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6 7 Séptimo{Sentido} 4 DE DICIEMBRE DE 2011 4 DE DICIEMBRE DE 2011 Séptimo{Sentido} En este país, donde las matemáticas son vistas como arte abstracto, existe alguien que se regodea en ellas y busca inculcárselas a los futuros dirigentes científicos de El Salvador. Desde hace 14 años, Carlos Canjura dirige Jóvenes Talento. Forma a algunos de los jóvenes con más altos promedios y coeficientes del país. Una entrevista de Carlos Chávez FOTOGRAFÍAS DE VÍCTOR PEÑA SE TIENE QUE HACER GOZAR AL NIÑO DE RESOLVER UN PROBLEMA SOLO {Carlos Canjura}

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6 7Séptimo{S en t i do } 4 DE DICIEMBRE DE 2011 4 DE DICIEMBRE DE 2011 Séptimo{S en t i do }

En este país, donde las matemáticas son vistas comoarte abstracto, existe alguien que se regodea en ellas y

busca inculcárselas a los futuros dirigentes científicos de ElSalvador. Desde hace 14 años, Carlos Canjura dirige

Jóvenes Talento. Forma a algunos de los jóvenes con másaltos promedios y coeficientes del país.

Una entrevista de

Carlos ChávezFOTOGRAFÍAS DE VÍCTOR PEÑA

SE TIENE QUEHACER GOZAR

AL NIÑO DERESOLVER UN

PROBLEMA SOLO

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esde hace 14 años, Carlos Mau-ricioCanjuradirige aalgunosdelos jóvenes más “avispados”deEl Salvador. Niños y adolescen-tes –dueños de altísimos pro-medios y coeficientes intelec-

tuales– a los que, previo a un examen de ad-misión, los zambulle en las aguas de las mate-máticas, la física, la química y la biología. Suprograma se llama Jóvenes Talento. Y lo quese busca, dice, es crear un motor para estepaís. Crear una futura élite que lo dirija a tra-vés de la ciencia y la tecnología. Una tarea quese supone difícil. “¿Por qué esta sociedad go-za de que el ‘Mágico’ González haya entrado auna élite del fútbol? ¿Por qué no gozar de po-der entrar a una élite de físicos-matemáti-cos? Ya tenemos jóvenes que destacan a es-cala iberoamericana en química, física y ma-temáticas, ¿cuánta importancia le está dan-do esta sociedad a ellos?”, se pregunta.Carlos Mauricio Canjura platica mientras ca-mina por el largo pasillo de la única facultadde matemáticas del país, la de la Universidadde El Salvador. Hace más de 20 años, solíatransitar por aquí mismo, cuando era un estu-diante deingeniería electromecánica.Eso an-tes de marchar a Suiza, para obtener el gradode máster en matemáticas. Ahora, su centrode operaciones es este edificio que parece an-clado en 1970, “estas condiciones son tam-bién un reflejo de lo que esta sociedad aspirapara su universidad”.Canjuranotieneempacho endecircosas.Diceque trabaja con el mismo presupuesto que elGobierno mantiene desde hace 12 años parael programa, $300,000. Que el sistema edu-cativo nacional está como está por “el peca-do” de descuidar la capacitación de los maes-tros. Que es un error exigir a un alumno queaprenda algo, cuando debe ser estimulado.Quese lesasignanmuypocas becas,solotres,para estudiar en el extranjero. Que algunoshan tenido que emigrar a Estados Unidos. Quees una lástima que el país no aproveche el ta-lento de estas “luminarias”. Este año, JóvenesTalento cosechó más logros. Muchos de losjóvenes formados han merecido medallas porser los mejores (en física, química o matemá-ticas) de Centroamérica e Iberoamérica. “Es -te año, Gerardo Urbina ganó plata en mate-máticas. Y oro, en química. Lo hizo a escalaiberoamericana. No es raro que jóvenes comoél superen a nuestros maestros.” A sus 65años, Canjura asegura que si El Salvador qui-siera impactar “fuerte” en su futuro, deberíaapostar más por la ciencia y la tecnología, “elproblema no es que el país sea pequeño, esque nos vemos pequeños. Hay demasiadascosas que se podrían hacer aquí”.

¿Cómo se le halla el gusto a las matemáticas?Es necesario valorar los ambientes que lo propician.Una persona puede tener una condición natural pa-ra la matemática –el fútbol o la música– pero si noexiste un ambiente apropiado, esa condición innataresulta en nada. Es importante crear los espaciosadecuados para desarrollarse. No es indispensabletener talento. No es indispensable tener el gran ta-lento en la música para buscar ser músico.

Trabaja con algunos de los jóvenes con mayorcoeficiente intelectual del país. Desde 1997 in-culca matemáticas, incluso física, química y bio-logía. ¿Cuál es la parte más difícil de su trabajo?A decir verdad, lo difícil es hacer comprender a esta so-ciedad la importancia del desarrollo científico y tecno-lógico en el avance de los pueblos. Cuando no se tieneesa comprensión es una tarea muy delicada. Tenemoshistoria acumulada de no concederle importancia a laciencia, a las matemáticas, a la química. Aunque no esun tema particular de El Salvador, aquí es socialmenteaceptado que la gente no tenga cultura científica. Ese esel más grande reto que tenemos, y no es nada fácil.Cuandouno veel plandeestudio nacional,uno leequées lo que aquellos que están conduciendo al país aspi-ran para el ciudadano del futuro.

¿Qué le falta o le sobra al sistema educativo en elcampo de las matemáticas? ¿Está bien seguirusando la aritmética y el álgebra de Baldor?El libro de Baldor es una forma de presentar el álgebraque está bastantesuperada por los quehan trabajado ladidáctica matemática, el álgebra. Sin embargo, el libroestá presente en el sistema educativo nacional y eso re-fleja lo poco que se ha avanzado en la formación de losmaestros. Yo soy de los que cree que los textos del siste-maeducativo losdefine elmaestro.Y hayque hacerunesfuerzoextraordinario porponera nuestrosmaestrosa un nivel que permita que a nuestros jóvenes les co-miencen a gustar las matemáticas. Hay esfuerzos pero,a mi criterio, demasiado limitados.

¿Ha visto ganas de querer mejorar?Yo sostengo que hay un problema de velocidad. Hayun problema de una respuesta rápida a un problemahistóricamente difícil. El sistema educativo –no soloen las áreas de matemáticas, sino en cualquier espe-cialidad– tiene como techo la formación de susmaestros. La formación del maestro es un tema quefue muy descuidado durante varias décadas. Y esepecado lo estamos pagando en el sistema educativo.Usted ve el último resultado de la PAES, usted no pue-de leerlo como resultado de los dos últimos años delgobierno de turno. Es resultado de doce años de es-cuela y de otros factores.

¿Cómo empezó Jóvenes Talento?Estoempezó conmuy pocagente.Empezamos en1997,con 30 estudiantes. Y el objetivo era prepararlos paraparticipar en la XII Olimpiada Iberoamericana de Mate-máticas. Esa participación la hicimos con una prepara-ción muy escasa, prácticamente de un programa sabati-no de junio a septiembre. La suerte es que el grupo de es-tudiantes se entusiasmó con el tipo de preparación, y alregresar de la Olimpiada continuamos el esfuerzo.

¿En 1997 no consiguieron ninguna medalla?Nada. Pero sí habíamos dado el salto. Previo a 1997, ElSalvador había tenido resultados muy bajos, andabaentreelúltimo ypenúltimolugar.En 1997quedamosenla cuarta posición, pero de abajo para arriba. Estamoshablando de 22 países, hablamos de la posición 19-22.Lo importante es que el grupo de estudiantes me pidióque continuáramos el esfuerzo, que mantuviéramos elprograma de manera sistemática. En 1998, ya hubo re-sultados.Logramos serelpaíscon mayorprogresorela-tivo. En las olimpiadas siempre se premia al país que evi-

dencia un progreso con relación a sus últimos tres años,ElSalvadorvenía demuyabajo.Yen 1998quedamosenposiciónnumero11,en Iberoamérica,queescomoestarjusto a la cintura de la tabla.

¿Y ahora en qué posición anda El Salvador?En Iberoamérica, estamos en la posición sépti-ma-octava. Allí hemos andado en los últimos años.En 1999, junto a Costa Rica, impulsamos la creaciónde una olimpiada de Centroamérica y el Caribe paratener otro espacio de formación para menores de 16años. Allí participan 12 países. México, Cuba, Repú-blica Dominicana, Colombia, Venezuela...

¿Y quién lidera esas olimpiadas?En la centroamericana y del Caribe está arriba Méxi-co, Cuba, El Salvador... Tenemos bastante rato de es-tar la zona de tercero-cuarto lugar. En cuanto a Cen-troamérica, somos los primeros.

¿Incluso antes que Costa Rica?Antes que Costa Rica, nosotros. Pero este esfuerzoarrancó en matemáticas. Y el programa Jóvenes Talen-tos es más ambicioso, más integral. Es un intento porincidir en eldesarrollo de la culturacientífica nacional.En la iniciativa se ha sumado la física, la química y labiología. Y en los eventos internacionales, El Salvadorya tieneresultados internacionales.Ahora cuandoveouna prueba, ya quedóprobado que nuestros estudian-tes pueden entrar a la élite iberoamericana. Pero igualempiezo a preguntarme cosas.

¿Qué se pregunta?¿Porqué gozamostanto queel“M á g i co ”González ha-ya entrado a una élite? ¿Por qué no podemos aspirar aentrar a una élite de matemática, física o química? ¿Porqué nosotros nos alegramos de que Fito Zelaya andeallá en Rusia? ¿Y por qué no nos preocupa que haya es-tudiantes brillantes en matemáticasque tienen que ir-se para EstadosUnidos? ¿Por qué lagente está conten-ta de que Fito Zelaya esté en Rusia, en vez de estar aquí?¿Dónde está la diferencia? Todo está en la manera devernos en la sociedad.

¿Será que los salvadoreños le hemos apostado aque podemos destacar solo en labores físicas y po-co menos en las intelectuales?Cuando Gerardo Urbina sacó el oro iberoamericano–que era algo mucho mejor que estar hablando de la pla-ta de Eva María Dimas–, porque con Gerardo se estabadiciendo “este muchachoes elquintoestudiante, deesaedad, en el área de química a escala iberoamericana”;incluso así, saliómedia paginita, media página.Y cuan-dometeungolFitoZelaya, saleunapáginaentera,porlomenos. Y no es que no valga Zelaya, vale, claro. Lo queno vale es que aprecien tanto lo físico, porque parece quelo que avalanes el circo enla sociedad. Eso tieneque vercon cómo nosvemos nosotros mismos, yqué aspiramoscomo sociedad.

¿Usted tiene hijos?Tengo tres, y han pasado por aquí...

¿Les exigió que sacaran buenas notas?No, las aliento. No es militarmente que se piden esas co-sas. Se les estimula para que las hagan. Esa es una de lasgrandes debilidades de nuestro sistema, no se trata deque el papá le va a exigir al niño. El maestro tampocopuede exigir.El papelde amboses estimular.Si aun hijole gusta cualquier área de conocimiento, cualquier de-porte, cualquier cosa que le guste, los padres y los maes-tros tienen la obligación de estimularlos a que se desa-rrollen en esas áreas. El auténtico conocimiento –porejemplo, enfrentarse con la ciencia– obliga a la gente aser honrada. El rigor que se plantea en la ciencia obliga apasarlo todo por un tamiz de si esto es falso o verdadero ybuscar formas de demostrarlo. El desarrollo de capaci-

dad de lógica, capacidad de argumentación, desarrollodeperseverancia, dela disciplinaaparececuando estasetrabaja. La inspiración aparece cuando se trabaja. Pero sila escuela solo trabaja cuatro horas y después el niñopuede hacerlo que quiera,ver televisión, agarrarel Nin-tendo, allí está lo que la sociedad quiere.

A título personal, ¿qué cree que pasó en la últimaPAES? ¿Por qué bajó el promedio nacional?No tengo datos para explicarlelas razones. Lo que puedodecir es que lo que se evalúa es algo muy instantáneo. Yeste tipo de exámenes no puede reflejar, del todo, quétan mal estamos. Si nos registramos un poco más y nospreguntamos ¿cuáles son las competencias que nues-tros jóvenes han desarrollado?, la respuesta de la situa-ción podría ser muchísimo peor. La verdad, yo confíomuy poco en notas y promedios nacionales. Claro que

dice algo. A mi criterio, qué puede hacer un estudiantequé salio mal o regularmente bien. Yo no podría decirlo.

¿Por qué la mayoría de jóvenes fracasa en mate-máticas?No hay que olvidar qué significa que la gente repruebe enmatemáticas, ¿qué quiere decir esto? Que nuestro sis-tema educativo muestra una evidente debilidad. Laplanta docente nacional, loscontenidos que se desarro-llan,lasmetodologías queseutilizan,los textosquean-dan circulando, los niveles de inversión que tenemoscomopaís enelcampo educativo,todoestoabona aquelos resultados sean bajos. Y leinsisto, el fenómeno de losbajos resultados no es un fenómeno salvadoreño.

¿Es mundial?Sí. Y hay algo que hay que tomar en cuenta –a la hora deformar maestros–es que las matemáticas tienen su di-ficultad propia. Y que mientras no se aborde desde supropia disciplina es muy difícil que los problemas seanresueltos. En otras palabras, hay que asegurarse de quelos maestros alcancen un buen nivel en matemáticaspara atender esas debilidades en los jóvenes.

¿Es cierto que en su programa, el de Jóvenes Talen-to, muchos niños llegan a saber más que el maes-tro?Pues esa es la inspiración de un auténtico sistemaeducativo: que el estudiante supere al maestro.

¿Entonces es cierto que eso pasa aquí?Pasa, pasa, pasa... Nosotros hemoslogrado formar a es-tudiantes con un buen nivel. Recién ganamos una me-dalla de oro, en el área de química, a escala iberoameri-cana. No es ninguna sorpresa que uno de estos jóvenespueda superar, en un campo, a un profesor de química.

¿En dónde aparecen los mejores matemáticos delpaís? ¿De qué colegios o lugares del país vienen?Afortunadamenteestán distribuidosal azar.Aparecenestudiantes excelentes del colegio Externado de SanJosé, del Liceo Salvadoreño, de la Academia BritánicaCuscatleca... Y hay estudiantes de cantones. Estu-diantes que no tienen un ambiente favorable para de-sarrollar su potencial. Nosotros hemos tenido estu-diantes con excelentes resultados internacionalesprovenientes de escuelas con muy baja condición.

¿Se necesita un entorno especial para pensar?¿Tiene la UES los lugares más adecuados?Los ideales talvez no. Pero sí tiene sus espacios, se-ría preferible tenerlos en un ambiente más favora-ble, pero todo esto responde a lo que el país aspiracomo sociedad, no como grupo social o grupo eco-nómico. Esto es lo que aspira el país para su univer-sidad pública. Esta es la expresión de lo que se aspi-ra, a futuro, como sociedad.

En internet, hay colgadas algunas críticas a su progra-ma. Hay quien dice que está lleno de niños que son

CUANDO UNO VE EL PLAN DEESTUDIO NACIONAL, UNO LEE QUÉ ES

LO QUE AQUELLOS QUE ESTÁNCONDUCIENDO AL PAÍS ASPIRAN

PARA EL CIUDADANO DEL FUTURO.”

¿POR QUÉ NOS ALEGRA QUE FITOZELAYA ANDE ALLÁ EN RUSIA? ¿YPOR QUÉ NO NOS PREOCUPA QUE

ESTUDIANTES BRILLANTES ENMATEMÁTICAS TENGAN QUE IRSE A

ESTADOS UNIDOS?”

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“explotados”por sus padres. Que les exigen buenasnotas, para después vivir de ellos...Es legítimo queel padre aspire aque su hijo seprepare almejornivel.Yomásbiencreo quelocontrarioeslocriti-cable. Abunda el tipo de padre que solo llega a dejar al ni-ño a la escuela, para que se lo tengan allí todo el día. Esoes frecuente en nuestra sociedad. Aquellos padres quesaben quién es su maestro, que saben qué le enseñan,son escasos. Y esa es otra debilidad de nuestro sistemaeducativo, porque la educación de los niños no empiezaenlaescuela, empiezaenlafamilia.Ysi lospadresnoes-tán atentos a qué es lo que pasa en la formación de sushijos, estamos en problemas.

El programa Jóvenes Talento dura 30 sábados, el pro-grama va de 9 de la mañana a 4 de la tarde. Mucha gen-te critica que es una jornada que raya en el sacrificio.Hay cosasque habría quepreguntarse, ¿cómo esque laescuela o instituto de mi hijo trabaja tan poco? ¿Por quétrabajamos tanpoco? Loschinos ylos japonesestraba-jan bastante más que acá. Solo revise los horarios de lasescuelas internacionales. Por ejemplo, en la AcademiaBritánica entran a las 7 y media de la mañana y salen alas 2. ¿Cuánto trabaja la escuela salvadoreña? Entran alas 7 y media y a las 12 van para fuera. Allí hay dos horasdediferencia, pordía.Y sison200días alaño,que esloque tiene el calendario escolar salvadoreño, estamoshablando de 400 horas de diferencia. Y cuando ustedlopone alolargo delavida escolar–estáhablando de12años de escuela hasta llegar de bachiller– está hablan-do de 4,800 horas de diferencia de formación. Enton-ces no hay de qué asombrarse porque uno puede salircon competencias superioresa las del otro.Porque ob-viamente el trabajo hace la diferencia.

Sin embargo, en internet muchos critican o conside-ran que el programa es un prolongado sacrificio. Qui-zá un sacrificio mental para unos chicos que podríanestar haciendo cualquier cosa, menos números.En vez de imaginarse que el niño se está torturando–porque hay unas versiones que dicen que el niño quetrabaja ocho horas es pobrecito– deberían enseñarleque la perseverancia es uno de los grandes valores.¿Cómo es que creemos que en fútbolun niño no se va aaburrir? ¿Y por qué enquímica sí? Un verdadero hom-bre de ciencias puede pasar el día entero, hay experi-mentos que le consumen las 24 horas y allí está. Si a míme gustan las matemáticas, puedo pasar todo el día es-tudiándolas. Es más, uno de los primeros indicadoresde que los niños van bien en el aula es dejarle problemascomplejos y percatarse de que pasan tres horas y allí es-tán haciendo su trabajo. Sin que el profesor los vigile,sin que los supervise, entre comillas. Cuando el estu-diante está estimulado, puede pasar horas. Pregúnte-les a los niños si esto es en realidad un sacrificio.

Cada diciembre, hay un curso extra, el FDTC (FuturosDirigentes Técnicos Científicos). ¿No asisten todoslos de la academia sabatina a él?Notodos.A lolargodelaño,nosotros lospreparamosenmatemáticas, física, química y biología, tratando defortalecer esas áreas. Pero en el curso se va viendo cuál esel desempeño y conducta como estudiantes. Hay unacantidad de variables que tomamos en cuenta para decir“este estudiante puedesoportar el curso defin de año”.El curso de fin de año esdistinto al sabatino. Vienen a las8 dela mañana,y sevan a las4 dela tarde.Reciben ochohorasdiariasde clases,tienenunexamen diario,unata-rea diaria y se ven sometidos a un trabajo intenso duran-te tres semanas. Un estudiante que no tenga la disciplinay los hábitos pues no lo seleccionamos.

El año pasado, ¿cuántos jóvenes tuvo el programa?Aproximadamente 360 estudiantes en la academiasabatina. Este año, fueron entre 360 y 370 jóvenes,entre la sede capitalina y la de Santa Ana.

¿Será que hay muchos más jóvenes con alto rendi-miento en el país? ¿Quizá hay muchos que ni si-quiera hacen el examen para entrar?¡Exacto! Hay muchísimos jóvenes, con alto rendimien-to, que ni siquiera se someten al examen de admisión.Tienen otras preferencias: música, fútbol, hay quienesno desean sacrificar el día sábado, y otros que disfrutanpasar haciendo ejercicios un fin de semana. Son opcio-nes que reflejan por dónde va la preferencia de la gente.Hay estudiantes aquí que están también en la sinfónica.

¿Y la tendencia es que cada año aumente el núme-ro de jóvenes en el programa?No, no ocurre eso. Tenemos un presupuesto limitadodesdeel año2000. Doceaños después,tenemos elmis-mo presupuesto.

¿Y de cuánto es?$300,000 desde el año 2000.

Si contara con más recursos, ¿podría conseguir sufi-cientes docentes para atender a más jóvenes?A los estudiantes o los medallistas del programa los in-corporamos. Son los que nosotros llamamos “educado -res modelos”. Los estudiantes que a escala iberoameri-cana o centroamericana ganan una medalla, nosotroslos ponemos como educadores modelo. Justamentequeremos que sean modelos para los otros niños. Los jo-vencitos se van desarrollando, asu vez, por estudiantes.Luego, algunos de estos estudiantes se van a estudiarfuera del país. Y los que no escogemos, los que no sonolímpicos, son escogidos porque tienen promediosarriba de 8 en su carrera.

¿Cuántas becas universitarias, se asigna cada añoa estos jóvenes de alto rendimiento, algunos me-

dallistas iberoamericanos?Ese es un problema serio, un problema de país. Es unalástimaqueun paísnopuedaaprovechar todoelpoten-cial que tienen estos jóvenes cuando se forman comoprofesionales. Tenemos un espacio reducido en términode becas:solo tres, por añoal extranjero. Y hayotros jó-venes que participanen becas nacionales. Siel país qui-siera impactar fuerte debería crear núcleos de forma-ción de profesionales en ciencia y tecnología para podersostener el desarrollo nacional. Y tenerlos agrupados.

Después de graduados como bachilleres, ¿cómo les vaa los que estuvieron en Jóvenes Talento? ¿Tienen em-pleo? ¿Están bien ubicados?Sí, están bien ubicados. Hay muchos que han hechomaestrías en el área de ingeniería, hay muchos que hi-cieron sus estudios en el área de computación. Hay unoque se está doctorando en el área de computación.

¿Y habrá de los que mejor se fueron a Estados Unidos?Hayestudiantes nuestrosquese hanidoa EstadosUni-dos a hacer matemáticas. ¡Es una lástima que la socie-dad no pueda acogerlos! Y no tiene nadita que ver queseamos un país chiquito, es que nos vemos chiquitos co-mo sociedad. Si no, haga las cuentas, usted ha visto fut-bolistas holandeses en Alemania, Inglaterra, España,donde quiera hay futbolistas allí. Y Holanda tiene40,000 kilómetros cuadrados. ¿Y de dónde le salentantos futbolistas? ¡Es que tienen una escuela seria!Cuando usted viaja por Holanda, ve que hay tantas can-chas de fútbol como postes. Aquí se puede, pero tene-mos que hacer el espacio para estos jóvenes. Confiar enque ellos pueden alcanzar un alto nivel, y potenciarlospara que hagan su labor aquí. Mire a ANDA, ¿usted havisto alguna vez un estudio de expertos salvadoreños?Cuando necesitan un estudio, recurren a extranjeros.

¿Qué recomienda para que la enseñanza de las mate-máticas sea cautivante y eficiente, sin sacrificar rigor?Hay una creencia de que las matemáticas se puedeaprender sin estudiarla, solo viendo al profesor. Y di-cen que esto solo será asimilado mientras el profesorexplique bien. La verdad es que mientras nosotros nonos habituemos a enfrentar al niño con la resoluciónde problemas, vaa ser muy difícil queel niño desarro-lle el gusto. El hombre, en general, goza de sus resulta-doscuando esproducto desu propioesfuerzo. Nohaynada más gratificante para alguien que hace matemá-ticas que cuando hace la demostración de un teoremapor su propia cuenta, aunque este haya sido demos-trado hace 300 años o más. Pero si él lo desarrolla porsupropiacapacidad,el estímuloquetieneparaconti-nuar en ese trabajo es enorme. Se tiene que hacer go-zar al niño de la satisfacción de resolver un problemaso l o.

TENEMOS QUE HACER QUE ESTOSJÓVENES HAGAN SU LABOR AQUÍ.

PERO MIRE A ANDA, CUANDONECESITAN UN ESTUDIO,

RECURREN A EXTRANJEROS.”

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