IMPORTANCIA DE LAS CONDICIONES PARA UNA EVALUACION ORIENTADA AL

APRENDIZAJE EN LA LABOR DOCENTE

Actualmente se considera que la evaluación, es una herramienta por la cual podemos

apreciar, indicar, valorar, establecer, calcular el avance y desarrollo del alumno, si es

positivo o negativo, para así determinar métodos de aprendizaje que ayuden a este a

superar los inconvenientes para seguir avanzando en el ámbito académico y personal.

Siendo así la evaluación un punto clave en el desarrollo de cualquier sistema educativo.

La evaluación es de vital importancia, durante las funciones del docente como elemento

de medición de avance y de desarrollo de las actividades, siguiendo un parámetro del

diseño curricular, la evaluación debe ser materia indicadora de las virtudes del alumno, y

a su vez observar las fortalezas y debilidades del docente, si un grupo mayor de alumnos

presenta una baja diferencia en las evaluaciones, significa que el docente no está

tomando en cuenta las condiciones para desarrollar la evaluación.

Gibbs nos propone once condiciones para desarrollar una evaluación orientada al

aprendizaje y Carless la amplia aumentando una doceava condición, las cuales tienen

una enorme importancia al momento de realizar una evaluación, puesto que nos brinda

las pautas que tiene que tener una correcta evaluación basada en aprendizaje.

Como la primera propuesta que engloba la necesidad de plantear tareas de evaluación

que impliquen a los alumnos tareas de estudio y aprendizaje apropiado, es decir, estas

tareas de evaluación fomenten el aprendizaje de manera parcial y autentica, brindando al

alumno un amplio panorama del trayecto de aprendizaje en su vida. Este punto es de

importancia porque nos explica como brindar una evaluación real, que las tareas dirigidas

influyen a que el alumno aprenda de manera contante realizando esquemas, resúmenes o

mapas, consiguiendo de esta manera que las tareas vayan acompañadas del aprendizaje.

La segunda propuesta nos menciona el feedback, de manera que los estudiantes actúen

sobre la información que han recibido y utilicen esa información para progresar en su

trabajo y aprendizaje feedforward (pro aprendizaje).

En esencia, el feedback es necesario e importante, pero se sugiere que el feedforward

tiene mayor poder para estimular el aprendizaje. Existe, por tanto, una diferencia entre el

feedback (retro-alimentación) y el feedforward (pro-alimentación). Mientras que el

feedback engloba comentarios sobre la calidad de la tarea realizada, el feedforward

incluye información que pretende ayudar al estudiante a que en el futuro haga mejores

tareas similares.

La tercera propuesta resalta la evaluación orientada al aprendizaje, lo cual es importante

al hacer que los estudiantes se conviertan en evaluadores de su propio trabajo.

Asiéndoles así convertirse en aprendices independientes y efectivos, más allá de la

enseñanza, en su vida profesional.

Se lograría también que el estudiante pueda comparar sus realizaciones con estos

criterios. Además de esto, se haría uso de las técnicas de auto-evaluación y de

evaluación por compañeros.

Es por ello que estas 3 propuestas son necesarias para la evaluación de los alumnos que

están en constante aprendizaje; queda a criterio y juicio del docente, la objetividad y el

desarrollo de las evaluaciones, las técnicas propicias que se debe de usar durante la

evaluación y el desarrollo de las clases.

La evaluación no ha venido cumpliendo su función en el proceso enseñanza-aprendizaje

debido principalmente al uso erróneo que los docentes hacen de ella, puesto que en la

mayoría de las veces se confunde con la calificación de un alumno y no como un proceso

básico en la educación.

Cuantas de las veces se ha creído que con calificar a un alumno se cubre con el proceso

de evaluación, se otorga un número y se conforma con ello, sin darse cuenta que ese

número no refleja muchas veces lo aprendido por el alumno y pone en manifiesto algunas

veces un retroceso en la labor docente.

El realizar adecuadamente el proceso de evaluación requiere un estudio minucioso de

todo lo realizado en un ciclo de enseñanza y el tener en cuenta las condiciones para una

correcta evaluación del aprendizaje donde se pueda reflejar en realidad todo el potencial,

grado de aprendizaje de cada alumno y los objetivos que se alcanzaron, cuales se deben

modificar y cuales hay que reafirmar.