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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO
PROGRAMA DE DOCTORADO EN ECONOMÍA
INSTITUTO DE INVESTIGACIONES ECONÓMICAS
CAMPO ECONOMÍA POLÍTICA
Enero 2016
Presenta:
Mtro. Gabriel Bagundo Medina
Comité Tutoral:
Dr. Teresa Aguirre
Dr. Alejandro Montoya
Dr. Alejandro Valle Baeza
“Las relaciones económicas entre Estados Unidos y México
ante la crisis capitalista mundial del 2008”
Capítulo I
Estados Unidos de América:
economía política del imperialismo frente a la crisis capitalista
Índice
Índice de Gráficos
Gráfica #1 GNP de Estados Unidos (1926-1975) p. 12
Gráfica #2 Producción industrial en los países avanzados (1950-1980) p.13
Gráfica #3 Distribución de la exportación de manufactura entre países desarrollados (1953-1977) . p. 14 Gráfica #4 Participación del trabajo productivo y el trabajo improductivo en el GNP (1947, 1977). p. 15 Gráfica #5 Estimación de Fred Moseley sobre la tasa de ganancia y tasa de plusvalor (1947-1977). p. 18
Gráfica #6 Distribución del empleo en EU (1955-2000). p. 19
Gráfico #7 Ganancia del sector manufactura y el sector financiero (1970-2012) p. 20
Gráfico #8 Tasa relativa de crecimiento del empleo en la manufactura (1947-2005) p. 21
2
Gráfico #9 Empleo en manufactura de bienes durables (1970-2013) p. 22
Gráfica #10 Inversión extranjera directa (outflows) de EU (1980-1993). p. 23
Gráfico #11 Porcentaje de cambio del GDP en EU (1998-2013). p. 26
Gráfico #12 Relación entre el total de la exportación e importación (1999-2013) p. 27
Gráfico #14 Relación entre exportación e importación de bienes durables (1999-2013) . p. 27
Gráfica #16 Porcentaje de la manufactura respecto al GDP (1950-2007) p. 28
Gráfica #17 Empleo total en manufactura de EU (1950-2007) p. 29
Gráfica#18 (Inversión extranjera directa (outflows) de EU 2007-2011. p. 30
Gráfica #19 Porcentaje de desempleo en la fuerza de trabajo civil (1998-2014) p. 30
Gráfica #20 Población total bajo la línea de la pobreza en EU (2003-2012) p. 31
Índice de Contenido
1.- Introducción p. 3
2.- La Dinámica capitalista p. 5
3- Estados Unidos durante el último ciclo largo del capital p. 9
3.1 Las fases del ciclo capitalista en EU p. 9
3.2 1945: el boom de posguerra y la hegemonía estadounidense p. 11
3.3 La crisis internacional de 1970: economía política del descenso capitalista p. 16
4.- La crisis del 2008: contradicciones del capitalismo norteamericano p. 24
5.- Conclusiones p. 32
6.- Bibliografía p. 34
3
Introducción
El proyecto de investigación doctoral que el autor de este trabajo presenta, estudia
las transformaciones en las relaciones económicas entre México y Estados Unidos
a la luz de la profunda crisis capitalista que azota a la economía mundial desde el
2008. Como país dependiente y semicolonial de la hegemonía norteamericana,
nuestras relaciones económicas están subordinadas a las transformaciones que
ocurran con capitalismo norteamericano.
Siendo esto así, la investigación que ahora se presenta constituye la base y los
fundamentos del primer capítulo de la investigación de conjunto. En este material
se presenta un análisis de lo que ha acontecido con la economía política de
Estados Unidos durante la última onda larga de la dinámica capitalista. Sostengo
que solamente con una visión de amplio plazo histórico es posible justificar las
hipótesis que se sostienen como conclusiones de la investigación en general y de
este capítulo en particular.
A la salida de la Segunda Guerra Mundial y hasta la crisis internacional de los
años 70´s, el liderazgo económico de Estados Unidos (EU) en Occidente era
incuestionable. Con el fin de la Guerra Fría, pero sobretodo tras la caída del Muro
de Berlín y la extinción de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URRS),
esta hegemonía parecía no tener mayor rival en el globo. Pero ha sido la dinámica
misma del capitalismo la que ha precipitado aceleradamente las tendencias al
declive de EU, al grado que hoy se considera que será uno de los temas de
discusión más importantes en las próximas décadas del siglo XXI [Ugalde: 2015].
El enfoque teórico desde el cual se aborda esta investigación es el de la economía
marxista, y para este capítulo en particular nos es fundamental la teoría marxista
del imperialismo. Diferencio de una visión marxista ya que concepto “imperialismo”
se ha utilizado de manera muy laxa en la amplia literatura que existe sobre el tema
en diversas disciplinas sociales. Junto con Lenin, sostengo que el imperialismo no
se refiere a las relaciones económicas que imperan en un país determinado o al
conjunto de algunos de ellos, sino a la dinámica económica de una época histórica
particular del capitalismo. En este capítulo utilizaremos esas nociones porque
sostengo como hipótesis de trabajo que es en esta época histórica, la de la crisis
capitalista, en la que se reactualizan la tendencias fundamentales del capitalismo
imperialista.
Estados Unidos enfrenta un aparente declive de su poderío económico -y por tanto
político y militar- que es consecuencia necesaria de las transformaciones que ha
sufrido su economía a lo largo del último ciclo del capital y que hoy le hace
4
experimentar en carne viva las contradicciones de la época imperialista del
capitalismo. De ser el principal productor de mercancías en los años 50´s pasó a
ocupar un lugar como importador neto de bienes durables. Su economía se
advierte desindustrializada y cada vez más dominada por el capital financiero,
mientras experimenta altas tasas de desempleo y de población debajo de la línea
de la pobreza. La particularidades económicas fundamentales del imperialismo
que describe la teoría marxista se reactualizan en el Estados Unidos del siglo XXI.
En el primer apartado de esta entrega estudiaremos los rasgos económicos del
imperialismo que describieron Vladimir I. Lenin y el liberal John Hobson hace ya
más de un siglo. El estudio de la dinámica imperialista nos permitirá tener los
elementos teóricos necesarios justificar por qué he escogido las variables de
análisis que presento para estudiar la economía norteamericana durante el siglo
XX y de cara a la crisis del 2008.
La periodización que se presenta consta de dos etapas. La primera es un breve
estudio de economía norteamericana de 1929 hasta los años del “boom de
posguerra”, como contexto previo a los llamados “25 gloriosos”, de 1945 a 1970,
con la intención de ubicar y abarcar la fase de auge, la fase ascendente del ciclo
largo del capital que dura hasta la gran crisis internacional de los setenta.
Los lectores podrán percibir que existen dos distintos patrones en el
comportamiento de la producción de manufacturas, que corresponden a cada fase
del ciclo. Estados Unidos conquista la supremacía económica debido a su
capacidad industrial, pero en los años siguientes y hasta la década de los 70´s
estos patrones se invierten, constituyendo una profunda reestructuración de la
economía estadounidense. En esta investigación mostramos cómo EU pasó de
ser la principal economía industrial y un exportador de mercancías a un importador
neto de ellas.
En la última periodización analizo alrededor los años 2000 al 2014, para estudiar
con mayor detalle los años que enmarcan a la crisis del 2008 y las nuevas
tendencias que a raíz de esta crisis están germinando en la economía
norteamericana, muchas de las cuales tienen importante incidencia en la
economía industrial mexicana. Al sostener como hipótesis teórica de trabajo que
lo que ocurre actualmente con la economía mundial es la reactualización de los
rasgos económicos fundamentales de la época imperialista, supongo también,
junto con Lenin, que se reactualizan también los rasgos más contradictorios del
sistema capitalista en tanto sistema económico de transición al régimen del capital
social y la propiedad social. Por esta razón, en el último apartado de este ensayo
económico me dedico a analizar las contradicciones que enfrenta el capitalismo
norteamericano. Una de estas contradicciones es que, en búsqueda de espacios
5
de valorización para sus inmensos capitales acumulados, la economía
norteamericana es la fuerza motora que exporta las relaciones capitalistas de
producción y la técnica productiva más avanzada a amplias zonas del mundo
subdesarrollado. Es esta una de las cualidades y contradicciones más importantes
de la dinámica capitalista, y de suma importancia estructural para comprender la
relación económica que México guarda con Estados Unidos.
En medio del férreo oleaje de la crisis capitalista, Estados Unidos enfrenta un
importante declive de su hegemonía económica y por distintos medios intenta
contrarrestarla. Esta época de crisis capitalista es una época de importantes
cambios en las relaciones internacionales del conjunto de la economía mundial, en
la que un puñado de países avanzados profundizan la opresión colonial y
estrangulación financiera que ejercen sobre una gran cantidad de naciones del
tercer mundo (América Latina, Europa del este y los países periféricos, África o la
región de Asia Pacífico) intentando sostener altas tasas de beneficio para los
principales monopolios transnacionales. Sin comprender esta dinámica será
imposible comprender las relaciones que sujetan a la economía política de México.
La dinámica imperialista
La historia económica de Estados Unidos es, desde hace más de 2 siglos, la
historia de una nación con "visión transcontinental” [Mussali: 2000]. Desde las
incursiones militares del siglo XIX con las que logró su expansión hacia la costa
Oeste, pasando por el Tratado Guadalupe Hidalgo de 1848 con el que México
perdió la mitad de su territorio, hasta las incursiones militares en América Latina y
Centroamérica, Estados Unidos pretendía asegurarse territorios para el
crecimiento y desarrollo de su economía.
Durante el siglo XX, en varias disciplinas de las ciencias sociales (además de la
economía, la ciencia política, la sociología, por ejemplo) se utilizó la categoría de
“Imperialismo” para referirse al comportamiento de Estados Unidos en tanto
hegemonía política, económica y militar a nivel mundial. Esto ha redundado en
que el concepto se utilice de manera muy laxa a lo largo de la amplia literatura
existente, tal como sostienen autores como Santi [1971]. Pero sin duda alguna han
sido Lenin con El Imperialismo, fase superior del capitalismo [1916], John Hobson
con Imperialismo, un estudio [1902] y Rudolf Hilferding con El Capital Financiero
[1910] los clásicos quienes desde muy temprano en el siglo introdujeron los
elementos suficientes y necesarios para la fundamentación de este concepto
desde la economía política.
6
En su obra Lenin utiliza una gran cantidad de información de la estadística oficial
para explicar con esos datos “el lugar histórico del imperialismo”. Lenin señala
como rasgos económicos fundamentales del Imperialismo: la centralización de la
producción, la creación de grandes trusts y conglomerados con alta productividad,
los altos grados de monopolio en las distintas ramas económicas, la centralización
y concentración de la banca internacional, el acceso de la gran industria al capital
financiero internacional, el cambio de patrón de los países avanzados que pasan
de exportadores de mercancías a exportadores de capital, así como el reparto de
las áreas de dominación e influencia de territorio mundial. De conjunto, estas son
las particularidades económicas fundamentales de la época imperialista que Lenin
analizó, en gran parte apoyado con las obras de Hobson y Hilferding pero, a
diferencia de ellos, con una profunda comprensión de la dialéctica histórica.
Al estudiar el “lugar histórico” del imperialismo Lenin pretendía, como señaló en el
prólogo a la edición francesa y alemana, demostrar que “el imperialismo es el
preludio de la revolución social del proletariado”, sentencia que fue confirmada por
la historia con las diversas revoluciones que ocurrieron desde 1917 en Europa y
un poco antes en otras regiones del mundo como América. El capitalismo
imperialista es la época de la gran centralización y concentración del capital, la
época de los monopolios que promueven el proceso de socialización de la
producción, mismo que entra en contradicción con la apropiación privada. Los
recientes movimientos sociales que como el Ocuppa Wall Street cuestionaron la
apropiación del 99% de la riqueza mundial por el 1% de la población del planeta,
confirman que hoy es más vívida que nunca la tendencia a la monopolización de
grandes áreas y ramas de la vida económica internacional. En su estudio, Lenin
también fijó su atención en la importancia que adquiere la centralización de la
banca a nivel internacional, fenómeno que permite la hegemonía del capital
financiero sobre la economía productiva.
Al respecto de la financiarización como una de las características de la economía
en la época imperialista dice Lenin: “El desarrollo del capitalismo ha llegado a un
punto tal, que, aunque la producción de mercancías sigue “reinando” como antes y
siendo considerada como la base de toda la economía, en realidad se halla ya
quebrantada, y las ganancias principales van a parar a los “genios” de las
maquinaciones financieras”. La financiarización de la economía es la condición
necesaria para la formación de grandes monopolios internacionales. Lenin
sostenía que “el imperialismo es la fase monopolista del capitalismo” por el
predominio monopólico que las empresas pueden tener a nivel internacional fruto
del acceso a este crédito.
7
Pero, de manera contradictoria en el capitalismo, el imperialismo también es una
fase del capitalismo en la que los países avanzados se han apropiado de una gran
cantidad de capital que no puede ser invertido en su propio territorio con tasas de
ganancia “atractivas”. Por esta razón, la necesidad de nuevos territorios política y
económicamente subordinados en búsqueda de altas tasas de ganancia, es un
necesidad para la época de mayor desarrollo y de “madurez” del capitalismo. Es
también esta la razón por la cual el capitalismo maduro es el principal motor de la
propagación de las relaciones sociales asalariadas y de la producción capitalista
hacia grandes porciones del globo donde este sistema social no había penetrado,
por la vía de la exportación de capitales que buscan valorizarse en el tercer mundo
y los países dependientes.
Los países avanzados se vuelven exportadores de capital porque estos ya no
encuentran altas tasas de valorización en sus territorios de origen. La dinámica
imperialista genera altas tasas de desempleo interno en los países avanzados e
importantes proporciones de su población arrojadas a las filas del ejército
industrial de reserva. El sistema capitalista, que mantiene despojada a la
humanidad de la posibilidad de la regulación consiente de la producción, muestra
abiertamente en esta época su imposibilidad para satisfacer a la humanidad de
valores de uso socialmente necesarios debido a la contradicción entre la
centralización de la producción social mundial con la búsqueda de altas tasas de
ganancia y su apropiación privada.
Porque en la época imperialista, los grandes monopolios internacionales no son
otra cosa sino la centralización de la producción social mundial en determinadas
ramas de la economía. La crisis de la época imperialista es entonces la
manifestación de las contradicciones del modo de producción capitalista en tanto
sistema de transición a un régimen de producción social internacional que entra en
contradicción con la apropiación privada. Necesitado de espacios para la
valorización de capital, el capitalismo imperialista impulsa férreas políticas hacia
los países coloniales, con la que busca la consolidar la subordinación y la
sumisión de los “países independientes” envueltos en redes de dependencia
financiera y diplomática.
Otra característica fundamental del capitalismo imperialista que describe Lenin es
la exportación de capital como la nueva tendencia con la que se reemplaza la
exportación de mercancías para los países avanzados. Señala Lenin en su obra:
“Lo que caracterizaba al viejo capitalismo, en el cual dominaba plenamente la libre
concurrencia, era la exportación de mercancías. Lo que caracteriza al capitalismo
moderno en el que impera el monopolio, es la exportación de capital”.
8
En un esclarecedor y sintético párrafo, Lenin señala, resumiendo lo que hasta
ahora he resaltado como las características fundamentales de la época
imperialista: “Mientras el capitalismo sea capitalismo, el exceso de capital no se
consagra a la elevación del nivel de vida de las masas en un país determinado, ya
que esto significaría la disminución de las ganancias de los capitalistas, sino al
acrecentamiento de estos beneficios mediante la exportación de capital al
extranjero, a los países atrasados (…) La necesidad de la exportación de capital
es debido al hecho de que en algunos países el capitalismo ha “madurado
excesivamente” y no dispone de un terreno para la colocación “lucrativa” del
capital”.
Yo sostengo en esta investigación que la transformación de la economía
norteamericana, desde que emergió como potencia hegemónica capitalista tras el
boom de posguerra, se ha ido modificando hasta adquirir características que, por
primera vez en el siglo, corresponden a la descripción de la dinámica de una
economía avanzada en la fase imperialista de un ciclo largo del capitalismo.
En esta investigación me voy a referir por imperialismo a una fase del ciclo del
capital en la que se re actualizan los rasgos económicos fundamentales con los
cuales se comporta la economía de una nación avanzada, y cuyas consecuencias
necesarias son la crisis y la acentuación de las contradicciones sociales del
capitalismo.
En los siguientes apartados de este estudio pretendo demostrar que la economía
norteamericana se ha ido modificando a lo largo de la última onda larga del capital
que ocurrió durante el siglo XX; desde una economía con predominio de la libre
concurrencia de capitales principalmente enfocados en el sector manufactura,
hasta una economía centralizada y fuertemente dominada por el capital financiero,
cuyo sector manufacturero comenzó a decrecer en favor de sectores económicos
no productivos como es el de servicios y los negocios especulativos.
Las secciones que siguen en esta investigación pretenden mostrar cómo se ha
transformado la economía norteamericana en cada fase del ciclo, con el afán de
demostrar que en la época contemporánea, en la época de la crisis capitalista, la
economía norteamericana presenta los rasgos fundamentales de una economía
avanzada en el capitalismo imperialista. En los años de la crisis capitalista, EU
tiene el mayor nivel de beneficios financieros de su historia mientras que su nivel
de producción en manufactura es el más bajo de todo el ciclo económico, y pasó
de ser el mayor productor de manufactura en el mundo a un importador neto de
bienes durables, mientras que va en aumento el crecimiento de la inversión
extranjera que el capital norteamericano realiza en otras partes del mundo.
9
Estados Unidos durante el último ciclo largo del capital
Las fases del ciclo capitalista en USA
Para el análisis de esta sección propongo una periodización de la economía
norteamericana basada en las distintas fases del último ciclo largo del capital. En
la economía contemporánea la teoría de los ciclos económicos es ampliamente
reconocida por diversas corrientes y una metodología común en las oficinas de
análisis estadístico alrededor del mundo. En Estados Unidos el National Bureau of
Economic Research, por ejemplo, mide las fases de expansión y contracción de
los ciclos de negocios en Norteamérica y sostiene que de 1945 al 2009 se han
producido 11 ciclos (US Bussiness cycle expansions and contractions). Pero en
esta investigación no nos vamos a referir a los ciclos cortos, sino a las ondas
largas como verdaderos periodos históricos que, a decir de Ernest Mandel [1980],
tienen implicaciones tanto en la vida cotidiana de la humanidad como en la
aceptación de la teoría económica que mejor explique y responda a los diversos
fenómenos económicos.
Si bien Estados Unidos ha jugado un papel político y económico de peso desde su
conformación en el siglo XVIII, no ha sido sino hasta la conclusión de la Segunda
Guerra Mundial en 1945 que Norteamérica comenzó a desempeñar un rol
hegemónico en la economía mundial desplazando a la entonces potencia de
Reino Unido. La economía británica, ya en declinación, se veía amenazada por el
crecimiento de los productos industriales que Estados Unidos exportaba al mundo.
Incluso al término de la Primera Guerra Mundial y la firma del Tratado de Versalles
(1918), la economía norteamericana se vio beneficiada y continuaba su ascenso
mientras que aumentaba su papel protagónico en los asuntos internacionales,
Con la crisis en Wall Street de 1929 y su veloz propagación al resto del mundo, la
caída de la demanda y de los precios, la baja en las inversiones y en la tasa de
interés, así como la depreciación de la libra esterlina en un 30% respecto al dólar
que terminó acentuando la crisis en Europa [Joshua: 2012], la Gran Depresión fue
un gran freno a la expansión norteamericana y del conjunto de la economía
mundial. El GDP de EU pasó de 100 billones de dólares a menos de 60 billones de
1929 al 1933 en términos nominales, y poco menos del 20% de su valor en
términos reales a dólares de 1929. La inversión doméstica cayó en términos reales
de 16 billones de dólares a 2 billones en cuestión de 3 años [Walton, 2010]. El
derrumbe de los sistemas financieros en los principales países capitalistas de la
época generó un adverso clima para el comercio internacional y para el desarrollo
de la producción industrial que cayó hasta un 40% a nivel mundial. Entre 1931 y
1933 más de una veintena de países de América Latina y Europa no pudieron
10
seguir cumpliendo con sus obligaciones por concepto de deuda externa, tasados
mayoritariamente en dólares. El flujo de capitales norteamericanos hacia los
países de la periferia capitalista era de 358 millones en 1929 y para 1932 era de 6
solo millones de dólares [Joshua: 2012, 249]. 1929 fue una crisis del emerger
norteamericano, que destruía la hegemonía británica pero no alcanzaba a sustituir
su papel hegemónico mundial. El periodo de entreguerras significó la
estabilización de la economía internacional, pero no la resolución de las pugnas
entre economías emergentes y proyectos políticos a nivel global, la cual se
consolida solamente con el orden mundial emergente tras 1945 y el resultado de
la II Guerra Mundial.
El bombardeo a Pearl Harbor en 1941 precipitó el ingreso de EU a la Segunda
Guerra Mundial del lado de los aliados, acrecentando su economía de guerra y la
expansión de la gran industria militar. Estados Unidos fue el mayor beneficiado
político y económico de la Guerra Mundial habiendo librado el mayor
enfrentamiento bélico de la historia de la humanidad sin afectar su territorio ni su
capacidad productiva. Es este el momento en el que podemos ubicar un nuevo
período histórico, el inicio de una fase ascendente del ciclo del capital, en el que
la hegemonía norteamericana conquista un rol dirigente en el bloque occidental
del mundo. En 1945 comienza la primera fase de nuestra periodización.
La segunda fase es la que comienza en los años 70´s con el fin del patrón de
acumulación que se mantenía desde la posguerra. Son tiempos en los que toca a
su fin los “años gloriosos” del capitalismo del siglo XX y comienza toda una época
de declinación capitalista. La economía norteamericana es para entonces la
rectora del sistema internacional, con una estructura económica en plena
transformación. Considero que sin una revisión de la dinámica del ciclo de auge,
no se pueden entender en qué proporción la economía norteamericana se ha
financiarizado y en qué proporción se ha desindustrializado. Gran parte del trabajo
gráfico presentado espera cumplir este objetivo.
La tercera fase de nuestra periodización es el período inmediato anterior a la
época que se abre con la crisis que estalla en el 2008 y que tiene como uno de
sus epicentros a Estados Unidos. En este y otros trabajos académicos he
sostenido que estamos en el punto inferior de la fase decreciente de la última onda
larga capitalista y que, en tanto época histórica, implica la preparación de fuertes
transformaciones en la política y en la economía capitalista mundial. El último
subapartado se centrará analizar la economía imperialista a la luz de la crisis
capitalista del 2008, como elemento que nos permita continuar el estudio de
Norteamérica en la relación que guarda con la economía de México.
11
El propósito general de mi investigación doctoral es entender qué cambios se
están germinando en Estados Unidos y de qué manera afectarán a la economía
mexicana. Para ayudar a responder estas interrogantes sostengo que en este
período de crisis capitalista se reactualizan las contradicciones fundamentales de
la época imperialista en tanto fase superior del capitalismo, y que son justamente
las tendencias fundamentales del capitalismo imperialista las que marcarán su
impronta en la relación de Estados Unidos con la economía mexicana. Los
siguientes dos apartados pretenden contrastar las tendencias en la economía
norteamericana, con particular atención en el sector de producción de
manufacturas.
1945: el boom de posguerra y la hegemonía estadounidense
El final de la Segunda Guerra Mundial estuvo marcada con la victoria de Estados
Unidos y los “países Aliados” sobre Alemania y los “países del Eje”. Fue el
conflicto militar más mortífero de la historia de la humanidad en el que se terminó
por imponer un nuevo sistema político internacional que aplastó las aspiraciones
de la Alemania nazi para dar paso al capitalismo de Estados Unidos como la
nación que indiscutiblemente ejercerá la hegemonía política y económica durante
el resto del siglo XX.
Estados Unidos fue capaz de forjar una nueva arquitectura política internacional y
una nueva gobernanza económica internacional. Conforme a los intereses
políticos de los países vencedores, pero sobre todo de Estados Unidos, se creó la
Organización de Naciones Unidas en 1945 y se realizó en julio de 1944 la
importante Conferencia de Bretton Woods que reorganizaría el sistema monetario
y financiero internacional.
Estados Unidos se convirtió en el principal acreedor mundial al verse beneficiado
por el préstamo de 14 mil millones de dólares acordados en el Plan Marshall para
la reconstrucción de Europa, además de que su territorio no sufrió perjuicio bélico.
En cambio la destrucción de gran parte de la capacidad industrial instalada en
Alemania, el bombardeo nuclear a las zonas industriales de Hiroshima y Nagasaki
en Japón, y la generalizada devastación que sufrió Europa en esta guerra,
implicaron importantes transformaciones en el sistema económico internacional.
A partir de este año se habla en la historiografía oficial norteamericana de los “25
años gloriosos” en los cuales el Producto Interno Bruto de Estados Unidos y sus
principales indicadores económicos crecieron sustancialmente, de casi 600
12
billones de dólares de 1972 a más de 1200 billones al finalizar los sesentas.
James R. Schlesinger sostiene que para 1945, el 60% de la capacidad
manufacturera del mundo correspondía a Estados Unidos (The American
Economy in Transitión: 551].
Gráfica #1 GNP de Estados Unidos (1926-1975)
Fuente: Elaboración propia con datos de History of American Economy.
Después de 1929 la producción y la inversión en Estados Unidos tuvieron una
importante caída durante el siguiente lustro al estallido de Wall Street, y luego una
ligera recuperación. A diferencia, después de 1946 el Gross National Product de
Estados Unidos tuvo un crecimiento sostenido que llegó a los años 70. La
observación de Schlesinger sobre el papel de la producción de Estados Unidos
con respecto a la producción mundial es fundamental para comprender las causas
que permitieron la emergencia de Norteamérica como hegemonía capitalista
mundial. La gráfica 2 permite observar cómo Estados Unidos mantiene, por
mucho, el mayor porcentaje de la producción industrial de entre todos los países
avanzados durante 1950 y 1980. La gráfica 3 permite comparar durante las
siguientes dos décadas al finalizar la segunda Guerra mundial, la economía
norteamericana implica ella sola un gran porcentaje de la economía exportación
total de manufactura entre los países desarrollados.
Gráfica #3 Producción industrial en los países avanzados (1950-1980)
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1966
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1971
1973
Bill
on
es d
e d
óla
res
(19
72
)
1926-1975
GNP de Estados Unidos (1926-1975)
REAL GNP (dollars 1972)
13
Fuente: Elaboración propia con datos de The American Economy in Transition, p. 191.
Gráfica #4 Distribución de la exportación de manufactura entre países desarrollados
(1953-1977).
Fuente: Elaboración propia con datos de The American Economy in Transition, p. 196.
1950
1965
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Países industrializados
Po
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Producción industrial en los países avanzados
1950
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195319561959196219651968197119741977
Po
rcen
taje
%
Distibución de la exportación de manufactura
Países desarrollados(Canadá, Japón, Europaoccidental, Australia,Nueva Zelanda ySudafrica)
Estados Unidos
Asia
14
El gráfico #5 muestra, apoyados en cálculos de Fred Moseley, cómo para el
término del conflicto bélico de 1945, la proporción del trabajo productivo y el
trabajo improductivo era de 3:1 siendo superior el primero sobre el segundo.
Durante los “25 gloriosos” de la economía norteamericana tuvo preeminencia el
trabajo productivo sobre el improductivo, y esto se mantuvo aún hacia la década
de los 80´s, aunque reduciendo la distancia entre uno y otro. Para 1947 Moseley
calcula que la economía norteamericana contaba con 59.7 billones de horas de
trabajo productivo, hasta 1973 se mantuvo un crecimiento absoluto que llegó hasta
los 71.5 billones de horas de trabajo productivo en el sector. El mismo autor
calcula que para 1947 la productividad por hora era de 5.33 dólares de ´72, y para
1977 fue de 12.45 dólares del ´72 con un crecimiento ininterrumpido. Los salarios
reales aunque fueron en crecimiento de2.24 dólares del ´72 por hora a 4.73 en
1977.
Gráfica #5 Participación del trabajo productivo y el trabajo improductivo en el GNP (1947,
1977).
Fuente: Elaboración propia apoyado en datos de (Moseley: 1991, 114)
En la próxima sección analizaremos con mayor detenimiento los cálculos sobre la
tasa de ganancia y plusvalor que estima Fred Moseley, pero por ahora nos será
suficiente con decir que en sus cálculos registra una subida en la composición
orgánica del capital y una ligera pero constante tendencia a la baja de la tasa de
ganancia en Estados Unidos durante la economía de posguerra. En Estados
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l GN
P
1947-1977
Trabajo productivo y trabajo improductivo (1947-1977)
Trabajo productivo
Trabajoimproductivo
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Unidos era cada vez más difícil invertir importantes masas de capital esperando
obtener las mismas tasas de ganancia que en los primeros años gloriosos.
La economía norteamericana se caracterizó por ser la nación con la mayor
capacidad productiva industrial instalada, y su poderío económico se visibilizada
entre otras cosas por la importancia de la participación de la economía
norteamericana en el comercio mundial. Pero la crisis internacional de los años
70´s cambiará la dinámica de los patrones de acumulación en el mundo, lo que
marcará un cambio estructural en la economía norteamericana. En la siguiente
sección analizaremos qué pasó con la balanza comercial, y con mayor
detenimiento sobre el comercio internacional de bienes durables, así como el
papel que juega el sector manufactura en relación a distintas variables de la
economía.
La crisis internacional de 1970: economía política del descenso capitalista
La lógica interna del capitalismo que Marx describió en El Capital, desde el
capítulo de La Mercancía hasta el Tomo III, se sustenta en la idea de que el valor
en tanto trabajo humano abstracto sólo encarna y se materializa en la producción
de mercancías (Marx: 1978, 8). En el sistema capitalista, es decir en la sociedad
mercantil, el motor que rige la dinámica económica es la producción y apropiación
de plusvalor buscando tasas de ganancias cada vez más elevadas. Para la teoría
marxista, la producción de manufacturas y la gran industrial tienen un papel
transcendental en la economía capitalista al ser la única actividad que genera
nuevo valor, sin cuyos beneficios no podrían sustraerse ningún otro tipo de
ganancias, como las del capital financiero o las que genera el trabajo humano
improductivo.
La crisis económica internacional de inicios de la década de los 70 marcó el fin de
los años gloriosos para la economía capitalista. Desde una mirada en
retrospectiva, hoy podemos sostener que esta crisis marcó el punto de inflexión
superior de la fase ascendente de la onda larga, para comenzar un período de
descenso, marcado por continuas crisis durante las siguientes décadas. Estados
Unidos y los países capitalistas avanzados impusieron una serie de medidas en la
economía internacional para contrarrestar el turbio clima económico, entre las que
se encontraban las medidas económicas del Consenso de Washington.
El Consenso de Washington es trascendente al ser el plan general de la relación
política y económica que Estados Unidos impondría desde fines de los años 80´s
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a las naciones del tercer mundo o en vías de desarrollo, entre las que se incluye
México. Esta serie de políticas económicas impuestas desde los organismos
financieros internacionales fue la reacción de la hegemonía mundial para
mantener la relación a la época de crisis financieras que asolaron a amplias
regiones del mundo. Con el fin de conseguir “estabilidad macroeconómica” se
exigió la liberalización de las inversiones y del comercio, la reducción del gasto
fiscal, la privatización de empresas estatales y una nueva regulación de los tipos
de cambio para hacerlos competitivos.
En Estados Unidos la tasa de inflación se mantuvo estable en rangos menores al
3% de 1950 a 1970, pero en la década de los 70 y parte de los 80 se disparó a
más de 10% en no pocos años. La tasa de desempleo también se disparó a más
del 8% y en todo el mundo se observó una caída en la demanda. En este período
ocurrió el fenómeno de la “stagflation”, que consistió en una época de contracción
productiva con altas tasas de inflación y alto desempleo. Habían quedado atrás los
años de altas tasas de crecimiento en el mundo y Estados Unidos mismo
enfrentaba grandes y graves consecuencias en su economía.
El déficit fiscal se convirtió una importante preocupación, agravado por los gastos
de Guerra en Vietnam (de donde Estados Unidos tuvo que batirse en retirada en
1975) y los gastos de consumo que promovía el Estado Benefactor. De ser el
principal exportador de mercancías hacía sólo un par de décadas atrás, Estados
Unidos experimentó en esta crisis un déficit en su balanza comercial que era ya
una tendencia que venía forjándose de tiempo atrás. Para enfrentar este
problema, el presidente Richard Nixon aplicó en 1971 una serie de medidas
económicas con las que terminó de facto con la convertibilidad del dólar con
respecto al oro, a lo que luego le siguieron, en el plano internacional, varios años
de inestabilidad financiera internacional y una alta volatilidad en el mercado de
divisas.
La crisis internacional de 1970 es también la cumbre y el inicio del fin del Estado
Benefactor, forma social que cubría al Estado capitalista para embellecer su
régimen frente a las posibilidades que había mostrado la URSS en tanto primer
gran intento de establecer el socialismo. Un Estado capitalista es capaz de asumir
servicios y garantías sociales para la satisfacción de las necesidades de un amplio
espectro de la población, siempre que pueda sustraer y apropiarse de un
porcentaje suficiente del plusvalor producido en su economía privada.
Como ya hemos señalado, para la teoría marxista el valor sólo se crea con un tipo
de trabajo humano, que es el trabajo en la producción de mercancías. Como
hemos mostrado previamente, el capitalismo norteamericano fundó su poderío en
su capacidad industrial a la salida de 1945. Pero la dinámica capitalista actuó en
17
Estados Unidos de forma tal que propició la deslocalización de sus inversiones
productivas fuera de su territorio al encontrar ahí mayores tasas de beneficio. Este
hecho es algo reconocido en la historia económica norteamericana [cfr (Walton:
2010,553) o (Sommers: 1993), por ejemplo] pero por fuera de una óptima marxista
no se reconoce diferencia entre los beneficios obtenidos en el sector industrial y el
de los generados por los negocios financieros. de la dinámica y del sistema
capitalista, ni contradicción en el hecho de que una nación avanzada no deje de
tener incentivos para invertir en su territorio. Para mantener tasas de rentabilidad,
el capitalismo avanzado llega a un punto en el cual el invertir en zonas del tercer
mundo donde la composición orgánica del capital es mucho menor, resulta más
redituable, sobre todo para los grandes monopolios internacionales.
Otro hecho fundamental de este período, bien documentado y discutido por la
historiografía económica norteamericana es que a partir de la década de los 70´s
adquiriera un importante peso el capital financiero y que el sector servicios cobrara
un rol emergente y preponderante. Como hemos mencionado, visto desde la
crítica a la economía política esta trasformación de la estructura economía termina
arrastrando importantes contradicciones al ser el capital financiero y el sector
servicios, un tipo de capital que por sí mismos no producen valor, y que en
cambio, pueden devenir en parasitarios.
Fred Moseley (1991) observa que en la economía de posguerra de Estados
Unidos operó una mínima pero tendencial caída de la tasa de ganancia. Siguiendo
a la teoría marxista, Moseley estudia cómo aumentó la composición orgánica del
capital y su tasa de crecimiento, pasando del año 1949 a 1974 con un aumento del
0.61% según sus cálculos (Moseley: 1991, 66). La baja en las tasas de ganancia
de la clase capitalista norteamericana implicó una fuerte presión para que el
Estado tuviera que poner freno a la apropiación de masas crecientes de capital
destinadas al gasto social.
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Gráfica #6 Estimación de Fred Moseley sobre la tasa de ganancia y la tasa de plusvalor
Fuente: Elaboración propia con datos de The Falling rate of profit in the postwar United
States economy (p. 51 y ss).
El gráfico #6 muestra el comportamiento de dos de las variables estudiadas por
Moseley: la tasa de ganancia y la tasa plusvalor. La tasa de plusvalor es calculada
como el flujo de plusvalía en billones de dólares corrientes sobre el capital variable
(=S/V) para luego aplicar un deflactor, y la tasa de ganancia la calcula como (=S /
C), es decir como el plusvalor [(=N – V), flujos de nuevo capital menos capital
variable) entre el stock en billones de dólares de capital constante. Aunque con
estimaciones diferentes que las de Edward N. Wolff (1979) y Thomas Weisskopf
(1979), Moseley sostiene que en la economía de posguerra de Estados Unidos la
tasa de ganancia enfrenta una pendiente en ligera caída.
Si la tesis que sostengo en esta investigación es correcta, entonces la crisis
capitalista del 2008 es signo y efecto del agotamiento de las causas
contrarrestantes a la caída de la tasa de ganancia que operaron con mayor fuerza
a nivel mundial después de la década de los 70´s (entre otras medidas, con el
paquete de políticas económicas del Consenso de Washington, el aumento del
grado de explotación del trabajo mediante la prolongación de la jornada laboral y
el grado de intensidad del trabajo, la reducción del salario real, la superpoblación
relativa, el comercio internacional, el abaratamiento del capital constante, etc.).
Después de los “25 años gloriosos” de Estados Unidos y la economía mundial, el
capitalismo norteamericano estaba “muy desarrollado” para que la inversión
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Estimación de Fred Moseley sobre la tasa de ganancia y la tasa de plusvalor
Tasa de ganancia
Tasade plusvalor
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productiva en su propio territorio resultara redituable con las tasas de plusvalía
que venía experimentando de años atrás. De esta manera operan las causas que
promovieron el cambio en la estructura de la economía norteamericana.
Gráfica #7 Distribución del empleo en EU (1955-2000)
Fuente: Elaboración propia con datos de (Walton: 2010, 543).
Como podemos observar en la gráfica 7, para el año 1955 el empleo que había en
el sector servicios era sólo una octava parte más grande que el empleo registrado
en el sector manufactura, pero para el año 2000 el sector servicios creció en
términos relativos y absolutos hasta llegar a tener tres veces más empleados que
la producción de manufactura para el año 2000. Los años que enmarcan a la
década de los setentas son momentos en los que el grueso de la economía
norteamericana se trasladó al sector servicios. La gráfica #8 muestra cómo los
beneficios que se obtenían en la economía manufacturera decrecieron
aceleradamente comparados con los beneficios que se comenzaron a obtener en
el sector financiero desde finales de los 80´s. Tendencia no observada antes
durante este ciclo largo. Si bien la economía financiera de EU siempre ha tenido
un peso importante, observando la gráfica es posible advertir, como lo hizo Lenin,
que como nunca antes en este ciclo largo capitalista la proporción que adquiere la
dinámica financiera es mayor que el sector de la manufactura industrial, y que esto
ocurre justo en la fase superior de una onda larga de desarrollo capitalista.
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Distribución del empleo en EU (1955-2000)
Agricultura
Manufactura
Servicios
Gobierno
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Gráfico #8 Ganancia del sector manufactura y el sector financiero (1970-2012)
Fuente: Elaboración propia con datos de The economic report of the president (2014), p.
373.
Si bien en 1950 EU fue el mayor productor de los bienes industriales creados en el
mundo, en la fase descendente la dinámica económica norteamericana este
patrón cobra un giro de 180 grados. A mediados de los ochentas el flujo de
ganancias obtenidas en el sector manufactura comenzó a decrecer mientras que
las ganancias del sector financiero aumentaban aceleradamente. Después de
1991 por primera vez el sector financiero obtuvo mayores ganancias que la
industria manufacturera. Es posible que haya sido la inestabilidad financiera
internacional de los años noventa -que golpeó fuertemente a América Latina y a
Asia- lo que frenó el crecimiento financiero en los noventa, pero como nunca antes
las ganancias se mantenían equilibradas entre el sector de manufactura y el sector
financiero. En el año 2010 las ganancias de sector financiero fueron por más de
400 billones de dólares, lo que superaba a más del doble a las ganancias
obtenidas en el sector manufactura. Acontecimiento inédito en el comportamiento
del ciclo capitalista norteamericano de 1945 en adelante. En Estados Unidos es
cada vez más un hecho que el capital financiero desempeña una importante
presencia en la vida económica como nunca antes. A partir de la primera década
del siglo XXI la proporción de obtención de ganancias en el sector financiero sobre
el sector industrial se vuelve con notoriedad.
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Ganancia del sector manufactura y del sector financiero (1970-2012)
Industria financiera Industria de la manufactura
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Para los años que enmarcan la crisis capitalista del 2008, la transformación de la
estructura económica norteamericana pasó de tener una fuerte capacidad
industrial a verse en disminución relativa y hasta absoluta frente a los servicios
financieros y de servicios, comparado con los niveles de la década de los
setentas.
Gráfico #9 Tasa relativa de crecimiento del empleo en la manufactura (1947-2005)
Fuente: Elaboración propia con datos de “1947-2005 quarterly job series for US
manufacturing (NBER)”.
En la gráfica #9 podemos observar una serie de 1947 al 2005 en la que la tasa
relativa de crecimiento del empleo en manufactura deja de tener tasas de
crecimiento tan altas como en los años 50´s para enfrentar a partir de la crisis
internacional de 1970 un período de decrecimiento neto. La línea de tendencia
marca claramente no sólo la caída del empleo, sino el período en el que la
tendencia de crecimiento se vuelve negativa. Son los años setenta el punto de
origen en el que el crecimiento del empleo en manufactura en realidad lleva una
tendencia decreciente.
R² = 0.081
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-2.00
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1.00
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Tasa relativa de crecimiento del empleo en manufactura (1947-2005)
Tasa relativa de crecimiento
Línea de tendencia
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Gráfico #10 Empleo en manufactura de bienes durables (1970-2013).
Fuente: Elaboración propia con datos de The economic report of the president (2014),
p.382.
El gráfico #10 observa el movimiento de la serie del empleo, en números
absolutos, que se emplea en la manufactura de bienes durables. A partir de 1970
registra un movimiento que no alcanza a recuperar el crecimiento de los “años
gloriosos”, y desde inicios de la década de los 80´s registra una clara caída que se
profundiza para el año 2000. En el 2010, unos meses después de la estallido
financiero de la crisis capitalista, la cantidad empleo que existía en Norteamérica
para la producción de bienes durables había caído en una tercera parte con
respecto a su nivel de 1970. Hacia la madurez de esta onda depresiva del ciclo
capitalista, se convirtió en una tendencia la desindustrialización de la economía
norteamericana.
El comportamiento de los flujos al exterior (outflows) de la inversión extranjera
directa de Estados Unidos, en contraste, presentan un movimiento a la alza desde
la década de 1980. Según datos de United Nations Conference on Trade and
Development (2013), de 1990 al año 2000, el flujo en billones de dólares
corrientes de flujos al exterior por concepto de inversión extranjera directa
norteamericana pasó de 30,982 en 1990 a 142,626 en el 2000, y luego a 308, 296
en el 20008 y 238,905 en el 2010. El flujo promedio de inversión extranjera
externa en 1971 era del 0.5% del GDP, creció al 1% durante los 80´s, pero para
finales de la década de los 90´s era de 2.5 y para el 2007 fue del 3%.
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Empleo en manufactura de bienes durables (1970-2013)
Bienes durables
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Gráfica #11 Inversión extranjera directa (outflows) de EU (1980-1993).
Fuente: Elaboración propia con datos de (Salehizadeh: 2005).
La gráfica #11 muestra con mayor detalle el punto en el que los flujos de inversión
extranjera directa de EU al exterior comenzaron a crecer con ritmo acelerado. No
fue sino hasta la década de 1990 que esta tendencia se consolida en la economía
norteamericana.
Este movimiento ha sido bastante importante sólo a partir de las 3 últimas
décadas. Kornecki, por ejemplo, sostiene que a nivel mundial el flujo de
inversiones extranjeras se ha duplicado tal solo del año 2000 al 2011 (Kornecki:
2013). Los flujos de inversión de Japón, Alemania y las inversiones asiáticas,
según datos del mismo autor, han tenido mucho mejor desempeño que las de
origen norteamericano. Pero sin tomar en cuenta los rendimientos, el movimiento
de las tasas de inversión extranjera externa de EU y el crecimiento que éste ha
tenido a nivel mundial, nos hablan de un sector de inversiones que ha crecido
fundamentalmente en los últimos 20 años. A la par que Estados Unidos ha
desindustrializado a tasas aceleradas su economía, en los mismos años su
inversión extranjera directa externa sube. Esta tendencia tendrá una gran
importancia para la industria mexicana, pero ello será analizado en futuras
elaboraciones.
El deterioro de la economía norteamericana no fue tan visible en la arena política
debido a dos grandes acontecimientos. El primero de ello fue la caída del Muro de
Berlín y la posterior desintegración de la Unión de Repúblicas Socialistas
Soviéticas durante 1991 estando en el gobierno Mijail Gorbachov. Este hecho
24
histórico de enorme importancia para el siglo XX permitió darle a EU la visión de
que su política era la única conductora de la geopolítica mundial, una sensación
de poderío absoluto tras el fin de la Guerra Fría, de la cual George Bush padre y
William Clinton hicieron amplia propaganda durante sus mandatos. El segundo
gran hecho para atemperar el deterioro progresivo de la política y la economía
internacional fue la capacidad de Estados Unidos para imponer sus planes y
políticas alrededor del mundo, desde las visiones económicas que predicaron R.
Reagan y M. Tatcher, pasando por el Consenso de Washington y la política del
neolieralismo, hasta las negociaciones y acuerdos firmados con el NAFTA (North
American Free Trade Agreement).
La influencia política y la capacidad económica de EU fueron insuficientes para
contrarrestar, detener ni revertir el deterioro del ciclo de la economía mundial.
Desde los años 80´s algo se advertía mal con la industria norteamericana, pero en
aquél entonces no eran evidentes los signos de agotamiento de Estados Unidos
como potencia hegemónica. En cambio, la crisis capitalista del 2008 conjuga una
serie de fenómenos que hacer más seria la discusión acerca del declive de la
economía norteamericana. Por ahora hemos mostrado cómo, de ser la economía
con mayor capacidad industrial, su economía se desindustrializó y a la par de ello
el sector financiero ha cobrado un papel central en la producción de ganancias, a
la par que las inversiones extranjera directas de EU al exterior han crecido
aceleradamente.
La crisis del 2008: contradicciones económicas del capitalismo imperialista
La crisis capitalista que estalló en Estados Unidos con la caída de los principales
bancos de inversión durante septiembre del año 2008, ha puesto en entredicho la
visión de la economía norteamericana como una potencia indiscutible. En el año
2001, con el atentado a las Torres Gemelas en Nueva York y a las instalaciones
del Pentágono, Estados Unidos se embarcó en una invasión militar en Medio
Oriente primero sobre territorio afgano y después en contra de Iraq, invasiones
con las que no ha tenido el dinamismo económico la economía esperaba. La suma
de esos conflictos militares heredados a Barack Obama y los nuevos conflictos
militares en Siria, Libia y otras regiones del Mediterráneo por el avance del
llamado Estado Islámico (ISIS) imponen un reto a Estados Unidos que muestran
en entredicho su capacidad militar y, como fundamento de ello, la solidez de su
base económica.
25
José Luis Valdés-Ugalde (2015) sostiene que a nivel internacional existe un
debate importante que discierne acerca de qué tan “intenso y profundo” es el
declive que experimenta Washington evidenciado tras el estallido del 2008 En esta
reciente obra editada por el Centro de Estudios Sobre América del Norte (CISAN-
UNAM) se identifica a la crisis que comenzó hace casi 8 años con la fractura del
sistema económico mundial y la preeminencia de Estados Unidos como poder
dominante. Un período en el que se le ha puesto fin al protagonismo unipolar que
EU venía desempeñando en los asuntos internacionales. En esta misma
compilación, el profesor Luis Maira califica la situación contemporánea de EU
como un posible “ocaso imperial”.
La “economía casino” de EU, con enormes burbujas financieras y gran cantidad de
créditos subprime, estalló arrastrando consigo al sistema financiero internacional.
Pero la crisis de la esfera financiera no tardó en trasladarse a la economía real: el
desempleo ha llegado a niveles históricos al igual que los niveles de deuda
norteamericana. La participación de la economía norteamericana en el mercado
mundial pasó de ser el 50% en 1946 al 21.01% en el 2012 según datos de Luis
Maira [Ugalde: 2015, 50].
Por si fuera poco otros entes económicos han irrumpido en la escena del mercado
mundial, tal es el caso de China como el principal competidor productivo. De los
flujos de inversión extranjera directa al exterior que EU realizó durante el 2001,
más de 5.4 billones de dólares estaban destinados en China. Para el 2014 eran
2.7 billones los que invertía el capital norteamericano en el gigante asiático. En
cambio, en 1990 la participación de la exportación de mercancías chinas en el
mercado mundial era del 1.8% del total, para el año 2000 creció a 3.8 y para el
2014 del su participación fue de 12.2%, mostrando crecimiento sumanente en la
última década. Mientras que del año 2000 al 2014 Estados Unidos ha tenido una
balanza comercial negativa de hasta en un -5.0% en el 2007, mismo año en el que
China tenía un superávit del 10.1%. Otro dato sobresaliente es que la nación hasta
hace tan solo pocas década era una economía en desarrollo tenga tasas de
crecimiento de sus inversiones extranjeras directas tan altas; en el año 2000 el
flujo en billones de dólares de China hacia el mundo era de 0.9, pero para el año
2006 era de 21.2, para el 2008 de 55.9 y para el 2014 de 116 billones de dólares
[Morrison: 2015].
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Gráfico #12 Porcentaje de cambio del GDP en EU (1998-2013).
Fuente: Elaboración propia con datos de The economic report of the president (2014)
El gráfico #12 muestra la evolución del GDP en Estados Unidos del año 1998 al
2013. El desempeño norteamericano no volvió a alcanzar las tasas del 4% como
la que tuvo en el año 2000. Para el año 2001 el crecimiento fue de sólo 1% y tras
una breve recuperación, en el 2008 y el año siguiente se experimentaron tasas
negativas de crecimiento. Estados Unidos también comienza a enfrentar
problemas de deuda y déficit. Para solventar gran parte del déficit de su cuenta
corriente de balanza de pagos lo hace mediante la emisión de dinero. Michael
Hudson (2003) afirma que EU está invirtiendo las reglas del sistema financiero
internacional con la creación de cientos de billones de dólares anualmente. Para
Hudson, EU impuso un “Imperialismo monetarista” con los acuerdos financieros de
los años 90´s en los que el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional sólo
realizan préstamos en dólares. Cuevas Ahumada, al estudiar las condiciones de
estabilidad del dólar como medio de pago internacional, recuerda que una moneda
internacional dominante debe de cumplir ciertas condiciones: a) estabilidad de
precios; b) valor real del PIB y exportaciones; c) tamaño y calidad de mercados de
dinero; d) externalidades históricas [en Ugalde, 125]. En este caso parece que
Estados Unidos se ha mantenido como moneda internacional dominante más por
las externalidades históricas que por el buen desempeño de su PIB y de las
exportaciones.
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Porcentaje de cambio del GDP en Estados Unidos (1998-2013)
GDP
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Gráfico #13 Relación entre el total de la exportación e importación (1999-2013)
Fuente: Elaboración propia con datos de The Economic Report of the President (2014).
El gráfico #13 muestra la relación entre exportaciones e importaciones totales en
una serie de 1999 al 2013. En toda la serie EU ha mostrado un saldo deficitario,
cuya tendencia viene desde finales de los años 80´s. En este documento de
investigación hemos hecho especial énfasis a que es la producción de mercancías
el único sector de la economía capitalista que produce nuevos valores, y que la
producción de manufacturas comenzó a expresar una caída que se expresa desde
inicios de la década de los setenta, comportamiento que para la balanza comercial
se muestra mejor en el siguiente gráfico:
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Relación exportación e importación (1999-2013)
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Total importados
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Gráfico #14 Relación entre exportación e importación de bienes durables (1999-2013)
Fuente: Elaboración propia con datos de The Economic Report of the President (2014).
El gráfico 14 muestra la relación entre la importación y la exportación de bienes
durables para el mismo periodo. Así contrastadas es notorio que no solamente
prevalece una tendencia deficitaria, sino que en la última década Estados Unidos
presenta una mayor brecha entre los bienes durables que importa y exporta que la
que impera entre el conjunto de los bienes comercializados. Hace 70 años EU era
el mayor exportador de bienes manufacturados del mundo, y hoy es un importador
neto de bienes durables.
El estudio del déficit en la balanza comercial revela algunas importantes
contradicciones que, aunque ya eran una tendencia desde el inicio de la última
fase decreciente del capital, se profundizaron en los años que enmarcan la crisis
capitalista. El gráfico 16 muestra cómo la producción de manufactura como
porcentaje del GDP bajó 5% respecto a su participación de 1950 a 1980. Para el
2007 el nivel alcanzaba poco más de una tercera parte de 1950, con un valor de
11.7% del GDP. El gráfico 17muestra que en cantidades absolutas, para el año
2007 EU tenía empleadas una cantidad menor de personas en manufactura que el
1950.
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1999-2013
Relación exportación e importación de bienes durables (1999-2013)
Bienes durablesexportados
Bienes durablesimportados
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Gráfica #16 Porcentaje de la manufactura respecto al GDP (1950-2007)
Fuente: Elaboración propia con datos de History of the American Economy, p. 534.
Gráfica #17 Empleo total en manufactura de EU (1950-2007)
Fuente: Elaboración propia con datos de The economic report of the President (2014).
Por su parte los flujos de inversión extranjera directa de EU al exterior, que venían
en una proporción creciente, tuvieron durante el 2008 una caída que resultó más
importante para el conjunto de las 34 economías de la OCDE que para las
inversiones norteamericanas que, aunque decrecieron, lo hicieron en una
28 26.9 23.9 20 16.3 14.5 11.7 0%
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1950-2007
Manufactura como porcentaje del GDP (1950-2007)
Manufactura comoporcentaje del GDP
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1950-2007
Empleos en manufactura EU (1950-2007)
Empleos en manufactura(millones)
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proporción mucho menor que el decrecimiento del conjunto de las inversiones en
el mundo. En años recientes su comportamiento muestra signos de recuperación.
Si esto es así, dos de los rasgos más importantes del capitalismo imperialista que
señala Lenin, a saber, del paso de la exportación de mercancías a la exportación
de capital (con la consecuente desindustrialización debido a la alta composición
orgánica de capital), son tendencias que podemos observar en la dinámica
norteamericana de los años de crisis. Si bien haría falta estudiar otras variables
(como la concentración mundial del capital bancario, la dinámica de las
inversiones externas y de la producción de manufactura con una visión
internacional) podemos decir que, en tanto tendencias, estamos en una etapa en
la que los rasgos económicos fundamentales del imperialismo se actualizan en
una economía en crisis como la de Estados Unidos.
Gráfica#18 Inversión extranjera directa (outflows) de EU 2007-2011.
Fuente: Elaboración propia con datos de OECD International Direct Investment Statics
(2013).
Desde la economía marxista, Lenin encuentra que otra de las principales
características del capitalismo imperialista es que en él se acentúa la diferencia
entre el ritmo de crecimiento de las distintas partes de la economía mundial. En su
relación con México, la inversión extranjera directa en el sector productivo que
viene de EU es importante dado que es uno de los factores más importantes de
desarrollo de nuestra economía. Este tema será estudiado con mayor detalle en el
capítulo correspondiente.
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2007 2008 2009 2010 2011
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Inversión extranjera directa (outflows) de EU (2007-2011)
Estados Unidos
OCDE Total
Mundo
31
Existen además otras contradicciones de capitalismo imperialista que bien se
expresan en sus indicadores macroeconómicos. La tasa de desempleo de la
fuerza de trabajo civil, por ejemplo, ha estado cerca de alcanzar en los años de la
crisis capitalista los niveles históricos que correspondieron a la etapa de
estanflación. Entre el 2009 y el 2010 el porcentaje de desempleo alcanzó casi el
10%, y para el 2014 era cerca del doble que a finales de los años noventa. Este
movimiento se expresa en la gráfica siguiente:
Gráfica #19 Porcentaje de desempleo en la fuerza de trabajo civil (1998-2014)
Fuente: Elaboración propia con datos de The economic report of the President (2014).
La población absoluta que se encuentra por debajo de la línea de la pobreza
también ha tenido un aumento de consideración en los últimos años. Según cifras
oficiales, el total de la población de todas las razas que se encontraba por debajo
de la línea de la pobreza en el año 2003 era de 35.9 millones de personas, cifra
que fue en incremento hasta el 2008, cuando se disparó de 39.8 a 43.6 millones
de personas para el 2009. En el año 2012 se reportaron 46.5 millones de personas
que en EU vivían en la pobreza.
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1998 2000 2002 2004 2006 2008 2010 2012 2014
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1998-2014
Trabajadores civiles desempleados Estados Unidos (1998-2014)
Trabajadores civiles desempleados (millones)
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Gráfica #20 Población total bajo la línea de la pobreza en EU (2003-2012)
Fuente: Elaboración propia con datos de The economic report of the President (2014).
La alta tasa de desempleo, el aumento de la población en condiciones de pobreza,
las tendencias deficitarias de la balanza comercial, las altos niveles de
endeudamiento público y privado, la tendencia a una dependencia en la
importación de bienes durables y manufacturados, son algunas de las
contradicciones de la economía norteamericana con las cuales llega a los años de
crisis capitalista. Estados Unidos ha visto menguada su capacidad productiva y
económica desde los años setenta, pero esta condición se ha visto acentuada a
partir de la primera década del siglo XXI, restándole impronta en su capacidad
política sobre los asuntos internacionales y limitando sus proyectos e incursiones
militares. La economía norteamericana ha acumulado una inmensa cantidad de
capital monetario por fuera del ciclo industrial, y ha sido el propio desarrollo de sus
fuerzas productivas lo que evita que el capital pueda ser reintroducido al ciclo
global del capital debido a las bajas tasas de ganancia que encuentran esas
posibles en territorio del capitalismo norteamericano. Los flujos de inversión
extranjera directa que salen de EU se han desarrollado con crecimientos
constantes desde la década de 1980, dirigiendo sus inversiones a diversas partes
del mundo, buscando mayores beneficios aún a costa de la economía interna,
proletarizando e industrializando otras regiones del mundo mientras que se
acentúan las contradicciones sociales en su propio territorio.
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Población bajo la línea de pobreza (2003-2012)
Millones de personas bajola línea de pobreza
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Conclusiones
Pese a que ha terminado la división del mundo en los bloques económicos, el
bloque occidental del bloque soviético, dejando como única súper potencia a
Estados Unidos, para los años de la crisis capitalista del 2008 la superioridad y
hegemonía norteamericana se encuentra también en declive. Para entender su
declive he hecho uso de la teoría marxista del imperialismo y de los ciclos largos
del capital. El declive económico norteameriano se enmarca en una crisis general
del ciclo económico capitalista que se encuentra en una fase de descenso desde
inicios de los años 70´s, en donde la crisis capitalista del año 2008 se ubica como
la madurez de esta fase depresiva del capitalismo. Una relectura de El
Imperialismo de Lenin nos ha permitido utilizar este concepto como una categoría
histórica de la dinámica capitalista, señalándolo como una época del capital en
donde se presentan rasgos económicos fundamentales a los que se somenten las
economías avanzadas como es la de Estados Unidos.
En la época imperialista se tiende a la creación de grandes monopolios
internacionales (trust), a la concentración y centralización del capital bancario
mundial, a la preeminencia del capital financiero sobre el capital productivo, al
acceso al gran capital financiero como fuente de crédito para el capital industrial y
a la tendencia de los países avanzados por volverse exportadores de capital en
lugar de exportadores de mercancías. En tanto tendencias, estos rasgos
fundamentales de la economía capitalista están presentes con mayor dinamismo
en la economía contemporánea que en cualquier otra fase del actual ciclo largo
capitalista que se desarrolló durante el siglo XX. En particular a la economía
norteamericana, estos rasgos han marcado algunos de sus principales tendencias
cambio sobre su dinámica en esta época de crisis.
Una de las consecuencias más importantes en la época del capitalismo
imperialista, en tanto fase superior y de madurez de un ciclo largo del capital, es la
reactualización de las contradicciones más importantes de la economía capitalista.
La enorme concentración de capitales y la imposibilidad de valorizarlos con altas
tasas de ganancia en las zonas más desarrolladas del mundo expone en sus
contradicciones a los límites capitalismo en tanto régimen de transición a una
economía basada en la socialización internacional de la producción.
Para mostrar la dinámica que ha tenido Estados Unidos en este último ciclo largo
del capital, nos hemos detenido a analizar sus principales rasgos en 3 distintas
fases. La primera es de 1945 a 1970, los años en los que ocurrió un nuevo auge
del ciclo del capital como producto de la resolución del conflicto bélico de la II
Guerra Mundial. Una época en la que la capacidad industrial de Estados Unidos lo
34
llevó a ser la potencia indiscutible del bloque occidental. El segundo momento son
los cambios que operaron a raíz de la crisis internacional de 1970 y hasta el 2008
con la caída en los patrones de ganancia, en donde la economía norteamericana
se desindustrializó para dar paso al crecimiento del sector servicios y a las
ganancias especulativas del sector financiero, además de que se implementaron
fuertes medidas económicas en la periferia del mundo capitalista para asegurar
espacios de inversión y de extracción de plusvalor para la economía
norteamericana.
Sin embargo, ninguna medida de política económica capitalista fue suficiente para
romper la tendencia al descenso del ciclo de capital y en el año 2008 estalló en su
forma financiera la crisis capitalista mundial. Un análisis de la dinámica económica
en estos años nos permite percibir que Estados Unidos continúa presentando un
patrón de desindustrialización y de importación de bienes durables, a la vez que
aumenta sus flujos de capital en forma inversión extranjera directa al exterior. Esta
es una tendencia de particular importancia en su relación con México, que será
estudiada con mayor detalle en el apartado correspondiente de esta investigación.
Por ahora, una de las conclusiones más importantes es que la reactualización de
los rasgos fundamentales de la época imperialista acentúan la contradicciones de
la economía capitalista; Estados Unidos experimenta tasas de desempleo y
niveles de pobreza sumamente altos, considerando que en esta fase del capital
EU tiene poco margen de maniobra ante el desgaste del Consenso de Washington
como contratendencia a la caída de la tasa de ganancia en el plano internacional,
y a sus enormes niveles de deuda pública, de déficit en el plano fiscal y en su
balanza comercial. Sin embargo, la época de la crisis capitalista es un período
histórico todavía en desarrollo.
35
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