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RESUMEN PARA FINAL DE TEORIA POLITICA PROFESOR: GERMAN SOPRANO UNIDAD I, LA TEORÍA POLITICA Y DEL ESTADO EN LOS ORIGENES DE LA MODERNIDAD EL ESTADO ABSOLUTISTA, ANDRESON PERRY Prologo El objeto de esta obra es intentar un análisis comparado de la naturaleza y desarrollo del estado absolutista en Europa. Examinar el absolutismo europeo simultáneamente “en general” y “en particular”; es decir, tanto las estructuras puras del estado absoluto, que lo constituyen como una categoría histórica fundamental, como las variantes impuras que presentan las específicas y diversas monarquías de la Europa pos medieval. En este estudio no hay un medio temporal uniforme, precisamente porque los tiempos de los principales absolutismos de Europa, oriental y occidental, fueron enormemente diversos, y esa misma diversidad es constitutiva de sus respectivas naturalezas como sistemas de estado. El absolutismo español sufrió su primera gran derrota a finales del siglo XVI en los países bajos; el absolutismo ingles fue derribado a mediados del siglo XVII; el absolutismo francés duro hasta final del siglo XVIII, el absolutismo prusiano sobrevivió hasta finales del siglo XIX, el absolutismo ruso solo fue derrocado en el siglo XX. Las amplias diferencias en la cronología de estas grandes estructuras correspondieron inevitablemente a una profunda diversidad en su composición y evolución. El absolutismo es le primer sistema estatal internacional en el mundo moderno. Cap. 1: El estado absolutista en occidente. La larga crisis de la economía y la sociedad europea durante los siglos XIV y XV pusieron de manifiesto las dificultades y los límites del modo de producción feudal. ¿Cuál fue el resultado político final de las convulsiones continentales de esa época? En el siglo XVI apareció en occidente el estado absolutista. Las monarquías centralizadas de Francia, Inglaterra y España representaron una ruptura decisiva con la soberanía piramidal y fragmentada de las formaciones sociales medievales, con sus sistemas de feudos y estamentos. Engels afirmaba que la condición fundamental de la antigua monarquía absoluta era le equilibrio ente la nobleza terrateniente y la burguesía. Pero esta clasificación se desliza hacia la designación de un tipo de estado burgués, en el cual la nobleza feudal fue obligada a comprender que el periodo de su dominación social y política había llegado a su fin. Para Marx las estructuras administrativas del nuevo estado absoluto eran un instrumento específicamente burgués. Las monarquías absolutas introdujeron unos ejércitos y unas burocracias permanentes, un sistema nacional de impuestos, un derecho codificado y los comienzos de un mercado unificado. Todas estas características parecen ser eminentemente capitalistas, y coinciden con la desaparición de la servidumbre. Sin embargo, un estudio mas detenido de las estructuras del estado absolutista en occidente niega inevitablemente la validez de tales juicios. El fin de la servidumbre no significó por sí mismo la desaparición de las relaciones feudales en el campo. Durante toda la temprana edad moderna, la clase económica y políticamente dominante fue, pues, la misma que en la era medieval. La aristocracia feudal. Esta nobleza sufrió una profunda metamorfosis durante los siglos siguientes al fin de la edad media, pero desde el comienzo hasta el final de la historia del absolutismo nunca fue desalojada de su dominio del poder político. El absolutismo fue esencialmente eso: un aparato reorganizado y potenciado de dominación feudal, destinado a mantener a las masas campesinas en su posición social tradicional. El estado absolutista nunca fue árbitro entre la aristocracia y la burguesía ni mucho menos, un instrumento de la naciente burguesía contra la aristocracia: fue el nuevo caparazón político de una nobleza amenazada. El feudalismo como modo de producción se definía originalmente por una unidad orgánica de economía y política. Con la conmutación generalizada de las cargas por una renta en dinero, la unidad celular de la opresión política y económica del campesinado se vio gravemente debilitada y en peligro de disolución. El poder de clase de los señores feudales quedo, directamente amenazado por la desaparición gradual de la servidumbre. El resultado fue un desplazamiento de la coerción

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RESUMEN PARA FINAL DE TEORIA POLITICA

RESUMEN PARA FINAL DE TEORIA POLITICA

PROFESOR: GERMAN SOPRANO

UNIDAD I, LA TEORA POLITICA Y DEL ESTADO EN LOS ORIGENES DE LA MODERNIDAD

EL ESTADO ABSOLUTISTA, ANDRESON PERRY

PrologoEl objeto de esta obra es intentar un anlisis comparado de la naturaleza y desarrollo del estado absolutista en Europa. Examinar el absolutismo europeo simultneamente en general y en particular; es decir, tanto las estructuras puras del estado absoluto, que lo constituyen como una categora histrica fundamental, como las variantes impuras que presentan las especficas y diversas monarquas de la Europa pos medieval. En este estudio no hay un medio temporal uniforme, precisamente porque los tiempos de los principales absolutismos de Europa, oriental y occidental, fueron enormemente diversos, y esa misma diversidad es constitutiva de sus respectivas naturalezas como sistemas de estado. El absolutismo espaol sufri su primera gran derrota a finales del siglo XVI en los pases bajos; el absolutismo ingles fue derribado a mediados del siglo XVII; el absolutismo francs duro hasta final del siglo XVIII, el absolutismo prusiano sobrevivi hasta finales del siglo XIX, el absolutismo ruso solo fue derrocado en el siglo XX. Las amplias diferencias en la cronologa de estas grandes estructuras correspondieron inevitablemente a una profunda diversidad en su composicin y evolucin. El absolutismo es le primer sistema estatal internacional en el mundo moderno.

Cap. 1: El estado absolutista en occidente.

La larga crisis de la economa y la sociedad europea durante los siglos XIV y XV pusieron de manifiesto las dificultades y los lmites del modo de produccin feudal. Cul fue el resultado poltico final de las convulsiones continentales de esa poca? En el siglo XVI apareci en occidente el estado absolutista. Las monarquas centralizadas de Francia, Inglaterra y Espaa representaron una ruptura decisiva con la soberana piramidal y fragmentada de las formaciones sociales medievales, con sus sistemas de feudos y estamentos. Engels afirmaba que la condicin fundamental de la antigua monarqua absoluta era le equilibrio ente la nobleza terrateniente y la burguesa. Pero esta clasificacin se desliza hacia la designacin de un tipo de estado burgus, en el cual la nobleza feudal fue obligada a comprender que el periodo de su dominacin social y poltica haba llegado a su fin. Para Marx las estructuras administrativas del nuevo estado absoluto eran un instrumento especficamente burgus.

Las monarquas absolutas introdujeron unos ejrcitos y unas burocracias permanentes, un sistema nacional de impuestos, un derecho codificado y los comienzos de un mercado unificado. Todas estas caractersticas parecen ser eminentemente capitalistas, y coinciden con la desaparicin de la servidumbre. Sin embargo, un estudio mas detenido de las estructuras del estado absolutista en occidente niega inevitablemente la validez de tales juicios. El fin de la servidumbre no signific por s mismo la desaparicin de las relaciones feudales en el campo. Durante toda la temprana edad moderna, la clase econmica y polticamente dominante fue, pues, la misma que en la era medieval. La aristocracia feudal. Esta nobleza sufri una profunda metamorfosis durante los siglos siguientes al fin de la edad media, pero desde el comienzo hasta el final de la historia del absolutismo nunca fue desalojada de su dominio del poder poltico.

El absolutismo fue esencialmente eso: un aparato reorganizado y potenciado de dominacin feudal, destinado a mantener a las masas campesinas en su posicin social tradicional. El estado absolutista nunca fue rbitro entre la aristocracia y la burguesa ni mucho menos, un instrumento de la naciente burguesa contra la aristocracia: fue el nuevo caparazn poltico de una nobleza amenazada.

El feudalismo como modo de produccin se defina originalmente por una unidad orgnica de economa y poltica. Con la conmutacin generalizada de las cargas por una renta en dinero, la unidad celular de la opresin poltica y econmica del campesinado se vio gravemente debilitada y en peligro de disolucin. El poder de clase de los seores feudales quedo, directamente amenazado por la desaparicin gradual de la servidumbre. El resultado fue un desplazamiento de la coercin poltica e un sentido ascendente hacia una cima centralizada y militarizada: el estado absolutista. La coercin diluida en el plano de la aldea, se concentro en el plano nacional. El resultado de este proceso fue un aparato reforzado de poder real, cuya funcin poltica permanente era la represin de las masas campesinas y plebeyas en la base de la jerarqua social.

Con la reorganizacin del sistema poltico feudal en su totalidad, y la disolucin del sistema original de feudos, la propiedad de la tierra tendi a hacerse progresivamente menos condicional, al tiempo que la soberana se haca correlativamente ms absoluta. El efecto final de esta redistribucin del poder social de la nobleza fueron la maquinaria de estado y el orden jurdico absolutistas, cuya coordinacin habra de aumentar la eficacia del dominio aristocrtico al reducir a un campesinado no servil a nuevas formas de dependencia y explotacin. Los estados monrquicos del renacimiento fueron instrumentos modernizados para el mantenimiento del dominio nobiliario sobre las masas rurales. Al mismo tiempo, la aristocracia tena que adaptarse a un nuevo antagonista: la burguesa mercantil que se haba desarrollado en las ciudades medievales.

Cuando los estados absolutistas quedaron constituidos en occidente, su estructura estaba determinada fundamentalmente por el reagrupamiento feudal contra el campesinado, tras la disolucin de la servidumbre; pero estaba sobredeterminada secundariamente por el auge de una burguesa urbana que, tras una serie de avances tcnicos y comerciales, estaba desarrollando ya las manufacturas preindustriales en un volumen considerable. El orden estatal sigui siendo feudal mientras la sociedad se haca cada vez mas burguesa.

El resurgimiento del derecho romano ocurri en la era del renacimiento, correlativamente con la del absolutismo. Econmicamente, la recuperacin e introduccin del derecho civil favoreci el desarrollo del capital libre en al ciudad y en el campo, puesto que a gran nota distintiva del derecho civil romano haba sido su concepcin de una propiedad privada absoluta e incondicional. La recepcin del derecho romano en Europa fue un signo de la expansin de las relaciones capitalistas en las ciudades y en el campo: econmicamente, responda a los intereses vitales de la burguesa comercial y manufacturera. Polticamente, el resurgir del derecho romano corresponda a las exigencias constitucionales de los estados feudales reorganizados de la poca.

El auge de la propiedad privada desde abajo, se vio equilibrado por el aumento de la autoridad pblica desde arriba, encarnada en el poder discrecional del monarca. El principal efecto de la modernizacin jurdica fue el reforzamiento del dominio de la clase feudal tradicional.

La guerra era le modo ms racional y rpido de que dispona cualquier clase dominante en el feudalismo para expandir la extraccin de excedente. La definicin social de la clase dominante feudal era militar. A especifica racionalidad econmica de la guerra en esa formacin social es la maximizacin de la riqueza y su papel no puede compararse a que desempea en las formas desarrolladas del modo de produccin que le sucede, dominado por el ritmo bsico de la acumulacin de capital y por el cambio incesante y universal (Marx) de los fundamentos econmicos de toda formacin social, la nobleza fue una clase terrateniente cuya profesin era la guerra: su vocacin social no era solo un mero aadido externo, son una funcin intrnseca a su posicin econmica. La guerra no era el deporte de los prncipes, sino su destino. La guerra les atraa como una necesidad social de su estado. Un prncipe no puede tener otro objeto ni otro pensamiento, ni cultivar otro arte ms que la guerra, el orden y la disciplina de los ejrcitos, porque este es el nico arte que se espera ver ejercido por el que manda (Maquiavelo). Los estado absolutistas eran maquinas construidas especficamente para el campo de batalla.

La burocracia civil y el sistema de impuestos caractersticos del estado absolutista no fueron menos paradjicos. En modo de integracin de la nobleza feudal en el estado absolutista que prevaleci en occidente adopto la forma de adquisicin de cargos. El que compraba privadamente una posicin en el aparato pblico del estado la amortizaba por medio de la corrupcin y los privilegios autorizados (sistema de honorarios). El desarrollo de la venta de cargos fue uno de los ms llamativos subproductos del incremento de monitorizacin de las primeras economas modernas y del relativo ascenso, dentro de estas, de la burguesa mercantil y manufacturera. Pero la integracin de esta ultima en el aparato del estado, por medio de la compra privada y de la herencia de posiciones y honores pblicos, tambin pone de manifiesto su posicin subordinada dentro de un sistema poltico-feudal en el que la nobleza constituyo siempre, necesariamente, el cima de la jerarqua social.

La transicin econmica de las prestaciones en trabajo a las rentas en dinero vino acompaada, en occidente, por la aparicin de impuestos reales para financiar la guerra que, en la larga crisis feudal de finales de la edad media, ya fueron de las principales causas de los desesperados levantamientos campesinos de la poca. De todos los males que afligan a los campesinos, los que am sufran eran los que provenan de las cargas de la guerra y de los remotos impuestos. No exista ninguna concepcin del ciudadano jurdico. La clase seorial, en la prctica y en todas partes, estaba realmente exenta del impuesto directo.

Las funciones econmicas del absolutismo no se redujeron, sin embargo a su sistema de impuestos y de cargos. El mercantilismo, doctrina dominante de la poca, exiga la supresin de las barreras particularistas opuestas al comercio dentro del mbito nacional, esforzndose por crear un mercado interno unificado para la produccin de mercancas. Al pretender aumentar el poder del estado en relacin con los otros estados, el mercantilismo alentaba la exportacin de bienes a la vez que prohiba la de metales preciosos de moneda, en la creencia de que exista una cantidad fija de comercio y riqueza en el mundo. El mercantilismo representaba exactamente las concepciones de una clase dominante feudal que se haba adaptado a un mercado integrado, pero preservando su visin esencial sobre la unidad de lo que Bacon llamaba consideraciones de abundancia y consideraciones de poder. La teora del laissez faire seria siempre pacifista, buscan que los beneficios de la paz entre la naciones incrementaras un comercio internacional mutuamente ventajoso, la teora mercantilista era profundamente belicista al hacer hincapi en la necesidad y rentabilidad de la guerra.

El comercio y la guerra no fueron las nicas actividades externas del estado absolutista en occidente. So otro gran esfuerzo se dirigi a la diplomacia. La contraccin de la pirmide feudal en las nuevas monarquas centralizadas de la Europa renacentista produjo, por vez primera, un sistema formalizado de presin e intercambio interestatal, con el establecimiento de la nueva institucin de las embajadas recprocamente asentadas en el extranjero y comunicaciones e informes diplomticos secretos, protegidos por el nuevo concepto de extraterritorialidad. El mecanismo supremo de la diplomacia era le matrimonio, espejo pacifico de la guerra, que tantas veces provoco. Las maniobras matrimoniales, menos costosas como va de expansin territorial que la agresin armada, proporcionaba resultados menos inmediatos y estaban sujetas `por ello a impredecibles azares de mortalidad en el intervalo anterior a la consumacin de un pacto nupcial o su goce poltico.

El estado feudal del absolutismo estuvo, a pesar de todo, constante y profundamente sobredeterminado por el crecimiento del capitalismo en el seno de las formaciones sociales mixtas del primer periodo moderno. Estas formaciones eran una combinacin de diferentes modos de produccin bajo el dominio decadente de uno de ellos: el feudalismo.

La burguesa de occidente posea ya suficiente fuerza para dejar su borrosa huella sobre le estado del absolutismo. La aparente paradoja del absolutismo en occidente fue que representaba fundamentalmente un aparato para la proteccin de la propiedad y los privilegios aristocrticos, pero que, al mismo tiempo, los medios por los que se realizaba esta proteccin podan asegurar simultneamente los intereses bsicos de las nacientes clases mercantiles y manufactureras. El estado absolutista realizo algunas funciones parciales en la acumulacin originaria necesaria para el triunfo final del modo de produccin capitalista. Las razones por las que pudo llevar a cabo esa funcin dual residen en la naturaleza especfica de los capitales mercantil y manufacturero: como ninguno de ellos se basaba en la produccin en masa caracterstica de la industria maquinizada propiamente dicha, tampoco exigan una ruptura radical con el orden agrario feudal que todava encerraba a la vasta poblacin. Esos capitales podan desarrollarse dentro de los lmites establecidos por el marco feudal reorganizado.

La centralizacin econmica, el proteccionismo y la expansin ultramarina engrandecieron al ltimo estado feudal a la vez que beneficiaban a la primera burguesa. Incrementaron los ingresos fiscales del primero al proporcionar oportunidades de negocio a la segunda.

El carcter irreductiblemente feudal del absolutismo permaneci. Era un estado basado en la supremaca social de la aristocracia y limitado por los imperativos de la propiedad de la tierra. La nobleza poda depositar el poder en la monarqua y permitir el enriquecimiento de la burguesa, pro las masas estaban todava a su merced. En el estado absolutista nunca tuvo lugar un desplazamiento poltico de la clase noble. Su carcter feudal ac frustrando y falsificando uno y otra vez sus promeses al capital. Ejercito, burocracia, diplomacia y dinasta formaban un inflexible complejo feudal que regia toda la maquinaria del estado y guiaba sus destinos. La dominacin del estado absolutista fue al dominacin de la nobleza feudal en al poca de la transicin al capitalismo. Su final sealara la crisis del poder de esa clase: la llegada de las revoluciones burguesas y la aparicin del estado capitalista.

Cap. 2: clase y estado. Problemas de periodizacin.

El estado absolutista sufri modificaciones significativas en los 3 o 4 siglos de su existencia. La periodizacin real del absolutismo en occidente debe buscarse en la cambiante relacin entre la nobleza y la monarqua, y en los mltiples y concomitantes virajes polticos que fueron su correlato.

La ordenada jerarqua feudal de homenaje y lealtad personal, las asambleas de los estados corporativos ejerciendo sus derechos de votar impuestos y deliberar obre los asuntos del reino, el carcter informal de una administracin mantenida parcialmente por la iglesia, todo eso formaba un lgico y trabado sistema poltico que ataba ala clase noble a un estado con el cual, a pesar y en medio de constantes conflictos con monarcas especficos, formaban un todo. El tipo de causalidad histrica provocadora de la disolucin de la unidad originaria de explotacin extraeconmica en la base de todo el sistema social, por medio dela expansin de la produccin e intercambio de mercancas, y su nueva centralizacin en la cspide, no era visible en el interior de su universo categorial. Para muchos nobles, el cambio signific una oportunidad de fortuna y de fama; para muchos otros significo la indignidad o la ruina; para la mayora, entrao un largo y difcil proceso de adaptacin y reconversin, a travs de sucesivas generaciones, antes de que se restablecieran precariamente una nueva armona ente clase y estado.

La monarqua absoluta de occidente estuvo siempre doblemente limitada: por la persistencia de los organismos polticos tradicionales que estaban por debajo de ella y por la presencia de la carga excesiva de una ley moral situada por encima de ella. El poder del absolutismo operaba, en ltimo trmino, dentro de los necesarios lmites de la clase cuyos intereses afianzaba. El aumento de la burocratizacin de los cargos produjo, a su vez, nuevos tipos de altos administradores, que se reclutaban normalmente de la nobleza y esperaban los beneficios convencionales de cargo.

La extensin de la guerra, la burocratizacin de los cargos, la intensificacin de los impuestos, la erosin de las clientelas: todo empujaba en la misma direccin, hacia la eliminacin de lo que Montesquieu habra de teorizar con nostalgia, e el siglo siguiente, como los poderes intermedios entre la monarqua y el pueblo. En otras palabras, las asambleas de estados se hundieron progresivamente a medida que el poder de clase de la nobleza asuma la forma de una dictadura centrpeta ejercida bajo la enseanza real.

El siglo XVII fue escena de repetidas rebeliones locales nobiliarias contra el estado absolutista de occidente, peor esta reaccin nunca pudo convertirse en un asalto unido y total de la aristocracia contra la monarqua, porque ambas estaban unidas entre si por un cordn umbilical de clase. Todo ello fue necesariamente as porque ninguna clase dominante feudal poda echar por la borda los avances alcanzados por el absolutismo, que eran la expresin de profundas necesidades histricas que se abran paso por si mismas en todo el continente, sin poner en peligro su propia existencia. Pero el carcter parcial o regional de estas luchas no minimiza su significado: os factores de autonomismo local se limitaban a condensar una desafeccin difusa, que frecuentemente exista en toda la nobleza, y le daban una forma poltico-militar violenta.

Esta es la explicacin de la aparente paradoja de la trayectoria posterior del absolutismo en occidente. Porque si e siglo XVII es el medioda tumultuoso y confuso de las relaciones entre clase y estado dentro del sistema total de dominio poltico de la aristocracia, el siglo XVIII es, en comparacin, el atardecer dorado de su tranquilidad y reconciliacin. Una nueva estabilidad y armona prevalecieron, a medida que cambiaba la coyuntura econmica internacional y comenzaban cien aos de relativa prosperidad en la mayor parte de Europa, mientras la nobleza volva a ganar confianza en su capacidad para regir los destinos del estado.

Con esta situacin de fondo se extendi por toda Europa una cultura cosmopolita y elitista de corte y saln, tipificada por la nueva preeminencia del francs como idioma internacional del discurso diplomtico y poltico. Naturalmente, debajo de ese barniz esta la cultura estaba mucho mas profundamente penetrada que nunca por as ideas de la burguesa ascendente, que ahora encontraba una triunfante expresin en la ilustracin. El peso especifico del capital mercantil y manufacturero aumento en la mayora de las formaciones sociales de occidente durante este siglo que presencio la segunda gran ola de expansin comercial o colonial ultramarina.

Conclusiones

A diferencia del modo de produccin esclavista que le precedi y del modo de produccin capitalista que le sigui, el modo de produccin feudal como tal no se prestaba a un expansionismo imperialista en gran escala. Aunque cada una de las clases seoriales luchara incesantemente apara ampliar el rea de su poder por medio de la agresin militar, la construccin de grandes imperios territoriales era imposible debido al sistemtico hendimiento de la autoridad que defina al feudalismo de la Europa medieval.

El feudalismo en cuanto categora histrica fue un trmino acuado por la ilustracin. Desde el mismo momento en que entro en circulacin, se debati el problema de si el fenmeno haba existido fuera de Europa, que fue quien le dio el nombre. Montesquieu declaro que era totalmente singular: el feudalismo fue un hecho que acaeci una sola vez en el mundo y que probablemente nunca volver a repetir. En desacuerdo Voltaire es igualmente conocido: el feudalismo no es un acontecimiento, sino una forma muy antigua que, con diferentes administraciones, subsiste en tres cuartas partes de nuestro hemisferio. Y en realidad, el feudalismo fue, desde luego, una forma institucional antes que un acontecimiento instantneo, pero la amplitud de las diferencias de administracin que se le atribuan tendieron a vaciarlo de una identidad determinada.

El modo de produccin feudal fue, en Europa, el resultado de una fusin de elementos liberados por el choque y la disolucin de os modos antagnicos de produccin anteriores a el. El modo de produccin esclavista de la antigedad clsica y los modos de produccin primitivo-comunales de las poblaciones tribales de su periferia. La lenta sntesis romano-germnica en la era oscura produjo finalmente la nueva civilizacin del feudalismo europeo. La historia especifica de todas las formaciones sociales que existieron en la Europa medieval y moderna estuvo marcada por la incidencia diferencial de esta sntesis primeria que dio origen al feudalismo.

A partir del renacimiento, Europa llevo a cabo la transicin hacia el capitalismo bajo su propio impulso en un proceso de incesante expansin global. La revolucin industrial, que, gracias a la acumulacin originaria de capital, se pone en marcha en escala internacional a comienzos de la poca moderna, fue una combustin espontanea y gigantesca de las fuerzas de produccin, sin igual en su poder y universal en su alcance.

Lo que hizo posible en Europa el paso singular hacia el capitalismo fue la concatenacin de la antigedad y el feudalismo. En otras palabras, para captar el secreto de la aparicin del modo de produccin capitalista en Europa es necesario descartar de la forma mas radical posible toda concepcin que reduzca el proceso a una simple subsuncin evolucionista de un modo de produccin inferior por un modo de produccin mas elevado, de tal manera que el uno se genera automtica y enteramente a partir del otro por una sucesin organiza, disolvindolo en consecuencia. Las formaciones sociales concretas encarnan siempre cierto nmero de modos de produccin coexistentes y conflictivos, de diversa antigedad. En efecto, el advenimiento del modo de producen capitalista en Europa solo puede entenderse desechando toda nocin puramente lineal del tempo histrico como un todo. En vez de presentar la forma de una cronologa acumulativa, en la que una etapa sucede y suplanta la anterior, para producir la siguiente que a su vez a superara la marcha hacia el capitalismo revela una supervivencia del legado de un modo de produccin dentro de una poca dominada por otro, y una reactivacin de su fuerza en el paso un tercero. La concatenacin de los modos de produccin antiguo y feudal fue necesaria para producir el modo de produccin capitalista en Europa. El pasado clsico volvi a despertar en el seno del presente feudal para asistir a la llegada del futuro capitalista, a la vez inimaginablemente distante y extraamente vecino a el. Porque el nacimiento del capital presencio tambin, el renacer de la antigedad. El renacimiento es la encrucijada de toda la historia de Europa. El doble momento de una expansin sin igual del espacio y, simultneamente, de una recuperacin el tiempo.

La frase de Marx contiene un profunda verdad si se aplica en un sentido algo diferente: la transformacin de una forma de propiedad privada, condicional, en otra forma de propiedad privada, absoluta, dentro de la nobleza terrateniente fue la preparacin indispensable de la llegada del capitalismo y marco el momento en que Europa dejo atrs a todos los dems sistemas agrarios. La consolidacin de una propiedad privad ilimitada y hereditaria constituyo un paso fundamental hacia a liberacin de los factores de produccin necesarios para la acumulacin de un verdadero capital. El orden legal surgido del renacimiento del derecho romano creo las condiciones jurdicas generales para una transicin eficaz hacia el modo de produccin capitalista, tanto en la ciudad como en el campo. Al renacimiento del derecho romano acompao o sigui la reapropiacin de casi toda la herencia cultural del mundo clsico. El pensamiento filosfico, histrico, poltico y cientfico de la antigedad adquiri una nueva potencia e inmediatez en la primera poca moderna. El resultado fue una revolucin intelectual y artstica de tal ndole que solo pudo ocurrir a causa de la especfica procedencia histrica del mundo clsico respecto al medieval.

La azarosa multiplicidad de unidades polticas en la Europa medieval tarda se convirti a comienzos de la poca moderna en un sistema organizado e interrelacionado de estados. El nacimiento de a diplomacia formalizo la novedad de un conjunto plural de miembros asociados, para la guerra, la alianza, el comercio, el matrimonio o la propaganda, dentro de una sola arena poltica, cuyos limites y reglas se hicieron mas claros y mas definidos. La fecundidad cultural resultante de la formacin de este sistema altamente integrado, aunque extremadamente diversificado, es uno solo de los rasgos peculiares de la Europa preindustrial.

El renacimiento fue simultneamente el momento en que el encuentro de la antigedad y el feudalismo. El tipo nuevo y singular de estado que surgi en esta poca fue el absolutismo. Las monarquas absolutas del primer periodo moderno fueron un fenmeno estrictamente europeo. Como estructura estatal dominante en Europa hasta el fin de la ilustracin, su hegemona coincidi con la exploracin del globo por las potencias europeas y con los comienzos de su supremaca sobre le universo. Por su naturaleza y estructura, las monarquas absolutas de Europa eran todava estados feudales, las maquinarias de gobierno de la misma clase aristocracia que haba dominado la edad media. Pero en Europa occidental, donde haban nacido, las formaciones sociales que gobernaban eran una combinacin compleja de los modos de produccin feudal y capitalista, con un auge gradual de la burguesa urbana y un crecimiento de la acumulacin originaria de capital en una escala internacional. El entrelazamiento de estos dos modos de produccin antagnicos dentro de las mismas sociedades fue lo que dio origen a las formas transnacionales del absolutismo.

La desaparicin de la servidumbre no signific la abolicin de la coercin extraeconmica privada para la extraccin del plustrabajo del productor inmediato. La nobleza terrateniente sigui poseyendo el grueso de los medios fundamentales de produccin en la economa y ocupando la gran mayora de las posiciones dentro del conjunto del aparato del poder poltico. La coercin feudal se desplazo hacia arriba, hacia una monarqua centralizada, y la aristocracia tuvo que cambiar su representacin estatamental por los cargos burocrticos dentro del renovado aparato de estado. Las agudas tensiones de estos procesos produjeron muchas revueltas seoriales, y la autoridad real se ejerci a menudo en forma implacable contra los miembros de la clase nobiliaria.

Pero hay, sin embargo, una caracterstica bsica que distingue a las monarquas absolutas de Europa de las miradas de tipos de gobiernos despticos, arbitrarios o tirnicos, encarnados o controlados por un soberano personal, que han prevalecido en todo el mundo. El aumento del poder poltico del estado monrquico no vino acompaado por una disminucin de la seguridad econmica de la propiedad nobiliaria de la tierra, sino por un aumento paralelo de los derechos generales de la propiedad privada, se consolido progresivamente la propiedad privada absoluta. Y as mientras el capital se acumulaba lentamente bajo las brillantes superestructuras del absolutismo ejerciendo sobre ellas un empuje gravitacional cada vez mayor, la nobleza terrateniente de la Europa moderna conservo su predominio histrico en y gracias a las monarquas que ahora les dirigan. Econmicamente a salvo, socialmente privilegiadas y culturalmente madura, la aristocracia segua dominando con el crecimiento ininterrumpido del capital dentro de las formaciones sociales mixtas de la Europa occidental.

MAQUIAVELO: EL PRNCIPEcuantas son las clases de principados y de que modo se adquieren.Todos los estados que han tenido y tienen imperio sobre los hombres, han sido y son repblicas o principados. Los principados son hereditarios, o nuevos. Y los dominios as adquiridos estn acostumbrados a vivir bajo el poder de un prncipe o habituados a vivir libres, y se adquieren con las armas de otro, o con las propias, gracias a la fortuna o virtud.

de los principados hereditarios.Me encargare solo de los principados, y tambin debatir sobre como es posible gobernarlos y conservarlos.

En los estados hereditarios y habituados al linaje de su prncipe, las dificultades p/ conservarlos son mucho menores que en los nuevos, en cuanto resulta suficiente no transgredir el ordena// de sus predecesores.

de los principados mixtos.Es en el principado nuevo donde se encuentran las dificultades. Por empezar puede no ser total/ nuevo, y aparecer como agregado al estado anterior, y en ese caso se origina un principado que puede ser denominado mixto.

Una necesidad natural y ordinaria, obliga a quien se ha convertido en nuevo prncipe a la ofensa de sus sbditos. As, tu tienes como enemigos a todos aquellos a quienes ofendiste al ocupar tal principado, y no puedes conservar como amigos a quienes te instalaron en el poder ,por que las obligaciones contradas con ellos te prohbe usar medicinas fuertes en su contra (siempre para entrar en una regin se necesita el favor de sus habitantes).

Dichos estados que son adquiridos agregndose a un estado hereditario del prncipe que adquiere ,forman parte de la misma provincia y lengua, o no. Cuando ellos sucede, su posesin resulta fcil, sobre todo si no estn habituados a vivir libres, y para conservarlos basta con haber extinguido la sucesin del prncipe , pues en las otras cosas, mantenindose las viejas condiciones y no existiendo diferencias de costumbres, los hombres siguen sus vidas tranquilos. Y el que adquiere territorios de estas caractersticas, si quiere conservarlos, debe respetar dos precauciones: la primera, indica que el linaje del prncipe antiguo debe extinguirse. Y el otro principio consiste en no alterar ni sus leyes ni sus atributos.

Pero, cuando se adquieren estados en una provincia diversa de lengua, de costumbres y de instituciones entonces si aparecen las dificultades, y hay que tener mucha habilidad para conservarlos .Uno de los mas eficaces remedios sera que la persona que los conquista se fuera a vivir all. El otro gran remedio es el establec// de colonias ; en estas no se gasta mucho , y sola/ se perjudica a quienes se les quita los campos y las casas para los nuevos habitantes que, por otro lado, constituyen una parte mnima de la poblacin del estado. Los perjudicados al quedar dispersos y empobrecidos, no pueden provocar dao alguno.

Todo ello, nos hace decir que a los hombres hay que tratarlos bien o aplastarlos, por qu ellos se vengan de las pequeas ofensas, pero de las grandes no pueden vengarse.

El deseo de adquirir es algo muy natural y ordinario, y siempre, los hombres que adquieren por qu pueden hacerlo, sern alabados y no censurados, pero cuando no pueden y quieren hacerlo de cualquier modo, aqu aparecen el error y la justa censura.

por que razon, despues de a muerte de alejandro, sus sucesores no perdieron el reino de dario que alejandro habia conquistado. Considerando las dificultades que surgen para conservar un estado recin adquirido, alguien podra asombrarse del modo en que Alejandro Magno lleg a ser dueo de Asia en pocos aos, y apenas la ocup, muri , y cuando pareca razonable que todo el estado se rebelar, sus sucesores lo conservaron , sin otra dificultad que la nacida entre ellos mismos por ambiciones propias. Al respecto, respondo: los principados de que se tiene memoria estn gobernados de dos modos. En primer lugar, por un prncipe y todos los otros servidores que ayudan a gobernar el reino. Pero tambin por un prncipe o por nobles , que poseen dicho grado no por gracia del seor, sino por herencia familiar. Estos nobles tienen estados y sbditos propios, que los reconocen por seores y sienten por ellos natural afecto. En aquellos estados que se gobiernan por un prncipe y por servidores, el prncipe posee mayor autoridad, por qu en todo el pas no hay nadie que reconozca a otro superior a l.

Ahora bien, si se considera a que naturaleza de gobierno perteneca el de Daro, lo encontraremos semejante al reino del Turco, por eso Alejandro debi atacarlo por completo y vencerlo en batalla campal , y despus de la victoria muerto ya Daro , le quedo aquel estado seguro por las razones ya expuestas.

de que modo deben gobernarse las ciudades o los principados que, antes de ser conquistados, tenian su propio ordena// juridico.Cuando aquellos estados que se han adquirido estn habituados a vivir con sus leyes y en libertad, hay 3 modos de conservarlos: el primero, arrastrarlos, el segundo, ir a vivir all personal/, el tercero, dejarlos vivir con sus leyes imponindoles un tributo y creando en el lugar un gobierno minoritario que los conserve amigos.

No hay manera segura de poseer una ciudad que no sea su destruccin. Y el que se convierte en seor de una ciudad acostumbrada a vivir libre sin destruirla, que espere ser destruido por ella.

Cuando las ciudades o provincias estn acostumbradas a vivir bajo el dominio de un prncipe, no se ponen de acuerdo para elegir uno entre ellos (una vez que la familia del mismo se extingui); y vivir libres no saben: as, son mal lentos para tomar las armas y un prncipe puede ganrselos con mayor facilidad.

Pero en las republicas, hay ms vida, ms odio, mas deseo de venganza: la memoria de la antigua libertad no las abandona ni les puede dar descanso y por lo tanto el camino ms seguro es destruirlas o residir en ellas.

de los principados nuevos conquistados con las armas propias y con virtud.

En los principados total/ nuevos las dificultades para conservarlos depende de la mayor o menor virtud de quien los adquiere. Y como el hecho de convertirse de simple ciudadano a prncipe presupone virtud o fortuna, sin embargo, el que menos se ha valido de la fortuna, a conservado mas tiempo el poder.

Aquellos que se convirtieron en prncipes por caminos virtuosos ,adquieren el principado con dificultad, , pero lo mantienen fcil/; y las dificultades que experimentan al adquirir el principado nacen de parte de las nuevas leyes y modos que se ven forzados a introducir para fundar su estado y su seguridad.

Adems de las cosas ya dichas, la naturaleza de los pueblos es variable,y resulta fcil convencerlos de algo, pero difcil mantenerlos en esa conviccin: entonces, conviene estar preparados de modo tal que ,cuando ellos no crean mas, se les pueda hacer creer por la fuerza.

de los principados nuevos que se adquieren con armas ajenos y con fortuna.

Aquellos que sola/ por fortuna se convierten de particulares en prncipes, lo logran con poco esfuerzo, pero deben hacer mucho para mantenerse en el poder. No tienen ninguna dificultad en el camino, pues parece que volaran, pero todas las dificultades nacen si son instalados en el poder. Ello sucede cuando a algn prncipe le es concedido el estado por dinero o por la gracia de quien lo concede.

El primer termino de adversidades los destruye, cuando aquellos que se han convertido tan repentina/ en prncipes, como ya he dicho, no poseen la virtud suficiente para preservar lo que la fortuna les ha confiado. EJ: Alejandro.

de quienes llegaron al principado por de crimenes.Tambin es posible convertirse de particular en prncipe de otros modos no atribuibles a la virtud o fortuna. Estos modos se producen cuando se asciende al principado por algn medio prfido e impo, o cuando un ciudadano particular se convierte en prncipe de su patria con el favor de sus conciudadanos.

Con respecto al primer modo, un ejemplo, es el del rey de Siracusa , quien llev durante toda su vida una conducta criminal; sin embargo dedicado a la milicia y pasando por todos sus grados, lleg a uno de los mas altos y decidi ser prncipe ; una maana reuni al pueblo y al senado de Siracusa ,como si tuviera que discutir asuntos pertinentes a la Republica ,y, a la seal convenido, hizo que sus soldados mataran a todos los senadores y a los mas ricos del pueblo. Muertos estos, ocup y conservo el principado sin ninguna disputa interna. Lleg al principado a travs de los grados militares, y despus se mantuvo debido a sus acciones fogosas y arriesgadas. Pero no es posible llamar virtud al exterminio de sus conciudadanos, al hecho de carecer de fe, de piedad, de religin: estos s pueden llevar a la conquista del poder, pero no a la gloria.

Y no es posible atribuir entonces a la fortuna o virtud ,lo que el consigui sin la una y sin la otra.

Si es licito hablar bien del mal, podemos considerar bien empleadas aquellas crueldades que se ejercen de golpe y una sola vez, por la necesidad de asegurarse el poder, y luego no se insiste en ellas. En cambio son mal empleadas aquellas crueldades que, aunque pocas al principio, con el tiempo ms bien crecen, en lugar de disminuir.

Por ello, al conquistar un estado, el que lo ocupa debe pensar todas las ofensas que necesita hacer, y hacerlas toda de golpe, tranquilizando a los hombres y ganndoselos con favores, los cuales si se deben hacer poco a poco.

del principado civil.

Cuando un ciudadano se convierte en prncipe de su patria con el favor de sus conciudadanos. Para llegar a este principado se necesita ms bien una acertada astucia. A ese principado se asciende con el favor del pueblo o con el favor de los grandes. Por que en toda ciudad se encuentran estos 2 humores distintos: por un lado el pueblo no desea ser dominado ni oprimido por los grandes, y por otro lado, los grandes desean dominar y oprimir al pueblo.

De las dos tendencias opuestas nacen en las ciudades 3 efectos: el principado, la libertad o el libertinaje.

El principado es promovido por el pueblo o por los grandes segn sea la una o la otra parte que encuentra la ocasin propicia. El que llega al principado con la ayuda de los grandes se mantiene en el con mayores dificultades que el promovido con ayuda del pueblo, por que , aun siendo prncipe esta rodeado de muchos que se creen iguales ,y entonces no puede ni mandarlos ni manejarlos a su manera. Pero el que llega al principado gracias al favor popular esta solo en el poder. No se puede satisfacer digna/ a los grandes sin cometer injusticias con los otros, pero si se puede satisfacer al pueblo, por que el fin del pueblo es mas honrado que el de los grandes, en cuanto los grandes quieren oprimir y el pueblo solo quiere no ser oprimido. Y, adems un prncipe nunca puede estar seguro del pueblo enemigo, por que se trata de muchas personas, de los grandes puede asegurarse, por que son pocos.

Un prncipe prudente debe imaginar un modo para que sus ciudadanos, siempre y aun en los momentos especiales, tengan necesidad de el, y del estado: as, ellos, siempre le sern fieles.

de que modo debe medirse la fuerza de los principados.

Pueden sostenerse por si mismo los que, en virtud de la abundancia de hombres o de dinero, pueden organizar un ejercito poderoso como para dar batalla.

No se puede ver facilidad alguna en el asalto a quien tiene bien defendida su ciudad y que no es odiado por el pueblo.

A un prncipe prudente no le resultar difcil tener a su favor el nimo de sus ciudadanos antes y despus del asedio, siempre que no les falte de que vivir y con que defenderse.

de los diferentes generos de tropas y de las milicias mercenarias.

Me queda discurrir de modo general s/ los 1/2s de ataque y defensa que pueden presentarse en c/u de los principados.

Los principales fundamentos que deben poseer todos los estados, son las buenas leyes y las buenas armas.

Las armas con las cuales un prncipe defiende a su estado, le son propias o mercenarias, auxiliares o mixtas. Las mercenarias y auxiliares son intiles y peligrosas, y si un prncipe asienta su estado en estas armas, nunca estar firme y seguro, por que las tropas carecen de unidad, con ambiciosas, sin disciplina, desleales, etc. Y as como en la guerra te despojan los enemigos, ellas te despojan en la paz.

El prncipe debe ir personal/, cumpliendo el mismo oficio de capitn .La republica debe mandar a sus ciudadanos y, si manda a alguien que no acta como un hombre valiente, debe reemplazarlo. Y si es valiente debe contenerlo con las leyes, para que no se extralimite. Y la experiencia nos demuestra que prncipes solos y republicas con ejrcitos propios hacen grandes progresos, y que las armas mercenarias solo producen dao.

de los soldados auxiliares, mixtos y propios.De las tropas auxiliares, que son las otras armas intiles, son aquellas de las que dispones cuando se llama a un prncipe poderoso para que acuda a ayudarte y a defenderte con sus armas. Son mucho ms peligrosas que las mercenarias. Con ellas la ruina queda asegurada: estn absoluta/ unidas y dispuestas a obedecer a otro. En cambio en el caso de las tropas mercenarias, si vencen, necesitan mas tiempo y una mejor ocasin para daarte, por que no constituyen un solo cuerpo, y adems han sido formadas y pagadas por ti.

Los prncipes prudentes han evitado estas armas y han recurrido a las propias, prefiriendo perder a veces con ellas que vencer con las ajenas, y juzgando que una victoria, gracias a estas ltimas, no es una victoria.

Ningn prncipe esta seguro entonces, si no tiene armas propias. Los ejrcitos propios son los que estn compuestos por sbditos, ciudadanos, o criados tuyos: todos los otros son mercenarios o auxiliares.

de la relacion e/ el principe y el ejercito. Un prncipe no debe tener otro objeto, ni otra preocupacin, ni cultivar otro arte fuera de la guerra y su organizacin y direccin, por que esta es el nico arte que compete a quien manda.

Y la primera causa que te hace perder el estado es descuidar este arte, as como la primera causa de su conquista es justa/ el hecho de profesarlo.

de las cosas por las cuales los hombres y especial/ los principes, son alabados o censurados. Quedan ahora ver cuales deben ser las conductas de un prncipe con los sbditos o con los amigos.Mi intencin es escribir algo til para quien lea, y entonces me ha parecido ms conveniente seguir la verdad real de la cosa y no su representacin imaginaria. Un prncipe, si quiere conservarse, debe aprender a poder sor no bueno, y valerse de ello o no segn la necesidad.

Todo los hombres, cuando se habla de ellos, y especial/ los prncipes, por estar ubicados en el lugar mas alto son designados segn ciertas cualidades que les acarrean alabanza o censura.

de la liberalidad y la moderacin.Para comenzar con las primeras cualidades mencionadas, reconozco en principio que sera bueno ser considerado liberal. Sin embargo, la liberalidad, usada de modo ostentoso, te perjudica por que, utilizada con inteligencia y como corresponde, no te deja ver y no te evitar ser tachado de las cualidades opuestas. Adems si se quiere mantener e/ los hombres el nombre de liberal, es necesario no dejar de lado ninguno de los elementos de la magnificencia. Todo ello empezar a volverlo odioso y poco estimado por la gente, empobrecindose, de modo que con su liberalidad, al haber perjudicado a la mayora y favorecido a la minora se arriesgar ante el primer peligro.

de la crueldad y la clemencia, y si es mejor ser amado que temido o viceversa.Descender ahora a las otras cualidades, y dir que todo prncipe debe desear que se lo considere clemente y no cruel, y sin embargo, tambin debe prevenirse del mal uso de esa clemencia.

Un prncipe no se debe preocupar por la mala fama de cruel, a fin de mantener unidos y leales a sus sbditos. Por que, con algunos castigos ejemplares, ser mas clemente que aquellos guiados por excesiva clemencia y que permiten la continuidad de los desordenes, de los que nacen muerte y rapias, adems estas ultimas suelen ofender a toda la sociedad, mientras las ejecuciones ordenadas por el prncipe ofenden solo a un particular.

De aqu surge una controversia, si es mejor ser amado que temido, o viceversa. Se contesta que correspondera ser lo uno y lo otro, pero como resulta difcil combinar ambas cosas, es mucho mas seguro ser temido que amado cuando una de las dos cualidades falta.

Adems los hombres vacilan menos en cometer ofensa al que se hace amar que al que se hace temer. El amor se mantiene por el vnculo de gratitud, el cual es roto en cualquier ocasin por que los hombres son perversos, en cambio el temor, se mantiene por el miedo al castigo, que nunca te abandona.

El prncipe debe hacerse temer, de modo que, si no consigue que lo amen, tambin puede evitar el odio, por que ser temido y el no ser odiado bien pueden estar juntos. Y lo conseguir siempre, si se abstiene de tocar los bienes y mujeres de sus sbditos y ciudadanos .Los hombres olvidan mas rpido la muerte del padre que la perdida de patrimonio.

de que modo los principes deben guardar la palabra dada.Hay 2 modos de combatir uno con las leyes, otro con la fuerza. El primero, es propio del hombre, el segundo de las bestias. Pero como el primero muchas veces no basta conviene recurrir al segundo. Por lo tanto a un prncipe le conviene saber usar bien a la bestia y al hombre, amabas, ya que la una sin la otra no es duradera.

Un prncipe esta necesitado por lo tanto de saber usar bien a las bestias, , y de ellas debe elegir al zorro y al len, por que el leon no se defiende de las trampas y el zorro no se defiende de los lobos. Entonces es necesario ser zorro p/ conocer las trampas, y len p/ intimidar a los lobos. Los que se basan simple/ en el len deberan dejar la poltica. Y el que mejor imit al zorro fue el que mas xito ha tenido.

Un prncipe, por lo tanto, no debe tener necesaria y efectiva/ todas las cualidades mencionadas, pero es bien necesario que parezca tenerlas. Aun, me atrever a decir, que si las tiene y las observa siempre, son perjudiciales, y en cambio, son tiles si aparenta tenerlas.

Un prncipe necesita tener un estado de animo dispuesto a moverse segn los vientos de la fortuna y las variaciones de las cosas y, no alejarse del bien mientras puede, y en cambio, saber introducirse en el mal si estuviera necesitado de hacerlo.

Un prncipe debe cuidar que nunca salga de su boca, algo que no este lleno de las cualidades que se ve obligado a actuar para mantener el estado(fe, claridad, humanidad, religin). No mas cualidad mas necesaria de aparentar que la religin. Todos ven lo que pareces pocos palpan lo que eres.

de que modo se ha de evitar ser despreciado y odiado.El prncipe debe evitar todo aquello que pueda hacerlo odioso y despreciable. Y despreciable lo hace ser considerado, inestable, superficial, afeminado, etc., por el contrario debe ingenirselas para que en sus acciones se reconozco grandeza de animo, valor, gravedad, fortaleza.

Un prncipe debe tener muy poco en cuenta las conspiraciones cuando cuenta con el apoyo del pueblo, pero si este es enemigo suyo y lo odia, entonces si, debe temer todo y de todos.

El odio se conquista tanto con las buenas obras como con las malas. Por lo tanto si un prncipe quiere conservar el estado, a menudo se ve obligado a no ser bueno. Por que como aquella colectividad esta corrompida (nobles, pueblo, soldados), y tu la consideras necesaria p/ mantenerte, te conviene seguir su humos para satisfacerla y entonces las buenas acciones sern enemigas tuyas.

si las fortalezas y muchas otras cosas que los principes hacen cotidiana/ son utiles o no.Algunos prncipes p/ conservar con certeza el estado, han desarmado a sus sbditos, algunos otros mantuvieron divididos los territorios sometidos, algunos han alimentado las oposiciones contra ellos mismos, algunos edificaron fortalezas, otros las han arrasado y destruido.

Jams ha sucedido entonces, que un prncipe nuevo desarmara a sus sbditos. Mas aun, cuando los ha encontrado desarmados, siempre los arm, por que al armarlos esas armas se hacen tuyas, se vuelven fieles quienes te resultan sospechosos.

Pero si los desarmas, empiezas a ofenderlos, muestras que por cobarda o por poca fidelidad no les tienes confianza, y una y otra de estas opiniones te acarrean su odio.

Sin duda alguna los prncipes se vuelven grandes cuando superan las dificultades y la oposicin que puedan encontrar. Por lo tanto la fortuna, especialmente cuando quiere hacer grande a un prncipe nuevo, necesitado de adquirir reputacin en mayor grado que un prncipe hereditario, le hacen hacer enemigo y tambin induce a estos a acometer empresas en contra suyo, para que el prncipe tenga ocasin de superarlas, subiendo mas alto por la escalera que le han trado justa/ dichos enemigos.

Los prncipes, y sobre todo los que son nuevos, han encontrado mayor lealtad y provecho en aquellos hombres considerados sospechosos al principio de su gobierno y no en aquellos inicial/ confiables. Hecho que cambia de acuerdo a c/ fenmeno. Es mas fcil ganarse como amigos a aquellos hombres conformes con el estado anterior y por lo tanto enemigos suyos, y no a aquellos otros que se hicieron amigos suyos por estar descontentos con ese estado y que lo ayudaron a ocuparlo.

Los prncipes, a fin de conservar con mayor seguridad su estado, han tenido la costumbre de construir fortalezas. Las cuales son tiles o no, segn los tiempos, y si te favorecen en un caso, en otro te daan. Este aspecto puede resumirse as: el prncipe que teme mas al pueblo que a los extranjeros debe construir fortalezas; pero el que teme mas al extranjero que al pueblo debe dejarlas de lado.

La mejor fortaleza que existe consiste en no ser odiado por el pueblo porque, aunque tenga fortalezas, si el pueblo te odia, ellas no te salvaran, puesto que una vez tomadas las armas los pueblos siempre encontraran extranjeros que los ayuden.

como debe conducirse un principe p/ tener prestigio.Ninguna otra cosa proporciona a un prncipe tanta estima como las grandes empresas y los ejemplos poco comunes que pueda dar de si mismo. Debe ingenirselas p/ que c/u de sus acciones le proporcione fama de hombre superior y de excelente ingenio.

Los prncipes indecisos, a fin de escapar a los peligros presentes, casi siempre siguen el camino de la neutralidad, y casi siempre se hunden. Pero cuando el prncipe se declara valiente/ a favor de una parte, si el que vence es el aliado, aunque sea poderoso y el prncipe quede en sus manos, habr contrado una obligacin y ambos permanecern unidos por la amistad.

Un prncipe debe guardarse de establecer jams alianzas con alguien mas poderoso que el p/ atacar a otro, salvo cuando la necesidad lo obligue. Por que, si se alcanza la victoria, te vuelves prisionero suyo, y los prncipes, cuando pueden, deben evitar las circunstancias de quedar a disposicin de otros.

por que causas los principes italianos han perdido sus estados. Un prncipe nuevo es observado con atencin mucho mayor que un prncipe hereditario en sus acciones, y cuando estas son reconocidas como virtuosas ganan mucho mas a los hombres y los vinculan al prncipe tambin mucho mas que la antigedad de la sangre. Por que los hombres son atrados mucho mas por las cosas presentes que por las pasadas, y cuando en las presentes encuentran el bien, gozan de el y no buscan nada mas.

Estos prncipes nuestros que haban conservado durante muchos aos sus principados, y despus los perdieron, no deben acusar de ello a la fortuna sino a su propia indolencia.

en que medida la fortuna domina en los asuntos humanos y de que modo es posible resistirle.Muchos han tenido y tienen la opinin de que las cosas del mundo estn as gobernadas por la fortuna y por Dios, de modo que los hombres con su prudencia no pueden corregirlas. Sin embargo, para que nuestro libre arbitrio no quede anulado juzgo como verdadero que la fortuna es rbitro de la mitad de nuestras acciones, pero que tambin ella incluso nos deja gobernar la otra mitad, o casi la otra mitad.

La fortuna muestra su poder donde no hay virtud organizada p/ resistirle, y entonces dirige sus mpetus hacia donde sabe que no se han construido los diques y espigones capaces de contenerla. Y si ustedes consideran el caso de Italia, sede de estos cambios y la que les ha dado impulso, vern que es un campo sin diques y sin espigon alguno. Porque si hubiera estado defendida por la necesaria virtud, como Alemania, Francia, etc. esta inundacin no habra provocado tan grandes cambios o no se hubiera producido.

Aquel prncipe que se apoya integra/ en la fortuna, cae segn ella cambia. Dos personas actan de modo distinto, consiguen el mismo resultado, y de dos personas que actan del mismo modo, una alcanza su propsito y la otra no. De ello dependen tambin las variaciones de la felicidad, por que si un hombre se conduce con precaucin y con paciencia, las cosas y los tiempos se desarrollan de modo tal que su gobierno es bueno y el progresa. Pero, si los tiempos y las cosas cambian, el sucumbe, por que no cambia su modo de proceder.

Concluyo entonces que, si la fortuna cambia y los hombres permanecen obstinados en sus proced//s, ellos prosperan mientras la una y los otros concuerdan, y no prosperan cuando entran en discordancia. Yo creo una cosa: es mejor ser impetuoso que precavido, por que la fortuna es mujer, y si se quiere tenerla sumisa, resulta necesario castigarla y golpearla. Y es evidente que ella se deja vencer mas por estos y no por quienes actan fra/.

exhortacin a apoderarse de italia y a liberarla de los barbaros.As ,en el momento actual, p/ que se reconociera la virtud de un espritu italiano, era necesario que Italia se redujera a su presente condicin ,mas esclava que los hebreos, mas sometida que los persas, mas dispersa que los atenienses, sin jefe, sin orden, derrotada , despojada ,desgarrada , saqueada, y que hubiera soportado toda clase de calamidades.

De modo que, al quedar como sin vida Italia espera al que pueda curar sus heridas , y termine con los saqueos y que tambin le limpie sus llagas ya por largo tiempo. Y se le va rogando a Dios que le enve a alguien capaz de redimirla de estas crueldades e insolencias brbaras, tambin se la ve pronta y dispuesta a seguir una bandera, siempre que alguien la enarbole.

Y todo procede de la debilidad de los jefes, por que los que saben no son obedecidos, y todos creen saber, y hasta ahora no ha surgido nadie que se haya sabido elevar ,por virtud y por fortuna ,de modo que los otros cedan.

No se debe dejar pasar esta ocasin de que Italia, despus de tanto tiempo vea a su redentor. No puedo expresar el amor con que se le recibira en todos aquellos territorios que han padecido a causa de los aluviones extranjeros.

MAQUIAVELO: DISCURSOS SOBRE LA PRIMERA DCADA DE TITO LIBIO2. De cuantas clases son las Repblicas

Repblica o principado: distintos principios, diversas leyes, y ordenamientos.

Podemos llamar feliz a una repblica en la que haya surgido un hombre tan prudente que le haya dado leyes ordenadas de tal manera que se pueda vivir segura bajo ellas. De todos modos es seguro que nunca se reordenaran sin peligro, por que la mayora de los hombres no se inclina a unas leyes nuevas que supongan un nuevo estado de cosas en la ciudad, a no ser por una necesidad manifiesta que le obligue a hacerlo, y como tal necesidad no puede llegar sin peligro, es fcil que la republica se destruya antes de llegar a un orden perfecto.

Gobierno3 clases: monrquico, aristocrtico y popular. Los que organizan una ciudad deben inclinarse a uno de ellos.

Cada uno de los gobiernos tiene su forma mala que dependen de ellas y que le son semejantes y cercanas: el principado fcilmente se vuelve tirnico, la aristocrac. evoluciona fcilmente en oligarq. Y el Gob. popular se convierte en licencioso.

El organizador de una Rep. si ordena segn uno de los regimenes buenos ,lo hace por poco tiempo, porque irremediablemente ,degenerara en su contrario.

Estas distintas clases de gob aparecieron entre los hombres por azar:

Al principio, haban pocos habitantes y los hombres vivan como fieras, luego se multiplican y buscan al mas fuerte y con mas coraje para que sea su jefe, al que obedecan ;conocen las cosas honestas y buenas , y se sometieron a hacer leyes y ordenar castigos, lo que traigo la justicia.

Consec.: Para elegir PRINCIPE elegan al mas prudente y justo. Pero cuando los prncipes se proclaman por sucesin y no por eleccin , van a empezar a ser odiados y los prncipes al tener miedo a ese odio , pasan rpidamente del temor a la ofensa y as nace la TIRANIA: germen de su ruina.

MULTITUD: se levanta en armas contra el prncipe en algn momento, y constituyen un gob. Al principio gobernaban segn leyes promulgadas por ellos; pero de generacin en generacin, los hijos que no haban probado la desgracia se dieron a la avaricia, convirtiendo el gobierno de los mejores en el GOBIERNO DE UNOS POCOS, que se hicieron tan odiosos como el tirano; la multitud harta su gobierno es ahora un instrumento que quiere daar a los oligarcas; la gente se inclino a la DEMOCRACIA.

Luego de que se extingui la generacin que organizo esta democracia, se extingui el desenfreno , se hacan mil injurias cada da, hasta tal punto que obligados por la necesidad, se volvi al PRINCIPADO, y de ah de grado en grado , se volvi de nuevo al desorden.

En ese circulo giran todas las Republicas. Por lo general ninguna tiene una vida tan larga como para pasar por todas esas mutaciones, suele suceder que en uno de esos cambios , se vuelva sbdita de algn estado prximo mejor organizado.

Las formas buenas tienen una vida breve, y las malas son de por si perversas. Por ende los legisladores prudente huyen de cada una de estas formas en estado puro, eligiendo un tipo de gobierno que participe de todas: GOBIERNO MIXTO.

4. Que la desunin entre la plebe y el senado romano hizo libre y poderosa aquella republica

Los que condenan los tumultos entre los nobles y la plebe atacan lo que fue la causa principal de la libertad de Roma, no se fijan en los buenos efectos que produjeron y consideran que en toda Repub hay 2 espritus contrapuestos: El de los grandes y el del pueblo , y todas las leyes que se hacen en pro de la libertad nacen de la desunin entre ambos, como se puede ver en Roma.

No se puede llamar desordenada una Republica donde existieron tantos ejemp. de virtud. Las diferencias internas (que muchos condenan) no crearon mas que leyes y ordenes en beneficio de la libertad publica.

Roma: Cuando el pueblo quera que se promulgase alguna ley , o protestaba , o se negaba para ir a la guerra , era preciso aplacarlo satisfaciendo el menos en parte sus peticiones. Los deseos de los pueblos libres rara vez son daosos a la libertad , nacen de sentirse oprimidos o de sospechar que pueden llegar a estarlo.

5. Dnde se resguardara mas seguramente la libertad, en el pueblo o entre los grandes?

Los que organizan una rep, consideran entre lo mas importante la institucin de una garanta de libertad.

En toda rep hay magnates y pueblo, y dudas acerca de en que manos estaria mejor colocada la vigilancia.

Roma confiaron a plebe. Creen que se debe poner como guardianes de una cosa a los que menos deseo tienen de usurparla. En los nobles hay un gran deseo de dominar, y en los plebeyos esta el deseo de no ser dominados y x ende mayor voluntad de vivir libres. Poniendo al pueblo como guardin de la libertad , no pudindola tomar no permitirn que otro la tome.

Venecianos confiaron en nobles. Ya que asi se satisface su ambicion , y se los mantiene contentos , y por otro lado lo justifican diciendo que asi se quita un cargo de autoridad a los nimos inquietos de la plebe, que son causas de infinitos escandalos en una Rep.

Tomando ambos casos, se duda para elegir, sin saber que tipo de hombre es mas perjudicial para la Rep ,el que desea mantener el honor ya adquirido o el que quiere adquirir el que no tiene.

Ambos apetitos pueden ser causas de grandes tumultos, estos sin embargo son causados la mayora de las veces por los que poseen , pues el miedo de perder genera en ellos las mismas ansias que agitan a los que desean adquirir. Sus maneras descorteces encienden en el pecho de los desposedos la ambicin de poseer

55. Donde existe igualdad no se puede establecer un principado ,y donde no la hay no se puede establecer una Republica.

Donde no existe bondad en el pueblo no se puede esperar nada bueno.

La bondad tiene 2 causas:

No haber tenido mucho contacto con los vecinos, han evitado la causa de los contactos y los principios de corruptela.

Aquellas rep donde se ha mantenido el vivir poltico y sin corrupcin no soportan que sus ciudadanos se comporten y vivan al de los hidalgos , y as mantienen equitativa igualdad , y son enemigos de los gentileshombres , que son los que son ociosos y viven de las rentas.

El que quiera hacer una rep donde existen bastantes gentileshombres, no podr hacer nada si primero no los despide a todos, y el que quiera fundar un principado donde exista bastante igualdad no podr hacerlo si no extrae entre los iguales muchos hombres de animo ambicioso o inquieto y los convierte en gentileshombres de hecho, favorecindole con bienes, etc.

57. La plebe reunida es valiente, dispersa es dbil

.La multitud es audaz para hablar, en muchas ocasiones, contra las desiciones de su jefe, y luego ,cuando ven el castigo de cerca se apresuran a obedecer

No se debe tener muy en cuanto lo que se diga sobre la buena o mala disposicin del pueblo, excepto cuando esa mala disposicin se debe a haber perdido la libertad o de haber sido probados de un prncipe muy amado y que todava este con vida; as si se requieren grandes remedios para ponerle freno, las que provienen de otras causas son fciles de reprimir, siempre que no tengan un jefe a quien recurrir

58.La multitud es ms sabia y ms constante que un prncipe

Un pueblo que gobierna y que esta bien organizado, ser estable ,prudente y agradecido ,igual o mejor que un prncipe al que se considere sabio, y x otro lado ,un prncipe libre de ataduras de las leyes ser mas ingrato ,variable e imprudente que un pueblo.

El pueblo es mas estable , prudente y tiene mejor juicio que un prncipe. Muchas mas veces se equivoca un prncipe cegado por sus pasiones, que son mucho mas abundantes que la de un pueblo.

Nunca se persuadir al pueblo para que otorgue algn cargo publico a un hombre infame ,de lo que es fcil de persuadir a un prncipe por diversos medios.

Vemos que las ciudades donde gobierna el pueblo hacen en breve tiempo extraordinarios progresos ,mucho mayores que los de aquellas que han vivido siempre bajo un prncipe ej: Roma.

El gobierno del pueblo es mejor que el de los prncipes. Si comparamos todos los desordenes de los pueblos y todos los de los prncipes , todas las glorias de los pueblos y todas las de los prncipes, veremos que la bondad y la gloria del pueblo son, SUPERIORES.

Ambos gob necesitan ser regulados por leyes , por que un prncipe que pueda hacer lo que quiera esta loco, y un pueblo que pueda hacer lo que quiera no es sabio.

Si se reflexiona sobre ambos cuando no estn sujetos a freno alguno ,se encontraran menos errores en el pueblo que en el prncipe. Adems para curar la enfermedad del pueblo bastan las palabras , y la del prncipe necesita del hierro, por ende donde se necesita mayor cura es por que son mayores los errores.

La crueldad de la multitud se ejerce contra aquellos de los que se teme que se apoderen del bien comn , la de un prncipe se dirige contra el que teme le arrebate su propio bien.

2. Con que pueblos tuvieron que combatir los romanos, y que obstinadamente defendan aquellos su libertad.

Nada creo a los romanos tantas dificultades a la hora de vencer a los pueblos de su entorno, como el amor que tenan muchos pueblos a la libertad.

Es fcil conocer de donde le viene al pueblo esa aficin a vivir libre, por que se ve por experiencia que las ciudades nunca aumentan su dominio ni su riqueza sino cuando viven en libertad.

Roma es maravilloso contemplar la grandeza que alcanzo despus de librarse de sus reyes. La causa : es que lo que hace grande las ciudades no es el bien particular sino el bien comn. Y este solo se logra en las Rep, por que estas ponen en ejecucin todo lo que se encamine a tal propsito.

Lo contrario sucede con los prncipes, la mayora de las veces lo que hacen para si mismos perjudica a la ciudad , y lo que hacen para la ciudad les perjudica a ellos.

Pensando de donde puede provenir el que en aquella epoca los hombres fueran mas amantes de la libertad que en esta, creo que procede de la misma causa por la que los hombres actuales son menos fuertes, de la diferencia entre nuestra educacin y la de los antiguos, que esta fundada en la diversidad de ambas religiones.

Religin antigua no beatificaba mas que a los hombres llenos de gloria mundana.

Nuestra religin ha glorificado mas a los hombres contemplativos que a los activos. Cuando te pide que tengas fortaleza quiere decir que seas capaz de soportar, no de hacer un acto de fuerza.

Este modo de vivir ha debilitado al mundo, convirtindolo en presa de los hombres malvados, los cuales lo pueden manejar con plena seguridad ,viendo que la totalidad de los hombres con tal de ir al paraso, prefiere soportar sus opresiones que vengarse de ellas.

Tanto han podido esta educacin y estas falsas interpretaciones, que no hay en el mundo tantas rep como antiguamente, y no se ve en los pueblos el amor a la libertad que antes tenan.

Adems el imperio romano aniquilo todas las republicas y toda forma de vida civil. Y aunque luego se deshizo no pudieron las ciudades unirse ni reordenarse para la vida libre sino en pocos lugares.

En los pases que viven siervos, de todas las servidumbres la mas dura de todas es la que te somete a una Rep., por que es la mas duradera y por que el fin de la rep es enervar y debilitar los otros cuerpos para acrecentar el suyo.

TEORICO:

Papel importante: figura del legislador Emerge esta figura opuesta al prncipe. Genera las condiciones para que en el clima de paz del principado se pueda crear la Republica. Crea leyes, sist institucional, etc.

Rep: requiere que todos los ciudadanos persigan el bien comn.

UNIDAD II, EL MODELO IUSNATURALISTA Y LOS FUNDAMENTOS DE LA TEORIA POLITICA Y DEL ESTADO MODERNO

LOS REVOLUCIONES BURGUESAS, HOBSBAWM

Cap. I: el mundo en 1780-1790

El mundo de 1780-1790 era mucho ms pequeo geogrficamente, porque incluso los hombres cultos y mejor informados que entonces vivan solo conocan algunas partes habitadas del globo. Gran parte de la superficie de los ocanos ya haba sido explorada y consignada en los mapas. Los principales contornos de los continentes y las islas eran conocidos, aunque no con la seguridad de hoy. Fuera de unas escasas reas e mapa del mundo consista en espacios blancos cruzados por las pistas marcadas por los mercaderes o los exploradores.

No solamente el mundo conocido era ms pequeo, sino tambin el mundo real, al menso en trminos humanos. Por no existir censos y empadronamientos con finalidad prctica, todos los clculos demogrficos son puras conjeturas, pero es evidente que la tierra tena solo una fraccin de la poblacin de hoy; probablemente no ms de un tercio. Si la poblacin era ms pequea, tambin lo era el rea de asentamiento posible del hombre. Las condiciones climatolgicas hicieron retroceder los lmites habitables en el rtico. Las formas primitivas dela economa, sobre la caza y en Europa la extensin territorial dela trashumancia de los ganados, impidieron los grandes establecimientos en regiones enteras. Tambin la humanidad era mas pquela en un tercer aspecto: los europeos eran ms bajos y ms delgados que ahora.

Pero si en muchos aspectos el mundo era mas pequeo, la dificultad e incertidumbre de las comunicaciones lo hacia en la practica mucho mayor que hoy. La segunda mitad del siglo XVIII fue, respecto a la edad media y los siglos XVI y XVII, una era de abundantes y rpidas comunicaciones, e incluso antes de la revolucin del ferrocarril, el aumento y mejora de caminos, vehculos de tiro y servicios postales es muy notable. Peor las posibilidades para el trasporte de viajeros por tierra eran escasas y el trasporte de mercancas era a la vez lento y carsimo.

En estas circunstancias, el trasporte por medio acutico era no solo ms fcil y barato, sino tambin a menudo ms rpido si los vientos y el tiempo eran favorables. Vivir cerca de un puerto era vivir cerca del mundo.

Por todo ello, el mundo de 1789 era incalculablemente vasto para la casi totalidad de sus habitantes. La mayor parte de estos, de no verse desplazados por algn terrible acontecimiento o el servicio militar, vivan y moran en la regin y con frecuencia en la parroquia de su nacimiento. Las noticas eran difundidas por los viajeros y el sector mvil de la poblacin: mercaderes, viajantes, artesanos y trabajadores de la tierra sometidos a la migracin de la siega o la vendimia, la amplia y variada poblacin vagabunda.

El mundo de 1789 era preponderantemente rural y no puede comprenderse si no damos cuenta exacta de este hecho. La lnea fronteriza entre ciudad y campo, o mejor dicho, entre ocupaciones urbanas y ocupaciones rurales, era rgida. En muchos pases la barrera de los consumos, y a veces la vieja lnea de la muralla divida a ambas. Peor aun en donde no exista era rgida divisin administrativa, los ciudadanos eran a menudo fsicamente distintos de los campesinos. Sin embargo, la ciudad provinciana perteneca esencialmente a la economa de la comarca. Viva a expensas de los aldeanos de las cercanas y casi como ellos. La ciudad provinciana haba declinado tristemente desde sus das gloriosos de la edad media. Ya no eran como antao ciudades libres o ciudades-estados sino rara vez un centro para el comercio internacional. A medida que declinaba, se aferraba con obstinacin a monopolio de su mercado, que defenda contra todos los competidores. Gran parte del provincianismo del que se burlaban los jvenes radicales y los negociantes de las grandes ciudades proceda de ese movimiento de autodefensa econmica. En la Europa meridional, gran parte de la nobleza viva en ellas de la rentas de sus fincas. Pero toda esa prosperidad proceda del campo.

El problema agrario era por eso fundamental en el mundo de 1789, y es fcil comprender por que la primera escuela sistemtica de economistas continentales, consideraron indiscutible que la tierra y la renta de la tierra, eran la nica fuente de ingresos. Y que el eje del problema agrario era la relacin entre quienes poseen la tierra y quienes la cultivan, entre los que producen su riqueza y los que la acumulan.

Desde el punto de vista de las relaciones de la propiedad agraria, podemos dividir a Europa en 3 grandes sectores: al oeste de Europa estaban las colonias ultramarinas. En ellas el cultivador tpico era el indio, que trabajaba como un labrador forzado o un virtual siervo, o el negro, que trabajaba como esclavo, menos frecuente era el arrendatario que cultivaba la tierra personalmente. El cultivador tpico no era libre o estaba sometido a una coaccin poltica. El tpico terrateniente era el propietario de un vasto territorio casi feudal (hacienda, finca, estancia) o de una plantacin de esclavos. La economa caracterstica de la posesin casi feudal era primitiva y autolimitada, o en todo caso, regida por las demandas puramente regionales. La economa caracterstica de las zonas de plantaciones de esclavos, cuyo centro estaba en las islas del Caribe, a lo largo de as costas septentrionales de Amrica del sur y las del sur de estados unidos, era la obtencin de importantes cosechas de productos de exportacin. Este formaba por ellos parte integrante de la economa europea y, a travs de la trata de esclavos, de la africana.

Al este de Europa occidental, estaba la regin de servidumbre agraria. Esta vasta zona contena algunos sectores de cultivadores tcnicamente libres. Sin embargo, el cultivador tpico no era libre sino que realmente estaba ahogado en la marea de la servidumbre, creciente casi sin interrupcin desde finales del siglo XV o principios del XVI.

En el resto de la zona, el campesino tpico era un siervo que dedicaba una gran parte de la semana a trabajos forzosos sobre la tierra del seor y otras obligaciones por el estilo. Su falta de libertad poda ser tan grande que apenas se diferenciara de la esclavitud.

Las regiones serviles de Italia y Espaa tenan caractersticas econmicas similares, aunque la situacin legal de los campesinos era distinta. En trminos generales, haba zonas de grandes propiedades de la nobleza. El seor caracterstico de las zonas serviles era un noble propietario y cultivador o explotador de grandes haciendas.

Socialmente, la estructura agraria en el resto de Europa no era muy diferente. Esto quiere decir que, para el campesino o labrador, cualquiera que poseyese una finca era un caballero, un miembro de la clase dirigente y viceversa: la condicin de noble o hidalgo (que llevaba aparejado privilegios sociales y polticos y era el nico camino para acceder a los altos puestos del estado) era inconcebible sin una gran propiedad. Sin embargo, econmicamente, la sociedad rural occidental era muy diferente. El campesino haba perdido mucho de su condicin servil en los ltimos tiempos de la edad media, aunque subsistieran a menudo muchos restos irritantes de dependencia legal. Losa fundos caractersticos hacia tiempo que haban dejado de ser una unidad de explotacin econmica convirtindose en un sistema de percibir rentas y otros ingresos en dinero el campesino, mas o menos libre, grande, mediano o pequeo, era el tpico cultivador del suelo. Si era arrendatario de cualquier clase, paga una renta o una parte de la cosecha) al seor. Si tcnicamente era un propietario, probablemente estaba sujeto a una serie de obligaciones respecto al seor local, que podan o no convertir en dinero, lo mismo que pagar impuestos al prncipe, diezmos a la iglesia y prestar algunos servicios de trabajo forzoso, todo lo cual contrastaba con la relativa exencin de los estratos sociales mas elevados.

Solo unas pocas comarcas haban impulsado el desarrollo agrario dando un paso adelante hacia una agricultura puramente capitalista, principalmente en Inglaterra. La gran propiedad estaba muy concentrada, pero el tpico cultivador ser un comerciante de tipo medio, granjero-arrendatario que operaba con trabajo alquilado. Peor cuando esta cambio 8entre 1760-1830) lo que surgi no fue una agricultura campesina, sino una clase de empresarios agrcolas y un gran proletariado agrario.

Tcnicamente la agricultura europe4a era todava con la excepcin de unas pocas regiones avanzadas, tradicional, a la vez que asombrosamente ineficiente. Sus productos seguan siendo los ms tradicionales. La alimentacin de Europa segua siendo regional.

El siglo XVIII no supuso un estancamiento agrcola. Por el contrario una gran era expansin demogrfica, de aumento de urbanizacin, comercio y manufactura, impulso y hasta exigi el desarrollo agrario.

El mundo de la agricultura resultaba perezoso, salvo quizs para su sector capitalista. El del comercio y el de las manufacturas y las actividades tcnicas e intelectuales que surgan con ellos era confiado, animado, expansivo, as como eficientes, decididas y optimistas las clases que de ambos se beneficiaban. Un sistema de comunicaciones martimas que aumentaba rpidamente en volumen y capacidad, circundaba la tierra, beneficiando a las comunidades mercantiles de la Europa del atlntico norte, que usaban el podero colonial para despojar a los habitantes de las indias orientales de sus gneros, exportndolos a Europa y frica, en donde estos y otros productos europeos servan para la compra de esclavos con destino a los cada vez ms importantes sistemas de plantacin de las Amricas. Las plantaciones americanas exportaban por su parte en cantidades cada vez mayores su azcar, su algodn, etc., a los puertos del atlntico y del mar del norte, desde donde se redistribuan hacia el este junto con los productos y manufacturas tradicionales del intercambio comercial este-oeste. Textiles, sal, vino y otras mercancas. Del oriente europeo venan granos, madera de construccin, lino, etc.

Pero aunque la minera y la industria se extendan con rapidez en todas partes de Europa, el mercader segua siendo su verdadero director. Por eso es que la principal expansin de la produccin industrial fue la denominada sistema domestico por el cual un mercader compraba todos los productos del artesano o del trabajo no agrcola de los campesinos para venderlo luego en los grandes mercados. El simple crecimiento de este trfico creo inevitablemente unas rudimentarias condiciones para un temprano capitalismo industrial.

Las actividades del comercio y la manufactura florecan brillantemente. Inglaterra, el pas europeo mas prospero del siglo XVIII, deba su podero a su progreso econmico. Y hacia 1780 todos los gobiernos continentales que aspiraban a una poltica racional, fomentaban el progreso econmico y, de manera especial, el desarrollo industrial, pero no todos con el mismo xito. La conviccin del progreso del conocimiento humano, el racionalismo, la riqueza, la civilizacin, y el dominio de la naturaleza de que tan profundamente imbuido estaba el siglo XVIII, la ilustracin, debi su fuerza, ante todo, al evidente progreso de la produccin y el comercio, y al racionalismo econmico y cientfico, que se crea asociado a ellos de manera inevitable. Y sus mayores paladines fueron las clases ms progresistas econmicamente: los crculos mercantiles y los grandes seores econmicamente ilustrados, los financieros, los funcionarios con formacin econmica y social, la clase media educada, los fabricantes y los empresarios.

Un individualismo secular, racionalista y progresivo, dominaba el pensamiento ilustrado. Su objetivo principal era liberar al individuo de las cadenas que le opriman: el tradicionalismo ignorante de la edad media que todava proyectaba sus sombras sobre le mundo; la supersticin de las iglesias; de la irracionalidad que divida a los hombres en una jerarqua de clases altas y bajas segn el nacimiento o algn otro criterio desatinado. La libertad, la igualdad, y luego la fraternidad, de todos los hombres eran sus lemas (en debida forma serian tambin los de la revolucin francesa). Sin embargo los jefes de la emancipacin por la que aclamaba la ilustracin procedan por lo general de las clases intermedias de la sociedad y el orden social que nacera de sus actividades seria un orden burgus y capitalista.

Con la excepcin de gran Bretaa y algunos estados pequeos, las monarquas absolutas gobernaban en todos los pases del contienen europeo. Los monarcas hereditarios por la gracia de dios encabezaban jerarquas de nobles terratenientes, sostenidas por la tradicional ortodoxia de las iglesias. Por el contrario, las clases medias y educadas con tendencia al progreso consideraban a menudo el poderoso aparato centralista de una monarqua ilustrada como la mejor posibilidad de lograr sus esperanzas. Un prncipe necesitaba de una clase media y de sus ideas para modernizar a su rgimen, una clase media dbil necesitaba a un prncipe para abatir la resistencia al progreso de unos intereses aristocrticos y clericales slidamente atrincherados. Pero la monarqua absoluta, a pesar de ser modernista e innovadora, no poda, ni daba seales de quererlo, zafarse de la jerarqua de los nobles terratenientes, cuyos valores simbolizaba e incorporaba, y de los que dependa en gran parte. La monarqua absoluta, tericamente libre para cuanto quisiera, perteneca en la prctica al mundo bautizado por la ilustracin con el nombre de feudalidad o feudalismo. Difcilmente poda desear y de hecho jams la realizara, la total transformacin econmica y social exigida por el progreso y los grupos sociales ascendente.

Lo que abolira las relaciones feudales agrarias en toda Europa central y occidental seria la revolucin francesa por accin directa, reaccin o ejemplo y luego la revolucin de 1848. Exista un latente conflicto entre las fuerzas de la vieja sociedad y la nueva sociedad burguesa, que no poda resolverse dentro de las estructuras de los regmenes polticos existentes , con la excepcin de los sitios en donde y haban triunfado los elementos burgueses, como Inglaterra. Lo que hacia a esos regmenes ms vulnerables todava era que estaban sometidos a diversas presiones: la de las nuevas fuerzas, la de la tenaz y creciente resistencia de los viejos intereses y al de los rivales extranjeros. Su punto ms vulnerable era aquel en que la oposicin antigua y nueva tendan a coincidir: e los movimientos autonomistas de las colonias o provincias ms remotas y menos firmemente controladas. Las comunidades blancas en las colonias ultramarinas de los pases son europeos se oponan a la poltica de sus gobiernos centrales, que subordinaba los intereses estrictamente coloniales a los e la metrpoli. En todas partes de las Amricas (espaola, francesa e inglesa) lo mismo que en Irlanda, se produjeron movimientos que pedan autonoma. La expansin econmica, el desarrollo colonial y la tensin de las proyectadas reformas del despotismo ilustrado multiplicaron la ocasin de tales conflictos entre los aos 1770-1790.

El completo dominio poltico y militar del mundo por Europa y sus prolongaciones ultramarinas, las comunidades de colonos blancos, iba a ser el producto de la poca de la doble revolucin. La conquista europea directa ya empezaba a extenderse mas all del rea ocupada desde hacia tiempo por la primitiva colonizacin de los espaoles y los portugueses e el siglo XVI, y los emigrados blancos de Norteamrica en el XVII. La doble revolucin iba a ser irresistible a la expansin europea, aunque tambin iba a proporcionar al mundo no europeo las condiciones y el equipo para lanzarse al contraataque.

Cap. II: La revolucin industrial

La revolucin se da e/ los aos 1780 y 1790, a partir de la liberacin del poder productivo de la soc humanas.

En Inglaterra se inicio con el take off (1780) y concluyo con la construccin del ferrocarril y la creacin de una fuerte industria pesada (1840). Desde Portugal a Rusia ya exista un gran avance industrial y comercial c/ respecto a sus competidores potenciales. Pero era Inglaterra quien ya estaba por dems adelante, no debido a su superioridad cientfica y tcnica, justamente porque consideraba a las investigaciones peligrosas, mientras que el gobierno revolucionario francs estimulaba las investigaciones cientficas (ej. mejores barcos) o Alemania creaba instituciones p/ la enseanza tcnica. Eran necesarios pocos refinamientos intelectuales p/ la Rev. Ind, es mas, se podra decir que los adelantos tcnicos en Inglaterra fueron modestos.

Entre los cimientos sociales de la revolucin industrial, debemos mencionar necesariamente a la agricultura que ya estaba preparada p/ aumentar la produccin y productividad p/ alimentar a la poblacin no agraria en cte. crecimiento, p/ proporcionar un vasto y ascendente cupo de potenciales reclutas p/ las ciudades y las industrias, estaba capacitada p/ suministrar mecanismos p/ acumular capital utilizable por los sectores modernos de la economa, p/ crear un mercado amplio e/ la poblacin agraria y tambin p/ proporcionar un excedente p/ la exportacin y as ayudar a la importacin del capital. El capital social era destinado a buques, instalaciones portuarias y mejoras en caminos y canales. El s. XVIII fue un periodo de prosperidad y expansin econmica de Europa. Ya instaladas las races, solo se requeran dos cosas: una industria que ya ofreca retribuciones p/ el fabricante q pudiera aumentar su produccin total c/ innovaciones baratas y sencillas, y un mercado mundial amplia// monopolizado por la produccin de una sola nacin, viendo as las posibilidades de expansin.

Entre 1789 y 1848 Europa y Amrica se vieron inundadas de expertos, maquinas a vapor, maquinaria algodonera e inversiones de capital, todo britnico. Inglaterra tena ya una industria muy fuerte y un estado agresivo p/ poder apoderarse de los mercados de sus competidores y una coyuntura econmica que se lo permita: industria algodonera y expansin colonial.

LA INDUSTRIA ALGODONERA britnica tuvo su origen en el comercio ultramarino, que produca su material crudo y artculos de algodn indio, adems de ir de la nao de la esclavitud. La industria de algodn impulsada por el comercio colonial tuvo una gran expansin e/ 1750 y 1769.

Los mercados coloniales y semicoloniales tenan mayor importancia que las metrpolis en el exterior. Durante las guerras napolenicas estos mercados europeos fueron bloqueados, pero luego de terminas las guerras continuaron afirmndose. Dentro de Amrica, frica y Asia (zonas subdesarrolladas), la industria britnica fue estableciendo monopolio a causa de las guerras, las revoluciones de otros pases y su propio gobierno. Las indias orientales, que haban sido las exportadoras tradicionales de mercancas de algodn, cuando comenzaron a predominar los nuevos intereses industriales en Inglaterra, estas fueron automticamente desindustrializadas. China se negaba a comprar lo que las economas occidentales controladas le ofrecan hasta que e/ 1815 y 1842 los comerciantes occidentales ayudados por caoneros occidentales descubrieron un producto ideal para el comercio exportador: opio.

Por todas esto el algodn tenia perspectivas de expansin p/hacer inversiones y realizar la revolucin. Los inventos que revolucionaron eran sencillos y baratos por ello compensaban rpida// los gastos de instalacin c/ altsimas producciones. El abastecimiento de la materia prima aumentaba con la esclavitud y la apertura de nuevas reas de cultivo. e/ 1790 y 1860 la industria algodonera britnica encontr sus suministros e estados del sur de EEUU.

Otras industrias como la textil, la alimenticia o la de bebidas eran estimuladas por el rpido crecimiento de las ciudades, aunque todas ellas empleaban poca gente y su poder de transformacin era mucho mas pequeo a comparacin de la industria algodonera cuya demanda derivada del mismo (maquinas, adelantos qumicos, alambrados industriales, buques, etc.) contribuyo al progreso econmico en Inglaterra hasta 1830, adems de que su expansin fue tan grande y su comercio exterior decisivo, que logro dominar los movimientos de la economa total del pas.

Sus graves consecuencias fueron sociales: la transicin a la nueva economa creo miseria y descontento la explotacin del trabajo q mantenan las rentas del obrero a nivel de subsistencia permitiendo a los ricos acumular beneficios a financiaban la industrializacin de forma que los obreros y pequeos burgueses, q compartan el mismo descontento se unen en movimientos de masas, como el radicalismo, democracia, y republicanismo.

Hubo 3 fallos: el ciclo comercial de alza y baja, la tendencia de la ganancia a declinar y la disminucin de las oportunidades de inversin. Las crisis peridicas que conducan al paro, a la baja de produccin, a la bancarrota, reflejaban una catstrofe agrcola, pero tambin se daban en pequeos sectores fabriles y financieros.

La industria algodonera tena varias ventajas: la mecanizacin que permita el aumento de la productividad, la construccin de fbricas barata, el material en bruto rebajado por la expansin del cultivo en EEUU, y encima los empresarios gozaban de los beneficios de la inflacin. Pero a partir de 1815 las ventajas se vieron neutralizadas por la reduccin del margen de ganancia, debido a que la Rev. Ind. causo una cte. baja en el precio del producto terminado pero no en los diferentes costos de produccin y porque a partir de 1815 los precios eran de deflacin y de esa forma las ganancias padecan de una baja. Para poder atenuar esta situacin, deban reducirse los costos, y de todos, el de los jornales, es decir, la reduccin de obreros caros por mecnicos ms baratos y maquinas. La industria se vio as obligada a mecanizarse, a racionalizarse y a aumentar su produccin y sus ventas, sustituyendo por un volumen de pequeos beneficios por unidad la desaparicin de los grandes mrgenes.

El CARBON constituyo la fuente de mayor podero industrial del s. XIX, y fue el combustible mas importante debido a la escasez de bosques en Inglaterra. El crecimiento de las ciudades provoc q la explotacin de las minas se extendiera desde el s. XVI. Su industria era suficiente// amplia como p/ estimular la invencin: el FERROCARRIL debido a q las minas requeran maquinas de vapor p/ su explotacin y tb como medo de trasporte.

El ferrocarril era el nico producto de la industrializacin del s. XIX, tenia la capacidad p/ abrir caminos hacia pases separados del comercio mundial por el alto precio de los trasportes, aumentaba la velocidad y el volumen de las comunicaciones terrestres p/ personas y mercaderas, y tenia un inmenso apetito de hierro y acero, carbn y maquinaria pesada, trabajo e inversiones. Durante las dos primeras dcadas del ferrocarril la produccin de acero y de carbn se triplico.

Por qu el ferrocarril? En las dos primeras generaciones de la Rev. Ind. , las clases ricas acumularon renta