1
Año 1912 Gracias a la generosidad de la señora de Dorrego y de la señora Dorrego del Solar, la hermana superiora del asilo de viaje a Francia, hizo varias compras para provecho de la casa. Dos estatuas para la capilla, la de San Vicente y la del Beato Juan Gabriel Perboyre; una linterna para proyecciones y facilitar de éste modo la enseñanza de la religión, piezas de género para hacer un uniforme para las niñas externas. El uniforme se pone para las fiestas principales; para la fiesta y procesión del Santísimo, la de San Luis, de San Vicente , en los dias de los funerales de la familia : 27 de Enero y 5 de Septiembre, también se pone el dia de los premios, que se fijó el día 28 de Diciembre, cumpleaños de la tan buena señora Enriqueta L de Dorrego. En éste día habrá misa a su intención, y de tarde la fiesta de los premios. Desde Europa, la buena señora de Dorrego, no se olvidaba de la obra de su corazón, y sus queridas hijas partían sus sentimientos; asi que un día recibimos el hermoso crucifijo que adorna nuestra linda capilla, y que habla con tanta elocuencia, del amor de Jesús para las almas.

Año 1912

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: Año 1912

Año 1912

Gracias a la generosidad de la señora de Dorrego y de la señora Dorrego del Solar, la hermana superiora del asilo de viaje a Francia, hizo varias compras para provecho de la casa. Dos estatuas para la capilla, la de San Vicente y la del Beato Juan Gabriel Perboyre; una linterna para proyecciones y facilitar de éste modo la enseñanza de la religión, piezas de género para hacer un uniforme para las niñas externas.

El uniforme se pone para las fiestas principales; para la fiesta y procesión del Santísimo, la de San Luis, de San Vicente , en los dias de los funerales de la familia : 27 de Enero y 5 de Septiembre, también se pone el dia de los premios, que se fijó el día 28 de Diciembre, cumpleaños de la tan buena señora Enriqueta L de Dorrego. En éste día habrá misa a su intención, y de tarde la fiesta de los premios.

Desde Europa, la buena señora de Dorrego, no se olvidaba de la obra de su corazón, y sus queridas hijas partían sus sentimientos; asi que un día recibimos el hermoso crucifijo que adorna nuestra linda capilla, y que habla con tanta elocuencia, del amor de Jesús para las almas.