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La Sabiduría
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Hijo mío;como ves a tu padre lo envuelvela capa del tiempo y el olvido...
notarás el sendero de los años en mi frente
y el brillo del ocaso en mis ojos;
lo único que conservo y conservaré hasta mi muerte
es el sentimiento de amor a Dios
y por ende el autoreconocimiento de mis errores y pecados
y la satisfacción de haber podido encontrar con los años
la fuente inagotable de la vida....: ¡la sabiduría!
Yo como Tú tambén fui joven y bello
tomó mi corazón el placer a manos llenas
el vino mojó mis labiosy la lujuria calmó mis ansias
viví en el pecadoy corrí enceguecido por sus venas....
¡Oh hijo...! aparta de tu carne el mal porque todo es vanidad:
la juventud! ¡el oro! ¡la carne!son vanidad...¡nada más!
Bienaventurado el hombre que siendo joven
se acuerda del creador,
y su pensamiento está por encima de las cosas terrenas...
el corazón del sabio late con la tranquilidad eterna
el del necio se agita como las tormentas peligrosas;
nada quedó de los placeres que me brindó el mundo,
todo fue como un sueño fugaz,como la generación que se va...
y la generación que viene...,
como la espuma que se pierde en el cause del río...
como el polvo que vuelve a la tierra (como era antes)
y el espíritu que vuelve a Dios que lo dió..
vanidad hijo mío....sólo vanidad.
Ama a dios hijo mío...¡siempre!y guarda sus mandamientos
en cada segundo de tu existencia;
no valen las palabras ni los sermones,
ni quemarse las pestañas leyendo libros;
la sabiduría no se hizo para los eruditos,
la sabiduría es sencilla...es para el que sabe cómo y dónde
encontrarla...
privilegiado aquél que siendo joven es sabio
y bienaventurado el viejo que busca la sabiduría¡y al fin la encuentra!
¡bienaventurado Tú hijo mío!que aún siendo joven Dios permite que yo vivapara poderte decir:
ve...anda...búscala....¡encuéntrala!y vive espiritualmente siempre con Dios.
