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59 Impactos de la vivienda en la salud. Morbi-mortalidad. Agentes etiológicos y causas atribuibles. Aunque en la Región de las Américas la disminución de la mortalidad por enfermedades transmisibles se interpreta como efecto de ciertas mejoras en cuanto a condiciones de vida y tecnología básica y de hecho el riesgo de morir por dichas enfermedades se redujo en el hombre de 112,4 defunciones por 100 000 habitantes en el período 1980 – 85 a 67,4 en el 1995 – 00 y de 89 a 51,2 en la mujer, continúan representando un porcentaje importante en Centroamérica, Brasil, la Región Andina y México. La introducción de tecnologías simples ha parecido responsable de la reducción de muertes relacionadas a enfermedades diarreicas agudas y a infecciones respiratorias agudas en los niños de la Región. No obstante la tuberculosis, la malaria y el cólera se consideran enfermedades re-emergentes en el continente. De 1980 al 97 la incidencia de la tuberculosis aumentó en un 13 %, principalmente en México, la Región Andina y Brasil. El SIDA siguió impactando principalmente América del Norte, Brasil y México (5) . Las neoplasias malignas han mantenido relativamente estables sus prevalencias y sus diferencias territoriales: 9 % de mortalidad en Centroamérica y 25 % en América del Norte (1995 – 00). Además los trastornos mentales y psicosociales continúan afectando la región, incluida la violencia y la drogadicción. Los estados depresivos y las fobias simples atacaron principalmente a las mujeres. Se ha estimado de otra parte que no menos de 17 millones de niños en ALC estarían afectados por trastornos psiquiátricos que requieren intervención. El Banco Mundial estima que el 8 % de los años de vida perdidos ajustados en función de la discapacidad son atribuibles a las enfermedades mentales en ALC, seguida del cáncer con 5,2 % y las enfermedades cardiovasculares con 2,6 % (9) . En la Región, la salud aún se resiente por las tasas de las enfermedades transmisibles de diversos territorios y el creciente papel de las crónicas no transmisibles en otros. En su etiopatogenia se combinan tanto los agentes infecciosos relacionados a los problemas de la insalubridad como las causas vinculadas a las condiciones y la calidad de la vida en la transición de la sociedad a nuevas formas de desarrollo. Las tendencias de los nuevos estilos de vida están acelerando el tránsito y concomitancia de los factores de riesgo de la era biológica de la higiene que matizó el pasado siglo, a la

5. Impactos de la vivienda en la salud

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Impactos de la vivienda en la salud.

Morbi-mortalidad. Agentes etiológicos y causas atribuibles.

Aunque en la Región de las Américas la disminución de la mortalidad por enfermedades

transmisibles se interpreta como efecto de ciertas mejoras en cuanto a condiciones de

vida y tecnología básica y de hecho el riesgo de morir por dichas enfermedades se

redujo en el hombre de 112,4 defunciones por 100 000 habitantes en el período 1980 –

85 a 67,4 en el 1995 – 00 y de 89 a 51,2 en la mujer, continúan representando un

porcentaje importante en Centroamérica, Brasil, la Región Andina y México. La

introducción de tecnologías simples ha parecido responsable de la reducción de

muertes relacionadas a enfermedades diarreicas agudas y a infecciones respiratorias

agudas en los niños de la Región. No obstante la tuberculosis, la malaria y el cólera se

consideran enfermedades re-emergentes en el continente. De 1980 al 97 la incidencia

de la tuberculosis aumentó en un 13 %, principalmente en México, la Región Andina y

Brasil. El SIDA siguió impactando principalmente América del Norte, Brasil y México (5).

Las neoplasias malignas han mantenido relativamente estables sus prevalencias y sus

diferencias territoriales: 9 % de mortalidad en Centroamérica y 25 % en América del

Norte (1995 – 00). Además los trastornos mentales y psicosociales continúan afectando

la región, incluida la violencia y la drogadicción. Los estados depresivos y las fobias

simples atacaron principalmente a las mujeres. Se ha estimado de otra parte que no

menos de 17 millones de niños en ALC estarían afectados por trastornos psiquiátricos

que requieren intervención. El Banco Mundial estima que el 8 % de los años de vida

perdidos ajustados en función de la discapacidad son atribuibles a las enfermedades

mentales en ALC, seguida del cáncer con 5,2 % y las enfermedades cardiovasculares

con 2,6 % (9).

En la Región, la salud aún se resiente por las tasas de las enfermedades transmisibles

de diversos territorios y el creciente papel de las crónicas no transmisibles en otros. En

su etiopatogenia se combinan tanto los agentes infecciosos relacionados a los

problemas de la insalubridad como las causas vinculadas a las condiciones y la calidad

de la vida en la transición de la sociedad a nuevas formas de desarrollo. Las tendencias

de los nuevos estilos de vida están acelerando el tránsito y concomitancia de los

factores de riesgo de la era biológica de la higiene que matizó el pasado siglo, a la

60

química de la centuria que acaba y a la física que se proyecta al futuro, relacionada a la

electrónica en la cultura de la informatización no equitativamente distribuida a los

pueblos. Los cambios en los estilos de vida y en las conductas de riesgo están

exacerbando el papel de los estresores psicosociales. Para grandes masas de

población las limitaciones en la calidad de vida asociadas a la precariedad económica

continúan impulsando nuevas enfermedades, enfermedades re-emergentes y

enfermedades que siguen actuales.

Diferentes estresores actúan con un grado de intensidad tal que desatan reacciones

agudas de corta latencia bajo un claro principio de causa-efecto. No obstante, lo más

común es la exposición de baja intensidad a múltiples estresores de larga latencia cuyo

efecto se rige por probabilidades individuales, lo que permite hablar de causas

atribuibles.

Los estresores están presentes en distinto grado en todos los ambientes que el hombre

enfrenta, pero su impacto resulta más connotado allí donde la susceptibilidad de este

hombre es más acusada, particularmente en la vivienda. A ello hay que añadir la

inequidad de la exposición, pues el amplio espectro de las condiciones de vida en las

distintas capas sociales presupone un gradiente de tensiones ambientales. En las

viviendas deficientes se localiza la población de mayor riesgo de afectación por

enfermedades relacionadas con la vivienda y el entorno. Por ello podría adjudicarse a la

vivienda el papel de determinante de salud.

Afecciones transmisibles

Afecciones relacionadas al saneamiento básico

El consumo doméstico de agua, si antes la misma no es sanitariamente tratada,

comporta el riesgo de transmitir a los residentes un amplio espectro de enfermedades

de origen hídrico como diarreas, vómitos, gastroenteritis, cólera, tifus, etc., lo que

resulta consecuencia de los agentes patógenos presentes en las aguas de consumo,

tales como bacterias patógenas, virus entéricos, protozoarios y helmintos parásitos.

Estos agentes llegan al hombre por inhalación, ingestión y contacto. Asimismo

alimentos no adecuadamente lavados y cocidos pueden transmitir bacterias como la E.

Coli, la salmonella y parásitos nocivos a la familia. La falta de higiene vinculada a la

escasez, no utilización apropiada o contaminación del agua se asocia a alta incidencia

61

de enfermedades diarreicas y cutáneas como el impétigo y la septicemia, así como

enfermedades oculares como el tracoma y la conjuntivitis (25). La contaminación de las

aguas de consumo con las aguas servidas puede constituir un factor de riesgo

microbiológico y aún químico.

Según el Centro Latinoamericano de Demografía (CELADE), al analizar los factores de

riesgo para la supervivencia infantil en Costa Rica (referidas al estado del material de la

vivienda, el abastecimiento de agua, el saneamiento y el hacinamiento) se encontraron

índices de mortalidad infantil de 27 por 1000 en las familias que habitaban viviendas en

malas condiciones, mientras que ese índice era de 16 por 1000 para los que ocupaban

viviendas adecuadas1 y el grado de deterioro habitacional representaba el riesgo más

definitivo(7). En un estudio efectuado en Sudáfrica se observó que, de 132 niños

menores de un año hospitalizados con infección aguda grave de las vías respiratoria

inferiores, el 70% tenía antecedentes de intensa exposición cotidiana al humo generado

por el fuego utilizado para fines domésticos (26).

En 1988 se realizó una encuesta a personas mayores de 15 años de baja condición

socioeconómica en la comuna nororiental de Medellín, Colombia, donde se encontró

que la prevalencia de enfermedades respiratorias fue más alta en el grupo de personas

que cocinaban los alimentos dentro del dormitorio, en aquellas cuyo dormitorio carecía

de ventanas al exterior, en las que dormían hacinadas, y las que tenían menos años de

escolaridad. El riesgo de enfermedades respiratorias aumentó con la edad en ambos

sexos. Se encontró también que la mala calidad de la vivienda (hacinamiento y mala

ventilación) y del lugar del trabajo también aumenta el riesgo de padecer de

tuberculosis(27).

Con miras a determinar si los niños se ven afectados por enfermedades respiratorias

debido a la exposición al bióxido de nitrógeno (NO2) proveniente de cocinas de gas y

1 Cada país tiene su propia definición de lo que es una vivienda adecuada basados en la

información disponible sobre los últimos censos de vivienda donde se clasificó el parque habitacional enbase a información relativa a los materiales de construcción predominantes (por ejemplo, materiales demuros, pisos y techos) y al tipo de vivienda. En algunos países incluso se recurre a otras variables comoservicios sanitarios, abastecimiento de agua, eliminación de excretas, y año de construcción. (VéaseCEPAL, “Alojar el desarrollo: una tarea para los asentamientos humanos”, donde se detalla el criterioutilizado por cada país).

62

calentadores de pared o del suelo en la vivienda, se investigaron 1.400 hogares en

Alberquerque, Nuevo México, sin poder demostrar que haya relación en las variaciones

de las concentraciones de bióxido de nitrógeno en el aire interno debido al uso de

cocinas y calentadores de gas(28). Sin embargo, en La Habana se halló que las

afecciones respiratorias padecidas por los niños se vinculaban a una ventilación

deficiente de su vivienda, ubicación de la cocina en una habitación de uso común y al

número de fumadores a los cuales estaba expuesto (29).

Una variable que añade complejidad a los estudios de la contaminación del aire interior,

y que debe tenerse en cuenta, es la inhalación de humo de cigarrillo por parte de los

lactantes y los niños pequeños. En un estudio realizado en un suburbio residencial de

Londres, se demostró que los hijos de padres que fuman en el hogar corren un mayor

riesgo de bronquitis y neumonía que los hijos de padres que no fuman(24). Esto se

agudiza cuando las condiciones de la vivienda presentan falta de ventilación y

hacinamiento.

Los vertebrados mamíferos que el hombre conscientemente lleva a su casa son

frecuentemente los perros y los gatos. Ambos transmiten enfermedades conocidas por

zoonosis a sus ocupantes. La más temida es la rabia, aunque también se cuenta la

leptospirosis y la toxoplasmosis.

Diferentes insectos y microbios son mecánicamente trasladados por las mascotas a la

vivienda, entre ellos las pulgas y las garrapatas, las que constituyen vectores de

enfermedades. En las heces de estos animales frecuentemente se hallan lombrices y

parásitos que pueden transmitirse al hombre.

Las aves, trasladan también enfermedades y desprenden polvo de sus plumas que

constituyen un fuerte alergeno para los residentes. Los roedores mayormente no son

introducidos de forma voluntaria por el hombre, pero constituyen peligrosos vectores de

enfermedades, la más conocida es la peste, que asolaba los pueblos europeos en la

edad media.

Entre los insectos que penetran la vivienda se cuentan las hormigas, las moscas, los

mosquitos (causantes del paludismo, el dengue, la filariasis), las cucarachas, las trazas,

63

las polillas, las chinches, el comején y también arácnidos. Algunas de estas especies

comportan riesgo a la salud, operando como vectores de enfermedades.

En la vivienda rural en las Américas, habitan las chinches triatominos, portadoras del

protozoo flagelado Trypanosoma cruzi causante del mal de Chagas que amenaza a

unos 100 millones de personas con 16 - 18 millones de infectados en 17 países. De otra

parte, las picaduras de los flebótomos traslada la Leishmania trópica que produce la

Leshmaniasis, mal que afecta a los países centroamericanos y sudamericanos con la

excepción de Chile (30).

La dispersión aérea de enfermedades virales se facilita por el hacinamiento o por la

acción de los sistemas de ventilación. El contagio aéreo es causante de muchas

infecciones respiratorias agudas, las que frecuentemente son consideradas como la

más extendida causa individual de morbilidad (31).

Afecciones relacionadas a los bioaerosoles.

Los grandes bioaerosoles se depositan en la nariz (diámetro aerodinámico de 10 a 50

µm), en tanto los pequeños (2 - 10 µm) alcanzan las vías aéreas intratorácicas y los

muy pequeños (< 2 µm) los alvéolos produciendo la infectación. Se calcula que el 30 %

de los casos de pneumonía Legionella son adquiridos en edificaciones por esta vía (32).

La dermatitis por contacto, con inflamaciones agudas y crónicas, es causada por

efectos alergénicos, tóxicos o irritantes. Aparece luego de la exposición a los

bioaerosoles. Los eczemas atópicos (rash de la piel) de la niñez temprana son

agravados por los bioaerosoles y por la perspiración con altas temperaturas. La urticaria

por contacto tiene también causalidad alérgica. Reacciones inflamatorias locales

crónicas o agudas pueden ser producidas por bioaerosoles, a través de procesos de

infectación, alergia o mecanismos no alergénicos. La rinitis y la conjuntivitis están

comúnmente asociadas a las exposiciones a los contaminantes del aire interior de la

vivienda, aunque también pueden originarse por aire seco o frío. Los bioaerosoles

producen sinusitis, dermatitis por contacto y otitis.

Endotoxinas provenientes de dehumidificadores contaminados pueden desatar una

suerte de influenza. La alveolitis por su parte conduce a la falta de aire y es causada por

64

mecanismos no específicos y la neumonitis por hipersensibilidad resulta la más

frecuente enfermedad causada por la exposición a los antígenos de las heces de aves.

La micotoxicosis aparece con fatiga e irritabilidad y produce alteraciones en la función

inmune.

También los bioaerosoles han sido vinculados al síndrome del edificio enfermo, el que

parece una consecuencia de la falta de ventilación, las altas temperaturas, los niveles

de polvo o ciertos químicos vaporizados de los materiales de construcción, el fumar

pasivo y factores psicogénicos y sociales, pero en todo ello no se descarta la acción de

los bioaerosoles.

En el cuadro 16 se especifican procesos de enfermedad asociados con diferentes

bioaerosoles.

Cuadro 16

Enfermedades y sus causas en la vivienda

Infeccio-

sos

Alerge-

nos

Irritantes y

toxinas

Enfermedades VirusBacte

rias

Hon

gos

Hon-

gos

Po-

len

Ácaros y otros

artrópodos

O-

trosEndotoxinas

Micoto

xinas

Asma X X X X X X X ? ?

Pneumonia X X X

Alveolitis X ? X X X ? ?

Fiebre del

dehumidificadorX ? X ?

Aspergillosis X X

Rinitis X X X X X X X ?

Dermatitis X X X X

Micotoxicosis X

Fuente: Lippman, M., 1992.

65

Los riesgos a la salud derivados de la exposición a los agentes infecciosos están pues

vinculados a la situación interior de la vivienda y a los factores específicos del

hospedero, en tanto la emisión de los virus está relacionada a la conducta humana

(estornudos, emisión de microgotas al hablar). De otra parte la eficiencia de la

transmisión depende de la localización de las fuentes con relación a los receptores, la

que se vincula en gran medida a la circulación del aire. Los aerosoles atmosféricos son

eficientes portadores de microbios. La temperatura y la humedad influyen en la

transmisión cambiando las dimensiones de las partículas y afectando el tiempo de

sedimentación. Con humedades sobre 65 % se incrementa la incidencia de las

enfermedades respiratorias superiores, así como los efectos adversos en los asmáticos

y alérgicos. El tipo de agente, su patogenicidad y la susceptibilidad del hospedero

determinan si ocurrirán afecciones del tracto respiratorio bajo.

Riesgos a la salud relacionados a los procesos mórbidos

Diversos agentes microbianos penetran al ambiente interior de la vivienda en la forma

de enfermedades de las mascotas (vg: toxoplasmosis en los gatos o conejos, psitacosis

en las aves), los cuales se transmiten a los humanos por la manipulación de los

animales domésticos. Asimismo algunos virus animales (vg: virus de la leucemia del

gato) resultarían también transmisibles. La susceptibilidad individual tiene un papel

destacado en la cuantificación del riesgo de desarrollar infecciones. Los defectos

genéticos del sistema inmune, la infancia, la vejez se asocian a los incrementos en la

susceptibilidad. Aunque la inmunización puede jugar un papel paliativo, las condiciones

que incrementan la susceptibilidad serían:

• enfermedades preexistentes (enfermedad crónica del pulmón, inmunosupresión

debida a la quimioterapia, cáncer, SIDA, diabetes)

• hábito de fumar

• consumo de alcohol

• dieta (baja en los nutrientes necesarios, vitaminas y minerales)

• exposición ocupacional a los irritantes de las vías aéreas

• exposición ambiental a los irritantes de las vías aéreas

En cuanto a los alergenos, en los individuos predispuestos a la alergia o al asma, se

puede remarcar que el riesgo de sensibilización depende de:

• la potencia del alergeno

66

• el nivel de exposición

• la duración de la exposición

Altos niveles de exposición a alergenos por cortos períodos de tiempo pueden resultar

más peligrosos que una dosis similar distribuida a lo largo de un período de tiempo más

largo. En cuanto a los antígenos se puede señalar que su potencia depende de las

proteínas antigénicas involucradas en particular. Los ácaros del polvo doméstico y los

antígenos de las cucarachas son usualmente considerados como potentes, el polen

relativamente potente y los antígenos del moho menos potentes. Las endotoxinas

liberadas por las bacterias pueden distribuirse a través del ambiente doméstico por el

sistema de ventilación. Su inhalación puede causar síntomas de fiebre, sudoración,

dolor de cabeza, rinitis, asma y falta de aire una horas luego del contacto y la duración

se extiende a lo largo del día.

Afecciones no transmisibles

Accidentes

El daño es la mayor causa de fallecimientos en el mundo (primera causa de muerte en

norteamericanos de 1 a 44 años, 63% de las muertes en personas de 1 a 24 años en el

Canadá). Las lesiones traumáticas ocasionan 3 millones de muertes por año y son

responsables de una tercera parte de las admisiones hospitalarias. Globalmente, sus

costos anuales médicos, sociales y de pérdida de productividad exceden los 500

millones de dólares. La mortalidad por daños en los países en desarrollo es mayor que

en los desarrollados. Los daños intencionales incluyen asaltos, violencia, homicidio y

constituyen un problema que atañe a los derechos humanos, el desarrollo social, la

cooperación internacional y la fuerza de la ley. Los niños, los ancianos y los grupos en

desventaja son grupos vulnerables, quienes encuentran en el hogar el escenario de

muchos accidentes(33), no obstante existir información preventiva. En un universo de

5370 menores de 10 años encuestados, el 83 % declaró haber recibido información

sobre prevención en un municipio de la ciudad de La Habana (34). Sin embargo, los

accidentes en el hogar han sido menos atendidos que los del trabajo. En ellos se

combinan incidentes intencionales y no intencionales.

67

En muchos casos los accidentes y la violencia son también consecuencias de las

condiciones inadecuadas de la vivienda. Las lesiones producidas por caídas son

frecuentes en los alojamientos de mala calidad, así como en las viviendas construidas

en laderas abruptas donde los niños están particularmente expuestos. Una encuesta

realizada entre 599 menores de 5 años residentes en las favelas de Río de Janeiro

reveló que los accidentes representaban el 19% de todos los problemas de salud y

entre ellos se destacaban por su frecuencia las caídas (66%), las heridas (17%) y las

quemaduras (10%) (35).

En Ecuador adjudicaron a las precarias condiciones de la vivienda de amplios grupos de

la población, el aumento de riesgos epidemiológicos y ambientales, el deterioro de la

salud, incluyendo aumento de trastornos mentales y de comportamiento en jóvenes y

adultos, e incremento de disociación familiar, accidentes, violencias y delincuencia (36).

La violencia juvenil en El Salvador es un fenómeno psicosocial que se ha analizado

insistentemente en forma sectorial. En una encuesta realizada en 1993 se reveló que el

principal problema del país era la delincuencia y las maras1. Definen los patrones

sociológicos de las maras como: estrato social bajo y medio bajo, con un promedio de

edad de 18,5 años, provenientes de familias desintegradas, generalmente viven al

menos cuatro hermanos en hacinamiento, con ausencia comunitaria de espacios

sociales y recreativos, y la mayoría no tiene trabajos estables (37).

Afecciones relacionadas a la calidad de la vivienda

En la ciudad de Nueva York se llevó a cabo un estudio sobre infantes con bajo peso al

nacer, menos de 2.501 gramos, y se encontró que existe una relación entre los niveles

de infantes de muy bajo peso al nacer y las condiciones de la vivienda pues todos ellos

provenían de zonas donde ocurrió entre 1970 y 1980 la mayor destrucción y deterioro

de las viviendas (38).

Afecciones relacionadas al ruido.

El rango de los efectos en salud se extiende desde las pérdidas del umbral auditivo

temporal o permanentes hasta los efectos psicosomáticos inespecíficos constituidos

primariamente por un conjunto de reacciones compensativo adaptativas involucradas en

1 Maras es la palabra que se utiliza en El Salvador para referirse a lo que en otros países se llaman pandillas.

68

la reacción general de estrés. Ruidos inesperados desatan la reacción de avivamiento,

caracterizada por una etapa de orientación manifiesta en el cambio de la resistencia

eléctrica de la piel, seguida de una etapa de prevención matizada por el aumento de la

resistencia vascular periférica. A la primera puede seguir la habituación, no así a la

segunda. Se adscribe también una gama de desórdenes del psiquismo (39).

En la vivienda la presencia inmoderada de sonido externo puede convertirse en una

intrusión en la privacidad, dificultando la comunicación interpersonal y tareas de

concentración (lectura), distracción (juegos) y aún el reposo simple. Trastornos del

sueño, de la memoria inmediata, de la digestión y del sistema nervioso, así como de

funciones endocrinas pueden aparecer como resultado del estrés del sonido, lo cual

depende en gran medida de la labilidad de los sujetos expuestos. Los enfermos y las

personas mayores constituyen grupos vulnerables. La reacción más común a la

exposición al ruido en el ámbito de la vivienda es la molestia, la cual ha servido en no

pocas ocasiones para establecer los valores límites de exposición en el ámbito

comunal.

Afecciones por exposición a las vibraciones

Las vibraciones se trasladan al hombre por contacto, pudiendo ser clasificadas en

generales y locales. Las primeras actúan sobre los puntos de sustentación del cuerpo,

las segundas sobre sus extremidades. En la transmisión de las vibraciones juegan un

importante papel los fenómenos de impedancia (absorción en las vértebras) y de

resonancia (discos intervertebrales, ligamentos, tendones y músculos). Efectos

generalizados de las vibraciones aparecen con frecuencias superiores a los 5 Hz,

incrementando el consumo de oxígeno y la ventilación de los pulmones, la fatiga y las

caídas. La cadera, los hombros y el abdomen reaccionan con oscilaciones hasta los 15

Hz. El cráneo, la cabeza y los hombros entre 20 y 30 Hz; en tanto los glóbulos oculares

responden con frecuencias de 60 a 90 Hz. La exposición a las vibraciones puede

traducirse en nerviosismo, lumbalgias, falta de irrigación sanguínea del hígado y el

riñón, náuseas, entre otros efectos. En el ambiente laboral es conocido el Síndrome de

Raynaud cuya naturaleza es una alteración vasomotora (40).

69

Afecciones relacionadas al microclima y la ventilación

El hombre vive inmerso en un océano de aire, soporta su presión (lo que le permite

asimilar el oxígeno en la sangre) y responde a su temperatura a través de un delicado

sistema de equilibrio en procura de sostener una temperatura central aproximadamente

constante, la que es necesaria a la vida. Las transferencias calóricas entre el cuerpo y

el ambiente pueden expresarse según:

donde:

S: acumulación de calor en el cuerpo

M: energía libre metabólica

E: calor de evaporación

W: trabajo

R: calor radiante

C: calor convectivo

K: calor conductivo

El cuerpo humano genera calor a través del metabolismo y absorbe calor a través de la

radiación infrarroja del medio, en tanto pierde calor por evaporación-conducción,

convección y radiación. La temperatura central es generada por el calor producido en

los tejidos. La función de transferencia de la piel es disipadora. Cuando el gasto de

energía libre es mínimo para mantener el calor central se dice que el individuo está en

neutralidad térmica. Los gastos exagerados que comprometen la economía del

organismo se manifiestan en signos de afectaciones neuropsíquicas y metabólicas, que

en el caso del estrés por altas temperaturas serían nerviosismo, fatiga, irritabilidad,

vértigos, palpitaciones, etc. llegando al síncope. En estrés por frío se observa

70

destrucción de tejidos, eritemas, enfriamientos generalizados, accidentes (41, 42). Los

valores de neutralidad térmica han sido señalados según:

Temperatura 19 - 25 °CHumedad relativa 60 %corriente de aire 0,15 m/seg.

Afecciones de las radiaciones ionizantes

Es la ionización de los átomos del cuerpo humano la causa del daño biológico. Los

iones son altamente reactivos y atacan estructuras críticas de las células, incluyendo las

proteínas y el DNA. Los efectos se dividen en dos tipos básicos:

• efectos determinísticos (de umbral)

• efectos estocásticos (no de umbral)

Los primeros siguen una relación de dosis-respuesta en el individuo. Los estocásticos

proveen una cierta probabilidad de afectación para el sujeto expuesto. Una presentación

esquemática de los efectos de la exposición a la radiación ionizante permite separar los

tipos de efectos:

Cuadro 17

Efectos y condiciones de ocurrencia de las radiaciones ionizantes

Efecto Condiciones de ocurrenciaTempranos muerte muy alta dosis o tasa de dosis: gran parte del cuerpo

eritema muy alta dosis o tasa de dosis: área de la pielesterilidad muy alta dosis o tasa de dosis: testículos y ovarios

Tardíos Noestocásticos

Cambios nomalignos

muy alta dosis: variadas ocasiones de manifestación

Cambios deldesarrollo

muy alta dosis: introducción al embrión

retardo mental muy alta dosis: manifestado al nacimiento

Estocástico enfermedadesmalignas

cualquier dosis o razón de dosis: se manifiesta añosdespués

defectoshereditarios

cualquier dosis o razón de dosis: se manifiesta en losdescendientes

71

Las dosis altas de radiación conducen al síndrome de irradiación cuyos estadios han

sido bien definidos, incluyendo una posible reparación por reducción de los iones OH

generados en las células a través del proceso de ionización. Los cánceres más

frecuentemente asociados a la exposición a radiación ionizante se ubican en los

pulmones, sangre (leucemia), piel, pecho y tiroides. En general las latencias son del

orden de los 10 años para la leucemia y 20-30 para otros cánceres. El embrión humano

y el feto son muy sensibles a esta radiación.

Cuando los productos de decaimiento del radón se inhalan y se depositan en los

pulmones, las emisiones alfa penetran en las células del epitelio que reviste el pulmón.

Posiblemente la energía depositada en estas células de lugar al proceso de

carcinogénesis, observándose una relación proporcional entre dosis y probabilidad de

daño, en el tipo de efecto denominado estocástico (32).

A fines de los años 70 se alertó acerca de la influencia del radón en la salud de los

residentes, cuando se midieron altos niveles en el interior de las viviendas. Hoy se

considera que miles de personas mueren cada año a consecuencia de la exposición al

radón. Su nivel de acción para la inducción de un riesgo de fallecimiento por cáncer del

3 % está en el orden de 200 Bq/m3 . Se piensa que el humo del tabaco sinergiza con la

inhalación de los productos del radón para dar lugar al cáncer del pulmón. Con el nivel

de acción indicado el riesgo de fallecimiento en fumadores se estima en 10 %. Hoy se

acepta que el radón constituye el segundo factor principal en la etiología del cáncer del

pulmón (el primero es el humo del tabaco). El radón se ha asociado a la aparición de

cáncer infantil y adulto del pulmón y el riñón, melanoma y leucemia mieloide. Se estima

que hasta el 15% de los casos de cáncer de pulmón es causado por el radón(43). Según

la Agencia para la Protección del Medio Ambiente (EPA) de los Estados Unidos, por lo

menos 20.000 defunciones por cáncer de pulmón se han asociado con exposición

prolongada al radón(44).

Afecciones relacionadas a la radiación ultravioleta

Esta radiación muestra un fuerte efecto oxidativo en las células, principalmente en las

longitudes de onda alrededor de los 2 800 Å. Dos subregiones espectrales, conocidas

como UV-B y UV-C, se asocian a este impacto potencial más severo al nivel celular,

pero el ultravioleta de estas subregiones es absorbido mayormente en la alta atmósfera

72

(en la capa de ozono, hoy amenazada por los clorofluorocarbonos empleados como

gases refrigerantes y como impulsores de aerosoles). El efecto biológico está asociado

a la energía de los fotones y a la capacidad de las moléculas biológicas de absorberlos,

de manera que puede definirse una cierta "eficiencia biológica" de la radiación. Un haz

de fotones con un rango amplio de energías producirá un efecto igual a la suma de las

contribuciones individuales determinada por el producto de la intensidad de la energía

de cada fotón por su eficiencia biológica relativa. La eficiencia biológica depende de la

dosis que determina la efectividad espectral.

Cuadro 18

Eficiencias espectrales del ultravioleta para efecto biológico

lambda (Å) Dosis (J/m2) Efectividad espectral (S.lambda)

2 000 1 000 0,03

2 200 250 0,12

2 400 100 0,30

2 600 46 0,65

2 800 34 0,88

3 000 100 0,30

3 050 500 0,06

3 100 2 000 0,015

3 150 10 000 0,003

Fuente: Balfour, 1974.

La absorción de los fotones UV por una molécula conlleva a la transformación de

energía radiante en energía rotacional vibratoria y al cambio de la configuración

electrónica dentro de la molécula. El DNA (ácido dexoxirribonucleico) en los núcleos

celulares es el blanco preminente de la UV con daños en las bases y en las cadenas de

polinucleótidos. De aquí puede derivarse una acción letal en los microorganismos. En

los mamíferos las consecuencias pueden ser lesiones cancerígenas, mutagénesis y

muerte debido a la reducción del proceso de replicación de las células o su replicación

con errores considerables.

73

La penetración del UV en la piel conduce a la vacuolación del citoplasma de la célula y

un cambio en la densidad de los núcleos ha sido reportado con la aparición de células

quemadas. Un efecto posterior puede ser el de hiperplasia, el eritema y la inflamación.

Así en el hombre se observa que, de transferirse las energías del UV-B a las células,

puede aparecer cáncer de la piel y daño al sistema inmune. Otro daño importante es la

aparición de cataratas en los ojos, la que se asocia a un efecto acumulativo de la

exposición UV en las mismas longitudes de onda que producen el eritema (2970 Å). La

absorción en el medio ocular no permite que los receptores de la visión detecten el UV,

de modo que el daño ocular surge sin prevención. Fotoqueratitis asociada a exposición

UV aparece con un tiempo de latencia inversamente proporcional a la intensidad de la

exposición extendida de 30 min. a 24 hs, en ocasiones seguida de conjuntivitis (45).

Afecciones relacionadas al clima luminoso.

Los efectos directos de la exposición a esta radiación están constituidos por cambios

químicos y los indirectos se deben a la presencia de los mediadores químicos que

pueden alterar la función de la glándula pineal, la cual además de la función

reproductora controla ritmos biológicos. La luz puede causar daños a la vista por sobre-

exposición, pero su déficit para una determinada tarea visual puede devenir en fatiga,

nistagmos, vértigos. Entre los efectos extraoculares se cita la irritabilidad nerviosa, la

cefalea, trastornos digestivos y alteraciones circadianas.

74

Fig. 5 Cambios de la sensibilidad al color con la intensidad luminosa

Existe una sensibilidad diferenciada a la percepción visual en el curso del día y la

noche. Durante el día los fotoreceptores que operan en la retina son los conos, que

resultan detectores de color. Su sensibilidad se representa por la curva punteada. En la

noche, con bajos niveles luminosos, los conos son sustituidos por los bastoncillos

quienes particularmente son sensibles a los contornos. Su sensibilidad al color está

desplazada hacia la zona de menores longitudes de onda como puede verse en la curva

continua de la figura 5. A este efecto se le denomina Purkinje(46).

Afecciones relacionadas a la radiación infrarroja.

Los efectos de la radiación infrarroja se producen esencialmente al nivel de la piel de los

mamíferos y su labilidad condiciona las manifestaciones que transitan entre el

enrojecimiento y la quemadura. Otros signos de exposición excesiva al IR se identifican

como fatiga y dolor de cabeza. Particularmente se describen los daños al aparato visual

en la forma de aparición de cataratas, cuyo origen se basa en la absorción del calor con

reorientación de las moléculas de proteína y agua.

75

Afecciones relacionadas a las radiofrecuencias y microondas.

En términos generales los organismos vivos no han desarrollado sentidos para

comunicar al cerebro la incidencia de radiaciones electromagnéticas en la gama de las

frecuencias muy bajas, radiofrecuencias y microondas. Sin embargo, las ondas

electromagnéticas interactúan con los seres vivos fundamentalmente a través de la

transducción de la energía en calor, aunque se mencionan mecanismos al nivel de la

membrana celular que alteran los intercambios iónicos y que parecen vincularse a la

repolarización de las grandes moléculas orgánicas que conforman estas superficies.

Así:

• los efectos térmicos pueden conducir a una ruptura estructural de las proteínas

por incremento de la aminoaciduria

• se observa la alteración del patrón electroforético e incremento de la reactividad

antigénica

• se perciben ciertos cambios en la sedimentación de coloides y tiempo de

reacción

Se ha reportado en correspondencia con el grado de irradiancia desde elevación de la

temperatura del tejido irradiado hasta malformaciones congénitas y alteraciones

morfológicas irreversibles (47).

Las líneas de transmisión de energía de alta tensión presentan campos eléctricos y

magnéticos bien definidos. Los estudios de laboratorio indican que los campos

asociados a las líneas de 60 Hz producen:

• cambios en las funciones celulares y tisulares

• disminución de la hormona melatonina

• alteraciones del sistema inmunitario

• crecimiento tumoral acelerado

• cambios de los ritmos biológicos naturales

• cambios de la actividad cerebral y la frecuencia cardíaca en los seres humanos

Las investigaciones epidemiológicas apuntan indicios sobre incremento en la incidencia

de cáncer en el sistema nervioso y en la sangre, principalmente en niños, pero aún

prima un carácter controversial en las conclusiones(48).

76

Afecciones relacionadas a la exposición a campos magnéticos.

Los mecanismos de interacción física de los campos magnéticos con la materia viva se

basan en la inducción magnética, los efectos magnetomecánicos y las

interacciones electrónicas, en tanto los factores que afectan la interacción de la

materia viva con los campos magnéticos dependen de los parámetros de las fuentes

(frecuencia, modulación...), los de exposición (propiedades del tejido, tamaño y

geometría...) y de factores adicionales (implantaciones de metal, drogas

medicamentosas...). La influencia de los campos intensos en la salud aparece en el

ámbito hematológico (eritropoyesis y distribución leucocitaria), cardiológico (arritmia,

alteración del complejo QRS), metabólico (aumento del consumo de oxígeno), del

Sistema Nervioso Central (alteraciones circadianas, aumento de las ondas lentas del

EEG)(49).

Las líneas de transmisión eléctrica son productoras de campo magnético.

Particularmente a ellos se han achacado algunos resultados que permiten sospechar la

aparición de mayor incidencia de cáncer en los residentes próximos. Aunque existen

normas para campos eléctricos de muy baja frecuencia, tales normas no obstante se

implantan menos frecuentemente con los campos magnéticos de muy baja frecuencia.

La intención es impedir el incremento de la peligrosidad actual.

Influencia de los aeroiones

La concentración de aeroiones ligeros, según las investigaciones, guarda una relación

con el estado funcional del sistema inmunológico, lo que ha llevado a definir niveles

óptimos, así como mínimos y máximos tolerables.

Síndrome del edificio enfermo.

El síndrome del edificio enfermo se caracteriza por un conjunto de manifestaciones en

sus ocupantes:

§ Categorías de síntomas que cubren la mayor parte de las quejas

- irritación sensorial de los ojos, la nariz y la garganta (dolor, sensación de

sequedad, sensación de escozor, punzada, irritación, ronquido, problemas de la voz)

77

- síntomas neurológicos o de salud general (dolor de cabeza, fatiga mental, memoria

y capacidad de concentración reducida, vértigo, intoxicación, náusea, vómitos y

cansancio)

- irritación de la piel (dolor, enrojecimiento, sensación de escozor u hormigueo, piel

seca)

- reacciones hipersensibles no específicas (flujo nasal y lagrimeo, síntomas de tipo

asmático entre no asmáticos, sonidos del sistema respiratorio)

- síntomas del gusto y el olfato (cambios de la sensibilidad olfatoria y gustativa,

percepciones olfatorias y gustativas desagradables)

§ Irritación de las membranas mucosas en los ojos, la nariz y la garganta

§ Otros síntomas: vías respiratorias bajas y de los órganos internos deberían ser

infrecuentes

§ Una gran mayoría de los ocupantes reportan los síntomas, los que aparecen

especialmente recurrentes en todo el edificio o en parte de él.

§ No se identifica causalidad evidente con la exposición ni con la sensibilidad de los

ocupantes.

Existe un cierto tipo de contaminante atmosférico que estimula las terminales nerviosas

sensitivas e inicia débiles reacciones inflamatorias en los tejidos. Los efectos agudos

secundarios consistirían en la percepción de las reacciones de los tejidos. Efectos

subagudos podrían ser descritos como reacciones al estrés ambiental o reacciones de

la piel más severas. La intensidad de los síntomas puede ser modificada por factores

adicionales como la edad, el hábito de fumar, el género, entre otros. Además, el número

de síntomas y su intensidad pueden producir un retro-efecto en la conducta de las

personas, modificando su ambiente o focalizando ciertos síntomas o suprimiendo otros,

pero con una reacción de la población expuesta de amplio espectro y de tipo individual.

Estos efectos son no específicos. Estos síntomas guardan concordancia con los rangos

cuali-cuantitativos de ambos sistemas de reacciones. Ellos son provocados por los

compuestos orgánicos volátiles (VOC), los que están presentes en los materiales de los

edificios y mobiliarios(32).

78

Las relaciones dosis-respuesta, de tipo tentativas, para malestar resultante de la

exposición a sustancias orgánicas volátiles se muestran en el cuadro 19.

Cuadro 19

Relaciones dosis – respuestas de los compuestos orgánicos volátiles

en la salud humana

Concentración

total (mg/m3)Irritación y malestar Rango de exposición

< 0,20 No hay irritación ni malestar Rango de bienestar

0,20 - 3,0Posible irritación y malestar si otras exposiciones

interactúan

Rango de exposición

multifactorial

3,0 - 25Efecto de exposición y posible dolor de cabeza si

otras exposiciones interactúanRango de malestar

> 25Pueden ocurrir efectos neurotóxicos adicionales al

dolor de cabezaRango tóxico

Fuente: Lippman, 1992.

Efectos de la exposición aérea a asbestos y otras fibras vítreas

Los asbestos son elementos elaborados de silicatos minerales con cualidades y

propiedades especiales. Más de 200 productos comerciales emplean asbestos. Estas

fibras pueden desprenderse mecánicamente de las superficies y transformarse en

aerosoles atmosféricos que pueden ser inhalados y de aquí llevados al tracto

respiratorio. La deposición de las fibras en el tracto responde a 5 mecanismos.

1. impacción

2. sedimentación

3. intercepción

4. precipitación electrostática

5. difusión

Las probabilidades de impacción y sedimentación son gobernadas por los diámetros

aerodinámicos de las fibras, las cuales, para las grandes fibras minerales es cerca de 3

79

veces su diámetro físico. El proceso de impacción ocurre corriente abajo de los chorros

de aire en las vías respiratorias mayores, donde las velocidades de los flujos son altas y

el momento de las partículas fibrosas supera la curvatura de las líneas de flujo. La

sedimentación de otra parte, es favorecida por bajas velocidades del flujo, largos

tiempos de residencia y pequeña luz de las vías aéreas. De otra parte la precipitación

electrostática ocurre a tenor de las fuerzas de imagen, en las que las partículas

cargadas inducen cargas opuestas sobre las superficies de las vías aéreas. La

intercepción se incrementa con la longitud de paso del aerosol. Desplazamientos

difusivos resultan de las colisiones entre las moléculas de aire y las fibras. Existen

verificaciones experimentales acerca de que el incremento en la longitud de las fibras

incrementa su deposición dentro de las vías aéreas traqueobronquiales. Sitios

preferenciales de deposición aparecen en las bifurcaciones de las vías aéreas. Luego

de la retención suelen aparecer procesos de translocación, que refieren el movimiento

de las fibras a lo largo de la superficie epitelial, y de desintegración, que puede estar

asociada a la acción de los macrófagos, subdivisión en segmentos cortos y disolución

parcial.

Las propiedades específicas que afectan la actividad biológica de las fibras de asbestos

incluyen tipo, longitud, diámetro y durabilidad dentro de los pulmones y en otros sitios

del cuerpo. Una respuesta inflamatoria de los pulmones estaría influida por la razón de

dosis entregada a los pulmones. Un proceso de penetración en los intersticios puede

ser importante en la aparición de los procesos inflamatorios, incluyendo reacciones

fibróticas. Existe un riesgo eventual de cáncer pulmonar por inhalación de estas

partículas independientemente de la edad, pero el riesgo de mesotelioma sería mayor

cuanto menor es la edad del comienzo de la exposición. El riesgo de cáncer es

proporcional a la exposición acumulativa y sinergiza con el hábito de fumar. En la

vivienda puede suponerse una respuesta lineal, sin umbral, de la incidencia del cáncer

con la magnitud de la exposición.

El impacto en salud de las fibras vítreas es semejante al observado en el asbesto,

diferenciándose en su potencial más que en su naturaleza ya que existen similitudes

morfológicas y toxicológicas, y esa repercusión se pesquisa al nivel de la información

epidemiológica de las exposiciones ocupacionales y sus efectos, la respuesta biológica

de las suspensiones de fibras inhaladas por animales de laboratorio o inyectadas en los

80

pulmones o en los espacios pleurales o peritoneales y la conducta aerodinámica,

deposición y extinción de las mismas en el tracto respiratorio. Existe evidencia de la

aparición de fibrosis pulmonar, cáncer bronquial y mesoteliomas en humanos. También

se le imputan dermatitis e irritación de los ojos (32).

Efectos de la exposición al benceno.

Entre los agentes cancerígenos humanos conocidos, el benceno es el compuesto

orgánico de mayor volumen y más amplia distribución. Se plantea que su control debe

efectuarse a nivel del agua y de la atmósfera, aunque se distribuye muy ampliamente.

La exposición a productos de la industria petroquímica implica riesgo de exposición al

benceno, incluyendo la gasolina evaporada y los escapes de los vehículos de motor,

exposición directa o indirecta al humo del cigarro e incluso cierta variedad de comidas;

de este modo a los niveles basales de benceno en fuentes industriales en la comunidad,

pueden añadirse:

• fumar activa y pasivamente - los niveles de benceno de la respiración en áreas

donde predomina el humo del cigarro son mayores y también los niveles de

benceno en sangre son más altos en fumadores que en no fumadores.

• uso de solventes o gasolina en el hogar - los solventes pueden ser el principal

contribuyente al benceno en la vivienda cuando éstos se evaporan (aún en

concentraciones del 0,1 %), penetrando por la piel o la respiración. Las viviendas

con aparcaderos acoplados o con recipientes de gasolina, cortadores de césped

y otros implementos pueden constituirse en fuentes de benceno, junto a los

agentes domésticos de limpieza, objetos de afición, pegamentos, etc.

• tanques deteriorados subterráneos de almacenamientos - el suministro de agua

puede contaminarse con benceno cuando existen tanques de gasolina en el

subsuelo. La contaminación del agua subterránea llega al hombre por ingestión,

inhalación y absorción de la piel.

• fuentes automotores - las emisiones del transporte y la evaporación ambiental

de la gasolina de los carburadores y el tren de combustible del motor, así como

durante la recarga, penetran por vía aérea al interior de las viviendas.

Se estima que la asimilación media diaria de este producto varía de 130 a 550 µg en no

fumadores.

81

Los mecanismos de toxicidad del benceno están relacionados a la producción de

metabolitos tóxicos que alteran el metabolismo hepático y a la toxicidad selectiva de la

médula ósea. La producción de efectos hematológicos se describen comúnmente como

citoplégicos y aplásicos, hasta el caso agudo de anemia aplásica que afecta los tres

tipos de células sanguíneas (glóbulos rojos, blancos y plaquetas). En cuanto a efectos

neoplásicos, se adjudica la leucemia mielógena aguda, forma adulta de la leucemia

aguda. El benceno altera el genoma en el ámbito de las células de la médula ósea y de

los linfocitos circulantes. Existen sospechas de que puede inducir el mieloma múltiple,

adicionalmente. En cuanto a los efectos no hematológicos se piensa que en el sistema

nervioso puede aparecer delirio, vértigo y un efecto de pérdida de conciencia. En cuanto

a efectos reproductivos y del desarrollo, se plantea una posible fetotoxicidad potencial y

finalmente sobre el sistema inmune se considera que la afectación de los linfocitos

repercute en el mismo, aunque decrementos de la inmunidad pueden aparecer en

ausencia del efecto en los linfocitos (32).

Efectos de la exposición al formaldehído y otros aldehídos

Los aldehídos de bajo peso molecular, caracterizados por un grupo carbonil polarizado

reactivo, constituyen un número de compuestos útiles en un gran número de procesos

industriales. Entre ellos se cuenta el formaldehído (HCHO), el acetildehído (CH3CHO) y

la acroleina (CH2=CHCHO) que se diferencian en la longitud de la cadena de carbonos

y en el estado de saturación o no-saturación. Las fuentes de la exposición humana son

numerosas e incluyen formación endógena durante el metabolismo.

Por la alta solubilidad acuosa, comparada a otros contaminantes ambientales, el

principal sitio de deposición de estos compuestos es el tracto respiratorio superior. En

estos puntos los aldehídos pueden formar enlaces cruzados, actuando sobre las

proteínas, el RNA, el DNA. La relación entre la dosis de exposición y la producción de

enlaces cruzados es no lineal en el rango de 0,3 a 15 ppm. La aparición de bronco-

constricción seguida de hiperreactividad puede resultar peligrosa para personas

asmáticas. La irritación del aparato respiratorio puede ser acompañada por la irritación

de los ojos, reacciones que pueden ser precedidas por sensaciones olfatorias. Los

efectos de exposiciones múltiples reducen la función pulmonar e inician sensibilización

de la piel, parecen también inducir carcinogénesis de acuerdo a criterios de

82

genotoxicidad, experimentos inhalatorios en animales y evidencias epidemiológicas. Al

nivel de la vivienda está documentada la aparición de irritación en los ojos, la nariz y la

garganta. Aumentos de la morbilidad pulmonar entre los niños que residen en casas con

0,12 ppm de formaldehído con relación a los que viven en viviendas con valores < 0,12

ppm han sido probados (32).

Efectos de la exposición a otros contaminantes del aire interior

En la vivienda rural y en algunas zonas urbanas subsiste el problema de contaminación

del aire interno por la quema de combustibles fósiles. En todo el mundo decenas de

millones de familias aún cocinan o se calientan quemando carbón u otros combustibles

en hogares abiertos o estufas mal ventiladas, a las cuales los lactantes y niños

pequeños suelen estar expuestos. La exposición a estos contaminantes puede retrasar

el crecimiento y provocar un mayor número de infecciones respiratorias agudas, entre

ellas la neumonía y, en la edad adulta, la neumopatía obstructiva crónica. Si en las

viviendas se reduce la contaminación de la atmósfera, se reducirá asimismo la

incidencia de neumonías en los niños y la mortalidad consiguiente(50).

El plomo es un tóxico agudo a dosis elevadas, aunque puede producir efectos en

adultos y niños a dosis reducidas en comparación a las que producen sintomatología

clínica. En altas concentraciones pueden aparecer daños neurológicos severos, renales

y hematológicos. También daños a la fertilidad de la especie. A bajos niveles de

exposición aparecen alteraciones en el metabolismo de la vitamina D, afectando el

crecimiento de los niños, defectos congénitos menores y se constata aumento de la

presión de la sangre. El sistema nervioso es el blanco de excelencia de los efectos de

baja y alta dosis. Está presente en objetos suntuarios, pinturas y tuberías.

En los Estados Unidos de América el polvo de viviendas contaminado con plomo

contribuye significativamente a los niveles de plomo ingerido por niños en zonas

urbanas que tienen niveles elevados de plomo en la sangre(51). Sin embargo, en Polonia

se llevó a cabo un estudio(52) donde se descartó la hipótesis de que había una relación

entre los materiales de construcción de la casa (madera, ladrillos y concreto, y

productos prefabricados) y el riesgo de adquirir leucemia. No se observó ningún cambio

con relación al tiempo en que habían vivido en esa vivienda y la incidencia de leucemia.

83

La exposición a los compuestos de mercurio, tanto orgánicos como inorgánicos,

muestra variadas reacciones de intoxicación. Los síntomas de la exposición al vapor de

mercurio incluyen bronquitis aguda y neumonitis intersticial, disturbios del sistema

nervioso con tremor, excitabilidad y muerte. La exposición a mercurio inorgánico se

asocia a la aparición de dolor abdominal, diarrea, oliguria, nefropatía y proteinuria. Los

organomercuriales de otra parte conllevan letargia, ataxia, parestesia y sordera. Se ha

indicado que todas las formas del mercurio atraviesan la barrera placentaria y que el

feto absorbe cierta proporción del mismo (53).

El monóxido de carbono (CO) es emitido desde las fuentes de combustión incompleta,

incluyendo los motores de combustión interna. Al ser absorbido por vía aérea y unirse a

los glóbulos rojos de la sangre forma carboxihemoglina (COHb), reduciendo la

capacidad portadora de oxígeno de estas células e interfiriendo la liberación del oxígeno

al nivel de los tejidos conduciendo a la hipoxia. La asimilación intracelular del CO

interfiere los procesos de producción de energía y transporte de electrones. Así se

producen efectos fisiológicos y cardiovasculares que se constituyen en factores de

desarrollo de la arteriosclerosis, de arritmias cardíacas y efectos neuroconductuales.

Grupos de riesgo serían las personas con trastornos de la hemoglobina, enfermedades

pulmonares crónicas, mujeres embarazadas, fetos y recién nacidos.

Los hidrocarburos aromáticos policíclicos son mutágenos. Se ha imputado

carcinogénesis a los hidrocarburos portados por las partículas de hollín. Molestias a

causa de olor, dolor de cabeza, náuseas e irritación de los ojos no son infrecuentes y se

asocian a la exposición a los constituyentes de la fase vapor-gas, desconociéndose si

existe relación entre los síntomas transientes y los efectos en salud irreversibles y

progresivos.

En el caso del humo del tabaco, los fumadores pasivos, como los niños, muestran

incremento en la ocurrencia de enfermedades del tracto respiratorio bajo, de etiología

infecciosa, incluyendo bronquitis y neumonía, pudiendo incentivar el asma en las

personas que la padecen. El número de días en cama se estima un 20 % mayor en

niños de padres fumadores. Es conocido que la incidencia de cáncer del pulmón ha sido

reportada en conviventes no fumadores. Actividad genotóxica para diversos

componentes de este humo ha sido demostrada. También el hábito de fumar ha sido

84

señalado como factor de riesgo cardiovascular, incluyendo la enfermedad coronaria y

arteriosclerosis vascular periférica.

Como se sabe, existen efectos vasoconstrictores agudos a la exposición al SO2, lo que

puede acarrear riesgos de afecciones respiratorias a los residentes de habitaciones

pobremente ventiladas en viviendas que emplean kerosene como combustible de

cocción o calefacción. Tales afecciones incluyen broncoespasmos en asmáticos y

bronquitis crónica en los expuestos. Ello está asociado a la deposición de gotas sobre

las superficies conductivas aéreas de los pulmones. No está descartado que la

exposición a los aerosoles ácidos juegue un papel en la carcinogénesis, asociada a la

modulación que ejerce el pH en la regulación mitótica y enzimática de las células.

Con relación a los contaminantes importados a través de la infiltración y la ventilación,

las investigaciones muestran que la presencia de óxidos de nitrógeno en la vivienda da

lugar a un incremento en las enfermedades respiratorias agudas, especialmente en

niños pequeños, lo que avala una infectividad bacteriana incrementada mostrada en los

estudios toxicológicos.

La respuesta aguda de la exposición de la población al ozono se describe como

disminución de la función pulmonar e incremento de síntomas respiratorios, reactividad,

permeabilidad e inflamación de las vías aéreas.

Se llevó a cabo un estudio en San Diego California para ver si las condiciones

ambientales de la vivienda junto con el status económico tiene influencia en los niveles

de asma en niños Hispanos de poblaciones urbanas pobres. Se encontró que la

sensibilidad y exposición a ciertos agentes ambientales (polvo, cucarachas, gatos) son

factores que contribuyen a aumentan la severidad de las enfermedades en estos niños(54).

El asma puede ser incentivada por los bioaerosoles (55). La mayoría de los pacientes

afectados responden a muchos factores de desencadenamiento (ejercicios, aire frío,

irritantes, contaminantes del aire, alergenos e infecciones). Los síntomas asmáticos

relacionados al interior de la vivienda suelen aparecer repentinamente tras la exposición

y concluyen luego de terminada la misma. Una recurrencia puede desencadenarse a las

85

6 - 12 horas luego de la acción de un alergeno de la vivienda. El polvo de la casa es un

ejemplo del tipo de estímulo que dispara el ataque de asma.

En la vivienda rural puede considerarse la eventual exposición de los residentes a los

plaguicidas, principalmente por vía aérea pero con el peligro de accidentes por ingestión

con intoxicación aguda. Las investigaciones epidemiológicas indican que en el caso del

DTT una deposición de ciertos metabolitos en el tejido graso del cuerpo es observable

largo tiempo después de cesar la influencia del plaguicida; en tanto investigaciones

toxicológicas indican cambios de peso, de la actividad enzimática y del hígado con

aparición de carcinomas hepatocelulares, en los casos de sustancias policlorinadas.

También se reportan efectos sobre la piel, inmunosupresión e impacto en la

reproducción (56).

Influencia del hacinamiento

En Inglaterra y Gales se llevó a cabo un estudio para tratar de identificar procesos

etiológicos que pudieran explicar la relación de cáncer del estómago con la pobreza.

Se relacionó datos de mortalidad de la enfermedad con índices de estandard de vida

entre los años 1968 y 1978. Se encontró que, contrario a lo que ocurre con otros

índices de condiciones deficientes de la vivienda, los niveles de hacinamiento en el

noroeste de Gales eran consistentes con los altos niveles de muertes por cáncer del

estómago. Se concluyó en el estudio que un factor determinante del cáncer en el

estómago puede ser el haber vivido en hacinamiento en el hogar durante la infancia lo

que puede contribuir a transmitir los organismos causantes (57).

Estresores de la vida moderna

En territorios urbanos principalmente concurren los ritmos de vida acelerados y la

creciente duración de las actividades extradomiciliarias impersonales, las escasas

relaciones interpersonales -principalmente entre vecinos de la zona de residencia-, las

presiones de la competitividad laboral y la productividad del trabajo, la dificultad del

dominio de las nuevas tecnologías y la capacitación, las complicaciones del

desplazamiento y las distancias entre centros laborales, comerciales, de salud,

escolares y la vivienda, las fuerzas económicas conducentes a la deprivación y las

tendencias inflacionarias del mercado, los problemas de la vivienda y de la atención a

familiares lejanos o enfermos, las cambiantes escalas de valores de una cultura

86

dinámica y su repercusión en la esfera emotivo-afectiva, la ampliación extraordinaria del

acceso intradomiciliario a la información y la cultura globales con el desarrollo acelerado

de las telecomunicaciones, la multiplicidad de influencias negativas de la vida urbana

sobre los niños –incluida la drogadicción y la violencia-, el aumento del delito y el peligro

de los fenómenos incontrolados.

La multiplicidad y simultaneidad de la acción de los estresores psicosociales y su

creciente influencia conduce inexorablemente a una sobrecarga de las percepciones y a

una continua revalorización de las realidades, lo que introduce un componente de

inestabilidad en la vida del hombre moderno que a veces impacta en el ámbito familiar.

Ello se traduce en un incremento del estrés y de toda su gama de consecuencias, lo

que se manifiesta en un elevado consumo de psicofármacos particularmente relajantes

y antidepresivos.

Estas condiciones incrementan los tenores de ansiedad e incertidumbre en los sujetos

más lábiles de la población, favorecen la intolerancia, el voluntarismo, el carácter

errático e impensado de las reacciones, el deterioro de las relaciones familiares, la

pérdida de valores morales, el deterioro del área sentimental y de otra parte fortalecen

el pragmatismo de las conductas en detrimento de las trayectorias de vida guiadas por

los ideales. En los casos de individuos con antecedentes psicóticos, neurosis, manías,

depresiones, se puede predecir un empeoramiento del estado de salud y un incremento

en la demanda de los servicios médicos.

Indicadores de una vivienda insalubre

A modo de resumen tentativo se pueden observar en el cuadro 20 las enfermedades

relacionadas al ámbito de la vivienda y su asociación con los factores de riesgo, en

tanto en el cuadro 21 los efectos en la salud de las condiciones deficientes de la

vivienda y su entorno.

87

Cuadro 20Indicadores de una vivienda insalubre

Factor principal de riesgo Enfermedades transmisibles Enfermedades no transmisibles Desordenes psicosocialesDefectos en la construcción de lavivienda

• debido a insectos vectores• debido a roedores• Geohelmintiasis• debido a excretas de animales• debido a mordeduras de animales• relacionadas con el hacinamiento

• inducidas por el polvo y la humedad• heridas• quemaduras

• neurosis• violencia• delincuencia y vandalismo• abuso de alcohol y drogas

Deficiencias en el abastecimientode agua

• enfermedades hídricas fecales orales• enfermedades no fecales orales• enfermedades relacionadas con el agua e insectos

vectores

• enfermedades del corazón• cáncer

Deficiencias de saneamiento • enfermedades fecales orales• Geohelmintiasis• Teniasis• Helmintiasis relacionados con el agua• debido a insectos vectores• debido a roedores

• cáncer del estómago

Combustible inadecuado yventilacion deficiente

• infecciones respiratorias agudas

• efectos perinatales• enfermedades del corazón• enfermedades crónicas de pulmón• cáncer de pulmón• incendios y quemaduras

Disposición y recoleccióndeficiente de la basura

• debido a insectos vectores• debido a roedores

• heridas• quemaduras

Preparación deficiente de losalimentos y almacenamientoinadecuado de los mismos

• enfermedades relacionadas con excretas• zoonosis• enfermedades debidas a toxinas microbiológicas

• cáncer

Ubicación inadecuada (cercano azonas de mucho tráfico, zonasindustriales, etc.)

• enfermedades relacionadas con las excretas decontagio aéreo

• aumento del riesgo de enfermedades respiratoriasinfecciosas

• enfermedades crónicas de pulmón• enfermedades del corazón• cáncer• enfermedades neurológicas y reproductivas• heridas

• desordenes orgánicospsiquiátricos debido a químicosindustriales

• neurosis

Fuente: Adaptado de WHO, Health and Environment in Sustainable Development: Five years after the Earth Summit, Executive Summary, Geneva, June 1997 (Table 4.18 Indicators ofunhealthy housing conditions) que esta basado en Mara, D.D y Alabaster GP (1995) An environmental classification of housing-related diseases in developing countries. Journal oftropical medicine and hygiene, 98:41-51.

88

Cuadro 21Relaciones claves identificadas entre

las condiciones de la vivienda y sus efectos en la salud

Deficiencia de la vivienda y su entorno Posible efectos en la saludLa estructura de la vivienda no presenta las condiciones necesarias para servir comoalbergue que protege adecuadamente de temperaturas extremas, ruido, y la entrada depolvo, lluvia, insectos y roedores vectores de enfermedades

Riesgo de incendios que pueden provocar quemaduras, también riesgo de enfermedadescomo Chagas, malaria, y otras.

Abastecimiento y calidad del agua inadecuados Riesgo de enfermedades como tifoidea, cólera, hepatitis, polio, desinteria, amibiasis, yprotozoarios intestinales.

Sistema de alcantarillado y disposición de excretas inadecuado Riesgo de enfermedades del intestino y varios virus.Disposición inadecuada de residuos sólidos Contaminación del aire debido a quemas, propagación de ratas y moscas que puede

propagar enfermedadesCondiciones inadecuadas del terreno que pudiera estar contaminado o poseer un maldrenaje que mantenga agua estancada

Parásitos, filariasis, malaria, encefalitis y otras.

Ventilación inadecuada y espacio limitado para el numero de habitantes provocandoproblemas de hacinamiento

Resfriados, tuberculosis, menengitis, infecciones respiratorias.

Aire contaminado por mala ventilación y utilización inadecuada de cocinas de leña Enfermedades respiratorias crónicas.Ausencia de lugares adecuados para guardar los alimentos, y malas condiciones paralavarse y lavar adecuadamente los utensilios de cocina

Infecciones a través de los alimentos.

Utilizar la vivienda como un sitio de trabajo ya sea una tienda, taller o arriendo de cuartos Riesgos de accidentes, incendios, o envenenamientos con productos químicos.Hacinamiento, pobreza, desempleo, falta de privacidad, seguridad y facilidades derecreación

Problemas mentales y de adaptación social.

Medios de transporte inadecuados Falta de acceso a los servicios de salud.

Protección con barras o rejas contra ladrones Se obstaculiza la posibilidad de salir rápidamente en el caso de un incendio.Ruidos Se deteriora la calidad de vida.

Fuente: Goldstein, G., Novick, R, and Schaefer, M. Housing, Health, and Well-Being: An International Perspective. Housing, Health, and Well-Being. Journal of Sociology and Social Welfare, VolumeXVII, March 1990, Number 1. Resumiendo las siguientes publicaciones de OMS:• Martin, A.E. (Ed.). (1977) Health Aspects of Human Settlements: a review based on the technical discussions held during the Twenty-ninth World Health

Assembly, 1976. Geneva, WHO Public Health Papers No. 66.• WHO (1987). Housing-the implications for health. Report of a WHO consultant, Geneva, June 1987. WHO/EHE/RUD/87

89

Cuadro epidemiológico. Los grupos de riesgo.

La población indígena de las Américas se aproxima a los 42 millones de personas (58), y

representa alrededor del 6% de la población total de las Américas y algo menos del

10% de la población de América Latina y el Caribe. De estos 42 millones, más del 80%

se concentran en 5 países: México (12 millones), Perú (9,3 millones), Guatemala (5,3

millones), Bolivia (4,9 millones), y Ecuador (4,1 millones) (59). La mayoría de la población

indígena vive en condiciones de extrema pobreza y de vivienda insalubre, padeciendo

patrones específicos de enfermedades y tasas de mortalidad infantil muy superiores a

los promedios nacionales. Así en México mientras las cinco causas principales de

mortalidad en la población general corresponden a enfermedades no transmisibles, en

el caso de la población indígena, entre las cinco causas tres eran de tipo infeccioso

(enfermedades intestinales, neumonía y sarampión) patologías a cuya transmisión

contribuyen las condiciones de vivienda y saneamiento (7). En estos casos, hay que

tener en cuenta que de acuerdo con las condiciones de cada región, el tipo de vivienda

debe adaptarse a las condiciones climáticas de cada uno de los pisos ecológicos.

Los impedidos físicos y discapacitados, los enfermos, los niños, los ancianos, las

mujeres pueden considerarse grupos de riesgo, por cuanto ellos resultan los primeros

afectados por las condiciones inapropiadas de la vivienda. La falta de recursos

económicos es un fuerte moderador psicosocial de la deprivación y un determinante de

la calidad de vida precaria en la vivienda. Por ello los pobres deben ser también

considerados grupo de riesgo.

Por su más larga estadía en el hogar, los niños pequeños y las amas de casa sostienen

una interacción más prolongada con el ambiente de la vivienda. En investigaciones

desarrolladas en Cuba, se ha reportado que la morbilidad perinatal mostró una estrecha

relación con la salud de la madre, particularmente en el caso de madres asmáticas,

nefrópatas, hipertensas y multíparas. La altura de los edificios se asoció a mayor

frecuencia de afectaciones de salud en los pequeños. Trastorno de los nervios resultó el

padecimiento más frecuente de las amas de casa, el cual apareció relacionado a la

altura de la vivienda en el edificio y a la percepción de vibración, humedad, humo y

ruido. El cálculo del riesgo relativo por regresiones logísticas indicó que los factores

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objetivos de riesgo del sueño interrupto fueron la altura del edificio, el nivel de la

vivienda en el edificio, el área de residencia y los años resididos; asimismo los factores

subjetivos fueron la vibración, el ruido, la iluminación artificial pobre, las altas

humedades y temperaturas. Asimismo se determinaron riesgos relativos para el ardor

ocular, la nariz tupida, la tos, el lagrimeo y la dermatitis, que fueron los padecimientos

más frecuentes hallados en una cohorte de 187 niños y 580 amas de casa entrevistadas

con cinco años de pausa en viviendas de proyectos típicos de dos microdistritos

residenciales (60).

Educación y promoción de salud.

La educación es una herramienta clave para lograr una mejora de la salud en el hogar.

Los jefes de familia constituyen el grupo más grande y más importante que es necesario

educar. Ellos deben comprender cómo proteger y mejorar la salud de la familia dentro

de las restricciones financieras y, por lo tanto, deben estar informados sobre las

prácticas de la higiene personal y doméstica, mantenimiento, reducción de riesgos y

prevención de accidentes.

En algunos países, como Honduras, se ha ensayado hacer llegar a la familia la

educación sanitaria a través de los niños, quienes a su vez la reciben en la escuela.

Campañas de comunicación social en escolares con la consigna "Escuela Saludable"

pueden constituir el preámbulo de una educación en pro de la "Casa Saludable".

Los arquitectos, constructores, fabricantes de materiales y abastecedores pueden

beneficiarse con capacitación en factores de diseño y construcción que promueven la

salud y reducen los riesgos. Debe generarse información sobre salud e integrarla en la

curricula de educación profesional y técnica. Puede llegarse a los profesionales en

actividad a través de cursos de actualización o de "educación continua", para los cuales

los gremios profesionales y comerciales resultarían colaboradores eficaces.

Los trabajadores sanitarios constituyen un medio importante para llegar a la comunidad,

pero primero debe dárseles información a ellos mismos. Es necesario que los médicos,

ingenieros y sanitaristas que viven en las comunidades, así como los auxiliares de

atención primaria a la salud, comprendan los riesgos de la vivienda para la salud e

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integren medidas educativas y otras medidas correctivas dentro de su trabajo. Este

proceso de educación tiene también como objetivo a trabajadores de otros sectores, por

ejemplo, ampliación agrícola, trabajo social y desarrollo rural, los que están en situación

de influir en los esfuerzos hacia mejoras económicas y sociales y apoyarlos.

Los líderes políticos, los planificadores y administradores del desarrollo, así como las

autoridades locales, deben estar conscientes de las implicaciones que tiene la

educación para la salud en la vivienda.

La educación de todos estos grupos exige un esfuerzo amplio y de gran magnitud, el

que se hará progresivamente más eficaz a medida que se consolide un cuerpo de

conocimientos en el ámbito nacional y local. Su iniciación implica encontrar los canales

de comunicación correctos y alimentarlos con los materiales adecuados. Los gobiernos

necesitarán ayuda de la comunidad internacional para la generación de información, la

capacitación de los educadores y el establecimiento del marco institucional.

En el campo de la promoción de salud debe buscarse una integración de esfuerzos que

conjure:

• la ubicación de industrias en lugares que producen efectos desagradables o

peligrosos en las viviendas, o en el suelo, el aire y el agua de los alrededores

• el desarrollo de rutas de transporte que hagan más difícil la comunicación entre

vecindarios ya establecidos en lugar de unirlos

• el no estar preparados para la migración de familias de trabajadores hacia las

vecindades de centros de trabajo recién desarrollados

• el desplazamiento innecesario de asentamientos humanos y de su población

• el no tomar medidas adecuadas para albergar temporalmente a las familias

mientras se está implementando un proyecto de desarrollo

Las entidades del sector vivienda no pueden resolver solas los problemas de la

vivienda. Un gran número de actividades de desarrollo afectan al ambiente domiciliario y

a la salud de los moradores. Es necesaria una colaboración intersectorial en todos los

procesos mencionados, no sólo para alcanzar metas de salud sino en realidad para

detener la actual situación de deterioro de la vivienda. Una única entidad a cargo de la

vivienda al nivel nacional brinda un punto de focalización importante, pero es necesario

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que los esfuerzos de cooperación involucren a una serie de ministerios, junto con

organismos de financiamiento, la industria de la construcción, sindicatos, fabricantes de

materiales, cámaras de desarrollo, funcionarios de los gobiernos locales y entidades de

servicio social entre otros.