1
Año 1917 Las fiestas acostumbradas se celebraron con solemnidad, con la presencia amada, de las distinguidas señoras de del Solar Dorrego y de Unzué Dorrego, que con mucha bondad y liberalidad se interesan por el fin del Asilo. En el tiempo de crisis que atravesamos, el presupuesto atribuído al Asilo, no puede alcanzar, la caritativa señora Inés Dorrego de Unzué, tiene la bondad de saldar el déficit cada mes; es un consuelo de ver con qué interés entra en todos los detalles y trata de remediar todo. Durante éste año, tuvimos el consuelo de hacer bendecir dos uniones ilegítimas y bautizar tres niños. La primera comunión de los niños, nos procuró una alegría muy grande, 35 niñas y 25 varones recibieron a Jesús por primera vez. Tales gracias, son muy poderosas para dar confianza y ánimo, para vencer las dificultades, que no faltan nunca en las obras de Dios.

Año 1917

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: Año 1917

Año 1917

Las fiestas acostumbradas se celebraron con solemnidad, con la presencia amada, de las distinguidas señoras de del Solar Dorrego y de Unzué Dorrego, que con mucha bondad y liberalidad se interesan por el fin del Asilo.

En el tiempo de crisis que atravesamos, el presupuesto atribuído al Asilo, no puede alcanzar, la caritativa señora Inés Dorrego de Unzué, tiene la bondad de saldar el déficit cada mes; es un consuelo de ver con qué interés entra en todos los detalles y trata de remediar todo.

Durante éste año, tuvimos el consuelo de hacer bendecir dos uniones ilegítimas y bautizar tres niños.

La primera comunión de los niños, nos procuró una alegría muy grande, 35 niñas y 25 varones recibieron a Jesús por primera vez.

Tales gracias, son muy poderosas para dar confianza y ánimo, para vencer las dificultades, que no faltan nunca en las obras de Dios.