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EL MAGO Y LAS SIETE PUERTAS. Por fin estaba delante de la montaña de fuego y aún me quedaban un montón de puertas que atravesar para llegar a la cámara del tesoro. Vi una puerta, pero me di cuenta de que había un gigantesco guerrero de madera delante de la puerta. Yo era mago, le tiré un rayo y mientras me fui corriendo, atravesé la puerta y después de haberla atravesado, paré el rayo. Detrás de la puerta había un bosque. Era de noche. Como tenía una linterna en la mochila, la saqué y al encenderla, vi que había un camino que me llevaba a un sitio desconocido. Poco a poco se fue haciendo de día. Al final del camino me encontré con dos escorpiones muy venenosos. y dije las palabras mágicas, pero dije HABRA-CADAHABRA pero también pero nada sucedió. No tenía nada que hacer, pensé, pero no podía rendirme. Revisé la mochila y me encontré con un libro que decía cómo hacer escudos. A mi lado vi que había una piedra muy grande. Con esa piedra y otra más pequeña me hice un escudo y con el escudo, me enfrenté a los escorpiones. Primero pensé en esquivarles con el escudo, pero después pensé que mejor era utilizarlo como una jaula y encerrar a los escorpiones. ¿Que cómo lo hice? Fácil, puse el escudo al revés y los atrapé. Así pude pasar por la segunda puerta. Una vez que pasé me encontré con un camino que me llevó volando hasta la siguiente puerta. En ella estaba el monstruo más terrible y más fuerte del mundo. Como a mí me gustan mucho los libros, yo siempre llevo en la mochila un montón. Vi que tenía uno de monstruos del pasado. Le enseñé el libro al monstruo y se puso triste.

El mago y las ciete puertas

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Page 1: El mago y las ciete puertas

EL MAGO Y LAS SIETE PUERTAS.

Por fin estaba delante de la montaña de fuego y aún me quedaban un montón de puertas que

atravesar para llegar a la cámara del tesoro. Vi una puerta, pero me di cuenta de que había un

gigantesco guerrero de madera delante de la puerta. Yo era mago, le tiré un rayo y mientras

me fui corriendo, atravesé la puerta y después de haberla atravesado, paré el rayo. Detrás de

la puerta había un bosque. Era de noche. Como tenía una linterna en la mochila, la saqué y al

encenderla, vi que había un camino que me llevaba a un sitio desconocido. Poco a poco se fue

haciendo de día. Al final del camino me encontré con dos escorpiones muy venenosos. y dije

las palabras mágicas, pero dije HABRA-CADAHABRA pero también pero nada sucedió. No

tenía nada que hacer, pensé, pero no podía rendirme. Revisé la mochila y me encontré con un

libro que decía cómo hacer escudos. A mi lado vi que había una piedra muy grande. Con esa

piedra y otra más pequeña me hice un escudo y con el escudo, me enfrenté a los escorpiones.

Primero pensé en esquivarles con el escudo, pero después pensé que mejor era utilizarlo como

una jaula y encerrar a los escorpiones. ¿Que cómo lo hice? Fácil, puse el escudo al revés y los

atrapé. Así pude pasar por la segunda puerta. Una vez que pasé me encontré con un camino

que me llevó volando hasta la siguiente puerta. En ella estaba el monstruo más terrible y más

fuerte del mundo. Como a mí me gustan mucho los libros, yo siempre llevo en la mochila un

montón. Vi que tenía uno de monstruos del pasado. Le enseñé el libro al monstruo y se puso

triste. Le dije que si me dejaba pasar y me dijo que si le daba el libro me dejaría pasar. No lo

pensé mucho, le di el libro y pasé por la puerta tercera. Detrás de la puerta había un camino

recto. Eché a correr me fatigue mucho ya no tenía agua para hidratarme , de repente escuché

una música que me adormecía. Saqué de la mochila un jabón mágico .y diciendo las palabras

mágicas se convirtió en una bomba gigante sin oxigeno antes de desmayarme me metí en la

bomba así por fin no escuche mas esa melodías suaves pero peligrosas flotando por minutos

ya lejos explote la bomba y seguí corriendo para atravesar la puerta cuarta.

Cuando pasé por la puerta, suspire y respire creyendo que era el final de lucha pero no fue asi

Delante de mí había un árbol lleno de ramas que no me dejaban pasar. De la mochila saqué un

acido de fumigación al instante poniéndome una careta especial para fumigar así lo

hice ,espere por un largo tiempo mientras se secaba el árbol y el efecto del acido pasara,;

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descanse y busque que comer en mi mochila no encontrando nada, dormí y así recobre

fuerzas luego pasé por la puerta quinta Detrás de la puerta me sorprendí porque todo hermoso

sentí gran alegría al verme en este paraíso de jardines ya desprevenida cantando y saltando

llegue a un lugar que nada se veía retrocedí y pensé en que magia debía hacer junte dos

flores de diferentes colores que arranque de este jardín y salió una pintura verde

fosforescente que iluminaria todo ese lugar , pintando una bella puerta dije las palabras

mágicas y la puerta se abrió pero no duro mi alegría porque al instante de abrirse la puerta me

encontré con un agujero negro profundo agotado de hacer magia , respire y pensé si tendría

una mini bomba en mi mochila ,busque y me alegre al ver que si la tenia la use

inmediatamente en ese hoyo tirándola y yo retrocedí unos metros atrás .fue fuerte la explosión

pero se organizo el camino y así pude pasar la sexta puerta ya no podía correr porque estaba

muy desgastadas mis fuerzas pero camine despacio me demore mucho tiempo en recorrer ese

camino que no era hermoso como el anterior , era todo lo contrario encontré arañas insectos

hormigas pero al instante me di cuenta que no hacían daño alguno muchas telarañas que me

tocaba reventar con mis manos así llegue a un lugar donde encontré un gran rebaño de cabras

sonrientes solo se escuchaban sus carcajadas que difícil se podría hablar en este lugar. Pensé

que si las hacía llorar podría pasar. Cogí un montón de piedrecitas pequeñas y dije las

palabras mágicas para que se convirtieran en cebollas ,las tire en el lugar donde ellas estaban

ya machacadas y era tan fuerte el olor que de inmediato las cabras se pusieron a llorar y yo

también lloraba mientras pasaba por la puerta séptima. Ya así había llegado al final. Pase esta

puerta y De repente vi una gran puerta luminosa que se abrió y me asuste con todo lo que me

había pasado en este recorrido no sabía que pensar en este instante entrando yo por esa

puerta de repente salió una araña. Había un botón para hacerla desaparecer, lo pulsé y

apareció un genio que me dijo:

―mira todo este tesoro puedes apreciarlo y tocarlo pero de este lugar solo puedes sacar una

sola cosa Dime un deseo y será cumplido.

Yo le dije:

―QUIERO OTRO CEREBRO

Y el deseo se cumplió.