LA POSITIVIDAD TÓXICA
JAVIER CORTINES
Autor del cuadro Eduardo Anievas
La positividad tóxica exige ser feliz a toda costa y vivir en un estado de
optimismo total, con lo cual se niegan, se minimizan, se invalidan las
auténticas experiencias emocionales del ser humano
El otro día un sobrino pintor que vive en Nueva York me habló de “la
positividad tóxica” que impera en nuestra sociedad de las prisas,
marcada por el individualismo, el consumismo y la victoria sobre el
prójimo. Yo desconocía esa expresión, que explica muy bien “el malestar
de nuestra cultura”, y le agradecí el haberme abierto una nueva puerta
para ver el mundo desde otro ángulo.
157
Eduardo Anievas, así se llama ese bohemio que aboga por encumbrar
“la empatía”, mostró su hartazgo por esas personas que te machacan
continuamente con “un rollo positivo”, haciendo alarde de sus atributos,
y que son incapaces de sentarse a tu lado para escuchar tus problemas,
compartirlos y transmitir el calor humano que tanto se necesita en esta
época en “la hay que estar bien a la fuerza” porque si no eres “un maldito
pringao”.
En el curso de nuestra conversación, mediante el wasapeo, enfatizó lo
importante que es pasar de la mismidad a la otredad, es decir: ponerse
en la piel del vecino, para entender lo que le pasa y compartir sus
pesares, lo que en muchas ocasiones “es la única medicina que ayuda a
soportar las cargas y, por ende, a despejar la mente.”
¿Quién no conoce a esos tipos que te apabullan cuando lo estás pasando
mal y te dan la tabarra para que sigas sus consejos y su ejemplo? “Yo
antes lo pasaba peor que tú y ahora mira como estoy”, le dice un fulano
a otro mostrando un rostro radiante y sano mientras su amigo “vive en
un infierno” y está pensando en el suicidio. Cuando «el fracasado» baja
la mirada, el otro, tras bombardearle con su «positivismo tóxico», mira
el reloj y sale corriendo «porque tiene que hacer cosas muy
importantes».
Le agradecí, repito, que me regalara el mojón conceptual de “la
positividad tóxica”, que ha sido para mí una nueva serendipia filosófica.
En uno de los enlaces que me envió hallé la ruta para encontrar varios
158
textos que abordan el tema, entre ellos la obra “Toxic Positivity: The
Dark Side of Positive Vibes” (La positividad tóxica: el lado oscuro de las
vibraciones positivas) de los psicólogos/especialistas Samara Quintero y
Jamie Long.
¿Qué es la positividad tóxica? Los autores consultados responden así a
esta cuestión:
«Se trata de insistir (ignorando los problemas y necesidades del otro)
en que hay que ser feliz a toda costa y vivir en un estado de optimismo
total, con lo cual se niegan, se minimizan, se invalidan las auténticas
experiencias emocionales del ser humano».
En otras palabras, “cuando reiteramos demasiado que hay que ser
positivo” estamos negando el sufrimiento del otro por narcisismo,
egoísmo, individualismo o simplemente “porque el sistema nos ha
helado el corazón”, nos ha abotargado o nos ha encadenado al adagio,
que tanto gustaba a Anna Harendt, del “burro, la noria, el palo y la
zanahoria”. ¿Para qué? Para que vayamos como pollos sin cabeza en
busca de la fuente de la eterna juventud, de quimeras que terminarán
en la trituradora social.
Los especialistas coinciden en que “la positividad tóxica” es mala para la
salud porque «Nos hace llevar una máscara que oculta nuestros
verdaderos sentimientos, porque nos hace sentirnos culpables (aunque
sea inconscientemente), porque se desprecia el sufrimiento de los
demás engañándonos con el mantra de que estamos bien, porque nos
159
negamos a reconocer cosas que no funcionan en nuestra vida, porque
nos sentimos falsamente mejor viendo que los otros están mal, etc.»
En esta época de tanto ruido, en la que las palabras son como piedras
y la fe está bajo tierra, se echa en falta “esa humanidad” que demanda
“tener tiempo para el otro”. Los mercaderes están haciendo bien su
trabajo y gozan metiéndonos en nichos donde los mudos gritan y los
sordos predican para nos dejemos llevar a un paraíso virtual en el que
acabaremos, si no despertamos, abrazados a un robot o atrapados «in
perpetuum» en las redes sociales, allí donde saltan peces con anzuelos
en la boca y se bebe sangre.
Blog del autor Nilo Homérico
Fuente: https://rebelion.org/la-positividad-toxica/
160
MENSAJE A TODOS LOS BOBOS ECOLOS QUE NOS QUIEREN
HACER LA MORAL...
ANÓNIMO
¡Sólo los de + de 50/60 años pueden entenderlo!
¡El movimiento ecológico hace rechinar a los sin dientes!
161
En la caja de un supermercado una anciana elige una bolsa de
plástico para guardar sus compras.
La cajera le reprocha que no se oponga a la ecología, y le dice:
′′ ¡Tu generación simplemente no entiende el movimiento
ecológico.
Sólo los jóvenes pagarán por la vieja generación que
desperdició todos los recursos! ′′
La anciana se disculpa con la cajera y explica:
“Lo siento, no hubo movimiento ecologista en mis tiempos."
Mientras la mujer de edad deja la caja, la cajera la mira con
desconfianza y agrega:
La gente como tú arruinó todos los recursos a los que somos de
mi generación. Cierto, en tu tiempo no se consideraba la
protección del medio ambiente.
Así que, un poco molesta, la anciana señala que: en mi tiempo
volteábamos las botellas de vidrio que comprábamos en la
tienda. La tienda las enviaba a la fábrica para ser lavadas,
esterilizadas y llenadas de nuevo. Las botellas eran recicladas.
162
Pero no se sabía del movimiento ecológico.
Y la anciana agrega:
En mis tiempos, subíamos las escaleras caminando: no
teníamos escaleras rodantes y teníamos pocos ascensores.
No tomábamos el auto cada vez que teníamos que movernos
dos cuadras:
caminábamos hasta la tienda cercana.
Pero es cierto, no conocíamos el movimiento ecologista.
Tampoco conocíamos los pañales desechables.
Lavábamos los pañales de los bebés.
Hacíamos secar la ropa afuera en una cuerda.
Teníamos un despertador, es decir, nuestro bebé, que nos
levantaba por la noche.
En la cocina, nos activábamos para preparar las comidas; no
disponíamos de todos estos aparatos eléctricos especializados
que existen hoy para preparar todo sin esfuerzo.
Cuando envolvíamos cosas frágiles para enviar por correo,
usábamos como relleno el papel periódico o la guata,
utilizábamos cajas que ya habían servido, no burbujas de
espuma de poli estireno o plástico.
No teníamos cortadoras de gasolina auto propulsadas ni
muchos autos.
163
Aceitábamos la podadora para cortar el césped.
Trabajábamos físicamente; no teníamos que ir a un gimnasio
para correr sobre las alfombras de ruedas que funcionan con
electricidad.
Pero es cierto, no conocíamos el movimiento ecologista.
En mi tiempo, bebíamos agua en la fuente cuando teníamos
sed.
No usábamos tazas ni botellas plásticas que se tiraban después
de usar.
Llenábamos los bolígrafos en una botella de tinta en vez de
comprar una pluma nueva.
Reemplazábamos las cuchillas de afeitar en vez de tirar toda la
navaja después de algunos usos.
Pero es cierto, no conocíamos el movimiento ecologista.
La gente tomaba el autobús, el metro, el tren y los niños se
dirigían a la escuela en bicicleta o a pie en vez de usar el auto
familiar, y la mamá como un servicio de taxi las 24 horas del
día.
Los niños tenían usaban la misma mochila varios años; los
cuadernos que no se terminaban de usar, servían de un año a
164
otro; los lápices de colores, gomas, sacapuntas y otros
accesorios duraban mientras pudieran, nada era desechable.
Pero es cierto, no conocíamos el movimiento ecológico
Sólo teníamos un enchufe de energía por habitación, no
existían los multicontactos que sirven para alimentar la enorme
cantidad de accesorios eléctricos “tan indispensables para los
jóvenes de hoy”.
¡ASÍ QUE NO VENGAS A CAGARME CON TU MOVIMIENTO
ECOLOGISTA!
Lo único que lamentamos los de mi generación es no haber
tenido la píldora lo suficientemente temprano para evitar
engendrar a la generación de jóvenes idiotas como tú, que se
imagina haber inventado todo, empezando por el trabajo. Que
no saben escribir 10 líneas sin cometer 20 faltas de ortografía.
Que nunca abrieron un libro que no sea de cómics. Que no saben
quién escribió el Bolero de Ravel... (incluso creen que es un
gran diseñador). Que no saben dónde pasa el Danubio….
etc., pero que creen que pueden dar lecciones a los demás,
desde lo alto de su ignorancia.
165
RESEÑAS
166
RESEÑA: "EL LIBRO DEL TÉ" Y POR QUÉ NO SOMOS SABIOS
Por Dani Mundo
Regir un gran Estado es como freír un pequeño pez.
Lao Tse
Ilustración: Nora Patrich
El crítico de la cultura Dani Mundo rescata de las mesas de saldo un
clásico del lejano Oriente de Kakuzo Okakura, y trata de explicar qué
define a un sabio.
167
Una vez por año leo este librito hermoso: El libro del té, de Kakuzo
Okakura —también conocido como Okakura Tenshin. Su lectura me hace
bien tanto como me hace mal. Me hace bien porque me hace creer que
todavía es posible revertir o detener la caída estrepitosa en la que
estamos comprometidos, y que festejamos como una buena vida. En
palabras de Okakura: “El mundo avanza a tientas en las sombras del
egoísmo y la vulgaridad”. Eso sí, tendríamos que ser capaces de dar
marcha atrás a toda velocidad, como hacen los dobles de riesgo en las
persecuciones automovilísticas en la tele. Es decir, imposible. Ni siquiera
podemos frenar. Esto es precisamente lo que me hace mal: no hay
salida. Yo, vos y algunes otres tal vez podamos organizar nuestra vida
para que no le haga daño ni al planeta ni a los otros ni a nosotros
mismos, pero somos seres privilegiados: casi la mitad de la población
lucha día a día para sobrevivir. Ni el progresismo ni la izquierda tienen
alternativas sustentables para enfrentar la revolución suicida que
comanda la derecha, que confía que el día después de la catástrofe final
ella se salvará protegida como está en sus bunkers y sus barrios
armados. Lo cierto es que vaciamos todos los rituales de sus sentidos
milenarios y los reemplazamos por gestos y poses que parecen los
mismos, pero tienen otros significados. Significados “chatarras” volcados
por los tutoriales del té (o de lo que sea) en Youtube. Me gusta tanto el
título del libro que cada vez que termino de leerlo me dan ganas de
escribir un Libro del mate, encontrando ahí, en el mate, algunos secretos
de nuestro ser nacional. Falta por hacer una interpretación popular y
168
peronista de este ritual que la derecha se apropió con sus bombillas de
alpaca y sus termos Stanley.
El libro del té se publicó a principios del siglo XX, en 1906, un año
después de que el loco de Albert Einstein hubiera escrito su ensayo sobre
la relatividad —lo que entiendo del pensamiento oriental está influido
por lo poco y nada que entiendo de la relatividad. El pensamiento
oriental es absolutamente relativo. Mi edición porteña de la década del
60 trae dibujos e ideogramas japoneses, fue traducida del inglés, idioma
en el que se escribió originalmente —es una edición diferente a las que
ofertan ahora las editoriales piratas por la avenida Corrientes. El ensayo
de Okakura fue uno de los primeros trabajos teóricos que se propuso
difundir la cultura oriental en Europa, unas décadas antes de que el gran
Daisetsu Suzuki emprendiera esa monumental tarea (hay dos grandes
fenómenos en el siglo pasado que difunden la cultura oriental en tierras
occidentales: los libros de Suzuki y la serie televisiva Kung Fu,
interpretada por David Carradaine). Es un libro muy ameno. Parece fácil
lo que propone, pero es muy difícil. Casi incomprensible. Porque lo que
nos dice es tan claro que por un lado nos parece estúpido, pero por otro
nos resulta irrealizable. Deberíamos vivir como vive un sabio.
Deberíamos convertir esa vida en un modelo de conducta social. Eso sí,
preparar un buen té puede llevar años o toda una vida.
Si tuviera que figurarme de alguna manera al maestro del té, yo, un
occidental típico, es decir: un ser vulgar y obcecado, me lo perfilaría
como un sabio. El sabio no es un asceta ni un anacoreta que renunció
al mundo. Tampoco es alguien que acumuló conocimiento y se volvió un
169
especialista, no (la sabiduría no tiene nada que ver con la acumulación
de conocimiento; la inteligencia se perfecciona con los conocimientos
mientras que la sabiduría se atrofia con ellos). El sabio no da lecciones,
pero si alguna lección queremos sacar de su forma de vida, nos tenemos
que pasar toda la vida interpretándola —tal vez en eso consiste ser
sabio. El sabio, el maestro del té, no hace un buen té, no tiene la receta
perfecta para la cocción del té, sino que vive su vida como si el té fuera
lo único o lo más importante que tiene que hacer. Solo porque es sabio
puede hacer un buen té. Ahora, ¿qué es un buen té? Para responder
esta pregunta complejísima les recomiendo leer el libro.
El maestro del té vive como vive un sabio. Como nosotros, occidentales,
no tenemos idea de cómo vive un sabio en el lejano oriente, lo que
deberíamos hacer es vivir como imaginamos que vive un sabio. En
verdad, el mismo Okakura deja entrever que un sabio auténtico nunca
se proclama sabio, porque ese gesto, asumirse o representarse como
sabio, es precisamente lo que denunciaría su impostura. Pero si vivimos
como imaginamos que vive efectivamente un sabio, y lo imitamos, en
una de esas tal vez nos vayamos pareciendo al sabio. Y como ya
sabemos, la diferencia entre parecer y ser, tan rígida y tan importante
en la filosofía occidental (esta diferencia todavía cumple una función
fundamental en el imaginario progresista), en el siglo pasado por fin fue
refutada: ser y (a)parecer hoy terminan siendo lo mismo —esta
afirmación trascendental no la digo yo, que soy nadie, la dicen figuras
de la talla de Maurice Merleau-Ponty o la última Hannah Arendt. En
pocas palabras, el sabio no puede creer que es un sabio, porque si lo
170
creyera, estaría reproduciendo precisamente eso que debe derogar: el
yo. Eso lo sostiene expresamente Okakura: “Somos malvados porque
somos terriblemente conscientes de nuestro propio yo” (la cursiva es
mía).
Un sabio, por ser sabio, entonces, puede creer y decir lo que quiera,
cualquier cosa, salvo una: que es sabio. Creerse un sabio o un maestro
del té es vanagloriarse, y vanagloriarse es todo lo contrario de lo que
debe hacer un maestro del té. Un sabio piensa (si es que un sabio
“piensa”) que es un ser constantemente imperfecto, fallado, que no deja
de equivocarse, mientras que vulgarmente se considera que el sabio no
se equivoca nunca y es tan perfecto como un té inglés a las cinco o’clock.
¿Cómo resuelve este intríngulis el sabio? Seguramente encontraría
muchas maneras de resolverlo. A mí, al leer a Okakura, se me ocurren
dos: 1) pasar desapercibido, pasar por el mundo sin dejar rastro o
dejando el menor rastro posible; 2) empezar a proclamar a voz en cuello,
en cualquier sitio, que se es un sabio, lo que tiene que hacerlo aparecer
como un idiota —y si no entendí mal a Okakura, el sabio, para ser sabio,
debe también ser idiota.
El yo: menudo problema nos deja este japonés occidentalizado que no
solo se propuso difundir su cultura entre nosotros, sino que también
soñaba con preservarla y legarla al futuro. Desde chiquitos a nosotros
nos enseñan a cuidar al yo, a amarlo, a enriquecerlo. El yo es lo más
importante de nuestra vida —tan importante que sin yo no hay vida, tal
nuestra vulgar creencia. Así como Okakura habla del té-ismo, la religión
del té, nosotros hablaríamos del yo-ismo, la religión del individuo: “El té-
171
ismo es el culto basado en la adoración de lo bello en medio de los
hechos sórdidos de la existencia diaria”. El yo forma parte de los hechos
más sórdidos de nuestra existencia diaria. Lo que va a quedar para otro
articulito es tratar de comprender qué entiende Okakura por belleza.
Seguramente va a ser algo muy distinto a lo que entendemos nosotros.
Cuando termino de leer el libro, a veces creo que es una suerte que
Okakura se haya tomado la molestia de escribir este manual que nos
enseña las transformaciones históricas que tuvo el té en Oriente. Cada
cambio en la manera de procesar el té significó una transformación
política en la organización de esos estados descomunales que son China,
India o Japón. Otras veces, deprimido, creo que el futuro le dio la
espalda a sus lecciones, que las violó, y que convirtió a Oriente en un
objeto de interés como lo fueron los animales que encerrábamos en
zoológicos luego de exterminarlos en la realidad. El capitalismo salvaje
ganó en todos lados, en Norteamérica (considerada globalmente como
el país insignia de la vulgaridad) como en China. También en nuestro
amado país, por supuesto. Frente a este panorama, Okakura sostiene
que no se trata de negar esta realidad, de criticarla desde otros valores
(que serían los propios y que serían mejores), no se trata de denunciarla
con un dedo acusador, se trata de adaptarnos: “La Relatividad busca la
adaptación. El arte de vivir reside en esa readaptación constante a lo
que nos rodea”. Ninguna añoranza por un pasado mejor, ninguna
esperanza por un futuro distinto.
Fuente: https://www.agenciapacourondo.com.ar/cultura/resena-el-libro-del-te-y-
por-que-no-somos-sabios
172
Quentin Meillassoux, Después de la finitud. Ensayo sobre la
necesidad de la contingencia, traducción de Margarita
Martínez, Ed., Caja Negra, 2015, 208 págs.
Por Karla Castillo Villapudua
Este texto expone una breve descripción de algunos de los argumentos
centrales del libro “Después de la Finitud” de Quentin Meillassoux,
filósofo nacido en París en 1967, y discípulo de Alan Badiou. Dicha obra
173
fue publicada por la editorial argentina Caja Negra en el año 2015 y está
conformada por cinco ensayos: La Ancestralidad, Metafísica, fideísmo y
especulación, El principio de factualidad, El problema de Hume, y La
revancha de Ptolomeo.
De entrada, lo primero que encontramos en el prefacio escrito por
Badiou, es la afirmación de que esta obra tiene un estilo claro y
demostrativo. Palabras, que en definitiva, nos develan con anticipación
la ruta de estrategias lógicas que el autor utilizará para demostrar sus
refutaciones a toda filosofía anclada en lo que él llama “correlacionismo”,
esto es, a la tesis que afirma que no podemos acceder de manera directa
a lo real y objetivo, a la cosa en sí, puesto que todo lo que conocemos,
es el vínculo entre pensamiento y ser, y de esta forma es imposible
disociar lo objetivo de lo subjetivo. Ante ello, Meillasseoux propone un
materialismo especulativo, eminentemente realista, donde lo
matemático juega un papel fundamental: “Todo lo que, del objeto puede
dar lugar a un pensamiento matemático (una fórmula, una traslación a
números, y no una percepción o una sensación, es lo que tiene sentido
convertir en una propiedad de la cosa sin mí tanto conmigo”. Tesis, que
coincide con uno de los aspectos del trabajo de su maestro Badiou, en
el libro Manifiesto por la Filosofía, donde el matema forma un operador
elemental de los cuatro operadores que presenta para todo pensamiento
filosófico futuro: matema, poema, política y amor.
Ahora bien, al correlacionismo lo clasificará en correlacionismo débil y
correlacionismo fuerte. El correlacionismo débil renuncia al principio de
174
razón suficiente, es decir, descalifica toda prueba de necesidad
incondicionada, y señala a Kant como su referente: “Hemos dicho que
lo trascendental kantiano podía identificarse con un correlacionismo
débil”. Frente a esto, debemos decir que para Meillasseoux, toda la
filosofía posterior a Kant quedó estancada en un subjetivismo, y nos
quedamos en la conformidad o negación de poder conocer el mundo
objetivo al margen del sujeto. En pocas palabras: entramos a la era de
la subjetividad: “El pensamiento no podría salir de él mismo para
comparar el mundo –en sí- y el mundo para –nosotros- y entonces
discriminar lo que se debe a nuestra relación con el mundo y lo que solo
pertenece al mundo”.
Por su parte, el correlacionismo fuerte renuncia al principio de no
contradicción, es decir, no se puede fundar racionalmente la
imposibilidad absoluta de una realidad contradictoria o de la nada de
todas las cosas: “En el modelo fuerte, en efecto, una creencia religiosa
puede sostener con pleno derecho que el mundo fue creado por dios a
partir de la nada por un acto de amor, o que Dios tiene el total poder de
convertir en verdadera la aparente contradicción de su plena identidad
con su Hijo y con él”. De ahí que para el joven filósofo francés este
modelo está representando tanto por Heidegger como por Wittgenstein
y los califique de místicos.
Ante aquello, Meillasseoux propone superar el correlacionismo con la
tesis de la ancestralidad, para ello tomará ejemplos de las ciencias
experimentales como los siguientes: “el origen del Universo (13,5 miles
de millones de años); la formación de la tierra (4,45 miles de millones
175
de años), el origen de la vida terrestre (3,5 miles de millones de años)”.
Ejemplo que en definitiva nos llevan a pensar en la Astrofísica, la
Geología, la Paleontología, etc. En este sentido, Meillasseoux plantea:
“Pensar la ancestralidad nos lleva a pensar un mundo sin pensamiento,
un mundo sin donación de mundo. Estamos, en la obligación, entonces,
de romper con el requisito ontológico de los modernos según el cual ser
es ser un correlato”.
De este modo, es importante preguntar: ¿Cuáles son los conceptos que
utiliza Meillassoux para armar la arquitectura de su teoría? ¿Cuáles son
esos enunciados? ¿Qué conceptos crea para sostener su argumento?
Establezcamos el vocabulario: Lo ancestral y el archifósil. Llama
ancestral “a toda realidad anterior a la aparición de la especie humana”
y archifósil a los “materiales que indican la existencia de una realidad o
de un acontecimiento ancestral; anterior a la vida terrestre”. De esta
forma, en la propuesta filosófica de Meilleseoux, sí existe vida antes del
hombre, sí existe el mundo al margen del hombre, sí hay un gran afuera
ancestral. No estamos encerrados en el mundo del lenguaje, ni en
ninguna cueva platónica, ni tampoco nos conformamos con el criticismo
kantiano que nos condena únicamente a conocer fenómenos y jamás la
cosa en sí. De tal modo, Meillasseoux necesita construir enunciados
ancestrales o pensar en términos de ancestralidad, cuidándose de no
caer en el paso correlacional.
Una de las estrategias demostrativas de Meillaseoux desemboca en lo
siguiente: “El enunciado ancestral es un enunciado verdadero en el
hecho de que es objetivo, pero respecto del cual es imposible que el
176
referente haya podido efectivamente existir tal como dicha verdad lo
describe”. Visto de esta forma, el enunciado ancestral se vuelve
paradójico, luego entonces, pregunta: ¿En qué condiciones podemos
legitimar los enunciados ancestrales de la ciencia moderna?, a lo que
responde: “Es una pregunta de estilo trascendental, pero cuya
particularidad es que tiene por condición primera el abandono de lo
trascendental”. Luego entonces, ante la inmensidad de tal problema
filosófico, Meillassoux de manera prudente señala: “Pero digámoslo de
inmediato: nuestra ambición no es aquí resolver semejante problema
sino sólo intentar plantearlo bajo una forma rigurosa, y eso de modo tal
que su resolución deje de aparecernos como completamente
impensable”.
En suma, la ambición del pensamiento de Meillassoux deriva en superar
todo límite señalado por los pensamientos débiles o el club de anti-
filósofos franceses (Derrida, Lacan, Deleuze, Foucault), pues igual que
su maestro Badiou desea dejar atrás ese “desencanto” por la filosofía
para reactivar la vía moderna. En este sentido, la voluntad de
Meillasseoux se encamina en superar y transgredir los límites de la razón
crítica, sin caer en el supuesto “dogmatismo metafísico” del idealismo
alemán. De esta forma, otorga un poder nuevo al pensamiento,
atravesando el impasse al que se había acostumbrado toda la filosofía
post-kantiana. No obstante, es importante tener presente que “Después
de la Finitud” es el inicio de su teoría y, por lo tanto, esta sigue en
proceso de construcción. Hacer una crítica, sin la toma de distancia que
177
otorgan los años, y al menos unos cuantos libros más, me parece
prematuro, aunque ello no impida la especulación o pensar en la
posibilidad de semejante empresa. Finalmente es importante recordar el
deseo que guía su propia búsqueda: “Este es el enigma que nos hace
falta enfrentar: la capacidad de los matemáticos para discurrir sobre el
Gran Afuera, para discurrir sobre un pasado que el hombre ha
abandonado tanto como la vida”.
Fuente: https://reflexionesmarginales.com.mx/blog/2015/11/29/quentin-
meillassoux-despues-de-la-finitud-ensayo-sobre-la-necesidad-de-la-contingencia/
178
POEMA
179
MEJOR BUSQUE ENTRE LOS POBRES
Gabriela Mistral
¿De qué quiere Usted la imagen?
Preguntó el imaginero,
tenemos santos de pino,
hay imágenes de yeso,
mire este Cristo yacente,
madera de puro cedro,
depende de quien la encarga,
una familia o un templo,
o si el único objetivo
es ponerla en un museo.
Déjeme pues que le explique,
lo que de verdad deseo.
Yo necesito una imagen
de Jesús El Galileo,
que refleje su fracaso
intentando un mundo nuevo,
que conmueva las conciencias
y cambie los pensamientos,
yo no la quiero encerrada
en iglesias y conventos.
180
Ni en casa de una familia
para presidir sus rezos,
no es para llevarla en andas
cargada por costaleros,
yo quiero una imagen viva
de un Jesús Hombre sufriendo,
que ilumine a quien la mire
el corazón y el cerebro.
Que den ganas de bajarlo
de su cruz y del tormento,
y quien contemple esa imagen
no quede mirando un muerto,
ni que con ojos de artista
sólo contemple un objeto,
ante el que exclame admirado
¡qué torturado más bello!
Perdóneme si le digo,
responde el imaginero
que aquí no hallara seguro
la imagen del Nazareno.
Vaya a buscarla en las calles
entre las gentes sin techo
en hospicios y hospitales
donde haya gente muriendo
en los centros de acogida
en que abandonan a viejos,
en el pueblo marginado
entre los niños hambrientos,
en mujeres maltratadas
en personas sin empleo.
Pero la imagen de Cristo
no la busque en los museos,
181
no la busque en las estatuas,
en los altares y templos.
Ni siga en las procesiones
los pasos del Nazareno,
no la busque de madera,
de bronce de piedra o yeso,
¡mejor busque entre los pobres
su imagen de carne y hueso!
182
DOSSIER
ONTOLOGÍA
ORIENTADA A LOS
OBJETOS (OOO)
183
LA FILOSOFÍA DEL FUTURO, LA IRRUPCIÓN DE LOS MEDIOS Y EL FIN DEL SER HUMANO
DANI MUNDO
Cuando llegue el fin del mundo
no vamos a percibirlo.
XM
Ilustración: Gabriela Canteros
El filósofo Dani Mundo reflexiona sobre los medios de masas y el
individualismo egoísta de nuestra sociedad: “No hace falta chequear la
cantidad de horas y la cantidad de actividades que realizamos en ellas
para corroborar que la virtualidad se está imponiendo como nuestra
primera realidad”.
¿Qué es la ontología?
184
Desde hace unos años viene consolidándose en el campo filosófico un
dispositivo teórico que trata de fundar una nueva ontología, una
Ontología Orientada a Objetos (Triple O). Entre sus integrantes más
encumbrados se encuentran Graham Harman, Quentin Meillassoux,
Timothy Morton, Jussi Parikka, y un largo etc. En nuestro país hay varios
simpatizantes de este movimiento, que tiene a la técnica como núcleo
duro de reflexión. Ontología es una palabra hermosa pero muy pesada,
intimidante. Era la disciplina que se encargaba de pensar el ser. ¿Qué
es el Ser? Parece una pregunta muy obvia, tal vez lo sea, pero la filosofía
siempre se preguntó por cosas obvias e inútiles. Recién con este
utilitarismo totalitario en el que vivimos, que somete todo lo que
hagamos a la necesidad de ser útil para algo, es que la filosofía cambió
bruscamente, y hoy se bambolea entre convertirse en un show
mediático cool a lo Sztajnszrajber, o enclaustrarse en la gélida atmósfera
de los departamentos académicos. La Triple O tiene para aportar lo suyo
en esta decisión. Veremos en qué deriva.
Hasta hace muy poco tiempo la pregunta por el Ser solo incumbía al ser-
humano y sus acciones. Si bien el “Ser” remitía siempre a un ente
diferente y más potente que él, su existencia dependía de la existencia
del ser humano (no hay que olvidar que no hará más de diez años atrás
el término “ser humano” era intercambiable con el de El Hombre, cosa
imposible hoy en día, aunque a algune todavía se le escapa: así de
injusto y arbitrario era nuestro pensamiento). Existía una idea de
trascendencia, cuya encarnación última era Dios. Ya no es así. No hay
Más Allá. Por diversos motivos, desde ecológicos hasta psíquicos, y
185
principalmente debido a la evolución mediática, ser-humano hoy implica
la capacidad de destituir al humano de su lugar de dominio absoluto
sobre los otros entes, y colocarlo reflexivamente en un pie de igualdad
con todos ellos, desde la vida animal hasta las variaciones climáticas y
la explotación mineral. Lo que los diversos miembros de esta novedosa
corriente filosófica hacen es ubicar al humano en esa posición más
plural, más democrática, menos antropocéntrica o yoica. Quizás la única
manera de comprender esta realidad posthumana que vivimos (que
chorrea humanitarismo, por otro lado), es sometiendo a la razón
humana a las potencias de lo irracional, y por ende lo incontrolable —el
maestro en este arte fue, sin duda, Friedrich Nietzsche, el inventor de la
filosofía del siglo XX. Una razón razonable que no se arrogue la potestad
de tener razón. Es posible que la filosofía sólo sobreviva si es capaz de
crear un método de pensamiento que sea al acto de pensar lo que el
sampler o la máquina de ritmos fue a la música hace 40 años atrás.
Parece fácil, pero es muy difícil. Habría tan solo que deconstruir ese
dispositivo insignificante que se llama Yo.
Para lograr esto, estos filósofos neontológicos incorporan al análisis a un
actor que se está volviendo disimuladamente hegemónico, y que
desplaza a los humanos del centro de la escena, me refiero a los medios
de comunicación o información de masas —este concepto: “medios de
comunicación o información de masas”, es demasiado complejo como
para poder resolverlo en este ensayito periodístico de tres carillas, pero
no puedo dejar de plantear que la diferencia conceptual entre los
términos comunicación e información es decisiva, aunque suele pasar
186
desapercibida, y que el término “masas” todavía no está definido, lo
mismo que el concepto “información”: para alguna bibliografía
especializada el término información es tan denso que no puede
definirse de modo claro y distinto (es la tesis de un libro fundamental, La
información, de James Gleick). El concepto “medios”, además, se presta
a equívocos, porque nos hace creer que simplemente son dispositivos
que median entre diferentes instancias (la realidad y el yo, pongamos),
cuando en realidad con esa mediación transforman todo lo que es
mediado, creando incluso una nueva realidad —en lugar de medios
habría que hablar de médiums. A esta nueva realidad la denominamos
virtual, y al proceso por el cual nos mediatizamos, mediomorfosis (es un
concepto que tomo de Roger Findler). La mediomorfosis da cuenta de
una mediatización general de todos los entes. Todos los entes, incluido
el yo, se van por un lado mediatizando (van requiriendo medios de
información para vincularse), y por otro lado van metamorfoseándose a
sí mismos en medios de información, incluido el yo. Esta nueva realidad
(RV) no es un espacio/tiempo abstracto que se enciende cuando nos
sumergimos en el video game o nos ponemos el casco de 3D. Es muy
concreto, tan material como nuestros afectos, nuestra sensibilidad o
nuestra corporalidad. Es esta RV la que exige una ontología ampliada
que vaya más allá de los problemas tradicionales de la filosofía: no solo
se trata de incorporar al cuerpo al hecho de pensar sino de recalibrar
qué es un cuerpo (humano), pues aunque suene raro aún no lo
sabemos.
Otros seres
187
Los medios de información (la técnica) son los que le permiten a este
movimiento filosófico poner en jaque el antropocentrismo y plantear la
necesidad de un pensamiento más plural que tenga en cuenta a los otros
seres que habitan nuestro planeta, y que nosotros, los seres humanos,
estamos aniquilando —otros seres que pueden ser tanto orgánicos como
inorgánicos, naturales como un mineral o artificiales como
el smartphone o una botella de plástico, vivos como los animales o
inertes como las rocas: cada uno de estos entes es de una forma que
convive armónicamente con los otros entes, aunque el ser humano no
pueda entenderlo. La nueva ontología ampliada que le otorga existencia
a las cosas que rodean al ser humano, y por ende sentidos propios,
independientes de lo que los humanos hagamos o dejemos de hacer con
ellos, tiene la misión de pensar desde otras perspectivas que no tengan
a los humanos como origen ni fin de la vida en el planeta. Ésta es la
escala en la que piensan estos filósofos. Ahora bien, los objetos o cosas
ganaron existencia porque esa realidad exterior que parecía sólida y
obvia hoy ha sido intervenida por los medios. De hecho, esas cosas (un
libro, una mesa, una goma de auto, una piedra) también se volvieron
medios o incluso multimedios de información y vinculación de masas.
Son los medios, o si se quiere, la técnica, los encargados de hacernos
tomar consciencia de estos desplazamientos y este descentramiento del
ser humano, que el ser humano, por supuesto, se resiste a aceptar y
niega.
Durante el siglo XX la pregunta ontológica por el ser encontró una última
torsión que terminó abandonando el ser en la nada. Parece un simple
188
juego truculento de palabras, pero este cambio ontológico implicó toda
una revolución filosófica: el ser, en tanto ser, no es (es nada), mientras
que todo lo que es, desde el alma hasta un inodoro, es un ente. El ser
no es y lo que es, es un ente, como si el ser, que no es algo, sea a la
vez la condición de posibilidad de todos los entes. A esta sutileza
absolutamente desestabilizante el famoso Martin Heidegger —el filósofo
más analizado del siglo pasado— la llamó “diferencia ontológica”. Este
develamiento tuvo enormes consecuencias para el pensamiento, entre
otras aquella que llevó a la filosofía a su propio final —durante unos años
Heidegger se enorgullecía de ser el primer pensador post-metafísico. Si
hoy llegamos al agotamiento de la filosofía no es porque ésta sea inútil
(siempre lo fue: pensar no tuvo nunca ninguna utilidad), sino porque su
único objeto, aquello alrededor de lo cual giraba su reflexión, debe ser
destituido: El Hombre, la especie humana. Si solo nos informamos por
los medios de masas y los libros de moda, esta destitución no se percibe,
pues para estos medios lo más importante siguen siendo los seres
humanos y las catástrofes que desencadena, el individuo prístino que
ansía la verdad y juzga todo lo que no entiende como si no tuviera
sentido. Pero en cuanto reflexionamos un poco, advertimos que si hay
futuro (no lo hay), el futuro depende de nuestra capacidad de
deconstrucción no solo del machismo, sino también del individualismo y
el egoísmo modernos, que afecta a todos, todas y todes. El máximo
valor de nuestra sociedad sin valores es el individuo, que hay que
preservar como sea.
¡Viva la adicción!
189
La pregunta por el ser, que es algo obvio, hoy encuentra un campo casi
inédito para inmiscuirse. Por ahora las promesas de esta seudo escuela
no oficializada son más sólidas que sus logros. Sus libros tienen
excelentes títulos, intuiciones brillantes, objetivos imprescindibles y
argumentos que terminan siendo repetitivos. Es cierto que pasó el
momento de los grandes pensadores, ya no los hay. Y que llegó la época
en la que la prensa y la publicidad son más importantes que las
publicaciones. Los pensadores se volvieron investigadores full time con
una agenda sobrecargada de exigencias que piensan sus conceptos
entre aeropuerto y aeropuerto. Sin embargo, es en los libros de esta
gente donde encontramos gérmenes para pensar lo que vendrá, y
dentro de cuya atmósfera ya vivimos. La Triple O habilita pensamientos
que pueden ayudarnos a comprender lo que está ocurriendo en nuestra
sociedad de la información, postmoderna, tardocapitalista, digital. Para
mí, la marca característica de esta sociedad, su esencia, es que divide
su realidad en por lo menos dos dimensiones, a una de las cuales
llamamos realidad (RR), y a la otra le dimos el nombre de realidad virtual
(RV). Que la denominemos virtual evidencia nuestra resistencia, pues
nos hace creer que es una realidad que no alcanza el estatuto pleno de
realidad, es una realidad devaluada, más potencial que efectiva.
Obviamente, no es así: la RV es tan real como la RR. Esto es una
novedad teórica inédita, pues nunca en la historia tuvimos una
tecnología que habilitara la existencia de una nueva realidad, igual y sin
embargo diferente a la RR. Se piensa que la RV es menos real que la RR
porque está mediada y en gran parte acontece en la pantalla (no solo
190
acontece ahí, también acontece en nuestro cuerpo). Pero este juicio es
producto de un error de perspectiva. Nuestro vínculo con la pantalla y
con lo que ocurre en ella es tan íntimo como el vínculo que tenemos con
nuestro propio cuerpo. De hecho, “nuestro propio cuerpo” (concepto mal
construido, pues da a entender que entre nuestro cuerpo y nosotros hay
una diferencia, cuando en realidad son lo mismo) mantiene una relación
con la pantalla que nuestro yo abstracto no termina de entender ni
aceptar. Preso del imaginario del siglo XIX, lo cataloga de adicción. Hace
esto porque supone que el yo es uno y compacto, cuando a todas luces
advertimos que el ser del ser humano es un ser esquizo, escindido,
fragmentado y sin posibilidad de unidad. Nuestra sociedad decretó que
la adicción es mala entre otras razones porque pone en jaque el
presunto poder de nuestro yo, que se ve sometido a hábitos que no
gobierna. La Triple O nos habilita a reflexionar positivamente sobre estos
desplazamientos.
En la realidad analógica en la que vivimos durante siglos, los medios de
información o comunicación de masas, desde el libro de papel hasta el
la radio, desde las pinturas hasta la tele, cumplían una función muy
diferente a la que cumplen los medios en nuestra sociedad digital. En la
realidad analógica los medios informaban lo que sucedía en la realidad.
Por lo menos supuestamente hacían eso. Había una realidad en la que
sucedían cosas, y los medios nos informaban sobre esas cosas. Cuando
empezó el análisis en serio de los medios, recién a mediados del siglo
XX, fuimos advirtiendo que el hecho de informar era más complejo de
lo que creíamos, porque informar no es solo transmitir la noticia de lo
191
que sucedió en algún lado, informar también significa darle-forma
(construir) a la realidad a partir de la manera en que se organiza la
transmisión de esa información. Construir la realidad ya no significa
construir una representación de la realidad, como sucedía hasta la
digitalización de la información, significa que materialmente se elabora
una realidad en la que los seres humanos ya no somos los amos y
señores de nuestros deseos, es decir, de nuestra existencia. De esa
sospecha inicial a lo que sucede hoy se dio un paso geológico, pues es
la RR la que cada vez más imita a la RV. ¿No será que nuestro auténtico
espacio de existencia ya no es la RR sino la RV? No hace falta chequear
la cantidad de horas y la cantidad de actividades que realizamos en ellas
para corroborar que la virtualidad se está imponiendo como nuestra
primera realidad, como un espacio/tiempo otro que estamos habitando
y en el que se juegan gran parte de nuestros deseos. El deseo no es una
fuerza ciega que nos empuja desde la naturaleza a la transgresión, sino
que es una potencia sobredeterminada por lo cultural y lo político —el
deseo no es transhistórico o natural, está situado y políticamente
influenciado. ¿Qué quiero decir? Que también nuestro deseo está
mediatizado. Que nuestro deseo está materialmente encarnado en
nuestros medios. Como supo decir el mediólogo Marshall McLuhan, el
inconsciente no está oculto en algún lado de nuestro ser, sino expuesto
en la tapa de las revistas y en las pantallas.
Chau yo
Tal vez solo aceptando la destitución del yo como ente hegemónico
seamos capaces de comprender la nueva realidad en la que estamos
192
ingresando (en la que ya habitamos). La pregunta lógica que surge es:
¿quién o qué ente comprende en este caso? El que comprende no es el
yo sino un conjunto de pulsiones que el yo reúne, pero no domina. Para
la fenomenología heideggeriana, comprender es algo muy diferente que
entender. Entender es una actividad del entendimiento, comprender, en
cambio, está cargado de afecto y corporalidad, es ambiguo, pero es a la
vez lo que nos enraíza en la existencia, lo que nos permite ser lo que
somos. Comprender es un acto artístico, digamos.
Lo que la Triple O como idea general nos habilita a pensar es que ahora
ya no somos simples usuarios de los medios, que los utilizamos en
nuestro provecho para acceder a realidades que de otro modo nos serían
desconocidas. Ahora también "habitamos" los medios. Somos sus
funcionarios, dice el filósofo italiano Umberto Galimberti. Desde hace
años los trabajos teóricos sobre medios vienen repitiendo que estos se
convirtieron en nuestro medio ambiente, que vivimos rodeados de
medios como en otras eras vivíamos rodeados de naturaleza. No es muy
alocado decir que de hecho cada uno de nosotros se volvió un medio de
información, incluso un multimedio. Desde nuestras huellas dactilares
hasta nuestros deseos están cargados de información a interpretar o
procesar. Los medios son, por supuesto, dispositivos exteriores a
nosotros: ahí, sobre la mesa, está el smartphone, más allá la tele y los
libros cubren las paredes que me rodean. Pero a la vez todos esos
medios influyen en nuestra intimidad, integran nuestra intimidad,
alimentan nuestro deseo. El deseo no es una fuerza natural sino una
potencia históricamente construida. Entre el smartphone y nosotros se
193
entabla una relación que se parece menos a la que entabla el yo-pienso
con la mano, que la que entabla la mano del ciego con el bastón que
utiliza para orientarse por el mundo, y que tan bien analizó el querido
Maurice Merleau-Ponty. Llega un instante, dice Merleau, que entre la
mano y el puño del bastón hay un acoplamiento, se vuelven una unidad
y ya no pueden diferenciarse como dos entes distintos. Con el
Smartphone sucede lo mismo.
Fuente: https://www.agenciapacourondo.com.ar/cultura/la-filosofia-del-futuro-la-
irrupcion-de-los-medios-y-el-fin-del-ser-humano
194
ONTOLOGÍA ORIENTADA A LOS OBJETOS
Nuevas maneras de leer el mundo
ABRAHAM ESPARZA VELASCO
Ilustración de portada: Behance/ Ori Toor
Los problemas filosóficos son tan diversos que pueden ir desde lo más
palpable hasta lo más abstracto. Los objetos y la razón por la que se
consideran objetos es una de estas cuestiones, de la que se encarga
la ontología.
La llamada ontología orientada a los objetos (OOO) es una de las
formas más novedosas de explicar filosóficamente el mundo y, de
195
hecho, su visión impregna campos tan dispares como la informática
y el arte.
LA VUELTA AL OBJETO
La cuestión es relativamente simple. Los objetos pueden ser vistos
por la filosofía como una mera cáscara, la capa más superficial que
envuelve lo importante y más profundo. Pero para el filósofo
estadounidense Graham Harman, el objeto podría ser todo lo que
vemos. Su trabajo se traduce como una ontología donde no existe
una superficie que envuelve, sino que todo es el objeto.
Así, la energía, las cosas materiales, un dispositivo tecnológico, el
átomo, el ser humano o el espacio-tiempo son objetos y están en el
mismo nivel ontológico; es decir, ninguno es más importante que
otro. Esta peculiar perspectiva no se explica de manera sencilla, pero
ayuda a entender diferentes fenómenos y a tomar en cuenta más
variantes en la interpretación del mundo.
El realismo especulativo es un movimiento filosófico que toma su
nombre de un coloquio impartido en la Goldsmiths University en 2007,
en el que participaron figuras importantes para fundar el movimiento
en cuestión, el cual luego se convertiría en la OOO. El francés Quentin
Meillassoux, los británicos Ian Hamilton Grant y Ray Brassier, y el ya
mencionado Graham Harman se reunirían en este evento. La visión
particular de Graham es la que se encargó de formular una ontología
(estudio filosófico del ser en general y sus propiedades), poniendo su
foco en los objetos.
196
Foto: Behance / Studio Takeuma2
Sin embargo, no se trata de un movimiento que esté totalmente
definido; sus límites difusos generan distintas posiciones e intereses
filosóficos, que sin embargo guardan una manera de trabajar en
común.
Los autores de esta corriente comparten una crítica hacia el
antropocentrismo, en el que nuestra especie tiene la mayor jerarquía
en cuanto a importancia. La vuelta al objeto, a darle la importancia
debida, hace necesario quitar al ser humano de su posición
comúnmente protagónica dentro de los problemas filosóficos.
197
Si bien las heridas del ser humano son, por una parte, provocadas
por los avances filosóficos y científicos, ya sea el descubrimiento de
que la Tierra no es el centro del universo, la animalidad de nuestra
especie develada por los descubrimientos de Charles Darwin, o la
teoría de Sigmund Freud en la que el individuo no es dueño de sí
mismo sino que hay un inconsciente que toma muchas veces el
control de las acciones; el realismo especulativo hace un hueco más
grande en estas carencias. Parte de la concepción de que la realidad
existe de manera independiente e indiferente a la acción humana, y
señala que el foco antropocéntrico de la filosofía ha sido, por mucho
tiempo, el equivocado. Los objetos toman una nueva relevancia.
CIENCIA EN RELACIÓN CON EL OBJETO
La razón por la que funciona en la ciencia es que, desde sus inicios,
la ontología orientada a los objetos se ocupa de factores importantes
para ella. Para Bruno Latour, filósofo y antropólogo de la ciencia cuyo
pensamiento antecede a la OOO, existen actantes (es decir, objetos
que actúan) para que ocurra un fenómeno.
En su obra Los microbios: guerra y paz (1984), el filósofo cita como
ejemplo a Louis Pasteur, quien para explicar la diferencia que hay
entre las enfermedades que adquiere cierto tipo de ganado, debió
hacer énfasis en definir los actantes que influyen en ello.
198
La OOO sirve para detectar más fácilmente la relación entre distintos
objetos para explicar fenómenos. Foto: Behance / Yukai Du
Así, el bacteriólogo francés logró dar con un hallazgo importante: el
lugar en que se alimentaba el ganado era en el que se enterraban los
animales que habían muerto enfermos, por lo que los gusanos
transmitían nuevamente la enfermedad hacia la pastura que comían
los rebaños.
Esta visión es defendida por Latour como cercana a la OOO porque,
en este caso, todos los objetos pueden tener alguna clase de poder
para cambiar la afección del ganado. Se trata de una visión
multifactorial en la que todo es un objeto y puede ser actante. Tanto
la realidad misma como las variantes de cualquier estado de la
materia pueden ser de interés para el análisis científico y filosófico, y
pueden generar diferentes fenómenos.
199
El éxito de una figura como Pasteur, también replicado por la
medicina moderna, reside en la revisión minuciosa de actantes que
no se habían contemplado anteriormente: los parásitos, bacterias y
virus que, a su vez, pueden ser transmitidos por otros organismos
más complejos.
ACTORES
El concepto que Latour denomina como actores, son objetos que
intervienen provocando que otros, a su vez, realicen una acción; lo
que se conoce como actor-red.
Los actantes son objetos que tienen mayor posibilidad de sobrevivir.
Para Latour, son aquellos que actúan en cadena a través de otros,
influyendo en ellos y completando una serie de hechos.
La OOO se basa en la posibilidad de conocer la realidad de
manera objetiva. Esa idea la acerca a la ciencia, haciendo una
prolongación de las reflexiones en las que esta ha basado sus
esfuerzos.
200
Las matemáticas se consideran objetos creados por el humano, los
cuales pueden tener impacto en la realidad. Foto: Behance / Yukai Du
MUNDO DE CONEXIONES
El pensamiento de Latour se configuró, en primera instancia, dentro
de la sociología, luego en la filosofía y, finalmente, influyó a las
ciencias que establecen relaciones multifactoriales: es el caso de la
economía, la contabilidad o la estadística. De hecho, su
concepto oligopticon se refiere a los dispositivos que se utilizan para
obtener información y datos. Como es de esperarse, lo anterior puede
tener que ver con la informática y con la forma en que nos
relacionamos a través de redes sociales.
Por otro lado, Graham Harman parte de la noción de herramienta de
Heidegger, la cual no existe separada de los demás y moviliza
propósitos y transformaciones. Esta noción se extiende hacia todos
los objetos.
Para Harman, un objeto no es lo que comúnmente se considera como
tal: algo sólido y durable. Los personajes ficticios, por ejemplo,
forman parte de una realidad y generan relaciones con los demás
objetos; alguien puede sentirse inspirado por una película u otra obra
de arte, siendo que normalmente se les considera fuera del mundo
real.
El mundo como lo conocemos está lleno de factores que nos afectan
y que, sin embargo, sólo pudieron ser concebidos a través de la mente
201
humana: nuestra manera de medir el tiempo e incluso construcciones
sociales como las empresas y el valor económico, son todos objetos
que moldean nuestra realidad.
Los números y las entidades matemáticas son expresiones también
construidas por el ser humano, y que son utilizadas para determinar
lo que existe en el Universo. El filósofo francés Alain Badiou, quien
funge como antecedente del realismo especulativo y la OOO, sostiene
que existe una exterioridad, un gran afuera al que el pensamiento no
puede acceder y al que las matemáticas, por el contrario, sí.
Fuente: https://siglonuevo.mx/nota/2567.ontologia-orientada-a-los-objetos
202
METAFÍSICA, VIOLENCIA Y ONTOLOGÍA
Metaphysics, violence and ontology
MARIO TEODORO RAMÍREZ Universidad Michoacana de
San Nicolás de Hidalgo Instituto de Investigaciones Filosóficas
“Luis Villoro” (México) [email protected]
Recibido: 26/08/2016
Revisado: 30/08/2016
Aprobado: 24/10/2016
RESUMEN
Planteamos aquí que la metafísica es una forma de violencia
fundamental, en cuanto discurso que niega el ser de lo real e impone
una concepción abstracta e idealista del Ser. Siguiendo las líneas del
nuevo realismo o realismo especulativo, contraponemos a la metafísica
una concepción de la ontología como discurso que asume y acepta al
ser tal cual, en su contingencia, devenir y pluralidad. La ontología así
entendida puede ser el fundamento de una concepción no violenta de lo
real y fundar la búsqueda de la paz en la vida social y en la existencia
humana en general.
Palabras clave: Realismo, Meillassoux, Metafísica, Ontología,
Violencia, Contingencia, Pluralismo.
203
ABSTRACT
We propose here that metaphysics is a form of fundamental violence, as
discourse that denies the being of reality and imposes an abstract and
idealistic conception of Being. Following the lines of the new realism or
speculative realism, we counterpose to the metaphysical a conception
of the ontology as a discourse that assumes and agrees to be such that,
in its contingency, becoming and plurality. Ontology so understood can
be the foundation of a non-violent conception of reality and found the
search for peace in social life and human existence in general.
Keywords: Realism, Meillassoux, Metaphysics, Ontology, Violence,
Contingency Pluralism.
La crítica de las ideologías, que en el fondo siempre
consiste en demostrar que una situación social
presentada como inevitable es en verdad
contingente, va unida esencialmente a la crítica de la
metafísica entendida como producción ilusoria de
entidades necesarias.
Quentin Meillassoux1
Me gustaría titular a esta intervención una “metafísica de la violencia”
para indicar su carácter de una reflexión filosófica básica o fundamental.
No obstante, eludo este título porque una tesis que sostendré es
precisamente que la metafísica –al menos en un significado de esta
1 Quentin Meillassoux, Después de la finitud. Ensayo sobre la necesidad de la contingencia, Buenos
Aires: Caja Negra, 2015, pp. 61-62.
204
escurridiza palabra que precisaré adelante– implica una forma de
violencia fundamental. Esta violencia consiste en el intento del
pensamiento de plantearse en la forma de una imposición de la mente
(de sus categorías y nociones) sobre la realidad; al fin, en una
disposición negativa hacia la realidad o incluso de una negación de lo
real (una “denegación”, como se dice en psicoanálisis). Bajo esta
definición, la metafísica resulta ser un ejercicio teórico-ideológico de
violencia, lo que sería una de las razones de la aparentemente
insuperable situación de violencia de la condición humana, en todas sus
formas y manifestaciones. De lo anterior se desprendería la tesis de que
la superación de la violencia, y por ende la asunción de la realidad tal
cual, tarea de una Ontología, de una filosofía ontológicamente fundada,
según nuestra propuesta, tendría como condición la definitiva
superación de la metafísica y de la forma metafísica de pensar y, en
general, de vivir y actuar. (En este planteamiento seguimos el derrotero
del nuevo realismo o realismo especulativo2, corriente filosófica reciente
que ha venido a renovar la perspectiva ontológica en filosofía. Como
sea, nuestra exposición tiene más bien un carácter de reconstrucción o
construcción propia de las cuestiones planteadas).
2 Nos referimos a una serie de propuestas que han aparecido en lo que va del siglo. Cabe señalar
como fecha paradigmática el año de 2007, cuando en un coloquio en Inglaterra cuatro jóvenes filósofos, Quentin Meillassoux, Graham Harman, Iani Hamilton Grant y Ray Brassier, dieron origen a
lo que se llamó “realismo especulativo”, una propuesta por la recuperación de la primacía de la ontología y contra el dominio de la epistemología, el “correlacionismo” (sujeto-objeto) y el relativismo
posmoderno. Otras figuras se han sumado posteriormente a este movimiento como Markus Gabriel,
Maurizio Ferraris, Ian Bogost, Timothy Morton, Jane Bennett, Steven Shaviro. Una reconstrucción de los antecedentes del nuevo realismo ha podido considerar a Roy Baskhar, Gilles Deleuze, Manuel de
Landa, Bruno Latour, y más lejanamente, a Alfred North Whitehead. Sobre el nuevo realismo ver la antología: Mario Teodoro Ramírez (coord.), El nuevo realismo. La filosofía del siglo XXI, México: Siglo
XXI, 2016.
205
Es necesario aclarar que nuestro uso de la dupla filosófica
metafísica/ontología se distingue de otros usos hechos en la historia de
la filosofía, e incluso se contrapone a ellos. Significativamente, por
ejemplo, del uso que Emmanuel Levinas puso en circulación hace unos
años y que prácticamente se presenta de manera inversa al nuestro.
Levinas pone la violencia del lado de la Ontología, al entenderla como el
discurso filosófico que prioriza al Ser, al objeto, en un saber abstracto,
indiferente y colonizador sobre la Otredad, sobre el otro (del otro
humano a la Otredad absoluta), que, por su parte, y dado su carácter
de trascendencia esencial y radical, Levinas convierte en el tema propio
de una “metafísica”, según su uso3. Nuestra diferencia con el uso que
hace Levinas, y quizá nuestra diferencia con su perspectiva filosófica,
tiene que ver con que nosotros consideramos necesario modificar la
manera como tradicionalmente ha operado la Ontología y formular una
nuevo concepto de esta disciplina, donde los rasgos de alteridad,
irreductibilidad y diferencia son propios, según nuestro punto de vista,
del “Ser” en cuanto tal, del objeto mismo (y no sólo del “otro”). En otras
palabras, consideramos que solamente se puede partir de la oposición
Ser / Otro desde una determinada (metafísica, en el sentido tradicional)
concepción del Ser. Bajo otra perspectiva, podríamos colocarnos más
3 Ver, por ejemplo, este significativo pasaje: “La metafísica, la trascendencia, el recibimiento del Otro por el Mismo, del otro por Mí, se produce concretamente como el cuestionamiento del Mismo por el Otro, es decir, como la ética que realiza la esencia crítica del saber. Y como la crítica precede al dogmatismo, la metafísica precede a la ontología”. E. Levinas, Totalidad e infinito. Ensayo sobre la exterioridad, Salamanca: Sígueme, 1977, p. 67. Sobre el carácter violento y colonizador de la ontología, ver: E. Levinas: Humanismo del otro hombre, México, Siglo XXI, 1974. Para el asunto de
la relación entre ontología y violencia, en realidad y en general, entre filosofía occidental y violencia, ver el excelente ensayo que Jacques Derrida dedicó a Levinas: “Metafísica y violencia”, en: Jacques
Derrida, La escritura y la diferencia, Barcelona: Anthropos, 1989.
206
allá de esa oposición (y de la oposición levinasiana entre Ontología y
Ética). Así, en nuestro planteamiento tomamos el concepto de metafísica
en el significado más tradicional, es decir, como el discurso acerca de
un Ser inmutable, abstracto y puro.
Nuestra exposición se desplegará entonces en dos partes: 1)
explicar qué significa que la metafísica es violencia, o que hay una forma
fundamental de violencia implicada en el pensamiento metafísico; 2)
mostrar que un pensamiento ontológico, anti-metafísico y
filosóficamente realista es el camino para un pensamiento (y una vida)
de no-violencia, para un pensamiento, precisamente, no violento.
Comentaremos brevemente algunas consecuencias de estos
planteamientos para el plano ético, particularmente en lo referido a la
relación entre culturas (la interculturalidad), un asunto señaladamente
importante en nuestro contexto.
1. La violencia del pensamiento metafísico.
Entendemos por metafísica el intento del pensamiento filosófico (y
humano en general) por dominar la realidad al buscar someterla a sus
categorías y definiciones, bajo la suposición, en gran medida ingenua,
de que los instrumentos de la mente tienen una realidad más verdadera,
clara y evidente que la realidad misma, y por ende, que ésta se ajusta y
adecua a ellos sin ninguna dificultad de principio, como si estuviera
hecha para ellos. Así entendida, la metafísica se encuentra directamente
emparentada, desde Platón, con el “idealismo”, esto es, con una
sobrevaloración de los elementos ideales sobre los elementos reales, o
207
bien, en su extremo, con una absolutización de la dimensión ideal
(eidética, mental, subjetiva, lingüística, etcétera). También puede
observarse el compromiso de la metafísica con una postura “humanista”
(antropocéntrica) en la medida que, a la vez, la metafísica privilegia en
el ser humano una dimensión espiritual pura y abstracta. De ahí que una
propuesta de superación de la metafísica (y de la violencia) tenga que
seguir la vía de una concepción ontológico-realista y, en principio, no-
humanista. En cuanto ontológica, nuestra crítica de la metafísica se
distingue de las posiciones empiristas o fenomenológicas; en cuanto
realista se distingue de las concepciones vitalistas y anti-racionalistas
como las de Nietzsche o Bergson; y en cuanto no-humanista se distingue
del existencialismo, la teoría crítica (marxismo y racionalismo
comunicativo) y el individualismo posmoderno. Definiremos más
adelante en qué ha de consistir la concepción que defendemos.
Para mayor abundamiento, la metafísica lleva a cabo su operación
de negación de la realidad tal cual a través de las siguientes categorías,
los presupuestos básicos de toda visión metafísica:
1.- Totalidad. El supuesto metafísico más común es la idea de que la
realidad o el mundo conforman una totalidad o un todo existente y, por
ende, aprehensible por el pensamiento. La refutación de este supuesto
es, ante todo, lógica: el todo de lo que existe no puede existir porque
crearía una paradoja: ese todo tendría que pertenecer a sí mismo o,
bien, existir en “ningún lugar”, es decir, no existir. La idea del todo es
una ilusión natural de la mente humana, pero es insostenible con poco
que la analicemos reflexiva y críticamente. El todo, que es el
208
presupuesto de todo lo que sabemos, no es objeto de saber4. Lo que
existe y conocemos son entes, una multiplicidad de entes en diversos
niveles y diversas modalidades de existencia. Cabe observar que el
totalismo (o totalitarismo) metafísico tiene consecuencias relevantes en
el campo socio-político, en el que, finalmente, se justifica y apuntala
toda forma de totalitarismo político-social, es decir, todo orden social
regido por un mecanismo de dominación y control cuasi-absoluto, donde
la disidencia y la diferencia se encuentran perfectamente objetivadas (lo
excluido de la totalidad) y contra las cuales ha de actuarse de forma
implacable para lograr su marginación o eliminación definitiva5.
2.- Sustancialidad. Junto con la idea de totalidad, la metafísica se
reconoce en la suposición de algún tipo de entidad sustancial, es decir,
un ente que posee una identidad y una permanencia de suyo, una
realidad sólida que escapa a todo devenir, cambio o relatividad.
“Sustancializar”, “identificar”, es uno de los modos duros de ejercicio de
la violencia metafísica. Consiste en reducir la complejidad de un
existente a un único modo de ser. El sustancialismo metafísico también
posee consecuencias político-sociales desastrosas. Es el sustento
ideológico de toda mecánica de identificación de los sujetos sociales
(individuales y grupales), que es una estrategia imprescindible en toda
4 De alguna forma, el nuevo realismo tiene como un presupuesto común la crítica de la idea de
totalidad, así en el norteamericano Graham Harman, el francés Quentin Meillassoux, o el alemán Markus Gabriel. Éste útimo es quien ha expresado la escandalosa fórmula “el mundo no existe”. Ver:
Markus Gabriel, Why the world does not exist, Cambridge: Polity Press, 2015 (Traducción al español:
Por qué el mundo no existe, Barcelona: Pasado y Presente, 2015). 5 El señalamiento crítico de las implicaciones ideológico-políticas de la idea metafísica de totalidad
como identidad fue hecho por la antigua Escuela de Frankfurt. Ver, particularmente, Theodor Adorno y Max Horkheimer, Dialéctica del iluminismo, Buenos Aires: Sur, 1969; y Theodor Adorno, Dialéctica negativa, Madrid: Taurus, 1975.
209
sociedad del control6, es decir, en toda sociedad donde la ideología de
“la seguridad y el orden” es utilizada como instrumento para el
mantenimiento de relaciones de dominación y de disminución de las
potencias y los derechos de los ciudadanos que la conforman. Desde el
punto de vista cultural, la categoría de sustancialidad está a la base de
todas las concepciones de la identidad colectiva como una fórmula fija,
esencial, inmutable, y que justifica formas de opresión en el interior de
las diversas colectividades humanas. Pero también se da lo contrario.
Las operadores de identificación y sustancialización sirven a la
dominación de una cultura sobre otras, o de una cultura hegemónica
sobre la subalternas (configurando todas las formas de racismo y
clasismo que acompañan ideológicamente las políticas de dominación)7.
3.- Necesidad. La idea metafísica más fuerte, y aparentemente
insuperable en la mente humana, es la de “orden necesario”, esto es, la
suposición de que existe un modo y no otro en el que las cosas son y
pueden ser. Más todavía, la suposición de que existe, más allá de la
contingencia de la existencia, un “ente necesario”, que se define a sí
mismo y define para el mundo lo que puede y debe ser (como causa
necesaria de lo que existe). No obstante, como argumenta Quetin
Meillassoux8, la idea de ente necesario, y en general la idea o suposición
6 Téngase en cuenta aquí todo el famoso análisis foucaultiano del saber como instrumento del poder.
Ver de Gilles Deleuze, Foucault, Barcelona: Paidós, 1987. 7 Aunque se ha considerado a Luis Villoro un defensor de la identitarismo cultural (o identitarismo
comunitario), él en realidad es un crítico de la idea de identidad; en todo caso, lo que él propone es
una concepción crítica de la identidad cultural en el marco de una teoría general de la ideología y la dominación. Cf. Luis Villoro, Estado plural, pluralidad de culturas, México: Paidós, 1998,
particularmente el ensayo “Sobre la identidad de los pueblos”, pp. 63-78. 8 Cf. el texto que provocó el surgimiento del nuevo realismo: Quentin Meillassoux, Después de la finitud…, Op. cit., pp. 53 y ss.
210
de “necesidad absoluta”, conlleva también, al igual que la idea de
totalidad, un desfase lógico, una contradicción lógica. Un “ser necesario”
es aquel que puede ser al mismo tiempo dos cosas distintas, A y –A, es
decir, que puede ser contradictorio. Pero un ente contradictorio es, por
definición, un ente inexistente. Por ende, Dios no existe. Pues si Dios
existiera sería un ente (sólo existen entes), y si fuera un ente, entonces
no sería Dios. En este sentido, la idea metafísico-teológica de Dios opera
igual que las otras ideas metafísicas, como una forma de violencia –por
eso Gianni Vattimo proponía en algún momento como alternativa para
nuestro tiempo una religiosidad (cristiana) no metafísica ni teológica9, o
bien, como han dicho otros, una espiritualidad sin Dios. No obstante, el
asunto es más complejo. No se trata meramente de formar ahora la
iglesia de los ateos, o de que los ateos formen una comunidad y tengan
hasta su canal de televisión (como está sucediendo en Estados Unidos).
El ateísmo simplón y ramplón plantea un problema semejante al de la
religión, y también puede convertirse en una metafísica impositiva.
Abundaremos adelante sobre esta observación.
En fin, totalidad, sustancialidad y necesidad conforman el esquema
del pensamiento metafísico en cuanto pensamiento contra la realidad,
la contingencia y la libertad: los temas de una nueva ontología, realista
y contra-metafísica.
A lo largo de la historia la violencia de la metafísica se ha
presentado bajo la forma sobre todo de un pensamiento sobre-
determinista o pre-determinista: esto es, bajo la idea de que lo que
9 Cf. Gianni Vattimo, Creer que se cree, Barcelona: Paidós, 1996; y Después de la cristiandad. Por un cristianismo no religioso, Barcelona: Paidós, 2003.
211
existe –el mundo, el universo y la acción humana– se encuentra
determinado (incluso: totalmente determinado) y, por ende, limitado en
cuanto a sus posibilidades de innovación y creatividad. Podemos señalar
tres grandes formas de la metafísica de la predeterminación (o
predestinación). Son los tres designios metafísicos que nos han
acompañado y definido en la historia.
1) El designio metafísico-teológico (religioso).
2) El designio cientificista-naturalista (ateo).
3) El designio humanista-prometeico (nihilista).
Explicaremos ahora cada uno.
1) El designio metafísico-teológico.
Es la suposición de que existe un Dios que es la causa y razón del
universo, de todo lo que existe y que señala posibilidades y deberes para
la vida humana, por ende, que pone límites a la libertad y al deseo
humano. Esta creencia se sostiene no solamente aún su
contradictoriedad lógica, sino aún su contradictoriedad moral –lo que es
peor. Esta se refiere al hecho, muy discutido pero al fin irresuelto en el
discurso teológico, de la contradicción que hay en la suposición de que
existe un ser absoluto, un Dios, y a la vez, en la constatación de que
existe el mal en el mundo –el mal en sus formas radicales, como la
muerte terrible de inocentes y las formas de injusticia y destrucción más
ominosas, para lo cual la única respuesta de la religión es que la voluntad
divina es inescrutable (por no decir absurda o malvada)10.
10 De ahí la escandalosa afirmación de Meillassoux de que “creer que Dios existe” es la peor blasfemia.
Para él, la única afirmación religiosa congruente y seria consistiría en “creer que Dios no existe”, o al
212
2) El designio cientificista-naturalista.
El pensamiento moderno, como sabemos, se aleja en general de la
centralidad de Dios (teocentrismo), pero lo que pone en su lugar deja
mucho que desear. Se ofrece la idea de que la pre-determinación ya no
es operada por una voluntad divina (buena y santa, supuestamente)
sino por los mecanismos de la naturaleza, estructurados en Leyes
universales e incuestionables. El problema no es criticar la imagen que
la ciencia nos da sino la suposición de que esa es la única imagen
correcta y válida de la realidad. Y, en general, el hecho de que la
ideología cientificista nos impone la misma suposición de la “necesidad”
pero en la forma de un proceso supuestamente objetivo y fatalmente
realizado. Esto es peor que la concepción metafísica-teológica, pues
mientras ésta nos dice, al fin, que hay que “creer” en la necesidad, la
ciencia nos dice que la “necesidad” está firmemente comprobada. Toda
cuestión acerca de valores, de posibilidades, de sentido y de la misma
libertad queda eliminada desde la visión cientificista. Hasta qué punto la
propia ciencia posee, en cuanto a sus supuestos, una contextura
ideológica y metafísica, es cosa que sospechamos pero no nos
atrevemos a afirmar. Lo que sí parece que no es casualidad es que el
pensamiento cientificista vaya junto con el sistema capitalista, es decir,
con una sociedad que practica una concepción materialista del mundo
(materialismo vulgar), donde sólo operan el dinero, el cálculo egoísta, el
menos, “que no existe todavía”. A pesar de su carácter escandaloso esta afirmación tiene algunos antecedentes en la tradición de la teología negativa, en algunas formulaciones del pensamiento
oriental y en algunos teólogos-filósofos del siglo XX, como, por mencionar alguno, el teólogo y filósofo
protestante Dietrich Bonhoeffer. Cfr. de Quentin Meillassoux, “Deuil à venir, dieu à venir”, Critique, /1-2 (n° 704-705): 105-115.
213
deseo de posesión y, al fin, el sinsentido, la violencia y la muerte. La
ideología cientificista es la ideología que legitima y sostiene la sociedad
capitalista tardía.
3) El designio humanista-prometeico.
Frente a los dos designios anteriores, desde los albores de la modernidad
y hasta nuestros días (pasando por el marxismo, el existencialismo, el
posmodernismo) se ha conformado la alternativa “humanista”, es decir,
la suposición metafísica acerca de la humanidad como una realidad que
crea su propia necesidad desde la voluntad y un supuesto poder
ilimitado, un deseo de ser que se sostiene a sí mismo y se cree capaz
de lograr lo que sea, a costa de lo que sea11. El humanismo es la última
forma de la violencia metafísica. Declara al humano como el sustituto de
Dios. Al no fundar su decisión más que en su puro deseo, el humanismo
prometeico puede llegar a las peores actuaciones y a las posiciones más
destructivas y negativas12. Es el reino del sinsentido y de la sin-razón. El
imperio del deseo. Un deseo que nada lo funda y que acaba siendo al
fin sólo deseo de nada. En la medida que se desentiende de la primacía
de la ontología en el pensamiento y en la medida que denuncia todo
acto racional de fundamentación como espurio (que sólo acepta una
auto-fundamentación), el humanismo, en su versión posmoderna, se
convierte en una vía al nihilismo y, a veces, a la simple autodestrucción.
11 Para un diagnóstico general sobre el pensamiento moderno y posmoderno, cf. Luis Villoro, El pensamiento moderno. La filosofía del renacimiento, México: FCE, 1992. 12 Para una reflexión sobre el humanismo, sus límites y posibilidades actuales, Cf. Mario Teodoro Ramírez, Humanismo para una nueva época. Nuevos ensayos sobre el pensamiento de Luis Villoro,
México: Siglo XXI, 2011.
214
En este sentido, el humanismo tampoco es una solución, una vía
consistente e interesante para tomar.
2. Hacia la no violencia. Nuevo realismo y ontología de la
contingencia.
Una nueva ontología –la del “nuevo realismo”–, al contrario de la
metafísica, consiste en asumir la realidad como tal, es decir, aceptando
que no hay unidad, ni totalidad, ni sustancialidad, ni necesidad. No hay,
pues, razón (o una razón) de la existencia. Así, el principio del nuevo
realismo es bien la absoluta contingencia de lo que existe (Meillassoux)
o bien la inexistencia de una totalidad, de un mundo (Markus Gabriel),
esto es, la pluralidad indefinida de lo real en la forma de campos de
sentido diversos sometidos a una contingencia básica. Podemos
puntualizar la propuesta general de una ontología de lo real en el
siguiente orden (donde retomamos tesis de algunos conocidos filósofos
del siglo XX previos al nuevo realismo pero que apuntan hacia esta
concepción).
1.- Ontología democrática. La ontología ha tenido de suyo, desde
sus inicios en el pensamiento griego, un significado radical: la
disposición del pensamiento humano a pensar más allá de sí mismo, a
superar los límite “humanos, demasiado humanos” de nuestras
estructuras lingüísticas y conceptuales, es ensayar la posibilidad de un
pensamiento ahumano, o de lo inhumano del Ser, es la disposición a
captar el acontecimiento del Ser con toda su posible carga terrible,
amoral, destructora incluso (son sintomáticos los ejemplos deleuzianos
215
del ser como “acontecimiento”: la herida, la batalla, la muerte13). De ahí
que la condición de un pensamiento ontológico no sea sólo algo
intelectual sino también algo que tiene que ver con un estado de ánimo,
el de la valiente neutralización emocional, la puesta en suspenso de la
“subjetividad” en general, para que lo que “es” se muestre tal cual es.
Como sabemos, el estoico es el personaje filosófico de esa disposición,
una forma de conducirse, una ética, que se sigue inmediatamente de
una ontología, pero que es a la vez su condición.14
En segundo lugar, el pensamiento ontológico implica directamente
un principio político democrático; al hablar del ser en cuanto ser, bajo
una concepción estrictamente de univocidad ontológica, estamos
asumiendo una noción de igualdad ontológica originaria (isonomía
ontológica), es decir, según la consideración de que no hay jerarquía ni
equivocidad ontológica: todos los seres son igualmente seres, todos los
entes son igualmente entes (inmanentismo total)15. Esta suposición
pone las bases trascendentales de una “anarquía soberana” (o una
“anarquía coronada”, según la expresión de Deleuze16) como principio
de una política democrática radical17.
13 Cf. Gilles Deleuze, Lógica del sentido, Madrid: Paidós, 1989. 14 Esta es la manera como Gilles Deleuze interpreta el pensamiento de Nietzsche (el “amor fati”) en su texto ya clásico de Nietzsche y la filosofía, Madrid: Anagrama, 1971. 15 Con estas palabras, un canto a la univocidad del ser, a la inmanencia y a las multiplicidades, concluye Deleuze su libro Diferencia y repetición: “Una sola y misma voz para todo lo múltiple de las mil vías, un solo y mismo océano para todas las gotas, un solo clamor del Ser para todos los entes. A condición de haber alcanzado para cada ente, para cada gota y en cada vía, el estado de exceso, es decir, la diferencia que los desplaza y los disfraza, y los hace retornar, girando sobre su extremo móvil”. Gilles Deleuze, Diferencia y repetición, Madrid: Amorrortu, 1987, p. 446. 16 Gilles Deleuze, Diferencia y repetición, op. cit., p. 80. 17 Sobre la concepción filosófica de una democracia radical (ontológica) ver: Giorgio Agamben, La comunidad que viene, Valencia: Pre-textos, 2006; Jacques Rancière, El odio a la democracia, Buenos
Aires: 2007; Jean-Luc Nancy, La verdad de la democracia, Buenos Aires: Amorrortu, 2009.
216
Bajo este punto de vista, Ontología y Democracia se inter-
constituyen. Podemos hablar de una democracia ontológica, esto es, de
una democracia que se funda en la consistencia mismo del ente, de lo
que existe, más allá de toda conceptualización política, ideológica o
moral, más allá de toda jerarquía social, de toda relación de oposición o
exclusión: todos somos iguales; ninguna desigualdad, ningún trato
desigual puede justificarse desde que nos colocamos en la desnuda
perspectiva ontológica. Pero podemos hablar también de una ontología
democrática, es decir, de una filosofía ontológica para la cual todo lo
que existe tiene el mismo rango de ser y la misma dignidad. La noción
de igualdad se generaliza desde el plano únicamente social-humano al
plano general del universo, de todos los seres animados e inanimados.
Todos los objetos son igualmente interesantes desde esta perspectiva,
no hay ya un privilegio del punto de vista humano. Se ha llegado a hablar
incluso de una “democracia de los objetos”18.
2.- Principio de irrazón. El gran principio de una ontología realista es
el principio de irrazón. Al contrario del clásico y primordial principio de
razón suficiente de toda la metafísica tradicional, el principio de irrazón,
tal como lo formula Quentin Meillassoux, sostiene que no hay ninguna
razón o causa necesaria en todo lo que existe, es decir, que en el reino
del ser en cuanto ser reina la contingencia absoluta, el Hipercaos o
supercaos, lo que no excluye la posibilidad de regularidades no
18 Cf. Lévy R. Bryant, The democracy of objects, Ann Arbor: University of Michigan Library, 2011. Ver
también la obra de Graham Harman, representante norteamericano del nuevo realismo, particularmente: The quadruple object, Washington: Zero Books, 2011; y Hacia el nuevo realismo,
Buenos Aires: Caja negra, 2015.
217
absolutas19. Cabe señalar que este principio se encuentra justificado de
forma lógico-especulativa, esto es, no se funda en alguna forma de
“experiencia” (intelectual, empírica o científico-metódica). De acuerdo
con Meillassoux, el principio de la contingencia absoluta de lo que existe
se fundamenta en la consideración de que la existencia, en cuanto
sometida a la temporalidad, solamente puede ser contingente. Existir es
existir en el tiempo, y éste es un principio sintético a priori, por ende, es
una verdad absoluta, a la vez racional y objetiva. Afirmar la contingencia
ontológica del mundo no es una posición anti-racionalista sino al
contrario: se trata de la más alta forma de racionalidad, la más pura
forma de la razón. Ser racional no es imponer o dar un sentido a lo que
existe sino asumir y aceptar que el ser es sin sentido o sin razón. Por
difícil que parezca, asumir la irrazón no conduce a un quietismo a un
nihilismo sino a la posibilidad de un libre pensar y actuar para los seres
humanos. La racionalidad de nuestro actuar y de nuestras decisiones
éticas queda así posibilitada en la medida que podemos fundamentar en
el Ser lo que queremos y debemos, pues el Ser, en cuanto contingencia
absoluta, es precisamente lo que justifica y da lugar a la libertad de
nuestras elecciones y a la posibilidad real y no sólo ilusoria de un vivir
ético. De alguna manera, una concepción ontológica de la contingencia
absoluta ya es una ontología de la libertad, al menos, de su absoluta no
imposibilidad20.
19 Meillassoux, Después de la finitud…, op. cit., pp. 133 y ss. 20 Para un claro antecedente de una concepción ontológica de la libertad, cf. Jean-Luc Nancy, La experiencia de la libertad, Barcelona: Paidós, 1996.
218
3.- Ontología pluralista. Otro principio ontológico del nuevo realismo
es el formulado por el filósofo alemán Markus Gabriel. Según su
argumentación, una ontología realista es una ontología pluralista, un
nihilismo meta-metafísico, cuya afirmación central es que “el mundo no
existe”, esto es, que no existe la totalidad de todo lo que existe ni
tampoco una forma básica de existencia (el universo físico) de la que se
derivarían todas las demás o que se definirían como pertenecientes a un
mundo irreal, subjetivo, el “mundo interno”. Si no hay mundo externo,
tampoco hay mundo interno21. Lo que existe es una pluralidad transfinita
y no totalizable de campos de sentido. Un campo de sentido es el lugar
de aparición de los objetos, y de este modo es que podemos decir de
tales objetos que existen. Ahora bien, en contra de lo que parece, los
campos de sentido son estructuras o condiciones ontológicas, no están
determinados por algo “subjetivo”, existen como tales
independientemente del sujeto. Gabriel insiste en que no existe el
campo de sentido de todos los campos de sentido22.
En general, el nuevo realismo ha venido a cuestionar las supuestos
más comunes del pensamiento moderno, como la dualidad subjetivo-
objetivo. El filósofo norteamericano Graham Harman propone una
Ontología orientada a objetos, donde, al contrario de toda la tradición
moderna, la filosofía da una preeminencia total al objeto, asumiendo a
la vez que existen muchos, infinidad de objetos, más allá de los que el
orden epistemológico establecido determina como tales. Objetos son los
21 Cf. Markus Gabriel, “Neutral Realism”, The monist, 2015, 98, 181–196. 22 Cf. Markus Gabriel, Fields of sense. A New Realist Ontology, Edinburgh: Edinburg University Press,
2015; y Trascendental Ontology. Essays in German Idealism, London: Bloomsbury, 2011.
219
típicos objetos de “tamaño medio” (ejemplos clásicos de la ontología
tradicional): la silla, el cenicero, el árbol, etc. Pero objetos son también
las cosas sumidas en los abismos oceánicos, una tormenta perfecta, la
Unión Europea, un equipo de fútbol, los restos de un cadáver a la
intemperie, una partícula de polvo, un quark, el dragón de la suerte, una
galaxia lejana… ¿Y el sujeto humano? Él también es un objeto, uno entre
tantos otros, relacionado con cualesquier otros, sin ningún privilegio
especial. En todo caso, Harman propone sustituir la cupla sujeto-objeto
por la dualidad objeto real (que existe independientemente de nosotros
y, heideggerianamente, se retrotrae a toda presencia) y objeto sensual
(la figura o apariencia que cada objeto ofrece a otros, sean seres
humanos o seres cualesquiera)23. De esta manera, la ontología pluralista
de Harman nos aleja definitivamente de cualquier antropocentrismo, de
cualquier “humanismo” egocéntrico y egolátrico, humanismo que según
observaba ya Jean-Luc Nancy es, al fin, el núcleo o la razón de toda
significación metafísica24.
3. Conclusión: Ontología e interculturalidad.
Como habíamos adelantado, el objetivo de una ontología de lo real, de
la contingencia, es superar la metafísica y, por ende, su carácter
impositivo, autoritario y totalitario, o, al menos, la manera en que el
23 Cfr. Graham Harman, “The road of objects”, continent.3.1 (2011):171-179; en español: “El camino a los objetos”, traducción de Ilbel Ramírez Gómez, en: Mario Teodoro Ramírez, El nuevo realismo…, op cit., pp. 170-192. 24 La metafísica consiste en la reducción del sentido del ser a una significación, a una representación y, por ende, al sujeto que opera la representación. Cfr. Jean-Luc Nancy, El olvido de la filosofía,
Madrid: Arena, 2003, p. 44. Para Nancy el sentido del mundo, el sentido de la existencia es (están en) la propia existencia; el sentido no está separado de la existencia en su exterioridad, incluso en
su materialidad. Esto implica, claramente, pensar más allá del Dasein, es decir, de Heidegger.
220
discurso metafísico legitima las formas sociales y prácticas del
autoritarismo y el totalitarismo. De esta manera, una perspectiva
ontológico-realista radical funda las posibilidades de la asunción radical
de la democracia como el régimen político de la contingencia y la
pluralidad, por ende, como el régimen que lleva en su núcleo la tarea de
disolución de todo poder de dominación y toda forma de ideología, esto
es, de todo intento de sobreponer el Estado a la sociedad. En esta
medida puede fundarse filosófica y éticamente una práctica y una vida
en común más allá de la violencia, o donde la violencia ya no puede
presumir de ningún tipo de justificación o legitimación. Desfundar la
violencia es el camino para un pensamiento sin violencia, que a su vez
es el camino para una vida en paz y para la paz. Al fin, se trataría para
el humano de hacer las paces con el Ser tal cual es (de transitar, como
dice Markus Gabriel, de una “conciencia autónoma” a una “conciencia
ontónoma”25). De todo lo anterior se derivarían otras consecuencias en
los planos éticos, estéticos, políticos, culturales, epistemológicos,
etcétera. Nos interesa hacer algún comentario sobre las implicaciones
de este planteamiento para el campo de las relaciones interculturales.
En general, la dominación de unas culturas sobre otras se ha
basado precisamente en que la cultura dominante asume una metafísica
de la violencia y una metafísica violenta. El “ser necesario”, el totalismo
y el sustancialismo funcionan como mecanismos de justificación y
legitimación del dominio cultural, y a la vez, a través de mecanismos
prácticos-ideológicos, como instrumentos para producir y reproducir las
25 Cf. Markus Gabriel, “A ideia de Deus em Hegel”, Aurora (Curitiba), v. 23, n. 33 (2011), p. 537.
221
relaciones de dominación establecidas. A la forma de pensar metafísica
corresponde precisamente una forma monológica y monocultural de
pensar. Se asume que existe una “Cultura” única o básica, una cultura
esencial y bajo el signo de la necesidad, cuya misión es, al fin, colonizar
a todas las demás, convertirlas, diluirlas o incluso, si es el caso de que
persistan en su diferencialismo, destruirlas.
A una metafísica mono-culturalista se opondría una ontología pluri-
culturalista e interculturalista. Dos serían sus principios: no existe
necesidad en el campo cultural (ni en ningún campo), las culturas son
productos contingentes de la ontológicamente contingente historia
humana (que es prolongación de la contingencia ontológica de todo lo
que existe), no hay proceso necesario en ninguna cultura y ninguna
puede plantearse como la más “necesaria”26. Por ende, segundo
principio, la pluralidad cultural es una expresión ontológica, un rasgo de
la pluralidad que caracteriza todo lo que existe.
Tanto desde el punto de vista cultural, como desde el punto de
vista de la vida individual, y humana en todos los aspectos, queda
cuestionada toda estrategia de imposición, dominación o control que se
crea justificada en algún tipo de concepción filosófico-general
(metafísica). El principio de la contingencia y el de la pluralidad, en
cuanto principios ontológicos, nos abren a la posibilidad de una praxis
de la libertad sin restricción y de la responsabilidad sin atenuantes, de
cada cual y en cada situación. En general, nos abren a la posibilidad de
una humildad esencial de la conciencia humana ante la realidad, la
26 Cf. Mario Teodoro Ramírez, Filosofía culturalista, Morelia: Gobierno del Estado de Michoacán, 2007.
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naturaleza y el cosmos. No hay nada que garantice racionalmente que
los humanos somos un ente privilegiado en la realidad. Nuestro
antropomorfismo es un defecto cognoscitivo que debemos siempre
buscar superar y no usarlo abusivamente para justificar el acendrado
antropocentrismo. En todo caso, si resta una dignidad humana
incuestionable es la de un ser que es capaz de asumir valerosamente
esa verdad eterna y esta forma superior de razón: que no hay nada
necesario, que todo es contingente, sin-razón y sin-sentido, y que
nuestro ser no es sólo lo que “queramos” hacer de él sino lo que
realmente “podamos” hacer de él, en función de las condiciones
ontológicas de nuestra libertad, bajo una perspectiva que es realista
pero no determinista, que es racional pero no autoritaria, que es humana
pero no humanista, que es ontológica pero nunca cerrada o acabada.
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Fuente: http://sincronia.cucsh.udg.mx/portal_articulos_71/a6_126_142.html
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