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DIOS EL LEGISLADOR Lección 6, para el 11 de febrero de 2012

Dios el Legislador

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DIOS EL LEGISLADOR

Lección 6, para el 11 de febrero de 2012

LA PROMULGACIÓN DE LA LEY¿De qué modo dio Dios los diez mandamientos?

“Todo el monte Sinaí humeaba, porque Jehová había descendido sobre él en fuego; y el humo subía como el humo de un horno, y todo el monte se estremecía en gran manera” (Éxodo, 19: 18)

“Porque no os habéis acercado al monte que se podía palpar, y que ardía en fuego, a la oscuridad, a las tinieblas y a la tempestad, al sonido de la trompeta, y a la voz que hablaba, la cual los que la oyeron rogaron que no se les hablase más” (Hebreos, 12: 18-19)

¿Qué reacción hubo ante la promulgación de los diez mandamientos?

“y tan terrible era lo que se veía, que Moisés dijo:

Estoy espantado y temblando”(Hebreos, 12: 21)

“Todo el pueblo observaba el estruendo y los

relámpagos, y el sonido de la bocina, y el monte que humeaba; y viéndolo el pueblo, temblaron, y se

pusieron de lejos. Y dijeron a Moisés: Habla tú con nosotros, y nosotros

oiremos; pero no hable Dios con nosotros, para que no

muramos” (Éxodo, 20: 18-19)

LA PROMULGACIÓN DE LA LEY

¿Por qué reaccionaron así?

Al escuchar los mandamientos, ellos sintieron su pecaminosidad. Se dieron cuenta que habían vulnerado la Ley de Dios.

“El pueblo de Israel estaba anonadado de terror. El inmenso poder de las declaraciones de Dios parecía superior a lo que sus temblorosos corazones podían soportar. Cuando se les presentó la gran norma de la justicia divina, comprendieron como nunca antes el carácter ofensivo del pecado y de su propia culpabilidad ante los ojos de un Dios santo. Huyeron del monte con miedo y santo respeto”

LA PROMULGACIÓN DE LA LEY

(E.G.W., Patriarcas y profetas, pg. 318)

¿Qué propósito tuvo Dios al promulgar los diez mandamientos?

Mostrar el pecado.

“¿Qué diremos, pues? ¿La ley es pecado? En ninguna manera. Pero yo no conocí el pecado sino por la ley; porque tampoco conociera la codicia, si la ley no dijera: No codiciarás” (Romanos, 7: 7)

Inmediatamente después de promulgar la Ley, Dios mostró al pueblo cómo salvarse del pecado a través del Santuario, que prefiguraba la obra redentora de Cristo.

LA PROMULGACIÓN DE LA LEY

Al mostrarnos el pecado, reconocemos la necesidad de

salvación.

LA LEY ANTES DEL SINAÍCaín fue acusado de homicidio por matar a su hermano (Génesis, 4: 9-10)

A Noé se le indicó: “El que derramare sangre de hombre, por el hombre su sangre será derramada” (Génesis, 9: 6)

Job menciona homicidio, robo y adulterio(Job, 24: 14-15)

Abimelec reprendió a Abraham por mentir (falso testimonio) cuando Dios le advirtió que no cometiera adulterio con Sara (Génesis, 20)

Jacob pidió a su familia que se deshiciese de los ídolos para ir a adorar a Dios en Betel (Génesis, 35: 2-3)

El sábado fue bendito desde la misma Creación (Génesis, 2: 1-3)

Cuando Dios dio el maná (antes del Sinaí), le daba al pueblo doble porción el viernes para que descansase el sábado “para que yo lo pruebe si anda en mi ley, o no” (Éxodo, 16: 4)

I

II

I I I

IV

VVIVIIVIIIIXX

LA LEY ANTES DEL SINAÍ

La Ley es la norma moral por la que podemos juzgar la rectitud de las personas.

Si no hubiese existido la Ley antes del Sinaí, ¿cómo podía haber dicho Dios de Job que era “varón perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal” (Job, 1: 8)?

De Abraham, que vivió varios siglos antes del Sinaí, dijo Dios que “guardó mi precepto, mis mandamientos, mis estatutos y mis leyes” (Génesis, 26: 5). Esto nos habla de un sistema complejo de leyes, aún más abarcante que los diez mandamientos.

Cuando Moisés regreso a Egipto, comenzó una reforma espiritual entre el pueblo de Israel que incluía retornar a la observancia de los mandamientos. Por ello, Faraón acusó a Moisés y Aarón de hacer “sabatizar” al pueblo (Éxodo, 5: 5)

EL PUEBLO DE ISRAEL Y LA LEY

Hasta el extremismo farisaico de los tiempos de Jesús, Israel nunca vio la Ley como un medio de salvación. Para ellos, la salvación era una gracia de Dios y la Ley era (y es) el reflejo del carácter divino.

Si comprendemos que la palabra “ley” abarca no solo los Diez Mandamientos sino todas las enseñanzas del Antiguo Testamento, en especial las de los primeros cinco libros de Moisés, entonces entenderemos que ellos amaban el mensaje de salvación de gracia. Ellos amaban “la verdad” como se les había revelado y como la habían captado. No era un amor a las reglas, sino un amor a un conjunto de criterios y principios que, si los guardaban, les abrirían el camino a muchas bendiciones y promesas, porque Dios les había dado todo eso para su propio bienestar.

EL PUEBLO DE ISRAEL Y LA LEY

“La ley de Jehová es perfecta, que convierte

el alma; el testimonio de Jehová es fiel, que hace sabio al sencillo” (Salmo 19:

7)

“Vengan a mí tus misericordias, para que viva, porque tu ley es mi

delicia” (Salmo 119: 77)

“¡Oh, si hubieras atendido a mis

mandamientos! Fuera entonces tu paz como un río, y tu justicia como las ondas del mar” (Isaías, 48: 18)

AMAR

ÁS A

DIO

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TODA

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¿Anula el resumen de la Ley (Mateo, 22: 37-40)

toda la Ley?

JESÚS Y LA LEY

Tanto el apóstol Pablo como Santiago, reconocieron varios de los diez mandamientos como de obligado cumplimiento para el creyente que ama a su prójimo.

“No debáis a nadie nada, sino el amaros unos a otros; porque el que ama al prójimo, ha cumplido la ley. Porque: No adulterarás, no matarás, no hurtarás, no dirás falso testimonio, no codiciarás, y cualquier otro mandamiento, en esta sentencia se resume: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. El amor no hace mal al prójimo; así que el cumplimiento de la ley es el amor” (Romanos, 13: 8-10)

“Si en verdad cumplís la ley real, conforme a la Escritura: Amarás a tu prójimo como a ti mismo, bien hacéis… Porque cualquiera que guardare toda la ley, pero ofendiere en un punto, se hace culpable de todos. Porque el que dijo: No cometerás adulterio, también ha dicho: No matarás. Ahora bien, si no cometes adulterio, pero matas, ya te has hecho transgresor de la ley” (Santiago, 2: 8, 10-11)

LA LEY DESPUÉS DE JESÚS

LA LEY DESPUÉS DE JESÚS

En la Biblia, la Ley y el amor están íntimamente relacionados.

“En esto conocemos que amamos a los hijos de Dios, cuando amamos a Dios, y guardamos sus mandamientos. Pues este es el amor a Dios, que guardemos sus mandamientos; y sus mandamientos no son gravosos” (1ª de Juan, 5: 2-3)

En un sentido, se podría alegar que el amor trasciende la Ley, que alguien que realmente ama a Dios y a los otros revela los principios últimos de la Ley. Pero esto no es una excusa para negar la Ley. Por el contrario, el amor cumple la Ley; es la Ley expresada en su forma más pura.