La Lengua Españo la: Origen y Evo lució n

La lengua española, llamada también castellana, por ser Castilla el lugar donde primeramente alcanzó mayor perfección, es una de las dominadas romances o románicas, por haber nacido en territorio de dominación romana y neolatina, por derivarse del latín.

Es muy difícil precisar cuales fueron los primeros pobladores de España, pero puede asegurarse que antes de la invasión romana, los españoles hablaban, entre otras, el ibérico, lengua de los antiguos iberos.

Los filólogos sostienen que la pérdida de la f con que comienzan muchas palabras latinas se debe a la dificultad de los iberos, desde un principio para pronunciarla, razón por la cual la sustituyeron por una expiración representada por h en lo escrito.

Ejemplos: filium- hijo fame- hambre folia- hoja

Los pueblos que se establecieron sucesivamente en distintos lugares de la península, en especial en los territorios costeros ( fenicios, griegos, cartagineses, vascos, celtas, etc.)

De origen prerrománico son palabras como: manteca, Iberia, perro, barro, etc. apenas dejaron elementos lingüísticos, pues sólo interesan los que pueden haber llegado a través de los romanos.

Los soldados romanos que invadieron la Península en el siglo II A.C. trajeron el latín vulgar. Éste se fue uniendo con las expresiones propias del pueblo de cada región.

Los primitivos habitantes de la península fueron olvidando la lengua en uso y adoptaron el latín vulgar.

El latín culto se refugió en las iglesias y los monasterios, pero el latín que hablaba el pueblo, fue cambiando en las distintas provincias del Imperio Romano, hasta convertirse en las llamadas lenguas romances. Estas son: tumana, dáltico, retorrománico, italiano, sardo, provenzal, francés, catalán castellano, gallego y portugués.

El castellano es una de esas lenguas romances que por su mayor fuerza y riqueza fue absorbiendo a los dialectos principales, hasta convertirse lengua nacional, cambiando su nombre por el de español.

Mediante el cultivo literario, dándose a conocer la primera obra escrita en castellano, El poema del Mio Cid, de autor anónimo y el poder político de Castilla contribuyeron al desarrollo y la expansión de esta lengua a través de toda la península convirtiéndola en la lengua española por excelencia.

La publicación de la primera gramática castellana de Elio Antonio de Nebrija en 1492, fecha del descubrimiento de América y de la toma de Granada por los Reyes Católicos, establece la fecha inicial de la segunda gran etapa de conformación y consolidación del idioma. 

En el año 1713 se fundó la Real Academia Española. Su primera tarea fue la de fijar el idioma y sancionar los cambios que de su idioma habían hecho los hablantes a lo largo de los siglos, siguiendo unos criterios de autoridad.