UNIVERSIDAD DE SAN CARLOS DE GUATEMALACENTRO UNIVERSITARIO DEL NORTE -CUNOR-LICENCIATURA DE CONTADURÍA PUBLICA Y AUDITORIANOVENO CICLOPLAN DIARIO
Licda. Griselda Caseros
RIESGO DE LIQUIDEZ
Carlos Antonio Chen Ponce Ana Julissa Elías Bac
Felipe Antonio Caal CucNorma Giovanni Argueta Moran
INTRODUCCIÓN
Las entidades financieras deben resolver diariamente la estimación de la cantidad de dinero que deben mantener en efectivo para atender todas sus obligaciones a tiempo. Entre estas obligaciones se pueden citar la recuperación de la cartera de sus proveedores de fondos, ya sea al final del término de un depósito a plazo, o cuando el cliente de cuenta de ahorro o corriente los requiera. El Riesgo de liquidez se produce cuando una entidad a corto plazo no tiene liquidez suficiente para atender este tipo de pagos.
No hay que confundir iliquidez con insolvencia. La primera es coyuntural y la segunda estructural. Los problemas de liquidez pueden resolverse a través de la venta de inversiones o parte de la cartera de créditos para obtener efectivo rápidamente. No obstante, la liquidez mal administrada puede llevar a la insolvencia.
El riesgo de liquidez hace pues referencia a la posibilidad de que el activo pueda ser vendido fácilmente, antes de su vencimiento, sin sufrir pérdidas importantes de capital.
RIESGO DE LIQUIDEZ
El riesgo de liquidez puede definirse como la pérdida potencial ocasionada
por eventos que afecten a la capacidad de disponer de recursos para enfrentar
sus obligaciones pasivas, ya sea por imposibilidad de vender activos, por
reducción inesperada de pasivos comerciales o por ver cerradas sus fuentes
habituales de financiación. El riesgo de liquidez pude considerarse como el
agregado de tres componentes:
Riesgo de fondos: que considera la posibilidad de una que una entidad no
pueda cumplir en la forma pactada sus obligaciones de pago debido al desajuste
entre los flujos de fondos activos y pasivos.
Riesgo contingente: que es el riesgo de que eventos futuros puedan
requerir un volumen de liquidez superior a la prevista
Riesgo de que ciertos flujos de caja tengan un vencimiento y/o una cuantía
diferentes a los previstos contractualmente.
Riesgo de que los clientes hagan uso de las opciones implícitas de muchas
de las operaciones bancarias típicas: cancelaciones anticipadas,
renovaciones, etc
Riesgo de mercado: que mide la capacidad de una entidad para generar o
deshacer posiciones sin incurrir en pérdidas inaceptables.
El riesgo de fondos, junto con el riesgo de tipos de interés y de tipos de cambio, es
considerado uno de los tres riesgos bancarios estructurales.
La identificación del riesgo de liquidez
Los bancos tienen una estructura de pasivo con una proporción de fondos
propios mucho menor que el resto de empresas. La mayor parte del pasivo
bancario está en forma de depósitos totalmente líquidos para sus titulares,
mientras que los activos están materializados en préstamos con distintos plazos
de vencimiento. Los bancos mantienen como reserva solo una pequeña parte de
los depósitos. Por tanto, la falta de liquidez, que impida en un momento
determinado realizar los pagos comprometidos, es un riesgo inherente al negocio
bancario y que siempre se ha tenido en cuenta en la gestión de las entidades de
crédito. La liquidez puede entenderse como la capacidad de atender las
disminuciones de pasivo y los incrementos del activo.
Un banco tiene una adecuada liquidez cuando puede obtener fondos
suficientes, ya sea incrementando los pasivos o transformando sus activos,
rápidamente y a un coste razonable. La liquidez es esencial para todos los bancos
para atender las fluctuaciones del balance, esperadas e imprevistas, y proporciona
fondos para crecer.
Precio de la Liquidez
Teniendo en cuenta que la liquidez exige tomar posiciones en instrumentos
a corto plazo y de alta calidad crediticia, el precio de la liquidez es la renuncia al
mayor ingreso que se obtendría invirtiendo a plazos más largos y/o en activos de
menor calificación. Si la liquidez necesaria no se consigue realizando las
posiciones en activos líquidos, el banco se vería forzado a reestructurar o adquirir
pasivos adicionales en condiciones de mercado desfavorables. Por ello, también el
precio de la liquidez es una función de las condiciones del mercado y de la
percepción por el mercado del riesgo de interés y de crédito reflejados en las
operaciones de balance y de fuera de balance de la entidad.
Medida de la liquidez
Al tratar de la liquidez, se suele considerar el corto plazo hasta los tres
meses, coincidiendo con el plazo máximo habitual que se contrata en los
mercados monetarios y, por tanto, con el máximo plazo que controla el
departamento de Tesorería, que es siempre el gestor último de la liquidez. El
medio plazo se suele considerar hasta un año, excepcionalmente, hasta 18
meses.
La medida de la liquidez no es más que la expresión del descuadre entre
los activos y pasivos, ya sea en términos absolutos o relativos. La sofisticación de
los análisis de liquidez está en los modelos predictivos de comportamiento de los
activos, pasivos y operaciones fuera de balance y de la evolución dinámica de las
masas de balance de la entidad.
Los métodos de valoración del riesgo de liquidez
Para determinar si la posición de liquidez del banco es adecuada deberán
analizarse lo siguiente:
Necesidades históricas de recursos
Posición de liquidez actual.
Necesidades futuras de fondos previstas
Fuentes de recursos
Opciones para reducir las necesidades de recursos o conseguir recursos
adicionales.
Calidad, presente y prevista, de los activos.
Capacidad, actual y futura, de generar beneficios.
Posición de capital actual y previsto
Para comparar los flujos de caja derivados de las posiciones activas, pasivas y
fuera de balance de la entidad, se utiliza una escala donde se sitúan los
correspondientes vencimientos agrupados en determinados períodos de tiempo.
El análisis de las necesidades futuras de fondos parte de la construcción de la
escala de vencimientos y en cálculo del desfase o gap (superávit o déficit) de
fondos para los períodos considerados y el importe acumulado a lo largo de un
período de tiempo.
Medición Estática
La medición estática del riesgo de liquidez parte de proyectar los flujos,
pasivos y activos para un periodo de tiempo, bajo un escenario predeterminado.
Para los flujos contractuales la estimación es directa. Esto permite proyectar en el
tiempo tanto los flujos activos como los pasivos y determinar los importes de
superávit o déficit. Con esta información es posible construir diversas medidas que
sirven para controlar los niveles de liquidez mínimos requeridos
Gap de liquidez acumulado
Una vez calculado el gap de liquidez de cada periodo, se puede estimar el
llamado gap de liquidez acumulado, para lo que se suman los gaps de los
periodos comprendidos dentro de cierto período de tiempo. La expresión que
permitiría su cálculo es:
Gap de Liquidez Acumulado
El gap de liquidez acumulado proporciona información sobre los
requerimientos (gap negativo) o excesos (gap positivo) de liquidez en el periodo.
La posibilidad de un gap acumulado positivo también es importante. Un exceso
innecesario de liquidez puede tener un impacto negativo en la rentabilidad de la
gestión del balance. Sin embargo, en el contexto de una función de gestión de
riesgo, el objetivo es establecer niveles mínimos de liquidez que permitan
minimizar la posibilidad de que la institución financiera incumpla con sus
compromisos pasivos. Esto lleva al establecimiento de límites operativos o ratios
de liquidez.
Límites
Existen muchos límites internos utilizables por las entidades, en función del
modelo de gestión de liquidez implantado: por plazos, por divisas, máximo
porcentaje de financiación por contraparte, desfases en la escalera de
vencimientos, máxima posición en el interbancario, etc. Sean cuales sean los
utilizados, los límites cuantitativos al riesgo de liquidez deben referirse, como
mínimo:
a) la máxima apelación al mercado interbancario en divisas convertibles;
b) el máximo desfase de liquidez acumulada en cada plazo del análisis; y
c) máxima apelación a los mercados mayoristas de las diferentes clases de activos.
Medición Dinámica
A diferencia de la medición estática, parte de considerar diversos
escenarios futuros para la evolución de los flujos de efectivo netos. Implica
modernizar la porción incierta de los flujos futuros. Entre otras causas, a:
Pagos contingentes por posiciones en derivados financieros.
Encarecimiento o cierre de fuentes de financiación.
Suspensiones de pagos en las posiciones activas.
Cancelaciones anticipadas.
El tratamiento dinámico del riesgo de liquidez implica desarrollar modelos
probabilísticos y de comportamiento para las variables de mercado y líneas de
balance. Al elaborar todas las previsiones de liquidez hay que tener en cuenta las
tendencias macroeconómicas, de los mercados y de los tipos de interés, por su
incidencia en la evolución de los activos y pasivos, así como en la de los pasivos
contingentes y productos derivados.
A partir de los modelos es posible generar múltiples escenarios futuros para
la distribución de los flujos activos y pasivos. Según los escenarios considerados,
será diferente la volatilidad de ciertas partidas del activo y el pasivo,
especialmente las que no tienen un vencimiento determinado, como las cuentas
corrientes, los disponibles en cuentas de crédito y otros pasivos contingentes,
como los avales.
Gestión del riego de liquidez
La gestión de la liquidez supone estimar las necesidades de liquidez, para
alcanzar los objetivos previstos, y atenderlas de la forma menos costosa posible.
Los bancos pueden obtener liquidez por ambos lados del balance así como de
actividades fuera de balance.
Liquidez de los activos
Generalmente los bancos mantienen algunos activos líquidos para
complementar la liquidez de los depósitos y otros pasivos. Esos activos pueden
ser rápida y fácilmente convertibles en efectivo a un coste razonable, o tienen un
plazo de vencimiento anterior a las necesidades de liquidez previstas.Los activos
líquidos incluyen aquellos que pueden ser pignorados o utilizados en repos y,
aunque los gestores esperan conseguir también un ingreso por intereses en estos
activos, su objetivo básico es procurar liquidez.
Los activos del mercado monetario son generalmente los activos más
líquidos.
La cartera de inversión puede proporcionar liquidez por tres vías:
1. El vencimiento de los activos;
2. la venta de los activos para conseguir efectivo; y
3. la utilización de los activos “libres” como colateral en un repo o en un préstamo.
Los activos de caja tales como efectivo, cuentas mutuas, y saldo en la cuenta del
Banco de Guatemala son generalmente activos no líquidos en una entidad en
funcionamiento. Esos activos son necesarios para atender el negocio diario, así, si
esos fondos se utilizan deberán reponerse antes de acometer más actividades
Liquidez de los pasivos
Los grandes bancos generalmente tienen un fácil acceso a los mercados
monetarios y usualmente encuentran que tales prestamistas resultan una vía más
económica para resolver a corto plazo las demandas inesperadas de préstamos o
las retiradas de fondos. El acceso a los mercados mayoristas puede proporcionar
fondos rápidamente y en cuantías elevadas frente a los resultados mucho más
lentos derivados de un incremento de los depósitos de clientes. Sin embargo, los
bancos más pequeños no suelen tener la misma facilidad para resolver estas
situaciones recurriendo a los mercados monetarios.
La gestión de pasivos no está exenta de riesgos. Los cambios en las
condiciones de los mercados pueden hacer difícil que el banco consiga recursos
para gestionar su estructura de pasivo.
Fuentes de Recursos
Las fuentes de recursos se caracterizan generalmente como mayoristas y
minoristas. Los bancos distinguen entre ambas fuentes dado que tienen diferente
sensibilidad al riesgo de crédito y al riesgo de interés y reaccionan de forma
distinta a los cambios en las condiciones económicas y financieras de la entidad.
Los depósitos minoristas, son los que el banco recibe del público en
general, economías domésticas y pequeñas empresas. Son la principal
fuente de financiación y, para muchos bancos, continúan siendo a fuente
relativamente estable de fondos.
Los depósitos minoristas, se benefician de la existencia de un fondo de
garantía y los clientes suelen valorar la relación personal con la entidad.
Sin embargo, la determinación de la sensibilidad de los depósitos
minoristas no resulta sencilla. El tamaño del depósito; el origen, oficina o
Internet; la personalidad del titular, etc. son aspectos que deben
considerarse para determinarla.
Los depósitos mayoristas, provienen de grandes empresas, otras instituciones
financieras, administraciones públicas, etc. Estos fondos resultan muy sensibles al
riesgo de crédito y al riesgo de interés y suponen una importante fuente de riesgo
de liquidez para el banco.
El importe de la misma será aquel que si se retirase solo, o acompañado de
unas pocas cuentas grandes más, podrían originar un cambio significativo en la
estrategia diaria.
Titularización de activos
La titularización ha incrementado las fuentes de recursos para las entidades
y la presencia de las mismas en los mercados. Sin embargo, la dependencia
excesiva de un único vehículo puede incrementar el riesgo de liquidez.
Los bancos que originan activos específicamente para su titularización
pueden depender excesivamente de que el mercado esté en condiciones de
absorber las nuevas emisiones de bonos de titularización. Esta estrategia puede
causar dificultades si las circunstancias del mercado, o las específicas del banco,
le obligan a mantener los activos en su cartera.
Repercusiones
Además del grado de exposición de cada entidad a las causas que definen
cada escenario, será necesario formular hipótesis sobre la duración de la crisis, su
intensidad, su generalidad, etc.
El paso siguiente consistirá en estimar como pueden verse afectadas las
variables más significativas.
Horizonte de supervivenciaEspecialmente para los escenarios de crisis severas, se debe establecer el
número de días de supervivencia que se pretende garantizar. Habitualmente se
considera que el horizonte mínimo necesario es de 20-30 días.
Planes de contingencia
Tras establecer los diferentes escenarios de crisis y el horizonte de
supervivencia que se quiere garantizar, las entidades deben prever cómo obtener
la liquidez necesaria en dichas condiciones diseñando procedimientos que
garanticen suficiente liquidez con los menores costes posibles. Analistas
profesionales u otros participantes en el mercado pueden también formular
opiniones sobre la calidad crediticia del banco.
A la hora de plantearse la gestión del riesgo de liquidez, como de cualquier
otro riesgo, tanto por las entidades de crédito como por las autoridades
supervisoras debe analizarse como el grado de exposición a otros tipos de riesgos
puede afectar a la liquidez.
Lineamientos para la estimación de la Liquidez en Riesgo
Según el Oficio No. 5739-2009 de fecha 30 de diciembre de 2009 enviado
por la Superintendencia de Bancos de Guatemala a Bancos, Sociedades
Financieras y Entidades Fuera de Plaza estimula los siguientes lineamientos para
la estimación del Riesgo de Liquidez
1. Bandas de Tiempo
Con base en los criterios establecidos en el presente apartado se
clasificarán los saldos de las cuentas del balance a la fecha de evaluación, tanto
en moneda nacional como en moneda extranjera, en las bandas de tiempo
expresadas en días calendario:
Banda
1
= de 1 a 7 días
Banda 2 = de 8 a 15 días
Banda 3 = de 16 a 30 días
Banda 4 = de 31 a 60 días
Banda 5 = de 61 a 90 días
Banda 6 = de 91 a 180 días
Banda 7 = de 181 a 365 días
Banda 8 = más de 365 días
Para la clasificación anterior, las entidades deberán tomar en cuenta los criterios
siguientes:
Activos
a. El efectivo en caja y los depósitos de inmediata exigibilidad en entidades
bancarias incluyendo al banco central, se clasificarán en la primera banda de
tiempo.
b. Los cheques a compensar se clasificarán en la primera banda de tiempo.
c. Las inversiones en títulos-valores para negociación y para la venta podrán
clasificarse a partir de la primera banda de tiempo, conforme el propósito de las
mismas y el plan de negociación o venta que defina la institución.
d. Los giros sobre el exterior se clasificarán en la tercera banda de tiempo.
e. Las cuotas en mora de capital, intereses, comisiones u otros recargos de créditos
vigentes, deberán clasificarse en la quinta banda de tiempo y el saldo restante de
dichos activos crediticios deberá mantenerse en las bandas de tiempo que
correspondan a los vencimientos contractuales.
f. La cartera de créditos vencida deberá clasificarse en la octava banda de tiempo.
g. Los activos extraordinarios se clasificarán en la octava banda de tiempo.
h. Los activos que no tengan una fecha cierta de vencimiento deberán clasificarse
en la octava banda de tiempo.
i. Los activos con fecha de vencimiento contractual se clasificarán en las bandas
de tiempo según las fechas en que se esperan recibir los flujos de efectivo
conforme a las condiciones pactadas.
j. Los productos financieros por cobrar deberán clasificarse en la banda de tiempo
que corresponda a la fecha en que se estime que se realizará su cobro.
k. Los activos que pertenecen a fondos de amortización y a fondos especiales se
clasificarán en la banda de tiempo que corresponda a los pagos de las
obligaciones que se encuentren cubriendo.
l. Las operaciones de reporto, como reportador, se clasificarán en las bandas de
tiempo según la fecha en que se reciba el efectivo conforme a las condiciones
pactadas.
m. Todo activo que presente gravámenes, pignoraciones o limitaciones que afecten
su liquidez se deberá clasificar en la octava banda de tiempo.
n. Los activos se clasificarán netos de sus cuentas regularizadoras.
Pasivos y Otras Cuentas Acreedoras
o. Los pasivos con fecha de vencimiento contractual se clasificarán en las bandas
de tiempo según la fecha en que deban hacerse los desembolsos de efectivo
conforme a las condiciones pactadas.
p. Los depósitos que no tengan una fecha cierta de vencimiento, tales como los
depósitos a la vista y de ahorro, así como las obligaciones financieras con garantía
de recompra y/o desinversión anticipada, se clasificarán con base en la
determinación de los retiros o desinversiones máximos probables, así como de la
porción que tiene carácter permanente o estable, conforme la metodología
presentada en el apartado 2 de este oficio.
q. Los gastos financieros por pagar deberán clasificarse en la banda de tiempo que
corresponda a la fecha en que se estime que se realizarán los desembolsos.
r. r. Las provisiones laborales se clasificarán en la banda de tiempo que
corresponda o en la que se estime que se efectuará el desembolso.
s. s. Los otros pasivos que no tengan una fecha cierta de vencimiento deberán
clasificarse de conformidad con las fechas en que se estime se efectuarán los
desembolsos.
t. t. Las otras cuentas acreedoras deberán clasificarse en la octava banda de
tiempo.
Capital Contable
u. El capital pagado se deberá clasificar en la octava banda de tiempo. Las
obligaciones subordinadas, los resultados de ejercicios anteriores, y las demás
cuentas de capital deberán clasificarse de conformidad con las fechas en que esté
previsto el desembolso.
Contingencias y Compromisos
v. Las contingencias y compromisos deberán clasificarse de conformidad con las
fechas en que se estime se efectuarán los desembolsos.
w. Las operaciones de reporto, como reportado, se clasificarán en las bandas de
tiempo según la fecha en que deban hacerse los desembolsos de efectivo
conforme a las condiciones pactadas.
2. Determinación de los máximos retiros o desinversiones probables (MRDP)
Para determinar los máximos retiros o desinversiones probables de los
depósitos sin fecha cierta de vencimiento, así como de las obligaciones financieras
con garantía de recompra y/o desinversión anticipada, tanto en moneda nacional
como extranjera, que se clasificarán en las primeras tres bandas, se aplicarán las
fórmulas siguientes:
En donde:
MRDPk = Máximos retiros o desinversiones probables de los depósitos
y obligaciones financieras a ocurrir en la banda k.
K = Banda de tiempo; k = 1, 2, 3 para las bandas de 1 a 7 días,
de 8 a 15 días y de 16 a 30 días, respectivamente.
TCDt = Sumatoria de saldos de las cuentas de depósito sin fecha
cierta de vencimiento, así como las obligaciones financieras
con garantía de recompra y/o desinversión anticipada, al día
t, ya sea en moneda nacional o en moneda extranjera, según
los balances de saldos.
2.33 = Factor para calcular un nivel de confianza de 99%.
Σ = Desviación estándar del logaritmo natural (ln) de las
variaciones relativas diarias de la sumatoria de saldos [ln
(TCDt / TCDt-1)] de un total de observaciones diarias de una
serie de 365 días (el subíndice t oscilará entre 2 y 365).
Por ejemplo, para la evaluación al 31 de agosto de 2009
(TCD365), el día más lejano a considerar sería el 1 de
septiembre de 2008 (TCD1) para disponer de los 365 días
indicados.
Los depósitos y las obligaciones financieras a que se refiere este apartado,
no considerados en las tres bandas anteriores, se tomarán como captaciones
estables, por lo que se clasificarán en la octava banda de tiempo. Estos, tanto en
moneda nacional como en moneda extranjera, se determinarán mediante la
fórmula siguiente:
Los cálculos anteriores deberán efectuarse de forma separada para los montos en
moneda nacional y en moneda extranjera.
3. Establecimiento de la brecha de liquidez (BL) y brecha de liquidez acumulada (BLA), por banda de tiempo
La brecha de liquidez será igual a la diferencia entre los activos y los
pasivos, otras cuentas acreedoras, capital contable, contingencias y compromisos,
tanto en moneda nacional como en moneda extranjera, en cada banda de tiempo.
Para determinar la brecha de liquidez se aplicará la fórmula siguiente:
BLk = ACTk – (PASk + OCAk + CAPk + CyCk)
En donde: BLk = Brecha de liquidez (exceso o deficiencia de
liquidez) para la banda k.
ACTk = Sumatoria de activos clasificados en la banda k.
PASk = Sumatoria de pasivos clasificados en la banda k.
OCAk = Sumatoria de otras cuentas acreedoras
clasificadas en la banda k.
CAPk = Sumatoria del capital contable clasificado en la
banda k.
CyCk = Sumatoria de contingencias y compromisos
clasificados en la banda k.
K = k – ésima banda de tiempo; k = 1, 2, 3, ... , 8.
Asimismo, se deberá calcular la brecha de liquidez acumulada para cada
banda de tiempo, la cual será igual a la suma de la brecha de liquidez de la
respectiva banda más la brecha de liquidez acumulada obtenida en la banda de
tiempo anterior, aplicando la fórmula siguiente:
BLAk = BLk + BLAk-1
En donde: BLAk = Brecha de liquidez acumulada (exceso o deficiencia de
liquidez acumulada) hasta la banda k.
4. Liquidez en riesgo (LeR)
La liquidez en riesgo es el déficit de los activos líquidos disponibles para
cubrir la brecha de liquidez acumulada negativa determinada en alguna de las
primeras cinco bandas de tiempo. Para estos efectos, dicha liquidez en riesgo será
la diferencia entre los activos líquidos clasificados en las bandas de tiempo
posteriores a la banda en la cual se determinó la deficiencia y el valor absoluto de
la brecha de liquidez acumulada negativa.
Si BLAk < 0, se deberá calcular la liquidez en riesgo de la manera siguiente:
LeRk = AL - |BLAk|
En donde: LeRk = Liquidez en riesgo para la banda k (siempre que los
activos líquidos sean menores que la brecha de
liquidez acumulada negativa).
AL = Activos líquidos clasificados en las bandas de tiempo
posteriores a la banda en la cual se determinó la
brecha de liquidez acumulada negativa. Estos activos
están conformados por los depósitos en bancos del
país y del exterior, así como por las inversiones en
títulos-valores, excluyendo inversiones permanentes,
siempre que no presenten gravámenes,
pignoraciones o limitaciones que afecten su liquidez.
|BLAk| = Valor absoluto de la brecha de liquidez acumulada
negativa para la banda k.
K = k – ésima banda de tiempo, k = 1, ... ,5.
5. Pruebas de tensión
Los resultados de las pruebas de tensión a que se refiere el artículo 8 del
Reglamento para la Administración del Riesgo de Liquidez, deberán remitirse con
referencia a los meses de marzo, junio, septiembre y diciembre, de cada año.
Asimismo, deberán adjuntarse los supuestos utilizados en el escenario de tensión
moderada y en el escenario de tensión severa, incluyendo las respectivas
justificaciones consideradas para utilizar dichos supuestos.
BIBLIOGRAFÍA
http://riesgodeliquidezbancaria.blogspot.com/
http://es.wikipedia.org/wiki/Riesgo_de_liquidez