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Realismo político2

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Maquiavelo

La teoría y el programa del realismo político fuerondesarrollados por vez primera por Maquiavelo

Pero Maquiavelo no inventó elmaquiavelismo, la separaciónde la práctica política y losideales cristianos.

Cualquier pequeño prínciperenacentista era ya unmaquiavélico nato.

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Solo la doctrina del racionalismopolítico adquirió en él su primeraformulación.

(Maquiavelo fue sólo unexponente y un portavoz desu época).

Maquiavelo decía, que desde que hubo señores ysúbditos, amos y criados, explotadores yexplotados, hubo también dos distintos órdenes depatrones morales, uno para los poderosos y otropara los débiles.

Intentaba justificar que en los asuntos de Estadovalen otras máximas de actuación que en la vidaprivada, y que, en primer lugar, los principiosmorales cristianos de la fe dada y verdad no sonabsolutamente obligatorios para el Estado y paralos príncipes.

La doctrina de la doble moral

Su tesitura

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El Concilio de Trento seconvirtió en la alta escueladel realismo político. Tomócon fría objetividad lasmedidas que parecíanadecuadas para adaptar lasorganizaciones de la Iglesiay los fundamentos de la fe alas condiciones y exigenciasde la vida moderna.

Los directores espirituales del Concilio quisieron trazar una frontera clara entre laortodoxia y la herejía. Si ya no se podía disimular la secesión, al menos se debíaimpedir la ulterior difusión del mal. Se reconoció que, dadas las circunstancias, eramás razonable acentuar las antítesis que velarlas, y aumentar frente a loscreyentes las exigencias que reducirlas.

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Con la convocatoria del Concilio cesó el liberalismo de la Iglesia respecto del arte.La producción artística de la iglesia fue puesto bajo la vigilancia de teólogos, y lospintores debían atenerse, especialmente en las empresas mayores, estrictamentea las indicaciones de sus consejeros espirituales.

Incluso la elección de losmedios artísticos también esprescripta por las autoridadeseclesiásticas en muchosaspectos más estrictamenteque en la Edad Media.

Ante todo se prohíbe tener enlas iglesias obras de arte queestén influidas o inspiradaspor errores religiososdoctrinales.

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Los artistas han de atenerse exactamente a la forma

canónica de las historias bíblicas y a la exposición oficial

de las cuestiones dogmáticas

Se critica en el Juicio Final de Miguel Ángel

el Cristo sin barba, la mitológica barca de

Caronte, los gestos de los santos.

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En el Banquete en casa de leví (Verón) se cuestiona la

introducción de motivos como enanos, perros, un bufón

con un loro y otras cosas.

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Acta del tribunal de la Inquisición, Venecia, 18 de julio de 1573; asunto a juzgar: El festín en casa de

Simón

El inquisidor. — En esta escena que habéis pintado para la iglesia de los Santos Giovanni y Paolo, ¿qué

significa el hombre que sangra por la nariz?

El Veronés. — Quería representar a un doméstico que había sufrido un accidente.

El inquisidor. — ¿Y estos hombres de armas vestidos como alemanes y provistos de alabardas?

El Veronés. — Nosotros, los artistas, nos tomamos las mismas libertades que los poetas y los bufones;

yo he pintado, pues, dos alabarderos; uno que bebe, y otro que come al lado, cerca de la escalera. Se

encuentran ahí al servicio del dueño de la casa, que, según se me ha dicho, era un hombre rico y tenía

probablemente sirvientes de esta clase.

El inquisidor. — ¿Por qué habéis pintado al hombre vestido de bufón y con un loro en la mano?

El Veronés. — Como un adorno, es cosa habitual.

El inquisidor. — ¿Quienes se hallan sentados a la mesa de nuestro Señor?

El Veronés. — Los doce apóstoles.

El inquisidor. — ¿Qué hace san Pedro, el primero de ellos?

El Veronés. — Corta el cordero, para hacerlo pasar a la mesa.

El inquisidor. — ¿Y qué hace el apóstol siguiente?

El Veronés. — Tiende un plato, para tomar lo que san Pedro le da.

El inquisidor. — ¿Y el siguiente?

El Veronés. — Se limpia los dientes.

El inquisidor. — ¿Quién creéis que asistía realmente a esta comida?

El Veronés. — Creo que estaban allí Cristo y sus apóstoles; pero cuando queda en un cuadro un espacio

vacío, añado personajes que convienen al tema.

El inquisidor. — Lo que los artistas añaden a sus cuadros, ¿no debe ser apropiado al tema y a los

personajes principales? ¿O acaso ponéis en vuestras obras, para vuestro placer, simplemente lo que os

viene al espíritu, sin discreción ni discernimiento?

El Veronés. — Yo pinto mis cuadros como me parece y lo mejor que mi talento me lo permite.

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las representaciones de desnudos así como la

exhibición de representaciones

excitantes, inconvenientes y profanas en los

lugares sagrados.

el formalismo y el sensualismo del arte en

todos los aspectos.

Pero, a diferencia de la Reforma, el Tridentino no fue, a pesar

de su rigorismo moral y de su posición antiformalista, en modo

alguno opuesto al arte.

También

prohibieron

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La reforma y los herejes

Lutero condenaba “la idolatría” de la Iglesia católica, es decir, la

expresión del sentimiento religioso mediante el arte, la decoración de las

iglesias con imágenes.

También todos los movimientos

heréticos de la Edad Media tenían en

el fondo una actitud iconoclasta.

Tanto los albigenses y los valdenses

como los lolardos y husitas condenan

la profanación que la fe recibe del

esplendor del arte.

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Reformadores

Carlostadio hizo quemar en wittenberg las imágenes de los santos,

Zuinglio hizo retirar en Zurich las obras de arte de las iglesias y las hizo

quemar, Calvino, decía que no hallaba diferencia entre orar a una

imagen y observar una obra de arte, los anabaptistas, que odiaban el

arte.

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El arte como propaganda

La Contrarreforma, no solo buscaba siendo amigadel arte acentuar su oposición al protestantismo ylos herejes que eran sus enemigos, sino que queríaservirse del mismo, ante todo, como arma contralas doctrinas de la herejía.

El arte, gracias a lacultura estética delRenacimiento, habíaganado muchísimotambién como medio depropaganda.

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Hay opinionesdiversas encuanto si laexpresiónartística de laContrarreformase da en elManierismo o enel Barroco.

¿La expresión artística de laContrarreforma se da en elManierismo o en el Barroco?

Cronológicamente está más cerca delManierismo, además la orientaciónespiritualista de la época tridentinahalla en él una expresión más pura que enel Barroco.

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Asimismo, el programa artístico de laContrarreforma – la propaganda delcatolicismo en las amplias masaspopulares mediante el arte – fue, sinembargo, sólo realizado por el Barroco.

No querían que elmismo estuvieradirigido a unreducido estratode intelectuales,sino a las masas.

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El artista del Manierismo

Por lo tanto, los artistas delmanierismo hallaron en las doctrinasde la iglesia sólo un débil apoyo.

De todas formas, el artistade la época manierista sehallaba en una situacióndiferente al de la EdadMedia.

Allí uno no se podíaimaginar servir a Dios deotra manera que no sea consu arte, o también, dada larígida ordenación social dela época no ofrecía a unhombre ninguna posibilidadde existencia fuera de suoficio.

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En el siglo XVI, un artista podía ser rico eindependiente, la cultura del individualismo le ofrecíainfinitas posibilidades que estaban cerradas al artistade la Edad Media.

Dadas estascircunstancias,estaban divididosentre la imposicióny la libertad, y seencontrabanindefensos frente alcaos que amenazabael orden del mundoespiritual.

Pero le colocaba en unvacío de libertad en elque muchas veces estaba apunto de perderse.

En ellos se nos presenta porprimera vez el artistamoderno, con su escisióninterna, su hambre devida, su huida del mundo ysu rebeldía sin piedad, susubjetividad exhibicionistay su último guardadosecreto.

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Características del artista manierista

A partir de este momento, aumentande día en día, entre los artistas,el raro, el excéntrico, elpsicópata.

Parmigianino seentrega a laalquimia en losúltimos años desu vida.

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Pontormo padece desde su juventudgraves depresiones y con los años sevuelve cada vez más misántropo yarisco.

Rosso termina en el suicidio.

Tassomuereen lalocura.