Sermones #MisionCaleb 2016

3UNIÓN PERUANA DEL SUR

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IMPRESO EN EL PERÚPRINTED IN PERU

Contenido

5UNIÓN PERUANA DEL SUR

GEDEONUna Victoria INCOMUN

JUECES 6:11-14

INTRODUCCIÓN:

Cuantas veces hemos vivido una vida de derrotas y fracasos, sin haber saboreado una victoria?

I. HIJOS DE ISRAEL HACEN LO MALO ANTE LOS OJOS DE JEHOVÁ

Habían culminado 40 años de paz y tranquilidad en el Pueblo de Israel y nuevamente el Pueblo de Israel hace lo malo ante los ojos de Jehová y esta vez Jehová los entrego en manos de Madián por 7 años. Era tanto la opresión de Madián sobre el pueblo de Israel que esto los llevo a construir cuevas en los montes y cavernas y lugares fuertes donde esconderse.

Separarse de Dios trae consecuencias terribles:

1. El pecado nos hace esclavos.2. El pecado solo nos lleva al fracaso.3. El pecado te separa de Dios, hasta el punto de esconderte de su presencia.

Imagínese Ud. un pueblo cuyos antepasados alguna vez habían visto la mano poderosa de Dios para sacarlos de Egipto, habían visto las maravillas que Jehová hizo por ellos en el desierto, así como las murallas de Jericó caer en pedazos, ahora vivían atemorizados y escondiéndose en cuevas como ermitaños.

Los Madianitas estaban dispuestos a destruir todo lo que encontraran a su paso, incluyen-do siembras y ganado. Dice enfáticamente los Vers. 5 y 6 que los Madianitas venían para empobrecer la tierra y eran grande multitud como langostas.

Déjenme decirles apreciados jóvenes que esta es una clara representación de lo que Sata-nás quiere hacer con el Pueblo de Dios y en especial con los jóvenes de la Iglesia. El diablo se instaló en este mundo para robar, matar y destruir.

6 UNIÓN PERUANA DEL SUR6 7SERMONES CALEB 7.0 UNIÓN PERUANA DEL SUR

II. DIOS LLAMA A GEDEÓN VARÓN ESFORZADO Y VALIENTE.

Gedeón. estaba sacudiendo el trigo en el lagar y estoy seguro que muchos de nosotros sabemos que el trigo no se sacude en el lagar ya que eso demandaría mucho esfuerzo. El lagar servía para vendimiar (pisar las uvas) no para sacudir el trigo.

Permítanme hacer una pregunta entonces. ¿Qué hacia Gedeón en el lagar sacudiendo el trigo? Pues la respuesta es clara, estaba trabajando aun sabiendo que si los madianitas lo encontraban seguramente le quitaban la vida.

Déjame decirte con todo respeto que el Señor no utiliza a los ociosos. El Señor utiliza a aque-llos que son esforzados al igual que Gedeón. Aquellos que tienen disposición de corazón para servirle y no a conformarse. Cada vez que el Señor llamo a un hombre o a una mujer para que le sirvan, generalmente ellos estaban haciendo algún tipo de trabajo. Cuando Jehová llamo a Moisés el estaba cuidando las ovejas de su suegro Jetro, cuando el Señor llamo a David, David estaba cuidando las ovejas de su Padre Isaí, cuando el Señor llamo a Eliseo este estaba arando el campo. Muchos de nosotros queremos que el Señor nos utilice en su obra y tenemos la disposición de corazón para servirle; sin embargo, muchas veces las situaciones adversas, la duda y el miedo entra en nuestros corazones y preferimos abandonar todo. El Señor llama varón esforzado y valiente a Gedeón, porque a pesar de la situación que estaba pasando junto al pueblo de Israel, el seguía trabajando y esforzándose.

Ilustración: Si tu tuvieras un banco que acreditara a tu cuenta cada mañana con $86,400 soles con la condición de usarlo en el día, y lo que no usaste cancelarla por la noche, qué harías? ¡Sacarías cada sol y lo pondrías a trabajar?

Pues, tu tienes un banco así y se llama TIEMPO. Cada mañana te acredita con 86,400 segundos. Cada noche registra como perdida cualquier cantidad de él lo que fallaste en invertir a un buen propósito. No añade ningún saldo del restante del día anterior. Cada día abre una nueva cuenta contigo. Si fallas en usar el depósito de ese día, es tu pérdida. Los valientes como Gedeón entienden el valor del tiempo, los cobardes y falta de fe de mu-chos, les obligaba a esconderse.

III. JEHOVÁ ESTA CONTIGO La respuesta de Gedeón fue:

Ah, señor mío, si Jehová está con nosotros, ¿por qué nos ha sobrevenido todo esto? ¿Y dónde están todas sus maravillas, que nuestros padres nos han contado, diciendo: ¿No nos sacó Jehová de Egipto? Y ahora Jehová nos ha desamparado, y nos ha entregado en mano de los madianitas.

Apreciado joven déjame decirte que todo sucede con un propósito. No es que Dios se aleja de nosotros, sino nosotros nos alejamos de Él.

Dios quiere darte la victoria V. 14Gedeón cuestionó dónde estaba Dios cuando sucedieron todas esas calamidades. No obs-tante, no era que Dios no estaba con ellos, SINO QUE ELLOS no estaban con Dios. Como respuesta a la pregunta de Gedeón, Dios le dijo que avanzara, asegurándole que él sería el que libraría a Israel.

“¿No te envío yo?” le dijo. Fue Dios quien lo envió. Esa no fue una misión que Gedeón ha-bía tomado por sí mismo, estaba ahí en el trigo trabajando. Lo más probable, es que nunca haya pensado que él iba a ser el que libertara a Israel de los Madianitas. Sin embargo, podemos decir con seguridad que de lo que le dijo el ángel le daba muchas razones para pensar seriamente en esa propuesta.

IV. SI DIOS TE MANADA HACER ALGO ES PORQUE QUIERE MOSTRARTE COSAS GRANDES.

Gedeón no estaba convencido de que Dios lo usaría para librar a los Israelitas de las manos de los Madianitas. En sus manos no estaban ser un hombre de valor y prominencia, él necesitaba trabajar en su confianza en Dios:

“Entonces le respondió: Ah, señor mío, ¿con qué salvaré yo a Israel? He aquí que mi familia es pobre en Manasés, y yo el menor en la casa de mi padre. Jehová le dijo: Ciertamente yo estaré contigo, y derrotarás a los ma-dianitas como a un solo hombre.”

Aunque él en la realidad no era un cobarde, se consideraba débil por ser el menor de sus hermanos. Una cosa es sentirse pequeño, otra es ser cobarde. Dios empezó a trabajar a través de él para convertirlo en un hombre de valor y fe. La historia ya la conocemos.

Él fue guiado por Dios y después destruyó el inmenso ejército de los Madianitas con sólo tres-cientos hombres como todo un hombre poderoso de valor. Como con Gedeón, la manera en que nosotros vemos las cosas puede ser totalmente diferente de la manera en que Dios las ve.

Cuando creas que no puedes ganar la victoria es cuando más fe precisas. (Jueces 7: 2-7)

V. SI DAS EL PASO LA VICTORIA ES TUYA.

La gente sigue fácilmente a alguien que conocen bien como líder, por ejemplo un rey, un general etc. ¿Pero Gedeón? ¿Quién lo seguiría? Era un completo desconocido. No obstan-te, una vez más Dios le aseguró que Él estaría con él.


“Ciertamente yo estaré contigo” y derrotarás a los madianitas como a un solo hombre”, le dijo. Por eso Gedeón no tenía motivos para tener miedo. Sin embargo, a veces Dios prome-te algo que como es extremadamente bueno nosotros tardamos en creerlo. Nos pregun-tamos “¿en verdad pasará eso tan maravilloso”? “¿de verdad Dios me lo concederá?” Ese tipo de pensamientos también tenía Gedeón. Sin embargo Dios le demostró lo contrario. CONCLUSIÓN:

1. Si te pide que hagas algo aunque suene loco es con un fin V.122. No desmayes se fiel y deposita tu fe en Señor 13.3. Dios te llamo a vivir en victoria 14.4. Cuando Dios te manda hacer algo Él siempre estará contigo V.14

LLAMADO:

El burgomaestro Guericke construyó un barómetro gigantesco con un tubo de treinta pies de altura, parte del cual sobresalía por encima de su casa en Madeburgo - Alemania.

El índice del barómetro era la figura de un hombre que en tiempo bueno, aparecía sobre el techo; pero cuando se avecinaba una tormenta, se metía cuidadosamente en la casa en busca de seguridad y abrigo. ¡Cuántas personas tienen la actitud de este barómetro! Cuan-do el sol brilla y la brisa acaricia suavemente el paisaje, ¡cuán erguidos y valientes parecen! Pero apenas se juntaron las nubes, y se deja oir el trueno, ¡cómo desaparecen sus cabezas!

Tú y yo podemos tener una vida llena de victorias. Dios nos ha dado Su Palabra y las mani-festaciones del espíritu para darnos a conocer Su voluntad. Si ahora necesitamos ayuda en el camino, deberíamos estar seguros que tendremos Su auxilio. No sé que tipo de ayuda será, lo que sí sé, es que cualquiera que ésta sea, será suficiente para apoyarnos todo el camino exactamente así como también lo fue para Gedeón.

ORACIÓN

JABESUn nombre INCOMUN

Y Jabes fue más ilustre que sus hermanos, al cual su madre llamo Jabes, diciendo: Por cuanto lo di a luz en dolor.

E invocó Jabes al Dios de Israel, diciendo! Oh, sí me dieras bendición, y ensancharas mi

territorio, y si tu mano estuviera conmigo, y me libraras de mal, para que no me dañe! Y le otorgo Dios lo que pidió. (1Cro.4:9,10)

INTRODUCCION:

En estos dos versículos que son unos de los más singulares que existen en toda la Biblia, Jabes es un nombre que casi nadie conoce y su nombre se encuentra en este primer libro de las crónicas entre otros nombres que la mayor parte de nosotros tam-poco conocemos.

No se mencionada nada acerca de él, es decir a que se dedicaba, si tenía familia o alguna obra que haya hecho excepto la oración que el hizo.

Apreciados jóvenes, necesitamos tener algunas cosas claras en nuestra vida cristiana, y es que todos nosotros estamos siendo preparados para una misión. Puede que Dios te esté preparando para una misión de una semana o de un año y para toda tu vida. Sin importar cuanto tiempo te estés preparando, o cuánto tiempo dure tu misión, lo importante es que formes parte de ella.

Ejemplos: 1. Juan el bautista fue preparado 30 años para un ministerio de 6 meses.2. Moisés fue preparado 40 años en el desierto para 40 años de ministerio.3. Cristo fue preparado 30 años para un ministerio de 3 años y medio.

Ninguno de nosotros sabemos cuándo es que Dios nos dará la oportunidad de servirlo, pero lo que sí sabemos es que debemos estar preparados para cuando ese momento lle-gue y es por eso que hoy estas aca… COMO UN CALEB


En la biblia hay personajes que ocupan capítulos enteros para relatar su vida, sin embargo hay personajes que ocupan solo dos versículos como es la vida de Jabes.

No importa cuánto dura la vida, ni cuán rápido pasa. Lo trascendente es lo que hacemos con ella.

Anónimo

En medio de una interminable lista genealógica del Reino del Sur, la Tribu de Judá, pode-mos observar en los versículos 9 y 10 lo que podríamos llamar una plaqueta de bronce, como las que se usan habitualmente en los monumentos históricos y/o de personajes célebres. Elevando al título de ilustre a este desconocido personaje. Podemos decir, sin temor a equivocarnos, que Jabes fue un personaje especial para el Señor. Por ello fue que quedó plasmada su oración en la Biblia.

Y, aunque te sorprenda lo que te voy a decir, tu podrás pasar de ser un desconocido a ser un ilustre personaje, así como Jabes, ser acreedor de todas las bendiciones de nuestro amado Padre Celestial.

Ven, te invito que juntos analicemos y descubramos, a través de la Palabra de Dios, esta maravillosa bendición que Dios premio a Jabes y si tú la pones por obra TU VIDA NUNCA MAS SERA IGUAL porque...”Dios... es galardonador de los que le buscan.” Hebreos 11:6

DESARROLLO: 1. JABES ERA MÁS ILUSTRE QUE SUS HERMANOS:

La palabra ilustre en el original hebreo significa: destacado, prominente. Según el dicciona-rio de la lengua Española podemos encontrar, al menos tres definiciones de

ILUSTRE. 1-De distinguido origen 2-Personaje celebre, insigne 3-Titulo de dignidad Tú puedes llegar a ser el mejor en lo que tú quieres pero ten cuidado con tus motivaciones.

Dice la Palabra de Dios que Jabes fue más ILUSTRE que sus HERMANOS. Ahora tú tienes la oportunidad en la escuela, en la universidad, en tu casa, en la iglesia de ser más destacado, más prominente que los demás hasta donde tu decidas serlo, pero no se trata de ser más destaca-

dos o prominentes en el aspecto de estatus o posición social, sino que Dios está queriendo de-cir que Jabes era más destacado y prominente que sus hermanos en el aspecto espiritual Ante los ojos de nuestro amado Padre Celestial él fue diferente que sus hermanos, él fue especial. Viniendo esto de parte del Señor solo podemos exclamar, de todo cora-zón Amen.

Aunque nosotros como cristianos no debemos desear grandezas o preocuparnos por ob-tener riquezas, poder o algún reconocimiento público, si debemos anhelar superarnos interiormente y espiritualmente. Si tú quieres mantener tu vida cristiana mediocre es tu decisión. Jabes no pertenecía al montón

PARA MEDITAR:

“No nos es válido anhelar grandezas para satisfacer nuestro ego, pero si no es válido anhelar superarnos para la gloria de Dios”

Winston Churchill

2. SU MADRE LO LLAMO JABES: Jabes es un nombre hebreo es ôtseb = dolor. De acuerdo a la tradición hebrea los nom-bres impuestos a los hijos, a unos días de nacer, eran nombres proféticos, profetizaban el destino de su vida.

Podemos encontrar innumerables ejemplos en la Biblia de personajes con nombres profé-ticos que se cumplió dicha profecía.

1. Jacob = El que arrebata, usurpador 2. Salomón =Pacifico, el que traerá paz 3. Abraham =Padre de muchas gentes 4. Y así podemos citar muchos ejemplos más.

Sobre Jabes pesaba una maldición, un destino no muy bueno.

Los días de su vida serian de DOLOR Y SUFRIMIENTO Ante los ojos de los hombres, pero para Dios el sería más distinguido que sus hermanos.

Este personaje de una u otra manera está ligado al dolor, sin embargo aunque sufrió mu-cho y su nombre estaba ligado al dolor, Jabes cuya historia solo ocupa dos versículos en la Biblia, fue un hombre que se superó y fue más prominente que sus hermanos, esto implica que no se amargo por las cosas que el sufrió


Cuántas veces hemos visto nosotros a través de la Biblia, y de nuestras experiencia diaria que el sufrimiento ha sido el instrumento que Dios utiliza para hacernos más útiles. “A la mujer dijo: multiplicaré en gran manera los dolores de tus embarazo; con dolor darás a luz a tus hijos;...” Génesis 3:16 A causa de la desobediencia del padre de la raza humana, Adán, se produjo la separación del hom-bre de Dios. Y como consecuencia directa del pecado dice que la mujer daría a luz con dolores. Los dolores que sufrió la madre de Jabes fueron la consecuencia directa de esa separación y por ende daría a luz con dolor.

ILUSTRACIÓN:

Napoleón decía: “en cada batalla hay un momento de diez a quince minutos solamente, cuando se decide la derrota o la victoria. Saber aprovechar el instante critico será la gloria y no la vergüenza”

Así también, en la batalla de la vida, una recta y pronta decisión determinara nuestro destino; la victoria o la derrota

Si tu que estas escuchando estas pasando por sufrimientos o dolor en tu vida.

Si la soledad, angustia, depresión, frustración o fracaso, están atacando tu vida, si estas pasando por prueba de enfermedad,..

Si tu vida esta desordenada y vacía. Te invito a seguir estos sencillos pasos de fe, que lo elevaron a Jabes a ser alguien especial, distinguido… 1 Paso:(V. 10) “... E invoco Jabes al Dios de Israel...” Romanos 10:13 “ porque todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo.”

En esta vida en la que vivimos una persona es conocido por que hace y no por lo que es”. Sin embargo a Dios le importa más lo que tu eres que lo que tú haces.

No importa cuánto hagas, si tu carácter esta lejos de ser un espejo de honestidad en todo lo que haces. Era necesario que Jabes invocara el nombre del Señor para romper ese destino de mal-dición, así como es necesario que invoques el nombre de Nuestro Señor Jesucristo para sepultar esa vida pasada y comenzar a vivir las promesas de bendición a tu vida.

Juan 6:47 “ de cierto, de cierto os digo: El que cree en mi, tiene vida eterna.” 2 Paso:(V. 10)! Oh, si me dieras bendición,...” Jabes no pidió por algo en especifico, no realizo una lista de necesidades, no impuso sus necesidades ante el altar. Solo manifestó su deseo de hallar gracia ante el Señor, no ejerciendo su voluntad sino que dejó su vida en manos del Señor.

Nuestro Padre Celestial conoce todas nuestras necesidades, y cuando él viene a nuestra vida, cuando le damos el control de ella él nos bendecirá en todo lo que necesitamos. Romanos 12:1 “así que, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vues-tros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional.” 3 Paso: (V. 10)...” y ensancharas mi territorio,...” leemos en Éxodo 34:24 “ Porque yo arrojare las naciones de tu presencia, y ensanchare tu territorio; y ninguno codi-ciara tu tierra, cuando subas para presentarte delante de Jehová tu Dios tres veces en el año.”

Jabes confeso y se apodero de esta promesa de Dios. Su territorio seria ensanchado, librado de enemigos, y de celos y envidia con la condición que consagrara su vida al Señor. Jabes estaba estableciendo un pacto con Dios. Creyendo y sabiendo que “... Él es fiel a su Palabra...” Comenzaras a caminar en otra dimensión. La dimensión de lo sobrenatural. Jabes Hizo un pacto con Dios y se consagro a Él.

4. Paso:(v 10)”... y si tu mano estuviera conmigo...”

Leemos en Isaías 49:10 “No tendrán hambre ni sed, ni el calor ni el sol los afligirá; porque el que tiene de ellos misericordia los guiara, y los conducirá a manantiales de aguas.”


Solo la mano poderosa de Jesús nos conducirá a manantiales de agua de vida. ( v 10) “...”y me libraras del mal, para que no me dañe!...”

Cuando viene la bendición de Dios a nuestras vidas no significa que no vendrán pruebas o circunstancias, ellas de cierto vendrán y con la protección del Señor no nos harán daño.

Aquí concluyo la oración de Jabes, RESULTADO: V 10 “Y le otorgo Dios lo que le pidió.”

ILUSTRACIÓN:

Un obispo, de la costa oriental de los Estados Unidos, hace muchos años visitó a una pe-queña universidad religiosa. Se alojó en casa del presidente de la universidad, que también fungía como catedrático de física y química. Después de la cena, el obispo dijo que el mi-lenio no podía estar lejos porque todo sobre la naturaleza había sido descubierto y todos los inventos habían sido concebidos.

El presidente de la universidad le manifestó cortésmente su desacuerdo y le dijo que él creía que habría más descubrimientos. Cuando el obispo, retó al presidente para que nom-brara siquiera uno de tales inventos, el presidente replicó que estaba seguro de que dentro de cincuenta años los hombres podrían volar.

“¡Absurdo!”, respondió el obispo. “Sólo los ángeles fueron creados para volar”.El nombre del obispo era Wright, y tenía dos hijos que demostrarían tener una visión más amplia que la de su padre. Sus nombres eran Orville y Wilbur.

El padre y sus hijos vivían bajo el mismo cielo, pero no tenían el mismo horizonte.Podemos vivir bajo el mismo techo, inclusive tener desventajas uno del otro, pero nunca pienses que las desventajas son limitaciones para Dios. Puedes alcanzar el cielo de bendi-ciones en tu vida, siempre que estés dispuesto a dejar de mirar las limitaciones que tienes aquí en la tierra. Da el paso para que Dios sea el que ensanche, guie y dirija tu vida.

Vamos a orar.

EL LLAMADO DE JEREMÍASDe tímido a INCOMUN

Jeremías 1: 4-7

Enfoque Principal: Lograr que cada oyente en especial los jóvenes, al igual que Jeremías Decida aceptar el llamado que Dios le hace.

INTRODUCCION

Jeremías llegó a la adolescencia en esa atmósfera de tensión internacional entre de las dos potencias mundiales, Egipto y Babilonia y declinación religiosa. Su llamado fue en la primera mitad de la década de sus 20 años entre los reinados de Manasés y Amón.

Cita: “En el joven Jeremías, Dios veía alguien que sería fiel a su cometido, y que se destacaría a favor de lo recto contra gran oposición...” PR, 299.

Jeremías fue elegido, consagrado y enviado a ser un profeta ante las naciones. La vocación no había sido suya por elección humana, sino por orden directa de Dios.

Encontramos la intimidad que puede existir entre Dios y los hombres.

Ilustración: Cuando era estudiante conoci a una persona que habia quedado sorda. Mien-tras su esposa leia su charla para nosotros, un estudiante se atrevió a preguntarle. Que era lo peor de ser sordo. El escribió para que su esposa nos leyera: “Tener oidos y no escuchar

Jeremias podia haber rehusado oir, más como respondió a la invitación?

Texto: Jeremías 1: 5

I. LA RESPUESTA DE JEREMÍAS A menudo Jeremías ha sido considerado como el profeta llorón. Jeremías por su natu-raleza era tímido e introvertido. Su reacción natural fue protestar, aunque sus palabras


solo revelan la humildad de su mente, sus sentimientos de indignidad y el conocimiento de sus limitaciones. Jeremías alega ser demasiado joven, con el propósito de huir a una acción contraria a la tranquila vida familiar. Su alegato de que es un niño o muy joven se refiere a la falta de habilidades para hablar (al igual que Moisés en Ex 4:10-16) y refleja cierto temor.

“La insuficiencia y la experiencia humana brinda la ocasión para la capacitación divina”.

• Jeremías no podía elegir a su auditorio. Debía ir a donde Dios le mandara.• Tampoco podía elegir su mensaje. Debía declarar lo que Jehová le mandara.• Predico más de 40 años en Jerusalén.

Cita: “...En un tiempo de apostasía si igual, iba a representar en su vida y carácter el culto del único Dios verdadero...” PR 300.

• El hizo un llamado al pueblo de Israel a renovar el pacto que había descuidado por mucho tiempo.

• Más de una vez debió el profeta considerar fracasada su misión.• Maldijo como Job el día en que nació (Jer 15: 10; 20: 14).• A pesar de las circunstancias tan desesperantes, Jeremías tenía la convicción de que

la vida puede ser trasformada por medio de la presencia de Dios.• De acuerdo a lo que sabemos de Jeremías, el nunca escapo de la crisis. El siguió sien-

do un testigo audaz de Dios en medio de ellos.• La misión profética es como el fuego ardiente, en su interior que no puede apagarlo

(Jer 20: 9).• Fue el varón de dolores por excelencia, por ser el mas perseguido de los profetas.

ILUSTRACIÓN:

PARABOLA DE LA PIEDRA: El hombre hizo lo que el Señor le pidió, día tras día. Por muchos años, desde que salía el sol hasta el ocaso, el hombre empujaba la fría pie-dra con todas sus fuerzas... y esta no se movía. Todas las noches el hombre regre-saba a su cabaña muy cansado y sintiendo que todos sus esfuerzos eran en vano. Satanás decidió entrar en el juego trayendo pensamientos a la mente del hombre: “Has estado empujando esa roca por mucho tiempo, y no se ha movido”. Le dijo que la tarea que le había sido encomendada era imposible de realizar y que él era un fracaso. Estos pensamientos incrementaron su sentimiento de frustración y desilusión. Satanás le dijo: “¿Por qué esforzarte todo el día en esta tarea imposible? Solo haz un míni-mo esfuerzo y será suficiente”.

El hombre pensó en poner en práctica esto, pero antes decidió elevar una oración al Señor y confesarle sus sentimientos: “Señor, he trabajado duro por mucho tiempo a tu servicio. He empleado toda mi fuerza para conseguir lo que me pediste, pero aún así, no he podido mover la roca ni un milímetro. ¿Qué pasa? ¿Por qué he fracasado? El Señor le respondió: “Querido hijo, cuando te pedí que me sirvieras y tú aceptaste, te dije que tu tarea era empujar la roca con todas tus fuerzas, y lo has hecho. Nunca dije que esperaba que la movieras. Tu tarea era empujar. Ahora vienes a mí sin fuerzas a decirme que has fracasado, pero ¿en realidad fraca-saste? Mírate ahora, tus brazos están fuertes y musculosos, tu espalda fuerte y bron-ceada, tus manos callosas por la constante presión, tus piernas se han vuelto duras. Algunas veces, cuando escuchamos la palabra del Señor, tratamos de utilizar nuestro in-telecto para descifrar su voluntad, cuando en realidad Dios solo nos pide obediencia y fe en Él. Cuando todo parezca ir mal... ¡solo empuja! Cuando estés agotado por el trabajo... ¡solo empuja! Cuándo la gente no se comporte de la manera que te parece que debería... ¡solo empuja! Cuando te sientas agotado y sin fuerzas... ¡solo empuja! III. DIOS PROMETE ESTAR CON ÉL

“No temas delante de ellos, porque estoy contigo para libarte”, fue la palabra de confianza que recibió Jeremías.

Dios desechó las objeciones del joven diciendo: “...Te di por profeta a las naciones...a todo lo que te envié iras tú y dirás todo lo que te mande” Dios siempre ha escogido las cosas insensatas del mundo para confundir a los sabios, y las cosas débiles para avergonzar a los fuertes; y las cosas viles y despreciadas del mundo para anonadar a los que no son; para que nadie se gloríe delante de Dios.

Cita: “Cada miembro debe ser un medio por el cual Dios pueda comunicar al mundo los tesoros de gracia, las inescrutables riquezas de Cristo...todo

el cielo está esperando a los hombre y a las mujeres por medio de los cuales pueda Dios revelar el poder del cristianismo.” HAP, 479.


Aplicación: Muchas veces nos miramos y decimos: “no puedo hacerlo, no sirvo para esto o no tengo habilidades” y tratamos de justificarnos ante alguna actividad que Dios nos manda que lo hagamos. Además a menudo encontramos a personas que dicen: “no, aún no; no estoy preparado, etc.”

En esta semana a través de algunos personajes que encontramos en la Biblia nos daremos cuenta que Dios nos llamó con un propósito maravilloso y lo mejor de todo es que él pro-mete estar con nosotros en todo momento sobre todo en los momentos tan difíciles y tan alarmantes de nuestra vida.

CONCLUSION

Ilustración: Cierto trapecista explicaba como ejecutaba el triple salto mortal: “para to-marse del trapecio en el momento preciso es necesario calcular el tiempo a la perfección. Esto requiere mucha práctica. El secreto siguió diciendo… consiste en lanzar el corazón a la barra. Cuando se hace esto, el cuerpo le sigue detrás”

Lo mismo ocurre en nuestras vidas: cuando entregamos el corazón a la voluntad de Dios, el resto de la vida le sigue automáticamente. El pensamiento, las intenciones, las palabras, y el comportamiento general acompañan a la entrega del corazón. Se produce entonces la nueva vida o el nuevo nacimiento del cristiano.

LLAMADO:

Salir de la timidez para transformarte en incomún tiene un punto de partida “La Palabra de Dios llegó a mí”.

Dios quería estar cerca de Jeremías así como también hoy contigo.

El te hace la invitación,?Quieres salir de tu timidez para transformarte en incomun?

Vamos a orar.

SAMUELEs INCOMUN ser Fiel a Dios en Tiempos Malos.

“Quien aprende a servir en su vida, servirá en mejor medida a Dios”.

Texto 1Sam. 3:1-10

INTRODUCCIÓN:

El sacerdote Elí tenía dos hijos Ofni y Finees, los cuales ofendían con su conducta indecente a Dios y a la familia del sacerdote (2:12-17). Elí consentía a sus hijos rebeldes; les llamaba suavemente la atención acerca de sus excesos, tal vez por eso ellos continuaban así (2:22-25).

Tuvo que venir un enviado de Dios diferente de Elí, para que dijera a éste todas sus faltas y lo que éstas le acarrearían, pues Elí había honrado más a sus hijos que a Dios (2:29);

El contexto para el llamado de Samuel es que Elí no estaba haciendo lo correcto (1 Sam.2:27-34). Dios le anuncia que levantaría un sacerdote fiel (2:35).

“Si tú no haces tu trabajo, alguien mas lo hará por ti”

Aunque la nación y los que ejercían la vida espiritual se había corrompido, aquel joven, Samuel, aprendió a conocer la voz de Dios en su juventud, y anduvo irreprensiblemente en toda su vida, al punto de llegar a ser un pionero espiritual. Él fundó el linaje de profetas que irían a convertirse en la única voz verdadera de Dios para la nación.

Por 300 años, el pueblo no escuchó nada o casi nada de parte de Dios.

En medio de todo, Dios toma la iniciativa, y se comunicó personalmente, con un joven llamado Samuel. Las escrituras registraron que en la época de los Jueces: “cada uno hacia lo que creía mas recto”(Jue. 21:25)

Durante esos períodos, prevalecían la anarquía, la iniquidad e inmoralidad de toda espe-


cie. Eran períodos violentos de transición en toda la nación. Condiciones que producían fácilmente a los hombres más malignos. Sin embargo, de esa era confusa y degenerada, emergió Samuel, hombre íntegro, que anduvo delante del Señor como Su profeta. La vida de Samuel nos deja lecciones para nuestras vidas:

I. CUANDO DIOS LLAMA, DIOS TOMA LA INICIATIVA.

Dios es quien llama. El sabe lo que quiere de nosotros. Nos llama no necesariamente por-que nos necesita, sino porque quiere compartir con nosotros Su obra más grande

Uno de los significados de la palabra “llamó” es “dirigirse a alguien por nombre”. Y dirigirse a alguien por nombre implica que uno conoce a esa persona. Tal vez Samuel no conocía a Dios; pero Dios le conocía a él. Anhelaba una relación personal con aquel joven y usarle en gran manera. Desde antes de nacer, le había destinado para Su servicio.

Apreciado joven quiero decirte que cuando Dios llama, Dios toma la iniciativa, El hecho de tenerte hoy aquí es muestra de eso. Déjame decirte que estas en el lugar correcto. Ahora solo tienes que oír la voz de aquel que dio su vida por ti.

II. CUANDO DIOS LLAMA, ESPERA QUE RESPONDAMOS FIELMENTE.

La respuesta de Samuel era típica del siervo que escucha y obedece el plan de Dios. (Gén. 22:1; Ex. 3:4; Isa. 6:8)

La respuesta de Abraham, Moisés, Isaías y Samuel se traduce en obediencia e fe y eso marcó para siempre la vida de ellos. La misma respuesta es la que Dios espera de ti y de mí.

Una de las grandes verdades para nuestras vidas, es que no podemos seguir a Dios y que-darnos donde estamos. Necesitamos hacer ajustes en nuestra vida, para poder hacer lo que Dios quiere que hagamos. La obediencia nos va a costar a nosotros, y también a aque-llos que están a nuestro alrededor.

III. CUANDO DIOS LLAMA, DIOS CONTINÚA LLAMANDO HASTA QUE RESPONDAMOS.

Dios no llamó a Samuel una vez, sino 4. Persistió llamándole, hasta que respondió. Que-ría hacer tantas cosas en y a través suyo, que no le dejo quieto. Finalmente, aquel joven con gran potencial, respondió. Era de noche, todos estaban durmiendo, y Jehová llama a Samuel por primera vez. Samuel responde “Heme aquí,” pensando que era Elí quien lo llamaba. Esto sucede tres veces. A la tercera, Elí reconoce que era Dios quien lo llamaba, e instruye a Samuel como responder.

El (v. 10) es hermoso. Dice que “Jehová vino, se paró allí y lo llamó como las otras veces. ‘¡Samuel! ¡Samuel!’” El respondió “Habla porque tu siervo oye.”

CONCLUSIÓN:

Seguramente el sacerdote Elí pensó que había llegado la hora de ser sustituido; por lo menos se dio cuenta de ello y es algo bueno. Quizá muchos hoy no estén cumpliendo el trabajo que les ha sido encomendado, (como el sacerdote Elí), llegara el momento en que deben ser sustituido. ¡Qué importante para la causa del evangelio es que cada uno de nosotros entendamos esto, para nunca ser un obstáculo!

Después que Elí comprendió todo esto, dio las instrucciones a Samuel, para que, cuando Dios volviese a llamarlo, respondiese de inmediato.

Así como Samuel, un siervo de Dios no puede ni debe poner objeciones al llamado de Él, sino que debe estar dispuesto a obedecerle y seguirle sin importar el costo. Si Dios le llama a usted, no ponga objeciones ni pregunte por qué, sino diga “heme aquí” “¿para qué me quieres?”

Preguntar “¿para qué me llamaste?”, como lo hizo Samuel a Elí (creyendo que era él quien hablaba), nos recuerda que siempre es mejor responder ¿para qué? que decir ¿por qué?, pues una actitud correcta generará una respuesta correcta.

ILUSTRACIÓN:

Un joven había estado en el estudio bíblico del miércoles a la noche. El pastor había ha-blado de escuchar y obedecer la voz del Señor. El joven no pudo evitar pensar, ¿Será que aun Dios habla con la gente hoy? Ya eran las 10 de la noche cuando el joven emprendió el regreso hacia su casa.

Sentado en el auto comenzó a orar: “Dios, si todavía hablas con la gente... por favor há-blame a mí. Yo te voy a escuchar. Voy a hacer todo lo que pueda por obedecerte.” Mien-tras manejaba por la calle principal de su ciudad, tuvo un pensamiento extraño: parar y comprar un litro de leche. Sacudió la cabeza y dijo en voz alta “¿Dios, eres tu?” Como no obtuvo respuesta, siguió camino hacia su casa. Pero, nuevamente el pensamiento: “com-pra un litro de leche”.

El joven recordó como el pequeño Samuel no reconocía la voz del Señor y acudía a pedirle ayuda a Elí. “Esta bien, Dios, en caso de que seas Tú, voy a comprar la leche.” No parecía una prueba muy difícil de obediencia. La leche siempre es útil. Se detuvo, compró el litro de leche y siguió camino hacia su casa. Cuando estaba por pasar la calle 7, sintió de nuevo


el impulso, “Dobla en esta esquina.” “Esto es una locura”, pensó y pasó de largo la inter-sección. De nuevo, tuvo la sensación de que debía haber doblado en la calle 7. Así que en la siguiente intersección dobló y volvió hacia la calle 7. Medio en broma dijo en voz alta, “ OK Dios, así lo haré “.Anduvo por varias cuadras, cuando de repente sintió que tenía que parar. Estacionó y miró a su alrededor. Estaba en una zona semi comercial de la ciudad. Los negocios estaban cerrados y la mayoría de las casas estaban oscuras, como si sus habitantes ya se hubieran ido a dormir. Otra vez sintió algo, “Anda y dale la leche a la gente de la casa de enfrente. El joven miró la casa. Estaba oscura y daba la impresión de que la gente se había ido o estaba durmiendo. Empezó a abrir la puerta y se volvió a sentar en el auto. “Dios, esto es una locura. Esa gente debe de estar durmiendo y si los despierto se van a enojar y yo voy a quedar como un estúpido”

Nuevamente sintió que debía ir y darles la leche. Finalmente, abrió la puerta del auto y dijo “Está bien, Dios, si eres tu, voy a ir y les voy a dar la leche. Si quieres que quede como un loco, está bien. Quiero ser obediente. Supongo que eso servirá de algo pero si no me contestan rápido, me voy.” Cruzó la calle y tocó el timbre.

Se escuchaban ruidos que venían desde adentro. Un hombre gritó: “¿Quiénes? ¿Qué quie-re?” Y la puerta se abrió antes de que el joven pudiera salir disparando. El hombre que abrió tenía jeans y una remera. Qué quiere?” le preguntó. El joven sacó la botella de leche y dijo, “Aquí tiene, esto es para usted.” El hombre tomó la leche y corrió por el pasillo hacia adentro. Luego vio pasar a una mujer llevando la leche a la cocina. El hombre la seguía cargando un bebé en brazos. El bebé lloraba. El hombre tenía los ojos llenos de lágrimas y le dijo casi llorando: “Estábamos orando. Tuvimos que pagar muchas cuentas este mes y nos quedamos sin dinero. No teníamos leche para nuestro bebé . Le estábamos pidiendo a Dios que nos muestre como conseguir leche”. La esposa desde la cocina gritó: “Le pedimos que mandara a un ángel con un poco de leche. ¿Es usted un ángel?

El joven dio media vuelta y volvió a su auto mientras las lágrimas corrían por su rostro.

LLAMADO:

Hoy Dios sigue llamando a muchos (y ha algunos en digital ); Él habla al corazón del hom-bre de muchas maneras: En la oración, en la reunión de la iglesia, en la predicación, en una plática con otra persona y a través de muchas circunstancias. Los que son de Dios, oyen y atienden su llamado. Dios nos ha llamado a todos para servirle. ¿Eres tu uno de esos? Si lo eres, responderás a su llamado hoy?

OREMOS.

ZAQUEOUN LLAMADO INCOMUN

Un hombre pequeño con decisiones grandes

Lucas 19:5

INTRODUCCION:

“Cuando Jesús llegó a aquel lugar, mirando hacia arriba, le vio, y le dijo: Zaqueo, date prisa, desciende, porque hoy es necesario que pose

yo en tu casa.”

Recordando la historia: Zaqueo sentía curiosidad de ver a Jesucristo, el cual estaba po-niendo el mundo al revés, este hombre que era capaz de darle vista a los ciegos, le-vantar paralíticos, sanar enfermos y en ocasiones resucitarlos, estaba causando una inmensa excitación en las mentes de los hombres. Algunas veces nos parece que la cu-riosidad no es buena, pero podemos decir que la curiosidad es un aliado de la gracia.

Zaqueo, movido por este motivo, deseaba ver a Cristo; pero dos obstáculos se interponían en el camino:

1. Había una gran muchedumbre de personas y le resultaba imposible acercarse al Salvador; 2. Era tan pequeño de estatura que no tenía la menor esperanza de poder verle por

sobre las cabezas de las otras personas.

¿Qué hizo entonces? Él hizo lo mismo que algunos muchachos estaban haciendo; pues los muchachos de esa época eran sin duda igual que los muchachos de nuestro tiempo, curiosos y juguetones que se trepaban a las ramas de árboles para mirar a aquel que des-pertaba curiosidad en ellos.

“La juventud no se mide por los años que suma, sino por la curiosidad hacia el bien que almacena”


CONTENIDO:

Aunque Zaqueo ya era un hombre mayor, se sube a un árbol y allí movido por su curiosidad se acomoda en medio de los muchachos. Mírenlo allí. Con qué ansiedad espía hacia abajo para ver quién es Cristo; pues el Salvador no poseía ninguna distinción pomposa; no llevaba en Sus manos ningún báculo de oro: no iba vestido con vestidos reales; de hecho, iba vesti-do igual que todos los que le rodeaban. Poseía una túnica igual a la de cualquier ciudadano común, hecha de una sola pieza de arriba abajo; y Zaqueo tenía dificultad en distinguirlo. Sin embargo, antes de que Zaqueo hubiera visto a Cristo, Cristo había fijado Su ojo en Zaqueo, y deteniéndose bajo el árbol, Él mira hacia arriba, y le dice: “Zaqueo, date prisa, desciende, porque hoy es necesario que pose yo en tu casa.” Al escuchar esto Zaqueo desciende rápidamente; Cristo va a su casa; Zaqueo se convierte en seguidor de Cristo. Es así como inicia nuestra vida de servicio.

Puntos importantes en el llamado de Zaqueo: 1. No importa de dónde vengas: Zaqueo pertenecía a una ciudad mala (Jericó) un lugar de donde nadie sospecharía que alguien podría salir de Jericó para el ser-vicio. Fue cerca de Jericó que aquel hombre cayó en manos de ladrones; confiamos que Zaqueo no haya participado en ese asalto; pero hay quienes, además de ser pu-blicanos, pueden ser también ladrones. Al igual que la ciudad de Jericó de aquellos días, debemos esperar conversiones de lugares donde humanamente es imposible. Nota: Apreciados jóvenes, no importa de dónde vienen, pero si hacia donde van. La gracia de Dios no hace distinciones. 2. No importa sino lo entiendes: Al rico Zaqueo se le ordena que baje del árbol; y él baja. Siempre me ha parecido una de las grandes muestras de amor de Dios que Él mire hacia abajo, a los hombres; pero les diré que hubo una mayor muestra de amor que esa, cuando Cristo miró hacia arriba para ver a Zaqueo. Que Dios se digne mirar hacia abajo a sus criaturas: eso es misericordia; pero que Cristo se humille de tal manera que tenga que mirar hacia arriba a una de Sus criaturas, eso revela una mayor misericordia aun. ¡Hay quienes se han subido al árbol de sus propias buenas obras, y se quedan en las ramas de sus santas acciones, y confían en el libre albedrío de las pobres criatu-ras, o descansan confiados en pensamientos mundanos; sin embargo, Jesucristo eleva Sus ojos para mirar aun a los orgullosos pecadores, y les dice que bajen. “Des-ciende,” dice Él, “porque hoy es necesario que pose yo en tu casa.” Si Zaqueo hu-biera sido un hombre de mente humilde, sentado junto al camino, o a los pies

de Cristo, entonces debimos haber admirado la misericordia de Cristo; pero veá-moslo en un lugar elevado, y Cristo lo mira hacia arriba, y le ordena que baje.

3. Tu llamado es personal: Estaban unos muchachos junto con Zaqueo, pero no ha-bía la menor duda acerca de la persona que fue llamada. Fue “Zaqueo, date pri-sa, desciende “Porque muchos son llamados, y pocos escogidos.” Dios no llama a Su pueblo en multitudes, sino de uno en uno. “Jesús le dijo: ¡María! Volviéndose ella, le dijo: ¡Raboni! (que quiere decir, Maestro). Jesús ve a Pedro y a Juan pescan-do en el lago y les dice: “Venid en pos de mí.” Contempla a Mateo sentado al ban-co de los tributos públicos y Él le dice: “Levántate y sígueme,” y Mateo así lo hizo. Cuando el Espíritu Santo viene a algún hombre, la flecha de Dios penetra en su corazón: no solamente pasa rozando su casco, o deja una pequeña seña en su armadura, sino que penetra por entre las junturas de su arnés y llega hasta lo más profundo del alma. 4. Tu llamado es apremiante: Zaqueo, date prisa.” Fueron las palabras del Maestro, y ante este llamado a formar parte de la gran comisión q cristo nos dejó, muchos responden de esta manera: “hoy no, tal vez mañana, por el momento no tengo tiempo, ya llegara el día etc, etc, etc.

Dicen que el camino al infierno está pavimentado con buenas intenciones. Y no podemos vivir solo de buenas intenciones, sino es ahora cuando debemos decidir y convertir esas buenas intenciones en realidad. El llamado es hoy date prisa, mañana puede ser tarde “Si oyereis hoy su voz, no endu-rezcáis vuestro corazones, como en la provocación.” La gracia de Dios siempre llega con prontitud; y si ustedes son atraídos por Dios, entonces van a correr tras Él, y no estarán hablando de esperar. El mañana no está escrito en el almanaque del tiempo. Mañana, está escrito en el calendario de Satanás, y en ninguna otra parte.

Para meditar: El mañana es una roca pintada de blanco por los huesos de los mari-neros que han naufragado en ella; es el faro de los destructores que brilla en la cos-ta, atrayendo a los pobres barcos a su destrucción. El mañana es la copa que el necio finge encontrar al pie del arco iris, pero que nadie ha podido encontrar ja-más. El mañana es un sueño. El mañana es un engaño. Mañana puede ser tarde. Aquel reloj dice: “hoy;” tu pulso susurra “hoy;” escucho hablar a mi corazón en me-dio de sus latidos, diciendo: “hoy;” todas las cosas claman “hoy;” y el Espíritu San-to se une a todas estas cosas y dice: “Si oyereis hoy su voz, no endurezcáis vuestros corazones, como en la provocación.” Queridos jóvenes, ¿sienten ahora la necesidad de buscar al Salvador? ¿Están musitando ahora una oración? ¿Están diciendo: ‘¡Aho-ra o nunca!’, debo ser salvo ahora? Si es así, entonces espero que sea un llamamien-to eficaz, pues Cristo, cuando hace un llamamiento eficaz, dice: “Zaqueo, date prisa.”


5. Tu llamado es un llamado con resultados: el llamado de Dios siempre da re-sultados, pues vemos los frutos que produjo. La puerta de Zaqueo fue abierta; su mesa fue servida; su corazón era generoso; sus manos fueron lavadas; su concien-cia fue aliviada; su alma estaba gozosa “He aquí, Señor,” dice él, “la mitad de mis bie-nes doy a los pobres; porque me atrevo a decir que la mitad de lo que tengo se lo he robado a los pobres, y ahora lo devuelvo.” “Y si en algo he defraudado a algu-no, lo devuelvo cuadruplicado.” Y Zaqueo de despoja de otra parte de sus bienes. Jesús pudo haber dicho: Zaqueo, tú te irás a la cama esta noche siendo muchísimo más pobre de como te levantaste esta mañana (pero también infinitamente más rico) pobre, muy pobre, en bienes de este mundo, comparado a lo que tenías cuando te subiste a ese sicómoro; pero más rico (infinitamente más rico) en tesoros celestiales.

Querido joven, en esto sabremos si Dios te llama: si Él llama, será un llamamiento con resultado; no un llamado que tú escuchas y que luego olvidas. Sino que es un llamado que produce buenas obras. Si Dios te ha llamado hoy, caerá al suelo tu copa llena de dudas y se elevarán tus oraciones; si Dios te ha llamado el día de hoy, todas las cor-tinas de tu tienda estarán corridas, y pondrás un letrero que dice: “Esta casa está ce-rrada los sábados, y nunca volverá a estar abierta en día del Señor.” Mañana habrá tales o cuales diversiones mundanas, pero si Dios te ha llamado, no irás. Y si has roba-do a alguien (y ¿quién sabe si no hay un ladrón los presentes?) si Dios te llama, resti-tuirás lo robado; lo abandonarás todo para poder seguir a Dios con todo tu corazón. No creemos que un hombre se haya convertido a menos que renuncie a los errores de sus caminos; a menos que, de manera práctica, llegue al conocimiento que el propio Cristo es Señor de sus pensamientos y que Su ley es su delicia. “Zaqueo, date prisa, desciende, porque hoy es necesario que pose yo en tu casa.” LECCIONES PARA NUESTRAS VIDAS:

1. LECCIÓN PARA EL ORGULLOSO: ¡Desciendan, corazones orgullosos, desciendan! La misericordia corre en los valles, pero no sube a los picos de los montañas. ¡Descien-dan, desciendan, espíritus altivos! “Porque derribó a los que moraban en lugar subli-me; humilló a la ciudad exaltada, la humilló hasta la tierra, la derribó hasta el polvo.” Y luego la construye otra vez. Además,

2. UNA LECCIÓN PARA TI, POBRE ALMA DESESPERADA: me da gusto verte en la casa de Dios el día de hoy; es una buena señal. No me importa para qué viniste. Oíste que hay un tipo extraño que predica aquí, tal vez. No te preocupes por eso. Tú eres tan extraño como él. Es necesario que haya hombres extraños para que puedan reunir a otros hombres extraños.

ILUSTRACIÓN:

Mientras que un joven caminaba por la playa al amanecer, vio que un anciano, unos pa-sos adelante, iba recogiendo de la arena estrellas de mar, que luego arrojaba al océano. Por último, al llegar hasta el anciano, el jove le preguntó por qué hacía eso. La respuesta fue: Las estrellas de mar extraviadas en la arena morirían si las dejaba allí hasta que el sol calentara la playa.

– Pero hay muchos kilómetros de playa, y hay allí millares de estrellas de mar. ¿Habrá algu-na diferencia después de ese esfuerzo tuyo?

– Objetó el joven. El anciano miró la estrella de mar que tenía en ese momento en la mano, la lanzó al mar, y replicó:

– Para esta sí habrá diferencia

LLAMADO:

Tengo aquí a un Zaqueo; allá arriba está una María, y a un Juan allá abajo, a Sara, o a Guiller-mo, o a Tomás. Ahí donde estas déjame decirte que Dios quiere hacer la diferencia contigo.

¡Ah!, pobre pecador, ven a Jesús, cree en Su amor, confía en Su misericordia. Si tú tienes el deseo de venir, si te estás abriendo paso entre tus dudas, tus miedos y tu orgullo, quizá más de uno está aquí por pura curiosidad. ¡Oh!, escuchen a Cristo mientras Él les habla. Cristo dice, “desciende,” el día de hoy. Joven querido no puedes mirar a Cristo antes de que Él te haya mirado a ti. Cristo puede estar mirándote a ti y te está diciendo: “Date prisa, desciende, porque hoy es necesario que pose en tu casa.”

ORACIÓN: Vamos a orar.


MOISESHacia una vida INCOMUN

Enfoque principal: mostrar a los jóvenes que vivir por fe y no por vista es una vida INCOMUN

Por la fe Moisés, hecho ya grande, rehusó llamarse hijo de la hija de Faraón, escogiendo antes ser maltratado con el pueblo de Dios, que gozar de los deleites temporales del pecado, teniendo por mayores riquezas el vituperio de Cristo que los tesoros de los egipcios; porque tenía puesta la mirada en el galardón. Por la fe dejó a Egipto, no temiendo la ira del rey;

porque se sostuvo como viendo al Invisible.

Hebreos 11:24-27

INTRODUCCIÓN:

El capítulo 11 de la carta a los Hebreos está considerado como el museo o la galería de los grandes hombres de la fe, porque aquí se nos describe a los más grandes hombres y mujeres de Dios. Como un ejemplo, para que nosotros los imitemos y podamos considerar que es lo que en realidad significa vivir por fe. Si realmente queremos saber cómo es la FE práctica, entonces es de vital importancia estudiar lo que se nos revela.

Hoy vamos a aprender a través del ejemplo de la vida de Moisés.

Una de las generaciones más perseguidas y más sufridas de la historia, es precisamente la generación que se menciona aquí. Los primeros años de la Iglesia cristiana sabemos noso-tros por historia que no la tuvo tan fácil. Muchos de ellos eran echados a los coliseos para ser devorados por los leones, eran quemados vivos convertidos en antorchas humanas, era una generación donde verdaderamente se requería vivir por fe.

Estos Judíos convertidos a Jesús, por eso se llama la carta a los hebreos, porque fue una carta dirigida a un grupo de Judíos que estaban siendo encarcelados, perseguidos, tortu-rados, y la mayor parte de ellos asesinados.

Precisamente esta carta a los hebreos tenía el propósito de animarlos, confortarlos, de exhortarlos y enseñarles mediante estos ejemplos de hombres y mujeres de fe.

“los buenos ejemplos son espejos para que te mires en ellos, y reprensio-nes mudas para que te corrijas”

San. Agustín

Moisés sigue siendo ejemplo de fe para nuestros días como lo fue en años ulteriores. El se da cuenta de que el único Dios verdadero es el de los hebreos, no de los egipcios; se da cuenta de que el Dios de su pueblo natal estaba con los débiles, con los pobres, con los oprimidos. Y decide ser un hombre de fe, un hombre incomun

Sin embargo Moisés sacrifica dos cosas en su vida que sólo el que quiere ser incomun lo tendrá que hacer.

“Y decía a todos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día, y sígame” (Luc. 9:23)

Negarse a sí mismo implica sacrificar todo aquello que vaya en contra de los principios divinos. Nuestros placeres, deseos y gustos carnales. Tenemos que aprender a morir inte-riormente.

Vamos a ver entonces la primera cosa que Moisés sacrifico:

I. REHUSÓ LLAMARSE HIJO DE LA HIJA DE FARAÓN

Al final de los primeros cuarenta años de edad, Moisés debió enfrentar y resolver un agudo dilema. Él era hebreo de nacimiento, pero egipcio por formación. Una mezcla bastante extraña para un hombre de Dios. Si él hubiese querido, tenía a su disposición una carrera superior a la de José en Egipto, porque tenía más derechos que José para postular a ella. Pero antes de seguir por allí, él necesitaba decidir aquel asunto previo, a qué iría a consagrar su vida, a Egipto o a Israel, al mundo o a las promesas. Lo más probable para Moisés al ser hijo de la hija de Faraón era que el llegaría a ser el próximo gobernante de Egipto, en otras palabras si el se hubiera contentado con tener una posi-ción de grandeza sobre todos los demás hombres de su época esta sería la oportunidad de su vida.

Moisés era un hombre como tú y como yo sujeto a tentaciones y con la oportunidad de tener una posición política, rango, influencia, autoridad, titulo, honores y riquezas. Sin embargo aunque todas estas cosas estaban delante de él, el los rechazo.


Cuantos hombres hoy quisieran tener lo que Moisés rechazo.

Para muchos tener fama, riquezas, influencias, autoridad es sinónimo de estatus y posi-ción, siendo así capaces de sacrificar su familia su salud y hasta su propia vida.

“Entonces Jesús, llamándolos, dijo: Sabéis que los gobernantes de las naciones se enseñorean de ellas, y los que son grandes ejercen sobre ellas

potestad. Mas entre vosotros no será así” (Mateo 20:25)

El impulso natural de una persona cuando tiene dinero, cuando tiene poder y posición es ver a los demás por encima del hombro, ver a los demás como inferiores, ver a los demás como sus esclavos, ver a los demás como sus sirvientes, sin embargo el Señor dice: “Más entre vosotros no debe ser así”

No hay nada de malo querer alcanzar una posición elevada, tener poder y ser un per-sonaje reconocido, pero debemos cuidar que todo esto no será para abusar del poder, ser arbitrario con los demás o olvidarnos que Dios nos dió esa oportunidad para usarlo para el bien.

II. RECHAZO LOS DELEITES TEMPORALES ESCOGIENDO EL MALTRATO:

Moisés estaba en la edad en que los placeres del pecado eran los más fascinantes y atra-yentes. El encanto de un mundo de poder y gloria era tangible y real. En cambio, las pers-pectivas y recompensas de la eternidad estaban todas a una gran distancia, intangibles, excepto para la fe. Moisés tenía todo a sus pies, las mujeres que él quisiera, los vinos que él quisiera. Tenía todo lo que cualquier humano pudiera anhelar, pero también sabía perfectamente que todo lo que el mundo nos ofrece es temporal y que más tarde o más temprano todas esas cosas afectarían nuestra salud y nuestra vida.

• ¿Cuánto te dura el placer de estar con una mujer que no es la tuya? • ¿Cuánto te dura el placer de una borrachera?• ¿Cuánto te dura el placer que te da el usar drogas

No importa cuanto dure, nada de eso será eterno.

No sólo las promesas dadas a Abraham pesaban en el corazón del israelita piadoso, sino también los huesos de José, que eran mudos testigos de una fe que esperaba el día de la salida de Egipto (Éx. 13:19). Pesando todo esto en su corazón, Moisés se inclina por el camino de sus padres, que es de la fe en las promesas de Dios.

ILUSTRACIÓN:

En el lejano oriente habia un sabio. este hombre tenía la sabiduría en plenitud. habia dedi-cado toda su vida a tener esa sabiduría pero en el mismo lugar tambien habia un niño. Este niño quería engañar al viejito sabio y para conseguirlo, tomaba diferentes objetos entre sus manitas, iba con el sabio y le decía: A ver ¿que tengo entre mis manos?

El sabio con paciencia le decía: Tienes una piedrita roja.

El niño comenzó a desesperarse porque cada vez que se presentaba con este sabio, le adivinaba las cosas que tenía entre las manos:

-tienes una canica. -tienes una luciérnaga. -tienes una bolita blanca.

pero en una ocasión en que el niño salía de estar con el sabio pensó: “tengo que engañar a este sabio, pero, ¿cómo hago?...ya se, tomare un pajarito entre mis manos y le pregun-tare :a ver viejito sabio ¿que tengo entre mis manos? y como es sabio me dirá “tienes un pajarito” y yo le preguntare: ¿está vivo o está muerto?, si él me dice está vivo, lo voy a apretar hasta matarlo, abriré las manos y diré: no, mira, está muerto. Pero si él me dice, está muerto, entonces abro las manos y le digo, no, mira, está vivo. Ante estos pensa-mientos el niño se puso muy contento por haber hallado la manera de engañar al sabio.

A ver viejito sabio ¿qué es lo que tengo entre mis manos?

El viejito respondió: Tienes un pajarito.

El niño se puso muy contento por ver que el plan iba viento en popa y le dijo:Es cierto. Yo sé que tú eres un sabio grande, pero dime: ¿está vivo o está muerto?

El viejito sabio, conservando su serenidad le dijo: “la decisión es tuya”

CONCLUSIÓN:

En esta encrucijada, si miramos desde la perspectiva de la historia posterior y, sobre todo, de la eternidad, Moisés hizo la elección correcta. Estos dos verbos destacados denotan un

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acto de decisión con una doble faz. Por un lado, Moisés rechaza, y por otro, acepta. Por un lado rechaza lo que Egipto le ofrecía, por otro, acepta lo que la fe le ofrecía. Por un lado influía su alta formación en las universidades egipcias; por otro, la influencia materna, y las promesas de Dios para su pueblo.

Sin embargo, no fue fácil el camino de ahí en adelante. La decisión fue la correcta, pero habría de enfrentar graves fracasos. Poco después, él da muerte a un egipcio, y asume un destierro voluntario de cuarenta años, por temor al castigo de Faraón.

Fueron cuarenta años de destierro y de soledad, toda una pérdida de tiempo desde el punto de vista humano, pero desde la perspectiva de Dios, este hecho empujó a Moisés al período más importante de su formación espiritual. El desierto, en vez de anular el llama-miento y hacer nula la difícil decisión, corroboró ambas cosas, pues transformó el carácter impulsivo y orgulloso, en uno manso y humilde líder en la mano de Dios.

LLAMADO:

No importa la edad que tengas, es tiempo de tomar decisiones. Moisés lo hizo a los cua-renta años, tú puedes hacerlo hoy rechazando lo que es temporal, por todo aquello que Dios te ofrece y es eterno. Moisés optó por la mejor, y de eso da claro testimonio la Palabra de Dios. De la nuestra, ¿dará testimonio Dios algún día?

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