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HÍGADO GRASO14 remedios naturales 4 - 8

Ojos sanos10 mejores alimentos 10

EndometriosisClaves para controlarla 12

Derrame CerebralDescubre cómo prevenirlo 5 - 9

Cómo convivir conalguien que vive quejándose 6 - 7

PsoriasisAlivio a tu piel 27

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“Metástasis falsa” Columna de reflexión del Dr. Soto: “Del machismo al nuevo hombre”

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EL GUARDIÁN DE LA SALUD ES UNA PUBLICACIÓN MENSUALExije tu ejemplar en tu kiosco más cercano, a partir de los primeros días de cada mes

Mensaje del biólogo Bruce Lipton sobre la pandemia (extracto)

Queridos amigos,

Todo se reduce a: “¿A qué le temes?” En la pandemia actual, ¿te preocupa la pérdida de ingresos durante la cuarente-na, o tal vez el temor final es la visión de morir de la enfermedad por COVID-19?

Mi intención es CALMAR los temores generados por los medios que repiten continuamente que “el cielo se está cayendo”.

El estrés económico es suficiente para inhibir el sistema inmunitario y exacerbar significativamente la propagación de la enfermedad.

Como se describe en La Biología de la Creencia, las hormonas del estrés apagan el sistema inmunitario cuando el cuerpo está en un estado de lucha e huida, impulsado por las suprarrenales. Las hormonas del estrés son tan efectivas para inhibir el sistema inmune, que los cirujanos proporcionan terapéuticamente a los pacientes que esperan trasplantes de órganos, hormonas de estrés para que sus sistemas inmunes no rechacen inmediatamente el tejido extraño.

Es un hecho científico que tanto el pen-samiento positivo como el negativo tie-nen un profundo efecto en la función del sistema inmune. Uno de los frentes líderes en investigación inmunológica es el campo de la psiconeuroinmunología. Desglosado en sus palabras fundamenta-les, es la ciencia de cómo la conciencia da forma al control del cerebro sobre el sistema inmune.

La investigación en psiconeuroinmunolo-gía revela claramente que la conciencia controla la función del sistema inmune. La conciencia positiva es responsable del efecto placebo, en el que la mente puede curar casi cualquier enfermedad, mientras que el estrés y el pensamiento negativo crean el efecto nocebo, que puede causar casi cualquier enfermedad. El miedo al COVID-19, junto con las amenazas resultantes para la supervi-vencia, inhibe profundamente el sistema inmunitario de la población y exacerba aún más la epidemia.

CONCLUSIÓN:

Muchas personas que enferman con la nueva enfermedad COVID-19, probable-mente experimentarán síntomas leves, similares a la gripe; fiebre, tos y dolor de garganta. De hecho, más del 80% de las personas infectadas tienen la enfer-medad de forma leve a moderada, y dura aproximadamente dos semanas. El 20% restante tendrá síntomas más graves que pueden necesitar atención médica, pero estos síntomas pueden aliviarse con el tratamiento adecuado.

El énfasis de los medios en las esta-dísticas de muerte de COVID-19 es un sesgo matemático, cuyo pronóstico es-tresante es en sí mismo responsable de debilitar el sistema inmunológico del público y agravar la propagación de la enfermedad.

¿La epidemia de COVID-19 va a seguir y seguir? La respuesta es claramente ¡NO! Como lo demuestra el cese casi com-pleto de los nuevos casos de COVID-19 en China y Corea del Sur, la epidemia llegará a su fin.

Para mantenerte saludable, hay algunas prácticas que potenciarán tu sistema inmunológico y disminuirán los síntomas de COVID-19.

1. Mantén un estilo de vida saludable: come alimentos nutritivos, naturales y orgánicos; toma vitaminas y suple-mentos, especialmente grandes dosis de vitamina C; lávate las manos con más frecuencia de lo normal; aléjate de la computadora y muévete (¡algo que debo aprender a hacer también!).

2. Reconoce que la gran mayoría de las personas sanas, menores de 65 años, probablemente solo tengan síntomas leves de COVID-19. Aquellos cuya salud ya está comprometida, y aquellos que son adultos mayores, son los más susceptibles a enfermedades graves. Estas personas deben tomar TODAS las precauciones ofrecidas por los CDC.

3. ¡Haz todo lo posible para desestresar-te! Deportes, juegos, caminatas por la naturaleza, enamorarte, leer un libro, ver una película. Básicamente, RELAX. Esto mejorará significativamente la función de tu sistema inmunológico y reducirá la gravedad de cualquier síntoma de COVID-19.

Habrá quienes me agradecerán por estas ideas relajantes y habrá otros que me cas-tigarán por no tomar esta epidemia más en serio. Para el último grupo, tomo muy en serio su perspectiva. Si consciente-mente sientes que he subestimado la gra-vedad del coronavirus, quiero honrar tu preocupación y sugerir que, por todos los medios, participes en todas las prácticas de protección sugeridas por los CDC. A través del efecto nocebo, los pensamientos temerosos inhibirán el sistema inmune y lo abrirán a la infección. Sin embargo, un estado mental tranquilo y un estilo de vida saludable son la mejor receta para resistir esta tormenta estacional.

Con amor y luz,Bruce

Fuente: www.brucelipton.com/newsletter/think-beyond-your-genes-

march-2020

Bruce Lipton, PhD., tiene un doctorado en biología celular, y es conocido por promulgar la idea de que los genes y el ADN pueden ser manipulados por las

creencias de una persona, siendo el autor del libro La Biología de la Creencia.

Termómetros infrarrojos

Quisiera consultar si los termómetros infrarrojos (método actual para contro-lar la temperatura en supermercados y otros locales), realmente pueden producir algún daño a la salud (a los ojos o las neuronas). Y si se puede tomar no en la frente, sino en la muñeca por ejemplo, y daría la misma temperatura corporal.

Quedo muy agradecida.Isabel

Estimada Isabel,

Para que un termómetro infrarrojo llegara a “quemar” o matar neuronas, la radiación infrarroja y las débiles ondas láser que emiten tendrían que ser aplicadas a la frente por un tiempo muy prolongado.

Ahora, es cierto que no suele haber una diferencia sustancial entre tomar la tem-peratura en la frente, en la muñeca o en otra parte del cuerpo, pero hay que re-cordar que cuando uno entra a una tienda desde un ambiente externo frío, puede que algunas zonas estén más abrigadas o acaloradas que otras y, por ende, puede que la lectura sea distinta en determinados momentos.

El daño ocular, sobre todo en la retina, producido por el mal uso de estos aparatos apuntando al ojo es otra preocupación, pero para que exista un daño en la vista, una persona tendría que someterse miles de veces a esta luz justo en sus ojos.

Así que, igual como lo intenta hacer Bruce Lipton (primera carta), nosotros también hacemos un llamado a la calma y a NO TEMER, ya que si lo ponemos en el con-texto de un riesgo potencial para la salud, un teléfono celular con sus microondas presenta un riesgo mucho mayor que el de ser apuntado de vez en cuando por ondas infrarrojas.

Un abrazo,Gonzalo y Ruth

“Reticencia” a la vacunación

El 22 de julio pasado Tele13 publicó un artículo titulado “Los ‘antivacunas’: el nuevo escollo para contener el corona-virus en el mundo y en Chile”. Como se imaginarán, el enfoque apunta a la gran importancia y complejidad que presenta el desarrollo de una vacuna contra el COVID-19, pero que es aún más complejo lograr persuadir a un grupo creciente de personas reticentes a utilizarla. Y revelan un dato interesante: cerca del 50% de los estadounidenses dice no estar dispuesto a recibir la vacuna, aun cuando haya stock en el mercado.

El artículo es bastante completo en el senti-do de que menciona algunas de las razones

de quienes se resisten a la vacunación, como el hecho de que consideran que el medicamento puede generar serios daños para la salud, provocando autismo en los niños e importantes contraindicaciones en las personas. Y comentan que estos grupos antivacunas están presionando desde ya para que ningún gobierno pueda obligar a utilizarla, con el argumento de que el cuerpo es de cada persona, y cada quien debe ser libre para tomar la decisión.

El tema es que una parte importante de infectólogos consideran que en este tipo de “batallas”, donde existe la necesidad urgente de “salvar vidas”, es necesario “garantizar” (o sea, obligar) que las per-sonas se vacunen, de manera de asegurar la “inmunización” mundial. Algo que el doctor Anthony Faucci, el principal experto en enfermedades infecciosas de Estados Unidos, descartó que ocurra de manera sencilla y expedita, en una en-trevista con CNN, que pone en evidencia la clara intención de hacer obligatoria esta vacuna, ya que Faucci dice: “Me conformaría con una vacuna para CO-VID-19 que tuviera una efectividad del 70% al 75%, pero esta protección incom-pleta, sumada al hecho de que muchos estadounidenses dicen que no recibirán una vacuna contra el coronavirus, hace improbable que Estados Unidos logre niveles suficientes de inmunidad para extinguir la enfermedad”.

Me preocupa bastante que la vacunación obligatoria contra el coronavirus pueda convertirse en una batalla campal entre la libertad y el supuesto “bien común”, siendo que yo creo en un paradigma dis-tinto (el que plantea las 5 leyes biológicas de las Nueva Medicina Germánica). En verdad que me apena esta situación, ya que es totalmente falso que las vacunas en realidad de por sí sean agentes que nos puedan “salvar” de esta pandemia. Pero siento que es tan fuerte la creencia en ellas que quienes pensamos distinto terminaremos siendo rechazados por la sociedad y nos veremos obligados a ir a vivir de forma aislada en comunidades de personas con una forma de pensar más libre.

Bueno, tal vez esto último no sea algo malo. Pero igualmente me parece in-justo que aquellos que disfrutan la vida en comunidad y en ciudades terminen obligados a optar otro estilo de vida si desean mantener sus convicciones, ya que el hecho de ‘obligar’ solo deja de manifiesto la severa falta de libertad y el dogmatismo o dictadura científica que está surgiendo en el mundo.

¡Ánimo!R.G.R.

Estimada R.G.R,

Estamos totalmente de acuerdo. En reali-dad la misma enfermedad ha demostrado

Continúa en pág. 23

Cartas al director y la editora ejecutiva

3Edición 194

Tiraje: 17.000 ejemplares Agosto 2020

Director: Gonzalo Carrasco C.Editora ejecutiva: Ruth A. ModraJefa de edición y gestión: Carolina Pérez A.Asistente: Rosy Sobarzo P.Escritores especiales: Dr. Ricardo Soto, Paola Ramírez, Francisco Ríos, Josefina Fuentes,Hugo Peralta, Lorena Castillo, Iván Soto, Luis Quinteros y Pedro Grez.Asesor legal: Carlos López D.Producción audiovisual: Patricio Pinto G. y Cristian Lizana H.Diseño: Willy Román A.Representante legal: Gonzalo Carrasco CurilemImpreso en Aimpresores S.A.

Publicado por El Guardián S.A.Diagonal Paraguay 491 - Santiago - Fono: 2 2633 0695www.guardiansalud.cl - Email: info@guardiansalud.cl

La intención del periódico y sus escritores no es diagnosticar ni prescribir, sino ofrecer información sana que ayude al lector a conocer y cooperar en la común búsqueda de la salud. En el caso de que alguien use esta información sin aprobación de su médico, estará auto prescribiéndose; por el ejercicio de esta libertad, El Guardián de la Salud no asume responsabilidad alguna.El periódico deniega, hasta el máximo permitido por la ley, toda responsabilidad o perjuicio hacia cualquier persona u otra entidad que surja de, o se conecte con, cualquier información contenida en un artículo, material publicitario u otras declaraciones que aparezcan en El Guardián de la Salud.Las posiciones y opiniones expresadas en esta publicación son de exclusiva responsabilidad de quienes las emiten y no representan necesariamente el pensamiento del Director, pero se dan a conocer para reafirmar el derecho que tienen las personas a tener sus propias opiniones y creencias. Más aún, cuando el éxito de la medicina alopática ha sido tan poco que impulsa este derecho en quienes opinan que se justifica renovar y reenfocar la investigación.Todo el contenido de El Guardián de la Salud está protegido por la Ley de Propiedad Intelectual y no se puede utilizar o reimprimir sin permiso escrito del Director.

El resto del material representa publicidad que puede o no estar de acuerdo con nuestra línea editorial.

La publicidad es responsabilidad de cada anunciante.

Las personas deben procurar no volverse dependientes y escoger el producto o terapia que necesiten de manera informada, investigando siempre el origen de dichos bienes o servicios.

Sr. Watcher advierte:Todos los artículos trabajados por el equipo deEl Guardián de la Salud y de carácter informativo, terminan con

Todas las declaraciones que publicamos en El Guardián de la Salud son libres de intención política. No obstante, sabemos que la política influye en las condiciones y hábitos de salud de las personas, por lo que no podemos quedar absolutamente al margen de ella.

El Guardián de la Salud publica mensualmente solo un periódico por vez (además de ediciones ocasionales de la revista de colección ‘Soluciones’).No tenemos ninguna relación o vínculo con otros medios similares.

Mensaje del Director y la Editora Ejecutiva

¡Ganémosle a los robots!

oficial, en un medio hegemónico que solo transmite una “verdad”. Como dijo al-guien por ahí refiriéndose al coronavirus, estas aplicaciones también pueden mutar y transformarse en “buenas” y “malas personas”; un cambio probablemente imperceptible para el usuario.

Es indudable que el uso de las nuevas tecnologías e Internet hasta hoy ha sido muy positivo, pero también nos tenemos que dar cuenta hasta qué punto la tecno-logía puede escaparse de nuestro control y adoptar lo que parece una autonomía que, inocentemente, podríamos estar comenzando a obedecer. Esto, sin darnos cuenta de que es ajena y probablemente hasta contraria a nuestros intereses.

Lo peor de todo es que el temor de mu-chos se comenzó a hacer realidad con la censura dictada por los controlado-res de las aplicaciones y redes sociales más masivas y populares del mundo. Censura que nosotros mismos hemos podido comprobar, dado que en varias ocasiones nos han retirado de las pla-taformas de Facebook un programa de radio que transmitimos desde una esta-ción de frecuencia modulada en el sur

de Chile. Aprovechando la ocasión, te dejamos aquí la invitación para que nos escuches y des tu testimonio u opinión a través del WhatsApp de Ruth: +56 9 5225 8539 (desde donde te podemos mandar el link para que tengas acceso al programa desde cualquier parte de Chile o el mundo).

Afortunadamente, aún tenemos la radio, las revistas y los periódicos, que son manejados por personas y no por algorit-mos. Por ello, queremos seguir adelante por medio de tu apoyo en cada edición, y esperamos que sea de tu completo agrado nuestro nuevo formato de revista, con más páginas para poder entregarte la misma cantidad de información de la forma más amena y humana posible, y que no pueda ser omitida ni censurada por medio de robots.

A contar de la edición de septiembre, búscanos en los kioscos como la revista El Guardián de la Salud. Pero si aún es complejo que nos consigas en la calle porque continúa el confinamiento, puedes suscribirte de forma digital en www.guardiansalud.cl e imprimir tú mismo tu ejemplar si lo deseas en papel.

¡No dejemos de informarnos, aprender, denunciar, y darnos ánimo juntos y con todas las ganas!

Por ahora te dejamos una amplia parrilla de temas para “pasar agosto” y el encierro con salud y sabiduría.

¡Hasta el mes de la Patria!, si Dios así lo permite.

A partir de mediados de los años noventa, los teléfonos móviles comenzaron a circular por todo

el mundo. Así, se empezó a dejar atrás el boom de las ofertas de televisión por cable y de telefonía fija, y posteriormen-te comenzaron a caer también muchos medios impresos, debido a las nuevas aplicaciones de información.

Son muchas las personas que creen que la tecnología ha servido como un gran “libertador” y democratizador, tanto de los procesos burocráticos como de la limitada o coartada libertad de expresión, que con fundamentada razón tantos ale-gaban. Y sí ha tenido esa función. Con el tiempo, la tecnología se pudo popu-larizar y tomar fuerza como método de comunicación entre personas y grupos. También logró encuentros entre personas aisladas que piensan y viven situaciones similares alrededor del mundo.

Con la aparición de la World Wide Web (Internet), se popularizaron los buscado-res, los blogs y el comercio electrónico. De esta forma, comienza a ser mucho más común para todo usuario el término globalización, y la implementación de tecnología y actualizaciones necesarias para su desarrollo.

Pero también siempre hubo voces de alerta acerca de la dependencia exce-siva de la tecnología, así como de los conflictos con la seguridad, vigilancia y control que se podrían generar. Sin mencionar las advertencias de peligro por la pérdida de puestos de trabajo que pudiese ocurrir, al ser sustituidos por inteligencia artificial.

Tener Internet en el teléfono es solo com-parable con la nicotina u otra sustancia adictiva similar, ya que es muy difícil de dejar (intenta dejar de usar el "teléfono inteligente" o quitárselo a sus hijos, y entenderás de lo que estamos hablando).

Hoy en día tenemos muchas razones para desconfiar del contenido que nos apor-

ta la tecnología, especialmente en este particular contexto de pandemia. Esto debido a que existe una nula disposición de parte de los dueños de los buscadores más grandes, de informar de forma com-parativa, con profesionales que contrasten las teorías oficiales, con educación real y de fácil comprensión acerca de numerosos temas. Por ejemplo, de qué tratan los tests, cómo se hacen las estadísticas, cómo se descubren los virus y las bacterias, o qué tipo de relación biológica existe entre el medio interno y externo a nuestro orga-nismo. Muchos menos pretenden mostrar las denuncias de fraudes que ocurren en distintas partes del mundo, dentro de hospitales y otros centros de salud. Hoy todo esto está siendo omitido. Este tipo de información es seleccionada y etique-tada por robots para que su exposición sea mucho menor, y en muchos casos es directamente censurada.

El problema es que al tener menos prensa en papel (impresa), se ha vuelto aún más fácil un tipo de censura sutil pero potente. Muchos tememos que, por lo menos en gran parte, la web y las aplica-ciones favoritas de las personas se estén transformando, al igual que la televisión

Ruth ModraNaturópata Holístico

Editora Ejecutiva El Guardián de la Salud

Gonzalo CarrascoIng. Ejecución Industria AlimentariaDirector El Guardián de la Salud

4 Edición 194

CoMPILADo PoR EQuIPoEL GuARDIán DE LA SALuD

El hígado es uno de los órganos más importantes del cuerpo, ya que una de sus principales funciones es la

filtración de toxinas. Ahora, si la persona tiene problemas con el exceso de peso o un nivel alto de azúcar en la sangre, sus análisis de sangre también pueden mostrar enzimas hepáticas altas, lo que indicaría que tiene un hígado graso. Un hígado lleno de grasa dificulta la desin-toxicación, promueve la inflamación, puede aumentar los cálculos biliares y estadísticamente aumenta el riesgo de ataque cardíaco.

Cuando más del 5 al 10% del peso del hígado es grasa, se conoce como enfer-medad del hígado graso. Inicialmente, las personas no muestran ningún síntoma de esta enfermedad, pero con el tiempo comienzan a sentir náuseas, fatiga, in-comodidad y una sensación general de malestar. Si el hígado graso progresa sin control, puede conducir a complicaciones graves a largo plazo como cirrosis.

Entonces, ¿si tengo un hígado graso sig-nifica que tengo que comer menos grasa? Incorrecto. El culpable de esta condición no es un exceso de grasa, sino demasiados azúcares y carbohidratos. De hecho, de-masiados carbohidratos son los principales

acumulación de grasa en el hígado. Por ejemplo, si una persona pesa 85 kilos, un 5% representa tan solo 4 kilos. Ahora, una pérdida del 7-10% del peso corporal (8,5 kilos para nuestro ejemplo) puede disminuir aún más la inflamación.

La mejor manera de bajar de peso y man-tenerlo es dar pequeños pasos de cambios de hábitos hacia tu objetivo. Por ejemplo, si estás acostumbrado a tomar bebidas gaseosas todos los días, un pequeño paso sería reducir esa cantidad a solo los fines de semana en un inicio, para posterior-mente dejarlo solo para alguna ocasión especial. Las dietas extremas y aquellas que promueven el ayuno son insostenibles y pueden ser duras para el hígado. De hecho, según las investigaciones del Dr. Ryke Geerd Hamer, uno de los factores gatillantes del hígado graso es tener un conflicto de inanición o miedo a morir de hambre, y justamente una dieta restrictiva puede activar este tipo de conflicto, ya que nuestro cuerpo cree que estamos viviendo una situación de hambruna.

2. Cambia tu dieta por una baja en carbohidratos y sin azúcar

Un nivel alto de azúcar en la sangre con-duce a hígado graso. Para comenzar a revertirlo, debes reducir el azúcar en la sangre a niveles saludables, y esto se logra con una dieta de alimentos inte-

responsables del exceso de grasa abdo-minal que es un signo seguro de hígado graso. Esto se debe a que el exceso de azúcar le indica al hígado que almacene dicho azúcar como grasa.

Continúa en pág. 8

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grales abundante en vegetales fibrosos, grasas saludables y proteínas, pero baja en alimentos que aumentan el azúcar en la sangre. La mayoría de las personas también comenzarán a perder el exceso de grasa con esta forma de comer, lo que descargará aún más el hígado.

Alimentos en los que debes enfocarte:

§ Frutas y vegetales. Trata de comer variado: prueba berries de todo tipo, verduras de hoja verde como lechuga y espinaca, brotes de alfalfa, brócoli, coliflor, pimientos, pepinos, berenjenas y tomates.

§ Grasas saludables. Usa aceites salu-dables, como el aceite de oliva extra virgen; frutos secos como nueces; semillas como las de girasol; palta y aceitunas; todos contienen una alta concentración de grasas saludables.

§ Pescado y carnes magras. Consume pescado dos veces por semana. Los huevos y las aves magras, como el pollo y el pavo sin piel, están bien con moderación, al igual que la carne roja magra.

§ Legumbres. Incluye porciones muy pequeñas de porotos, arvejas, lentejas o garbanzos al menos dos veces por semana.

Actualmente no hay medicamentos dis-ponibles para tratar la enfermedad del hígado graso. Pero la buena noticia es que puedes revertir el hígado graso con cambios en tu alimentación y tu estilo de vida antes de que sea demasiado tarde.

1. Pierde el exceso de peso

La Asociación Americana para el Es-tudio de las Enfermedades del Hígado (AASLD) recomienda perder del 3 al 5% del peso corporal para reducir la

Hígado graso14 remedios naturales para sanar tu hígado

5Edición 194

Un derrame cerebral o accidente cerebrovascular ocurre cuando un vaso sanguíneo que transporta

oxígeno y nutrientes al cerebro está blo-queado o se rompe. Esto se manifiesta físicamente con los siguientes síntomas:

§ Debilidad en un lado del cuerpo§ Entumecimiento de la cara§ Dolor de cabeza inusual y severo§ Pérdida de la visión§ Entumecimiento y hormigueo§ Inestabilidad al caminar

Un derrame cerebral es una crisis de salud grave y debes buscar ayuda médica de inmediato si sientes tales síntomas.

10 cosas que puedes hacer para prevenir un derrame cerebral

Según un estudio de 50 años de duración sobre los accidentes cerebrovasculares en la India, donde estos son más comunes que en los países occidentales, controlar los factores de riesgo fue la mejor opción para la prevención.

El conocimiento es poder. A continuación detallamos los 10 focos principales de atención, basados en evidencia, para la prevención de un derrame cerebral:

Derrame cerebralPuedes prevenirlo si sabes cómo

informado de pág. 22).§ Come de 4 a 5 tazas de frutas y verduras

todos los días, una porción de pescado dos o tres veces por semana y varias porciones diarias de granos enteros y lácteos bajos en grasa.

§ Haz más ejercicio: al menos 30 minutos de actividad al día y más, si es posible.

§ Deja de fumar si lo haces.

hincapié en una dieta balanceada repleta de frutas y verduras a diario, y pescado varias veces a la semana, a la vez que evitas los alimentos procesados y limitas la carne roja y los alimentos fritos y salados.

nista para crear una estrategia personal de pérdida de peso.

5. Tabaquismo: deja de fumar

Fumar acelera la formación de coágulos de diferentes maneras. Espesa la sangre y aumenta la cantidad de acumulación de placa en las arterias. Junto con una dieta saludable y ejercicio regular, dejar de fumar es uno de los cambios de estilo de vida más poderosos que te ayudarán a reducir significativamente tu riesgo de accidente cerebrovascular.

1. Hipertensión: bájala

La presión arterial alta o hipertensión es el mayor contribuyente al riesgo de derrame cerebral tanto en hombres como en mujeres. Es un factor enorme, que duplica o incluso cuadruplica tu riesgo de accidente cerebrovascular.

Hoy en día, las personas tienen fácil ac-ceso a mediciones regulares de su presión arterial, ya sea una lectura rápida en el supermercado o por medio de la compra de una máquina económica para usar en casa.

§ Tu objetivo ideal: mantener una pre-sión arterial de menos de 120/80 si es posible.

§ Reduce la sal en tu alimentación, ideal-mente a no más de 1.500 miligramos por día (aproximadamente media cu-charadita).

§ Aumenta las grasas poliinsaturadas y monoinsaturadas, evitando los ali-mentos ricos en grasas saturadas. (Más sobre esto en la sección Consumidor

2. Inactividad física: muévete

El ejercicio contribuye a bajar de peso y a reducir la presión arterial, pero también se destaca por sí solo como un reductor independiente de derrames cerebrales.

§ Tu objetivo: hacer ejercicio a una in-tensidad moderada al menos cinco días a la semana.

§ Sal a caminar, cuando sea posible, idealmente después del desayuno o almuerzo.

§ Asiste a un gimnasio y trabaja de acuer-do a un plan de objetivos.

§ Cuando hagas ejercicio, alcanza el nivel en el que respiras con dificultad, pero aún puedes hablar.

§ Sube por las escaleras en lugar de usar el ascensor, según tus posibilidades.

§ Si no tienes 30 minutos consecutivos para hacer ejercicio, divídelo en se-siones de 10 a 15 minutos un par de veces al día.

Un ejercicio popular para la pre-vención y recuperación de un

accidente cerebrovascular es el Tai Chi. El Tai Chi es un ejercicio chino que consiste en movimientos lentos y elegantes practicados en una posición semi en cuclillas. Una investigación del 2015 mostró que el Tai Chi ayu-da a mejorar el equilibrio corporal y reduce la depresión y la ansiedad. En el 2017, muchos de esos mismos investigadores publicaron un estudio que sugiere que el Tai Chi tiene un papel como medida de protección contra el accidente cerebrovascular isquémico en adultos mayores.

3. Alimentación poco saludable: equilíbrala

Ya que funciona bien para prevenir el accidente cerebrovascular, es bueno hacer

4. Obesidad: baja de peso

El ejercicio y la alimentación saludable ayudan a reducir la obesidad, lo que baja aún más el riesgo de accidente cerebrovas-cular. Los factores de riesgo del derrame cerebral no existen de forma aislada: están altamente interconectados. Los mismos cambios en el estilo de vida que evitan el accidente cerebrovascular también pueden contribuir a reducir el riesgo de sufrir un ataque cardíaco o desarrollar diabetes, cáncer o demencia.

Si tienes sobrepeso, bajar tan poco como 5 kilos puede tener un impacto real en tu riesgo de accidente cerebrovascular. Si la mayor parte de la grasa corporal de una persona se encuentra alrededor de la cintura en lugar de las caderas, entonces tiene un riesgo mayor de enfermedad cardíaca y diabetes tipo 2. Las mujeres con un tamaño de cintura mayor de 89 cm y los hombres con un tamaño de cintura mayor de 101 cm también tienen un riesgo más elevado.

Si bien un índice de masa corporal (IMC) ideal es de 25 o menos, eso puede no ser realista para ti. Trabaja con un nutricio-

§ Busca ayuda profesional sobre la forma más adecuada para dejar de fumar (pas-tillas o parches de nicotina, hipnosis, PNL, etc.).

§ No te rindas. La mayoría de los fuma-dores necesitan varios intentos para dejar de fumar. Ve cada intento como un paso más cerca de vencer con éxito este mal hábito.

6. Riesgo cardíaco: trátalo

La enfermedad cardíaca y el riesgo de accidente cerebrovascular van de la mano. Un problema de ritmo cardíaco llamado fibrilación auricular es un importante factor de riesgo de derrame cerebral si no se trata. La fibrilación auricular es una forma de latidos cardíacos irregulares que hace que se formen coágulos en el corazón. Esos coágulos pueden viajar al

Continúa en pag. 9

6 Edición 194

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