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El Ministerio Pastoral Capítulo 1La devoción personal (Párrafo 13) La verdad bíblica no experimentada en el alma del ministro es rechazada por los oyentes como un errorTenemos un ministerio diminuto y defectuoso. A menos que Cristo more en los hombres que predican la verdad, ellos rebajarán los normas morales y cristianas en dondequiera que sean tolerados. Un ejemplo les es dado aún, Cristo. Toda Escritura es inspirada por Dios, y es útil para enseñar, reprender, enmendar e instruir en justicia, para que el hombre de Dios sea perfecto, cabalmente instruido para toda buena obra. En la Biblia tenemos el consejo infalible de Dios. Sus enseñanzas, ejecutadas en forma práctica, capacitarán al hombre para cualquier puesto de responsabilidad. Es la voz de Dios hablando cada día al alma. Cuán cuidadosamente debe el joven estudiar la Palabra de Dios y atesorar sus sentimientos en el corazón, para que sus preceptos gobiernen completamente la conducta. Nuestros ministros jóvenes, y aquellos que han estado predicando por algún tiempo, muestran una marcada deficiencia en la comprensión de las Escrituras. La obra del Espíritu Santo es iluminar el entendimiento oscuro, derretir el corazón de piedra, egoísta, subyugar al transgresor rebelde, y salvarlo de las influencias corruptoras del mundo. La oración de Cristo por sus discípulos fue: Santifícalos en tu verdad: tu Palabra es verdad. La espada del Espíritu, la cual es la Palabra de Dios, penetra el corazón del pecador y lo hace pedazos. Cuando la teoría de la verdad es repetida sin sentir su sagrada influencia en el alma del que habla, no tiene fuerza sobre los oyentes, sino que es rechazada como error, siendo el orador responsable por la pérdida de esas almas.Testimonies for the Church 4:441.

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El Ministerio Pastoral

Capítulo 1—La devoción personal

(Párrafo 13) La verdad bíblica no experimentada en el alma del ministro es rechazada por los oyentes como un error—Tenemos un

ministerio diminuto y defectuoso. A menos que Cristo more en los hombres que predican la verdad, ellos rebajarán los normas morales y cristianas en dondequiera que sean tolerados. Un ejemplo les es dado aún, Cristo. “Toda Escritura es inspirada por Dios, y es útil para enseñar, reprender, enmendar e instruir en justicia, para que el hombre de Dios sea perfecto, cabalmente instruido para toda buena obra”. En la Biblia tenemos el consejo infalible de Dios. Sus enseñanzas, ejecutadas en forma práctica, capacitarán al hombre para cualquier puesto de responsabilidad. Es la voz de Dios hablando cada día al alma. Cuán cuidadosamente debe el joven estudiar la Palabra de Dios y atesorar sus sentimientos en el corazón, para que sus preceptos gobiernen completamente la conducta. Nuestros ministros jóvenes, y aquellos que han estado predicando por algún tiempo, muestran una marcada deficiencia en la comprensión de las Escrituras. La obra del Espíritu Santo es iluminar el entendimiento oscuro, derretir el corazón de piedra, egoísta, subyugar al transgresor rebelde, y salvarlo de las influencias corruptoras del mundo. La oración de Cristo por sus discípulos fue: “Santifícalos en tu verdad: tu Palabra es verdad”. La espada del Espíritu, la cual es la Palabra de Dios, penetra el corazón del pecador y lo hace pedazos. Cuando la teoría de la verdad es repetida sin sentir su sagrada influencia en el alma del que habla, no tiene fuerza sobre los oyentes, sino que es rechazada como error, siendo el orador responsable por la pérdida de esas almas.—Testimonies for the Church 4:441.