03.edward luttwak

Pensamiento Estratégico Contemporáneo Rubén Segura Flores

DUCUM – 2015 Documento público

Santiago de Chile, 15 de marzo de 2015. Pág. 1/6

“LA ESTRATEGIA, DESDE LA VEREDA DE EDWARD LUTTWAK”

INTRODUCCIÓN

Edward Nicolae Luttwak (nacido el 04 de noviembre 1942), es un economista e historiador que se ha convertido en un erudito de la estratega de prestigio mundial. Ha publicado trabajos en las áreas de la estrategia, historia militar y las relaciones internacionales.

Los orígenes de Luttwak dan cuenta de su multiculturalismo. Nació en una familia judía en la ciudad de Arad, Rumania. Su infancia la compartió entre Italia e Inglaterra. Por un breve período asistió a Carmel College en Inglaterra y luego a la Escuela de Economía de Londres y la Universidad Johns Hopkins. Su primer puesto académico, antes de mudarse a los EE.UU., fue en la Universidad de Bath. Se convirtió en profesor en la Universidad de Georgetown en 1975. El 2008 se convirtió en Senior Adviser del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales en Washington, DC. Adicionalmente se ha desempeñado como consultor de la Oficina del Secretario de Defensa, el Consejo de Seguridad Nacional, el Departamento de Estado, la marina, el ejército y la fuerza aérea de EE.UU, como también de varios ministerios defensa de la OTAN.

El profesor Luttwak se ha transformado en un conferenciante internacional y consultor en las altas esferas de la defensa de países occidentales. Es conocido por sus ideas políticas no ortodoxas, sugiriendo, por ejemplo, que los intentos de las grandes potencias para sofocar las guerras regionales hacen realmente los conflictos más prolongados. Su libro “Golpe de Estado: Manual práctico” ha sido reimpreso varias veces y traducido a 14 idiomas. Su libro “Estrategia: La lógica de la guerra y la paz” es ampliamente utilizado como libro guía sobre el tema, y del cual se han extractado las principales ideas para la redacción de este texto.

Es por lo anterior que en el presente trabajo comenzaremos a develar cómo se entiende la estrategia desde la vereda de Edward Luttwak.




LA ESTRATEGIA PARA LUTTWAK

El profesor Luttwak argumenta que existe una lógica paradójica en la estrategia, a través de lo que él describe como los cinco niveles y dos dimensiones de ella. Estos cinco niveles de la estrategia que describe son: técnico, táctico, el operacional, estratégico de teatro y la gran estrategia.

LA ESTRATEGIA V/S LA LÓGICA COTIDIANA

La lógica paradójica de la estrategia

Edward Luttwak plantea que existe una diferencia entre la lógica del pensamiento estratégico y el pensamiento cotidiano. Para él, el pensamiento cotidiano está condicionado por nuestra cultura (en este caso la occidental) y es pragmático. Es decir, nos gusta ser serios y ordenados en nuestros pensamientos, sobre todo, en problemas de la defensa en asuntos exteriores. Por otra parte, el pensamiento estratégico lo define como el intento de descubrir los patrones generales que conducen a conclusiones nuevas, que pueden mostrar, por ejemplo, que lo que parece ser la decisión correcta en este tema, en este momento, hoy , para resolver este problema, puede de hecho llevar a otra situación que es mucho peor que el anterior.

Lo expresado por el profesor Luttwak me sirvió de base para definir dos casos de “Loop Problema-Solución”, los cuales he utilizado para ampliar, en el plano académico, los alcances del pensamiento estratégico convencional en la solución de problemas complejos. El Caso 1 es el más recurrente en las estrategias fallidas, y consiste en ocupar soluciones de problemas anteriores a nuevas situaciones; el Caso 2 ocurre cuando la solución no aborda en su totalidad el problema, siendo la semilla de nuevas problemáticas estratégicas.

Así las cosas, Luttwak se pregunta ¿Cuál es el mejor terreno experimental para trabajar con la teoría? ¿Es realmente haber luchado en la guerra, la observación de las guerras, el estudio de la historia de las guerras? Con estas interrogantes concluye que afirmativamente a todas ellas, pero también advierte que lo más importante es entender que en el reino de la estrategia el sentido común no tiene cabida. Uno de sus ejemplos más recurrentes es el caso de la construcción de un puente.

“Un ingeniero puede aceptar el desafío de construir un puente muy difícil, ya que se enfrenta a un río que cambia de cursos según las estaciones del año, es muy profundo y las orillas son muy arcillosas. Sin embargo, el río no está mirando la construcción del puente. No está tratando en forma deliberada de evitar que se construya un puente para cruzarlo”. El problema es que en el reino de la estrategia “el río” sí trataría de hacer eso, ya que estaría pensando y moviéndose constantemente. En otras palabras, “el éxito no se asegura haciendo las cosas correctas conforme al sentido común. El enemigo estará pensando, moviéndose y mutando constantemente para evitar mi éxito”.

Otro ejemplo al que recurre Luttwak es un juego de ajedrez. En este juego, usando la lógica cotidiana, los jugadores tienen reglas, un lugar específico donde jugar (el tablero), etc. Sin embargo, “en el reino de la estrategia los jugadores, además, podrían golpearse, envenenarse, dar vuelta el tablero, etc. No debemos olvidar que en el campo del conflicto, las reglas se han eliminado. Si bien existe el derecho humanitario o de los conflictos armados, esto no significa que existen reglas a seguir en la estrategia, todo lo contrario, la idea es sorprender con lo ilógico, lo no pensado, lo imposible”.




Luttwak, a través de muchos ejemplos, es enfático en señalar que la lógica de la vida diaria, el sentido común, es causal, lineal. Si algo es bueno, es bueno. Podría ser mejor. Si algo es malo, es malo. Podría ser peor. Si algo funciona hoy va a funcionar mañana. “En la guerra, todos estos supuestos no sirven para nada”.

En otro de sus ejemplos plantea que si se quiere avanzar para derrotar a un enemigo, y existe un buen, amplio y pavimentado camino recto y corto, nunca se tomaría esa ruta. La verdad es que se buscará ir por las montañas, en una carretera sinuosa o incluso un camino en mal estado y en horas de oscuridad. ¿Por qué? “Porque si se hiciera lo lógico o correcto, o se aplicara el sentido común a la guerra, el enemigo estaría esperando y seríamos derrotados. Con el fin de prevalecer, se tiene que ir en contra del sentido común, de manera sistemática, en cada elección. De hecho, la característica fundamental de la lógica de la estrategia es que su razón es paradójica y contradictoria”. Ya lo decían los romanos “si quieres paz, prepárate para le guerra”. Mismo concepto de la disuasión nuclear, es un arma que nunca se usa. Si se usa es inútil. Finalmente sentencia que “es por eso que, por regla general, en la guerra cada vez que se pregunta qué va a hacer el enemigo, uno se pregunta lo que sugeriría el sentido común y se opta por lo contrario”.

LOS CINCO NIVELES DE LA ESTRATEGIA SEGÚN LUTTWAK

El primer nivel de estrategia es el nivel técnico. En este nivel, Luttwak nos hace consciente de las interacciones problemáticas entre los soldados, técnicos y políticos para decidir los sistemas de armas que deben ser desarrollados para la fuerza militar. La lógica paradójica de este nivel “podría superarse mediante la mejora de las relaciones entre el desarrollo de la tecnología civil y militar”.

El segundo nivel de la estrategia es el nivel táctico. Para Luttwak, la fuente de la lógica paradójica en este nivel viene de "las complejidades de pleno derecho de la dimensión humana en combate". El resultado de la guerra depende principalmente de factores intangibles como la moral individual, disciplina de grupo y la cohesión de la unidad. Dado que ”la interacción de estos factores no puede ser controlada de forma instantánea por un jefe militar, el resultado de los combates son impredecibles”.

El tercer nivel de la estrategia es el nivel operacional. En este nivel, Luttwak trata de mostrar una correlación entre la elección de la estrategia operacional de desgaste y maniobra con los estilos nacionales en la guerra. Esta correlación crea la lógica paradójica en el nivel operacional. Según Luttwak, "ni desgaste ni maniobra están siempre presente y en forma pura, pero su peso relativo, por lo general, reflejan la cultura y tradición de la fuerza militar de un determinado país, así como su enfoque general para la guerra".

La influencia determinista de las autoimágenes nacionales va acompañada de paradigmas mentales que influyen en las decisiones del nivel estratégico de teatro. Similares con el nivel anterior, en este cuarto nivel de la estrategia, “la lógica paradójica es transpirada por las actitudes políticas y culturales de la naturaleza del gobierno”. Luttwak expone cómo las decisiones estratégicas entre varios tipos de estrategia de defensa, tales como elástica, en profundidad, guerra de guerrillas y la defensa activa no podrían ser seleccionadas en forma autónoma por los comandantes militares. Las opciones estratégicas se hacen bajo la presión generada por la lucha política en el ámbito nacional.




El quinto nivel de la estrategia es el nivel de la gran estrategia. Para Luttwak, en este nivel la lógica paradójica llegará a su fin en dos dimensiones de la estrategia: las dimensiones vertical y horizontal. Argumenta que "la gran estrategia puede ser vista como una confluencia de las interacciones militares que fluyen desde este nivel hacia arriba y hacia abajo, dando forma a la estrategia de dimensión vertical, con las variadas relaciones exteriores entre los estados que forman la estrategia de la dimensión horizontal". Fuentes de la lógica paradójica de la gran estrategia vendrán de la falta de creación de una estrategia de defensa integral que consolide coherentemente políticas de todos los niveles de la estrategia o de la incapacidad en la gestión del dilema de la seguridad como resultado de la interacción estratégica entre los estados.

EFICACIA V/S EFICIENCIA EN LA ESTRATEGIA

En forma reiterada, Luttwak plantea que en estrategia no sirve utilizar la lógica del sentido común. Esto es porque la lógica de la estrategia, es en realidad la lógica de la destrucción. Esto lo ejmplifica señalando que “si se aplica el concepto civil de eficiencia, lo lógico sería tener una base logística que pueda abastecer en todos los rubros y necesidades desde un punto equidistante a los usuarios finales. Esto permite automatizar procesos, estandarizar sistemas y tener en bodega lo que realmente se necesita, aplicando el conocido concepto del just in time”. Lamentablemente en guerra eso es un error fatal, más conocido como el “just too late”.

Caemos nuevamente al tema de la lógica, pero esta vez en la logística. La lógica de la paz es la especialización, reproducir, producir en masa y buscar la economía de escala. La lógica de la guerra es la redundancia, la cobertura, la multiplicidad, porque el enemigo está listo para aprovechar cualquier especialización de su parte para superarla.

En el ejemplo anterior, lo eficaz es tener varias bases desde donde dar el apoyo (redundancia), si el enemigo destruye una de ellas el impacto no afecta la continuidad de las operaciones. Asimismo, no se pueden tener stock de munición y/o repuestos conforme a las estadísticas de fallas de tiempo de paz, donde las exigencias son totalmente diferentes a las de guerra. Luego, la ineficiencia de mantener stocks que podrían no ser utilizados durante la guerra asegura la eficacia en ella. Acá encontramos una de los aspectos paradójicos y contradictorios que señala Luttwak.

Luttwak es radical en señalar que no importa lo que la lógica sugiera, a pesar de la disciplina de costos. Toda la sociedad va a decir: "Esto es lo que yo estoy dispuesto a asignar a mi defensa", de acuerdo con nuestra percepción de cómo es el enemigo y cómo se prepara para ir a la guerra. Pero lo relevante cómo se gasta lo asignado. Si se aplica la lógica del sentido común, se gasta de manera eficiente. Si se aplica la lógica de la estrategia, se gasta con eficacia. Y muy a menudo, lo efectivo es ineficiente. Y la razón es muy simple, porque ser efectivo es precisamente ser ineficiente.

LA GRAN ESTRATEGIA DEL IMPERIO BIZANTINO

El año 2009 Luttwak publica su último libro “La gran estrategia del Imperio Bizantino”. En él hace un profundo análisis de qué fue lo que llevó a la extinción temprana del Imperio Romano de Occidente (Roma) y qué hizo perdurar por casi un milenio.




El trabajo que realizó Luttwak le tomó casi dos décadas de estudios, lo que puso a disposición del mundo académico, pero principalmente orientado a EE.UU. Resumió a siete los consejos para que la potencia mundial continúe manteniéndose en el poder.

Evitar la guerra por todos los medios posibles, en todas las circunstancias posibles, pero siempre actuar como si la guerra podría empezar en cualquier momento. Entrenar intensamente y estar listo para la batalla en todo momento - pero no alimentar las ganas de luchar. El mayor propósito de la preparación para el combate es reducir la probabilidad de tener que luchar.

Reunir información de inteligencia sobre el enemigo y su mentalidad, y supervisar sus acciones de forma continua. Hacer los esfuerzos por todos los medios posibles podría no ser muy productivo, pero rara vez se desperdician.

Hacer la guerra vigorosamente, tanto ofensiva como defensivamente, pero evitar las batallas,

sobre todo batallas a gran escala, salvo en circunstancias muy favorables. No se debe pensar como los romanos, que vieron a la persuasión sólo como un complemento a la fuerza. En su lugar, se debe emplear la fuerza en las dosis más pequeñas posibles para ayudar a persuadir a los persuasibles y dañar a los que aún no son susceptibles a la persuasión.

Reemplazar la guerra de desgaste y ocupación de países con la guerra de maniobra – golpes de mano e incursiones ofensivas para quebrantar al enemigo, seguido de rápidas retiradas. El objetivo no es destruir a sus enemigos, ya que pueden convertirse en aliados mañana. Una multiplicidad de enemigos pueden ser menos amenaza que uno solo, ya que pueden ser persuadidos de atacarse unos a otros.

Esforzarse por terminar las guerras con éxito mediante la búsqueda de aliados para cambiar el equilibrio de poder. La diplomacia es aún más importante durante la guerra que la paz. Rechazar, como lo hicieron los bizantinos, el tonto aforismo que cuando las armas hablan, callan diplomáticos. Los aliados más útiles son los más cercanos al enemigo, porque conocen la mejor forma de luchar contra sus fuerzas.

La subversión es el camino más barato a la victoria. Tan barato, de hecho, en comparación con

los costos y riesgos de la batalla, que siempre debe ser intentado, incluso con los enemigos más irreconciliables. Recuerde: Incluso los fanáticos religiosos pueden ser sobornados, lo que fue descubierto primeramente por los bizantinos, porque los fanáticos pueden ser muy creativos para inventar justificaciones religiosas para traicionar a su propia causa.

Cuando la diplomacia y la subversión no son suficientes y la lucha es inevitable, utilizar métodos y tácticas que se aprovechan de las debilidades del enemigo, evitar el consumo de las fuerzas de combate, y con paciencia reducir gradualmente la fuerza del enemigo. Esto puede requerir mucho tiempo. Pero no hay urgencia porque tan pronto como un enemigo ya no existe, seguramente habrá otro que lo sustituya. Todo está en constante cambio, como emergen y caen gobernantes y naciones. Sólo el imperio es eterno - si es que no se agota a sí mismo.




ALGUNAS REFLEXIONES

Edward Luttwak provee a sus lectores con un conjunto de herramientas para analizar cualquier guerra por sí mismos. Si alguna situación se examina con diligencia a través de sus cinco niveles y dos dimensiones, el examinador puede estar seguro de que ha considerado todo, sin el riesgo de llegar a conclusiones simplistas.

Luttwak propone que al enfrentar un problema estratégico, uno debe preguntarse qué va a hacer el enemigo, posteriormente preguntarse qué sugeriría el sentido común y finalmente optar por lo contrario.

Respecto de lo anterior, estimo prudente sugerir al lector de este trabajo, que el solo optar por lo contrario, conforme plantea Luttwak, reduce las soluciones a blanco y negro. O sea, solo se tendrían dos soluciones estratégicas, y al parecer podrían haber muchas más… En otras palabras, se puede optar por lo contrario, pero también por lo inesperado, lo diferente, lo parecido, o no actuar tal vez. Esto último es plausible en el ámbito de acción político-estratégico.

BIBLIOGRAFÍA

- INSTITUTE OF INTERNATIONAL STUDIES, UC Berkeley. “Conversando con Edward Luttwak”, 1987. Disponible en: http://globetrotter.berkeley.edu/conversations/Luttwak/luttwak-con0.html

- INSTITUTE OF INTERNATIONAL STUDIES, UC Berkeley. Entrevista a Edward Luttwak "The Logic of Strategy and U.S. Foreign Policy", 2007. Disponible en: http://globetrotter.berkeley.edu/people7/Luttwak/luttwak07-con0.html

- WIDJAJANTO, Andi. “The Paradoxical Logic of Strategy”. The Study of War, 2007. Disponible en: http://staff.ui.ac.id/internal/132229994/material/AndiWidjajanto-TheParadoxicalLogicofStrategy.pdf

- LUTTWAK, Edward, “Strategy: The Logic of War and Peace” Rev.Enlarged Edition, Cambridge,

Massachusetts, 2002.

- LUTTWAK, Edward, “The Grand Strategy of the Byzantine Empire”, Cambridge, Massachusetts, 2009.

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