16
BE VISTA NACIONAL DE LITERATURA Y CIENCIAS SOCIALES Año III—Tomo III | Montevideo, 10 de Septiembre de 1897 § Húmero 55 REDACCIÓN Daniel Martínez Vigil. Víctor Pérez Petit. Carlos Martinez Vigil. José Enrique Rodó. APICE LOS OIAS 10 í 25 DE CADA IES PRECIOS DE SUSCRIPCIÓN: En la Capital, por mes....................... S 0.50 En campaña ............................. „ 0.60 En el exterior „ ............................ „ 0.70 Número suelto..................................... „ 0.80 CENTROS DE SUSCRIPCIÓN: Librería Nacional, de Barreiro y Ramos.—Librería del Ateneo, de Sierra y Antuiia.—“El Anticuario“.— Joya Literaria, de Cuspinera, Teix y 0.a ADMINISTRACIÓN: CALLE TREINTA Y TRES, NIÍM. 219 SUMARIO:—C onfidencias epistolares: C hile y el U ru - ouay; i.a «Revista Nacional» y i» on A ntonio de V albuena, por Fidelis l\ del Solar Dos cartas abiertas, por Alejandro P. Relieve- rria y Adolfo Valderrama A puntaciones bibliográficas, por Carlos Martínez V ig il- Los primeros pobladores, por Daniel Grana- da - Moral y estética, por Pedro CosíoI n- tima, por Emilio Barbaroux R uinas, por José Chirapozu.-- E vocando el pasado, por Luis licrisso - A L avallkja, por Nicolás N. Piayijio — K n un Album, por José Antonio Mora -«S obre lenguaje» - Medicina legal, or el doctor José borrando y Olaondo — UELTOB. CONFIDENCIAS EPISTOLARES CHILE I EL UUUGUAL— LA « REVISTA NACIONAL » I DON ANTONIO DE VALBUENA. Santiago de Chile, 7 de agosto de 1897. Señor don Carlos Martínez Vigil Montevideo. Señor i amigo de toda mi distinción: La hermosa i erudita carta confidencial con que he sido honrado por Vd. ha sido re- producida con entusiasmo en «Los Lunes> i en «La Libertad Electoral) de Santiago i en «La Union» de Valparaíso, i a fe que hacen bien estos periódicos. No es el loco de Valbuena para ellos el asunto principal, ni tampoco para mí: todos vemos reflejados en la carta de Vd. el noble esfuerzo de los directores de la R evista N acional de L i- teratura i Ciencias S ociales para acer- car a los chilenos a los uruguayos, que hemos estado separados literaria, comercial i socialmentc por muchos años, como lo es- tamos aun de muchas repúblicas america- nas, especialmente de Méjico, Centro Am é- rica i las tres repúblicas colombianas; i sucede, sin que jamas me lo haya espli- cado, que mas sabemos del Japón, de Aus- tralia i del Transvaal, que de nuestros her- manos por la sangre, por les usos i eos- tumbres i por nuestras comunes glorias. Debe tener Vd., amigo mió, la satisfacción de haber contribuido, mucho mas de lo que Vd. tan modestamente declara en la REVIS- TA, a acercarnos, cuando dice: «Por mi parte, yo me enorgullezco de haber contri- buido, si bien en pequeñísima esfera, á esa unión más estrecha cada día entre nuestras naciones, unión cuyas felices consecuencias en lo futuro apenas si podemos hoy vislum- brar.» ¡ Hermosas palabras, seguidas de lie1 chos positivos, que me constan, pues desde la infancia de la R evista N acional de L i- teratura 1 C iencias S ociales , ese bri- llante órgano de la literatura oriental, de que Vd. es uno de sus principales directo- res, he seguido paso a paso el movimiento literario que se opera, atrayendo Vds. a muchos escritores de mi pais, entre los cua- les me ha considerado Vd. también a mí, como si fuese digno de figurar al lado de Eduardo de la Barra, de Amunátegui, de Valderrama, etc. De los escritores de Colom- bia mencionaré a José Rivas Groot i Abra- ham Z. López Penha; de Venezue'n, a Ma- nuel Diaz Rodríguez, Andrés A. Mata, Eloi G. González; del Perú, al mui conocido autor de « Tradiciones », Ricardo Palma, a Enri- que López Albújar i Clemente Palma; de Cuba, residente en Colombia, a Rafael M. Merchan; de Costa Rica, al autor del « Dic- cionario de Burbarismos >, Carlos Gagini; de San Salvador, a Isaias Gamboa; del Ecua- dor, a Joaquín Gallegos del Campo; de Boli- via, a Tomas O’Connor D’Arlach. De Chile, á mas de los nombrados, figuran entre los co- laboradores de la REVISTA, Pedro Pablo Fi- gueroa, Cárlos Cabezón, Cárlos Newman, Enrique Nercasseau i Moran i otros; de la República Arjentina, Rafael Obligado, Leo- poldo Diaz, Casimiro Prieto, Anjélica Com- bes, José Pardo, Cárlos Ortiz, etc.; 1 , por fin, ¿para qué nombrar aquí a los valientes cau- dillos del pensamiento que bregan incesan- temente en la dirección de la R evista N a- cional CArlos 1 D aniel Martínez V igil , V íctor P érez P etit , J osé E nrique R odó, seguidos de esa cohorte de intelijencias na- cionales, entre los que mencionaré en pri- mera fila a Juan Francisco Piquet i a Daniel Granada, que aunque de oríjen españui el segundo, puede considerarse, no obstante, uruguayo o arjentlno por su larga residen- cia en el Salto del Uruguai i por sus impor- tantísimos trabajos literarios « Diccionario Rioplatense » i su « Reseña histórico-des- criptiva de antiguas i modernas supersticio- nes del Rio de la Plata », este último de reciente data, i que aun 110 conozco? ¿ Quién es Valbuena para menospreciar a los hispanoamericanos, hasta el punto de llamar libtrtadorciUos a esos jenios que hicieron morder el polvo a la poderosa Es- paña, su patria; a ese pais donde nunca se ponia el sol, ¡ tal era de vasto su territorio! I ¿ qué le queda a España de su antiguo es- plendor? Cuba, que luchando ardorosamente por su independencia, en la que tenemos fe ciega los americanos, al fin la obtendrá con su pujanza i la santidad de su causa; las Fili pinas, también convulsionadas, i donde arde en estos momentos un inestinguible volcan, que acabará tarde o temprano por desme- drar mas aun a la orgullosa madre patria, i, por último, ¡para qué quiere mas! su Academia de la Lengua, llena de telarañas, de orín, i con su chupa de dómine hecha jirones por las incurias del tiempo, sin avan- zar un tranco en el progreso del siglo. ¿Pura qué viene a remover Valbuena las cenizas del pasado? ¿Por qué despierta recuerdos desagradables que sublevan nuestro amor patrio, siendo esos hijos ya largo tiempo emancipados i teniendo por España aprecio, respeto i gratitud por la acojida que se les hace en la Península? f, ¡cosa admirable! los descendientes del Cid se abrazan con los del mundo de Colon, descendientes de Mo* tezuma, de Atahualpa i de Caupolican! ¿Conoce Vd., amigo mió, ese nuevo perso- naje, de oríjen inglés, que no há muchos años figura en los circos ecuestres, vestido rigorosamente de negro, de frac, sombrero de copa alta calado a lo doctrino, con un superlativo lazo de blanca corbata de piqué, i que sirve de segundo caricato, o mas bien dicho, no sirve de nado?; ¿que sin desplegar los labios recorre la arena, cae pesadamen- te con su humanidad en tierra, se levanta torpemente, se acepilla la ropa i el colero, toma parte en las operaciones de preparar las inaromas, garfios, trampolines, alfom- bras i jergones de mullida estopa para la caida de los volatines que deben ejecutar las arriesgadas pruebas?; ¿que descompone, perturba i revuelve las operaciones, ya lis- tas, de los mozos verdaderamente ú'ilcs? Este ser degradado, mudo, ridículo, dejenc- racion del llamado payaso, se denomina to- ny. El payaso trabaja, hace saltos mortales, ejecuta pruebas difíciles de equilibrio, es hasta músico i acróbata consumado, hace reir, por burdas que sean las necedades que profiere. El tony imita ridiculamente las pruebas del payaso i se tumba brutalmente, dándose descomunales costalazos; empuña su escobilla; se limpia el traje con flema es- toica, buscando una sonrisa de abrobacion en su público. Éste apénas si pára su aten, cion en el infeliz. Cuando el auditorio está pendiente del peligroso equilibrio de un artista en el trapecio, aparece el tony co- rriendo por el circo, precedida su aparición de un estruendo diabólico sobre el entari- mado que sirve de entrada a los actores i caballos; se trepa al redondel; camina por encima de él como podría hacerse en la

BE VISTA NACIONAL - anaforas.fic.edu.uyanaforas.fic.edu.uy/jspui/bitstream/123456789/11588/1/RevistaN55.pdf · pendiente del peligroso equilibrio de un artista en el trapecio, aparece

  • Upload
    others

  • View
    7

  • Download
    0

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: BE VISTA NACIONAL - anaforas.fic.edu.uyanaforas.fic.edu.uy/jspui/bitstream/123456789/11588/1/RevistaN55.pdf · pendiente del peligroso equilibrio de un artista en el trapecio, aparece

BE VISTA NACIONALD E

L I T E R A T U R A Y C I E N C I A S S O C I A L E SAño III—Tomo III | Montevideo, 10 de Septiembre de 1897 § Húmero 55

R E DA C C I Ó ND a n ie l M a rtín e z V ig il. V íc to r P é r e z P e tit . C a rlo s M a rtin e z V ig il. J o sé E n riq u e Rodó.

A P I C E LOS OIAS 1 0 í 25 DE CADA I E SP R E C IO S D E S U S C R IP C IÓ N :

En la Capital, por mes....................... S 0.50En campaña „ ............................. „ 0.60En el exterior „ ............................ „ 0.70Número suelto..................................... „ 0.80

CENTROS DE SUSCRIPCIÓN:Librería Nacional, de Barreiro y Ramos.—Librería del Ateneo, de Sierra y Antuiia.—“El Anticuario“.— Joya Literaria, de Cuspinera, Teix y 0.a

ADMINISTRACIÓN:CALLE T REIN TA Y T R ES, NIÍM. 219

SUMARIO:—C onfidencias e p is t o l a r e s : C hile y e l Uru- o u a y ; i.a «Re v ist a N a c ion a l» y i»on A ntonio d e V albu en a , por Fidelis l\ del Solar Dos ca rta s a b ie r t a s , por Alejandro P. Relieve-

• r r i a y Adolfo Valderrama A pun tacion es b ib lio g r á fica s, por Carlos Martínez V ig il- Los primeros pob lad o res, por Daniel Grana- da - M oral y e st é t ic a , por Pedro Cosío— I n­t im a , por Emilio Barbaroux — R uinas, por José Chirapozu.-- E vocando e l pasad o , por L u i s licrisso - A L a v a ll k j a , por Nicolás N. Piayijio — K n un Album , por José Antonio Mora -« S obre len g ua je» - M edicina le g a l ,

or el doctor José borrando y Olaondo —UELTOB.

CONFIDENCIAS EPISTOLARESCHILE I EL UUUGUAL— LA « REVISTA NACIONAL »

I DON ANTONIO DE VALBUENA.

S a n tia g o de C h ile , 7 de a g o sto de 1897.

S eñ o r don C a rlo s M artínez V ig il

M o n tev id eo .

S eñ o r i am igo de toda m i distinción:

L a herm osa i erudita carta confidencial con que he sido honrado p or V d . ha sido r e ­p roducida con entusiasm o en « L os L u n e s > i en «La L ib erta d E le c to r a l) de S a n tia go i en «La U nion» de V alp a raíso , i a fe que h acen bien estos p eriódicos. N o es e l loco de V a lb u e n a p ara e llo s el asunto principal, ni tam poco p ara mí: todos vem os reflejados en la carta de V d . el n ob le esfuerzo de los d irectores de la R evista Nacional de L i­teratura i Ciencias Sociales p ara a c e r­ca r a los ch ilen os a los uru gu ayos, que hem os estado sep arados literaria, com ercial i socia lm en tc p or m uchos años, co m o lo e s ­tam os aun de m uchas rep ú blicas am erica­nas, especia lm ente de M éjico, C en tro A m é ­rica i las tres rep úblicas colom bian as; i sucede, sin que jam as me lo h aya espli- cado, que m as sabem os del Japón, de A u s­tralia i del T ra n sva al, que de nuestros h e r­

m anos p o r la san gre , p o r le s usos i eos- tum bres i p o r nuestras com u n es glo ria s.

D e b e ten er V d ., am igo m ió, la satisfacción de h ab er con tribu id o , m ucho m as de lo que V d . tan m odestam ente d ecla ra en la REVIS­TA, a a cercarn o s, cu ando dice: «Por m i parte, y o m e e n o rg u llezco de h ab er co n tri­buido, si b ien en p equeñísim a esfera , á esa unión m ás estrech a cada día en tre nuestras n aciones, unión cu yas fe lice s co n secu en cias en lo futuro ap en as si p od em os h o y v is lu m ­brar.» ¡ H erm osas palabras, seguidas de lie 1 ch os p ositivo s, que m e con stan , pues desde la infancia de la R evista Nacional de L i­teratura 1 Ciencias Sociales, ese b r i­llan te ó rg a n o de la litera tu ra oriental, de que V d . es uno de sus p rin cip ales d ire c to ­res, he segu id o p aso a p aso e l m ovim ien to literario que se op era , atra yen d o V d s . a m uchos escrito res de m i pais, entre los cu a­les m e ha con siderado V d . tam bién a mí, com o si fuese d ign o de figu rar al lado de E d u ard o de la B arra, de A m u n átegu i, de V ald erram a, etc . D e los escrito res de C o lo m ­bia m en cion aré a José R iv a s G ro o t i A b ra - ham Z. L ó p e z Penha; de V en ezu e 'n , a M a­nuel D ia z R od rígu ez, A n d rés A . M ata, E lo i G. G onzález; del Perú, al mui co n o cid o autor de « T ra d ic io n e s », R icard o Palm a, a E n ri­que L ó p e z A lb ú ja r i C lem en te Palm a; de C uba, resid en te en C olom b ia, a R a fa e l M. M erchan; de C o sta R ica, al autor del « D ic ­cion ario de B urbarism os >, C a rlo s G agini; de San S a lvad o r, a Isaias G am boa; d el E c u a ­dor, a Joaquín G a lle g o s del Cam p o; de B oli- via, a T o m a s O ’C o n n or D ’A rla c h . D e C hile, á m as de lo s nom brados, figuran en tre los c o ­laborad ores de la REVISTA, Pedro P a b lo F i- gu eroa, C á rlo s C ab ezón , C á rlo s N ew m an , E n riq u e N ercasseau i M oran i otros; de la R e p ú b lic a A rjen tin a, R afael O b lig a d o , L e o ­p oldo D iaz, Casim iro Prieto, A n jé lic a C o m ­bes, José Pardo, C árlos O rtiz, etc.; 1, p or fin, ¿para qué nom brar aquí a los v a lien tes ca u ­dillos del pensam iento que b rega n incesan­tem ente en la d irección de la R evista N a­cional CArlos 1 Daniel Martínez V igil, V íctor Pérez Petit , José E nrique R odó, segu id os de esa co h o rte de in telijen cias na­cion ales, en tre los que m en cion aré en p ri­m era fila a Juan F ra n cisco P iq u et i a D an iel Granada, que aunque de oríjen españ ui el segu n d o, puede considerarse, no obstante, uru gu ayo o arjentlno p or su la rg a residen­cia en e l S a lto del U ruguai i p or sus im por­tantísim os trabajos literarios « D iccion ario R io p laten se » i su « R eseñ a h istórico-des- cr ip tiva de antiguas i m odernas su p erstic io ­nes del R io de la P lata », este últim o de rec ien te data, i que aun 110 conozco?

¿ Q uién es V albu en a p ara m en osp reciar a los h isp a n oa m erica n o s, h asta e l punto de llam ar libtrtadorciUos a esos jen io s que h icieron m order el p o lvo a la p od ero sa E s­

p añ a, su patria; a ese p a is d o n d e nunca se p on ia e l so l, ¡ ta l e ra d e vasto su te rr ito rio ! I ¿ q u é le queda a E sp añ a de su a n tig u o e s ­plendor? Cuba, que luchando ard orosam en te p o r su in d ep end en cia, en la que ten em os fe c ie g a los am erican os, al fin la o b ten d rá con su pujanza i la santidad de su causa; las F ili p inas, tam bién con vulsion adas, i d o n d e arde en esto s m om en tos un in estingu ib le volcan, q u e aca b a rá tarde o tem p ran o p o r d esm e­drar m as aun a la o rg u llo sa m ad re patria, i, p o r últim o, ¡p a ra qué quiere m as! su A cad em ia de la L en g u a , llen a de telarañas, de orín, i con su ch u p a de dóm in e h ech a jiro n es p o r las incurias d el tiem p o, sin ava n ­zar un tran co en e l p ro g re so del s ig lo . ¿Pura qué v ien e a rem o ver V a lb u en a las cenizas d el pasado? ¿Por qué d esp ierta recu erd os d esagrad ab les que su b levan nuestro am o r p atr io , siendo eso s h ijos y a la rg o tiem p o em an cip ad os i teniendo p or E sp añ a ap recio , re sp e to i g ra titu d p or la aco jid a que se les h a ce en la Península? f, ¡c o s a ad m irab le! lo s descen d ien tes del C id se ab razan con los del m undo de C o lo n , descen d ien tes de Mo* tezum a, de A ta h u a lp a i de C a u p o lic a n !

¿C onoce V d ., am igo m ió, ese nuevo p erso ­naje, de oríjen in g lés, q u e no h á m uchos años figura en los c irco s ecu estres, vestid o rigo ro sam en te de n egro , de frac, som brero de co p a a lta ca la d o a lo doctrin o, con un su p erlativo lazo de b lan ca co rb ata de p iqué, i q u e sirve de segu n d o caricato , o m as b ien d icho, no sirve de nado?; ¿que sin d e sp le g a r los labios reco rre la arena, ca e p esadam en ­te con su hum anidad en tierra, se levan ta torp em ente, se a cep illa la ro p a i e l colero, tom a p arte en las op eracion es de p rep a rar las inarom as, garfios, tram polines, a lfom ­bras i jergon es de m ullida esto p a p ara la caida de los volatin es que d eben ejecu tar las arriesgad as pruebas?; ¿que d escom pon e, p ertu rb a i re v u e lv e las o peracion es, y a lis ­tas, de los m ozos verdaderam en te ú 'ilc s ? E ste ser d egrad ad o, m udo, ridículo, d ejen c- racion del llam ado payaso, se denom ina to­ny. E l p a ya so trabaja, h ace saltos m ortales, e jecu ta p ruebas d ifíc iles de equilibrio , es hasta m úsico i a cró b ata consum ado, hace reir, p or burdas que sean las n ecedades que profiere. E l tony im ita ridiculam ente las p ruebas del p a y a so i se tum ba brutalm ente, dándose descom unales costalazos; em puña su escobilla; se lim pia e l traje con flem a e s ­toica, buscando una sonrisa de a b ro b a c io n en su p ú b lico . É ste ap énas si pára su aten , cion en e l infeliz. C uando e l au ditorio está p endiente del p e lig ro so equ ilibrio de un artista en el trap ecio , ap arece e l tony c o ­rriendo p or e l c irco , p reced id a su aparición de un estruendo d ia b ólico so b re el entari­m ado que s irve de entrada a los actores i caballos; se trep a al redondel; cam ina p or encim a de é l com o p odría h acerse en la

Page 2: BE VISTA NACIONAL - anaforas.fic.edu.uyanaforas.fic.edu.uy/jspui/bitstream/123456789/11588/1/RevistaN55.pdf · pendiente del peligroso equilibrio de un artista en el trapecio, aparece

93c u e rd a , i c o n lo s b ra z o s en cr u z c a e p e sa d a i b ru ta lm e n te e n la aren a. H é a q u í to d o el o fic io d e e s e s e r d eg en era d o d e la e s p e c ie h u m a n a , q u e n a d a h a c e d e b u e n o , d e útil, n i d e n u e v o , p u e s n o c h e a n o c h e re p ite su s je d e o n a d a s .

P u e s b ie n , a m ig o m ió , e l tony d e lo s c i r ­c o s e s p a ra m í V a lb u e n a e n la litera tu ra . É s te , c o m o a q u é l, n a d a h a c e a la s d erec h a s; n a d a ú til p r o d u c e p a ra e l m u n d o d e la s le ­tras; su g r a c e jo es d e m a sia d o c o n o c id o de to d o s lo s e s c r ito r e s d e su p a tr ia i d e A m é ­ric a ; lim p ia su tr a je , c o m o e l tony, d e l p o lv o q u e lo c u b re , p ro d u c id o p o r e l m u ch o q u e a r r o ja a lo s lite r a to s q u e ca e n en su s g a rra s , p a r a c e b a r s e c o m o b u itre h a m b rie n to en o tr o s n u e v o s; se b u rla de lo m as r e s p e ta b le q u e e n c u e n tra en su ca m in o: es, en fin, e l s e r m as d e s p r e c ia b le , i, c o m o e l e s c la v o , m e­r e c e e l lá t ig o d e l m a y o r a l en su s e s p a ld a s .

P o r la im p r e n ta i lito g r a fía d e J a c o b o P e u s e r se p u b lic ó en B u e n o s A ir e s en 18 9 4 u n a o b r ita in titu la d a « V a lb u e n is m o s i V a l- b u e n a d a s >, p o r A b e l d e S o r r a lto , en la cu al se re tra ta a V a lb u e n a d e c u e r p o e n te r o i se e s p o n e e l m é to d o o p ro c e d im ie n to q u e e m ­p le a e l c r it ic a s tr o p a ra e n sa ñ a rse en sus v íc t im a s . P e rm íta m e V d . tr a n s c r ib ir aq u í e s o s ru in e s m e d io s d e q u e s e v a le p a ra e s­to s casos:

< i .° E n in su lta r a l a u to r c u y o s e s c r ito s v a a an a liza r.

c 2.0 E n cr it ic a r n o m b r e s i a p e llid o s .c 3.0 E n c r it ic a r e l fís ic o d e l au tor.< 4.0 E n b u rla rse d e lo s c a r a c te r e s d e

im p r e n ta c o n q u e e s tá im p r e sa la o b ra q u e ca e e n tre su s m an o s.

< 5.0 E n e c h a r en c a ra a l a u to r su b u e n a s itu a c ió n fin a n c iera , si la tien e .

c 6.° E n d e d u c ir c o n c lu s io n e s ta n ló jic a s i tan a b s o lu ta s c o m o ésta s:

< i . 1* T o d o lib ro q u e se v e n d e b a ­ra to tie n e fo rz o s a m e n te q u e se r m a lo .

< 2.* P o e s ía s c o m p u e sta s p o r un a m e ric a n o tien en p o r fu e rz a q u e s e r d e te s ta b le s .

« 3.* E l h e c h o de p r e s e n ta r se unas cu a n ta s c o le c c io n e s d e v e r s o s becquerianos p o r a c á (A m é r ic a ) ,< e s p lic a su fic ie n te m e n te e l p o r q u é la s r e p ú b lic a s a m e ric a n a s se lo p asan en g u e rra u n as co n otras.» (T e s tu a l) .

< 4.* N a d ie d e b e n o m b ra r a n in g ú n D o n P ed ro , ni d e c ir c D o n P e ­d ro > a se ca s , p o rq u e a llá , en la p r o v in c ia d e L e ó n , Don Pedro, se g ú n p a re c e , q u ie re d e c ir una c o s a m ui f e a . . . .

c 5 * Q u e u n o s v e r s o s n o p u ed e n se r b e llo s , p o rq u e h ai o tro s m as b e llo s . E s decir: q u e una c o sa no p u e d e ser b u en a cu an d o e x is ­te o tra q u e lo es m as.

< 6 * N o se p u e d e c a r e c e r d e a lg ú n d o n de la n atu raleza , o e sp re sa r q u e ta l c o sa su ced e, p o rq u e e llo en la tín s ig n ific a sáb an a. ( Sin- don en la tín s ig n ific a sábana ).

« 7 .a T o d o a q u e l q u e en la duda, v . g r ., d e s i se a c o rd a rá d e é l

Eevista Nacioml do Literatura y Cienoiaa Sociales

u n a m u jer, d ic e q u e a veces riE N SA QUE SÍ, d a d e r e c h o a q u e se c r e a q u e s o lo está d o ta d o d e la fa c u lta d d e p e n s a r a veces.

< 7 ° D e lo s ru in es m e d io s d e a ta c a r . E n h a c e r g a la d e u n a m a la fe i d e u n a ig n o r a n ­

c ia q u e esp a n ta n .< 8.° E :i p r o d ig a r e l b o b ís im o s is te m a d e

p a ra fra s e a r c o n m a lo s v e r s o s d e la p r o p ia c o s e c h a d e l cr ític o , o tr o s b u e n o s d e l a u to r c r it ic a d o . ( P a ra lo cu al S o r r a lt o c ita a lg u ­

n o s e je m p l o s ).< g.° É11 una no in te r ru m p id a s e r ie d e

in e p c ia s , co m o l a s q u e s ig u e n . ( A q u í a lg u ­

n o s e je m p lo s ).< I io .° E n o tra se r ie d e s u p e r c h e r ía s ,

d ifíc ile s d e c la s ific a r , p e r o d e la s c u a le s d a ­rá e je m p lo lo q u e c o p io a co n tin u a c ió n . > (S ig u e n a q u í n u m e ro so s e je m p lo s co n q u e e l a u to r c ita d o c o n c lu y e c o n la e s p o s ic io n d e l m é to d o valbuenesco ).

D e lo d ic h o se d e d u c e q u é c la s e d e c r í t i ­c o es V a lb u e n a . S ig u ie n d o p o r e l m o m e n to su s iste m a d e m ord er, v a lié n d o s e , c o n fo rm e a l se g u n d o ca p ítu lo de ru in d a d es, d e criticar nombres i apellidos, p e rm íta m e V d . c ita r un o s o lo d e lo s e je m p lo s q u e A b e l d e S o r r a lto c o p ia d e la s o b ra s d e V a lb u e n a , p a r a e n s e ­g u id a s a c a r y o p o r m i- p a r te un s ím il d e l n o m b re d e l m ism o V a lb u e n a , q u e c o n c u e r ­d a p e rfe c ta m e n te co n su c a rá c te r .

c S e h a o b s e rv a d o — d ic e V a lb u e n a , a p r o p ó s ito d e l p o e ta a m e ric a n o d o n S a lv a ­d o r C o r d e r o i B u e n r o s tro — q u e la s p e r s o ­nas c u y o s n o m b re s i a p e llid o s so n d e e so s q u e e sp re sa n d e te rm in a d a s cu a lid a d e s , sue­len tener las contrarias precisamente.

c N o sé y o si e l s e ñ o r don S a lv a d o r C o r ­d e ro i B u e n r o s tro , q u e es e l p o e ta , d i g á ­m o slo así, q u e v a a o c u p a r h o i la b e n é v o la a te n c ió n d e lo s le c to r e s i la m ia, e s ta rá d e l to d o co m p re n d id o en la re g la .

< Por de pronto, au n q u e se lla m a Salva­dor, no m e p a re c e q u e e s e l q u e h a d e s a l­v a r a la p o e s ía d e lo s a b ism o s d e in m u n d a p ro sa en q u e la v a su m ien d o la lla m a d a c i ­v iliz a c ió n m od ern a.

« N i ta m p o co d e ja de te n e r p a ra a q u e lla h e rm o sa i d e sv a lid a se ñ o ra , a l p a r q u e v e r ­d ad era s s e n c ille c e s d e c o rd e ro , sa ñ a s de lo b o .

c I p o r lo q u e h a c e a l ú lt im o a p e ll id o , p u e d e ser q u e e l s e ñ o r D . S a lv a d o r C o r d e ­ro i B u en ro stro sea e fe c tiv a m e n te d e ro s tro a g ra c ia d o . >

H a sta aq uí la cita . A h o r a v a m o s a V a l- buen a. < Q u ien e sc u p e a l c ie lo , en la ca ra le ca e >, d ice e l refrá n , i é l m ism o se h a s e ­ñ alad o su c a s tig o cu a n d o d e c la r a < q u e la s p e rso n a s c u y o s n o m b re s i a p e ll id o s so n de e so s q u e esp resa n d e te r m in a d a s cu a lid a d e s, su e len ten er la s co n tra r ia s p re c isa m e n te . > i N o v e V d ., a m ig o m ió , e n e s to a lg o d e p r o ­v id e n cia l ? E l a p e llid o Valbuena s ig n ific a va-a-la-buena. I < no n o ta V d . qu e, s ig u ie n ­d o su p ro p ia re g la , tie n e p re c is a m e n te la cu a lid a d con traria : va-a-la-mala i S o lo en e l n o m b re de Antonio h a i p a rid a d p e r fe c ta . D ic e e l d ic c io n a rio in g lé s :— T ony. s. Im b é ­cil, to n to , za m a cu co . ¡| n. p r . D im in u tiv o de A nthony , A n to n io . (J . M . L o pes , E . R . B ensley, Dice, ing.-esp. i esp.-inglis. Paris,

G a r n ie r I T 08, 18 >5 ). E s a s í q u e e s t á p r o b a d o q u e d o n A n t o n i o d e V a l b u e n a n o e s o tr a c o s a q u e u n tony, o to n to d e c i r c o , i q u e en su m é to d o d e c r i t ic a r va a la m ala s ie m p r e : lu e g o . . . . n o s e m e c u lp e a m í d e im p u ta r a l s e ñ o r d e V a 'b u e n a n in g u n a c o s a q u e no e s té c o n fo r m e c o n su té s is .

P e r o y a e s t ie m p o , q u e r id o a m ig o , de a p a r ta r n o s d e l c a m in o e n q u e h e m o s t r o ­p e z a d o c o n e s te r e p t i l l it e r a r io , i to m a r la s e n d a q u e n o s c o n d u c e a la fr a te r n id a d de C h ile c o n e l U r ttg u a i, o b je t o ú n ic o d e su p r e c io s a c a r t a , r e b o s a n t e e n s e n tim ie n to s n o b le s p o r e s te C h i le ta n a m a d o p o r m í, i p o r e l c u a l d a r ia la ú lt im a g o t a d e m i s a n g r e .

H a c u m p lid o V d . d e la m a n e r a m a s e s ­p lé n d id a c o n m i e n c a r g o d e d a r la s m as es- p r e s iv a s g r a c ia s a l s e ñ o r P iq u e t p o r su v a ­lio s o l ib r o P erfiles literarios, i s i, c o m o V d . m e lo h a c e s a b e r , < t ie n e a l to c o n c e p t o fo r ­m a d o d e C h ile i d e s u s h o m b r e s > i h a c r e í ­d o re n d ir un r e s p e t u o s o h o m e n a je d e d ic a n ­d o un e je m p la r d e su o p ú s c u lo a un h ijo de e s te s u e lo b e n d it o , q u e v e n e r o ; y o — e l ú lt im o d e lo s c h ile n o s e n v a lía , p e r o d e lo s p r im e r o s en v i j i la r p o r su h o n r a in m a c u la ­d a — r e c ib o e l lib ro d e l s e ñ o r P iq u e t co m o p r e n d a s a g r a d a d e fr a te r n id a d e n tr e C h ile i la R e p ú b lic a O r ie n t a l d e l U r u g u a i; i V d ., s e ñ o r M a rtín e z , e s c r i t o r e s c la r e c id o d e ese b e l lo p a is i d ig n ís im o in te r m e d ia r io e n este la z o d e u n ió n d e a m b a s n a c io n e s , se rv irá , lo e s p e r o , d e t e s t ig o e n e s t e p a c t o so le m n e , q u e n u n c a , ja m a s , s e a v io la d o !

F i d é l i s P. DEL SOLAR.

DOS C A R TA S A B IER T A S

Dicen que don Alejandro P. Echeverría, poe­ta colombiano, tuvo unos amores en Lima con una joven do extraordinaria belleza; que los dos amantes vivían felicísimos en una casa que el amor había transformado en un paraíso terre­nal, y que un día la Eva de aquel paraíso, no se sabe si por ajena sugestión ó por arrepentimien­to sincero de su conducta, tomó las de Villadie­go y fue á parar al convento más cercano, sin decir á su Alejandro: ahí quedan esas llaves.

Llegó éste á Chile y escribió una carta á su querida, ya monja, en valientes cuartetas espa­ñolas, notables por su facilidad y atildamiento.

El fondo de la composición en que so malde­cía á la mujer hasta ayer amada, cuya suerte fué la suerte del poeta en días serenos de paz y de amor, chocó vivamente con la manera de pensar de un ilustre poeta chileno, para quien no era lícito maldecir á la mujer que nos ha te­nido entre sus brazos, á la mujer ante la cual hemos estado de rodillas.

Esto dió margen á que el doctor Valderrama, que es ol poeta aludido, tomase la defensa de la religiosa, y en magníficos tercetos, dignos de las estrofas del colombiano, contestaso los ver­sos de Echeverría.

Esta es la historia que surge de las dos com­posiciones que lucen á continuación y cuya in­serción en estas columnas avalora altamente el presente número de la Revista Nacional.

Page 3: BE VISTA NACIONAL - anaforas.fic.edu.uyanaforas.fic.edu.uy/jspui/bitstream/123456789/11588/1/RevistaN55.pdf · pendiente del peligroso equilibrio de un artista en el trapecio, aparece

I

A S O R ............

Del convento en el misterio,Se me finge til hormosura flor que agota su frescura perfumando un cementerio.

Y al verte así, distraída de tu misión en el mundo, pienso que Dios, iracundo, ha de maldecir tu vida.

Que tú no fuiste creada para tan loco egoísmo, y tu necio misticismo á nadie sirve de nada.

Ya cadáver insepulto, sólo para el mundo eres; mas, olvidas tus deberes y haces á Dios un insulto;

porque el propio juramento que al Sór Supremo te ha unido, también yo lo lie recibido y fuó juguete del viento.

Y ese Dios, tan justo y sabio, á quien de hinojos le ruegas, sabe que en el pecho niegaslo que murmura tu labio,

y que en las horas ardientes de la pasión comprimida, das en la memoria vida á mis caricias ausentes.

¿ Ni qué digno en tus altares puedes ofrecer al cielo, si fueron míos tu velo y tus blancos azahares ?

¿Si en la celda solitaria en donde mueres de anemia, es una torpe blasfemia lo que imaginas plegaria ?

¿ Si los cantos del salterio que entonas en el altar, la mancha no han de borrar de tu místico adulterio ?

Podrás, quizá, en el santuario obscuro de tu convento, jurar arrepentimiento al pie del confesonario;

podrés, llorosa y contrita y humillada sobre el polvo, oír el Ego te absolvo del confesor sibarita;

podrás, también, al olvido dar tu primitiva historia y arrancar de la memoria mi recuerdo aborrecido;

pero siempre el anatema de tu conciencia tendrás, porque solución no das á este precioso dilema:

ó conmigo eres perjura, si ya mi amor olvidaste, ó aquel que á Dios le juraste es sacrilega impostura.. . .

Pudo el febril histerismo que enrojece tu semblante,

abrir ayer un instante entre Dios y yo un abismo;

pudieron tus infernales promesas, para engañarnos, un instante colocarnos á Dios y á mí de rivales;

pero hoy, que tu labio necio nos ha mentido á los dos, tu amor lo desprecia Dios y yo también lo desprecio.. . .

Extingue en el claustro obscuro que tu existencia consume el venenoso perfume do tu corazón impuro;

agota los esplendores de tus ardientes pupilas y el almíbar que destilas en tus labios seductores;

y mañana cuando, al verte en el instante postrero, sientas el ósculo fiero do los labios de la muerte,

muere, muere amortajada en tu sayral voluntario, tínico digno sudario de tu conciencia menguada.

A lejandro P. ECHEVERRÍA.(Colombiano).

Beviata Naoional de Literatura y Cienoias Sociales

. II

A DON A L E J A N D R O P . E C H E V E R R ÍA

En esta pobre y misteriosa estancia, en donde siento mi alma arrepentida de las flores del cielo la fragancia,

tu carta recibí: por ella herida caí, en el suelo do mi celda estrecha, con el dolor más grande de mi vida.

Tu mente no imagina, no sospecha cuán hondo fuó el dolor que me causaste, y á do llegó tu envenenada flecha.

¡ Quién pudiera pensar que tú, que amaste; que tú, que en tu pasión desenfrenada la bendita inocencia me arrancaste,

dieras á la mujer que fuó tu amada, en premio de su amor y su ternura, afrentoso desdén ! ¡ Pobre enclaustrada !

To amó para calmar tu desventura, y el mundo la maldijo por ligera; y cuando fuó á buscar su sepultura

en el seno de un claustro, traicionera, la negra ingratitud del inconstante lanzó á su corazón injuria artera.

De pie en mi celda, atónita, anhelante, apretando en mis manos el breviario, leí la carta de mi antiguo amante;

y al ver que estaba sola en mi calvario y que tú me enviabas tu desprecio, destrocó con mis manos el rosario,

y en frente do tu altivo menosprecio como muerta caí en la celda fría; jera aquel golpe demasiado recio

y dado con sobrada alevosía, para que yo pudiera soportarlo, sin sufrir el horror de la agonía!

Lo que por mí pasó no sé contarlo... inquietud.. . . un dolor.. . . un calofrío.. . . no sé qué; ya no puedo recordarlo;

mas al fin de aquel loco desvario

cogí la carta, la escondí en mi pecho y d- rramó de lágrimas un río.

El llanto me calmó; junto á mi lecho me arrodillé sacrilega y llorosa, muriéndomo de pena y de despecho.

Era el amanecer; pura, radiosa, entró la blanca luz por mi ventana, luz del Reñor que confortó \ su esposa,

y al vor aquel fulgor do la mañana iluminar mi frente enrojecida, reflejo fiel do la miseria humana,

me sentí de este mundo desprendida, perdonó de tu epístola el lenguaje, y oré, Alejandro, por tu frágil vida.

Esta carta es el último homenaje que rindo un corazón apasionado á quien le hirió con temerario ultraje.

Para nosotros todo ha terminado: no soy una mujer; soy religiosa; no tengo corazón; tú lo has matado!

Sola me acojo á Dios; no estoy llorosa; al sayal do una monja nadie alcanza; la querida murió; le abrió la fosa

quien le arrancó la flor de la esperanza; puedo reflexionar con sangro fría; del bien y el mal sostengo la balanza.

Por eso puedo ya, sin cobardía, contigo discutir tranquilamente, segura do la paz del alma mía.

¿De qué me acusas? Habla francamente; ¿de haber buscado asilo en un convento, donde posar mi fatigada frente?

Y si ésto fuó en verdad tu pensamiento, ¿por qué no me llevaste a los altares y diste vida á tu alto sentimiento ?

¿No pudieron los vivos luminares de mis hermosos ojos conducirte hasta una choza con sus viejos lares?

Muchas cosas pudiera yo decirte; mas no seré contigo despiadada: no puedo con mis labios maldecirte

á ti, de quien, al cabo, fui la amada:¡ pudores do un amor pasado y muerto!¡ cortesía do una alma contristada!.. . .

Al fin y al cabo, ya lio llegado al puerto, y en esta celda, que es mi sepultura, mi cuerpo encontrarán un día yerto.

Dios te colmo de dichas y ventura !... Por ti rogaré á Dios mientras yo viva; y al dejar esta tosca vestidura,

cárcel en donde mi alma está cautiva, por tu felicidad pediré al cielo, y Él ha de oír mi voz caritativa.

Sólo hay un Dios que es fuente de consuelo: ese es el solo amor que satisface y que hoy me envuelvo en este negro velo.

Gloria mundana el viento la deshace; la celda es un sepulcro, mas no miente y muestra sin disfraz el desenlace.

La campana del coro ya se siente.. . .¡ Que vivas en la paz y la concordia, que adores en el Dios omnipotente y que Él tenga do ti misericordia!

•Adolfo VALDERRAMA.(Cliilono).

____________________ 99

Page 4: BE VISTA NACIONAL - anaforas.fic.edu.uyanaforas.fic.edu.uy/jspui/bitstream/123456789/11588/1/RevistaN55.pdf · pendiente del peligroso equilibrio de un artista en el trapecio, aparece

100

ipuÉifioues bibliográfieas

LA REFORM A ORTOGRÁFICA. S U HISTORIA Y S U ALCAN­C E. TR ATAD O D E ORTOGRAFIA REFORMADA. POR EDUAR­DO D E LA BARRA ( D E L A R EA L ACADEMIA ES P A Ñ O LA ).

U n e s c r ito r a m e ric a n o c u y a g r a n r e p u ta ­c ió n c o r r e p a r e ja s c o n su a c t iv id a d in c a n ­s a b le , e l e m in e n te p r o s o d is ta d o n E d u a r d o d e la B a r r a , v ie n e p u b lic a n d o en C h ile una s e r ie d e tr a b a jo s g r a m a tic a le s d e s tin a d o s á a firm a r la s c o n q u is ta s o r to g r á f ic a s a lc a n z a ­d a s en a q u e l p a ís y á p r e p a r a r d is c r e ta m e n ­t e la re fo rm a , im p la n ta d a p o r B e l lo y S a r ­m ie n to h a c e m ás d e m e d io s ig lo .

L a ta re a e m p re n d id a p o r e l s e ñ o r d e la B a r r a es d e e sa s q u e m e re c e n se r a le n ta d a s , p o r e l e s p ír itu d e p r o g r e s o q u e la s in fo rm a , p o r e l p la u s ib le e s fu e rz o q u e im p lic a n y p o r e l d e s in te ré s y e l b ie n e n te n d id o a m o r p a ­

tr io q u e r e v e la n .E s o b r a d ig n a d e l a u to r d e lo s Elementos

de métrica castellana, q u e lle v a p u b lic a d a s s ie te o b r a s d e e r u d ic ió n y v e r d a d e r o m é r ito e n lo s m e s e s tr a n s c u rr id o s d e l a ñ o p r e s e n te .

E l ilu s tre lite r a to se p r o p o n e lle v a r á c u m p lid o té r m in o la re fo r m a o r to g r á f ic a p a rt ie n d o d e b a s e se g u ra : d e la su s titu c ió n d e l im p e r fe c to a b e c e d a r io a c tu a l p o r o tro q u e re s p o n d a á la s e x ig e n c ia s d e l p r in c ip io fo n é tic o : un signo para cada sonido y un solo sonido para cada signo.

( U n o r a d o r d e a ld e a , r e fie r e , h a b ía p e r ­d id o lo s d ie n te s , y e l m e n g u a d o , en u n a s o ­le m n e o c a s ió n , d ic e n q u e p id ió á un v e c in o su d e n ta d u ra p o s t iz a , p a r a a y u d a rs e ; p e r o , c o m o e r a d e e s p e r a r lo , la d ific u lta d c r e c ió p a ra é l, p u e s s e lle n a b a la b o c a c o n un in ú ­ti l e s to r b e , d e s d e q u e a q u e l a p a r a to n o s e a ju sta b a á su p a la d a r n i á su s e n cía s .

c A s í n o s o tr o s , u sa m o s un a lfa b e to a je n o , e l la tin o , q u e n o n o s d e ja e s c r ib ir c o m o h a ­b la m o s , c u a l e l r id íc u lo o r a d o r q u e n o a t i­n a b a á d e c ir lo q u e q u e ría , im p e d id o , m ás q u e a u x ilia d o , p o r lo s d ie n te s d e su c o m ­

p a d re . >

* *

L a c u e s t ió n d e la re fo rm a a lfa b é tic a e s tá n u e v a m e n te e n ta b la d e d iscu sió n , d e sp u é s d e a lg u n o s a ñ o s e n q u e p a re c ía a b a n d o n a ­d a á lo s c a p r ic h o s o s e m b a te s d e la s u e rte .

Á p a rt ir d e la r e a c c ió n d e 1888 y d el m o ­v im ie n to d e 188 4, en e l cu a l to m a ro n m u y a c t iv a p a r t ic ip a c ió n , á fa v o r y en c o n t r a d e la re fo rm a , lo s d is tin g u id ís im o s lite r a to s M ig u e l L u is A m u n á te g u i, Z o r o b a b e l R o d r í­g u e z , A d o lfo V a ld e r r a m a , S a n d a lio L e t e lie r , F id e lis P . d e l S o la r , E n r iq u e N e rc a s s e a u y M o rá n y F r a n c is c o S o la n o A s t a -B u r u a g a , la c u e s t ió n d e la re fo r m a a lfa b é tic a p a r e c ía

. s ó lo d e stin a d a á a u m e n ta r la a n a rq u ía re i­n a n te en C h ile e n m a te ria o rto g rá fic a .

H o y re n a c e a r m a d a d e to d a s a rm a s, fu e r­t e y b r io s a , c o m o b r o tó d e la lu m in o sa fr e n ­t e d e B e llo ; y h a s ta c o n m ás títu lo s: c o n e l p r e s t ig io d e m á s d e m e d io s ig lo d e p r á c t i c a c a s i u n ifo rm e e n la c u lta R e p ú b lic a ch i­le n a .

P e r o n o s e x p r e s a m o s in e x a c ta m e n te c u a n d o d e c im o s q u e la re fo rm a fu é iniciada p o r e l s a b io v e n e z o la n o : es sa b id o q u e e l

Bevista Nacional de Literatura y Ciencias Sooialei= = = = ^ = = = = = = = ¡

p r in c ip io fo n é tic o tu v o m u c h o s y m u y c a lu ­

r o s o s d e fe n so re s a n te s q u e é l.B a s te r e c o r d a r q u e e l c é le b r e A n t o n i o d e

L e b r i ja ó N e b r ija e n s e ñ a b a , a llá en e l s ig lo X V I , q u e t d e b ía m o s e s c r ib ir c o m o p r o n u n ­c ia m o s y p ro n u n c ia r c o m o e sc r ib im o s .» E x ­c e p to d ife re n c ia s d e d e ta lle , lo m ism o h a n s o ste n id o M a te o A le m á n , J u a n L ó p e z d e V e la z c o , G o n z a lo C o r r e a s , B a r t o lo m é J i ­m én ez P a tó n , lla m a d o s , á ju s to títu lo , lo s p a d r e s d e la g r a m á tic a c a s te lla n a . Y e l d o c t o r d o n J u a n d e I r ia r te c o m e n z a b a así, h a c e m ás d e c ie n a ñ o s , su d is c u r so d e in c o r p o r a c ió n e n la A c a d e m ia E s p a ­ñ o la : < S ie n d o p r o p ia m e n te la e s c r itu r a u n a im a g e n ó r e tra to d e la p a la b r a , c o m o é s ta lo e s d e l p e n s a m ie n to , p a r e c e q u e la s le tr a s y lo s so n id o s d e b ie r a n te n e r e n tr e s í la m ás p e r fe c ta c o rr e sp o n d e n c ia : e s to e s , q u e n o h a b ía d e h a b e r le t r a s q u e n o tu v ie s e n su s o n id o , ni so n id o q u e n o tu v ie s e su le tra ; q u e c a d a c a r á c te r n o h u b ie s e d e s e ñ a la r m á s q u e un s o n id o , ni c a d a s o n id o s e r s e ñ a la d o p o r d iv e rs o s c a ra c te re s ; y , c o n s ig u ie n t e m e n ­te , q u e s e d e b ie ra e s c r ib ir c o m o s e h a b la ó

s e p ro n u n c ia . >E n re a lid a d no h a b r ía n e c e s id a d a q u í d e

e s ta m p a r n o tic ia s ta n d iv u lg a d a s , q u e n o d e s p o ja n c ie r ta m e n te á B e l lo d e la g lo r ia d e s e r e l in ic ia d o r d e la re fo rm a e n C h ile , c o m o q u ie ra q u e co n v e in te a ñ o s d e a n t e la ­c ió n á S a rm ie n to p r o p u s o su s is te m a d e s d e L o n d r e s en 18 23 en la Biblioteca Americana y e l e l Repertorio Americano en 18 2 6 , en u n ió n d e G a r c ía d e l R ío . P e r o n o e s tá d e m á s re p e tir lo , s i s e c o n s id e r a q u e e s e h e c h o le v a lió á B e l lo e n v id a e l d ic ta d o d e p la g ia r io , d e q u e a p e n a s se lib r a n lo s q u e la b r a n la tie - r r a y d e p o s ita n en su s e n o la se m illa fe c u n d a .

E l p la n te ó la re fo rm a y la p r e s e n t ó e n e l o rd e n s u c e s iv o c o n q u e su e s p ír itu e m in e n ­te m e n te p r á c t ic o c r e y ó d e b ía s e r a d o p ta d a .

A l p r o c e d e r así, o b r ó c o n m u c h a c o r d u r a , c o n v e n c id o d e q u e la s ta r e a s r e la c io n a d a s c o n e l p e r fe c c io n a m ie n to d e la s le n g u a s , co m o to d a s la s c o le c t iv a s , h a lla n su m e jo r

a u x il ia r e n e l tie m p o .V a r ia s e s p e c ie s d e ir r e g u la r id a d e s n o tó

e n e l v ie jo a lfa b e to c o r r ie n te . H e a q u í la s

p rin c ip a le s :1. “ U n m ism o so n id o e s r e p r e s e n ta d o p o r

d o s s ig n o s d ife re n te s: i-y, g -j, c-z k-qu.2. ‘ U11 m ism o s ig n o a lfa b é tic o r e p r e s e n ta

d o s so n id o s d ife re n te s: c o m o la r (') a l p r in ­c ip io d e d ic c ió n y d e sp u é s d e la s c o n s o n a n ­te s u, /, s, y la m ism a le tr a en m e d io d e p a ­la b ra ; la y , enyugo y e n convoy; la c en ca­ma y en cielo.

3 * S u e le n e m p le a r s e s ig n o s q u e n o r e ­p re s e n ta n n in g ú n s o n id o , c o m o la h c u a n d o no es a sp ira d a , ó c o m o la u d e s p u é s d e la q.

V e a m o s c ó m o e s c a lo n a b a B e l lo la r e fo r ­m a p a ra su m e jo r r e a liz a c ió n en la p r á c t ic a .

L a d iv id ía e n d o s é p o c a s :

ÉPOCA 1.“I . S u st itu ir l a / á la x y á la g e n to d o s

(') Don Andró» Bello llam aba h estn le tra ere, .y el señor de la Barra propone se la llame re,, oo suave, fundándoso en que. si bien no ,1-miousa ttiiabn, heoho fonético distinto. So g clon no nos convence del todo. Si eon frav“se le preguntara cómo denomina ó estn 1 ’ • ¡nlondo á su aseveración y apelando ó un soar pronunciable, diría, sin duda alguna, re.

lo s c a s o s e n q u e e s ta s ú lt im a s t e n g a n e l so- n id o g u t u r a l á r a b e .

2. S u s t itu ir la i i la y e n to d o s lo s c a s o s en q u e é s ta h a g a la s v e c e s d e s im p le v o c a l.

3. S u p r im ir e l h.4. E s c r ib ir c o n r r t o d a s la s s í la b a s e n q u e

h a y a e l s o n id o fu e r t e q u e c o r r e s p o n d e á e s­

ta le tr a .5. S u s t itu ir la z á la c s u a v e .6 . D e s t e r r a r la « m u d a q u e a c o m p a ñ a á

la q.ÉPOCA 2.*

7 . S u s t i t u ir la q á la c fu e r te .8. S u p r im ir la u m u d a q u e en a lg u n a s

d ic c io n e s a c o m p a ñ a á l a ¿ \*

# #

E l s e ñ o r d e la B a r r a l l e g a á e s ta s m ism a s c o n c lu s io n e s y c o in c id e c o n e l m a e s tr o en e l m o d o d e l le v a r á té r m in o la re fo rm a , q u e lu c h a y lu c h a r á s e g u r a m e n t e aú n m u ch o t ie m p o c o n la fu e r z a d e la c o s tu m b r e , q u e e s p o d e r o s a . E s t e p o d e r d e la in e r c ia s ó lo p u e d e v e n c e r s e y e n d o p o r g r a d o s , d e m o d o q u e e l c a m b io s e e f e c t ú e p a u la t in a m e n te y n o d e g o lp e . < E l h a z d e m im b r e s m á s r e ­s is te n t e , d ic e v a lié n d o s e d e u n s ím il ta n h e r­m o s o c o m o e x a c t o , s e v e n c e s in g r a n d ifi­c u lta d , s i s e le v a q u e b r a n d o v a r i l la p o r v a ­r illa : a s í ta m b ié n s e d o m a l a r u t in a in v e n c i­

b le . >A lg u n a s d ife r e n c ia s s e a d v ie r t e n , e m p e ro ,

e n tr e lo s s is te m a s d e B e l lo y d e la B a rra .E l f i l ó l o g o v e n e z o la n o c r e ía q u e e ra n e ­

c e s a r io q u e la q s u s t i t u y e s e á la c fu e rte . Y e l s e ñ o r d e la B a r r a o p t a p o r la k, a p a d r in a ­d a p o r G o n z a lo C o r r e a s y p o r la g r a n m a­y o r ía d e lo s fo n e t is ta s d e n u e s tr o s t ie m p o s, q u e la p r e f ie r e n p o r la u n iv e r s a lid a d d e su v a lo r g u t u r a l, p o r su m a y o r c la r id a d y b e ­lle z a , p o r la im p o s ib il id a d d e c o n fu n d ir la c o n o tr a s le t r a s y p o r la m a y o r fid e lid a d c o n q u e c o n s e r v a á v e c e s e l c a r á c t e r e tim o ­ló g ic o d e la s p a la b r a s .

T e s t i g o s d e s u s v e n t a ja s s o n lo s ilu s tra ­d o s n e ó g r a fo s c h ile n o s A l b e r t o L i p t a y , C a r ­lo s N e w m a n , C a r lo s C a b e z ó n y M a n u e l A . D é la n o , q u e p a r t id a r io s a l p r in c ip io d e la le t r a d e ig n o r a d o o r ig e n , c o n c lu y e r o n p o r

a d o p ta r la g r ie g a .O t r a d ife r e n c ia n o ta m o s e n tr e lo s s is te ­

m a s e n c u e st ió n .E l s e ñ o r d e la B a r r a , c o n t r a r ia n d o la opi-

n ió n d e B e l lo , s u s t i t u y e la x e n tr e v o c a le s p o r la c o m b in a c ió n es. P a r a e s t e ú lt im o , ta l e q u iv a le n c ia n o e x is t e e n e l c a s t e l la n o a c ­tu a l, y la a: r e p r e s e n ta u n a a r t ic u la c ió n p e ­c u lia r q u e s e a p r o x im a m á s a l s o n id o d e ¿-y ó s s o la , q u e a l d e es, s o n id o q u e p r e f ie r e e l s e ñ o r d e la B a r r a . D o n A n d r é s B e l lo so ste n ía q u e p r o n u n c ia r ecsamen y eesonerar, d a n d o su v e r d a d e r o v a lo r á la c, p a r e c e r ía a fe c ta c ió n y r e c a lc a m ie n t o .

E l e m in e n te a u t o r d e la R eform a ortográ­fica s ie n te c o n J o s é S e g u n d o F lo r e s , M a rtín ez L ó p e z , D o m ín g u e z , F e r n á n d e z M o n je y F i­d e lis P . d e l S o la r , q u e n o d e b e p in ta r s e en lo e s c r i t o u n a le t r a q u e n a d ie p ro n u n c ia y a s in in c u r r ir e n s in g u la r id a d a fe c ta d a , a u n q u e la p r á c t ic a o p u e s t a c u e n t e , en tre m u c h a s o tr a s , c o n la s a u t o r id a d e s d e S ic ilia y d e B e l lo , q u ie n e s c o n s id e r a b a n p r e fe r ib le p r o n u n c ia r , y p o r c o n s ig u ie n t e e s c r ib ir , ex-

Page 5: BE VISTA NACIONAL - anaforas.fic.edu.uyanaforas.fic.edu.uy/jspui/bitstream/123456789/11588/1/RevistaN55.pdf · pendiente del peligroso equilibrio de un artista en el trapecio, aparece

pedir, expectación, expectativa, p orq u e e llo • t ie n e á su favo r e l uso de las p erson as in s­tru idas q u e no se han d ejad o co n ta g ia r de la m anía de las in n ova cion es. >

O tra de las v aria n tes de im p ortan cia que e l n u evo sistem a p resen ta es la de la adop - ción de la w, co m o co n secu en cia de la des­ap a rició n de la h an te los sonid os na, ue, ut. R eem p la zá n d o lo s con way ive, wi, se e v i­tarían n u m erosas in con secu en cia s y la « se c o n v e rtir ía en co n so n an te, lo m ism o que la i en los d ip to n g o s ia, te, cuando com ien zan d icció n . ( ‘) E s a p ráctica , que se o b serva en la len g u a in g lesa , ha sido p rop u esta p ara la fra n cesa p o r e l rep u ta d o filó lo g o D arm es- te te r y p a ra la ca ste llan a p o r el señ or F e r ­n an do Á ra ú jo en s u s Estudios de Fonética, y p o r e l señ or G u illerm o F r ic k en algu n as o b se rv a c io n e s so b re la o rto g ra fía universal p re se n ta d a s en 1883 á la co n sid era ció n del C o n se jo de In stru cció n P ú b lica de C hile. H o y es defendida p o r f iló lo g o s de rep u ta ­c ió n universal.

** «

E l sab io au to r de lo s Ensayos literarios y críticos, don A lb e r to L ista y A ra g ó n , dijo en su Juicio cr ític o á la edición octava del Diccionario de la Academia Española, que « así co m o las refo rm as p o lític a s son inúti­le s y aun p e rn ic io sa s cu ando no están en arm on ía co n e l esp íritu d é la s n acion es, así tam bién la s re la tiva s á gra m á tica y o rto g ra ­fía son in oportu nas si no se con form an con e l uso g e n e ra l, que es la razón suprem a del id iom a. >

H a y q u e co n v e n ir en que en tre las p e r ­so n a s que p resta n p referen te aten ció n á esta s cu estion es, la op in ión del au tor de lo s Ensayos está d esgra cia d am en te m uy g e n e ­ra lizada.

H a y d em asiados p artid ario s de las p rá c ­tica s actu a les, d em asiados ad o ra d ores del uso, dem asia dos ad ep to s del p rin cip io e ti­m o ló g ic o , p ara que sea d ab le esp erar su p ro n ta d esa p a rició n d el m undo de la cien­cia.

P ero i q u é se o p o n e en ca ste lla n o á la ad m isión d el p rin cip io fo n ético ? ¿ P o r qué ra zó n h em os de esta r su je to s siem p re al dom in io de la v ie ja ru tin a ?

L a e tim o lo g ía , e l uso y la p ron u n ciación son, seg ú n la A ca d em ia , las ba ses de nues­tra escritu ra .

P ero la e tim o lo g ía y e l uso no lo serán en lo futuro necesariam en te, op o n ién d ose c o ­m o se o p o n en á las n u evas ideas. D ejarán de ser in vocad o s, p orq u e to d o lo que no en cu en tra a p o y o en la razón hum ana, todo lo q u e v a co n tra e l p ro g re so , to d o lo que es inútil, ca e n ecesa ria m en te en desuso.

E s la m arch a n atural de las cosas, y no h a y nada ca p a z de co n te n e r su im pulso arro­llad o r.

i Q u é p uede, en verd ad , d eten erla ? ¿ L a etim ología? P ero ;ha im p ed id o acaso la e ti­m o lo g ía lo s p ro g re so s alcanzados? ¿Ó se so sten d rá que ha p erm an ecid o in m ob le la escritu ra an te la m archa ja m á s interrum -

(') Nuestro autor paroce inclinarse h la opinión do que la t en estos casos se hace consonante, aun cuando el diptongo no ligure al principio de palabra, y esoribe adyero, enyesto, ¿i mi entender contra las leyes de la or­toepía.

pida del p rog reso ? ¿ Ha sido la etim ología ca p az de co n servar la ph con sonido de f, la x con v a lo r de j , la ch con sonido de k, la d u plicación de la s, la y en los d ip ton gos a) ' ey, oy, uy, cuando no term inan dicción, y tán ta co sa inútil com o ha ido á m orir al do­m inio de lo pasado? No h ay nada más ridí­cu lo que a le g a r orígenes m ás ó m enos ign o­rados con tra las prácticas actuales del len­gu aje. « C on servar letras inútiles p or am or á las etim o lo gía s, dice B e llo , m e p arece lo m ism o que con servar escom bros en un edi­ficio nuevo p ata que nos hagan recordar el antiguo.» i E l uso ? Pero el uso, cuando se op o n e á la razón y la conveniencia de los que leen y escriben, m erece m ás bien, com o se ha d icho algu n a vez, el títu lo de abuso. É l no es ni p u ede ser obstácu lo á la adm isión de nuevas ideas. E n ningún orden de c o ­n ocim ien tos son los usos y p rácticas sino an teced en tes más ó m enos atendibles, razo­nes de segu n d o orden, satisfactorias en tan­to no son sustituidas p or otras mejores; a lg o a«í com o un hom enaje que rinden los h ech os á la verdad y la razón. < S i la p rá ctica fuera un argum ento, dice el d o c­tor M anuel M aría M adiedo en su Derecho de Gentes, ¿ cuándo ni có m o podríam os p ro ­g re sa r en a lg o sobre la tierra ? E s la p rác­tica 1. se exclam aría siem pre; y toda refo r­m a y toda m ejora serían de todo punto im ­p osib les. P rá ctica s que d escon ocen ó a tro ­p ellan e l d erecho fundam ental de las so cie­dades civilizadas, no tienen razón para se­g u ir ex istien d o entre hom bres que aspiran á ser llam ados naciones; y si la p ráctica fu e­ra una razón contra un d erecho d esco n o ci­do ó atrop ellad o , todavía sería lícito d e g o ­llar ó ven d er al prisionero de gu erra y deshonrar á la esp osa del s iervo de la g leb a, p orq u e eso se h a practicado com o una p re ­rro g a tiv a del ven ced o r rom ano y com o una rega lía d el señorío de los tiem pos fe u ­dales.»

Q ueda, pues, su bsistente y en p ie el p rin cip io de la pronunciación com o basa de la escritura, c u y o oficio, debem os ten erlo m uy en cuenta, no es dar le y e s á la pronun­ciación y m odificarla á su cap richo, sir.o re­p resentarla fielm ente, con entera verdad.

P ero la innovación, se dice, no extirp aría las anom alías o rto grá fica s, p orq u e el a lfa­b eto hablado, acreciendo el cúm ulo de so ­nidos articu lados con variadas distinciones y m atices de pronunciación, no tarda en trasp a sar larga m en te los lím ites del a lfab e­to escrito; p orq u e la pronunciación, según W h itn e y y D arm esteter, cam bia de región á región , de ciudad á ciudad; en una misma localidad, de g en te á gen te, de se x o á sexo; en un m ism o individuo, con la edad y el hu­m or del m om ento; p orque el cam bio de unas letras p or otras en el ca ste llan o — cam ­bio que debería hacerse ex ten sivo á las pa­labras y frases tom adas de otros idiom as — p rod u ciría el efecto de variar la pronun­ciación de ellas ó a lterar su sentido: así la g de gentium y generis, en ju s gentium y en sttigeneris, se pronunciaría com o j", que es e l sonido que le daban lo s latinos, y la p a ­labra in g le sa gest, que escrita así significa proeza, pasaría, escrita con j , á significar chanza, y así muchas otras; finalm ente, p or­que e l idiom a, com o los árboles, v ive p or

Jtev lsta Naolonal di Literatura jr Ciencias Sociales 101sus raíces, por su origen, p or la base funda­m ental de su misma existencia.

E l tiem po dirá si el valor de estas obser­vaciones, cu ya exactitud é im portancia e s­tam os d istantes de negar en absoluto, será suficiente valladar para oponerse á la refor­m a, cu ya sencillez y verdad no pueden m e­nos de cautivar á los espíritus despreocupa­dos, independientes y cultos. Pero ad virta­m os desde ahora que cuando hablam os de pronunciación nos referim os á la de la gen ­te educada de todas partes, á la de las per­sonas cu ltas que poseen el idioma á perfec­ción, no á la viciada del mayor tríimero, prin­cipio no m u y atendible en cuestiones de gram ática. A d o p ta r otro criterio, som eterse á la m ayoría en prueba de obediencia, sería dar la m uestra de la más supina bisoñería, porque— no llevando las analogías más allá de lo razonable— en la ciencia, com o en la política, la capacidad es el único título que da el derecho de voto.

Contribuir al resultado apetecido p or el em inente autor de los Elementos de métrica castellana; a llegar nuestro grano de arena á la obra grande y patriótica de la reform a de la ortografía, es el objeto de estas mal pergeñadas líneas, débilísim o testim onio de adm iración sincera, de sim pática adhesión y de confraternidad americana.

Carlos MARTINEZ VIGIE

L O S P R I M E R O S P O B L A D O R E SJuan D íaz de Solís (1516). H ernando de

M agallanes (1520 ),Sebastián G a b o to y D ie­g o G arcía (1527-1528) descubrieron, visita­ron y reconocieron respectivam ente los ríos de la Plata, U ruguay, Paraná y Paraguay; pero la época de la conquista y colonización de las p rovincias que abrazan, com ienza en 1537 con don Pedro de Mendoza.

Solís, reputado el m ejor piloto de su tiem ­po, descubrió á principios del año 1 5 1G, bus­cando un estrecho para la Mar del Sur, el R ío de la Plata; pero muerto alevosam ente i m anos de los charrúas en la m argen orien­tal junto á la isla de Martín García, en segui­da tom aron á E sp aña sus com pañeros, que­dando fugitivo en tierra uno de ellos, que escap ó de la matanza com o por m ilagro.

M agallanes, intrépido navegante, que o freció abrir p or la vía del oeste un paso para las codiciadas islas de la especería, que aseguraba p erten ecer á la Corona de C asti­lla, v isitó á principios del año 1 520 el Río de la Plata, recorriéndolo de orilla a orilla p a ­ra verificar su anchura, que encontró de vein te leguas; reem plaza la aguada, p rosi­gue su derrota, descubre el estrecho que lle ­va su nom bre, y m uere defendiéndose con generoso heroísm o en las Filipina».

E l año 1527 entró por el R ío de la Plata Sebastián G aboto, marino diestro y anim o­so, inducido á e llo p or la im posibilidad de continuar, falto de v íveres y perdida la ma­y o r de sus em barcaciones, la derrota que llevaba hacia la India O riental por el es­trecho de M agallanes. Fondeado en la isla de San G abriel, frente á la Colonia del Sacra­m ento, despacha en reconocim iento del Río

Page 6: BE VISTA NACIONAL - anaforas.fic.edu.uyanaforas.fic.edu.uy/jspui/bitstream/123456789/11588/1/RevistaN55.pdf · pendiente del peligroso equilibrio de un artista en el trapecio, aparece

102

U r u g u a y a l c a p itá n Ju an Á lv a r e z R a m ó n , q u ie n a r r o ja d o p o r u n a to r m e n ta c o n tr a un b a n c o d e a r e n a c e r c a d e la d e s e m b o c a d u r a d e l R ío N e g r o , s e s a lv a d e l n a u fr a g io en un b o te c o n to d a su g e n te , p e r o m u e re e n s e ­g u id a c o n a lg u n o s c o m p a ñ e r o s b a ta lla n d o c o n lo s y a r o s . T o m a G a b o t o un b r a z o d e l P a r a n á y s u b e h a s ta e l C a rc a ra ñ a l, p r o v in ­c ia d e S a n ta F e , d o n d e c o n s tr u y e un fu e rte c o n e l n o m b r e d e S a n ti-S p ir itu s . C o n tin ú a , n a v e g a e l P a r a g u a y h a s ta e l B e r m e jo , y G o n z a lo N ú ñ e z d e B a lb o a , q u e ib a a d e la n te , h e rm a n o d e l h e r o ic o d e s c u b r id o r d e l M a r d e l S u r, c o n u n a v e in te n a d e e s p a ñ o le s q u e le a c o m p a ñ a r o n á t ie rra m u e re en d e s e s p e ­ra d a p e le a c o n t r a lo s te m ib le s a g a c e s c e r c a d e l b a ñ a d o d e N e m b u c ú . B a ja G a b o t o e l río y e n c u e n tra á D ie g o G a r c ía (15 2 8 ), e n v ia d o d ir e c ta m e n te a l r ío d e S o lís . P e ro G a r c ía , e n c o n tr a n d o y a á G a b o t o e n p o s e s ió n d e n u e v o s d e s c u b r im ie n to s , h u b o d e c e d e r le la p rim a c ía , y s e v u e lv e á E s p a ñ a . P o c o d e s ­p u é s h izo lo m ism o G a b o to , c o n e l o b je to d e ju s tific a r su c o n d u c ta a n te e l R e y y d e o b te n e r e l p e rm iso y e le m e n to s n e c e s a r io s p a r a c o n tin u a r su s d e s c u b r im ie n to s ; y a u n ­q u e r e c ib id a s c o n e l m a y o r a g r a d o su s g e s ­t io n e s , e n r e s o lu c ió n le s a lie r o n fru str a d a s á c a u sa d e la p e n u r ia d e l e ra r io D e s a p a r e ­c e n p o r ú ltim o , d e la s t ie rra s r e c ié n d e s c u ­b ie r ta s , u n o s tr á g ic a m e n te , o tro s a r ra s tra d o s p o r e l v ie n to , a l l í s ie m p r e re c io , d e la fo r tu ­na, c ie n to d ie z h o m b r e s q u e b a jo e l m a n d o d e Ñ u ñ o d e L a r a h a b ía d e ja d o G a b o t o d e g u a rn ic ió n en e l F u e r t e d e S a n ti S p ír itu s . H e a q u í c ó m o M a n g c r é , c o n q u ie n lo s e s­p a ñ o le s e s ta b a n en p a z . se e n a m o r ó p e r d i­d a m e n te de L u c ía d e M ira n d a , m u je r h e r ­m osa , c a sa d a c o n S e b a s tiá n H u rta d o . P o s e í­d o d e un s a lv a je d e lir io , se p r o p u s o a c a b a r c o n lo s e s p a ñ o le s , á tr u e q u e d e p o s e e r e l s u s p ir a d o o b je to d e su s d e s v e lo s . A p r o v e ­ch a n d o la c irc u n s ta n c ia d e h a b e r s a lid o c u a ­r e n ta h o m b r e s (e n tre e llo s H u rta d o ) a l m a n ­d o d e l c a p itá n R u i G a r c ía M o s q u e ra en b u s ­c a d e v ív e r e s p o r la s is la s y r ib e r a s d e l P a ­ra n á, ju n ta s o b r e c u a tr o m il b á r b a r o s , y se a p r o x im a una n o c h e á S a n ti-S p ír itu s , p o ­n ie n d o d e e m b o sc a d a á c a s i to d a su g e n te e n un s a u z a l q u e h a b ía á n o la r g a d is ta n c ia d e l fu e rte . S e a c e r c a , y a n u n c ia a l c e n t in e la q u e tr a ía b a s tim e n to s . V ie n d o la g u a r d ia q u e e ra n p o c o s lo s q u e lo a c o m p a ñ a b a n , le s a b re , y a l p u n to c a e n lo s e m b o s c a d o s c o m o ja u r ía d e p e r r o s s o b r e e l fu e rte , y s o r p r e n ­d ie n d o en su s c a m a s á la m a y o r p a r te d e lo s e s p a ñ o le s , h a c e n en e llo s u n a fe ro z m a ­ta n za M a s n o p u d o g u s ta r M a n g o r é e l fru to d e su in fa m e tra ic ió n ; p o r q u e e n tre lo s e s ­p a ñ o le s q u e p u d ie ro n e m p u ñ a r la s a rm a s, s a le á la p la z a Ñ u ñ o d e L a r a re s p ira n d o v e n g a n z a , y a u n q u e y a c o n una fle c h a e n ­te r r a d a en e l c u e rp o , s e a b r e p a s o a filo d e la e s p a d a p o r e n tr e la m u c h e d u m b re q u e c o n e s p a n to s o c la m o r e o h u y e a te r í ada: fre ­n é tic o d e fu ror, b u s c a d ilig e n te á M a n g o r é , d a co n é l, y a s e s tá n d o le tr e s g ra n d e s c u c h i­lla d a s, lo d e rr ib a m u erto . A c r ib illa d o d e h e ­r id a s , c a e Ñ u ñ o d e L a r a e x á n im e a l s u e lo , y ro d e á n d o lo lo s b á rb a ro s , c o n c lu y e n c o n é l á s a e ta z o s y g o lp e s , a s í c o m o co n lo s p o c o s e s p a ñ o le s q u e m a n te n ía n la p e le a . V u e lt a á S a n ti S p ir itu s la e x p e d ic ió n d e G a r c ía M o s ­q u era , e l in fe liz H u rta d o h u y e d e sa te n ta d a -

Kevista Nacional de L iteratura y Ciencias Sociales

m e n te á b u s c a r e n tr e lo s b á r b a r o s á L u c ía , d e q u ie n S ir ip o , h e rm a n o d e M a n g o r é , se h a b ía p o s e s io n a d o e n v a n o a s p ira n d o á lo s h a la g o s d e su b e l la c a u tiv a . Ir r ita d o un d ía S ir ip o , la h a c e q u e m a r v iv a á p r e s e n c ia d e H u rta d o , a l m ism o t ie m p o q u e é s te , a ta d o á un á r b o l, e ra m u e rto á fle c h a z o s . G a r c ía M o s ­q u e ra y su s tr e in ta y n u e v e c o m p a ñ e r o s , d e s p u é s d e e n te r r a r á lo s e s p a ñ o le s , le v a r o n a n c la s río a b a jo á re m o y v e la , p a s a r o n e l P la ta , y c o s te a n d o s ie m p r e p o r e s ta r sin o b r a m u e rta la e m b a r c a c ió n e n q u e n a v e g a b a n , re c o r r ie r o n e l B r a s il h a s ta la b a h ía d e Ig u á , d o n d e s u r g ie r o n , á v e in t ic u a t r o le g u a s d e S a n V ic e n te . P a r e c ió le s to m a r a s ie n to en a q u e l p a r a je , y c o n s tr u y e r o n u n a c a s a fu e r­te , p e r m a n e c ie n d o q u ie ta m e n te d o s a ñ o s. Á e s te t ie m p o , h a b ie n d o lo s e s p a ñ o le s d a d o a c o g id a a l b a c h il le r D u a r te P é re z , c a b a lle r o p o r tu g u é s d e s te r r a d o d e la C o r te , e l g o b e r - n a d o r d e S a n V ic e n t e M a rtín A lfo n s o d e S o ­s a le s in tim ó q u e ju r a s e n o b e d ie n c ia a l r e y d e P o r tu g a l, ó s in o s e r e t ir a s e n e n e l té r ­m in o d e tr e in ta d ía s. L o s e s p a ñ o le s c o n t e s ta ro n q u e n o h a ría n n in g u n a d e la s d o s c o ­sas, y a u n q u e sin m ás a r m a s q u e su s e s p a d a s , d e te r m in a r o n m a n te n e r se á to d o tr a n c e en e l p u e sto . P o r fo rtu n a v in o á e c h a r a n c la s á e s ta s a z ó n c e r c a d e la b a h ía un c o r s a r io fra n c é s , q u e , s in d e s c u b r ir e l p u e s to e s p a ñ o l, d e s p r e n d ió un b o te á la c o s ta . A p r e s á r o n lo lo s e s p a ñ o le s , y y a e n tr a d a la n o c h e , a p a ­re n ta n d o s e r lo s m ism o s m a rin e r o s q u e h a b ía n b a ja d o á t ie rra y q u e tra ía n u n a s c a n o a s c a r g a d a s d e v ív e r e s , s e a c e r c a n a l b u q u e c o r s a r io y lo to m a n a l a b o r d a je m e d ia n te u n a c o r t a re fr ie g a . E s t a fe liz a v e n tu r a le s p r o p o r c io n ó a r m a s d e fu e g o y m u n ic io n e s . E n t r e ta n to lo s p o r t u g u e s e s se p u s ie ro n e n m o v im ie n to c o n d o s c o m p a ñ ía s d e tr o p a a l m a n d o d e P e d r o G o e s y m u c h e d u m b re d e g u a r a n íe s c o m o a u x il ia r e s . L o s e s p a ñ o le s lo s e s p e r a r o n , p o n ié n d o s e v e in te d e e l lo s en e m b o s c a d a c o n a lg u n o s c ie n to s d e in d io s q u e s e le s h a b ía n h e c h o a m ig o s , y e l r e s to e n el fu e rte . C o m e n z a d o e l a ta q u e , h a c e n ju g a r lo s d e l fu e rte la s p ie z a s d e a r t i l le r ía q u e h a b ía n s a c a d o d e l c o r s a r io . E s t o d e s ­c o n c e r tó á lo s p o r tu g u e s e s , q u e a je n o s a l su c e s o , n o e s p e r a b a n ta m a ñ a r e s is te n c ia , y a c o m e tid o s d e im p r o v is o p o r lo s d e la e m ­b o s c a d a , h u y e n d e s o r d e n a d o s , c a y e n d o p r i­s io n e r o un c o m a n d a n te y s ie n d o p e r s e g u i­d o s y a c u c h illa d o s h a - ta S a n V ic e n te . S a ­q u e a ro n lo s e s p a ñ o le s e l p u e b lo y se fu e ro n á e s ta b le c e r , c o n a lg u n o s p o r tu g u e s e s q u e q u is ie r o n s e g u ir lo s , á la is la d e S a n ta C a t a ­lin a , q u e p e r te n e c ía in d is p u ta b le m e n te á la C o r o n a d e C a st illa .

G a b o to , a n te s d e ir é l á E sp a ñ a , h a b ía e s ­c r ito a l R e y e x p lic á n d o le la s c a u s a s p o r las c u a le s se in te r n a ra en e l r ío d e S o lí« , en lu ­g a r d e s e g u ir su v ia je á la In d ia. A l m ism o t ie m p o le e n v ia b a á p r e s ta r v a s a lla je u n o s in d io s d e la t ie rra , a d o rn a d o s c o n d ije s d e p la ta . D e a q u í v in o q u e e l r ío h a sta e n to n ­c e s lla m a d o de Solis se e x o r n a s e c o n e l s o ­b re n o m b re , ta n lis o n je r o c o m o e n g a ñ o s o , de la plata, a s o c ia d o n a tu r a lm e n te á la p e r s o n a de G a b o to , a s í c o m o e l m u n d o d e C o ló n no fu é mundo d* Colón, s in o Am érica, d e A m é r ic o V e s p u c io : la v e r ­d a d y la ju s tic ia , q u e h a c ía la r g o s a ñ o s h u y e r a n a l c ie lo , e n to n c e s , c o m o en e l

d ía p r e s e n te , n o h a b ía n n i h a n v u e lto á

la t ie r r a .L a s n o tic ia s , a u n q u e e n r e a lid a d in fa u s ­

ta s , q u e a s í un ta n to d u lc if ic a d a s c o r r ía n p o r E s p a ñ a d e e s te n u e v o te a tr o d e a r r ie s g a d a s a v e n tu r a s , e n c e n d ie r o n e n e l p e c h o d e d o n P e d r o d e M e n d o z a e l a n h e lo d e s e r un p r o ­ta g o n is ta . H a b ía s e d is t in g u id o c o m o g u e r r e ­ro a l s e r v ic io d e l e m p e r a d o r C a r lo s V y h a ­lla d o e n e l a s a lto y s a c o d e R o m a , s ie n d o p o s e e d o r d e un c u a n tio s o m a y o r a z g o e n G u a d ix . L o e x h a u s to d e l e r a r io , im p o s ib il i­ta n d o s a t is fa c e r á G a b o t o , a b r ió c a m in o á l a a m b ic ió n d e d o n P e d r o , q u ie n o fr e c ió a l r e y d is p o n e r u n a e x p e d ic ió n y c o n q u is t a r y p o ­b la r , d e su e x c lu s iv o p e c u lio , la s r e c ié n d e s ­c u b ie r ta s tie rra s : r e c o n o c e r la s q u e ca ía n h a c ia la m a r d e l S u r ( h o y O c é a n o P a c íf ic o a u stra l) y l l e g a r h a s ta su s o r i lla s c o n a c r e ­c e n t a m ie n to y lu s tr e d e la C o r o n a . O t o r g ó - s e le la m e r c e d q u e p e d ía p o r c a p itu la c ió n fe c h a e n T o le d o á 21 d e m a y o d e 15 3 4 , c o n f ir ié n d o s e le e l t í tu lo d e a d e la n t a d o a l ­g u a c il m a y o r g o b e r n a d o r y c a p itá n g e n e r a l d e la s tie r r a s , p r o v in c ia s y p u e b lo s q u e c o n ­q u is ta r e , p a c if ic a r e y p o b la r e , c o n c a r g o d e c e ñ ir su c o n d u c ta á u n a p r o v is ió n d e s p a ­c h a d a a n te r io r m e n te p a r a c a s o s s e m e ja n te s , la c u a l c o n te n ía : q u e lo s c o n q u is t a d o r e s , una v e z e n tie rra , p e r s u a d ie s e n p r im e r a m e n te p o r le n g u a d e in té r p r e t e s á lo s in d io s c ó m o e l r e y d e E s p a ñ a lo s e n v ia b a á e n s e ñ a r le s b u e n a s c o s tu m b r e s , a p a r ta r lo s d e c o m e r c a r n e h u m a n a y d é l o s d e m á s v ic io s q u e le s e ra n h a b itu a le s , y p r o p o r c io n a r le s u n a v id a m e jo r q u e la e r r á t ic a y m is e r a b le q u e l le ­v a b a n : q u e lo s c o n q u is ta d o r e s s ó lo e n d e ­fe n s a d e su s v id a s y b ie n e s h ic ie s e n g u e r r a á lo s in d io s , y e s o en e l m o d o y fo rm a q u e la r e l ig ió n c r is tia n a p e r m ite y m an d a: q u e n o lo s s a q u e n c o n v io le n c ia d e su s t ie r r a s y n a tu r a le z a , y c a s o d e q u e b u e n a m e n te se p r e s ta r e n á e llo y lu e g o q u is ie r e n re s titu ir s e á su c o n d ic ió n p r im itiv a , lo s d e je n , á n o s e r q u e h u b ie s e in c o n v e n ie n te ó p e l ig r o e n e je ­c u ta r lo : q u e n o lo s a p r e m ie n a l tr a b a jo en n in g ú n g é n e r o d e g r a n je r ia s ; y fin a lm e n te , q u e lo s tr a te n b ie n , a l ig u a l d e lo s d e m á s s ú b d ito s y n a tu r a le s d e l re in o , y c o m o p r ó ­jim o s lo s m ire n y fa v o r e z c a n .

D o n P e d ro d e M e n d o z a p u s o en s e g u id a m a n o s á la o b ra , d e s p le g a n d o ta l a r d o r y m u n ific e n c ia e n lo s p r e p a r a t iv o s á la e x ­p e d ic ió n , q u e u n o s r ic o s m e r c a d e r e s , e n tr e q u ie n e s c u n d ie r a e l e n tu s ia s m o q u e á é l le d o m in a b a , q u is ie r o n m e te r e n e l la ta m b ié n su s c a u d a le s , y a lg u n o s s e e m p e ñ a r o n aú n e n m ás q u e su s p o s ib le s . P o r lo m ism o a lle - g ó s e le m u c h e d u m b re d e g e n t e , lo g r a n d o c o m p o n e r m u y p r o n t o e l e jé r c ito m ás g a ­lla rd o y lu c id o q u e v ie r o n la s In d ia s , así p o r la c a lid a d d e la s p e r s o n a s q u e lo in te ­g r a b a n , m u c h a s d e e lla s ilu s tr e s , c o m o p o r su p e r ic ia y v a lo r . E n c a to r c e e m b a r c a c io ­n e s s a ió d e C á d iz , a r r ib a n d o á S a n L u c a s p o r la fu e rz a d e l m a r y s ig u ie n d o v ia je d e ­f in it iv a m e n te e l 1 ° d e s e t ie m b r e d e 15 3 4 . U n te m p o r a l le s l le v ó d is p e r s a s la s e m b a r ­c a c io n e s , á la s is la s d e C a n a r ia . L u e g o to c ó e n la d e S a n t ia g o d e C a b o V e r d e , y p o r ú ltim o , tr a s la r g a y a z a ro s a n a v e g a c ió n h iz o a rr ib a d a e n R ío J a n e iro c o n p a r t e d e la a rm a d a , s e p a r a d a p o r u n a to r m e n ta d e l r e s t o , q u e a l m a n d o d e su h e rm a n o e l a lm i-

Page 7: BE VISTA NACIONAL - anaforas.fic.edu.uyanaforas.fic.edu.uy/jspui/bitstream/123456789/11588/1/RevistaN55.pdf · pendiente del peligroso equilibrio de un artista en el trapecio, aparece

ra n te don D ie g o fue á dar al R ío de la Plata.A llí, h a llán d o se m u y en ferm o, n om b ró

p o r m aestre de ca m p o á Juan de O so rio , v a ­lie n te y e x p erim en ta d o g u e rre ro , que a d e ­m ás h ab ía co n trib u id o á la e x p e d ic ió n con to d o cu an to tenía: tan b ien v isto en tre los so ld ad o s p o r su trato afa b le y lib eral, com o re p u g n a d o don P ed ro p o r su desabrid a c o n ­d ic ión y d u reza en el m ando. E l valim ien to que de resu lta s se g ra n jeara O so rio en tre la g e n te de la e x p e d ic ió n , fue p arte p ara q u e d iese fá c il o ído don P ed ro á c ierta h a ­b lilla en d ereza d a á em p a lid ecer en su án i­m o el c o n c e p to de lea ltad que se m ereciera; y así p reven id o co n tta él, m andó que lo m a­tasen sin d ila ción , recelan d o que, si lle g a se á s o sp e ch a r el m aestre de ca m p o la su erte q u e le esp era b a , lo g ra se acaso fru strarla con su p re stig io y gra n d e ac ierto . E n el a cto Juan de A y o la s , Juan de S a la zar, J o rg e L u ja n y L á za ro M edrano e jecu taron la orden d án d ole de puñaladas. E l resu ltad o de la e x p e d ic ió n , de aq uí t delan te , fue p or dem ás desastroso: p ereg rin a cio n es y trab a jos sin cu ento , m iserias y h am bres h o rrib les, un in­ce sa n te b a ta lla r con los indios, la m uerte, en fin, á cad a in stan te y en sus m ás sin ies­tras form as. L o s so ld ad os, d o lid o s con la p érd id a d e un je fe en ten dido y anim oso en quien cifrab an las esp eran za s de m ejor fo r­tuna, ach acab a n tam años m ales á su g e n e ­ral, que, im ped id o p o r sus d o len cias, m os­trábase in cap az de lleva r á buen térm ino la em presa. A s í su ced ió con e fecto .

E n en ero de 1535 se ju n tó don P edro con e l resto de la arm ada q u e al m ando del A lm ira n te lo esp erab a en la isla de San G a ­briel; y p racticad o s a lgu n os rec o n o cim ien ­tos, p asó á la o rilla op u esta del río, á los 34* 36’ 28” en donde h izo asien to . E l p rim ero que sa ltó en tierra fué S a n ch o del C a m p o, y excla m ó: ;q u é buenos aires son los de este su elo ! D e donde vin o e l llam arse con este ca lifica tivo á la h o y o p u len ta ca p ita l de la C o n fed eració n A rg en tin a . C o n stru y ó se allí un fu erte y ca -a s de b arro co n tech o de ¡ta­ja, que m uy lu e g o habían de ser arrasadas.

E sta b lecid o s, pues, los esp a ñ oles en B u e ­nos A ires , no tardó en darse una furiosa b a ta lla co n los in d om ables pam pas, ó que- rnndies, que aunque ca stig ad o s y d esh ech os se d ieron muña p ara m atar con sus dardos y bo la s de p ied ra á don D ie g o de M endoza y á o tro s esfo rzad o s ca b a llero s de d istingui­da hidalguía. D ie g o L u jan p e re c ió allí, y un río ce rca n o á cu y a o rilla fueron en co n tra­dos sus restos, lleva hasta el p resen te su nom bre. S u ced e en segu id a e l ham bre e s­p an tosa d escrita p or U lr ic o S ch m idel y e l c lé r ig o L u is de M iranda que la p adecieron; y en una salida que h ace J o rg e L u ja n en busca de v íve re s p or las islas d el Parana, p e re ce la m itad de la g e n te en e l trayecto : con el m ism o o b je to va G o n zalo de M endo­za a l B rasil. E n treta n to los p am pas y gua- ;an ís co n fed era d os aco m eten é incendian la ciudad con m ech on es afianzados á lo s te ­chos. A y o la s , que había subido á re c o n o ­ce r el Paraná, reg resa co n n o tic ias algún ta n to h alagü eñ as, á v ista de las cu ales el A d e la n ta d o tu v o p or b ien cam b iar e l nom ­b re de C o rp u s C hristi á un fuerte que aquél co n stru y e ra m ás arriba de S a n ti-S p ir itu s , p o r e l de p u erto de B uena E sp eran za, y de-

ja n d o el g o b ie rn o de B u en os A rte s á E ran- c isco L u is G alán , se hizo h acia él á la vela, con la m itad de la gen te . D esd e a llí d esp a ­cha al m ism o A y o la s p ara que su b ien d o el P a ra g u a y a tra v ie se lu ego p o r tierra hasta com u n icar con el Perú, y dos so ld ad o s m ar­chan v o lu n ta rio s p or e l in terior con la in­sen sata d eterm in a ción de rea liza r d ire c ta ­m en te igu al d esign io . C o sa llana y co rrien te era á la sazón esta clase de d eliran te h e- ¡ ro ísm o. C u and o G a b o to h izo p ie en S a n ti- S p iritu s, cu a tro esp añ oles, uno d e e llos lla­m ado C ésar, e jecu taron idén tica hazaña, p ereg rin a n d o hasta la m ism a co rd illera de los A n d e s , y vu e lto s al p u nto de p artid a, que en co n traro n d eso lad o p o r la tra g e d ia de M a n g oré , en cam in áron se n u evam en te h acia el Perú. C o n ó c e se este h ech o en la h istoria p o r la conquista de los Césares.

E l A d ela n ta d o , antes de d esp a ch a r á A y o - las, m ed iad o el año de 1536, ¡tasó revista . SoD re dos m il quinientos h om bres salieron co n é'. de E sp aña, y só lo h alló q u in ien tos s e ­senta: los dem ás h ibían p erecid o . In esp era­do y b ien a c o g id o refu erzo le o freció la lle ­ga d a de G o n za lo de M endoza, que v o lv ió d el B rasil acom p añ a d o de G a rcía M osquera y su g e n te , qu ien es se le in co rp o ra ro n en San ta C ita lin a , sigu ien d o desp u és en tod as sus v icisitu d es las h u estes de la co n q u ista . C o n te m p ló a lg o m ejorada la p reca ria s itu a ­ción de la em p resa, p articu larm en te con el esta b lec im ien to de Buena E sp eran za, en que era a u x iliad o co n so lic itu d p or los tim bús, que rec ib iero n de p az á le s españ oles; p ero en ferm o, u lcerad o, ab atido, d eterm in ó resti- I tu írse á E sp aña. A l e fecto e x te n d ió una m em oria en B u en o s A ire s á 21 de ab ril de j 153 7, en q u e d eclara b a y en ca recía , en tre otras a isas, lo s igu ien te: que su lu ja r te - j niente Juan de A y o la s lle va se ad elan te l i s o p era cio n es de la co n q u ista segú n las indi­ca cion es que le b a rí 1, sin p erju icio de p ro ­ce d e r co m o m ejor en ten d iere aten d id as las circu n stan cias: que no ap licase ca stig o s sino co n m ucha razón y ju stic ia , y en cosa s que p udiere p asar, fuese to leran te: que si en sus e x p e a ic io n e s en tra se tan adentro, que se e n ­co n trase con A lm a g ro ó Bizarro, p rocu ra se h a cerse su am igo; p ero que si e llo s in ten ta­ban in vad ir e l territo rio que le esta b a a s ig ­nado y p erten ecía , los rep e liese p o r la fu e r­za, y á m ás no p od er les h iciese los debidos requ erim ientos y p rotesta s p ara m an tener ín teg ros sus derechos: que si p or la g o b e r ­nación del R ío de la Plata y la que tenía se­ñ alada h acia la m ar del Sur, quisiera d ar A l ­m agro c ien to cincuenta m il d u ca d os, ó aun­que no fueran sino cien m il, co m o lo hizo con P ed ro d e A lva ra d o p orq u e se v o lv ie s e á á su tierra, ce rrase el trato d in ero en m ano, á no ser que v iere otra co sa que fuese más en su p r e v e d lo , habida co n sid era ció n á no d ejarle m orir de ham bre: que no lo o lv id ase, pues se iba con seis ó siete llagas, cu atro en la cabeza, una en la m ano y o tra en la pierna: que le diese n oticia de lo que hiciere; y si adquiría algu n a p erla ó jo y a , no dejase de en viársela p ron to, ya que, co m o le constaba, no tenía que co m er en E sp añ a , estan d o c i­frada en él, después de D io s , toda su e sp e ­ranza. E l rico m ayo ra zgo , e l esfo rzad o ca b a­llero, e l a ltivo h idalgo, v o lv ía á sus lares p o ­bre, d o lien te y m ísero. E m b a rcó se: en el

Revista Naoional 4o Literatura y Cienoias Sedales 103v ia je , á falta de v íve re s frescos, h izo m atar una perra: co m ió la carn e, y á los p o c o s días, d esp u és de un g ra n d e d esa so sieg o , m urió. L a s ag u as del O céan o , ce rca de las Islas T e rc e ra s , rec ib iero n el cu erp o de e ste d e s­d ichad o. A y o la s , su bien d o el R ío P a ra g u a y co n tre sc ie n to s sesen ta h om bres, en co n tró á lo s indios carias ó gu aran ís en núm ero de cu atro mil, á quienes so m etió depués de tres días de co m b a te y a- ed io del p u eb lo de L a m - b aré, d o n d e se habían h ech o fuertes. L a ren ­d ic ión tu vo lu ga r e l día de la A su n c ió n de N u estra S eñ o ra , en cu ya m em oria y h o m e ­n aje ba u tizóse con ese n om bre una ca sa fu er­te que allí m ism o, á los 25° lO ’ 40" de latitud, m andó con stru ir e l ca u d illo españ ol. P o co d esp u és se h icieron o tro s edificios, y q u ed ó señ alad o este p unto co m o ca p ita l y ce n tro de las o p era cio n es de la con qu ista.

S ig u ió A y o la s río arrib a hasta los 2 1 o 5’ de latitud, p u erto de la C andelaria , y d ejan ­do á D o m in g o M artín ez de Irala co n cin­cu enta h om bres con e n ca rg o de esp erarle cu atro m eses, a tra ve só las p rov in cias de C h i­q u itos y S a n ta C ru z de la S ierra, dando c o n ­tinuadas b a ta lla s co n tra las num erosas tr i­bus de indios que le in tercep ta b an la m ar­cha, h asta lle g a r á la falda de la co rd illera de los A n d es. D e aq uí re g re só tam bién p e­leando, y y a c e rc a de la C andelaria , los al- b a y á s y p a y a g u á s con fed erad os le arm aron una em b o scad a y lo m ataron á él y á tod os sus com p añ eros. C a y e ro u en esta m atanza don C a rlo s de G u evara , don C a rlo s D ubrín, h erm ano de lech e del E m p erad o r C a rlo s V , don Juan l ’on ce de L e ó n , herm ano d el D u ­que de A rc o s , y L u is peres de C ep ed a y A h u m a da , que la tra d ic ió n y la h isto ria dan com o h erm ano de S a n ta T e r e s a de Jesús.

E n treta n to había lleg a d o al R ío d é la P la­ta (octubre de 1538) e l v eed o r A lo n so C a ­brera, m andando cu atro em b arca cio n es y con d u cien do d o scien to s soldados, a lgu n o s oficiales, m uniciones, etc . E ra asim ism o p o r­ta d or de una rea l cédu la fech a en V a lla d o - lid á 12 de setiem b re de 153 7, p o r la cu al se d ispon ía que en caso de que á su lle g a d a fuese m uerto A y o la s , h iciese ju n ta s á los p ob lad o res, y p re v io ju ram en to de m irar a l serv icio del R e y y al b ien de la tierra, e li­g iesen p or m ayo ría de v o to s la p erson a que d ebía d esem p eñ ar el ca rg o de g o b ern a d o r y cap itán g e n e ra l de las nuevas p rovin cias. A s í se hizo en la A su n ción , re c a y e n d o el n om bram ien to en D o m in g o M artínez de Ira- la. C on sid eran d o éste la d ificu ltad de m an­ten er á tan la rg a d ista n cia de la A su n ció n el p uerto de B u en o s A ire s , determ in ó que se d esp oblase; m edida in con ven ien te, p o r­que d ejab a sin p u erto de com u n ica ción y esca la el R ío de la Plata, y que se lle v ó á ejecu ció n no sin p ro te sta form al de los p o ­bladores, a p o yad o s p or lo s m ism os indios com arcan os, que asegu raban h ab er lleg a d o al Brasil con m ucha g e n te cu atro n avios de E spaña. E sto se efectu ó á m ediados d e la ñ o 15 4 1, que es desde cuando data la erecció n del p u erto de la A su n c ió n en ciudad, cu yas arm as fueron: las efig ies de la A su n ción y de San B las, rec ien tem en te p roclam ad o pa­tron o de la con q u ista, una casa fuerte y un co co , árb o l en que abunda el país.

D a n ie l GRANADA.

Page 8: BE VISTA NACIONAL - anaforas.fic.edu.uyanaforas.fic.edu.uy/jspui/bitstream/123456789/11588/1/RevistaN55.pdf · pendiente del peligroso equilibrio de un artista en el trapecio, aparece

1 0 «

MORAL Y ESTÉTICA_____

A J o s é E n r iq u e R o d ó .

N a d ie m á s a u to r iz a d o q u e e l ilu stre m a e s ­tr o d o n Ju an V a le r a , p a r a d is e r ta r s o b r e e l te m a q u e in d ic a e l e p íg r a fe . N a d ie m á s d ig ­n o d e s e r e s tu d ia d o c o n a te n c ió n é in te r é s in te n so s , e n to d o c u a n to d ic e en su e s tilo s u g e s t iv o , d e s a b o r c lá s ic o p r im o r o s o y d e s e n c il le z e n c a n ta d o ra . P e r o n a d ie m á s d ifí­c i l d e s e r b ie n c o m p r e n d id o p o r lo s q u e c o n s titu im o s la tu r b a m u lta d e n e ó fito s d e l a r te , y , s o b r e to d o , p o r lo s le c to r e s d e in g e ­n io p o c o su til.

V a le r a c o r r e p a r e ja s c o n C a m p o a m o r en p u n to á s u tile z a y s e g u n d a in te n c ió n . C a s i to d o s lo s e s c r ito r e s e s p a ñ o le s , lo s d e g e n io , se c a ra c te r iz a n p o r e s a s c o n d ic io n e s : tie n e n a lg o d e C e r v a n te s . P o r e so , p o r e l in g e n io , lo g r a n s e r le íd o s c o n g u s to h a s ta p o r m u ­c h o s to n to s , q u e lle g a n á c r e e r , p o n g o p o r c a so , q u e o q u e v a le C a m p o a m o r lo v a le p o r e l c h is te y la s á t ira q u e d a la n o ta risu e ñ a , c a s i s ie m p r e la n o ta d o m in a n te en su s v e rs o s .

V a le r a d is e r tó s o b r e M oral y Estética en d o s a r tíc u lo s d e c r ít ic a s o b r e e l Himno tí la Carne, d e q u e es a u to r S a lv a d o r R u e d a . S u in g e n io s ís im a a r g u m e n ta c ió n te n d ía á d e ­m o s tr a r q u e < e l g o c e d e l a m o r, p a te n t iz a ­d o p o r e l a r te , e s a n t i-e s té t ic o > D e s d e h a ­c e a lg u n o s a ñ o s e s te es u n o d e lo s a s u n to s d e a r te q u e m á s se d isc u te n , n o s o la m e n te e n lo q u e to c a a l am o r, s in o á to d o lo q u e e l c o n v e n c io n a lis m o s o c ia l p r e te n d e q u e se o c u lte en la v id a r e a l y se e x c lu y a p o r c o m p le to en la v id a im a g in a ria d e la s c r e a ­c io n e s a r tís tic a s

E s ta s id e a s d e fie n d e V a le r a . L a s d e fie n d e en lo s c ita d o s a r tíc u lo s y en la c r ít ic a á E l Extraño, d e R e y le s , y e n e s to s o tr o s e s tu ­d io s cr ític o s: Fines d el Arte fu era d el Arte, E l M aestro de Palm ira y L a M oral en e l Arte. Y ta m b ié n p r e d ic a c o n e l e je m p lo , en su s n o v e la s .

E n e l p r im e ro d e lo s a r tíc u lo s q u e h e c i ­ta d o , q u e l le v a e l t ítu lo d e Disonancias y ar­monías de la M oral y de la Estética, d ic e en a p o y o d e su d o ctr in a : q u e H o r a c io , cu a n d o c a n ta su a m o r á G líc e ra , to d o n o s lo c u e n ­ta , m e n o s lo q u e p a s a e n tre e llo s , á so la s , en la a lc o b a ; q u e Jú p iter, se d u c id o p o r lo s e n c a n to s d e J u n o ,— q u e se le m u e s tra ir r e ­s is tib le , a d o rn a d a c o n e l c in to d e V e n u s ,- e m p ie z a p o r r e q u e b ra r la , y h a s ta a q u í n o s d e ja v e r lo q u e , h a c e , p e r o lu e g o q u e p a sa á m a y o re s , é l y e lla se e n v u e lv e n en d e n ­sa s n u b e s, p a r a q u e n a d ie v e a lo q u e e n tre a m b o s o cu rre ; q u e e l m ism o J ú p ite r , <que e r a ta n d e s a fo ra d o y p r o p e n s o á p o n e r s e e l m u n d o p o r m o n te ra , >- e lig e p a r a u n irse á la n in fa M a y a c un a n tro n e m o ro s o y e s ­q u iv o ; > q u e e l tá la m o d e P e n é lo p e e r a c o ­n o c id o so la m e n te p o r su e s p o s o U lise s ; q u e J a n o se u n e á la n in fa C a m e s e n a « e n la d e ­s ie r ta c u m b r e d e l A p e n in o , y c irc u n d a e l a g r e s te y a m p lio tá la m o d e te n e b ro s a s te m ­p e sta d e s . > L u e g o s ig u e d ic ien d o : < N o es a r tís tic o e l d e s c r ib ir p ro lija m e n te lo s p la c e ­re s d e la a lc o b a , » « L a p in tu ra m in u cio sa , v e h e m e n te y s o b r a d o m a te r ia l d e la p a s ió n ,

Revista Nacional do Literatura y Cienoias Sociales

c o n v ie r te su fis io lo g ía e n p a to lo g ía ; h a c e p e n s a r , n o en r o b u s te z y e n e r g ía , s in o en d e s e q u ilib r io d e fa c u lta d e s , e n e l h o s p it a l ó e n e l m a n ic o m io . >

D afnis y Cloe t ie n e d e lo s r a s g o s a n ti-e s - té t ic o s q u e s e ñ a la V a le r a , y c o m o é s te t r a ­d u jo p r im o r o s a m e n te e l c ita d o lib r o d e L o n g o , y t i l o d e m u e s tra q u e la o b r a m e n ­c io n a d a fu é m u y d e su g u s to , V a le r a d ic e q u e h a y m u ch a d ife r e n c ia e n tr e D afn is y Cloe y e l Himno á la Carne, d e S a lv a d o r R u e d a . * L a d ife re n c ia , d ic e , e s g ra n d ís im a . D afnis y Cloe v iv e n h a c e c a to r c e ó q u in c e s ig lo s ; so n p a g a n o s , e s tá n en c ie r to c a m p o id e a l, p a s to r il y p r im itiv o . N o c h o c a e l q u e s e d e sn u d e n c o m o s e d e s n u d a un c a b a lle r o y u n a d a m a d e a h o ra , q u itá n d o s e la le v ita , p a n ta lo n e s , c o rs é , e tc . E n fin; e s o tr a c o sa . >

M e p a r e c e q u e si, s e g ú n e l c r ite r io d e V a le r a , n o c a b e e s ta b le c e r p a r a le lo e n tre la v id a y o b ra s d e D afn is y Cloe y la v id a y c o s tu m b r e s d e h o y , p o r q u e lo s h é r o e s d e L o n g o v iv ie r o n h a c e c a to r c e s ig lo s , p ie r ­d en to d a su fu e rz a c o m o a r g u m e n to s la s c ita s q u e a p u n ta d e lo q u e h ic ie ro n H o r a c io y G líc e r a , J ú p ite r y Ju n o, U lis e s y P e n é lo p e , e tc ., p o r la m ism a d ife re n c ia d e é p o c a s , y au n p o r o tra s ra z o n e s , h a rto e v id e n te s .

E l in g e n io a d m ir a b le d e V a l e r a t ie n e tá n ta fu e rza , q u e é s te ja m á s d e s e s p e r a d e s a lir c o n b ie n en la d e fe n s a d e u n as te o r ía s y e n la c e n s u ra d e o tra s . M u c h a s v e c e s p a ­r e c e e m p e ñ a r s e e l s e ñ o r V a le r a e n e l tr iu n ­fo d e u n a c a u sa p e rd id a , y n o s ie m p r e y n o to d o s lo s le c to r e s e n tie n d e n e n la s c r ít ic a s d e l in s ig n e a u to r d e Pepita Jim énez to d o lo q u e d ic e , to d o e l a lc a n c e d e su s p a la b ra s . Á v e c e s h a la g a á a lg ú n p o b r e li t e r a to m e ­n o s q u e m e d ia n o ; p e r o e n to n c e s su e s t ilo p a r e c e e n v u e lto en un n im b o d e fin ís im a iro n ía q u e d ic e m u c h o a l le c to r q u e n o e s to n to y s a b e le e r to d o lo q u e s ie m p r e d e ja n e n tr e lín e a s lo s e s c r ito r e s d is c r e to s . P a r e c e q u e su v e r d a d e r o p e n s a m ie n to fu e ra este : ¡ G o c e e l a u to r. . . . y r ía n s e d e é l lo s p o c o s q u e m e e n t ie n d a n !

P o r eso , á p e s a r d e la c o n t r a d ic c ió n q u e á m i v e r e x is te en su s a r g u m e n to s e n c o n ­tr a d e l g u s to u ltra r e a lis ta d e R u e d a ( en e l h im n o e n c u e s t ió n ) , n o h e p o d id o d a r m e p o r s a t is fe c h o y q u e d a rm e c o n v e n c id o , c o ­m o lo e s ta b a , d e q u e e l p o e m a d e R u e d a v a le p r e c is a m e n te p o r lo q u e V a le r a q u ie ­re q u e n o v a lg a .

H e tr a ta d o d e d e s c u b r ir en lo s a r tíc u lo s d e c r it ic a d e V a le r a , r e la c io n a d o s c o n e l a su n to d e q u e h a b lo , e l v e r d a d e r o c o n c e p t o d e l m a e s tr o y lo s fu n d a m e n to s d e ta l c o n ­c e p to . H e b u s c a d o c o n in te r é s la o p in ió n de V a le r a , p o r q u e , h a y q u e c o n fe s a r lo , a n d a ­m o s e m p e c a ta d o s m á s d e lo c o n v e n ie n te lo s e s c r ito r e s m o d e rn o s a m e ric a n o s , en p u n to a id e a s e s té t ic a s , y e s n e c e s a r io n o s e g u ir in c o a d ic io n a lm e n te á c u a lq u ie r r e v o ­lu c io n a r io , p o r m u ch o p r e s t ig io q u e te n g a .

D e s p u é s d e h a b e r le íd o lo s a r t íc u lo s d e V a le r a y d e h a b e r p e sa d o y m e d id o su s ra ­z o n e s , q u ie ro d e c ir s in c e r a m e n te c u á le s so n m is id e a s al re s p e c to .

V a le r a lla m a á B a u d e la ir e y á R o ll in a t , p o e t a s c r a p u lo so s . S in e m b a r g o , e s p a r t id a ­r io d e l a r te p o r e l a r te , c o m o lo e ra B a u d e ­la ire . Y e n tre la s r a z o n e s d e l u n o y d e l o tro y o e n c u e n tro m ás p e s o e n la s d e l ú ltim o:

t L a p o e s ía , so p e n a d e m u e rte ó d e g e n e ­r a c ió n , n o p u e d e a s im ila r s e á la c ie n c ia ó á la m o ra l, > d e c ía B a u d e la ir e . Y n o e s ju s to lla m a r c r a p u lo s o a l p o e t a d e la s id e a lid a ­d e s s u b lim e m e n te e x t r a v a g a n t e s , p o r q u e p r e s e n t a e n to d a su h o r r o r o s a d e s n u d e z c ie r to s h e c h o s q u e la m o r a l c o n d e n a , p u e s ­to q u e es m á s b ie n un a p ó s to l d e la m o r a l a q u e l q u e d e s c u b r e lo s v ic io s y p r e v ie n e c o n tr a e llo s á to d a la s o c ie d a d , y n o e l q u e h ip ó c r ita m e n te c a lla to d o lo q u e s a b e , p u - d ie n d o e v ita r á m u c h o s una tr is te e x p e r i e n ­c ia d e e s a s q u e en la h is to r ia d e n u e s tr a v i ­d a fig u ra n en c a p ítu lo s d e « quísdam dolo­roso philosophia. >

E s t o e n lo to c a n te á c ie r ta s e s c e n a s d e e fe c to d e s a g r a d a b le , ó á d e s c r ip c io n e s d e c o s a s r e p u g n a n te s , q u e e s c o n lo q u e n o tr a n s ig e V a le r a . T o d a v ía n o h e p o d id o v e r u n a a firm a c ió n c a t e g ó r i c a d e V a le r a , en la cu a l d ig a q u e r e c h a z a e n a b s o lu to e l n a tu ­ra lis m o fra n c é s c o m o e s c u e la ; y p o r e s ta ra z ó n h e lle g a d o á c r e e r q u e r e c h a z a la s e x a g e r a c io n e s s o la m e n te . D ic e d o n Juan: < D e m o s p o r s e g u r o q u e n o h a y b ie n , v e n ­tu ra , n i g o c e m a y o r q u e e l d e lo s a m o re s; p e r o ¿ t o d o b ie n , to d o g o c e e s p a r a r e fe r i­d o ó r e p r e s e n ta d o e s té t ic a m e n t e p o r lo su ­b l im e ? E s t a e s la c u e s t ió n . E s t e e s e l e r r o r d e l n a tu ra lism o ; e r r o r q u e n o s e v e m ás c la r o e n la s d e s v e n tu r a s q u e e n la s v e n t u ­ra s. S o b r e la m u e r te d e un a m ig o , s o b r e la ru in a d e la p a tr ia , s o b r e lo s s u p lic io s y tr a ­b a jo s d e un a p ó s to l, e s tá b ie n e s c r ib ir e le ­g ía s . P e r o d e s v e n tu r a s so n , y n o m e n o re s , q u e s e le p u d r a n la s n a r ic e s a l d o c t o r P a n - g lo s s , q u e á o tr o le d é t iñ a y s e le c a ig a e l p e lo , q u e á o tr o le s o b r e v e n g a u n a d e b il i­d a d en la s e n c ía s y e s c u p a lo s d ie n te s y q u e á o tr o le o c u r r a c a d a tr e s d ía s u n a in d ig e s ­tió n m o le s ta y a p e s to s a , y sin e m b a r g o ¿ so n e s to s p e r c a n c e s á p r o p ó s ito p a r a c o m ­p o n e r v e r s o s e le g ia c o s ? N o s o t r o s , e n la v id a re a l, n o s c o m p a d e c e r e m o s en e x tr e m o d e l p a c ie n te , a u n q u e s ó lo s e a p ró jim o , y n o a m ig o ó d eu d o ; p e r o s i h a b la m o s e n v e r s o h e r o ic o d e lo q u e a c o n te c e , h a r e m o s re ír en v e z d e llo r a r . >

E n la s e s c u e la s lite r a r ia s p a s a lo q u e en lo s p a r t id o s p o lít ic o s : la s e x a g e r a c io n e s d e un b a n d o e x c it a n la s e x a g e r a c io n e s d e l o tr o . S i Z o ia n o h u b ie s e p in ta d o ta n á lo v iv o la s a v e n tu r a s d e la b a r o n e s a S a n d o r fl en L A rgen t, p o r e je m p lo , V a le r a d a r ía p o r m u y d e su g u s to e s a n o v e la ; y e l d o c t o r P a n g lo s s s e r ia p a ra é l un p e r s o n a je in t e r e ­s a n te . . . . s i n o se le p u d r ie s e n la s n a r ic e s . S i Z o la n o fu e se ta n e x c lu s iv is ta e n su s d o c ­tr in a s , V a le r a n o t ira r ía ta n to d e la c u e rd a o p u e s ta .

Y o n o s o y in tr a n s ig e n te . S i m e fu e ra p o ­s ib le lo s p o n d ría d e a c u e r d o á V a le r a y á Z o la ; c la r o e s tá q u e h a b ía n d e h a c e r s e m u ­tu a s c o n c e s io n e s . S i q u ie r e V a l e r a q u e se e x c lu y a d e l a r te lo q u e en la v id a r e a l es r e p u g n a n te , e s t o y d e a c u e r d o . P e r o n o lo e s t o y s i m e p id e q u e en u n a n o v e la q u e tie ­n e p o r a su n to e l a m o r, n o se h a g a u n a d e s ­c r ip c ió n m in u c io s a d e la s e s c e n a s m ás in te ­re s a n te s , p o r r a z ó n d e q u e c ie r ta s c o s a s r e la t iv a s a l a m o r so n in m o r a le s . L o q u e c o n s t i tu y e e l v e r d a d e r o fin d e l a m o r, lo q u e r e c ib e la c o n s a g r a c ió n s o le m n e d e la s le y e s d iv in a s y h u m a n a s, lo q u e la s fu e rza s d e la

Page 9: BE VISTA NACIONAL - anaforas.fic.edu.uyanaforas.fic.edu.uy/jspui/bitstream/123456789/11588/1/RevistaN55.pdf · pendiente del peligroso equilibrio de un artista en el trapecio, aparece

105

n atu raleza im ponen; no p u ede ser inm oral, sino en e l cr iterio estrech o de un c o n v e n ­cion alism o hip ócrita .

A s í cuando V a le r a nos h a ce co n o cer, co n arte m aravilloso, las interiorid ad es p sic o ló ­g ic a s de la herm osísim a y esp iritu a l R afaela, y ju stifica con las co n d ic ion es de su tem ­p eram en to los e ró tic o s d eslices de la h ero í­na de su últim a n ovela; cuando nos lleva en com pañ ía de lo s am antes de R afaela, h asta la a lco b a de ésta y allí nos da « con la p u erta en los h o cic o s >, com o el d ice que h ace H oracio cuando va á v isita r á G lícera; echam os de m enos, los lecto res dilettantes, la m ano m aestra de Z o la , p ara que nos h a ­g a v e r lo mas p o ético , lo m ás sublim e de ese tem p eram en to dado á las p ecam in osas exp an sion es. S i con la fría m inuciosidad de un in ven tario se nos ha de referir lo que a llí ocurre, v a le m ás que nos dejen fuera, i P ero V a le ra lo sab ría h a c e r! Sí, y tendría g u sto en h a cerlo si no ex istiera n las p r e o ­cu p acion es de c ese term ino m edio de la in te lig en cia y de la m oralidad, que jam ás p erd on aría á la M a g d a le n a .. . . » S i R a fa e ­la no descien d e al p eca d o p o r un p rurito de lasciv ia ; si se e n tre g a á sus adoradores, no p orq u e se sienta ex c ita d a p o r so lic itu ­des sensuales, sino p o r un e x c e s o de c o n ­d escen d en cia, p rop io de su ca rá cter, que la in clin a á d erram ar la felicidad y la a legría en tod o lo que la rodea; si en fin, no h ay con cu p iscen cia en lo que tiene una e x p li­ca ción m ás p sico ló g ic a que fis io ló g ica , no habría escándalos, no hab ría inm oralidad en exhib ir poéticamente las exp a n sion es prác­ticas de su tem p eram ento.

¿ P odría h ab er acaso a lg o rep u gn an te ó an ti-estético en lo que ocu rriese d en tro de la a lco b a de R afaela, cuando en e lla daba cita á algun o de sus a d o ra d ores? D ad o el ca rá cter de R afaela, no ca b e im aginar esas p erversio n es del gu sto eró tic o que dan lu ­g a r á escen as g ro te sc a s ó rep u gn an tes. A l contrario: só lo co n cib e la im aginación unos d eta fies y un conjunto de la m ás herm osa p oesía, sin que, ni siquiera vaga m en te, se d esp ierte un p ensam ien to lú b rico p r o v o ­cando e x cita c ion es sensuales. Q u isiéram os co n o cer, si p osib le fuera sentir, esas e m o ­cion es in efables de los am antes dichosos, esas im presiones intensas que dan la nota m ás a lta en la etern a p oesía de la natura­leza 1.. . .

N o d esco n o zco las o b jecion es que p u e­den h acerse resp ecto de lo que afirm o, p or lo cual m e apresuro á d eclara r que no p re ­tendo estar y o en lo com p letam en te cierto , sino en lo que m e p arece m ás ló g ic o . Mal haría y o en p roclam ar com o verdad real lo que y o pienso, cuando e l m ism o m aestro V a le ra hab la del asunto con el estilo de los p irrón icos. E s im p o sib le d isip ar toda som ­b ra de duda, cuando so b re un tem a m uy discutido se quiere dar una o p in ió n de bue­n a fe.

V a le ra tiene en a p o y o de sus teorías el buen efecto obtenido con ellas en la p rá c­tica. C om o diría Clarín: sus obras sirven de h ip oteca al crédito de sus doctrin as. P ero y o , adm irador del naturalism o de Zola , di­g o de V a le ra lo que él á su vez ha d icho de V íc to r H ugo: la adm iración que le p rofesa­m os, es á su genio, no á su escuela. C asi

Eevfita Racional do Literatura y Cienolas Sociales

p u ed e d ecirse que toda e scu e la litera ria , p o r e x tra v a g a n te que sea, triunfa en m anos del gen io .

Titano COSIO.

ÍN T IM A

¿Te acuerdas, mi prenda, del rato dichoso Que juntos pasamos un día los dos,En medio de un bosque callado y frondoso, Muy lejos del mundo, muy lejos de Dios?.. .

Pues bien; esa tarde, el sol que moría,Con rojos colores las nubes tiñó;Y en tanto tu rostro, (pie entonces ardía,- De rojos matices también so cubrió.

Después, lo quisiste, y al bosque tornamos; El bosque frondoso cubrió nuestro amor,Y el Sol, que en su ocaso de nuevo miramos, Teñía las nubes do rojo color.

El cuadro era el mismo que fué ol primer día: Murmullos de amores y luz do arrebol.Tan sólo en tu rostro, que entonces ardía,¡No hallé más colores de puesta do sol!...

E m ilio BARBAROUX.

RUI NAS( D E S D E S A N C A R L O S )

D esp u és de un casi a g ra d a b le v ia je en d i­lig en cia , llegu é á esta an tigu a red u cción , adonde m e han traído asuntos que na la in­teresan al lecto r, p ero en donde he rec o g id o im presion es que bien p udieran in teresarle.

E l cam ino, d esd e Posadas, cruza cam pos form ad os p o r altas y herm osas cu ch illas cu ­b ie rta s de abundante p asto , y , d e vez en cuando, p or m anchas ob scu ras de m onte, ta ­les cu ales se alcanzan á v e r desde Posadas en la co sta p ara gu aya . E sa s m anchas r e s a l­tan intensa y n etam ente en el ve rd e p a s t i­zal, un tan to am arillento, co m o b o rro n es en la p lan a de un esco la r p o c o p ro lijo . S ea c o ­mo sea, ellas recrean y h alagan al v iajero , á quien, si faltaran, p ron to cansarían las p e ­ladas cuchillas. Á v eces acom p añ an á éstas, p o r la p arte m ás baja de su caída, la rg a s fa­ja s de m onte, bajo cu y a s hum ildes fro n d o si­dades co rre tal cual a rro y o de n om b re tan ob scu ro ó d ign o de p eren n e obscu ridad c o ­m o el T eb iroin sá .

Y en tre tanto los pasajeros ch arlan en la d iligen cia , y el m ayo ra l g rita d esd e e l p e s­cante, asp irando las haches: H aaa! H eee! m ientras e l cu arteador c cu erp ea » in cesan ­tem ente de d erech a á izquierda ó v ice-versa , adaptándose á las e x ig e n cia s del cam ino que ora sube, ora baja, ora d ob la á un lado, ora á otro, p ero jam ás sigue la rg o trech o en lí­nea recta ni p or el m ism o nivel.

A l ap roxim arn os á San C a rlo s, nos fué m ostrado el m onte que, irgu ién do se p in to­rescam en te sobre e levada lom a, rodea las venerab les ruinas que son, co m o las dem ás del T errito rio , capital p unto de m ira de los v ia jero s paseantes, m otivo de algu n as m e­

d id as g u b ern a tiv a s y o b je to d el m e n o sp re ­c io de la gen era lid a d de lo s v e c in o s c o lin ­d an tes q u e la s huellan m il v e c e s sin d ir ig ir ­le s una so la, una p re g u n ta siq u iera s o b f c e l se c r e to de su pasado.

L a r g o ra to co n tem p la m o s d esd e la v e n ­tan illa, e l h erm oso p aisa je in terior que n os era dad o ver. N o in curriré en la ban al r e p e ­tición d e que los jesuítas en tendían d e lu g a ­res y u b icac ió n de p u eb lo s, p ero no p u edo o m itir que la altura de S a n C a rlo s , so b re la cu al co n toda g a lla rd ía se alza e l m on te, d om in an d o, esta es la p ala b ra , a ltu ra y m on ­te, vasta e x te n sió n de lo s ca m p o s v ecin o s, o fre ce una de esas p e rsp e c tiv a s q u e p a rti­cu larm en te m ueven el a lm a á la ad m ira ción y al am or de la m ad re naturaleza.

R a to h acía que la d ilig e n cia ro d a b a so b re p ied ras, co m o si qu isiera a v isa rn os que nos a v ecin d áb a m o s á ruinas.

¡Ruinas! ;Y o iba á v e r ruinas al fin! Y no h ay que e x tra ñ a r la e x c la m a c ió n R e c u e rd o que cu ando p eq u eñ o, al lado de m is p u eriles < id ea les >, ten ía uno q u e esta ría m al llam ar p u eril, p ero que ta m p o co sé có m o calificar: era el de < v e r un m uerto. > U n día, p o r fin, co n seg u í rea lizarlo . N o lo h e o lv id ad o ni lo o lv id a ré nunca. E l m uerto era una anciana, y esta b a en el fondo del ataúd, co m o acu ­rrucada, co m o en co g id a p o r e l frío de la m uerte. L a s en ferm ed ad es y los años, tra b a ­ja n d o de consuno, h ab ían la co n v ertid o , en m enos que un ca d áver, en u n .desp ojo c u y a v ista daba asco y p ena. D e sp u é s de s a t is fa ­ce r mi curiosidad, sen tím e arrep en tid o de ella, no h u b iera qu erid o v e r lo que h ab ía v isto y , p o r algú n tiem p o, m e p e rs ig u ió en m is sueños, en m is ju e g o s , en los m om en tos m en os p rop icios, la v isión d e l ataúd co n su h o rrib le contenido.

T ra ig o á cu en to este de mi y a lejan a In­fancia, p orq u e eq u ip aro la im presión q u e m e han cau sad o las ruinas co n la q u e m e causara la anciana difunta. A n te s y d esp u és de en trar en el b o sq u e som brío que s irv e á aq u élla s de m ortaja , tu ve la im p resión de que iba á v e r y h ab ía v isto c un m uerto . »

Á los dos días de mi lle g a d a á S an C a rlo s, y no an tes p or im pedírm elo una im p o rtu n a y ob stin ad a lluvia que em p ezó á ca e r a p e . ñas m e bajé de la d ilig e n cia , — subí, al a c o m ­p asad o trote de m i ca b a llo y en co m p a ñ ía de un p eón , la lom a en cu y a cim a y a c e , b ien p u ede decirse, e l an tigu o p u eb lo te o ­crático . E l cam p o esta b a m ojado, y en los v ie jo s cam inos hondos se veían a lu vion es de tierra co lora d a que e l ag u a de los días an teriores h ab ía arrastrad o, al co rre r p o r las fald as ab ajo de la colina.

U n a vez en el m onte, de cu yas co p as, que el v ien to m ovía, nos caían frías g o ta s d is ­p ersas, segu im os un sen d ero em p a p a d o en agua é interrum pido á v e ce s p o r b a ch es lle ­nos de un líquido rosado.

Mi p eón , un indio, p ero no <pur sang,» m e gu iaba y h ab lab a a l m ism o tiem p o de cosas que en van o m i m em oria trata ría de record a r ahora. P o r m i p arte, m irab a á to ­dos lados, m edía co n la v ista la m agnitud de los altos árboles, exam in ab a su p orte y e l co lo r de sus h o jas, trata b a en fin d ar­m e clara cu enta de ¡o que m e rodeaba. M as, difícil es o b se rv a r con cien zu d am en te cu an ­do se d etien e e l alm a im p resion able y se es-

Page 10: BE VISTA NACIONAL - anaforas.fic.edu.uyanaforas.fic.edu.uy/jspui/bitstream/123456789/11588/1/RevistaN55.pdf · pendiente del peligroso equilibrio de un artista en el trapecio, aparece

106 Revista Nacional de Literatura y Ciencias Sociales

tá b a jo la in flu e n c ia d e u n a im p r e s ió n p r o ­fu n d a . T a l, n i m á s n i m e n o s , e r a lo q u e m e s u c e d ía m ie n tra s , a l le n to p a s o d e m i c a b a ­llo , ib a tr a s e l d e m i g u ía p o r lo s v e r ic u e to s d e l a n g o s to c a m in o , a g a c h a n d o m u ch a s v e ­c e s la c a b e z a p a r a n o p e g a r c o n e lla e n la s ra m a s ó en la s e s p in a s d e lo s n a ra n jo s, a p r e ­ta n d o o tr a s la s p ie r n a s c o n t r a lo s ija re s p a ­ra n o q u e d a r e n g a n c h a d o en la s m a le z a s q u e , á un la d o y o tro , s e y e r g u e n c o m o te n ­d ie n d o su s la z o s al d e s p r e v e n id o p a sa n te .

¡Q u é s ile n c io e n e l e x tr a ñ o m o n te s o lita ­rio ! E v id e n te m e n te e r a a q u e l un lu g a r d e fú n e b re s m e m o ria s . P e r o au n n o m e h a b ía s id o d a d o c o n t e m p la r la s ru in a s y a c e n te s , la c o s a m u e rta p a r a a lb e r g a r c u y o su e ñ o s e e n c o r v a b a n y e n la z a b a n e n s e r ie in te r m i­n a b le u n a s á o tr a s , la s a r c a d a s d e a q u e l v e r ­d e s a r c ó fa g o .

U n s e n tim ie n to d e r e s p e t o m e h a b ía in ­v a d id o , d e s d e m i e n tr a d a al b o s q u e . ¿ Á q u ié n ib a d ir ig id o ? ¿q uién m e lo in sp ira b a ? E l p a s a ­d o , s in d u d a a lg u n a , e l p a s a d o , q u e e s s ie m ­p r e u n m u e r to ilu s tre . P e r o ¿ c ó m o lo d i­ré ? É l se p r e s e n ta á m i im a g in a c ió n c o m o < un m u e rto c o n v id a . > Y p o r e s o e s t o y d e la n te d e é l c o m o d e la n te d e u n g r a n d e y y e x tr a ñ o se r , s o b r e c o g id o , m u d o y ca s i te m b lo r o s o . N o , y a n o m e p a r e c e q u e en e l b o s q u e to d o e s té m u e rto . P o r e l c o n tr a r io , p a r é c e m e q u e h a y a lg u ie n , p o r m ás in ta n g i­b le q u e é l se a . P a r é c e m e q u e e n la s o m b r a q u e c a e d e la s a lta s c o p a s a b o v e d a d a s , a l­g o s e m u e v e , a lg o m e m ira y s ig u e m is p a ­s o s . . ,

P o r fin, a l l le g a r á c ie r to p a r a je , m e fué m o s tr a d a p o r e l g u ía u n a ta p ia ,u n m u r o ,c u a l­q u ie r a d e e s to s n o m b r e s le c o n v ie n e , d e a l­g u n o s m e tr o s d e la r g o y en c u y a p a r t e m e ­d ia u n a a b e rtu ra , q u e d e b ió s e r r e c ta n g u la r , h a c ía p e n s a r en u n a p u e rta . E n t r e e l u m b -a l a lg o e le v a d o y e l s u e lo h a b ía u n a e s p e c ie d e ra m p a q u e q u iz á s e n c u b r ie r a u n o s p e l­d a ñ o s .

N o s e rá e x tr a ñ o q u e e l q u e m e le a , h a lle en lo q u e v o y á d e c ir u n a m u e s tra d e l c o n ­v e n c io n a lis m o c o n q u e m u c h o s l it e r a to s e s c r ib e n , y s e g ú n e l c u a l e s fo r z o s o c o n m o ­v e r s e y e le v a r e l e s p ír itu s ie m p r e q u e se e s ­té d e la n te d e u n a r e liq u ia d e l p a s a d o , s i­q u ie ra s e a la m ás v il. P e r o , p a s e y o p o r un s u g e s t io n a d o d e V o ln e y , c r é a s e d e m í lo q u e se c r e a , t n D io s y en m i á n im a ju r o , q u e a n ­t e a q u e l m o n tó n d e p ie d r a s m a l a p lo m a d a s p e r o d e a u t é n t ic a fil ia c ió n je s u ít ic a , s e n tí a s í c o m o un v u e lc o d e n tr o d e l p e c h o .

Q u e d é m e c o n te m p la n d o e l tr o z o d e p a ­r e d q u e , o b s t in a d a e n n o s e g u ir la s u e r te d e la s d e m á s, se e r g u ía e n tr e e l d e r r u m b e g e n e ­r a l , ta l c o m o a n ta ñ o , c u a n d o d e la n te d e e lla s e e x te n d ía la c a lle , p o lv o r o s a sí, m a s lim ­p ia d e la s m a le z a s y á r b o le s q u e h o y la c o l­m a n , m ie n tra s c r e p it a b a n la s r is a s ó s u b ía n a l c ie lo lo s la m e n to s ¡q u ién sab e! p e r o , en fin , la b u l lic io s a v id a h u m a n a la ro d e a b a . C o m p la c ía le e n fig u r a r m e la c a s a d e q u e a q u e l r e s to in fo rm e h a r ía p a r t e y la in m e ­d ia ta y la d e m á s a l lá y la d e e n fre n te ; m e r e p r e s e n té d e s p u é s la c a lle to d a q u e c o n su c o n ju n to fo rm a ría n la s c a sa s , y la s c a lle s q u e c o n e s a p r im e r a c a lle c r u z a r ía n , y a c a b é p o r fig u r a r m e e l p u e b lo e n te r o y p o r v e r á lo s in d io s é in d ia s d e te z ro jiz a p a s a r d e un la d o á o tro , á lo s m u c h a c h o s d ir ig ir s e a l Colegio y

á ta l cu a l P a d re ca m in a r , c o n p a s o b e a tífic o , im p r im ie n d o , a l p a s a r , su n e g r a s ilu e ta en e l r o jo a s p e r ó n d e la s ta p ia s . . .

A s í , s u m e r g id o en e l t ie m p o v ie jo s ie m ­p r e m is te r io s o , al q u e s ie m p r e v o lv e m o s c o n c u r io s id a d a n s io s a la m ira d a y d e l q u e la re t ir a m o s tr is te s p o r q u e y a no sea y p o r ­q u e no será y a m ás y n o p o d r e m o s , p o r e n ­d e, p e n e t r a r to d o s su s s e c r e to s ni v iv ir to d a su v id a ( t á n t a e s n u e s tra a n s ia d e v iv ir !) , e n tr e o í la v o z d e m i p e ó n q u e m e lla m a b a , c a n s a d o d e n o v e r m e l le g a r a d o n d e e l se h a b ía d e te n id o á e s p e r a rm e .

E c h é á a n d a r n u e v a m e n te p o r e l ro s a d o s e n d e ro , n o b ie n d e s p ie r to aú n d e m i su e ñ o r e t r o s p e c t iv o , y g u ia d o p o r la s in d ic a c io n e s d e m i a c o m p a ñ a n te , e m p e c é á v is lu m b r a r d e un la d o , y á tr a v é s d e la c o r t in a d e á r b o le s y lia n a s, un m u ro a lto y b ie n c o n s e r v a d o , un la rg u ís im o m u ro q u e n u n c a s e a c a b a b a .

— E s e l Corralón, m u rm u ró e l in d io . Y n o s a b ía m ás. S in e m b a r g o , la m ita d , p o r lo m e n o s , d e la s a n g r e q u e en su s v e n a s p a lp i­ta b a , le v e n ía d e q u ié n s a b e q u é p a r e ja in ­d ia q u e , a llí m ism o ta l v e z , á la o tra p a r t e d e la v e c in a ta p ia , h a lla r a la d ic h a en lo s t r a s ­p o r t e s d e su s a m o re s e le m e n ta le s .

E l s o l ib a c a y e n d o ; su s r a y o s n o s l l e g a ­b a n o b lic u o s p o r e n tr e la s d e s ig u a le s v e n t a ­n a s a b ie r ta s p o r e l a c a s o e n tr e e l ra m a je . P o c o h a b ía a n d a d o , p o c o h a b ía v is to , y la n o s t a lg ia d e l p a s a d o , m e jo r q u iz á s , la d u lc e m e la n c o lía q u e é l n o s in fu n d e , m e lla m a b a c o m o u n a s ir e n a d e s d e lo s a p a c ib le s c la r o s r o d e a d o s d e e n h ie s to s á r b o le s y a l fo m b r a ­d o s d e a m a n b a y s . U n a s u a v e lu z v e r d o s a , c o m o filtr a d a p o r g ó t ic a s v e n ta n a s d e c o l o ­re s y c a y e n d o e n e l p e n u m b r o s o r e t ir o d e s a g r a d a n a v e , ilu m in a b a , s in a la rd e , to d o s lo s d e ta lle s d e l b o s q u e s e c u la r . A u n p o d ía y o v e r , se n tir , so ñ a r: to d o e s ta b a p r e p a r a d o ; to d o m e c o n v id a b a á e llo . . . . P e r o a le jé m e d ic ié n d o m e : A lg ú n d ía v o lv e r é y v o l v e r é á s e n tir e l d e lic io s o v é r t ig o d e l p a s a d o ju n to á la s p ie d r a s c u b ie r ta s d e m u s g o y d e r e c u e r ­d o s, b a jo la a l ta b ó v e d a v e r d e q u e g u a r d a e l m is te r io d e la s c o s a s q u e fu e r o n , y s o b r e la c u a l e l s o l, s ie m p r e n u e v o , c o m o e s c u d o r e c ié n b ru ñ id o , b r i lla c o m o b r i lla r a c ie n a ñ o s h a s o b r e la c r e p ú b lic a c r is tia n a . >

JuSÉ C1IIR A PO ZU .

E v o c a n d o e l p a s a d oR.ECUEKDOS PE ITALIA

Á P R O P Ó S I T O D E U N F R A C A S O

A llá p o r e l m e s d e s e t ie m b r e d e 18 8 S, to m a b a e l q u e e s ta s lín e a s e s c r ib e , en la r a ­d a d e B u e n o s A ir e s , e l t r a s a t lá n t ic o Victo­ria , á c u y o b o r d o se m a r c h a b a la c o m p a ñ ía l ír ic a q u e a c a b a b a d e te r m in a r , b r i l la n t e ­m e n te , su fa m o s a te m p o r a d a e n e l te a tr o C o ló n .

E n M o n te v id e o , d o n d e e l v a p o r s e d e tu v o a lg u n a s h o ra s , s u b ie ro n , e n tr e o tr o s p a s a je ­ro s , c in c o fr a ile s , q u e ib a n á h a c e r u n a p e ­r e g r in a c ió n á J e ru s a le m , y un jo v e n c it o t r i ­g u e ñ o , m o d e s ta m e n te v e s t id o , d e s im p á tic o

p o r t e y d e o jo s n e g r o s , v iv o s y lu m in o s o s , q u e ib a á h a c e r ta m b ié n su p e r e g r in a c ió n á la J e ru s a le m d e l A r t e .

E l c o m a n d a n te d e l Victoria n o s h iz o e s ­tr e c h a r la m a n o . A lo s d ie z m in u to s c o n ­v e r s á b a m o s c o m o a n t ig u o s c o n o c id o s ; d e s ­p u é s, fu im o s ín tim o s . M e m a n ife s tó su s s u e ­ñ o s é id e a le s . A m a b a e l A r t e y la G lo r ia . S e n t ía v e r d a d e r o d e lir io p o r M a sin i. Q u e r ía s e r c a n ta n te ; le a le n ta b a u n a fe c ie g a ; p a r e ­c ía te n e r e l d ó n d e lo s fu e r te s y lo s a u d a ­ce s . D e a h í q u e a b a n d o n a s e h o g a r , p a tr ia , a m ig o s y s e la n z a s e s o lo , s in r e c u r s o s , á la c o n q u is t a d e Ita lia . Y o m ir a b a c o n c o n m i­s e r a c ió n , c a s i c o n h o rro r , e l p o r v e n ir d e e se m u c h a c h o to d a v ía im b e r b e , q u e l le v a b a en e l c e r e b r o un c a p ita l d e ilu s io n e s , y q u e v e ía la s e n d a q u e ib a á r e c o r r e r — v e r d a d e ­ra v ia -c r u c is , — a lfo m b r a d a d e la u r e le s y d e flo r e s . . . .

E l v ia je t r a n s c u r r ió a g r a d a b le m e n te , y n o p o d ía tr a n s c u r r ir d e o tr a m a n e ra , e n tre un g r u p o d e m u je re s jó v e n e s y b e lla s : p ri­ma donnas, c o r is ta s , b a ila r in a s , q u e d a b a n c o n s ta n te p á b u lo á b ro m a s y c o m e n ta r io s p ic a n te s , c o n su s e s c e n a s d e a m o r y d e c e ­lo s , q u e p o n ía n d e p ú r p u r a la s m e jilla s de lo s S a n to s P a d re s .

F u é un v ia je id ea l! C a n to , m ú sic a , b a ile , y o tr a s c o s a s , ta n b e lla s y s e d u c t o r a s c o m o e l c a n to , la m ú s ic a y e l b a i le ! . . .

L o s d ía s s e s u c e d ía n p lá c id o s . N i u n a rá ­fa g a d e v ie n to , ni u n a d e e s a s p e q u e ñ a s b o ­r r a s c a s , ta n fr e c u e n te s b a jo lo s t r ó p ic o s . E l v a p o r s e d e s liz a b a s e r e n o , c o m o un e n o r m e c e t á c e o , e n la m a r e n c a lm a . L a s n o c h e s p r e n d ía n to d a s su s c o n s te la c io n e s . D e s d e la c u b ie r ta o ía m o s la v o z d e la D a m e r in i, q u ea r r u lla b a e n e l p ia n o e l V orrei m orir__d eT o s t i . U n a m e la n c o lía d e lic io s a y p ro fu n d a p a r e c ía d e s c e n d e r d e l f irm a m e n to e s tr e l la d o , y n o s in v a d ía la tr is te z a . T o c a b a T a m a g n o su c la r ín g u e r r e r o , y v o lv ía la a le g r ía , q u e e s ta lla b a e n e l c o r a z ó n y b r o t a b a d e lo s la ­b io s h e c h a h im n o , e n fo rm a d e d e c la r a c ió n ó d e s ú p lic a . L a b e l la E g l e e n to n a b a á m e ­d ia v o z su s p ic a r e s c a s c a n c io n e s n a p o li t a ­n a s, y e n to r n a b a su s g r a n d e s o jo s n e g r o s y lá n g u id o s c o n u n a v o lu p t u o s id a d s e n s u a l, i r r e s is t ib le .

D e s p u é s im p r o v is á b a s e e l b a ile s o b r e c u ­b ie r ta , y s e d a n z a b a a le g r e m e n te , a l p á lid o fu lg o r d e la s e s tr e l la s , h a s ta a lta s h o r a s d e la n o c h e , e n tr e la in m e n s id a d d e l m a r y la in m e n s id a d d e l c ie lo .

Y así, e n u n a f ie s ta c o n t in u a , lle g a m o s á la s Is la s C a n a r ia s . E n P a lm a s , p r im e r p u e r ­to q u e to c a m o s d e s d e n u e s tr a p a r t id a d e B u e n o s A ir e s , d e s c e n d ie r o n lo s f r a n c is c a ­n o s, in d ig n a d o s c o n tr a to d o s lo s t r ip u la n te s y p a s a je r o s , d e s d e e l c o m a n d a n te a b a jo , p u e s n o h a b ía n p o d id o d e c ir u n a s o la m isa , ni c o n v e r t ir á la r e l ig ió n á u n a s o la d e a q u e ­lla s a le g r e s y t r a v ie s a s m u c h a c h a s , c a p a c e s d e h a c e r p e c a r a l m ism o S a n A n t o n io , e l d e la p u r e z a tr a d ic io n a l. A l l í q u e d a r o n , p u e s, lo s p o b r e s c u r a s en e s p e r a d e un vapor m e ­n o s lír ic o y m á s r e l ig io s o . N o s o t r o s s e g u i­m o s v ia je . A lo s c u a tr o d ía s d iv is a m o s e l p e ñ ó n d e G ib r a lt a r , a l q u in to B a r c e lo n a . U n d ía m ás, y d e s e m b a r c á b a m o s e n la Soberbia Genova.

Page 11: BE VISTA NACIONAL - anaforas.fic.edu.uyanaforas.fic.edu.uy/jspui/bitstream/123456789/11588/1/RevistaN55.pdf · pendiente del peligroso equilibrio de un artista en el trapecio, aparece

D e cla ro ingenuam ente que sentí d eseos de no d ejar aq u ella casa flo tan te, en la cual hablo p asado h oras agrad abilísim as, o lv id a ­do del m undo en tero, y que a l v o lv e r á re­co rd a rla s h o y , «con un p la c e r que lle g a á ser do loroso» , m e dan ga n a s de ap ron tar m is baúles y m archarm e de nu evo á aquel país, donde ap ren dí á am ar y donde tu v e las p rim eras y m ás hondas sen sacion es de A rte . P erm anecim os una n och e en G énova; y a l día sigu ien te, después de atra vesar la c a m ­piña lom barda y los tún eles obscuros, lle g a ­m os á M ilán. A llí acab ab a de lle g a r ta m ­bién A rtu ro B eru tti, con sus estudios term i­n ados y sus p rim eros p rem ios de L e ip z ig , hab lan d o una je r g a endem oniada, m ezcla de alem án y de español, m etido en un U ns- te r co lo r ratón, y con dos len tes azules, que le daban el a sp ecto de Mr. COrganiste en M lle. Nitouche. P rep arab a su ó p era Vendet­ta, y recu erd o que p ara p rob ar su rap id ez de co n cep ción m ental, le di dos co m p o sic io ­nes de la Postuma de S tecch etti, p ara que las p usiera en m úsica. H oras después m e la s en tre g ab a p erfectam en te concluidas. A m b a s corren im presas p or D em arch i, una ga lan tem en te d ed icad a á mí, y am bas ca n ta­das p or la M antelli, en el m em orable c o n ­c ierto efectu ad o en la Ó p e ra en 1890.

O x ilia , el ten or orien ta l, o bten ía su co n ­sa g ración en la Scala, can tan d o el Asrael de F ra n ch etti. Por aq u ellos días vin ieron á en ­g ro sa r nuestro g ru p o de am erican os resi­dentes en M ilán, dos uruguayos: José Gui- llot, - barítono casad o con la Iw ner, — y L u is M andeville, que andaba siem pre á p esca de aven turas galantes, con sus vele id ad es de bajo , y e l cu al acab a de unirse en m atrim o­nio con una m illonaria n eo york in a en París, dando un ré so b reag u d o que no estaba en su registro .

■ Todas las m añanas nos d irigíam os en g r u ­p o al estudio del m aestro Pozzo, un v ie jecito querido, ex-ten or, que hab la in terpretado en Ita lia el Rienzi de W a g n er, con el b e n e ­p lá c ito del ilu stre revolu cion ario de B a y ­reuth m anifestado en retratos y cartas au- to grá ficas que é l osten taba con legítim o o r­gu llo .

L a p acien cia de aquel hom bre era tan gran d e com o su bondad. T u v e ocasión de p on erla á p ru eb a m as de una vez, p ues y o tom é tam bién algunas leccion es, que só lo m e han servido para fastidiar á los im por­tunos. É l nos regim en taba y nos hacía v o ­calizar p o r turnos. Q u ien más, quien m e ­nos, atendía las o b servacion es del p rofeso r y las acep tab a, tratando de enm endarse en las in correccion es y en los yerro s. G u illo t era el m ás im paciente y el más cascarrabias; él no adm itía ad verten cia s ni consejos; se d espachaba á su gusto; tratab a de hacer c a ­dencias y gru p etos; quería a p ren d er p artitu­ras antes que los e jercicios de vocalización ; y tan p ronto se salía de su reg istro central, p ara encaram arse al de sopran o, co m o des­cendía al de bajo profundo.

E ra un d erroch e de sonidos que aturdían la casa.

Y p ara rep osar unos instantes de los esfu er­zos que hacía, eq u ivo ca b a siem pre de S alón , y se iba al de las discípulas á darles brom as.

É stas, ap en as le veían, huían dando g rito s á la s h ab ita cion es interiores, co m o una b an ­dada d e p ája ros sorpren dida p o r el cazador.Y el b on d ad oso v ie jecito siem p re con buenas m aneras, s iem p re am able y so n rien te , re c la ­m ando ord en y com postura; p e ro , qué d ia­b lo , era p red ica r en desierto!

*• *

U11 buen día, la p acien cia b en ed ictin a de aquel san to varó n se ag o tó . H alló á G u illo t tarareando A media voz un dúo de amor co n la dam a ligera, y an tes qne p e rd e r á sus num erosas p upilas, p ensó cu erd am en te a c a ­b ar co n n osotros, y nos mandó con la música d otra parte! L a b rom a h ab ía sido d em a ­siado pesada. E l m aestro e s ta b a ju sta m en te indignado. Q u ien sufrió de v eras los e fecto s de esa reso lu ción cesá rea fué e l p o b re A m é- rico; e l ten ía , m ás que nadie, v e rd a d e ra ne­cesidad de estudiar, y no sab ía á quien rec u ­rrir p ara tom ar leccion es.

S e h alla b a en aq u el e n to n ces en M ilán, el in o lv id a b le T a rtin i, que tra jo aq uí p o r los años 18 75 y 80 algu n as co m p a ñ ías líricas, form adas de to d o s los artistas in serv ib les y co n trah ech o s q u e h allab a á su p a so , de los cu ales decía m odestam en te que can taban com o dii, y llam ab a cani á G a y a rre y S ta - gno! T a rtin i desca n sa b a de sus fatiga s de em p resario enseñando á cantar. T e n ía tres ó cu atro d iscípulos, en tre e llo s A m érico ; ésto s habían entrado á estudiar co n algu n a voz, y al p o co andar, se qu ed aron afó n icos. Á uno tuvo el co ra je de h a c e rle debutar; es decir, sacrificar en el D al Verme, con la Forza del Destino; y e l destino fué fatal p ara e l infeliz, p u es p erd ió la razón y a c a b ó sus días en un m anicom io, p e rsegu id o p o r aq u e­lla tem p estad de silb id os y d e gritos! Y T a rtin i, con ese fiasco p iram idal de su dis­cípulo, le jo s de co n ven ir en e l fa llo del p ú ­b lico , y co n ven cerse de que había h ech o una v íctim a e x p ia to ria d e su inep titud, se co n ­cre ta b a á d ecir que erano tutti assini.

C uando A m é rico v ió e l suceso de su c o ­leg a , no q u iso se g u ir tom ando lec c io n e s que de b ald e co m o eran, e fectivam en te, le re ­sultaban carísim as. V o lv ió á su an tigu o m aestro, quien lo recom en d ó al Dr. S ch u ltz , esp ecia lista de las en ferm edades de la g a r­ga n ta , p ara que le rem ed iase los d e sp e rfe c ­to s y los estra g o s causados en la s cu erd as vo ca les p o r una falsa em isión. T r e s m eses e stu vo en cura, al ca b o de los cu ales d e s­a p areció la afonía, y v o lv ió á ad q u irir su v o z e l tim b re p rim itivo ,

I *

P ara rep on erse com p leta m en te, el d o cto r le a co n se jó un viaje á Suiza. R ec o rrim o s ju n tos las m ontañas y los v a lles de aq u ella reg ió n p riv ileg ia d a de la E u rop a. E stu v i­m os en G inebra, L ucern a, A m ste c , Ilo sp en t- hal y W assen; n avega m o s e l la g o de los C uatro C antones; subim os al San G o ta r- do y la F urka, y regresa m o s á Italia, p a ­sando p o rB o lo g tia , T u rln y G én ora. U n te­legram a de mi padre m e llam ab a á B u en os A ires . A m érico m e acom p añó h asta el m is­m o v a p o r que un año antes nos había co n ­ducido á aq uel puerto. N o s d ejam os con sen tim ien to. S e hallaba con é l o tro am igo que no [he de o lv id ar nunca: A le jan d ro

Eeviita Nacional de Literatura y Ciencias Sociales 107

L a m p o n i: en sus o jos b rilla b a u n a lá grim a.E l v a p o r la rg ó las am arras. E r a una ta r­

de b ru m osa y fría de n o viem b re, y p en sa n - san do en la su erte de m is dos b u en o s y fie­les ca m ara d as, p ensando q u e qu izá no v o l­vería y a á v erlo s , m e en cerré en m i ca m a ­ro te y l l o r é . . .

Q u e d a b a a llí e l jo v e n co m p a trio ta so lo , sin recu rsos; iba á em p e z a r p ara él la é p o c a m ás azaro sa de su vida: la p o b re za en un p aís e x tra ñ o y donde no es fácil g a n a rse el su sten to . Iba á d ecid irse su p orven ir. E l d i­lem a era terrib le: ó se levan tab a , ó se hun­día! Y la n ecesid a d , «que tien e ca ra d e h e­reje» , es la en gen d rad o ra , á v eces , d e los gra n d es artistas.

C o n o c ió de c e rc a la in gra titu d hum ana y la m iseria n egra; p ro b ó e l p an am a rg o y durm ió m uchas n o ch es al raso; las esca lin a ­ta s del Duomo, co n o cid a s de O x ilia , no m e d ejarán m entir. H izo co m o ta n to s o tros; v a ­g ó p or lo s cafés y p o r la am p lia g a le r ía Víctor Manuel, dond e de día y de n o ch e se ven p asar, cu al so m b ra se n fuga, los a rtista s fra ca sa d o s, co rrrid os p o r e l h am bre. Y de esa v ida de n ecesid a d es y de p riva cio n es sin cu ento , vin o á sa ca rle A rtu ro B erru tti, quien lo hizo estren a r en V e r c e lii , co n su ó p era Vendetta.

S a lv a d o y a el p rim er esca ló n , p a só al te a ­tro Cárcano de M ilán, p ara d ar a lg u n a s r e ­p resen ta c io n es de Favorita.

N o ob sta n te su segu n d a ten ta tiva , v o lv ie ­ron á re c ru d e ce r p ara él las h oras am a rg a s y los días sin pan, p e ro la fuerza de v o lu n ­tad, unida á la p ersevera n cia y al estudio, v e n c ie ro n o tra vez.

P id ió á los em p resa rio s que se d ig n a sen escu ch arle , y lo co n sig u ió al fin, h a c e dos años, siendo co n tratad o p ara ca n ta r Lucia y Faltaff, en e l Comunal de M ódena. D e có m o se h ab rá d esem p eñ ad o h ab la co n m a y o r e lo cu en cia de cu an to y o p u diera decir, el que e l m ism o año p asase al San Carlos de N á p o le s á ca n ta r Favorita y Cavalleria Rusticana. H allán d o se in c id en talm en te, en la ic p re se n ta c ió n de esta últim a, M ascagn i, au tor de esa obra, p asó al p ro sc e n io á fe li­c ita r al jo v e n in térp rete de Turiddi, p ron o s­ticá n d o le una ca rre ra brilla n te . D e sd e en ­to n ces han sid o y son bu en os am igos. D e sú bito m ejoró su p o sic ió n , can tan d o con é x ito crecien te la Traviata y el Rigoletto, en el Malibrán de V e n e cia . É n to n c es m an­dó bu scar á sus p ad res, que residían en M on­tev id eo , y se lo s lle v ó co n sigo . Á su h erm a­no m enor, lo hizo estu d iar co n trap u n to en e l C o n se rva to rio de N á p o les, e l que actu a l- m -nte escrib e m úsica y co m p o n e ro m an ­zas.

Á p artir de V e n e c ia , A m é rico no d esca n ­sa; va á R u sia y tom a p arte en una serie de co n cierto s en San P etersb u rg o co n B a ttisti- ni y la T etraz in i. Su carrera se afirm a con un triunfo serio , en el tea tro Imperial de V a rso v ia (1896), ca n ta n d o Rigoletto, Fausto, Marta, Lucía, Puritanos, Barbero y Cava­lleria Rusticana, d iv id ien d o los ap lau sos con la Pacini y D e v o y o d . D e sd e ese m om ento su nom bre suena en e l m undo tea tra l y se d esta ca co m o un ten or de gran des esp eran ­zas.

Page 12: BE VISTA NACIONAL - anaforas.fic.edu.uyanaforas.fic.edu.uy/jspui/bitstream/123456789/11588/1/RevistaN55.pdf · pendiente del peligroso equilibrio de un artista en el trapecio, aparece

103 Eevista Nacional de Literatura y Cienoias Sooiales

S u ú ltim a te m p o r a d a e fe c tu ó la en e l te a ­tro R eal de M adrid, c a n ta n d o e n cu a re n ta y o c h o re p r e s e n ta c io n e s la s p r in c ip a le s ó p e ­ra s d e su re p e rto r io .

Y a q u í c e d o la p lu m a a l S r. G u e rra y A la r c ó n , c r ít ic o m u sica l d e un im p o rta n te d ia rio m a d rile ñ o , p a ra q u e se v e a c ó m o h a s id o ju z g a d o e n la c a p ita l d e E sp a ñ a :

«» »

« A u n p a ra lo s q u e no c o n o c ía m o s á S tam - p a n o n i y sa b ía m o s a lg o d e su s c o n d ic io n e s a r tís tica s, d e sus p r e fe re n c ia s m u sica le s , de su te m p e ra m e n to n e rv io so , se n s ib le , belli• miaño, e ra un p ro b le m a a d iv in a r c ó m o a q u e l jo v e n p o d ría in te r p re ta r c o n a c ie r to un p a ­p e l c o m o e l de E rick en la o b ra d e Y V agn er, tan c o n tra r io á su s g u s to s é in c lin a c io n e s.

L a re p re s e n ta c ió n de E l Buque Fantasma b a r r ió ca si p o r e n te r o to d a s la s d e s c o n fia n ­za s. S ta m p a n o n i se m o stró , n o s ó lo co m o un c a n ta n te a fo rtu n a d o en una p a rte d ific i­lís im a y sin n in g ú n lu c im ie n to , s in o ta m b ién a c to r lír ico d e lo s m ás c o n c ie n zu d o s.

« L u e g o h a n s id o ta le s y ta n rá p id o s sus p r o g r e s o s en E l Barbero, Dinorah, Sonám­bula y Fausto, q u e e l p ú b lic o m a d rile ñ o v ió en é l e l g e rm e n d e un te n o r e x tr a o r d in a ­rio .

« D e sp u é s d e c a n ta r co n a p la u so en lo s te a tr o s d e Ita lia y R u sia , h a c a n ta d o co n é x ito s ie m p re c r e c ie n te e n e l R e a l d e M a ­d rid y en el fr a g o r d e l tr a b a jo c o n tin u o y fa t ig o s o á q u e le h a o b lig a d o la e m p re sa p o r la e s c a s e z d e te n o r e s c o n tra ta d o s .

« C o n d e c ir q u e h a c a n ta d o 48 fu n cio n es, e s tá d ic h o to d o . E s to d e m u e stra m e jo r q u e n a d a la u tilid a d é im p o rta n c ia d e su la b o r a r tís tic a y e l a p r e c io á q u e s e h a h e c h o a c re e d o r ta n to p o r p a rte d e la e m p re sa c o ­m o d e su s m u ch o s a d m ira d o re s .

« T a l es A m é r ic o S ta m p a n o n i. N o es M a ­rio , ni T a m b e r lic k , ni G a y a r r e , ni M a sin i, ni T a m a g n o . S e c o n te n ta c o n s e r él, y e l p ú b li­c o s e lo a g r a d e c e d e to d a s v e ra s .

« E l ap la u d id o te n o r b o n a e re n s e e s un c a n ta n te d e b u e n a fe; d a lo q u e t ie n e sin d is fra c e s ni su b te r fu g io s ; p o s e e u n a v o z de e x q u is ito tim b re , q u e se p r e s ta c o m o p o c a s á la s d e lic a d e z a s en el d e c ir , y e m ite n o ta s p u rís im a s c o n la fa c ilid a d d e un n iñ o , s in p e ­c a r co n la in o c e n c ia d e l q u e lo ve .

« Y esa m o d e stia y esa fa lta d e p r e te n s io ­n es p ro d u c e n s im p á tic a im p re sió n . Y c u a n ­d o la v o z d e l c a n ta n te s e d e ja o ír se re n a y tr a n q u ila en la Cavatina: Ecco ridente i l cie­lo d e E l Barbero de Sevilla, n o h a y sin o ap la u d ir, lo m ism o q u e en la p a rte d e E l- vino d e la Sonámbula e x tr a e to d a la tie rn a p o e s ía q u e c o n tie n e y s e la c o m u n ic a a l a u ­d ito r io c o n a c e n to s q u e lo c a u tiv a n p o r c tri­p le to .

« D u ran te lo s e n s a y o s d e la Sonámbula, la P a c in i d e c ía q u e e l te n o r a r g e n tin o e ra e l m e jo r d e to d o s c u a n to s h o y c a n ta n c o n la diva la ó p e ra d e B e llin i. >

«* «

H a s ta a q u í e l c r ít ic o e sp a ñ o l. P o r m i p a r ­te s ó lo a g r e g a r é q u e h e o íd o a l jo v e n c o m ­p a tr io ta e n tr e s ó cu a tr o tr o z o s m u sica le s , d e já n d o m e u n a im p re sió n p la c e n te ra . L a v o z , sin s e r p o d e ro s a , e s d u lc e y e sp o n tá n e a , y e l t im b r e , d e e x tra o rd in a r ia p u re za , se

m a n tie n e c r is ta lin o en su d é c im a to n a l, p a ­sa n d o sin e s fu e rzo s v io le n to s , d e lo s a rru ­llo s a te r c io p e la d o s d e l spirto gentil, á lo s a g u d o s b r illa n tís im o s d e la ro m a n z a fin al d e la Africana.

Á p e sa r de ta n r e c o m e n d a b le s d o te s , su e s tre n o en la Ópera fu é un fra ca so . E n t o ­d a la re p re s e n ta c ió n n o lo g r ó h a c e r o ír una so la s iq u ie ra d e su s e s p lé n d id a s n o ta s a g u ­das. L a v e r d a d e s q u e m e r e c ió s e r s ilb a d o . E l p ú b lic o tu v o p a ra é l u n a p a c ie n c ia y una b o n d a d q u e n o s u e le usar. A m é r ic o d e b ió in te n ta r una s e g u n d a p ru e b a , p u e s e s a n o ­c h e se se n tía v is ib le m e n te in d isp u e sto . E n v e z d e in te n ta rla , p r e fir ió p a r t ir d e rro ta d o . E s e h a sid o su m a y o r é im p e r d o n a b le e rro r , p o r q u e e l v e r d a d e r o a r tis ta d e b e im p o n e r ­se ó su cu m b ir!

Y o la m e n to q u e e s e jo v e n , q u e a c a b a de m a rc h a rse d e n u e v o á E u r o p a , a m a r g a d a e l a lm a y a p u ñ a le a d o e l c o r a z ó n p o r la in m e n ­sa p e n a d e un fra c a so in e x p lic a b le , n o h a y a te n id o un p o c o m ás d e v a lo r y un p o c o m ás d e fe en sí m ism o: h u b ie ra lo g r a d o tr o c a r la d e r r o ta e n v ic to r ia .

Y á lo s c r ít ic o s q u e h an e n s a y a d o e l e p i ­g r a m a s o b r e la s e s p a ld a s d e un c o m p a tr io ta q u e e s a lg o m ás q u e u n a e s p e r a n z a d e l a r te lír ic o , n e g á n d o le to d o , y o le s p re g u n ta r ía : ;c ó m o e x p lic a r E L F E N Ó M E N O d e q u e un a u d ito r io ta n in c o n te s ta b le y s e v e r o cu a l e l q u e a s is te a l T e a tr o R e a l d e M a d rid , le e s ­c u c h a s e , c o m p la c id o , d u ra n te 48 r e p r e s e n ­ta cio n es? . . .

H e a h í un in te r r o g a n te d e p ie .M ie n tra s e l te n o r a r g e n tin o re a n u d a en

R u s ia su c a r r e r a a r tís tic a , y nos lle g a n lo s e c o s de su s p r ó x im o s e s tr e n o s en lo s te a ­tr o s im p e r ia le s d e S a n P e t e r s b u r g o y d e M o sco u , c o n s ta te m o s c o n p e n a , q u e en é l se h a c u m p lid o u n a v e z m ás e l v ie jo a fo ­rism o : Nemo propheta in patria sua!

Luis BERISSD.

Á LAVALLEJABajo las garras de la suerte impía,

Prosternada á los pies de una diadema, Visto á tu patria, Lavalleja, un día,Cuando un lampo de ardor, de luz suprema, En tu alma y genio y corazón ardía.

Y para armar tu legendario brazo Más fuego, más pasión diste á tu anhelo; La patria de tu vida era pedazo;Era tu fe, tu amor, era tu cielo,La verdadera paz de tu regazo.

Cuando las torpes huestes brasileras En almonas de torres uruguayas, Orgullosas alzaban sus banderas, Reflejando en sus muros y atalayas Sólo acentos de lenguas extranjeras;

Y llenaban las quejas del esclavo,Por el látigo vil escarnecido,Los alcázares nobles, menoscabo De todo lo más grande y más querido Que aplaude el hombre generoso y bravo;

Y cuando al toque del clarín guerrero Se agrupaban las tropas imperiales,

Para quebrar con su bullicio artero La ilusión de los pocos orientales Mezclados entre el coro brasilero:

Con el fuego de un santo patriotismo Te lanzastes audaz á la pelea.. . .Ya tiembla el Leviatán del despotismo, Porque surge una nueva Mantinea Que en Sarandi transforma tu heroísmo.

De victoria en victoria proseguiste Lanzando por los aires tus pendones;Ya el enemigo torpe no resiste,Y huyendo temeroso á tus bridones,Va á proclamar al mundo que venciste.

Del patrio capitolio haces morada Para la augusta enseña que tremolas;Ya otro clarín resuena en la alborada,Y otro rumor se escucha entre las olas Del anchuroso Plata en la Ensenada.

Ya el pretorio uruguayo está reunido,Y en todos los semblantes se refleja La gratitud de un pueblo redimido.. . .¡ Salve al ilustre prócer Lavalleja, Generoso en la paz, nunca vencido!

Nicolás N. PIAGGIO.

EN UN ÁLBUMHe buscado en las cuerdas de mi lira

La nota más sublime que vibrara,Para que en el concierto en que tú vives No fuera á ser notoria disonancia.

Pué mi deseo,Que entre las auras

De los suaves perfumes que te envuelven, Pudiera ella alternar sin ser notada.

Pero en vano pulsó las cuerdas todas Para enviarte mi canción más grata,Pues una sola no encontró que fuera El nuncio fiel de la emoción causada

Por tu presencia Bella y gallarda,

Cuando soñando con futura gloria Verdes laureles á mi sien buscaba.

Por eso, amiga, si hallas esta hoja Para tu álbum demasiado pálida,Y, al confrontarla con las otras, miras Que sólo por lo humilde se destaca,

Piensa tú entonces Que hay en mi alma

Un recuerdo más grande, indescriptible Á la pluma, al pincel y á la palabra.

J o s é A n t o n i o MORA.

« S o b r e l e n g u a j e »

P u b lic a m o s á c o n tin u a c ió n a lg u n o s d e lo s ju ic io s e m itid o s p o r la p re n sa n a c io n a l y p o r d is tin g u id o s e s c r ito r e s a m e ric a n o s , á p r o p ó s ito d e l o p ú s c u lo q u e c o n e l títu lo q u e e n c a b e z a e s ta s lín ea s a c a b a d e p u b lic a r n u e stro c o - r e d a c t o r C a r lo s M a rtín e z V ig il-

Page 13: BE VISTA NACIONAL - anaforas.fic.edu.uyanaforas.fic.edu.uy/jspui/bitstream/123456789/11588/1/RevistaN55.pdf · pendiente del peligroso equilibrio de un artista en el trapecio, aparece

Sup erin tend en cia de A du an as. C hile.

V alp a raíso , 21 de a g o sto de 1897.

Z o ro b a b el R o d rígu ez saluda aten tam en te al ilu stre escritor u ru gu ayo don C a rlo s M ar­tínez V ig il, exp resá n d o le sus m ás sin ceros ag rad ecim ien tos p or e l op úsculo < S o b re len guaje » que ha ten id o la am abilidad de enviarle y que será le ído co n el interés que m erece el tem a so b re que versa y la com ­p eten cia del autor.

M on tevideo, A g o s to 16 de 1897.

S eñ o r don C a rlo s M artínez V ig il.

E stim ad o com patriota:A g ra d é z c o le su interesantísim o fo lleto

< S o b re lenguaje. > L o he releído con sum o p lacer; y al p ar de fe lic itarle p or el acierto con que ha tratado el punto, d ebo en viarle m i enhorabuena p or lo bien y correctam en ­te escrito que está e l opúsculo.

Sin em b argo, m e h a ocurrido una duda con resp ecto á un m odo a d verb ia l que V d. em p lea, y uno de esto s días le p ediré p or carta que se sirva p on érm elo en claro, que m e ven d rá com o de p erla s, p orq u e p recisa­m en te e sto y bo rra jean d o un lib ro sobre c M odism os y refranes de la R ep ú b lica A r ­gen tin a, del P a rag u a y y d el U ru g u a y. >

■ Wa sh in g t o n P. BERMÚDEZ.

M on tevid eo , A g o s to 15 de 1897.

S r . D r. D . C arlos M artínez V ig il

Presen te.E stim ad o com patriota:

A p e n a s he tenido tiem po, ni gu sto , con las p reocu p acion es de estos días, p ara h o ­je a r p rod u ccion es literarias, y su p o n go que V d . sab rá atribuir á esa d isposición de áni­m o m i tardanza en a g ra d ecerle la deferente rem isión de su últim o fo lle to < S o b re len ­guaje. >

C ú m plem e h acerlo ahora, después de ha­b er leído con la aten ción que se m erece su nuevo trabajo, que p one en eviden cia las buenas dotes del autor y su co n tracció n al estudio.

C o n ta l m otivo m e rep ito de V d . aíTmo.

F ra ncisco BAUZÁ.

M useo y B ib lio teca P ed a g óg ico s.

M ontevideo, A g o s to 13 de 1897.

S eñ o r don C a rlo s M artínez V ig il, C ated rá­tico interino de G ram ática castellan a en la U n iversidad de M ontevideo.

M u y señ or mío:T e n g o e l ag rad o de acusar recib o del

fo lle to titu lado < S o b re lenguaje >, q u e V d . se ha servido d onar á ia B ib lio teca de esta Institución.

E sa im portante p u b licación de que es V d. autor, p one de re lieve su esp ecia l co m p e­tencia en la m ateria, á la vez que satisface una sentida necesidad que sabrán ap reciar los que se dedican al estudio de nuestra lengua.

Saludo á V d . con mi con sideración más distinguida

A lb erto G Ó M E Z RUANO.

Revista Naoloaal de Literatura y Ciencias Sociales« S o b r e l e n g u a j e »

H em os recib id o , e lega n tem en te im p reso en lo s ta lleres de la T ip o g ra fía y L ito g ra fía O rien tal, un fo lleto de que es autor e l se­ñor C a rlo s M artínez V ig il, escr ito á p r o p ó ­sito del op ú scu lo Neologismos y americanis­mos, p u b licad o p or el co n o cid o litera to p e ­ruano R icard o Palm a.

E l nom bre de su autor es la m ejor re c o ­m en dación del fo lle to « S o b re len gu a je , > p u es C a rlo s M artínez V ig il no es un d esco n o ­cid o en ei m undo de nuestras letras, donde ha sab id o o b ten er un p u esto en vid iable, ad­quirido p o r esfuerzo p rop io y sin m ás ayu da que su ta len to unido á una e jem p lar la b o ­riosidad.

E l lib ro de que nos ocu p am os, ten d en te en p rim er térm ino á lleva r á la p rá c tic a las teorías de su autor resp ecto de la d iscreción con que se d eben adm itir los n eo lo gism o s, so p ena de p erd er esp a ñ oles y am erican os las en orm es ven taja s de un idiom a com ún, no es una obra de la que él p ueda esp erar brillan tes resultados p ara la rep u ta ció n de su tem p eram en to literario , p e ro sí de profi­cu a enseñanza p ara quien es la le y e re n , p ues la teoría que en e lla se so stien e está basada en largas o b servacion es, hijas de p acien tes estudios, que revisten de autoridad al d o ctor M artínez V ig il p ara e x cla m a r co m o e x c la ­m a al final de su libro: « N o n o s c ie g u e el resp eto á lo pasado, ni en cerrem os n u es­tro idiom a en los m ezquinos m oldes de un afectado purism o. Sen tiría infinito contribuir al triunfo de escu ela de tan estrech as miras. Imiten) is á los padres de fam ilia que se es­fuerzan en leg a r á sus h ijos m ayo r patrim o- nio que e l que les cupo en suerte; reco ja­m os tan p rovech o sas enseñanzas; p rocu re­m os aum entar el acervo com ún; a c re c e n ­tem os la va liosa herencia, y , acrecen tad a y rica, p ase la h erm osa len gu a ca ste llan a de nuestros lab ios á los lab ios de la p o ste ­ridad.)

(El Siglo, Montevideo.)F o l l e t o s g r a m a tic a les . «S obre l e n g u a je ,»

p o r C arlo s M a r tín ez V ig il .U n a de nuestras jó ve n e s y m ás v ig o ro sa s

in teligen cias acab a de aum entar ia b ib lio ­teca uruguaya con un lib ro d ign o de ap re­cio p or m uchos con cep tos. C a rlo s M artínez V ig il, m iem bro de la red acción de la REVIS­TA Nacional de L iteratura y Ciencias Sociales y C ated rático in terin o de G ram á­tica castellan a en la U n iversidad de M on te­video, es el joven á quien h acem os referen ­cia, y e l p roducto de su ta len to se titu la «S o ­b re len gu aje. > Q uien h aya leído la R evis­ta antes citada y se p reocu p e del m ovim ien­to intelectual del país, no d esco n o cerá ni al autor ni á la obra, pues uno y o tra están re­flejados en las p áginas de la m encionada p u ­b licación, en artículos de im portan cia indis­cu tible para el estudio d el idiom a que nos legaron los españoles, y que han m erecido el aplauso espontáneo de autoridades en la m ateria.

E ste fo lleto , que no será e l único que pu­blique M artínez V ig il, es una recop ila ción co rregid a y au 1 entada de los artícu los que aq u él p ublicó en la R evista Nacional. O cupan ellos sesenta y cuatro p ágin a s de nu­

109

trida lectu ra , im presas esm erad a m en te p o r la L ito g ra fía y T ip o g ra fía O rien ta l, q u e en esta, co m o en otras ocasion es, d em u estra e l buen g u sto tip o g rá fico que d istin g u e las ob ra s q u e salen de sus p rensas, y se tratan ce rca de sesen ta v o cab los , m uchos de e llo s d e sco n o cid o s p ara la A ca d em ia y qu izás p ara m uchos que presum en de p uristas. N o en trarem os n osotros á d iscu tir la bondad del fo lle to de M artínez V ig il, p orq u e cu estión es esta que requiere m ás d eten im ien to y e s­tudio que el que e x ig e un sim ple su elto de acu se de recibo , escrito al co rrer de la p lu ­ma; p ero lo que sí harem os co n sta r ahora, p orq u e p ara e llo no n ecesitam os esforzarn os m ucho, es que e l so lo nom bre del au tor de < S o b re len gu a je > es g a ran tía más que su fi­cien te de la im portan cia de su obra. Q uien escrib e co n la co rrecció n que é l escrib e y quien ha lo gra d o á fuerza de p acien te la b o r p rofundizar los secreto s de una de las m a­terias m ás áridas é in gra ta s que se con ocen , com o es la que se refiere á la gram ática, no puede o frecer sino buenos p rod u cto s de su in teligen cia cu ltivada.

(La Tribuna Popular, Montevideo.)

B ib l io g r a f ía . «So b r e l e n g u a je ,« p o r C ar­lo s M a r t ín e z V ig il .

S e acab a de ed itar p o r la T ip o g ra fía y L i­tografía O rien tal, en rico p a p el, e le g a n te ­m ente im preso, un fo lle to escrito p or e l se­ñor C a rlo s M artínez V ig il y que lleva p or título: « S o b re len gu aje. >

E l señ or C a rlo s M artínez V ig il es C a te ­drático interino de G ra m á tica en nuestra U niversidad , y desde h ace m uchísim o tiem ­p o se d ed ica con laboriosidad y gran p ro v e ­cho á las cu estion es gram aticales. M uchos de sus escrito s so b re la m ateria, p u b licad o s en la R evista N acional, de c u y a re d a c­ción form a p arte, han llam ado la aten ció n p or la belleza y la p rop ied ad del estilo y p or la erudición y las ideas que los ilustran.

« S o b re len guaje > es uno de los tan tos estudios de C a rlo s M artínez V ig il que ha s i­do inspirado p or la obra de Palm a titulada «N eologism os y am ericanism os.» A u n q u e e l asunto es árido, está d esarrollad o con tán ta habilidad y e legan cia , que el que em p ieza su lectura, aunque no entienda de g ra m á ti­ca, se deja lleva r sin esfuerzo y lee de un ti­rón las sesen ta p ágin a s, ap rendiendo m u­chas cosas, en con tran d o á cada p aso citas interesantes y o b servacion es oportunas.

E l fo lleto tiene o tro ca rá cte r im portante: es m u y co m p leto , ag ota e l asunto á que se dedica, registran do su autor, antes de o p i­nar, las distintas opiniones que pueden a y u ­d ar á form ar criterio. A s í que puede d ecirse que el que lea e l fo lleto sab rá d efin itiva­m ente á qué aten erse sob re lo s o ch en ta y tantos v o c a b lo s que se estudian, m uchos de los cuales son de frecuentísim o uso entre n osotros.

Á ju zg a r p or el título g en era l de « F o lle ­to s gram aticales > co n que está encabezada la carátula del fo lle to que nos ocupa, se d e­duce que C a rlo s M artínez V ig il tiene el p ro­y e c to de editar una serie de trabajos del m ism o gén ero . Q u e p ersevere en su ¡dea, pues su p rep a ració n y su laboriosidad h a .

Page 14: BE VISTA NACIONAL - anaforas.fic.edu.uyanaforas.fic.edu.uy/jspui/bitstream/123456789/11588/1/RevistaN55.pdf · pendiente del peligroso equilibrio de un artista en el trapecio, aparece

n o

c e n e s p e r a r q u e p r o d u z c a m u ch a s c o s a s a g r a d a b le s y b u en a s.

(E l D ía, Montevideo.)

U n g io v a n e c h e o n o r a a lta m e n te la le t te ­ra tu ra u r u g u a y a é d o n C a r io M a rtín e z V ig i l , u n o d e lla p ic c o la m a v a lo r o s a s c h ie r a c h e fo n d ò e d ir ig e q u e lla im p o r ta n te e se r ia R ev ista N a cio n a l d e L itera tu ra y C iencias S o cia les , c h e p u ò d irs i il P a lla d io le t te r a r io d i q u e s ta R e p u b b lic a .

Q u a n d o la m u ta r iv o lte l la d i R a v e c c a c o l­pi, p e r u n o s tra n o fe n o m e n o M i b a lis tic a , il p o v e r o p r o fe s s o r L a s o , fu n o m in a to a so st i­tu ir lo n e lla c a tt e d r a d i G ra m m a tic a a l l ’ U n i­v e r s ità il s ig n o r M a rtín e z V ig il ; e i l s o s t itu to é d e g n o d e l tito la re ; 1’ o n o r e c o n c e s s o g li é p r e v ia m e n te m e rita to .

A c o n fe r m a r c i in q u e s ta o p in io n e , v e n n e te s té un lib r o , p ic c o lo d i m o le , m a g r a n d e p e r l ’ im p o rta n z a d e l c o n te n u to , in tito la to : < S o b r e le n g u a je >, c h e é una c r it ic a illu m i­n a ta e s e re n a d ’ un o p u s c o lo d e l le t te r a to p e r u v ia n o R ic c a r d o P a lm a.

C o m e d ic e e l t i to lo , si tr a tta d i q u e s tio n i filo lo g ic h e : q u e lle fe c o n d e lo g o m a c h ie fra c o n s e r v a t o r i e p r o g r e s s is t i, c h e p ro d u c o n o la r a z io n a le e n o rm a le e v o lu z io n e d e lle lin ­g u e v iv e n t i. Il s ig n o r M a rtín e z V ig i l , b e n c h é g io v a n e ed a m e ric a n o , s a te n e r s i lo n ta n o d a lla lic e n z a in fa tto di p r o g r e s s o d e lla lin ­g u a , e s e n z a e s s e re c o n s e r v a t o r e ad o ltr a n ­za , c h e é q u a n to d i piti lo g ic o , ra z io n a le e p o s s ib ile v ’ h a in m a te ria d ’ e v o lu z io n e lin ­g ü is t ic a .

In c o s i p ic c o la m o le 1’ e g r e g io a u to r e h a r a c c h iu so un v e r o le s s ic o d i v o c i e m o d i e r ­ra ti e d u b b io s i, e d in o g n i a r t ic o lo h a d i­s c u s s o c o s i b e n e il p r o e il c o n tr o , ed h a c o ­r r o b o r a to o g n i a s s e r to c o n ta l c o p ia d’ e s e m ­p i, d a d im o s tra r e c h ia ra m e n te la su a so lid a c o ltu r a , la su a v a s ta e ru d iz io n e lin g u is tic a ed il sa n o c r ite r io c h e lo g u id a .

E ’ un lib r e tto p r e z io s o , c h e b a s ta ad a ss i­c u r a r e la fa m a d e l g io v a n e le t te r a to u ru g u a ­y o ; e n o i a u g u ria m o c h e e s s o s ia un s a g ­g io d ’o p e r a m a g g io r e su ll’ im p o r ta n te a r­g o m e n to .

D a l v a le n t e a u to r e é le c ito a t te n d e r e o p e ­r e d i ta le im p o rta n z a , e c i r a lle g r ia m o v iv a ­m e n te c o n lu i d e lla b e lla fam a a cu i h a g ià a c q u is ta to d ir it to n e lla r e p u b b lic a d e lle le t ­t e r e e d i q u e lla m a g g io r e c h e s e n z a d u b b io 1* a s p e tta .

( V Italia al Plata, Montevideo.)

U n libro interesante. «Sobre lenguaje,» por Carlo3 Martínez Vigil.

C o n e l t í tu lo « S o b re le n g u a je ,» y e s p lé n ­d id a m e n te e d ita d o p o r la b ie n r e p u ta d a T i ­p o g r a f ía y L i t o g r a f ía O r ie n ta l , h a s a lid o á lu z u n p r e c io s o o p ú s c u lo , c u y o a u to r e s e l d o c t o r C a r lo s M a rtín e z V ig i l , c o n o c id o li­te r a to q u e fo rm a en p r im e ra fila c o m o la ­b o r io s o é in s tru id o e n tr e e l e le m e n to jo v e n q u e m á s s e d e s ta c a e n e l e s c e n a r io d e la R e p ú b lic a .

C o n o c ía m o s y a la s p ro d u c c io n e s in te le c ­tu a le s d e l d o c t o r M a rtín e z V ig i l , q u e h an s id o p u b lic a d a s en la s a m e n a s co lu m n a s d e la n o ta b le R ev ista N acional , re c ib id a y s a lu d a d a c o n e n tu s ia s m o p o r la s p e r s o n a li-

Eevista Nacional do Literatura y Ciencias Sociales

d a d e s m ás sa lie n te s d e la lite ra tu ra a m e ri­ca n a , y d e c u y a re d a c c ió n fo rm a p a rte d i ­c h o a u to r.

S a b ía m o s ta m b ié n q u e e l se ñ o r M a rtín e z V i g i l e s u u o d e e s o s jó v e n e s d e v a le r , q u e p o r e s fu e rzo p ro p io , p o r u n a la b o r c o n s ta n ­te y p ro ficu a , p o r una d e d ic a c ió n d ig n a de to d o e lo g io , se h a b ía co n q u is ta d o co n h o n o r e l p u e sto d e C a te d r á t ic o in terin o de G ra m á ­tic a c a s te lla n a d e la U n iv e r s id a d d e M o n te ­v id e o , q u e o cu p a a c tu a lm e n te co n g e n e ra l b e n e p lá c ito u n iv e rs ita r io . Y ta n to m ás h o n ­ro s o d e b e s e r p a ra e l s e ñ o r M a rtín ez V ig i l e l d e s e m p e ñ o d e e se c o m e tid o , c u a n to q u e p a ra o b te n e r lo n o h a n e c e s ita d o d e fa v o r i­tism o s , q u e s ie m p re so n c o n tra p ro d u c e n te s , ni h a fo rm a d o p a rte n u n ca d e c írc u lo s y c o ­m a n d ita s o d iosa s, d e e s a s q u e , m ás d e una v e z , han p r iv a d o en e l p rim e r c e n tr o de e n ­s e ñ a n z a d e n u e stro p aís.

P e r o , a p a r te d e e s to s a n te c e d e n te s , y c o n ­c r e tá n d o n o s a l o b je to d e e s ta s lín ea s, d ir e ­m o s q u e en e l lib ro « S o b r e le n g u a je » v e ­m o s e ru d ic ió n v a sta , c o r r e c c ió n p o c o c o ­m ún, am p litu d d e c o n o c im ie n to d e l id io m a c a s te lla n o , ta le n to lite ra r io en su a u to r y p á ­rra fo s e s c r ito s c o n e lo c u e n c ia , co m o e l q u e tr a n s c r ib im o s á c o n tin u a c ió n : «E n la le n g u a c a s te lla n a v iv e n y v iv ir á n e te r n a m e n te la ro tu n d id a d y h a rm o n ía d e la fra se in im ita ­b le d el a u to r d e l Q u ijo te , la c a s tic id a d de M o ra tín , e l c h is te d e B r e tó n y d e L a r r a , la e lo c u e n c ia d e D o n o s o C o r té s y la c o r r e c ­c ió n y e x q u is ito g u s to d e J o v e lla n o s y B e ­llo . E l la a le n tó lo s m ás e s fo rz a d o s p a la d in e s d e l p e n sa m ie n to ; h a b la n d o en e lla se s in ­tie ro n g ra n d e s; p o r e lla , en fin, cu ltiv á n d o la y c u id á n d o la c o n r e lig io s o re s p e to , e le v a ­ro n sus n o m b r e s v e n e ra n d o s á la s c u m b r e s e x c e ls a s d e la in m orta lid ad .»

S ó lo n o s r e s ta fe lic ita r s in c e r a m e n te a l c o r r e c to e s c r ito r , q u e c o n ta le n to y b u en t i ­n o h a e c h a d o e n la s p la y a s d e l P la ta lo s c i ­m ie n to s d e la in s titu c ió n te n d e n te a l e s tu ­d io s e rio d e la le n g u a q u e in m o r ta lizó e l g e ­n ia l C e r v a n te s en la E s p a ñ a d e p r in c ip io s d e l s ig lo X V I I .

(El Tribuno, Montevideo.)

Folletos gramaticalesE l c o n o c id o é ilu stra d o lite ra to u ru g u a y o

d o c to r C a r lo s M a rtín e z V ig i l , h a te n id o la g a la n te r ía d e o b s e q u ia rn o s c o n un e je m p la r d e su fo lle t o titu la d o « S o b re len gu a je ,» es­c r ito á p ro p ó s ito d e l o p ú sc u lo p u b lic a d o p o r e l re n o m b ra d o lite r a to p e ru a n o R ic a r ­d o P a lm a , s o b r e n e o lo g is m o s y a m e ric a n is­m os.

S u a u to r, a u n q u e jo v e n , h a d e s c o lla d o y a e n tre lo s h o m b r e s d e le tra s de n u e stro p aís, y su ta le n to y p r e p a r a c ió n en e l d ifíc il a r te d e m a n e ja r la p a la b ra , h an sid o p re c o n iz a ­d o s p o r e m in e n cia s a m e ric a n a s y e u ro p ea s, lo q u e im p o rta d e c ir q u e e se lib ro esta lla ­m a d o á p r e s ta r g r a n u tilid a d á to d o s a q u e ­llo s q u e se d e d ica n a l c u ltiv o d e la s b e lla s le tra s .

E n é l e l d o c to r M a rtín ez , e s ta m o s s e g u ­ro s , h a d e b id o e m p le a r m u ch o tie m p o en su s p a c ie n te s in v e s tig a c io n e s , p a ra p o d e r l le g a r á fo rm u la r la te o r ía q u e c o n ta n ta lu c id e z d e sa rro lla .

E s a o b ra m e re c e fig u ra r e n la b ib lio te c a

de to d o s , d e sd e q u e en e lla s e e n co n tra rá n la s re g la s fijas q u e c o n v ie n e s e g u ir en la p rá c tic a p a ra e m p le a r y a d m itir lo s n e o lo ­g ism o s c o n d iscre c ió n y m esu ra , c o n s e rv á n ­d o se así la p u re za d e l h e rm o so id io m a de C e rv a n te s .

A g r a d e c e m o s á su d istin g u id o a u to r su v a lio s o o b se q u io , de c u y o e stu d io n o s p r o ­p o n e m o s s a c a r g ra n p ro v e c h o .

( La Campaña, Independencia.)

MEDICINA LEG A L( Continuación)

E l tr a y e c to r e c o r r id o p o r e l p r o y e c t i l v a ­ría, p u e s n o s ie m p re e stá re p re se n ta d o p o r la lín ea r e c ta q u e un e lo s d o s o rific io s. L a lín ea re c ta e x is te en la s p a rte s b lan d as; p e ­ro si la b a la en cu e n tra un c u e rp o d u ro , un h u eso , se d e sv ía . A s í , n o e s e x tra ñ o e n c o n ­tra r p r o y e c t i le s q u e en tra n d o p o r un lad o d e la c a b e z a han d a d o la v u e lta a l crá n eo , s in e n tra r en él, s a lie n d o p o r e l la d o o p u e sto . C o n la s b a la s a c tu a le s q u e son c ó n ic a s esta s d e s v ia c io n e s son p o c o fre c u e n te s . E s ta s re ­fle x io n e s a p a re ce n ta m b ién co n lo s p r o y e c ­tile s q u e a tra v ie sa n c u e r p o s in ertes; así, no e s ra ro q u e una b a la d isp a ra d a d e N oi te á S u r, v e n g a á in c ru sta rse en la p a re d n o rte de una h a b ita c ió n , es d ecir, en se n tid o c o n ­tra rio d e la q u e se d isp a ró . E s t o se a c e p ta , lo m ism o te ó r ic a q u e p rá c tic a m e n te : te ó r i­c a m e n te , p o rq u e se a d m iten la s re fle x io n e s ; y en la p rá c tic a , p o rq u e su c e d e q u e tiran d o un tiro á un in d iv id u o se h ie re á o tro que e s ta b a en e l p u n to c o n tra r io d e a q u e l al cu a l s e tirab a .

E n la s h erid a s p ro d u c id a s p o r arm a s de fu e g o e l p r o n ó s tic o es c o n fre c u e n c ia r e ­se rv a d o , p u e s q u e au n q u e le v e s en un p r in ­c ip io , p u e d e n a su m ir un c a rá c te r g r a v e e n ­tre lo s 14 y 16 d ías, á co n se c u e n c ia d e la s h e m o rr a g ia s in tern a s á q u e p u ed e n d ar lugar; so n h e rid a s q u e n o su e le n s a n g ra r en sus c o m ie n zo s , a p a r e c ie n d o co m o le v e s al p r in ­c ip io . L a s p ro d u c id a s p o r a rm a b la n c a r e ­v is te n un c a r á c te r d istin to : su e le n s a n g ra r m u ch o , p re se n tá n d o se de p ro n to b a jo un a s p e c to g r a v e , au n q u e su c e d e q u e p asan á le v e s d esp u és.

hom icidio y lesio n es corporalesI V .— Cuestiones generales sobre las artnas.1.a Y a se h a v is to q u e la c u e st ió n m ás

im p o rta n te en e l h o m ic id io e s tr ib a en d e­te rm in a r co n q u é c la s e de arm a s se han p ro d u c id o la s les io n es, c o s a se n c illa tra tá n ­d o se d e le s io n e s re c ie n te s , p e ro q u e se co m ­p lic a cu an d o se tra ta d e a v e r ig u a r e l arm a co n q u e se h a a g re d id o , tra tá n d o se d e h e ­r id a s cica tr iz a d a s . L a c u e stió n co n siste , p u es, en declarar con qué arma se ha hecho la herida cicatrizada.

E s ta c u e stió n e s d ifíc il, p re se n tá n d o se c o n fre c u e n cia ca u sas d e e n g a ñ o q u e p u e ­d en d e se n ca m in a r a l p erito ; así, p o r e jem ­p lo , h a y c ie r ta s h e rid a s q u e c ica tr iz a n en d ire c c ió n d istin ta d e la h e rid a in ferid a, de­b id o á la re tra c c ió n d e la s fibras, s o b re to ­

Page 15: BE VISTA NACIONAL - anaforas.fic.edu.uyanaforas.fic.edu.uy/jspui/bitstream/123456789/11588/1/RevistaN55.pdf · pendiente del peligroso equilibrio de un artista en el trapecio, aparece

R e v is ta N a o io n a l d e l i t e r a t u r a y C ie n c ia s S o c ia le s 111

do en las heridas cortan tes. Sin em b argo, cuando las heridas p roducidas p or esta ú l­tim a clase de arm as son lineales, c ica tr i­zán dose sin supuración, la h erid a se ha cu ­rado p o r p rim era intención, y , en ton ces, es fác il d eterm in ar la clase de arma.

L a s heridas cicatrizadas, p roducidas p or arm as de fu ego , tienen la form a de un h o ­y o , son deprim idas, sob re to d o cuando el p ro y e c til ha atra vesad o las p artes blandas; p o r la sen cilla razón que los tejidos que han sustituido á los destruidos son m enos c o n ­sistentes, m enos gru eso s y producen ese h o y o .

H a y que ad vertir que e l p erito tendrá buen cu idado en no confundir estas c ic a tr i­ces co n las que pueden p roven ir, y a de o p era cion es quirú rjicas que son g e n e ra l­m ente lineales, y a de ú lceras ven éreas y sifilíticas, y a de escrófu las, cáusticos, etc., y las cu ales se pueden ca ra cteriza r con p r e ­cisión. L a s cicatrices, co m o elem en tos de identidad, son indelebles; unas v eces se a l­teran y otras se agrandan, p ero esto no im ­p orta al hom icidio.

2 * Determinar en que situación estaban el agredido y el agresor. E sto es m uy im por­tante, pues p or m edio de e llo y á falta de o tro s datos, se podrá determ inar si ha h a ­bido ó no a g resión , en una palabra , se p re ­cisará en qué con d icion es se ha efectuado el hecho. E n a lgu n os casos, es esto p osible; en otros, no. P ara sacar con clusion es p re ­cisas, una de las cosas que se d eben hacer es estudiar tod os los indicios y d eta lles que en e l lu gar del suceso y sus alred ed ores se puedan p resentar. S u p ó n g a se que se e n ­cu entra á un individuo con una herida de b a la en la espalda, sin que el p ro y ec til h a ­y a salido (p a r a ev ita r que se dude cuál es e l ag u jero de en trad a y cu ál el de salida). E n este caso, se puede decir: que lo han agarrad o p or la espalda, y que, p or p arte del herido ó m uerto no ha habido agresión , p ues nadie p resenta en ta les circunstancias sino e l frente. O tro caso: se encuentra á un individuo con el brazo izquierdo hech o p i­cad illo y con una herida en el v ien tre, de cu yas resultas m uera. A q u í cab e esta b le­cer que la v íctim a ha sosten ido una lucha y que con el brazo ha tratado de am o rti­gu ar los g o lp es, recibiendo la puñalada en el vientre. S e citó en clase el ca so siguiente: U n a p ersona de cierta p osición p o lítica te­m ía el ser asesinado de un m om ento á otro, sucediendo que un buen día p en etró en su casa cierto sujeto, al cual madrugó; hecho lo cual, se p resentó acto continuo ante las autoridades d eclarando que lo había m uerto en defensa propia. S e p roced ió á un reco ­nocim iento de la p ieza en que había tenido lu gar el hecho, con statán dose que un sillón en el resp aldo estab a atravesad o p or una b ala en d irección h orizon tal y de delante atrás, lo que hacía supon er que la bala p e ­n etró p or e l sillón después de h ab er atra­vesado e l p ech o de la víctim a, la cu al estaba sentada, corresp ondiendo la altura de la b a ­la en el cuerpo, con la altura que tenía en e l sillón perforado. T o d o esto hizo su p on er que la m uerte había sido á traición y no en defensa propia.

3.* Determinar si las lesiones son obra de la misma persona ó si son producidas por

mano ajena; en una palabra, si se trata de un h om icid io ó de un suicid io. E sta cues­tión ocu p ará su p uesto cuando se h ab le del suicidio.

4 “ Determinar si ha habido uno ó más agresores.— E sta, c'omo todas la s cu estion es m éd ico-lega les, puede ser de fác il so lu ción en a lgu n os ca sos y m uy n eb u losa en otros. U n individuo que p resenta un so lo b alazo, puede sin em bargo h ab er ten ido varios ag resores, com o el que lo m ató, el que lo su jetó , etc., á p esar de lo cual, no p resen ­ta el cu erp o señal m ás que de una so la le ­sión. P or o tra p arte una m ism a p ersona puede usar p ara con su víctim a de arm as distintas: h erirlo de un balazo p rim ero, d es­de lejos, y d ego lla rlo , d espués. E n este ca ­so p arecería que han in terven id o dos p erso ­nas, y , sin em bargo, una s o 'a ser el ag en te crim inal.

P ero d escartan do estas cu estion es que son las oscuras y que pueden confundir al p erito , es p osib le dar con lo que se busca en m uchos casos. A sí, p. cj., se p resentan en un m ism o individuo varias heridas de arm as de fu ego de d istintos ca lib res, etc . B asta este dato p or sí so lo p ara h acer supon er que se trata de una ag resión lleva d a á ca b o p or varias p ersonas, p or no ser ló g ic o p r e ­sum ir que un so lo a g resor lleve un arsen al encim a.

O tras v e ce s esto no se determ ina p o r la naturaleza de las lesiones, sino p or la form a de la m uerte; p. ej., en un hom icid io en que se en con trara á la víctim a co lgad a; esta sus­pensión in dicaría la p articip ació n de varias personas.

O tra m anera m uy im portante de d eterm i­nar si han in terven id o una ó m ás p ersonas, sería e l estudio de las huellas que se e n ­cuentren en los alred ed ores del teatro del suceso, estudio p recio so en estos ca sos y que p u e d : ay u da r m uchísim o p ara el descu­brim iento de los ag resores. E studian do los a lred ed ores del lu gar del crim en se en con ­trarán: en la ciudad, m anchas de sangre, rastros, etc.; y en e l cam po, vestig io s, h u e ­llas, pisadas. Su p ó n g ase que se h aya com e­tido un hom icidio y que en la san gre derra­m ada en el suelo se encuentren p isadas de diferentes tam años; esto nos llevaría á e v i­d en ciar la ex isten cia de m ás de un d elin ­cuente.

L a s pisadas ¿pueden identificar al crim i­nal? Sí, m uchas veces, p uesto que las p isa­das no son tan sem ejantes. S e ha tom ado á varios crim inales, hécholos p isar en una san gre cualquiera y después p isar fuera de la sangre; hech o esto, se han com pu lsad o estas pisadas con las que con la sa n g re del m uerto se habían p roducido. S e hizo en clase una dem ostración en e l p izarrón , tra ­zándose en éste la figura de una p isada y después tirándose so b re e lla varias líneas horizontales y paralelas. C on este m edio se trataba de determ inar las p isadas, pues, en efecto , una m ancha cualquiera que en una pisada estaba á una altura de e lla d eterm i­nada, p. ej., entre la 2.* y 3.“ líftea h orizon ­tal, es decir, que la co locació n de la m ancha en la p isada estuviera entre esas dos líneas; dado el hecho crim inoso, la p isad a y la m ancha en ella: si la m ancha estu viera á la altura que dejam os indicada, serla del indi­

v id u o cu y a p isad a se exam in ó; si m ás arrib a ó m ás ab ajo , de o tra persona.

L o s v e stig io s que dejan la im presión de los p ies en e l suelo son m ás ó m en os a p a ­rentes, segú n que la tierra esté m ás ó m en os húm eda y blanda. Para a p reciar e x a c ta m e n ­te las d im en sion es y form a g en era l d el p ie , la con form ación de la p lanta, si el p ie e s ta ­b a ca lzad o ó desnudo, la p osición re la tiva de lo s dedos,.si la suela c-staba d eteriorad a en a lgú n p unto ó si ten ía cla v o s, etc ., se p ro c ed e de un. m odo esp ecia l. S u p ó n g a se que la ju stic ia encuentra una h u ella ju n to á la v íctim a ó en cu alq u ier o tro lado y la cu al una vez ob ten id a se b u sca con fron tarla con la que deja e l p ie de la p erson a que se su­p on e sea e l agresor. — U n a vez en co n trad a la huella, lo p rim ero que se h ace es tratar de co n servarla im pidien do que se a lte re ó d esfigu re debido al v ien to ó al p aso de otras person as, e t c , p ara lo cu al se tapan las im ­p resion es y se deja una p erson a v ig ilá n d o ­las, hasta que los p erito s se m im an de los m edios necesarios con que co n servar y tras­ladar la huella.

H a y que d istinguir aquí los ca so s en que la h u ella esté en un terren o duro, en uno b lando ó en el p o lvo . E n el p rim er caso, p. c j , cuando se trata de una p isada im presa en el p ortland, se a g arra el p eda zo de P or­tland y se rem ite al ju ez la p isada auténtica.

T ra tá n d o se de una huella en terren o blando, se usa e l s igu ien te procedim iento: se co lo c a so b re la huella que se quiera o b ­ten er una e sp ecie de p arrilla h ech a con alam bre g ru eso á uno altura so b re aq u élla de tres á cu atro centím etros. S o b re esta p arrilla , que tiene que ser m ás gra n d e que la h u ella , se co lo ca una lám ina de h oja lata y so b re esta lám ina un p o c o de ca rb ó n encendido, el suficiente para ca len ta r p ro n ­to la huella. C uando éste ten ga 120° ó 130o se quita el ap arato ó p or lo m enos la lám i­na de h oja lata y con un tam iz se ciern e un p o co de p o lvo esteá rico so b re ella, de m odo que form e una cap a igual en to d a la superficie de la huella ca lien te. E l p o lv o va ca yen d o sin a lterar la form a de la im presión, p o r lo leve del p eso que aquél tiene, y com o está ca lien te se d errite é insinúa p or los in­terstic ios, á más ó m enos profundidad. Cuan­do se ha enfriado la huella, lo que se co n o ce p orq u e y a el p o lvo cern ido encim a no d es­ap arece d erretido, se v u e lv e á ca len tar un p oco y se v u e lv e á ce rn er con el tam iz, re­p itién d ose esto hasta ta n to que, dejando enfriar y secan d o los bordes, el fondo y las cercanías de las huellas, se v e a que ésta y a tiene con sisten cia, debido a l p o lvo esteá rico que al so lid ificarse con el enfriam iento ha unido los gran os de arena ó terron cito s de tierra, form ando con e llo s un só lido bastan- de com p acto p ara p od erle m over en una pieza. E n este estad o se tom a un cu ch illo y se m ina la huella p or to d o s sus bord es, cu i­dando de que no se rom pa; y así se la sepa­ra del terreno. C ald ead a encim a de un lien ­zo de varios d obleces, se d o lo ca encim a de ellos la huella al revés, lo de arrib a abajo y se levantan los bo rd es del lienzo de m odo que form en com o una caja encim a de la huella, sosteniendo eso s bordes con piedras ó tierra. A s í d ispuesto, se deslíe y e so fino en agua, y cuando está bastante esp eso

Page 16: BE VISTA NACIONAL - anaforas.fic.edu.uyanaforas.fic.edu.uy/jspui/bitstream/123456789/11588/1/RevistaN55.pdf · pendiente del peligroso equilibrio de un artista en el trapecio, aparece

113

p r ó x im o á so lid ific a rse , s e v ie r te en e l h u e ­c o fo rm a d o p o r lo s b o r d e s d e l lie n z o y se e s p e r a q u e e l y e s o e s té d u ro , su c e d id o lo cu a l se q u ita e l lie n z o y s e s a c a ¡a p ie z a e n ­g a sta d a e n e l y e s o ; se v u e lv e y se tien e la h u e lla ta l c o m o e s ta b a en e l s u e lo . A s í se o b tie n e e l m o ld e e n y e s o q u e s e r á e l p o s i­t iv o , p o s it iv o q u e co m o se h a v is to s e o b tu ­v o v e r tie n d o e l y e s o d e s le íd o s o b re e l n e­g a t iv o p ro d u c id o c o n la e s te a r in a . C o lo c a d o e l m o ld e d e y e s o en u n a c a ja d e m a d e ra y e n v u e lto en a lg o d ó n en rama^ s e le re m ite á d is p o s ic ió n d e l ju e z .

E l m ism o p r o c e d im ie n to se e m p le a p a ra o b te n e r la s h u e lla s d e ja d a s p o r la s a rm a s ú o tr o s o b je to s , u n a lla v e , un b a stó n , e tc .

C u a n d o la h u e lla se e n c u e n tra en un te r r e ­n o m u y b la n d o ó m u y te n u e , c o m o su ce d e c o n la h u e lla d e ja d a en e l p o lv o d e l ca m in o , é s ta se c o p ia y se s a c a c o n un n e g a t iv o q u e se o b tie n e c o n la g e la tin a ; p e ro e s ta su sta n ­c ia tie n e e l in c o n v e n ie n te d e re tr a e r s e a l p o c o ra to , p o r lo q u e se a c o n se ja s a c a r e l p o s it iv o lo m ás p r o n to p o s ib le en y e s o . P a ­ra s a c a r e l m o d e lo ó c o p ia se e c h a la g e la ­tin a r e b la n d e c id a en a g u a c a lie n te en la c a v id a d d e la h u e lla , y u n a v e z cu a ja d a , co n un c u c h illo se d e s p re n d e p o r to d o e l c o n t o r ­n o y se le v a n ta , q u e d a n d o a sí en la p a rte in fe r io r im p re sa la h u e lla c o n to d o s su s a c ­c id e n te s j p o rm e n o re s . P a ra o b te n e r e l p o ­s it iv o e n y e s o se d e s líe é s te e n u n a c a ja d e m ad era , y cu a n d o e stá p a ra cu a ja rse , se a p lic a e n cim a la p ie z a d e g e la tin a , d e sp u é s d e h a b e r la u n ta d o d e a c e ite p o r la c a ra q u e tie n e la h u ella; se a p r ie ta c o n e l y e s o , y una v e z s o lid ific a d o é ste , se s a c a e l n e g a t iv o d e la g e la t in a q u e d a n d o e l p o s it iv o en e l y e s o .' E n a lg u n a s p a r te s se a p lic a ta m b ié n la

g e la tin a s o b r e e l h ie lo , p a ra o b te n e r un n e ­g a t iv o d e la s h u e lla s ; a u n q u e en e s te - c a s o v e rd a d e ra m e n te ca s i no se n e c e s ita u sa r la g e la tin a , p u e s la m ism a n ie v e la s en d u re ce .

E s t o s v e s t ig io s p u e d e n s e r á v e c e s de g ra n u tilid ad . E n n u e stro p a ís e s b ien c o n o ­c id o e l h e c h o d e h a b e rs e d e s c u b ie r to un c r i­m in al p o r la s h u e lla s d e l c a b a llo q u e e sta b a h e rra d o , p u e s en e l p a r a j; d o n d e tu v o lu g a r e l c i im e n r.o h a b ía m ás q u e d o s c a b a llo s h e rra d o s .

5.“ Determinar si las lesiones que presenta e l cadáier han sido hechas durante la vida ó después de la muerte.— L a sum a im p o rta n c ia d e e s ta c u e st ió n s e c o m p r e n d e , p u e s unas h e r id a s p u e d e n se r h e c h a s a n te s de la m u e r­t e y o tra s d esp u és. S u p ó n g a n s e los d o s c a so s s ig u ie n te s : un in d iv id u o q u e se ca e d e un b a lc ó n y d e sp u é s se le e n c u e n tra c o n h e ri­das; y un in d iv id u o á q u ien se m a ta y d e s ­p u é s se le a rro ja de un b a lc ó n s im u la n d o un s u ic id io . E n e s to s d o s c a so s h a y q u e d e te r ­m in a r c u á le s le s io n e s han s id o h e c h a s p r i­m e ro y cu á le s d e sp u é s d e la m u erte .

¿P ueden lo s p e r ito s r e s o lv e r e s ta c u e s ­tió n co n la c la r id a d q u e la s le y e s n ecesitan ? E n g e n e ra l, sí; e n p a rt ic u la r , n o. S i e s ta s le ­s io n e s h an s id o re a liz a d a s cu a tr o ó c in c o h o ra s d e sp u é s d e la m u erte , es fá c il d istin ­g u ir la s d e la s r e c ie n te s p o r c a r a c te r e s d e ­te r m in a d o s; p e r o s i se tr a ta d e le s io n e s in ­fe r id a s e n un e s p a c io d e tiem p o - m en o r, la c o s a n o e s tan fácil; p. ej., cu an d o e lla s han s id o h e c h a s u n a h o ra ú h o ra y m e d ia d e s ­p u é s d e l fa l le c im ie n to d e la v íc tim a .

Revista Nacional de Literatura y Ciencias Sooiales

C o n to d o , h a y m u ch o s s ig n o s q u e p e rm i­te n a p r e c ia r y d is tin g u ir e s ta s d iv e rs a s c la ­s e s d e les io n es. L e s le s io n e s en e l in d iv id u o v iv o tie n e n e l c a r á c t e r s ig u ie n te : la s a n g r e q u e d e e lla s em a n a se c o a g u la d e sp u é s d e la m u erte , in filtrá n d o se e n lo s te jid os; m ie n ­tra s q u e en u n a h e r id a in fe rid a d e sp u é s d e la m u e rte , la s a n g re co rre ; e n la p e r s o n a v i­v a lo s b o rd e s ó la b io s d e la h e r id a se re tra e n , m ie n tra s q u e en e l m u e rto no e x is te e sa r e ­tr a c c ió n d e lo s te jid o s ó s i e x is te es p o c o a p a r e n te y e n é rg ic a , d e s a p a r e c ie n d o si la h e rid a h a s id o in ferid a d e sp u é s d e a lg u n a s h o ra s d e a c a e c id a la m u e rte . S e c itó en c la ­se e l c a s e d e q u e en un h o m ic id io se d e te r ­m in aro n co n to d a e x a c titu d lo s d a to s d e las d iv e rsa s le s io n e s , m e rc e d á la m a y o r ó m e­n o r re tra c tib ilid a d d e la s h e r id a s , p u e s e n ­c o n tra ro n d e sd e lo s b o r d e s m u y c o n tra íd a s h a sta la s d e a b e rtu ra s s u p e r fic ia le s sin e l m e n o r s ig n o d e e s a m ism a r e tra c tib ilid a d , s ie n d o lisa s c o m o u n a su p e r fic ie . P o r c o n ­s ig u ie n te , cu a n d o h a y v a r ia s h e rid a s s e d e ­te rm in a ría c u á le s h ab ían s id o h e c h a s p rim e ro y c u á le s d e sp u é s de la m u erte .

O t r o d a to e s ta ría en la e x is te n c ia ó n o e x is te n c ia d e h e m o rra g ia s . L a h e r id a e n u n a p e r s o n a v iv a p ro d u c e , si in te r e s a la s a r te ria s , u n a h e m o r r a g ia im p o rta n te , lo q u e no s u c e ­d e e n e l c a s o c o n tra r io , p o r la s e n c illa ra zó n d e q u e e n e l in d iv id u o m u e rto d e s a p a r e c e p o r c o m p le to la s a n g r e d e lo s c o n d u c to s a r te r ia le s , d a n d o e s to lu g a r á q u e a n t i­g u a m e n te s e c r e y e r a q u e la s a r te r ia s n o c o n te n ía n s a n g re , c o n s id e rá n d o s e la s co m o m e ro s c o n d u c to s r e s p ira to r io s . S u p ó n g a s e e n to n c e s q u e una a r te r ia p e q u e ñ a c o m o la in te r c o s ta l h a y a s id o d iv id id a p o r u n a h e rid a y q u e s e e n c u e n tra g ra n h e m o r r a g ia in tern a; e s to h a rá s u p o n e r n e c e s a r ia m e n te q u e e sa h e r id a h a s id o p ro d u c id a en v id a ; m ie n tra s q u e to m á n d o s e e l c a s o c o n tr a r io , e l q u e se h a y a c o r ta d o u n a a r te r ia im p o rta n te y q u e n o se e n cu e n tre n v e s t ig io s d e h e m o rra g ia : to d o e llo c o n d u c irá á d e c la r a r q u e e sa h e ­r id a h a sid o p r o d u c id a e s ta n d o y a m u e rto e l a g r e d id o .

C u a n d o lo s m ie m b ro s c o r ta d o s d e un v i­v o s e a rro ja n a l a g u a , p a lid e c e la h erid a ; p e ro , s e g ú n D e v e r g ie , v u e lv e á r e c u p e r a r e l c o lo r q u e te n ía en v id a , cu a n d o se le s s a c a fu era d e l líq u id o .

111Manchas de sangre.— I. — E s m ás d ifíc il

d e lo q u e se c r e e c o m e te r un c r im e n sin d e ­ja r v e s t ig io s d e n in g u n a e s p e c ie , p u e s p o r m á s p r e c a u c io n e s q u e se to m e n , s ie m p re p o r a lg ú n d e scu id o in e x p lic a b le y p r o v id e n ­cia l, q u e d a n s ig n o s , c o m o m a n c h a s d e san ­g r e , e tc , y a s o b r e e l c u e rp o , y a s o b r e lo s o b ­je to s , d e b id o á la p r e c ip ita c ió n c o n q u e se p ro c e d e ; d e ta lle s , q u e , si b ien in s ig n ific a n ­te en a p a r ie n cia , so n la b a s e s o b r e q u e d e s ­c a n s a la a v e r ig u a c ió n to d a d e l d e lito . Y e s ­to n o p u e d e s e r d e ' o tr a m an era: la p e rso n a q u e h ie r e á .o tr a c o n un a rm a q u e o b r e d i­r e c ta m e n te se e x p o n e á q u e e l im p u lso d e la m ism a sd tig re lo a lc a n c e y lle g u e á m an ­c h a r le la s ro p a s y e l c u e rp o , s ie n d o e s to in e ­v ita b le , y s in o q u e lo d ig a n lo s m é d ico s en la s o p e ra c io n e s y a u to p s ia s , lo s cu a le s , á p e ­s a r d e la s p r e c a u c io n e s , á d u ra s p e n a s se

e s c a p a n d e lo s v e s t ig io s q u e e sa s c a rn ic e r ía s o r ig in a n . T c .y lo r c ita e n tr e o tr o s e l c a s o d e un F u la n o q u e p a ra e je c u ta r e l cr im e n se d e sn u d ó c o m p le ta m e n te á fin d e q u e su s ro ­p a s n o le d e la ta se n ; p e r o tu v o la p o c a s u e r­te d e q u e a l v e s t ir s e , su c u e r p o m a n c h a d o d e s a n g r e m a n c h ó á su v e z la s ro p a s , p u e s n o d ió en la v a rs e d e s p u é s d e l c r im e n . C o n e s to se v e q u e to d a s la s p r e c a u c io n e s son p o c a s e n e s to s ca so s .

L a s m a n c h a s d e s a n g r e so n , p u e s, un d e­ta lle p r e c io s o p a ra la a v e r ig u a c ió n d e e s o s h e c h o s . E n la v e r if ic a c ió n d e la s m a n ch a s se in te r v ie n e d e d o s m a n era s: u n as v e c e s e l J u ez la s bu sca; en o tra s , o rd e n a a l p e r ito q u e la s b u sq u e .

E l e s tu d io d e la s m a n c h a s d e s a n g r e t ie ­ne lu g a r, ó y a en e l e x a m e n d e lo s lu g a re s , o ra en lo s in d iv id u o s y en lo s o b je to s q u e á é s to s p e rte n e z c a n , y a en la s a rm a s q u e se su p o n e n h an s e r v id o p a ra e s o s o b je to s ; en u n a p a la b r a , se e s tu d ia n en to d o a q u e llo q u e h a ro d e a d o a l cr im en .

J osé FERRANDO Y OLAONDO.

( Contimiará.)

S u e l t o sH a m e re c id o lo s h o n o r e s d e la r e p r o d u c ­

c ió n en « L a L ib e r ta d E le c t o r a l > d e S a n ­t ia g o , un o d e lo s m ás re p u ta d o s d ia rio s d e C h ile , e l e s tu d io q u e a c e r c a de la p e rs o n a lid a d d e d o n M ig u e l L u is A m u n á te - g u i y d e su o b ra « C u a d r o s A n t ig u o s > p u ­b lic ó , en un o d e lo s ú ltim o s n ú m e ro s d e la REVISTA, C a rlo s M a rtín e z V ig i l .

Á p r o p ó s ito ta m b ié n d e e s e tr a b a jo , e l D e c a n o d e la F a c u lta d d e F ilo s o fía y H u m a­n id a d e s d e S a n tia g o , d o c t o r d o n D o m in g o A m u n á te g u i S o la r , h ijo d e a q u e l in s ig n e p u ­b lic is ta y h o m b re p ú b lic o , y á su v e z d istin ­g u id ís im o e s c r ito r , h a d ir ig id o á n u e stro c o m p a ñ e r o de R e d a c c ió n u n a a te n ta ca rta , d e la cu a l to m a m o s e l s ig u ie n te p árra fo :

« H e le íd o c o n m u ch ís im o c u id a d o a lg u ­n o s d e lo s a r tíc u lo s , s o b r e to d o , c o m o p u e ­d e V d . s u p o n e r lo , e l d e d ic a d o á t C u a d ro s A n t ig u o s >, y h e q u e d a d o p e rsu a d id o , c o n ta n b r illa n te m u e s tra , d e q u e en C h ile no e s tá b a m o s e n g a ñ a d o s cu a n d o cr e ía m o s q u e lo s e s c r ito re s d e l U r u g u a y h o n ra n á n u e s ­tr a A m é r ic a . P o r m i p a rte , q u e d o lle n o de a g ra d e c im ie n to p o r lo s b e n é v o lo s c o n c e p ­to s q u e V d . e m ite s o b r e e l lib ro d e m i p a ­d re. »

# * •

Á la persona que se ha servido rem itir á esta redacción la poesía suscripta con el pseudónim o d e Oromaya Ayamoro, le ro g a­mos se digne darnos su verdadero nombre, pues el p rogram a d é la REVISTA ha adver­tido oportunam ente que ésta no publicaría sino trabajos inéditos firmados con el nom ­bre de sus autores.

Tlpo-Lit. ORIENTAL; C. Treinta y Tres,U2—Monteyldeo