El CañicoNº 12 - Agosto ‘10

En este número...

Conoceremos más de Daniel AndrésCentenario de Miguel HernándezPregrinamos SantiagoVolvemos al pueblo tras muchos añosConoceremos otros pueblosRecordamos a nuestro amigo desparecidoAprenderemos cosas nuevas ...

... y más

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sumario1- Sumario2- Editorial3- El personaje: Daniel Andrés Andrés5- Sesnández tiene otra centenaria6- Impresiones de la visita a mi pueblo8- Ventana de Actualidad9- En el centenario de Miguel Hernández11- Peregrinos a Santiago14- Diploma15- Imágenes17- En memoria de nuestro amigo Geñin19- La huerta de Teresa20- El apellido Caballero21- Al encuentro de otros pueblos23- Rincón poético21- La hermosura de lo pequeño25- Un libro para disfrutar26- La conservación del Medio Ambiente27- El Molino28- Para pasar un buen rato29- Sesnández en Fiestas

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Vivimos días de sosiego. ¡Qué fortuna! De vez en cuando,dejar “el mundanal ruido” y acercarnos al remanso de pazde Sesnández, oxigena la vida. Se mastica la amistad y lafamiliaridad. Los jóvenes habláis de buen rollo. ¡Que bienhuelen los olores primaverales de mi pueblo! Los saludos,comentarios, tertulias, recuerdos y procesiones nos sitúanen una atmósfera de satisfacción.

Esta semana, llamada santa, nos congrega. Cuando la vidafluye, los sentimientos se armonizan y el horizonte resplan-dece, estamos a gusto. Hoy corregimos a León Felipe y, con

tono melodioso y ligero, declamamos: “Yo nací en la entraña de la estepa castellanay, por eso, acudo a un pueblo que presume de La Milana”.

Con orgullo escuchamos a los forasteros: “¡qué bien acogidos somos enSesnández! o ¡hay mucha marcha!”.

Desde remotos lugares del mundo llegan mensajes anhelando conocernos. Es elcaso del joven Nicolás:

“¡Hola amigos! Me llamo Nicolás y tengo 17 años. Vivo en un pequeño pueblo de Argentina, en laDiócesis de Rafaela.A diario voy al colegio, hasta casi al mediodía. En mi casa hago algunos deberes yestoy con mi madre, mi abuela, mi hermana y mi tío.Mi pueblo se encuentra rodeado de campos, por lo que en estas noches de primave-ra, disfrutamos del aire fresco, y por la mañana, del hermoso aroma de los jazmines.Me gusta mucho estar con mis amigos y charlar, además de compartir cenas con ellos.Quiero mucho a mi Parroquia. Allí todos los sábados vamos a los grupos de PastoralJuvenil En los grupos nos divertimos y disfrutamos mucho aprendiendo a llenar desentido nuestras vidas.Y, oigan: no se detengan nunca.Espero conocerles algún día.Un fuerte abrazo,Nicolás.”

A Nicolás, a Cristina, a Sergio y a todos los que me seguís desdelos lugares más recónditos del planeta os digo: ¡VENID ASESNÁNDEZ! ¡Se está tan bien!Un abrazón de

EL CAÑICO

Editorial

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La vida de las personas mayores de un pueblo esel reflejo vivo de su historia durante esos años en losque guardaron e incluso forjaron sus costumbres, tradi-ciones religiosas y culturales, folklore,...y sobre todo,nos dejaron su ingenio y vivencias personales parasobrevivir, tanto en tiempos de decadencia y escasez,los más, como en los prósperos y de bonanza.

Todos estamos matriculados en la escuela de lavida, donde el maestro es el tiempo. En la juventudaprendemos y con la edad comprendemos. Se dice que,en los ojos del joven arde la llama y en los del viejo bri-lla la luz.

Los 90 años vividos por Daniel Andrés en estesu Sesnández, son fiel testimonio de la vida del puebloen esos primeros años de carencias, fruto de un atrasosecular agravado todavía más por una guerra que se lle-vaba lo mejor de los pocos bienes que se producían y,más que nada, a sus jóvenes para participar en ella.

Daniel nació el 12 de Noviembre de 1918 sien-do el benjamín de la familia formada por sus padresSantiago Andrés Ratón y Josefa Andrés Rodríguez ypor sus hermanos mayores Mª Teresa y Tomás.

Su infancia transcurrió entre las muchas caren-cias y penalidades de la época pero en edad escolarasistía casi diariamente a la escuela. A este respecto,recordaba todavía al maestro Portales y sobre todo a D.Andrés que estuvo de pupilo en casa de sus padres.Dejó la escuela a los 14 años sabiendo leer y escribircorrectamente. D.Andrés tuvo que ir a la guerra ycuando volvió a Sesnández, otra vez a casa de Santiagoy Josefa, contaba que cualquier mendrugo de pan, aun-que estuviera roído por los ratones, le sabía a gloria.Daniel no se lo cría porque decía de él que era algo“escurrumijido “ (¿melindroso?).

Cuando tenía 18 años estalló la Guerra Civil ytuvo que enrolarse en el ejército. Al principio se quedóen Zamora juntamente con Juan, el de Aurora, Amelio,Miguel Vara y Gerardo Fínez. Cuenta que en una oca-sión, pidieron permiso para venir a las fiestas del pue-blo y se quedaron un día más de la cuenta y no los arres-taron; Pero a Gerardo y a él los enviaron al 5º Tabor deRegulares en Zaragoza. Él tuvo suerte porque el maes-tro armero Luis Sánchez Azcárate le tomó como “asis-tente “, le llevaba con él allí donde iba y le encargabade cuidar el material y los muebles de la “unidad”.Aprendió a reparar las armas que se estropeaban. Poreste motivo no estuvo nunca en el frente en primeralínea. No obstante, tuvo que recorrer diferentes zonassegún iban sucediendo los acontecimientos bélicos y,tiene anécdotas que contar:

En Barcelona, los enemigos cercaron a la “uni-dad” en forma de tenaza y tuvieron que abandonar toda

la documentación que guardaban de la Compañía porsalvarse ellos. Nadie sabía donde se encontraban y“temblaban como mimbres “ del miedo que tenían. Elmiedo los llevó a Gandesa donde permanecieron unmes.

En Pueblo Nuevo del Terrible les daban decomer pan solo, sin acompañamiento alguno. EntoncesDaniel, que sabía dónde se guardaba el aceite, “ saca-ba lo necesario para mojar el pan y luego echaba aguapara que no se notara la falta de aceite “ .

También cuenta que cuando llegaron aSigüenza, el alcalde dio un bando en el que pedía a losvecinos que encerraran las gallinas en sus casas porquevenían los regulares..., que ya tenían fama de ser preda-dores de animales domésticos.

Terminada la guerra, estuvo en Melilla con elmaestro armero durante dos años ocupado sobre todoen arreglar las armas deterioradas.

En los tres años que estuvo en la guerra, no seencontró con ninguno del pueblo salvo con DemetrioFolgado, que más tarde llegarían a ser cuñados, puesera hermano de Inocencia. Se encontraron durante laBatalla del Ebro y, “ como yo ganaba más que él , leconvidé para pasar unas horas juntos “.

De regreso al pueblo, entabló relaciones conInocencia Folgado, su prima, y apenas estuvieron unaño de novios, cuando el 14 de Noviembre de 1942decidieron contraer matrimonio haciéndolo coincidircon la boda de su hermano Tomás y Francisca para aho-rrarse un dinerillo. Sin embargo, su vida en pareja ybajo el mismo techo no se hizo realidad todavía, puesestuvieron viviendo durante los 6 años siguientes a suboda, cada uno en casa de sus padres.

Apenas transcurrió un mes de matrimonio,cuando Daniel fue movilizado de nuevo con toda suquinta. Los reunieron en Zamora y en Diciembre vinoandando desde la “ unidad” en víspera de Año Nuevopara pasarlo con su esposa y familia. Traía los pies lle-nos de ampollas de tantas horas de camino. Su padre lereclamó, porque era el que estaba con él para ayudarley, antes de un mes, le enviaron para casa. El resto decompañeros volvieron dos meses después.

En casa de los padres de Inocencia, ClaudioFolgado y Tomasa Ferrero, nacieron sus hijas Claudinay Pilar.

Durante un año vivieron juntos en casa deSantiago, padre de Daniel y allí nació Inmaculada.Luego se fueron a vivir, de alquiler, a la casa de D.Demetrio, donde nacieron los mellizos Demetrio yMaría. .

EL PERSONAJE DANIEL ANDRÉS ANDRÉS

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Agosto 2010Ya en su casa actual en el año 1950, empezó con laenfermedad que ha padecido toda la vida, cuando sushijos eran todavía pequeños y necesitados de muchoscuidados, especialmente Pilar, que nació enferma delcorazón del síndrome de “ Marfán” pero no empezó amanifestarse hasta que cumplió los 6 años.

¿ Puede haber un panorama peor para una fami-lia, agravado todavía más por producirse en una épocade máxima escasez recién salidos de una guerra? Noeran los únicos, claro. Primero los familiares más cer-canos y luego los vecinos, se apoyaban entre sí parasalir con todo adelante como no se ha conocido nuncay menos ahora.

Inocencia, en casa de sus padres a penas traba-jaba, pues era la más pequeña de sus hermanosDemetrio y Gerardo y así tenía todo el tiempo para ir ala escuela con Doña Esperanza, aunque faltóun año por enfermedad de su madre. Sinembargo, ahora se siente la responsable detodo el que hacer de la casa y sus habitantes:cuidar de su marido, de los niños y las faenasdel campo.

Todavía se acuerda bien cuando le dijoDaniel por primera vez “ coge la azada, quevamos a arrancar jaras”. Cuántas veces excla-maba: “ no me lo lleves Señor; que me ayudea cuidar de los niños”.

Ante esta situación había que repartirse las tare-as a medida de las posibilidades de cada uno.

Daniel era propenso a padecer neumonías seve-ras varias veces al año y Zamora, Madrid, Valladolid ySalamanca fueron testigos de las muchas visitas quehicimos para poner remedio a su falta de salud. Al prin-cipio le acompañaba su cuñado Gerardo y luego, algu-no de sus hijos a medida que se fueron haciendo mayo-res.

En los viajes, no había ambulancias que te lle-vaban y traían como ahora, sino que te tenías que apa-ñar como podías ; y como la economía no estaba muyboyante se comía de frío donde se podía, incluso en elcampo entre pinares.

En los períodos en que Daniel se encontrabamejor, iban los dos a faenar y si no, contrataban cuadri-llas para hacer la sementera y la siega.

A pesar de su pertinaz enfermedad, jamás dejóde ser cabeza de familia, exigente para él y los suyos.Hombre de principios que no se doblegaba ante las difi-cultades. No se resignaba a que sus hijos dejaran de ira la escuela, porque pensaba que la instrucción era lomejor para su porvenir. “Cuando íbamos a apañar pata-tas elegíamos los días que no había escuela y buscába-mos a quién podía ayudarnos”.

Claudina a los 14 años dejó el pueblo junto conun buen grupo de chicas de parecida edad para ir inter-

nas a Madrid a estudiar a una institución religiosa.Pilar, durante algún tiempo, estuvo estudiando

en una Asociación de Seglares en Madrid. Cuando suenfermedad fue avanzando se la ingresó en el ClínicoSan Carlos con opción de poder ser operada por el mis-mísimo Dr. Cristóbal Martínez Bordiú. Pero ella seoponía porque costaba 70.000 pts. de entonces que erauna hipoteca insuperable para la familia. Pero el Doctorles aseguró que si podía ser operada sir demasiado ries-go, lo haría él mismo y gratis. La operación tenía queser a corazón abierto que, unido a la falta de mediostécnicos suficientes, no había mínima garantía de éxito.Ante este panorama, Pilar se negó a ser operada.

Los diez últimos años de su vida los pasó encasa y los dos últimos postrada casi todo el tiempo enla cama salvo algunas veces que la llevaban a

Salamanca para aliviarla de sus dolores durantealgún tiempo.

En Zamora había un cura llamado D.Bernardo que estaba metido en la PastoralSanitaria y tenía un coche que llamaban “ ElQuijote “ con el que iba de un lugar a otro paravisitar a los enfermos, entre ellos a Pilar enSesnández para darle ánimos. Muchas otrasvisitas recibía Pilar de los vecinos de su puebloy de otros pueblos que sabían de su estado; pero

los ánimos los recibíamos los visitantes porque ellasiempre nos recibía con semblante animoso y alegre,con palabras que denotaban conformidad y gratitud yhasta soltaba algún que otro chascarrillo para quitarseriedad y pesadumbre a las circunstancias. Allí habíaun ángel que consolaba a quienes le visitaban y másque a nadie a los suyos para afrontar tantas dificultades.Murió a los 33 años.

Daniel, cuando el cansancio podía más que suvoluntad para ir a trabajar al campo, se quedaba en casarepartiendo el tiempo en cuidar su salud dando periódi-cos paseos cuando el clima lo permitía o manejandomimbres y otros materiales para hacer cestos y otrosutensilios prácticos alrededor de la lumbre si no podíasalir de casa. Todos hemos visto exhibidas sus precio-sas manualidades en las exposiciones que se hacen enverano en la Casa de la Cultura o repartidas por variascasas vecinales procedentes de generosas donacionesde su autor.

Con el esfuerzo de toda la familia, la mejora delas instituciones sanitarias a través del tiempo y las ayu-das sociales, han salido adelante y Daniel llegó a vivirmal que bien, arropado por el amor y el desvelo de lossuyos, 90 años.“ Permanecerás siempre en nuestro recuerdo, porquesolo se muere cuando se olvida “ . Descanse en paz

Hortensia del Río Andrés

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Agosto 2010Sesnández tiene otra centenaria

Hace ya dos años homenajeábamos a Isabel Ratón al cumplir el siglo.Isabel sigue cumpliendo años y ya son los 102 cumplidos en diciembre y noparece que se le vea el fin tan pronto, pues está como un roble.

Pues bien, ya no está sola como centenaria. Desde el día 15 de febre-ro, la acompaña María Manuela Folgado Rodríguez. Nació, según dice supartida de bautismo el 15 de febrero de 1910, como a las diez de la noche.

Es hija de Miguel Folgado Prieto y de Joaquina Rodríguez del Río.Fue confirmada el 16 de mayo de 1923 y contrajo matrimonio canóni-

co en Entrepeñas de Sanabria el día 14 de abril de 1934. Por si alguien seextraña de cómo se casó en tal pueblo diré que el cura que regentaba laiglesia de Entrepeñas era tío suyo. Esa es la razón.

Se casó con Gaspar Fernández Ferrero, natural también deSesnández, pero su padre era de Escober, de ahí que se fueran a vivir a él.

Tuvieron seis hijos, de los cuales han fallecido tres.

Desde aquí damos nuestra enhorabuena a María Manuela y familia.Vivir un siglo no es cualquier cosa.

Ángel Ferrero

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Salí de mi pueblo para Sevilla con15 años, el 23 de diciembre de 1943. Enaquella época, las monjas no teníamospermiso para salir, como ahora, a visitar ocuidar a los padres siendo mayores oestando enfermos. Por otra parte, comosabéis, toda mi familia salió del pueblo yse vino para Sevilla, con lo cual yo notenía ningún motivo que justificase unavisita al pueblo.

Pasado el tiempo y con reglamentomás flexible en el tema de la clausura, envarias ocasiones, los superiores y lacomunidad me aconsejaban un descanso,y como mi hermano Tomás y su mujer,Merceditas, habían hecho la casa en elpueblo, me decían que me vendría bien irallí a descansar. Pero yo siempre encon-traba pretextos, pues era priora, y, aun-que una no es imprescindible, siempretenía motivos para decir que no podía;que si las monja enfermas, que las obras,etc�Por supuesto nunca dije que no porfalta de cariño a mi pueblo y a mi familia,pues aunque llevo tantos años lejos devosotros, el pueblo no lo olvido y mi fami-lia es muy importante para mí.

Después de esta aclaración sigocon las impresiones.

El día cinco de septiembre de esteaño 2009, 65 años después, se dice pron-to�salí para mi pueblo con mi hermanaRemedios, mi sobrina Mari y sus doshijos. La despedida de mi querida comu-nidad me emocionó mucho; tengo unafoto de ese momento que lo afirma. Alsalir por la puerta y encaminarnos haciael pueblo, me vino a la mente el gozo queexperimentan los judíos cuando se dirigena Jerusalén. Yo tenía la misma sensación.

Llegamos a la sierra de la Culebra,de la cual yo no tenía ni remota idea; tan-

tos kilómetros de pinos, con ese perfumey que tanto embellece a la sierra; todo meparecía un sueño. Cuando nos íbamosacercando al pueblo y me señalabandónde estaba, yo ni lo veía, el corazónme empezó a palpitar con fuerza. Y, aunos 20 metros de mi querido pueblo, meencontré a la puerta de la casa de mi her-mano Tomás y mi cuñada Merceditas. Allíestaban esperándome un buen númerode personas: Tomás, Decorosa,Mercedes, vecinos del pueblo y algunosprimos. Y fueron apareciendo más y másconforme iban sabiendo mi llegada.

Después de los abrazos y saludos,por fin entré en la bonita casa con músicacomo si fuera la reina. Qué cantidad deflores, todo muy cuidado, no cuento losdetalles del interior porque me haría muylarga. Pero la verdad es que era admira-ble ver la cantidad de casas nuevas, queparecen palacios, con tantas flores y her-mosos jardines, muy bien cuidadas. Lascalle bien limpias, con buena iluminación.En fin, para mí todo era muy distinto ymaravilloso.

Al día siguiente me esperaba otrasorpresa: mi querida iglesia, en la que mebauticé, hice mi primera comunión y mesentí llamada por el Señor para seguirle.Donde tantas horas pasé. Fue muy emoti-vo¡¡Tantos recuerdos!!...Me fui directa albanco que tantos años siempre ocupé yallí estaba mi tía Delfina. Los días queestuve en el pueblo, siempre me senté enel mismo sitio, junto a mi tía y ella estaballena de gozo.

Impresiones de la visita a mi pueblo

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En todos estos años, la iglesia ha recibidograndes mejoras, está preciosa, no pareceni la misma, muy cuidada, muy limpia. DonGermán quiere que sea una parroquiaviva, y lo es, canta todo el pueblo, con bue-nas voces y participan en todo. Me llamó laatención que diariamente van muchas per-sonas a misa. Todos los días le pido alSeñor que siga creciendo la fe en vues-tros corazones y en vuestros hogares.

Otra sorpresa para el día siguiente:el cementerio�Visité las tumbas de mispadres, mis abuelos y algunos familiaresmás. Rezamos para que todos los quedesde allí pasaron a la casa del buenPadre Dios intercedan por todos nosotros.El cementerio es nuevo y como todo, estámuy limpio y bien cuidado. Está muy boni-to.

Los demás días los pasé en plan “turista”.Por la noche se organizaba la excursióndel día siguiente: visitar a mis primos car-nales, algunos amigos a los cuales ya niconocía y eso me hacía sufrir, pues ellos,todos se acordaban de mí. También visitélos molinos de viento, que tampoco cono-cía y me hicieron mucha ilusión. Fui a lafuente del Cañico, a las Fuentes, que hanquedado muy bonitas, a otros lugares her-mosos y al mercadillo de Tábara. Se llenael alma y se ensancha el espíritu de ver

esos paisajes, tanta vegetación, de respi-rar tanto aire puro. ¡¡Dios sea bendito!!

Un detalle curioso quiero contar. El día quellegué, por la noche, le dije a mi cuñadaMerceditas, que todos conocéis, que mellamase a las 6´30 de la mañana pararezar y hacer oración, pues durante el díano había tiempo para ello, cuál fue mi sor-presa que a las siete se presentó en lahabitación con un café para que lo tomaseantes de ir a misa. Me dio un beso como sifuese su hija pequeña, pues estoy seguraque así lo haría con sus hijos, pues es unagran mujer y buena madre.

Después de tantos años, 65 años sinvolver al pueblo, tengo que confesaros queha sido una experiencia maravillosa. Atodos quiero saludaros, agradeceros tanto

cariño y tantas atenciones. A todos os llevoen mi corazón orante y os presento ante elSeñor para que Él os recompense con suamor, con su paz y con su bendición.

Vuestra hermana, amiga y paisana.

Teresa Blanco.

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Agosto 2010VENTANA DE ACTUALIDADADIOS A MIGUEL DELIBESMiguel Delibes Setién nació en Valladolid en 1920 y murió el 12de marzo de 2010.Fue miembro de la Real Academia Española.Comenzó su carrera como columnista y posterior periodista deEl Norte de Castilla, periódico que llegó a dirigir, para pasar gra-dualmente a dedicarse a la novela. A lo largo de su vida consi-guió diferentes premios. Entre sus obras destacan : La sombradel ciprés es alargada, Las Ratas, Cinco horas con Mario, El prín-cipe destronado, Los Santos inocentes y El hereje.

CÉLULAS MADRE CAPACES DE “ FABRICAR” HUESOInvestigadores de la Universidad de California en San Diego(E.E.U.U.), han logrado identificar la región específica en losvertebrados donde surgen las células madre de la sangredurante el desarrollo embrionario. El descubrimiento es unpaso crucial hacia el desarrollo de terapias eficaces con célulasmadre para pacientes con leucemia, mieloma múltiple, ane-mia y una variedad de otras enfermedades de la sangre o lamédula ósea.

CELDA 211La película Celda 211, junto con Ágora, ha sido la queha conseguido el palmarés de los premios Goya de esteaño. Celda 211 es la historia de un funcionario de pri-siones que, el mismo día que empieza su trabajo en unnuevo centro, se ve atrapado en un motín . El rodaje serealizó en la antigua cárcel de Zamora, con la interven-ción de bastantes zamoranos y zamoranas.

ESTUDIOS SOBRE TUTANKAMÓNDesde que Howard Carter descubrió su tumba en 1922, su muerte haestado rodeada de misterio. Ahora un trabajo científico detalla que lamalaria y las anomalías óseas parecen haber contribuido a su muerte.Este diagnóstico ha salido a la luz gracias a la utilización de análisisgenéticos, radiológicos y antropológicos llevados a cabo sobre sumomia y otras 10 con las que estaba relacionado.

CENTENARIO DE MIGUEL HERNÁNDEZCerca de 500 actos están programados a nivel mundial para conmemorarel centenario del nacimiento del poeta Miguel Hernández, autor de poe-mas tan maravillosos como El rayo que no cesa. Entre dichos actos seencuentra una exposición pictórica en la que han participado 43 artistasde la provincia de Alicante. En un espacio creado a tal efecto se hanexpuesto mobiliario y herramientas de la familia del poeta, así como unahiguera cedida por el Ayuntamiento de Orihuela y una palmera por elConsistorio ilicitano.

Carmen Ferrero Peral

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En el Centenario de Miguel Hernández

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En el año 2010 se cumple el centenario delnacimiento del poeta Miguel Hernández, desde larevista “el Cañico” queremos hacerle nuestro pequeñohomenaje relatando de manera escueta la biografíapersonal y literariaMiguel Hernández Gilabert nació en Orihuela el 30 deoctubre de 1910. Cuando nació, su familia la compo-nía el matrimonio, un niño llamado Vicente, y una niñallamada Elvira. El padre de Miguel Hernández se dedi-caba a la crianza y pastoreo de ganado. Su madre, eraama de la casa. El matrimonio tuvo, en total, sietehijos, de los que sólo sobrevivieron cuatro: Vicente,Elvira, Miguel y Encarnación. A los cuatros años de nacer Miguel, su padre decidetrasladar el hogar familiar a una casa más amplia,situada en el actual casa museo en Orihuela. Su infan-cia transcurre entre los juegos y el trabajo, ya quedesde los siete años ayuda a su hermano mayor,Vicente, en las tareas del pastoreo, aprendiendo de éleste oficio.A los nueve años inicia su aprendizaje académico des-pués de que su padre consiga que le admitan en lasEscuelas del Ave maría, anexas al ColegioSanto Domingo... Pronto destaca el inte-rés de Miguel por la lectura y los estu-dios, consiguiendo excelentes calificacio-nes. En el citado colegio estudia tambiénRamón Sijé, el que más tarde sería sugran amigo.Ante la crisis económica que atraviesa su

familia, en marzo de 1925 deja los estu-dios en el Colegio Santo Domingo, ya que su padre lenecesita para atender el ganado pero, pese a todo, élaprovecha sus horas de pastoreo en la sierra paraseguir estudiando. Miguel se convierte en un asiduovisitante de la biblioteca de Luis Almarcha, sacerdote ycanónigo de la catedral Oriolana.En ella descubre a los escritores clásicos de lenguaespañola, así como traducciones de escritores griegosy latinos, al mismo tiempo que se interesa por el tea-tro. Lee con avidez la colección teatral "La Farsa" yjunto con otros amigos forman un grupo teatral.Representa diversos papeles en actuaciones realizadasen la Casa del Pueblo y en el Círculo Católico.

Hacia el 1925 Miguel Hernández empieza aescribir poesía. Su principal fuente de inspiración es elentorno en el que vive: la huerta, su patio, la montaña,las cabras, el pastoreo, el río, etc., aprovecha cualquierocasión para escribir. Incluso tiene que esconderse desu padre, a quien le molesta esa afición poética de suhijo.......Los periódicos de la provincia comenzaron a publi-car sus primeros poemas. El primero que aparecepublicado es el titulado "Pastoril", en el periódico local

El Pueblo de Orihuela. Tras esta aparición públicacomienzan sus colaboraciones en la prensa local y,posteriormente, en la provincial....Así, sus poemas vanapareciendo en los periódicos y revistas tales comoVoluntad, Actualidad, El Día, Destellos, La Verdad, etc.Se trata, de una poesía mimética en la que el jovenMiguel va buscando su propia identidad a través detodas las lecturas que está realizando en esos momen-tos...... Como fruto de la amistad entre Carlos Fenoll,Miguel Hernández y Ramón Sijé, se forma el llamado"Grupo de Orihuela". Su interés por la literatura lesaniman a reunirse periódicamente en la tahona pro-piedad del padre de Carlos Fenoll. Cada uno compagi-na su trabajo o sus estudios con estas aficiones litera-rias, por lo que tienen que celebrar las reuniones alacabar la jornada. ......En 1931 realiza su primer viaje a Madrid y, ante eldesinterés manifestado por los escritores de la Capital,regresa a Orihuela donde participa en un homenaje aGabriel Miró.En 1933 se edita su primer libro, Perito en lunas. En

1934 realiza su segundo viaje a Madrid,donde obtiene su primer triunfo alpublicarse en la revista Cruz y Raya suauto sacramental Quién te ha visto yquién te ve y sombra de lo que eras.Comienza a relacionarse con grandespoetas del momento tales como Alberti,Rosales, Aleixandre y Neruda. Regresa Orihuela en ese mismo verano

y en septiembre formaliza su noviazgo con JosefinaManresa.Vuelve a Madrid en noviembre de 1934, después decomenzar el drama titulado El torero más valiente, y eneste viaje conocerá mejor el ambiente literario de laCapital.

En 1935, comienza su trabajo en la enciclope-dia Los Toros, con José María de Cossío. Miguel parti-cipa, en Cartagena, en un acto-homenaje a Lope deVega. Escribe el drama Los hijos de la piedra. En ese mismo año fallece su amigo Ramón Sijé y en1936 Se edita su libro de poemas El rayo que no cesa,termina su obra teatral El labrador de más aire ypublica su "Elegía" dedicada a su amigo Ramón Sijé.. Seincorpora al Ejército Popular de la República y es nom-brado Comisario de Cultura.

En febrero de 1937 es destinado en Andalucíaal "Altavoz del Frente". En marzo se casa con JosefinaManresa. Participa en el II Congreso Internacional deIntelectuales en Defensa de la Cultura, celebrado enValencia. Realiza un viaje a la URSS, formando parte deuna delegación española enviada por el Ministerio de

Agosto 2010

10El Cañico

Agosto 2010En ese mismo año le publican Viento del Pueblo,Teatro en la guerra y El labrador de más aire y endiciembre nace su primer hijo, Manuel Ramón.En otoño de 1938 muere su hijo y ello provoca unaserie de poemas que anuncia en su libro Cancionero yromancero de ausencias. En ese mismo año escribe eldrama Pastor de la muerte y actúa como soldado, ycomo poeta, en diversos frentes.En 1939 nace su segundo hijo, Manuel Miguel y enabril el general Franco declara finalizada la guerra. Miguel intenta huir a Portugal, pero se lo impide lapolicía portuguesa y es entregado a la Guardia Civilfronteriza. Pasa por las prisiones del Paso, Huelva ySevilla, en la prisión de Torrijos en Madrid, y es en estaúltima donde compone las famosas "Nanas de la cebo-lla". Es puesto en libertad inesperadamente, pero enOrihuela lo detienen de nuevo y en 1940 se le trasladaa la prisión de la plaza de Conde de Toreno en Madrid,donde se le condena a la pena de muerte. Condenaque más tarde fue conmutada por la de 30 años de pri-sión. Pasó por las prisiones de Palencia, el penal de Ocaña yen 1941 es trasladado al Reformatorio de Adultos deAlicante donde se manifiesta una grave afección pul-monar que se complica con tuberculosis

En 1942 muere en la enfermería de la prisión alicanti-na y es enterrado en el cementerio de Nuestra Señoradel Remedio de Alicante. Contaba, a su muerte, con 31años de edad

No quisiera finalizar este articulo sin transcribir unacarta que Miguel Hernández le dirigió a Juan RamónJiménez y que para mí, hasta hace muy poco tiempo,era desconocida

Orihuela, noviembre 1931Venerado Poeta:Sólo conozco a usted por su "Segunda Antología" que-créalo-ya he leído cincuenta veces aprendiéndomealgunas de sus composiciones. ¿Sabe usted dónde heleído tantas veces su libro?. Dónde son mejores: en lasoledad, a plena naturaleza, y en silenciosa, misteriosa,llorosa hora del crepúsculo, yendo por antiguos sende-ros empolvados y desiertos entre sollozos de esquilas.No le extrañe lo que le digo, admirado maestro es quesoy pastor, No mucho poético, como lo que ustedcanta, pero sí un poquito poeta. Soy pastor de cabrasdesde mi niñez. Y estoy contento con serlo, porquehabiendo nacido en casa pobre, pudo mi padre darmeotro oficio y me dio este que fue de dioses paganos yhéroes bíblicos.Como le he dicho, creo ser un poco poeta. En los pra-dos por que yerro con el cabrío ostenta natura su

mayor grado de belleza y pompa; muchas flores,muchos ruiseñores y verdores, mucho cielo y muchoazul, algunas majestuosas montañas tras las cualesrueda la gran era del Mediterráneo....Por fuerza he tenido que cantar. Inculto, tosco, séque escribiendo poesía profano al divino arte...Notengo culpa de llevar en mi alma una chispa de lahoguera que arde en la suya...Usted, tan refinado, tan exquisito, cuando lea esto¿qué pensará? Mire: odio la pobreza en la que he naci-do, yo no sé por muchas cosas.. .Particularmente porser causa del estado inculto en que me hallo, que nodeja expresarme bien ni claro, ni decir las muchascosas que pienso. Si son molestas mis confesiones, per-dóneme, y ... ya no sé como empezar de nuevo. Ledecía antes que escribo poesías...Tengo un millar deversos compuestos, sin publicar. Algunos diarios de laprovincia comenzaron a sacar en sus páginas mis pri-meros poemas, con elogios...Dejé de publicar en ellos.En provincia leen poco los versos y los que lo leen nolos entienden. Y heme aquí con un millar de versos queno sé qué hacer con ellos. A veces me he dicho quequemarlos tal vez fuera lo mejor. Soñador, como tan-tos, quiero ir a Madrid. Abandonaré las cabras-¡ oh, esaesquila en la tarde!- y con el escaso cobre que puedandarme tomaré el tren de aquí a una quincena de díaspara la corte.¿Podría usted, dulcísimo Juan Ramón, recibirme en sucasa y leer lo que le lleve? ¿Podrá enviarme unas letrasdiciéndome lo que crea mejor?Hágalo por este pastor un poquito poeta, que se loagradecerá eternamente.

Miguel Hernández.Arriba 73. Orihuela.

11 El Cañico

PEREGRINOS A SANTIAGO Agosto 2010

“A SANTIAGO NO SE LLEGA,

SOLAMENTE SE VA”

(Cita jacobea)

El Año Jacobeo o “Año Santo Compostelano” esun acontecimiento eclesial, europeo y nacional derelieve durante el presente año 2010. Muchasactividades culturales, de ocio y espirituales sehan organizado en vistas a movilizar a muchaspersonas y grupos con este motivo. Se esperaque lleguen a Santiago de Compostela muchosmiles de peregrinos a visitar la tumba del Apóstol. La peregrinación a Santiago es una actividadhumana y de espiritualidad popular en auge y debastante actualidad. Para quien se pone en cami-no por primera vez, sorprende la variedad de per-sonas y la diversidad de motivaciones de los quese echan al Camino. Para muchas personas esuna forma de hacer turismo. Para otras, es viajecultural. Muchas otras, se lo toman como undeporte de aventura. Existencialmente la peregri-nación puede ser una experiencia que, a pocoseriamente que se viva, transforma por dentro,enriquece y deja huella. Desde la dimensión reli-giosa, una oportunidad muy propicia para intentarcrecer en humanidad y madurar en la fe, que nin-guna persona creyente debería perderse.En el presente artículo quiero ofrecer algunas cla-ves más significativas que ayuden a conocer ycomprender algo mejor la riqueza de experienciasde ese mundo del Camino de Santiago. Lo hagodesde la escucha atenta del testimonio entusiastade algunos caminantes-peregrinos que, en distin-tas ocasiones y por rutas diferentes, han recorridoy disfrutado de la belleza del Camino, con lamochila a la espalda. Sin otra autoridad que mireconocimiento y admiración hacia ellos, me atre-vo a elogiar y recomendar su experiencia de lovivido, con el único deseo de que pueda servir deinspiración y motivación a aquellos que mantie-nen la intención de echarse un día al Camino yhacerse peregrinos a Santiago.Pero, ¿qué enseñanza transmiten los “maestrosperegrinos”, expertos conocedores de la místicadel Camino, para el momento de la preparación?Lo primero que debe preguntarse alguien que hadecidido hacer el Camino, deseando vivir unaexperiencia auténtica de caminar en libertad, es:qué motivos le echan al Camino. Es decir, québusca, desea y espera encontrar en el Camino.Qué locura le mueve a caminar. Cuáles son susexpectativas y sus miedos. Es la preparación inte-

rior del peregrino que necesita encontrar el senti-do a su caminar.La preparación de la mochila, los días previos a lasalida, es el momento idóneo para preguntarsepor lo que realmente es más importante y necesa-rio en la vida. El espacio reducido de la mochilaobliga a discernir entre lo que es necesario eimprescindible para vivir y lo que es prescindible.Con la preparación de la mochila, los valores quenormalmente tenemos cambian de sentido.Frente a la cultura consumista del usar y tirar, elCamino nos dice que es preferible lo reutilizable,lo duradero, lo que se puede usar varias veces ycon diferentes finalidades. Frente a una culturaque impone “lo nuevo” sobre “lo usado”, el pere-grino descubrirá que las mejores botas paraandar son las usadas, las que ya están hechas alpie, y que es mejor la mochila que ya conoce elsurco de la espalda. Frente a una cultura quemenosprecia lo pequeño, la mochila se llena depequeñas cosas de gran valor: agujas para sanarampollas, bolsas de plástico para impermeabilizarla ropa, linterna para la oscuridad, y otros muchosdetalles que en la vida normal apenas prestamosatención.

Y ¿qué lecciones recibe el peregrino en la escue-la del Camino?Ya con la mochila a la espalda, el peregrino pron-to descubre que la experiencia de ponerse acaminar supera todo preparativo. Los primerospasos suelen ser difíciles. Puede ocurrir que elsupuesto terreno blando se vuelva duro, y lo durollevadero. Que la etapa larga sea gozosa y, encambio la corta, se vuelva un infierno. Así es elCamino, y así es la vida.La primera lección que recibe el peregrino es elmucho esfuerzo y sufrimiento. El Camino no sóloda, también quita. Te quita tus caprichos y como-didades. Cada día tiene su sufrimiento, su dolor,su angustia, su cansancio� Pero, sobre todo,regala. Para acoger los regalos del Camino hayque levantar la vista de las propias necesidades ymolestias, de los propios cansancios y fatigas. Setrata de caminar a pesar de todo, aceptando quela fatiga y el cansancio son el precio a pagar porlos regalos recibidos. Entre los muchos regalosque va encontrando, la naturaleza es, sin duda,uno de ellos. Las flechas amarillas son quizá elregalo más afanosamente buscado del Camino.Enseñan al peregrino la necesidad de recibir yagradecer.

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Agosto 2010Como el camino de la vida, el Camino a Santiagono podemos andarlo solos. Caminamos sobre lashuellas de otros peregrinos. Todo lo que encuen-tra el peregrino en el Camino le viene dado yregalado. De todos los regalos, el más importante es elencuentro, siempre inevitable y gratuito, con losotros que actúan según sus propias posibilidadesy limitaciones. Por muy cargada que vaya lamochila, nunca es lo suficiente para hacer elCamino. Lo más importante lo va recibiendo elperegrino gratis, paso a paso, en el contacto conotras personas que pueden ser también peregri-nos, hospitaleros o lugareños�En el camino también hay otras presencias.Porque, en la soledad de las sendas, cuando laspalabras se acaban, afloran los recuerdos. Gentemuy querida que físicamente no está presente allado del peregrino, y, sin embargo, va subida en loalto de la mochila. También en el Camino hay encuentros sin pala-bras y miradas llenas de vida que procuran alien-to al corazón del peregrino en los momentos másduros y cansados. Todo ello se convierte en unainmejorable razón para decir “gracias” y seguircaminando.El Camino de Santiago le saca a uno del terrenoconocido de lo habitual y cotidiano. Enseña alperegrino a cambiar sus rutinas y su ritmo devida, cambiando su percepción de los tiempos yde los espacios. El espacio no queda limitado a loya conocido y transitado a diario. Se amplía a lodesconocido, novedoso, sorprendente, domina-do, sobre todo, por el deslumbrante marco de lanaturaleza. El Camino es una invitación a entraren profunda comunión con nuestro mundo, a gus-tarlo tal cual es, dejando atrás toda relación utili-tarista o de control. Invita también al peregrino acambiar su vivencia del tiempo. A no ir con prisas,sino al ritmo de los pasos, gustando de las cosas.El tiempo se humaniza. Se pasa de un tiempomarcado por las agujas del reloj, a una diversidadde tiempos: tiempo de la mañana y tiempo delatardecer; tiempo del camino y tiempo de descan-so; tiempo de silencio y tiempo de la palabra;tiempo de la naturaleza, del cuerpo, tiempo delcompañero, tiempo de la oración� Lo importanteno es echar más o menos horas en cada etapa,sino cómo aprovechar esas horas.El Camino enseña, además, que no es buenodetenerse mucho tiempo en el mismo sitio. Sólo lojusto para descansar y tomar alimento. Y luegopartir. Siempre partir. Porque si no empiezan asurgir las ataduras y dependencias, se pierde la

libertad y el ánimo para seguir avanzando.Todo camino siempre está abierto a la sorpresa,para bien o para mal. A lo largo del Camino, elperegrino experimenta momentos de debilidad,de pérdida de sentido y de ilusión. Le invade elescepticismo y siente la tentación de sentarse alborde del Camino. En esas situaciones el peregri-no aprende a confiar de nuevo en el sentido delCamino y a recuperar la razón más profunda desu ser: seguir caminando para llegar a una metasiempre lejana, pero cada vez un poco más cer-cana. Pero también hay momentos de gracia enlos que el peregrino se siente encantado y envuel-to en la magia del Camino: un paisaje espléndido,una iglesia perdida, el descanso después de unajornada agotadora, el diálogo sereno que nosadentra en el corazón del otro, también peregrino;una sencilla oración compartida con mucho calorhumano y de fe.Algo importante para vivir el Camino es avivar lossentidos. Ningún sentido es ajeno al Camino. Consus ojos el caminante-peregrino podrá contem-plar la belleza de los diferentes paisajes, los cam-bios de luz en la mañana y en la noche, la majes-tuosidad del gótico y la sobriedad y recogimientode las iglesias románicas. Posando la mirada,podrá contemplar sin prisas viñedos, espigas,campos sin cultivar. El oído se afinará para escu-char el canto de los pájaros y la suave brisa quehace el camino más llevadero. Se escucharánhistorias de compañeros de camino, y también seescuchará el silencio que hace posible la escuchainterior, donde habita lo que deseamos, lo quenos preocupa, nuestras ilusiones y nuestros mie-dos. El tacto nos habla del peso de la carga anuestras espaldas; nos dice cómo están nuestrospies; cuándo es preciso descansar y cuándo hayque volver a caminar. El olfato y el gusto tambiénse afinan y se hacen más sensibles a lo sencillo:el olor de la mañana, de un campo en flor, de laropa limpia o del sudor� El placer de un pan conchocolate cuando hay hambre, o de un simpletrago de agua cuando el sol aprieta.El Camino enseña que es fácil la fraternidad. Enlas relaciones de proximidad a los otros, el pere-grino aprende dos actitudes, patrimonio de huma-nidad, de la Ruta Jacobea: la hospitalidad hechade gratuidad, de servicio desinteresado y de rela-ciones diferentes como la que se recibe en losalbergues, en los monasterios y en las casas departiculares que ofrecen acogida y descanso. Y elejercicio de la solidaridad que brota de la atencióndesinteresada a la situación del otro, en especialdel más necesitado

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En el Camino el peregrino aprende que, en la vida, no todos tenemos las mismas posibilidades: hayquienes están paralíticos, otros son parados camuflados; están los “averiados” para quienes el cami-no es momento de reflexión y terapia; están los jóvenes que buscan algo mejor en sus vidas. Tambiénhay personas en las que ha calado tanto el valor de peregrinar, que han hecho de su vida una pere-grinación continua. Para el peregrino que en su caminar atiende con cuidado la dimensión creyente de su existencia, elCamino puede resultar una verdadera escuela de oración: oración en camino, oración con la natura-leza, oración monástica, oración sencilla en una ermita� Detenerse unos días a reflexionar, rezar ydescansar en alguno de los monasterios que pueblan el Camino, es una oportunidad para ir posandocon suavidad lo vivido y recibido en las largas jornadas que llevan a Compostela.Ya en Santiago, se acaba el Camino� Pero en realidad es cuando el peregrino llega a entender conclaridad el sentido de su propio camino. La meta del Camino es Compostela, pero la peregrinación noconcluye allí, sino que perdura indefinidamente en el corazón. Porque todo lo recibido y experimenta-do a lo largo de cada etapa del recorrido es sólo signo de la plenitud que se espera, y que tan bella-mente está significada en el Pórtico de la Gloria. Esta es la idea que inspira la frase que figura en eltítulo de este artículo. Por eso, quien se atreve a dejarse zarandear por el misterio divino que envuel-ve la existencia, descubrirá que en su camino todavía hay muchas etapas por recorrer, y, difícilmenteromperá su bordón ni tirará la concha que colgó un día de su cuello.

“¡Ultreia y buen camino, peregrino!”

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IMÁGENES

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Hola Geni.Me han pedido que escriba un artículosobre ti para la revista del pueblo, no sécómo empezar esto, ni que decir de ti queno haya dicho ya, la verdad que solo mesalen cosas buenas de ti.Yo no soy escritor ni nada que se lo parez-ca pero te escribo con el corazón, no sé sialgo de lo que a veces digo de ti, a alguienno le gusta pero yo lo hago con toda mibuena voluntad y con mi mejor intención,pero siempre hay alguien que no le gusta,por eso me disculpo.Geni todavía seguimos esperando quenos digas y nos expliques porque te fuistesin despedirte de tu familia, amigos..., elhueco que tienes en nuestros corazonessigue estando ahí.Ya han pasado más de dos años desdeque te fuiste y yo todavía sigo sin creerlo,me hago a la idea de que te has ido aalgún sitio y que algún día regresarás, laverdad es que me gustaría saber qué sitioes y poder ir allí y darte un abrazo muyfuerte como los que tú me dabas cuandoéramos pequeños.Nadie olvida la buena clase de personaque tú eras siempre haciéndonos felices alos demás de una forma u otra.Casi siempre te escribo por las mañanas,porque me paso casi todas las nochessoñando contigo, hay noches que measomo a la ventana y miro hacia el cielo yveo tu cara dibujada con las estrellas, eresun gran recuerdo para mi (y para muchagente) cada día que pasa, más me acuer-do de ti y eso me hace mucho más feliz.Hay una cosa que quiero decirte, aunquetú y yo ya la hemos hablado varias veces,teníamos una cosa pendiente tú tenias undeseo y lo hemos intentado hasta que lohemos conseguido, ahora nosotros ya noestamos en deuda contigo, porque ade-más lo hicimos a lo grande como a ti tehubiera gustado hacerlo, ese día tú nos

hiciste muy fuertes, nos diste ánimos y nosprotegiste, asique ahora tú eres el queestás en deuda con todo tu pueblo y contoda tu gente, ¿por qué te fuiste? ¿por quélo hiciste sin despedirte?Hace unos días soñé que habías vueltopero a lo largo del sueño me di cuenta deque habías vuelto para decirme algo, algoimportante y justo me desperté, ya nopude saber lo que era, desde ese día nohe vuelto a soñar contigo y desde enton-ces todas las noches al irme a la camapienso para mi, a ver si esta noche sueñocon Geni y vuelvo al sueño del otro día yme dice esa cosa que al final no me pudodecir.¿Recuerdas todas aquellas cosas quesolías hacer con todos tus amigos? Hoy lamayoría de las cosas se han olvidado y yano se hacen todas esas meriendas quehacíamos en las tardes del otoño, los díasque nos íbamos a pescar a la raya deEscober..., pero hay una cosa que no seha olvidado y que no se olvidara jamás yeso es tu recuerdo.Todo parece imposible se te echa muchode menos y las cosas ya no son iguales, túsiempre nos has querido ver haciendoalgo porque de una forma u otra tú estásentre nosotros y por lo tanto te quieresdivertir con nosotros.La verdad que no sé qué más decirte ycreo que lo tendré que dejar para otro ratoo cuando tenga otro sueño porque ya nosoy capaz de seguir escribiendo porque turecuerdo además de ser muy bonito y bri-llante es un dolor muy fuerte el pensar si tevolveremos a ver algún día o no, yo poreso siempre quiero pensar que te has idoa algún lugar, que algún día regresarás yte recibiremos con los brazos abiertospara darte fuertes abrazos. Un beso Geni, me voy a dormir, que des-canses, hasta mañana, te quiero.

En memoria de nuestro amio Geñín

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Hola de nuevo voy a seguir dedicándotealgunas palabras aunque no es mi espe-cialidad pero yo lo hago desde el corazóny con toda mi buena intención. Casi siem-pre digo lo mismo o cosas parecidas de tipero no me cansare de decir que todo eltiempo que pasamos juntos fue muy boni-to y por lo tanto nunca se olvida. Tú y yonos conocíamos muy bien ya que estuvedesde muy pequeñito cerca de ti hasta mesacabas de paseo cuando yo tenía muypoco tiempo, fuimos creciendo y me acuer-do mucho cuando los domingos te subía adespertar para ir a jugar antes de comercon nuestras excavadoras, incluso algunavez me dormía contigo en la cama porquetú decías que era muy pronto para levan-tarse, pero a ti te hacía ilusión que fuese.Alguna vez me dijiste pero ya estás aquípero si hemos quedado más tarde y tedecía yo, no, mira el reloj. Al final siempreacababas levantándote.

El tiempo paso y ya íbamos cambiando losjuguetes por los rifles, que de pardalesindefensos le dábamos a tu abuela y a lamía para que los hiciesen, ¿recuerdasaquella vez que nos siguió la guardia civilpor tras las casas? Tú eras como unrelámpago desaparecías con solo pesta-ñear, aunque ese día gracias a dios,bueno gracias al patatal de Tomás y Petray a los que andaban recogiendo las pata-tas que nos escondieron, no nos cogieron.

El tiempo seguía pasando y te comprastela primera moto "El vespino", cuántos via-jes dimos a los pueblos de alrededor y porel pueblo, cuántas caídas y que al final noslevantábamos como si nada qué grandesrecuerdos... Contigo nada cambiaba todoera igual aunque te fuiste para Zamora losfines de semana aprovechábamos paradisfrutar para el resto de la semana.Cuando te fuiste a Madrid las cosas cam-biaron ya a la fuerza pero de vez en cuan-do regresabas para recordar viejos tiem-pos. Recuerdo un día tu estando en Madrid y yoen Zamora estudiando, una mañana queme levanté a eso de las ocho de la maña-na y bajé de casa para ir a clase cuandosalía por el portal me parecía ver una caraconocida y resultó que eras tú que habíasvenido para darme una sorpresa, que esalgo que nunca olvidaré. Quiero que sepas que pase lo que pasenunca te olvidaré y siempre irás con migoen mi corazón donde yo vaya. Te quieroHermanitoDesde Sesnández un beso y un abrazo

muy fuerte.

Geñín te queremos.

Marcos Ratón del Río

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Agosto 2010La Huerta de Teresa

Trabajo, tesón y mucho amor. Son los secretos de laabuela Teresa para conseguir que su huerto sea uno delos más envidiados de Sesnández. Tomates, cebollas,lechugas, calabazas o judías verdes. Todos los produc-tos típicos de la tierra castellana se pueden encontraren su huerta. Sesnandina de nacimiento, Teresa dedi-ca gran parte de su tiempo a trabajar con esmero este"trocito" de tierra y a pesar de sus 84 años no está dis-puesta a dejar la azada. Porque para ella, su huerta, estambién su vida.

¿Cuales son los primeros recuerdos que tiene de estehuerto,Teresa?

Uy...lo recuerdo de toda la vida. Mi familia tiene estacasa desde antes de que yo naciera.Yo recuerdo que mimadre estaba también mucho en el huerto y a midesde pequeñita ya me gustaba. Además nosotras éra-mos una de las pocas familias que tenía el huerto pega-do a la casa. En aquella época no era lo normal.Estaban más lejos, a la afueras del pueblo. Pero nos-otros estábamos cocinando y si necesitábamos unacebolla o un tomate, pues solo teníamos que salir ycogerlo. Era un lujo.

¿Que significa para usted este huerto?

Para mí lo es todo. Muchas veces me levanto cansada,mal, sin ganas de hacer nada. Pero desayuno y digo,tengo que salir al huerto a hacer cosas y ya me animo.A mi me da la vida. Aunque muchos no lo puedancreer. Me da fuerzas.

¿Cuanto tiempo dedica cada día a trabajar esta tierra?

Depende de la temporada. Normalmente cuatro ocinco horas al día. Pero en la época de siembra o cuan-do el huerto necesita más dedicación puedo estar tra-bajando hasta 10 horas. Si están mis hijas ellas seencargan de hacer la comida y yo me dedico a mi tra-bajo. Es que siempre hay algo que hacer. Sembrar, qui-tar las hierbas, regar, recoger frutos....

Habrá mucha gente que le diga, que porqué a su edadaún sigue trabajando en la huerta...

La verdad es que muy poca gente me dice eso, porqueven lo bien que estoy. Yo sé que algún día tendré quedejarlo porque ya tengo una edad, pero de momentovoy a seguir. El día que mis hijos me digan que pare, loharé, pero será un gran dolor para mí. Además estar en

el huerto, es también es una manera de relacionarmecon la gente. Todo el mundo que sube al bar habla con-migo... hasta los que traen las bebidas me dicen: ¡quebuen huerto tiene¡.

Y, ¿como consegue que esta tierra de tan buenos fru-tos?

Yo creo que lo importante es trabajarla mucho y dedi-carle tiempo, que es lo que necesita.

Teresa cuida cada detalle. Las semillas que siembraesta especialmente elegidas por ella. Tiene sus propiossemilleros, que va plantando según la época. Aunque aveces pide a sus hijas que le traigan nueva semillas:"Porque siempre es bueno cambiar", asegura. La rota-ción en el cultivo del huerto es también importante.Tiene claro que hay hortalizas que siempre tiene queplantar en el mismo sitio, aunque hay otros productosque es bueno ir rotanto. Y es que si hay un ejemplo de superación, ese es el de

Teresa. Ni la edad, ni los problemas de salud que laobligan a utilizar para caminar, han cambiado su formade ver la vida. Su huerta, le hace seguir adelante. Estatierra se ha convertido en otro motivo para seguirluchando por vivir.

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Este apellido que nos viene al pueblo, pero muy discretamente, en segundo lugar, porvenir por madre, procede de Sarracín, su dueña se llama Isabel, casada con FranciscoFerrero. Esto ocurre en 1772 cuando tienen un hijo llamado Antonio Atilano FerreroCaballero. Ya lo hemos visto combinado con el Andrés pero siempre en segundo lugar.Mas he aquí que, digamos, por un golpe de timón inesperado pasa a primer lugar, impen-sadamente.

La que hemos visto en el apellido Andrés, Juana Caballero, casada con Juan Andréscon el cual ha tenido varios hijos, concretamente cuatro, ha quedado viuda y en 1807,tiene un desliz que se llama Silvestre Caballero Fernández, claro, lo bautizan el 31 dediciembre, es lo suyo que se llame Silvestre. Ya tenemos al apellido Caballero en primerlugar, veremos lo que da de sí. Nuestra viudita Juana tiene un segundo desliz en 1812, alque necesariamente pone el nombre de Antonio pues nace el día de S. Antonio Abad.

Sigue el Caballero en segundo lugar y en 1815 nace María Caballero Peláez, hija deJuan Caballero y Dominga Peláez, él natural de Cabañas. En 1817, nace Manuel Antonio;en el año 1819 nace Melchora Teresa Caballero Peláez, de la que ya poseo la partida,pero en 1822, en junio, junto con su hermano Manuel, que ha nacido en enero de eseaño, es confirmada; en 1824, Francisca Javiera, ésta va a ser la mujer de Juan Blanco; en1827, Pedro; en 1830, Tomás Canturiense; en 1833, Juan Bautista; en 1834, María; en1838, Petra y Francisco.

Por otra parte en 1830, nace Pascuala Caballero Ferrero, hija de Pedro Caballero yde María Ferrero, él natural de Abejera y el padre de éste, de Cabañas; en 1833, nacePedro Regalado Caballero Ferrero; en 1837, Bernardo; en 1847, José.

El Pedro que vimos anteriormente, hijo de Juan y de Dominga y casado con Nicolasadel Río, tiene en 1854 un hijo al que llaman Juan pero que según dice en el margen,muere; en 1856, Dominga; en 1859, Isabel; en 1863, Rafaela, en 1866, Simona; en 1870,Juan.

Por otro lado, el Bernardo que hemos visto, casado con Cipriana Fínez, tiene en1862 a Benita Caballero Fínez; en 1864, a Inés.

En 1866, Francisco, el hijo de Juan y Dominga, casado con Gregoria Pérez, tienen aJuana Caballero Pérez; en 1868 a Alejandro.

Poco a poco ha ido desapareciendo del primer lugar el apellido Caballero; sinembargo en segundo lugar ha resistido con vitalidad y llevando delante muchos otros ape-llidos. De repente cuando todo hacía pensar que ya había fenecido surge en 1895,Gregorio Caballero Ratón, hijo de Juan Caballero del Río y de Anastasia Ratón Rodríguez;en 1897, Miguel y con esto nos metemos en 1900, donde la última fue María CaballeroRatón, a la que hemos conocido y fue la madre de Maruja, Justa y Eusebia, del RíoCaballero.

Como dijimos al principio, el apellido Caballero nos vino de Sarracín, pero tambiénalguno de Cabañas, pues incluso el que vino de Abejera, procedía de dicho Cabañas.

Ángel Ferrero

El apellido CABALLERO

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C E B O L L E R O S, mi pueblo (II)

Antes de 1936 y luego durante mi niñez,hasta finales de los años 50, el pueblo eraeminentemente agrícola, labrándose fincas dedistinto tamaño sobre un terreno fértil, pocopedregoso pero todo de secano. No habíapozos ni regadío posible. Por tanto a penashabía productos hortícolas. Se cultivabasobre todo trigo, cebada y patatas. Alguna vezse veían fincas de maíz , berzas y remolachapero en muy poca cantidad y para consumode los animales. También se cultivaban fruta-les como manzanos, perales , cerezos, noga-les y almendros.

Ya he dicho en otra ocasión que nohabía ganadería mas que la necesaria paralabrar las tierras y la recolección en verano yunas pocas familias poseían una o dos vacasde leche, todas en régimen estabular.Un puñado de familias poseían ovejas, peroen número muy reducido: una 4, otra 6, algu-na 8... ; y aquí sí, se “ ajustaba “ un pastor alque se le daba casa y sustento y las echabana pacer al cuidado del pastor por el pocomonte que había.Todos los días, al anochecer, volvían a casa

y la mayor parte del invierno no podían salir apastar. Para el sustento de estos animales sesembraban algunas fincas de avenas, riclas,alholvas y alfalfa que, con la paja que se obte-nía de la trilla, se almacenaba en los pajares.

Todo esto fue desapareciendo cuando aprincipio de los 60 se realizó la ConcentraciónParcelaria. Entonces desaparecieron los árbo-les que estorbaban, salvo los que estabanjunto a los arroyos o en las linderas de las par-celas, y los nogales que tenían más valor. Sesustituyó la fuerza animal por tractores y cose-chadoras cada vez más grandes y potentes.Los vecinos menos pudientes vendían las par-celas o las ponían en renta. Así las tierras seconcentraron aún más en manos de los 3 o 4labradores más fuertes, que construyerongrandes almacenes para guardar la maquina-ria y los frutos de la labranza que ya se redu-jo al trigo, cebada y patatas. El ganado tam-bién fue desapareciendo poco a poco, salvoalgunos que experimentaron comprando 6 u 8

vacas lecheras construyendo unas instalacio-nes modernas para vender la leche. Pero alpoco tiempo se fueron dando cuenta que estetrabajo era muy esclavo y poco renditivo y, lofueron dejando también.

Así se ha llegado a hoy día, como dijeen otra parte, que los pocos que quedaban, yamayores, han sido llamados por sus hijos allídonde rehicieron su nueva vida o han compra-do un piso en Medina o Trespaderne, pueblosmas grandes, donde tienen médico, escuelasy otros servicios esenciales, y han dejado elpueblo de su vida vacío de gente estable. Sinembargo, no hay un rincón de su terreno quequede sin labrar. Lo mismo ha ocurrido conotros pueblos de los 15 que forman elAyuntamiento llamado Merindad de Cuesta-Urria. En alguno, el casco urbano, ha sidocomido por la vegetación y no se ve ya, perosus tierras cultivables permanecen en explota-ción.Hoy día en Cebolleros no hay residentes fijos,pero todos los días, incluso en invierno haypersonas que vienen a hacer las faenas delcampo desde Medina de Pomar u otras pue-blos colindantes donde han fijado su residen-cia habitual o desde más lejos a pasar fines desemana o largas estancias entre Marzo yNoviembre, porque tienen aquí su casa deveraneo.

El antiguo horno del pueblo, lo hantransformado en un pequeño bar denominado“ El Whisky “, al que han adaptado una hermo-sa chimenea con su correspondiente parrilla.Raro es el fin de semana, durante todo el año,en el que un grupo de amigos y familias delpueblo o foráneos no esté celebrando unasana juerga al anochecer, alrededor del fuegoy al olor de un rico cordero, jabalí , cazuela decaracoles o setas recogidas previamente delcampo y, jugando unas buenas partidas demus hasta las tantas de la noche.

Es un sitio ideal para descansar y des-conectar de las preocupaciones y tareas coti-dianas de los demás días de la semana y apoca distancia de zonas populosas comoMedina, Burgos, Bilbao y su comarca , Vitoria,e incluso San Sebastián. Todavía hasta hacepoco, varios pajares se han transformado en

AL ENCUENTRO DE OTROS PUEBLOS

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casas confortables, se han construido algu-nas nuevas y se han remodelado las viejas.

Quizás por ser un pueblo tranquilo yaprovechando el tirón del castillo, una familiaindustriosa de Bilbao creyó ver el sitio idóneopara poner una casa rural que lleva funcio-nando dos años aunque no con el éxito queimaginaban sus promotores.

Sobre personajes ilustres nacidos enCebolleros tengo referencia de dos catedráti-cos: una catedrática de la Universidad deBarcelona y un catedrático de instituto enMadrid, así como varios maestros y profeso-res. También un arquitecto y dos aparejado-res. En el año 1968, un amigo mío me contóque había leído en eldiario ABC de Sevilla unartículo que mencionabaa CEBOLLEROS enrelación con EloyGonzalo, el famosohéroe de Cascorro quetiene una estatua en elRastro de Madrid. Deesta conversación saquéla conclusión que sumadre había nacido enCebolleros. Pero no esexactamente así.

La Historia cuenta que Eloy, en Madrid,a sus 19 o 20 años, se alistó voluntario parair a luchar a Cuba en la guerra que Españalibraba contra los independentistas cubanosy los EE.UU. que los ayudaban. Resulta que:sitiados en el pueblo de Cascorro un puñadode soldados españoles, sin defensa posible ysin vislumbrar una salida, se presentó Eloyal capitán del grupo y le dijo: “ estoy dispues-to a ir al fortín desde donde nos asan a caño-nazos y pegarle fuego, si me atáis con uncordel para recoger mi cuerpo herido o micadáver una vez que se haya quemado esefortín agresor” y el capitán contestó: “ solda-do Eloy, en tus manos están nuestras vidas;que Dios te guíe “. Y allá fue Eloy atado consu cuerda y provisto de una lata de petroleoen una mano y una mecha encendida en laotra. Ardió el fortín y los soldados se salva-ron. Eloy murió pocos meses después de

paludismo a los 21 años de edad. ¿ Pero quienes fuero sus progenito-

res? A raíz de la conversación con mi amigoen 1968 investigué en el ABC y me cercioréque, un día el médico Miguel A. SáizAntomil, hijo de un teniente coronel que

luchó en Cuba, se lo contó a Luis MartínezKleiser del periódico ABC de Sevilla y fuepublicado en Febrero de 1968, y dice así:

A mediados del siglo XIX vivía enColima ( situado en el barrio cántabro deSoba) D. Manuel García Torre que fue maes-tro del pueblo durante 44 años casado condoña Josefa López, de cuyo matrimonionacieron varios hijos, y una de ellas ( hermo-

sa por cierto ) fueEugenia. Ésta, en sutemprana juventud,llegó a tener relacio-nes, bajo promesa dematrimonio ( que luegono cumplió ) conAntonio González, delmismo pueblo. Comofruto de estos amoresnació en secreto, enMadrid en 1876y depositado en lainclusa, nuestro héroe

, a quien le pusieron el nombre de Eloy y deapellido Gonzalo, transformación del deGonzález, por si algún día fuera necesaria suidentificación. Andando el tiempo y curada yala herida moral del pasado recuerdo, lamadre de Eloy, Eugenia, se casó conRicardo Fernández del Moral, albañil deCebolleros, próximo a Nofuentes, muriendosin sucesión “. Así pues, la única relación queexiste entre el Héroe de Cascorro yCebolleros es que su padrastro era de allí,pero sin haberse conocido entre sí.

Os propongo que lo visitéis, si tenéisocasión; especialmente en verano que habrámás gente. En cualquier caso allí os esperael castillo, la iglesia, la casa rural y otrasmuchas casas de buena fábrica para su con-templación y no quedaréis defraudados.

Leopoldo Ruiz

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A LA SIERRA DE LA CULEBRA

Sierra de La Culebrade nombre te llaman,tan verde y tan brava.

Tus raíces nacenen tierras zamoranas.

Estamos en Sesnández,tierra muy cercana,

tan sólo a dos yardasdesde mi ventana.En mañanas claras

cuando te despiertasnos alegra el almay en tus entrañas

fresca nace el aguaque aquellos labriegos

antaño llegabana calmar su sed

de largas jornadas.Yo no sé alabarte

como desearapues mi pobre plumaya está muy gastada;qué serán los años

que nada perdonan,pero pensad todos

que aquí pongo el almay siempre esperandoque llegue el verano

para yo también beber de sus aguas.

Mercedes Cánovas.Sevilla.

EN SESNANDEZ NO HAY MAR

Sesnández no tiene martampoco muelles ni barcas,

pero cuando yo viví allíhabía cholas y albarcas.

------En Sesnández no hay mar

ni cigalas, ni almejas,tan solo un par de rebañosy los dos son de ovejas.

------En Sesnández no hay maraquí solo existen tierras,

que con sudor sus vecinossacan sus frutos de ellas.

------En Sesnández no hay mar

pero hay lobos en la sierra,que no les puedes tocarni declararle la guerra.

------En Sesnández no hay marni es grande su riqueza,la sierra le da un fragor…

que se trasforma en limpieza.------

En Sesnández no hay marpero quedan varias fuentes,

que puedes saciar la sedsin temor a que revientes.

------En Sesnández no hay marpero hay centeno y trigoque ya no va ni a la era

ni en costales al molino.------

¿Qué en Sesnández no hay mar?lo saben hasta los lerdos,pero tiene otros encantos

que otros quisieran tenerlos.

Pedro del Río Canas

Rincón Poético

LA HERMOSURA DE LO PEQUEÑO

¡Mira ese pastor,con el calor que hace!

Venía en el coche con mi amigo Luis, eran las seis de la tarde, (los partes mete-orológicos han anunciado que hoy será el día más caluroso del año, llegaría-mos a los 48 grados), cuando en el rastrojo cercano a mi casa había un pastorcon un rebaño de 83 ovejas recién esquiladas, e inmediatamente pensamosen el calor que estaría pasando mientras que otros no nos atrevemos ni a salira la calle y el aire acondicionado nos refresca a cualquier hora.

Luis me dejó en la puerta y él se fue a su parroquia, me lavé la cara conagua fresca y seguí pensando en ese pastor y en el tremendo calor. Quise fun-dirme en su realidad y fui a su encuentro.

Ese hombre, Fulgencio se llamaba, me acogió con simpatía sanadora altiempo que el perro custodio movía su rabo y se iba acercando a mi lado.

Habló conmigo del duro trabajo de pastorear y lo que supone cuidar elrebaño, (es el único rebaño que queda por aquí). Visita su ganado a cualquierhora. Pierde su tiempo y esa es su ganancia, y me contagiaba con sus ganas.Se emocionó echándose a llorar, por el trato despiadado del progreso, y lomás sorprendente fue que no se refería únicamente a las ovejas, a los corde-ros, sino al devenir del mundo y de las personas. Sacó de la mochila dos librosy una radio (sus compañeros para las largas horas, así me refirió). Un libro erauna antología poética de Miguel Hernández, el otro los Santos Evangelios.“Dios nos habla de muchas formas”, me expresó. Yo me quedé boquiabierto ymás evangelizado.Fulgencio me ofreció un trago de agua con vinagre, (dijo que me calmaríamejor la sed). Sin lugar a dudas que el día más caluroso del año experimentéel regalo de la luna en horas de pleno sol, y ese pastor llenó mi alma comohacen los amigos de Dios, a pesar de las horas abrasadoras.Volví a casa entusiasmado y le llevé una cerveza. Dejé a Fulgencio cuando elsol dejaba su pesada luz y aún hoy sigo dando gracias a Dios por el pastor queme ayudó a crecer en la fe.

José María Avendaño

1El Cañico

Agosto 2010

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1 El Cañico25

“Teología para Mario”

¿Qué es la Teología? El conocimiento de Dios a través de los hechos quevan sucediendo a lo largo de la Historia. ¿Quién es Mario? Es el personaje a quien se dirige el libro, un joven denuestros días, un estudiante responsable, de carácter abierto y cariñoso,que es feliz de pasar unos días en el pueblo que le ha visto crecer,Sesnandez, junto a sus padres Antonino y Carmen. A través de la lectura del libro, se descubre lavida diaria en Sesnandez, la lucha de los mayo-res por transmitir los valores de un pueblo, laexperiencia vital que llena a los hombres ymujeres que se sitúan del lado de los sencillosy buscan la experiencia de Dios en cadaencuentro, en cada sonrisa, en cada esquina.Porque si algo refleja este libro, son las raícesprofundas en las que Antonino, su autor, hacimentado toda su vida y la de su familia yamigos: el cariño a su pueblo, su esposa, suspadres, el amasado del pan, la huerta, la natu-raleza…Su lucha por ser coherente con lo quesiente y piensa y de fondo Jesús de Nazaret, suEvangelio y su mensaje.Y esto que es todo un testamento vital, la mejor herencia, lo quiere depo-sitar en el corazón y en las manos de su hijo Mario, para que le sirva a él,a otros jóvenes y a todo el que quiera dedicar unos minutos a leerlo, de tes-timonio y de recuerdo, a la vez que facilita la reflexión y el encuentro conJesús de Nazaret, con su mensaje de amor, solidaridad, cercanía y transfor-mación personal y social.Es un libro sencillo pero profundo, fácil de leer pero comprometido con lavida y la realidad. Es un libro que puede llegar a hacer comprender al lec-tor lo importante que es la responsabilidad y el compromiso personal, seacual sea su edad o condición, porque parte de la propia raíz de la vida: ELAMOR.

Agosto2010Un libro para disfrutar

La Conservación del Medioambiente:Una actitud cristiana

Según se explica en el Catecismo Cristianosobre los Diez Mandamientos, el séptimo,no robarás, exige el respeto de la integridadde la Creación. Los animales, como las plan-tas y los seres inanimados, están natural-mente destinados al bien común de laHumanidad pasada, presente y futura. Yabunda, diciendo: “el uso de los recursosminerales, vegetales y animales delUniverso no puede ser separado del respetoa las exigencias morales”.Como bien sabemos, en la Biblia, los dosrelatos del libro del Génesis nos sitúan en unauténtico resumen de la fe en todo lo crea-do, puesto que lo hecho por Dios está bienhecho, según la conocida formulación bíbli-ca: “y vio Dios que todo era bueno”. Y enton-ces, encomendó Dios al Hombre “hacersecargo” de su Creación: cuando uno “está acargo” de algo, significa que debe estarcomprometido con ello, es decir que debedesarrollar un liderazgo moral y ejemplari-zante, en este caso sobre el Medioambiente. Sin embargo, lejos de exigencias, compro-misos o mandatos que a todos nos resultanimpositivos y, por ello, difíciles de asumir ymás aún de cumplir, nos es mucho másreconfortante encontrarnos con ejemplos depersonas que hicieron de su vida una prácti-ca constante de esa supuesta “exigencia” o“compromiso”, entendiendo al Mundo y másconcretamente, a la Naturaleza, como laobra más bella jamás creada. Nos estamosrefiriendo a Francisco de Asís. SanFrancisco llamaba a los animales, al fuego yal agua, “hermanos” y “hermanas”, puestodas las criaturas provienen de la mismafuente y, por tanto, en cierto sentido, todosson miembros de una “familia”. Esta visiónde una creación comunitaria fue captadapoéticamente en su llamado “Cántico delHermano Sol” escrito en el verano de 1226. Así visto, la idea del ecologismo y la conser-vación de la Naturaleza no es nada nueva

para los cristianos; sin embargo, sí es ciertoque a lo largo de los últimos años ha crecidoel interés y la sensibilidad social, sobre todoen las sociedades del llamado primermundo, hacia temas relacionados con el cui-dado del Medioambiente. Nadie niega ennuestros días que estamos ante un tema decapital importancia, ya que hablamos, nimás ni menos, que de la conservación delorden natural, del cuidado de la MadreTierra, casa común de los hijos de Dios. Con cosas tan sencillas como reutilizar lashojas impresas por una cara para por la otra,por ejemplo, trabajar en nuestras tareasescolares, arrojar siempre los papeles a loscubos de basura, mantener una buena lim-pieza de nuestras casas por dentro y porfuera, cuidar de los árboles propios y ajenosno arrancando ramas sin sentido, cuidar delas plantas que estén a nuestros alrededor,evitar que nuestros vehículos contaminen elaire, o acciones similares a estas, seguire-mos el ejemplo de San Francisco, quien, asu vez, como ya hiciera Jesús e imitando suejemplo, dedicó su vida a los demásmediante actos sencillos y llenos de bondadhacia todos sus “hermanos”, para Franciscolos humanos y los que no lo eran tanto. En definitiva, se trata de una actitud ante lavida, más que de un compromiso, de unaexigencia o de un mandato; y para ello no esnecesario involucrarse con ningún movi-miento ecologista, ni pretender liderar accio-nes mediáticamente relevantes, con las queen muchas ocasiones buscamos además elreconocimiento de los demás; es suficientecon que la “familia” en la que creía SanFrancisco de Asís y que cuidaba con tantoesmero, mantenga unidos a todos susmiembros, ¡que no es poco!

A. Muñoz del Viejo

1El Cañico

Agosto 2010

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Desde estas paginas del mes de agosto os animaba a aportar ideas paraacometer la rehabilitación del Molino, pero veo que no hay ideas o no inte-resa el tema, de todas las maneras en las fiestas del pueblo os enseñe unamaqueta de lo que yo considero como seria dicha rehabilitación.

El otro dia en el Diario de Zamora hablaban de que existe una asociaciónllamada El Cigüeñal que se dedica de forma altruista a la rehabilitación delpatrimonio cultural, de echo parece que organizan todos los años un con-curso llamado Ayúdanos a conservar el patrimonio, este año a ganado elconcurso la rehabilitación del Molino de La Ribirica situado en Figueruelade Abajo.

También existe otra Asociación llamada Amigos de Los Molinos en Toro quetambién colabora en estos menesteres.

Que os parecería si nos pusiéramos en contacto con ellos.

Este invierno como sabréis ha llovido bastante en el pueblo y tuve la opor-tunidad de ver como La Zuda del Molino estaba llena y corría el agua, ospongo unas fotos.

MIGUEL GARCIA

El Cañico

Agosto 2010El Molino

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Profesor: " ¿Qué debo hacer para repartir 11 patatas por 7 personas?"Alumno: "Puré de patata, señor profesor."

Profesor: "Joaquín, diga el presente del indicativo del verbo caminar."Alumno: "Yo camino, tú caminas, él camina..."Profesor: " ¡Más deprisa!”Alumno: "Nosotros corremos, vosotros corréis, ellos corren."

Profesor: "llovía", ¿qué tiempo es?" Alumno: "Es un tiempo muy malo, señor profesor."

Profesor: "Paco, diga 5 cosas que contengan leche." Alumno: "Sí, señor profesor. Un queso y 4 vacas"

Profesor preguntando en un examen oral a un alumno de Derecho :"¿Qué es un fraude?" Contesta el alumno: "Un fraude es lo que está haciendo usted." El profesor indignado" ¿Cómo es eso?" Dice el alumno: "Según el código penal, comete fraude todo aquél que se aprovecha de la ignoran-cia del otro para perjudicarlo."

Profesora: "María, señale en el mapa dónde queda América del Norte!" María: "Aquí está" Profesora: "Correcto. Ahora los demás respondan "¿Quién descubrió América?" Los demás: "María"

Profesora: "Arturo, tu redacción "Mi perro" es exactamente igual a la de tu hermano. ¿La has copia-do?"

Arturo: " No, profesora, el perro es que es el mismo."

1El Cañico

Agosto 2010

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Para Pasar un buen rato

1 El Cañico

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17, 18,19 y 20 de Septiembre 2010

Bailes, Verbenas

JuegosDisfracesHornazo

Ciervo al poteChocolatada

Y muchas sorpresas

SESNÁNDEZ EN FIESTAS

1El Cañico

Agosto 2010

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Revista de la Asociación CulturalSierra de Sesnández

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