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¿Cómo saber cuántos fondos necesito para la operación habitual de mi empresa? Cuando iniciamos nuestro propio negocio, hacemos todo lo posible para calcular apropiadamente cuánto necesitamos invertir y cómo vamos a financiar tal inversión. Pero muchas veces nos centramos tanto en lo que necesitamos invertir para que la empresa exista toda una vida -como maquinarias y equipos- que descuidamos lo que necesitamos invertir para que la empresa pueda operar normalmente de forma habitual. A continuación compartimos ciertos tips que nos permitirá calcular apropiadamente lo que necesitamos invertir para la operación del día a día: Todos los activos (exceptuando aquellos donde se deposita el dinero que sobra una vez que está financiada la operación habitual, es decir bancos y sobre todo inversiones temporales) representan una inversión para la empresa, tanto los activos no corrientes como los activos corrientes. Una empresa invierte en cuentas por cobrar porque si no da crédito, simplemente no vende. Una empresa invierte en inventarios porque si no tiene mercaderías, entonces no vende. Por tanto, los activos corrientes necesarios para la operación son una inversión de la empresa. Producto de la operación habitual de la empresa surgen ciertos pasivos de forma automática o espontánea. Por ejemplo: si compramos inventarios, los proveedores nos dan crédito para retenernos como clientes. Si tenemos trabajadores, las leyes nos permiten provisionar gastos de beneficios sociales que están pendientes de pago para una fecha futura. Si tenemos utilidades, la autoridad tributaria nos permite provisionar impuestos por pagar en el siguiente ejercicio fiscal. Entonces, la propia operación habitual de la empresa, permite generar un financiamiento espontáneo para nuestra inversión en activos corrientes necesarios. Por ende, si los pasivos espontáneos financian una parte de la inversión en activos corrientes necesarios, los fondos que necesitamos para la operación habitual de la empresa, serán iguales a la porción de activos corrientes necesarios que no se encuentra financiada por los pasivos corrientes espontáneos. A esta porción no financiada se la conoce como “Necesidades Operativas de Fondos” o simplemente NOF. Recuerda: Las NOF es la parte de los activos corrientes necesarios que no se encuentra financiada por los pasivos corrientes espontáneos. Escrito por: Fernando Romero Morán Ingeniero en Finanzas y Máster en Economía Área de Finanzas y Contabilidad de IDEPRO www.fernando-romero.com

Cómo saber cuántos fondos necesito para la operación habitual de mi empresa

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Page 1: Cómo saber cuántos fondos necesito para la operación habitual de mi empresa

¿Cómo saber cuántos fondos necesito para la operación habitual de mi empresa? Cuando iniciamos nuestro propio negocio, hacemos todo lo posible para calcular apropiadamente cuánto necesitamos invertir y cómo vamos a financiar tal inversión. Pero muchas veces nos centramos tanto en lo que necesitamos invertir para que la empresa exista toda una vida -como maquinarias y equipos- que descuidamos lo que necesitamos invertir para que la empresa pueda operar normalmente de forma habitual. A continuación compartimos ciertos tips que nos permitirá calcular apropiadamente lo que necesitamos invertir para la operación del día a día: Todos los activos (exceptuando aquellos donde se deposita el dinero que sobra una vez que está financiada la operación habitual,

es decir bancos y sobre todo inversiones temporales) representan una inversión para la empresa, tanto los activos no corrientes como los activos corrientes. Una empresa invierte en cuentas por cobrar porque si no da crédito, simplemente no vende. Una empresa invierte en inventarios porque si no tiene mercaderías, entonces no vende. Por tanto, los activos corrientes necesarios para la operación son una inversión de la empresa.

Producto de la operación habitual de la empresa surgen ciertos pasivos de forma automática o espontánea. Por ejemplo: si compramos inventarios, los proveedores nos dan crédito para retenernos como clientes. Si tenemos trabajadores, las leyes nos permiten provisionar gastos de beneficios sociales que están pendientes de pago para una fecha futura. Si tenemos utilidades, la autoridad tributaria nos permite provisionar impuestos por pagar en el siguiente ejercicio fiscal. Entonces, la propia operación habitual de la empresa, permite generar un financiamiento espontáneo para nuestra inversión en activos corrientes necesarios.

Por ende, si los pasivos espontáneos financian una parte de la inversión en activos corrientes necesarios, los fondos que necesitamos para la operación habitual de la empresa, serán iguales a la porción de activos corrientes necesarios que no se encuentra financiada por los pasivos corrientes espontáneos. A esta porción no financiada se la conoce como “Necesidades Operativas de Fondos” o simplemente NOF.

Recuerda: Las NOF es la parte de los activos corrientes necesarios que no se encuentra financiada por los pasivos corrientes espontáneos.

Escrito por:

Fernando Romero MoránIngeniero en Finanzas y Máster en EconomíaÁrea de Finanzas y Contabilidad de IDEPRO

www.fernando-romero.com