Upload
antonio-fernandez-tristancho
View
71
Download
4
Embed Size (px)
Citation preview
Nuestra Virgen del Carmen
Ya hemos defendido en reiteradas ocasiones que la
religiosidad en nuestro pueblo es especial. Está muy
ligada a la tradición popular, al sentimiento colectivo y a
sensibilidades enraizadas en la noche de los tiempos.
Este fenómeno puede comprobarse en todo lo
relacionado con nuestra Patrona, la sin par Virgen del
Carmen, “como se venera en Galaroza”, tal y como
decían las medallas antaño, extrañadas de que en un
pequeño pueblo serrano se venerase a una talla
marinera y encinta.
A Ella, a sus fiestas y a las tradiciones con que Galaroza
celebra estos días, dedicamos el número cuatro de este
boletín cultural. Comenzando con la tradicional Bajada,
pasando por la novena, el petitorio, la Procesión de
Tercia, la Subida, las fiestas en el Paseo que lleva su
nombre y los recuerdos que se atesoran, todo en estas
fechas adquiere tintes personales, que, todos juntos,
configuran un exclusivo sentir popular.
La Bajada inicia el largo ciclo festivo estival, que estará
jalonado de numerosos eventos a lo largo de tres meses.
El traslado de la Virgen del Carmen desde su morada de
la Ermita del Carmen hasta el templo parroquial de la
Purísima Concepción se asemeja a una particular
romería por las calles del pueblo que destila emociones
y un fervor que se aprecia distinto en nuestro pueblo.
Los cachoneros tienen una particular forma de vivir la
experiencia religiosa que los hace volcarse e identificarse
con la imagen de su patrona. Es “la madre de todos los
cachoneros”, en expresión mitad popular mitad
fervorosa.
4 Verano 2011
El traslado en sí es un espectáculo para los sentidos. No
hablamos del ornato que cotidianamente envuelve los actos
religiosos en cuanto a estética y colorido, sino del
sentimiento interior que desborda la comitiva popular. Se
nota a la legua que los cachoneros sienten a su imagen, se
percibe que existe una relación muy particular entre ellos y
su patrona.
Nuestra Virgen del Carmen
Aunque son los vecinos de Galaroza quienes con
mayor pasión viven estos momentos, también se
suman cientos de personas procedentes de los
pueblos cercanos, e incluso muchos emigrantes que
vuelven, aunque sea por un día, al reencuentro con
su gente.
Otra de las sensaciones especiales que pueden
apreciarse durante La Bajada es la impresión que
causa al visitante el peculiar aspecto que presenta
esta Virgen del Carmen. Como ya es sabido, la talla
está embarazada, lo cual le confiere un atractivo
muy singular. En opinión de algunos estudiosos de
la especial devoción sentida por la Virgen del
Carmen de Galaroza, “al estar embarazada se
percibe como más humana por parte de la
población, lo cual acerca la imagen al vecino, que la
siente como una madre, como alguien más de la
comunidad”.
dejase el
Todo el p
Pudiera ser ésta la cualidad que explicase el cariño y
la cercanía con que se venera en Galaroza a esta
imagen marinera, que en este pueblo se convierte
en hortelana, según los magníficos versos que nos
dejase el poeta cachonero Jesús Arcensio, una de las
cumbres literarias onubenses.
Todo el pueblo se engalana para la procesión y el
ambiente creado da la razón a aquéllos que
consideran a Galaroza como una fuente de
inspiración poética, como un caudal de recursos
literarios, como un paraíso para los sentidos.
Mujeres descalzas, niños recién nacidos, gentes del
campo, personas que nunca aparecen por la iglesia,
intelectuales con deseo de comprender el
fenómeno y la Banda de Música de Galaroza
emocionando a familiares y extraños. Todo ello
queda aderezado con las calles empedradas de todo
el núcleo y el agua por las regaeras y lievas del
pueblo, con las casas recién encaladas y las macetas
de geranios en los balcones.
Nuestra Virgen del Carmen Durante la novena, los cachoneros tienen una cita ineludible
en la Iglesia Parroquial. Son días en los que el pueblo abajo se
convierte en un hervidero de personas, comentarios y
vivencias. Son nueve jornadas en las que acoge el símbolo
más querido de toda Galaroza.
Se saludan los parientes lejanos, los que han llegado desde
tan lejos, con tan sólo unos días para participar en este auto
de afirmación colectiva. Se pregunta por la familia y por los
estudios o los trabajos de los hijos. Se recuerda, mucho, a los
que ya no están, y se cuentan los años que faltan de estar en
la procesión.
Porque el 25, día grande de nuestro calendario, se producen
dos acontecimientos que ningún cachonero se puede perder.
Por la mañana, la Procesión de Tercia, la más bonita, a decir
de muchos, la más luminosa y sentida, la de la gente humilde,
la de los que siempre están con la Virgen, a pesar de haber
trasnochado. Es la procesión del Pueblo Abajo, cuyas calles se
honran al recibir un caudal de sentimientos.
Y luego, La Subida. Pocos pueblos pueden presumir del
espectáculo que vive Galaroza esa noche. Es la vuelta a la
morada habitual, la devolución del tesoro más preciado, en
un recorrido por la columna vertebral de nuestro casco
urbano.
Nuestra Virgen del Carmen
La Subida al Paseo, a su Paseo, simboliza su dedicación a todo el pueblo por igual. Pero todavía queda un hueco para las
emociones cachoneras, cuando, ya en el interior de su Ermita, la Salve sale de los corazones de hombres y mujeres. Hasta en
este cántico, Galaroza es especial. Supone el fin del rito, la promesa cumplida y el deseo de volver el año siguiente.
A la devoción por la Virgen del Carmen sigue la algarabía de nuestras fiestas, vividas como sólo los cachoneros sabemos
hacerlo. Las preocupaciones se aplazan y dan paso a la alegría, al cante y al saber estar. Las Comisiones de Fiestas, el
Ayuntamiento, todo nuestro pueblo en general han contribuido históricamente para que las fiestas de Galaroza hayan sido las
mejores de toda la Sierra.
Así son nuestras fiestas. Cariño, religiosidad, orgullo, emoción, hospitalidad y júbilo. Que así sea por siempre.
A la izquierda,
el azulejo que
estaba situado
en el antiguo
Hotel Venecia.
A la derecha,
una talla de la
Virgen, obra de
Ignacio Tovar
En la historia reciente,
son muchos los
documentos que nos
recuerdan nuestras
fiestas patronales.
Recibos, revistas,
papeletas, boletos y
tantos otros objetos que
relacionan a Galaroza
con su Virgen del
Carmen.
Herramientas de
cuadro de texto para
cambiar el formato
del cuadro de texto
de la cita.]