Método Cartesiano

Explica los móviles de la investigación:

• Mejorar la vida con ayuda de un conocimiento autentico.

• Punto de partida: la ignorancia.

• Dirección Metódica: cuando uno esta extraviado parece preferible seguir una dirección fija (regla), mientras no haya buenas razones para variarla.

Las reglas del método:

Precepto de la evidencia: no admitir nunca algo como verdadero sin conocer con certeza lo que es. Es decir no dar asentamiento mas que a aquello que no tuviera ocasión de dudar, evitando la precipitación y la prevención.

Precepto de análisis: dividir las dificultades que tenemos en tantas partes como sea posible, para solucionarlas mejor.

Precepto de la síntesis: establecer un orden de nuestros pensamientos incluso entre aquellas partes que tengan un orden significativo, apoyándonos en la solución de las cuestiones mas simples para resolver los problemas mas complejos.

Precepto de comprobación: hacer revisiones amplias para estar seguros de no haber emitido nada.

Verdadero (finalidad): únicamente aquello de lo que hay certeza – es decir, las ideas indudables – excluyendo la supuesta verdad preestablecida, hasta no someterla al juicio de la razón y constatar que de ella puede darse una prueba rigurosa. Pero conviene interpretar estas pruebas en clave dialéctica (discusión).

La duda: en el contexto de la investigación hay que rehusarse a asentir a todo aquello de lo que fuera posible dudar racionalmente.

Epistemología cartesiana:

Libertad practica para decidir investigar de manera voluntaria y libre.

Filosofía practica: la responsabilidad no es ilusoria, pues si hay conocimiento legitimo, y este versa en parte sobre algunas relaciones causales, hemos de tomar nuestras decisiones sin hacer oídos sordos a las consecuencias previsibles de nuestros actos.

Elementos:

Duda metódica: en busca de la certeza.

Dudas del conocimiento sensible: los datos de los sentidos no son seguros podemos dudar de ellos.

Dudas del conocimiento racional: las verdades de la razón (lógicas y matemáticas) no son alcanzadas por la duda, la cual recae sobre el conocimiento sensible.

Pienso, Existo: mas allá de toda duda se encuentra nuestra propia existencia.

Criterio de verdad: “claridad y distinción” que brindan en pienso, existo.

Existencia de Dios: garante del conocimiento racional.

Conocimiento racional seguro: con Dios como garantía, el conocimiento lógico y matemático recobra su seguridad y se desecha la hipótesis del genio maligno.

Ideas innatas: no proceden ni de la experiencia ni de la imaginación, son las únicas verdaderamente claras y distintas; por ejemplo la idea de dios.

Conocimiento sensible: son las ideas adventicias que se supone representan las cosas reales.

Ideas facticias: producidas por la propia conciencia mediante la imaginación por ejemplo: la idea de un mino tauro.

Ideas adventicias: ideas que nos vienen del exterior a través de los sentidos; por ejemplo: la idea del azul.

Sexta meditación:

• “Mi finalidad no es la de enseñar el método que cada uno debe de seguir para conducir rectamente su razón, sino solamente hacer ver de que manera he procurado conducir la mía”.

• Es un principio a la vez teórico y practico, que es la misma esencia del hombre.

• “La facultad de juzgar bien y distinguir lo verdadero de lo falso, que es lo que se llama propiamente buen sentido o razón, es naturalmente igual en todos los hombres. Esta universalidad de la razón es sin evidencia la intuición”.

• La intuición es el acto mismo de la evidencia, el transparentarse de la mente a si misma y la certeza inherente a este transparentarse.

• La presencia del alma racional establece la diferencia radical entre las hombres y las bestias.

• Acciones y Pasiones en el alma: las acciones dependen de la voluntad; las pasiones (amor, odio, alegría, tristeza y deseo) son involuntarias y están constituidas por percepciones, sentimientos o emociones causadas en el alma por los espíritus vitales, esto es, las fuerzas mecánicas que actúan en el cuerpo. Evidentemente, la fuerza del alma consiste en vencer las pasiones y detener los movimientos del cuerpo; esto no quiere decir que las pasiones sean dañosas, todas se relacionan con el cuerpo y se dan en el alma.

• El hombre debe dejarse guiar, no por las pasiones, sino por la experiencia y por la razón, solo así podrá distinguir en su justo valor el bien y el mal y evitar los excesos.

• En este dominio sobre las pasiones consiste la prudencia; y esta se obtiene extendiendo a pesar de las pasiones, el dominio del pensamiento claro y distinto y separando este dominio en cuanto sea posible de los movimientos de la sangre y de los espíritus vitales de los que dependen las pasiones y con los cuales habitualmente esta unido.

• En este progresivo dominio de la razón, que restituye al hombre el uso integro del libre albedrío y le hace dueño de su voluntad, esta la característica de la moral cartesiana.

• Ideal de la moral cartesiana: Prudencia; “no hay nada que nos impida estar contentos, excepto el deseo, la nostalgia y el arrepentimiento; pero si hacemos siempre todo lo que nos dicta nuestra razón, no tendremos jamás ningún motivo de arrepentirnos, aunque los acontecimientos nos muestren que nos hemos engañado sin culpa nuestra.

• El grado mas alto de la libertad se alcanza cuando el entendimiento posee nociones claras y distintas que dirigen la elección y la decisión de la voluntad.

• El poder de la razón sobre la voluntad es el poder del hombre sobre las propias acciones (elección de la ocupación que ha de seguir en la vida).