Winnie el boletín mundial para niños
A Winnie le encanta Islandia
¿Dónde está Islandia?
Islandia es una gran isla (junto con otras pequeñas) al noroeste del Reino Unido.
Debido a que Islandia está tan al norte, tiene luz solar constantemente por 2 o 3 meses
durante el verano. En el invierno, el sol sale a las 10:00 a.m. y se pone a las 3:00 p.m.
El territorio:
A Islandia a veces se le llama “la tierra del fuego y hielo.” Islandia tiene más de 100
volcanes, aguas termales burbujean debajo de la tierra. La palabra inglesa géiser,
viene del Islandés.
Las aguas termales se encausan por tuberías hacia los edificios para mantener. Las
costas son rocosas. Tierra adentro, Islandia tiene montañas y volcanes, lagos y hasta
desiertos. Los inviernos y hasta los veranos pueden ser muy fríos cuando los cortantes
vientos vienen desde el Polo Norte. A menudo tienen terremotos pero generalmente no
causan serios daños.
La gente:
Los Islandeses son descendientes de los escandinavos, quienes vinieron de Noruega
durante el siglo XVII. Por cerca de 400 años, Dinamarca controló la isla. Islandia se
convirtió en una nación libre en 1944. Hoy día, Islandia tiene aproximadamente 270,000
personas. Ellos hablan Islandés, que suena parecido al lenguaje antiguo que los
Noruegos hablaban hace 1.000 años. La mayoría habla inglés y danés. La mitad de la
población vive en la ciudad capital Reykjavik.
Creencias religiosas:
Desde 1550, la iglesia Luterana Evangélica ha sido la iglesia oficial de Islandia. Casi
todos están inscritos como miembros de esta iglesia. La gente tiene la libertad de asistir
a cualquier tipo de iglesia que elijan. Mucha gente va a la iglesia únicamente dos veces
al año. Ellos han escuchado el nombre de Jesús, pero no saben que Él es el Salvador.
Los niños de Islandia:
Los niños asisten a la escuela de los 6 a los 16 años. Antes de poder graduarse de la
escuela primaria deben saber cómo nadar. Durante los fríos días de invierno, los niños
disfrutan jugando juntos, leyendo, viendo televisión, o jugando ajedrez. Uno de los
deportes populares del invierno es esquiar. Cuando el clima está mejor, juegan fútbol.
Hay muchas cosas para hacer afuera, como ir de pesca, nadar en las aguas termales
(aun cuando está frío afuera), y montar los caballitos de Islandia.
La vida en Islandia:
A los Islandeses les gusta ir a visitar a sus amigos y familiares para compartir en sus
acogedores hogares. La cena a menudo es una clase de pescado o cordero, con papas
asadas. Ambos padres a menudo trabajan, muchos trabajan en tiendas, oficinas,
fábricas o como pescadores. Los granjeros crían vacas para la carne y productos
lácteos; ovejas para la lana con la que fabrican ropa, espinacas, papas, y “skyr” (es
como yogurt). Los islandeses pueden tener vegetales frescos durante todo el año
gracias a los invernaderos.
Los misioneros llegan a Islandia:
¿Qué puedo comprar con $125? Bueno, cuando lo damos a Dios, ¡puede alcanzar para
una nación entera!
Hace veinticinco años, una señora cristiana envió $125 a la División de Misiones
Foráneas. Ella indicó que quería que compraran literatura cristiana para enviar a
Islandia. En ese tiempo las Asambleas de Dios no tenían misioneros en ese país. Así
que enviaron el dinero al director de ICI (Instituto Internacional por Correspondencia) y
él decidió visitar Islandia. Él formó un grupo con otros creyentes formaron un grupo
llamado “Islandia para Cristo.” Este grupo llevó los $125, y otros fondos para traducir
“Las grandes interrogantes de la vida” al idioma de Islandia. Este breve curso bíblico le
dice a la gente acerca de Jesús, la respuesta a sus preguntas acerca de la vida. Ellos
enviaron este curso a cada casa en Islandia, ¡60,000 casa!
Eso era sólo el comienzo. Ministros de Canadá, Bélgica, Suecia, y España sostuvieron
reuniones en cada ciudad de Islandia. Muchas personas habían leído el curso bíblico.
Durante esos servicios, ellos aprendieron más acerca de Jesús, y muchos decidieron
servirle.
En 1992, Mike y Sheila Fitzgerald, los primeros misioneros de Asambleas de Dios en
Islandia, empezaron a trabajar con la iglesia pentecostal de Islandia. Hoy día existen 25
iglesias y lugares de reunión, pero sólo 14 pastores. Una escuela bíblica está
adiestrando a más pastores.
Los misioneros y la iglesia pentecostal empezaron Radio Lindin la primavera de 1995.
Ellos invitan a la gente a escuchar, llamar para pedir oración, y aprender acerca de
Jesús; 18 horas al día. Ahora hay cuatro estaciones para alcanzar a toda Islandia.
Los misioneros quieren alcanzar a los niños también. Sheila Fitzgerald y un equipo de
cristianos en Islandia producen un programa de radio para niños llamado, “La fosa de
los leones”. Ahora están trabajando en una serie de televisión basada en este
programa. En el verano, la familia Fitzgerald hace campamentos para niños. Cientos de
niños se divierten y aprenden sobre Jesús en estos campamentos. BGMC ayuda con
los materiales necesarios para hacer las cruzadas y campamentos, tales como títeres,
vestuarios, premios y más. BGMC también ha ayudado con el equipo necesario para la
estación de radio.
Gracias a una señora que dio su dinero a Dios hace muchos años, niños como tú, y sus
familias, han escuchado que Jesús los ama.
Oremos:
Por los misioneros en Islandia, que Dios bendiga su trabajo y les dé protección.
Por las iglesias y los pastores que están tratando de alcanzar a sus vecinos.
Por los niños de Islandia
Por la radio cristiana y el programa de televisión, para que alcancen a mucha gente
más con las buenas nuevas.
Lección objetiva de misiones
Sus oraciones ayudan a los misioneros a ganar batallas espirituales
Versículo clave:
2 Corintios 10:4 “porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas
en Dios para la destrucción de fortalezas.”
Materiales:
Una cuerda larga
Disfraz del diablo (Trate de que el disfraz no de miedo. Si no tiene un disfraz del diablo,
simplemente pídale a alguien que vista totalmente de negro.)
Presentación:
Escoja a un niño para que se pare junto a usted. Los otros niños van a pretender ser
misioneros. Pregúnteles a dónde les gustaría ir para ser misioneros. Diga a los otros
niños que este es un pastor (nombre un niño) y él o ella es misionero a (nombre el país
que el niño escoja.)
Niños y niñas, nuestros misioneros están en una batalla, están en una batalla contra
Satanás. (Pida a la persona con el disfraz de diablo que salga con la cuerda.) Satanás
quiere tratar de detener a los misioneros de decir a la gente acerca de Jesús. Él trata
de causar problemas a los misioneros esperando que ellos se vayan del país al que
Dios los ha enviado. Es más o menos como un juego de jalar la cuerda entre el diablo y
los misioneros. (Diga al diablo que lance un extremo de la cuerda a uno de los niños
que está pretendiendo ser misionero e instruya al niño que tome el otro extremo y trate
de botar al diablo jalando la cuerda.) Niños, animen al misionero mientras trata de
derrotar al diablo. (permita que el diablo y el misionero continúen jalando la cuerda por
unos segundos.)
¡Alto! ¡tengo una idea! Necesito un guerrero de oración para este misionero.
¿Puede alguien orar por nuestro misionero? (llame a un niño para que se pare detrás
del misionero.) Esta vez cuando diga, ‘ahora’ la lucha va a empezar de nuevo. Cuando
el diablo empieza a tratar de botar al misionero, quiero que extiendas tus brazos hacia
el misionero y ores que él gane la batalla. Uno, dos, tres, ¡ahora! (Pida al misionero y al
diablo que jalen por unos segundos mientras el niño ora por el misionero. Luego diga al
diablo que caiga como si el misionero lo hubiera derrotado. Instruya a la persona
haciendo de diablo antes de la clase para que sepa cuando debe caer. Diga a los niños
que aplaudan al misionero.) Gracias a la oración de este niño (señale al niño), Dios ha
ayudado al misionero a ganar la batalla contra el diablo. (el diablo corre disgustado por
haber sido derrotado.)
Una de las cosas más importantes que podemos hacer por los misioneros es orar por
ellos. Ellos no lo pueden hacer solos. Tú puedes ayudarles a ganar batallas espirituales
a través de tus oraciones.
Verdadera historia de Misiones Las Alas de Dios
(Dibujo #1)
“La neblina es demasiado espesa, no podemos aterrizar para abastecernos de combustible.” Esas fueron las palabras del piloto por los parlantes del avión.”
Juan Hall y su esposa Cuba oraron. Ellos eran misioneros enviados por Dios para alcanzar gente alrededor del mundo que no conocían a Jesús. Ellos estaban en el avión (el avión que les compró las Asambleas de Dios a través del ministerio de Speed the Light [Apresura la Luz]) conocido como el “embajador”; era un avión del ejército C-46. ¿Pero sería este el último vuelo del “embajador”? ¿Sería este el fin para los misioneros Juan y Cuba Hall junto con los otros misioneros abordo del avión en medio del océano?
El “embajador” había salido del aeropuerto en Islandia en un largo viaje rumbo a los Estados Unidos. Los misioneros habían estado ministrando alrededor de todo el mundo, enseñando a la gente acerca de Jesús y entregando suministros a otros misioneros en necesidad. Ahora les esperaba un largo viaje a casa; hasta que la tormenta llegó.
De Islandia, la próxima escala sería en Groenlandia. Al llegar a 4 kilómetros de del aeropuerto, la torre les indicó que la neblina estaba espesa y que sería imposible aterrizar. El avión había estado volando por muchas horas, y tenían menos de la mitad de combustible. Era demasiado tarde como para regresar a Islandia. Y para empeorar las cosas, se encontraron con fuertes tormentas, con vientos contracorriente que empujaban el avión. El avión tenía que usar más combustible para atravesar la tormenta, y se estaban quedando sin combustible rápidamente.
(Dibujo #1)
(Dibujo #2)
Los misioneros abordo del avión oraron, “¡Dios nos estamos quedando sin combustible, por favor ayúdanos!” Ellos oraron y siguieron orando.
El piloto buscó y buscó, pero no podía encontrar su camino fuera de la tormenta. Los vientos eran demasiado fuertes, y las alas seguían empujando el avión hacia atrás. Más y más combustible estaba siendo consumido, y pronto el avión estaría vacío. ¿Sería este el fin de los misioneros? ¿Sería este el último vuelo del “embajador”?
El piloto hizo todo lo que pudo; él diluyó la mezcla de gasolina, luego hizo que los pasajeros más pesados y algunas maletas se acomodaran al frente. Él también explicó a los misioneros cómo usar los chalecos salvavidas y los botes inflables para que estuvieran preparados en caso de que el avión se estrellara en el océano. Durante todo ese tiempo los misioneros continuaron orando.
(Dibujo #3)
Y entonces el piloto tuvo una idea. Él bajó a través de las espesas nubes y voló a 300 metros sobre el mar. El avión estaba tan cerca al agua que los misioneros podían ver el reflejo del avión en el océano. Y los misioneros continuaron orando.
De repente, el avión se movió bruscamente hacia adelante, ¡algo estaba empujándolo! El piloto gritó que unos vientos rápidos estaban empujando el avión hacia adelante dejando la tormenta atrás.
Estos vientos rápidos continuaron durante todo el camino hacia el aeropuerto. El avión aterrizó sin problemas, y con sólo un poquito de combustible. Dios había provisto un fuerte viento para que los sostuviera sin tener que gastar mucho combustible. Como resultado, el avión no se quedó sin gasolina y no se estrelló. ¡Dios mantuvo a los misioneros a salvo!
Se podía escuchar un concierto de alabanzas a Dios cuando el avión aterrizó en el aeropuerto. Dios había respondido las oraciones de los misioneros manteniéndolos a salvo.
(Dibujo #2)
(Dibujo #3)
La información para esta historia fue encontrada en la edición de Evangelio Pentecostal de 1998.