Eleazar Meletinsky - Sociedades Cultura y Hechos Literarios

  • Upload
    juan32

  • View
    238

  • Download
    0

Embed Size (px)

Citation preview

  • 8/16/2019 Eleazar Meletinsky - Sociedades Cultura y Hechos Literarios

    1/11

    ELEAZAR MELETINSKY

    r evisad o   por   JEAN BESSIERE

    En   el marco d e   la teor fa literaria,   es   importante plantear la   pregunta de como

    se   realiza el hecho   literario.l!:.Iecho   literario se toma aquf   en   su   acepcion   am-

     plia, ya que abarca   1 0   que se entiende habitualmente por obra,   pero tambien   1 0

    que   acontece en torno   ala obra  --contexto, publico-,   10   que la precede   -an-

    tecedentes, autor -   y   1 0   que la sigue -la recepcion, sus   inf luencias]En esta

    notacion   de   los anteced entes y en esta indicacion del   f enomeno liter ario, sellega al problema   de   la   identificacion, de un comienzo de   este fenomeno, y al

    de la diferenciacion progresiva de 1 0 literario en el transcur so de la histor ia.   En

    la notacion de la ser ie historica y geogr afico-cultural del fenomeno liter ario, se

    (destaca la   d iver    idad d e   las realizaciones   d e   10   literario,   pero tambien de las

    corr espond encia   E S   similitudes que tienen q ue ver con   la forma,   las   situa-ciones   d e   enunciacion el e   tatuto   del autor ,   el d e la obr a y las organizaciones

    tematicas   y simboli a.   toda   estas   preguntas   corresponden busqued as   his-

  • 8/16/2019 Eleazar Meletinsky - Sociedades Cultura y Hechos Literarios

    2/11

    I t   I  f t'"   /film   or al,   y 1£1escritura,   que es l a marta   de los exper tos,   no impid e   que,'I' IIi ,)1,POl'una  par te,   lit erat u ra cult a   y,  pOl'otra parte,   lit eratura popular .   Se-

    ,111111'I jllcgo   d e 10or al   y d e 10escrito,   fi jar algunas grandes identidades   hist6-

    r i 'o-clIltllr ales   d el   fen6meno liter ar io   y, mediante ella,   trazar los orfgenes de

    I ) lit rario, sus  gr andes modos de realizaci6n, la evoluci6n de la noci6n de au-

    lor ,   1£1impor tancia progresiva de la preocupaci6n formal,   algunos paralelis-

    mos   y corr espondencias legibles en las   literaturas occidentales   y  orientales,

    tales   son los pr incipales puntos de d esarrollo de este capftulo,

    lin   'I mar   'n   c 1 ~ 1 sin   'I'   tismo   pr imer o   d e  las :lI'l~s, hay div   .   SO,'   1'011111111111111

    'on   funciones s pecfficas   quc  tom an s u Jugal' d e   mantr a nal ural.   1'01   (')I'lIl plll

    'n los ritos d e   los   a borf genes   de   Austr alia,   la   d anza   r e pr es   nla   111('011(1111II

    usual d e] anima]-t6tem, en tanto que el canto   g]orifica   a los a ncestr    slot   '1I11(II',

    En las pausas,   e] comentar io or a] d e  ]os sacerdotes- bru jos   r econstruye   I itilll'l 1

    r io sagr ado de los   ancestros a tr aves   de los   territorios de las  tribu,   vecinas.   I.I

    musica  de los instrumentos   primitivos,   la d anza  y la pala bra   voca]izad a,   p ti  'U Y

     prosaica,   tam bien   se ensamblan.   EI juego gestual, el juego verbal y la su p 'r  po

    sici6n de los diversos   pIanos artfsticos   provocan inevitablemente una   fr agm n-

    taci6n del texto   verbal tal  como se nos ofrece. En  su forma original,   el canto   no

    consiste   a veces mas   que   en una   0  dos   pala br as (pOI' e jemplo,   el nombr e   d   I

    t6tem,   d el espfritu).   Para pr eser var    el ritmo   se   agr ega   partfculas enfaticas,   s

     prolonga   ]as sflabas,   se   modi f ica   los  acentos.   En la   poesfa primitiva,   el ritmo

    se acerca   £IImetr o   poetico y muchas   veces   supone aliteraciones, asonancias,

     per o todavfa excluye   las rimas.   La pr eferencia pOI'uno u otro tipo de repetici6n

    f 6nica esta vinculada   al caracter    especffico de cada lengua   - pOI' ejemplo,   el

    recuento de las sflabas   en la poesfa del Extremo Oriente, el metro estricto en

    los Ob-ugrianos, 1£1aliter aci6n   en la poesfa germanica y en Somalia, las asonan-

    cias   en la   poesfa romana,   en los   polinesios 0 en   algunas tribus   aut6ctonas,   la

    d uplicaci6n en Fidji, el acento t6nico en los birmanos   y los yorubas. La cohe-

    rencia   del canto esta   pOI'entero en el verso,   cuya   longitud    esta determinada pOl'

    la  melodfa y por Ia   dur aci6n posible de la resonancia   d e   1£1VOl..Cada verso   es

    una   r e petici6n y una variante   d el   verso precedente   -line-upon-line method  ,

    como 10denomina M.C.   Bowr a en su o bra   Prhnitive song   (1962). No obstante,

    no hay que   exagerar ni sobr eestimar la anterioridad    y la hegemonf a   de la mu-

    sica y d e   la d anza sobr e   1£1poesfa arcaica (como]o hace A. N. Vesselovsky;

    ]£1inter  pretaci6n de M.C.   Bowr a   par ece   mas justa).   La   pala br a   cantada en 1£1

     poesf a arcaica ritual d esempefia   un pa pel magico y   simb6lico; se asocia y   se

    r ef ier e   alas representaciones   mitol6gicas,   expresa   emociones co]ectivas y no

    es un modo   alguno pr oducto d e  impr esiones   fortuitas. Plegarias y encantamien-

    tos magicos   y  sagrados   son ]as  primeras fuentes de 1£1frase poetica.   EI ritual, en

    su totalidad y particularmente   en su aspecto verbal, procede de una finalid ad 

    magi ca.   La magia de la pala bra engendra ]a repetici6n y la   metrica de algunas

     palabr as desemboca en el empleo de variaciones sinonfmicas y de expresiones

    metaf6ricas (en los aborfgenes de Australia y en Africa asf como en ]os textos

    grabados en las piramides del antiguo Egipto).   En algunos pueblos, en es pecial

    etllos samoyedos, el discurso cantado y metaf6rico es el equivalente de un ju   '.

    go ritual.   En el rito chamanico,   1£1palabra cantada es el sosten de los di f er    Ill's

    espfritus, guardianes 0 malef icos. Sus   "mascaras"   revisten la forma d 1:1III

    la br a. La   lengua metaf 6rica de los chamanes   no s610 favor ece el d csarr ollo d ('

    Par ece   pro ba ble que ningtin   arte haya pod ido real mente   acceder   a 1£1existencia

    antes   d e  1£1adquisici6n dellenguaje ar ticulado,   EI arte verbal surgi6 sin embar-

    go mas   tarde que 1£1musica y las artes plasticas   porque tiene como unica materia

     prima 1£1pala bra y requiere un desarrollo complejo de la lengua en sus funcio-

    nes expresivas y de comunicaci6n, en sus formas gramatico-sintacticas, En sus

    inicios, el   arte   verbal estuvo ligado estrechamente ala d anza   y   a la musica, en

    el mar co de un   acto teatralizado que   er a   un rito primitivo.   EI fundador de lateoda d el sincretismo inicial de las artes, el academico A.N. Vesselovsky,

    indic6 que etimol6gicamente las dos series de nociones:   canci6n-dicho-ac-

    to teatralldanza- encantamiento-adivinaci6n-acto ritual, son muy cercanas.

    La   hip6tesis de   K . Bucher    segun la cual el   arte verbal se derivarfa directa-

    mente de la   canci6n cantada durante el  tr a bajo   y   el metro poetico de los rit-

    mos  natur ales   d e este trabajo,   nos parece en la actualidad muy ingenua.

    EI a nalisis   que A. N.   Vesselovsky expone en su   Pohica historica,   escrita a

    finales del siglo   XIX,   parece mas justo   y  mas matizado. Insiste en 1£1 primacfa de

    1£1danza y la  melodfa,   que son las que dan nacimiento   £IIdisefio rftmico. La

     pantomima   rftmica va acompafiada de una melodfa que comprende asimismo

    onomatopeyas fijadas de antemano, pero todavfa privadas de sentido.   La poesfanace el dfa en que se agreg6 la palabra a este acto ritual.   EI gesto   y   la VOl.,el

    sonido d e   los instrumentos musicales preceden a ]£1aparici6n de la pa]abra y,

    de inmediato, ]£1acompafian.   En particular la VOl.es el sustrato fisiol6gico de

    1£1palabra. En sus ultimas obras,   Paul Zumthor considera que 1£1VOl.es la media-

    ci6n entre 10antropo]6gico y 10cultural, un actante principal de la p s fa oral

    y hasta uno de los componentes de la literatura escrita hace tiempo   y  que supone

    una recepci6n oral y permanece dicha porIa VOl.deljuglar .   Para Paul  Zumthor 

    (1983), 1£1funci6n simb61ica   y   social de la VOl.es muy importante antes del

    surgimiento de 1£1 palabra y des pues paralelamente a ella y en relaci6n con ella.

  • 8/16/2019 Eleazar Meletinsky - Sociedades Cultura y Hechos Literarios

    3/11

    II  m   r :'f or a   y de otr as   f igur as poeticas,   sino   q ue surge como el modelo del   d is-'ur so   poetico, que   se  d istingue notor iamente del   discur so cotidiano.

    La  calid ad estilf stica d el ar te   ver  bal primitivo esta vinculada al r i t m"   VI)

    mientr as   que la  poesia de pende del saber mitico   y sagrado ... Por  ello la po   'S

    r ituallir ico-epica es cantada y despues   versificada   y se caracteriza   por un Csl j.

    10 es pecif ico,   mientras que el planteamiento   d el   mito  en pros a, en  el marco d 

    r ito y f uer a de el,  es neutro desde un punto   de vista   estilistico. No solo las dif c·

    r entes ar tes, sino tambien los tr es ti pos d e poesia   (lir ica,   epica, dramatic a) d e·r ivan d el   comple jo   rito-mitico.   El elemento dr amatico y teatral domina en  e

    r ita   y esta estr echamente vinculado allirismo pri mero. En  la poesia medieval

    d e   todos los   paises,   vemos   asimismo   hasta que punto la   poesia lirica esta en·

    gendrad a por ritos de las estaciones y ritos de pasa je.   No se trata   unicamentf 

    del ti po   de lirismo q ue se encuentra en lengua tamil, sino   tambien   del de 1

    trovador es, de los troveros y d e  los   minnesinger.

    Tr atand ose del origen de la   poesf a   epica,   el pa pel pr incipal   cor res ponde a

     planteamiento prosaico de  los   mitos,   con frecuencia   f uera de los  ritos.   A 1

    cantos   compuestos   ala gloria   de los ancestros no les atane esto. La f orma mix-

    ta  es   la   f orma pr imera de la epopeya:   solo los d ialogos   y las descr ipciones S

    cantan y estan versif icados.

    La poesf a epica mas atrasada y mas   arcaica evoca a los ancestr os   -heroes

    civilizadores   (culture hero)-;   mas tarde, con el  fortalecimiento de la nocion

    de estad o,   esta poesia ca pta las leyendas   histor icas   locales que   en otro tiem-

     po  constituian un genero independiente de la poesia e pica.   La poesia   epica con-

    q uista progr esivamente   una belleza estilistica que, en las canciones heroicas   0

    cn los   cuentos fantasticos, supera la de la poesia   pur amente ritual.   Hay que

    o bservar que las formulas   iniciales y sobre   todo finales del cuento   acentuan   l

    inverosimilitud ,   es decir, destacan el derecho a la invencion,   ala   ficcion.   Se

     puede   encontrar huellas   del antiguo sincretismo en la literatur a medieval y por

    110M.1. Steblin-Kamensky ha insistido en "la   verdad sincretica" de las sagasislandesas (1979).

    Si   se   liga el mito con el contenido del arte verbal   arcaico s e cor r e el  r iesgo

    d    r   d ucir el caracter metaforico de la literatura, de   la pro pia   pala br a poetic a,

    II III mcntal idad mitologica.   A principios del siglo xx,   los romantic   os alemanes

    ( bs 'r var on la   relacion entre literatur a   y   mito.   La poesia mitologica   es inse pa-

    I'Ilhl   d    la esf era emocional   y   motora   y   del hecho d e  q ue   el hombr e primitivo

    Ill) s   e1istinga de la  naturaleza que  10 r oelea. Esto im plica una personificaci6n

    IIniv   r sal.   La   difusi6n   y  la influencia de la mentalidad mito16gica se car actcri-

    ",un asi mismo   por una diferenciaci6n incierta   de los d atos siguientes:   sensual,

    'on   'r to  y   a bstr acto;   sujeto   y   objeto;   objeto   y   signo; criatura   y   nombr c;   OSll   yItr ihut   s;   ticm po   y espacio;   causalid ad    y  contigiiid ad ;   esencia   y or i n.   De

    \,110S'   d   e1u c q ue cl  t iempo   prim   ro cs  la fuente d    todo   ticmp   1 1 1 1   ·r ior .   I\ N ll

    IIH'lIllllidad   'ollclu   ' ala par li 'ipa 'ion,  cI   S'fila   por  I. 'vy-Ilr uhl,   II   III   ('n'   1(' 01

    Gracias a la magia d e  la  palabra,   la r epetici6n   y las  variantes semanticas ganan

     p?;   la ~ an~   a.la repetici6n   de los  sonid os. La palabra sagrada y magica es tam-

     bIen mltolo~lca porq ue los   encantamientos   y   los cantos r ituales son   inse pa-

    r a bles de  la Imagen de los   ancestros   y de la d e  l os espir itus y los dioses.   Es por 

    ello por   10que   los.e,ncan.tam,ie~tos primitivos com pr end en muchas   veces frag-

    mentos d e   narraclOn mltologlca,   cantos guer r eros   (histor ia   de los dioses de

    la  guerra) y relatos r elacionad os con   los r itos   d e las estaciones   (mitos de  lacreacion),   etceter a.

    .   EI rito y el   mito son   insepar ables,   repr esentan las   d os facetas   de   un mismo

    sIstema.   Hist6ricam.ente,   se engendr an   r eci procamente. Observemos   que   A.N.

    Vesselovsky su bestlma ba el papel   d el   mito   y que   la llamada   escuela de Cam-

    ~rid ge (1os ?isci pulos d e   J.G.   Frazer) insistfa demasiad o en la   prior i dad d el

    l"I.to.En reahd ad,   la mayor . par te   de los  ritos posee su eq uivalente mitologico   y

    ~Iceversa.   En 10q ue se r eflere al folklor e austr aliano, este fenomeno esta ana-

    ~Iz~d~ en la obra   d e W.E.   Stanner ,   On abor iginal   r eligion   (1966): los ritos

    IIltJchlUma   de reproducci on de   los   totem   se  pueden   consid erar    como eq uiva-

    le~tes a lo~ mitos totemicos; los ritos d e   iniciacion como equivalentes de los

    mltos rela.tIvos al her oe civilizad or    y al  her oe de la tribu,   a la serpiente arcoir is

    y   a   la   br uJ~ que se tr aga a  los   ninos;   los ritos   d e reproducci6n   y   de fertilidad 

    como eq Ul~alentes   de los mitos   relacionados   con las her manas que andancn'antes   y   dlspersan a los totem.

    Varios mitos pueden correspond er    a  un solo   r ita,   pero   rar as veces un rito

    car ece   d e   e~uivalente ~itologico.   En todos los casos, los mitos y los   ritos po-

    secn. una   uJ1ldad semantIca comun, si bien el analisis de algunos per sonajes d e

    los   I"It,as pued e   que   no coincid a can el   de los mitos,   y ambos presentan estruc-

    t~,ras Isom6r ficas.   Estas   estructuras son inseparables de la notacion d el miste-

    n   :   'I   heme:   exiliado,   sufre pruebas terribles y   regr esa   a su   clan d espues   d e

    Itah r a'   cd ldo a   un   estatuto   mas   elevad o.   (Compar ese aquf mitos-r itos on

    I~'  l"lId .as   y   ucntos.)   Esta   unidad semantica es el   anteced ente   neccsar io   d   I

    ,'lllVI'   '(Ismo   d  '  las artes   en  el  sena   d el rito Es  inncga ble   q ue el  sincr clisl110   110

    ~olo   l','   fo 1'111III (   I r ito   r cun'   f as   r orr nas   pf lin   ras   d    las   ar t   s),   sino   l:lIl1hh   II

    11Il'i)ll»)   ('0   ('1,llilo   un'   I ar t·   v 'r ind  n;1  ' j   'nl   a   "'111   nl()s d   Ia,. 'Ji}'ioll   dl'1 I I I I i ) , 1 I 1 I   I ) , ]   ,

  • 8/16/2019 Eleazar Meletinsky - Sociedades Cultura y Hechos Literarios

    4/11

    J l   '1~"~t1n'.~te ~e cam pos ~im??licos   mediante modificaciones de los codigos

    I,   .VI-.  tl auss) y a  la SUStltuclOnde las  relaciones de repeticion por las de causa

    y ",   'I   . La for ma artfstica es en sf misma la heredera del  sincretismo y de un

    mod o   con~reto y sensual de adquisicion del saber .   Todas estas identificacio-

    n   ~, ~nenctonadas mas   arriba, son los fundamentos de las comparaciones pa-ralellsmos,   metMoras   y sinonimias. '

    .   En R usia, la   estrecha vinculacion entre el mito y la   forma, exterior    0inte-

    nor, de   la  palabra,   fue comprendida con exactitud por Potebnja a fines del   si-

    glo   ~IX   y por Freudenberg ~n los anos  veinte y treinta. Este autor piensa   que   la

    rnet~fora   ~s la consecue~cIa   de la divergencia entre la semantica del mito y su

    ~lOrf?logta. Estas mut~c~ones d e   la significacion del mito las expuso d e  mane-

    Ia mas  cl~~a Claude   LevI-Strauss en  Mit ol6gicas.   En la epoca arcaica, el mito

    ~ese~Fen.o   u.~gr~~ pepel como   fuente original del   arte   verbal.   La   literatura

    ta:nbten   S.tgUlO,ut~hzando ~~tivos mitologicos   a  10 largo de su historia   y to-

    mand o   mlt~s.  btbhcos,   cor amcos,   hindues,   budicos,   dao. Los   mitos   d e estas

    gr a.nd es   rehglOnes han conservado los  arquetipos y tr ansmitido poco   a poco ala hteratur a   un gran numer o   d e   motivos-clises.

    1?espues de u~ periodo de desmitologizacion consciente   -siglo de las Luces,

     p~nodo d el reahsmo en el   siglo   XIX-,   el modernismo del   siglo   xx vuelve al

    mlto,   en el que   ve no solo un motivo de ornamentacion, sino tambien un medio

    d e   estr ucturar la  obra y d e  interpretar 10 imaginario (T.   Mann Joyce K fk  

    r :~lU.lkner,~~cte.au,   Garcia  Marquez y multi ples autores de Ame~ica   La;inaay d:

    Af nca).   Nt s lqu~era el arte Ilamado realista   0natur alista   pued e evitar por com-

     p~eto la presen:la   s~bter r ane p   d el mito;   incluso en la literatur a sovietica,   Bul-

    gakov,   Rasputm,   Altmatov y algunos   escritores georgianos utilizan los mitos.

     pr ovisacion y d e   la   representacion. La   oralidad utiliza el procedimienl0   f l1II'

    upon line   que   aca bamos de mencionar (veanse los estudios de Bowr a,   Fill

    negan (1977), Tchistov). EI desarrollo del tema y el paso, verso a ver so,   pOl'

    medio d el   encabalgamiento,   pueden ser descritos en for ma de una progr esi n

    r emo-temlitica:   eI tema   del eslabon que  sigue es la rema transformada d el  esla-

     bon que pr ecede. EI discurso poetico se puede tr atar como un desarrollo jer ar -q uizado d e unidades   predicativas. Parece que este tipo de desarrollo esta en

    cor npetenci a con  una   acumulacion d e  versos   geminados,   paralelos e isomor-

    f os.   K.V. Tchistov, en su obra   Les traditions populair es et Iefolklore   (1985),

     juzga que   la alianza d e  la estabilidad y de la plasticid ad constituye el caracter 

    s pecff ico   del   folklore. Esta   alianza y los d atos de composicion estables (for-

    mu las, situaciones tfpicas, etiqueta,   per sona jes constantes) deter minan el cam-

     po d e  las var iaciones.

    EI texto poetico oral comparte algunas caracter fsticas con el discurso coti-

    diano.   Por ejemplo,   esta dividido en pequefios fr agmentos estructurales, enla-

    zados   entre sfpor reglas sintacticas   que no tienen nada d e  estricto.   Pero e I   texto

     poetico oral es mas codificado que el discurso cotidiano. Los textos folklori-cas   son   tradicionales y se trasmiten mediante el sesgo de una  r epresentacion.

    Un acto   de esta f ndole, en parte ritualizado, implica   una vinculacion estrecha

    ntre el  cantor y su auditorio,   que debe conocer   las tradiciones   y las obligacio-

    n   s r ituales. La representacion no equivale a una   recitacion de memoria, sino

    IIla r ecreacion de modelos de generos, de estilos, d e temas.   Las repeticiones de

    I)da lase y  las formulas permiten al cantor retener eI texto en la memoria en-

    r I'  '  una y otra   representacion. EI mismo cantor modi fica   ligeramente su "texto"

    uuranle   una   serie de representaciones.   Las variaciones se van haciendo mas

    IihI'   sa   med ida que el texto pier de   su caracter sagrado y va adquir iendo impor-

    Ian ia el   pa pel q ue desempenan los generos prof anos. En principio,   la varia-

    'ion   es el  car acter fund amental del folklore y esta es la razon de que haya que'onsid er ar la   investigacion de un prototipo unico como una utopfa cientffica.

    Las   f r onter as   de una obra or al siguen siendo muy borrosas y esta es una de las

    Iifi   IIltad es   par a el estudio de las obras   orales.   En la liter atura oral, el principio

    I' 'II ri   0 pred omina.   EI paralelismo y la sinonimia favorecen el examen d el

    I'IlHl n sus  dif erentes aspectos.   Este examen normalmente no sirve para pr e-

    'isHr    1senti do de la palabra,   sino que abre a una nocion mas amplia que  coin-

    rid '   on la  parte comun a los sinonimos (su "interseccion").   Las repeticiones

    I' 'I   I' 'I'   nlan,   en todos los casos, el procedimiento mas importante de estructu-

    1   l'i   n y d e   ornamentacion.

    I~I) pr inci pia,   la liter atura escrita   tiene su origen   en  el f olk lor e, alga que   I   s

    I

    \)I11:lnliOs mpr end ier on r nuy bien  y  mas  tar d G. Pa r  is   y A. N.   V   ss   lovsky.M,PlIr r y   I   R   yA.L   r d (l\   10   par I nd    1S\lPIi 'I'I   d 'qll'llI" po p   yll   ' 1 ' 1   f ila

    Tr atando.se   d el problema de la genesis   de la   literatura hay   que r ecord ar que

    ~Ia.   f la sldo ante   .to~o un arte oral   y   que, aun des pues de la invencion de la

    :"cr~tur a y e.' Surglmtento de la literatura escrita propiamente dicha la oralidad 

    SI   :UIO~Jer cI.end o u~~ influen,ci.a y per manece como uno de los prin'cipales ele-

    Il~,"l.~" d    la cr eaclOn .f olklonca.   La or alidad conserva   en gran medid a   una

    r   I"   Ion   .   n   la   teatr ahdad .   La   r e peticion de pala bras y de   "f '   I"   I,   ..,.. .•   .   ,   .   ormu as   ,   as

    V.l11:1l()r ~ s d p.alabr as (los sl11ol1lmos)y d e   ver sos (el par alelismo   f ono-sin-

    1.1 'f   I, '0   1'1'11'1)   1'1 nd o  las car aclerfslicas   mas   f und amenlales   d el  canto ar cai   a

    1 1 1 '1

      'olk lof\'   d '   Jos 'n   r os   IiI   rar ios   q ll   manun   d el   f olk l   I'   . T d    '  '1   :

    I   I   .   S   S   OsI   'I'll,.   !l11l'S'   J '   :IL'IOl)allaliI'   lod o   '011IIIor alidad ,   /0 > 01 1   illS' pam   hits   ele  IIIirll

  • 8/16/2019 Eleazar Meletinsky - Sociedades Cultura y Hechos Literarios

    5/11

    ( 'n   pr imer   lugar ,   los   poem as homericos) es la heredera de la  tecnica oral de la

    r  ' pI'   sent~ci?n   f olkl6rica, si bien estos autores no creen que la literatura haya

    ',~anad o   umcamente ?el folklore.   En realidad, casi toda la literatura epico-he-

    r ?,ca procede de canclOnes y de leyendas orales,   aun cuando las f6rmulas poe-

    tlcas   no pued an ser reducidas exclusivamente a los procedimientos del arte oral.

    En nuestr os dias, "antropologizando" un poco y subrayando el importante pa pel d e l~ voz,   Paul Zumthor demuestra de modo convincente la importancia

    de   la or ahdad durante toda la Edad Media, incluida la literatura escrita. Este   I

    autor ex plica mediante la supremacfa de la tradici6n oral el hecho de que sean

    tan escasos los manuscritos que se conservan en Europa   anteriores al siglo   XII.

    P. Zumthor   se vale del termino oralidad mixta para designar muy en particular 

    '~ I.for ma   d e   creatividad que representan los cantares de gesta,   las cancioneshncas y  la s   canciones populares,   y para car acterizar    en menor med ida la lite-

    ratu~a cortes, cuyas rakes estan en parte en el folklore y cuya invenci6n es

    escnta y pe~sonal, pero cuya representaci6n concreta sigue siendo oral (a pesar 

    d el des pr eclO del que a veces   son objeto los troveros por parte de los trovado-

    res).   Es .muy   significativo que   el can tar de gesta   emplee la palabra   "can tar"r sustantJvo] y contraponga   "can tar" [verbo]   0"hablar" a "oir "   0"escuchar"(en ale~a.n   sagenlhoren),   que el narrador a veces irrumpa en el texto al dirigir-

    se ~l pubhco   y  que el texto este dividido en fragmentos que corresponden alas

    seslOnes or ales. En la literatura medieval, epica y Ifrica,   encontrar con frecuen-

    cia a   la figur~ del cantor no se debe para nada al az ar :   vease, por ejemplo, el

     Beowulfy   la hter atura anglosa jona en general,   0 bien en la liter atura rusa una

    o br a e. pica,  s olamente y por entero escrita,   La gesta de Igor .  EI dobJe est~tuto

    d e  la hteratura cortes se manifiesta mediante el empleo paralelo de "escuchar"

    ode " ofr "   y de   "ver". En esa epoca, el par "orallescrito" ya se identifica con

    c~ pa~ ':V~lgar /culto". La victoria casi total de la escritura conduce a la "prosai-

    'lzaClOn .del romance cortes y a la retoricizaci6n de la poesfa Ifrica. Los gene-ros de   la hteratura urbana propiamente dicha -trovas,   Schwank,   el   Roman de

     Renard,   etc.- conservan durante un cierto tiempo un cankter oral.   Por ulti-

    mo,  hay qu~ tener en cuenta eI elemento oral en los sermones y en los ejemplos

    tll/ .  han d e   Jlustrar esos sermones.   EI predominio de la tradici6n oral ha favo-

    I"   '   'Id o   alguna~   var iaci,o.nes, algunas inestabilidades de ]os textos escritos y el

    'UI"   I r   f or LUlto y  caotlco de la distribuci6n de las obras en los manuscritos1/1  'oi 'val   s.

    I~n ri nL ,  la influencia r  ecfproca de dos corrientes   literarias, oral   y escr i-

    f    I, Illi ': ·rOl/rad o.   L~s   narr aciones tipo   sira   arabe   0 dastan   persa son s emi-

    II Ik  I  )lICaS POI" SI/   On   n,   POl'   el  scs   0   d e   la r ece pci6n   y por   su   auditorio.   Los

    111110   'os  11IK 'IIIlISd '   .or  la ni,   Nizami   y   Rust av I i, qu   son los cqllival   Ill's   d    J

    1111111111(0   1'01II   S ('1\   v 'r so,   I I I'   'OlllO   1111's   'nf t:1l   illS   II   r oi  'as   f   '11~xll" "110   Or i   'II

    Le,utilizarfan motivos f olkl6r icos e influirfan a su vez en la nar r aci6n   or aJ  (d   '1

    mismo   modo, en Eur opa,   los romances corteses enriquecieron el cuento   f an-

    lasti   0   ral).   En Oriente, existe una s6lida tradici6n profesional de narrad or s

    qu r   lIabilitan ar tf sticamente los temas de las narraciones medievales escri-

    tus.   No hay que olvidar que la gran cor r iente folkl6rica coexiste siempre con la

    1itcr atura escrita   y sufre la presi6n de esta asf como la de las grandes religiones.Las inscripciones, cuya funci6n no podf a   ser satisfecha plenamente por la

    oralidad, marcan los inicios de la literatura escrita mas antigua.   Las inscripcio-

    nes biogr af i ca s r  eferentes a los altos dignatarios, los textos relacionados con el

    oficio de  muertos en el antiguo Egipto, las inscripciones de los reyes de Sume-

    r ia,   las   inscripciones chinas en los huesos   de adivinaci6n, las inscripciones ru-

    ni   as escandinavas,   etc., han respondido a esta   necesidad .   La propia   escritura

    sLuvo aureolada en primer lugar por una gloria   magica. Los libros can6nicos

    y  r eligiosos mas antiguos (Biblia,   Coran,   Rigveda, canon confuciano) fueron

    sacr alizados independientemente del origen de los elementos que los compo-

    ncn.   La escritur a   facilit6 la resistencia alas variaciones que son contrarias ala

    'sencia d e los textos sagrados.Simultaneamente, varios generos de la literatura antigua siguieron la tra-

    d ici6n folkl6rica de los encantamientos, de la poesfa ritual,   del mito y de la

    I yenda   hist6rica, EI saber folkl6rico se transforma primero en literatura   d i-

    d !\ tica.   Las bell as Jetras surgen mas tarde. En los paises arabes, despues de la

    inf roducci6n del Islam y dellibro sagrado,   el Coran, paralelamente a la audi-

    'i n d c   la poesfa (el discfpulo del poeta es quien recita casi siempre los versos

    d  . SlI maestro), se vuelve a copiar la poesfa para leerIa y se compone antolo-

    e   us,   incluso   individuales, escogidas con   todo cuidado y estructuradas (deno-rninadas   Divan).

    I,s   )bvi que   una larga historia separa al canto magico primitivo, acompafiado

    d . dUllzas r ituales, de la obra literaria (y hasta de la canci6n contemporanea,

    int  ' rpr ctad a por un artista de variedades), La evoluci6n del cantor   al poeta co-

    I I"  's ponde a esta distancia diacr6nica. Para designar al cantor y al poeta, cono-

    ll'm   s apelativos diversos: aeda   versus   rapsoda, f  ilid    ver sus   bardo, thulr 

     \ l N S  IiS    sk ald    0scop,   trovador    0trovero   versus   juglar, etc.   Estas denominacio-

    III'S   n r alidad   miden el grado de emancipaci6n de la palabra poetica,   que s

    v \   II ' jllnd   poco a poco d el   sa ber mfLico, y la i nd e pend encia pr  of esional   y   I

    (••'f   IllIf o so inl d 'J po   la  (a d a y tr oY 'r o   \ler ,~us   rapsod a y jll lar ). on   orr 10

  • 8/16/2019 Eleazar Meletinsky - Sociedades Cultura y Hechos Literarios

    6/11

    Ihi lralli   'i6n,   el acto  poetico tiene por objeto la reproduccion de un c ierto textohk lll que   ha   sid o   inspirado por los dioses y debe seguir existiendo.   En su

    ('stad io   ar caico,   el canto   0el mito pertenecen a grupos definidos,   reuniones de

    hombr es,   dinastfas de chamanes,   sacerdotes, etc.   Los cantos individ uales sur-

    ir on relativamente tarde entre los indfgenas de America   0en  los pueblos

     palco-siberiano y no aportaron cambios notables porque tambien   estaban ins-

     pirados   por los espfritus guardianes.   Estos espfritus pueden tambien escoger e

    ins pirar a un cantor, cuando este   10merece,   0 a un narrador, un chaman   0 un

     profeta.   Los nivjy (ghiliacos) de Sajalin creen que durante la representacion

    d el   nast und    (cuento heroico) un espfritu   mifkehn   ocupa la lengua del cantor y

    Ie inspira   el canto.

    En   los   kirguiz, el protagonista da al cantor, a rafz de un suefio, la orden de

    can tar sus   d escubrimientos.   EI cantor anglosajon Caedmon fue elegido e ins-

     pirad o d e   esta misma manera.   Asf pues, en la poesfa arcaica, el  "canto"   0 la

    " pala br a"   son consid erados con frecuencia como si fueran   seres vivos,   inde-

     pend ientes del cantor .   En los   samoyed os, el cantor se d irige ha bitual mente al"canto" cuando tiene que modificar la estructura de la  accion.   Los poetas se

    d irigen a veces ala pala bra   0a la cancion tanto en el folklore desarrollado co-

    mo   en  la literatura medieval.   La   imagen   de la palabra de la cancion precede a

    la  imagen del poeta. Muchas   veces, este ha de buscar esta "pala bra". EI cantor 

    y el  chaman   finlandes Vainamoinen van a buscar las palabras magicas al reino

    de   los  muertos y esto es comparable a la relacion que existe entre el canto y la

    serpiente ctonica en la mitologfa autoctona de America   Central.   EI dios supre-

    mo escandinavo Odfn recibe mnas magicas despues de una iniciacion chama-

    nica y roba la miel poetica  a los gigantes.

    Segun las representaciones musulmanas,   el poeta es un instr umento del

    cr eador y actua   gracias a la energfa creadora de este. Simultaneamente,   se eva-lua   la maestrf a   del cantor .   Se hace competir a cantores y narradores. Los

    filologos arabes de la Edad Media encontraron asf el med io para lIegar a una

    evaluacion definitiva de los  poetas.

    En chino,   la palabra   zuo zhe ,   que significa escritor ,   esta relacionada etimo-

    16gicamente con la rafz "hacer". En un himno del Rigveda, se compara las bus-

    q uedas so bre   la versificacion al trabajo del carpinter o. Los poetas arabes y los

    trovador es pr ovenzales compar an el trabajo del poeta con  los oficios   de f orja,

    dorad o,   iluminado,   etc.   Se reconoce al poeta por la calid ad de su   ex pr esion,

    (Iun cuando el   cuento inspirado por los dioses y los tropos poeticos   ponen de

    ll1anif i   sto   la trad icion.   Los arabes medievales conocen   el ter mino plagio, q ue

    no   nil   va   ninguna connotacion peyorativa.1,t1   front   ra   entr e "cr eador " e "interpr ete", entr e   "autor "   y "actor ", escritor 

    eo pista,   durant rnu ho   li mpo f u   muy va a.   Las   pr imeras   r and es obras

    literarias lIevan un nom bre,   pero   este nombre no  r emite al autor,   sin   II 1111 \

    autoridad   cu 1Iuml que garantiza   la autenticidad d el texto, y de a hf tftulos onH)

    "Sentencias d e  Imhote p", "Para bolas de   Salomon",   "Salmos de David ",   "Hi-

     bulas   d e Esopo", "Himnos   de   Homero" ...   En la liter atura   china, los nom br    s

    Laoizi y Mengzi representan   a los   supuestos compiladores de los libros mas

    antiguos,   a   los per sona jes d e   leyenda y hasta a   los tflulos   de esos libros.   As.

     pues,   se   ha   alribuido "la   lliad a"    y "Ia   Odisea"    a Homer o, el  Mah7ibharat a   a

    Vyasa,   elc.   Hay otr os dos e jemplos   muy   conocidos:   la atri bucion del   Gilga-

    mesh   a Sin-Iege-unnlni,   q ue   ha brf a establecid o y dado   a conocer este texto;   la

    m nci6n del nom bre de Turold   a proposito d e la  C anci6n d e  R olando,   cuando

    aqu I no es en m od o   alguno el  a utor de esta e po peya.

    En la  Antigiied ad    gr ecorr omana   Y en parte en la  Edad   Media,   los nombres

    d e   autores simbolizan muchas veces el  es tilo   y  el genero,   per o   no la obra.   Al

    mismo tiempo, en el  mar co d e   la tr adici6n   antigua   y med ieval,   la  conciencia y

    la   seguridad q ue   los   poetas tienen de sf mismos alcanzan un   alto grado.   Esta

    conciencia   y esta segurid ad cr ecen   en el R enacimiento   d e bid o   a la constitucion

    del ind ividualismo.   EI nombr e   del   autor   adquiere una   im portancia   capital en la

    e poca romantica   yes   entonces   cuando nace la teorfa de los "genios" y el   estilo

    individual prevalece so bre   el   estilo tr adicional.   EI r ealismo no modif ica el es-

    tatuto   social d el   autor ,   per o sf la concepcion del   papel de   este:   el escritor 

     pretende ala vez   conver tir se   en   el testigo objeti vo d  e   su e poca y realizar bus-

    q uedas   d e  tipo   social.

    La   evolucion de la  noci6n d e autor esta vinculad a al   surgimiento y ala evolu-

    ci6n de  l a noci6n de valor   ar tfstico.   La  extr afia   fantasfa del mito,   su frescura de

    imaginacion   insuperable, su sa ber didactico,   se han compr endido como datos

    o bjetivos,   exter iores   al propio mito, ver f dicos   y de natur aleza divina.   Cuando

    las   leyendas hist6ricas tomaron   el lugar de los mitos,   asimilaron los resid .uos

    mf ticos   (por ejemplo,   en la e popeya griega   0hindu),   y su contenido se conSId e-

    r pr od ucto   de los tiempos antiguos y una   herencia sagrada del pasado.   Esto

    suscito   una teorfa del  valor artfstico que no se refiere   al contenido sino exclusi-

    yam   nte a la "f orma", ala calidad de la expresion. Para el publico del pasad o,

    los   lementos ar tf sticos   eran los signos de un saber  hacer de un tipo d eter mina-

    do d comunicaci6n   social, de las   formas culturales   adecuadas   a  esta comu-ni  ' Il'i   n  y   el med io de provocar    el   placer   estetico. La  r ece pcion   estclica   esta

    vincnla   la   :II r    'ono   imi   nto   y   a   la   afir ma   i6n   c I   una   f r ma   sp r r i   a.   Las

  • 8/16/2019 Eleazar Meletinsky - Sociedades Cultura y Hechos Literarios

    7/11

    11111111III  ,'f .i'ls   'on' j r n'~l npr im rlugaralosf actor esr f tmicosym tricos,

    II II   II'P\'I   "lOll · s d'   tod o   tIPO, ala   estructur a, y alas f6r mulas   y las pr acticas

    "hllll   I,'.

    I   "   .'\  h I'  'vivencias del   pr imer   sincr etismo impiden el nacimiento d e una r e-

    Ill'   Ion t'   )r ica ...   Esta es la raz6n   d e que se designe a la comunicaci6n artistic a

    \   Iilo, .  ner o o~igi~al) mediante terminos que no   son esteticamente signifi-

    \,:lnl 's, Sin?  q ue   mdlcan una funci6n r itual 0 social.   Por ejemplo, un canicter 

    " Ir rad o   mas 0   menos acentuado,   un canicter de autenticidad mas 0 menos des-

    11 1   'udo,   ocultan la distinci6n entre el mito y e] cuento arcaico.

    En   la Ed ad Media,   la tradici6n se interpreta a la luz de ]a memoria hist6rica

    y.   ncuentra,su ex presi6n en los modelos poeticos:   del texto se espera virtuo-

    S .I   lad. ~s   aSIcomo   se  prepara la reflexi6n sobre el esti]o. Esta reflexi6n adqui-

    f1.r amas t~rde ]a forma de ]a poetica ret6rica.   Hay que tener en cuenta algunas

    d lvergenclas   entre la teoda y la practica poeticas. Sabemos que, en el desarro-

    11.0d el   f olk lore, el elemento estetico se extrae de los generos mas alejados del

    nto   (cuentos,   ca,nc!o~es epicas),   mientras que la poetic a ret6rica ignora el

    cue~;o y la p~esla eplca, pero comprende la prosa oratoria y aun la historio-

    gr~ha.   A partir de los siglos   VII-VI   de la Antigiiedad griega,   y hasta antes en el

    Onente, la literatura implica una estrecha vinculaci6n entre la  calidad esteti-

    ca y I,aforma: el contenido ya esta predeterminado. Usual mente, se prefiere la

     poesl~ a la prosa.   Se cr:an nociones como la del   wen   en China,   la del  kavya   en

    I~  India, la .de la poesla.en la Antigiiedad europea.   Wen   significa escritura,

    hteratu~a;   hteralmente hteratura y tambien   " bordado". Discfpulos sabios de

    Con~uclO com. paran la noci6n de wen   con el principio fundamental de dao   (en

    un, cl~rto s~ntldo,   el   wen   se acerca al de la Palabra bfblica   0Logos),   pero el

     pnnclpe Xlao Ton~, que en el siglo   VI   compone una antologia poetica, exclu-

    ~e de esta antologJa a Confucio y a sus discfpulos puesto que el objetivo de

    estos   ~?era este~ico sino filos6fico. Para el principe Xiao Tong, el caracter 

    especlflco de la hteratura reside en su forma, en la palabra considerada comoun o~namento (decoraci6n, embellecimiento) -el   wen  chino. No obstante, en

    los slglos   IX  Y   X,   el poeta Si Kong Tu vincula de nuevo la poesia   dao   con una

    misi6n sobrehumana del poeta en el poem a   "Categorias de obras poeticas"

    (shi pin).

    La poesia sanscrita   -kavya-   presenta un obvio formalismo.   La teoria

     poeti~a de los siglos   VII-IX   (Dandin) ilumina las figuras poeticas, denominadas

    alm!larka,   y las define como una especie de d iscurso ins6lito   (vakrokti   litera]-

    mente "plegado").   Los Yamana en el siglo   VITI   fueron una tentaci6n d~ vincu-

    lar ~as la ~oesia ~os gU!1a,es decir, a la claridad y no a la consonancia. A

     partlf del slglo   IX   (Anandavardhana y otros), se insiste mas en las nociones de

    dvhani   (sugesti6n poetica) y de   rasa   (recepci6n emocional). En la poetic a ara-

    h'   d '   los   si ,I )s   VI II IX   (al-O jahiz,   I bn Kutay ba,   Ibn AI-Mu'Ia'l.'l.,   ud:lllli 1\111

    Jia'f ar),   S   'ontrapone   ma'alli   (motivo,   to pos) a laf  z. (vestidu.ra vc~ bal   .  ('011111

    .1t 'ma   es   p   I'completo   producto d e   la trad ici6n poetica   p~~lsI5mlca   y   S.'II   I,

    'onsid er ad a   una  norma   id eal,   se pone   el acento en la expr eslOn   verbal   m  'thanl  '

    la cuallos   poet as pued en manifestar    su maestr fa.   EI sentido   existe   ~e.una ma

    n ra potencial,   la pala bra   expr esiva 10 actualiza. Poco a poco,   la poetlc.a arab'

    in   orpora ala r et6rica un mayor numero d e   ma'anl.   y facilita   el maneJo d t.: \a

    materia   trad icional a poetas que son consid erados   originales y cuya   obra   csta

    pOl'  otra parte   bastante r eglamentad a.   ,.   .'n la  Grecia   antigua,   la poetica corr esponde a una   teona   del arte de 1I1l1tar 

    (incluida   la   metrica),   per o el discurso, la elecci6n de las   palabr ,a~, los tropos   Y

    la jerar qufa   de los   estilos f uer on   estudiados e~ par te  po~ la r etonca y ~n. parte

     por Ia   gramatica. En la Ed ad Media,   y hasta fl~es   d el   slgl?   XIX,   la ret.onca   se

    transforma   definitivamente en poetica y la poetIca se convlerte   excluslvamen-

    Ie en normativa, en parte   bajo la inf luencia d e  la tradici6n horacia~a (vean~e

    10stratados   d e Mathieu d e Vend ome, Geoff r oy d e Vinsauf,   etc.). La mllucncJa

    d e  la r et6rica   antigua se expresa   entonces d e  maner a   clara   en la pn'ictica   poet~-

    ca, q ue coincid e   con la r enuncia alas   tradiciones or al.es. Hay   ~ue observa: aSI-

    ll1ismo q ue esta pr actica   tiene   en   cierta manera una  tnfluenclU ~n la teona:   laam plificaci6n se consider a   un desarrollo   Y   no una marc~ d e estl10 elevado; se

    r ecomienda una cierta   reserva en el uso de las com paraclOnes; cuando se trata

    d e   la   d escripei6n   Y   d e   la jerarqufa   estilf stica,   se  toman   en   consideraci6n los

    d iferentes   componentes   d e la  sociedad feud al. No hay que   exager ar,   como Curtius y su escuela   10han ~eeho, el ~apel de los

    modelos   ret6ricos y d  e las tradiciones antiguas antes de fmes   d el   stglo   XIII.   In-

    de pendientemente de la r et6rica,   la conciencia poetica   pri:ilegia   asimismo I~

    intenci6n formal   en la Edad Media. Islandia es   un buen   eJemplo   d e   ello: al1l

    d onde la herencia grecolatina ha sido mfnima,   el caracter   especf f icamente es-

    tCtico de la obra ha   estado vinculado a la forma. En la poesf a esdldica, la for-

    ma  fue intlada con metMoras   (Kenningar),   sin6nimos   (heiti),   mientras que elcontenido se componfa de hechos   verfdicos,   control ados p~r la opini6n pU~li-

    ca.   En la   Edda   en prosa d e   Snorri Sturluson, los planteamlentos de los mltos

    l11uchas veces eshln   sometidos a una descr ipci6n formal hecha de metaforas,

    de sin6nimos y de metros.La   poetica   ret6rica normativa,   los mod elos de temas tradicionales ~ el.esta-

    tuto   ret6rico de la literatura siguen eoexistiend o   en el marco d el Renaclmtento,

    d el barroco y del clasicismo,   cualquiera que sea In dif erencia entr e estos esti-

    los.   La poetica ret6rica tr iunfa con L' art poetique   de Boileau.   .

    Algunos   generos olvidados pOI'el sistema   ret6rico en la,~dad Me~ta, como

    el poem a heroico, la novel a corta y algunas formas   dramatlcns, r eclben   en Iii

  • 8/16/2019 Eleazar Meletinsky - Sociedades Cultura y Hechos Literarios

    8/11

    4   IHU '   I   tit"   R  'Iwcimicnto   una   especie   d e   r econocimiento. EI contenid o   d e   las

    IIhl   IS pi   'I'd   en par te   su car acter    sagrado   y se f ormaliza,   en especial en el siglo

    tI '  1:lsI,u   cs.  La segund a   mitad d el  siglo xvrrr marca   una  clara desretorizaci6n.

    '011   I r omanticismo,   la estetica filos6fica sustituye a la poesia normativa. Los

    ll'ol'i  'os   r omanticos se consagran a la  ficci6n y dirigen su atenci6n a la estruc-

    Illra .d e 10 imagi~ario.   Los   realistas se inter esan pOl'las cosas y pOl'los hechos.

    I,ll  IJter atur a es   Interpretada como una manifestaci6n de la vida interior del

    I   . ta   0como un r efJejo de la realidad objetiva social, hist6rica   y nacionaL Ennente,   este proceso perdurar a   hasta finales d el siglo   XIX.

    EI interes porIa poetica de la pala br a   renace en el siglo   xx en el marco d e un

    cstilo   ind ividualizado.   Hay   que recordar una  vez  mas que   existe   una cierta di-

    ver gencia,entre la teo~fa y la  pnictica   a 10 largo de la historia literaria y que

    algun~s ge~ero.s .n~rratlvos   0 po pulares son plenamente estimables.   En el siglo

    XX,   el Interes   dmgld o   pOI'separado a la pala br a   poetica,   a la  ficci6n y a  la his-tor ia   vivid a   no es   sino uno solo.

    I   1l1l'I'lllllOlo'   a, car acter f stica de los generos,   es bastante ca6tica.   Pu   d    inUi.

    I   II 111111r UIl   i n ritual   0 bien   el car acter   d e  10que se expone (cuento/cant   ), as!

    1111110   'IIi   mpo   d e  la  acci6n (la bilina rusa se llama   starina,   es decir, una   COSH

    1   II   .   ·1ti pO d e re pr esentaci6n (lento/rapido) acompaiiada de danza   0   de mu-

    II   I   HI   I   nnino empleado corresponde habitualmente a un solo cankter d el

    04   1 \1 '1   ()   Y I   s d emas   aspectos se dan pOl'supuestos,

    I.   I,   d ivisiones   en relaci6n con los generos son tambien muy diversas en la

    I  II I Ill1ra med ieval.   La canci6n   0no, el caracter personal   0no, el estilo de dan-

    :II IkIl1lisica, el empleo de unas u otras figuras poeticas y los temas fijan los

    I "  I'll. d ir   r enciales.   La terminologfa muchas veces tiene aspecto confuso: pOI'I14IIlplo,   n la  literatura francesa, se distingue mal cuento, sentencia, historia,

    I IIltdl   () histor ia   y novela. En la Antigtiedad y en la Edad Media, dominan los

    IIIH'I()'   ner os,   es decir, formas del discurso cuya distribuci6n este limitada pOl'

    110111   'rus   lingtif sticas. En los manuscritos medievales,   es frecuente que se reu-

    II  I I   ~1I'r os completamente diferentes, EI principio formal de la clasificaci6n

    I'wd olllina   en la Ind ia y el principio funcional en los pafses arabes;   se encuen-

    II  III ' j 'mplos   intermedios en China y en la literatura grecorromana.   En la

    II  I  "

  • 8/16/2019 Eleazar Meletinsky - Sociedades Cultura y Hechos Literarios

    9/11

    s 'd ja ba   una   r elativa   1iber tad en la eleccion d e la f orma.   En  la epoca mas an-

    ti )ua,   cstos principios esteticos, d e acuer d o con 1amentalid ad mito-poetica,   no

    'r,m  lodavia o bjeto   d e reflexion   teor ica,   pero   a par tir d e l a Antigtied ad    clasica

    y  hasla el siglo   xVJIJ(en Oriente   hasta   fines del   sig10 XIX),la conciencia poetica

    n   uentra   su expresion en 1apoesf a retor i ca y  normativa   d e   una   maner a   q ue

    lif iere segun 1as diver sas epocas   (Antigtied ad , Edad Med ia,   R enacimiento,

     barroco   y   clasicismo).   Ad emas,   el estilo predomina   hasta el R enacimiento, el

    'cnero en los siglos   XVI-XVIII,y el autor   a partir   del r omanticismo.   En el um brald el   siglo XIX,en Occid ente,   y   a pr inci pios   d el   siglo   XX,en Or iente,   la concien-

    cia cr ead ora   individ ual pr evalece so br e   la tr ad icion   y  la  r etorica. EI autor sur ge

    como   una Figur a singular,   10cual no impide   la formacion   de escuelas   liter ar ias

    (romanticismo,   r ealismo,   naturalismo,   im presionismo,   sim bolismo,   ex presio-

    nismo, surr ealismo   y  otr as   variantes del modernismo).

    La   diversidad    y   la  comple jid ad    d el   fenomeno   literar io   se pued en eslud iar no

    solo de   manera d iacr6nica (casi   evolucionista), sino   tambien de  maner a sin-cr6nica   (ti pologf a   com parada).

    Los   car acter es es pecf ficos   d e   una   u otr a   cultur a   van   sur giend o   evid ente-

    mente   en   ellr anscur so   de   la historia.   Per o despues   del   inicio   d e   la epoca   mo-

    derna, la intluencia   r ecfpr oca   d e   las d if erentes literatur as   y  d el   d ominio   de 1as

    literatur as   occidentales   cr ea   una siluaci6n   com ple ja.   Por   ello,   d esd e   un punto

    de vista   tipologico, el  arle verbal   0 escrito   d e   la Ed ad Media es   objeto   privili-

    giado   de la   liter atura com parad a.   En   esa   e poca,   la   influencia   recfpr oca   entre

    Oriente   y Occidente era  mfnima,   las  liter atur as se d esarrollaban par alelamente

    y   sus similitudes er an 16gicamente de ord en tipol6gico.   Solamente en   zonas:reogr af icas   mas   0menos   d ef inidas   pud o   d ominar   una   liter atur a   unica e intluir 

    a olras   liter aturas,   por   e jemplo   la liter atur a   f rancesa   en  Eur o pa,   las   liter atur as

    ar a be, sanscrita,   persa   0 china en r egiones   d if er entes de Oriente.

    EI par alelismo   pierde su fuerza d  ur ante   el Renacimiento   (la   teorf a   d e   un

     pr lend ido   R enacimiento or  iental   es f alsa),   per o  en los siglos XVII-XVIIIr ea pa-

    r '   d    maner a   mas   clar a   una   cierta analogf a entre Europa occid ental   y  el  Ex-

    I r  ' 1110   riente.   A par tir   d el  siglo   XX,el Occid ente comienza a influir   al Oriente

    S   .  d ihuja   la per s pectiva d e   la f ormaci6n d e   una   liter atur a   mund ial   casi uni-Ik:l(la.

    So"rl"   1111   r Olld o   I   par ' i uos   lip 16   i   os,   las   d if r en ias   10'al   s   cJ'sl:!   an1011   \'111   id nd .   I. Il"Olll plll'lI'i   II 11Ills   pr<   111 'Iiva   s  l a   I'   los I ll:! 'ro'   O("I'Os: po .

    I I ri  ' :\ lomad a   en su conjunto, epopeya heroica, r elata her oico,   novela,   110

    •kill, I   ter a.

    La  oovela   (en ingles   romance, novel)   es el mejor ejemplo   de ello   y~ q ue su

    III I   -0   s heterogeneo y diversificado. Sus fuentes son:   el cuento   her mco   celta

    , III,Ilr o pa,   la tradicion epica preislamica y las leyendas s~~r~ I~s.poetas enam.o-

    I ,d os 'n la literatura persa, el cuento heroico local y la trad lclon eplcaen   GeorgIa,

    III   •.datos   y los cuentos fantasticos, los ciclos lfricos enmarc~dos por la pr~sa

    los d iar ios lfricos en el Japon, donde la novela precede ala hteratura hermca.

     p ~sarde esta diversidad de fuentes, la naturaleza de la novel~ parece   ba~tante

    hOlllo   cnea   y con stante. De manera universal, la novela ~edleva~ descn be   al

    I I~r e"interior" hasta entonces ocultado por la personahdad socral del ca ba-111111 ,   •   '"   d'   .d 1"

    II. I0 (en Occidente) 0 del prfncipe (en Oriente).   La pasIon amoro~a In IVI ua   ,

    IlI11slIgr ad aa un objeto insustituible, provoca el de.sorden socIal, y transgrede

    III   id eales   epicos. La armonfa podrfa establecerse SIel amo; suscltar~ un valor 

    111'1oico   0 un don poetico, asf como 10 sugieren el amor cortes 0 el suflsmo.   ,

    Hn la novela medieval   (romance   en espanol  y en ingles;   roman   en Frances),

    III 'd omina   un esquema de composicion. La pr~mera parte per ten~ce al cuento:

    II pI'olagonista realiza hazanas y logr a conqUlstar a una bella pnncesa. En la

    "l'lInda parte, surge un conflicto puramente novelesco entre el!~or pe.rs~nal

    I d e ber social.   En las primeras obras   (Vis   y   Ramin   de Gorgam y   Tristan e

    1\(Ildo   en las versiones de Thomas 0 de Beroul), la armonfa es destrui?a, pero

    .II , IlU 'S, en   el   periodo clasico (Chretien de Troyes, Niiami, Rust~veh, ~u.ra-

    I~i Shikibu), es restablecida gracias ala revelacion del valor socIal 0 estetIco

    tll   I :1l110r su blime, que inspira un caballero,   un soberano 0 un poeta ..   ,

    I~n Fr ancia y en Persia,   las similitudes de estructura y de eV~lu.clOnde las

    IIlIvclas   parecen excepcionales.   En Georgia,   Rustaveli ~e d~s:la hgeramente

    I'IlI"   la  vfa   de la epopeya heroica.   En el Japon, Murasa~1 Shlkl~u por la de la

    II I lV   'Ia   psicologica "a la manera de Mme de La Fay.eue . ~ partIr de estos ras-

     pO l'   omunes, vemos c1aramente cuales.   s~n ~as dl~erenclas, ~rocedente.s en, It'rla manera de creencias religiosas   -cnstlamsmo, Islam, budlsmo.   :o~ e j~~-

     plo,   I f inalismo cristiano conduce a una perspectiva 1i~eal, ala.   aSlmllaclon

    II - I   destino   del protagonista a la formaci on de la personahdad socI.a!.E~ l~ no-

    Vl'lll jap   nesa, la filosoffa budica introduce y ref uerza la conce p~lOn clchc~ 0

    I j l   cular de   la vida del protagonista, de la sucesion de las generacIOnes:   el bIen

    'I mal se  mezclan.   Cada una de las faltas q ue se ha cometid o en lajuv~ntud ,

    III pii   a necesariamente el castigo   (kar ma)   a ed ad   av~nzad a   0 ~un en la ~Id a d e

    I,   ' 'n racion siguiente.   La novela   presenta   un amblente d e   md ulgencla me-

    1111   '   >1i a y   una   propension ala contemplacion. Se utilizan mod .elos q u~ se re-

    II 'J' 'n al cambio   d e  las estaciones para sim bolizar est a concepcl~n fatalJsta d .e

    11\'OII'i 'nl   vilal.   EI po   ma nove)   so p r sa se acer ca mas a I   s   jemplos   0   1-

  • 8/16/2019 Eleazar Meletinsky - Sociedades Cultura y Hechos Literarios

    10/11

    s 'd ' jaba   una r elativa   liber tad   en la eleccion d e   la forma. E n la e poca mas   an-

    ti )uu, estos   pr incipios esteticos,   de acuerdo   con   la mentalid ad mito-poetica,   no

    cran   todavf a   objeto de reflexion teorica, pero a partir de la  Antigiiedad clasica

    y hasta   el siglo   XVIII   (en Oriente hasta fines del siglo   XIX),   la conciencia poetic   a

    encuentr a   su expresion en la   poesfa r etorica y normativa   de una manera que

    difiere segun las   diver sas epocas   (Antigiiedad ,   Ed ad Media, Renacimiento,

     bar roco y clasicismo).   Ademas,   el   estilo predomina hasta el Renacimiento, el

    genero   en los siglos   XVI-XVIII,   y el  autor a partir del romanticismo. En el umbral

    del   siglo   XIX,   en Occid ente,   y a   principios del siglo   XX,   en Oriente, la concien-

    cia creadora   individual prevalece sobre la tradicion y la retorica.   EI autor surge

    como una  figura singular,   10  cual no impide la formacion de escuelas literarias

    (r omanticismo, r  ealismo,   naturalismo, impresionismo, simbolismo,   expr esio-

    nismo,   surr ealismo   y otr as variantes d el mod ernismo).

    La diver sidad    y  la comple jidad d  el fenomeno liter ario se pueden estudiar no

    solo d e   manera diacronica (casi evolucionista),   sino tambien de manera sin-

    cr onica   (tipologfa comparada).

    Los   caracteres   especf ficos   de una u otra cultura van surgiendo   evid ente-

    mente   en   el transcur so de la  historia. Pero despues del inicio de la  epoca mo-

    d erna, la influencia recfproca de las dif erentes literaturas y del dominio de las

    literatur as occidentales crea   una situacion compleja. Por ello, desde un punto

    de vista tipologico, el arte verbal   0escrito de la Edad Media   es objeto privili-

    giado de la literatura comparada. En esa epoca, la influencia recfproca entre

    Oriente y Occidente era mfnima, las  liter aturas se desarrollaban paralelamentey   sus similitudes eran logicamente de orden tipol6gico. Solamente en   zonas

    geogrMicas   mas   0menos   definidas pudo dominar una literatur a   unica e intluir 

    a otras   literatur as,   por   e jemplo la liter atura francesa en Europa,   las literaturas

    ar a be,   sanscrita,   persa   0china en regiones diferentes de Oriente.

    EI paralelismo pierde su fuerza   durante el Renacimiento (la teorla de un

     pr etendido Renacimiento oriental   es falsa), pero en los siglos   XVII-XVIII   reapa-

    r ece   de manera mas clara una cierta   analogfa entre Europa occidental y el Ex-

    tr emo   Oriente.   A partir del siglo   XX,   el Occidente comienza a intluir al Oriente

    y se dibuja   la perspectiva de la formacion de una literatura mundial casi uni-

    fi   ad a.

    So br un f ondo d e   parecidos tipol6gicos, las diferencias locales d estacan

    'Oll   'Iarid ad .   La comparacion mas   productiva es la de los  macrogeneros:   poe-

    II ri   '(\   lomad a en   su   conjunto,   e popeya heroica, r elato her oico,   novcla,   no-

    (kia,   I   t   ra.La   nov   la  (en ingJes   r omance, novel)   es el mejor ejemplo de ello y~ que su

    III   "n   's   h tcrogeneo   y diversificado.   Sus fuentes son: el cuento herOlco celta

    III~lIr)pa,   la tradicion epica preishimica y las leyendas s~b,r~I~s~oetas enam.o-

    IIIlos   'n la liter atur a  persa, el cuento heroico local  y la tradlclOn eplcaen Georgia,

    IllS   r ial   s y   los   cuentos fantasticos, los ciclos lfricos enmarcados   por la pr?sa

    Ins d iarios   If r icos en el Japon,   donde la novela precede ala literatur a   herOlca.

     p 'sar d e esta   diver sidad de fuentes, la naturaleza de la novel~ parece   ba~tante

    110 m   cnea   y   con stante.   De manera universal, la novela ~edleva~ descn be al

    Immhre "interior"   hasta entonces ocultado por la personahdad    SOCIaldel   caba-

    Ill-rn (cn Occid ente)   0del pr f ncipe (en Oriente). La pasion amoro~a "individual",

    ('( Ilsagr ad a   a un   ob jeto   insustituible,   provoca el de.sorden SOCIal.y transgr ede

    los ideales   e picos.   La  armonfa podr f a esta blecerse SIel amo; suscltar~ un valor 

    "t-roico   0un  don   poetico, asf como   10sugieren el amar cortes   0el sufIsmo. ,

    'n la nove]a medieval   (romance   en espanol   y  en ingles;   roman   en frances),

    p I '   domina   un esq uema de composicion. La pr~mera parte pertene.ce al cuento:

    I

    I protagonista realiza hazanas y logra conqUlstar a una bella pnncesa.   En   lat' 'und a parte, surge un contlicto puramente novelesco entre el!~or pe:s~nal

     _ (deber social.   En las primeras obras   (Vis   y   Ramin   de Gorgam   y   Tnstan e

    II'O /da   en las ver siones de Thomas   0de Beroul),   la  armonf a es destruida, per o

    ( i   'S pll 'S,   en el periodo clasico (Chretien de Troyes,   Nizami,   Rust~veli, ~u~a-,\..iShiki bu),   es resta blecid a   gracias   ala revelacion d el   valor SOCial0estetlco

    111, 1   amor su blime, que ins pira un ca ballero,   un soberano   0   un poeta ..   ,

    En Francia   y   en Persia,   las similitudes de estructur~   y   de ev~lu.clOn de las

    nov ' Ias parecen excepcionales.   En Georgia, Rustaveh ~e d~s:la hgeramente

     pOl"   la vfa   d e la   e popeya heroica.   En el Ja pon, Murasa~1 Shlkl~U por la de la

    IH vcla   psicologica "a la maner a   de Mme de  La Fay~tte   . ~ parttr de estos r as-

    'os comunes,   vemos claramente cua]es   son las dlferenclas,   ~rocedente.s enci 'rta   maner a   de creencias religiosas   --cristianismo, islam, budlsmo.   ~o~ eJ~~-

    I  (0,   I finalismo cristiano conduce a una per s pectiva lin.eal,   ala.   aSlmllaclOn

    1'(   d 'slino   del protagonista   ala formacion de la personahdad socI.a!. E~ I~ no-

    v 'Ia ja ponesa,   ]a fi]osoffa bUdica introduce   y   refuerza la concep~lOn   clchc~   0

    'il'   ular d e   la vid a   del protagonista, de la sucesion de las generaclones:   el bIen

    y   I mal   se mezclan. Cada una   de las faltas que se ha cometido   en   lajuv:ntud,

    implica   necesariamente el castigo   (karma)   a edad av~nzada   0~un en  la v.ldade

    III gcncracion siguiente. La novela pr esent~ ,un amb~e~te de   md ulgencla me-

    Ian   61ica y una   propension ala contemplaclOn. Se utthzan mod.e,losque. se re-

    n   r en   al cambio   de las estaciones para sim bolizar esta concepcl~n fatahsta   d .ela or r iente   vital.   EI poema novelesco persa se acerca mas  a los eJemplos OCCI-

  • 8/16/2019 Eleazar Meletinsky - Sociedades Cultura y Hechos Literarios

    11/11

    d ntales,   per o el protagonista es un prfncipe   0un soberano.   Se puede delimitar 

    1I na clara   divergencia entre las ideas corteses y suffes y la concepcion japonesa

    d   I mol1o   no aware   (belleza conmovedora de las cosas   fnigiles).   En cuanto al

    nacimiento de la novel a modern a (en ingles   nove!),   descubrimos tambien un

     paralelismo entre Europa occidental y el Extremo Oriente. La novel a china

    an6nima   Jin   ping   mei   (fin del siglo   XVI)   y las novelas japonesas de Saikaku

    (siglo   XVII)   r ecuerdan a varias novelas picarescas   0   "comicas"   de la Europa del

    siglo   XVII.   Pero mientras que en Europa predomina   10  picaresco (a excepcion

    d e   un Sor el),   en Asia, el elemento erotico es el mas   impor tante. En la novela

     picar esca,   la conducta   del protagonista esta determinada por el medio social

    mas que por   su naturaleza.   Los dos tipos de novela contienen   componentes sa-

    tfricos y burlescos.

    Se puede   comparar la novel a inglesa y la novela francesa y oriental (Voltaire,

    Swift,   Wu   Jingzi,   Li Ruzhen). La novel a se vuelve mas   sentimental,   per o   no

    renuncia a la crf tica social (comparar, por ejemplo, R ichardson con Cao Xue-

    qin,   el autor   de   Sueno en  el pabellon raja).   Las diferencias se expresan sobreese f ondo analogico que hemos mencionado ya. Por ejemplo,   la vid a   privada

    -tema   especffico de la novela-, en la novela   china,   al contrario de   1 0   que

    suced e en la novel a europea, se amplfa a la vida de una   gran familia en cuyo

    seno   se manifiesta la conciencia individual   del protagonista.

    Ya hemos hablado de la   novela medieval que pref igura a la novel a psicolo-

    gica ulterior,   pero en la China de la Edad Media (hasta el siglo   XVI),   la novela

    no  existe y su funcion la cumplen, por una parte, los grandes relatos heroicos e

    historicos y, por  otra, la novela corta de la epoca de la dinastfa Tang,   Chuanqi.

    Esta   forma de r elato se puede comparar con los   Lais   de Mar ie de France. Las

    novelas cortas   orientales u occidentales poseen caracterfsticas comunes, pero

    existe a la vez una gran diferencia, En Occidente, el cuento fantastico es dis-

    tinto del cuento animal (fabula), del cuento anecdotico,   del relato corto, y de

    los   e xempla,   mientras que en el Oriente,   todas estas formas literarias estan

    mezcladas bajo la influencia de la intencion didactica y de la creencia en la

    reencarnacion del alma humana en los ani males.

    Tr atandose de la novela corta, las diferencias entre dominio oriental y do-

    minio occidental estan aun mas acentuadas por el hecho de que la novel a cor ta

    o 'cid cntal extrae s u  materia de la anecdota, la india de la fabula y la china d 

    la I   ycnda d e espfritus, de cadaveres vivos y sobre todo de zorros mfticos.   Esta

    S  la r ar ,on d e que   la inclusion de elementos fantasticos sea usual en los escr i-

    lor s   ri nlalcs,   mientras que sigue siendo exce pcional en Europa   hasta   la c po-'ltrol1lanf i a ..   I n   ;.T.J\.lloffmannoT.Gautier as piramoscsear omafan-

    I   l.'li   '0  <  I l l   '   nOS r '   'II  ' r ela a   la   II()V   la hina n ncrnl   y a   In  c  I   Pu   Son 'Iin   r 

    (1.1( /0:/'"   " II   p IIIi 'lilli',   I~n('hi'llI,   III fant:'isli .()r ' pr 'sentn   pr e   ·iSlIlllllll'   'I CII

    I,'1 r  cs pecffico de la novela corta (acontecimiento   0 punto de vista sorpr    n

    II 'nl   ).   La   novela corta urbana y de car acter social,   huaben ,   a dif er encia d  e

    I , novela   chuanqi   medieval   y sublime,   se parece a  un fabliau   Frances   0 a un

    S l'  Invallk   aleman, pero en   la novela   huaben   encontramos   un gr an numero   d e

    1('llt10Sde detecti ves, desconocidos en Occidente en esa   epoca   (siglos   XVI-XVll),

    I,os "cuentos",   0me jor   dicho las novelas cor tas ara bes,   ocupan una posicionlilt 'r media   entre la novela cor ta   europea y la extr emo-or iental.   En  Occidente,

    I \ novel a cor ta del R enacimiento, a partir d el  Decamer on   de Boccaccio, repre-

    ilIa a la  novela clasica. La com paracion d e las novel as occid entales   yorien-

    I.lk s 's  muy fructffer a.   En la novela   d el  Renacimiento, la accion   es el r esultado

    d ,'   1 '1   iniciativa personal   d el protagonista,   q uien   as pira   a realizar    un objetivo

    , \  Ilncto.   EI protagonista   de la  novel a oriental es muy pasivo   la mayor parte de

    I"   v 'ccs, y con frecuencia un fracasad o,   un desfavorecido, sin la menor facul-

    lo ld   d '" ad aptacion. EI   es   el   q ue   suf r e   la accion,   y seres   fantasticos,   magos   0

    IIllil'OS   f ieles acuden   en  s u  ayud a.   En   los   relatos   or ientales no  pocas veces el

    11 11 II   'S   tr agico.I\n   'uanto a la poesfa !f r ica,   la comparacion   es dif f cil   por   razones   lingiif sti-

    I   \   Ilay   muchos caracteres comunes,   no solo en la poesfa   d el amor sublime   en

    1',IIV('nZa,en Es pana, en los arabes   (poesf a   'udhrita), sino tam bien en la poesfa

     pi  I  lI, india,   china y japonesa   d e la Ed ad Media. Hay varios   motivos ( por   e jem-

    Id'l, ('I d I alba, que A.  Hatto   estudia en su obra   titulada   £os)   que se r e piten d e

    IIli\lll'   Ia   'asi   univer sal.   Las biogr af fas de los poetas   se   par ecen   mucho en los

    \llliu s  y   'n los japoneses.   Hay   algunos   sir vent es   provenzales que   r ecuer dan a

    IIIlilli','   II\fr ica   china en la epoca   de la d inastfa   Tang.   Pero las   difer encias   tam-

    hll II   011sorprendentes. Por ejemplo,   ]a poesf a   'udhrita d el amor   sublime   igno-

    III I I  'nha Ilcr fa;   es mas   fr ecuente   que la poesfa   china cante la amistad entr e los

    11 11 11 \111 '   'S   q ue  el amor a una   mujer .   EI tema   d e la amistad y d el  vino   es total men-

    II I   p"   f ico   d e   la poesfa china   y per sa   y, en Euro pa, d e la poesf a   neolatina   de

    III   IIl'I'ici   vagantes.   A diferencia d e los  s irvent es,   la   poesf a   china canta sobre

    IIHIIIlIS   s"' paraciones,   las   perdidas,   los suf rimientos del   pueblo.   En la   poesfa

    III II   Id ,'   10 los  los pueblos, siem pr e es muy notor io   el uso  q ue se hace del  par a-

    h II   1 I 11 1   p:i   'ologico, pero sabre todo en Extr emo Or iente,   dond e poesfas-vine-

    II   III  •'III  'n  un paisa je y estan impregnadas de la   melancolf a   budica.