12
La Ciber Guerra en las Relaciones Internacionales Karina Ramírez Aguilar

La ciber guerra en las relaciones internacionales

Embed Size (px)

Citation preview

La Ciber Guerra en las Relaciones Internacionales

Karina Ramírez Aguilar

La Ciberguerra Se Entiende Como Una Agresión

Promovida Por Un Estado Para:

• Dañar Las Capacidades De Otro

• Sustraer Información

• Destruir Sistemas De Comunicación

• Alterar Bases De Datos

• Infiltración En Sistemas Enemigos

Internetes un factor primordial

Puede llevarse a cabo desde cualquier parte del

mundo

¿Constituye éste una amenaza?

Ya que, si la ciber guerra constituye una violación a la soberaníade los Estados, y éstos a su vez luchan por mantener una supremacía de poder, a través de cualquier método, uno de los cuales podría ser el

uso de internet y sus diversas herramientas; ya sea para conseguir información sobre armamento, cuestiones económicas, seguridad nacional entre otros, incluyendo información clasificada, esto de antemano simboliza un ataque, ya que esta

información puede ser usada en contra del Estado ya que podría revelar debilidades o puntos en contra para efectuar un ataque real.

¿Cómo contrarrestar estos ataques?

A TRAVÉS DE LA CREACIÓN DE:

Sistemas de seguridad

Infraestructuras cibernéticas de detección

Estrategias de prevención

• Concientización

Proyecto “ciber policía”

Conclusiones

Referencias.

1.Sánchez medero, G. La ciberguerra: los casos de stunxnet y anonymous.[En línea] fecha de publicación: sep.-Nov 2012. [Revisado el 18/09/14]tomado de: http://derecom.Com/numeros/pdf/gema.Pdf

2.“Cyber terrorism: a clear and present danger, the sum of all the fears,breaking point or patriot games?” Stohl, Michael. Cyber terrorism: a clearand present danger, the sum of all the fears, breaking point or patriotgames? [En línea] fecha de publicación: marzo de 2007 [revisado el18/09/14] tomado de:http://link.Springer.Com/article/10.1007/s10611-007-9061-9/fulltext.Html

3. Sánchez medero, g. (2008). “Ciberterrorismo. La guerra del siglo xxi”,en el viejo topo, nº 242, marzo, pp. 15-23