Upload
maria-virginia-diaz-frutos
View
105
Download
3
Embed Size (px)
Citation preview
[Escribir texto] Esta obra está licenciada bajo la Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional. Para ver una copia de esta licencia, visita http://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/4.0/.Esta obra está licenciada bajo la Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional. Para ver una copia de esta licencia, visita http://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/4. Esta obra está licenciada bajo la Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional. Para ver una copia de esta licencia, visita http://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/4.0/.
La educabilidad sitiada Internet como agente transformador
María Virginia Díaz Frutos
Febrero de 2015
Contenido
La educabilidad sitiada: Internet como agente transformador. .......................................... 2
La educabilidad y el mundo actual .................................................................................... 2
La escuela y el mundo actual ........................................................................................... 7
Internet y la escuela........................................................................................................ 11
A modo de conclusión .................................................................................................... 17
Bibliografía ......................................................................................................................... 22
La educabilidad sitiada: Internet como agente
transformador.
Este trabajo intenta analizar, cómo Internet es la influencia primordial en la educabilidad
para el siglo XXI. No se referirá específicamente sobre las TIC, pese a que están
íntimamente relacionados, sino a Internet en su concepto de “red de redes” o sea a la
conexión entre redes de computadoras con el objetivo de compartir recursos.
La educabilidad y el mundo actual
“La educabilidad es una cualidad humana, conjunto de disposiciones y capacidades, que
permiten a una persona recibir influencias para construir su conocimiento.” (Definición
extraída de Wikipedia).
"La educabilidad es una posibilidad y una categoría humana. Unaposibilidad, porque
significa la viabilidad del proceso educativo y la afirmación de que la educación es factible;
una categoría humana, por cuanto se predica del hombre esta cualidad" (FERMOSO, P.,
1985, p. 191).
“El concepto de educabilidad se asocia a las posibilidades de ser educado, al de ductilidad
y plasticidad guardando marcas distintivas con las posibilidades de aprender de otras
especies.”(Baquero, 2006).
Según Paturet (2003) la educabilidad significa la capacidad humana de una renovación
permanente, de una esencia que hace posibles nuevos despliegues.
El hombre es educable por su capacidad de comunicación, hace décadas que nos
encontramos frente a los desafíos de los medios para esa comunicación y la llegada de
Internet a nuestro país a comienzos de los 90, ha agudizado el afán por comprender el
proceso de aprendizaje.
El ser humano es un producto del tiempo y el espacio, la educabilidad se forja porque la
humanidad necesita sobrevivir, la educabilidad es plástica y sin embargo pareciera que
quienes dirigen nuestra educación olvidaran esa gran cualidad. La educación ya no puede
concebirse como un conjunto de prácticas organizadas por una institución.
“Es la sociedad la que tiene que reclamar la educación, como una exigencia de todos, no
como algo que los gobernantes conceden como para caer bien” (Savater, F., 2006. P. 11).
La función educativa se ve sometida a las contradicciones que azotan nuestras
sociedades, según Carneiro (2000), en ella están cifradas todas las esperanzas de mejoría
de la sociedad. Este mundo actual inestable e innovador, es necesario reinventar la nueva
paidea, como sinónimo de educación y cultura.
Siguiendo con Carneiro, éste señala una secuencia a seguir para que la sociedad
construya esa paidea con sentido: información, conocimiento, aprendizaje y por último el
sentido.
Información (primer nivel): recolectar información para transformarla y trasmitirla al
ciudadano, es la etapa de elaboración de los metadatos como mercancía de los medios de
comunicación masivos.
Conocimiento (segundo nivel): la transformación de la información en conocimiento. La
aparición de la sociedad del conocimiento, donde la inteligibilidad humana agrega valor a la
materia prima informativa.
Aprendizaje (tercer nivel): el saber deja de valer como simple objeto de conocimiento para
integrarse plenamente en sujetos del aprendizaje.
Sentido (cuarto nivel): el metaaprendizaje, ascender a un estado superior donde los
aprendizajes están pensados para fomentar la integridad del ser humano.
Toda esta secuencia tiene como objetivo de pasar de la simple acumulación de datos a la
conquista del sentido de la existencia humana, y cada sociedad lo hace según sus tiempos
y creencias.
Se debe adoptar un enfoque de aprendizaje estratégico, nos vamos superando como
humanos cuando pasamos de fórmulas de repetición y reproducción a estrategias de
indagación.
¿Cómo aprenden los chicos?
“Hace tiempo que los educadores han reconocido que los chicos aprenden mejor cuando
están activos, cuando satisfacen sus propios intereses, y cuando participan en culturas de
conocimiento y participación. Sin embargo, hasta ahora ha sido logísticamente imposible,
excepto para las élites, crear semejantes entornos. Con un acceso individual a laptops
interconectadas, los chicos interactúan activamente en la construcción del conocimiento y
no son relegados a una recepción pasiva de información. Cada chico puede satisfacer sus
áreas de interés personal y la clase no está limitada a una formato pre-fabricado y pre-
determinado”.1
Desde una imagen original, Mark Prensky (2010) en “Educar a nativos digitales”, compara
los jóvenes de ahora con cohetes, los profesores deben construir y lanzar los mejores
1The OLPC Wiki (en línea) (Consultado: 15/07/2012), Disponible
en:http://wiki.laptop.org/go/Visi%C3%B3n_Educativa
cohetes que puedan, pero para eso ya no sirve el combustible del pasado, también se
necesitan nuevos diseños, nuevas cargas y lo más importante es preparar estos cohetes
para monitorearse, autoevaluarse y autocorregirse cuantas veces sea necesario.
Esos cohetes pueden ser poderosas fuerzas de exploración como armas de destrucción,
depende de la carga al comienzo, esa carga que es responsabilidad de la familia, los
docentes y la comunidad adulta. En esta carga lo principal es el comportamiento ético, qué
vamos a hacer con lo que encontremos durante la aventura de este vuelo supersónico.
No hay duda que lo que se defiende es la educación en democracia, pero esto trae
aparejado el debate, cómo utilizar los recursos, los nuevos sistemas de comunicación, el
acceso a Internet, el acceso a la educación en las conceptualizaciones actuales.
El desarrollo deseable y cultural e históricamente valorado, durante la modernidad, se
confundió con el desarrollo normal o natural. El problema radica en suponer que el
desarrollo hacia la apropiación de prácticas culturales tales como la escritura o la ciencia,
expresan un desarrollo natural de los sujetos. La modernidad supone que el lugar natural
para que esto ocurra, además, es la escuela.
La consecuencia inmediata es creer que los sujetos no tienen disposición, y entonces la
noción de retraso sólo se puede explicar si se piensa que existen ritmos homogéneos en el
proceso de desarrollo de los aprendices.
Según Castells (1996) en nuestra estructura social, la escuela siempre ha tenido un
estatus de estabilidad y protección de los saberes instituidos. Frente a cualquier crisis los
saberes atesorados están protegidos para humanizar a los más jóvenes.
Uno de los tantos conceptos que acerca Pérez Gómez (2012, p.110) es el de enactividad,
o sea el conocimiento ligado a la acción, una versión más actual del constructivismo social.
Según este autor una de las aportaciones para comprender el aprendizaje y el desarrollo
humano es el conocer en y para la acción, lo cual es realmente relevante cuando
pensamos en nuestros aprendices.
Porque cada uno construye en función de su experiencia, cuando esa experiencia cobra
sentido, se convierte en un aprendizaje exitoso. El conocimiento simplemente es proceso,
es un componente de la acción.
Al repetirse una experiencia y entender la regularidad con que aparecen ciertos patrones
en la acción, le da sentido a la interactividad con el mundo circundante.
Eso trae otro de los aportes de la enactividad, que es justamente el sentido que cobra el
saber cuándo es a través de la acción en el ambiente.
El enactivismo asume que los humanos son seres biológicos y sociales, entonces el
cuerpo se implica, se compromete con el contexto con el que interactúa. Esto nos lleva al
mundo de las emociones, a todo lo primitivo que trae el humano en su hacer. Pérez Gómez
en su obra continuamente insiste en la importancia de la emoción y de todos los hábitos,
rutinas que actúan por debajo de la conciencia.
No existe aprendizaje si la situación que se quiere que sea educativa, no emociona al
educando. La idea de la razón como motor para lograr el aprendizaje, negó la existencia de
la emoción como factor preponderante en el éxito de la actividad educativa durante mucho
tiempo.
Y finalmente para Pérez Gómez (2012, p. 32) el currículum debe atender a todas las
dimensiones del desarrollo personal: el conocimiento (habilidades y contenidos), la
identidad (pertenencia, emociones, autoestima y valores) y la acción (actitudes,
comportamientos, rutinas y estrategias).
La escuela y el mundo actual
¿Cómo se sigue entendiendo la escuela? En nuestro país, ¿qué justifica su existencia?
¿Cómo se mantiene?
La escuela como ha sido pensada desde el siglo XIX:
- la inclusión “universal” y obligatoria
- la presencia de un régimen de trabajo y de regulación de espacios y tiempos
relativamente homogéneo.
- gradualidad
- simultaneidad (áulica y sistémica)
- la creación de un colectivo de educandos
“Se defendió como medio de emancipación social e individual, desde la perspectiva
ilustrada; fue unaforma de legitimar un nuevo orden social naciente; desempeñó el papel
de mecanismo de integraciónsocial de los estados nacionales modernos; se convirtió
también en una forma de “vigilancia” simbólicadisciplinadora de los individuos. En las
primeras leyes que la propusieron como ideal, se hablaba de suutilidad social y se creyó
que era un deber moral; más tarde se reconoció como una obligación de
estrictocumplimiento y un derecho de las personas” (Gimeno Sacristán, 2000: 14).2
El sinnúmero de factores que llevaron a esta situación, quizás sería más fácil entenderlos
si recurrimos a la genealogía (Sibilia, 2012). Se puede comparar la escuela con una
tecnología, un intrincado aparato destinado a producir algo que se ha vuelto incompatible
con los cuerpos y subjetividades de los chicos de hoy. La escuela se ha convertido en una
máquina anticuada.
La sociedad moderna se pensó a sí misma como igualitaria, fraterna y democrática.
Asumió la responsabilidad de educar a todos sus ciudadanos: alfabetizar a cada uno de los
habitantes en el uso correcto del idioma patrio, hacer cálculos y ejercer una “moral laica”
que la burguesía lo integró a su proyecto político, económico y sociocultural.
2Informe sobre el estado de la educación en Uruguay 2014, INEED, 2014.
Siguiendo en parte a María Angélica Lus (2004), podemos encontrar, en general, trestipos
de posiciones acerca de las razones atribuidas al fracaso escolar masivo:
Posiciones centradas en el alumno: Las posiciones más clásicas, aunquesumamente
vigentes, buscan las razones del fracaso en aspectos que hacenal alumno, sea, como
vimos, cuestiones ligadas a su maduración como a sudesarrollo psicológico o intelectual.
Posiciones centradas en las condiciones sociales y familiares del alumno:
Muchas veces se centra la explicación supuesta del fracaso escolar masivoen las difíciles
condiciones de vida de los niños y jóvenes, generalmente pertenecientesa los sectores
populares.
Posiciones centradas en la relación alumno-escuela:
Se trata de posicionesque buscan atrapar el problema en la interacción de las
características de losalumnos y de las prácticas escolares.
Hace ya décadas que he corroborado dentro de mi experiencia como docente, que se
resaltan las características del alumnado como causal para justificar los niveles
insuficientes de aprendizaje.
Se ha hablado de factores y condicionantes económicas, sociales, biológicas, psicológicas,
etc. pero siempre extrapolando las causas propias del ser educable.
La escuela tiene una razón de ser un organismo político – económico, por supuesto,
existen aprendices que no logran adaptarse a tal modelo pero la impronta de Internet deja
aún más cosas al descubierto.
La escuela, tal como fue concebida en un principio y permaneciendo aún en nuestro
tiempo prácticamente incambiada en su concepto estructural interno y su diseño, está
inserta en un panorama regional donde la importancia se enfoca en la evaluación de
resultados para el llenado de un ranking (PISA), exigiéndose números estadísticos en
tiempo récord por el lapso de un período presidencial, transmitiendo al resto de la
población una interpretación que ésta logra traducirla desde un plano netamente político
estimando que los resultados educativos pueden llegar a ser tan cambiantes como sus
gobiernos.
Según Chapman(1988), los progresos de los sujetos no deben quedar supeditados a la
distancia hacia las metas, sino al proceso, a si la dirección hacia la meta es la correcta. Las
encrucijadas a las que nos vemos los educadores sometidos acerca de la evaluación de
los procesos de aprendizaje.
Por ello, las prácticas educativas no pueden plantearse como prácticas técnicas, neutrales,
estimuladoras de un desarrollo natural sino como prácticas decididamente
políticas(Foucault, 1970:45).
Leyendo a Baquero (Sujetos y aprendizajes, 2006), menciona a Ángel Rivière, pedagogo
español que escribió acerca de los diez mandamientos que debería seguir un niño en la
escuela (“¿Por qué fracasan tan poco los niños?”, 1983). Su acento irónico se centra en
dos ideas principales: la discontinuidad entre el pensamiento intuitivo que trae el niño y se
trunca en el ingreso a la enseñanza; en segundo lugar, la imposibilidad de comprender los
aprendizajes escolares haciendo abstracción desde su experiencia educativa.
Se puede encontrar en internet todo el material, pero los mandamientos primero y décimo
resumen el mensaje que nos quiere trasmitir:
I «Desvincularás gran parte de tu pensamiento de los propósitose intenciones
humanas».
X «Y, para colmo, deberás parecer un niño interesado y competente».
Lo primero que la escuela demanda es atención, olvidando que se cultiva y desarrolla en
un ambiente no natural. No existían exigencias atencionales para el niño antes de ingresar
al sistema escolar, el dedicaba toda su atención a aquello por lo que sentía especial
atracción e interés.
Por supuesto que tanto educandos como educadores podemos seguir en la parodia, donde
el educador se miente a sí mismo, cuando a modo de ejemplo,logra silencio en el salón de
clase como sinónimo de atención de los educandos hacia éste. Por su parte los aprendices
lograron traducir a su forma interpretativa que funciona mejor y es más fácil “parecer un
niño interesado y competente”.
En la obra de Sepúlveda, se hace referencia a Bateson (1985) quien nos sumerge en los
tipos de aprendizaje a los que accede el humano: aprendizajes de primer orden
(condicionamiento e imitación), aprendizaje de segundo orden (investigación,
descubrimiento, experimentación) y los aprendizajes de tercer orden.
Los aprendizajes de tercer orden son el verdadero desafío ya que la persona debe
trascender desde el sistema de información cultural disponible y acceder a una
complejidad que requiere distintos hábitos de la mente.
El autor defiende el hecho que necesitamos desarrollar nuevas destrezas y nuevos
patrones de aprendizaje pero dependerán de nuestra capacidad para renovar nuestras
instituciones y prácticas educativas.
El aprendizaje expansivo es una expresión que acuñó Engeström (1987) para referirse al
tipo de aprendizaje que permite pasar desde el aprendizaje de los contextos de actuación
cultural legitimados institucional o socialmente que configuran el aprendizaje de segundo
orden a los dominios del aprendizaje de tercer orden en los cuales es posible desarrollar y
descubrir nuevas formas de actuación cultural y social.
No olvidemos que uno de los objetivos de la OLPC y en Uruguay con el Plan Ceibal, era
disminuir la brecha digital entre los estratos sociales menos favorecidos con los demás.
Esa intención de la OLPC, era justamente con respecto al acceso a Internet, considerado
por el grupo de genios del MIT dirigidos por Negroponte3, como un aspecto esencial para
lograr disminuir el abismo entre países del tercer mundo y el resto.
Todavía falta un tramo muy importante para el uso innovador, espectacularmente creativo
y que garantiza la inclusión de las tecnologías en su publicidad para el consumo.
3Nicholas Negroponte, (1 de diciembre de 1943), es un arquitecto estadounidense de origen griego, más conocido como fundador y
director del MIT Media Lab un laboratorio de diseño y nuevos medios del Instituto Tecnológico de Massachusetts MIT y en el cual es profesor desde1966. En 1992, se implicó en la creación de la revista especializada en informática Wired Magazine como inversor minorista. Es el impulsor del proyecto que pretende producir computadoras portátiles de bajo coste, concretamente con un precio de 100 dólares, para disminuir la brecha digital en los países menos desarrollados, proyecto que presentó en 2005 en el Foro Económico Mundial en Davos, Suiza. De este modo, la fundación "Un portátil para cada niño" (OLPC por sus siglas en inglés), iniciada por Negroponte y otros miembros de la facultad delMIT Media Lab, pretende desarrollar el uso de la informática e Internet en países poco desarrollados.(Wikipedia)
Internet y la escuela
La educabilidad se encuentra sitiada, rodeada por el fracaso escolar y todos los actores de
la educación (desde los aprendices hasta el gobierno de turno).
Internet llega al escenario como agente transformador ¿en qué sentido? Porque permite
lograr el aprendizaje de tercer orden al que refiere Sepúlveda.
Según Area (2000), el sujeto debe aprender a aprender, saber enfrentarse a la información
(buscarla, seleccionarla, elaborarla y difundirla), cualificarse laboralmente para el uso de
las TIC y tomar conciencia de las implicaciones económicas, ideológicas, políticas y
culturales de la tecnología en nuestra sociedad.
Este mismo autor reafirma a la Tecnología Educativa como ese espacio intelectual
pedagógico cuyo objeto de estudio serían los efectos socioculturales eimplicaciones que
para la educación poseen las tecnologías de la información y comunicación en cuanto
forma de representación, difusión y acceso al conocimiento y a la cultura de los ciudadanos
(Area Moreira, M., 2002).
En el impulso entusiasta de la “generación digital” donde se unifica los jóvenes sin
destaque de sus diferencias, y se pasa por alto el uso banal de los medios. Esto ha sido
estudiado y se ha llegado a la conclusión que las tecnologías están siendo utilizadas por
los niños en rutinas de comunicación y de recuperación de información.
¿Qué hacen en Internet los jóvenes en las escuelas? Realmente es muy escasa la utilidad
que los jóvenes le dedican a internet en las escuelas, ésta se basa fundamentalmente en
la búsqueda de información inmediata y la aplicación de algún recurso educativo, en
contraposición a la postura que adoptan una vez fuera del instituto educativo
enfrentándose a las tomas de conciencia y desarrollando el manejo de su propia
autonomía y autoridad frente al uso de la tecnología.
La llegada de Internet al ámbito educativo ha movido ladrillos que se creían bien
cimentados, y mediante el análisis que se pretende plasmar en este documento, se intenta
demostrar que influye fuertemente en la educabilidad porque frente a los desafíos de la
educación en el siglo XXI (Sancho, 2011): puede ayudar a construir puentes significativos
entre el pasado y el futuro, apasionar a los estudiantes en proyectos innovadores, ayudar
en la formación permanente de los educadores y mejorar las relaciones sociales y
educativas. Pero agrego que gracias a la red conceptual que permite la web, se puede
lograr lo que hasta ahora sigue estando en un debe: establecer metas claras y coherentes
de forma consensuada entre todos los actores del escenario educativo.
¿A qué nos referimos en este siglo cuando hablamos de aprendizaje en el aula?
Es cierto que durante el período de aprendizaje entre la infancia y adolescencia, la familia
y las instituciones educativas tienen un papel muy importante.
Pero los conocimientos que van adquiriendo acerca del mundo y las personas “cada vez
más tienen su origen en los mensajes de industrias de la conciencia como la televisión y
la publicidad o en los contenidos que circulan por las autopistas electrónicas de la
información” (Lomas, 2002).
Si se les enseña a los docentes, éstos se motivan para trasmitirles a sus alumnos el
saber entender el doble mensaje que nos llegan de los medios de comunicación y de
Internet: una de naturaleza cognitiva y otra de naturaleza ideológica.
La de naturaleza cognitiva porque permite la construcción de la personalidad así
como un conocimiento compartido del mundo. La naturaleza ideológica al constituirse en
herramientas de consenso social.
El universo comunicativo del mundo de hoy, lo enfocamos utilizando las teorías
constructivistas, las mismas que utilizamos para enseñar ciencias, matemática, etc. en el
aula.
“El aula sin muros de la ventana electrónica del televisor y de las páginas de Internet
constituye en nuestros días el ojo mágico con el que observamos el mundo mientras en
el mundo de la educación aún persiste esa falsa idea de que el mundo escolar debe
permanecer ajeno a tales fenómenos comunicativos (…)” (Lomas,2002).
El conocimiento fluye a través de un nuevo espacio social telemático, pero para seguir el
flujo se necesitan nuevas destrezas y habilidades. Según Javier Echeverría(2001) la
creación de nuevos espacios online de aprendizaje, motiva al alumnado para mejorar sus
interacciones. La universalización de la educación, implica el acceso de todos a este
escenario, pero para que esto suceda se necesitan reformas: cómo se organizan las
clases, el programa escolar, el espacio físico. En la escuela (¿del futuro?) ni siquiera
deberían existir los salones de clases tal como los conocemos en la actualidad porque
coartan el trabajo colaborativo.
Los espacios de trabajo se deben dar naturalmente y hasta dejar de lado la división por
franja etaria, sino la división para trabajar por competencias.
Las tecnologías aparecen como potenciadoras de formas de apropiación del conocimiento
(Lion, 2004) ellas nos cambian y nosotros según el uso que les demos, las transformamos.
El tecnoconocimiento nos trae otra manera de ver el proceso de enseñanza, hay una
nueva valoración de la imagen, las narrativas hipertextuales, las prácticas de modelización
y hasta elconcepto de percepción. Para el aprendiz, muchas cosas como la supremacía de
la imagen, ya es parte de su hacer diario. Varios docentes aseguramos que sólo es
cuestión de tiempo para que la letra manuscrita vaya desapareciendo poco a poco, el
código simbólico está en camino a una nueva era.
Es fundamental que las escuelas se ocupen de las experiencias culturales que viven los
jóvenes fuera del aula, que están estrechamente vinculadas a los medios digitales.
Necesitamos enseñar acerca de la tecnología y no limitarnos a enseñar con o a través de
la tecnología, la escuela debe desarrollar las habilidades críticas y creativas de los niños
en relación con los nuevos medios.
Internet, los video juegos, el video digital, los celulares brindan nuevas maneras de mediar
y representar el mundo, así como nuevas formas de comunicarse.
“Los niños se están relacionando con estos medios no como tecnologías sino como formar
culturales.”
“El problema que plantea la mayoría de los usos educativos de esos medios es que los
sigue considerando meros medios instrumentales de distribuir información, como si fueran
herramientas neutras o materiales de enseñanza”(Buckingham, 2006).
Una de las premisas de este autor, es que el uso de las tecnologías en las escuelas está
realmente desfasado con el uso de las tecnologías por los jóvenes fuera de la escuela.
Según Sancho Gil, lo más arraigado entre los seres humanos son las tecnologías sociales,
las formas de hacer la vida, de entender la organización social, las instituciones, las
relaciones, la distribución del poder.
Internet tiene un papel cada vez más preponderante en el mundo educativo, por lo tanto
necesitamos entender sus implicancias, consecuencias y posibilidades.
El objetivo es crear una economía basada en el conocimiento, donde las nuevas
tecnologías multimedia e Internet son instrumentos poderosos para promover el
aprendizaje. El conocimiento es el principal activo para el desarrollo social, cultural y
económico y el ser humano, debe seguir aprendiendo durante toda su vida si quiere
continuar en la dinámica.
Uno de los desafíos que tiene la educación escolar en el siglo XXI es el aprender a
aprender, y cuando los docentes se encuentran en su formación que lo más importante
para el alumno es “pensar”, realmente se encuentran frente a una encrucijada.
Siguiendo a Badia y Monereo (2005), el estudiante se encuentra frente a una situación
problemática a la que deberá hacer frente haciendo un uso estratégico de su conocimiento.
Estos autores defienden a Internet como medio para la enseñanza y el aprendizaje
estratégico, favorecer estrategias que deben estar integradas en metodologías didácticas
articuladas.
¿Qué actitud se debe tomar en lo que respecta a la cultura mediática?
“Los lazos que unen el lenguaje de las palabras, el de las imágenes y el de los
sonidos han llegado a ser tan estrechos y constantes en el día de hoy que ya no es
posible hablar de tres lenguajes diferentes y opuestos sino más bien de un solo y
único lenguaje: el lenguaje total que dispone de tres formas de expresión, de tres
clases de signos diferentes: las palabras, las imágenes y los sonidos”.
“El lenguaje total”. – Francisco Gutiérrez
Todo mensaje audiovisual utiliza códigos, fundamentalmente icónicos y sonoros. Estos
códigos están ganando la batalla de la “atracción” al verbal y al escrito, códigos que, por
lo menos en nuestra educación primaria y secundaria, siguen prevaleciendo. Por lo tanto
los docentes uruguayos deben afianzarse no sólo en la interpretación de los códigos
audiovisuales, sino también en su producción.
Pese a todo lo que ha pasado seguimos en déficit en lo que respecta a la educación en
Medios de Comunicación. Ahora nos estamos refiriendo a todo aparato que nos
t r an s p or t e al mundo de Internet porque la radio, televisión y cine son historias
pasadas para las nuevas generaciones, internet representa todo eso en un objeto
transformador y transformado.
Vuelven a las mismas actitudes que existieron con los medios antes mencionados:
veneración o indiferencia. ¿Otra vez se volverán a cometer los mismos
errores?¿Seguiremos los educadores discutiendo sobre si utilizar, en este caso, la
computadora o no? Mientras tanto todo llega a nuestros jóvenes e influye en su vida
diaria, en su personalidad, en su manera de ver el mundo.
La aceptación crítica, un camino intermedio entre el optimismo ingenuo y el
catastrofismo estéril (Ferrés, 1994).
Según Aguaded, deberían pensarse como ámbitos de conocimiento para que los
alumnos interpreten el mundo en el que viven y ser críticos en su uso.
El universo nos llega a través de los medios, construimos nuestra realidad a través de
ellos, lo que nos trae como consecuencia la modificación de nuestras formas de captar
esta realidad.
Un término citado por Garay (2013, p. 113) acuñado por Jenkins: la convergencia. Ese
término refiere “al flujo de contenido a través de múltiples plataformas mediáticas, la
cooperación entre múltiples industrias mediáticas y el comportamiento migratorio de las
audiencias mediáticas.”
Esta convergencia ha modificado a las personas en su forma de comunicarse, de leer,
informarse, entretenerse. Hasta las aulas magnas de las universidades se ven asediadas
por gente interesada por saber qué pasa y pueden llegar a ellas gracias a las plataformas
virtuales. Actualmente un profesor universitario que no use plataforma virtual, ni siquiera es
obsoleto, en este momento es una amenaza para la educación tal como se quiere pensar
para el siglo XXI.
Se deben analizar estos medios como objeto de estudio y conocimiento, lo cual supone
competencias intelectuales más complejas, propias de un receptor crítico: ser capaz de
aceptar o rechazar un mensaje, descubrir las tácticas y estrategias empleadas en la
emisión de los mensajes mediáticos, reconocer las omisiones claves, y programar el
uso del medio, etc.
El mundo de la web, es un medio al que tenemos acceso para utilizarlo, transformarlo,
recrearlo y mejorarlo. Tenemos que explorarlo para llegar a una valoración.
Antonio Bartolomé (2008), citado por Garay (2013, p. 124) se refiere a los nuevos
elementos que no estaban presentes hasta ahora en los modelos educativos:
Aprender en cualquier lugar;
Construcción social del conocimiento (inteligencia colectiva);
Base de datos: etiquetas versus descriptores;
Más allá del nivel de un único dispositivo cualquier lugar y a cualquier hora;
Aprender de los compañeros;
Algunas ideas clave para e-learning 2.0 como comunidades de práctica, contenido
sindicado, aprendizaje móvil y juegos.
No se trata de que la escuela sea actualizada transformándola en un nodo más de la red
de Internet o tratar inútilmente de levantar vallas al ingreso del mundo real.
Hay que redefinir las escuelas como espacios de encuentros y diálogos, producción de
pensamientos, trasmisión de experiencias de vida para las nuevas generaciones.
La revolución pedagógica en la era digital no reside en aparatos y plataformas, sino en la
formación personalizada que permiten y estimulan las herramientas digitales.
A modo de conclusión
No se pretende que el concepto de Internet como agente educativo se refiera al material
educativo que puede acceder cualquier ciudadano del mundo, sino a la definición que se
mantiene en este trabajo desde el principio: “red de redes”.
Con esta definición, nos encontramos con que pasa a sustituir a los medios de
comunicación en la educación pero de modo mucho más desafiante: los implicados
pueden interactuar.
La potencialidad de Internet para la educación generó otras formas de enseñanza y
aprendizaje ya que aparecieron diferentes maneras de presentar los contenidos, el trabajo
con los dispositivos móviles y el entendido que el aprendizaje es ubicuo, entendiendo el
término como algo que puede estar al mismo tiempo en todas partes. Lo que resulta
anecdótico es que si se consulta al diccionario, allí refiere que la palabra ubicuo antes era
un adjetivo usado con referencia a Dios.
Dentro del capítulo de Carneiro, al que ya se ha hecho referencia, se dedica unos párrafos
a las escuelas del futuro, sobre el estudio que publicó la OCDE, “¿Qué escuelas para el
futuro?”4, el cual es muy interesante ya que las Pruebas Pisa que siguen aplicándose en
nuestro país, provienen de esta organización.
El material se puede encontrar en la web, pero lo más importante es que habla de seis
posibles escenarios: 1 y 2 son de “Extrapolación” (mantenimiento del statu quo), 3 y 4 son
de “Reescolarización” y los escenarios 5 y 6 que integran el modelo de
“Desescolarización”.
Estos escenarios tienen que ver con la realidad de las escuelas del Uruguay actual, pero
también con las esperanzas. El estudio se refiere, como idea esperanzadora, a los
conceptos donde las redes de aprendizaje y las escuelas se consideran centros sociales
básicos, lo que trae aparejado que se elevará el nivel en la sociedad de los docentes entre
otras cosas. Por supuesto que todo ello va de la mano de una mayor inversión y de
escenarios que priorizan la sociedad del conocimiento, con articulaciones verticales y
horizontales que resultan más efectivas que el modelo tradicional.
4 “¿Qué escuelas para el futuro?” (2001), París, OCDE/CERI
Hay una metáfora que usa Martínez Sánchez (1996), como la “llave de oro” de Alicia en el
País de las Maravillas, que no es fácil de alcanzar pero debemos para lograr abrir la
puerta.
El mundo se ha encontrado conque las dimensiones espacio y tiempo son diferentes en el
ciberespacio, y la formación educativa no estaba pronta para ello.
Cuando la persona ingresa en internet, sigue estando en el mismo lugar pero a su vez se
pone en contacto con otras culturas, en forma sincrónica o asincrónica. Esto es un gran
desafío para la educación y la llave para abrir todas las puertas de las que habla Martínez
Sánchez, es una “llave de oro”. Esta llave va a estar configurada por formación, criterio,
cultura y conocimiento.
Si nos detenemos en el conocimiento, la escuela se ha encargado de trasmitirlo, ordenado,
de generación en generación, controlado por los adultos.
Internet hace todo lo contrario y para colmo se desarrolla en forma mucho más veloz que la
escuela.
El aprendiz ya no recibe ciertos conocimientos especializados dentro de un calendario
preestablecido, y lo peor de todo: ajeno a él. Todos los aprendices buscan el conocimiento,
a través de un proyecto común que rompe las paredes de la escuela. Quizás en un futuro
no muy lejano en realidad los proyectos sean compartidos por aprendices de diferentes
países, que actualmente está pasando pero todavía quedan caminos por recorrer.
Es un conjunto de instituciones las que deben estar preocupadas por el desarrollo del
aprendiente, apoyándolo en la construcción de su conocimiento.
Para que todo esto funcione se debe pensar en comunidades de aprendizaje, pero no
como están pensadas hasta ahora (de docentes, de alumnos, de centros) que lo hacen en
base a una organización vertical, sino comunidades de aprendizaje horizontales.
Las recientes incorporaciones en la escuela pública uruguaya de entornos virtuales de
aprendizaje, pone a disposición todo el bagaje que Internet tiene para las comunidades de
aprendizaje.
Siguiendo a Illich (1985:106), tanto el acceso global a recursos, la posibilidad de compartir
con otros las oportunidades de aprendizaje y enseñanza, como abrir al debate ideas con
otros agentes educativos, son plausibles en internet como entorno educativo.
Enla línea de pensamiento de Engeström (1987) hablamos de aprendizaje expansivo,
como el aprendizaje necesario en esta época, porque considera la actividad como la
unidad básica de la acción cultural humana.
Este mismo concepto, con seguras raíces en la Zona de Desarrollo Próximo de Vigotsky,
es el que nos acerca al concepto de comunidad: aprendemos a través de las interacciones
de los individuos. Para Engeström se produce un encapsulamiento del aprendizaje escolar,
por eso hace necesario el aprendizaje expansivo, la interacción de esa comunidad
abarcando el contexto de crítica, de descubrimiento y de aplicación práctica.
Según Suárez Guerrero (2013:87) la oportunidad educativa se en un contexto sociocultural
en red, donde se destacan dos aspectos claves para repensar lo educativo: la
reconfiguración de las condiciones sociales en red y las condiciones culturales abiertas.
Con la primera la escuela deja de ser el centro neurálgico del saber y con la segunda se
puede aprovechar la conectividad para pensar en la interdependencia en equipos de
aprendizaje.
Se deben generar prácticas de escolarización alternativas pero generadas por los propios
miembros de la comunidad, no por políticas externas disfrazadas de innovación mal
entendida.
Frente a la intención de modificar sustantivamente las estrategias de enseñanza, entender
que los aprendizajes de parte de los alumnos devienen en cambios sustanciales, se debe
asumir que es el dispositivo escolar el que debe cambiar en primera instancia.
Los nuevos entornos producen lo que Coll (2013) llama nuevas condiciones sociales y
culturales:
Posición activa y participativa de las personas (prosumer) en la dinámica social y en
la creación cultural en internet a través de distintos soportes web.
Existe una enorme cantidad y calidad de datos e información, así como una gran
capacidad de reutilizar contenidos culturales a escala global y bajo distintos
lenguajes.
Existe un modo de ser en la red que se sostiene en un conjunto de valores,
actitudes o creencias que orientan el comportamiento de las personas en internet
que, de forma consciente o inconscientemente, está cimentando una cultura digital
emergente en la sociedad y en la escuela.
Para todo esto en nuestro país y en varios del mundo, se ha implementado que cada
alumno tenga su dispositivo para acceder a las aplicaciones y por supuesto a Internet. Al
respecto Fullan (2014) en “Una rica veta. Como las nuevas pedagogías logran el
aprendizaje en profundidad” dice al respecto:
“Cuando los estudiantes tienen sus propios dispositivos, pleno acceso a aplicaciones y
recursos digitales para el aprendizaje y la libertad de explorar y utilizar estos elementos
como parte de tareas bien estructuradas de aprendizaje en profundidad, el aprendizaje
puede incrementarse enormemente” (p. 156)
La presencia de Internet en las escuelas no cambia las prácticas por sí solo, sólo modifica
las condiciones. Actualmente sigue en el tapete la discusión acerca si realmente existen
pedagogías emergentes o estamos frente a pedagogías de antaño que vuelven a tener
vigencia. Con respecto a este tema, en mi caso personal sigo torciendo la vara hacia la
actitud de rever nuestros pedagogos del siglo XX, tanto de nuestro país como del mundo.
Entiendo que podemos volver a aprender de sus palabras frente a los nuevos desafíos
educativos con la inclusión de tecnologías, pero dejaré ese trabajo para el futuro.
Otro factor importante en todo lo que significa la educación de estos tiempos, un elemento
esencial en las iniciativas de experiencias exitosas en la educación: la inclusión de los
padres.
Los padres necesitan comprender de qué se trata Internet como elemento educativo, cómo
puede llegar a ser una ayuda para el aprendizaje de sus hijos, por supuesto hablando del
aprendizaje productivo, porque nunca perdamos la idea de que Internet está ahí con o sin
apoyo de los padres.
Si el cuerpo docente no se convence de ello, de cómo usar en su beneficio educativo el
trabajo en red, por ejemplo, verá como inexorablemente cada educando usará la
tecnología direccionado por el consumismo.
Ni siquiera se puede soñar que si el educando queda solo frente al mercado, sin el apoyo
de la educación social, logre manejar el impulso del consumo a su favor como persona.
Los docentes son humanos formados por lo tanto deben respetarse sus opiniones y
convencerlos con conocimiento, ellos deben quedar convencidos del uso educativo de
internet.
Los padres también deben ayudar a crear ciudadanía en sus hijos, creen que ellos tienen
poderes para manejar las tecnologías y por supuesto Internet.
Pero no es lo mismo saber cómo se hace algo a saber hacer algo, los niños pueden
enseñarnos muchas cosas acerca de Internet, pero son las generaciones de adultos, los
de la comunidad educativa (padres y docentes), quiénes deben guiarlos para ser
ciudadanos del mundo.
Una de las características de Internet es la interactividad y el anonimato con que se puede
manejar la información. Para esto también debe estar preparada la comunidad educativa,
porque contenidos inconvenientes para los aprendices existen en todos los medios de
comunicación, pero no con esas características.
Todo lo que está pasando es tan atractivo como intimidante, la escuela tradicional aunque
no lo haya planificado, se está abriendo al mundo o mejor dicho las nuevas fuerzas
educativas están entrando aunque no se quiera.
“La educación es praxis, reflexión y acción del hombre sobre el mundo para
transformarlo”(Freire, P., 1975).
Nadie se educa solo sino que los hombres se educan entre sí mediatizados por el mundo,
dice Freire. Si llevamos esta concepción con la inclusión de internet en la educación, nos
vemos frente a la realidad de que ese mundo realmente mediatiza.
El cambio fundamental surge de asumir cada hombre su destino, dejar de ser fatalista,
pasivo, conformista para llegar a tener una actitud de acción-reflexión-acción en su
experiencia social con los demás.
“El problema no es lo que no saben hacer sino lo que no saben ser: humanos entre
los humanos, libres pero responsables, críticos pero no obsesos, ni caprichosos
seguidores de los archimandritas de la superstición apocalíptica. Son, ay, idiotas,
aunque eso sí, suficientemente preparados. Eduquemos mejor... o empecemos a
temblar”.
Fernando Savater (2006)
Esta obra está licenciada bajo la Licencia Creative Commons
Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional. Para ver una copia de esta licencia, visita http://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/4.0/.
Bibliografía
Area Moreira, M. (2002)La tecnología educativa como disciplina pedagógica. Extraído de
la Web Docente de Tecnología Educativa, Universidad de La Laguna.
Badia, A. y Monereo, C.(2005) Aprender a aprender a través de Internet. En: Monereo, C.
(Coord.) Internet y competencias básicas (pp. 51-70) Ed. Graó, Barcelona.
Baquero, R. (2006) Sujetos y aprendizaje. Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología
de la Nación. Buenos Aires.
Buckingham, D. (2006, marzo) Ponencia para el Congreso del décimo aniversario del
MED “La sapienza di comunicare”, Roma, Italia.
Carneiro, R. (2000)“La nueva educación en la sociedad de la información y los saberes”.
En Las Tecnologías de la Información y Comunicación en la Educación: Retos y
posibilidades. Sesión II. (pp. 73-86) Santillana, Madrid, España.
Coll, C. y Monereo, C. (2008).Psicología de la Educación virtual. Ediciones Morata.
Madrid.
Coll, C.(2013) “El currículo escolar en el marco de la nueva ecología del aprendizaje” en
Aula, 219, pp. 31-36. En línea:
http://www.psyed.edu.es/prodGrintie/articulos/Coll_CurriculumEscolarNuevaEcología.pdf
Fullan, M. (2006) La escuela del mañana: repensar la educación, escenarios
futuros.Recuperado 20/6/2013 En línea:http://www.oecd.org/edu/research/36905464.pdf
Fullan, M. y Langworthy, M (2014) Una rica veta. Cómo las nuevas pedagogías logran el
aprendizaje en profundidad.Plan Ceibal. Montevideo, Uruguay.
Garay, R. (2014) Educación, convergencia, emergencia y disrupción.En “Formar parte, ser
parte, tomar parte” (pp. 110-144) Ed. Grupo Magro. Montevideo, Uruguay.
García, J. M. y otros (2013) Cap. 2 “Comunidades de aprendizaje. Entre la innovación, el
conocimiento y la tecnología”. En “Aprendizaje abierto y aprendizaje flexible. Más allá de
formatos y espacios tradicionales”. ANEP. Plan Ceibal. Montevideo, Uruguay.
Lion, C. (2006)Cap 3: El infoconocimiento, Cap 4: El tecnoconocimiento y cap 5: El
conocimiento colaborativo.En: Imaginar con tecnologías. Relaciones entre tecnologías y
conocimiento. La Crujía: Buenos Aires.
Litwin, E. (Coordinadora) (1997)Enseñanza e innovaciones en las aulas para el nuevo
siglo. El Ateneo. Buenos Aires.
Lomas (Compilador) (2002)El aprendizaje de la comunicación en las aulas,Paidós.
Barcelona.
Lowell, M. (1996) Computadoras en Educación: La Red y el Arado. Revista Contexto
Educativo. Revista digital de Educación y Nuevas Tecnologías. Disponible en:
http://contexto-educativo.com.ar/index.htm
Lus, Ma. Angélica (2004) De la integración escolar a la escuela integradora. Ed.Paidós.
Bs As.
Martínez Sánchez, F. (1995) Cap 17 Alicia en el país de las tecnologías.En Nuevas
Tecnologías y educación.
Martínez Sánchez, F.(1996)La enseñanza ante los nuevos canales de comunicación. En
Tejedor, F. y A. García Valcárcel, Perspectivas de las Nuevas Tecnologías en la
Educación. Narcea. Madrid
Pérez Gómez, A. I., (2012) Educarse en la era digital. La escuela educativa. Morata:
Madrid.
Prensky, M. (2011)Enseñar a nativos digitales (eBook-ePub). Grupo SM.
Sancho Gil, J. M.(2009)“La tecnología educativa en un mundo tecnologizado”En:
”Tecnología educativa. La formación del profesorado en la era de Internet” Cap. 1 (pp 45-
67) Ediciones Aljibe, 2009.
Sepúlveda, G. (s.f.) El aprendizaje expansivo. Recuperado el 13/10/2013. En línea:
http://firgoa.usc.es/drupal/files/aprendizaje_expansivo.pdf Sibilia, Paula (2012)¿Redes o paredes? La escuela en tiempos de dispersión. Tinta
Fresca: Buenos Aires, Argentina.
Suárez Guerrero, Cristóbal(2013) La oportunidad abierta y cooperativa de aprender en
red” En “Aprendizaje abierto y aprendizaje flexible. Más allá de formatos y espacios
tradicionales”.(pp. 83-105) ANEP. Plan Ceibal. Montevideo, Uruguay.
Esta obra está licenciada bajo la Licencia Creative Commons
Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional.
Para ver una copia de esta licencia, visita http://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/4.0/.