Facebook es otra red social de las más populares y populosas que hay en estos momentos.

Igual que twitter es más dinámica Facebook es algo más tranquila pero permite mucho más

contenido. Si ya lo usas de forma personal te darás cuenta de que la gente suele postear casi

siempre a la misma hora. Los que “echan un rato de Facebook” después de comer, al salir del

curro, o incluso como forma de ponerse al día durante el desayuno. Esto quiere decir que la

“vida útil” de una publicación en Facebook es bastante más larga que en twitter, con lo que

hay que poner más empeño en que todo salga a las mil maravillas.

¿Cómo empezar? ¿Le hago un perfil a mi negocio como el que yo tengo personal o una página?

Sin lugar a dudas una página. Uno de los errores más frecuentes es la creación del perfil. El

perfil es para personas, no para organizaciones. ¿Qué edad pondrías en el perfil? Si la empresa

tiene menos de 16 años no podría estar técnicamente en Facebook. ¿Qué sexo le pondrías?

¿Te fiarías de ser “amigo” de una empresa? Ten en cuenta que podría acceder a todas tus

fotos. Si ya eres usuario de Facebook, ¿No estás harto de ver como el mayor problema de tus

amigos es que les falta una bisagra para la puerta de su granja, o que necesitan tu ayuda para

conseguir un pollo más? ¿Qué te parecería que a alguien le llegara un mensaje tipo

“Fontanería Ramírez está triste, se le ha muerto una vaca en farmville. ¿Quieres ayudarle a

comprar otra?”? Por eso existen las páginas. Si a alguien le gusta tu página hará click en “Me

Gusta” para recibir tus actualizaciones. No hay más compromiso que ese y se puede revocar en

cualquier momento.

Bien, convencidos ya de que una página es lo mejor, necesitamos un perfil a partir de la cual

crearla. El nuestro personal valdrá, o si no nos lo creamos. El proceso apenas dura unos

minutos. Si dijimos a la hora de poner un avatar en twitter que debía de ser significativo de

nuestra empresa, en Facebook tenemos que cuidar mucho más la estética. Tenemos el avatar

(si es el mismo que en twitter mejor, así mantenemos una identidad corporativa), tenemos la

foto de portada, y tenemos la distribución de todos los elementos de la página. Con las ideas

un poco claras tendremos la página disponible en el día, pero vayamos paso a paso.

Lo primero es elegir el tipo de página que queremos crear entrando en

http://www.facebook.com/pages/create.php. En nuestro caso será seguramente “Lugar o

Negocio Local”.

Una vez seleccionado es cuestión de rellenar un sencillo formulario con nuestros datos con

una buena imagen de perfil. Como ya dijimos si es la misma que en twitter mejor que mejor,

da mayor homogeneidad a nuestra marca. Una vez creada nuestra página nos permitirá

seleccionar una imagen de portada, que aparecerá a lo ancho de la página en la parte superior.

Muy importante es elegir una dirección para nuestra página. Lo de “Búscanos en Facebook” es

cosa del pasado, ¿Te imaginas cuantos talleres o tiendas similares a la tuya puede haber? Así

que elegimos una que esté libre y nos defina. Nuevamente sería interesante que coincidiera

con nuestro Nick en twitter. Así para cualquier tarjeta de visita, firma del correo o similar lo

podremos poner todo mucho más claro. En mi caso es http://twitter.com/BEEPalcala y

http://www.facebook.com/BEEPalcala. Posteriormente, cuando hablemos de los blogs,

intentaremos (si no lo tenemos ya) elegir el mismo nombre; en mi caso es

http://beepalcala.com/

¿Y ahora que, a seguir gente? Pues no. Si bien una página puede ser fan de otra, no lo puede

ser de personas. Es decir, no puedes salir a buscar seguidores, sino que tienen que ser ellos

los que vengan a ti. Esto de primeras te creará una sensación extraña, de estar escribiendo

para nadie. Pero no te preocupes, puedes conseguir fans de tu página en unos pocos pasos.

Lo primero y más lógico será echar mano de los amigos de tu perfil personal. Tan sencillo como

indicar que te has creado una página y que si le dan a “Me gusta” serán mejores personas. O

invitándolos directamente, otra de las opciones de administración de la página. Costó tiempo

conseguir tus followers en twitter, no? Pues tráetelos! Anuncia tu página, pero sin pasarte ni

llegar al spam. En la misma configuración de nuestra página en Facebook podremos vincularla

con twitter, de manera que se actualicen automáticamente los contenidos en forma de tweet.

Otra opción que nos garantizará un buen número de segudores será crear un concurso. Ahora

veremos como hacerlos. ¿Qué regalar? Fácil, busca en tu almacén eso que no hay manera de

vender y ponlo! Así de sencillo. Tendrás más sitio, lucirá mejor tu negocio al no tener artículos

obsoletos a la vista y caramba, es gratis para el concursante! La temática puede ser la que

prefieras: contestar a una pregunta, adivinar de dónde es una foto, enviar el chiste más

gracioso… lo que quieras, cuanto más sencillo mejor. Muchos concursos sólo exigen para

participar que seas seguidor de la página y rellenes un formulario con tu email.

Para crear un concurso en Facebook necesitas usar una aplicación de terceros, ya que según

las normas de esta red no se puede hacer directamente en el muro. La más popular es

Easypromos. La primera promoción que creemos no tendrá coste, así que se adapta a la

perfección a nuestro presupuesto de márquetin digital. Veamos como crear un sencillo

concurso.

Entramos en http://apps.facebook.com/easypromos/ e indicamos qué página es la que

queremos usar para la promoción, por si administramos varias.

Y ya sólo nos queda definir el tipo de concurso.

Puede consistir en que los concursantes envíen por ejemplo un eslogan y el más votado gane,

así que será publico. O por ejemplo puede consistir en contestar a una pregunta, en este caso

las respuestas permanecerán ocultas al público. Tu si podrás verlas, evidentemente, en el

panel de control de la aplicación. También puedes solicitar una dirección de correo electrónico

o datos como la fecha de nacimiento. Todo esto lo configuraremos en la propia aplicación en

apenas un par de clicks.

La ventaja de esta aplicación es que hay muchas webs que la monitorizan y promocionan en

distintos foros. Así que si alguien busca en ellas dará contigo. Definimos la fecha de inicio y

fin de la promoción, el premio y lo que hay que hacer para acceder a él.

Una vez publicada nos aparecerá en la página. Ahora a moverlo por ahí, por Facebook, twitter,

incluso en la cartelería de nuestro local. En un negocio local, de barrio, no es raro que haya

clientes esporádicos que nos digan en las redes y por otro lado clientes asiduos que ni sepan

que estamos en ellas.

Otra opción para promocionar nuestra página es crear un anuncio. En este caso si tendrá un

coste económico, que nosotros mismos decidiremos. A mayor presupuesto, más

frecuentemente aparecerá nuestro anuncio. La ventaja de los anuncios es el alto grado de

personalización que tiene, nos permitirá definir nuestro objetivo para aprovechar al máximo la

inversión seleccionando la zona geográfica, edad, nivel de estudios, sexo, estado civil, ….. Por

ejemplo sólo en España tenemos más de 16 millones de usuarios y posibles lectores de nuestro

anuncio.

Una vez rellenado por completo el formulario, indicamos el importe y listo. Si hemos incluido a

menores de edad en nuestro target pasará a ser revisado, y en unos minutos tendremos

nuestro anuncio listo y publicado. Ahora a esperar que cause efecto!

Los seguidores de tu página en Facebook suelen ser fieles. Algo muy gordo tienes que hacer

para que alguien decida que ya no le gustas. Pero también es más difícil atraerlos. Lo ideal

sería que los trajeran tus propios seguidores. Un me gusta de ellos en tu página saldrá

publicado en su muro y lo verán sus amigos. Una consulta bien contestada y resulta hará que

te recomiendo. Como se ha hecho toda la vida, vamos. Si tratas bien a un cliente seguro

vuelve con más.

Muy interesantes son las estadísticas que el propio Facebook te facilita en la web. Puedes ver

qué días tienes más afluencia de lectores, que días menos, que temas han interesado más…

Con todos esos datos puedes prepararte artículos o fotos para subirlas en un determinado

momento. La interacción es la sal de toda relación social, sea en un bar o en una página en

internet, si llegas a más gente más opciones tienes de que te comenten y de entablar un

diálogo. Que al fin y al cabo es de lo que se trata.

¿Y que pongo en mi Facebook? Tienes uno de los escaparates más grandes que hay, lúcete!

Puedes comenzar subiendo imágenes de tus instalaciones, explicando el trabajo que haces.

Puedes subir fotos del proceso, desde que llega el encargo hasta que el trabajo está

entregado. Puedes decirle a tus clientes que entren a ver cómo hiciste su… lo que sea, que lo

comenten, lo compartan. Puedes tu compartir enlaces de otras páginas que te interesen, mil

cosas. Y lo ideal es hacerlo con un mínimo de regularidad. Cinco actualizaciones en dos

minutos y ninguna el resto del día sólo sirven para saturar al lector. Repártelas, espérate a

publicarlas en el mejor momento. Es mejor hacer una buena actualización semanal que

muchas malas durante la semana.

Facebook, decíamos, tiene una vida útil de actualización más larga que en twitter. Si en la

segunda dices alguna tontería seguramente se pierda entre toneladas de twits a los pocos

minutos. En Facebook es distinto, tienes que cuidar más tu expresión y temática. También es

lógico que un seguidor nuevo repase tus actualizaciones de bastante tiempo atrás. Así que no

hay que dejarse nada suelto. Ninguna conversación debe acabar con la pregunta de un

usuario, sino con tu respuesta. Aplica simplemente, los hábitos sociales que empleas a diario.

No insultes o ridiculices a nadie por muy peregrina que sea su consulta, piensa que todo lo que

escribas o te escriban permanecerá ahí para ser consultado en cualquier momento.

Simplemente intenta ser ameno e interesante para que cada vez sean más los que hagan click

en “me gusta”.

Personalmente prefiero usar twitter para compartir enlaces, noticias, reenviar enlaces de

otros, etc… En Facebook esa interacción también es necesaria, pero deberías de incluir un

porcentaje más elevado de material propio. Yo tengo una tienda de informática, y en

ocasiones escribo pequeños tutoriales para eliminar algún virus concreto. ¿Estoy perdiendo

trabajo por enseñarle a mis clientes a hacerlo? Ni mucho menos. Algunos no me traerán su

equipo para repararlo, pero sí su agradecimiento si les he ayudado a conseguirlo. Y si sabe que

en mi página encuentra consejos y trucos para los problemas más habituales se la

recomendará a sus amigos. Una vez captada la atención, mi trabajo es que permanezcan

atentos.

Más al principio, pero durante toda la vida de tu página y por ciclos verás que la interacción

sube y baja. Habrá momentos en los que casi desaparezca y te creas predicando en el desierto.

¿Qué hacer? Analiza el problema. ¿Has cambiado la frecuencia o temática de tus

actualizaciones? ¿Hay ya demasiadas páginas demasiado similares? ¿Sigues teniendo un

número constante de visitas pero sin embargo pocos “me gusta” nuevos y pocos comentarios?

Nuevamente imagínate que no estás en internet, sino en una verbena de barrio charlando con

los asistentes. ¿Qué haces si de pronto nadie te dirige la palabra? Pues preguntarles. Una

pequeña encuesta de tipo “¿Qué te gusta que incluyéramos en esta página?” puede dar pie no

sólo a la participación de los usuarios sino al debate entre ellos mismos. A partir de ahí estudia,

analiza, planea y ejecuta. ¿Qué así tampoco va bien? Piensa en lo que te está costando, un

poco de tiempo que hemos aprendido a rascarle al reloj. Sigue probando. Y si falla a otra cosa y

si falla…

O simplemente puedes terminar cada actualización con un “¿Qué opinas del tema?” Invitando

al lector a dejarte un comentario en tu muro. En mi experiencia he tenido mensajes privado en

Facebook preguntándome si se puede publicar una duda en el muro. Ahora veo inadmisible

esa pregunta y un error garrafal por mi parte. Hay que dejar clara, abierta e inequívoca la

opción de comentar, participar, discutir. Al fin y al cabo de eso se trata. La confianza de un

seguidor en Facebook es tan importante como la de un cliente, aunque no lo sea. Nos

recomendará a otros, nos enviará posibles clientes, nos permitirá acceder a un número más

amplio de público, …

Pero... ¿Y si me critican? ¿Y si, peor, me insulta? Pues lo mismo que haces en tu negocio. Si en

la oficina entra alguien quejándose de un servicio de malas maneras, no te levantas y te quitas

el cinturón para fustigarlo. En internet actúa igual. Los trolls, en el argot, son

mayoritariamente personas aburridas que sólo buscan notoriedad ridiculizando y

promoviendo el mal ambiente. Que el miedo a la crítica no te impida usar las redes sociales.

Siempre contesta con calma, serenidad, sin entrar al juego y, en caso de verte atrapado,

simplemente pregunta a alguien cómo zanjar el tema. Hay cientos, miles de tutoriales y

consejos por la red que te ayudarán. Al fin y al cabo, si tuviéramos miedo a fracasar no

seríamos autónomos ni emprendedores ni nada!

Aquí no he hablado de aplicaciones ni de clientes de esta red. Realmente hay pocos y bastante

regulares en lo que a gestionar páginas se refiere. Hootsuite si te lo permite, y está disponible

para cualquier plataforma móvil y vía web. Aunque, dado que la inmediatez de twitter no es

tan necesaria en Facebook, recomiendo usar la versión web y si acaso el mencionado

hootsuite para responder a algún comentario que requiera mucha premura. Espero que los

clientes móviles mejores este aspecto, la versión móvil de la web de Facebook es realmente

limitada y no permite la edición de páginas, todo lo más contestar a algún comentario o

publicar en el mucho algo no demasiado complejo.

Recapitulando, y para terminar este capítulo, aquí están las 6W’s de Facebook:

Qué: Facebook es una red creada en sus inicios para mantener el contacto entre estudiantes

de un mismo campus, pero con el tiempo ha crecido y ronda los 800 millones de usuarios (ahí

es nada) de todos los gustos y colores.

Quien: Todos. Desde empresas multinacionales, famosos, deportistas, ingenieros, fontaneros,

jubilados, …, y lo más importante: tu empresa.

Cuando: Como mínimo una vez al día, o cada dos. Lo más importante que tenga una cierta

regularidad y variedad. Por ejemplo alternar un anuncio u oferta con alguna noticia

interesante del gremio.

Donde: Contestar y leer comentarios lo podrás hacer en cualquier lugar, vía smartphone. Para

crear tu contenido lo mejor es bien en casa o bien en tu despacho, donde tienes a mano tus

enlaces más interesantes, tus fotografías, etc...

Como: Con paciencia y aportando siempre algún valor. Da igual si sólo compartes enlaces de

alguna web especializada, pero al hacerlo añade algún comentario. Dale tu toque.

Por qué: Por razones obvias: tendrás un escaparate desorbitado y abierto todo el mundo, una

vía de contacto con clientes que comentarán, preguntarán, criticarán o alabarán tus servicios.